Boletín Espeleológico Informativo y Científico No.6 (Edición Especial No.3) Parte III

download Boletín Espeleológico Informativo y Científico No.6 (Edición Especial No.3) Parte III

of 56

description

Boletín del Grupo Espeleologico Ernesto Tabio, el cual ha sido dedicado en su totalidad a Antonio Nunez Jimenez, Padre de la espeleologia de Cuba... Parte III

Transcript of Boletín Espeleológico Informativo y Científico No.6 (Edición Especial No.3) Parte III

  • No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Sumario

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    La sencillez de Nez Jimnez Por: Ramn Artiles Avela

    Mis vivencias espeleolgicas Por: Humberto Vela Rodrguez

    Present a la prensa matancera, el libro El otro Antonio Por: Jos Miguel Sols Daz Cuba pasaje a la naturaleza (LXXII) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIII) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIV) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXV) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVI) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVII) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVIII) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIX) Por: Pedro Luis Hernndez Prez y Jorge Freddy Ramrez Prez

    La geografa de Cuba quemada. Sinopsis de los hechos y consecuencias Por: ngel Graa Gonzlez

    Antonio Nez Jimnez. Fundaciones y primacas Por: ngel Graa Gonzlez

    Organizaciones y leyes proteccionistas en Cuba. Lo que tenemos y disfrutamos hoy se debe en mucho al trabajo de Antonio Nez Jimnez Por: ngel Graa Gonzlez

    Visiones de Nez Jimnez sobre el Che Por: Amelia Duarte de la Rosa y Henry Delgado Manzor

    Pg. 1

    Pg. 3

    Pg. 5

    Pg. 6

    Pg. 9

    Pg. 11

    Pg. 13

    Pg. 15

    Pg. 18

    Pg. 21

    Pg. 26

    Pg. 29

    Pg. 35

    Pg. 39

    Pg. 45

  • No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Antonio Nez Jimnez. Tiempos de pensamientos Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    La Gran Caverna de Santo Toms, Viales, Pinar del Ro Cuba Por: ngel Graa Gonzlez

    Pg. 46

    Pg. 50

    Sumario

  • Pg. 1

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Por: Ramn Artiles Avela

    En enero de 1986 se celebr en el Palacio de las

    Convenciones de Cuba el Primer Simposio Mundial

    de Arte Rupestre, desde el ao anterior La Sociedad

    Espeleolgica con Nez Jimnez a la cabeza vena

    preparando este magno evento, en los meses finales

    del 1985, Nez inform en un curso que se

    imparta en la sede de la Academia de Ciencias de

    Cuba de la ausencia de unos colegas extranjeros y

    que si los que estbamos all desebamos participar

    debamos presentar la documentacin necesaria en

    su oficina del Ministerio de Cultura, en el plazo que

    se determinaba, despus de tramitar la autorizacin

    en la Direccin de Educacin y otras gestiones de

    rigor con la escuela donde trabajaba, me avisaron

    de mi participacin como delegado en este magno

    evento.

    Haba ingresado a la Sociedad Espeleolgica de

    Cuba dos aos atrs y participaba con mis

    compaeros de las visitas a las cuevas de las Alturas

    Bejucal Madruga Coliseo y las Alturas Habana-

    Matanzas, primero como aventura, despus de

    forma sistemtica y mucho ms seria como

    miembro del grupo de espeleologa del municipio

    Madruga; a Nez lo conoca por mi padre y mi

    abuelo paterno, de este ltimo recuerdo como

    disfrutaba los partes meteorolgicos que daba

    Nez cuando se acercaba un cicln a nuestro pas,

    era la poca en que Nez diriga la academia de

    Ciencias al principio de nuestra Revolucin, mi

    padre conservaba el libro Geografa de Cuba, la

    edicin de 1959 como un tesoro, la exhiba en su

    librero y recuerdo que era intocable para mi

    hermana y yo, solo poda usarla l cuando nos lea

    fragmentos de ella, hoy conservo este tesoro en mi

    librero, l me hablaba de su sapiencia y casi lo

    veneraba por su conocimiento de la geografa

    cubana, crec con ese amor a la figura de Nez

    como una leyenda.

    Visit junto a mi padre las cuevas desde muy nio,

    siempre me hablaba de descubrimientos, de

    expediciones a la provincia de Pinar del Ro, a

    cueva de Mesa y otras tantas. Mi padre ha sido un

    autodidacta de la espeleologa cubana, y logr

    interesarme en la Geografa y la Historia, en cuanto

    sali publicada la obra: Cuba, dibujos rupestres la

    adquir en la librera y me la beb literalmente,

    todava hoy la consulto muchsimo, la utilic como

    bibliografa en mi tesis de maestra, poco a poco me

    adentr en el maravilloso mundo de la cultura

    aborigen hasta enamorarme de este tema del cual

    converso con mis colegas y estudiantes

    universitarios. Nunca le cont a Nez como fue

    que me hice espelelogo, me apenaba hablarle de

    este tema en las mltiples veces que lo encontraba

    en reuniones as como en las exploraciones de

    cuevas, pienso que fue de los temas que dej para

    otra ocasin y al final pas la oportunidad, solo una

    vez le ped un autgrafo, cuando en la cueva de la

    Candela, en Gines antigua Habana, hoy

    Mayabeque, present el libro Medio siglo

    explorando a Cuba, l me dijo que para que quera

    que le firmara el libro, le respond que lo haca para

    la historia.

    En los primeros das de enero de 1986 comenz el

    La sencillez de Nez Jimnez

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

  • Pg. 2

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    La sencillez de Nez Jimnez

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 105, Cuba, 29 de enero de 2013.

    Primer Simposio Mundial del Arte Rupestre,

    excelente oportunidad para intercambiar y conocer a

    otros estudiosos del tema, nos haban explicado que

    para hacer uso de la palabra debamos pedir permiso

    a la mesa central, solo identificndose con nuestro

    nombre y primer apellido y el pas que

    representbamos, recuerdo cuando comenz el

    evento en las primeras sesiones un colega cubano

    constantemente en el momento de intervenir se

    identificaba con gran parte de su currculo haciendo

    mencin del nivel universitario que posea entre

    otros ttulos que ostentaba, eso era totalmente

    incorrecto, esto lo hizo en repetidas ocasiones y

    comenz a incomodar a algunos que lo vean como

    un rasgo de falta de modestia y de sencillez, quien

    presida el evento era Nez y con esa nobleza que

    siempre lo caracteriz puso al colega en su sitio y al

    hacer uso de la palabra despus del colega

    pronunci la siguiente frase que la recuerdo como si

    fuera dicha ahora: Yo, simplemente, Antonio Nez

    Jimnez de Cuba, y comenz a hacer la explicacin

    refirindose al tema del arte rupestre en nuestro pas

    a m me pareci ms que aleccionadora la frase, el

    colega aludido cambi de color y a partir de ese

    momento enmudeci durante el resto del evento.

  • Pg. 3

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Humberto Vela Rodrguez

    [email protected]

    Grupo Espeleolgico Cayo-Barin. Miembro Ordinario de la Sociedad Espeleolgica de Cuba.

    Conociendo a Nez Jimnez

    Lo conoc en las pginas

    de su libro Geografa de

    Cuba, en los ya lejanos

    das de la enseanza

    media, un texto satanizado

    por sicarios, condenado a

    la hoguera y resucitado de

    las cenizas; que marcaba

    un hito espeleolgico con

    frecuentes fotos y

    alusiones; y exhalaba un

    irrefutable hlito de aventura y peregrinaje. Lo

    reconoc entonces como el maestro ideal,

    identificado con su vehemente vocacin por las

    cuevas.

    Otro libro le sigui a la Geografa: Cuba, con la

    mochila al hombro, para un nuevo acicate a mis

    efusivas inclinaciones, recreando andanzas, parajes

    y gente humilde de la campia y el mar, en

    momentos en los que corra yo los cerros cercanos

    en romnticas exploraciones de adolescente.

    Despus llegaron otros libros: cientficos,

    humanistas y hasta de arte. Lo segu conociendo con

    Clasificacin gentica de las cuevas de Cuba, que

    vi como la taxonoma acuciosa del subsuelo cubano,

    capaz de permitir el ordenamiento infalible de

    cuanta cueva descubriera en el campo, repleto

    tambin de grficos y fotografas elocuentes; con

    las Series Espeleolgicas y Carsolgicas sobre

    Cayo Caguanes; con Cuba: Dibujos Rupestres...

    Todo esto en momentos en que mi andar potico

    daba paso al escrutinio cientfico e iba sintiendo que

    de la mano de la ciencia marchaba mejor el romance

    y la aventura.

    Lo encontr otra vez cuando andando La Habana

    Vieja entr al local de un vendedor de libros usados

    y vi, entre dismiles vejestorios, Primera expedicin

    bioespeleolgica cubano- rumana, cuando daba mis

    primeros pasos en el fascinante mundo viviente de

    las cavernas.

    Segu conocindolo imaginariamente en las

    andanzas de los sistemas naturales que con afn

    recorra en los aos pasionales: Caguanes, donde l

    viviera momentos tan emotivos explorando el cayo

    y sus cuevas, cartografindolas, estudiando los

    murales pictogrficos, las formaciones fungiformes,

    el clima subterrneo... Cmo no percibirlo en Punta

    Judas, en Santo Toms, en Punta del Este, en la

    cima del Turquino... l, siempre presente en la

    palabra escrita, en la foto precisa, en mi andar de

    novel naturalista...

    Era entonces el Nez incorpreo, etreo... hasta un

    buen da en que se corri el teln de un teatro y lo vi

    sentado al centro de una larga mesa, tangible y

    manifiesto, con la serena mirada puesta en el

    reverente auditorio.

    Y lo segu conociendo en sucesivos certmenes:

    reuniones nacionales, simposios y congresos.

    Mis vivencias espeleolgicas

  • Pg. 4

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 105, Cuba, 29 de enero de 2013.

    En uno de los primeros decid abordarlo, con la

    natural timidez de quien ha concebido un dios

    devenido de los regulares lecturas, y lejos de eso

    encontr al hombre sencillo y gentil, que siempre

    me acompaara incorpreo en las pginas de sus

    libros y en los parajes subterrneos.

    Pude conocerlo ms, pero cay la noticia trgica

    una tarde de septiembre, y con ella el dolor

    punzante como de familiar allegado. Haba

    desaparecido el Nez tangible con su mochila

    colmada de sueos y enseanzas, y me quedaba de

    nuevo el otro, el de siempre y para siempre, etreo y

    real.

    El primer homenaje pstumo de mi Grupo Cayo-

    Barin, tuvo por escenario el ntimo umbral de una

    caverna, cuando la caliza se encarn con el fulgor

    de la fogata y nos sumimos en un coloquio

    reverente sobre su vida y su obra.

    Mis vivencias espeleolgicas

  • Pg. 5

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Jos Miguel Sols Daz

    El otro Antonio, un compendio de 24 crnicas sobre

    Antonio Nez Jimnez, es la propuesta que el

    doctor Ercilio Vento, historiador de la ciudad del

    occidente cubano y vicepresidente de la Sociedad

    Espeleolgica de Cuba comparti con la prensa

    yumurina el pasado viernes 7 de junio.

    Bajo el sello de Ediciones Matanzas, y recin salido

    de imprenta, El Otro Antonio es una interesante

    forma en la que Ercilio propone acercarse al

    revolucionario, al cientfico, al ser humano que fue

    Nez Jimnez.

    De grata lectura y con el recurso de colocar los

    vnculos entre ambos cientficos como una sub-

    trama, posibilita que en la medida que avanza la

    narracin tambin lo haga la relacin entre ellos,

    por tramos, de forma gradual, de tal forma que se

    completan los matices de la personalidad.

    Pero, como seala Ercilio, no toda la informacin

    que da pie a estas pginas proviene exclusivamente

    del intercambio directo entre ellos dos; sino que

    tambin se revelan ideas, ancdotas que parten de

    un libro de recuerdos (indito) y un manuscrito

    autobiogrfico (no concluido) de Nez Jimnez,

    as como de remembranzas de otras personas que le

    conocieron y trabajaron con l.

    El quehacer como espelelogo, su conocimiento, su

    erudicin en ese sentido, y la manera en que

    contribuy a su desarrollo en Cuba y en el mundo,

    se convierten en el principal eje temtico de los

    recuerdos que Ercilio propone en este volumen.

    Aparece Nez Jimnez, con toda razn histrica,

    como protagonista de hechos capitales como la

    creacin de la Sociedad Espeleolgica de Cuba en

    1940, su papel como director de la Academia de

    Ciencias de Cuba y al frente de la Comisin

    Nacional de Monumentos, sus vnculos con la

    Unin Internacional de Espeleologa y su

    persistencia para crear una organizacin de este tipo

    que uniera a los especialistas de Amrica Latina, en

    el mtico viaje del Amazonas al Caribe.

    Ercilio Vento Canosa (Matanzas, 1947) ensayista,

    investigador e historiador. Es vicepresidente de la

    Sociedad Espeleolgica de Cuba e Historiador de la

    Ciudad de Matanzas. Ha publicado los libros El

    alma de la ciudad (2001), La ltima morada.

    Historia de los cementerios en Matanzas (2002), La

    momia de Matanzas (2005) y Marcas de agua

    (2009)

    Present a la prensa matancera, el libro El otro Antonio

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 110, Cuba, 28 de junio de 2013.

  • Pg. 6

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba.

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin

    Gentica de las Cuevas de Cuba Resumen de los

    captulos 10 y 11. Cueva del Tipo Aston1

    Espeleognesis

    Las cuevas del tipo Aston se han originado al

    parecer por la accin disolvente de las aguas

    freticas en su parte superior, aprovechando la lnea

    de menor resistencia de los estratos horizontales y

    de las grietas. Las fluctuaciones del nivel superior

    del manto fretico a travs del tiempo geolgico han

    provocado la tendencia a hundirse, tal vez debido al

    descenso del nivel marino o a la elevacin gradual

    de la llanura crsica, proceso que ha dejado huellas

    de bvedas altas o solapas (nichos de lagos fsiles)

    con pisos planos sobre los actuales lagos

    subterrneos de Aston, como se ve entre otras

    cuevas, como de la Lechuza y de Paredones. La ms

    pequea fluctuacin estacional del nivel superior del

    manto fretico ha debido ser factor importante en el

    agrandamiento de las bvedas subterrneas.

    A veces se ven hasta dos de estos nichos de lagos

    fsiles sobre la solapa ms reciente que es abierta

    por la disolucin fretica actual.

    Es posible que la forma semiesfrica o

    campaniforme de la parte superior de las cuevas del

    tipo Aston se deba no a las aguas freticas sino a las

    vadosas, que en pequeas cantidades penetran por

    sumideros o claraboyas o por huecos de grietas o de

    disolucin que comunicaban con la cueva fretica

    preexistente y circulando aciduladamente en todas

    direcciones, que resbalando sobre el techo interior

    de la bveda, le fue dando su morfologa

    campaniforme.

    Las races de los rboles, principalmente las de los

    jageyes, pueden haber sido tambin factores

    importantes en la gnesis de estas cuevas, ya que las

    races al perforar el manto calizo pueden haber

    servido de gua para la penetracin del agua vadosa

    a la cueva.

    Esas bvedas aparecen constantemente desplomadas

    con su cono de derrumbe sobre el piso de tales

    cuevas, lo que nos indica que la morfologa

    abovedada puede originarse fsicamente y no

    exclusivamente por disolucin vadosa o fretica.

    En trminos generales, el desarrollo vertical de las

    cuevas de origen fretico puede producirse bien por

    disolucin vadosa posterior o por la coalescencia de

    sistemas de galeras superpuestas, como se ve que

    ha ocurrido en algunas secciones de las cuevas de

    Caguanes y de Aston.

    El hecho sealado de la mayor facilidad de la

    formacin de cuevas prximas al nivel superior

    fretico no excluye la existencia de cuevas de

    disolucin fretica a niveles profundos como parece

    demostrar el trabajo de Moneymaquer y Rhoades.2

    Fauna Cavcola

    Las cuevas de Aston, al igual que muchas otras de

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXII)

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

  • Pg. 7

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXII)

    la Llanura Crsica Meridional poseen una fauna

    interesantsima, formada por peces ciegos de las

    especies Lucifuga subterraneus de unos 9 cm de

    longitud y la Stygicola dentata3 de unos 15 cm de

    largo, ambas de la familia Brotulidae, representantes

    de la cual viven en los mares profundos de Cuba (a

    ms de 300 m de profundidad) donde ya se

    encuentran despigmentados, pero con ojos; las

    especies cavcolas los presentan en estado

    embrionario.

    La fauna de los peces ciegos Lucifuga y Stygicola

    se extiende, de acuerdo con nuestras exploraciones,

    desde la zona de Artemisa hasta Quivicn.

    Junto a los peces cavcolas viven otras especies,

    camarones y cochinillas ciegas. Los camarones

    pertenecen al gnero Troglocubanus y las

    cochinillas corresponden al gnero Troglocirolana.

    Al respecto de estos reportes existe una

    actualizacin en el libro Sinopsis de la

    espeleofauna cubana, compilado por el Dr.

    Gilberto Silva Taboada, publicado por la editorial

    Cientfico-tcnica, 1988, que denomina a estos

    reportes como supragenricos adicionales y

    aporta un total de 17 espeluncas en la localidad de

    Artemisa que completan los reportes hechos por

    Nez Jimnez para esa localidad, las cuevas son:

    de Emilio, del Bao, de los Animales, Modesta,

    Lechuza, Diamante, de los Prez, de Eugenia, de los

    Murcilagos, del Dragn, de Ashton, caverna de

    Ashton, cueva en Caa, cuevas cerca de Caas,

    cavernas en San Isidro y cueva en Las Fras.

    En la zona de Caimito, cueva de Paredones, en el

    barrio Vereda Nueva, cueva de Sandoval, del Curro

    y de los Barrenos; en Guanmar (Alquzar), cueva

    del Cafetal La Concordia y del Cafetal La Industria

    y en el barrio de San Andrs, cueva del Quintanal.

    En Quivicn, barrio Giro Marrero, cueva de

    Juanelo Piedra, entre otras cuevas de origen fretico

    que han sido estudiada en la antigua provincia de

    Pinar del Ro, luego La Habana y en la actualidad

    Artemisa.

    De los estudios de la fauna en esta zona geogrfica

    y donde se incluyeron cuevas de este tipo se

    encuentran adems estudios realizados por la

    Expedicin Bioespeleolgica Cubano-Rumana en

    1969, de la cual se publicaron, en cuatro tomos, los

    Resultats des expeditions biospologiques cubano-

    roumaines a Cuba, entre 1973 y 1974, como parte

    de esos tomos los trabajos de Antonio Nez

    Jimnez, C. Fundora, V. Decu y S. Negrea.

    Premiere expedition biospologique cubano-

    roumaine a Cuba, 1973 y T. Orghidan. Stations

    hypoges et piges prospectes a Cuba entre el 3

    novembre et 12 dcembre 1970, dado a conocer en

    ese propio ao.

    El trabajo de C. Bolvar Pieltain en 1944, del cual se

    public, Exploracin biolgica de algunas cavernas

    de Cuba y en 1974 el propio Gilberto Silva

    Taboada public Sinopsis de la espeleofauna

    cubana. Serie Espeleolgica y Carsolgicas # 43.

    Captulo 11

    Fases de la cueva del tipo Aston

    A continuacin se expone la evolucin de las cuevas

    del tipo Aston, tomando los ejemplos de la misma

    regin de Las Caas, Artemisa. Esta evolucin

    comprende desde la cueva que conserva su techo,

    sus lagos freticos y su cono de derrumbe, smbolos

  • Pg. 8

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXII)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de

    Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    2- Berlen C. Moneymaquer, Roger Rhoades: Deep Solution Channel in Western Kentucky, en: Bulletin of the Geological

    Society of America, v. 56, 1945, pp. 39-44.

    3- En la actualidad Lucfuga dentatus.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 117, Cuba, 29 de enero de 2014.

    de la madures de la espelunca (fase Diamante) hasta

    que estos tres factores desaparecen, cuando la cueva

    se convierte en una dolina cubierta por arrastres

    laterticos (fase San Isidro), pasando por las etapas

    intermedias de cueva sin techo, sin cono de

    derrumbes, pero con lago fretico (fase Animales) y

    la fase ms avanzada de Sobrante Asilo que no

    posee ni siquiera el lago y solo muestra una dolina

    con solapas laterales (nichos de lagos fsiles), lo

    que no se ven cuando son casi enteramente

    cubiertos por los arrastres, como la dolina de San

    Isidro. De las caractersticas de las fases Lechuza,

    Quintanal, Juanelo Piedra y Paredones se ampliar

    ms adelante.

  • Pg. 9

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Cueva del Diamante1

    Se localiza en las

    coordenadas 274-286

    de la hoja 3684-II en

    la finca Aston, barrio

    Las Caas, municipio

    de Artemisa, actual

    provincia de igual

    nombre antigua Pinar del Ro.

    Se abre en la Llanura Crsica Meridional, el plano

    de esta cueva representa a grosso modo un crculo

    cuyo dimetro mayor de norte a sur, es de 39 m.

    Hacia el lado NE y en toda la mitad meridional, la

    cueva est ocupada por sendos lagos freticos que

    tienen la forma de herradura y se les ve perderse

    hacia las profundidades debajo de la bveda

    cavernaria sifonante.

    El interior de la nica cmara subterrnea visible de

    la Cueva del Diamante es como un hemisferio en

    forma de cpula; en el centro de esta se alza un

    cono de derrumbes, evidentemente desprendido de

    la bveda superior que cubra la cueva al centro de

    la misma. Estos conos de derrumbes a veces se van

    disolviendo pero en ocasiones se cubren de

    formaciones secundarias. En el primer caso ocurre

    el mecanismo de desplome-disolucin; en el

    segundo sucede el de desplome estalagmitizacin.

    El techo est perforado por cuatro claraboyas, por

    las que se penetra a este subterrneo, las cuales

    tienen menos de 1 m de dimetro. Sobre el cono se

    ven bellas estalagmitas con sus correspondientes

    estalactitas, muy cristalinas, como formadas en

    ambiente cerrado; muchas estn teidas

    superficialmente de color rojizo por el xido de

    hierro.

    En la pared circular de la cueva se ve, bastante cerca

    del techo, una serie de duros estratos calizos que

    buzan 4o al sur. Esta caliza est constituida por

    granos muy finos, algo deleznables de color crema,

    con escasos foraminferos no identificados.

    Esos estratos calizos estn intercalados en masas de

    roca de marga calcrea con abundantes moldes

    fsiles de conchas marinas como Archalas sp.,

    Mililidos, etc, que parecen corresponder al

    Mioceno.

    Sobre la superficie de los lagos freticos, situada a 9

    m bajo la superficie del suelo, se observa una fina y

    brillante capa de carbonato de calcio, debajo de la

    que vemos burbujas de aire2 entre la superficie del

    agua y la capa carbonatada; al quebrar nosotros

    parcialmente dicha capa, los grandes fragmentos,

    como si fueran de vidrio plano, se van al fondo

    suavemente, donde van constituyendo formaciones

    finamente estratificadas.

    Visto un fragmento de esas capitas de calcita al

    microscopio se observan los cristales planos a veces

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIII)

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

  • Pg. 10

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIII)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    2- Igual observacin hace Gze al escribir sobre la calcita flotante [] a veces se producen pequeos remolinos (por la cada de gotas de aguas, por la llegada de un minsculo chorreo) insuficientes para desencadenar esta precipitacin pero lo suficientemente fuertes como para que una burbuja de aire se encuentre aprisionada en una pelcula de calcita flotante. De este modo se forman singulares burbujas de calcita que, aunque raras, han sido sealadas en Inglaterra, Francia y Estados Unidos. Sus dimensiones son siempre escasas (algunos milmetros) y su fragilidad es extrema. (En: Bernard Gze: L Spleologie Scientifique. ed. Du Seuil, Paris, pp. 96-97, 1968).

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 118, Cuba, 2 de marzo de 2014.

    dejando huecos entre ellos; igualmente se aprecian

    impurezas de xido de hierro, inclusive

    pequesimas algas que han conservado su color

    verde brillante.

    Esas capas se forman por la sobresaturacin de

    carbonato de cal sobre el agua y son un ndice

    seguro para localizar la superficie de los antiguos

    lagos freticos ya desaparecidos y que se encuentran

    en algunas cuevas del tipo Aston, ahora totalmente

    desaguados, como se observa en la cueva de los

    Animales. Esas formaciones reciben el nombre de

    calcita flotante.

    La fase Diamante es representativa de la juventud

    de la cueva del tipo Aston, es decir que esta ha

    alcanzado su mxima magnitud y comienza a

    orificarse su bveda con mltiples claraboyas que al

    desarrollarse harn desaparecer el actual techo; el

    cono est cubierto por brillantes estalagmitas que a

    medida que la bveda se perfore y el techo caiga,

    perdern su madre nutricia, las estalactitas y que

    terminarn por desaparecer bajo la luz solar

    rodeadas por la vegetacin que acelerar el proceso

    de disolucin junto con la de los bloques que ahora

    forman el cono.

  • Pg. 11

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cueva de los Animales1

    Se encuentra ubicada en las coordenadas 275-287

    de la hoja 3684-II en la finca Aston, barrio Las

    Caas, municipio Artemisa, actual provincia de

    igual nombre, es decir a 170 m al E, al N de la

    Cueva del Diamante en la Llanura Crsica

    Meridional.

    Ella constituye una fase ms avanzada de

    destruccin del anterior de la espelunca, pues ha

    perdido prcticamente el techo, ha desaparecido uno

    de los dos lagos freticos de herradura y en gran

    medida el cono de derrumbe, constituyendo no una

    verdadera cueva sino ms bien una dolina-cueva, en

    la que a veces caen animales como vacas, caballos,

    etc, de ah su nombre.

    El plano de la espelunca se muestra circular con un

    dimetro de norte a sur de 20 m de este a oeste,

    tiene 36 m, es decir es ms bien ovalada, con un

    lago fretico debajo de la bveda del lado occidental

    y sobre el mismo una gran solapa seca del lado

    oriental, evidentemente un nicho de lago fsil,

    ahora completamente seco. Sobre el piso del nicho

    se ven las tpicas capitas carbonatadas estratificadas

    que se fueron formando sobre la antigua superficie

    lquida hace miles de aos. En las paredes de este

    nicho de lago fsil se ven conglomerados laterticos

    muy endurecidos.

    La superficie del lago de la parte occidental se

    encuentra a 6,50 m debajo del suelo exterior. Tiene

    unos 10 m de ancho y menos de 1 m de

    profundidad; el nicho de lago fsil del lado oriental

    tiene 4 m de fondo y contina tan bajo que no se

    puede ver el final.

    En el fondo de la dolina se notan aun grandes

    bloques que debieron formar parte del cono de

    derrumbes, cuando la cueva de los Animales estaba

    cubierta por su techo calizo.

    La vegetacin penetra por la dolina hasta la cueva y

    las poderosas races perforan la dura roca que ante

    sus puntas aciduladas cede y se ahueca.

    Cueva de Sobrante Asilo

    Se localiza en las coordenadas 267-285 de la hoja

    3684-II de la finca Aston, barrio La Caas, en igual

    municipio y provincia anterior, a 500 m al WSW de

    la cueva del Diamante.

    El plano de esta cueva es un valo en medio del

    cual se ve una dolina de forma circular. El largo del

    valo, casi de norte a sur es de 16 m y el dimetro

    de la dolina es de 8 m. La profundidad vertical de la

    misma es de 3,47 m.

    En los extremos norte y sur de la dolina se adentran

    dos solapas nichos de lagos fsiles resguardadas

    por la bveda recesiva que forman las paredes de la

    dolina, solapas que son las que dan aspecto ovalado

    a la planta y que fueron las reas ocupadas

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIV)

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

  • Pg. 12

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIV)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 119, Cuba, 26 de marzo de 2014.

    antiguamente por los lagos freticos que debieron

    tener la tpica forma de herradura o arco, tal como

    se ve en la cueva del Diamante, del Bao, de Emilio

    y de los Animales, todas en la misma zona de

    Aston.

    La solapa septentrional tiene 3 m de fondo y la

    meridional 4,90 m. El fondo de la dolina es plano,

    cubierto por arrastres laterticos y pocas rocas

    calizas sueltas, la vegetacin ha invadido la dolina.

    La estratigrafa es casi horizontal, los estratos buzan

    solo 2o al este.

    En la fase Sobrante Asilo presenta un gran avance

    del estado destructivo que ya no tiene techo, lagos,

    ni cono de derrumbe. El nivel del manto fretico se

    encuentra hoy por debajo del piso de la cueva.

    En la pared SW se observan una serie de diaclasas

    que se parecen a un abanico, cuyos planos se dirigen

    hacia el oeste. Las diaclasas tienen casi la misma

    direccin de la pared de recesin de la solapa; de

    abajo hacia arriba tales diaclasas tienen la siguiente

    inclinacin 34o, 31o, 34o, 11o, 25o, 6o; en la pared

    opuesta, la del NE, las diaclasas tienen direccin

    SW y buza con valores de 21o y 36o, es decir que

    todas las diaclasas cortan oblicuamente la

    estratigrafa local.

    Estos datos indican que a pesar del sistema de

    diaclasas, la disolucin general en la cueva adopt

    la forma circular de todas las cuevas tipo Aston y

    una planta horizontal, disolucin controlada por el

    nivel horizontal del manto fretico y no por el

    sistema oblcuo o inclinado de las diaclasas.

  • Pg. 13

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Dolina de San Isidro 1

    Se localiza en las

    coordenadas 268-

    272 de la hoja

    3684-II, en la finca

    de igual nombre,

    barrio Guanmar,2

    municipio

    Artemisa, actual provincial homloga, a 1,9 km al

    NNE de la cueva del Diamante. El grado de

    destruccin es tal en este caso que no se le puede

    dar ni tan siquiera el nombre de cueva o gruta.

    La dolina tiene su planta bastante circular, con un

    dimetro de 20 m y una profundidad de menos de 2

    m por debajo de la superficie del suelo exterior.

    Alrededor de casi toda la dolina sus paredes son

    ligeramente recesivas, formando solapas (nichos de

    lagos fsiles muy pocos profundos). El fondo de la

    dolina est todo relleno por arrastres laterticos, sin

    bloques ptreos y con pocos cultivos como pltanos,

    donde se abre un pozo de 8 m de profundidad que

    capta el manto fretico para el abastecimiento de

    agua a una familia campesina que vive en el borde

    de este fenmeno crsico.

    Es evidente que los arrastres ocurridos despus del

    desplome del techo de la cueva han cubierto la

    antigua cmara subterrnea. El grado de destruccin

    de esa cueva es tal que no existen ninguno de los

    seis factores espeleolgicos enumerados como

    tpicos de la fase Diamante del tipo cueva Aston.

    Cueva de la Lechuza

    Se encuentra casi en la coordenada 275-287 de la

    hoja 3684-II, es decir muy prxima a la cueva de los

    Animales, a 65 m al sureste de esta, en la finca

    Aston, barrio La Caas, municipio Artemisa, de la

    provincia de igual nombre. La caliza de la cueva es

    de grano fino, con macrofauna muy escasa y

    recristalizada, parece ser del mioceno.

    Es una cueva del tipo Aston, muy prxima a la fase

    Animales, aunque por presentar una prolongacin

    notable en direccin vertical la hemos tomado como

    una fase propia que con posterioridad puede

    desarrollarse en cuevas longitudinales de bastante

    inclinacin como la cueva de Quintanal y otras.

    Esta gruta ha perdido casi todo el techo por

    desplome, es decir forma de dolina con

    sobresalientes cornisas a su alrededor. Vista de

    plano presenta una morfologa casi circular de 20 m

    de dimetro. Ms de la mitad suroeste de su

    circunferencia est ocupada por un lago fretico en

    forma de herradura; la otra mitad, la

    correspondiente al noreste es seca; vista de perfil la

    cueva presenta la forma de semiesfera tan tpica de

    Aston, pero ya deformada por el derrumbe de la

    bveda; se ve bien claro dos salones casi iguales

    superpuestos, perforados por la dolina central, es

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXV)

  • Pg. 14

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXV)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    2- Se aclara por el autor del libro que Guanmar tambin es un barrio del municipio Alquzar.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 120, Cuba, 26 de abril de 2014.

    decir que aqu estamos en presencia de la tpica

    superposicin de nichos, el superior de carcter fsil

    y debajo el nicho ocupado por las aguas freticas.

    El centro de la gruta lo ocupa parcialmente un cono

    de derrumbe sobre el que la vegetacin ha crecido

    profusamente. El urticante chichicaste, con sus

    hojas grandes se destaca sobre el resto de la

    vegetacin.

    La dolina, de forma entre circular y cuadrada, est

    enmarcada en tres de sus lados por diaclasas

    rectilneas; las del lado oriental se cruza con las

    otras. Estas grietas sirvieron de lneas de menor

    resistencia para la disolucin primero y luego para

    provocar el derrumbe de la bveda.

    Sobre el piso cerca de la orilla del lago han crecido

    algunas estalactitas; en el piso y techo del lago fsil

    abundan ms estas formaciones secundarias.

    Un accidente digno de destacarse es la presencia en

    la pared noreste de Boxwork ms arriba del nivel

    del lago fretico. All la caliza presenta la forma

    compleja de cajas de distintas formas que

    constituyen un complicado sistema de grietas que al

    rellenarse de material calcreo secundario y luego

    producirse la disolucin interna, ha originado una

    estructura de cajuelas. Bretz seala que estos

    Boxwork son ejemplos del origen fretico de las

    cuevas que los presenten pues una corriente fluvial

    hubiera destruido tales formas.

    Realizamos una exploracin subacutica en la que

    observamos que las paredes del lago presentan

    estructuras espongiformes, tanto en la partes en

    contacto con el aire como dentro del lago.

    Como otras cuevas del tipo Aston el lago fretico se

    pierde hacia la pared posterior. En este caso de la

    cueva de la Lechuza exploramos subacuticamente

    con escafandra autnoma el interior del lago. En la

    pate sureste la profundidad result de 8 m; en el

    lado occidental presentaba hacia abajo un tnel de

    unos 5 m de dimetro de mucha inclinacin de 13 m

    de profundidad, es decir que la disolucin fretica

    ha llegado, relativamente a grandes profundidades;

    en este caso, desde la superficie terrestre al fondo

    del lago, la disolucin ha excavado 23 m. Como la

    superficie de la llanura donde se abre la cueva se

    encuentra en la cota de los 18 m de altitud y el

    fondo del lago se halla a 23 m por debajo de esa

    cota, dicho fondo se sita a 5 m por debajo del nivel

    del mar.

    El tnel lacustre de 13 m es un claro ndice de que

    el tipo Aston adems de desarrollarse en cuevas ms

    o menos planas y circulares, tambin se desarrolla

    ocasionalmente en forma de tnel inclinado. La

    culminacin de este proceso puede ser la fase

    representada por la cueva Quintanal.

  • Pg. 15

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cueva de Quintanal 1

    Se localiza en las

    coordenadas 338-

    342 de la hoja

    3684-I, en la finca

    de igual nombre,

    barrio La Paz,

    municipio

    Artemisa, actual provincial homloga, a 8,5 km al

    NE de la cueva del Diamante a unos 30 m sobre el

    nivel medio del mar. La caliza est formada por

    gruesos estratos horizontales que parecen

    corresponder al mioceno.

    Se ha desarrollado en un plano inclinado a travs de

    una galera descendente de 68 m que finaliza en un

    lago fretico, cuyo nivel superior se encuentra a

    unos 25 m debajo de la superficie, continuando la

    cueva bajo condiciones de inundacin.

    El plano de esta cueva representa una galera de 97

    m de largo total, orientada en lneas generales de

    SSW a NNE. La parte ms alta, el saln de la

    Claraboya, es el extremo SSW y el saln del lago la

    ms baja es el NNE, es decir que la poca circulacin

    del agua vadosa actual es hacia este ltimo rumbo,

    al igual que el primitivo proceso fretico generador

    de la cueva, aunque en trminos generales la

    Llanura Crsica Meridional se inclina hacia el Sur,

    determinando cierta tendencia de la direccin de las

    cuevas regionales hacia la parte meridional.

    El hecho de que la estructura estratigrfica es

    prcticamente horizontal, produce que la direccin

    de las cuevas regionales no tenga que ser

    forzosamente una lnea de norte a sur, como es

    comnmente el drenaje de las aguas subterrneas

    freticas en esa llanura. En este caso parece ser el

    sistema de diaclasas, pues a lo largo del saln de la

    grieta (en el techo) se ve una en direccin al NNE,

    que fue la lnea de menos resistencia para la

    formacin de la galera.

    En el saln del Lago, donde la cueva tiene una

    tendencia a prolongarse al W, precisamente presenta

    otra diaclasa en esa direccin. Tales diaclasas se

    localizan en el estrato calizo blanco puro, en

    contraste con el resto de la cueva, constituida por

    una masa de conglomerados fundamentalmente

    madreprico.

    El saln de la Claraboya se encuentra en el fondo de

    una dolina de unos cien metros de dimetro,

    embudiforme, de piso ligeramente inclinado hacia el

    centro, donde se abre la cueva a travs de una

    claraboya de 7 m de largo por unos 4 de ancho, que

    comunica con el citado saln de forma casi ovalada,

    menos por su extremo NE, por donde contina la

    espelunca; dicho saln tiene el perfil propio del tipo

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVI)

  • Pg. 16

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVI)

    Aston en su fase Animales, con un cono de

    derrumbes esparcidos por casi todo el interior.

    En la boca de la cueva crece una tupida vegetacin

    con el destaque para el jagey, la yagruma y la pica

    pica.

    Despus del saln de la Claraboya se contina por

    una galera bastante amplia de unos 7 m de ancho,

    con el piso cubierto por rocas desplomadas o por

    tierra rojiza. El techo muy plano en el saln

    continuo, est formado por un estrato calizo en el

    que se ven varias campanas de disolucin donde

    viven los murcilagos. En la superficie del techo se

    observan centenares de goticas de agua de color

    ureo, cuya presencia tambin se seala en la cueva

    Grande de Caguanes, as como en cueva Jbara y en

    otras que deben su color a la presencia de

    microorganismos.

    En el piso estructural de la cueva se ve la superficie

    horadada por millares de pequeos huecos de 1 cm

    de dimetro, formados por la disolucin de las

    aguas vadosas que all penetran ocasionalmente.

    Hacia adentro la galera contina descendiendo

    suavemente hasta presentar, en el inicio del tnel,

    cadas muy inclinadas de 3 m de ancho por 2 m de

    alto hasta desembocar en el saln Rojo, con un

    desnivel de 5 m y ramificaciones hacia el oeste. Al

    final se llega al saln del Lago, coronado por un

    techo horizontal formado por un plano de estratos

    calizos de gran pureza, donde se abren las campanas

    de disolucin, que en las paredes tambin se ven

    pero ya no verticales como en el techo sino,

    inclinadas, como nichos circulares.

    Hacia arriba se observan chimeneas muy irregulares

    que se pierden en la masa rocosa. Se observa un

    pequeo tnel horizontal junto al techo

    estratificado, lo que se observa tambin en el

    anterior saln Rojo.

    En el fondo de la cueva se abre el lago fretico, que

    presenta una orilla de 8 m de largo. El agua muy

    transparente, se prolonga profundamente detrs de

    la pared sifonante. Peces ciegos nadan en el lago

    fretico, el cual inunda totalmente la continuacin

    de la espelunca.

    La cueva vista en seccin longitudinal, muestra una

    galera inclinada de unos 15 grados con cadas casi

    verticales en dos puntos.

    En el saln de la Claraboya todava se nota junto al

    piso el nicho de lago fsil. En la masa rocosa

    madreprica no se forman las tpicas campanas de

    disolucin, sino un intrincado sistema de huecos

    irregulares, entrantes y salientes. En los estratos

    calizos s se ven ntidas campanas de tamao

    pequeo.

    Los nichos y pequeos tneles laterales a veces

    cilndricos de casi toda la cueva se ven

    completamente tapiados en los pequeos huecos del

    techo, demostrndonos que en una etapa toda la

    cueva debi estar rellena por dicha arcilla. Este

    hecho que observamos en la cueva de Quintanal

    tambin ocurre en otras cuevas y ya Bretz sealaba,

    en su obra, un ciclo de relleno arcilloso, posterior al

    ciclo fretico y anterior al ciclo seco o areo de la

    caverna. Los derrumbes ocupan casi todo el piso de

    la espelunca.

  • Pg. 17

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVI)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de

    Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 121, Cuba, 30 de mayo de 2014.

    Salvo unas poqusimas estalactitas del saln de la

    Claraboya apenas la cavidad presenta formaciones

    secundarias. Hay predominio de la disolucin sobre

    la sedimentacin secundaria.

  • Pg. 18

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cueva de Juanelo Piedra1

    Esta espelunca se encuentra en las coordenadas 554-

    231 de la hoja 3784-III, en la finca Juanelo, barrio

    de Giro Marrero, municipio Quivicn, actual

    provincia de Artemisa, a unos 9 m sobre el nivel

    medio del mar, a solo 2 km al norte de la cinaga

    litoral y a 30 km al ESE de la cueva del Diamante,

    en la extensa Llanura Crsica Meridional, donde

    sobresalen el diente de perro y las piedras sueltas o

    carsolitos y afloran las tierras rojas, que permiten

    una incipiente agricultura y la explotacin ganadera.

    La caliza masiva, sin formar estratos con

    fragmentos de microfsiles, corresponde al perodo

    mioceno.

    El plano de esta cueva representa una galera

    rectilnea de 136 m de largo total, por un ancho

    promedio de 20 m; salvo una pequea parte del

    saln de las Claraboyas, la cueva est ocupada

    por un gran lago fretico y orientado casi de SW a

    NE.

    A la cueva se penetraba originalmente por una de

    sus dos claraboyas, abiertas en el techo; debajo de

    estas se ve un pequeo cono de derrumbes, cubierto

    por formaciones secundarias, rodeado por un lago.

    Una entrada artificial escalonada, abierta en el siglo

    pasado permite un cmodo acceso por su lado sur.

    El espejo de agua del lago se halla a 7 m debajo de

    la superficie de la llanura, es decir a 2 m sobre el

    nivel del mar.

    La parte visible del lago tiene 48 m de longitud por

    20 m de ancho; en sus extremos este y oeste la

    bveda desciende en sifn impidiendo ver la

    continuacin del lago en esos rumbos opuestos.

    El saln de las Claraboyas tiene una morfologa

    muy semejante a la cueva tipo Aston en una fase

    Diamante. En ese punto la bveda,

    aproximadamente semiesfrica, tiene casi 7 m de

    altura, mientras que la bveda de la galera del

    Lago, en su prolongacin hacia el occidente,

    apenas tiene 2 m de altura sobre el nivel del espejo

    de agua, aunque entre el techo (libre de agua

    fretica) y el piso (ocupado por dichas aguas) hay

    unos 7 m de separacin.

    Al bucear la galera del Lago se encuentran en el

    piso de la cueva estalagmitas debajo de las

    puntiagudas estalactitas pendientes del techo. Era

    evidente que tales formaciones secundarias se

    haban originado en una fase del desarrollo de la

    cueva en que esta se encontraba libre de las aguas y

    que luego de formarse dichos espeleothemas, la

    cavidad volvi a inundarse, demostrando los

    cambios del nivel de las aguas en esta localidad.

    Hacia el oeste la profundidad del agua aumenta

    hasta los 5 m. El fondo se ve a veces cubierto por

    manchas oscuras formadas por las deyecciones de

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVII)

  • Pg. 19

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVII)

    las golondrinas que han hecho sus nidos de barro en

    los huecos del techo de la cueva libre del nivel de

    las aguas; en otros tramos el piso rocoso de la

    galera est cubierto por estalagmitas.

    En direccin al NW, luego de nadarse unos 40 m, la

    bveda del techo cavernario va descendiendo hasta

    llegar a la superficie del agua. En ese extremo existe

    un amplio sifn, en ese punto es necesario

    sumergirse y bucear en un amplio saln por donde

    contina la cueva inundada de agua en su totalidad.

    Ya no se ve ni un plido reflejo de la luz solar que

    penetra por la claraboya, a la luz de las linternas se

    observan blanqusimos mantos, cuyas gotas de agua,

    al rodar por su superficie area, es decir antes de

    que se inundara la cueva, form pliegues dentados.

    Este saln fue bautizado con el nombre de saln

    Blanco.

    Una estalactita casi en el centro de ese saln

    presenta su cnica superficie erizada por miles de

    helictitas. A continuacin se desarrolla un tnel con

    morfologa similar a la del saln del lago, pero

    desciende hacia el occidente, donde la cueva

    contina ms estrecha, cubierta de esbeltas

    columnas; el techo desciende bastante y la

    prudencia indica el retorno. El piso muy irregular

    deja ver trechos de roca estructural perforada por

    huecos cilndricos.

    Durante la exploracin del 4 de mayo de 1966, por

    Antonio Nez Jimnez, Nicasio Vias y otros

    expedicionarios se tomaron temperaturas a las 10:40

    horas en el aire exterior con 24.4o en el interior de la

    cueva 23.0o y en el agua 25.3o. Adems, durante la

    exploracin subacutica se tomaron muestras de

    agua a distintas profundidades para realizar anlisis

    de salinidad y oxgeno disuelto:

    El O2 fue determinado mediante el Mtodo de

    Winkler. La salinidad titulada con solucin

    NO3Ag, y tambin midiendo la conductibilidad

    elctrica del agua. Los resultados son una

    proporcin de salinidad casi nula y el oxgeno no

    disminuye con la profundidad, sino que aumenta.

    Se calcul que el piso de la cueva en el fondo del

    Saln Blanco se encuentra a unos 8 m por debajo

    del nivel del mar y sin embargo existen las

    estalagmitas ya descritas. Se demuestran los niveles

    del mar durante el pleistoceno.

    En direccin opuesta al saln Blanco, casi NW a

    partir del saln de las Claraboyas la cueva vuelve

    a descender, totalmente ocupada por el agua. Es

    necesario bucear de nuevo en sifn como 5 m de

    profundidad para pasar al saln de los Cristales,

    por presentar bellas estalactitas cristalinas, casi

    transparentes, de la ms pura calcita. Curiosamente,

    numerosas estalactitas muestran su superficie como

    estriadas horizontalmente, es decir ligeramente

    cordadas como las bautiz Nez Jimnez y ellas

    se deben a las huellas de las fluctuaciones del nivel

    del manto fretico; esta forma cordada ya fue

    observada en las formaciones secundarias de

    Cueva de La Lechuza.

    Profundidad (m)

    Oxgeno ML/L (milmetro por

    litro)

    Salinidad 5o/00 (gramos por mil gramos de agua)

    0.00 m 4.02 0.5o00-5%

    3.00 m 3.98 0.5o00-5%

    6.00 m 4.22 0.5o00-5%

    10. 00 m 4.60 0.5o00-5%

  • Pg. 20

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVII)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de

    Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 122, Cuba, 26 de junio de 2014.

    El rumbo de esa nueva direccin es casi norte 10o,

    la cueva sigue a travs de un ancho sifn en cuya

    superficie existe una campana de aire, respirable,

    sin equipos de escafandra autnoma.

    A esta parte de la espelunca se le nombr saln del

    Sifn; presenta en su centro el cono de derrumbes

    con la bveda de morfologa semiesfrica, pero sin

    presentar la claraboya, esto permite suponer que

    algunas cuevas y salones del sistema subterrneo

    Aston se encuentran en rosario, unidos por sifones

    y galeras inundadas que dejan libre la

    comunicacin, que aprovecha para su movimiento

    la fauna que atesora.

    A los lados del cono de derrumbe del saln del

    sifn se observa que dicho cono tiene unos 15 m de

    altura desde su base hasta la cima, lo que indica que

    el piso de esta cueva se encuentra 13 m por debajo

    del nivel del mar. La tierra roja penetra entre sus

    grietas y se deposita en el fondo de la cueva

    inundada, en forma de cono.

    A 24 m de distancia de la entrada al saln de los

    Cristales es necesario sumergirse unos 7 m para

    pasar por una galera de deslumbrante belleza,

    porque compiten los cristales de las ms variadas

    formas en helictitas. A travs de ellos nadan lo

    peces ciegos. Se avanza a travs de un bosque de

    estalagmitas cnicas de aspecto alabastrino. A esta

    seccin se le denomin la galera de las Helictitas,

    la ms bella de Juanelo Piedra. Se prolonga esta

    galera y se observan mantos pursimos colgados de

    sus techos y paredes, la cavidad parece una geoda

    cuajada de cristales con las formas ms fantsticas.

    Se avanz en esa galera unos 45 m, hasta que

    comienza a estrecharse y ante el peligro se retorn.

    De esta forma este tipo de cueva Aston presenta las

    siguientes caractersticas:

    1. El plano de la cueva muestra una galera

    rectilnea sin ramificaciones laterales.

    2. El perfil longitudinal muestra la galera en

    que algunos salones tienen forma ms o

    menos abovedada, siendo secciones

    transversales arqueadas.

    3. El piso de casi toda la cueva est ocupado por

    el agua fretica que ha inundado la cueva

    despus de un perodo seco en que se

    formaron bellas formaciones secundarias

    como estalactitas, estalagmitas y mantos hoy

    sumergidas. Sobre el piso se ven grandes

    conos de derrumbes subacuticos.

    Gran parte del techo tambin est en contacto con el

    agua fretica y del mismo cuelgan esbeltas

    estalactitas. El techo es de morfologa abovedada y

    en algunos salones es como una semiesfera hueca,

    forma peculiar de las cuevas tipo Aston en su fase

    Diamante.

  • Pg. 21

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cueva de Paredones 1

    La cueva se localiza

    en las coordenadas

    327-259, en la hoja

    3684-I (antigua finca

    de Paredones, en el

    ao 1967

    perteneciente a la Granja del Pueblo El Vaquerito,

    barrio de Ceiba del Agua, actual provincia de

    Artemisa. La boca de la cueva, abierta en el fondo

    de una dolina, est situada a 90 m de la carretera de

    Ceiba del Agua a Alquzar. Dicha espelunca se

    ubica a 2 km al NW N de la cueva de Quintanal.

    Se abre en la Llanura Crsica Meridional a unos 50

    m sobre el nivel medio del mar, a pesar de su poca

    altura est alejada a 18 km del litoral meridional,

    por lo que el nivel fretico se encuentra ms

    profundo que en la localidad de Aston o Juanelo,

    zonas que se encuentran mucho ms cerca de la

    cinaga litoral o del mismo mar y a una altitud

    mucho menor, 15 m, en la localidad de la cueva del

    Diamante (Aston) y 9 m en Juanelo Piedra.

    La zona de Paredones est erizada de diente de

    perro y horadada por casimbas y pequeos huecos

    casi cilndricos que tienen como promedio 6 cm de

    dimetro. Se ven numerosos embudos de

    infiltracin y dolinas muy desdibujadas por la

    disolucin. Entre el diente de perro se ve la tierra

    roja. Esta penetra al fondo de las cuevas y dolinas,

    transportada por las lluvias, independientemente de

    la tierra que se forma por descalcificacin en el

    interior de las cavidades y dems formas huecas.

    En la roca caliza de la cueva descubrimos un diente

    fsil de Charcharodon megalodon, tpico de los

    grandes tiburones del mioceno.

    La cueva de Paredones representa la fase del tipo

    Aston en que la cueva se ha desarrollado

    notablemente en forma de galera, la que ya ha sido

    desaguada, hallndose sobre el nivel fretico (si se

    excepta su parte final a ms de medio kilmetro de

    la boca de la entrada principal).

    El plano de la cueva de Paredones la muestra en

    forma de galera ms o menos rectilnea, orientada

    en trminos generales de NE a SW, por una

    distancia total de 580 metros.

    Aunque las formaciones secundarias han

    enmascarado en parte la morfologa original de la

    cueva, se ve claramente que la galera no es muy

    regular, como suele verse en los cauces fluviales

    subterrneos, los salones presentan formas

    irregulares, con tendencia a las formas ovaladas,

    salvo la galera Final, que tiene morfologa de tnel,

    136 m de largo, en cuyo final se ve el nivel fretico,

    donde viven peces ciegos

    Los salones de la cueva de Paredones a pesar de las

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVIII)

  • Pg. 22

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVIII)

    alteraciones sufridas por una larga evolucin,

    todava recuerdan algo de la morfologa original y

    se parecen aun a las cmaras subterrneas del tipo

    Aston que en su juventud eran circulares u ovaladas,

    y que al unirse en forma de rosario con otras grutas

    semejantes constituyeron las largas cuevas en forma

    de galeras como se ve en la cueva de Juanelo

    Piedra.

    A lo largo de toda la galera de la cueva solamente

    se ven unos pocos salones laterales al eje central de

    la misma: el saln Escondido, de forma ovalada,

    que se encuentra al mismo nivel que dicho eje, lo

    que demuestra que se form al mismo tiempo que el

    resto de la cueva. En la pared opuesta a la de este

    saln se abre otro ms pequeo, formando ambos

    como un crucero de galeras, nico caso en toda la

    cueva de Paredones. El saln Escondido visto en

    seccin muestra un piso estructural intermedio, casi

    destruido, es decir, forma dos cmaras superpuestas;

    la superior se prolonga en chimenea irregular hacia

    arriba. El saln superior debe haberse originado

    antes que el inferior; este debe su formacin al

    ocurrir el descenso del nivel fretico. En otros pocos

    lugares de Paredones se ve esta superposicin de

    salones.

    La prolongacin hacia arriba en forma de irregular

    chimenea es muy comn en Paredones; por estos

    conductos inclinados e irregulares a veces penetra el

    agua cargada de tierra roja. Estas chimeneas de

    origen vadoso parecen formarse a partir de un domo

    o campana de disolucin que en ocasiones alcanza

    el exterior y es la primera fase para constituir

    despus una dolina.

    Las aguas de lluvia, al penetrar por tales chimeneas

    alteran las formas originales y los primitivos domos

    se transforman en conductos ms irregulares,

    muchas veces inclinados.

    Vista en seccin longitudinal la cueva muestra un

    perfil casi horizontal (piso de la cueva) con ligera

    inclinacin hacia el rumbo SW, siguiendo la

    pendiente general de la llanura crsica que es

    coincidente con el buzamiento estratigrfico, es

    decir influido por la estratigrafa regional.

    La cueva est formada por una sucesin de salones

    abovedados contiguos unos a los otros, recordando

    esta morfologa slo muy ligeramente a los salones

    hemisfricos de las fases originales del tipo Aston.

    Al desarrollarse hacia arriba por efecto de la

    disolucin, tales salones abovedados alcanzan la

    superficie para formar claraboyas, a veces se ha

    desplomado la precaria bveda originndose conos

    de derrumbes, como se ve en los salones de los

    dolos y de la catedral y otros que alcanzan 10 m de

    alto.

    En los techos se observan algunas campanas de

    disolucin a partir de diaclasas; en las paredes se

    notan cilindros de disolucin y tambin huecos

    espongiformes.

    Las secciones transversales de la cueva muestran

    generalmente bvedas en forma de media luna, es

    decir arcos convexos (techos) con una base (piso)

    bastante recta. Este piso original no puede

    estudiarse bien porque est casi siempre

    enmascarado por los depsitos de tierra roja o por

    los derrumbes. Tales secciones en arcos son tpicas

    de las cuevas freticas, es decir originadas por la

    disolucin de las aguas ms o menos en reposo y no

  • Pg. 23

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVIII)

    por las aguas corrientes o turbulentas.

    Parte del piso de la cueva de Paredones se ve

    ocupado por gruesos depsitos de tierra roja. Estos

    depsitos han sido cortados en forma de valle por

    las ocasionales corrientes que se forman despus de

    los grandes aguaceros. El perfil de estos valles

    excavados entre la tierra roja a veces presenta una

    morfologa en terrazas, correspondindose las

    formas del lado izquierdo con las del derecho.

    La galera de los fsiles muestra la tpica seccin en

    arcos, pero en la parte septentrional el techo

    presenta hacia arriba dos conductos o chimeneas

    que se pierden en la masa rocosa; tales conductos

    penetran las aguas despus de grandes aguaceros. A

    veces los perfiles transversales dejan ver en ambas

    paredes opuestas los tpicos nichos de lagos

    fsiles

    En el saln de los dolos en la parte inferior, dos

    nichos de lagos fsiles encima de la bveda que en

    su parte superior presenta otros dos nichos cuya

    bveda ha sido destruida por la claraboya del Pozo.

    Debajo de esta, se alza el cono de derrumbe, es

    decir, todos los factores de las cuevas del tipo

    Aston.

    En esa misma sala se observan varias esbeltas

    estalagmitas con rostros humanos (ojo, boca, nariz)

    tallados por manos no muy artsticas. En nuestra

    exploracin de 1943 los campesinos nos contaron

    que eran obras de los negros esclavos que

    celebraban ceremonias en este saln. Advertimos

    que sobre una de las cuatro estalagmitas talladas, y

    con posterioridad a nuestras primeras exploraciones,

    manos contemporneas nada cultas alteraron los

    rasgos primitivos dandolas irreparablemente.

    En el saln de la Gubia, ya que en las primeras

    exploraciones apareci ese instrumento de caracol

    Strombus, contiguo a la dolina de la entrada se ven

    bien claro dos amplias grutas o nichos superpuestos

    a la galera principal de la cueva, lo que nos indica

    en general tres estadios de la disolucin fretica.

    Estos nichos colgados, unos sobre otros, son muy

    caractersticos de las cuevas tipo Aston y en general

    de las grutas formadas por disolucin fretica, en

    que cada prolongado estacionamiento de un nivel

    fretico produjo un nicho lateral (nicho de lago

    fsil), que quede desaguado al ocurrir el

    hundimiento del referido nivel, descenso que al

    estacionarse nuevamente origin otras galeras.

    Si nos fijamos en el dibujo de la seccin del saln

    de la Gubia se distinguen claramente estos nichos de

    origen fretico, su parecido con el tipo Aston en su

    fase primigenia es bastante notable.

    Sobre el techo del saln de la Gubia se ven tres

    claraboyas por una de las cuales sale el tronco de un

    jagey, un rbol evidentemente espeleoflico y que

    debe haber influido poderosamente en la gnesis y

    control de las morfologas de las cuevas cubanas.

    Parte del techo, paredes y piso de la cueva de

    Paredones estn tapizado por formaciones

    secundarias: estalactitas, estalagmitas, mantos,

    perlas de cueva, etc.

    Algunas estalagmitas crecidas a veces sobre los

    derrumbes de la galera de la Catedral han sufrido

    una redisolucin que ha alterado extraamente sus

    formas originales, llegando en ocasiones hasta

    hacerlas desaparecer. Esta accin destructiva por la

    va qumica se debe principalmente a factores

    biolgicos como la presencia de guano de

  • Pg. 24

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVIII)

    murcilago y a los orines y a los propios cadveres

    de dichos quirpteros.

    Algunas estalagmitas terminan en forma de cresta

    de gallo, muy blancas. Su goteo procede desde muy

    alto.

    Las perlas de cuevas, completamente esfricas y

    pulidas se localizaron en el interior de las represas

    levantadas levemente sobre el suelo calcreo.

    A 444 metros de la dolina de entrada, la cueva

    cambia su morfologa. De una cueva amplia en que

    la anchura promedio es de 20 m y la altura de la

    bveda a veces es de 7 m, en la galera final se

    reducen a unos 2 o 3 m de ancho, por 1 o 1,5 m de

    altura. Desde el comienzo de este tnel de 136 m de

    largo se observa una diaclasa casi vertical en medio

    del mismo que sirvi de gua a las aguas freticas

    para su formacin. Solo unas pequeas estalactitas

    adornan su techo y paredes en contraste con las

    opacas y grandes formaciones secundarias de las

    restantes galeras.

    El aspecto cristalino de las estalactitas de la galera

    final se debe a la quietud del medio ambiente de la

    misma (es un tnel esttico desde el punto de vista

    anemomtrico) en contraste con el resto de la cueva,

    perforada por varias claraboyas que la convierten en

    una espelunca dinmica, con corrientes de aire, etc.

    El tnel final es de superficie muy irregular. En el

    piso se ven curiosos huecos como de unos 30 cm de

    dimetro.

    Durante la exploracin realizada el da 12 de junio

    de 1954 (poca de lluvias) observamos que en

    alguna parte de la galera Final fluan pequeos

    hilos de agua que iban a morir en el lago fretico, es

    decir, que dicha galera, si se form freticamente,

    hoy recoge las aguas vadosas infiltradas y por lo

    tanto sirve de pequesimo cauce estacional.

    No existe en toda dicha galera un tramo liso de

    paredes techo o piso. Todo all se ve agujereado,

    irregular.

    Es tambin notable la presencia en la galera Final,

    especialmente cerca del saln de los Derrumbes

    como de unas estalactitas geoides circulares muy

    achatadas, de unos 30 cm de dimetro y unos 12 de

    alto que se muestran estructuralmente formadas por

    capitas concntricas como las cebollas. Tales

    capitas son cristalinas, de fosforita de color

    achocolatado brillante y recuerdan algo a las

    formaciones fungiformes descubiertas por

    nosotros en las cuevas de Caguanes.

    En las paredes, formando un nivel muy ntido, se

    observan restos de fosforitas a lo largo de esta

    galera.

    Formados igualmente de fosforitas se ven en

    muchas partes principalmente junto al techo

    estratos que a veces buzan 14o al W, constitudos

    por finas capitas de ese mineral oscuro.

    Hay partes del piso, formado por roca estructural

    caliza, que al partirlo se ve en su estructura interna

    zonacin de fosforita arriba y ms abajo la caliza

    pura, sin alteracin fosfortica.

    Como la fosforita se forma en las cuevas por el

    contacto prolongado entre el carbonato y el guano

    de murcilago, es de creer que las formaciones

    fungiformes fosforticas descubiertas por nosotros

    en esta cueva se hayan originado cuando la galera

    Final se hallaba inundada de agua y en este medio

  • Pg. 25

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXVIII)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de

    Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 123, Cuba, 30 de julio de 2014.

    lquido haba fosforita en disolucin que se nucle

    alrededor de una estalactita o de un saliente del

    techo, concrecionndose concntricamente como las

    capitas de una cebolla.

    Los estratos de fosforitas mencionados ms arriba

    debieron originarse sobre depsitos ms o menos

    planos de guano o tierra con guano.

    La morfologa de la galera Final difiere mucho de

    todas las formas estudiadas en el tipo Aston. La

    caliza regional de toda la cueva de Paredones no se

    muestra muy estratificada, ms bien en trminos

    generales es masiva, salvo en el saln de los dolos

    donde se ve buzar 12o al SW.

    En el lago fretico localizado donde termina la

    galera Final viven peces y camarones ciegos.

  • Pg. 26

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Sumidero del ro San Antonio de los Baos1

    Existe en la obra ya citada del Dr. Antonio

    Nez Jimnez que no pertenece a las cuevas

    tipo Aston como l las clasific, pero que s son

    parte de la provincia de Artemisa, territorio por

    el cual hoy se mueven las exploraciones de los

    autores de estos artculos. En el nmero 86 de El

    Explorador se hizo un recorrido por el territorio de

    San Antonio de los Baos y no se profundiz en

    el tema de la cueva fluvial del ro de esa

    localidad; no queremos dejar de citar el libro

    Clasificacin Genticas de las Cuevas de Cuba,

    sin dejar de mencionar lo que al respecto

    escribiera Nez:

    El sumidero del ro San Antonio de los Baos

    constituye un subtipo del Cuyaguateje.2 Este

    carso no est formado por el carso cnico como en

    la sierra de los rganos, sino por una llanura crsica

    de estructura casi horizontal con ligero y general

    buzamiento hacia la costa sur. El San Antonio de los

    Baos no presenta un evidente resolladero, aunque

    s un bien definido sumidero, pues hasta ahora nadie

    ha podido explorar esta espelunca.

    El ponor de entrada del ro se localiza en las

    coordenadas 462-404 en la hoja 3784-VI a una

    altitud de 50 m sobre el nivel medio del mar. Dicho

    sumidero se encuentra en el interior del pueblo de

    San Antonio de los Baos. Se abre en la Llanura

    crsica Meridional, regin fisiogrfica Habana-

    Matanzas.

    El ro San Antonio de los Baos nace en la margen

    suroriental de la laguna crsica de Ariguanabo. La

    laguna, por el contrario, por la margen oriental

    vierte sus aguas al arroyo Govea que corre casi de

    este a oeste. El San Antonio de los Baos o

    Ariguanabo, despus de fluir 5 km al sur de la

    laguna hace la sumersin en el ponor.

    La laguna de Ariguanabo, que en ocasiones se seca

    completamente, es un curioso accidente geogrfico:

    Tradicionalmente se ha considerado la laguna de

    Ariguanabo como la ms extensa de Cuba; pero esta

    ha ido disminuyendo de caudal y extensin a

    medida que se tal la zona y se extrajo de su cuenca

    agua para el abastecimiento de industrias y

    ciudades.

    En la sequa de los aos 1961-62, una de las ms

    desastrosas acaecidas en Cuba, esta laguna qued

    completamente seca. Tiene 8 km de largo de este a

    oeste y 2,5 km en su parte ms ancha.

    La laguna de Ariguanabo, de forma larga y estrecha,

    est situada en la provincia de La Habana, a 3 km al

    sureste del extremo oriental de la sierra de Anafe.

    Sus aguas se encuentran a 60 m sobre el nivel del

    mar. Ocupa la cima de un pequeo anticlinal

    erosionado constituido por rocas calizas del

    oligoceno.

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

    Por: Pedro Luis Hernndez Prez

    Jorge Freddy Ramrez Prez

    Miembros Ordinarios de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    Antonio Nez Jimnez y su obra Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIX)

  • Pg. 27

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIX)

    Poco antes de que el ro penetre en la caverna, ha

    sido represado para operar una antigua fbrica de

    levadura.

    La caverna es poco conocida y no se sabe a dnde

    van a brotar sus aguas. El naturalista Ramn de la

    Sagra al tratar de este interesante lugar dice que el

    ro parece correr subterrneamente pues en el

    punto de la costa llamado Cago brota una

    considerabilsima cantidad de agua y ms adelante

    agrega que estas corrientes subterrneas se

    perciben en todos los pozos de la regin. En

    realidad los pozos captan el manto fretico que solo

    en mnima parte es alimentado por el ro San

    Antonio de los Baos.

    Los doctores Massip e Ysalgu exponen que es

    posible que el manantial llamado Catorce Arrobas,

    situado a poca distancia del litoral de Quivicn y de

    bastante caudal, sea la desembocadura submarina de

    ro Ariguanabo.

    En toda esa regin de la Llanura Crsica

    Meridional, son frecuentes los potentes manantiales,

    como el llamado Ojo de Agua en Guanmar, no

    lejos de la costa meridional de La Habana.

    Sabemos que en la dcada del 40 el Dr. Guillermo

    Lage realiz pruebas con fluorescena para conocer

    el resolladero del mencionado ro, sin obtener

    resultados positivos.

    Es posible que sus aguas fluviales subterrneas se

    rieguen entre los estratos de la llanura crsica y no

    resuellen en parte alguna definida, sino que

    engrosen el caudal fretico regional. El sumidero

    est situado entre rocas calizas del mioceno.

    No podemos aportar una descripcin de la caverna

    porque su exploracin es en extremo dificultosa ya

    que su boca se halla tapiada por una espesa capa de

    plantas acuticas introducidas por el ro en el ponor,

    materia vegetal muy compacta. En ocasiones el ro

    fluye por debajo de esa capa.

    El sumidero se abre en medio de la llanura porque el

    ro ha excavado un estrecho valle en esta para seguir

    su curso subterrneo al pie de una gran ceiba. La

    boca tiene 6,30 m de altura, su anchura es de 21,80

    m. El ro corre a 9,70 m por debajo de la superficie

    de la llanura. La forma de la bveda es como de

    media luna y la pared posterior a solo 6 m de la

    boca se muestra sifonante.

    En algunas partes de la superficie caliza se

    distinguen huellas de borrosos scallops. El ro

    despus de correr subterrneamente por espacio de

    ms de 200 m, reaparece por un resolladero de casi

    iguales caractersticas que el sumidero descrito,

    pero el ro no sale por esta boca, sino que sigue

    fluyendo por una galera inferior con rumbo al ESE.

    Frente a esta boca, en la llanura crsica se ve un

    pequeo valle seco de ms de 5 m de ancho por

    unos 2 m de profundidad con su fondo formado por

    calizas con diente de perro y casimbas.

    Este valle superior que se dirige al oeste-suroeste es

    continuacin del curso subterrneo del ro

    Ariguanabo, solo es utilizado por la corriente en

    pocas que la cueva se inunda totalmente y las

    aguas al subir de nivel alcanzan el citado valle

    superficial, por donde corren hasta formar una

    laguna ocasional a pocos cientos de metros del

    resolladero.

    Cerca de dicho resolladero las paredes del valle

    muestran huellas que nos permiten suponer que este

  • Pg. 28

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Cuba pasaje a la naturaleza (LXXIX)

    1- Antonio Nez Jimnez: Clasificacin Gentica de las Cuevas de Cuba. Departamento de Espeleologa, Instituto de

    Geografa de la Academia de Ciencias de Cuba, edicin provisional, pp. 98-149, 1967.

    2- Al respecto Nez expresa con el nombre de Cuyaguateje a un tipo muy numeroso de cavernas fluviales que

    principalmente se localizan en la sierra de los rganos, donde la morfologa del carso cnico es tan caracterstica. Se trata

    de cuevas excavadas en la roca caliza por ros que en su mayora son alctonos, nacen como el prototipo (ro Cuyaguateje),

    en las lomas arcillosas de la formacin San Cayetano para bajar por valles normales que lo conducen a una polja marginal,

    para despus perforar subterrneamente las laderas verticales de los mogotes y salir de nuevo al exterior, bien a otra polja o

    a una llanura crsica marginal.

    Fuente: Extrado del Peridico Digital Espeleolgico El Explorador, No. 124, Cuba, 29 de agosto de 2014.

    se form en parte por desplome de las bvedas

    subterrneas, pues en la margen oriental se ve

    dentro de la masa caliza una campana de disolucin.

    El resolladero (coordenadas 461-403 de la hoja

    3684-I) es utilizado por un matadero para echar en

    l sus desperdicios, los que ocupan casi toda el rea

    visible de la caverna, de manera que la pudricin y

    la pestilencia, unidas a las heces fecales que vierten

    las aguas de albaal en esta cueva, casi

    imposibilitan su exploracin. Los estratos calizos en

    el resolladero buzan 20o al oeste.

  • Pg. 29

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    Por: ngel Graa Gonzlez

    Miembro Ordinario de la Sociedad Espeleolgica de Cuba

    La primera nota sobre esta obra se public en la

    prensa el 14 de agosto de 1954, en el diario

    cienfueguero La Correspondencia, Efran Iznaga

    escribira: El tesoro editorial cubano acaba de

    enriquecerse con la publicacin de un magnfico

    texto sobre Geografa de Cuba, del Dr. Antonio

    Nez Jimnez, adaptada a los programas de

    Bachillerato. Y despus qu ocurri?, que

    motivara acaloradas protestas: sencillamente la

    desaparicin de este texto que fuera incautado de la

    librera por un grupo de militares al mando del

    Primer Teniente Jos de Jess Castao y Quevedo,

    quien con un grupo de policas recogi de la

    Librera Casa Lori los libros que all existan

    para la venta de Geografa de Cuba del Dr.

    Antonio Nez Jimnez.

    Cul fue la causa verdadera que originara esta

    medida monstruosa y de atentado contra la cultura y

    la libertad de expresin de un pas? Muy sencillo, se

    publicaba un libro que serva de texto a las nuevas

    generaciones, en el que no solo se explicaban temas

    geogrfico-histricos, sino en el que se denunciaban

    todos los abusos y latrocinios que sufra el pueblo

    cubano y en el que, por primera vez, aparecan

    impresas palabras como latifundio, imperialismo,

    desalojo. Eso no lo poda permitir el dictador

    Fulgencio Batista, que no solo viol la Constitucin

    cubana de 1940 al llegar al poder por un golpe de

    estado, sino que en esos momentos ahogaba

    sangrientamente cualquier manifestacin en contra

    de su rgimen. La orden fue perentoria:

    desaparecer semejante libro.

    El informe oficial del Servicio de Inteligencia

    Militar (SIM), del 17 de enero de 1955 dice:

    La obra fue redactada en la Ctedra de Geografa

    de la Universidad de La Habana. Est inspirada y

    orientada en la tesis nacionalista del Dr. Salvador

    Massip, colaborador del Dr. Nez en la obra. La

    Editorial Lex convino en imprimir 3 000

    ejemplares, Ha entregado al Dr. Nez 2,283

    ejemplares. Se ocuparon 717 y el plomo del

    linotipo. En la Librera Lori se ocuparon 11

    ejemplares; en La Moderna Poesa 42, y 3 en la

    Librera Cervantes, en la Minerva se haban

    agotado. Hay distribuidos muchos en el interior

    y, en particular, en la Librera Renacimiento de

    Santiago de Cuba.

    El mismo 17 de enero en el que secuestraron los

    libros de la Casa Lori, el propio teniente Castao

    se present en la Editorial Lex que diriga el Dr.

    Mariano Snchez Roca, a ocupar los libros all

    existentes, llevarse los grabados de la obra, as

    como el plomo utilizado en la impresin, siendo

    informado el Dr. Roca que los libros seran

    quemados. Igual situacin haba sufrido Europa

    durante la Segunda Guerra Mundial cuando Hitler y

    sus hordas quemaron los libros de los pases

    ocupados por los nazis. Al mismo tiempo, los

    sicarios asaltaron la casa del Dr. Nez Jimnez y

    La geografa de Cuba quemada. Sinopsis de los hechos

    y consecuencias

    A la memoria de Antonio Nez Jimnez, el padre de la Espeleologa Cubana

  • Pg. 30

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    La geografa de Cuba quemada. Sinopsis de los hechos

    y consecuencias

    se llevaron de su biblioteca privada, un nico

    ejemplar de esa obra, dedicado por l a su pequea

    hija Olimpia. Jos Pardo Llada, en el Diario

    Nacional denunciaba el 21 de enero el asalto a la

    Editorial Lex por los esbirros de Batista, y la

    sustraccin de los libros. El 22 de enero, en el

    peridico de Marianao, El Sol, el periodista y

    escritor Imeldo lvarez, denunciaba el hecho. Poco

    despus, el Ministro de Educacin del rgimen

    batistiano dicta la Resolucin Ministerial nmero

    07594 de fecha 30 de enero de 1955, en la que en

    sus Por Cuantos dice: Segundo: Prohibir su uso,

    como texto, obra de consulta o material de lectura

    en las escuelas, Institutos, Centros Medios, o en las

    instituciones privadas incorporadas, o simplemente

    sometidas a la inspeccin de los funcionarios

    tcnicos del Ministerio y lo firma el propio

    Ministro de Educacin Dr. Jos Lpez Isa.

    Esto sucede casi 15 das despus de ser recogidos

    los libros en la Casa Lori y otras libreras, a

    escasos das del Aniversario XV de la Sociedad

    Espeleolgica de Cuba, institucin fundada por el

    Dr. Nez Jimnez el 15 de enero de 1940 cuando

    tena solo 16 aos de edad. Las protestas continan.

    Vanguardia, rgano Oficial del Consejo Directivo

    de Maestros y Equiparados de Las Villas, en su

    edicin de febrero de 1955 (nmero 32 ao IV),

    publica la protesta del Colegio Provincial de

    Maestros por la ocupacin del libro Geografa de

    Cuba. Los alumnos de la Universidad Central

    Marta Abreu de Las Villas tambin alzan sus voces

    y el Consejo de esa universidad acord protestar

    contra la actuacin del Servicio de Inteligencia

    Militar al ocupar los ejemplares de esa obra que

    constituye un acto de restriccin a la libre expresin

    del pensamiento as como seala tambin que no

    existe razn alguna que impida considerarla como

    obra rigurosamente cientfica y recomendable como

    texto de estudio sobre la materia que comprende.

    Estas noticias aparecieron en el peridico

    Informacin del martes 22 de febrero de

    1955. Ulises Carb, director de Prensa Libre,

    publica el 19 de marzo de 1955 una entrevista

    realizada al Dr. Antonio Nez Jimnez donde este

    manifiesta que El deber de un maestro es decir

    siempre la verdad y contina diciendo:

    Mi libro fue secuestrado al amanecer del da 17 de

    enero de este ao. Dos miembros de la fuerza

    pblica entraron en mi hogar y una docena de ellos

    fueron a la casa editora. En horas de la maana se

    dirigieron a las libreras requisando la totalidad de

    los que estaban en venta, se los llevaron sin pagar su

    importe... seis mil pesos que constituan todos mis

    ahorros y muchos aos de labor compilatoria

    deshechas en pocas horas.

    La protesta estudiantil universitaria no se hara

    esperar y su comit creado en el Alma Mater

    universitaria, llamado Comit de Defensa de la

    Libertad de Expresin, regido por el presidente de la

    Federacin Estudiantil Universitaria (FEU), Jos

    Antonio Echeverra, denunciara fuertemente el

    monstruoso acto, catalogando a su autor de joven

    cientfico y miembro de la Sociedad Geogrfica de

    Cuba y lanzando como tarea inicial una encuesta

    pblica para levantar fondos que sirvieran a Antonio

    Nez Jimnez para resarcir las prdidas sufridas

    por la desaparicin de la edicin. La prensa de la

    poca, en sus ediciones del 17 de marzo de 1955,

    researa el hecho y la participacin acusatoria del

  • Pg. 31

    No. 6 (Edicin Especial No. 3)

    Septiembre 2015 Parte III

    La geografa de Cuba quemada. Sinopsis de los hechos

    y consecuencias

    propio Jos Antonio. El Bur de Represin de

    Actividades Comunistas (BRAC) sale a combatir la

    colecta. El teniente Jos Castao informa a sus

    superiores:

    Asunto: tentativa colecta popular para reeditar la

    Geografa de Cuba, cuyo autor es el connotado

    lder juvenil marxista Dr. Antonio Nez

    Jimnez. Un grupo de intelectuales izquierdistas

    y extremistas, entre ellos Carlos Rafael

    Rodrguez, Juan Marinello, Salvador Massip,

    Francisco Carone y Vicentina Antua, han