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ARQUIDIÓCESIS DE BARRANQUILLA - DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PASTORALES - PASTORAL LITÚRGICA – AÑO DE LA MISERICORDIA

NATIVIDAD DEL SEÑORMisa de MedianocheDiciembre 25 de 2015

MONICIÓN INICIAL

¡Hoy nos nace El salvador, el Mesías, el Señor!Hoy Jesús se hace presente y llega con todas las gracias de su nacimiento: La buena voluntad y la paz de Dios hacia todos los hombres. Celebremos con mucha alegría el misterio de la Navidad, hermanos, porque con Cristo ha llegado nuestra salvación.

MONICIÓN LITURGIA DE LA PALABRA

La esperanza en la salvación prometida por Dios se ha cumplido: ¡Es Cristo quien lo hace posible! ¡Hoy nos nace el Salvador! Anunciemos esta gran noticia.

MONICIÓN LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

OFRENDASCon el vino y el pan, presentemos al Padre nuestra vida y anhelo de participar de la divinidad de Jesús, su hijo unigénito, que con amor y humildad adquirió nuestra condición humana para nuestra salvación.

COMUNIÓNJesús se digna habitar en cada uno al hacernos partícipes ahora, de su Cuerpo y de su Sangre. Con alegría, guiados por su luz, vayamos a su encuentro.

SALIDANuestra vida de bautizados tiene que ser un continuo nacimiento de Dios. Vayamos a nuestros hogares a compartir la alegría que hoy nos embarga el corazón: ¡Hoy nos ha nacido el Salvador!

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NATIVIDAD DEL SEÑORDiciembre 25 de 2015

ORACIÓN DE LOS FIELES

Presidente: “Nosotros hemos conocido el amor y la misericordia de Dios”. Al contemplar a su Hijo hecho hombre, dirijámonos con plena confianza al Padre que nos ama.

Todos: Dios que nos amas tanto, escúchanos

Roguemos al Señor por los pastores de la Iglesia. Que con su palabra y con su testimonio sigan entregando a todos los hombres la maravillosa noticia del amor y la misericordia de Dios.

Roguemos al Señor por las naciones del mundo en donde pesan las tinieblas de la guerra, el hambre y la pobreza. Que en ellas brille la luz de Cristo, Salvador del mundo.

Roguemos al Señor por los pobres, los enfermos y necesitados; los que están privados de la libertad; por quienes están desorientados en la vida. Que para ellos también haya Navidad a través del compromiso de caridad de los hermanos.

Roguemos al Señor por nuestras familias. Que en todas ellas haya un lugar para acoger al Niño Dios que viene a traerles la paz, amor y unidad.

Roguemos al Señor por todos nosotros. Que la celebración del nacimiento del Salvador renueve nuestra fe, esperanza y caridad; permanezca en cada uno el amor manifestado en Cristo Jesús y, en este año de la misericordia, nos mueva a compasión con los más humildes y sencillos.

Intenciones particulares

Presidente: Dios y Padre nuestro, que quisiste que tu Hijo naciera en el seno de una familia humana, escucha nuestras oraciones, y haz de todos los hogares una iglesia doméstica donde se predique y viva la fe, y donde se practique el amor a Ti y al prójimo. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

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NATIVIDAD DEL SEÑORMisa del día

Diciembre 25 de 2015

MONICIÓN INICIAL

¡Es Navidad, ha nacido el Salvador, el Mesías, el Señor!¡Hoy es día de gran júbilo, queridos hermanos! Dios, en su inmenso amor por los hombres, ha querido que pudiéramos compartir la vida divina de aquél que hoy se ha dignado compartir la condición humana: Jesús.En este año de la misericordia mostremos con nuestra vida la alegre noticia que Jesús nace para nuestra salvación. Participemos con fe.

MONICIONES LITURGIA DE LA PALABRA

Jesucristo es el rostro de la misericordia del Padre. Con Él se inaugura una nueva etapa para toda la humanidad; en Él se cumplen todas las promesas ofrecidas por Dios. Él es la Palabra que se hace carne.

MONICIONES LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

OFRENDAS“La misericordia es el acto supremo con el que Dios viene a nuestro encuentro”. Junto al Pan y al Vino presentemos nuestra vida y el deseo de ser testigos veraces de la misericordia del Señor.

COMUNIÓNEn Jesús recién nacido contemplamos el misterio de la misericordia. Acerquémonos confiados y seamos eco de la Palabra de Dios que nunca se cansa de ofrecerla.

SALIDA¡Somos misericordia! Esa debe ser nuestra consigna durante todo el año. ¡Vivámosla desde ya en esta Navidad!

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NATIVIDAD DEL SEÑORMisa de MedianocheDiciembre 25 de 2015


Presidente: Unidos en la alegría de ser la familia santa del Padre, pidámosle que escuche nuestras súplicas y acoja con su amor misericordioso nuestras necesidades y esperanzas.

Todos: Padre misericordioso, escúchanos

Para que en los hijos de la Iglesia, que celebran hoy con alegría el misterio de la Navidad, renazcan a una nueva vida de justicia, de amor y de paz. Oremos.

Para que los gobiernos del mundo encuentren la paz, hagan cesar las guerras y tiendan su mano a los más necesitados. Oremos.

Para que el Hijo de Dios, que ha querido compartir nuestra naturaleza humana, dé alegría a los que lloran, salud a los enfermos, ayuda a los moribundos y consuelo a los que en estas fiestas se sienten solos y tristes. Oremos.

Para que crezca en nuestras familias, reunidas en estas fiestas la fe en Jesús, Hijo de Dios y Salvador nuestro. Oremos.

Para que todos los hombres lleguen a conocer a Cristo, el Señor, quien ha venido a buscar y a salvar a los que estaban perdidos; y muestren, a ejemplo suyo, el rostro misericordioso del Padre. Oremos.


Presidente: Dios, Padre misericordioso, que por el misterio del nacimiento de tu Hijo has querido compartir las fatigas y limitaciones de la familia humana, escucha las oraciones que tu Iglesia te presenta en este día. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

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LA SAGRADA FAMILIA DE JESÚS, MARÍA Y JOSÉDiciembre 27 de 2015

MONICIÓN INICIAL

Misericordia es la vía que une Dios y el hombre, porque abre el corazón a la esperanza de ser amado.

En este año de la Misericordia, dirigimos hoy nuestra mirada a aquella santa familia en que se desarrolló el Hijo de Dios hecho hombre.Celebremos con mucho gozo y evoquemos para nuestras familias las virtudes domésticas que reinaban en el hogar de Jesús, María y José.


La misericordia que ofrecemos a nuestros hermanos, Dios quiere que comience a vivirse entre los miembros de las familias. Descubramos en la Palabra el ejemplo de vida de la Familia de Nazaret. Escuchemos.

MONICIÓN LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

OFRENDASAl presentar los dones de pan y vino, pongamos en manos del Señor nuestra familia y el anhelo de que en ellas se edifiquen siempre en las virtudes del amor, la misericordia y de la mutua comprensión.

COMUNIÓNUnidos por el amor de Jesús, María y José, recibamos el alimento para nuestra alma. Acerquémonos con fe.

SALIDA¡A vivir la misericordia en nuestra familia! ¡Mostremos en nuestros hogares el amor misericordioso del Padre!

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LA SAGRADA FAMILIA DE JESÚS, MARÍA Y JOSÉ Diciembre 27 de 2015


Presidente: Hermanos y Hermanas: Imploremos la bendición de Dios sobra la gran familia humana y sobre todos los hogares cristianos. Digamos con fe:

Todos: Te rogamos, óyenos

Por la Iglesia universal, para que anuncie con entusiasmo el camino de salvación que nos mereció Jesús, y defienda siempre con valentía los valores humanos y cristianos del matrimonio y la familia, oremos al Señor.

Por quienes gobiernan las naciones, para que mediante leyes y disposiciones propicien la grandeza de la institución familiar y sepan valorar el papel del padre, de la madre y de los hijos en el hogar, oremos al Señor.

Por las familias que sufren violencia, división, indiferencia y falta de amor, para que encuentren caminos de reconciliación y perdón, de comprensión y tolerancia, oremos al Señor.

Por toda la familia de Dios, que vive la experiencia gozosa de este año jubilar, para que la misericordia se convierta en la viga maestra que sostiene toda la vida de la Iglesia.

Por todos nosotros: padres, madres hijos o familiares, para que pongamos todo nuestro esfuerzo por construir una familia gozosa en la que todos podamos vivir con la dignidad de hijos de Dios, oremos al Señor.


Presidente: Señor, Dios nuestro, que has querido que tu Hijo, engendrado antes de todos los siglos, fuera miembro de una familia humana, escucha nuestras súplicas y haz que los padres y madres de familia participen de la fecundidad de tu amor, y que sus hijos crezcan en sabiduría y gracia ante ti y ante los hombres. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

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SANTA MARÍA MADRE DE DIOS EUCARISTÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS FIN DE AÑO

DICIEMBRE 31 DE 2015

MONICIÓN DE ENTRADA

Hoy culmina un año más queremos terminarlo con los ojos y el corazón puestos en Jesús, el Señor, nacido de la Santísima Virgen María. Celebramos junto con toda la Iglesia la Solemnidad de Santa María, Madre de Dios y nos unimos a la jornada de mundial de oración por la paz.En este día de fin de año, agradezcámosle a Dios por todos los bienes recibidos y dispongamos nuestro corazón para estar abiertos a su voluntad en el que inicia. Participemos con fe.


El Señor fortalece nuestra fe con su Palabra que hoy se centra en María; en ella nos muestra su grandeza a través de la historia. Escuchemos


OFERTORIOLlevamos hacia el altar los dones para la Eucaristía. Con ellos presentamos al Señor la alegría y el compromiso de ser hijos suyos, participando con gozo de su compañía infinita.

COMUNIONHermanos, acerquémonos con alegría a la Mesa del Señor. Nos ha nacido el Salvador, el Pan de Vida, el alimento del amor. En la Eucaristía, Él nos acompaña hasta el fin de los tiempos.

SALIDACon nuestra fe puesta en Dios, vayamos a nuestros hogares, llevando la paz de Dios, seguros de que su bendición nos acompañará durante el 2016. Qué Dios sea el centro de nuestra vida y nos ayude a cumplir nuestros propósitos. ¡Feliz Año Nuevo!

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SANTA MARÍA MADRE DE DIOSEUCARISTÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS FIN DE AÑO

DICIEMBRE 31 DE 2015

ORACION DE LOS FIELES

Presidente: Hermanos y hermanas, con fe amor y esperanza, en este año que termina, presentemos con fervor, nuestras peticiones. Oremos juntos diciendo:

Todos: Señor del tiempo, escúchanos Por la Iglesia Universal, para que siga proclamando en todo momento y

en todo tiempo, que Jesucristo, es el Señor, el Rey de Reyes, el Salvador.

Por los Pastores de la Iglesia, para que sus vidas, sean manifestación perenne del amor de Dios, y su testimonio, refleje a todos los hombres de la tierra, a Cristo vivo y presente, ayer, hoy y siempre.

Por el mundo, para que en este nuevo año que se inicia, sea propicio para el acercamiento de todos los pueblos, sin distinción alguna, especialmente, de aquellos que viven la tragedia de la guerra, la violencia y el terrorismo, y que se desplieguen por todas partes, las banderas de la paz, la justica y la verdad.

Por nuestra comunidad parroquial, para que juntos iniciemos, con optimismo y confianza el año venidero; y con esfuerzo y firmeza, con fe y amor, hagamos realidad los proyectos que la voluntad de Dios, ponga en nuestras manos.

Por todos los grupos de nuestra parroquia, para que siempre se encuentren dóciles y disponibles a la labor pastoral y que, en la vivencia de su carisma, promuevan siempre la unidad, como camino eficaz, para desarrollar una pastoral de conjunto.

Por nosotros aquí reunidos, para que encontremos siempre en la Eucaristía, el alimento del espíritu, que nos fortalece y nos introduce en el misterio de la misericordia al que estamos llamados en este año jubilar.

Presidente: Padre Bueno, escucha las súplicas que con amor y humildad, te presenta tu Iglesia y que en los dones que recibimos, encontremos tu voluntad que oriente nuestras vidas. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

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HORA SANTA DE FIN DE AÑO

“Y habitó entre nosotros”

Canto: La dulce presencia de Dios

Jesús Sacramentado, en este momento tan especial de fin de año venimos a adorarte, reconociéndote como el Señor de la historia. Hoy, queremos darte la gloria y la alabanza. En esta hora, alzamos nuestras manos, para decirte que no hay nadie como Tú… Tus obras son maravillosas.

Hoy a pocas horas de que se acabe este año, nos postramos ante Ti por todo lo que ha transcurrido en este año. Alcemos nuestras manos para alabar a nuestro Señor…

¡Hoy es un día de acción de gracias! Presentemos cada uno de los instantes del 2015, pensemos en ellos y demos gracias a Dios: Los triunfos y los momentos de dificultad; los momentos de alegría y aquellos de dolor… Presenta al Señor tu corazón agradecido. Alza tus manos a Él…

Canto: Queremos darte gloria

Señor, quisiéramos poder decir que este año ha sido completamente consagrado a ti, para tu gloria y tu servicio. Te pedimos perdón por las veces que no hemos sabido corresponderte: Por todas nuestras ausencias, por la palabra mal dicha, por las omisiones, por los malos pensamientos, por la oportunidad no dada, por el hermano que rechazamos y al que no ayudamos a crecer…

Hoy, en tu presencia, queremos entregarnos y abandonarnos en tus manos. Queremos rendirnos incondicionalmente a Ti y acoger ese perdón. Y por eso, arrepentidos, pedimos que tu sangre generosa venga sobre nosotros y sobre cada miembro de nuestra familia para purificarnos. Recibe nuestro corazón contrito. ¡Perdón, Jesús, Perdón! Nosotros te agradecemos y te bendecimos porque tu Sangre redentora, que nos purifica de todo mal, está fluyendo sobre nosotros. Tu perdón está viniendo a nuestro corazón. Estamos siendo renovados por tu amor. Bendito seas Señor, por este momento de gloria en que nos reconcilias con el Padre a través de tu Sangre. Hazme, dócil a tu voz y transforma toda mi vida, Señor.

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Canto: Oración del PobreJesús Sacramentado, hoy, sobre todo, queremos darte las gracias. Jesús amigo, no solo queremos lamentarnos por el tiempo perdido, sino queremos hoy redoblar nuestros esfuerzos para superarnos. Danos tu gracia para aprovechar el tiempo de manera que podamos ya desde ahora encontrarnos con tu amor por toda la eternidad. Gracias por todos tus beneficios Jesús:Gracias por los días de sol y los nublados tristes,por las tardes tranquilas y las noches oscuras.Gracias por la salud y por la enfermedad,por las penas y las alegrías.Gracias por todo lo que me prestaste y luego me pediste.Gracias Señor, por la sonrisa amable y por la mano amiga,por el amor y por todo lo hermoso y por todo lo dulce,por las flores y las estrellas, por la existencia de los niños y de las almas buenas.Gracias por la soledad, por el trabajo, por las inquietudes,por las dificultades y las lágrimas.Por todo lo que me acercó a Ti.Gracias por haberme conservado la vida, y por haberme dado techo, abrigo y sustento Gracias Señor. Gracias Señor

Canto: Gracias, Señor, por amarme tanto

Ahora queremos escucharte…Háblanos, Señor, que te escuchamos:

Del Evangelio según San Juan 1, 1-18.“En el principio ya existía aquel que es la Palabra, y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. Ya en el principio él estaba con Dios. Todas las cosas vinieron a la existencia por él y sin él nada empezó de cuanto existe. Él era la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en las tinieblas y las tinieblas no la recibieron. Hubo un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan. Este vino como testigo, para dar testimonio de la luz, para que todos creyeran por medio de él. Él no era la luz, sino testigo de la luz. Aquel que es la Palabra era la luz verdadera, que ilumina a todo hombre que viene a este mundo. En el mundo estaba; el mundo había sido hecho por él y, sin embargo, el mundo no lo conoció. Vino a los suyos y los suyos no lo recibieron; pero a todos los que lo recibieron les concedió poder llegar a ser hijos de Dios, a los que creen en su

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nombre, los cuales no nacieron de la sangre, ni del deseo de la carne, ni por voluntad del hombre, sino que nacieron de Dios. Y aquel que es la Palabra se hizo hombre y habitó entre nosotros. Hemos visto su gloria, gloria que le corresponde como a Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan el Bautista dio testimonio de él, clamando: A éste me refería cuando dije: El que viene después de mí, tiene precedencia sobre mí, porque ya existía antes que yo. De su plenitud hemos recibido todos gracia sobre gracia. Porque la ley fue dada por medio de Moisés, mientras que la gracia y la verdad vinieron por Jesucristo. A Dios nadie lo ha visto jamás. El Hijo unigénito, que está en el seno del Padre, es quien lo ha revelado”.

Lector 1: Señor Jesús, tú que eres la Palabra eternamente creadora de la que “todas las cosas vinieron a la existencia y nada empezó de cuanto existe”, estamos reunidos alrededor de ti en este último día del año. Reconocemos que somos obra de tu amor. Eres una presencia personal de Dios en nuestras vidas. Sin embargo, en nuestros tiempos, un cierto tipo de cultura nos ha educado a movernos solo en el horizonte de las cosas, de creer solo en lo que vemos y tocamos con las manos. Por eso crece el número de personas que se sienten desorientados y creen en todo y nada. En este contexto, nos surgen algunas preguntas fundamentales: ¿Qué sentido tiene vivir? ¿Hay un futuro para nosotros y para las generaciones futuras? ¿Cómo orientar las decisiones de nuestra libertad buscando un resultado bueno y feliz de la vida?

Lector 2: Señor Jesús, “luz verdadera que ilumina a todo hombre”, necesitamos no solo el pan material, sino también necesitamos amor, sentido, esperanza, de un fundamento seguro, de un terreno sólido que nos ayude a vivir con un sentido auténtico, aún en la crisis, en la oscuridad, en las dificultades y en los problemas de cada día. Gracias por la luz de la fe, esta fe que es una confianza plena en ti, una adhesión a tu persona llena de esperanza y confianza porque has revelado el rostro amoroso de Dios con tu muerte y resurrección mostrándonos de manera luminosa que sólo en el amor está la plenitud del hombre. Ayúdanos a vivir de acuerdo a Tu voluntad y a educarnos en la fe, fruto de un encuentro contigo y del conocimiento de la verdad y de los acontecimientos salvíficos, en este año.

Lector 3: Señor Jesús, tú que eres el principio y el fin, “Aquel que es, que era y que ha de venir”, que “permanece hoy como ayer y por la eternidad”, pues “mil años para ti son como un día, un ayer, un momento de la noche”. Ayúdanos a no absolutizar el presente que nos lleva al vacío, crisis de sentido, frustración,

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ansiedad y angustia. Y porque eres la Palabra “que se hizo hombre y habitó entre nosotros”, abre nuestro ser para entender que el tiempo humano ha entrado a participar en la eternidad de Dios, suscita nuestra respuesta generosa descubriendo que creer es encontrar la verdadera vida. Provoca que en estos últimos minutos de este año dirijamos nuestra mirada a Ti quien nos ha revelado la plenitud de la vocación humana, nos enseñas a mirar la realidad en todos sus aspectos y nos invitas a responderte de manera adecuada y humana.

Canto: Quiero levantar mis manos…

Lector: El último día del año es una ocasión para elevar un cántico de alabanza y acción de gracias. Es una necesidad dar gracias a Dios que nos ha acompañado durante este tiempo, velando por nosotros con su amor de Padre. Repasemos en esta oración todos los beneficios de Dios. Agradezcamos de corazón y con humildad los dones recibidos. Todo es un regalo inmerecido de la Misericordia.Todos: Te damos gracias, Señor Jesús.

Lector: No podemos continuar nuestra oración sin pedir al Señor por todas aquellas personas que pasan por el sufrimiento, ya sea por el dolor físico o por las penas morales.Todos: Te lo pedimos, Señor Jesús.

Lector: Roguemos al Señor para que nos haga experimentar a todos su fortaleza y su gracia.Todos: Te rogamos, Señor Jesús.

Lector: Ahora miremos al futuro. No sabemos lo que nos tiene preparado la Providencia, pero nuestra fe nos dice que todo contribuye al bien de los que aman a Dios. En sus manos ponemos nuestros proyectos, pero sobre todo, nuestros deseos de amarlo por encima de todas las cosas.Todos: Tú eres nuestra esperanza, Señor Jesús.

Lector: Señor Jesús, los hombres y las mujeres que vivimos en esta tierra vamos a iniciar un año nuevo. En unos momentos nos desearemos: ¡Feliz año nuevo! Tú también nos deseas un feliz año nuevo, porque darnos felicidad es tu principal preocupación. Por eso te hiciste hombre y Dios con nosotros, con esa finalidad naciste como Salvador. Nos ponemos en tu presencia porque queremos que nos

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acompañes en este nuevo año, Eres el camino, la verdad y la vida, eres nuestro Maestro y nuestro guía.

Presidente: Acompáñanos, Señor, en este año nuevo. Enséñanos el camino de la felicidad. Bendícenos, Señor Jesús. Que este año nuevo nos traiga vida nueva. Que sigamos caminado junto a ti, que nunca nos apartemos de Ti. Que nuestro amor hacia Ti sea sin reserva, sin pretensiones. Un amor desinteresado, como el que Tú me ofreces… Que nunca me falte, Señor, mi amor hacia Ti.

Canto: Hasta Locura…

Presidente:“Otro año llega a su término, mientras que, con la inquietud, los deseos y las esperanzas de siempre, aguardamos uno nuevo. Si pensamos en la experiencia de la vida, nos deja asombrados lo breve y fugaz que es en el fondo. Por eso, muchas veces nos asalta la pregunta: ¿Qué sentido damos a nuestros días? Más concretamente, ¿qué sentido damos a los días de fatiga y dolor? Esta es una pregunta que atraviesa la historia, más aún, el corazón de cada generación y de cada ser humano. Pero hay una respuesta a este interrogante: se encuentra escrita en el rostro de un Niño que hace más de dos mil años nació en Belén y que hoy es el Viviente, resucitado para siempre de la muerte. El Dios eterno ha entrado en nuestra historia y está presente de modo único en la persona de Jesús, su Hijo hecho hombre, nuestro Salvador, venido a la tierra para renovar radicalmente la humanidad y liberarla del pecado y de la muerte, para elevar al hombre a la dignidad de hijo de Dios… Así pues, no hay lugar para la angustia frente al tiempo que pasa y no vuelve; ahora es el momento de confiar infinitamente en Dios, de quien nos sabemos amados, por quien vivimos y a quien nuestra vida se orienta en espera de su retorno definitivo. Desde que el Salvador descendió del cielo el hombre ya no es más esclavo de un tiempo que avanza sin un porqué, o que está marcado por la fatiga, la tristeza y el dolor. El hombre es hijo de un Dios que ha entrado en el tiempo para rescatar el tiempo de la falta de sentido o de la negatividad, y que ha rescatado a toda la humanidad, dándole como nueva perspectiva de vida el amor, que es eterno… A ti, oh Dios, te alabamos. La Iglesia nos sugiere terminar el año dirigiendo al Señor nuestro agradecimiento por todos sus beneficios. Nuestra última hora, la

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última hora del tiempo y de la historia, termina en Dios. Olvidar este final de nuestra vida significaría caer en el vacío, vivir sin sentido” (Benedicto XVI)

Canto: Tanto amó Dios al mundo

Y ahora queremos dar gracias por esta comunidad… Por la comunidad de la _________________. Por los esfuerzos de cada uno de sus miembros, por su crecimiento, por los grupos y movimientos…Demos gracias por (los grupos y/o equipos que haya en la parroquia):

El Epap, que me acompañan en la animación pastoral. La Pastoral Familiar… La Pastoral Infantil… La Pastoral Pre-juvenil… La Pastoral Juvenil… La Pastoral del Adulto Mayor… La Pastoral Litúrgica (Proclamadores, Cantores, Monaguillos,

Responsables de Sacristía, Ornato y Aseo)… La Pastoral Catequética… Cada uno de los movimientos apostólicos: Legión de María, Corazón de

Jesús, … La Pastoral Vocacional… El Consejo de Asuntos Económicos y Comité Pro-templo…

Señor, te presentamos, también, nuestros proyectos, nuestros anhelos:El deseo de crecer en número y en santidad.El deseo que cada día haya más gente comprometida con la misión de la Iglesia.El deseo de vivir plenamente este año donde la Iglesia Universal nos invita a ser anunciadores de la misericordia.

Adoremos, pues humildes a tan grande sacramento. Honor, gloria y bendiciones a Dios Padre sin principio, y las mismas alabanzas al Hijo del Él nacido y al Espíritu de ambos: nuestro Dios, único y Trino. Amén.Nos diste el pan del cielo.

Todos: Que contiene en sí todo deleite.

Oremos. Oh Dios, que en este Sacramento admirable nos dejaste el memorial de tu pasión, te pedimos nos concedas venerar de tal modo los sagrados misterios

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de tu Cuerpo y de tu Sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu redención. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Bendición con el Santísimo (incensación).Bendito sea Dios.Bendito sea su santo nombre.Bendito sea Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre.Bendito sea el nombre de Jesús.Bendito sea su sacratísimo Corazón.Bendita sea su preciosísima Sangre.Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del altar.Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.Bendita sea la gran Madre de Dios, María Santísima.Bendita sea su santa e inmaculada Concepción.Bendita sea su gloriosa Asunción.Bendito sea el nombre de María, Virgen y Madre.Bendito sea San José, su castísimo esposo.Bendito sea Dios en sus ángeles y en sus santos.

Alaben al Señor todas las naciones, aclámenlo todos los pueblos. Firme es su misericordia con nosotros, su fidelidad dura por siempre. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. AménTodos: Adoremos, por siempre, al Santísimo sacramento.

Canto: Cantemos al amor de los amores

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SANTA MARÍA MADRE DE DIOSENERO 1° DE 2016

MONICIÓN DE ENTRADA

“Elegida para ser la Madre del Hijo de Dios, María estuvo preparada desde siempre para ser Arca de la Alianza entre Dios y los hombres”.

¡Venturoso año 2016 para todos! Al recibir el nuevo año celebramos junto con toda la Iglesia la Solemnidad de Santa María, Madre de Dios y nos unimos a la jornada de mundial de oración por la paz. Como María, reconozcamos la misericordia de Dios para con los hombres y caminemos con ella en ese anhelo de paz que claman todos los pueblos de la tierra.


El Señor fortalece nuestra fe con su Palabra que hoy se centra en María; en ella nos muestra su grandeza a través de la historia. Escuchemos


OFERTORIOComencemos este año consagrándole a Dios nuestra vida, nuestros trabajos y nuestras aspiraciones, y el deseo de hacer su voluntad.

COMUNIONUnámonos más a Cristo en este nuevo año para actuar conforme a su voluntad. Acerquémonos con fe.

SALIDAPropongámonos durante este nuevo año mostrar la misericordia de Dios con nuestra propia vida, transmitiendo a nuestros hermanos la alegría de sentirnos amados por Él.

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SANTA MARÍA MADRE DE DIOSENERO 1° DE 2016

ORACION DE LOS FIELES

Presidente: Acudimos confiados al inicio de este año, para clamar que tu bendición descienda sobre todo lo que has creado por amor.

Todos: Señor, que tu bendición nos alcance Pidamos al Señor para que conceda a la Iglesia ser en el mundo

instrumentos de la paz que viene desde lo Alto.

Pidamos al Señor para que inspire en el corazón de todos los hombres de buena voluntad, particularmente en nuestros gobernantes, un empeño decidido por trabajar en la transformación de toda manifestación de injusticia en el mundo.

Pidamos al Señor para que todos los que sufren, poniendo sus inquietudes en manos de María, encuentren el consuelo y la ayuda necesaria.

Pidamos al Señor para que en nuestra comunidad parroquial se despierten cada día, actitudes de amistad y de perdón, fundadas sobre la fe, la esperanza, y el amor.

Pidamos al Señor para que en todo este año jubilar se despierte en nosotros el deseo de ofrecer misericordia a nuestros hermanos, especialmente los más humildes y abatidos.

Intenciones particulares Presidente: Padre eterno, nos has dado a María como madre nuestra, otórganos tu favor y haznos vivir siempre en tu paz. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

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