Almansa, mi pobre Almansa.

22
Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 197 [...] Fue en 1931 cuando conocimos y ensayamos en España la técnica de trabajo escolar que preconizaban unos maestros franceses colaborado- res entusiastas en las experiencias del maestro Freinet. Dos maestros, en sus escuelitas ru- rales de la provincia de Lérida, se deci- dieron a fabricar la sencilla prensa de madera, y a procurarse el elemental material de imprenta. La prueba fue en extremo animadora. Ningún mate- rial, ningún medio de trabajo se había revelado como aquél, interesante y atractivo. Desde los primeros momen- tos nos dimos cuenta de las hondas y amplias posibilidades latentes en aquella actividad. Ante la alegría, ante el afán apasionado de los niños, no ESTUDIS Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros Per Claudio Lozano Seijas Universitat de Barcelona

description

El exilio de Herminio Almendros

Transcript of Almansa, mi pobre Almansa.

Page 1: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 197

[...] Fue en 1931 cuando conocimos yensayamos en España la técnica detrabajo escolar que preconizabanunos maestros franceses colaborado-res entusiastas en las experiencias delmaestro Freinet.

Dos maestros, en sus escuelitas ru-rales de la provincia de Lérida, se deci-dieron a fabricar la sencilla prensa demadera, y a procurarse el elementalmaterial de imprenta. La prueba fueen extremo animadora. Ningún mate-rial, ningún medio de trabajo se habíarevelado como aquél, interesante yatractivo. Desde los primeros momen-tos nos dimos cuenta de las hondas yamplias posibilidades latentes enaquella actividad. Ante la alegría, anteel afán apasionado de los niños, no

ESTUDIS

Almansa, mi pobreAlmansa...

L’exili d’Herminio Almendros

Per Claudio Lozano Seijas

Universitat de Barcelona

Page 2: Almansa, mi pobre Almansa.

198 Educació i Història

dudamos en la trascendencia del des-cubrimiento y en la importancia de laconquista [...].

El éxito de los primeros ensayosfue extendiéndose entre los maestros.Los mismos que habían hecho la ex-periencia se sentían animados de ungran impulso proselitista. No sólo susniños, su clase, habían cobrado nuevavida, ritmo y entusiasmo nuevos, sinoque el mismo maestro se sentía rena-cer ante un horizonte gozoso y am-plio de nuevas posibilidades.

Nuevos maestros de escuelas rura-les de España se pusieron en relacióncon los que habían hecho los prime-ros ensayos y se dispusieron a secun-darlos. La extensión se hacía con difi-cultad. En primer lugar no era fácilprocurarse un material que no eraproducido industrialmente. Los com-pañeros franceses se desvivieron enayudarnos y nos proporcionaron losprimeros lotes del material dispuestoy fabricado por ellos, pero su adquisi-ción así ofrecía dificultades. La soluciónnos la dio también el ejemplo de los compañeros franceses. En cuantohubo una docena de maestros que en-sayaban este trabajo en sus escuelas,constituyeron una cooperativa. El de-sembolso de unas humildes accionesfue suficiente para comenzar la fabri-cación del material en España. Seconstruyeron rudimentarias prensas

metálicas, componedores, rodillos,etc. Y se adquirió el material restante:cajas, tipos de imprenta, tintas, papel...La Cooperativa Española de la Im-prenta en la Escuela, comenzó a pro-ducir un material apropiado y a distri-buir entre los cooperadores todo lonecesario para el nuevo trabajo [...].

Inmediatamente se organizaronlos intercambios mensuales de cua-dernos impresos entre las escuelas. Eséste un formidable motivo más, con-secuencia natural del nuevo trabajo,que ensancha y encauza el interés delos escolares y que suscita la actividadencaminada a una finalidad que, amás de ser apasionante, tiene en sícualidades y consecuencias de alto va-lor moral y social. Es preciso tambiénhaber asistido al gozo producido enlos niños por el intercambio de im-presos, para comprobar que es unafunción natural de un proceso encuya realización el niño pone todo suser, poniendo en juego todos sus re-sortes íntimos.

En el mes de junio de 1934 cele-bróse en Lérida el Primer Congreso delos cooperadores y los simpatizantescon la nueva técnica. La exposición detrabajos de la docena de escuelas coo-peradoras, atrajeron la curiosidad y elinterés de buen número de profesio-nales. En las sesiones de aquellaasamblea, de unos veinte maestros es-

Page 3: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 199

casos, se convinieron modificacionesdel material, ampliación de los servi-cios cooperativos, y se insistió muchoen la necesidad de respetar y seguircuidadosamente los principios de lanueva técnica escolar, garantía de re-novación fecunda de la labor de nues-tras escuelas [...].

El Segundo Congreso de la TécnicaFreinet en España se celebró en Hues-ca, en julio de 1935. Unos cuarentamaestros de Cataluña fueron a mos-trar su experiencia a maestros de tie-rras de Aragón. Ya en este curso secontaba con unas cincuenta escuelasdiseminadas por todas las regiones deEspaña, que trabajaban siguiendo lanueva técnica.

En el Congreso de Huesca los coo-peradores convinieron las condicionesde un reglamento de los intercambiosescolares nacionales e internaciona-les, intercambios organizados en equi-pos de escuelas, controlados por el ór-gano central de la Cooperativa. Secomenzaba el intercambio copiosocon escuelas de naciones de Europay con las de América hispana en dondealgunas escuelas, puestas en relacióncon las de España, comenzaron el nue-vo trabajo y se entregaron a una cola-boración entusiasta.

Ya en marcha el grupo cooperadorse hacía preciso un boletín que fuerala expresión de la experiencia y de las

reflexiones de los compañeros, que atodos los mantuviera unidos, en ten-sión y en forma. En el Congreso deHuesca se acuerda la publicación de un boletín mensual en el que se va-yan publicando fichas. Los ficherosconstituyen el instrumento que ha deayudar poderosamente a completar lanueva manera de actuar en la escuela.

El curso 1935-1936 es para el grupoun curso aprovechado. Se publica re-gularmente Colaboración, el boletínmensual. Los compañeros —caso insó-lito en España— se embalan en la obracooperadora al servicio de la renova-ción de la escuela. Se publican fichasde trabajo en el mismo boletín. El fi-chero general y el fichero de cálculohan comenzado. Se publican tambiéntres folletos de la colección «Lo que es-criben los niños». Lecturas para niños,escritas por niños, surgidas de asun-tos suscitados por la técnica de la re-dacción libre. Se pone una gran espe-ranza en la colección «Lo que escribenlos niños», material insuperable paralectura infantil. Se edita por la Coope-rativa la traducción del libro de Frei-net La imprimerie à l’école, technique

nouvelle d’éducation populaire.

Llegan nuevas adhesiones, el gru-po se va ensanchando, de todas las re-giones de España llegan consultas, sepide consejo y dirección para ensayarel trabajo de la imprenta.

Page 4: Almansa, mi pobre Almansa.

200 Educació i Història

Se planea el Congreso anual paralos días 20, 21 y 22 de julio en Man-resa. El Congreso promete ser inte-resante y concurrido. Nuevos pla-nes, nuevas creaciones para el cursopróximo. Intensificación de la publi-cación de fichas de trabajo para laclasificación del fichero por el siste-ma decimal, proyecto de adquisi-ción para las escuelas del grupo, deaparatos de cine y de gramolas, pro-yecto de registrar en discos nuestrasbellas canciones populares, paraque todo eso llegue a las escuelasrurales, por virtud del esfuerzo coo-perativo.

Todo un plan de trabajo para nor-malizar una técnica escolar capaz decrear una escuela popular a tono connuestro tiempo.

El proyecto de Congreso quedó enademán frustrado. El 18 de julio co-mienza la tragedia española.

Tras los primeros esfuerzos paraorganizar la defensa del pueblo, co-mienza la época de estructuración dela zona leal. Amplio plan de creaciónde escuelas, aprovechamiento de edi-ficios, preparación de maestros. Obrade gran volumen. La obra del pequeñogrupo cooperador queda amortigua-da. Compañeros en las líneas del fren-te, compañeros ocupados en trabajosde retaguardia...

La obra emprendida está circuns-tancialmente amortiguada, pero tienevalores decisivos, valores latentes, yrenacerá como una valiosa aportacióna la tarea de crear la escuela que nece-sita el pueblo.1

Para María Cuyás. Cortes, núm.558, 4t. Barcelona.

Estas notas2 las escribo por si algúndía puede leerlas May. Me dijo ella que

1. H. ALMENDROS, «Balance de una experiencia en escuelas de España...», Revista de Pedagogía (Bar-celona, FETE), núm. 182-183 (agost-setembre 1938), p. 207-216. Més informacions relatives als con-tinguts d’aquest treball, es poden trobar en els següents estudis: A. BLAT GIMENO, Herminio Almendros

Ibáñez: Vida, época y obra, Almansa, Ayuntamiento de Almansa, «Cuadernos de Estudios Locales»,núm. 13 (octubre 1998), 112 p.; F. JIMÉNEZ MIER TERÁN, Seis experiencias de educación Freinet en Cataluña an-

tes de 193, Fraga, Aula Libre, 1994, i Freinet en España: La Revista Colaboración, Barcelona, EUB, 1996. D’a-quest mateix autor cal consultar el seu llibre Un maestro singular: Vida, pensamiento y obra de José de Ta-

pia Bujalance, 3a ed. revisada i il·lustrada, Mèxic, 1996.2. El text central d’aquest relat ha estat extret del Diario: 1939-1940 d’Herminio Almendros, pro-

cedent de la documentació de la seva vídua —ja traspassada— Maria Cuyás. Aquest diari ha estat cer-cat, estudiat, transcrit i anotat per les professores Carme Domènech i Amparo Blat, amb vista a laseva propera publicació. Ambdues investigadores van presentar un avanç del seu estudi l’any 1999,en el congrés «L’exili cultural de 1939», celebrat a la Universitat de València del 1 al 4 de desembred’aquell any.

Page 5: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 201

las escribiera diariamente, explicandosólo el discurrir cotidiano, sin preten-sión de diario íntimo, sin literatura ysin más pretensión que dar cuenta delo más saliente de lo que me acontece.

Al principio decidí no escribirlas,porque la situación era peligrosa e in-cierta y no me parecía prudente decla-rar los sucesos y mi situación de refu-giado.

Comencé a escribir sin olvidar undía desde el 4 de marzo [de 1939]. Des-pués he llenado a grandes rasgos el es-pacio de los días primeros.

30 de enero

Hemos llegado a La Preste, José Mª[Ferrater Mora], Solsona, Bonilla y yo.Hemos llegado rendidos, deshechos.Desde [Prats de] Molló, todo el día ne-vando. El primer intento de atravesarel puerto, más de dos horas hasta per-dernos extenuados entre la nieve de lamontaña, para regresar desilusiona-dos. El segundo intento, con guía has-ta franquear la montaña con 40 cm.de nieve. La caminata, hundidos lospies y a pasos lentos y cortos, la he so-portado mejor pronunciando a cadapaso una sílaba, tres sílabas seguidasy un nombre. Tres horas de montañanevada, hasta la frontera francesa.Desde allá arriba, ya anochecido, he-mos visto el primer pueblecito fran-

cés. Esperamos a que se hiciera de no-che. Había que pasar el río no por lapasarela, para no encontrar a los gen-darmes. Hemos rodeado la orilla delrío, por fin, ya noche obscura, nos de-cidimos a pasar el río a vado. Hemosllegado a la orilla opuesta hechos unasopa. Mi abrigo pesa muchos, muchoskilos. De todas maneras respiramospor primera vez con alegría.

Hemos llegado a una casa que noshabían indicado en Molló. Íbamos he-chos una lástima. Nos han mirado concierta conmiseración y con no pocodespego. Nos han dado cena y hemosdormido con un sueño profundo. Lafatiga nos había dejado rendidos. A lamañana siguiente hemos telegrafiadoal Sr. Bonilla, padre de uno de los cua-tro. Está con su familia en Ameli[e] lesBains. También a Pagès y a Massé. Alas diez de la mañana ha venido el Sr.Bonilla en un auto. Hemos ido con élhasta Ameli[e], donde hemos comido.Al final de la comida ha llegado Pagès.Nos ha recogido a Solsona, a Ferratery a mí para llevarnos a Perpiñán. Sol-sona es un muchacho (del comercio)q[ue] trabajaba en el mismo despachoq[ue] Ferrater en el C. G. Hemos pro-metido seguir juntos, en lo posible.

Hemos pasado con el coche porentre campos de concentración, por en-tre muchos gendarmes. No nos po-díamos figurar el peligro que corría-

Page 6: Almansa, mi pobre Almansa.

mos. Todos los que han entrado sonrecogidos e internados en campos deconcentración, como rebaños. Nadanos han dicho. Al llegar a Perpiñán nosha detenido el coche un gendarme ynos ha preguntado por los papeles.Solsona y Ferrater no llevan ningúndocumento. Yo he enseñado mi pasa-porte y nos han dejado pasar.

Al llegar [a] casa de Pagès ha salidoél a informarse y ha regresado paradecir que los dos, Ferrater y Solsona,no debían permanecer en Perpiñánpor no tener documentos. Los ha lle-vado a la estación, ha sacado un bille-te para los dos hasta París, 300 fr. cadauno.

A la mañana siguiente hemos reci-bido un telegrama en el q[ue] nosanuncian que han llegado sin nove-dad.

Yo me he quedado dos días en Per-piñán sin salir de casa. Pagès ha idopor el Centro Español y me ha dicho el

nombre de españoles que están o hanpasado por allí: Piñol, Coll y Mas, etc,etc. Me ha dicho que dejara una listade mis amigos por si pasan, poderayudarlos. Ha venido Massé y me hadado 500 francos. Cousteau me ha dado100. Entre él y Pagès me han provistode ropa interior. Por el camino tuveq[ue] tirar el maletín. Pagès me hadado un corte de traje de los dos quetenía. Me han recibido como familia-res. Muchos familiares no se compor-tarían con igual cordialidad y gene-rosidad. Han acordado que debomarchar a [Saint-Paul de] Vence, puesaquí puede haber visitas de la policía alas casas. Han telefoneado a F.[reinet]el cual ha dicho q[ue] vaya en seguida.Me han llevado a la estación, me han[no continúa la frase y deja mediahoja en blanco]

[Doce páginas del cuaderno, enblanco]3

202 Educació i Història

3. «[...] Grâce aux camarades de Perpignan, Almendros avait réussi à éviter les camps et à re-joindre notre école. Sur le journal mural, un justicier qui signe J. O. s’indigne: “Pendant que le ca-marade Almendros travaille dans la salle des Maîtres, Carmencita et Pedro jouent du piano”. Nousrejoignait aussi, écrit ma mère, la frère de Paquita, colonel de l’armée républicaine, et l’extraordi-naire Lucie, à l’énergie sans limites, qui fut un temps secrétaire de Marty. Jours sombres qui se pro-longeaint tard dans la nuit en discussions, en recherches et démarches posibles pour l’évasion ou-tre-Atlantique. Finalement, le consulat de l’Espagne républicaine prenant fin, nous vîmes arriver lesfemmes et les enfants des plénipotentiaires congédiés. Eux, très informés et ayant des relations in-fluentes, purent en fin organiser les départs [...].» [M. FREINET, Élise et Célestin Freinet: Souvenirs de notre

vie. Tome I, 1896-1940, París, Stock, 1997, p. 453. Es tracta d’una obra «peculiar», que inclou una se-lecció arbitrària de documents de l’arxiu Freinet sense negligir els oblits de memòria de l’autora.Malgrat tot, sobre la Guerra Civil espanyola i els seus efectes sobre l’Escola Freinet, es poden veureles pàgines 395, 398, 408, 412, 415, 416, 419, 433, 451, 452, 453, 456, 463...] En qualsevol cas, cal con-

Page 7: Almansa, mi pobre Almansa.

27 de febrero

He salido de Niza a las 10 de la ma-ñana. He recogido el traje q[ue] mehan hecho. Freinet me ha acompaña-do a la estación. He llegado por la no-che a Perpiñán [...].

Pagès trabaja enormemente [...].En lo de los maestros refugiados tra-baja sin parar. Ya ha colocado a Virgilia su mujer en casa de un maestro y aPiñol y a sus hijos en casa de otrosdos. Hay otros maestros que pidenque les envíen gente, pero lo difícil essacarlos de los campos. Es notable lagenerosidad de muchos maestros. Elalbergar en su casa a una o dos perso-nas no representa un problema paraellos. Nunca me podía imaginar estasolidaridad tan generosa [...].

[...] Opinan que podré esperar aquía que la situación española se arregle,pues creen que todos podremos vol-ver a España [...].

5 de marzo

[...] He recibido también hoy cartade Alejandro [Casona]. Una larga yemocionante carta. Toda clase de ofre-cimientos y apoyos, pero ya me supo-nía yo que no todo estaría arreglado.Me ha girado mil francos que Freianuncia haber recibido y me proponeque me embarque en seguida pª[ara]La Habana donde me recibirán sustíos hasta que venga a reunirse con-migo o que espere a mayo para ir di-rectamente a Buenos Aires donde élllegará a fijar su residencia definitiva.Allí viviremos juntos y afrontaremosel porvenir. La carta es de una genero-sidad emocionante [...].

6 de marzo

[...] Hemos ido al sitio donde traba-ja esa especie de entidad católica deasistencia social [...].

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 203

trastar aquestes informacions amb altres obres com ara les següents: S. MARQUÈS SUREDA, L’exili dels

mestres, Girona, Universitat de Girona-Llibres del Segle, 1995; M. FORNAGUERA, Fugida!, Barcelona, PPU,2000 i M. del CASTILLO, Tanguy: Historia de un niño de hoy, Gasteiz, Ikusager Ediciones, 1999. Introducciód’Antonio MUÑOZ MOLINA. En relació amb aquesta obra es poden veure les notes de Joan de Sagarrapublicades en El País, edició de Catalunya, els dies 16 d’abril, 5 i 12 de novembre de 2000. La infor-mació sobre el tema de la infància exiliada o evacuada durant o després la Guerra Civil comença aser important. Tal vegada la millor i més completa informació la proporcionen AEMIC (Associacióper a l’Estudi dels Exilis i Migracions Ibèrics Contemporanis), adreça electrònica: [email protected]; RE-DER (Xarxa d’Estudis i Difusió de l’Exili Republicà), adreça electrònica: [email protected] i GEXEL(Grup d’Estudis de l’Exili Literari), Universitat Autònoma de Barcelona. Altres orientacions es trobenen treballs com el de J. J. ALONSO CARBALLÉS, «La construcción de una memoria colectiva del éxodo in-fantil vasco», a J. CUESTA BUSTILLO (ed.), Memoria e historia, Madrid, Marcial Pons, 1998, p. 163.

Page 8: Almansa, mi pobre Almansa.

204 Educació i Història

[...] Ha propuesto que fuéramos loscuatro como maestros de colonias deniños vascos a Inglaterra, y los cuatrohemos aceptado gustosos y un tantoilusionados. Después ha consultadocon unos compañeros y ha salido ofre-ciendo una estancia (dirigiéndose aTrincado) para Inglaterra [...].

El problema de Trincado está re-suelto magníficamente. Inglaterra esInglaterra y allí tendrá mucha más li-bertad de movimientos y más ayudapª[ara] resolver el viaje a América. Élha salido muy contento, sin saber loque le pasaba. Nosotros también, porél, pero envidiándole. Ahora, mien-tras escribo, no sé si envidiarle o no.Me duele alejarme de aquí. ¿Estoy máscerca de May?

8 de marzo

[...] Escribo todas las noches estasnotas en la cama. Después de escribir-las aún me queda la esperanza de pen-sar en los míos antes de dormirme. Lafoto de María Rosa4 está sobre la mesi-ta, al lado de la cama. No me atrevo amirarla mucho de cerca porque tieneun gesto, para mí tan profundamentesuyo, que parece que la tengo aquí,viva. Y es demasiado grande la decep-ción.

10 de marzo

Escribí a Alejandro. Le digo mi de-cisión de ir a La Habana. Las cosas deEuropa van mal. El espectro de laguerra se acerca a grandes zancadas.Le digo lo que es necesario hacer porsi su familia de Cuba puede hacerlo.Él está ahora en Méjico. Mientras va yviene la correspondencia habrá pasa-do tanto tiempo que puede que seaya tarde. No sabemos lo que puedeocurrir y tiene que ocurrir algo, so-bre todo a nosotros. Mi ilusión de po-der buscar una situación allá parapoder recobrar a mi mujer y a mis hi-jos me parece a ratos irrealizable. ¿Ymi madre? ¿Ya no he de volver a ver-la nunca más?

Sábado 11

[...] He escrito por la mañana a Vir-gili, que está con Guet, en Saint Plai-sir (Albir). Un matrimonio maestroque ha acogido a Virgili y a su mujer(¡Se casó antes de salir de Barcelona!)Este matrimonio no sólo tiene a Vir-gili y a su mujer sino que ha escrito aPagès diciéndole que si no me halloseguro aquí, que me vaya en seguidacon ellos, que me recibirán muy gus-tosos. No se concibe otro tanto en Es-

4. Maria Rosa Almendros Cuyás és la més gran dels seus tres fills, amb Néstor i Sergio.

Page 9: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 205

paña. Y es que a los maestros de allí seles ha secado la vena de la generosi-dad a fuerza de mezquindad y de mi-seria.

13 de marzo

[...] Me han enseñando un recortede La Vanguardia en el que viene la sus-pensión de empleo y sueldo de Zam-brano, Ferrer, Roco, May y Carpinteroy la separación por no comparecer deTrincado, Almendros, Serrano y Xan-dri. ¿Y Ibáñez? No me ha sorprendido.Se lo dije a May varias veces.

Hemos comentado, claro está, lar-gamente. Precisan mis amigos queobran con benevolencia. Como si hu-biéramos cometido algún delito. Cla-ro, que no lo sabemos todo. No sabe-mos qué pasará además de eso ni quémás serán capaces de hacer. Por miparte, fuera otras consideracionesque me obligaran a desear lo contra-rio, me contentaría con ver a May definitivamente separada de un ser-vicio que huele a podrido por el servi-cio mismo y por los servidores conraras excepciones. Me preocuparíamucho más el que May tuviera obli-gación de ir por la oficina y tuvieraque tratar con gente de la calaña deIbáñez. No quisiera desaparecer sinverlo alguna otra vez. Bien es verdadque no vale —es una piltrafa moral—

ni un mal pensamiento de un hom-bre de bien.

14 de marzo

[...] Después de toda la vida traba-jando con tanta honestidad —aquellosaños de Lérida en que May administróla escasez— preocupados por hacer lascosas bien, sin ambiciones bastardas,sin aspirar ni pedir más que la vidajusta que hemos llevado. Después detodo eso aún se nos declara indesea-bles, propicios a condena y en situa-ción en que habríamos de pedir per-dón. Cuando deberían ser ellosquienes nos pidieran perdón a noso-tros por lo mal e injustamente quenos han tratado y nos enjuician.

16 de marzo

[...] He recibido carta de Redondo,que está en Grenoble. Una carta llenade alegría de haber recibido la mía ysaber de mí. Ignoraba que estuvieraen Francia [...].

¡Qué tristeza! Esperando facilida-des para poder marchar y, por otrolado, esperando noticias de May. Siella me dice que no me marche mequedaré pase lo que pase.

Combeau me dejó el libro de Mal-raux L’Espoir, sobre la guerra de Espa-ña. Voy a leer un poco.

Page 10: Almansa, mi pobre Almansa.

206 Educació i Història

¡Qué tristeza, May! ¿Qué estaráshaciendo ahora?

17 de marzo

[...] Al marchar a casa he pasado porel Hotel de Francia donde me han di-cho que vive Frontera y un habilitadode la Generalidad. Piñol pidió 300 fran-cos a Pagès y le ha escrito para que veaa este habilitado y me entregue unacarta en la que Piñol le pide un subsi-dio con que reintegrar a Pagès. He vis-to al habilitado. Me ha dicho que Fron-tera estaba reunido. Casi me he echadoa reír. Todavía continúan reunidos es-tos idiotas. En fin, el habilitado me hadicho que ya no les enviaban francosdesde París y que no daban subsidios.Ellos, mientras tanto, continúan vi-viendo en el H. de Francia.

23 de marzo

Hice el viaje bien, sin ningún in-conveniente. Conforme el tren se ibainternando iba aumentando el frío.Desde Lyon a Moulins ha nevado. Meesperaban en la estación el matrimo-nio Guet y el matrimonio Virgili [...].

El matrimonio Guet es muy sim-pático. Hemos venido al pueblecito,casi una aldea a 35 kms. de Moulins.Tienen una casa grande. Tienen treshijos de la misma edad que los nues-tros: la mayor, niña y los dos más pe-queños, niños.

24 de marzo

Hace bastante frío. Sin ser comoaquello, esto me recuerda a Villabli-no.5 Menos mal que hay bastante fue-go y dentro de casa se está bien.

En esta casa se come un poco al es-tilo de la de Freinet. Están muy influi-dos por aquella casa y, aunque nosiempre, no son absolutamente vege-tarianos, también tienen sus manías.Tan abundante es aquí la leche y notoman leche; tampoco café. El ricocafé con leche de casa Pagès no existeaquí. Es una pareja excelente. Admiroesta sencillez, esta buena fe en unaspersonas cultas. La cultura no los hadeformado [...].

La tertulia de por la noche ha sidomuy distraída. Son los Guet unas per-sonas encantadoras. Su vida es biendistinta de la de las familias españo-

5. El jove Almendros va viure a la població lleonesa de Villablino —en ser contractat pel Patro-nat de Sierra Pambley— durant el període de 1926 a 1928. Sobre aquest punt, es pot veure I. CANTÓN

MAYO, La Institución Sierra Pambley: Una institución educativa leonesa, Lleó, Universidad de León, 1995. Hiha uns informes d’Almendros al Patronat de dita institució que encara no han estat editats, però quesón d’un gran interès.

Page 11: Almansa, mi pobre Almansa.

las; hay en ellas una generosidad, unaconfianza y una simpatía que cauti-van...

3 de abril, lunes

[...] Hemos comido en un banco deun jardín público. Los franceses sabenvivir. No gastan en hoteles ni restau-rants. Llevamos todo en el coche: lascamitas de campaña, colchonetas,mantas, todo. Hemos salido despuésde comer. 400 km de Francia. Hemospasado por Lyon ya de noche. ¡Precio-sa ciudad! Y hemos llegado a Grenoblea las 10 de las noche. El Congreso secelebra en el gran edificio de la Bolsadel Trabajo. La exposición está muybien instalada. He visto a Freinet y asu mujer [...].

Hemos armado las camitas decampaña y nos hemos acostado enuna de las dependencias de la Bol-sa del Trabajo que nos habían asig-nado.

4 de abril, martes

[...] Hemos asistido a una sesión delCongreso [...]. Por la mañana me handicho que hacían gestiones para quedejaran salir a Redondo y que vendríaseguramente esta tarde.

Hemos vuelto a la Bolsa donde sedebía celebrar una conferencia públi-ca a cargo de Freinet.6 A las dos ha lle-gado Redondo. Ha ido a traerlo en uncoche el secretario del sindicato demaestros del departamento. Redondoha tenido una gran alegría. Se haabrazado a mí y no me soltaba. ¡Quéenvejecido está! Es ya un viejo. Los tra-tan muy mal en el campo. Tienenhambre y miseria. El maestro q[ue] loha traído y otro compañero nos haninvitado a cenar con ellos. Hemosasistido a la conferencia de Freinet.Había mucha gente; lleno el local. Elmovimiento de l’Imprimerie ha llega-do a tener en Francia un reconoci-miento casi oficial de su importancia.7

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 207

6. «Le 13e congrès de L’Imprimerie à l’école a lieu à Grenoble, du 4 au 7 avril 1939, organisé parRaoul et Alberthe Faure, adhérents de la première heure... À la séance d’ouverture, “plus de 600 per-sonnes sont assises et combien obligées de rester debout”, note le secrétaire de séance. Dans son dis-cours, mon père donne connaissance des invitations internationales qu’il a lancée. Seuls, LucienneMawt (Belgique) et Vaclav Svoboda (Tchèque représentant l’Internationale de l’enseignement) sontlà. Mais il parle d’un camarade, fondateur de la Technique Freinet en Espagne, réfugié en France, etqui assiste au congrès. Il dit son regret, dans l’état actuel, de ne pouvoir l’inviter à la tribune. Ap-plaudissements nourris. Cet absent de la tribune est certainement Herminio Almendros». (Madelei-ne FREINET, Élise et Célestin…, p. 454)

7. Sobre aquest punt, es poden veure els següents treballs: A. J. COLOM CAÑELLAS i M. A. SANTANDREU

CALDENTEY, «Aportaciones inéditas a la ruptura del Movimiento Freinet», Educación y Sociedad, vol. 10,

Page 12: Almansa, mi pobre Almansa.

208 Educació i Història

Después Redondo me ha contadosu odisea. Se ha quejado del abandonoen que quedó allá por parte de Tapia,de Piera, de todos.

Los dos maestros nos han llevadoa un restaurant. Redondo ha cenadocomo un hambriento. Hemos comi-do como se come en Francia en losrestaurants. ¡Qué diferencia de aten-ción, de amabilidad, con España! ¡Cuán-to me he acordado de May! He sidomuy desgraciado no habiéndole podi-do proporcionar la satisfacción de unviaje por Francia. ¡Ella lo habría sabo-reado también! La gente aquí vive muybien. Los maestros mismos comen enrestaurants que para nosotros son res-taurants elegantes, visten bien, tienencoche, en las casas la vida es más có-moda, más abundante en todo. Cuan-do pienso que May ha carecido de to-das estas cosas me siento culpable.

Los maestros han dado a Redondocuatro grandes paquetes de tabaco yle han dejado una dirección para queles escriba cuando necesite algo.

Hemos acompañado a Redondo asu residencia a las 10, hora en que de-bía regresar. Han dicho que le dejaríansalir pasado mañana.

He regresado a la B. del Trabajo yhe asistido a una reunión en que setrabajaba en el fichero general.

11 de abril, martes

[...] Carta de Ferrater en la que diceque en la Embajada de Méjico se hanconfeccionado unas listas de intelec-tuales para una primera y próximaexpedición. En la confección de esalista ha intervenido Xirau, puestoq[ue] está Nuria Folch, su marido y al-gunos más que no son intelectualespero sí amigos suyos. A pesar de haberhablado Xirau con Tarragó y Ferratery haberles dicho que contaba con no-sotros para hacer allá un buen traba-jo, no estamos en esa relación. Tam-bién parece q[ue] ha intervenidoBallesteros. En malas manos está. Nome fío de la lealtad de ninguno de losdos. He escrito hoy mismo una carta aXirau pª[ara] q[ue] me conteste si po-demos ir incluidos entre los que hande ser evacuados.

Todas las puertas parece que senos cierran. Lo más probable es quesuframos la guerra próxima. A vecespienso que quizás es mejor quedarse

1992, p. 35-63; M. A. SANTANDREU CALDENTEY, De la ruptura del Movimiento Freinet a los inicios de la pedago-

gía institucional, tesi doctoral, Madrid, UNED, 1991; L. BRULIARD i G. SCHLEMMINGER, Le Mouvement Freinet:

des origins aux années quatre-vingt, París, L’Harmattan, 1996; A. J. COLOM, La pedagogía institucional, Ma-drid, Síntesis, 2000.

Page 13: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 209

y correr el albur de o desaparecer oganar y recobrar la patria y la familia.Para vivir así vale más acabar de unavez. Me doy perfecta cuenta de que nome importa vivir si he de vivir sinMay y sin mis hijos. Nunca he sentidotan profundamente cómo los quieroy cómo los querría si los recobrara.Creo que no me he portado bien conellos. En último caso de lo que sí es-toy seguro es de que he sido feliz doce

años de mi vida. Es tristísimo pensarque puede no volver esa felicidad.Doce años. Doce años que valen todauna vida [...].

Cada día que pasa estoy más tristey desesperanzado. Ya sabe May estepobre estado de ánimo mío. Lo que nosabe es la falta que me hace. Me sien-to anonadado sin ella. Si por lo menosreconociera lo mucho que la he queri-do. Pero ¿cómo lo va a reconocer si hehecho poco por demostrárselo? ¡Ah, siaquellos tiempos volvieran!

14 de abril, viernes

Viaje a París. Hemos salido tem-prano, todos: el matrimonio Guet, elmatrimonio Virgili, los tres niños yyo. No me explico todavía como, conlas maletas y todo, hemos podido ha-cer el viaje [...]. El matrimonio Guet noha permitido que viniéramos en eltren corriendo el riesgo que ello supo-

ne, y no nos quieren dejar ni un mo-mento [...].

Yo duermo en el cuarto de baño enuna colchoneta. El matrimonio Virgilien la cocina en un colchón. Y los Guety los niños en el dormitorio, en lacama y en colchonetas.

16 de abril, domingo

[...] Hemos ayudado a los Guet aarreglar todo pª[ara] su marcha. Hanmarchado temprano, a las nueve de lamañana. Guet nos ha besado; su mu-jer ha llorado de buena gana. Una des-pedida emocionante.

En nuestra memoria quedarán in-delebles estos dos nombres: Yves yJeanne Marie Guet. Corazones nobles,almas sencillas, generosas personas.Encontrarlas es un consuelo ante ladeformación de la humanidad, y unaesperanza. ¡Si alguna vez yo pudieracorresponder a todo cuanto han he-cho por nosotros! Es difícil igualarlos.Nos han dejado y han marchado preo-cupados por lo que puedan hacer porRedondo y pensando en si será posibletraer a Francia, a su casa, a mi mujery a mis hijos. Sin insistir más, los sen-timientos q[ue] inspira el proceder deestos hermanos es inefable.

Hemos ido Tarragó y yo a ver a Xi-rau en la Ciudad Universitaria. Con elpretexto de q[ue] ha de dar unas con-

Page 14: Almansa, mi pobre Almansa.

210 Educació i Història

ferencias ha podido instalarse muybien. Ha dicho que nos apoyarápª[ara] figurar en la lista de los q[ue]van a México.

18 de abril, martes

[...] ¿Qué pensarán Néstor y Sergiode mí?

23 de abril, domingo

[...] Si Ferrater y Solsona consiguenel visado para México o el hermanode Solsona les consigue como a míel de Cuba, podremos salir el 16 delmes próximo en el Flandre. Es el pri-mer barco que saldrá hasta esa fechaen viaje directo. El viaje cuesta 4.000 fr.Creemos que no tocará puerto espa-ñol, lo cual sería fatal. Para salir enotros barcos antes de esa fecha teníaque ser por vía Nueva York y el viajecuesta 7.000 fr. [...].

¿Será posible marchar? ¿Será posi-ble que un día pueda tener otra vez ami familia conmigo? ¿Es que la vidava a seguir siempre así y no he de po-der volver a vivir con ellos en aquellapaz y aquella felicidad cuya realidadno llegué a gustar lo suficiente, por-que no conocía el contraste?

¿Cómo vivirán? Néstor es inteli-gente y se dará cuenta. Mi madre,¿qué imaginará? Menos mal q[ue] tie-

ne a su lado a los niños. Será un con-suelo pª[ara] ella. ¿Y los padres de Mayy Juanito?

¿Me echará de menos May?

28 de abril, 29, 30, 1, 2 de mayo

[...] Me dijo Xirau que el lunes, día1, no dejara de ir por la Junta CulturalEspañola —George V, 55— porque sehabía de arreglar el viaje a Méxicopara el día 6 en un barco vía New York[...]. Nunca he necesitado como ahorael consejo de María, que tiene tan cla-ra visión de las cosas y sus consecuen-cias. ¿Debo aceptar lo de México?¿Debo ir a Cuba? En casa de Xurrigue-ra me dicen que no vaya a México. Fe-rrater también. Tarragó me inducehacia México, porque conviene a to-dos los compañeros.

Alejandro me dijo en una carta «deMéxico ni hablar, es un país antiespa-ñolista, cicatero a pesar de su gobiernoy hostil a todo cuanto nosotros poda-mos hacer. Te ofrezco ayuda para Cubao Buenos Aires». Alejandro me espera.Ha hecho por mí lo que no hace sinoun hermano. Lo que ha conseguido deCuba no lo consigue nadie. Torner nopuede conseguirlo a pesar de tener allíun hermano. Ventajas de México: viajegratis —pagan también el viaje a los fa-miliares. ¡Si estuvieran aquí María y losniños! Cerca de mil pesos (8.000 pesos)

Page 15: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 211

para sostenerse allí unos meses. El te-ner que intervenir en la evacuación delos demás (yo iría representando a losmaestros) y poder favorecer a muchosamigos que lo merecen.

El poder desde allí estar bien ente-rado de los puestos mejores que sepuedan encontrar. Pero ¿quién le dicea Alejandro: ahora marcho a México,después de lo que ha hecho y aconse-jado? Le he puesto otro cable dicién-dole lo de México y diciéndole que re-chazo la invitación y marcho a Cuba(cada cable me cuesta 180 fr.).

Hay un problema: ¿me habrá en-contrado algún trabajo en Cuba Ale-jandro? El amigo que ha intervenidoen conseguir mi entrada libre es sub-secretario de Instrucción Pública. Alponerle este cable en el que le explica-ba las ventajas que me ofrecía Méjico(viaje y trabajo pª[ara] unos meses)quería provocar una respuesta suya.Si la cosa está mal en Cuba me con-testará: acepta Méjico. He esperadopero no he tenido respuesta.

El lunes por la noche cenamos Ta-rragó y yo con Xirau. Él me dice quecree que debo aceptar, pero él no va aMéjico, sino que irá a Cuba donde lohan invitado a unas conferencias. En laJunta Cultural, por la mañana del lu-nes, me dijeron rápidamente las condi-ciones y que llevara el pasaporte paraobtener el visado y sacar el pasaje. El

martes llevé el pasaporte aceptandoen principio. Por la tarde nos reunimos enla Embajada de Méjico. Allí en los corri-llos de los 15 que van a ir me enteré decosas. Me enteré de que han invitado apersonalidades, que se han negadoa formar parte de la comisión, porquetienen las familias en España y temenrepresalias. Xirau no va. El Dr. Márqueztambién ha dicho que se retrasará unassemanas pues quiere asistir a un con-greso en París. Pi Suñer, que estaba an-tes en la lista, tampoco va... en fin, na-die quiere ir y se han quedado unoscuantos innominados que no represen-tan ni con mucho a la intelectualidadespañola. Bergamín tampoco es seguroque vaya. Yo veo todo eso muy turbio.Han comentado que el gobierno de Mé-xico quiere y ya está anunciándolo, re-cibirles oficialmente, organizar actos,dar la llegada a los cuatro vientos, pu-blicando los nombres de los quince re-presentantes de los emigrados, con susmerecimientos, hacer conferencias, in-terviews... En fin, q[ue] al día siguiente,los franquistas de España publicarántambién sus comentarios, quedarán fi-chados los 15 para lo que pueda suce-der a sus familiares. Yo creo que es estolo que teme todo el mundo. Los que de-finitivamente van llevan a sus mujeresy sus hijos, pero yo los tengo en Barce-lona. Si ahora aún abrigo la ilusión deque pasando inadvertidos puedan de-

Page 16: Almansa, mi pobre Almansa.

jarlos salir un día, ¿no provocará minombre como embajador de los emi-grantes a México la mayor vigilancia yquien sabe si la represalia? Si así ocu-rriera, y todo se puede esperar —no sa-bemos lo que allí pasa, pero todos losdías nos llegan noticias de encarcela-mientos y fusilamientos—, ¿podría yovivir con ese peso sobre mi concienciapor una ligereza? ¿Qué has hecho,

desgraciado?, podría acusarme María.He pasado la noche del martes sindormir. Por fin me he decidido a de-cirles que yo tampoco voy.8

La Habana, 27, junio, 1948

Mi querido Tarragó:9

[...] Me recuerdas muchas cosas conel cuento de tu viaje de Valencia a Ma-

212 Educació i Història

8. Almendros va salpar de Saint Nazaire a bord del Flandre el 16 de maig de 1939. Anava acom-panyat de Josep Ferrater Mora, Enric Solsona i un familiar d’aquest darrer, Carles Sala. En el mateixvaixell viatjaven centenars d’espanyols, 174 amb destí a Mèxic, entre ells Giral, Domenchina... L’a-rribada a La Havana es va produir el 28 de maig: «La Habana es una bella población, alegre, bullicio-sa, la Andalucía de América la llaman [...]. Cosas no sospechadas en España, la luz, la alegría, los co-lores claros, blancos... todo contribuye a hacer de la ciudad una hermosa ciudad española injerta conbrotes yankees. Me gusta mucho La Habana. Esta es mi primera impresión. Pero... la vida es muy cara[...]. Parece que no es nada fácil trabajar aquí. Todos lo dicen, aunque me insisten en q[ue] no debo de-sanimarme, porque un día u otro encontraré lo necesario, aunque al principio tope con dificulta-des.» El primer quadern del Diario d’Almendros —al qual pertany aquesta anotació del 30 de maig de1939— finalitza el dimecres 7 de juny. El segon comprèn fins al 9 de setembre de 1940 i relata les se-ves primeres dificultats en aquell país. La seva esposa, Maria Cuyás, la May del relat, que va rebre enel seu moment aquelles pàgines escrites per Almendros, anota al final del Diario: «el 25 de enero de1949 se reúne por fin con su mujer y sus tres hijos en La Habana y en adelante viven juntos añosde prosperidad gracias principalmente debido a los grandes ingresos que le aportan sus libros quesigue editando constantemente con gran éxito de venta en Cuba y en toda América Latina. [...] En el1949 se le nombra asesor en el Ministerio de Educación, luego profesor de la Universidad de Orien-te. Con la llegada de la revolución es nombrado director general de Educación Rural, etc. etc. etc. Fa-lleció 13 de octubre 1974.»

9. Ens trobem a poc menys de sis mesos per tal que Almendros se reuneixi amb la seva famíliadesprés de quasi deu anys d’exili. Tot i que coneixem poques coses de la seva etapa cubana, allò méssubstancial es pot trobar a l’obra d’Amparo BLAT, Herminio Almendros Ibáñez: Vida, época y obra, ja cita-da i que és el fruit de les seves investigacions i entrevistes amb Maria Cuyás i Néstor Almendros, aBarcelona, durant la dècada dels anys vuitanta. També es pot veure: J. M. HERNÁNDEZ DÍAZ, «Un expo-nente de la pedagogía española en el exilio: Herminio Almendros y la educación en Cuba», Revista de

Educación, núm. 309 (1996), p. 217-237. Es reprodueixen al final d’aquest article fragments d’algunescartes dirigides a Alexandre Tarragó, exiliat a Xile amb la seva família, cartes que descobreixen notí-cies i matisos de la vida cubana d’Herminio Almendros. Aquestes cartes han estat anotades i trans-crites a la revista Historia de la Educación, núm. 18 (1999) i reproduïdes en el llibre col·lectiu C. LOZANO

(ed.), 1939, el exilio pedagógico, Barcelona, PPU, 2000, p. 211 i s.

Page 17: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 213

drid. ¡Cuántas veces lo he hecho desdeAlmansa, en los terribles vagones detercera, dormitando sobre una male-ta, esperando los churros del amane-cer de Villarrobledo y la estampa delalba de Criptana! Almansa, mi pobreAlmansa, escenario de mis veinte pri-meros años, calcinada tierra de secosespíritus calientes y amodorrados.Tengo en mis ojos aquellas llanurassalpicadas de majuelos y pobres triga-les, y la estampa del soberbio y ruino-so castillo, una de las más raras y be-llas siluetas de castillos de España. Allíestá mi madre, viejecita, a quien no sési volveré a ver [...].

[...] Ya tengo aquí a mi Néstor, raromuchacho. En su adolescencia viva es-tampa de la desdichada formaciónanárquica y del desequilibrio de aque-lla juventud que se ha empachado deindividualismo y de inauditas mon-sergas. Menos mal que no se ha deja-do ni siquiera manchar por el idearioimperial y azul. Menos mal que tieneun fondo bondadoso. Te envidio cuan-do te veo al lado de tu Laura, de tus hi-jos, pequeños, en el momento en quese echan los cimientos sólidos y parasiempre del edificio. Y tu cuidado essabio: música y lenguaje y la miradaabierta ante la vida. Pocos libros, ¿eh?,y ni aún ése bien aprendido. Hay algomás que libros que aprender, y másque cultura de lecturas. Ni siquiera

mis libros, pero no sabes con cuántoplacer te los envío sabiendo que sonpara Laura y sabiendo que no se los vaa aprender...

Santiago de Cuba, 20, abril 1956

Amigos queridos Alejandro y Provi:

La inquietud entra hoy en el airecernido en espectación [sic] y silencio,en mi breve pieza de vieja casa en an-tigua calleja tras de la catedral. Juiciosa estudiantes, revueltas ayer con jóve-nes gravemente heridos, atentados lapasada noche con víctimas de la fuer-za pública, protestas, suspensión declases... Y, en La Habana, revuelo tam-bién; detenciones, conspiracionesabortadas, extremosos cuidados depolicía... A esta bella tierra de suavesuelo ondulante, dulce, fino y lumino-so como piel de mujer; a este que de-bía ser alegre paraíso en la tierra, melo están tornando cariacontecido ycon sabor triste de víctima. Pero lequedan arrestos —no en vano quedósembrada aquí la semilla genial in-comparable de Martí— y se salvaráhasta donde las ataduras lo permitandel coloso próximo.

[...] Ya sabes que María Rosa se casó[...]. Estuvieron un año con Virgili, ensu colegio [...]. No les gustó Venezuelapara volver, y, con sus pequeños aho-

Page 18: Almansa, mi pobre Almansa.

214 Educació i Història

rros se fueron [...] a una isla solitariade Bahamas, a vivir como robinsones[...]. Al año regresaron a La Habana [...].Piensan buscar trabajo en EstadosUnidos.

El otro niño es Néstor: un gigante.Hizo su doctorado aquí de Filosofía yLetras [...]. Como la pinta de espadassuya es el cine, se fue detrás de eso aN. York. Unos cursos de técnicas decine en el City College le permitieronentrar como estudiante. Huyendodespués de unos meses del frío de N.Y. y atraído por unos amigos, se tras-ladó a Los Ángeles [...].

[...] Sergio, el otro gigante [...] traba-ja en La Habana en un taller de offset, yacompaña a su madre. María trabajaen un colegio por la mañana y por latarde, sin faltar una, hace fiesta de re-gocijo con la mujer de Alvero, las dosal alimón en la brega para ella com-pensadora y feliz de la librería, que sino da ganancias muy sustanciales, es,como os digo, una incomparable dis-tracción para las dos mujeres.

¿Por qué vine yo aquí otra vez? Por-que necesito de la ayuda de este suel-do un par de años, plazo en el que podré decidir de la suficiencia econó-mica de las publicaciones, puesta ahora en problemático trance por lasambiciones y egoísmos del patrón.Además, porque todavía siento laatracción del trato con jóvenes y con

estudios en el ambiente universitario[...]. Yo aquí no tengo mucho trabajo.Sólo mucho aislamiento y mucha so-ledad. Me encargaron un hueso quetuvieron difícil de roer unos años: esoque llaman filosofía de la educación [...].

No volveré a España. En primer lu-gar porque la vida no me lo permitirá,pero también, no se lo digas a nadie,porque no me gusta aquello. Hay me-dia España bestial y odiosa hasta el in-finito, y en cuanto a ayudar a la otramedia, creo que las fuerzas no me lopermitirían. No siento ya la fuerzacomo apoyo firme, a la física me refie-ro, que es la única que podría servir...

¿Qué van a hacer con la Españafranquista los EE.UU., obligados a bai-lar el agua o el petróleo al mundo ára-be? Ya se ve; hincarán el pico los fan-toches de la «voluntad de imperio».Imbéciles que han hecho de Españaun solar de orates [...].

La Habana, 13, septiembre, 1963

Mi muy querido Alejandro:

Vuelvo otra vez, una y otra vez, alrecuerdo de tu carta. Vuelvo al recuer-do y a la decisión de escribirte. Recibítus largas y hermosas líneas un día, amedia tarde, cuando me disponía a continuar escribiendo un trabajo co-menzado, y ya no pude hacer nada.

Page 19: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 215

Fue demasiado fuerte la impresión. Nila lectura de T. de Chardin y de Ga-raudy que me esperaban —dos polosabsolutos— resistieron.

No son menester justificaciones yexcusas. Yo voy también en ellas [...].Tampoco escribo yo a los amigos. Ya,me basta con sentir que los quiero ycon saber que me quieren. Interrum-pida quedó hace tiempo mi corres-pondencia con los de México: Calle-ja, Virgili, Redondo, Torner [...]. Nodigamos con los de España. Mutua yprevisoramente cortada con José Ma-ría por esquivar para él cartas de im-pertinente procedencia. Otros añosme escribía una carta cuando llega-ba a Francia en vacación, y allá lecontestaba yo. Este año, ni la cartaesperada [...].

Intento imaginaros [...]. Recuerdo aMengod, en aquel desdichado viajeque se os ocurrió hacer —¡oh, el de-ber!— a Barcelona bajo las bombas. Re-cuerdo a Salvador en el deliciosoArán. No he visto nunca a Romera, dequien he leído alguna vez trabajos de crítica excelentes. Admiro también delejos al profesor Eleazar Huerta. Des-de hace mucho tiempo sabía yo de sutalento, allá en nuestra llana tierratan sencilla y austera. Su padre, Dn.Eleazar Huerta, me examinó a mícomo alumno libre, almanseño, en laNormal de Albacete. Luego supe del

hijo, destacado estudioso y escritor.¡Felices ustedes, juntos y unidos! Yoles mando desde aquí mi abrazo fra-terno [...].

[...] Ya dentro de un mes se cumpli-rán mis 65 años. Yo me los siento ya acuestas. A veces —lo que nunca ima-giné que sentiría— me ronda la ape-tencia de la jubilación. Aparte la pe-sadumbre de tener lejos a Néstor,tenemos aquí a María Rosa y a Sergio,casados. Todos trabajan, claro está;aquí todo el mundo trabaja [...]. Se hamarchado mucha gente ociosa y tam-bién técnicos nativos; pero vienenmuchos obreros y técnicos de distin-tos países de América y de Europa.Una transformación en hervidero enque no pocos se queman y otros se de-bilitan y diluyen sin resistencia posi-ble. Duele a muchos individualmente,pero el horizonte de realizaciones, deposibilidades y esperanzas para todoses sorprendente, impensado, y levan-ta el ánimo. Alguien sufre la perpleji-dad y la dura adaptación a nuevasnormas de vida —ya con los huesos rí-gidos— en esta revolución de jóvenesque tienen la energía física; pero lavuelta a la antigua política democráti-ca, repugna a todos sólo con pensarla.Es un notable y profundo cambio so-cial, al que es suerte haber podidoasistir, a pesar de los pesares propios[...].

Page 20: Almansa, mi pobre Almansa.

216 Educació i Història

Ahora trabajo en la Editorial Na-cional. Me ocupo de una naciente Edi-tora Juvenil y del cuidado de la edi-ción de las obras completas de Martí—libro de 500 páginas por mes, hasta25 o 30 volúmenes. Mi edad justificami desplazamiento de la función do-cente, ya te digo que ésta es revolu-ción de audacia y energía de jóvenes,de sistema de enseñanza dinámico,apoyado en lo que se llama línea de

masas, y yo no entiendo bien eso. Ellojustifica mi orillamiento. Aunque larealidad es ésta: cuando estuve en elMinisterio, pretendí iniciar, y trabajéen ello, una modernización de las téc-nicas docentes, de la que está biennecesitada la escuela en cualquierpaís. Preparé, mientras se llevaba laescuela a todos, todos los niños dela nación —antes no la tenían ni la mi-tad— un fermento de renovación conla «composición libre», «las imprentasescolares y la correspondencia inte-rescolar» y algunos ficheros autocos-rrectivos de cálculo, con publicacio-nes para el trabajo personal de los

alumnos. Era brutal la rutina con quese enseñaba el idioma en la escuela,como lo demás. Quise con esos ins-trumentos vitalizar un poco el traba-jo en el que mueren de aburrimientoy de escepticismo alumnos y maes-tros [...]. Pero llegó alguien de Francia,alguien del Partido de allá que ha he-cho una guerra a muerte a Freinet, to-davía no sé bien por qué, y puso todoaquello en el capítulo de lo nefasto, lomismo que, de rebote, al iniciador.Después de eso, el vacío. ¿Tú no cono-ces el libro de Godoy Urrutia —por lodemás gran luchador y buen publicis-ta— Educación y Política? Ve a la página57 y sig. Y verás un reflejo del igno-rante y malévolo ataque sectario.Tuve que desahogarme en silencio deesa puñalada corsa, escribiendo un li-bro que tengo guardado10 y que ¡natu-ralmente! no se puede publicar y nisiquiera hablar de él, hasta que otrascircunstancias dejen posarse el cieno,si es que eso ocurre. Y de esto valemás no hablar [...].

10. Aquest llibre es va publicar l’any 1985, a instàncies de l’Institut de Ciències Socials de l’Ha-vana, amb el títol de La Escuela Moderna, ¿reacción o progreso? L’edició és precedida per una presenta-ció de Maria Rosa, filla d’Almendros i d’un prefaci doctrinari de l’editor (p. 9-14). Finalitzada al generde 1963, l’obra porta un títol que difereix un xic de l’original: Campaña sectaria contra la Escuela Mo-

derna. Tot el llibre tracta de la cacera de bruixes a la qual va ser sotmès Almendros. S’han de veure es-pecialment les pàgines 44 i següents per a la deformació de l’intermediari Godoy Urrutia. Molts anysdesprés de l’afer, Néstor Almendros ho va denunciar internacionalment en el seu opuscle Cuba: pe-

dagogía y sectarismo (Madrid, Playor, 1986).

Page 21: Almansa, mi pobre Almansa.

Almansa, mi pobre Almansa... L’exili d’Herminio Almendros 217

La Habana, 20 febrero 1966

Mi querido Alejandro —el que mequeda; el otro se me fue—, tu carta sa-bia me emocionó profundamente.¡Pena de no haberlo gozado más decerca y por más tiempo, a nuestrofino, sensible, sage, fraterno Sarrá! Nome avengo bien a esa injusticia deldestino, de desaparecer. Con los quese van se me van cortando cachos,hasta que quede reducido y mínimo ¡ylisto! ya sin asideros [...].

Malo; me ha entrado cierta nostal-gia por mi pobre pueblo manchego[...]. Ahora me gustaría ir a él, ver loque queda, y hasta quizás me gustaríaquedarme para siempre en uno deaquellos pequeños oasis de pinos enla llanura [...].

La Habana, 12 febrero 1971

Querido Alejandro:

[...] Aquí las escuelas privadas fue-ron sustituidas pronto por las del Es-tado; ahí no irán tan rápido. ¿Quépiensas hacer? [...].

Sergio y Ma. Rosa están aquí, ca-sados. Nosotros haciéndonos ya de-masiado viejos. María, fuerte, conenergía y serenidad de inmortal. Esnuestra roca. Yo sigo trabajando enel Ministerio de Educación ahora.

Nada que relumbre, pero cosa útilque yo sé hacer. Es una satisfacción[...].

1 julio 1972

Querido Alejandro:

[...] Teníamos curiosidad e interéspor saber cómo respirabas en el nue-vo clima. Ahora, más que imaginartete vemos no sin cierta pena. Si tuspresagios no yerran, bien; pero sison extremosos como pienso, pue-des ir preparándote a andar al nuevopaso. Creo, por otra parte, que noserá ahí tan nuevo de pronto. Ahí seprevén cambios lentos, lejos de sertan rápidos y radicales como aquí.Tendrás tiempo de verlos venir y dedecidir, si es que ello es posible enesta época que nos ha tocado vivir.Además, ya te coge vencido de años.Puedo decir eso de ti yo que me sien-to agotado.

Te sigo en tu recuerdo entusiastade la República Española asesinada amansalva, y por su lucha descomunal.¿Ya has visto el trabajo que hizo Virgi-li en México? El haber dado esas Obras

Completas de Azaña honra una vida.Las Memorias me las he leído dos ve-ces, como muchos discursos, e iríapor la tercera vez si tuviera tiempo,que no encuentro en mi ocupación

Page 22: Almansa, mi pobre Almansa.

218 Educació i Història

con cosas menores. Es el noble geniode España que vive en sus razones yen su voz: sabiduría y severa hermo-sura [...].

Herminio Almendros Ibáñez mu-rió en la ciudad de La Habana el 13 deoctubre de 1974, a los setenta y seis

años. Sus restos reposan en el Pan-teón de Hombres Ilustres.

En una de sus cartas, había dicho asu amigo Alexandre Tarragó:

Para el final, la petición mayor:que me sigáis queriendo, que nos si-gáis queriendo. No se vive bien si nose sabe eso.