celulitis_25
Transcript of celulitis_25
370
CAPÍTULO 25. CELULITIS.
• Demostración del “fenómeno del colchón”, es decir, aparición de
hoyuelos, abultamientos y deformación de la piel.
• En el 90-98% de los casos el sujeto afectado es una mujer.
• Entre los síntomas están la sensación de tirantez y pesadez en las
áreas afectadas (especialmente en las piernas).
• La sensibilidad de la piel es bastante evidente cuando se pincha,
presiona o se somete a un masaje vigoroso.
Consideraciones generales.
EI término celulitis se utiliza para describir un defecto estético que causa
gran insatisfacción a millones de mujeres europeas y americanas. Esta palabra
francesa se adoptó como voz popular en los EE.UU. antes de que los médicos
norteamericanos y la literatura médica se interesaran por un trastorno que los
médicos europeos habían estado tratando durante ciento cincuenta años. La
correcta traducción inglesa del francés cellulite sería celulitis; sin embargo, en el
mundo anglo-sajón “celulitis” se utiliza sólo para describir un proceso
inflamatorio o infeccioso que afecta al tejido conjuntivo de la piel. En la celulitis
no existe ningún proceso inflamatorio o infeccioso. Esta diferencia de significado
del término traducido era motivo de confusión para los médicos
estadounidenses. Los investigadores han sugerido que para designar el trastorno
clínico se utilicen los términos dermopaniculosis deformante o adiposis
edematosa. Sin embargo, en este capítulo emplearemos el término celulitis.
371
Características estructurales de la celulitis.
El tejido subcutáneo es el que se encuentra inmediatamente debajo de la
superficie de la piel y une a ésta de forma laxa al tejido o huesos subyacentes.
Dicho tejido contiene células grasas en número y tamaño que varía entre los
diferentes sujetos y es la estructura alterada en la celulitis. Dado que los muslos
son la región que se altera con más frecuencia en la celulitis, comentaremos con
gran detalle la estructura de su tejido subcutáneo.
El tejido subcutáneo de los muslos está compuesto por tres capas de
grasa, con dos planos de tejido conjuntivo (sustancia fundamental) intercalados.
La estructura básica del tejido subcutáneo de los muslos es diferente en
hombres y mujeres, como se muestra en la figura 25.1. En las mujeres, la capa
superior de tejido subcutáneo consta de lo que se ha denominado cámaras de
células grasas de disposición vertical, que están separadas por paredes
arqueadas y radiales de tejido conjuntivo que se unen al tejido conjuntivo
superior de la piel (corion o dermis). Por el contrario, la parte superior del tejido
subcutáneo de los hombres es más delgado y tiene una malla de paredes de
tejido conjuntivo entrecruzadas. Además, el corion (la estructura de tejido
conjuntivo presente entre la piel y el tejido subcutáneo) es más grueso en los
hombres que en las mujeres.
Figura 25.1. Base anatómica de la celulitis.
372
Estas diferencias básicas en cuanto a la estructura del tejido subcutáneo
son la razón por la que la celulitis se observa casi exclusivamente en las
mujeres. Una prueba sencilla para ilustrar estas diferencias es la prueba del
pellizco. Al pellizcar la piel y el tejido subcutáneo de los muslos de las mujeres
se produce el “fenómeno del colchón”, es decir, la aparición de hoyuelos,
abultamientos y deformación de la piel, mientras que en la mayoría de los
hombres la piel se plegará o arrugará, pero no aparecerán hoyuelos ni
abultamientos. Estas diferencias estructurales entre los hombres y las mujeres
son las responsables de que en la mayoría de las mujeres se produzca el
fenómeno del colchón como respuesta a la prueba del pellizco.
A medida que las mujeres envejecen, el corion, que de hecho es más
delgado en ellas que en los hombres, adelgaza progresivamente y se hace más
laxo. Este hecho permite a las células grasas migrar hacia esta capa. Además,
las paredes de tejido conjuntivo existentes entre las cámaras de las células
grasas también adelgazan y permiten que dichas cámaras aumenten
excesivamente de tamaño (hipertrofia).
La rotura o el adelgazamiento de las estructuras de tejido conjuntivo es
un elemento importante del desarrollo de la celulitis y es responsable del tacto
granular que presenta. El fenómeno del colchón se debe a las depresiones y
protusiones alternantes de los sistemas del compartimento superior del tejido
graso. La orientación vertical de los compartimentos celulares grasos de las
mujeres, asociada con la debilidad de los tejidos citada con anterioridad, es lo
que permite aparentemente la protrusión de los adipocitos hacia el corion
inferior. Estas diferencias anatómicas entre hombres y mujeres se resumen en la
tabla 25.1. El examen histológico (examen microscópico de las células) revela
también la distensión de los vasos linfáticos del corion superior y una
disminución del número de fibras elásticas importantes.
373
Figura 25.2. La prueba del pellisco.
Tabla 25.1 Diferencias típicas de la piel de la región lateral de los muslos entre
hombres y mujeres (edades comprendidas entre los 16 y los 50 años)
Capa de la piel De hombres De mujeres
Epidermis Más gruesa (58—77 µm) Más delgada (47—62 µm)
Corion — dermis Más gruesa (1.159—1.798µm) Más delgada (994-1.349 µm)
Zona limitante del corion
e hipodermis Menos papilas adiposas Más papilas adiposas
Hipodermis Delgadez variable Espesor variable
Zona superior Células grasas poligonales Células grasas grandes
pequeñas, tabiques de disposición vertical
entrecruzados de tejido con tabiques radiales
conjuntivo de tejido conjuntivo
374
Estado de protrusión de
la piel* No se desarrolla Sí se desarrolla
* EI llamado “fenómeno del colchón”.
Características clínicas.
Las características clínicas básicas de la celulitis se conocen
perfectamente y se han descrito antes como el “fenómeno del colchón”. Las
mujeres constituyen el 90-98% de los casos, cifra que refleja las diferencias
histológicas que existen entre hombres y mujeres. Entre los síntomas de la
celulitis están la sensación de tirantez y pesadez en las áreas afectadas
(especialmente las piernas) y el dolor a la palpación de la piel es bastante
evidente cuando se pellizca, presiona o se somete a un masaje vigoroso. Las
áreas corporales afectadas típicamente son las nalgas, los muslos y, en menor
medida, la parte inferior del abdomen, la nuca y las zonas superiores de los
brazos y corresponden a la obesidad ginecoide (femenina).
La celulitis se clasifica en cuatro estadios principales:
• El estadio 0 es la fase en que la piel de muslos y nalgas presenta una
superficie lisa cuando el sujeto está de pie o tumbado. Si se pellizca la
piel (prueba del pellizco), se pliega y arruga, pero no aparecen
hoyuelos ni bultos. Es el estado normal de la mayoría de los hombres
y de las mujeres delgadas.
• El estadio 1 es la fase en que la superficie de la piel permanece lisa
mientras el sujeto está de pie o tumbado, pero la prueba del pellizco
es claramente positiva para el fenómeno del colchón. Es el estado
normal de la mayoría de las mujeres, pero en los hombres puede ser
un signo de deficiencia de hormonas androgénicas.
375
• El estadio 2 es la fase en que la superficie de la piel es lisa cuando el
sujeto está tumbado, aunque aparece el fenómeno del colchón cuando
se sitúa en bipedestación. Este estado es habitual entre las mujeres
obesas o mayores de 35-40 años.
• El estadio 3 es la fase en que el fenómeno del colchón es evidente
cuando el sujeto está tumbado o de pie. Es muy habitual después de
la menopausia y en la obesidad.
Aunque la mayoría de las mujeres consideran el estadio 0 como la
situación estética ideal, la mejor clasificación que cabe encontrar en la mayoría
es el estadio 1, debido a la predisposición estructural.
Terapia.
Como es habitual, el mejor enfoque es la prevención. Sin embargo, dado
que el número y tamaño de las células grasas de una persona está muy
determinado por la nutrición prenatal materna, muchos sujetos presentan una
predisposición importante. El paso siguiente consiste en mantener una capa de
grasa subcutánea delgada, lo que se consigue mediante el ejercicio y el
mantenimiento de un peso corporal normal durante toda la vida (las mujeres
delgadas y las que practican el atletismo no presentan celulitis, o es escasa).
Reducción de peso y ejercicio.
La reducción de peso y la práctica del ejercicio son medidas que pueden
utilizarse en el tratamiento de la celulitis y, de hecho, debe ser siempre el
método primario de tratamiento. No obstante, la reducción de peso debe ser
gradual, especialmente en las mujeres mayores de 40 años. La pérdida rápida
de peso en los sujetos cuya piel y tejido conjuntivo ya están sufriendo cambios
376
por el envejecimiento, a menudo hace que el fenómeno del colchón sea más
evidente.
Masaje. El masaje es muy beneficioso, especialmente el automasaje con la
mano o un cepillo. Sus efectos físicos y mecánicos mejoran la circulación
sanguínea y linfática. El masaje siempre debe aplicarse desde la periferia hacia
el corazón.
Fitoterapia.
Existen muchas fórmulas cosméticas y preparaciones herbarias en el
mercado que aseguran ser eficaces como remedio de la celulitis. No obstante, la
mayoría de estas fórmulas no tienen una base científica que apoye su uso.
Además, en los estudios doble ciego realizados a largo plazo de algunos de los
tratamientos más conocidos para la celulitis se demuestra que no son más
eficaces que los placebos. Sin embargo, se han confirmado los efectos de
algunos compuestos botánicos en el tratamiento de la celulitis.
El tratamiento herbario completo de la celulitis implica la administración,
tanto oral como tópica, de medicinas botánicas que refuerzan la estructura de
los tejidos conjuntivos. Como se mencionó antes, la rotura o el adelgazamiento
de las estructuras del tejido conjuntivo es la contribución más importante al
desarrollo de la celulitis.
Gotu Kola (Centella asiática) Con un extracto de centella, que contiene los
ácidos triterpénicos ácido asiático y asiatósido, se han demostrado unos
resultados clínicos impresionantes al administrarla por vía oral para el
tratamiento de la celulitis, la insuficiencia venosa de los miembros inferiores y
las venas varicosas.
En algunos estudios experimentales se ha demostrado que la centella
ejerce una acción normalizadora del metabolismo del tejido conjuntivo. En
concreto, aumenta la integridad de este tejido mediante la estimulación de la
377
síntesis de glucosaminoglucanos sin promover la síntesis de colágeno o el
crecimiento celular excesivos? Los glucosaminoglucanos son los componentes
principales de la sustancia fundamental en la que están incluidas las fibras de
colágeno. El resultado neto es el desarrollo de tejido conjuntivo normal con
abundantes glucosaminoglucanos.
El efecto de la centella en el tratamiento de la celulitis parece relacionarse
con su capacidad para potenciar la estructura del tejido conjuntivo y reducir la
esclerosis, mientras que su acción en la insuficiencia venosa y en las venas
varicosas es una combinación de sus efectos sobre el tejido conjuntivo y su
capacidad para mejorar el flujo sanguíneo en los miembros afectados.
Aescina. La aescina es un compuesto obtenido de las semillas de Aesculus
hippocastanum (castaño de Indias). Tiene propiedades antiinflamatorias y
antiedematosas y disminuye la permeabilidad capilar mediante la reducción del
número y el tamaño de los poros pequeños de las paredes capilares. Los
investigadores han demostrado también que la aescina tiene actividad
venotónica. Este hecho se ha confirmado en los ensayos clínicos que demuestran
un efecto positivo en el tratamiento de las venas varicosas y la tromboflebitis.
En el tratamiento de la celulitis, la aescina puede administrarse por vía
oral o puede aplicarse por vía tópica un complejo de aescina y colesterol. La
aplicación tópica de aescina también es beneficiosa en el tratamiento de
contusiones, por la capacidad de este agente para reducir la fragilidad capilar y
la inflamación.
Fucus (Fucus vesiculosus). El fucus es un alga marina que se ha utilizado
en el tratamiento de la obesidad desde el siglo XVII. Se cree que su alto
contenido de yodo estimula la función tiroidea. Se ha utilizado también en
productos de aseo y cosméticos por sus efectos tónicos, suavizantes y
calmantes.
La aplicación tópica del fucus también está indicada en el tratamiento de
la celulitis. En este caso, sus efectos no han sido confirmados mediante una
378
investigación científica minuciosa, pero las acciones generales del fucus pueden
ser beneficiosas.
Especies de cola. La cola es una fuente muy importante de cafeína y de
compuestos relacionados, los cuales potencian el efecto lipolítico inducido por
las catecolaminas. Es preferible administrar la cafeína por vía tópica en lugar de
oral para el tratamiento de la celulitis, ya que sus efectos serán principalmente
locales.
Tratamiento.
Debe recordarse que la celulitis no es una enfermedad per se. Se trata,
principalmente, de una alteración estética debida a cambios anatómicos. El
tejido adiposo subcutáneo excesivo, o su degeneración, conduce al aumento del
tamaño de las cámaras grasas y a la observación más definida del fenómeno del
colchón. El abordaje terapéutico básico es sencillo: reducir la grasa subcutánea
y fomentar la integridad del tejido conjuntivo.
A menudo se observan venas varicosas asociadas con la celulitis y los dos
trastornos tienen mucho en común: ambas parecen ser el resultado en gran
medida de la pérdida de la integridad del tejido conjuntivo de soporte.
Y se debe mencionar de nuevo que la demostración del fenómeno del
colchón en los hombres es un signo sumamente probable de deficiencia
androgénica (de hormonas masculinas).
379
Dieta.
Es muy importante realizar una dieta abundante en carbohidratos
complejos y baja en carbohidratos refinados y grasas. Se debe estimular a las
personas obesas para que pierdan peso.
Medidas fisicas.
• Ejercicio: haga de 20 a 30 minutos de aeróbic, un mínimo de cinco días
a la semana.
• Masaje: automasaje regular de la zona afectada con la mano o con un
cepillo.
Fitoterapia.
• Administración oral de extracto de Centella asiática (70% de ácido
triterpénico): 30 mg tres veces al día.
• Aesculus hippocastanum
Corteza de la raíz: 500 mg tres veces al día.
Aescina: 10 mg tres veces al día.
• Aplicación tópica de pomadas, ungüentos, etc., dos veces al día:
Complejo de aescina y colesterol: de 0,5 a 1,5 %.
Extracto de Cola vera (14 % de cafeína): de 0,5 a 1,5 %.
Fucus vesiculosus: de 0,25 a 0,75 %.