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1. Gluten y la lactosa en los medicamentos.

Las intolerancias y alergias alimentarias son un problema relati-

vamente frecuente en la población y cuyo principal tratamiento

consiste en evitar consumir el alimento que pueda contener la

sustancia que ocasiona la enfermedad. Las personas que pade-

cen este tipo de enfermedades no suelen tener dificultades

para seguir la dieta, porque los productos alimentarios están

bien etiquetados e incluso, en los supermercados, pueden

estar localizados en secciones bien diferenciadas.

Esto no es tan sencillo a la hora de tomar un medicamento. Todos

los medicamentos tienen excipientes. Los excipientes son sustan-

cias que ayudan a que el principio activo, que es el que produce el

efecto del medicamento, pueda resultar eficaz y agradable para el

paciente. Se incorpora al medicamento para su preparación, con-

servación o administración. Son sustancias como el almidón, que

se incorpora para dar forma al comprimido, o el azúcar de los jara-

bes. Son los que permiten que puedan existir distintas formas far-

macéuticas: cápsulas, jarabes, supositorios o inyectables, por

ejemplo. El almidón de distintos cereales o la lactosa son excipien-

tes relativamente frecuentes que deben tenidos en cuenta por los

pacientes celiacos o los intolerantes o alérgicos a la lactosa. Los

enfermos celíacos deben evitar el gluten en su dieta. El gluten se

encuentra en el trigo, cebada, avena, centeno y triticale, que es un

cereal sintético que procede de cruzar trigo y centeno. Si lo consu-

men, presentarán una serie de síntomas digestivos y, a veces, pue-

den presentar alteraciones en la piel, dolores óseos o trastornos del

sueño, entre otros. En cuanto a la intolerancia o alergia a la lactosa,

son dos enfermedades que no se deben confundir. La intolerancia

suele aparecer con el paso de los años y los síntomas son digesti-

vos (hinchazón abdominal, flatulencia o diarrea). La alergia, en la

mayoría de los casos, se da en bebés y se desarrolla, no frente a la

lactosa que es un azúcar, sino frente a las proteínas de la leche de la

vaca. Éste es un problema mucho más importante, ya que puede

producir, desde una simple erupción cutánea, hasta síntomas respi-

ratorios muy graves si no se pone un tratamiento urgente.

Vol. 4 | Julio 2014

Contenido: Gluten y lactosa en los medicamentos 1.

NOTIFIQUE CUALQUIER PROBLEMA RELACIONADO CON LOS MEDICAMENTOS en www.yonotifico.es, o en el tel. 985 10 31 70

Su colaboración es muy importante, le damos las gracias por hacerlo.pág. 1

Comité de redacción: C Gurruchaga, FJ Jimeno, ME Salgueiro, A Carvajal, C Aguirre, G Manso.Editado en Oviedo por la Universidad de Oviedo. Departamento de Medicina. Área de Farmacología (FISS -12 - PI11 - 01807)

Proyecto FISS-12-PI11-01807Instituto de Salud Carlos III. Ministerio de Economía y Competitividad.

Editor/Responsable Área de Farmacología. Departamento de Medicina.Universidad de Oviedo | Lugar de edición Oviedo

ISSN 2386-3447 | D.L.:AS- 02432-2014

Por tanto, algunos excipientes pueden originar alergias o intoleran-

cias. Por ello se contempla la obligación de detallar su composición

en el cartonaje y en el prospecto de los medicamentos. En el pros-

pecto, constan todos los excipientes y, de algunos de ellos, la canti-

dad. En la circular 2/2008, de 5 de marzo de 2008 de la Agencia

Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (1), (“instrucción

sobre excipientes”) se establece la obligación, entre otras, de que

tanto el etiquetado como el prospecto sean conformes a la ficha

técnica e incluyan la información de los excipientes que sea necesa-

ria para la correcta administración y uso del medicamento. En esta

circular, se establecen condiciones más específicas para la declara-

ción del gluten. Cuando el almidón utilizado en el medicamento

procede de un cereal sin gluten, como el arroz, la patata o el maíz,

también será obligatorio declararlo, indicando el cereal de origen.

Por ejemplo, si el medicamento contiene almidón de trigo, avena,

cebada, centeno o triticale y derivados, vendrá indicado el cereal

específico y, en función de la cantidad, que también constará en el

prospecto, añadirán que es apto igualmente para celíacos o que

deberá ser tenido en cuenta.

SIN

LACTOSA

SIN

GLUTEN

En resumen, leyendo el prospecto y cartonaje de los medicamentos,

se podrán identificar todos los excipientes y saber si son aptos o no

para cada persona. Esto es más eficaz que elaborar listas de medi-

camentos, que tienen el inconveniente de tener que ser actualiza-

das. Las asociaciones de celiacos están intentando que las cajas de

medicamentos sin gluten se etiqueten como tal: “SIN GLUTEN”.

Existe una aplicación para teléfonos móviles, llamada Glutenmed

(2), española (canaria), que es un trabajo realizado por farmacéuti-

cos hospitalarios. Está basada en los medicamentos comercializa-

dos en el mercado español. Este programa para 'smartphone'

ofrece un listado de medicamentos que contienen gluten, por lo

que permite hacer, tanto a pacientes como profesionales, un uso

seguro de los medicamentos. El listado se actualiza cada 4 meses.

De todas formas, ante cualquier duda, siempre deberá consultar

igualmente a su farmacéutico o médico.

(1)http://www.aemps.gob.es/informa/circulares/medicamentosUs

oHumano/2008/docs/circular_02-2008_instruccion-

excipientes.pdf

(2)http://www.laprovincia.es/sociedad/2013/01/09/aplicacion-

canaria-glutenmed-mejores-proyectos-farmaceuticos/507538.html

En cuanto a la lactosa, en el prospecto también vendrá indicado

con la siguiente información: “este medicamento contiene lactosa.

Si su médico le ha indicado que padece intolerancia a ciertos

azúcares, consulte con él antes de tomar este medicamento. Los

pacientes con diabetes mellitus deben tener en cuenta que este

medicamento contiene lactosa, que se compone de glucosa y

galactosa. Los pacientes con intolerancia a la galactosa o mala

absorción de glucosa no deberán tomar este medicamento. La

lactosa puede contener proteínas de la leche de la vaca, por lo que

puede producir reacciones alérgicas en pacientes con alergia”.

Conviene recordar que toda esta información aparece en el pros-

pecto de los medicamentos comercializados después de 2008,

pero no en los comercializados con anterioridad.

Todos los excipientes deben ser tenidos en cuenta. Pero por su

importancia o frecuencia de determinadas enfermedades, convie-

ne también recordar que los pacientes que deban hacer una dieta

pobre en sodio (como son los enfermos de corazón, de riñón o los

hipertensos) deben fijarse en el contenido en sodio. Las personas

con fenilcetonuria, deberán fijarse en si el medicamento contiene

aspartamo (que es una fuente de fenilalanina, la cual no deben

consumir). Los pacientes diabéticos, además de evitar los medica-

mentos con lactosa, deberán evitar también los que contengan

azúcar invertido, sacarosa y sorbitol.

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Su colaboración es muy importante, le damos las gracias por hacerlo.pág. 2

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Todos los medicamentos tienen excipientes.

Los excipientes son sustancias que ayudan a que el principio activo, que es el que produce el efecto del medicamento, pueda resultar eficaz y agradable para el paciente.

Algunos excipientes pueden originar alergias o intolerancias.

Se contempla la obligación de detallar la composi-ción de los excipientes en el cartonaje y en el prospecto del medicamento.

Leyendo el prospecto y cartonaje de los medica-mentos, se podrán identificar todos los excipientes y saber si son aptos o no para cada persona.