Vida Verdadera

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1 Este libro es el cuarto de doce libros que Jesús prometió dictarle a Mercedes Miranda con mensajes actuales para beneficio de todos los seres humanos. Vida Verdadera Dice Jesús: Porque el amor es vida y fuente de vida acepten Mi invitación a amarse los unos a los otros tal Como Dios los ama. Un conmovedor llamado a cada ser humano Inteligente y sensible, a despertar su capacidad de amar. ¡Especial para la Juventud!

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Este libro es el cuarto de doce libros que Jesús prometió dictarle a Mercedes Miranda con mensajes actuales para beneficio de todos los seres humanos.

Vida Verdadera

Dice Jesús:

Porque el amor es vida y fuente de vida acepten Mi invitación a amarse los unos a los otros tal

Como Dios los ama.

Un conmovedor llamado a cada ser humano Inteligente y sensible, a despertar su capacidad de amar.

¡Especial para la Juventud!

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índice

presentación...................................................................................................... 3 Mensajes de Jesús Mi vida fue una lección de vida. 5 La encarnación del amor.....................................................................................7 ¡Hagan carne su amor!......................................................................................10 ¿Cómo hacer carne el amor?............................................................................12 Transmitir es encarnarse en los demás. 14 La gestación del amor........................................................................................18 Nacimiento del amor..........................................................................................21 Al nacer sigue el crecer..................................................................................... Lecciones que dan los niños ............................................................................ Diferencia entre un niño y un viejo..................................................................... Lo que corrompe a los niños............................................................................. Los sustitutos del amor...................................................................................... El amor es también cosa de hombres............................................................... El único milagro que deben hacer los seres humanos...................................... El espíritu es fuerte............................................................................................ La falta de amor es muerte................................................................................ Vida verdadera................................................................................................... ¿Cómo hacer la cadena del amor?.................................................................... Separata La primera revelación......................................................................................

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Presentación Este libro es un mensaje humano, ¡estrictamente humano! Para los seres humanos de todo el planeta que anhelan un mundo nuevo. El mundo lo hacemos nosotros. Es nuestra obra. Si esta mal, es nuestra posibilidad directa o indirectamente. Mas que perder el tiempo en criticarlo, acción que demostraría un autocastigo, una autocrítica, necesitamos aprovechar nuestro tiempo (vida), para preocuparnos de cómo cambiarlo en beneficio de todos. Cambiar significa reemplazar una cosa por otra. Para cambiar el mundo viejo por uno nuevo, necesitamos reemplazar lo viejo que hay en nosotros por algo nuevo, ya que nosotros hacemos el mundo. Cambiar la critica que destruye, por el entusiasmo que construye. Cambiar el miedo que nos aleja, por la confianza que nos acerca. Cambiar la ambición por recibir, por la generosidad en darnos sin medida. Cambiar la falsedad que nos empobrece, por la verdad que nos enriquece. Cambiar la pequeñez que nos divide, por la grandeza que nos une. Cambiar la debilidad que nos corrompe, por la fortaleza que nos restaura. Cambiar lo ruin que nos avergüenza, por la nobleza que nos enorgullece. Cambiar la esclavitud que hemos conquistado, por la libertad que hemos perdido. Cambiar el odio que nos tontifica, por el amor que nos hace sabios.

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Mensajes de

Jesús

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MI VIDA FUE UNA LECCIÓN DE VIDA

Toda mi vida fue una demostración de amor hacia ustedes. De un amor profundo y grande, ¡sin medida! De mil maneras les mostré mi amor. En cada detalle de mi vida les mostré mi amor. Cada detalle de mi vida es también una lección de amor que a ustedes les convendría aprender y vivir, si quieren salir de la mediocridad y vivir realmente.

A través de esta lección podrán encontrar el acceso a la verdadera vida, fuente permanente de felicidad y de gozo infinito. Yo no quiero ni necesito que me veneren por todo el amor que les entregue. Es más importante y urgente que ustedes aprendan las lecciones de amor que les di y las vivan, y no sigan perdiendo ese precioso don de la vida que poseen venerándome, porque de nada les servirá la veneración. Solo amándose los unos a los otros recuperaran la a rmonía y felicidad que tanto añoran. Amarse los unos a los otros fue la gran elección que yo les deje con caracteres de orden para mover su debilitada voluntad. Amarse los unos a los otros será lo mejor que puedan hacer por ustedes mismos, por sus seres queridos y por la humanidad. Amarse los unos a los otros los liberara de todos los males, y lo más importante de todo, es que el amor los hará descubrir todos los bienes imaginables y los que no se imaginan, y los sumergirá en la verdadera y hermosa vida que les corresponde. Verlos vivir la vida que les corresponde a su dignidad de hijos de Dios, será la mayor satisfacción y la mas profunda alegría que me puede dar. Yo seré feliz viéndolos a ustedes felices. Y esta vida verdadera la alcanzaran cuando tomen en cuenta las lecciones que yo les di con mis ejemplos.

A través de esta lección, les enseño a vivir como personas capaces de amar y destinadas por lo mismo, a amar y ser amadas

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Todo lo que yo hice son acciones humanas, lecciones humanas para que ustedes puedan humanizarse, y así alcanzar la verdadera vida. ¿De que me sirve que me alaben con la boca, que digan que soy el mejor maestro, si sus corazones no quieren aprender la lección que les di y vivirla? Lo demuestra sus caras, sus miradas agresivas, tristes e indiferentes, sus hogares llenos de violencia, de amarguras y desarmonía; sus vicios, sus traiciones, sus indiferencias, sus divisiones, sus guerras, sus crueldades para construir tantas y tan sofisticadas armas físicas y síquicas, y la falta de responsabilidad para cumplir la única misión que tienen: amarse los unos a los otros. Esta vida llena de vicios, crueldades e indiferencias que llevan, es la mejor evidencia de que no creen en mi. Si hubieran creído en mi y hubieran aprendido la lección que les di, sus caras estarían alegres, sus corazones gozosos, sus hogares felices y la humanidad gozaría de paz, armonía, salud y felicidad. ¡Que dañina ha sido la terquedad para el ser humano! Si quieren levantarse del abismo en el que van descendiendo en estos momentos con tanta velocidad, solo será por obra del amor. Los seres humanos no se debilitan, envejecen y mueren por falta de alimento, sino por falta del amor que es vida y fuente de vid a.

Todos mis ejemplos, todos los actos de mi vida, desde la encarnación hasta la resurrección, son lecciones que les llevaran a alcanzar rápidamente esa meta que les puse y en el cual insistiré siempre: ¡Ámense los unos a los otros!

La mejor recompensa que puede recibir un verdadero profesor, es que sus discípulos aprendan la lección que les enseño y lo vivan.

Todavía hoy ustedes no creen en mi, pues no han aprendido ni practicado la lección de vida que les di.

Solo el amor los ascenderá hasta devolverles la verdadera vida. Solo el amor es vida.

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LA ENCARNACIÓN DEL AMOR

El primer ejemplo de amor que les di fue la encarnación. Todos mis ejemplos son ejemplos de amor, para que ustedes puedan tener la vida verdadera, llena de felicidad, porque yo quiero que sean felices de verdad. Por eso, mi primer ejemplo fue hacer carne mi amor. Mi amor por ustedes, los seres humanos, era tan grande que me vi forzado por ese amor a hacerme carne. Si no hubiera hecho carne mi amor, no habría podido desde arriba ayudarles en la forma en que lo hice, porque ustedes estaban completamente desconectados de las cosas de arriba. Con esto quiero decirles que estaban desconectados del padre, que es la fuente de todo lo creado. Por no amar intensamente desde el fondo de ustedes mismos, están llenos de dolores, desilusiones y debilidades. Por no amar extensamente a todos sus semejantes están llenos de miedos, desconfianzas, odios y violencias. La falta de amor a creado las diferencias entre los seres humanos, creados para vivir unidos y en armonía. La falta de amor a creado la indiferencia frente el dolor de los niños y de los jóvenes de todo el mundo, que son las victimas receptoras del quebrantamiento de la armonía. La falta de amor ha creado la agresividad y el desacuerdo entre los adultos, porque han rechazado el amor de sus vidas. La falta de amor ha transformado al planeta en un horrible orfelinato, donde el ser humano es el principal huérfano. La falta de amor ha transformado al planeta en una hostil cárcel y al ser humano en el cautivo de su propia tontificación.

Encarnar el amor es la primera lección que ustedes deben aprender y vivir

Estaban desconectados de Dios, porque no amaban, y a Dios solo se llega por medio del amor, porque Él es amor

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La falta de amor y todos sus desordenes físicos y síquicos, personales y universales, pueden desaparecer si al igual que yo, hacen carne su amor. Yo hice carne mi amor, para poder acercarme a ustedes y hacer que ustedes pudieran acercarse a mí, y de esta manera acercarlos al padre, ya que ustedes no recordaban como debían acercarse al padre. Hice carne mi amor para poder mostrarles con cuerpo y espíritu cuanto los amo y cuanto deseo que ustedes vivan también el amor para que se desprendan, de una vez por todas, de la mediocridad en que se revuelcan. Hice carne mi amor para poder despertarlos al amor a través de mi ejemplo y de mi palabra, y volverlos a todos al pad re y al hogar, porque mi ejemplo y mi palabra son para todos, ya que todo s son importantes para el padre. Hice carne mi amor para poder convencerlos de que ustedes también son hijos de Dios, y que pueden tener una vida digna de esa condición si ustedes se lo proponen y viven el amor que les enseñe. Hice carne mi amor para poder enseñarles con mi eje mplo como podían hacer ustedes carne su amor. Mi encarnación encierra dos etapas:

1. La encarnación corporal o personal en el cuerpo de mi madre.

2. La encarnación en el cuerpo de la humanidad o encarnación universal. Mi madre permitió que me encarnara en ella, pero ustedes, la humanidad, no me permitieron encarnar mi amor en ustedes. Trate de impregnarlos de mi amor, pero ustedes no me lo permitieron, porque ustedes no creyeron en el amor.

Hice carne mi amor para poder conocer el mal que nos separaba y poder enseñarles como pueden eliminarlo de raíz

Porque yo hice carne mi amor no solo para tener un cuerpo físico y poder mostrarles cuanto los amaba, sino para poder también encarnar mi amor en todos ustedes, el cuerpo de la humanidad, y motivarlos a amar y amarnos sin medida, en una unión completa y eterna

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Lo que yo quiero enseñarles nuevamente hoy, a través de estas lecciones, es que se esfuercen en realizar estas dos encarnaciones de l amor al mismo tiempo, para que recuperen pronto la verdadera vida.

Hagan carne su amor en ustedes mismos, amando intensamente a sus semejante, y hagan carne su amor entre ustedes, amándose los unos a los otros.

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¡HAGAN CARNE SU AMOR!

Solo amando conscientemente harán carne su amor. Hacer carne el amor es encarnar el espíritu. Primero deben presente que el espíritu es la capacidad de amar que todos poseen. Segundo, deben reconocer que ese espíritu o capacidad de amar, ustedes la tienen fuera de su carne, porque han transformad o su carne en enemiga del espíritu, en enemiga del amor. En estos momentos ustedes actúan solo como carne, sin espíritu. ¡Están fraccionados! En ustedes no conviven el espíritu y la carne estrechamente, por eso se encuentran en un estado muy pobre, en una dimensión imperfecta. Ustedes han relegado al espíritu, al amor, fuera de la carne porque no lo usan. Pero el espíritu se mantiene adherido a la carne, apegado a ustedes como una sombra, esperando que ustedes le den una oportunidad para poder encarnarse. Esperando que ustedes le den una oportunidad para entrar en el cuerpo. Esperando poder penetrar todos los rincones de la casa para poder iluminarla. Para que de esta manera el cuerpo no siga siendo un terminal del espíritu, sino parte de Él. Para que de esta manera la casa no siga siendo una terminal del Reino, sino parte de Él. El espíritu encarnado en el cuerpo hará que este se transforme en un vocero del amor. El amor se hará carne y la carne se hará amor.

Es necesario, ¡es urgente! que ustedes entiendan que el espíritu esta fuera de ustedes, como un mendigo sentado fuera de la puerta de su casa, esperando entrar, no para pedirles algo, como lo hacen todos los mendigos, sino para llenarlos de todas las riquezas.

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La carne inundada por el amor, vibrara con mas fuerza, con mayor intensidad y con mas velocidad. Todo el amor servirá a la carne y la librara de su corrupción, de su debilidad y de la muerte.

Así el amor se hará idea en la mente y realidad en la voluntad. Se hará sangre en las venas y latido en el corazón. Así el amor se hará palabra en la boca, caricias en las manos y ternura en las miradas. Toda la carne servirá de amor.

Así el ser humano dejara de ser amor latente y volverá a ser en espíritu y en cuerpo solo amor. Será amor vivo, amor activo, amor fecundo. Así, el ser humano volverá a encontrarse con Dios que es amor.

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¿CÓMO HACER CARNE EL AMOR?

Amando conscientemente y constantemente harán carne el amor, encarnaran el espíritu. Realizaran la encarnación personal. Cada vez que dicen ¡te amo! Silenciosamente, en el secreto de su corazón a sus semejantes, (padres, cónyuge, hijos, hermanos, vecinos, amigos, compañeros de trabajo, a los humildes, a los enemigos) están abriendo la puerta del corazón para que el amor entre. ¡Para que el amor se encarne en ustedes! Y mientras más fuerza y más entusiasmo pongan en cada uno de esos ¡te amo! , mas penetrara en ustedes el amor, mas se arraigara y más crecerá. En un comienzo será como lo hacen con los mendigos que golpean a sus puertas. Abrirán la puerta y luego la cerraran, dejando al mendigo afuera. Con el tiempo, harán pasar al mendigo unos minutos y luego lo despedirán para seguir atendiendo “sus cosas importantes”. Si continúan abriéndole la puerta, se darán cuenta que el mendigo les da mucho mas a ustedes, de lo que ustedes le dan a Él. Entonces, ya no solo le abrirán la puerta cuando golpee, sino además le pedirán que vuelva al día siguiente, por supuesto siempre pensando que le hacen un favor. ¿Es acaso cuando ustedes alimentan su cuerpo, le están haciendo un favor a ustedes mismos? Así sucede con el espíritu. Al comienzo lo trataran como un mendigo. Después como a un extraño a quien es grato ayudar. Luego, si continua amando, ya no solo lo harán un minuto al día, sino varias veces al día, por que se darán cuenta que el amor no los empobrece, al contrario, los enriquece. Ya no consideraran al espíritu como a un mendigo, sino que empezaran a tratarlo como a un amigo al que pueden invitar a su casa por un rato. Con esto quiero decirles que se Irán familiarizando con el amor, pero no por eso, significa que se han despertado aun. Todavía están como soñando. Todavía no creen en el amor verdaderamente. Todavía no se entregan de lleno al amor.

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Pero si siguen amando a pesar de todas las sospechas y de las malas opiniones de algunos, si siguen diciendo en el secreto de su corazón ¡te amo! A las personas que les rodean o a las que recuerden, les aseguro que llegara el día en que despertaran encontrando al espíritu instalado dentro de ustedes, y los llenara de gozo y de riquezas insospechables. Pero eso no es todo, cuando un amigo los ha conquistado y se ha instalado en la casa para darles alegría, no pueden ocultarlo. A un buen amigo es imposible ocultarlo. Nadie se avergüenza de un buen amigo, ni lo oculta. Menos se puede ocultar a un amigo que les ha dando un sentido a la vida y que los colma de dichas y de riquezas. A un buen amigo hay que lucirlo. Esto es parecido a lo que le sucede a una persona que ha adquirido algo hermoso, algo especial. Su mayor preocupación es lucirlo. Así sucede en la persona que ha encarnado el amor. Así sucede en el que ama. Así sucede en el que se ha dejado inundar por el amor. ¡No puede mantenerlo en secreto! Necesariamente quiere lucirlo, quiere mostrarlo. Necesariamente quiere hacer participes a los demás de su hallazgo, de su descubrimiento. Cuando se ha encarnado conscientemente el amor (el espíritu), con la encarnación nace la necesidad de comunicarlo a otras personas. Esta necesidad responde al hecho de que son parte del gran cuerpo de la humanidad. El que ha encarnado el amor necesita compartir con los demás el gozo de esa vivencia. Trasmitir es comunicar, es dar a conocer lo que se posee, lo que se conoce. Trasmitir es una forma de encarnar en los otros el amor que se esta viviendo y hacer que ellos también lo encarnen. Transmitir es un acto de amor. Yo ame y enseñe a amar. Ustedes también tienen que hacer lo mismo.

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TRASMITIR ES ENCARNARSE EN LOS

DEMÁS La encarnación universal comienza con la transmisión. Cada vez que una persona cuenta algo a alguien, esta tratando de trasmitirle lo que le sucede y esperando que la persona que lo escucha lo asimile, lo haga carne. Transmitir es compartir lo que se vive en el interi or de cada ser humano, esperando ser recibido por los que escuchan. Transmitir es hablar de lo que se agita en el corazón. Es contar lo que alegra y lo que inquieta al corazón. Es dar a conocer lo que esta sucediendo de bueno y de malo en el interior de la persona. Transmitir es mantener informados a los demás de todo lo que esta sucediendo en el interior de cada integrante de la especie humana. La especie humana necesita estar informada de lo que suceda en cada persona, porque cada persona es una célula del cuerpo de la humanidad. Entonces, cada persona necesita informar a la especie humana lo que sucede en ella, así como también necesita saber lo que le esta sucediendo a la especie humana. Cuando una mujer esta embarazada, el hijo se ha encarnado en ella. Esta es la encarnación corporal personal. Cuando el niño nace, este se encarna en la humanidad. Esta es la encarnación en el cuerpo de la humanidad, o encarnación universal. Dar testimonio de la existencia de su hijo, es lo que hace una mujer cuando descubre que esta embarazada, al contárselo a su marido, a sus parientes, a sus vecinos, a sus amigos.

De aquí nace la necesidad de compartir, de informar, de dar testimonio de la existencia de que esta vivo, y también de que se es importante para los otros, así como también de que los otros son importantes para la persona.

La mujer no solo esta dando cuenta de lo que le ocurre a ella en su vientre, también esta cumpliendo con informar a los demás de la existencia de ese nuevo ser, de ese nuevo miembro de la humanidad.

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Es una manera inconsciente de encarnar a su hijo en el gran cuerpo de la humanidad. Desde el primer momento en que se da cuenta de su embarazo, empieza a hablar de ello y esta siempre hablando de su estado durante los primeros meses. La madre, inconscientemente esta haciendo de vocero de este hijo invisible para los demás, y solo perceptible para ella, indirectamente, a través de vagos síntomas. Así también sucede en la persona que ha encarnado su amor. Necesita que todos lo sepan. Necesita comentarlo desde su comienzo. Aunque en el comienzo los demás no lo perciban por lo insignificante que es, necesita comunicarlo. Cuando se comienza a amar, nadie lo nota, solo la p ersona que lo esta viviendo, pero eso no es razón suficiente para no comunicarlo. No hacerlo seria dañino, porque cerrarse es síntoma de miedo o de arrogancia, pero nunca de amor. Es necesario, ¡es importante! Dar a conocer desde el comienzo la encarnación del amor, para que los demás también se vayan familiarizando con el amor y lo hagan carne también, y no se extrañen con los cambios que ocurren en la persona durante la gestación del amor que ella esta haciendo conscientemente. Ni tampoco lo atribuyas a casualidades. Esta encarnación del amor que la persona ha hecho conscientemente, debe comunicarla desde el principio y durante la gestación, aunque solo sean sus palabras las únicas pruebas de esa encarnación, ya que hasta para la misma persona, esas señales son vagas en el comienzo. Con mayor razón serán vagas y poco convincentes para los demás. Pero les vuelvo a repetir, que nada de esto es razón suficiente para no comunicarlo.

Necesita que todos estén informados de lo que ha sucedido en su interior, en su corazón.

Es necesario, ¡es importante! Satisfacer esa necesidad de dar testimonio de todo lo que sucede en el interior de la persona.

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Hay que dar testimonio de la encarnación del espíritu, al igual como la madre necesita decir que esta embarazada, porque su hijo en un comienzo no puede dar testimonio de su propia existencia, porque es muy pequeñito para hacerlo. Solo a través de la madre puede dar testimonio de su existencia. Y la madre sólo a través de los vagos síntomas y de los pequeños cambios físicos, puede dar testimonio de ese hijo recién encarnado. El niño a través de los síntomas, trata de mostrarle a su madre que esta en ella, para que ella a su vez, se lo comunique a los demás. La madre es una receptora y transmisora de los mensajes que su hijo le envía desde su interior anunciándole su encarnación y su presencia, para que ella los de a conocer a sus semejantes del exterior. A los pocos meses, cuando el niño crece y ya esta a la vista de todos su existencia, porque el vientre de la madre se ha puesto prominente, ya la madre habla menos o nada de Él. A esa altura son las otras personas las que preguntan. Son las otras personas las que se preocupan del estado de la madre, como del estado del hijo. Son los otros los que piden información sobre la existencia de ese ser que ya se hace visible en el vientre de la madre y que ya se ha encarnado en ellos.

Solamente la persona lo percibe, pero muy vagamente. Los cambios que se producen en ella al comienzo, son tan pequeños y tan al interior, que apenas los percibe. Pero llegara el momento en que ese amor crecerá tanto que los demás lo notaran y le preguntaran acerca del amor. Le pedirán información. Con lo que están demostrando que ellos también quieren encarnar su amor. La encarnación del amor que ustedes hacen conscientemente, es un milagro muy grande, pero aparece pequeñito a los ojos de ustedes y con mayor razón, a los ojos de los demás. Aparece como un milagro pequeñito, porque empieza a mostrarse suavemente como los frágiles brotes de una semilla de árbol.

El niño se encarna en la madre y la madre lo encarna en la humanidad

Así pasa con el amor. Cuando la persona empieza a amar es tan poquito lo que ama que nadie lo nota

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La semilla que tiene el poder de transformarse en un árbol enorme, crece suavemente hacia afuera y hacia adentro al mismo tiempo. Así debe suceder con el amor. Crecer interiormente, lo que daría paso a la encarnación personal y mostrarse hacia fuera al mismo tiempo, para poder realizar la encarnación universal. Al comienzo la encarnación del espíritu es invisibl e. Pero después la persona lo notara y también lo notaran las que lo rodean. Al igual como el feto se convierte en persona y como la semilla se convierte en árbol, porque el feto posee en su interior el poder para transformarse en una persona y la semilla posee en su interior el poder para transformarse en árbol, así el ser humano por efecto de la fuerza el amor, saldrá de ese estado de feto o de semilla latente y alcanzara la altura que le corresponde: la de seres humanos grandiosos e ilimitados como personas y más grandiosos aun como parte del gran cuerpo de la humanidad. En un comienzo nada es ostensible. Pero es necesario ¡es urgente! Comenzar.

Hacer carne el amor es el primer paso, es el primer chispazo para encender el fuego personal. Y transmitir es el chispazo para encender el fuego en los demás.

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LA GESTACION DEL AMOR

Cuando se empieza a amar, el espíritu a crecer, mejor dicho, empieza a penetrar en la persona como el niño crece en el seno de su madre, invadiéndolo entero. Así como hay mujeres que cuando desean tener un hijo, no solo permiten que se encarne, sino también le permiten que crezca dentro de ella lo mejor posible y ponen todo lo que este de su parte para que ese hijo se desarrolle completamente y pueda mostrarse entero, así también hay mujeres que dejaron encarnar en ellas ese ser, pero no se responsabilizaron de Él. No les importa. No lo cuidan y a los primeros esfuerzos se cansan, se incomodan y solo tratan de deshacerse de Él, pensando que puede traerles problemas. Esas personas inventan los problemas, inventan también las razones para no dejarlo crecer y hasta buscan la complicidad de otras personas para abortarlo sin remordimiento. Así sucede con el espíritu. Hay algunas personas que empiezan a amar, que empiezan a hacer carne su amor, y siguen adelante entusiastamente con la gestación, hasta permitirle al espíritu hacerse carne, hacerse cuerpo y mostrarse completamente. Solo esas personas podrán conocerlo completamente. Ellas entienden que a la encarnación sigue la gestación. Ellas se transforman en nido del amor. Estas son las personas de buena voluntad. Son personas que quieren amar por encima de todo, lo que las transforma en verdaderas personas. Pero hay otras personas que, aunque sintieron los primeros beneficios del amor, no quieren continuar amando conscientemente. Rechazan el amor. Abortan el amor. No quieren ser nidos de amor. No quieren ser verdaderas personas. Ellas pensaron egoístamente que al primer ¡te amo! Ya serian como Dios y no necesitarían nada más. Ellas son como aquellas personas que con la primera vez que le pusieron atención a un mendigo, ya se creyeron bondadosas, pero se incomodan a la

Así como el útero es el nido del niño, el corazón es el nido del amor

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segunda vez que les golpean a la puerta, y a la tercera lo rechazan, lo despiden, lo abortan. Estas personas no han entendido que al espíritu hay que dejarlo entrar y permitirle que se quede. Ellas no entienden que transformar su corazón en nido de amor. Así actúan aquellos que solo están acostumbrados a manipular todo. Ellos también quieren manipular el amor. Ellos creen que el amor debe servirles a sus pobres ambiciones. Pero el espíritu empieza a mostrarles lo que realmente les conviene y ellos no lo entienden, porque ellos mismos no saben lo que les conviene. Esto les molesta y prefieren abortar el amor, prefieren dejar de amar, ya que el amor no les sirve para lo que ellos quieren. Para lo que ellos ambicionan. Después de que le han abierto la puerta al amor, se arrepienten, lo culpan de sus problemas y le cierran la puerta. Estas personas son como aquellas mujeres que después de haber permitido la fecundación, desarrollan una gran agresividad contra la criatura indefensa que llevan en su seno y luego lo abortan, la eliminan. Estas personas jamás conocerán a ese ser. Asia actúan los que empiezan amar y luego, porque n o hacen milagros y no los ponen sobre un altar, se incomodan y dejan d e amar. Abortan neciamente el espíritu. Y al abortar el espíritu, abortan con él la felicidad. Esa agresividad que desarrollan en contra del amor es una clara evidencia que no quieren ver en las otras personas a sus semejantes, a sus hermanos, a quienes hay que amar por encima de todo. A ellos no les interesa amar a los otros: los pobres, los enemigos, “los malos” A ellos solo les importa odiar y destruir. Ellas solo saben abortar. Por eso, rechazan el amor que yo les enseñe. Esas personas, mientras no se decidan a dejar penetrar en ellas el amor, mientras no se decidan a seguir amando a sus semejantes por encima de todas las cosas, jamás descubrirán las enormes riquezas que encierra el

Estas personas jamás llegaran a conocer el espíritu y los dones que el espíritu encierra.

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espíritu y seguirán pobres e ignorantes. Personas a medias, hombres a medias, mujeres a medias. Esas personas tendrán siempre la incomodidad de saber que podían amar y no amaron. Esas personas siempre vivirán en la amargura en que viven las personas a medias. Los fraccionados. Les sucederá igual como a la mujer que aborta a su hijo, que siempre tendrá la incomodidad de saber que pudo dar la vida y no la dio.

No basta con encarnar el amor. Hay que ser nido del amor. Hay que permitirle que invada todo ser, todo el cuerpo. Hay que permitirle a la capacidad de amar que se muestre entera.

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NACIMIENTO DEL AMOR

Así como yo entre al mundo (negativo) de ustedes como un bebe, así ustedes también tienen que entrar en mi mundo como un niño recién nacido, desnudo de toda arrogancia, de todo titulo. Despojado completamente de todo, necesitado de todo y necesitado a todos para poder seguir conociendo y penetrando mi mundo. Yo entre en el mundo de ustedes pequeño, pobre y débil como cualquier bebé, para poder mostrarles a ustedes como deben actuar si quieren entrar en mi mundo. Si yo hubiera entrado en el mundo de ustedes como adulto, habría sido chocante, habría sido anormal para ustedes y me habría considerado extranjero y, por esta razón, me habrían rechazado completamente y habría encontrado en esta actitud mía, la mejor excusa para no imitarme. Si además de haber entrado grande como un adulto, hubiera aparecido como un hombre rico, habría sido más chocante aun y más anormal para la especie humana, donde siempre, ayer y hoy, la gran mayoría de las personas son pobres. Esta actitud además de rara, estaría demostrando una gran falta de amor y una clara intención de agravar la situación de la humanidad, en vez de ayudar a arreglarla. Si además de grande y rico hubiera aparecido con mucho poder, como un cesar o un caudillo, ya no sólo no habrían podido imitarme, sino se habrían hecho más débiles, más temerosos, más dependientes. En vez de liberarlos, los habría hecho mas esclavos . Solo habrían cambiado de tirano. Esta actitud no sólo habría sido una clara demostración de falta de amor, sino una abierta tiranía. Pero ustedes no me comprendieron, porque estaban demasiado condicionados a ser conducidos, guiados, usados, tiranizados. Por eso mi ejemplo, aún hoy no ha sido comprendido. Por eso, mi primera presentación en publico fue como un bebe pequeño, pobre y débil.

Este ejemplo mío, fue para mostrarles a ustedes que deben actuar igual que yo, si quieren entrar en mi mundo

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Si en el mundo de ustedes es repulsiva y dolorosa la arrogancia y la tiranía, con mayor razón lo es en mi mundo, donde solo existe el amor. Los arrogantes cansan, anulan, alejan, asesinan. En cambio, un pequeño siempre motiva a la alegría. Atrae a los demás. Inspira confianza y ternura. ¿Quién le teme a un niño? Nadie. ¿No se dan cuenta como se relajan y sonríen los adultos frente a un recién nacido? ¿No se dan cuenta como un recién nacido inspira todos los sentimientos más profundos en las personas que lo rodean? Yo me mostré pequeñito para no sorprenderlos. Para que ustedes no se sintieran menores. Para poder acomodarme a ustedes y ustedes pudieran acomodarse a mí. Me mostré pequeñito para conquistarlos y motivarlos a despertar en ustedes todos esos hermosos sentimientos que tienen. Porque despertar es nacer. Porque nacer es desperta r. Nacer es estar convencido de que el amor es la luz. Nacer es mostrar esa luz a los demás, aunque sea co n torpeza. Los recién nacidos son torpes. Nacer es traspasar el convencimiento, la luz a los demás, aunque no hayan vivido intensamente. Nadie puede exigirle a un recién nacido que haga lo que hace un adulto. La diferencia entre un recién nacido de la carne y un recién nacido del espíritu esta, en que un recién nacido de la carne no sabe que puede ser un adulto, pero un recién nacido del espíritu sabe que puede llegar a la edad adulta en el amor, que es llegar a amar perfectamente. Nacer se transformara en la respuesta exterior a es e llamado interior del ser humano a la unión con los demás, a entregarse los unos a los otros en busca de una comunión gigantesca de la especie humana. Esta unión de todos los seres humanos en el amor, será la respuesta a una voz mayor aun, la voz del padre, que llama a sus hijos a la fusión con Él.

Nacer es entonces, el descubrimiento gozoso de la capacidad de amar y hacerlo saber a los demás. Sencillamente, pero con entusiasmo

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La fusión con el padre será la consecuencia de la f usión de todos ustedes. Esta es la principal lección que deben sacar del ejemplo que les di con mi nacimiento. ¡Despierten al amor! ¡Den a luz su amor! Ustedes tampoco deben sorprender. Siempre preséntense a los demás con naturalidad, sencillez, sin prepararse demasiado, para permitir al espíritu nacer espontáneamente. Porque el Reino no llegara ostensiblemente, ni dentro de ustedes ni fuera de ustedes. Deben partir como los niños, para que los otros también puedan partir como niños. El que quiera partir como maestro esta completament e equivocado. Significa que no me ha entendido. Significa que no ha profundizado en mi ejemplo. Querer imitarme a partir de mi vida “vida publica” es como querer recorrer un camino sin haber desarrollado las piernas, sin haber aprendido a andar. Ustedes llaman vida publica al periodo de mi vida a partir de los treinta años. ¡Están muy equivocados! ¡Toda mi vida fue publica! El error esta en que ustedes dan importancia, y solo algo de importancia, a esa parte de mi vida, y no valorizan la otra parte de mi vida, porque ustedes no quieren imitar todos mis ejemplos, porque solo sueñan con ser lideres, maestros o jefes. Si quieren tener vida verdadera, tienen que hacer carne su amor, como yo lo hice. Tienen que pasar por la gestación del amor, así como yo pase por la gestación carnal. Tienen que dejar nacer el amor, así como yo nací entre ustedes. Tienen que crecer en el amor, así como yo crecí entre ustedes.

Si ustedes despiertan el amor, si dan a luz su amor, verán nacer en ustedes al nuevo ser humano y con el, el advenimiento del nuevo mundo del amor

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Y tienen que llegar a amar a sus semejantes, así co mo lo hice yo. ¿Qué les enseña mi nacimiento? Aunque la encarnación es un acto aparentemente pequeño, es el primer paso, el más importante. Si no hay encarnación, no hay gestación, no hay nacimiento, no hay crecimiento, no hay adulto. Mi nacimiento les enseña a no sorprender a nadie. A no ser anormal premeditadamente. A ser sencillos. También mi nacimiento les enseña, que dejen nacer el espíritu. Que salga a la luz. Que lo dejen hablar. Así como en cualquier nacimiento, ya no es la madre la que habla por el hijo, pues el hijo quien habla por si mismo y se muestra públicamente, así pasa con el espíritu. Cuando se ha hecho carne el amor, llegara el momento en que nacerá espontáneamente. El espíritu hablara por sí mismo. Pronto se darán cuente que el espíritu hablara solo. Y hablara de lo suyo. El amor habla del amor. Con esto quiero decirles que cuando tengan que hablar en publico del amor, no necesita prepararse si han estado amando como yo se los he enseñado. En las primeras ocasiones el espíritu hablara poco, medido para no sorprenderlos, ni a ustedes, ni a los que escuchan. No se desanimen por eso. Siempre recuerden que un recién nacido hace muy pocas gracias, pero no por eso se siente mal. Si ustedes se sienten mal, es porque en el fondo de ustedes mismos quieren sorprender a los demás. Lo importante no es sorprender a los demás, sino motivarlos a que empiecen a amar. Lo importante no es sorprender a los demás, sino hacer que saquen toda esa ternura que esconden en su corazón.

Si antes de hablar han estado amando a esas personas a quienes van a trasmitir el mensaje del amor, no necesitan más preparación, porque el espíritu hablará por sí solo y.! hablara del amor!

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Lo importante no es dejar a la gente muy contenta, sino muy despierta, muy encendida, con ganas de cooperar en la construcción del nuevo mundo. Un recién nacido no solo trae alegrías, también trae trabajos. Un recién nacido mantiene a todos los que le rodean despiertos, activos, vitales. Así deben hacer ustedes, como el recién nacido. El recién nacido quiere mostrarse, él quiere crecer, y para eso, necesita a los demás y los demás lo necesitan a él, porque les da alegrías. Él trae gozo, pero también trae trabajos. Pero son tan grandes las satisfacciones que da con solo su presencia, que todo lo que pide, mas que cansar, se transforma en una necesidad para los que lo rodean, satisfacer su pedido. Así deben sentir y hacer ustedes también. Dejar hablar al amor y hacerlo sencillamente, sin ostentación, sin preparación. Sólo tienen que pedir y sentir que nece- sitan la ayuda de los otros para que él amor crezca en el mundo y así sus pala-

bras, como el llanto o la sonrisa del niño, abrirá los corazones de los que escu- chan para satisfacer sus peticiones.

AL NACER SIGUE EL CRECER

Les aseguro que si ustedes no cambian y se vuelven como los niños, no entrarán en el reino de Dios. (Mateo 18,3)

Nacer no es lo único, también hay que crecer. Aunque un bebé es hermoso, atractivo y capaz de despertar hermosos sentimientos en las personas que lo rodean, dejaría de serlo si se quedara siempre como bebé. Un bebé eterno sería una carga. Un bebé necesita crecer. ¡ Debe crecer!

Lo importante no es sorprender a los demás, sino empujarlos a que muestren toda esa gran capacidad de amar que Dios deposito en ellos.

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Al nacer sigue el crecer. Así como no basta con nacer, también es necesario crecer constantemente. Así tampoco basta con hacer un acto de amor en la vida, sino hacer de la vida un acto de amor. Nacer es encender la luz Crecer es mantener la luz encendida ¿Cómo es un niño? Aunque los niños no buscan sorprender, la sabiduría que despliegan en cada momento sorprende por sí sola. Porque un niño es un ser que está siempre creciendo. Un niño crece siempre física y espiritualmente. Un niño está siempre creciendo porque está siempre abierto. Estar abierto es la característica principal de los niños. Esta apertura permanente los capacita para estar siempre desplegándose. Para estar siempre mostrando sus riquezas interiores y descubriendo también las exteriores. Las que poseen las personas y las cosas que los rodean. Un niño no se detiene a valorizar lo que él es, lo que él sabe, lo que tiene o lo que le falta, porque está siempre abierto al “más”, un niño no se detiene nunca. Un niño sólo tiene tiempo par darse más, para contemplar más, para amar más. Los niños son contemplativos. Su inagotable entusiasmo y ardor por Contemplarlo todo, hace el milagro de Que todo se la revele. De que todo se

le descubra. De que todo se le muestre.

El estado natural del niño es un estado de contemplación y de revelación. Debido a ese permanente estado de Contemplación y de revelación , ve las Cosas como son, siente las cosas como

Son y ¡ama las cosas como son! De esta notable cualidad de ver las cosas como son, nacen otras cualidades. Los niños son sinceros, claros y directos. Los niños dicen con toda naturalidad, profundidad y sencillez como ven las cosas. La capacidad de ver las cosas como son y la libertad con que las dicen o muestran, los hace peligrosos.

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Por encontrarse en un nivel muy alto de pureza y en contacto permanente con la armonía universal , descubren inmediatamente las simulaciones de los adultos que rompen esa armonía y las delatan claramente, lo que los hace aparecer como seres intolerantes. Lo que sucede en realidad es que ellos no comprenden la mentira, lo anormal, lo desagradable y lo dicen directamente, con lo que dan la impresión de ser crueles o antipáticos, cuando lo único que están haciendo es dar luz con l a verdad. Cuando lo único que están haciendo es decirles a los adultos que están rompiendo la armonía Universal. El niño es un desmitificador por naturaleza. El niño es un apóstol espontáneo de la verdad. El niño es protector voluntario de lo hermoso. Un niño es el más sabio interventor entre la verdadera vida y la falsa vida que llevan los adultos. La capacidad de los niños de estar abiertos a darse y a recibir es también una demostración de sensibilidad. Los niños son sensibles a todo lo que les rodea. A lo hermoso y agradable, como también a lo feo y desagradable que interrumpe la armonía. Los niños viven en completa intimidad con todo. La sensibilidad que caracteriza a los niños los hace parte de todo , Tienen la capacidad de entrar en intimidad con todo. Ellos viven en una gran lucidez, que bien podrían envidiar los adultos. Esta capacidad de poder entrar en pro-

funda intimidad con todo, les permite ver lo que los adultos no pueden ver.

Entre las cosas que pueden ver los niños, están los pensamientos y las intenciones de los adultos. Cuando estos pensamientos e intenciones son inofensivas, reaccionan con tranquilidad y aceptación. Cuando son peligrosas reaccionan con miedo y rechazo. Estas capacidades las pierden con la educación o en marcamiento que reciben.

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La sensibilidad, la claridad, la amplitud de su visión y la facilidad para entrar en intimidad con todo, mantiene a los niños en un permanente Éxtasis, por lo que su cuerpo y su mente están en una vibración más alta que los adultos que se cerraron a la contemplación y a la intimidad con su medio. Este estado de contemplación, revela-

ción y éxtasis en que viven los niños, se pierde por falta de comprensión de los adultos. Ser como los niños es crecer siempre en el amor.

LECCIONES QUE DAN LOS NIÑOS

Los niños están siempre abiertos. Estar abiertos no significa estar siempre en una disposición intelectual de ver y aprender. Estar abierto es estar siempre dándose, estar amando a los demás, mostrando las cualidades interiores. Dando a luz. Vaciando hacia los demás todo el amor que se posee. Sólo el que se abre para darse a sí mis-

mo puede recibir. Porque el que espera sólo recibir sin haber dado antes, no puede recibir por- que no está abierto.

El que se da a sí mismo, provoca en los demás la necesidad de darse también. La persona que aprenda y viva esta lección, será como el grano de semilla que se abre para dar paso al árbol. Se abrirá a la verdadera vida.

Ser como los niños es crecer siempre En el amor. Los niños están siempre en estado de contemplación. Contemplar las cosas que los rodean, no es lo mismo que ver las cosas que les rodean. Contemplar las cosas es entrar en profunda intimidad con ellas.

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Entrar en intimidad con las cosas que les rodean es penetrar en las cosas y dejarse penetrar por ellas. Para entrar en intimidad hay que amar Intensamente, porque no puede haber

intimidad sin amor.

Cuando las personas aprendan y vivan esta lección que dan los niños, se les revelará todo, porque entrarán en intimidad con la vida que está presente en todas las personas que les rodean y en todos los seres visibles e invisibles. Los niños están siempre en éxtasis. El éxtasis es la satisfacción o gozo profundo al en trar en intimidad con la verdad de lo que se contempla. Es el resultado de la profunda entrega que permite penetrar profundamente todo lo que se está contemplando y que hace que todo lo contemplado se le revele profundamente también. De esta contemplación o revelación profunda, Surge el éxtasis. En la medida que la persona despliegue su fuerza amorosa, en esa misma medida conocerá la dicha profunda o éxtasis. Y cuando todas las personas amen pro- Fundamente, entrarán en el éxtasis Eterno, porque entrarán en la comunión

Perfecta entre todos los seres humanos Que los llenará de gozo profundo y per- manente.

DIFERENCIA ENTRE UN NIÑO Y UN VIEJO

Ni la edad, ni las arrugas, ni las canas son síntomas de vejez. La vejez comienza cuando se interrumpe la niñez. Hay viejos de cinco años. Interrumpir la niñez es parar el desarrollo. La interrupción del desarrollo es la característica principal de la vejez. Parar el desarrollo es impedir que un niño siga mostrando sus riquezas interiores.

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Parar el desarrollo es lo que hacen los padres, los educadores y la sociedad, cuando tiran a los niños al pantano de las costumbres, de lo convenido, de lo impuesto. Parar el desarrollo es lo que hacen los adultos cuando, a pesar que les amarga la esclavitud de la costumbre, se niegan a romper con ella, y hasta caen en la necedad de defenderla y de imponerla. Estancarse en la costumbre y en lo convencional, idiotiza al hombre. Idiotizarse es ver las cosas como la costumbre y el convencionalismo obligan a verlas. El viejo entonces no ve las cosas como son. A diferencia de los niños que son abier- tos a darse constantemente, a mostrar todas sus cualidades. Los viejos prefie-

ren y escogen cerrarse y tranformarse en egoístas y ciegos esclavos de la cos- tumbre y el convencionalismo.

A diferencia de los niños que son capaces de contemplar hasta el éxtasis todo lo que les rodea, como las hormigas, las aves, las flores, los animales, las personas, las estrellas, por el contrario, los viejos han cerrado los ojos a la contemplación. Sólo saben mirar sin llegar a la contemplación profunda y, por lo mismo, no alcanzan el éxtasis y sus caras se arrugan al servicio de la seca, y desnutrizadora costumbre. A diferencia de los niños que se escandalizan con la chocante desarmonía que interrumpe lo hermoso y normal, los viejos la excusan , la buscan y la practican. A diferencia de los niños que están siempre sumergidos en lo natural y eterno, los viejos están sumergidos en lo antinatural y temporal. A diferencia de los niños que tienen sus vibraciones más altas, porque viven sumergidos naturalmente en la unidad eterna Universal, los viejos al cerrarse, han bajado al mínimo sus vibraciones porque se han anquilosado, aislándose dentro de la unidad ellos mismos. Las vibraciones que tiene un viejo son parecidas a las que tiene una hoja que se ha desprendido del árbol. A diferencia de los niños que poseen una gran lucidez, los adultos viven en una gran oscuridad que los aleja de lo esencial.

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A diferencia de los niños que tienen una claridad extraordinaria, los viejos viven en una gran confusión. A diferencia de los niños que poseen una gran sensibilidad, los adultos se hacen cada vez más insensibles. Al autoencarcelarse en la costumbre, el ser humano se ha transformado en una célula cancerosa de la humanidad y en un lunar del universo. El adulto o viejo ha perdido la facultad de ver la realidad tal como es. Sólo ve y vive lo que le impone la costumbre, la tradición y el convencionalismo. El adulto no es capaz de ver ni entender Que es una unidad perfectísima, parte De otra unidad mayor que es la huma- nidad, y la humanidad a su vez, es par- te de otra unidad mayor aún que es el Universo. ( leer el libro “ La creación”)

Así como una célula atípica en el cuerpo humano es peligrosa, así el hombre que ha parado su desarrollo, cerrándose al amor de todos sus semejantes y de todo lo que le rodea, se transforma en una célula cancerosa de toda la humanidad.

LO QUE CORROMPE A LOS NIÑOS

Y al que escandalizare a uno de estos niños que creen en mí, más le

valiera que le colgasen al cuello una piedra de molino y le hundieran en

el fondo del mar. (Mateo 18,6) Cada vez los niños tienen menos infancia y más corrupción. La corrupción está en interrumpir su infancia para transformarlos en robots. La mayor preocupación de los adultos es hacer del niño un buen ciudadano, con lo que le impiden ser persona. A los adultos sólo les interesa hacer de los niños unos buenos profesionales, unos hábiles científicos y unos eficientes operarios para que puedan servir perfectamente a la máquina del materialismo. Todavía no saben hablar los niños y ya los entregan en manos de extraños para que modelen con ellos hermosos robots que sirven al insaciable materialismo. Corrompen a un niño cuando lo sacan de su estado de contemplación, revelación y éxtasis, para enmarcarlo en lo convencional.

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Corrompen a un niño cuando lo sacan de su mundo natural y lo internan el mundo artificial y antinatural de la costumbre, Corrompen a un niño cuando agregan a su mundo cosas que lo distraen de su contemplación. Si estas aumentan, distraerán tanto al niño que lo corromperán completamente y pasará a ser una persona que sólo estará bien rodeada de muchas cosas artificiales. Se despersonificará. Las cosas negativas que los adultos dan a los niños, son murallas que ponen frente a ellos para impedirles seguir gozando de la Universalidad. Son como terremotos que van abriendo grietas por todos sus c ostados hasta transformarlos en una isla separada del Universo. Corromper a los niños es transformarlos en sonámbulos y cretinos. Para los adultos es más cómodo enmarcar a los niños y engancharlos a su rutina que dejarlos ser felices. Presionar a los niños para transformarlos en robots del materialismo es corromperlos. A los niños no hay que cambiarlos, hay que imitarlo s.

LOS SUSTITUTOS

DEL AMOR (LAS TENTACIONES)

Entonces fue llevado Jesús por el espíritu al desierto para ser tentado por el diablo... y habiendo ayunado cuarenta días y cuarenta noches, al fin tuvo hambre. Y acercándose el tentador, le dijo: “ Si eres hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan “. Pero Jesús respondió diciendo: “Escrito está, no sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”. Llevóle entonces el tentador a la ciudad santa y poniéndole sobre el pináculo del templo, le dijo: “ Si eres el hijo de Dios, échate de aquí abajo, pues escrito está, que Él enviará a sus ángeles para que te cuiden, para que no tropieces con piedra alguna”. Díjole Jesús: “ También está escrito, no tentarás al Señor tu Dios”

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De nuevo le llevó el tentador a un monte muy alto, y mostrándole todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, le dijo: “ Todo esto te daré, si de rodillas me adorares “ Díjole entonces Jesús: “ Apártate Satanás, porque escrito está, al Señor tu Dios adorarás y a él sólo venerarás.” Entonces el tentador le dejó y llegaron los ángeles y le sirvieron. (Mateo 4, 1-11) Mi retiro al desierto fue para ayunar y para poder así sentir la debilidad de la carne, porque yo no escuchaba la voz de la carne con la fuerza que ustedes la escuchan. Porque yo no sentía la tiranía de la carne con la intensidad que ustedes la sienten. Yo necesitaba oír esa voz y sentir esa tiranía para conocer cuanto poder ejercía sobre ustedes el cuerpo, y así poder comprenderlos mejor y también poder ayudarlos. Necesitaba saber cuanto poder le habían dado ustedes al cuerpo. Porque si la carne se ha convertido en tirana, es porque ustedes se lo han permitido. Esa es la razón que me empujó a retirarme al desierto a ayunar. Necesitaba sentir el hambre física en toda su intensidad. En la intensidad que ustedes la sienten. Necesitaba sentir las debilidades físicas y mentale s en la misma medida en que ustedes la sienten, para así poder hablarles sobre esas debilidades más claramente. Necesitaba saber cuales eran sus mayores esclavitud es, para poder mostrárselas y hacerlos tomar conciencia de ellas. Necesitaba saber cuales eran los sustitutos del amor que ustedes habían creado. Yo debía mostrarles todo lo que les esclaviza aunque sabía que por sacarles la venda de los ojos me crucificarían y me relegarían a la condición de “anormal”, “ Subversivo”, “superhombre”, “endemoniado”, o “ superestrella”. Mi misión era mostrarles todas las es-

clavitudes, pues mientras no tomen con- ciencia de que son esclavos, no podrán desear la libertad ni trabajar por ella.

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Pero no basta con tomar conciencia de que son esclavos, pues eso sería muy doloroso para ustedes sino saben como alcanzar la libertad. Por eso, mi misión no sólo consistió en mostrarles la esclavitud, sino en mostrarles también el camino a seguir par alcanzar la libertad verdadera. Esa fue la razón de mi ayuno. Ayuné para debilitar mi cuerpo hasta la agonía y así darme cuenta en carne propia, cuales eran las tiranías que ejercía sobre ustedes la carne. Necesitaba saber por qué cosas habían reemplazado al amor. La primera esclavitud que descubrí, fue la preocupación desmedida por lo que han de comer y beber. Esta gran preocupación la tienen todos los seres humanos, sin excepción, porque no han descubierto que no sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. En satisfacer las necesidades físicas, pierde el ho mbre la mayor parte de su vida y despreocupa la vida del amor. El hombre ha olvidado que el amor es el principal alimento del ser humano. Una persona puede estar muy bien alimentada y si no ama es una persona infeliz. Si el hombre se preocupara de amar, como tanto ha insistido Dios a través de los tiempos, descubrirá que el alimento del cuerpo es secundario y fácil de conseguir. Si los seres humanos hubieran creado Un mundo donde la principal preocupa- ción de los hombres fuera alimentarse

de amor, amarse, el pan material no faltaría.

Pero se han preocupado sólo del pan material y sólo han conseguido hacer un mundo sin amor, donde por supuesto, falta el pan para muchos. Los que han logrado satisfacer esta primera tiranía del cuerpo, del comer y del beber, se dejan tentar por la segunda tiranía que atormenta a la especie humana. La fama. Esta es la ambición desmedida por llamar la atención de los demás, por ser diferentes, Por ser especiales. Esta tiranía la sufren la mayoría de los seres humanos, pero no todos. Aunque esta tentación no la sufren todos los seres humanos, especialmente no la sienten los pobres que en este momento están muriendo de hambre. También ellos están en peligro de ser tentados por ella, si solucionan su problema y no aman.

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Los que caen en esta segunda tiranía, en este segundo sustituto del amor, son aquellos que no tienen problemas para satisfacer su estómago y que además poseen dinero para pagar comodidades, lujos, servicios y servidumbre. Y según la cantidad de dinero que poseen, es la cantidad de fama que pueden obtener y la cantidad de admiradores y seguidores que pueden captar o comprar. Éstos son los que pueden hacer algunas o muchas cosas y saber de antemano que serán aprobadas por los pocos o muchos que dependen de ellos. Estos son los que manejan a los demás aprovechándose de sus necesidades físicas. También se cuentan entre éstos los que para manejar a los demás les crean necesidades como la moda, el lujo, las diversiones, los miedos y hasta necesidades religiosas y políticas, con lo que ganan dinero y con el dinero compran la fama. Éstos son los que en mayor o menor escala desean ser estrellas, con muchos satélites girando a su alrededor y que saben que todas las cosas que hagan siempre serán bien recibidas o aceptadas por sus satélites. Esta tentación de hacer las cosas fuera de lo común, buscando llamar la atención, buscando fama, es muy peligrosa, porque crea dependencias muy dañinas, tanto para los que buscan ser el centro co mo para los que giran alrededor de ellos. Se esclavizan mutuamente. Sucumbir a la tentación de la fama es una grave esc lavitud. Es caer en una grave mediocridad. La gravedad está en que no se dan cuenta que pueden ser “señores del amor” sin manipular a nadie, sin anular a nadie, sin buscar satélites. Un señor del amor, es aquel hombre que hace del amor a sus semejantes la única razón de su vida, lo que lo transforma en algo así como un dios del amor. Señor del amor. El amor lo capacita para descubrir la ten- tación de la fama en cualquier lugar, aun- que ésta se presente disfrazada de la forma más atractiva. Un señor del amor nunca caerá es esa tentación, en esa esclavitud, porque es libre.

Un señor del amor no pasará nunca des- apercibido, porque un hombre que ama se da a los demás, ¡ en libertad! para liberarlos.

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La tercera tentación en la que caen los seres humanos porque no aman, es la ambición por el poder. El poder es el tercer sustituto del amor. A esta tentación se doblegan todos aquellos que no se conforman con no tener la preocupación de que van a comer y beber. Ni tampoco se conforman con tener dinero para pagar servidumbre y seguidores, como los ricos y los patriarcas políticos y religiosos. Éstos ambicionan más porque son personas muy fuertes, con mucha vitalidad y muy ambiciosas. Éstos, además de las dos esclavitudes anteriores, quieren echar sobre sus hombros, y sobre sus conciencias, una tercera esclavitud, un tercer sustituto del amor: el poder. El poder absoluto sobre las personas y sobre las cosas. El poder de imponer su voluntad a todos. El poder de manejar las voluntades de los demás a su antojo. Manejar las voluntades ajenas sin pedirlo, sin pagarlo, sin conquistarlo, como lo hacen los ídolos. Sólo exigiendo acatamiento total. Ellos no pagan servidumbre ni seguidores, ni les preocupa conquistar admiradores o amigos. Ellos sólo esclavizan Ellos no se conforman sólo con esclavizar a medias y disimuladamente como lo hacen los patrones, los jefes y los líderes. Ellos quieren esclavizar completamente a la persona. Ellos no se conforman con esclavizar a algunos. Ellos ambicionan esclavizar a todos. A los buscadores de poder sólo les interesa y les satisface ver a los demás de rodillas frente a ellos. Ellos son los tiranos que han existido en todos los tiempos. Que han existido y existen en todo el planeta, causando desolación con sus actuaciones despóticas y subhumanas. Estos tiranos son lo césares, los emperadores, los dictadores, los inquisidores y los negreros de ayer y de hoy. Éstos son pocos pero hacen mucho daño a la especie humana, porque la debilitan aún más. Estos hombres, llenos de fuerza, vitalidad, y decisión, no han entendido que sólo hay que servir a Dios en los semejantes.

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Y no se puede servir a Dios teniendo a sus semejantes de rodillas, asustados, limitados, esclavizados, sino amándolos y poniéndolos de pie, enseñándoles a amar. Ser servidores incansables del amor sería su verdad era misión. Trabajar por un mundo nuevo, es la única misión que calza co n su vitalidad. Trabajar por un mundo de amor para todos, es la mayor y más destacada misión donde podrán mostrar realmente sus capacidades, en vez de perderlas trabajando por un mundo para uno. Poner de pie a sus semejantes, llevan- doles la Buena Nueva del Amor, los hará más poderosos como personas. Porque sólo el amor hará poderosos a Todos los seres humanos. Estas son las lecciones que deben sacar de mi retiro al desierto y no otras. Primero: Preocúpense de vivir el amor; el alimento físico vendrá por añadidura y será mejor aprovechado. Segundo: ¡Transfórmense en señores del amor! Y tendrán la fama verdadera, la de los hijos de Dios. Destáquense por su aplicación en amar y transmitir el amor. Tercero: ¡Ocupen toda su vitalidad en poner de pie a sus semejantes, despertándolos al amor! Así serán poderosos como personas y como especie humana. Estás son las lecciones que deben sacar de este eje mplo mío. No es la soledad, ni el ayuno que yo hice lo que debe importarles, sino las lecciones que les dejan las tentaciones que yo sufrí. Estas son las tentaciones que ustedes sufren, y lo que es peor, ustedes caen en ellas porque no aman y se transforman en esclavos. Estas esclavitudes son los sustitutos del amor que han creado. Con mi ayuno, yo descubrí las tentaciones y se las mostré. Ustedes no necesitan seguir buscando. No necesitan ayunar. Yo ayuné por ustedes. Nadie debe ayunar, porque están muy débiles. Al contrario, necesitan tonificarse con mi mensaje de amor. Pero ustedes, los que han entendido por

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fin que el amor es lo esencial, y que tra- bajan para que sus semejantes también lo entiendan,¡están haciendo lo más im-

portante! Ustedes sólo tienen que preocuparse de amar y de despertar al amor a sus seme- jantes. ¡Eso es lo único importante!

Ustedes no deben ayunar, porque se debilitarían y perderían energía y tiempo que deben aprovechar para trabajar por el Reino del Amor.. A los que trabajan por el Reino del Amor o Reino de Dios, no sólo no les faltará el alimento corporal para satisfacer su estómago, sino también recibirán muchas satisfacciones más, pues sus corazones vibrarán al ritmo de Dios que es amor, y tendrán además la sabiduría que necesiten en el momento oportuno, porque Dios es generoso y está siempre listo a entrar en el corazón que está abierto. Los que me han entendido profundamente, no tienen porque ayunar ni retirarse al desierto. La única preocupación de los que me han entendido debe ser trabajar sin descanso por el Reinado del Amor en to dos los corazones humanos y en todo el mundo.

EL AMOR ES TAMBIÉN COSA DE HOMBRES

(BODA EN CANÁ) ...Al tercer día hubo una boda en Caná de Galilea y estaba allí la

madre de Jesús. Fue invitado también Jesús con sus discípulos a la

boda.

No tenían vino porque el vino de la boda se había acabado. En esto dijo

la madre de Jesús a éste: “ No tienen vino”. Díjole Jesús: “ Mujer que

nos importa a ti y a mí, mi hora no ha llegado aún”.

Díjole la madre a los servidores: “ Haced lo que él os diga”. Había allí

seis tinajas de piedra para las purificaciones de los judíos, en cada una

de las cuales cabían cincuenta a sesenta litros de agua.

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Díjoles Jesús “ Llenad estas tinajas de agua”. Las llenaron hasta el

borde y él les dijo “ Sacad ahora y llevadla al encargado de la fiesta”.

Se la llevaron y luego que el encargado de la fiesta probó el agua

convertida en vino sin saber de donde había salido, pero lo sabían los

servidores que habían sacado el agua, llamó al novio y le dijo:

“ Todos sirven primero el vino bueno y cuando están bebidos el peor,

pero tú has guardado hasta el último el vino mejor”. Este fue el primer

milagro que hizo Jesús. (Juan 2,1-11) Lo más importante de esta oportunidad ( La boda en Caná) no fue la transformación de agua en vino sino un ejemplo para mujeres y hombres. Si quieren tener Vida Verdadera , la mujer y el hombre deben unirse para conseguirla. La primera lección es para las mujeres. La mujer que ama al igual que mi madre, tiene tanta sabiduría y sensibilidad que puede motivar al hombre a hacer un acto de amor a cualquier hora y en cualquier lugar. Porque para el amor no hay hora; toda hora es buena. Ni hay un lugar; todo lugar Es bueno. La mujer es la que da el impulso a toda partida. La mujer guía al hombre hacia la libertad o hacia la esclavitud. El hombre sigue a la mujer a la felicidad o a la desdicha. En la construcción del Nuevo Mundo del Amor, el papel de la mujer es el más importante. La mujer como madre, esposa, hija, hermana, amiga, tiene que guiar al hombre al Amor. Todo guía se adelanta. Pero para cum-

plir esta misión, para ir adelante, tiene que despertar primero y pronto, su pro- pia capacidad de amar.

Sólo amando podrá la mujer dar a luz al nuevo hombre y reparar todo el desequilibrio que se ha producido por su casi nula intervención en la vida humana.

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El ejemplo de mi madre les muestra claramente que una mujer debe intervenir en la historia del hombre si lo ama, y también intervenir en la historia de la humanidad, si la ama. La mujer que ama, cree en el hombre y cree en la hu manidad. Eso fue lo que hizo mi madre. Ella intervino en mi vida porque me amaba y también intervino en la vida de aquellas personas que presenciaron mi acción y que representaban en esos momentos a la humanidad, porque ella también amaba a la humanidad. Por otra parte, mi ejemplo es una lección para los hombres. Yo me guié por la intuición femenina que vio en aquel momento la oportunidad precisa para que yo hiciera algo por esas personas. Y me dejé guiar porque amaba a mi madre y porque confiaba en ella. Su gran amor no la limitó al papel de una gran madr e. Ella era una verdadera mujer. Mi intención no era hacer milagros, ni tienen importancia los milagros. El milagro fue el fruto del gran amor de mi madre por los demás, que me llenó de inspiración y ternura y me impulsó a hacerlo. Ese gran amor de ella por los demás era la garantía de que ese milagro, o mejor dicho, esa acción, no se perdería y algún día daría sus frutos. Porque algún día los seres humanos, las mujeres y los hombres entenderían la lección. Cuando la intuición femenina se ponga al servicio del Nuevo Mundo del Amor, el hombre podrá dejarse guiar por ella, para realizar su verdadera misión. Porque la mujer que ama aportará en el momento oportuno la luz. Una mujer que ama siempre será luz para el hombre y para la humanidad. En cambio, una mujer que no ama, es carga para el hombre y para la humanidad. ¡ Es hora de que la mujer despierte su

capacidad de amar! ¡Es hora de que la mujer trabaje por el Reinado del Amor en el mundo! ¡Es hora de que la mujer se adelante para iluminar al hombre!

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También es el momento de el hombre se deje iluminar por la mujer que ha despertado su capacidad de amar y le preocupa hacer realidad el reino para todos. Mi madre, preocupada por los demás, me informa lo que ocurre. Esa información, además de mostrar la bondad de su corazón y su fe en mí, era también un delicado pedido que me obligaba a complacerla. Las características de una mujer que ama son las que mi madre mostró claramente. Ella no pedía nada para ella, sólo intercedía por los otros a los cuales ella amaba. Ella no necesitaba nada para ella, porque amaba intensamente a todos y ese amor la enriquecía tanto que nada necesitaba. Así, cuando la mujer ame verdaderamente, será tan rica, tan llena de dones que no necesitará a nadie que la sirva. Ese amor tan grande despertado en la mujer, liberará al hombre ( el cual hasta ahora sólo ha esperado que le sirva), y le permitirá también dedicarse a servir a sus semejantes. La mujer liberada por su capacidad de amar, y el hombre motivado por la mujer a despertar su capacidad de amar, se liberarán del miedo a amar y podrán trabajar unidos en la única misión que tienen todos los seres humanos: ¡ Amar! La intuición desarrollada por el amor permitirá a la mujer motivar al hombre a que libere toda esa inmensa capacidad de amar que posee, y que de tanto ocultar ha relegado al último lugar, al de las cosas inservibles o cosas de mujeres. El amor no es cosa de mujeres, es Cosa de hombres y mujeres. Porque de la urgencia con que hombre

y mujeres despierten su capacidad de amar dependerá el futuro de la humanidad.

La mujer tiene que ayudar al hombre a rescatar ese gran tesoro que de tanto esconder lo ha perdido, para que se entregue a la causa de humanizar. Así el hombre iluminado por la mujer que lo ama, podrá liberar todas sus riquezas interiores y hacer cosas esenciales. La humanidad es un gran cuerpo formado por hombres y mujeres. Si la mujer no ama el cuerpo de la humanidad sufrirá de hemiplejía. Si los hombres no aman, la mitad del cuerpo de la humanidad se paralizará.

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Tanto los hombres como las mujeres son importantes para que el cuerpo de la humanidad funcione bien . Mi madre da una gran lección a las mujeres y mi ejemplo es una lección para los hombres.

EL ÚNICO MILAGRO QUE DEBEN HACER LOS SERES HUMANOS

Todas las acciones que hice y que ustedes llamaron milagros, fueron actos que nacieron motivados por el gran amor que les tenía. Los milagros en sí mismos, no tienen ninguna importancia, ni me dan importancia, ni me hacen diferente. Esos milagros que yo hice puede hacerlos cualquier persona. Son acciones individuales, pequeñas incapaces de cambiar a los seres humanos y de cambiar las cosas en la humanidad. Sanar a una persona no significa que se ha liberado a la humanidad de la enfermedad. Multiplicar algunos panes no significa que se ha liberado a la humanidad del hambre. Si desean sacar una lección de esos hechos que llaman milagros, es descubrir que si una persona puede hacer ese tipo de acciones, ¿qué maravillas podría hacer la humanidad unida? Yo sólo pude mostrarles lo que puede hacer un ser humano. Esa era mi misión. Sólo mostrar lo que puede hacer un ser humano indiv idualmente. Lo que pueden hacer todos los seres humanos unidos por el amor sólo lo sabrán cuando vivan el mandamiento de amor que les dejé. El primero y único milagro que deben procurar hacer es unir a toda la humani-

dad ¡y sólo el amor une!

Todas las demás cosas las lograrán por añadidura. Cuando todos los seres humanos se unan por el amor, harán cosas tan maravillosas y grandes que jamás ninguno de ustedes ha visto hasta ahora. Cuando los seres humanos logren unirse serán tan poderosos que harán desaparecer la palabra “imposible”. Cuando los seres humanos se unan por el amor, rompe rán todas las barreras que los hace débiles, viejos y mortales. Entonces, el milagro que deben desear de todo corazón hacer, es amarse los unos a los otros.

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Si cumplen esta meta, ella será el punto de partida hacia la liberación completa para poseer la tierra y el Reino. No aspiren a multiplicar los panes o sanar enfermedades. Que la mayor aspiración de ustedes sea unirse en el amor. Así, eso que ustedes llaman milagros, serán “ cositas” frente a lo que podrán hacer si logran vivir el mandamiento que les di. Lo más importante de todas las acciones que hice y que ustedes llaman milagros fue la transfiguración. Por eso la hice en privado, frente a algunos de mis compañeros solamente. Si la hubiera hecho públicamente me habrían encontrado menos humano aún. La transfiguración fue sólo una pequeña demostración de la espiritualización de la materia, de la cual les he hablado ya en el libro “ Amar es el Éxito” y en otros mensajes. Esta pequeña acción también podrán hacerla ustedes cuando se decidan a amar y a hacer del amor la única misión de su vida. Yo transfiguré todas las células de mi cuerpo por la fuerza del amor que poseía. Cuando ustedes hagan carne su amor amando intensamente y constantemente ¡ amándose! , la vida de sus células se activará a límites inimaginables y podrán mantenerlas vivas concientemente. Cuando todos se amen verdaderamente, dejarán de estar sometidos a los ciclos de la tierra en los cuales han caído por no usar su espíritu. Cuando todos se amen los unos a los otros, se harán tan poderosos que erradicarán la muerte. Porque el amor los liberará no sólo de las esclavitudes síquicas, sino también de las esclavit udes físicas. Porque ustedes fueron creados libres para reinar en el Reino en unión con Dios. Ahora se encuentran dependientes de todas las limitaciones de su pequeño medio. El medio los absorbió en sus ciclos y puede aplastarlos si no se liberan pronto. El medio puede aplastarlos porque ustedes, como viven amargados por las esclavitudes que han adquirido, en un acto de desamor, de insatisfacción y de inconciencia, pueden destruir su limitado medio, con lo que están socavando su propia existencia y la de sus hijos.

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Si hacen del amor su principal razón de vivir, no sólo podrán transfigurar su propia materia, también podrán transfigurar su ambiente y ampliarlo hasta los confines infinitos del Reino. Sólo el amor los hará recuperar el derecho de reinar sobre todo lo creado para ustedes. Así, ustedes liberarán la tierra y la tierra los liberará a ustedes, con lo que se transformarán en seres dignos de traspasar las fronteras del planeta y habitar también el universo. El amor los hará reinar amorosamente sobre lo creado para ustedes, y dejarán de ser esclavos de lo creado. Yo transfiguré mi cuerpo porque tenía mi materia espiritualizada, ¡llena de espíritu! Ustedes también podrán hacer lo mismo cuando amen y alcancen la unión de toda la humanidad en el amor. Tendrán un cuerpo glorioso, tendrán un cuerpo inmortal. Lo que no podrán conseguir jamás solos, lo conseguirán unidos. Por eso no se queden atrás, preocupados en hacer pequeños milagros, ni preocupados de los pequeños milagros que hice yo. Lo más importante, ¡lo único importante! es que hagan el gran milagro de unirse.

Ese gran milagro lo lograrán sacando toda su capacidad de amar y ayudando a sus semejantes a despertar su amor, para que así todos unidos realicen todos aquellos deseos profundos que anidan en su corazón: La universalidad, la felicidad, la inmortalidad.

EL ESPÍRITU ES FUERTE (GETSEMANÍ)

Luego fue Jesús con sus discípulos a un lugar llamado Getsemaní, y les

dijo: “Siéntense aquí, mientras yo voy allí a orar”.

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Y se llevó a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, y comenzó a

entristecerse y a angustiarse. Entonces les dijo: “ Triste está mi alma

hasta la muerte; quédense aquí y permanezcan despiertos conmigo.”

Enseguida Jesús se fue un poco más adelante, se inclinó hasta tocar el

suelo con la frente, orando y diciendo: “Padre mío, si es posible, pase

de mí este cáliz; sin embargo, no se haga como yo quiero, sino como

quieres tú”. Y volviendo a los discípulos, los encontró dormidos, y dijo a

Pedro: “ ¿ Ni siquiera una hora pudieron ustedes mantenerse despiertos

conmigo? Manténganse despiertos y oren para que no caigan en

tentación. El espíritu es fuerte pero la carne es débil”.

De nuevo, por segunda vez se fue a orar diciendo: “Padre mío, si no es

posible evitar que yo sufra esta prueba, hágase tu voluntad”.

Cuando volvió, encontró otra vez dormidos a sus discípulos, porque sus

ojos se les cerraban de sueño. Los dejó y se fue a orar por tercera

vez, diciendo aún las mismas palabras.

Luego vino a los discípulos y les dijo: “ Duerman y descansen, que ya se

acerca la hora en que el hijo del hombre va a ser entregado en las

manos de los pecadores, levántense, que ya llega el que va a

traicionarme.” (Mateo 26,36-46) Todos mis dolores, todas mis lágrimas todos mis sudores en el huerto de Getsemaní, no fueron causados por el miedo a la muerte. Estos dolores fueron peores que la crucifixión misma y que todas las afrentas físicas juntas que un hombre es capaz de sufrir. Los dolores físicos no son nada comparados con el gran dolor que sentí en esos momentos.. En esa oportunidad pude ver claramente que todo lo que había hecho sería mal aprovechado; sufrí mucho, intensamente, pero por ustedes, no por mí. Los grandes sufrimientos que tendrían que vivir todavía ustedes, la humanidad, por no detenerse a profundizar mi mensaje , torturaba todo mi ser como ningún sufrimiento físico puede torturar. Era el momento más doloroso de mi vida. La bebida más amarga. En esos momentos yo veía como todos perderían inútilmente su tiempo buscando la mejor manera de utilizarme.

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Por utilizarme hasta se pelearían, pero nadie se pelearía por comprender y aprovechar mi entrega a ustedes desde el primer momento de mi existencia junto a ustedes hasta el último. Ni menos se pelearían por imitarme. Pero no piensen que deseaba ser imitado para sentirme satisfecho, eso jamás lo pensé. La preocupación porque me escucharan y me imitaran se debía a que sólo entendiendo lo que yo les enseñaba y vivié ndolo, podrían liberarse de todas las esclavitudes. Y veía en esos momentos, en Getsemaní, todo lo que pasaba y pasaría en los corazones de todos los seres humanos por muchos siglos. Veía cómo mis seres amados, ustedes, endurecían tanto sus corazones que no podían hacer callar la voz del egoísmo para escuchar mi voz que sólo les decía ¡ ámense! Yo veía todo lo que pasaba y pasaría en las vidas de todos los seres humanos, por muchos siglos. Veía todos sus dolores, todas sus miserias, todas sus enfermedades, todas sus esclavitudes físicas y síquicas por no querer vivir el amor en la forma que les enseñé. Yo veía cómo el desamor se apoderaba de los seres humanos, transformándolos en débiles marionetas, incapaces de tener voluntad para detenerse y decir con todas las fuerzas de sus corazones ¡amémonos! Ese gran dolor que sentía causado por la pobre y mediocre vida que tendrían tantos miles de millones de seres humanos, en lugar de tener una vida plena y eterna, era aumentado por otro gran dolor, el dolor de saber que ya se acercaba el fin de mi misión y que ya no podía quedarme más con ustedes como deseaba ardientemente en esos momentos. Por estas razones mi dolor se hacía más intenso y mi bebida más amarga. En esos dolorosos momentos, yo veía todo lo que ustedes sufrirían y todos esos dolores penetraron en mi ser como una súplica desesperada de los que vendrían después pidiendo que me quedara y los ayudara. En esos momentos yo era parte del cuerpo de la huma nidad y como parte de ese cuerpo, sufría todos sus dolores. Yo veía en esos momentos todas las súplicas de los seres humanos de todos los tiempos, pidiéndome que aliviara sus dolores. Veía también como los seres humanos que tanto amaba, desfiguraban y rebajaban mis enseñanzas que sólo estaban destinadas a hacerlos grandes y felices . Vi con horror la boca hambrienta y sedienta de los niños; vi sus llagas, sus pestes, sus lágrimas.

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Vi las legiones de jóvenes mutilados por los vicios, la apatía y las guerras. Vi las legiones de mujeres convertidas en incubadoras de carne de esclavos. Vi las legiones de hombres esclavos de los fanatismos religiosos, políticos y materialistas, con odio en sus miradas, con sangre en las manos, con indiferencia en sus corazones y con sus mentes enloquecidas por el dinero, la fama y el poder, Vi a toda la humanidad hasta estos tiempos convertirse en carne del monstruo más feroz, sangriento e insaciable, que con sus mentes esclavas no pueden reconocer ; el anticristo. Ese monstruo fue creado por ustedes y ha crecido co n ustedes, porque se alimenta de ustedes, ¡ de todos ustedes! Que se obstinan en no amarse los unos a los otros como se los enseñé. Vi a todas las personas, a ustedes, transformarse en una célula del anticristo. Vi cómo ese monstruo crecía en la medida en que la humanidad crecía. Sufrí. ¡Sufrí intensamente! Porque todo esto que veía, ocurriría no por falta de conocimiento, sino por terquedad, porque no tomaron en cuenta , ni los seres humanos de aquella época ni los de hoy, mis enseñanzas. Mis sencillas enseñanzas que los habría cambiado en seres felices y armónicos. Sufrí porque no tendrían derecho a disculparse diciendo: “No sabíamos cómo hacer para salir de estas miserias”. Sufrí y mis sufrimientos aumentaban aún más al saber que mi tiempo de estar con ustedes estaba llegando a su fin y ya no podía hacer nada más directamente por ustedes. Aún sabiendo que no podía hacer más, porque ya había hecho todo lo que ustedes podían captar y entender, y les había dado todo lo que ustedes necesitaban, todos los ejemplos, yo le pedía al Padre que me diera más tiempo para insistir, para repetir lo que había enseñado y evitarles todos esos sufrimientos que le esperaban a la humanidad y a cada uno de ustedes. Sufría, así como ustedes sufren cuando ven a sus seres queridos perderse en el vicio, en la indiferencia, en la crueldad, y sus sufrimientos son mucho más grandes aún, cuando se dan cuenta de que ya no tendrán más tiempo de ayudar a esa persona que tanto aman y que se obstina en no escuchar ninguna enseñanza, ni en ver ningún ejemplo. Sufren terriblemente por el porvenir de esas personas, pero no pueden pasar por encima de su elección. Ese dolor de ver los sufrimientos de ustedes durante tantos siglos, fue tan grande que pedí al Padre que los acortara.

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Era algo así como lo que les sucede a ustedes cuando sienten un dolor muy intenso y desean morir para poner fin a ese dolor. Imagínense como sufriría yo que estaba amándolos a todos ustedes intensamente y el dolor de todos y cada uno de ustedes era mi dolor. No sufría por mí, ni por unos pocos, sino por todos los seres humanos. Era tan grande la compenetración con la humanidad, que a cada instante aumentaban mis dolores, porque a cada instante veía más y más sufrimientos en ustedes, y esos eran mis sufrimientos también. Yo era uno con toda la humanidad igual como son ustedes. La diferencia estaba en que yo tenía conciencia de esa unidad y me importaba, y por eso sufría. En cambio, ustedes no quieren tomar conciencia de e sa unidad y por eso no sufren con los sufrimientos de los demás, sino c uando algo les toca a ustedes. Por eso están tan miopes e incapacitados para tomar en serio mi mensaje de amor que liberaría a toda la humanidad. A ustedes sólo les interesa buscar la libertad y el bienestar personal. Por eso no lo consiguen. Mis sufrimientos eran tantos y aumentaban cada vez más, que sólo terminarían con la muerte, a no ser que el padre los acortara antes. “Triste está mi alma hasta la muerte” .Con esto les decía que mis dolores no pararían hasta la muerte. Pero el Padre me dio un gran consuelo en aquella oportunidad, con lo que puso fin a mis sufrimientos interiores y me ayudó a soportar los sufrimientos físicos que vendrían después. Por eso dije a mis tercos e indiferentes compañeros. “Duerman y descansen...”,Porque yo ya había sido consolado. En aquella oportunidad, el Padre me consoló mostrán dome este momento, hoy , en el que un pequeño grupo de personas entendería por fin lo esencial del amor, y empezaría a difundirlo a su s semejantes , insistiendo en su sencillez y en la gran riqueza que encierra: liberar a la especie humana de la esclavitud del desamor que es miopía, debilidad, división, dolor y muerte. Este pequeño grupo de personas que entendió mi mensaje y tomó conciencia de que bastaría con que la humanidad tomara en serio el ma ndamiento que les di de amarse los unos a los otros para cons truir rápidamente el

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Nuevo Mundo del Amor, se encargaría de unir a todas las personas que en diferentes partes del planeta desean trabajar por una causa verdaderamente grande. ¿ Y qué causa puede ser más grande que trabajar por un mundo de amor para todos los seres humanos? Después de este consuelo, pude llegar a la cima del Gólgota sin problemas. El Padre me mostró cómo el amor comenzaba a tener sentido en la inteligencia del ser humano y trataba de hacerlo germinar en su corazón y contagiarlo a sus semejantes. Vi cómo el amor rescataba al ser humano , poco a poco en el comienzo rápidamente después, de esa idea fija de sólo satisfacer las necesidades del cuerpo hasta caer en el terreno del vicio, que termina por debilitar al mismo cuerpo y al debilitarlo, lo esclaviza. Vi como el ser humano tomaba conciencia de que el amor había sido reemplazado por los placeres físicos llevados hasta el vicio ( que debilitan a la persona), y por los placeres síquicos que dan el poder y la fama(que debilitan a la especie humana). De esta toma de conciencia, nacía la urgencia de vivir el amor en todos los seres humanos. Vi cómo el llamado al amor se empezaba a escuchar en el mundo. Esto me consoló. Vi cómo el espíritu que es fuerte, empezaba a ser parte de la vida del ser humano. Vi cómo el ser humano empezaba a poner atención a su espíritu que es amor y a usarlo. En Getsemaní había un solo hombre sufriendo todos los dolores del mundo con anticipación, Hoy la tierra se ha transformado en un enorme Getse maní, donde miles de millones de personas están sufriendo el horrible pe so del mundo presente, sin esperanza ni consuelo. A ustedes que han tomado conciencia de que es la falta de amor la que ha extendido el getsemaní, les pido que sigan dando importancia al amor sin detenerse, cuesta lo que cueste, por encima de todo . Sigan trabajando por el reinado del amor, en todos los corazones y en todo el mundo.

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Ustedes pueden hacerlo. El espíritu que es fuerte, los fortalecerá. No se preocupen por mi Getsemaní, sino por el que están sufriendo los seres humanos que aún no han descubierto que el amor pondrá fin a todos los males y los hará recuperar la verdadera vida. Por favor, no se duerman como mis compañeros en el huerto de Getsemaní. No es tiempo de dormir. La humanidad ya ha dormido demasiado. ¡Es tiempo de amar! Porque el amor, que es vida , triunfará sobre la muerte, eliminándola. Porque el amor, que es riqueza , triun- fará sobre la pobreza, eliminándola. Porque el amor que es gozo , triunfará sobre los sufrimientos, eliminándolos. Porque el amor, que es fuerte , triunfará sobre la debilidad, eliminándola. Porque el amor, que es unidad, triunfa- rá sobre la división, eliminándola. Porque el amor, que es eterno , triunfa- rá sobre lo temporal, eliminándolo. Porque el verdadero amor es fuerte, Infinito y eterno. Sólo amando podrán terminar con la debilidad y los dolores del cuerpo individual ( el de cada persona) y terminar con la debilidad y los dolores del cuerpo común ( la especie humana), del cual cada uno de ustedes es una célula. Ustedes necesitan mantenerse siempre amando, mantenerse siempre despiertos, para que los vicios que el cuerpo ha adquirido a través de los siglos no los siglos no los regresen a la esclavitud. Sigan amando porque el amor es fuerte. Ésta es la lección que deben sacar de

Getsemaní. El espíritu es fuerte, que Es lo mismo que decir, el amor es fuer- Te.

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Crean en al amor. ¡ Vivan el amor intensamente! ¡Constantemente! Y ¡despierten a sus semejantes al amor!

LA FALTA DE AMOR ES MUERTE

(LA CRUCIFIXIÓN)

A través de mi muerte en la cruz no les di ninguna lección. Mi muerte no es una lección de mi parte ni directa, ni indirectamente. Pero si pueden sacar una lección de ella. Mi muerte fue el fruto de la falta de amor de usted es, del desamor en que viven.

El desamor es muerte. No entiende la Vida. Le molesta la vida. El desamor es esclavitud. No entiende la Libertad. Le molesta la libertad. El desamor es tinieblas. No entiende la Luz. Le molesta la luz. Mi muerte, la muerte, es la mejor evidencia de lo mal que ustedes estaban en aquella oportunidad y de lo mal que están hoy.. Mi muerte, la muerte, es la mejor evidencia de la falta de amor que reina en los seres humanos. Mi muerte, la muerte, es la mejor evidencia de que sus mentes se encuentran en tinieblas, sumidos en la mentira, sumidos en la muerte. Mi muerte, la muerte es la mejor evidencia del poco interés que tienen en amarse los unos a los otros. Muerte, la muerte, es la mejor evidencia del poco interés que tienen en recuperar su dignidad de hijos de Dios que es amor. Hoy, todavía confían más en el poder del odio, la violencia y la muerte, que en el poder del amor. Hoy todavía no creen en mis ejemplos de amor, que son enseñanzas de vida Y prefieren seguir los impulsos del odio y de la muerte que despertar al amor y a la vida.

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Hoy prefieren dejarse guiar por las mentes corrompidas por el odio, las comodidades, la indiferencia, la falta de verdadera hermandad y la violencia física y sicológica, que por el amor, que es lo único capaz de iluminar la propia vida y la de los otros. Hoy , la falta de amor ha convertido a los hombres en crucificadores y crucificados al mismo tiempo, porque el que crucifi ca, se crucifica a sí mismo. El que esclaviza, se esclaviza a si mismo. El que engaña, se esclaviza así mismo. Hoy , la falta de amor los mantiene aún en la más completa ignorancia, porque el que no ama es un ignorante. Vivir en la ignorancia de lo esencial es vivir en l a mentira. Porque vi esa ignorancia tan profunda que dominaba a los seres humanos fue que dije :” Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen” La ignorancia de aquellos tiempos se ha multiplicado tanto que están a un paso de la idiotez. Aún hoy , no saben lo que hacen, porque aún hoy no se deciden a amarse los unos a los otros.

VIDA VERDADERA

(LA RESURRECCIÓN) El que ha encarnado el amor como yo me encarné y ha permitido que el amor nazca y crezca como nací y crecí yo, resucitará también a la vida verdadera como yo. Nadie puede tener verdadera vida si primero no se ha encarnado. Si primero no ha pasado por la gestación , el nacimiento y el crecimiento continuo, como lo hacen los niños. Todos mis ejemplos son lecciones prácticas, que si ustedes las entienden y las viven, los llevarán a recuperar la vida verda dera, la vida de seres inmortales y dichosos, que es la vida que yo estoy viviendo ahora. Esa vida que yo tengo ahora es la vida que ustedes deben alcanzar.

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Pero sólo alcanzarán la vida verdadera viviendo profundamente su dignidad de seres humanos, de hijos de Dios. Vivir la dignidad de seres humanos, de hijos de Dio s, es vivir intensamente el amor.

Yo estuve entre ustedes para mostrarles el camino que los devolvería a la vida verdadera y al Reino.

El reino es el hogar del cual se apartaron y al cual pueden volver fácilmente si aprenden las lecciones que les di con mi ejemplo. Si imitan mi ejemplo, jamás se equivocarán. Si imitan mi ejemplo, tomarán el camino directo y único que los llevará a l Reino del Amor. Si imitan mi ejemplo, Se incorporarán al hogar y se llenarán de dicha y n os llenarán de dicha. Yo estuve con ustedes para atraerlos amorosamente al Reino. Los invité de mil maneras distintas, pero ustedes no me creyeron. Hoy nuevamente los invito. ¡Atrévanse a amar!

Decídanse a amarse los unos a los otros y resucitarán a la vida verdadera, llena de luz y de felicidad, llena de esplendor y de satisfacciones sin límites.

¡Atrévanse a amarse los unos a los otros y alcanzar án la vida verdadera sin conocer la muerte! Todo lo conseguirán a través del amor. Conseguirán la vida infinita. Infinita en vida e infinita en posibilidades de multiplicar la vida. Porque el amor es vida y fuente de vida. Acepten mi invitación a amarse y jamás

serán defraudados.

Aunque esto no lo entiendan en toda su profundidad porque están en tinieblas, lo empezarán a entender a medida que vayan sumergiéndose en el amor. Porque las tinieblas irán desapareciendo a medida que amen.

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En la medida que amen irán descubriendo y conquistando la vida.

¿CÓMO HACER LA

CADENA DEL AMOR?

Horario : 8:00 a.m. y 9:30 p.m.,hora local de cada lugar o país. Duración: algunos minutos(los que desees).

Pensemos en la persona que más queremos. Luego abramos nuestro corazón y desde el fondo de él, saquemos todo nuestro amor y digámosle íntimamente, sólo con la voz del corazón ¡te amo! ( sin abrir la boca). Pensemos también en nuestros padres, hermanos, cónyuge, hijos, tíos, abuelitos, primos, amigos, vecinos, compañeros de trabajo. A cada uno de ellos digámosle ¡te amo! Sólo con la voz del corazón ( sin abrir la boca). Pensemos en las personas enfermas que conocemos y digámosle a cada una ¡ te amo! Pensemos también en las personas tímidas, en los que están solos y digámosle ¡te amo! Pensemos en los agresivos y amargados, y digámosle también, con todo nuestro corazón y con toda la ternura que podamos ¡te amo!

Pensemos en la personas humildes que conocemos y digámosle ¡te amo! Pensemos en aquellas personas a quienes nosotros hemos dañado, calumniado o mirado en menos y digámosle con mucha ternura ¡te amo! Pensemos en algún familiar o amigo que esté lejos y digámosle ¡te amo! (recibirá el amor que le enviemos en el mismo instante, porque la energía amorosa es más rápida que la luz). Y como ésta es una Cadena de Amor, recordemos también a esas personas que odiamos, a nuestro enemigo, a aquella persona que nos ha hecho daño y digámosle con toda la fuerza de nuestro corazón ¡ te amo! Pronto nos daremos cuenta que se producirá en nosotros un milagro tan grande como una resurrección, ya que nos iremos transformando en personas verdaderamente capaces de no dejar a nadie fuera de nuestro corazón y

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capaces también de tomar la responsabilidad de crear un mundo de Amor para todos. Para finalizar la Cadena del Amor, pensemos en Jesús y digámosle ¡te amo Jesús! Jesús nos enseñó que lo único y más importante que tenemos que hacer es amarnos los unos a los otros, y haciéndolo, esta mos cumpliendo con su mandamiento. La finalidad de esta cadena de Amor Pedida por Jesús es empezar a vivir El único mandamiento que Jesús nos Dejó: “Ámense los unos a los otros Como yo los he amado” Enviemos amor con mucho entusiasmo todos los días a las horas de la Cadena del Amor, pero durante el día, tenemos muchas más oportunidades para amar. ¡Amemos todo el día! Digamos silenciosamente ¡te amo! A todas las personas que encontremos en nuestro camino y a todas las personas que nos visiten o visitemos. Si viajamos en un tren, en un avión, en bus, en un automóvil, si estamos en una reunión o en una fiesta, que no quede ninguna persona sin que le digamos, desde el fondo de nuestro corazón ¡te amo! Cada vez que decimos íntimamente ¡te amo! a alguien, estamos realizando una comunicación a alto nivel con esa persona. Estamos transformándonos en protagonistas de un nuevo mundo, el Mundo del Amor.

SEPARATA Por Mercedes Miranda

LA PRIMERA REVELACIÓN Para satisfacer las inquietudes o la sana curiosidad de las personas acerca de las circunstancias que precedieron a las revelaciones y mensajes que he recibido de Jesús, para transmitir a todos ustedes, he decidido hacer una pequeña historia de ellas. Aunque mi lenguaje es parco y sencillo me esforzaré para explicar de la mejor forma posible estos hechos.

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Anticipo, eso si, que así como es difícil explicar un dolor o algo extraordinario que nos sucede, más difícil es aún explicar a otros, o dar a entender las alegrías, la claridad y la fuerza que recibí a partir de aquellos momentos de las primeras revelaciones. Puedo asegurarles que cualquier persona puede recibir un mensaje o revelación, aunque se considere poco digna según los criterios humanos actuales. En tal caso ni yo ni nadie sería digno de tales revelaciones. Pero la visión de Dios es diferente. Para Él todos somos dignos porque Él nos ama a todos por igual. Por esta razón, envió a Jesús hace dos mil años para mostrarnos lo que realmente somos y también, para indicarnos cuánto le inquieta nuestra situación de dolor. Jesús necesita dar a conocer sus verdades hoy, nuev amente. Y para comenzar me pidió que hablara de la necesidad de construir un mundo nuevo. Aquel mundo maravilloso y perfecto que vieron los antiguos profetas. El Reino del Amor. La Nueva Jerusalén, y que por terquedad aún no hemos construido. Me dijo que: 1.- La Nueva Jerusalén debíamos construirla entre todos los seres humanos. 2.- La única forma posible de construir un nuevo mundo es amándonos los unos a los otros tal como Dios nos ama. 3.- Debíamos hacer la Cadena del Amor todos los días, para despertar nuestra capacidad de amar y vivir, aunque sea por unos minutos, el mandamiento de “ amarnos los unos a los otros”. Esta Cadena del Amor debemos hacerla a las 8:00 y a las 21:30 horas (hora local de cada lugar). Antes de continuar, debo confesar que durante un largo tiempo después de las revelaciones estuve oponiéndome a cumplir la misión que Jesús me encomendaba. La oposición se presentó de mil maneras, tratando de sacudir esa carga de mis hombros. Jesús jamás se rindió a mis rechazos y temores. Estos rechazos y las excusas que para ello formulé, no eran motivadas por la falta de confianza en Jesús, o porque no entendiera sus enseñanzas y su palabra. Él me había dado la capacidad y la claridad para entenderlo, pero no me atrevía a transmitir estos mensajes por temor a que no fueran comprendidos.

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Sin embargo, desde el momento en que comencé a difundirlos, la gente fue entendiendo y acogiendo poco a poco el mensaje de Jesús. Las revelaciones ocurrieron así. El 18 de Septiembre de 1981, mis hijos habían sido invitados a casa de unos amigos y yo me quedaría sola por espacio de tres días. Sentí una gran felicidad ante la expectativa de sentirme sola y eso era muy extraño en mí, ya que siempre estaba anhelando estar al lado de ellos, temerosa de que les ocurriera algo negativo fuera de casa. Pero en esa oportunidad estaba realmente feliz de quedarme sola y me preparé para ello. Cerré las puertas y ventanas para no ser interrumpida. Presentía que algo especial me iba a ocurrir, aunque no tenía muy claro que podría ser Desde hacía ya un tiempo deseaba escribir algo acerca de Jesús . No sabía por qué escribir sobre Jesús , ya que no me sentía atraída hacia él de una manera especial. Lo que en realidad deseaba era escribirle una carta para hablarle de algunas cosas que me parecían poco claras. Tomé papel y lápiz y me senté frente a la única mesa que teníamos en un rincón de la pieza. Lo único que había escrito era : “ Algo acerca de Jesús” y nada más. De pronto se iluminó toda la habitación con una luz muy fuerte, muy especial. Solamente luz. Todo lo demás había desaparecido.¡ Todo! La luz no iluminaba los objetos que me rodeaban, sino que por el contrario , los borraba todos, dejándome sola en medio de esa luz. En un comienzo sentí temor, como le ocurriría a cualquier persona frente a un hecho extraordinario, pero el temor fue despareciendo gradualmente y solamente me sentí en medio de esa luz. Fue entonces cuando escuché una voz muy cálida, muy suave, casi humilde, que decía: “ Yo soy Jesús, el que vino a traer la luz al mundo y no la recibieron”. “ No puedo mostrarme hasta que me liberen”. “ No puedo mostrarme hasta que destruyan las cárceles en que me encerraron”. “No puedo mostrarme hasta que me liberen de las religiones, porque son ellas las murallas que me impiden mostrarme como soy”. “ Yo los amo a todos como siempre, pero no podrán verme hasta que desaten los nudos con que me ataron en la tierra las religiones”. “ Mi libertad depende de ustedes.... Escribe todo los que te diré y mostraré...y no temas...” Entonces la voz se suavizó aún más y me repitió el mensaje que yo empecé a escribir. Después Jesús dejó de hablar, pero la luz permaneció unos instantes para luego desaparecer lentamente.

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Me sentía muy feliz. Esa luz y esa palabras me habían dejado una gran felicidad, una sensación de plenitud. Después sentí miedo. Mis pensamientos, mi mente, mi imaginación volaba en busca de una explicación a lo que me había sucedido. Con sentido práctico, llegué a la conclusión de que todo se debía a un estado de fatiga, pues no había comido en todo el día. Mientras cocinaba recuerdo que cantaba. Me sentía algo inquieta. Comí bien y volví a la pieza. Al entrar, sentí nuevamente que algo se iba apoderando de mí, era como una luz invisible que iba infundiéndome a la vez, una gran claridad mental y una alegría inexplicable a mi corazón. Por segunda vez la habitación se iluminó con esa maravillosa luz que hacía desaparecer cuanto me rodeaba, pero entonces no sólo me sentía rodeada de luz y en medio de la luz, sino además llena de luz. Presentí que podría hablar con Jesús y no sólo limitarme a escucharlo, y así fue. Me dijo: “ Mercedes, toma el lápiz y escribe porque voy a encomendarte una misión”. Antes de escribir le pregunté : “Jesús, ¿ por qué me escoges a mí? Yo soy una mujer, soy ingenua, soy cobarde, soy pecadora y además creo que estoy loca” Jesús me respondió con calma y mucho amor. “No te escojo a ti por lo que eres sino por lo que serás. En ti escojo a todas las mujeres”. “Sólo las mujeres pueden liberarme, porque ellas no necesitan milagros para creer. Las mujeres me ayudaron y me acompañaron en mi vida sin temor y serán ellas las que me ayudarán y me liberarán en este tiempo”. “Tu misión es escribir todo lo que yo te diga o muestre, y no temas, porque yo estaré contigo”. “Todos te entenderán, porque a través de ti sólo estoy mostrando mi gran amor por los seres humanos y el gran deseo que tengo de mostrarme y de vivir plenamente con ustedes, pero para que esto pueda ser realizado, es necesario que ustedes me lo permitan”. “ Si el ser humano me libera, va a parar el descenso y empezará a crecer”. “Todas esas cosas que yo realicé y que ustedes llamaron milagros, las podrá el ser humano hacer por si mismo, si cree en mí, porque yo soy un verdadero hombre”. “Lo que yo les mostré es como Dios creó al hombre, y esto es lo que quiero que enseñes a todos los seres humanos, a quienes amo tanto, y es por este amor que les tengo que te encomiendo esta misión”. “ Es una misión de amor lo que te encargo, de mi eterno amor hacia ustedes”.

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“ Explícales a todos que no puedo mostrarme nuevamente porque no puedo aceptar que se arrodillen frente a mí . Diles que no quiero adoración, quiero imitación”. “ Y a ti te pido que estés preparada porque te estaré dando todos los conocimientos para que los publiques y aclares las dudas de mis hermanos y no temas, porque yo estoy contigo.”. Entonces le pregunté : “ ¿por qué eliges a las mujeres para que te ayudemos, cuando podrías pedírselo a tantos hombres importantes que poseen los medios para hablar y ser escuchados?” Jesús me contestó con voz dolida. “Tienen los medios para hablar, pero no hablan porque no pueden escuchar...Escribe y publica todo lo que yo te diga o muestre, y no temas”. Después de la publicación del primer libro, muchos hombres se sensibilizaron y hoy en día son Operarios del Amor, que trabajan fiel y entusiasmadamente para que todos los seres humanos conozcan los mensajes actuales de Jesús y así, en un futuro cercano, podamos vivir plenamente su mandamiento del amor, que es lo medular de su enseñanza. En la primeras revelaciones, Jesús me enseñó a hacer la Cadena del Amor y me pidió también que se la enseñara a todos los demás. Haciendo la Cadena del Amor todos los días, todos juntos a la misma hora durante algunos minutos, estaríamos empezando a vivir el mandamiento de “ amarnos los unos a los otros”, como Dios quiere que nos amemos. Mercedes Miranda

LIBROS DICTADOS POR JESÚS

A MERCEDES MIRANDA A PARTIR DE SEPTIEMBRE DE 1981

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LUZ PARA LOS HOMBRES VIDA VERDADERA LA CREACIÓN DIOSES SOÍS ILUMINANDO EL APOCALIPSIS PROFECÍAS Y MENSAJES EL MUNDO PIDE AMOR SEAN PERFECTOS COMO EL PADRE EL JUCIO FINAL DE LA HUMANIDAD TUS DONES Y ANTIDONES I Y II AMAR ES EL ÉXITO AMAR COMO DIOS AMA INSCRÍBETE PARA UNA VIDA FELIZ Se con siguen en : www.editorialcadenadelamor.cl