9. El diálogo es generador de vida y de crecimiento para el amor. No es para defenderse ni para pasar facturas.

10. En el diálogo se comparte todo, incluso las diferencias. Hay que aprender a confrontar las posiciones distintas.

11. En el diálogo muchas veces hay que saber “perder”, postergar lo propio. Los dos pierden lo particular para ganar los dos en la relación y la renovación del vínculo.

1- ERES SANTOHay gratitud en mi corazón, abro mis labios en adoración. Mi Redentor mi único Dios, tu vida entregaste solo por amor.Hoy me postro, hoy me rindo, ven y toma tu lugar. Haz de mi vida un altar, vive en tu santidad y que siempre te pueda adorar.Eres real y hoy, te puedo sentir dentro de mí, siento tu sangre hoy, que lava mi ser, vuelvo a nacer.Eres santo, eres santo, eres santo Dios.

2- DIOS INCOMPARABLEDios de mi corazón, en ti encontré mi salvación, tu gloria y majestad, quiero siempre contemplar. Tu eres mi adoración, y mi eterna canción, todo mi interior, es cautivado por tu amor. Eres Dios eterno, solo tú eres bueno, Dios incomparable, eres tú. Nunca me separaré, de tu gran amor, eres mi Señor, mi Salvador. Aleluya, Aleluya, Aleluya, Aleluya.

3- POR EL PODER DE TU AMORVengo a ti Señor cámbiame, renuévame,por la gracia que encontré en ti.Ahora sé que las debilidades que hay en mídesvanecerán por el poder de tu amor.Cúbreme, con tu amor rodéame/moldéame…tómame cerca quiero estar,y al esperar nuevas fuerzas yo tendré,y me levantaré como las águilas por el poder de tu amor.Yo te quiero ver cara a cara hoy Señory conocer así más de ti en mí.Prepárame Señor para hacer tu voluntad

viviendo cada día por el poder de tu amor.RETIRO ESPIRITUAL: El diálogo

Camino de encuentro con Dios y con los hermanos

En la Carta Pastoral Iglesia Trinitaria, Sinodal y Profética; dentro de sinodal propongo tres puntos: a) A la escucha; b) Siempre en diálogo y c) En constante discernimiento.

Nos detenemos hoy en el punto b) Siempre en diálogo. Dedico los puntos 24-26 al tema del diálogo.

Carta Pastoral 2017, 24. …Dialogar es salir al encuentro del otro, como constantemente hace Jesús (cf. Mc 8,2; 8,27; Lc 7,13; 7,40; 19,5). El diálogo tiene que ser respetuoso, paciente y progresivo, como demuestra el Señor con la Samaritana (cf. Jn 4,1-42)…

Mc 8,2Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: Me da pena esta multitud, porque hace tres días que están conmigo y no tienen qué comer…

Mc 8,27Jesús salió con sus discípulos hacia los poblados de Cesarea de Filipo, y en el camino les preguntó: ¿Quién dice la gente que soy yo?

Lc 7,13Al verla, el Señor se conmovió y le dijo: «No llores».

Lc 7,40Pero Jesús le dijo: Simón, tengo algo que decirte. ¡Di, Maestro!, respondió él.

Lc 19,5Al llegar a ese lugar, Jesús miró hacia arriba y le dijo: Zaqueo, baja pronto, porque hoy tengo que alojarme en tu casa.

Jn 4,7

Una mujer de Samaría fue a sacar agua, y Jesús le dijo: Dame de beber. ¿Qué es diálogo?Viene del griego: dialegomaiDia “en dos partes”.Legomai “hablar” (viene Logos: palabra).Etimológicamente hablando es: “hablar en dos partes”.

ES: Carta Encíclica Ecclesiam Suam de Pablo VI del 6 de agosto de 1964.

Carta Pastoral 2017, 25. …Queremos aprender a aplicar las cuatro grandes características del diálogo que el Papa Pablo VI nos regaló en su Encíclica Ecclesiam Suam: claridad, afabilidad, confianza y prudencia pedagógica (cf. ES 31). Estas cuatro palabras deben encarnarse en la vida cotidiana de nuestras familias y comunidades para poder ser auténticamente una Iglesia sinodal…

ES 31. El diálogo es, por lo tanto, un modo de ejercitar la misión apostólica; es un arte de comunicación espiritual. Sus caracteres son los siguientes: 1) La claridad ante todo: el diálogo supone y exige la inteligibilidad: es un

intercambio de pensamiento, es una invitación al ejercicio de las facultades superiores del hombre; bastaría este solo título para clasificarlo entre los mejores fenómenos de la actividad y cultura humana, y basta esta su exigencia inicial para estimular nuestra diligencia apostólica a que se revisen todas las formas de nuestro lenguaje, viendo si es comprensible, si es popular, si es selecto.

2) Otro carácter es, además, la afabilidad, la que Cristo nos exhortó a aprender de El mismo: Aprended de Mí que soy manso y humilde de corazón; el diálogo no es orgulloso, no es hiriente, no es ofensivo. Su autoridad es intrínseca por la verdad que expone, por la caridad que difunde, por el ejemplo que propone; no es un mandato ni una imposición. Es pacífico, evita los modos violentos, es paciente, es generoso.

3) La confianza, tanto en el valor de la propia palabra como en la disposición para acogerla por parte del interlocutor; promueve la familiaridad y la amistad; entrelaza los espíritus por una mutua adhesión a un Bien, que excluye todo fin egoístico.

4) Finalmente, la prudencia pedagógica, que tiene muy en cuenta las condiciones psicológicas y morales del que oye: si es un niño, si es una persona sin formación, si no está preparada, si es desconfiada, hostil; y si se esfuerza por conocer su sensibilidad y por adaptarse razonablemente y modificar las formas de la propia presentación para no serle molesto e incomprensible.

Con el diálogo así realizado se cumple la unión de la verdad con la caridad y de la inteligencia con el amor.

Nos dice el Papa Francisco:EG 142. Un diálogo es mucho más que la comunicación de una verdad. Se realiza por el gusto de hablar y por el bien concreto que se comunica entre los que se aman por medio de las palabras. Es un bien que no consiste en cosas, sino en las personas mismas que mutuamente se dan en el diálogo…

Preguntas para el trabajo personal: orar, pensar, reflexionar y revisar...1. ¿Se puede decir de mí que soy hombre, una mujer de diálogo?2. ¿Cómo es mi diálogo con Dios? En mi experiencia de oración: ¿existe

verdadera comunicación y búsqueda de comunicación de mi parte?3. ¿Descubro que Jesús hoy también sale a mi encuentro como hace con sus

discípulos en el NT cuando tienen que resolver la alimentación de una gran multitud y cuando tienen que fortalecer la verdadera identidad de Jesús?

4. ¿Acepto la presencia dialogante de Jesús como hace la viuda de Naím en medio de su dolor, Simón el fariseo en su soberbia, Zaqueo en su pecado y la Samaritana en su búsqueda de vida?

5. ¿Qué predomina en mis relaciones interpersonales: el monólogo, la simple conversación, compartir información o el diálogo como revelación de mi persona que va al encuentro del otro?

6. ¿Cómo es mi actitud de diálogo en los distintos niveles de mi vida: a) con el mismo Dios;b) con los miembros de mi familia;c) con mis amigos y participantes de espacios pastorales;d) con las personas de mis ambientes laborales y estudiantiles;e) con mis compañeros de diversos grupos sociales o pastorales?

7. ¿Qué me provocan las cuatro características que debe tener el diálogo según el número 31 de ES: claridad, afabilidad, confianza y prudencia pedagógica?

8. ¿Qué puedo hacer aquí y ahora, sostenido por la gracia de Dios, para crecer en diálogo con Él y con mis hermanos?

Algunos puntos para tener presente a lo hora de buscar el diálogo con algún hermano.1. Tener conciencia que el diálogo no se produce solo. Hay que sentarse...2. Se necesita tiempo. Y tal vez tiempos fijos. Algunas veces es necesario poner día y hora...3. Buscar un lugar físico adecuado y una atmósfera propicia.4. ¿Sobre qué vamos a dialogar? Muchas veces es necesario proponer temas... Se puede, por

ejemplo, partir de dos preguntas: a. ¿Qué me alegró más en esta semana?b. ¿Qué me dolió y me costó más durante esta semana?

5. Actitud fundamental: escuchar, escuchar y escuchar. Hace falta paciencia. Esperar realmente que el otro termine de comunicar y comunicarse.

6. Dialogar con el habla pero también con el cuerpo: los ojos y sus miradas, las manos y sus gestos, los latidos del corazón, la postura del cuerpo...

7. Siempre ponerme en su lugar, en sus zapatos, mirar por su ventana.8. Cuidar positivamente las formas de hablar: no acusar de forma virulenta:

Estaba preocupado porque no llegabas... no es lo mismo que decir: sos un estúpido porque no me avisaste que llegabas más tarde...