1. Orgenes de los Mosaicos Los mosaicos ms antiguos que se
conocen datan del siglo VIII a.C. y se hacan de guijarros, una
tcnica que fue perfeccionada por los artesanos griegos en el siglo
V a.C. Los guijarros son uniformes y su espectro de color vara
entre el blanco y el negro. Estos guijarros se juntaban y se
colocaban, sin ser perfeccionadas, en mosaicos sobre suelos y
aceras.
2. El Mosaico en la antigedad En la Antigedad la tcnica de
colocacin de mosaicos se utilizaba principalmente en suelos y
aceras. El principal motivo por el que se utilizaban era su
durabilidad y resistencia. Las piedras, en particular el mrmol y la
piedra caliza, resultaban adecuadas especialmente para la
elaboracin de mosaicos.
3. Forma y fabricacin Las piedrecitas de mosaico tienen
normalmente forma de pequeos cuadrados o tringulos y se unen para
componer cuadros en mosaico. Se suelen colocar sobre todo con
mortero u otro adhesivo en la parte exterior de un muro o en el
suelo (adhesivo de baldosas o adhesivo para gres). Tambin
encontramos cada vez con mayor frecuencia mosaicos integrados en
muebles, por ejemplo en mesas de jardn y de saln, as como en
puertas o mostradores comerciales en hoteles y restaurantes. Cada
una de las piedras de un mosaico es en s pequea e insignificante.
Slo cuando est
4. Forma artstica Los mosaicos pueden compararse lo que ms con
la pintura. Con ellos se crean diseos o cuadros bidimensionales. Al
igual que en la pintura, se pueden elaborar con ellos grandes
superficies decorativas, a pesar de que el colocador de mosaicos se
encuentra limitado, en cuanto a la seleccin de colores, por las
propiedades naturales del material que emplea.
5. Reflexin de la luz El tipo de reflexin de la luz produce un
brillo de color que no puede alcanzarse con imgenes pintadas o
impresas. El mosaico resulta especialmente ventajoso cuando ha de
mantenerse durante mucho tiempo una imagen valiosa que est sometida
a una fuerte inclemencia, ya sea debido al clima o al trnsito de
personas.
6. Mosaico en el tiempo Son cuadros para la eternidad, siempre
y cuando sean colocados en lugares y objetos destinados tambin para
la eternidad. Como elemento decorativo de una casa ofrece la
posibilidad de tener una fachada que nunca pierde el color y que no
tendr que ser pintada de nuevo.