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CINADE
CENTRO DE INVESTIGACIÓN PARA LA
ADMINISTRACIÓN EDUCATIVA
DOCTORADO EN GESTIÓN EDUCATIVA
SEGUNDO SEMESTRE
MODALIDADES ALTERNATIVAS DE
APRENDIZAJEENSAYO
“APRENDIZAJE ORIENTADO A PROYECTOS”
Autor:
Mtro. Eduardo Serrano Camarillo
Hablar sobre el Aprendizaje basado en Proyectos además de ser un proyecto para
la mejora educativa involucra una gran parte de reflexión para los docentes, al
lograr identificarlo como un modelo una herramienta que promueve que los
estudiantes y maestros actúen en base al diseño de proyectos elaborándolos con
estrategias para brindar nuevos resultados y cumplir con los objetivos curriculares
que se nos van presentando a lo largo del tiempo.
Es importante recordar que nosotros estamos capacitados para desarrollar y
planear frente al tipo de competencias y aprendizajes que incluso el proyecto
curricular nos maneja, para empezar, considero que no se puede llevar a cabo un
plan o proyecto en la escuela, o tan solo en una misma aula si no se conoce antes
las necesidades que el grupo o la escuela necesitan. La preocupación central de la
educación es en el análisis de por qué, a pesar de los múltiples esfuerzos que se
hacen para desarrollar herramientas de estudio efectivas en poblaciones de
alumnos de distintos niveles, estos fracasan con frecuencia. Se parte de la
premisa de que esto ocurre así porque en dichos esfuerzos se observa un
desconocimiento de los procesos cognitivos, efectivos y meta-cognitivos
implicados en el aprendizaje significativo y sobre todo, en nuestra “forma de
enseñar”. Uno de los objetivos más valorados y perseguidos dentro de la
educación a través de las épocas, es la de ensañar a los alumnos a que se
vuelvan aprendices autónomos, independientes y autorregulados, capaces de
aprender a aprender. Esta, implica la capacidad de reflexionar en la forma en que
se aprende y actuar en consecuencia, autorregulando el propio proceso de
aprendizaje. (Estrategias para el aprendizaje significativo: fundamentos
adquisición y modelos de intervención.)
Por esto mismo el Aprendizaje Orientado a Proyectos (AOP) además de
considerarse como una técnica didáctica es considerada como una metodología
de aprendizaje basado valga la redundancia en proyectos donde los alumnos
logren trabajar colaborativamente, y así planifiquen, creen y evalúen de manera
que todos respondan a las necesidades planteadas en una determinada situación.
Más que nada es una forma de emplear y mejorar lo que es el trabajo colaborativo
respetando distintas ideas, y pensamientos de los mismos.
El Aprendizaje Orientado en Proyectos apoya a los estudiantes a adquirir
conocimientos y habilidades básicas para afrontarlos a resolver problemas y llevar
a cabo tareas que para ellos en algún momentos se les hicieron difíciles. Incluso
problemas que en el exterior se les presentan y deben afrontar y saber resolverlos.
(Piaget, y Vygotsky,) sostienen que las personas construimos el aprendizaje a
partir de los conocimientos y las experiencias de los que ya disponemos y, en
muchas ocasiones, a través de la participación activa y de la interacción con los
demás. Por eso es que es muy importante aportar ideas que lleven al desarrollo
de proyectos, proyectos que se crean desde objetivos como hasta de una serie de
pasos para que esté, este de
una forma lo más organizada
posible, la finalidad del estudio
que se establece en estos
proyectos es demostrar que el
uso del Aprendizaje Orientado
a Proyecto logra ser un alto
desempeño integral en los
procesos de enseñanza-aprendizaje.
Morales (2007) afirma que una enseñanza centrada en el aprendizaje supone
para el alumno un papel más activo, un mayor compromiso y responsabilidad por
su propio aprendizaje y un enfoque profundo en su estilo de aprendizaje.
En la lectura, Miguel (2005) nos menciona ciertas capacidades que un proyecto
como tal debe cumplir para considerarse aceptable y favorable tales como partir
del análisis, la investigación, tener un pensamiento crítico, tener toma de
decisiones y llevar a cabo cierto proyecto por medio de una planificación y
organización, entre otras. La importancia de la planificación radica para un uso
efectivo del tiempo y priorizar la tarea pedagógica por encima de las actividades
administrativas que interrumpen el proceso y dispersan el trabajo educativo.
Araujo; (2009). Al momento de planificar es importante que el docente seleccione
y diseñe actividades más acordes de acuerdo a las situaciones de aprendizaje que
haya identificado en sus alumnos. A su vez se nos mencionan algunas
características que es importante recordar y tomar en cuenta a la hora de poner en
práctica la técnica de AOP. Por lo que considero que sin estas características no
sería un proyecto funcional. Tales como:
1. Ser una metodología centrada en el alumno.
2. Ser un planteamiento real. Favoreciendo así la motivación de los alumnos.
3. Ser una técnica favorecedora hacia el compromiso de los alumnos en su
aprendizaje.
4. Y ser una técnica que ofrece al estudiante la posibilidad implementar más sus
conocimientos previos.
En la actualidad los alumnos necesitan sentirse apoyados en este tipo de
procesos que puede emplear el profesor o la misma escuela. Para que con mayor
facilidad puedan elaborar, comprender y crear sus distintas actividades. Pero
hablar solo de las actividades que uno emplea en la escuela no lo es todo para
declarar si tu trabajo está bien realizado o no, una buena educación está basada
desde el ambiente donde estamos involucrados a desarrollar nuestra educación,
parte desde nuestro contexto, involucrando la familia, el modo de socialización que
llevamos con la gente de nuestra comunidad etc. etc. que es lo que debemos
tomar en cuenta para radicar hacia un proyecto escolar favorecedor para los
educandos.
Se pretende que con la técnica AOP logre un proceso de aprendizaje continuo,
siendo orientado por el docente, una vez aplicando esto uno como profesor
lograremos que los alumnos puedan cumplir con los objetivos previstos que desde
un principio son planteados por los docentes.
La potencia de esta técnica de aprendizaje reside no solo en los aprendizajes
conceptuales que logran los alumnos, sino también en las habilidades y destrezas
que han de poner en práctica. Aprendizaje Orientado a proyectos. Servicio de
Innovación Educativa (UPM) (2008)
Así mismo esta técnica no solo favorece al estudiante, en mejores casos también
ve por el profesorado, pues ofrece a los profesores la posibilidad de trabajar en
equipo estando también en continuo aprendizaje y en un crecimiento de mejora.
El método de aprendizaje orientado a proyectos (AOP) podemos decir que surge
de una visión educativa como mejora educacional en la que los estudiantes deben
de hacerse más responsables de su propio aprendizaje y lograr aplicar esos
aprendizajes en proyectos reales con sus propias habilidades y poner en jugo los
conocimientos adquiridos en el salón de clases.
Entonces podemos decir que la técnica AOP como tal se enfoca en un problema
que debe ser resuelto o en una tarea que debe ser completada.
En este último caso nos
referimos a que esta técnica
forma parte de un aspecto
innovador enfocado al trabajo
académico. Podemos expresar
como conclusión dos aspectos
importantes: a) existe una alta
aceptación de la estrategia para
la integración de la misma en el
aula, y b) se tiene conocimiento y gestión del aprendizaje colaborativo por el
alumno.
Considero que para elaborar un proyecto debemos distinguir un estudio de caso
donde se toma en cuenta tres fases: preparación, desarrollo y evaluación, que nos
llevan a hacer un gran proceso de tal proyecto. Ya que en el AOP involucra a los
estudiantes en proyectos complejos del mundo real, y se enfoca en los conceptos
y principios de una o varias disciplinas para la solución de problemas u otras
tareas significativas.
El trabajar con proyectos puede cambiar las relaciones entre los maestros y los
estudiantes. Puede también reducir la competencia entre los alumnos y permitir a
los estudiantes colaborar, más que trabajar unos contra otros. Además, los
proyectos pueden cambiar el enfoque del aprendizaje, la puede llevar de la simple
memorización de hechos a la exploración de ideas. Por lo tanto emplear este tipo
de proyectos en una escuela puede ser un tanto arriesgado no por su aplicación si
no por el resultado que se logren en los alumnos y los mismos maestros. El
desarrollo de proyectos, así como el desarrollo de solución de problemas, son por
consecuencias observables afectando al aprendizaje educativo, es por eso que
consideran al conocimiento y la aplicación de los contenidos como una disciplina
para resolver problemas prácticos o desarrollar proyectos de cambio para la
sociedad, y como tal es considerado un aprendizaje necesario para los alumnos.
BIBLIOGRAFÍA
ARAUJO, Betty. (2009). Planificación y ciclo de aprendizaje. Quito. Editorial
Santillana.
Aprendizaje Orientado a Proyectos. Servicio de Innovación Educativa de la
Universidad Politécnica de Madrid
DÍAZ-BARRIGA A. FRIDA, GERARDO HERNÁNDEZ ROJAS (2002). “Estrategias
para el aprendizaje significativo: Fundamentos, adquisición y modelos de
intervención”. En: Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. Una
interpretación constructivista. McGraw-Hill, México, pp.231-249.
CINADE
La educación tradicional, favorecida por los modelos sociopolíticos
convencionales, lejos de favorecer se ha empeñado en exaltar los logros
individuales y la competencia, por encima del trabajo en equipo y la colaboración;
esta realidad, tal como lo señala Díaz Barriga se evidencia no sólo en el currículo,
CENTRO DE INVESTIGACIÓN PARA LA
ADMINISTRACIÓN EDUCATIVA
DOCTORADO EN GESTIÓN EDUCATIVA
SEGUNDO SEMESTRE
MODALIDADES ALTERNATIVAS DE APRENDIZAJE
ENSAYO
“APRENDIZAJE COLABORATIVO”
Autor:
Mtro. Eduardo Serrano Camarillo
el trabajo en clase y la evaluación, sino en el pensamiento y la acción del docente
y sus alumnos.
Al hablar de aprendizaje colaborativo no se debe confundir con los trabajos en
grupo, que han sido práctica convencional en los diferentes niveles y modalidades
del sistema educativo ya que ello no implica que sea ésta una práctica
verdaderamente cooperativa.
En el aprendizaje colaborativo cada participante asume su propio ritmo y
potencialidades, impregnando la actividad de autonomía, pero cada uno
comprende la necesidad de aportar lo mejor de sí al grupo para lograr un resultado
sinérgico, al que ninguno accedería por sus propios medios; se logra así una
relación de interdependencia que favorece los procesos individuales de
crecimiento y desarrollo, las relaciones interpersonales y la productividad. Del
grupo al equipo, hay un tránsito, cuyo valor agregado es la cooperación, pero
muchas veces los mismos docentes desconocen cómo producir este logro y
orientar las actividades de aprendizaje en esa dirección.
A continuación se hace referencia al aprendizaje colaborativo para conocer más
acerca de esta propuesta pedagógica y podamos aplicarlo en nuestra práctica
pedagógica.
Aprendizaje colaborativo
Linares Garriga, expone que el contexto actual de la sociedad de consumo no
favorece a los valores de cooperación y ayuda ni las actitudes altruistas y
prosociales. Así mismo la sociedad, hoy en día, empuja al individuo a competir con
sus semejantes por la consecución de metas cada vez más elevadas, se fomenta
la competitividad tanto por parte de las familias, que esperan el éxito escolar,
como por parte de la propia escuela donde se trabaja la mayor parte del tiempo de
forma individual. Por otro lado, socialmente cada vez es mayor la exigencia de
personas capaces de trabajar en grupo y de mantener relaciones positivas y
fluidas con sus semejantes. Hasta el punto que una persona corre el riesgo de no
incorporarse al mercado laboral si no es mínimamente competente para
relacionarse y colaborar con otros.
El sistema educativo como generador de factores de socialización no solo debe
incorporar dentro del currículo el aprendizaje de habilidades de relación social,
sino que, para que el individuo aprenda a cooperar de manera eficaz debe
organizar de forma cooperativa los centros escolares y muy especialmente sus
aulas, ya que en ocasiones se asocia el aprender en grupo a la pérdida de tiempo
de algunos alumnos que se amparan o se sirven del trabajo de los compañeros
más aventajados. Por otra parte también se achaca el que los compañeros
“buenos” tengan que perder el tiempo en las ayudas, explicaciones o además en
hacerles el trabajo a sus compañeros.
Pero para lograr esto primeramente debemos entender ¿Qué es el Aprendizaje
Colaborativo?, la literatura nos presenta múltiples definiciones en torno a este
término, que se han desarrollado y gestado a través de distintas vertientes que
buscan aproximarse a su significado, entre las cuales están:
El aprendizaje colaborativo es una técnica didáctica que promueve el
aprendizaje centrado en el alumno basando el trabajo en pequeños grupos
donde los estudiantes con diferentes niveles de habilidades utilizan una
variedad de actividades de aprendizaje para mejorar su entendimiento
sobre una materia.
Son estrategias sistematizadas de instrucción que presentan dos
características generales: la división del grupo de clase en pequeños
grupos heterogéneos que sean representativos de la población general del
aula y la creación de sistemas de interdependencia positiva mediante
estructuras de tarea y recompensas específicas (Serrano y Calvo,1994)
Para Panitz (1997), la premisa básica del aprendizaje colaborativo es la
construcción del consenso, a través de la cooperación de los miembros del
grupo. Señala que en el aprendizaje colaborativo se comparte la autoridad y
entre todos se acepta la responsabilidad de las acciones del grupo;
mientras que en la cooperación la interacción está diseñada para facilitar el
logro de una meta o producto final específico por un grupo de personas que
trabajan juntas.
Gros, 2000 agrega que en un proceso de aprendizaje colaborativo, las
partes se comprometen a aprender algo juntos. Lo que debe ser aprendido
sólo puede conseguirse si el trabajo del grupo es realizado en colaboración.
Es el grupo el que decide cómo realizar la tarea, qué procedimientos
adoptar, cómo dividir el trabajo, las tareas a realizar.
Existe una inmensidad de definiciones acerca del aprendizaje colaborativo,
algunos autores la exponen como una herramienta metodológica, otros como una
nueva forma para favorecer el aprendizaje o también como una condición para
que el desarrollo de capacidades se pueda dar. Si analizamos cada una de las
definiciones se puede apreciar que el aprendizaje colaborativo es un sistema de
aprendizaje en la que la finalidad del producto académico no es exclusiva, sino
que se desplaza aquella en busca de la mejora de las propias relaciones sociales,
donde para alcanzar tanto los objetivos académicos como las relaciones se
enfatiza la interacción grupal. Se utiliza los métodos grupales no solo con fines de
socialización sino también de adquisición y consolidación de conocimientos,
aprender a cooperar y aprender a través de la cooperación, pero se podría añadir
para aprender más y mejor.
Pero para que se pueda llevar a cabo un aprendizaje cooperativo se deben reunir
ciertas condiciones, y entre las principales estaría que la actividad que se
programa para que se aprenda cooperativamente sea pertinente para hacerla en
grupo. Además debe ser planificado con claridad el trabajo a realizar, así como la
participación exigida y el resultado logrado por cada miembro del grupo. Se debe
planificar con detalle las actividades o experiencias a realizar, no basta con poner
juntos a un grupo de alumnos para que cooperen. Todos sabemos el tiempo que
se pierde cuando la razón por la que un grupo de personas se juntan no es clara.
Además para cooperar, trabajar en grupo es necesario desarrollar una serie de
habilidades que la hagan posible. Deben desarrollarse una serie de habilidades
que lo hagan posible tales como saber escuchar, respetar el turno, entender y
aceptar opiniones de los otros, saber preguntar, saber discrepar. De igual manera
los estudiantes deben estar comprometidos en el proceso de aprendizaje y deben
ser responsables por el aprendizaje, motivados y estar abiertos a escuchar las
ideas de los demás y articularlas efectivamente.
De acuerdo a lo que hasta este momento se ha expuesto, se puede apreciar que
el trabajo cooperativo es algo más que la pequeña suma de trabajos individuales
de los miembros de un equipo; no se trata de sustituir el trabajo individual
realizado por cada alumno en su pupitre en solitario por el trabajo de grupo, sino
que debe substituirse el trabajo individual en solitario por el trabajo realizado de
forma cooperativa dentro de un equipo. Por lo tanto para que se dé una
cooperación efectiva debe haber una interdependencia genuina entre los
estudiantes que están colaborando. Esta dependencia se describe como la
necesidad de compartir información, llevando a entender conceptos y obtener
conclusiones, la necesidad de dividir el trabajo en roles complementarios y la
necesidad de compartir el conocimiento en términos explícitos.
Para que la cooperación funcione bien, hay cinco elementos esenciales:
1. Interdependencia positiva, los miembros de un grupo deben tener claro que
los esfuerzos de cada integrante no solo benefician a él mismo si no
también a los demás miembros. Por tanto suponen un compromiso con el
éxito de otras personas, además del propio.
2. Responsabilidad individual, cada miembro será responsable de cumplir con
la parte del trabajo que le corresponda.
3. La interacción, esta preferentemente será cara a cara, los alumnos deben
realizar juntos una labor, compartiendo los recursos existentes y
ayudándose, respaldándose, alentándose y felicitándose unos a otros por
su empeño a aprender.
4. Habilidades interpersonales y grupales, el aprendizaje cooperativo es más
complejo que el aprendizaje individualista y el aprendizaje competitivo
porque requiere que los alumnos aprendan tanto las materias como las
prácticas interpersonales necesarias para funcionar como grupo. Así los
miembros del grupo deben saber cómo ejercer la dirección, tomar
decisiones, crear un clima de confianza, comunicarse y manejar los
conflictos y deben sentirse motivados para hacerlo.
5. Evaluación grupal, los miembros del grupo deben analizar en qué medida
estaña alcanzando sus metas y manteniendo relaciones de trabajo
eficaces. Los grupos deben determinar que acciones de sus miembros son
positivas o negativas y tomar decisiones acerca de que conductas
conservar o modificar.
Una de las preguntas que es necesario plantearse sería ¿Es conveniente el
aprendizaje cooperativo? Y de acuerdo a las múltiples investigaciones que se han
realizado se puede rescatar de los resultados lo siguiente: 1) La cooperación
conduce a manifestar un rendimiento más elevado por parte de todos los alumnos,
mayor motivación para lograr un alto rendimiento, más tiempo dedicado a las
tareas, un nivel superior de razonamiento y pensamiento crítico. 2) La cooperación
da lugar a unas relaciones más positivas entre los alumnos, relaciones solidarias y
comprometidas. 3) La cooperación produce mayor integración social, mejora la
autoestima individual y refuerza la capacidad para enfrentar la adversidad y las
tensiones. De acuerdo a lo expuesto se puede decir que si se utiliza de manera
adecuado el aprendizaje colaborativo es pertinente utilizarlo.
El docente puede emplear diferentes métodos para implementar el aprendizaje
cooperativo en su clase, alguno de ellos son: Tomar notas en pares, hacer
resúmenes junto con sus compañero, leer y explicar en pares, redactar y corregir
cooperativamente en pares, ejercitar o repasar lecciones en pares, resolver
problemas en pares, debates escolares, investigación en grupo, etc. Existen
diferentes métodos que le permitirán al docente alcanzar varias metas, en primer
lugar elevar el rendimiento de todos sus alumnos; en segundo lugar establecer las
relaciones positivas entre los alumnos, en tercer lugar proporcionar a los alumnos
las experiencias que necesitan para lograr un saludable desarrollo social,
psicológico y cognitivo.
Con el aprendizaje cooperativo el docente pasa a ser un ingeniero que organiza y
facilita el aprendizaje en equipo, en lugar de limitarse a llenar de conocimientos las
mentes de los alumnos. El rol del docente se vuelve multifacético, explica a los
alumnos la tarea, supervisa el trabajo de los equipos, evalúa el nivel de
aprendizaje de los alumnos.
Como se puede apreciar el aprendizaje colaborativo es un reto, ya que muchos
docentes no están experimentados en el empleo de este tipo de aprendizaje y así
mismo los estudiantes mismos no están acostumbrados a trabajar juntos y tienden
a ser competitivos; pero son muchas las ventajas que se pueden obtener a partir
de esta metodología de trabajo.
Para concluir, el aprendizaje cooperativo es el empleo didáctico de grupos
reducidos con el fin de que los alumnos trabajen juntos para optimizar su propio
aprendizaje y el de los demás. La esencia del aprendizaje cooperativo consiste en
implementar grupos para crear una interdependencia positiva entre los alumnos,
de tal modo que todos reconozcan que “se hunden o nadan” juntos. Otros
elementos básicos de la cooperación son: la responsabilidad individual (cada
alumno es responsable tanto de aprender el material asignado como de ayudar a
los otros miembros del grupo a aprenderlo); la interacción personal promotora
entre los alumnos (cada alumno promueve el desempeño de los otros); las
prácticas interpersonales y grupales, y el procesamiento por parte de los alumnos
del modo en que funcionó su grupo.
Las investigaciones realizadas indican que la cooperación conduce aun mayor
empeño en alcanzar los objetivos, a la generación de relaciones interpersonales
más positivas y a una mayor salud mental que los métodos competitivo e
individualista. El docente que aplique el aprendizaje cooperativo deberá planificar
y ejecutar cuidadosamente cuatro acciones concretas.
En primer lugar, tendrá que tomar varias decisiones previas a la enseñanza.
Deberá decidir cuáles serán sus objetivos conceptuales y actitudinales; cuántos
alumnos habrá en cada grupo; cómo distribuirá a los alumnos en los grupos y
cuánto tiempo trabajarán juntos, cuál será la mejor manera de disponer el aula;
cómo utilizará los materiales didácticos, y qué roles les asignará a los miembros
del grupo.
En segundo lugar, deberá explicarles a los alumnos lo que van a hacer durante la
clase cooperativa. Les asignará tareas claras y les explicará qué es la
interdependencia positiva dentro del grupo y entre los grupos, qué es la
responsabilidad individual y qué técnicas grupales habrán de aplicar en cada
lección a fin de mejorar continuamente su desempeño.
En tercer lugar, el docente tiene que coordinar la lección. Mientras los alumnos
trabajan juntos cooperativamente, deberá supervisar a los grupos de aprendizaje e
intervenir (cuando sea necesario) para mejorar la ejecución de tareas y el trabajo
en equipo. Y tendrá que ayudar a los alumnos a darle cierre a la lección.
Por último, el docente deberá organizar actividades posteriores a la lección. El
aprendizaje de los contenidos de la lección debe ser controlado y evaluado. Los
alumnos tienen que procesar cómo funcionaron sus grupos de aprendizaje durante
cada lección, para poder mejorar su rendimiento.
BIBLIOGRAFÍA
Úriz, B. N. (1999) Aprendizaje Cooperativo. Gráficas Lizarra.
Collazos, A.C., Guerrero, L. y Vergara. A. Aprendizaje Colaborativo: un cambio del
rol del profesor.
Johnson, D. Johnson, E. (2011) “El aprendizaje cooperativo en el aula” Síntesis
del D.O. del IES “Cinco Villas” Ejea.
Johnson, D, Johnson, R.T y Edythe J. (1994) El aprendizaje cooperativo en el
aula. Editorial Paidós. Buenos Aires.