6 de septiembre de 2020 disfruta segovia … · San Francisco de Asís —al que se le atribuye la...

6 de septiembre de 2020

www.eladelantado.com

ESPECIAL ESPECIAL Nº 9 VALLE DEL AGUISEJO

una mirada una mirada distinta sobredistinta sobrela provinciala provincia

disfrutasegovia

Aldealengua de Santa MaríaAldealengua de Santa María

AlconadillaAlconadilla

Alconada de MaderueloAlconada de Maderuelo

Grado del PicoGrado del Pico

AyllonAyllon

FrancosFrancos

EstebanvelaEstebanvela

Santibáñez de AyllónSantibáñez de Ayllón

Languilla

Languilla

Mazag

atos

Mazag

atos

MaderueloMaderuelo

2 EL ADELANTADO DE SEGOVIA DOMINGO, 6 DE SEPTIEMBRE DE 2020

ÍNDICE: VALLE DEL AGUISEJOPresentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 3

Grado del Pico y Santibáñez de Ayllón . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 4

Estebanvela y Francos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 5

Ayllón. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . págs. 6 y 7

Galería fotográfica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 8

Mazagatos y Languilla. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 10

Aldealengua de Santa María . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 11

Alconada de Maderuelo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 12

Alconadilla . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 13

Maderuelo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pág. 14 y 15

Coincidiendo con la salida del número de disfruta segovia dedicado al Valle del Aguisejo nos llega el último libro de Guillermo Herrero y Juan Enrique del Barrio

sobre los pueblos que circundan el río, comenzando por Ayllón. Un libro cuidadísimo en su edición y del que poco más se puede decir estando detrás la pluma de Herrero, tan querido en esta casa,

y la sensibilidad y el buen hacer de del Barrio.

Se presta bien la cuenca del Aguisejo y del Riaza a los paseos a salto de mata. Gozará el caminante ante esa mezcla de vegetación de ribera y enclave en el que la caliza

se disputa el descanso de la vista con la paramera. Disfrutará el curioso escudriñando en la huella que el arte ha dejado en la piedra roja de los sillares y del mampuesto, donde hasta la argamasa no escapa –como no podía ser de otra manera- a esa mágica unión de la caliza y la arcilla,

que en las tardes de primavera refulge dando todo su encanto a la dolomía.

Quien esto escribe ha tenido el enorme placer de recorrer todo el Aguisejo ensartando esa particular “Línea Maginot” compuesta por los palomares de la zona. Constituyen un testimonio sociológico y de arquitectura popular que desgraciadamente está desapareciendo de manera irremediable, salvo

algunos recuperados como merenderos con escasa fortuna estética. En otros lugares de Castilla y León, como Tierra de Campos o Cerrato, le han dedicado un museo –Santoyo- o existe un lugar especializado en su rehabilitación –Villamartín de Campos-. Tiempo habrá de detenernos más

profusamente en su análisis en otro especial de disfruta segovia.

Precisamente paseando en busca de palomares, me topé un día con el espectáculo geológico que supone el plegamiento de pizarras en la margen derecha del río Aguisejo

a su paso por las cercanías del cementerio de Santibáñez de Ayllón. Son retortijones en los intestinos de la piedra de una belleza inaudita, y más al entrar en paradójico contraste con

las areniscas rojas que lo coronan o con los surcos rojizos que forman toboganes naturales entre los bancos pizarrosos.

De un lado Ayllón y de otro, reflejándose en el embalse de Linares, Maderuelo. Qué decir de estas dos villas ejemplo de patrimonio histórico artístico universal que no se haya

mencionado. Solo me permito recomendar que el viajero repare en las espadañas que existen en ambos enclaves. Las de Santa María del Castillo en Maderuelo; la magnífica obra de

cantería que se hizo en la caliza en el antiguo convento de San Francisco, en Ayllón; el clasicismo que ya se deja otear en la enorme obra en Santa María La Mayor, en la misma villa,

con sus prominentes pináculos, o –y no quiero cansar- el sencillo remate de La Martina, que esconde tanto un torreón como un lugar de enorme interés histórico.

Una recomendación: aunque sean copias, es ineludible contemplar las pinturas románicas de la Vera Cruz, del siglo XII, a los pies de Maderuelo. Taüll, San Baudelio y Maderuelo:

la tríada del arte mural románico. Impresionante.

Y hay dos lugares precisos que no quiero dejar de nombrar en este paseo: el primero es la galería porticada de la iglesia de San Pedro, en Grado del Pico. Sin empacho la

reconozco no solo como una de las más interesantes del románico segoviano, sino también de toda España. El estar cegada no es óbice para que su contemplación sea posible, y en

especial la iconografía de sus capiteles. En uno de ellos aparece una sensible secuencia de la Epifanía: uno de los Reyes se arrodilla para besar el pie del Niño.

No es muy corriente en estos lares. Sí, en cambio, en el románico aragonés de las Cinco Villas, comarca zaragozana. Y qué curioso que no lejos de Grado del Pico haya

un pueblo que se denomine así, Cinco Villas. Nos da una idea de por dónde vinieron los influjos.

Finalizo con el segundo lugar elegido: la casa de los Contreras en Ayllón, BIC desde 1969. Son los Contreras una familia cuya historia se hace a la par de la de Segovia desde el Medievo.

En la capital hay varios testimonios de su huella, empezando por el Torreón de Lozoya y terminando por la actual casa de la familia y que fue del mayorazgo de los Cáceres. El palacio ayllonense fue construido por orden de Juan Contreras a finales del XV,

como recoge con epigrafía gótica su fachada. Pero - oh sorpresa, en una familia tan fiel a la orden dominica-,

toda la portada es recorrida, haciendo la función de alfiz, por el cordón de la orden de San Francisco, que según la tradición estuvo en Ayllón y fundó el convento antes mencionado.

Paradojas de la historia en una tierra tan rica, tan nuestra y tan cerca de casa que merece al menos una visita cada poco.

PIZARRAS, EPIFANÍA Y SAN FRANCISCO

ÁNGEL GONZÁLEZ PIERASDIRECTOR EL ADELANTADO DE SEGOVIA

EL ADELANTADO DE SEGOVIA 3DOMINGO, 6 DE SEPTIEMBRE DE 2020


GRADO DEL PICO, NATURALEZA EN ESTADO PURO

IURI PEREIRA/ SARA SUÁREZFOTOS: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

En los límites que marca Se-govia con las provincias de Soria y Guadalajara, más allá incluso de la villa de Ayllón, se encuentra Grado del Pico, la localidad más alejada de la capital de provin-cia, a 105 kilómetros de distan-cia. Desde este punto comienza la ruta por el Valle del Aguisejo.

Grado del Pico es una de las siete pedanías que conforman Ayllón, agregado a este muni-cipio en 1979. Se trata de una pequeña localidad con apenas quince habitantes, en gran par-te como consecuencia del éxodo rural hacia las ciudades o mu-nicipios mayores y con más re-cursos, Ayllón, por ejemplo. Sin embargo, los que se van de Gra-do del Pico pronto echan en falta un entorno natural envidiable.

Las casas de Grado del Pico se concentran en la falda de la Sierra de Pela. El pueblo se lo-caliza en la vertiente norte del macizo, donde se multiplican las poblaciones, gracias a la escasa prominencia de sus montañas y la anchura de los fértiles valles que bordean la sierra, la de me-nor altura del Sistema Central.

En el extremo de la Sierra de Pela se encuentra el Pico de Gra-do, el punto de mayor altitud de la localidad y que, además, da nombre al pueblo. Desde su ci-ma se puede divisar parte de la sierra de Ayllón y varias locali-dades de alrededor. Los fuertes vientos nutren los aerogenera-

Los numerosos caminos, rutas y lugares recónditos de Grado del Pico conforman un entorno natural envidiable.

dores del parque eólico del Pico.Cerca del límite con la provin-

cia de Guadalajara nace el río Aguisejo, af luente del río Riaza. Su nacimiento es curioso, pues toma su agua de un manadero, a kilometro y medio del casco urbano de la localidad, una es-pecie de poza por donde el agua subterránea sale a superficie. El manadero lleva el nombre del pueblo, Manadero de Grado, y se llega a él a través de un agra-dable paseo.

Después, el río discurre por un estrecho pero también profun-do valle, que fertiliza las tierras de una pequeña vega. Un paisaje

bello y pintoresco, verde y exu-berante, rojo y negro, de camino por un paisaje terroso. Los nu-merosos caminos y lugares re-cónditos de Grado del Pico ha-cen del lugar un paraje perfecto para gozar del entorno.

Precisamente, y con la inten-ción de disfrutar de la vasta na-turaleza que rodea al Valle del Aguisejo, surgen una serie de rutas, tanto para recorrer con la bicicleta como de senderismo, que tienen como punto de inicio Grado del Pico. Sujetos al mani-llar, algunas rutas nos encami-nan a puntos de interés cercanos a la localidad, como el Yacimien-

to Arqueológico de Tiermes o el Hayedo de Tejera Negra.

Nos adentramos en el casco urbano de Grado de Pico y una hermosa iglesia parroquial nos recibe. De época románica, es una joya muy poco conocida, pero de las más interesantes no solo del Valle del Aguisejo, sino de toda Segovia. En gran parte se debe a su esplendida galería porticada, que se cree data del siglo XII. Pese a que se trata de una gale-ría ciega, posee elementos de ex-trema belleza, como las colum-nas lisas, doble en la puerta de entrada, y los capiteles. Se pue-

den encontrar, talladas en los capiteles, numerosas represen-taciones escenográficas, como la Epifanía, poco común en el románico castellano. También aparecen representadas bestias y animales fantásticos, como gri-fos o un personaje antropomorfo pero con escamas en el cuerpo.

Del resto de la construcción no se rescata mucho del original románico, debido a las diferen-tes obras de reconstrucción. Sí es románica la torre cuadrada a los pies del templo. Nos permite entrever la época de esplendor que debió de vivir Grado no ha-ce mucho tiempo.

SANTIBÁÑEZ DE AYLLÓN Y SU ARQUITECTURA TRADICIONAL

IURI PEREIRA/ SARA SUÁREZFOTOS: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

Siguiendo el estrecho pero profundo valle del río Aguisejo, también al límite con la provin-cia de Soria y la de Guadalajara, la siguiente parada es la peque-ña localidad de Santibáñez de Ayllón, a 101 kilómetros de la capital de provincia.

El municipio se unió, al igual que los pueblos vecinos, al tér-mino municipal de Ayllón en 1979. Los habitantes censados en Santibáñez de Ayllón sobre-pasan por poco la barrera de los diez, menos de la mitad de los que había a principios de siglo, desgraciadamente. Sin embargo, la localidad mantie-ne un tinte añejo muy digno de visitar.

Cabe destacar que en el an-tiguo municipio se han encon-trado yacimientos prehistóri-cos al igual que en el cercano Las casas se construían en madera, piedras de la zona y adobe.

yacimiento de La Peña de Este-banvela. Este último es el pri-mer yacimiento del Paleolíti-co Superior encontrado en la provincia de Segovia, pero del que ya se hablará en su debido momento.

El verde rompe por completo con el negro de los cerros que se alzan a sus espaldas. El río Aguisejo, entre la carretera que nos encamina a Ayllón y el pro-pio pueblo, deja a su paso por Santibáñez de Ayllón una fron-dosa vega.

Sus aguas riegan los árboles y arbustos típicamente de ri-bera. Cerca de la localidad, un salto del río provoca una cas-cada de lo más vistosa. Eso sí, el acceso está boqueado por un propiedad privada.

Además, otras fuentes na-cen en el término. Las rutas de senderismo por los alrededo-res dejan a la vista un lujo de la naturaleza.

La iglesia parroquial de la lo-calidad se dedica a San Juan Bautista. Se encuentra situada en la parte alta de este municipio segoviano; lo primero que salta a la vista por entre los abundantes árboles que interrumpen nues-tro campo de visión. Se constru-ye en el siglo XVII y cuenta con elementos barrocos muy intere-santes, como una prominente to-rre, situada a los pies del templo.

Santibáñez de Ayllón mantie-ne en su caserío, además, inte-resantes muestras de Arquitec-tura popular representativa de las tierras de Ayllón.

La casa tradicional más fre-cuente es de dos plantas y de estructura rectangular. Gene-ralmente se construye en made-ra, piedras de la zona, la planta inferior, y en adobe, en un en-tramado solo roto por las ven-tanas. Se agrupan unas a otras formando calles irregulares. Un pueblo pintoresco, sin duda.


FRANCOS Y SU ROJIZO TEMPLO DE ORIGEN ROMÁNICO

SARA SUÁREZ VELASCOFOTOS: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

A poca distancia, el turista se encontrará con Francos, —una localidad pedanía del municipio de Ayllón, que estuvo agregado al pueblo de Estebanvela desde antes de 1857 y en el año 1970 ambos se agregaron a la villa ayllonense—. Perteneciente a la Comunidad de Villa y Tierra de Ayllón, en el pueblo destaca una rojiza iglesia dedicada a Nuestra Señora de la Anunciación.

Un templo de origen románi-co que conserva de esta época el ábside, el pórtico y la portada. La cabecera fue reformada en el siglo XVI. Junto a la cabecera se levanta la torre a cuyo campa-nario se sube por una singular escalera de caracol.

El pórtico se abre en el lado sur y consta de puerta y tres arque-rías. Los arcos apoyan en pilares cuadrados con impostas decora-das con las líneas entrelazadas.

La portada, dispuesta en el muro sur de la nave, es de tres ar-quivoltas aboceladas, añadién-dose a la interior medias bolas.

Dentro de la nave se encuentra el coro de madera a los pies, con el baptisterio debajo. La nave se

Afamada iglesia de Nuestra Señora de la Anunciación de Francos.

cubre con cubierta de madera de tres planos. Cerca de la cabecera se disponen dos retablos geme-los, uno a cada lado, dedicado a La Virgen del Rosario y a San Antonio de Padua.

Un arco triunfal apuntado da paso a la cabecera. Es acanala-do, con f lores decorando el in-

terior y estrechos capiteles de volutas. Este tratamiento de-corativo es muy similar al de la portada de la iglesia del conven-to de las Concepcionistas en Ay-llón y en la iglesia de Mazagatos.

El tramo recto del presbiterio se cubre con bóveda de lunetos decorada con motivos geomé-

tricos. El ábside semicircular lo está con bóveda de horno apun-tada, similar a las de las igle-sias románicas de San Miguel y San Juan en Ayllón. En el centro de ábside, cubierto por un reta-blo mayor, se abre una aspillera enmarcada con un estrecho ar-co de medio punto, tal como se

puede apreciar desde el exterior.Los capiteles se decoran con

rudos motivos vegetales. La cor-nisa es de piedra, decorada con medios círculos y apoya en ca-necillos decorados.

El retablo mayor es barroco, dorado y policromado, segu-ramente de la segunda mitad del siglo XVII. En la hornacina central se encuentra la imagen de la Virgen sostenida por án-geles y serafines. A cada lado se disponen dos gruesas columnas salomónicas en planos distin-tos, adornada con racimos de vid, que sostienen una cornisa que reproduce el movimiento de las columnas; en una losa sepulcral dispuesta en el centro de la iglesia aparece el mismo escudo que se puede ver en los capiteles del arco triunfal y la fecha de 1599.

En el lado sur se adosa la to-rre, cuya parte inferior es acce-sible desde la cabecera y se con-virtió en una capilla dedicada a Cristo crucificado, representa-do en una imagen de estilo gó-tico tardío. La escalera de cara-col ocupa un cuerpo cilíndrico adosado a la torre y tienen un pasamanos de piedra que deja hueco el centro.

EL ÚNICO YACIMIENTO DEL PALEOLÍTICO SUPERIOR EN ESTEBANVELA

SARA SUÁREZ VELASCOFOTO S EL ADELANTADO SEGOVIA

En la actualidad, Esteban-vela es una pedanía de Ayllón, pero fue municipio independien-te hasta 1970 con Francos como núcleo de población agregado. Pertenece a la denominada y co-nocida como Comunidad de Villa y Tierra de Ayllón; el río Aguise-

Un mural mostrando la vida en el Paleolítico en el Centro de Interpretación de la Peña de Estebanvela, izquierda, y trabajos de excavación en la zona, derecha. / FOTOS DE ARCHIVO

jo atraviesa dicha localidad en cuyas cercanías se encuentra el yacimiento de ‘La Peña’—al mar-gen derecho de dicho río y pre-cioso paraje natural—.

Popular como ‘La Peña de Es-tebanvela’ es el único yacimiento conocido del Paleolítico Supe-rior de la provincia de Segovia, ubicado al abrigo de una roca caliza en un enclave situado a

un kilómetro del casco urbano del municipio segoviano de Es-tebanvela.

Fue en el año 1999 cuando comenzaron las excavaciones, que finalizaron en el año 2009, y gracias a las cuales se encon-traron restos de mamíferos, pie-zas de arte mueble —entre las que destacan y llaman la aten-ción dos piezas únicas que re-

presentan caballos salvajes, ya que el resto de los hallazgos co-rresponden a arte simbólico—, adornos y diversas herramientas fabricadas en piedra y hueso, en su gran mayoría.

La inauguración del Centro de Interpretación de la Peña de Estebanvela tuvo lugar en el año 2006 y gracias a él se po-día conocer de primera mano el

trabajo de los arqueólogos que han pasado por dicho yacimien-to, así como las reproducciones de los materiales y del arte mue-ble hallado en el yacimiento y una representación de los cla-nes familiares.

En la actualidad, tanto el Cen-tro de Interpretación como el ya-cimiento se encuentran cerrados al público general.


AYLLÓN, UNA VILLA MEDIEVAL CON MUCHO ENCANTOSARA SUÁREZ VELASCOFOTOS: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

En el extremo nordeste de la provincia de Segovia, se encuen-tra la villa medieval de Ayllón —declarada Conjunto Histó-rico-Artístico de carácter na-cional en 1973—. Asentada en la Sierra a la que da nombre, la ‘Sierra de Ayllón’, está corona-da por el pico del Grado, —1613 metros—. A 95 kilómetros de la capital segoviana y en la frontera de la provincia de Soria, a 120 de Guadalajara y 140 de Burgos y Madrid es uno de los pueblos más bonitos de España.

Dominando el paisaje de este enclave, la Sierra de Ayllón con sus cumbres nevadas en invier-no y llenas de vida en primavera ha marcado la historia de este pueblo. Y estampando su abrup-to paisaje nace el Río Aguise-jo, modelando el valle en torno El Convento invita a pasear por la villa y sus alrededores.

El Torreón de La Martina se alza sobre el municipio ayllonense.

Casa-Palacio de Los Contreras, interesante edificio con fachada de estilo gótico isabelino.

al cual se localizan pueblos de singular belleza, en los que bien merece perderse por sus calles, empaparse de su hermosura y descubrir su legado cultural e histórico.

Según los datos del munici-pio, los celtíberos fueron los pri-meros ayllonenses de los que se tiene noticia, según abundan-tes restos aparecidos en el ce-rro donde hoy en día se alza la torre de La Martina. Después llegaron los godos, visigodos y árabes, aunque desde que la

villa de Ayllón fue reconquista-da vio pasar por sus calles a nu-merosos reyes y personalidades como Alfonso VI, Alfonso VII, Fernando III, María de Molina, el Cid Campeador, santos como San Francisco de Asís —al que se le atribuye la fundación del Convento de San Francisco— o Santa Teresa de Jesús.

Especial mención merece que Juan II concedió el señorío de la villa de Ayllón a Don Álvaro de Luna —nombrado en 1423 Con-destable de Castilla—; festividad que se sigue celebrando en la lo-calidad durante el último sábado del mes de julio, —a excepción de este año, por la pandemia que sufrimos—.

Entre los monumentos más emblemáticos de Ayllón desta-ca el arco medieval que da acceso al pueblo, tras pasar el Puente Románico que cruza el río Agui-sejo. Es la entrada principal, de

las tres puertas que tenía la vi-lla, y sobre ella están cuatro es-cudos pertenecientes a las fa-milias más ilustres de Ayllón.

Justo al lado de este arco es-tá la oficina de turismo, donde se puede acercar el turista pa-ra informarse, y el Palacio de los Contreras, que fue mandado construir en 1497 por Juan de Contreras. Un interesante edi-ficio de fachada de estilo gótico isabelino.

Su portada, de sillería, se en-cuentra recuadrada con un cor-

dón franciscano, con tres escu-dos ladeados hacia la izquierda. En caracteres góticos el visitante podrá leer la inscripción: “Rei-nando en Castilla y Aragón los muy altos Príncipes Don Fer-nando y Doña Isabel. Esta ca-sa mando hacer el muy virtuoso fijodalgo: Juan de Contreras el año de MCCCCXCVII”.

En el interior de esta Casa-Pa-lacio —declarada monumento histórico-artístico en el año 1969— se conservan unos be-llos artesonados y un mobilia-rio de gran valor.

Cerca de este enclave está otra de las señas de identidad de Ayllón, su plaza Mayor porticada que se proyecta sobre la Casa Consisto-rial —edificio que al parecer fue el primer Palacio de los Marque-

ses de Villena, a la derecha de la iglesia de San Miguel—.

En el centro de esta singu-lar y majestuosa Plaza está La Fuente —testigo de la historia y evolución del municipio, ya que fue construida en el año 1892 para conmemorar el IV Cen-tenario del descubrimiento de América—.

En el interior del templo de San Miguel, de origen románico tar-dío, se encuentra un excepcional sepulcro de alabastro que sirvió de enterramiento para María Ál-varez de Vallejo y su marido Pe-dro Gutiérrez de César, tesorero y secretario de don Diego I López Pacheco y de su segunda esposa doña Juana Enríquez, marqueses de Villena.

En la actualidad, durante los

meses de verano, dicha iglesia de San Miguel alberga una oficina de turismo. Frente a la espada-ña de dicho templo se encuen-tra la Casa de la Torre, junto a la Plaza Mayor, el edificio más antiguo de los que se conservan en la villa.

Otra de las joyas patrimonia-les del municipio es la iglesia de Santa María La Mayor, de estilo neoclásico, construida entre fi-nales del siglo XVII y comienzos del XVIII, con elementos proce-dentes de otras parroquias ex-tinguidas de la villa.

Destaca por su emplazamien-to, por su planta de cruz latina y porque cuenta con un soberbio campanario de cuarenta metros de altura rematado en una bo-nita espadaña.


La Plaza Mayor porticada de Ayllón es una de sus señas de identidad.

Considerado uno de los pueblos más bonitos de España, bien merece perderse por sus calles y descubrir su hermosura.De la ermita de San Nico-

lás , hoy en día sólo queda la portada románica muy bien conservada que alberga el ce-menterio viejo —que atesora un gran atractivo para los vi-sitantes que acuden hasta esta bonita villa segoviana—.

Su interior, —en donde ya no se realizan entierros—conserva un misterio que hace sentir có-mo el tiempo se paraliza cuando se contempla. Y es que los muros de dicho enclave son de la época del romanticismo.

Ubicado en los extramuros de la villa invita a pasear hasta el convento de San Francisco, —a un kilómetro del casco urbano del pueblo, donde se alzan las ruinas de este majestuoso edi-ficio, fundado, dicen en el año 1214 por San Francisco de Asís. Dicho edificio se quemó y fue levantado de nuevo entre 1733 y 1738. Destaca su fachada de sillería con espadaña y tres ar-cos de medio punto.

En la actualidad es de pro-piedad privada y su interior no se puede visitar pero merece la pena el paseo hasta su ubica-ción para observar y disfrutar del gran trabajo de cantería que se llevo a cabo en la espada-ña, cuya piedra se conserva a la perfección.

De la antigua iglesia o ermi-

ta de San Martín del Castillo, en la actualidad, tan sólo queda el torreón de La Martina y sus cimientos de piedra, que testi-fican que fue un templo de una sola nave y ábside circular. Es-tá situada al sudeste de la me-seta del cerro del Castillo y se accede a ella por las escalinatas de piedra.

Como bien es sabido, Ayllón estuvo en poder de los árabes o musulmanes y así lo demuestran los restos de muros de tapial de-nominados Los Paredones, que aún permanecen en pie a pesar de los años pasados, sobre el ce-rro en el que se encontraba el Castillo de Ayllón.

No es de extrañar que con es-tos numerosos atractivos y re-clamos turísticos que tiene el municipio de Ayllón sean mu-chos los visitantes y turistas que eligen la villa para pasar un día en familia, una velada o un fin de semana.

Y es que, además de numero-sas joyas patrimoniales y monu-mentales como algunas de las que hemos resaltado, el munici-pio es afamado por la hospitali-dad de sus vecinos y por contar con una rica y exquisita gastro-nomía propia de la zona.

Lo más reseñable son las ri-cas carnes obtenidas del gana-do, principalmente ovino, que se

cría en dichas tierras segovianas. Por supuesto, que el plato más exquisito y con más demanda es el cordero asado en el tradicio-nal horno de leña que ofrecen los diversos establecimientos y res-taurantes de la localidad.

Por otro lado, hay que ha-cer mención por haberse con-vertido en una forma divertida

de disfrutar y conocer Ayllón las visitas teatralizadas. Una apuesta diferente que t iene muy buena acogida por parte del público asistente, a quienes les muestran momentos histó-ricos acontecidos en la locali-dad desde el siglo XIII hasta la actualidad.

Algunos de los personajes que

aparecen son el rey Juan II de Castilla, fray Vicente Ferrer y Catalina de Lancaster, —ya que protagonizaron escenas histó-ricas que sucedieron en el mu-nicipio ayllonense—.

También se muestra al visitan-te escenas de la vida cotidiana en el término, desde el punto de vista de pueblo llano.

El Palacio del Obispo de Vellosillo está ubicado en el municipio, saliendo de la Plaza Mayor por la calle que limita la Casa de la Torre. Fue construido a finales del siglo XVI, mandado edi-ficar para su sobrino, del mismo nombre, por Fernando de Vellosillo —hijo ilustre de esta villa que llegó a ser obispo y señor de Lugo. Eminente teólogo, participó en representación de Felipe II en las deliberaciones del Concilio de Trento, llegando a ser Consejero Real—.

Entre los años 1972 y 1983, —tras muchas vicisitudes— el palacio pasa a ser de Propiedad municipal y se procede a realizar una profunda restauración del mismo. En la actualidad, el Palacio del Obispo de Vellosillo es sede del importante Museo de Arte Contemporáneo de la vi-lla y de la Biblioteca Municipal.

Entrada al Palacio del Obispo de Vellosillo, construido a finales del siglo XVI.

8 EL ADELANTADO DE SEGOVIA DOMINGO, 6 DE SEPTIMBRE DE 2020

GALERÍA

GRADO DEL PICO SANTIBÁÑEZ DE AYLLÓN

FRANCOS AYLLÓN FOTO JULIO SÁNCHEZ MIGUEL

LANGUILLA

ALDEALENGUA DE SANTA MARÍA MADERUELO

MAZAGATOS

PUBLICIDAD

DOMINGO, 6 DE SEPTIEMBRE DE 2020 EL ADELANTADO DE SEGOVIA 9

LANGUILLA, ENTRE TONOS ROJIZOSIURI PEREIRAFOTOS: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

Alejada de la capital sego-viana, a unos 100 kilómetros de aquella, y al límite de la provincia de Soria (a 30 kilómetros de San Esteban de Gormaz y a 43 de El Burgo de Osma), la tonalidad ro-jiza que recubre las fachadas de los edificios de las tierras de Ay-llón se hace presente también en la localidad de Languilla.

Pertenece a la comunidad de Vi-lla y Tierra de Ayllón y en el térmi-no se agrega la pedanía de Maza-gatos. Su origen es medieval y se debe a la repoblación que realiza-ron los pueblos sorianos proceden-tes de Langa de Duero, una ciudad de importante papel y relevancia histórica. De aquella repoblación se conserva el topónimo del lugar, en evidente relación con el lugar de procedencia de los repobladores.

Los antiguos pobladores de Languilla se dispusieron en la fal-da de un pequeño cerro, a resguar-do de un talud y de los meteoros adversos. Allí se construyó estra-tégicamente el municipio, orien-tado de tal forma que se consigue el mayor número de horas de sol.

En las tierras de Languilla con-fluyen las aguas de los ríos Agui-sejo y Riaza, a pocos metros del casco urbano. En el cruce de los ríos crece un frondoso bosque o soto de vegetación de ribera con

álamos, chopos, fresnos, saúcos, espinos y madreselva, también plantas aromáticas como esplie-gos y tomillos.

Fuera de los bosques de ribera predominan los páramos y cam-pos de cultivo de cereal, princi-pal actividad económica de los municipios del valle. Un paraje igualmente importante para el pastoreo de ganado. De paisaje ondulado, verde, repleto de natu-raleza, bañado por las aguas de dos ríos y de especial belleza que hará las delicias de los amantes del senderismo.

Las edificaciones en el destaca-do color rojizo van desde las ca-sas de los vecinos hasta la iglesia parroquial de la localidad, bue-nos ejemplos de la arquitectura tradicional de la sierra de Ayllón. Se realizan en adobo o piedras ex-traídas de las proximidades, que le proporciona ese característico tono rojizo.

Cabe destacar la iglesia parro-quial de San Miguel Arcángel. De época románica, también presen-ta el característico color rojizo de las piedras de las canteras de la zona. Se trata de un templo pe-queño, pero muy interesante. Del original románico conserva una espléndida portada de arquivol-tas sustentadas por bellos capite-les figurados. Se representan rela-tos de escenas del Génesis, como Adán y Eva en el Paraíso, la Ma-

Ayuntamiento de Languilla y, al fondo, una fachada donde se puede apreciar los tonos rojizos de las piedras.

tanza de los Inocentes y la deca-pitación de San Juan Bautista.

Se encuentra en buen estado de conservación gracias a que está resguardada por un pórtico ce-rrado. La creencia apunta a que fueron obra de los mismos artífi-ces de la catedral de El Burgo de Osma. En el interior de la iglesia se pueden vislumbrar interesan-tísimos retablos y una cruz pro-cesional realizada en Sigüenza.

DOMINGO, 6 DE SEPTIEMBRE DE 202010 EL ADELANTADO DE SEGOVIA

Portada románica de la iglesia de San Miguel Arcángel, en Languilla.

* Mazagatos

La pedanía de Mazagatos se sitúa junto al río, antes de llegar a Languilla desde Ay-llón, en la carretera que comu-nica con Aranda de Duero. Ac-tualmente es la única pedanía poblada de Languilla.

Entre el patrimonio de Ma-zagatos nos encontramos otra

muestra del románico reli-gioso. Se dedica al San Juan Bautista y de aquella primiti-va época se conserva su porta-da, igualmente dominada por el color rojo.

Una gran espadaña indica su situación en este pequeña localidad de apenas una trein-

tena de habitantes. En el inte-rior destaca la bóveda de cru-cería de estilo gótico y la capilla mayor.

Cabe destacar que se han en-contrado grabados en la zona de la actual población que in-dican que, en el pasado, tuvo relativa importancia.

PARADA OBLIGATORIA POR EL CURSO DEL RÍO RIAZA

IURI PEREIRAFOTO: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

Aldealengua de Santa María, a medio camino entre Maderuelo y Ayllón, encorsetado en el Valle que traza el río Riaza a su paso y junto a la carretera a Aranda de Duero, es un pequeño pueblo segoviano de 63 habitantes.

Unos pocos kilómetros separan a Aldealengua de Santa María de la cabecera del Embalse de Lina-res. Se sitúa en el margen derecho del río Riaza; sus aguas heladas del

Vista del pueblo de Aldealengua de Santa María desde las inmediaciones del río.


deshielo desembocan en el embalse, dejando a su paso una vegetación típica de las tierras húmedas aleda-ñas al río: álamos, chopos y fresnos son algunos de los árboles más nu-merosos. Una excelente ubicación de ribera donde se puede disfrutar de los acogedores parajes que con-forman sus bosques.

Aldealengua de Santa María, a lo largo de la historia, ha tenido varias denominaciones. En primer lugar, Aldea Lengua. ‘Luenga’ era utilizado antiguamente para de-signar a las aldeas ‘largas’, aunque no se sabe con exactitud si su to-

La iglesia parroquial de Aldea-lengua está dedicada a Nuestra Señora de la Asunción. El templo original era románico, aunque de este estilo solo quedan algunos elementos que se reaprovecharon. Por ejemplo, la puerta de ingreso al templo es románica pura, estan-do adornada con tres arquivoltas sustentadas por capiteles, donde aparecen representaciones esce-nográficas como una lucha entre leones y unas sirenas de muy ori-ginal corte.

La iglesia de Aldealengua de San-ta María se ubica en la parte alta de la localidad. Al exterior se dis-pone rodeando el edificio un mu-ro de cierta altura que se dice pudo servir como protección. De hecho, en la torre se puede identificar una abertura llamada ballestera, que normalmente se abre en los mu-ros de una fortificación destinada a disparar con ballesta.

La mayor parte de lo que pode-mos observar dentro del templo es ya de época barroca. De este estilo destaca su retablo mayor, obra de Antonio Martínez, acompañado en los laterales de dos retablos más, además de un buen Cristo crucifi-cado que parece gótico. También en la iglesia se guardan varios objetos de orfebrería, como una buena cruz procesional de fines del gótico, rea-lizada por plateros segovianos.

ponimia se debe a este supuesto. Posteriormente, se llegó a conocer con el nombre de Aldealengua de Maderuelo, por haber pertenecido a su Comunidad de Villa y Tierra. Finalmente, ya en el siglo XX, to-mó el actual nombre. Además de la localidad de Aldealengua de San-ta María, el término municipal se componía del hoy desaparecido si-tio de Valdelperal.

Al igual que otros municipios de la zona, Aldealengua de Santa Ma-ría estuvo integrada en la provincia de Burgos, en un intento de refor-ma provincial, situación que se re-

virtió tiempo después. Y, lo mismo que aquellos pequeños núcleos, es-taba incorporada a la Comunidad de Villa y Tierra de Maderuelo.

La actividad económica tiene un protagonista: el campo. Gira en to-no al sector primario; agricultura y ganadería se sirven de las excelen-tes tierras de cultivo, en el primer caso, y pastos, en el segundo, para desarrollar su actividad. Por otra parte, es común que algunos de los vecinos del municipio se desplacen a trabajar a otras localidades cer-canas como Maderuelo, Ayllón o Aranda de Duero.

ALCONADA DE MADERUELO, PARA EVADIRSE DE LA RUTINAIURI PEREIRAFOTO: JOSE ANTONIO SANTOS SEGOVIA

Alconada de Maderuelo, un municipio que geográficamente se sitúa entre Ayllón y Maderuelo, aparece sobre un pequeño otero en el horizonte del valle domina-do por tierras labrantías, por don-de avanza el río Riaza y por cuyo término atraviesa también el río Riaguas, antes de llegar a la cola del Embalse de Linares.

Cabe mencionar que los habi-tantes de Alconada de Maderuelo conocen con el nombre de Riejo al río Riaguas, o también como río Bercimuel, mientras que el río Riaza se denomina Río Mayor, por ser el río principal de la zona.

En torno a ellos crece una ve-getación típica de ribera que de-pende fundamentalmente de la humedad del suelo, como chopos, fresnos, saúcos, álamos, entre otros. Se hace idóneo pasear por sus rutas junto al río, ya sea solo o en familia; de todas formas se puede disfrutar de la más apaci-ble tranquilidad.

Sin embargo, nuevamente, co-mo en la mayoría de los pueblos ve-cinos, predominan los campos de cultivo de cereal y los interminables prados, donde también pasta el ga-nado. La zona de Alconada se con-virtió en un punto fundamental de pastoreo, gracias a sus excelentes pastos, al cruce de los ríos Riaguas y Riaza y, no menos importante, la cercanía a la Cañada Real Soriana Occidental. Un paraje, como veni-mos comentando, muy tranquilo pero disfrutable, apropiado para el paseo y el descanso.

Durante un tiempo, Alconada de Maderuelo estuvo integrada en la provincia de Burgos, pero, al realizarse la actual distribución de provincias en 1833, el municipio pasó a quedar dentro de la provin-cia de Segovia. En aquel momento, el municipio aparece mencionado Iglesia de San Martín de Tours presidida por una espadaña.

DOMINGO, 6 DE SEPTIEMBRE DE 202012 EL ADELANTADO DE SEGOVIA

como Halconada, pero también se llega a citar como Villa Realenga de Alconada, perteneciente al se-ñorío de don Álvaro de Luna, el noble y Condestable de Castilla, y del Conde de Miranda.

Antes de todo esto, en el siglo XIII, durante los duros años de reconquista y cuando estas pe-queñas poblaciones pertenecían a la Villa y Tierra de Sepúlveda, el nombre de la población era Al-conada de Arriba. Siglos después, en una situación ya muy diferente (siglo XX), se le añadió el sufijo ‘de Maderuelo’ por pertenecer a su Comunidad de Villa y Tierra.

Tal vez el patrimonio más apre-ciado de Alconada de Maderue-lo sea su entorno natural. Desde el otero sobre el que se sitúa, los campos de labranza, el cauce de los ríos recubiertos de una fron-dosa vegetación y la estampa del paisaje, tranquilo y sosegado, se convierten en un lugar rural ex-celente para evadirse de la más que agotadora rutina.

Igualmente destacable, y so-bre el punto más alto de la loca-lidad, es la iglesia parroquial de San Martín de Tours, uno de los pocos templos en Segovia que tie-nen el altar orientado al este. El edificio, barroco, se erige en una forma cuadrada. La fachada tra-sera comunica directamente con la Dehesa de las Guadañas, mien-tras que en la fachada delantera se levanta una sencilla torre-es-padaña.

Dentro del templo destaca, en-tre otras obras, su retablo mayor presidido por el santo titular, pa-trón de la localidad, blandiendo en su mano una espada. Se acom-paña de algunas otras imágenes, así como unas originales pintu-ras murales. Además, se puede contar con varias piezas de plata entre su patrimonio sacro; desta-ca un relicario de san Luis Gon-zaga, una custodia de sol hecha en Segovia a mediados del siglo XVIII y un cáliz realizado en Va-lladolid por Francisco Billamar en 1748.

Panorámica de los bosques de ribera y prados del entorno de Alconada de Maderuelo.

ALCONADILLA, A LAS PUERTAS DEL EMBALSE DE LINARES


Donde se cruzan el río Ber-cimuel y el río Riaza y a menos de 4 kilómetros de Maderuelo y de uno de los atractivos turísti-cos del valle, el Embalse de Li-nares, se encuentra la localidad de Alconadilla, que pertenece al municipio de Alconada de Ma-deruelo, a tan solo 2 kilómetros.

Cuentan los sabedores de la historia de Alconadilla que po-siblemente el poblado original estaba situado entre la desembo-cadura del río Riaguas, también conocido con el nombre de Ber-cimuel o Riejo, con el río Riaza, cerca de las eras.

Este último, más caudaloso, se nutre de agua de deshielo, per-mitiéndose durante más tiempo un caudal continuo. El río Ber-cimuel, por otra parte, se nutre del agua de la lluvia, por lo que es menos caudaloso. Sea como sea, esta primera ubicación te-nía una razón de ser: la rica ve-getación del entorno, la vega y los huertos.

Su antiguo nombre de 1247 era Archonada de Yuso, es decir, Al-conada de Abajo; la actual Al-conada de Maderuelo se queda-ría, así, con el título de Alconada de Arriba. Tiempo después, a lo largo del siglo XVI, se llamaba ya Alconadilla. A principios del siglo XVIII, después de la desa-parición, el pueblo fue adquirido por la Marquesa de Villena, y es

IURI PEREIRAFOTO: JOSE ANTONIO SANTOSSEGOVIA

Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Presentación y, muy cerca, se puede ver una fuente de agua de dos caños de 1905.

Llegando a Alconadilla una edificación circular salta a la vista. Es uno de los palomares de la localidad, cuyo fin último era la cría de aves pequeñas como palomas para consumo. A día de hoy, se restauran para darles otros usos, como vivienda o merenderos.

probable que pasados unos 20 años, a mediados del siglo XVI-II, algún descendiente de los an-tiguos moradores comenzara la reconstrucción de Alconadilla en la ubicación actual.

Según el Catastro del Marqués de la Ensenada, en Alconadilla en 1752 “no había pobres” y, a juzgar por los datos del Catastro, los vecinos parece que vivían del

producto de las tierras del tér-mino, y que trabajaban a renta, por lo que todos los labradores tenían una o dos yuntas. Los que llegaron tenían suficiente dine-ro para pagar la renta que se les imponía.

El entorno natural de Alco-nadilla está dominado por los paisajes de campos de cultivo, bosques de rica vegetación de ri-

bera y las aguas que f luyen por el cauce de los ríos en los meses más lluviosos. Pero, más allá de este magnífico paraje rural, Al-conadilla cuenta entre su patri-monio con la iglesia de Nuestra Señora de la Presentación.

El templo está construido en un solo volumen rectangular y la mampostería con sillares refuer-za los vanos y las esquinas. En

el interior, la nave y el presbite-rio se separan. El retablo mayor alberga una imagen de talla ro-mánica de la Virgen con el Niño.

Al exterior de la iglesia, a po-cos metros, se puede ver una fuente de dos caños, creada pa-ra proveer de agua a los ani-males domésticos y evitar des-plazamientos a fuentes de los alrededores.


MADERUELO, ENCLAVADO EN TIEMPOS LEJANOS

SARA SUÁREZ VELASCOFOTOS: EL ADELANTADO / J.A.SANTOSSEGOVIA

Maderuelo es una de las vi-llas más antiguas y bonitas de la provincia de Segovia, donde pa-rece haberse detenido el tiempo. Declarada Conjunto Históri-co-Artístico en 1993, se extien-de a lo largo de un cerro sobre un meandro del río Riaza —en el área correspondiente al ex-tremo oriental de la sierra de Pradales o Serrezuela— y sus calles aún guardan el encanto de su origen medieval.

Fue el obispo Rodrigo Jiménez de Rada quien cita la existencia del Castro Maderolum como for-taleza liberada por Sancho Gar-cés entre los años 1010 y 1013. Y el ilustre político Álvaro de Luna, condestable de Castilla, quien honra al pueblo y sobre el que se cuentan algunas leyendas relacionadas con esta bonita lo-calidad segoviana, donde reco-rrer sus calles y plazas supone disfrutar de una villa medieval amurallada, con rincones con magia, casas blasonadas y ca-lles empedradas.

Lo primero que llama la aten-ción al adentrarse en la villa es el ‘Arco de la Villa’ o entrada em-blemática de Maderuelo que pro-tege el acceso oeste. La muralla, que conserva buena parte de los lienzos y dicho Arco, llegó a tener cuatro puertas, torreones defen-sivos y el castillo integrado en el extremo oriental. Y el pueblo llegó a tener de ocho a diez pa-rroquias, de las cuales se con-servan el templo de Santa Ma-ría y las ermitas de San Miguel, Veracruz y Castroboda.

El Arco de la Villa aún con-serva los cerrojos, unas gruesas puertas de madera acorazada con adornos y policromía blin-daje del siglo XV y la poterna o puerta menor que daba al foso, ya que hasta principios del siglo XX disponía de foso y puente.

Este conjunto defensivo es una entrada abovedada cuya abertu-ra intramuros es un alto arco de medio punto y la abertura exte-rior es apuntada. Adosado al ar-co exterior hay otro medio pun-to, que presenta un hueco central y realiza la función de matacán para proteger y defender el ac-ceso del enemigo.

La estructura de la aldea es irregular, predominando las ca-lles estrechas y alargadas, adosa-das a la muralla. Además se dis-tinguen dos ejes longitudinales que convergen en las puertas de los extremos del recinto y que es-tán atravesados por numerosos callejones trasversales.

El conjunto de esta villa ofre-ce un interés incuestionable co-mo ejemplo de pueblo medieval

El embalse del Arroyo de Linares comprende desde los pies de Maderuelo hasta las Hoces del Río Riaza.

defensivo de gran impacto pai-sajístico por el entorno que le rodea.

Mención especial merece que en el año 1951 se inauguró el em-balse de Linares, en el río Riaza, que sumergió el pueblo de Li-nares del Arroyo, provocando el práctico despoblamiento de Maderuelo. Esta condición de lugar casi despoblado indujo al naturalista Félix Rodríguez de la Fuente a promover el Refugio de Aves Rapaces de Las Hoces del Riaza, — inaugurado en el año 1975 por el entonces Prín-cipe de España Juan Carlos de Borbón —.

Maderuelo mantiene una ar-quitectura de adobe, madera y piedra de sillería que le son pro-pias y diferentes al resto de lo-

calidades vecinas y contiguas. De su valorado patrimonio ar-tístico y monumental, el edificio que mayor tradición sagrada tie-ne es la pequeña ermita de la Ve-ra Cruz, declarada Monumento nacional en el año 1924, que sor-prende al visitante por albergar uno de los mejores conjuntos de frescos románicos castellanos.

En el año 1950, la construc-ción del embalse dio lugar a su expropiación y obligó a trasladar los frescos y las pinturas que hu-bo en sus paredes, una auténtica muestra de la iconografía me-dieval, al Museo madrileño del Prado. Es el templo más antiguo del municipio, del siglo XII, y la tradición atribuye su construc-ción a los templarios.

Enfrente de Maderuelo se en-

‘El Arco de la Villa’, entrada emblemática a la localidad.

cuentra la ermita de la Virgen de la Castroboda, patrona del pue-blo, de finales del siglo XVIII, que los vecinos levantaron con su esfuerzo. Fue edificada sobre una ermita anterior, dedicada a San Roque, el protector contra la peste.

El visitante al llegar a la Pla-za triangular de San Miguel se encontrará con una original at-mosfera medieval formada por los altos edificios que la circun-dan y por dos portadas románi-cas y una gótica. Sobre una de estas portadas se encuentra el escudo de estilo rococó, de los marqueses de Villena y condes de San Esteban. De esta zona ca-be destacar la iglesia-palacio de San Miguel, una antigua ermita cuyos muros formaron parte del

conjunto defensivo oeste y que ha sufrido profundas remode-laciones. En el s. XV se adosó una segunda nave rectangular, rematada por una espadaña. El torreón de la ermita románica de ábside semicircular se convirtió en vivienda; y fue reconstruida en el año 1981 gracias a la Jun-ta de Castilla y León y al propio Ayuntamiento de Maderuelo. En la actualidad se ha convertido en un edificio muy relevante por la actividad social y cultural de la villa.

Del municipio también des-taca la conocida como ‘Puerta del Barrio y Casa-Torre del Hos-pital’, —conjunto defensivo que protege el único acceso desde la muralla de la umbría, es una en-trada abovedada entre dos arcos de medio punto a los que se ado-sa una casa que fue un antiguo torreón, que posteriormente se usó como albergue de peregri-nos y gente necesitada.

Se denomina Plaza del Barrio por ubicarse en el barrio judío de Maderuelo—; la Plaza del Baile, dedicada a Pérez de Seoane, be-nefactor de la villa; la plaza de Santa María, que ocupa la par-te central del cerro bajo la im-ponente iglesia de Santa María del Castillo, llamativa por su ta-maño y por la gran diversidad de estilos que conserva —siendo el único templo segoviano con res-tos de estilo califal—; el Torreón del Castillo, uno de los últimos vestigios del castillo que prote-gía el acceso norte y el especta-cular mirador que se extiende bajo el atrio porticado de la igle-sia de Santa María, entre otros muchos reclamos turísticos de interés.

Por supuesto, el amante de la naturaleza y del senderismo tie-


Las calles de Maderuelo aún guardan el encanto de su origen medieval.

Jóvenes del pueblo se dan un baño en el embalse, junto a la ermita.

ne una parada obligada en Ma-deruelo donde podrá disfrutar de numerosas actividades, rutas en plena naturaleza o un día de merienda en la conocida como ‘zona de la playa’.

Y es que, el embalse de Lina-res del Arroyo comprende desde los pies de Maderuelo hasta las Hoces del Río Riaza, unas 690 hectáreas, donde la gran varie-dad existente de ecosistemas de gran riqueza natural le han he-cho merecedor de la propuesta como ‘Espacio Natural Protegi-do de la Unión Europea, Natu-ra 2000’.

Además, está catalogado co-mo humedal protegido donde subsisten numerosas especies de anátidas junto a la nutria y la garza real. Seguidamente del embalse están las hoces del río Riaza, zona de especial protec-ción para las aves. Un espacio natural formado por un conjun-to de cañones y barrancos que se extiende a lo largo de doce kiló-metros del cauce medio del río Riaza.

El paisaje predominante en las Hoces del río Riaza son las carrascas, quejigo, riscales y parameras. También hay sabi-nas, enebros, majuelos, esplie-gos, salvias…, entre otros, y se han detectado más de trescien-tas especies de vertebrados, pe-ro la relevancia de esta área está en alojar en sus paredes una de las colonias de buitre leonado y de alimoche más densas, impre-sionantes y numerosas de toda Europa.

Por el lo, no es raro que el sender ista o la persona que realice alguna actividad como piragüismo pueda divisar con-centraciones de más de cincuen-ta buitres sobrevolando estos preciosos parajes.

Por último, hay que resaltar

una senda semicircular de unos cuatro kilómetros, ampliable a diez, con principio y fin en Ma-deruelo que recorre la margen izquierda del embalse de Linares del Arroyo, donde el caminante podrá contemplar cultivos, ene-brales, pinares y las ruinas de la antigua estación de ferrocarril de Maderuelo. Es una ruta de dificultad media-baja y de una duración aproximada de una a tres horas.

Y, por supuesto, el Sabinar de Honruez, un fabuloso bosque de sabinas, con algunos ejempla-res de grandes dimensiones, que hacen las delicias de cualquier amante de la naturaleza. En este sitio está el Santuario de Nuestra Señora del Milagro de Honruez, patrona de la Tierra de Maderue-lo de inf luencia barroca de 1768. Y según cuenta la tradición, en una de esta Sabinas se apareció La Virgen.

6 de septiembre de 2020 disfruta segovia … · San Francisco de Asís —al que se le atribuye la...

Documents

Transcript of 6 de septiembre de 2020 disfruta segovia … · San Francisco de Asís —al que se le atribuye la...