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Taller II Metodología I

Análisis de los personajes de un film de ficción

Criterios metodológicos para el Taller II

Tipo y diseño de investigación

Para el Taller II la variable a analizar, como se señala anteriormente, la conforma los

personajes de un film, por ello se realizó la descomposición de esta variable como una

totalidad para la posterior integración-síntesis de sus partes, compararla con el relato para

obtener las cualificaciones que le otorgan a la narración cinematográfica y así comprender

la naturaleza profunda del evento.

En cuanto al diseño de investigación este es univariable, de caso, documental. Este tipo

de diseño se obtuvo aplicando la propuesta de Hurtado (ob. cit.), la cual identifica los

diseños en base a “tres criterios fundamentales: la perspectiva temporal, la fuente de donde

provienen los datos y la amplitud del foco” (p. 229)

De esta manera, el diseño utilizado es analítico univariable debido a que el propósito es

analizar un solo evento, los personajes de un film”; de caso, ya que este evento se estudia

precisamente en un único film, y documental por que no se obtienen los datos de fuentes

vivas, sino directamente del documento cinematográfico, como lo es la película analizada.

Población y Muestra

La población no es más que el conjunto de individuos que forman parte del objeto de

estudio. Tamayo y Tamayo (1999) la define como “... la totalidad del fenómeno a estudiar,

en el cual las unidades de población poseen una característica común que se estudia y da

origen a los datos de la investigación” (p. 92). También, para Hurtado (2000) la población

se refiere al “conjunto de elementos, seres o eventos, concordantes entre sí en cuanto a una

serie de características, de los cuales se desea obtener alguna información” (p. 152).

En el presente Taller se considera como población, tomando en cuenta lo anteriormente

descrito, el conjunto de los elementos que componen los personajes de la película “XXX” y

sus características de integración en la diégesis/trama del relato fílmico al cual

corresponden.

Por su parte, la muestra es una porción de la población que se toma para realizar el

estudio, la cual se considera representativa de la misma. Según Hurtado (2000), para

conformar una muestra es necesario determinar o seleccionar cuales de las unidades de

estudio serán observadas, a esto se le denomina muestreo, y se lleva a cabo cuando la

investigación no puede ser hecha con la población completa.

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Precisamente, en la presente investigación fue necesario muestrear la población antes

mencionada. Para ello se acometió un muestreo de tipo intencional, el cual ejecuta el

investigador en base a un criterio válido de selección de los elementos que comprenden el

conjunto poblacional y “que se considera necesario para obtener una mejor aproximación al

evento en estudio” (ob cit, p. 164).

Entonces, el criterio para obtener la muestra en esta investigación fue el hecho de

contemplar sólo aquellos personajes que puedan proporcionar la información más

pertinente y profunda para dar respuestas a los objetivos de la investigación. Estos son los

personajes principales, los que son sujetos esenciales del relato ficcional, que pueden sufrir

transformaciones durante el mismo, que adquieren, intercambian y desechan roles,

evoluciona psicológicamente, se desenvuelven incisivamente en el entorno social de lo

narrado y, por lo tanto, pueden representar cambios decisivos dentro de la trama de la

película.

Técnica e instrumento de recolección de datos

En función de la variable estudiada, se estableció la observación-decodificación como

la técnica apropiada para el análisis desarrollado. En este sentido, Sabino (2002) plantea

que “la observación consiste en el uso sistemático de nuestros sentidos orientados a la

captación de la realidad que queremos estudiar”. Para el Taller, como se trata de un

documento cinematográfico, una película, por lo tanto la observación conlleva a la

decodificación audiovisual de la misma.

Por otra parte, para llevar a cabo el Taller, se estableció la matriz como instrumento

más adecuado de recolección de datos, esta es definida como un patrón o criterio integral de

categorías o clases que permiten organizar, relacionar e interpretar los datos de una manera

determinada, en función del objetivo de la investigación.

Por lo tanto, fue necesario desarrollar dos matrices de acopio. La primera matriz se

aplica a cada uno de los personajes, para determinarlos como persona; y con la segunda se

establecen sus roles narrativos, para lo cual se necesitó la aplicación de otra matriz de

acopio. Asimismo, se realiza un análisis comparativo con los datos de estas dos matrices

para especificar cada personaje como actante dentro de la estructura del relato fílmico (ver

matrices).

Finalmente, se agrupan los datos recolectados por las matrices señaladas, lo que

permiten establecer los vínculos entre los diferentes personajes como persona, sus roles

narrativos y actantes que desempeñan en el relato de la película.

Técnicas de análisis de datos

La técnica de análisis de datos que se aplica es de tipo cualitativa, particularmente la

que se ejecuta con la información de tipo lingüístico que se recolecta luego de la

observación-decodificación del documento cinematográfico, a través de la aplicación de las

matrices de acopio y dada la naturaleza de este tipo de instrumento.

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Así, con el empleo de estas matrices se logra el reconocimiento, la decodificación,

interpretación y síntesis de elementos comunicacionales presentes en el objeto de estudio

(personajes como personas y sus roles narrativos), según el patrón o criterio integral de

categorías construido a partir de los objetivos de la investigación, para identificar los

vínculos coherentes entre las sinergias producidas en la descomposición de la totalidad

comunicacional de las escenas y planos de la película estudiada.

Por otra parte, difícilmente una investigación basada en este tipo de instrumentos

faculte la preparación de un conjunto inflexible de categorías que de antemano permita la

transformación de datos en cifras o porcentajes. Por tal motivo, en el taller no se adelanta

ningún tipo de clasificación cuantitativa, lo que ratifica que el análisis de datos fue

principalmente cualitativo.

Bases teóricas esenciales para el Taller

La narración

También, Casetti y Di chio (1991) aseveran que “la narración es de hecho, una

concatenación de situaciones, en la que tienen lugar acontecimientos y en la que operan

personajes situados en ambientes específicos” (p. 172) Así mismo, se destacan tres

elementos esenciales en la narración:

- Sucede algo: Ocurren “acontecimientos” (intencionales o accidentales, personales o

colectivos, ricos en consecuencias o muertos en sí mismos, de larga duración o

momentáneos etc.)

- Le sucede a alguien o alguien hace que suceda: Los acontecimientos se refieren a

“personajes” (héroes o víctimas, definidos o anónimos, humanos o no humanos, etc.), los

cuales, por su cuenta, se sitúan en un “ambiente” que los acompaña o d alguna manera los

completa (esta unión simbiótica de personajes y ambientes da origen a la categoría

narratológica de los “existentes”)

- El suceso cambia poco a poco la situación: en el sucederse de los acontecimientos y

de las acciones se registra una “transformación”, que se manifiesta como una serie de

rupturas con respecto a un estado procedente, o bien como reintegración, siempre evolutiva,

de un pasado renovado.

Las acciones y los acontecimientos

La dinámica narrativa sugiere una situación dentro de las cuales se sitúan acciones y

acontecimientos. Al tratarse de un agente animado llevará el nombre de acción, mientras

que si el agente es un factor ambiental o una colectividad, se denominará suceso. A partir

del orden establecido dentro de la diégesis cinematográfica se definirá el suceso en primera

instancia. Para Casetti y Di Chio (1991) estos explicitan la presencia e intervención de la

naturaleza, como acontecimientos climáticos, catástrofes, epidemias etc. y de la sociedad

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humana, lo que se relaciona con acontecimientos colectivos como guerras y revoluciones

entre otros.

Para una definición y comprensión más amplia de la acción es necesario identificar

diversos planos de análisis propuestos por Casetti y Di Chio (ob cit):

- La acción como comportamiento: Esta se considerará como una actuación

atribuible a una causa concreta. Teniendo en cuenta que el comportamiento es la

manifestación de la actividad de alguien, como consecuencia de un estímulo pueden

señalarse distintas categorías para su análisis, dentro de los cuales se presentan los

comportamientos: voluntario o involuntario, consciente o inconsciente, individual y

colectivo, transitivo o intransitivo, singular o plural y por último único o repetitivo.

- La acción como función: A pesar de las infinitas variables que pueda generar el

término de función, dentro de la narrativa cinematográfica se ha generado una clasificación

como consecuencia de su repetición el los filmes a través de los personajes. Estas son: La

privación, el alejamiento, el viaje, la prohibición, la obligación, el engaño, la prueba, la

reparación de la falta, el retorno y la celebración.

- La acción como acto: Al considerar el acto como una realización entre actantes, se

derivan dos dimensiones del mismo: Primeramente, la dimensión pragmática: En donde el

acto se explica a través de los existentes, mientras que en la pragmática se explica a través

de las movilizaciones interiores (sentimientos e impulsos)

Por otra parte, y en pocas palabras, los acontecimientos manifiestan que algo sucede, al

mismo tiempo que algo se avecina como consecuencia del mismo. Casetti y Di Chio (1991)

afirman que, “El acontecimiento, en suma, no es solo aquello que detalla el relato, sino

también y sobre todo lo que se mueve” (p. 198) Quedando establecida la importancia del

acontecimiento dentro de la diégesis del film, se deriva que es uno de los procesos

transformadores de la acción, por consiguiente, estos influenciarán el discurso narrativo.

El personaje como persona, rol y actante (fuente de información principal: Cora Requena, 2008)

Las tramas narradas son siempre, en el fondo, tramas “de alguien”, acontecimientos y

acciones relativos a quien tiene un nombre, una importancia, una incidencia y goza de una

atención particular: en una palabra, un “personaje”. Pero, determinar clara y sintéticamente

en qué consiste y qué es lo que en definitiva caracteriza a un personaje resulta difícil. Sin

embargo, se recurre a tres perspectivas posibles, tres ejes con los que afrontar el análisis de

este componente narrativo: el personaje como persona, luego como rol y, finalmente,

como actante.

El personaje como persona

El personaje lleva la responsabilidad de representar la fuerza del film y la base de su

existencia, por tanto siempre van a consolidarse como punto de partida del eje fundamental

en el contenido narrativo.

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Analizar al personaje en cuanto persona significa asumirlo como un individuo dotado

de un perfil intelectual, emotivo y actitudinal, así como de una gama propia de

comportamientos, reacciones, gestos, etc. Lo que importa es convertir al personaje en algo

tendencialmente real: ya se quiera considerar sobre todo como una “unidad psicológica”, ya

se le desee tratar como una “unidad de acción”, lo que lo caracteriza es el hecho de

constituir una perfecta simulación de aquello con lo que nos enfrentamos en la vida.

También, para Casetti y Di Chio (1991) al analizar el personaje como persona debe

tomarse en cuenta características como la edad, la apariencia y el sexo entre otros con en

fin de generar el ideal esquema anagráfico del mismo.

Según esta óptica se pueden hacer distinciones como las siguientes:

- Personaje plano y personaje redondo: simple y unidimensional el primero;

complejo y variado el segundo.

- Personaje lineal y personaje contrastado: uniforme y bien calibrado el primero;

inestable y contradictorio el segundo.

- Personaje estático y personaje dinámico: estable y constante el primero, en

constante evolución el segundo.

Naturalmente, pueden formularse categorías más específicas, distinguiendo entre

aquellas que se refieren al carácter (es decir, a un “modo de ser”, al personaje como unidad

psicológica), y las que se refieren al gesto (es decir, a un: “modo de hacer”, al personaje

como unidad de acción).

En todos los casos queda claro que la “persona”, en sus multiformes determinaciones,

se basa también en una precisa identidad física, que constituye, por así decirlo, su soporte.

De ahí oposiciones como macho/hembra, viejo/joven, fuerte/débil, pero también

normal/anormal...

El personaje como rol

Por otra parte, Casetti y Di Chio (1991), al señalar el personaje como rol, hacen

hincapié en que “más que los matices de su personalidad, se pondrán en relieve los géneros

de gestos que asume; y más que la gama de sus comportamientos, las clases de acciones

que llevan a cabo” (p. 179). De esta manera se colocará al personaje como un rol que

puntúa y sostiene la narración.

Este concepto presenta las siguientes clasificaciones:

- Personaje protagonista: Sostiene la orientación del relato.

- Personaje activo: Se sitúa como fuente directa de la acción y que opera en primera

persona.

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- Personaje pasivo: Es objeto de las iniciativas de otros y se presenta más como una

Terminal de la acción que como fuente.

- Personaje influenciador: Este hace “hacer” a los demás encontrando en ellos sus

ejecutores.

- Personaje autónomo: Este “hace” directamente, proponiéndose como causa y razón

de su actuación

- Personaje modificador: Se encarga de cambiar las situaciones para bien o para mal,

lo que los convierte en mejorador o degradador.

- Personaje conservador: Este tiene la tarea de mantener el equilibrio, por lo que se

convertirá en frustrador o protector.

- Personaje antagonista: Su posición es exactamente inversa a la del personaje

protagonista.

Sin embargo, estas clasificaciones son sólo indicativas, pero sirven al menos para

definir los roles narrativos en sus acciones, sus sistemas de valores, las axiologías de las

que son portadores. La contraposición entre protagonista y antagonista es, en este sentido,

ejemplar. También, dejan entender que el perfil de cada rol nace tanto de la extrema

especificación de las funciones (y de los valores) asignadas, como de la combinación de

diversos rasgos. La posibilidad para un personaje de asumir determinaciones distintas

muestra bien a las claras con su complejidad el modo en que cada uno de los roles nace

igualmente de una superposición de rasgos.

El personaje como actante

Otro modo de analizar el personaje consiste en leer tanto su entidad como su actuación

desde un punto de vista esencialmente abstracto. Aquí, a diferencia de lo que sucedía en las

perspectivas anteriores, no se examina al personaje ni en términos fenomenológicos (el

carácter y el comportamiento tal como se expresan), ni en términos formales (la clase de

actitudes y de acciones expresadas), sino que se sacan a la luz los nexos estructurales y

lógicos que lo relacionan con otras unidades.

Así, el personaje ya no se considera como una persona tendencialmente real, ni como

un rol típico, sino como, en terminología narratológica, un actante, es decir, un elemento

válido por el lugar que ocupa en la narración y la contribución que realiza para que ésta

avance. Con esto nos situamos, evidentemente, más allá de lo que se suele entender por

personaje: la noción de actante remite a una categoría general, independientemente de

quienes luego la saturen, trátese de humanos, animales, objetos o incluso conceptos, en la

medida en que se convierten en núcleos efectivos de la historia.

Desde este punto de vista, la primera distinción que se debe efectuar en el interior del

complicado universo de los personajes es la que se establece entre Sujeto y Objeto. El

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Sujeto se presenta como aquel que se mueve hacia el Objeto para conquistarlo (dimensión

del deseo), y a la vez como aquel que, moviéndose hacia el Objeto, actúa sobre él y sobre el

mundo que lo rodea (dimensión de la manipulación).

Esta doble actitud lo lleva a vivir cuatro momentos recurrentes: activa una performance

(es decir, se mueve concretamente hacia el Objeto o actúa concretamente sobre él); está

dotado de una “competencia” es decir, está en condiciones de tender hacia el Objeto y de

intervenir sobre él: antes incluso de hacer, sabe hacer, puede hacer, quiere hacer y debe

hacer, y esta capacidad, estas posibilidades, estas intenciones y estas obligaciones, son las

que le permiten cualquier tipo de actividad); actúa sobre la base de un “mandato” (si tiende

hacia el Objeto es porque alguien lo ha invitado a moverse); y como consecuencia de su

actuación obtiene una sanción (una retribución-recompensa o, más raramente, una

detracción-punición, que establecen la calidad de los resultados conseguidos).

El Objeto es, por el contrario, el punto de influencia de la acción del Sujeto: representa

aquello hacia lo que hay que moverse (dimensión de deseo) y aquello sobre lo que hay que

operar (dimensión de la manipulación); en resumen, una meta y un terreno de ejercicios.

Puede asumir distintas calificaciones: por ejemplo, puede mostrarse como Objeto

instrumental o como Objeto final (según el Sujeto tienda hacia él u opere en él con vistas a

otra cosa, o como meta última de su recorrido); o como Objeto neutro u Objeto de valor

(según sea susceptible de utilizaciones distintas o exprese una axiología concreta).

En torno al eje direccional Sujeto-Objeto se construyen luego otros ejes auxiliares,

sobre los que se disponen las acciones de enmarque y contorno. El resultado son otros

actantes contrapuestos.

Ante todo, el Destinador contra el Destinatario. El primero se propone como punto de

origen del Objeto, como su horizonte de partida; se trata, pues, de la fuente de todo cuanto

circula por la historia (haberes inmediatos, pero también haberes particulares, como la

propia competencia del Sujeto, que el Destinador le proporciona a través de un

adiestramiento o una persuasión, y la sanción con respecto a su actuación, que el

Destinador le expresa mediante premios y puniciones). El Destinatario, a su vez, se

identifica con quien recibe el Objeto, se enriquece con él y extrae beneficios. El mismo

Sujeto, obviamente, puede convertirse en Destinatario (no sólo cuando conquista el Objeto

deseado, sino también cuando adquiere una competencia y recibe una sanción).

También, el eje Destinador/Destinatario está relacionado con el eje Sujeto/Objeto,

proponiéndose como el “canal de comunicación” a través del cual se desplaza el Objeto: en

este sentido enmarca los movimientos de los dos primeros actantes, proporcionando la pista

de sus desplazamientos.

Finalmente, se presenta el Adyuvante contra el Oponente. El primero ayuda al Sujeto

en las pruebas que éste debe superar para conseguir el Objeto deseado; el segundo, por el

contrario, se dedica a impedir el éxito. El eje diferenciado por estos dos actantes se define

así, más que en relación al Objeto que se debe comunicar, en relación al Sujeto empeñado

en su performance; como consecuencia, debe relacionarse a su vez con el eje Sujeto/Objeto

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en calidad de estructura de apoyo, de “acelerador” o “desacelerador” de los movimientos

allí desarrollados.

Esto permite desarrollar, siempre basándose en los actantes y en sus tres ejes

fundamentales, un esquema fundamental cuyo núcleo principal esté basado en la estructura

polémica (la lucha) y cuyas partes periféricas se fundamenten sobre la estructura

contractual (el pacto, la alianza, la promesa): un esquema que, según algunos, podría

evidenciar que las manifestaciones narrativas, más allá de sus diferencias superficiales, no

son más que representaciones figuradas de las diferentes formas de la comunicación

humana, entendida también como teatro de intercambio, de contrastes, de acuerdos y de

enfrentamientos.

Destinador Objeto Destinatario

Ayudante Sujeto Oponente

Estructura actancial del relato

Ejemplos de la aplicación de los instrumentos

A continuación se exponen algunos resultados obtenidos con la aplicación de los

instrumentos mostrados en los criterios metodológicos, pero con la película “Crepúsculo”

(2008), de la directora Catherine Hardwicke.

Aplicación de la matriz para caracterizar personajes como persona de la película

“Crepúsculo”

Cuadro Personaje Bella Swan como persona / Aspectos físico-funcionales

Categorías Observaciones

Edad 17 años (aunque al final por su madurez frente a los

problemas que afronta, aparenta ser mayor, igualmente por

su manera de actuar y analizar su entorno)

Propiedades físicas-

funcionales (salud,

constitución corporal,

estatura, destrezas o

limitaciones…)

Es de estatura mediana y goza de buena salud, sin

embargo, es incapaz de moverse rápido sin caerse ó

defenderse por sí sola ante algún atacante, por ende,

caracteriza a un personaje que es delgado y débil, pero

sólo físicamente. Por otro lado, el olor de su sangre es

“deliciosa” para los vampiros, por lo que los atrae con

facilidad.

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Color de piel, ojos y

cabello

Piel muy clara, ojos color chocolate y cabellos color café,

de corte grafilado, con tonalidades más claras a la luz del

sol.

Apariencia Aparenta ser una joven sin mucho equilibrio físico por su

facilidad para tropezarse y golpearse con las cosas,

delicada, con una contextura delgada, inocente y no

exagera su apariencia con maquillaje, ni con cosas que

llamen la atención. Algunas veces presenta un aspecto

cansado

Vestuario / Estilo Pantalones largos que le quedan a la medida, las camisas

en su mayoría mangas largas, pegadas, que dejan ver la

forma de su cuerpo. Por estar en un lugar de bajas

temperaturas, siempre tiene chaquetas, generalmente

deportivas y sobretodos oscuros.

Personaje Bella Swan como persona / Aspectos intelectuales

Categorías Observaciones

Grado de instrucción Su grado de instrucción es de estudiante, cursante del 4to

año en la preparatoria de Forks, Washington.

Conocimientos Es una joven educada e inteligente, según su grado de

instrucción.

Habilidades cognoscitivas Bella es capaz de encontrar la verdad en sus sueños y hasta

de vislumbrar, algunas veces, parte de su futuro. Se

caracteriza por tener un “escudo mental”, siendo ésta la

única persona a quien Edward Cullen no le puede “leer”

sus pensamientos. Por otro lado, es muy observadora y

analiza todo lo que ve al instante, muy centrada en lo que

quiere, pero sabe qué reservarse. Estudia a las personas y

las situaciones antes de actuar, haciendo sentir bien a los

demás.

Lenguaje y actos del habla Generalmente expresa sus respuestas e ideas cuando

considera que es necesario o cuando alguien le formula

alguna pregunta, pero siempre sus respuestas son claras y

concisas, sin entrar en muchos detalles, a menos que hable

con alguien que le inspire confianza como para abrirse más

a esa persona. Suele dejar pausas entre cada oración

mientras está hablando, utilizando su lenguaje corporal

(inconscientemente) con el que describe lo que piensa.

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Personaje Bella Swan como persona / Aspectos psicológicos

Categorías Observaciones

Estado emocional

-Al comienzo del relato, es una persona resignada que vive

con sus penas, por lo que disimula estar bien y satisfecha;

cuando en el fondo guarda su desánimo. Por tal razón es

reservada, tímida y callada con los que intentan acercarse

más a ella. Luego, al aparecer Edward Cullen en su vida,

Bella de resignada a las circunstancias de los demás pasa a

querer decidir sobre lo que quiere. Pero todo gira alrededor

de Edward, a pesar de descubrir que es un vampiro, que no

es ningún joven (tiene casi el centenar de años).

-Suele mostrarse confundida cuando siente que algo no

encaja en su lógica. Pero también, es sensible, agradable,

optimista ante las dificultades.

Lazos afectivos Está completamente enamorada de Edward, aún después de

descubrir qué es, y lo único que teme es perderlo, su amor

supera su miedo, aún ante el peligro que éste puede

representar para ella. Se preocupa mucho por la familia de

Edward y el problema que ella puede llegar a representar

para ellos. Igualmente, ama a su padre y su madre. Sus lazos

afectivos hacia sus seres queridos son fuertes y los defiende

ante cualquier adversidad, y ante el miedo de perderlos,

prefiere perder su propia vida.

Personaje Bella Swan como persona / Aspectos socioeconómicos

Categorías Observaciones

Profesión y/o ocupación Es sólo una estudiante, que se ocupa de sus asignaciones, la

comida y de mantener la casa de su padre en orden.

Estado civil Soltera y nunca antes había tenido ningún novio.

Hogar y familia Anteriormente Bella vivía con su madre Renée, quien se

desplaza constantemente de lugar por la ocupación de su

pareja, un beisbolista, por lo que se muda con su padre

Charlie a Forks, Washington. Sus padres se separaron

cuando sólo tenía seis meses de nacida.

Conducta social Aunque no le agrada Forks decide mantener su mejor

actitud, es responsable, amable con su padre, trata de ser lo

más amigable posible, sencilla y humilde, no le gusta llamar

la atención, sino pasar desapercibida. No parece estar

interesada en encontrar algo que la llene de satisfacción, sólo

vive su día a día como mejor le parece. Pero luego su

atención se centra en Edward, desde que lo vio por primera

vez en el Instituto, y aún descubriendo su secreto es

incondicional a él. Pero por este mismo motivo se abstrae un

poco de sus relaciones familiares y de compañeros de clase.

Puede presentarse algo errática, pero también valiente al

enfrentarse al peligro sola, sin contar con nadie.

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Personaje Bella Swan como persona / Aspectos culturales

Categorías Observaciones

Creencias Al descubrir la existencia de los vampiros, como Edward,

la encuentra fascinante y cree en la bondad y las buenas

personas que representan para la sociedad, al optar ser

“vegetarianos.”

Ideología política

No hay datos que proporcionen esta información. Religión

Interpretación del personaje Bella Swan como persona

Es una persona joven pero madura, valiente, tímida e introvertida que no sabe lo que

busca, pero encuentra el amor en un vampiro que no formaba parte de su realidad del

mundo, por el cual es capaz de arriesgar hasta su vida. Una adolescente mártir que no

demuestra sus penas y no busca preocupar a nadie. Su aspecto físico demuestra lo que ella

es, alguien reservada, sencilla y aparentemente débil y desequilibrada físicamente, pero

fuerte de mente y corazón.

Por otro lado, no demuestra ningún tipo de creencias religiosas en la película. Atrae el

peligro sin buscarlo, pero trata de disimular su miedo para no afectar a los demás. Aunque

se considera a sí misma una débil humana, su habilidad inconsciente de evitar que Edward

le lea el pensamiento, es una de las cosas que en primera instancia la hacen atractiva e

interesante para él y su familia, sin contar el “exquisito” olor de su sangre.

En cuanto a su atractivo físico, en una adolescente que no busca explotar su belleza y ni

siquiera esta consciente de lo llamativa que es para otros chicos, lo cual tampoco es algo

que se encuentre en su lista de intereses, ya que su fijación sólo se centra en el extraño y

sorprendente Edward.

Su manera de aceptar el mundo sobrenatural de los vampiros al cual no esta

acostumbrada, es porque su amor adolescente supera a su miedo y porque confía

ciegamente en el vampiro que le llegó a salvar la vida en varias ocasiones. Es decir, le

parece fascinante la idea de que exista algo más a los humanos y eso despierta su curiosidad

y aplaca su miedo.

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Personaje Edward Cullen como persona / Aspectos físico-funcionales

Categorías Observaciones

Edad Aparenta unos 17 años, pero en realidad tiene 99 años de

inmortalidad. (desde 1918, el año en que fue transformado por

el doctor Cullen hasta el 2009)

Propiedades físicas-

funcionales (salud,

constitución corporal,

estatura, facultades o

limitaciones…)

Su salud es perfecta, puesto que nada le afecta. La constitución

corporal es fuerte por su condición de vampiro, aunque sin

mucha musculatura. De estatura alta. Además de las

características de un vampiro, según el relato ficcional de

Stephanie Meyer (rapidez, súper fuerza, de cuerpo

impenetrable, belleza, brillo en el sol, etc), cualidades con las

que pueden atraer a los humanos. Sin embargo, Edward por ser

“vegetariano” sólo se alimenta de animales, aunque se ve

tentado por el exquisito olor de la sangre de Bella.

Color de piel, ojos y

cabello

Su piel es clara, muy pálida y helada, brilla ante los rayos del

sol. Sus ojos son negros cuando tiene hambre y color ámbar ó

castaños claros cuando se ha alimentado, siempre con ojeras.

Sus cabellos son castaños con reflejos color miel y con un

aspecto cuidadosamente “desordenado”.

Apariencia Ante los demás parece un modelo atractivo de revista con porte

serio, casual, sofisticado y de carácter extraño. Más allá de su

físico, su cara demuestra una tristeza, tensión y desinterés por

todo, esto se enfatiza aún más al ser el único de su familia sin

pareja, lo cual es inexplicable para todas las jóvenes humanas

que alguna vez se interesaran en él y a las cuales no les prestó

atención.

Vestuario Su vestuario es casual pero no exagerado, con ropas de marca

debido a la posición económica de su familia.

Personaje Edward Cullen como persona / Aspectos intelectuales

Categorías Observaciones

Grado de instrucción Debido a su inmortalidad, se presume que se ha graduado

muchas veces de secundaria, según los detalles observados en

el film. Tiene una gran colección de libros literarios y tiene

conocimientos musicales, por lo que toca el piano con agilidad.

Conocimientos Es un estudiante que ha pasado muchas veces por una

preparación educativa, además es inteligente y educado.

Habilidades del

pensamiento

Tiene la habilidad de escuchar los pensamientos de los demás

vampiros y de las personas, con la clara excepción de Bella.

Esta habilidad debe ser constantemente controlada, para evitar

responder las preguntas de los humanos, cuando sólo se la han

formulado en pensamientos. Es fuerte de mente al lograr

controlar su naturaleza e instinto vampiro cuando esta cerca de

su amor, la humana y frágil Bella

Lenguaje Por ser de la época antigua de 1918, utiliza algunas palabras

pasadas de moda o en desuso.

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Personaje Edward Cullen como persona / Aspectos psicológicos

Categorías Observaciones

Estado emocional Piensa que los vampiros no deberían existir y se ha cansado

de vivir en la eternidad sin tener nada que lo pueda satisfacer

en todos los sentidos. Cuando conoce a Bella, descubre que

no puede controlar su atracción y su necesidad de estar cerca

de ella, con quien experimenta algo que no entiende, porque

nunca antes había sentido. Por otro lado, sabe el peligro que

él representa para una humana, y se muestra con actitudes

hostiles ante Bella. Cuando por fin acepta que no puede estar

lejos de Bella y que ella corresponde a sus sentimientos, él

se muestra tal cual es y espera que ella se asuste y se aleje

por sí sola, aunque esto nunca sucede, represente un

constante temor para él.

Estabilidad emocional No quiere ser un monstruo por lo que se mantiene como un

“vegetariano” al igual que su familia. Su amor se desborda

hacia Bella, por quien anhela ser humano otra vez para poder

compartir con ella sin la preocupación de poder hacerle

daño. Se convierte irónicamente en su protector mientras

esta cerca de ella. Nunca había estado enamorado y

comienza a experimentar el sentimiento hacia la humana

Bella de una forma sobreprotectora y a escondidas.

Lazos afectivos El amor, devoción y respeto hacia Carlisle y su familia lo

hace un miembro valioso y querido dentro de la misma. En

su familia encuentra el apoyo incondicional y es libre de

tomar sus propias decisiones. Con todos mantiene una buena

relación. Con Bella empieza a experimentar el amor, la

confianza y la comunicación con una pareja, por ello le

cuenta el secreto de los vampiros, aún teniendo en cuenta la

imprudencia que eso significa para él y su familia. Ambos

lazos afectivos son muy fuertes.

Personaje Edward Cullen como persona / Aspectos socioeconómicos

Categorías Observaciones

Profesión y/o ocupación Se ha graduado muchas veces de secundaria, lo cual se le

permite por su apariencia de adolescente. Por ende, y para

motivos del film, se encuentra en el instituto de Forks

cursando el 4to año.

Estado civil Soltero y nunca ha tenido un alma gemela o pareja.

Hogar y familia Vive en Forks, pero alejado del pueblo. Su familia adoptiva

son el Dr. Cullen, su madre Esme y sus “hermanos”: Alice,

Jasper, Rosalie y Emmet.

Conducta Le molesta los pensamientos maliciosos y tontos de los

demás y trata de no reaccionar ante ellos. Pasa de ser un

solitario a un enamorado y se demuestra con su estado de

ánimo y su trato hacia los demás. Se preocupa por el daño

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que puede llegar a causar, por lo que se muestra cuidadoso,

ausente y con poca relación con los demás humanos, a

menos que sea necesario. En sus facciones se pueden ver el

dolor que le causa su sed de sangre y la felicidad cuando esta

junto a Bella, cosa que nunca había sentido. Su decisión de

mantener a Bella tal cual la conoció es inquebrantable y hace

todo lo que puede porque ella no sea un vampiro, aun

cuando ésta le pide que la transforme y él sienta un deseo

incontrolable por su sangre.

Personaje Edward Cullen como persona / Aspectos culturales

Categorías Observaciones

Creencias Cree en la existencia del alma y que coexiste algo más allá

de la muerte para los humanos, pero no para los vampiros.

Ideología política No hay datos que proporcionen esta información

Religión Aunque cree en la salvación del alma, no hay datos que

demuestren que pertenece o cree en alguna religión ó en un

Dios.

Interpretación del personaje Edward Cullen como persona

Edward aparenta ser un chico de 17 años, cuando en verdad es un vampiro de 99 años.

Su apariencia, más allá de resaltar su atractivo físico, demuestra una tristeza y tensión

inexplicable a simple vista, pero todo ello se explica con su forma de pensar y ver el

mundo. Sus ideas se basan en que su raza no debería existir, en que son indestructibles y

tiene que vivir eternamente sin tener algo o alguien que le haga querer vivir tanto tiempo.

Su facultad de leer la mente es un don que le puede llegar a fastidiar y de aborrecer muchos

pensamientos a los cuales intenta controlarse para no reaccionar.

Con la llegada de Bella, Edward involuntariamente sufre transformaciones que no

entiende porque nunca había experimentado la atracción o el amor de esa manera. Existen

otros elementos que influyen en esa transformación y en su cambio temperamental: primero

la inexplicable razón de no poder escuchar sus pensamientos, lo que la hace especial,

extraña, luego está el deseo casi incontrolable de probar la sangre de Bella, su necesidad de

mantenerla viva, humana y a su lado y su ideal de no ser un monstruo, por lo que sólo se

alimenta de animales.

A pesar de todos sus intentos, él sabe lo que es, pero anhela ser humano para poder

compartir con Bella sin hacerle daño y evita afectar a su familia con sus decisiones. Tiene

claro que debe cumplir la única ley entre los vampiros de no revelar su identidad, pero

confía en Bella más que nadie, aceptando la imprudencia que eso significa.

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Después de estas matrices aplicadas y la respectiva Interpretación de datos de cada uno

de los personajes como persona, se presentan las Relaciones entre los diferentes

personajes como persona. Para que vean esto les presento un ejemplo de esta

interpretación final de los resultados de los personajes como personas, pero esta vez de la

película El Exorcista. A continuación el ejemplo:

Relaciones entre los diferentes personajes como persona de la película “El Exorcista”,

del director William Friedkin

Al analizar al personaje como persona implica identificarlo como un individuo dotado

de un perfil intelectual, emotivo y actitudinal, con una gama de comportamientos,

reacciones, gestos..., que lo convierten en una “unidad psicológica y de acción”, al tomarse

en cuenta características como la edad, la apariencia, sexo, entre otros, con el fin de generar

el ideal esquema del mismo. De esta manera, los personajes como persona de la película El

Exorcista muestran en general las siguientes características:

- De los seis analizados, por ser los más significativos del film, sólo hay dos

personajes planos, estáticos y lineales: el Dr. Klein y el Detective Kinderman. Ambos

mantienen a lo largo del film una unidad psicológica y de acción simple y unidimensional.

A pesar de todo lo acontecido con Regan, el Dr. Klein no sale de su diagnóstico inicial,

apegándose a lo conocido por el hombre hasta el momento por la ciencia médica,

entorpeciendo por desconocimiento la acción de Dios a través de los ministros de la iglesia,

Merrin y Karras. Igualmente ocurre con el Detective Kinderman, que trata de resolver los

hechos a través de lo racional y las ciencias criminalísticas, fracasando en ello, sin llegar a

entender plenamente la lucha entre el bien y el mal que se ha dado en su entorno.

- Los otros tres personajes son redondos y contrastados, o sea complejos, variados y

contradictorios. Estos presentan contrastes de debilidades y fortalezas:

Chris MacNeil es fuerte segura y decidida, pero su falta de Fe en Dios y su apego a la

ciencia médica le hace demorar su decisión de buscar ayuda en Karras. Este último es

fuerte físicamente y por sus conocimientos científicos y religiosos, pero es extremadamente

vulnerable psicológicamente por sus problemas de Fe y cargo de culpa por lo ocurrido a su

madre. Merrin es todo lo contrario, extremadamente débil físicamente (del corazón y la

vejez) pero tiene conocimientos y una gran experiencia en el tema del exorcismo, al

enfrentarse anteriormente a través de este ritual al Demonio, venciéndolo. Regan es una

niña dulce, tierna y afectuosa, pero que va degradándose y envileciéndose terriblemente por

la posesión del Demonio.

- Sin embargo, estos tres últimos personajes son más bien estáticos, casi no

evolucionan a lo largo del relato, tal vez Karras y Regan presentan cierto dinamismo con

cambios o evoluciones. El primero nombrado por un proceso de depresión que incrementa

sus dudas de Fe y de Regan que más bien involuciona por estar cada vez más abiertamente

poseída por el Demonio, tornándose violenta y horripilante.

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Resultados de la aplicación de la matriz para determinar los roles narrativos de

personajes de la película “Crepúsculo”

Rol(es) narrativo(s) del personaje Edward Cullen

Clases de acciones realizadas

Comportamiento(s)

del personaje /

transformación(es)

sufrida(s) por el

personaje

Con Bella se muestra como un protector que la mantiene con vida y

ante su familia como un solitario y testarudo que impide la

transformación de la humana en un vampiro.

Es independiente y por lo tanto toma sus propias decisiones, aunque

siempre tiene presente a su “familia”. Cuando conoce a Bella pasa de

ser un solitario y triste vampiro, a uno enamorado y desesperado por

mantener viva a una humana, la cual lo considera como su razón de

ser. Ésta relación permite que exista un cambio tanto en la vida de

Edward como en la de su propia familia, porque se ven obligados a

interactuar aún más con los humanos y los conduce a ser protectores

de su objeto de deseo.

Reacción ante los

conflictos

Ante los conflictos se muestra sobreprotector, preocupado, con un

coraje perturbador y una furia desaforada que lo hace peligroso para

sus enemigos.

Entre ser un vampiro de naturaleza despiadada y aparentar ser

humano, prefiere la segunda, por lo que controla su sed para no ser

un monstruo y se considera como toda su familia un vegetariano que

solo se alimenta con sangre de animales.

Interacción con los

otros personajes

Por su condición de vampiro, no se relaciona o se acerca mucho a los

humanos, con excepción de Bella, por quien comienza a establecer

pequeños diálogos con algunas de sus amistades, por educación. Es

unido con sus hermanos y demás miembros de su familia porque los

quiere como tal.

Tipo(s) de rol(es) caracterizado(s) en el relato

Edward es un personaje conservador, que quiere mantener las cosas como están sin

estropear nada ni arriesgar a su familia. Siempre evalúa el efecto de sus acciones y piensa

en el futuro para tomar sus propias decisiones, por lo que es un personaje autónomo.

Aunque se cree un antihéroe, la verdad es un modificador debido a que se convierte en la

razón de ser de Bella cambiando su forma de pensar y en consecuencia, interfiere en su

forma de vida y en la de su propia familia, en la que se muestra como un influenciador

que los conduce en la acción de protección y rescate de Bella. Finalmente, es

protagonista al sostener la orientación final del relato, haciendo cualquier cosa por Bella

con tal de protegerla y frustrando las acciones de James al intentar hacerle daño.

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Relaciones entre los diferentes roles narrativos de los personajes principales en el

relato de la película “Crepúsculo”, de la directora Catherine Hardwicke

Gracias al previo análisis de los roles narrativos que ejercen los personajes principales

en el film Crepúsculo (2008), se puede observar como sus desenvolvimientos y acciones

son necesarias para ir desentramando una serie de eventos conflictivos entre el amor y la

razón y el tradicional combate entre el bien y el mal. Por un lado, se encuentran los

personajes protagonistas activos representados en: mártir y víctima (Bella Swan) y

modificador - influenciador (Edward Cullen), que en circunstancias inapropiadas detonan

una serie de sentimientos encontrados. Cuentan con personajes de apoyo como es el caso

del Dr. Carlisle el que también juega un papel importante de influenciador, su esposa

Esme y el resto de su familia: Alice, Jasper, Emmett, a excepción de Rosalie, quien mostró

cierta reticencia y obstinación hacia Bella, pero que se ve obligada a ayudarla por órdenes

de su hermano Edward.

Por otro lado, quienes dan pie a la confrontación por una lucha de intereses son James y

su pareja Victoria, en sus roles de antagonistas reactivos ante un reto por ensañamiento y

diversión, en el cual Edward y su familia se interponen para actuar como modificadores

frustradores de sus acciones y terminar salvando la vida de Bella.

Análisis de los personajes como actantes dentro de la estructura narrativa de la

película Crepúsculo

Los personajes no son sólo elementos que pueden ser analizados por sus características

personales (aspectos físicos, psicológicos y sociales) o por el papel que desempeñan dentro

de la trama ficcional (comportamiento, actitudes y acciones expresadas), como se les

determinó en las matrices anteriores, sino también, como nexos estructurales y lógicos, que

se complementan a causa de sus objetivos y, por lo tanto, como consecuencia de sus actos o

intervenciones en los conflictos del relato. Desde el principio hasta el final de la trama, los

personajes conviven como partes fundamentales del orden dramático de la historia.

Así, el personaje no se considera como una persona real, ni en un rol típico, sino como

un elemento estructural actancial, es decir, un ente válido por el lugar que ocupa en la

narración y la contribución que realiza para que ésta evolucione. La noción de actante

remite a una categoría general, independientemente de quienes luego la ocupen, trátese de

uno o varios humanos, animales, objetos o incluso conceptos, en la medida en que se

convierten en núcleos efectivos del relato.

De este modo, la primera fase implica: distinguir a los personajes, enfocándose en la

compleja interacción de todos ellos, para luego identificar la relación entre el Sujeto y

Objeto. El Sujeto se presenta como aquel que realiza una acción motivado por sus

necesidades, que busca cumplir con algún objetivo, y que se mueve hacia el Objeto para

lograrlo (dimensión del deseo), y a la vez como aquel que, moviéndose hacia el Objeto,

actúa sobre el mundo que lo rodea. Esto se puede aplicar en la relación Bella (Objeto de

deseo) – Edward (Sujeto autónomo/modificador).

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En este eje actancial el Sujeto (Edward) se mueve específicamente hacia el Objeto

(Bella) y actúa concretamente sobre él dotado de una “competencia psicológica” querer-ser

y deber-hacer movido por una “atracción”, primero la atracción hacia su sangre y luego la

atracción hacia Bella como persona, buscando una retribución inconsciente de que ella

corresponda a su amor, lo que involucra la constante protección de la vida de Bella.

La segunda fase se aplica en torno al eje direccional Sujeto-Objeto, donde se

construyen otros ejes auxiliares, sobre los que se disponen las acciones de enmarque y

contorno. El resultado son otros actantes contrapuestos. Ante todo, el Destinador -

Destinatario. El primero se propone como punto de origen del Objeto, como su horizonte de

partida, en este caso, representado por las bondades y cualidades de la humanidad y el

Destinatario sería la misma Bella, en quien encarna la naturaleza benévola de la humanidad

mediante sus sentimientos de amor.

También, el eje Destinador - Destinatario está relacionado con el eje Sujeto -Objeto, a

través del cual se desplaza el Sujeto quien busca a proteger a Bella del peligro de su vida

cotidiana y de la amenaza que él mismo representa para ella, sin embargo, también busca

acercarse más a la humanidad mediante la misma Bella, estableciéndose una lucha interna

de Edward entre lo él quiere y no puede tener por su naturaleza; en este sentido se enmarca

los movimientos de estos actantes, proporcionando la pista de sus desplazamientos.

Finalmente, la tercera fase consiste en presentar el eje Adyuvante contra el Oponente.

El primero ayuda al Sujeto en las pruebas que éste debe superar para conseguir el Objeto

deseado; el segundo, por el contrario, se dedica a impedir el éxito. Este eje diferenciado por

estos dos actantes se define así, más que en relación al Objeto que es deseado por el Sujeto

empeñado en su desenvolvimiento a lo largo de la trama; como consecuencia, debe

relacionarse a su vez con el eje Sujeto/Objeto en calidad de estructura de apoyo, de

“acelerador” o “desacelerador” de los movimientos allí desarrollados.

En la película Crepúsculo el actante adyuvante está definido concretamente por la

familia de Edward (Dr. Cullen, Esme, Alice, Jasper, Emmet), a excepción de Rosalie que

presta su ayuda con cierta reticencia por el desagrado hacia Bella, debido al peligro que ésta

representa para su “familia”, no obstante, Rosalie es un personaje conservador/pasivo que

no intenta nada en contra de Bella. Sin embargo, existen otros actantes que si se oponen a

los objetivos del Sujeto y se pueden visualizar: en el mismo Edward por su naturaleza

vampírica, que en primera instancia pensó en asesinar a Bella por el exquisito olor de su

sangre. Por otro lado se muestra contradictorio, aun cuando se siente atraído por ella,

intenta alejarse, aunque se da cuenta de que no puede. Posteriormente, su último oponente

es James, quien movido por la ira y el capricho, intenta asesinar a Bella.

De acuerdo a las ideas antes expuestas y siguiendo el orden de acción e importancia de

los personajes seleccionados en el film Crepúsculo, el esquema actancial queda

representado de la siguiente manera:

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Destinador Objeto Destinatario

(La humanidad) (Bella Swan) (La misma Bella que encarna la

naturaleza benévola de la

humanidad, representada en los

sentimientos ligados al amor)

Ayudante Sujeto Oponentes

(Clan vampiros de la (Edward/Humano) (Edward/Vampiro. El vampiro

familia Cullen, aunque James y su pareja)

con la inicial reticencia

de Rosalie)

Estructura actancial de Crepúsculo

Orden para la realización del Taller II

- Aplicación de las matrices para caracterizar los personajes como persona de la

película XXX

Después de estas matrices aplicadas y la respectiva Interpretación de datos de cada

uno de los personajes como persona se presentan las Relaciones entre los diferentes

personajes como persona de la película XXX

- Aplicación de la matriz para determinar los roles narrativos de personajes de la

película XXX

Después de la aplicación de la matriz de Roles narrativos a los personajes se

presentan las Relaciones entre los diferentes roles narrativos de los personajes

principales en el relato de la película XXX

- Análisis de los personajes como actantes dentro de la estructura narrativa de la

película XXX

Desarrollar el análisis de los 3 Ejes actanciales de la película para entonces sintetizar

este análisis en el esquema de la Estructura actancial de XXX.

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Referencias

Casetti, F. y Di chio, F. (1991) Como analizar un film, Barcelona, Buenos Aires, México,

Ediciones Piados

Hurtado, J. (2000). Metodología de la Investigación Holistica. Ediciones SYPAL,

Venezuela.

Sabino, C. (2002). El Proceso de Investigación (5a. Ed.). Caracas: Panapo, C. A.

Tamayo y Tamayo (1999). El Proceso de la Investigación Científica. Editorial Luminosa.