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William Soto Santiago
Sab. 02-04-1994 Villavicencio, Colombia
Sábado, 02 de abril de 1994 (P.M.)
Villavicencio, Colombia
Este mensaje predicado por nuestro amado
hermano William Soto Santiago,
Es distribuido gratuitamente.
“Y el Espíritu y la esposa dicen: Ven. Y el que oye
diga: Ven. Y el que tiene sed venga; y el que
quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.”
Apocalipsis 22:17
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Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su obra de
reclamo; y así nos da la fe para ser transformados y raptados.
Por eso es que esperamos nuestra transformación, porque
nosotros hemos recibido el Mensaje que nos ha dado esa fe
para ser transformados y raptados, nos ha dado la fe en el
Señor Jesucristo como León de la tribu de Judá, como Rey de
reyes y Señor de señores, y Juez de toda la Tierra, en Su obra
de reclamo.
Que Dios nos continúe bendiciendo a todos, que el Angel
del Pacto nos acompañe todos los días de nuestra vida terrenal
y por toda la eternidad.
Pasen todos muy buenas noches. Y mañana estaremos
viendo al Señor Jesucristo resucitado, y estaremos viendo los
beneficios que El ha obtenido con Su resurrección, ¿para
quién? para cada uno de nosotros.
Con nosotros Miguel Bermúdez Marín para concluir nuestra
parte en esta noche. Que el Angel del Pacto les continúe
bendiciendo a todos, y a mí también. Amén.
“EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA.”
EL SEÑOR JESUCRISTO
EN LA SEPULTURA
Por William Soto Santiago
Sábado, 02 de abril de 1994 (P.M.)
Villavicencio, Colombia
APERTURA DE LABORES
Muy buenos días, jóvenes, en este Quinto Congreso y I
Taller Latinoamericano y Caribeño: “Los Siete Rayos de Luz
en los Jóvenes del Futuro.” Que las bendiciones del Angel del
Pacto sean sobre todos ustedes y sobre mí también.
Quiero leer una porción del Salmo 27, y dice así:
“Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová
es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?
Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis
angustiadores y mis enemigos, Para comer mis carnes, ellos
tropezaron y cayeron.
Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi
corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré
confiado.
Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté
yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para
contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su
templo.
Porque él me esconderá en su tabernáculo en el día del
mal; Me ocultará en lo reservado de su morada; Sobre una
roca me pondrá en alto.”
Que Dios bendiga Su Palabra en nuestros corazones; y
nuestros corazones con Su Palabra; y el Angel del Pacto
siempre nos guíe en el camino de Dios.
Queda abierto este día para los talleres correspondientes a
este día y todas las demás actividades de este día, en este
4 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Quinto Congreso y I Taller Latinoamericano y Caribeño “Los
Siete Rayos de Luz en los Jóvenes del Futuro.” Que el Angel
del Pacto les bendiga, y adelante en vuestros talleres en este
día. Con nosotros Miguel Bermúdez Marín.
CONFERENCIA
Muy buenas noches jóvenes, y todos los presentes en este
Quinto Congreso y I Taller Latinoamericano y Caribeño: “Los
Siete Rayos de Luz en los Jóvenes del Futuro.”
Es un privilegio para mí estar con ustedes en esta noche, y
estar disfrutando esta actividad, estar disfrutando esta parte que
ha tenido nuestro hermano Bermúdez, la cual ha sido
maravillosa, ha sido de grande enseñanza. Y hemos estado
viendo cómo cada uno de ustedes, jóvenes, ha captado el
Mensaje de Dios correspondiente para este tiempo final.
Yo estoy muy contento en ver y en escuchar a cada uno de
ustedes, los que han contestado, cómo han contestado estas
preguntas que ha hecho nuestro hermano Bermúdez; y las
contestaciones de ustedes muestran que ustedes han entendido
la hora que estamos viviendo, la dispensación que estamos
viviendo, la edad que estamos viviendo, la obra de Cristo que
corresponde para este tiempo final como León de la tribu de
Judá; todas estas cosas que Dios tenía reservadas para el fin del
tiempo, ustedes las están entendiendo.
Y para mí es de mucha alegría escuchar a nuestro hermano
Bermúdez y escucharlos a ustedes en este tipo de actividad. Yo
hubiera deseado que Miguel hubiera continuado en su
actividad con ustedes, porque esto es algo que a mí me llena de
alegría, de gozo, ver cómo Dios tenía un pueblo predestinado
para entender todas estas cosas que Dios estaría llevando a
cabo en este tiempo final. Puedo ver en cada uno de ustedes la
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 21
al infierno y le predicó a las almas, a los espíritus
encarcelados, que ya no tenían oportunidad de salvación,
porque ya se les había pasado el tiempo.
Por eso cada persona tiene que aprovechar bien el tiempo
que Dios le ha dado para vivir en esta Tierra, porque vendrá un
momento en que no habrá ya ni siquiera la más mínima
oportunidad, aunque la persona quiera una oportunidad de
salvación.
Por eso es tan importante en este tiempo servir a Dios y
recibir el llamado final de Dios, el Mensaje de la gran Voz de
trompeta, porque así se recibe el Sello del Dios vivo y somos
sellados para vida eterna, para pronto ser transformados y
raptados y evitar estos juicios que han de venir sobre este
planeta Tierra.
Jesucristo con Su Amor divino nos habla en el fin del
tiempo al corazón, y nos da a conocer estas cosas que deben
suceder pronto, por medio de Su último mensajero, Su último
Angel mensajero, para que así nosotros escapemos de estas
plagas, de estos juicios divinos que han de caer sobre la Tierra.
Hemos visto al Señor Jesucristo en el infierno, cuando
murió en la Cruz del Calvario pasó al infierno; y hemos visto
lo que hizo allá en el infierno, lo cual para el fin del tiempo es
tipo y figura de lo que estará aconteciendo en este planeta
Tierra.
Que Dios sea con cada uno de nosotros, que el Angel del
Pacto nos libre de estos juicios divinos que han de caer sobre la
Tierra, que la misericordia de El sea con nosotros, y que pronto
seamos transformados, conforme a Su promesa, porque
nosotros creemos el Mensaje del Evangelio del Reino, el
Mensaje de la trompeta final, el Mensaje de los Siete Truenos
de Apocalipsis capítulo 10. Nosotros creemos el Mensaje final
de Dios que nos revela a Jesucristo como León de la tribu de
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estará abierto, pero que no podrán tocar a esos 144 mil hebreos
que estarán viviendo en ese tiempo. La quinta dimensión no
los podrá afectar, no los podrá destruir.
Ahora, este Angel con el Sello del Dios vivo... El Sello del
Dios vivo es el Espíritu Santo, es la teofanía, es la Columna de
fuego, es Cristo en teofanía, el Espíritu Santo, el Sello del Dios
vivo. Y ese Angel con el Sello del Dios vivo, ese Angel con
Cristo, con el Espíritu Santo, tendrá el ministerio para llamar y
juntar y sellar 144 mil hebreos; ese es el ministerio de Moisés
y Elías en el fin del tiempo, en el Angel del Señor Jesucristo.
Ahora, antes de ser llevada esta obra en favor del pueblo
hebreo, primeramente tiene que llamar y juntar a los escogidos
de entre los gentiles. El Señor Jesucristo dijo: “Y enviará sus
ángeles con gran voz de trompeta y juntarán a sus escogidos.”
Desde un extremo de la Tierra, o desde un cabo de la Tierra
hasta un cabo del cielo.
Así que primeramente Cristo, por medio de Su Angel
mensajero, lleva a cabo una obra en favor de Sus escogidos en
medio de los gentiles, y también habrá una manifestación de
parte de Cristo para las vírgenes fatuas, y también para el
mundo o las almas encarceladas, que estarán encarceladas en la
quinta dimensión estando aún en sus cuerpos físicos, pero que
no tendrán oportunidad de salvación, porque ya para ese
tiempo el tiempo de salvación habrá terminado, y ya Cristo no
estará como Cordero de Dios haciendo intercesión, sino que
estará como Juez de toda la Tierra, y como León, como Rey.
Por eso es tan importante tener el conocimiento de todo el
programa de Dios, y de entender lo que significó la muerte del
Señor Jesucristo allá en la Cruz del Calvario en favor de cada
uno de nosotros, y lo que significó Su estadía en el sepulcro
(Su cuerpo), y Su estadía en la quinta dimensión, en el
infierno, en cuerpo teofánico, o sea, en espíritu, en el cual bajó
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 5
Escritura que dice:
“Los entendidos entenderán...” (Daniel 12:10).
Yo le doy gracias a Dios por cada uno de ustedes, y estoy
muy orgulloso de cada uno de ustedes, jóvenes, y de todos los
aquí presentes, y de todos los que han recibido el Mensaje en
toda la América Latina y el Caribe, y también los que en otras
naciones lo han recibido, que son también latinoamericanos o
caribeños.
Es realmente de gran provecho este tipo de actividad que
lleva a cabo nuestro hermano Miguel con ustedes, y le estuve
diciendo a Jairo: “Es bueno que la cámara también enfoque a
cada uno de los que conteste, y que tengan un micrófono, para
que todo esto quede grabado y sea usado en favor de todos los
demás jóvenes de toda la América Latina y el Caribe.” Y que
todas estas actividades de Miguel queden grabadas, porque son
de mucha ayuda para todos los jóvenes latinoamericanos y
caribeños, y para así también dar testimonio a todas las
personas de que hay en este planeta Tierra personas que están
entendiendo el programa divino y que tienen ese Mensaje para
darlo a conocer a los demás seres humanos.
Estas tomas de video están muy buenas también para la
televisión, porque es en un ambiente así espontáneo, es un
ambiente así sin estar preparado nada, y eso entonces es algo
real, algo que estamos viviendo en estos momentos. Y es algo
maravilloso lo que está pasando en la juventud latinoamericana
y caribeña.
Nuestro hermano Bermúdez también ha hecho en esta
misma forma en actividades de los niños; y ha sido también
algo muy hermoso cómo los niños también pueden dar las
contestaciones que ustedes están dando.
O sea, que Dios en este tiempo final ha abierto el corazón y
la mente de los jóvenes, los adultos y también los niños, para
6 WILLIAM SOTO SANTIAGO
entender Su programa. Es algo maravilloso cómo en esa forma
sencilla han estado recibiendo la revelación del cielo, la
revelación de nuestro Señor Jesucristo; revelación que en otros
tiempos no estaba disponible para la raza humana, porque no
era el tiempo todavía.
Pero ahora ha llegado ese tiempo, y ahora tenemos nosotros
el privilegio de entender las cosas que antes no podían ser
comprendidas de la Biblia por los seres humanos.
En esta noche quiero leer una Escritura, se encuentra en San
Mateo, capítulo 27 y verso 57 al 61. Esta es la Semana Santa
que el mundo gentil tiene en conmemoración a la muerte y
sepultura y resurrección del Señor Jesucristo. Y según
conmemoran en esta semana la entrada triunfal del Señor
Jesucristo (el domingo pasado), también recuerdan la muerte
de Cristo el viernes santo (ayer), y recuerdan también que fue
sepultado viernes en la tarde antes de caer el sol; fue sepultado,
colocado en una cueva, y luego pasó también el sábado en la
sepultura, y luego domingo resucitó.
En esta noche vamos a leer aquí lo de Su sepultura, y vamos
a ver dónde estaba el Señor Jesucristo cuando fue sepultado.
Dice así San Mateo capítulo 27, verso 57 en adelante:
“Cuando llegó la noche, vino un hombre rico de Arimatea,
llamado José, que también había sido discípulo de Jesús.
Este fue a Pilato y pidió el cuerpo de Jesús. Entonces Pilato
mandó que se le diese el cuerpo.
Y tomando José el cuerpo, lo envolvió en una sábana
limpia, y lo puso en su sepulcro nuevo, que había labrado en
la peña...”
En Israel, si ustedes tienen la oportunidad de ir en alguna
ocasión, traten de ver cerca del templo de Jerusalén, por ahí
cerca también del Monte de los Olivos, en esa área por ahí,
traten de ver un lugar de sepultura que está bajo tierra; mas
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 19
ángulos de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la
tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra (o
sea, para que no soplase guerra sobre la Tierra, o sea, para que
no viniera una guerra mundial sobre la Tierra), ni sobre el mar,
ni sobre ningún árbol.
Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol (de
donde sale el Sol; Cristo es el Sol de Justicia; y de donde sale
el Sol de Justicia: ‘para los que temen el nombre del Señor,’
como dice el profeta Malaquías, de ahí saldrá, sube, este Angel
del cual nos habla aquí. Dice:), y tenía el sello del Dios vivo; y
clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había
dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar, diciendo:
No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta
que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro
Dios.
Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil
sellados de todas las tribus de los hijos de Israel (y comienza a
enumerar doce mil de cada tribu).”
Luego, en Apocalipsis capítulo 14, verso 1, los encontramos
ya sellados:
“Después miré, y he aquí el Cordero estaba en pie sobre el
monte de Sion, y con él ciento cuarenta y cuatro mil, que
tenían el nombre de él y el de su Padre escrito en la frente.”
Estos son los 144 mil hebreos sellados con el Sello del Dios
vivo en sus frentes. Y ahora encontramos que tienen escrito en
sus frentes el Nombre de El, de Cristo, y el Nombre de Su
Padre escrito en la frente. Tienen el Nombre Nuevo del Señor
Jesucristo, y también tienen el Nombre eterno de Dios, que es
el mismo Nombre nuevo del Señor Jesucristo.
¿Y cómo obtuvieron ese Sello? ¿Cómo fueron sellados?
Porque Cristo, Dios, envía Su Angel para sellar a 144 mil
hebreos que pasarán por la gran tribulación, donde el infierno
18 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Y en aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no
la hallarán; y ansiarán morir, pero la muerte huirá de ellos.
El aspecto de las langostas era semejante a caballos
preparados para la guerra; en las cabezas tenían como
coronas de oro; sus caras eran como caras humanas;
tenían cabello como cabello de mujer; sus dientes eran
como de leones;
tenían corazas como corazas de hierro; el ruido de sus alas
era como el estruendo de muchos carros de caballos corriendo
a la batalla;
tenían colas como de escorpiones, y también aguijones; y en
sus colas tenían poder para dañar a los hombres durante cinco
meses.
Y tienen por rey sobre ellos al ángel del abismo, cuyo
nombre en hebreo es Abadón, y en griego, Apolión.
El primer ay pasó; he aquí, vienen aún dos ayes después de
esto.”
Ahora podemos ver lo que le espera a esta generación, lo
que le espera a la raza humana en el fin del tiempo. Podemos
ver que la raza humana estará para esos días en una condición
demente y estará viendo esa quinta dimensión que estará
abierta aquí en la Tierra; y así como hay personas que pueden
ver ángeles, para ese tiempo esas personas que no tengan el
Sello del Dios vivo en sus frentes, estarán viendo estos
demonios que están señalados en la Escritura que van a salir
del pozo del abismo, del infierno.
Ahora, estas personas que tendrán el Sello del Dios vivo en
sus frentes, ¿cómo lo habrán adquirido para esos días? En
Apocalipsis capítulo 7 tenemos la explicación a ese Sello de
Dios que tendrán en sus frentes algunas personas. Dice
Apocalipsis capítulo 7, verso 1 en adelante:
“Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 7
bien es en sí como una cueva: tiene sus caminos, y ahí en las
paredes de esa cueva han cavado huecos que son sepulturas. Es
para que esto lo puedan entender bien. Dice:
“…Y lo puso en su sepulcro nuevo, que había labrado en la
peña...”
O sea, que hacían esas cuevas así en la peña, y ahí era la
sepultura, y las tapaban y de este tipo de sepultura es que habla
aquí. Y hacían eso en el área que miraba hacia el templo,
esperando la resurrección.
“...y después de hacer rodar una gran piedra a la entrada
del sepulcro, se fue.
Y estaban allí María Magdalena, y la otra María, sentadas
delante del sepulcro.”
“JESÚS EN LA SEPULTURA.”
Mientras el cuerpo del Señor Jesucristo estuvo en aquella
sepultura hecha en la roca, en la peña, Su espíritu teofánico, Su
cuerpo teofánico, descendió al infierno, y allí tuvo una gran
labor. De esto nos habla el apóstol San Pedro.
Ahora, por cuanto el Señor Jesucristo había tomado el
pecado del mundo, se hizo mortal; no había otra forma para el
Señor Jesucristo poder morir. El dijo: “Nadie me quita la vida;
yo la pongo por mí mismo para volverla a tomar.”
Y para ponerla, tuvo El que tomar nuestros pecados, los
pecados de la raza humana, y así Dios cargó en El, el pecado
de todos nosotros. Y por cuanto la paga del pecado es muerte,
entonces tenía que morir; tenía que morir en aquel día en que
El murió, porque ese era el día en que la paga del pecado de la
raza humana caería sobre este mundo. Y por cuanto el Señor
Jesucristo recibió el pecado del mundo, se hizo pecado por
nosotros, Dios cargó en El, el pecado de todos nosotros,
entonces tenía que morir. Y luego de morir su cuerpo, tenía
que ir al infierno, donde tienen que ir los pecadores.
8 WILLIAM SOTO SANTIAGO
Ahora, Cristo murió en la Cruz del Calvario, y luego los que
vieron Su muerte no comprendieron que Dios había cargado en
El, el pecado de la raza humana. Por lo tanto vieron ese evento
como un evento común y corriente, el cual era llevado a cabo
con las personas que le aplicaban la pena máxima, que era la
muerte en la Cruz.
El murió como un malhechor para la gente; pero no para
nosotros. El murió como un pecador, aparentemente; pero fue
que Dios cargó en El, el pecado de todos nosotros, y por esa
causa vino a ser mortal.
Ahora, al morir y su cuerpo ser depositado en esta cueva
que hizo José de Arimatea como sepultura para El,
encontramos que Su Espíritu bajó al infierno, donde tiene que
ir toda persona en espíritu, toda persona que no ha recibido a
Cristo como su Salvador. Toda persona que no tiene a Cristo
como el Cordero de Dios que ha quitado el pecado del mundo
y lo ha limpiado con Su Sangre preciosa de todo pecado, tiene
que ir al infierno, que es la quinta dimensión.
Ahora, encontramos que Cristo fue al infierno. De esto da
testimonio el apóstol San Pedro en I de Pedro capítulo 3, verso
18 en adelante, donde dice:
“Porque también Cristo padeció una vez por los pecados, el
justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la
verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu;
En el cual también fue y predicó a los espíritus
encarcelados,
Los cuales en otro tiempo desobedecieron, cuando una vez
esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, mientras se
preparaba el arca, en la cual pocas personas, es decir, ocho,
fueron salvadas por agua.”
Ahora vean que el apóstol San Pedro tenía el conocimiento
del lugar donde el Señor Jesucristo había ido cuando murió en
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 17
como fue para aquellas almas o espíritus encarcelados en la
quinta dimensión, en el infierno.
Será un Mensaje de testimonio en donde Cristo dará
testimonio de la incredulidad de esas personas y del rechazo
que han hecho a Su sacrificio en la Cruz del Calvario. Ya no
habrá tiempo para esas personas, porque ya serán almas
encarceladas en el infierno, la quinta dimensión, que estará
abierta aquí en la Tierra.
Por eso es que en Apocalipsis aparece que el infierno, el
pozo del abismo, será abierto, y saldrán de allí langostas; y
muestra las diferentes formas. Esto habla de demonios del
infierno que estarán manifestados en la Tierra. Y dice que los
seres humanos buscarán la muerte, dice que por cinco meses
tendrán autoridad para atormentar a los seres humanos.
Capítulo 9 de Apocalipsis, vamos a ver:
“El quinto ángel tocó la trompeta, y vi una estrella que
cayó del cielo a la tierra; y se le dio la llave del pozo del
abismo.
Y abrió el pozo del abismo (que es el infierno), y subió
humo del pozo como humo de un gran horno; y se oscureció el
sol y el aire por el humo del pozo.
Y del humo salieron langostas sobre la tierra; y se les dio
poder, como tienen poder los escorpiones de la tierra.
Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a
cosa verde alguna, ni a ningún árbol, sino solamente a los
hombres que no tuviesen el sello de Dios en sus frentes.”
¿A quiénes no le será permitido hacerle daño? A los que
tengan el Sello de Dios en sus frentes. Son los que serán libres
de ese peligro que viene para la raza humana.
“Y les fue dado, no que los matasen, sino que los
atormentasen cinco meses; y su tormento era como tormento
de escorpión cuando hiere al hombre.
16 WILLIAM SOTO SANTIAGO
en contra de estas cosas que él veía en las mujeres, porque él
vio estas cosas en el infierno, y él les aconsejó siempre a vestir
y a arreglarse conforme a como él vio que lo hacían en el
Paraíso. Una buena recomendación del séptimo ángel
mensajero para toda hija de Dios y todo hijo de Dios; lo cual
nosotros no rechazamos, sino que creemos con todo nuestro
corazón y decimos que es como dijo nuestro hermano
Branham.
Ahora, yo amo a todos mis hermanos como estén, pero les
hago saber cómo a Dios le agrada que nosotros seamos aquí en
la Tierra. Y no nos vamos a poner a pelear el uno con el otro.
Yo no peleó con nadie, ni regaño a nadie, sino que les hago
saber las cosas de parte de Dios; porque eso es lo que todos
nosotros queremos saber: cómo agradar a nuestro Dios.
Para el fin del tiempo, dijo el séptimo ángel mensajero, que
el ministerio de Cristo tendría tres etapas en el fin del tiempo,
y que cuando la apretura llegue, la tercera etapa de Cristo, que
es la etapa de la Palabra, que es Cristo, va a tener tres
manifestaciones o tres fases para tres grupos de personas: para
los escogidos, que es la Novia del Señor Jesucristo, la Esposa
de Cristo, para las vírgenes fatuas (otro grupo), y para los
perdidos, los que ya no tienen oportunidad de salvación.
El dijo: “Estas etapas fueron vistas en el Señor Jesucristo.”
Cuando El murió y descendió al infierno, tuvo esta tercera
etapa en el infierno predicándole a las almas encarceladas; y él
dice: “Y eso se cumplirá también en el fin del tiempo.”
Pero ya no yendo allá por medio de muerte, sino que el
infierno, la quinta dimensión, estará abierta aquí en la Tierra, y
los que estarán escuchando ese Mensaje en el fin, luego que los
escogidos y las vírgenes fatuas reciban también su parte, luego
habrá esa etapa en donde el mundo incrédulo verá a Cristo
manifestado; pero no para salvación de ellos, sino que será
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 9
la Cruz del Calvario, y luego Su cuerpo fue sepultado en
aquella cueva de José de Arimatea. Dice que el Señor fue y le
predicó a las almas, a los espíritus, que estaban allí
encarcelados.
Fueron, estos espíritus encarcelados, personas que vivieron
en aquellos días de Noé, los cuales no creyeron a Noé, los
cuales no entendieron que Noé les estaba diciendo la verdad y
que Noé era el último profeta de aquella generación.
Fueron (dice) desobedientes. Dice: “los que en otro tiempo
desobedecieron.” ¿Qué desobedecieron? La Palabra de Dios y
programa de Dios por medio de Noé. Por lo tanto se
encontraban en el infierno, que es la quinta dimensión.
Hay siete dimensiones. Y nosotros vivimos aquí en la Tierra
en tres dimensiones; o sea, está la dimensión de luz, tiempo,
materia, en las cuales nosotros estamos; y luego la cuarta, la
dimensión de las ondas, en donde la radio y la televisión
trabajan; y ustedes con un radio pueden escuchar cualquier
estación de radio, o con un televisor pueden ver y escuchar
cualquier canal de televisión que esté funcionando en el
territorio donde usted está viviendo. Esa es la cuarta
dimensión, la cual existe; es una dimensión real; pero para las
personas poderla ver, necesitan un televisor, un instrumento
que pueda hacer visibles las cosas que están aconteciendo en
esa dimensión.
Este lugar, además de estar lleno de personas que son
visibles a nuestra vista, también está lleno de imágenes de
otras dimensiones. Por ejemplo, de la cuarta dimensión está
lleno este lugar; y no solamente este lugar, sino también el
patio, y el aire también; todo está lleno. En palabras más
claras, todo el planeta Tierra está lleno de imágenes y cosas de
la cuarta dimensión.
Los científicos querían preparar un equipo que pudiera
10 WILLIAM SOTO SANTIAGO
tomar las imágenes y la voz de personas que vivieron en otros
tiempos, para así tomar la vida del Señor Jesucristo y Su
ministerio, y tener el ministerio del Señor Jesucristo con Sus
Mensajes y Sus milagros para nuestra generación. No sé si ya
lo han logrado; pero no hay ninguna cosa imposible, pues todo
está grabado; todo está grabado ahí en el éter, y lo único que se
necesita es tener los instrumentos para captar todo eso que
sucedió en el pasado.
Si los científicos no logran hacerlo, Dios traerá de nuevo
todas esas cosas del pasado en el juicio final para la raza
humana; pues la vida de toda persona está grabada con todos
sus hechos. Por lo tanto, todo dará testimonio en el día del
juicio de aquellas personas que tendrán que presentarse ante
Dios para ser juzgados. Aún, dice la Escritura, los ángeles
caídos serán juzgados también.
Ahora, nadie podrá decir, de los que serán juzgados: “No es
así.” Pues, todo estará grabado en esa cuarta dimensión, como
también en otro lugar que no podrá ser borrado. ¿Saben dónde?
En la mente de cada persona.
Dicen los científicos, y lo han mostrado en ciertos
experimentos, que han hipnotizado a algunas personas y luego
los han llevado a través de los años pasados para que cuenten
su vida o diferentes cosas de su vida, y han hablado
exactamente lo que aconteció.
Así que cuando Dios dice que juzgará a todo ser humano, El
sabe cómo hacer presente todo el pasado de esa persona; y aun
los pensamientos de cada persona quedan grabados también.
Por eso es necesario que cada persona piense positivamente,
piense conforme a la Palabra de Dios, para que así no tenga
problemas delante de Dios.
Le dijo el Angel que le apareció al séptimo mensajero en el
1946, cuando le apareció en el estado de Indiana, le dijo que en
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 15
Piensen que esa dimensión, así como la sexta dimensión, y
la dimensión en la cual nosotros vivimos, son dimensiones en
donde existen personas, y en donde llevan a cabo ciertas
actividades. Como en el Paraíso, ellos estaban allí, caminaban,
pero no llevaban a cabo trabajos como aquí en la Tierra, ni
comían.
Bueno, en la quinta dimensión, los que están allí, están
también en un cuerpo, pero no un cuerpo de la sexta
dimensión, sino un cuerpo de la quinta dimensión. Y él (el
Hno. William Marrion Branham) vio todo eso.
Y luego en Norteamérica, en el estado de Arizona, él estuvo
en una tienda muy famosa, en donde fue con su esposa; y
mientras su esposa compraba algunas cosas y hacía algunas
diligencias, él se quedó sentado dentro de la tienda; y de
momento vio que del ascensor salieron unas personas, o de la
escalera eléctrica, y escuchó que iban hablando. Y luego
comenzó a sentir algo extraño, y él recordó que había visto y
había escuchado esas cosas; y él recordó que había sido cuando
tenía 14 años. (Esta experiencia la tuvo el Hno. Branham).
Y él vio un grupo de mujeres que venían hablando, y
cuando las miró, vio su forma de vestir y su forma de
arreglarse el cabello: su cabello corto y arreglado con esos
arreglos que han salido en el siglo xx, y con sus ojos pintados y
todas estas cosas. Y él dijo: “Así fue que yo vi a la gente allá
en el infierno.”
Por eso la recomendación siempre es: vivir en esta Tierra
reflejando el Paraíso y la forma de vida del Paraíso, y no
reflejar en nuestras vidas nada que tenga que ver con la quinta
dimensión, que es el infierno. Y esto cada persona debe
entenderlo para así ser consciente de esta realidad, y vivir en
esta Tierra mejor reflejando el Paraíso y no el infierno.
Por eso es que nuestro hermano Branham hablaba tan fuerte
14 WILLIAM SOTO SANTIAGO
color de su cabello que le corresponde; los varones tienen el
cabello corto y las damas lo tienen largo. Así es el Paraíso;
lugar que todos debemos imitar, y vivir aquí conforme a como
se vive en el Paraíso.
¿Quieren saber cómo se vive en la quinta dimensión; ya que
vieron cómo se vive en la sexta dimensión?
Allí en la sexta dimensión ni trabajan, ni comen, ni se
cansan, ni están cansados de estar allí tampoco; pero quieren
venir de nuevo a la Tierra; porque allí ellos están descansando
de sus trabajos terrenales.
Ahora, en el infierno, el séptimo ángel mensajero fue al
infierno cuando era un jovencito, quizás de algunos 14 años. Y
él dice que fue herido por un amiguito suyo con una escopeta
en sus piernas; lo llevaron al hospital y sangró tanto que
tuvieron que atenderlo de emergencia; le colocaron anestesia
también y todas estas cosas.
Y él, mientras estaba inconsciente, dice que comenzó a bajar
y a bajar; o sea, como cuando una persona se va por un
precipicio, o se cae desde un avión, que no encuentra donde
asentar sus pies; o cuando ustedes están durmiendo que sueñan
que se están cayendo de un edificio o de una torre o de algún
lugar alto -yo creo que a todos les ha pasado.- Y él comenzó a
bajar y a bajar, hasta que por fin llegó a un lugar donde
comenzó a ver personas, comenzó a ver mujeres allí.
Y dice que cuando comenzó a ver mujeres allí, vio que sus
ojos eran raros, y tenían algo por sus ojos. Y eso fue cuando él
(el séptimo Angel Mensajero) tenía unos 14 años. Así que eso
fue: 14 más 9 = 23. Fue en el año 1923. Y para esa fecha las
mujeres en su forma de vestir y de arreglarse eran diferentes.
Ahora, él dice que también escuchó conversación de ellas.
Comenzó a ver muchísimas cosas; y él dice que allí no estaba
Dios; y lo que se sentía allí era una soledad.
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 11
el cielo los pensamientos de los hombres hablan más fuerte que
las palabras de los hombres. Y eso es algo que a cada persona
le debe preocupar para que siempre esté pensando bien; porque
sus pensamientos son escuchados en el cielo, y quedan
grabados.
Ahora, hemos visto que Dios juzgará en el juicio final a
todos aquellos que tendrán que presentarse allí; aun estas
personas a las cuales Jesús les predicó, tendrán que presentarse
allí para ser juzgados, pero ya Cristo les predicó a ellos y les
dio a conocer el porqué se encontraban en el infierno, y los
señaló como incrédulos y desobedientes al programa de Dios.
Ahora, la única forma de borrar todo el pasado de la persona
es por medio del Señor Jesucristo, el cual llevó nuestros
pecados. Y cuando son colocados en el Señor Jesucristo y
somos limpiados con la Sangre de Jesucristo, podemos decir
como dice el apóstol San Juan y también demás apóstoles: “La
sangre de Jesucristo nos limpia de todo pecado.” Y entonces
no habrá nada en contra de esa persona. Vean ustedes lo
importante que fue la muerte del Señor Jesucristo en la Cruz
del Calvario.
Ahora, El estando allá en el infierno, dando testimonio allí,
Lo encontramos a El llevando a cabo una obra donde El
obtuvo un beneficio grande. Por aquí vamos a pedirle a Miguel
que nos busque dónde El dice que tiene las llaves del infierno y
de la muerte. Aquí está. Apocalipsis capítulo 1, verso 17, dice:
“Cuando le vi (Juan dice que cuando lo vio, vio a Cristo),
caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí,
diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último;
y el que vivo, y estuvo muerto; mas he aquí que vivo por los
siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del
Hades (las llaves de la muerte y del infierno).”
El obtuvo allí las llaves del infierno y de la muerte, que
12 WILLIAM SOTO SANTIAGO
tenía el diablo. Y por eso El promete a Sus hijos que no verán
muerte, El promete a Sus hijos vida eterna. Y por eso es que
Cristo podrá traer a resurrección a todos Sus hijos, porque
tiene las llaves del infierno y de la muerte. Puede traer a vida
nuevamente a todos Sus hijos que vivieron en el pasado
durante las edades de la Iglesia gentil y podrá también traer del
infierno a toda persona, a todo espíritu que está allí, y traerlo a
la Presencia de Dios en el Trono blanco, el Trono de juicio, del
juicio final, porque El tiene las llaves; El las obtuvo al morir e
ir al infierno y quitárselas al diablo.
Sigue diciendo el apóstol San Pedro, en el capítulo 4, verso
6:
“Porque por esto también ha sido predicado el evangelio a
los muertos, para que sean juzgados en la carne según los
hombres, pero vivan en espíritu según Dios.”
Ahora vean, les predicó el Evangelio a los muertos, cuando
murió Cristo y fue allá. “Para que sean juzgados en la carne,” o
sea, para que se tengan que presentar en el juicio final, que será
después del Reino milenial. Se tendrán que presentar en la
carne. Dice:
“Porque por esto también ha sido predicado el evangelio a
los muertos, para que sean juzgados en la carne según los
hombres.”
Ahora, hemos visto la labor que llevó a cabo el Señor
Jesucristo en el infierno, que es la quinta dimensión.
Nos habíamos detenido en la cuarta dimensión, que eran las
ondas, o la dimensión donde trabaja la televisión y la radio, en
donde han metido un sinnúmero de cosas muy dañinas para la
humanidad, cosas que están afectando grandemente a la raza
humana; porque más del 75% de lo que producen, a través de
la televisión, es nocivo a la mente, al alma, y al espíritu del ser
humano y también al cuerpo. Están sembrando en el alma, en
EL SEÑOR JESUCRISTO EN LA SEPULTURA 13
el subconsciente de las personas, violencia y un sinnúmero de
cosas dañinas para la raza humana.
Y es necesario que toda persona se cuide de esas cosas que
son dañinas, así como tenemos que cuidarnos de los vicios, que
traen consigo un sinnúmero de problemas a la salud del
cuerpo. Y dice Dios en Su Palabra: “El que destruya el templo
de Dios (el cuerpo), será destruido por Dios.” Así que Dios le
ordena a cada persona cuidar ese cuerpo que Dios le ha dado,
porque ese cuerpo es templo de Dios.
Ahora, la quinta dimensión es el infierno, donde están los
que no han recibido a Cristo como su Salvador, y los que han
sido también rebeldes antes de Cristo, en edades y
dispensaciones pasadas.
Y la otra dimensión que le sigue es la sexta dimensión,
llamada también el Paraíso, lugar donde van los creyentes en
Cristo, donde van los que creen verdaderamente en Dios y
viven conforme a Su Palabra.
Esa sexta dimensión es un lugar muy hermoso, del cual nos
habla la Escritura y del cual nos habla también el séptimo
ángel mensajero, el cual lo visitó en algunas ocasiones y quiso
quedarse allá, pero no le fue permitido hasta el día señalado
por Dios para reunirse con su pueblo allá en el Paraíso, donde
se encuentra en la actualidad.
El nos contó que el Paraíso es un lugar hermoso donde hay
árboles, donde hay grama, donde hay aves, pajaritos hermosos,
y aún hay animales también. Es un lugar como aquí, pero un
Paraíso, donde ni se trabaja, ni se duerme, ni se cansan las
personas, ni se come tampoco; pues están allí en un cuerpo
teofánico, un espíritu teofánico, el cual se parece al cuerpo que
nosotros tenemos acá, pero es un cuerpo espiritual en donde
todas las personas son jóvenes, que representan de 18 a 21
años; cada uno tiene la apariencia que le corresponde, y el