Y EL ARROYO - Instituto de los Hermanos Maristas · EL TRABAJO DE LA FORMACIÓN 1. Marcelino no...
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San Marcelino Champagnat yel Venerable Hermano Francisco
ELMANANTIAL
Y ELARROYO
PALABRAS DE INTRODUCCIÓN
El manantial y el arroyo es un ejemplo de paralelismo entre nuestroFundador, Marcelino Champagnat (el manantial), y el H. Francisco, queserá su primer sucesor y “su retrato viviente”. Nuestra Congregación,bajo el H. Francisco, conoció un crecimiento sorprendente: el manan-tial se convierte en arroyo.El Padre Champagnat y el H. Francisco han vivido la misma historia,los mismos principios; compartieron el mismo ideal, el mismo caris-ma, la misma aventura hacia la santidad. Estas páginas les acercan demanera que los dos sean acogidos por los hermanos con el mismo ca-riño, el mismo entusiasmo y la misma gratitud.Dos personalidades diferentes, que colaboran al máximo. Es que lasantidad es ante todo obra del Espíritu que esculpe con paciencia einteligencia a cada persona. Es también la invasión del corazón y de lavida por la potencia de la resurrección del Señor. Pero Marcelino yFrancisco testimonian que se puede caminar hacia Dios con dones na-turales bien diferentes.El estilo es ligero; se expresa a veces por atajos, y los textos pro-puestos son breves.Quizás estas páginas puedan reforzar en nuestra familia la costumbrede escuchar a nuestros primeros hermanos, a todos los hermanosque nos ha precedido en el camino del amor y del servicio, este cari-ño espontáneo y fuerte que tenemos por nuestro Padre y Fundador,Marcelino Champagnat. El orgullo de los orígenes consolida la identi-dad marista de hoy.
En la gracia de la familia, una madre excepcional . . . . . . . . . .7
Un niño precoz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .11
La responsabilidad cae sobre unas espaldas jóvenes . . . . . .15
1826: Entonces se compromete el amigo . . . . . . . . . . . . . .19
El discípulo honra a su maestro . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .23
Lo que Francisco nos lega . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .27
Pero el mismo espíritu . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .31
Una larga intimidad con Dios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .35
En el rostro, la irradiación de la Eucaristía . . . . . . . . . . . . . .39
Hijo privilegiado de María . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .43
Siempre os he amado tiernamente... . . . . . . . . . . . . . . . . . .47
Alegría . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .51
... y decírselo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .55
Dimisión: 1860 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .59
El Espíritu hace a los santos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .63
Agarre un hacha... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .67
Carta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .69
El retrato viviente . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .73
Oración de un Hermano . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .75
Francisco: grandes momentos de su vida . . . . . . . . . . . . . . .77
Oración para pedir la beatificación del Venerable H. Francisco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .78
Oración para elaño de las vocaciones . . . . . . . . . . . . . . . . .79
En la gracia de la familia, un padre excepcional . . . . . . . . . . .6
El trabajo de la formación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .10
Asumir responsabilidades . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .14
1826: Cuando la enfermedad produce el vacío . . . . . . . . . .18
Dos amigos en el camino de la vida . . . . . . . . . . . . . . . . . . .22
Lo que Marcelino nos deja . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .26
Dones diferentes... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .30
Bajo el sol de Dios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .34
Jesús en el centro de nuestra vida . . . . . . . . . . . . . . . . . . .38
María, la Buena Madre . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .42
Ya no respiro sino por vosotros... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .46
Alegría . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .50
Amar a los niños... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .54
Muerte: 1840 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .58
Si miramos las diferencias... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .62
Lo comeremos en comunidad... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .66
Carta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .68
Un pragmático apasionado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .72
Oración de un discípulo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .74
Marcelino: grandes momentos de su vida . . . . . . . . . . . . . .76
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ÍNDICESAN MARCELINO CHAMPAGNAT
ÍNDICE VENERABLE HERMANO FRANCISCO
7Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
EN LA GRACIA DE LA FAMILIA,UNA MADRE EXCEPCIONAL
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SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
EN LA GRACIA DE LA FAMILIA,UN PADRE EXCEPCIONAL
1. En la aldea de Maisonettes, de la parroquia de LaValá, los Rivat, son principalmente una familia deagricultores.
2. Tenemos pocas noticias del padre, Juan BautistaRivat.
3. La madre, Francisca Boiron, es un modelo de ma-dre cristiana. Marcará profundamente al pequeñoGabriel por su devoción mariana: en primer lugar,consagra el niño a María a la edad de cinco años yluego por su disposición a la ascesis voluntaria(hasta llevó cilicio). Paralítica durante largo tiem-po, sufre serena la prueba diciendo:“Tenemos queir allá arriba”.
4. Este hogar tendrá siete hijos, cuatro chicos y treschicas. Gabriel es el más pequeño de todos.
5. Los Rivat, de salud precaria, conocen por parado-ja una longevidad mayor que los Champagnat; va-rios sobrepasan los 70 años, entre ellos la madreFrancisca y su hijo Gabriel. (La medicina había he-cho progresos, estamos en una generación mástarde que la de los Champagnat).
6. Gabriel nace el 12 de marzo de 1808. En él va areflejarse mucho la imagen de la madre y proba-blemente también la discreción del padre.
7. Con Napoleón, la sociedad francesa ya no conoce
1. Los Champagnat, en la aldea deRosey, cerca de Marlhes, sonuna familia de campesinos yde pequeños comerciantes.
2. El padre, Juan Bautista, esuna presencia fuerte, poseecierta cultura y socialmenteestá comprometido con losideales revolucionarios: “Supadre era un hombre de jui-cio recto, muy instruido para aquellos tiempos ypara el pueblo en que vivía... De carácter pruden-te, conciliador, árbitro en los pleitos de los veci-nos” (p. 2). Entendido en todos los oficios manua-les indispensables en una granja.
3. La madre, María Teresa Chirat, forma el corazónde Marcelino, apoyándole especialmente en losmomentos de crisis. Mujer fuerte, de sólida pie-dad, de una gran devoción a la Santísima Virgen yde juicio recto.
4. Juan Bautista y María Teresa tendrán 10 hijos, 5 ni-ños y 5 niñas. Marcelino es el anteúltimo.
5. En la familia, una tía paterna, Luisa, religiosa de SanJosé, ayudará mucho a la madre en la formaciónespiritual de Marcelino.
6. Marcelino nace el 20 de mayo de 1789. En él va a
Para Marcelino
Champagnatla citacionesson tomadas
de la vidaescrita porel H. Jean
Baptiste Furet,edición del
bicentenario,Roma, 1989.
Para el H.Franciscolas paginasindicadasson las dellibro“HermanoFranciscoGabrielRivat: LaAlegría deserHermano”,Roma,diciembrede 2003
los horrores de la revolución, pero, en cambio, elemperador está constantemente en guerra y ne-cesita a muchos jóvenes en el servicio militar. Doshermanos de Gabriel son llamados a las armas.
“El H. Francisco llegó a identificarse de tal maneracon el P. Champagnat, que los hermanos no nota-ban ninguna diferencia entre los dos. Cuando el H.Francisco hablaba o escribía, era el P. Champagnatel que hablaba o escribía.”(H.Pierre Zind, Consejosespirituales del H. Francisco, p. 20).
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reflejarse el padre, con su sentido social y sus ha-bilidades prácticas, y la madre con su firmeza y supiedad.
7. Francia se encamina hacia los años trágicos de larevolución, aunque los sobresaltos de la capital lle-guen amortiguados a los pueblos
Leyendo estas páginas, El H. Paul Sester escribe es-ta reflexión:“poner a estos dos hombres en parale-lo sería, ante todo,poner en evidencia lo que los se-para antes que lo que los acerca. Son dos persona-lidades opuestas,dos formas diferentes de santidad.No es un trabajo fácil...”
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
Miramos a Marcelino como el
hijo que contempla a su padre y
aprende de él los valores
esenciales. En él vemos: Un
hombre de fe que vive la
presencia de Dios y que mira al
mundo en Él; un hombre
cautivado por Jesús y por María;
un hombre de oración; un
peregrino de la fe; un corazón
apasionado por Dios (Documento
del XX Capítulo general, art. 15).
1. A los ocho años es uno de los niños que van a lacatequesis con el joven coadjutor de La Valá y a laslecciones del maestro contratado por Marcelino,que había llegado a la parroquia el 12 de agosto de1816.A los diez años, su madre le confía al P. Champag-nat, siendo el sexto Hermano de la naciente con-gregación.
2. Marcelino le da lecciones de latín, después de ha-ber aprendido a leer y escribir.Tiene un hermanoque es sacerdote, lo que indica una familia abiertaa la cultura.Francisco se sien-te atraído por lostrabajos intelec-tuales. Cuandovuelve al Hermi-tage en 1826,muestra una grancuriosidad inte-lectual y adquiereuna buena cultu-ra en literatura,m a t e m á t i c a s ,ciencias natura-les, historia bíbli-ca... Pero le cos-taba imponer dis-ciplina a los alum-nos.
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
UN NIÑOPRECOZ
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SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
EL TRABAJODE LA FORMACIÓN
1. Marcelino no tendrá acier-to en los estudios. La bofe-tada que el maestro da aun alumno le decide a novolver a la escuela. Deci-sión definitiva.“Nacido en el can-tón de Saint-Genest-Malifaux (Loi-ra), he comprendido por las dificulta-des infinitas que experimenté para leery escribir, la urgente necesidad de unaSociedad que procurara a los niños delcampo la buena enseñanza que los excelentesHermanos de las Escuelas Cristianas procuran alos de las ciudades”. (534)
2. Reanuda los estudios a los 15 años para prepa-rarse a entrar en el Seminario. Es difícil. Tendráque poner mucha voluntad y trabajo para conti-nuar los estudios en el seminario, donde, al ca-bo del primer año escolar, se le aconseja que sequede en casa, probablemente a causa de losmalos resultados. Se queda por la noche a estu-diar.
3. En cambio, en la granja con su padre, aprende mu-chals cosas útiles: carpintería, albañilería, el traba-jo en el molino y el cuidado de las ovejas.Toda lavida se le dará muy bien el trabajo manual.
4. En Marcelino, la práctica será mucho más fácil quela teoría. Su inteligencia, su juicio y su don de gen-
3. Va a destacar en dos aspectos:– la medicina, campo en que está al corriente delos últimos avances: será un experto enfermero yejercerá durante toda su vida este oficio. Es una delas maneras de estar cerca de los Hermanos.– una cierta gula espiritual, que le lleva a coleccio-nar las máximas de los santos que llenan los cua-dernos de apuntes.Sus cartas revelan una pluma ágil y fecunda. Siem-pre estará preocupado por la formación intelec-tual de los Hermanos. Abrirá el primer escolasti-cado en 1849.
4. Su espíritu reflexivo y su timidez le crean una cier-ta distancia. Sin embargo, será un Hermano aten-to y abnegado con los demás. Sus cartas y su em-pleo de enfermero son prueba de ello.
tes son de orden práctico. Esta condición crea enél una proximidad inmediata, más fuerte y más fá-cil en el trato con la gente.
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
Miramos a Marcelino como el
hijo que contempla a su padre
y aprende de él los valores
esenciales. En él vemos:
Un padre que cuida de sus
hermanos como si fueran sus
hijos; un hombre lleno de vigor
y de ternura, que sabe cultivar
la alegría y el buen humor: un
corazón paterno y materno
(Documento del XX Capítulo
general, art. 15).
Hay que tener miedo
de adquirir la ciencia
que infla si no se
perfecciona al mismo
tiempo la caridad
que edifica.
(H. Pierre Zind, Consejos
espirituales del
H. Francisco, p 74).
1. Francisco entra gradualmente y bajo el signo de laprecocidad en el mundo de las responsabilidades.Director de una escuela a los 17 años y luego dela casa del Hermitage y del noviciado a los 18años: secretario y brazo derecho del P. Champag-nat a los 28 años. El 12 de octubre de 1839 le su-cede.Tiene 31 años.
2. Director general y luego Superior general de1852 a 1860.Durante 21años al frentede un Institutoen rápido cre-cimiento, en unmundo cadavez más exi-gente para loseducadores .Responsabletambién deuna congrega-ción legalmen-te reconocida,extendida porcasi toda Fran-cia y en el ex-tranjero. Dalos primerospasos en Romapara conseguir
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
LA RESPONSABILIDAD CAE SOBRE UNAS ESPALDAS JÓVENES
1. Marcelino tiene27 años cuandoes ordenadosacerdote y en-viado como co-adjutor a La Va-lá. Llega a esepueblo el 12 deagosto de 1816.
2. El 2 de enerode 1817, cuan-do todavía notiene 28 años,funda la nuevacongregaciónde los Herma-nitos de María.Como funda-dor y formadorforja religiosos educadores. Desempeñará esta ta-rea durante 24 años.
3. Crea un estilo de educación hecho de amor, depresencia, de cualidades marianas, (y por ello ma-ternales). Construye el Hermitage y moldea lasrocas. Responsabilidad del pionero, de quien abrecaminos: hombre de espíritu carismático, con lospies en el suelo.
4. Atiende al Espíritu y a los signos de los tiempos
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SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
ASUMIRRESPONSABILIDADES
El H.Francisco esen primerlugarDirectorgeneral de1839 a 1852,mientras el P.Colin es elSuperiorgeneral detoda laSociedad deMaría. Mástarde, cuandolas doscongregaciones,Padres yHermanos, seseparan, en1852,Franciscorecibe eltítulo deSuperiorgeneral. Sinembargo,cuando el P.Champagnatestá en Paris,de enero amayo de1838,Franciscofirma ya alpie de suscartas con lasletras d.g.(=DirectorGeneral), ydeja dehacerlocuando el P.Champagnatregresa alHermitage.(cf. Registrode Tomas dehábito I) ( ¿d.g. =delegadogeneral ?)
la aprobación pontifica de la congregación.
3. Muy pronto hace del Hermitage un santuario ma-rista, relicario del Fundador, cuya devoción fomen-ta entre los Hermanos.
4. Pero, con responsabilidad de discípulo, debe ser almismo tiempo, fiel y creativo. Será el hombre delas estructuras sólidas: Reglas Comunes y Reglasde Gobierno. Hombre de Regla: es su forma deatender al Espíritu y a los signos de los tiempos.
5. Alos 52 años dimite de su cargo. El admirable rit-mo de crecimiento de la congregación nos hacepensar en el enorme trabajo que ha exigido al Su-perior. Marcelino había muerto a los 51 años.A los52, Francisco está agotado.
para que el carisma y la misión de la nueva con-gregación sean cada vez más nítidos y unificados.Esboza una espiritualidad comprometida.
5. Muere agotado por el trabajo y la enfermedad el6 de junio de 1840, a los 51 años.
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VENERABLE
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CHAMPAGNAT
Miramos a Marcelino como el
hijo que contempla a su padre y
aprende de él los valores
esenciales. En él vemos:
Un pastor que escucha y escoge a
las personas; un apóstol de
corazón ardiente para anunciar la
Buena Nueva de Jesús; un amigo
de los niños y de los jóvenes; un
educador que sabe ser
misericordioso y exigente; una
persona creativa y audaz: un
corazón de apóstol (Documento
del XX Capítulo general, art. 15).
Se temen, se detestan
los pensamientos,
las palabras y las acciones
contrarias a la santa virtud...
¿se hace los mismo
con los pensamientos,
las palabras y las acciones
contrarias a la vocación?
(H. Pierre Zind, Consejos
espirituales del
H. Francisco, p 65).
1. 1824: Francisco tiene 16 años. Está en el Hermita-ge entre los que trabajan en la construcción de lacasa.
2. 1825: a los 17 años es director de la escuela de Bou-lieu.Ante esta nueva responsabilidad, pide a Marceli-no que le escriba una oración especial. El Fundadorle invita a poner todo en manos de María.
3. 1826: Hace la profesión perpetua y se comprome-te totalmente con la joven congregación.Tiene 18años y, mientras algunos se retiran, él se entrega.
4. Marcelino llamaa Francisco alHermitage y lepone como di-rector de la ca-sa, del novicia-do, y muy pron-to le nombraenfermero dela comunidad.Es el primerconsejero deMarcelino, alque reemplazacuando tieneque ausentarse.
5. En adelante,
1. 1824: Compra de la propiedad del Hermitage y enel mes de mayo inicia la construcción de la casa.Trabajo agotador, que Marcelino lleva a términoen medio de grandes contrariedades.
2. 1825: Mes de mayo, y la nueva congregación se ins-tala en el Hermitage: carencia de todo, deudas, crí-ticas y amenazas de abandono.
3. 1826: Marcelino cae gravemente enfermo despuésde Navidad de 1825. Jamás curará totalmente deesta enfermedad. Courveille, intrigante para serreconocido como superior durante al enfermedadde Marcelino, amenaza con dejarlo todo, abando-nando a los Hermanos frente a los acreedores.Terraillon, sacerdote que había hecho la promesade Fourvière, se marcha del Hermitage.
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1826: ENTONCES SE COMPROMETE EL AMIGO
1826: CUANDO LA ENFERMEDAD PRODUCE EL VACÍO
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Juan María Granjón, primer Hermano, abandona lacongregación; Esteban Roumezy, bien dotado parala administración, toma otra vocación.Courveilletiene que retirarse a causa de un escándalo.
4. Hay un vacío en el Hermitage: Marcelino se quedasolo, enfermo y con deudas. Juan Bautista, el bió-grafo, nos habla del deplorable estado de la comu-nidad.
5. El H. Estanislao, de pocos estudios, pero de pro-fundo y recto criterio, apreciado en Saint Cha-mond, se convierte en el enfermero, el confidentey el apoyo de Marcelino y le salva. Reanima a losHermanos y hace que la congregación pase el ca-bo de las tormentas.
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VENERABLE
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Francisco vive con Marcelino en el Hermitage. Co-mo él, se convierte en el hombre del Hermitage.Estará allí desde 1826 a 1858 y luego desde 1860hasta 1881.Total 53 años. Los dos años entre 1858y 1860 los pasa en Saint-Genis-Laval. Francisco se-rá la memoria y el santo del Hermitage.
Miramos a Marcelino como el
hijo que contempla a su padre y
aprende de él los valores
esenciales. En él vemos: Un hombre
que ve más allá de su época; un
hombre que con sus proyectos
abarca el mundo entero y prepara
misioneros; que vive sus ideales
con tal intensidad, que muchos
quieren ser como él y vivir como
él: con un corazón sin fronteras
(Documento del XX Capítulo
general, art. 15).
Consejos a un H. Director:
Procure usted especialmente hacer reinar
en su casa y sobre todo entre sus Hermanos
el buen espíritu, una gran abnegación
por el Instituto..., la verdadera piedad,
la modestia y la discreción.Trate
de preservarlos de la tristeza...
Recuérdeles a menudo estas palabras
de nuestro buen Padre Fundador:
“La cruz y las aflicciones son necesariamente
la herencia de todos los que hacen la obra
de Dios y que trabajan útilmente en
la salvación de las almas. El que teme
las contradicciones no conoce el misterio
de la cruz ni la economía de la salvación
de las almas, ni las vías de la perfección”.
El P. Champagnat decía que un hermano
director debe todo su tiempo, todo su talento,
todos sus cuidados y todos sus trabajos
a la comunidad. (H. Pierre Zind, Consejos
espirituales del H. Francisco, p 69-70).
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VENERABLE
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1. Marcelino recibe a Gabriel, niño de diez años, y se-rá el maestro que forma a su discípulo.Al principio le deja en una vocación abierta, con laposibilidad de encaminarse hacia el sacerdocio: leda clases de latín.
2. Marcelino reconocepronto el valor del H.Francisco. Su estimase muestra en los tra-bajos que le confía: lle-ga a ser su secretario,su sustituto durantelas ausencias y final-mente su sucesor.
3. Marcelino está en elorigen de la confianzaque los hermanos ma-nifiestan al H. Francis-co. Expresa su satis-facción cuando es ele-gido como Directorgeneral.Y no duda endecir públicamente alos Hermanos:“El quehabéis elegido lo harámejor que yo”.“En La Valá, la mayoríade las familias tienenla estampa del H.
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DOS AMIGOS EN EL CAMINODE LA VIDA
1. Francisco decideser “el retrato vi-viente de Marcelino”y no cambiar nadade lo que se hacíaen tiempo del Fun-dador. Se gana laestima de los Her-manos, se hace máscariñoso y máscercano a ellos, yles manifiesta suafecto.
2. Toma nota de lasinstrucciones delFundador, dejándonos cerca de 1.500 páginas enlas que podemos encontrar aspectos de nuestrosorígenes y del pensamiento de Marcelino.
3. Entre 1819 y 1865, Francisco escribe notas espiri-tuales que reflejan cuarenta y cinco años de histo-ria espiritual de los Hermanos, veintiuno de ellosen compañía del Fundador, que era la fuente de suespiritualidad.
4. La circular Sobre el Espíritu de Fe, de 1848 a 1853,presenta la primera síntesis de la espiritualidad dela joven congregación.
5. Francisco es un gran impulsor de la devoción que
EL DISCÍPULO HONRAA SU MAESTRO
los Hermanos tenían al Fundador: “Dirigíos al P.Champagnat.Ya veréis cómo lo arregla todo consu Recurso Ordinario, la Santísima Virgen.”
6. El retiro del 8 de septiembre de 1840 es un largomemorial de Marcelino; el Hermitage se convier-te en un santuario marista, relicario del Fundador.
7. El 10 de agosto de 1841, el H. Francisco pide a losHermanos que le envíen testimonios sobre elFundador, para que sirvan de fondo al escribir suprimera biografía.
Francisco en su dormitorio, al lado de la del Vene-rable Champagnat. En estas familias se le invoca adiario”. (Testimonio del H. Francisco de Borja, Sum-marium, pp. 611-655).
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
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Es evidente que la
intimidad con Jesús era
la meta del viaje de fe
de Marcelino
Champagnat (Circ. Una
revolución del Corazón,
pp. 27-29, 6 de junio
de 2003, H. Seán
Sammon, S.G.).
Se puede considerar toda la
casa de Notre Dame de
l’Hermitage como un gran
relicario del Venerable Padre
Champagnat. Fue él quien la
construyó. Vivió en ella durante
dieciséies años.Todo allí habla
de él, porque en todo puso su
mano; todo lo dirigía
(Hermano Francisco, Gabriel
Rivat: La alegría de ser
Hermano, p. 126)
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VENERABLE
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LO QUE FRANCISCONOS LEGA
1. A su muerte, 1840, Marcelino deja:• Una casa madre, El Hermitage.• Un noviciado: El Hermitage.• Un primer conjunto de Reglas, 1837.• 280 Hermanos, 48 escuelas, 7000 alumnos.• La congregación está presente en la región deLyón y en el norte de Francia; además, algunosHermanos trabajan en las misiones de Oceanía.• Marcelino había establecido relaciones con losHermanos de Saint-Paul-Trois-Châteaux, dirigidospor el Sr. Mazelier.
2. Deja un carisma, una misión, un espíritu, una nue-va congregación y mucho amor. Todavía hoy elamor recíproco del Fundador y de los Hermanoscaracteriza a la congregación.
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LO QUE MARCELINO NOS DEJA
1. A su dimisión, en 1860, Francisco deja:• Una congregación legalmente reconocida(1851).• Cinco noviciados.• El primer escolasticado, en la Grange-Payre.• Nuevas Reglas Comunes (1852).• La Guía de las Escuelas (1853).• Las Constituciones y las Reglas de Gobierno(1854).• Un voto nuevo, el de estabilidad (1855).• La primera biografía del Fundador (H. Juan Bau-tista Furet, 1856).• Una nueva Casa general: Saint-Genis-Laval(1853-1858).• 2.086 Hermanos, 376 escuelas, 50.000 alumnos.• La congregación está presente en Francia ente-ra, en Bélgica, Inglaterra y Escocia y 19 Hermanostrabajan en Oceanía.• Se hacen las primeras diligencias en Roma, 1858,para obtener el reconocimiento pontificio.• Francisco ha dado a la congregación estructurassólidas.
El H. Pierre Zind, a propósito del H. Francisco y paramostrar su actividad en el crecimiento de la congre-gación compara nuestras estadísticas con las de losHermanos de Proërmel:
Año HH. Maristas HH. De Ploërmel
1840: 280 395
1860*: 2086 935
* Año de la dimisión del H. Francisco.* Año de la muerte de Juan María de La Mennais, fun-dador de los HH. De Ploërmel
El H. Francisco declara:“Quiero ser el retrato vivo delFundador”.Y esto se traduce por:• Un primer tiempo de gobierno sin cambios.• Luego afrontará los acontecimientos según el espí-
ritu de Champagnat, como si Marcelino estuvierapresente, por lo tanto, con innovaciones.
3. Marcelino había dicho al H. Estanislao: “Le advier-to que después de mi muerte las cosas irán mu-cho mejor que actualmente”. (Vida p. 233).
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HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
“Cuatro medios para
tener éxito ante los niños,
que os puedo presentar como
infalibles...”
Estos cuatro medios consisten en:
- amar
- hacerse amar
- animar
- jamás desanimar.”
H. Pierre Zind, “Consejos
espirituales del H. Francisco”,
p. 77).
La espiritualidad de Marcelino
era eminentemente
transparente. La sencillez
marcaba y caracterizaba a este
hombre. El Fundador era
directo, jovial, acogedor. Su
humildad era también evidente:
no se le ha descrito como
alguien presuntuoso (Circ. Una
revolución del Corazón, p. 28,
6 de junio de 2003, Seán
Sammon, S.G.).
31Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
1. Marcelino es de naturaleza generosa, robusto, sim-pático, al que le gusta relacionarse.
2. Inclinado a la acción y a la práctica.
3. Atento a las situaciones humanas y a las llamadasde Dios, se compromete totalmente e invita a losdemás a comprometerse. Le es imposible quedarindiferente: vive para Dios y para los demás, conentusiasmo.
4. Es un líder natural, carismático que conquista fá-cilmente los corazones. “Tenía espíritu recto, jui-cio seguro y profundo, corazón bondadoso y
sensible... fácil detratar, atento. Susmaneras sencillas yafables... le ganabanlos corazones” (p.274).
5. Existe una corrientede afecto recíprocoentre Marcelino ysus Hermanos. Lesdice: “No hay nadaque no esté dis-puesto a hacer porvuestro bien. Estoydispuesto a com-partir con vosotros
E L M A N A N T I A L30
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
DONESDIFERENTES...
PERO EL MISMO ESPÍRITU
1. Francisco es de na-tural más tímido, re-concentrado, un po-co frío y distante, yde una salud másbien frágil.
2. Es inclinado a la cu-riosidad espiritual.Escribirá mucho, so-bre todo a partir de1860, y coleccionamáximas de los san-tos... Enfermero ex-perto, une el saber,el afecto y la ora-ción.
3. En la vida espiritual es mucho más propenso queMarcelino a la vida mística.
4. Es un líder espiritual y místico.
5. Francisco es estimado por sus Hermanos. Es ele-gido Director general por una gran mayoría: 87sobre 92. Muchos Hermanos definen su afecto co-mo paternal y maternal. Les escribe cartas largas,enjundiosas, con buen estilo; a menudo rebosantesde afecto. “Sabéis, queridos Hermanos que os heamado siempre con ternura”.
6. Se muestra muy enérgico cuando están en juegolos intereses de la congregación.
7. Hombre de prudencia y sabiduría, es consultadopor muchas personas.
8. Francisco hace del Hermitage el relicario marista,el santuario del Fundador. Con él la estima deMarcelino se hace memoria, devoción, culto.
9. Francisco es el hombre de la Regla, en el no-ble sentido de la palabra, que es otra manera deescuchar al Espíritu. Da a una congregación quecrece rápidamente las estructuras que necesita:Reglas Comunes, Constituciones, Reglas de Go-bierno, voto de estabilidad: estructuras que van adurar prácticamente un siglo.
hasta el último pedazo de pan”. Les escribe cartasbreves, prácticas, afectuosas. Es un verdadero pa-dre para sus discípulos.
6. Marcelino es el constructor del Hermitage y elhombre capaz de romper las rocas. Enérgico,transmite energía, entusiasmo y generosidad. Sabeembarcar a los demás en su aventura espiritual yhumana.
7. Sobre todo, Marcelino es el Fundador, hombre deun carisma, de una misión y de una congregación:Hombre de la fidelidad al Espíritu.
E L M A N A N T I A L32 33Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
La vanagloria es un ladrón
sutil que nos roba
nuestras buenas obras
y se desliza tan secretamente
que ha hecho su tarea
antes de que nos demos cuenta.
(H. Pierre Zind, Consejos
espirituales del H. Francisco, p 38).
He aquí la invitación que os
hago: ¡Sed Champagnat hoy!
¡Osad ser Champagnat! …
Lo esencial es que los
hermanos encarnen al
Fundador en su vida de
consagrados y que lleguen a ser
signos proféticos de los valores y
de la realidad que forman la
esencia de su vida
(H. Benito Arbués, S.G., 7 de
abril de 1999).
35Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
UNA LARGA INTIMIDADCON DIOS
1. En la oración concibió y planeó todos los proyec-tos y la obras que realizó.Todo lo comenzaba, locontinuaba y lo terminaba por la oración: “Nuncame atrevería a emprender un asunto sin haberloencomendado largamente a Dios”. (p. 309).
2. La oración era el punto capital en la formación delos Hermanos...Tener una sólida piedad era pose-er todas las virtudes... Un hermano sin piedad nosirve para nada (p. 313).
3. “Nada me ha llamado la atención ni me ha edifi-cado tanto como la piedad del señor Champagnat;sólo con oírle rezar se convence uno de que es unsanto; los que tienen la suerte de vivir con él nopueden dejar de ser piadosos” (p. 288).
4. Le gustaban sobre todo las oraciones de la Iglesia;las prefería a todas las demás (p 311). Daba la ma-yor importancia a la meditación y a la santa misa(p. 315).”Si sois fieles a la meditación diaria, yo res-
E L M A N A N T I A L34
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
BAJO EL SOLDE DIOS
1. “El H. Francisco noemprendía nada sinhaber reflexionadomaduramente, ni sinhaber rezado y he-cho rezar... Se enco-mendaba a Dios.Consideraba todocon cuidado, consul-taba, tomaba el tiem-po necesario... Elbuen Dios era suconsejero...” (p. 105).
2. “ Haced que vues-tros Hermanos sean piadosos, Los haréis felices ylos salvaréis indefectiblemente” (p. 122)
3. “Siendo la piedad una participación abundante enel espíritu filial de Nuestro Señor Jesucristo, paracon el Padre, la piedad nos da el abandono de unniño y la confianza absoluta que nos inducen a tra-tar con Dios como con el mejor de los padres ennuestras menores necesidades y en las penas másligeras” (p. 122).
4. “¿Quién nos librará de esta dureza de corazón tanfunesta? ¿Quién nos dará un corazón tierno y ge-neroso que nos hace amar la ley de Dios, que nosimpele a abrazarla con decisión y perseverancia?Solamente la piedad. Naturalmente duro e indócil,
ingrato y rebelde, inclinado a los placeres de lossentidos y opuesto a la ley del Espíritu, nuestrocorazón se ablanda por la meditación y por la ora-ción” (p. 129).
La presencia de Dios“Tomemos la costumbre de decir jaculatorias quemantengan nuestro espíritu y nuestro corazón conti-nuamente orientado hacia Dios. Retirémonos con fre-cuencia al santuario de nuestro corazón; por la fe en-contraremos a Dios” (p. 125).
pondo de vuestra salvación, y llegaréis a ser bue-nos religiosos” (p. 317).
5. “Tengo tal interés por los Hermanos que no mecanso de rezar por ellos y de presentarlos todoslos días al Señor y a su santa Madre” (p. 312).
La presencia de Dios El ejercicio favorito del P. Champagnat era el de la pre-sencia de Dios (p. 321)... Decir a menudo jaculatoriastan frecuentemente que hagan del trabajo una verda-dera oración (p. 310).
E L M A N A N T I A L36 37Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
¡Qué poco conocéis
la bondad de Dios!
Si comprendierais lo que
es esta bondad, hasta vuestras
faltas os inflamarían de amor
y de contrición, pero no os
pondrían tristes y taciturnos,
pues la tristeza viene
del demonio.¿Por qué os cargáis
tan fácilmente con esta
molesta carga?
¿Qué conocimiento os ha
venido con la tristeza?
¿Os ha traído alguna vez
algún bien? (H. Pierre Zind,
Consejos espirituales del
H. Francisco, p 36).
El título de Padre y Fundador
no es únicamente una llamada
histórica. El Fundador es
también el depositario de un
carisma cuya respuesta se
convierte en espiritualidad y
misión para nosotros.Aún más,
ese carisma se debe expresar
hoy con el fin de que otorgue la
ayuda de su riqueza específica
(H. Basilio Rueda, S.G., Circ. Del
8 de enero de 1968).
39Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
EN EL ROSTRO, LA IRRADIACIÓNDE LA EUCARISTÍA
1. “Su piedad durante la celebración de la misa eraadmirable: su actitud llena de modestia, su aireconcentrado, grave... todo anunciaba los senti-mientos de los que rebosaba su corazón y la im-presión profunda que imprimía en él la santidaddel augusto sacrificio que ofrecía a Dios” (p.337).
2. “Si comprendierais los beneficios inmensos de laEucaristía... (p.338). Si supiéramos cuán provecho-sas nos son las visitas al Santísimo Sacramento, es-taríamos continuamente prosternados delante deél” (p. 333).
3. Jesús en la Eucaristíaera su refugio; a sus piesexaminaba lo que debíahacer; nunca tomabauna decisión, ni aún lamenos importante, sinhabérsela encomenda-do al Señor (p. 334).
4. Dar a conocer a Jesu-cristo y hacerlo amares el fin de vuestra vo-cación... el objetivo delInstituto...Toda la cien-cia de la religión con-siste en conocer a Je-sucristo (p. 340).
38
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
JESÚS EN EL CENTRODE NUESTRA VIDA
E L M A N A N T I A L
1. En la comunión especialmente, al unirnos íntima-mente a Jesús, nos hacemos un mismo cuerpo yun mismo espíritu con él, vivimos su vida, nos co-munica su pureza, su humildad, su santidad... en fin,todas las virtudes (pp. 121-123).
2. Iba a la presencia del Santísimo Sacramento a bus-car la solución de todos sus problemas (p. 89).
3. El que ha conocido a Jesucristo... no pude ya pres-tar atención a lo que le gusta o le desagrada... yano piensa más que en permanecer unido a Él (p.134)
4. Acerquémonos a Jesucristo por el conocimiento yel amor, pero sobre todo por la imitación (p. 134)
5. Cuando el H. Francisco volvía de comulgar, irra-diaba una sonrisa extraordinaria por su rostro.“Era algo que parecía cercano a lo sobrenatural,pero que parecía producirse naturalmente” (p62).
6. La vida me sería insoportable si no tuviera nadaque sufrir por el nombre de Jesucristo” (p. 129).
5. Cuando antes de la comunión Marcelino decía:“Este es el cordero de Dios...” teníamos la impre-sión de que estaba viendo a Jesús (p. 290).
E L M A N A N T I A L40 41Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
Los cristianos
son como pintores que deben
copiar a Jesucristo.
Sus ojos deben estar
atentamente aplicados
sobre este divino original,
para reproducir en ellos
mismos los rasgos
de sus virtudes. Hagan
la prueba, y verán muy
pronto que la contemplación
de sus misterios
y el ejemplo de su vida,
como un admirable pincel,
harán de ustedes
una copia perfecta del divino
Salvador (H. Pierre Zind,
Consejos espirituales del
H. Francisco, p 23).
Nos sentimos llamados a
centrar apasionadamente
nuestras vidas y nuestras
comunidades en Jesucristo,
como María (Documento del
XX Capítulo general, art. 18).
43Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
HIJO PRIVILEGIADODE MARÍA
1. Devoción presentedesde la más tiernainfancia (p. 341), quele venía de su madre yde su tía paterna, Lui-sa.
2. En sus largos colo-quios con María, al piede sus altares, com-prendió que Diosquería santificarle (p.341). Precisamente enuna de estas visitas levino la idea de fundarla congregación y dedarle el nombre de laque le había inspirado tal proyecto (p. 342).
3. Ella es la buena madre, el recurso ordinario, la queha hecho todo entre nosotros, la primera supe-riora... Mira a María como a su madre y el caminoque le lleva a Jesús (p. 341).
4. Su divisa era:“Todo a Jesús por María y todo a Ma-ría para Jesús” (p. 341).
5. Todo en el Instituto debe pertenecer a María, to-do debe ser empleado para su gloria (p. 346).
6. Desde 1830, la Salve Regina será cantada todas las
E L M A N A N T I A L42
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
MARÍA, LA BUENA MADRE
1. Nacido en sábado... Muerto en sábado... Su madrele consagra a María cuando no tiene más que cin-co años, luego renueva a menudo esta consagra-ción, incluso en el momento en que se lo entregaa Marcelino Champagnat... Francisco se considerael hijo privilegiado de María (p. 41).
2. El día de la Inmaculada decidí buscar la perfecciónen cada una de mis acciones (p. 46).
3. Vayamos a María con toda confianza, porque nohay nada que ella no pueda lograr ante su divinohijo que es de tal manera suyo que ella disponede él, que usa de su poder como de algo propioy lo aplica a lo que quiere, pues Jesús ama a Ma-ría con tanto amor que es el principio de todo su
poder (p. 44).
4. Rogar a la amable Madrede Dios, estrella del mary mi buena madre, queconduzca ella misma labarca que me ha enco-mendado (p. 46).
5. “Trabajar en formar a Je-sús en nosotros y ennuestros alumnos:Tener para nuestrosHermanos y para nues-tros niños el mismo afec-
to que María por Jesús, escuchar y conservar ennuestro corazón la palabra de Dios como María;llevar como María, una vida oculta” (p. 43).
mañanas para poner la congregación bajo la pro-tección de María y expresarle nuestra confianza(p. 351). El “Acordaos” entre la nieve es uno de losmás hermosos signos de la protección de la Bue-na Madre (p. 352-354).
E L M A N A N T I A L44 45Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
“Del corazón de María
brota la sangre que vivifica
el corazón de Jesús,
y a su vez, del corazón de Jesús
nace la gracia que santifica
el de María” (Gabriel Michel -
Hermano Francisco,
Gabriel Rivat: 60 años
de historia marista, p. 341)
Invito a cada hermano y a cada
comunidad a comenzar
una peregrinación espiritual
que nos refuerce en el carisma
del Fundador, y que dicha gracia
permanezca siempre
en el mundo actual.
Estoy seguro que encontraremos
alguna cosa buena, “para
el cuerpo y para el alma”,
alguna cosa que encienda en
nosotros la pasión por
Champagnat (H. Charles
Howard, S.G., 1989).
47Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SIEMPRE OS HE AMADOTIERNAMENTE...
1. Un padre no ama tan tiernamente a sus hijos co-mo el Padre Champagnat ha amado a sus Herma-nos: “Vosotros sois, mis queridos Hermanos, elobjeto especial de mi solicitud: todos mis anhelos,mis mejores deseos son por vuestra felicidad...”(p. 437).
2. Sabéis que no respiro sino por vosotros,que no hayningún verdadero bien que no pida a Dios paravosotros cada día, que estaría dispuesto a procura-ros, aún a costa de los mayores sacrificios” (p. 438).
E L M A N A N T I A L46
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
YA NO RESPIRO SINO POR VOSOTROS...
1. “Aquí estoy, encargado de dirigir a mis Hermanospara amarlos y cuidar de ellos con entrañas de pa-dre, para ser siempre y en todo lugar su guía y sumodelo...” (H. Francisco: 60 años de historia marista,73)
2. Queridísimos hermanos míos, al descargar sobreotra persona las penosas e importantes tareasque yo ya no puedo cumplir, siento que mi afecto,mi cariño por vosotros y mi solicitud por todo loque suponga el bien del Instituto no disminuiránjamás y que, al contrario, no dejarán de crecermientras el Buen Dios me mantenga en la tierra...En efecto, cuando se ha estado durante 20 años ala cabeza de una Sociedad tan querida y tan en-trañable como la Sociedad de los Hermanitos deMaría, cuando se ha tenido relaciones tan fre-cuentes y tan íntimas, tan agradables con losmiembros que la componen, ¿podría uno olvidar-les? Sí, mis queridos hermanos, os he amado siem-pre tiernamente y os seguiré amando del mismomodo.Sí, vuestro recuerdo será siempre querido a mimemoria y nunca dejaré de ocuparme de vos-otros...” Circular anunciando la elección de su Vicario:Luis María, 1860).
3. Algunas frases que caracterizan la corresponden-cia del H. Francisco:“Le amo a usted, usted sabe que le amo y que noquiero sino su bien”.
“Usted sabe que le quiero mucho y que deseo ar-dientemente su adelanto en la perfección”.“Usted sabe, mi querido hermano, que yo le hequerido siempre con todo afecto” (Hermano Fran-cisco, Gabriel Rivat: 60 años de historia marista, p.215).
3. Una madre no tiene tanta ternura por sus hijoscomo la que él tenía por nosotros” H. Lorenzo (p.336-337).
4. “Os ruego, mis queridos hermanos, con todo elafecto de mi alma y por todo el que vosotros te-néis por mí, que hagáis de modo que la caridadsanta se mantenga siempre entre vosotros.Amaoslos unos a los otros como Jesús os ha amado. Queno haya entre vosotros más que un solo corazóny un mismo espíritu. Que se pueda decir de losHermanitos de María lo que se decía de los pri-meros cristianos: ¡Ved cómo se aman!... Éste es eldeseo más ardiente de mi corazón en estos últi-mos momentos de mi vida” (Testamento Espiritual).
E L M A N A N T I A L48 49Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
Querríamos salvarnos,
pero sin que nos costara nada;
no querríamos arder eternamente
en el infierno, pero querríamos
también tener todas las
comodidades de la tierra.
Querríamos tener el mérito
y la recompensa de la pobreza
sin que nos falte nada;
de la castidad sin mortificarnos;
de la obediencia haciendo lo que
nos da la gana. Consentiríamos
en perseverar en religión siempre
que estemos mejor que en el mundo
y que estemos aquí mucho mejor
que allí. (H. Pierre Zind, Consejos
espirituales del H. Francisco, p 39)
51Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
ALEGRÍA
1. Su carácter era alegre, abierto, fácil, obsequioso yconciliador... “Es tan bueno y sabe arreglar de talmodo las cosas...” (p. 274).
2. Lo que había de más llamativo en el carácter del P.Champagnat es que permanecía siempre el mis-mo. Las contradicciones, las pruebas, las fatigas...nada alteraba la paz de su alma y la serenidad de
E L M A N A N T I A L50
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
ALEGRÍA
1. Nunca vi al siervo de Dios perder la calma propiadel que no busca más que la voluntad de Dios...Ningún accidente ni fracaso le agobiaba... No sedesanimaba nunca, al contrario, cuantas más difi-cultades tenía, más confianza tenía. En los fracasosesperaba el momento de Dios (p. 89). Sin embar-go, estando enfermo, tendrá también momentosde impaciencia.
2. No estéis como en una cárcel cuando estéis conlos alumnos. Tenéis necesidad de tomar recreos.Vale más que los alumnos aprendan un poco me-nos, que amen a los hermanos y se hagan sus ami-gos en vez de que se irriten y crean que los her-manos les tratan con dureza para hacerlos traba-jar (Hermano Francisco, Gabriel Rivat: 60 años de his-toria marista, p. 222).
3. “Ponga atención a estos consejos: No se deje in-vadir por la tristeza, jamás el malhumor y el estartaciturno, sino siempre, ocurra lo que ocurra, ale-gría dulce, gozo santo, ecuanimidad, resignaciónperfecta” (Carta de principios de 1853. Consejos es-pirituales del V. Champagnat p. 35. Pierre Zind). “Tra-te usted de no perder nunca la paz del alma y laalegría del corazón” (Ibid. p. 36). “Sepa que hará us-ted mucho más bien yendo a Dios con alegría,sencillez y confianza, como un niño a su padre, quedejándose dominar por el temor. El temor excesi-vo oprime el corazón y nos hiela en el camino dela perfección” (Ibid. p. 36).
4. Cuando el siervo de Dios veía a un hermano pre-sa de una melancolía obstinada, él, tan grave, llega-ba a cantar una canción humorística y no lo deja-ba hasta haber arrancado una sonrisa y una pala-bra religiosa de confianza (p. 100).
su rostro... Jamás se le vio triste o desanimado... (p.274).
3. Para conservar entre los hermanos esta alegríadel alma y este optimismo dulce y modesto que seesforzaba por inspirarles, el P. Champagnat lespermitía jugar durante los recreos, y prefería ver-los entregarse a juegos inocentes antes que verlosconversar o pasearse. Él mismo jugaba con ellosalgunas veces (p. 278).
4. Durante un viaje que hacía a pie con un hermano,como éste parecía triste... Marcelino no hacía otracosa sino levantar su ánimo e intentar alegrarle...Entonó el Memento, salutis auctor, que cantó solo ycompleto, repitiendo tres veces la estrofa Maria,Mater gratiae..., y buscó un refrigerio para el her-mano (p. 275).
5. El estar tristes corresponde a los demonios, a losreligiosos les toca estar alegres, porque son los hi-jos de Dios... Después del pecado no hay nada tanpeligroso como la tristeza y el malhumor (p. 278).
E L M A N A N T I A L52 53Y E L A R R O Y O
VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
Como ya sabéis,
no es el éxito,
sino el trabajo y la buena
voluntad lo que Dios
recompensa.
Esta es la ventaja
de trabajar por Dios.
Por eso los santos estaban
siempre contentos,
siempre en paz,
siempre alegres.
(H. Pierre Zind, Consejos
espirituales del H. Francisco,
p 75).
1. Para acertar con losalumnos hay que hacerseamar de ellos y hacerserespetar al mismo tiem-po. Cuando los alumnosquieren al hermano queestá con ellos, están con-tentos con él y procuranno causarle disgusto al-guno. Cuando le respe-tan, su sola presencia lesmantiene en el orden ymodera su ligereza y di-sipación naturales. Parahacerse amar hay queamar: hay que estar en-tre los alumnos como unpadre para con ellos. De-ben darse cuenta de quese les ama, que se estáinteresado en todo loque les concierne: salud,tristezas, alegría, trabajo,diversiones... hay que de-mostrar que se está con-tento con ellos y no bus-car más que su bien espi-ritual y corporal. (Her-mano Francisco, Gabriel Ri-vat: 60 años de historiamarista, p. 159).
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HERMANO FRANCISCO
...Y DECÍRSELO
1. Marcelino Champagnat es un educador nato... Elsecreto de su éxito como educador está en lasencillez de relaciones y en la confianza que tieneen sus discípulos (Misión educativa marista, p. 30-31).
2. Para Marcelino el corazón de la misión es “hacerconocer y amar a Jesucristo” (Misión educativa ma-rista, p. 51 y Const. 2).No puedo ver a un niño sin que me asalte el de-seo de enseñarle el catecismo, y de darle a cono-cer cuánto le ama Jesucristo” (Const., 2).
3. “Para educar bien a los niños hay que amarlos, yamarlos a todos por igual” (p. 550).
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SAN MARCELINO
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AMAR A LOS NIÑOS...
2. El H. Avito, sujeto muy inteligente, es nombradoVisitador de las escuelas. Entre otros muchos con-sejos, dictados por la prudencia, el H. Francisco leescribe:“Si hay algo que corregir en las visitas a lasclases, tenga cuidado de no decir delante de losalumnos nada que pueda molestar a los Herma-nos... Ni siquiera reprender o dar avisos a unalumno ante los compañeros, sino hablarle aparte,al corazón, es decir con bondad y dulzura” (Her-mano Francisco, Gabriel Rivat: 60 años de historia ma-rista, p. 140).
3. Francisco era reflexivo y calculador.
4. Hay que vivir con los alumnos: Principio de la pre-sencia (Misión educativa marista, p. 61).
5. Presencia con los aspectos maternales de María(Misión educativa marista, p. 66).“Ella es la Madre detodos los alumnos que acuden a nuestras escuelas”(Carta al H. Bartolomé).
6. Presencia educativa en la que domine el espíritude familia (Misión educativa marista, p. 63).
7. Marcelino es franco y espontáneo.
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SAN MARCELINO
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Quedo con el afecto más
entrañable de mi corazón,
y en unión con vuestras
oraciones, en la capilla,
en la casa y ante la tumba
del P. Champagnat,
vuestro humilde servidor,
H. Francisco. (H. Pierre Zind,
Consejos espirituales del
H. Francisco, p. 25)
Marcelino era conocido por su
sencillez.No había malicia en él. Era
directo, honesto, recogido, y
animaba a sus hermanos a que
desarrollaran las mismas
características.El Fundador no era
ambiguo: lo mismo que la pobreza
caracteriza al franciscano, la
sencillez debiera caracterizar a
cada hermanito de María y, por
tanto, esa virtud tiene que
caracterizar la vida de todos los
que reclaman su carisma (Mensaje
de Seán Sammon, el 6 de junio
de 2004).
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
DIMISIÓN: 1860
Marcelino muere a los 51 años, agotado por el traba-jo y la enfermedad.Escribiendo a los Hermanos de Oceanía, el H. Fran-cisco dice esta frase:“Os extrañaréis sin duda, queridísimos hermanos, de nover escrito el nombre de aquel al que hace poco llamába-mos nuestro Padre y Superior. Hace ya seis meses que elbuen Dios lo ha retirado de este mundo... Su última en-fermedad lo había debilitado de tal modo y postrado queno era más que un esqueleto vivente. Su muerte como suvida fue llena de admiracíon”. Carta del 20 de noviem-bre de 1840.
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MUERTE: 1840
Francisco presenta su dimi-sión a los 52 años a causade su deteriorada salud. ElH. Francisco de Borja, asis-tente general en tiempo delH. Diógenes (1920-1942),dice en un testimonio es-crito: “No es de extrañar quela salud de este modestoobrero del Señor fuera que-brantada e incluso muy deli-cada a los 52 años. Desdehacía mucho tiempo el H.Francisco sufría dolores de ca-beza. Las dificultades, ocupa-ciones y preocupaciones, lasolicitud por todos no le deja-ban un momento de descan-so. Sus jaquecas se hicieron crónicas y alcanzaron talgravedad que solicitó ser descargado del peso del go-bierno del Instituto...” (Cf. Positio super virtutibus, p.611-655).
Sentimiento por su muerteA su muerte... “El reflejo de la gloria del cielo era tanpatente que todos deseaban tocarle con objetos depiedad. Durante todo el domingo el local casi no se va-ció. El P. Rabier, durante la misa mayor había sugeridoque se rezase por el difunto, pero sobre todo el cele-brante se encomendaba a la oración de “un alma tanjusta”.
El día del funeralhacía mucho fríoy había 25 centímetros de nieve...el H. Estratónico estaba presente con otros hermanos,“alegres y reconfortados,con la idea de que estaban asistiendo a los funerales de un santo” (Hermano Francisco, Gabriel Rivat: 60 años de historia ma-rista, p. 370).
Sentimiento por su muerte“El sentimiento del dolor era atemperado por la en-tera convicción que todos tenían de que sus sufri-mientos se habían cambiado por un peso inmenso degloria... Cerca de él la gente se sentía a gusto; le mi-raban... le besaban los pies” (255)“Lloremos a un tierno padre, a un digno superior, a unsanto sacerdote, nuestro apoyo, nuestro guía y nues-tro consuelo... Su muerte como su vida ha estado lle-na de ejemplaridad, y no dudamos de que haya sidopreciosa a los ojos de Dios” (H. Francisco, 257).
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
SAN MARCELINO
CHAMPAGNAT
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VENERABLE
HERMANO FRANCISCO
EL ESPÍRITU HACE A LOS SANTOS
1. De constituciónrobusta: talla 1,79m.
2. En familia, su pa-dre es una pre-sencia fuerte, po-see cierta cultu-ra, socialmentecomprometido.Su madre estápresente en to-do, es decisiva enlos momentosde crisis... Formael corazón de Marcelino.Familia de campesinos, de pequeños comercian-tes, abiertos al compromiso social.
3. Marcelino tiene dificultades en los estudios.
4. Marcelino forma parte de la banda alegre que fre-cuenta la taberna del pueblo.
5. Asume graves responsabilidades a la edad de 27años: coadjutor, fundador...
6. Líder por naturaleza; predomina en él la seguridad,la energía, la acción y el afecto: constructor de ca-sas y de hombres.Tiene el don de la mistad, crea la-zos paternales con los Hermanos Cariño espontá-
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1. De constitución débil: enfermizo...
2. En familia, el padre está como borrado. La madretiene una personalidad influyente, muy espiritual,que pasa al alma de Francisco. Familia enteramen-te campesina. Profundamente cristiana: un herma-no es sacerdote, una hermana lleva cilicio, como lamadre: un sobrino se hace sacerdote...
3. Francisco estudia latín desde los 10 años... Siem-pre será precoz.
4. Parece tener una ascensión espiritual constante,conservando la inocenciabautismal.
5. Asume verdaderas res-ponsabilidades: a los 17años es director de la es-cuela de Boulieu en 1825.
6. Líder intelectual, dado a lareflexión, al retiro y a lacontemplación: consulta-do como hombre de con-sejo y de sabiduría. Seriopor naturaleza, debe culti-var la alegría. Prefiere laacción que le es sugerida.Vive de los lazos de supe-rior a inferior, enfermero a
SI MIRAMOS LAS DIFERENCIAS...
enfermo, pero con ternura. Tiene respeto por lanaturaleza y, diríamos, sentido de la ecología.Vidadiscreta, activa, larga: 72 años.
7. Sensible al detalle, a la regla, al silencio, sin descui-dar el conjunto.
8. Hombre de Regla, de estructuras...
9. Hace la primera síntesis de esta espiritualidad:Circular sobre el espíritu de fe, 1848-1853.Y tra-duce estas ideas en Reglas y Constituciones.
10.Verdadero apóstol. En su discreción, comienza adar cuerpo al sueño de Marcelino:“Todas las dió-cesis del mundo entran en nuestras miras”...
11.Francisco quiere ser “el retrato viviente del Funda-dor”. Funde su corazón en el corazón del Funda-dor... siendo él mismo; admirable, pero diferentede Marcelino.
neo, manifiesto, carácter alegre, procura tambiénser serio. Su vida será activa, densa,... corta.
7. Atento al conjunto sin descuidar el detalle.
8. Hombre del Espíritu, del carisma..., de la novedad.
9. Crea una espiritualidad activa que se adapta a lascircunstancias de la fundación: nada estaba prefijado.
10.Apostolado de conquista: “Todas las diócesis delmundo entran en nuestras miras”...
11.El P. Champagnat formó a Francisco, lo eligió, lo pusoen puestos clave, lo hizo ser jefe... Lo estimó mucho.
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Nuestras Constituciones nos
recuerdan:“el Instituto es un
don del Espíritu Santo a la Iglesia
y es para el mundo una gracia
siempre actual”. Debemos
alegrarnos de los dones recibidos
que son como la herencia
que nos lega nuestro Fundador.
Pero debemos también esforzarnos
para ser más fieles al Padre
Champagnat, a su espíritu y a su
espiritualidad (H. Charles Howard,
S.G., 1989).
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AGARRE UN HACHA...
El H. Juan Pedro Martinol, direc-tor de Boulieu (Ardèche), hizo en1824 una visita a La Valá. Cuandovolvía a su colegio, de madrugadael Venerable Padre le dijo:– Como el cocinero no se ha levantado todavía, tomeesta hogaza que es el pan bendito que me dieron eldomingo en calidad de celebrante de la misa mayor. Lacome de camino para desayunarse.– No, padre mío, replicó el hermano. La llevaré a mishermanos y la comeremos en comunidad muy con-tentos, porque todo lo que viene de la casa madre deLa Valá, nos es precioso, agradable... y nos hace muchobien. Tendré mucho gusto en procurar este placer amis hermanos. Estoy seguro de que van a saltar de ale-gría y de que no hablaremos más que de usted y delos hermanos de la Valá durante la comida.Encantado con tales sentimientos, el Venerable Padrele dijo:– Hermano mío, me está usted haciendo llorar de ale-gría al hablarme así: esos son los sentimientos de es-píritu de familia que deben animar a los Hermanitosde María; conservemos siempre estos sentimientos yeste espíritu y gozaremos de la plenitud de dicha en lavida religiosa. (Avis, Leçons, Sentences: ed. 1927, p. 321-322).
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LO COMEREMOS EN COMUNIDAD...
La primera razón que me invita acreer en su santidad es el permiso,un tanto extraño, que me conce-dió cuando le comuniqué las con-diciones en que habíamos vividodurante el desgraciado año 1854-1855 en Quincié:Me habló así: “Si en el futuro se encuentra usted enuna casa semejante, y se le deja solo en casa durantedías enteros, venga a la casa madre y, si es necesariopara tener el dinero del viaje, agarre un hacha, rompael escritorio del director, tome el dinero que haga fal-ta y venga a verme.”
Otro motivo: En 1860, encontrándome en el Hermita-ge como enfermero provisional, me ocurrió lo siguien-te: El H. Ceferino, de la clase especial, fue operado deamígdalas. La de la izquierda, que había sido cortadademasiado profundamente, provocó una hemorragiaconsiderable, de 4 a 8 de la tarde. Dejando al enfermoal cuidado de otro hermano, fui corriendo a llamar alReverendo Hermano, el cual vino al instante. Me pidióel frasco de ácido sulfúrico y, habiendo tomado un po-co de algodón empapado en el ácido, lo aplicó un ins-tante al exterior del cuello, al lado izquierdo, y al ins-tante cesó la hemorragia. ¿Fue la aplicación del ácido loque hizo cesar la hemorragia o la oración del Supe-rior? Pues se puso a rezar mientras aplicaba el algodónempapado. No lo sé. Lo cierto es que la hemorragia sedetuvo instantáneamente y el enfermo que tenía unsíncope recobró al instante el conocimiento. (Testimo-nio del H. Juventino. Positio super virtutibus, pp. 500-501).
En 1824,La Valá era la
casa madre.El Hermitage
todavía no estaba
construido.
El H. Franciscoserá director
en Boulieu en 1825.
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CARTA
Muy querido Hermano Bartolomé y su querido cola-borador:
Me he alegrado mucho al tener noticias suyas. Estoy muycontento de saber que están bien de salud.Sé también que tienen gran número de niños, o sea, quetendrán un gran número de imitadores de sus virtudes, por-que sus niños se formarán según sean ustedes; según seansus ejemplos así ajustarán ellos su conducta.
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CARTA
Mi querido Hermano:
Me gusta llamarle con es-tas dulces palabras aun-que usted esté alejado denosotros por algún tiem-po, porque usted está to-davía unido a la Sociedad,usted la ama y yo soy to-davía su superior.He recibido su carta conmucha alegría y satisfac-ción. Desearía que me es-cribiera usted para darmenoticias suyas, decirme có-mo se encuentra, cuálesson sus disposiciones, paraque yo pueda serle útil ydarle algunos consejos.Pues le quiero con todo el cariño y pienso con frecuenciaen usted. He rezado mucho por usted. Si hubiera conoci-do antes su dirección, le habría escrito, o tal vez habría idoa verle.Me ha invadido una tristeza enorme y un gran dolor cuan-do he sabido que ya no podré verle en Beaucamps. Cuán-to lamento no haber podido hablarle, consolarle, animarle,y cuántas veces me he dicho a mí mismo: si hubiera podi-do verle, ese Hermano no habría abandonado el Instituto.(p. 52). (Este Hermano volvió a entrar).
Mi querido Hermano:
... la enfermedad del querido H. Acaire me da ocasión derecomendarle vivamente a usted dar abundantemente asus colaboradores lo que necesitan para sobrellevar las fa-tigas de la enseñanza: conservar su salud es la más gran-de economía que usted puede hacer para la Sociedad,siempre dentro de los límites de la Regla, a menos (creoque no tengo necesidad de recordárselo) de necesidad ex-traordinaria que una atención paternal sepa descubrir amenudo, aún antes de que el religioso la haya manifesta-do.... (p. 55)
¡Qué importante es su trabajo y qué sublime! Están conti-nuamente con aquellos de los que Jesús hacía sus delicias,ya que prohibía expresamente a sus discípulos impedir alos niños acercarse a él.Y ustedes, mis queridos amigos, nosolamente no quieren impedírselo, sino que hacen todo loposible para llevarlos a él. ¡Oh!, qué bien recibidos seránpor este divino maestro, este maestro generoso que no de-ja sin recompensa un vaso de agua fresca.
Digan a sus niños que Jesús y María los quieren mucho atodos: a los que son buenos porque se parecen a Jesucris-to, que es infinitamente bueno, y a los que aún no lo son,porque llegarán a serlo. Que la Santísima Virgen los quie-re también, porque es la Madre de todos los niños que es-tán en nuestras escuelas.Díganles asimismo que yo los quiero mucho, que nuncasubo al sagrado altar sin pensar en ustedes y en sus que-ridos niños.¡Cuánto me gustaría tener la dicha de enseñar, de consa-grar de una manera más directa mis desvelos a formar aestos tiernos niños!...
Nuestra Señora del Hermitage, 21 de enero de 1830.Cf. Lettres, p. 53 - Doc 14.
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¿Qué herencia ha dejado Marcelino a sus Hermanos?Ciertamente no una biblioteca de reflexión teológicay religiosa
Su herencia consiste más bien en un corazón genero-so, una pasión por el evangelio de Jesús, mucho senti-do común y un acercamiento práctico a la vida. Dichocon palabras más sencillas: fue un hombre de pasión yde acción.
El Hermitage, construido por el futuro santo y por susprimeros Hermanos nos hace ver algo del carácter ar-diente de este hombre: El edificio hecho con piedrassomeramente talladas revela sus cualidades: fuerza,determinación, constancia...
En el alma de Marcelino había fuego que encendía eiluminaba.
Su acogida era siempre calurosa; era un hombre decorazón, lleno de afecto.
No hay duda, era esta pasión la que hizo del fundadorla persona carismática que conocemos, no solamentepara los jóvenes a los que atrae naturalmente, sino atodos los que se llegan a él.
(Un corazón que no conoce fronteras, p. 93.H. Seán Sammon).
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UN PRAGMÁTICO APASIONADO
Decreto sobre la heroici-dad de su virtudes:“El H. Francisco buscócon todas sus fuerzasser la imagen viva delP. Champagnat, por el amor a la Eucaristía, la imitaciónde la Santísima Virgen, la acción de gracias por los be-neficios recibidos, exhortando a todos a participar deestos mismos sentimientos.
Oculto en Dios, le gustaba el silencio, la humildad, lamodestia: Excelente por la inocencia de su alma y lle-vando la mortificación corporal voluntaria hasta ladisciplina y el cilicio.
Misericordioso, bueno, amable para con todos, sobretodo para con los jóvenes, los pobres, los enfermos,sabía maravillosamente animar, y reconfortar...
En el estado actual... no hay duda sobre el tema de lasvirtudes teologales de Fe, Esperanza y Caridad, tantopara con Dios como para con el prójimo, y tambiénsobre las virtudes cardinales de Prudencia, Justicia,Fortaleza y Templanza y las demás que dependen deellas. El siervo de Dios, H. Francisco, Superior Generaldel Instituto de los Hermanitos de María las ha prac-ticado en grado heroico.
Dado en Roma el 4 de julio de 1968.Card. Benno Gut, Prefecto de la S. C. de Ritos.
EL RETRATO VIVIENTE
H. Francisco:Has vivido tu don a Dios y a tus hermanos y herma-nas con plenitud y generosidad;te pedimos que nos ayudes en el camino del don delamor,de modo que Jesús sea el centro de nuestra viday sea reconocido como Señor por los que viven connosotros.
Tú que has sido la Regla viviente,inspíranos el amor a nuestras Constituciones,como los pobres de Yavé aman tu Ley.
Tú has visto crecer a nuestra familia, extenderse yacoger a numerosas vocaciones.
Ahora que caminamos por el desierto, intercede paraque podamos decir con alegría:“Don de Dios son loshijos de la juventud”.
Tú has sido un excelente enfermero,y has sabido juntar el corazón de una madre con la se-renidad del médico.Hoy te pedimos por...
Francisco, escucha nuestras oraciones.Amen.
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ORACIÓN DE UN HERMANO
Padre Champagnat:Estoy contento de ser uno de tus discípulos.Admito tu ardor en el trabajo,tu amor por los hermanos, por los jóvenes ypor los pobres, tu sólido recto criterio y lasencillez de tu corazón,además de tu amor por María y Jesús,cuyas bondades querrías que descubrieran to-dos.
Tu dinamismo y tu alegría nacían de las horas pasadas ante el Santísimo Sacra-mento.
Marcelino, haz que me parezca un poco a ti,Ayúdame a irradiar alegría y entusiasmo como tú,A amar a nuestra gran familia marista:los hermanos, los jóvenes, los que comparten tu espíritu.
Haz especialmente que crezca en mí el amor por el Se-ñor y por su santa Madre,a la que tú llamabas “Nuestra Buena Madre”.
Te doy gracias por todo lo que has hechoY por el amor que me tienes.
Glorifica al Padre, al Hijo y al Santo Espírituen mi vida y en la de la gran familia marista.Amén
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ORACIÓN DE UN DISCÍPULO
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FRANCISCOGRANDES MOMENTOS DE SU VIDA
1. 1789, 20 mayo, nacimiento en la aldea de Rosey,Marlhes – Francia. En el bautismo recibe los nom-bres de José Benito Marcelino.
2. 1816, julio, es ordenado sacerdote en Lyón – Fran-cia.
3. 1816, el 12 de agosto, llega como coadjutor a LaValá.
4. 1817, el 2 de enero, funda la congregación en LaValá.
5. 1824, construye el Hermitage.
6. 1825, la comunidad se instala en el Hermitage.
7. 1826, enfermedad muy grave de Marcelino.
8. 1836-1838, gestiones en París para la autorizaciónlegal de la Congregación.
9. 1839, enfermedad del fundador.
10. 1840, el 6 de junio, muerte en el Hermitage.
11. 1889-1891, proceso ordinario en Lyón.
12. 1920, Decreto de heroicidad de las virtudes por elpapa Benedicto XV.
13. 1955, el 29 de mayo, beatificación por el papa PíoXII.
14. 1999, el 18 de abril, canonización por el papa JuanPablo II.
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MARCELINO GRANDES MOMENTOS DE SU VIDA
1. 1808, 12 de marzo, nacimiento en la aldea de Mai-sonettes, La Valá. En el bautismo recibe el nombrede Gabriel.
2. 1813, Su madre le consagra a la Virgen María en elsantuario de Valfleury.
3. 1818, 6 de mayo, entrada en la Congregación.Tie-ne diez años.
4. 1819, 8 de septiembre, se compromete con unapromesa de obediencia y toma el nombre deFrancisco, por amor a su madre Francisca Boiron.
5. 1826, emite la profesión perpetua.6. 1839, 12 de octubre, es elegido Director General,
reemplazando a Marcelino.7. 1852 , se convierte en Superior General.8. 1852-1854, Capítulo General: Reglas Comunes,
Constituciones y Reglas de Gobierno.9. 1858, Francisco y el Gobierno General se traslada
a Saint-Genis-Laval.10. 1860, dimite y se retira al Hermitage.11. 1876, ataque de apoplejía. Se le paraliza el lado de-
recho.12. 1881, el 22 de enero muere en el Hermitage.13. 1910-1934, proceso ordinario en Lyón.14. 1968, 4 de julio, Decreto de heroicidad de las vir-
tudes y título de Venerable, por el papa Pablo VI.
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ORACIÓN PARA PEDIRLA BEATIFICACIÓN DEL VENERABLEH. FRANCISCO
Oh Dios que os habéis dignado atraer a la vida religiosa a Gabriel Rivat desde su más tierna infancia, para que llegasea ser uno de los primeros discípulosde san Marcelino Champagnat, y luego su sucesor en el gobierno del Instituto consagrado a la Santísima Virgen, conceded a vuestros servidores,os rogamos, la alegría de ver pronto brillar su nombre entre los de los Beatos.Os pedimos que multipliquéis las gracias a favor de los fieles que piden su intercesión ante vos.Dignaos, oh María, nuestra Buena Madre, apresurar el día en que veamos en los altares al que en la tierra fue vuestro servidor. Amén.
Señor Jesús,miramos a nuestro alrededor
y tomamos conciencia de las enormes necesidadesentre los niños y los jóvenes de hoy.Sabemos que es urgente poder contar
con mensajeros de esperanza,testigos de tu amor.
Te damos gracias, Señor,por tu llamada personal
a desarrollar una vocación de servicio.Te pedimos nos concedas vivir de tal modo
que nuestro testimonio sea fuente de esperanzay aliente, a la vez,
nuevas vocaciones en tu Iglesiaya sea desde el compromiso del laicado,
o desde la vida religiosa o sacerdotal.
Oramospor todos aquellos y aquellas que convocas
a vivir hoy el sueño de Champagnatde evangelizar a niños y jóvenes,
particularmente los más desatendidos.
Te recordamos, de manera especial,a los que llamas a ser hermanos maristas.
Haz que los jóvenes que sientan esta vocación,sean audaces para seguirte con pasión
y generosos para serte fieles.
María, modelo de entrega y fidelidad,¡ruega por ésta, tu Familia!
Presentación y seleción de los textos: H. Giovanni Bigotto, Postulador generalEdita: Instituto de los Hermanos Maristas – Casa General – Roma, septiembre 2004
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