Download - Feldman Sobre Cage

Transcript

Es ampliamente conocida la infuencia del budismo zen en Cage y no lo es menos el lugar que este compositor tuvo enel desarrollo de las vanguardias musicales. En todo caso, sepuede mencionar dos cosas: que fue la fgura ms notable de la -no en vano- llamada vanguardia radical y que incluso a sus !" a#os segu$a liderando la escena vanguardista causando no poca sorpresa, tanto en los Estados %nidos como en Europa. &e todos los compositores clsicos, e incluso de todos los vanguardistas, Cage es el ms infantil en el sentido nietzsc'eano del t(rmino: un m)sico que no de*+ de *ugar, de ampliar los l$mites, alterar las reglas, que no amilanaba su fuerza creadora, que no se resent$a y no permit$a que los conceptos le quitasen libertad ni sensibilidad. ,o s( del grado del compromiso religioso o flos+fco de Cage con el budismo -tengo entendido que nunca se ad'iri+ a las prcticas .en del canto y la meditaci+n/, pero su arte muestra claramente una preeminencia del aspecto l)dico y *ovial que quizs s+lo tenga paralelo con la m)sica de Eri0 1atie -que tambi(n le infuy+ decisivamente/. 2o que quiero decir es que, poniendo entre par(ntesis la metaf$sica del nirv34a -del que se desprenden el ascetismo que ,ietzsc'e criticaba a 1c'open'auer, la meditaci+n, etc./, 'ay en el budismo, por ese mismo distanciamiento con el mundo fenom(nico -sams3ra/, una magn$fca parado*a: la entrega est(tica al mismo. ,o tiene sentido abandonar el mundo -por ilusorio que (ste sea- porque la condici+n 'umana esten todo caso atada a (l. &e 'ec'o, (sta es la diferencia esencial con el nirv34a del 'induismo, que est ms claramente opuesto al sams3ra. 5or eso 'ay en el budismo dos prcticas para olvidar el s$-mismo -atman/ e iluminarse:una ms pasiva, orientada al no 'acer ni pensar, que es la meditaci+n -b'avana/6 y otra ms activa, que consiste en lapermanente entrega, plena e incondicional, a la acci+n que se est realizando en el instante presente. Es por este segundo camino que lo est(tico y las representaciones art$sticas adquieren relevancia, ya que el artista, aun cuando enfatice su no-yo -an3tman/, como 'ac$a Cage con la indeterminaci+n y la aleatoriedad, y precisamente por eso, se entrega plenamente, sin reservas ni imposiciones sub*etivas, al *uego del arte. El 7uda volvi+ sobre las representaciones dramticas. Cage se entrega a la m)sica, que, seg)n su c(lebre defnici+n, lo es todo.Este apartarse del mundo cotidiano, donde predomina la certeza que acompa#a a nuestra percepci+n sensible, supone en s$ mismo una actitud est(tica antes que una moral o religiosa. &e lo que se trata es de aprender a *ugar con lo que 'ay en este mundo, *ugar con las representaciones. 8ugar signifca relativizar las creencias que sobre (l se asientan como certezas -como si fuese la realidad ob*etiva/. El arte y la actitud est(tica que (ste preferentemente despierta afectan a nuestro modo de comprender la vida y el mundo, as$ como a nuestra manera de vivirla. 5ero no podemos, en cuanto al budismo, de*ar delado aquello que pusimos entre par(ntesis6 esto es, su metaf$sica, porque es precisamente por ella que (ste vuelvepositivamente sobre el mundo. Como con el cristianismo de 8es)s, el budismo cree que la realidad ob*etiva est fuera del mundo y logra as$ la felicidad en el mundo. Eso y s+lo eso es lo que en el fondo signifca la frase de 8es)s: tu fe te'a salvado. -1e trata, adems, de fe y no de un conocimiento teol+gico que para buena parte de la tradici+n*ud$a est vedado/. El sufrimiento, la enfermedad y la muerte, as$ como la obsesi+n por las posesiones materiales,pierden su peso ob*etivo porque el mundo en el que vivimosno es real. Esa raz+n no la acepta ,ietzsc'e. 9 con esto se quiere decir que 'ay matices importantes por los que, fnalmente, se distancian el budismo y el ni'ilismo activo. 1ibien el budismo se cuida de los dogmatismos teniendo en cuenta la impermanencia -anitya/ y la insustancialidad -an3tman/, que son modos de colocar todos los fen+menos en el devenir, esto, para ,ietzsc'e, no *ustifca ni se desprende de la e:istencia de una suerte de sustancia incondicionada fuera del mundo -el nirv3na/. En eso, el budismo sigue siendo una religi+n celestial. 5or irreligioso que se le pretenda, esa es su divinidad. En cambio, por mspiedad o religiosidad que se quiera 'allar en el pensamientode ,ietzsc'e, (sta no de*a de serlo en todo caso como una fdelidad a la tierra: los dioses s+lo estn en ella, y en buena cuenta el traba*o de ,ietzsc'e es un intento por restituir una espiritualidad que no se ena*ene del mundo, dela vida, de la sensibilidad, asumiendo la ausencia de un suelo metaf$sico, incluso si (ste tiene forma de ,ada -o de signo de interrogaci+n, como en el agnosticismo contemporneo que ,ietzsc'e previ+ y critic+ tambi(n/. Elloimplica asumir que ni siquiera 'ay apariencias, puesto que la divisi+n misma entre realidad y apariencia 'a sido disuelta. ,o es que todo entre en un relativismo donde tododa igual, que es lo que piensa el cristiano desesperado -a lo&ostoievs0y/. El punto es de*ar de pretender que nuestras valoraciones sean, de un modo u otro, inmunes a la fuerza transvaloradora que es la vida misma. 5ero, si nos enfocamos s+lo en lo epistemol+gico, perderemos de vista el aspecto que podemos llamar e:istencial, que es al que ,ietzsc'e le da importancia decisiva. El ni'ilismo activo supone una aceptaci+n radical de la vida, de todo lo que ella ofrece, incluyendo lo feo y lo malo, incluyendo a nuestros deseos e incluyendo al sufrimiento. 5or eso, a partir de un poema de 2ou von 1alom( que (l musicaliz+ -;imno a la vida/, escribe: El dolor no es considerado como una ob*eci+n contra la vida: a)n tienes tu sufrimiento?@ -Ecce ;omo/. El budismo, en cambio, de*a en el propio mundo fenom(nico algo a lo que le da una valoraci+n distinta, ob*etiva a pesar de todo: el sufrimiento.&e cualquier modo, no es la supresi+n del sufrimiento lo que resalta en el arte musical de Cage. 1$, en todo caso, la supresi+n del yo, de la voluntad sub*etiva. En principio, ,ietzsc'e se opone a este tipo de despersonalizaci+n, de desapego -ne00'amma/. 1e opone a esa pretensi+n de desinter(s -como la 0antiana/ porque la aceptaci+n de la vida implica aceptar tambi(n los deseos personales6 es decir, la voluntad de poder en tanto que ella pueda manifestarse sub*etivamente, ,egar la sub*etividad es otro modo de negar la vida. 5ero 'ay que tener en cuenta dos cosas: 5rimero, que la ontolog$a trgica de ,ietzsc'e no requiere una metaf$sica de la sub*etividad, como pretend$a ;eidegger, sino que parte ms bien de una cr$tica del sub*etivismo moderno, fundamentalmente el ego cartesiano. Aue ,ietzsc'e mantenga una sub*etividad emp$rica -est(tica- no supone una aceptaci+n de ese su*eto moderno. 1egundo, que el no-yo del budismo no implica tampoco una supresi+n de la personalidad, de la consideraci+n sub*etiva que, a fnal de cuentas, es por la que actuamos en el mundo. Esta es, por lo tanto, s+lo una cuesti+n de matices muy sutiles. El no-yo del budismo, al menos en el terreno del arte, como lo muestra tambi(n su infuencia sobre el m(todo de direcci+n de orquesta de 1ergiu Celibidac'e, es ms que nada un asunto de ampliaci+n de la percepci+n, de renovaci+n de sentidos, en tanto que representaci+n-desrepresentacional. Cuando ,ietzsc'e va en contra de la determinaci+n conceptual de la m)sica -que es lo que 'ace Bagner en contra de 1c'open'auer y siguiendo a 7eet'oven y a ;egel-, no va enuna l$nea muy distinta. Claro, podr$a quizs ob*etarse que Cage es un artista conceptual. 5ero (ste es un malentendido fomentado por los artistas y los te+ricos del arte idealistas que, en su reducido esquema, piensan que todo arte de vanguardia es arte conceptual. Corton Deldman, compositor y amigo muy cercano de Cage, lo ten$a claro:2a relaci+n de Cage con &uc'amp 'a sido completamente malinterpretada. 1on las dos caras de la moneda. E...F son opuestos. 5or e*emplo, el inter(s que suscit+ &uc'amp en tanta gente *oven se debe a que llev+ la e:periencia fuera del o*o, fuera de la retina, y la convirti+ en un concepto. Cage la sac+ fuera del aspecto conceptual desinteresado por lo auditivo que primaba en el pasado y la puso directamente en el o$do. Eso es absolutamente diferente, Gse entiendeH ;asta donde yo s(, el ms grande &uc'amp musical fue 7eet'oven -Driedman, 7. ;. -ed./, Iive Cy Jegards to Eig't' 1treet. Collected Britings of Corton Deldman, Cambridge: E:act C'ange, K"""/.LMNNMM, en contra de lo que algunos m)sicos y te+ricos, generalmente cr$ticos pero tambi(n adeptos, creen, no es una obra de arte conceptual. Es, si se quiere, una obra de arte perceptiva, que nos devuelve al o$do y nos lo ensanc'ao, para ser ms precisos, lo 'ace ms fno. 1on dos cosas bien distintas y que 'ay que saber distinguir para no confundir la l$nea idealista del arte con la propiamente est(tica, la que es ms bien vitalista, tambi(n en el sentido nietzsc'eano del t(rmino. Auien corresponde a &uc'amp en la m)sica no es Cage, sino, como afrma el mismo Deldman, 5ierre 7oulez: los dos E&uc'amp y 7oulezF coinciden en que lo que se ve o lo que se escuc'a no es tanimportante como la instancia 'ist+rica que le dio lugar -$dem/. 5or eso los 'istoriadores del arte entran en (:tasis con &uc'amp. 5or eso el dictum de 7oulez no es el todo esm)sica de Cage, sino su 1c'Onberg 'a muerto. Es con la 'istoria con la que se miden. Duera de ella, s+lo generan bostezos.Auiero llamar la atenci+n, para fnalizar, sobre un )ltimo punto a prop+sito de Cage y el budismo que Deldman e:presa como su )nica discrepancia con (l. 1e trata precisamente de la m:ima de Cage que est detrs del todo es m)sica6 a saber: el proceso deber$a imitar a la naturaleza en su manera de operar. Deldman observa, acertadamente, que 'ay una decisi+n impl$cita en permitir que todo sea arte. ;ay, dir$amos, una afrmaci+n que es de todos modos sub*etiva. Deldman, que es tambi(n seguidor del budismo, se refere a un acerti*o zen: GPiene un perro lanaturaleza de 7udaH Jesponda de una o de otra manera, usted pierde su propia naturaleza de 7uda. Q lo que apuntaDeldman es que el budismo zen, sobre todo en lo que toca ala divinidad -la naturaleza/, e:'orta a mantenerse en la suspensi+n del *uicio: mantenernos en suspenso, vacilantes, entre las dos respuestas posibles. ,unca, a riesgo de perder nuestra propia divinidad, nos est permitido decidir. Ci desacuerdo con Cage es que (l decidi+ -$dem/. &e*emos el asunto de qui(n es me*or budista a los especialistas, que se divierten con este tipo decuestiones. ,osotros podemos concederle a Deldman dos cosas: R/ Cage decide y apuesta por una respuesta. K/ 2as decisiones de Cage contradicen, en cierto modo, la indeterminaci+n budista. 1obre K/, diremos que las contradicciones no tendr$an que ser una ob*eci+n demasiado seria sobre una fe que es abiertamente parad+*ica. Cage tambi(n es parad+*ico. 9 ,ietzsc'e tiene asimismo afrmaciones parad+*icas. Iuiarse por el principio de identidad o de no-contradicci+n es algo que correspondeen el budismo a la duplicidad enga#osa -m3y3/. ,ietzsc'e alza armas tambi(n contra ese principio: la vida no tiene por qu( ser co'erente. 9, respecto a R/, si el budismo implica un estricto estado de suspenso, como el de la meditaci+n, lo ms adecuado ser$a mantenerse en silencio -como 'acen quienes meditan/. 5ero eso es enga#oso precisamente en el sentido en que Cage lo 'ace manifesto con LMNNMM: no 'ay silencio. Podo es m)sica. Juido y silencio es m)sica. 2a vida es m)sica, dir$a ,ietzsc'e. Poda verdad es en el fondo m)sica. Podo en la mu*er que se ama es m)sica. 2a m)sica est as$ en un permanente devenir que se nos escapa una y otra vez, y en el que el artista es comoel danzante que simplemente agarra el ritmo -y que en ese mismo sentido lo transforma/. 1e 'a visto que 'ay otro camino en el propio budismo, uno que lleva a abrazar la acci+n que se est 'aciendo. Este es un camino afrmativo del desasimiento, del desapego, parad+*icamente, apegndose. 9 si esto fuese en defnitiva salir del budismo, =tanto me*or> 5orque lo que pretende Deldman es *ustamente lo que ,ietzsc'e califca como cansancio, d(cadence, ni'ilismo pasivo. 1e medita y se recurre a lo mental cuando la voluntad est cansada, enferma. &i*imos antes que, para ,ietzsc'e, la diferencia )ltima estriba en decidir, en apostar, en afrmar parad+*icamente. 5ues bien, la discrepancia de Deldman no 'ar$a sino confrmarnos que Cage es alguien que no est cansado6 que es un ni#o, un ni'ilista activo.