COMPRAS GUBERNAMENTALES CONSULTA A LA EN EL DR-CAFTA … · DR-CAFTA? Desde el año 1996 se inició...
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¿En qué consiste la Contratación Pública? Es la adquisición a través de cualquier medio contractual, de bienes, servicios u obra por parte de las instituciones del Gobierno, para satisfacer sus propias necesidades o para proveer los servi- cios a la ciudadanía que justifican su compra, sin que los mismos tengan como objetivo la comercia- lización o reventa. ¿Cuáles normas rigen las contrataciones públicas en la República Dominicana? Nuestro sistema está basado en la centraliza- ción normativa y la descentralización operativa, de manera que una sola institución, la Dirección General de Contrataciones Públicas, emite las nor- mas complementarias para la aplicación de la Ley, pero cada entidad realiza sus propias contratacio- nes, siendo sus titulares los responsables de lle- var a cabo procesos transparentes, utilizando los medios de publicidad en la forma que establece la ley, realizando los procesos de contratación que corresponde según el monto estimado, cumplien- do con los plazos, garantizando la participación y debida competencia entre los proveedores y eli- giendo las ofertas más convenientes de acuerdo con el pliego de condiciones. Las funciones de la Dirección General de Contrataciones Públicas consisten en actualizar los umbrales en la forma y plazo que establece el Tratado, servir de órgano de consulta sobre la correcta aplicación de la Ley y promover que las entidades elaboren planes de contratación a futu- ro, para facilitar que los proveedores conozcan de antemano cuales serán las adquisiciones que hará el Gobierno. Una característica importante del sistema de contratación pública dominicano, es que permite la revisión de los procesos en cualquiera de sus eta- pas, lo que supone, por ejemplo, que si una enti- dad no incluye en su aviso de licitación las infor- maciones previstas por la ley para garantizar que los posibles oferentes identifiquen si existe una oportunidad de negocio que les resulte atractiva, es posible incoar un recurso para impugnar esa parte del proceso. ¿Cuáles avances ha logrado República Dominicana a raíz del Capítulo IX del DR-CAFTA? Desde el año 1996 se inició un proceso para modernizar el sistema de contratación pública con la modificación del marco jurídico, el cual estaba basado en la Ley No. 295 del año 1965, que con- centraba todas las compras en la Dirección General de Aprovisionamiento del Gobierno. Sin embargo, es tras la firma del DR-CAFTA y para facilitar su implementación, que el Congreso Nacional aprobó y el Poder Ejecutivo promulgó, la Ley 340-06 y su modificación, la Ley No. 449-06. Son estas leyes las que han servido de marco para la puesta en marcha del registro único de proveedores de bienes, servicios, obras y conce- siones, con lo que se evita que cada institución tenga un registro particular, facilitando registrar- se en un solo lugar y participar en los procesos de contratación que realizan todas las institucio- nes del Gobierno Dominicano. Asimismo, crea la Dirección General de Contratación Pública, órga- no rector del sistema, con capacidad para regu- lar y fungir como instancia de segundo grado para el conocimiento de los reclamos. La entrada en vigencia del DR-CAFTA ha con- sagrado el derecho y acceso al sistema de impug- nación de los procesos en todas sus etapas, ha promovido la agilización de la puesta en marcha del portal www.comprasdominicana.gov.do, a tra- vés del cual los proveedores y toda la ciudadanía pueden dar seguimiento a los procesos, conocer los resultados de las impugnaciones o cualquier información relacionada. ¿Qué oportunidades representa para República Dominicana el mercado de compras públicas de Estados Unidos? El mercado de la contratación pública de los Estados Unidos es muy restringido, ya que está regulado por una normativa denominada “Compre Americano” (Buy American Act) que dispone pre- ferencia de precios a favor de los bienes produci- dos en el territorio estadounidense o en países con los que se ha suscrito algún tratado de libre comercio. Por esa razón el DR-CAFTA le permite a la República Dominicana, ingresar a un mercado privilegiado que en el año 2007 movió alrededor de 462 mil millones de dólares, en el que sólo com- piten los proveedores norteamericanos y los de aquellos países con los que Estados Unidos ha suscrito tratados de libre comercio. En adición, los proveedores dominicanos tie- nen la oportunidad de participar en los procesos de contratación, en 24 de los Estados que compo- nen los Estados Unidos de Norteamérica, incluyen- do Puerto Rico, Texas, Nueva York, Florida, Connecticut y Washington D.C., los cuales concen- tran la mayor cantidad de compras y adquieren todo tipo de bienes y servicios, entre ellos, montos que pudieran resultar atractivos para el empresa- riado dominicano. Lo importante es que las medianas empresas, estén atentas a los avisos de licitación publicados en los portales que las instituciones del Gobierno Federal y los Estados utilizan para esos fines, tales como: www.fedbizopps.gov y www.gsa.gov, ya que salvo excepciones puntuales, el DR-CAFTA otorga a los proveedores de la República Domi- nicana el mismo tratamiento que a sus proveedo- res norteamericanos y centroamericanos en ese importante mercado. PARA CONSULTAS: [email protected] Redacción Ariel Gautreaux Ruth de los Santos Edición: Cornelia Torres Yahaira Sosa Manuel Rodríguez Coordinación: Pablo Espinal Leidylin Contreras Katrina Naut Karina Alcántara Diseño: Pedro Escaño CRÉDITOS E n la actualidad, los gobiernos son gran- des adquirientes de mercancías y servi- cios de diferente variedad, incluyendo los servicios de construcción y administración, por lo que se ha estimado que una parte con- siderable del PIB corresponde a las adquisi- ciones públicas de los países en desarrollo y en menor grado de los desarrollados. En ese sentido, se han configurado esfuer- zos tanto a nivel multilateral como bilateral para procurar el acceso a estos mercados y establecer reglas claras de sana competencia y transparencia. En el ámbito multilateral de la OMC, exis- te un Acuerdo Plurilateral sobre Contratación Pública que tiene vigencia sólo entre aquellos miembros de la OMC que son signatarios del mismo. República Dominicana forma parte de la OMC, pero no del Acuerdo sobre Contratación Pública, por lo cual, sus disposi- ciones no le son aplicables. El DR-CAFTA contiene un Capítulo sobre contratación pública, que supone para la República Dominicana el comienzo de una serie de transformaciones en el ordenamiento de los procesos y procedimientos de las com- pras y adquisiciones del Gobierno. A raíz del capítulo IX del DR-CAFTA, se cre- aron diferentes normas internas que comple- mentan sus disposiciones, tales como el Decreto No. 63-06 sobre Compras y Contra- taciones de Bienes, Servicios, Obras y Conce- siones (“Decreto puente”), la Ley No. 340-06 sobre Compras y Contrataciones de Bienes, Servicios, Obras y Concesiones y su Regla- mento, que crea la Dirección General de Contrataciones Públicas, órgano rector de las contrataciones en el país, además de la Ley No. 449-06 que modifica la anterior. En el ámbito del DR-CAFTA están las con- trataciones de bienes, servicios o una combi- nación de estos, hechas a través de cualquier medio contractual, listadas y sujetas a las con- diciones estipuladas en el Tratado, llevadas a cabo por una entidad contratante y que no estén excluidas. Para que una contratación se considere cubierta por el Capítulo IX, debe alcanzar cierto monto, expresado en umbrales mínimos que actualmente son de 117 millones 100 mil dóla- res para las mercancías y servicios y de 8 millo- nes de dólares para las construcciones. Estos montos son ajustados cada dos años. A las entidades contratantes se les prohí- be preparar, diseñar, estructurar o dividir un contrato de compra que no esté conforme a las obligaciones establecidas en el Acuerdo. Además, el país debe otorgar a los provee- dores, mercancías y servicios de los demás países Partes, el mismo trato que a los nacio- nales. Para asegurar la transparencia y compe- tencia, se dispone la obligación de publicar toda reglamentación relacionada a la contra- tación pública y publicar las ofertas de contra- taciones futuras, estableciéndose un plazo mínimo de 40 días entre la publicación de con- tratación futura y la fecha límite para presen- tar las ofertas. Las entidades contratantes deberán facili- tar los documentos de contratación a los ofe- rentes interesados y elaborar especificaciones técnicas que no creen obstáculos innecesarios al comercio. En cuanto a los procedimientos en sí, deben efectuarse en principio, bajo la modalidad de licitación abierta y adjudicarse los contratos al proveedor que, completando los requisitos y criterios contenidos en los documentos de contratación, presente la ofer- ta más ventajosa y cuente con la capacidad necesaria para ejecutar el contrato. Se permite la revisión de las impugnacio- nes de los proveedores que no estén satisfe- chos, garantizando la no discrecionalidad en los procesos de licitación. z COMPRAS GUBERNAMENTALES EN EL DR-CAFTA CONSULTA A LA LIC. RUTH DE LOS SANTOS SUBDIRECTORA DE LA DIRECCIÓN GENERAL DE POLÍTICA Y LEGISLACIÓN TRIBUTARIA DE LA SECRETARÍA DE ESTADO DE HACIENDA
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¿En qué consiste la Contratación Pública? Es la adquisición a través de cualquier medio
contractual, de bienes, servicios u obra por partede las instituciones del Gobierno, para satisfacersus propias necesidades o para proveer los servi-cios a la ciudadanía que justifican su compra, sinque los mismos tengan como objetivo la comercia-lización o reventa.
¿Cuáles normas rigen las contratacionespúblicas en la República Dominicana?
Nuestro sistema está basado en la centraliza-ción normativa y la descentralización operativa, demanera que una sola institución, la DirecciónGeneral de Contrataciones Públicas, emite las nor-mas complementarias para la aplicación de la Ley,pero cada entidad realiza sus propias contratacio-nes, siendo sus titulares los responsables de lle-var a cabo procesos transparentes, utilizando losmedios de publicidad en la forma que establece laley, realizando los procesos de contratación quecorresponde según el monto estimado, cumplien-do con los plazos, garantizando la participación ydebida competencia entre los proveedores y eli-giendo las ofertas más convenientes de acuerdocon el pliego de condiciones.
Las funciones de la Dirección General deContrataciones Públicas consisten en actualizarlos umbrales en la forma y plazo que establece elTratado, servir de órgano de consulta sobre lacorrecta aplicación de la Ley y promover que lasentidades elaboren planes de contratación a futu-ro, para facilitar que los proveedores conozcan deantemano cuales serán las adquisiciones que haráel Gobierno.
Una característica importante del sistema decontratación pública dominicano, es que permite larevisión de los procesos en cualquiera de sus eta-pas, lo que supone, por ejemplo, que si una enti-dad no incluye en su aviso de licitación las infor-maciones previstas por la ley para garantizar que
los posibles oferentes identifiquen si existe unaoportunidad de negocio que les resulte atractiva,es posible incoar un recurso para impugnar esaparte del proceso.
¿Cuáles avances ha logrado RepúblicaDominicana a raíz del Capítulo IX delDR-CAFTA?
Desde el año 1996 se inició un proceso paramodernizar el sistema de contratación pública conla modificación del marco jurídico, el cual estababasado en la Ley No. 295 del año 1965, que con-centraba todas las compras en la DirecciónGeneral de Aprovisionamiento del Gobierno. Sinembargo, es tras la firma del DR-CAFTA y parafacilitar su implementación, que el CongresoNacional aprobó y el Poder Ejecutivo promulgó, laLey 340-06 y su modificación, la Ley No. 449-06.
Son estas leyes las que han servido de marcopara la puesta en marcha del registro único deproveedores de bienes, servicios, obras y conce-siones, con lo que se evita que cada institucióntenga un registro particular, facilitando registrar-se en un solo lugar y participar en los procesosde contratación que realizan todas las institucio-nes del Gobierno Dominicano. Asimismo, crea laDirección General de Contratación Pública, órga-no rector del sistema, con capacidad para regu-lar y fungir como instancia de segundo gradopara el conocimiento de los reclamos.
La entrada en vigencia del DR-CAFTA ha con-sagrado el derecho y acceso al sistema de impug-nación de los procesos en todas sus etapas, hapromovido la agilización de la puesta en marchadel portal www.comprasdominicana.gov.do, a tra-vés del cual los proveedores y toda la ciudadaníapueden dar seguimiento a los procesos, conocerlos resultados de las impugnaciones o cualquierinformación relacionada.
¿Qué oportunidades representa paraRepública Dominicana el mercado decompras públicas de Estados Unidos?El mercado de la contratación pública de losEstados Unidos es muy restringido, ya que estáregulado por una normativa denominada “CompreAmericano” (Buy American Act) que dispone pre-ferencia de precios a favor de los bienes produci-dos en el territorio estadounidense o en paísescon los que se ha suscrito algún tratado de librecomercio. Por esa razón el DR-CAFTA le permite ala República Dominicana, ingresar a un mercadoprivilegiado que en el año 2007 movió alrededorde 462 mil millones de dólares, en el que sólo com-piten los proveedores norteamericanos y los deaquellos países con los que Estados Unidos hasuscrito tratados de libre comercio.
En adición, los proveedores dominicanos tie-nen la oportunidad de participar en los procesosde contratación, en 24 de los Estados que compo-nen los Estados Unidos de Norteamérica, incluyen-do Puerto Rico, Texas, Nueva York, Florida,Connecticut y Washington D.C., los cuales concen-tran la mayor cantidad de compras y adquierentodo tipo de bienes y servicios, entre ellos, montosque pudieran resultar atractivos para el empresa-riado dominicano.
Lo importante es que las medianas empresas,estén atentas a los avisos de licitación publicadosen los portales que las instituciones del GobiernoFederal y los Estados utilizan para esos fines,tales como: www.fedbizopps.gov y www.gsa.gov,ya que salvo excepciones puntuales, el DR-CAFTAotorga a los proveedores de la República Domi-nicana el mismo tratamiento que a sus proveedo-res norteamericanos y centroamericanos en eseimportante mercado.
PARA CONSULTAS:[email protected]
RedacciónAriel GautreauxRuth de los Santos
Edición:Cornelia TorresYahaira SosaManuel Rodríguez
Coordinación:Pablo EspinalLeidylin ContrerasKatrina NautKarina Alcántara
Diseño:Pedro Escaño
CRÉD
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En la actualidad, los gobiernos son gran-des adquirientes de mercancías y servi-cios de diferente variedad, incluyendo
los servicios de construcción y administración,por lo que se ha estimado que una parte con-siderable del PIB corresponde a las adquisi-ciones públicas de los países en desarrollo yen menor grado de los desarrollados.
En ese sentido, se han configurado esfuer-zos tanto a nivel multilateral como bilateralpara procurar el acceso a estos mercados yestablecer reglas claras de sana competenciay transparencia.
En el ámbito multilateral de la OMC, exis-te un Acuerdo Plurilateral sobre ContrataciónPública que tiene vigencia sólo entre aquellosmiembros de la OMC que son signatarios delmismo. República Dominicana forma parte dela OMC, pero no del Acuerdo sobreContratación Pública, por lo cual, sus disposi-ciones no le son aplicables.
El DR-CAFTA contiene un Capítulo sobrecontratación pública, que supone para laRepública Dominicana el comienzo de unaserie de transformaciones en el ordenamientode los procesos y procedimientos de las com-pras y adquisiciones del Gobierno.
A raíz del capítulo IX del DR-CAFTA, se cre-aron diferentes normas internas que comple-mentan sus disposiciones, tales como elDecreto No. 63-06 sobre Compras y Contra-taciones de Bienes, Servicios, Obras y Conce-siones (“Decreto puente”), la Ley No. 340-06sobre Compras y Contrataciones de Bienes,Servicios, Obras y Concesiones y su Regla-mento, que crea la Dirección General deContrataciones Públicas, órgano rector de lascontrataciones en el país, además de la LeyNo. 449-06 que modifica la anterior.
En el ámbito del DR-CAFTA están las con-trataciones de bienes, servicios o una combi-nación de estos, hechas a través de cualquiermedio contractual, listadas y sujetas a las con-diciones estipuladas en el Tratado, llevadas acabo por una entidad contratante y que noestén excluidas.
Para que una contratación se considerecubierta por el Capítulo IX, debe alcanzar ciertomonto, expresado en umbrales mínimos queactualmente son de 117 millones 100 mil dóla-res para las mercancías y servicios y de 8 millo-
nes de dólares para las construcciones. Estosmontos son ajustados cada dos años.
A las entidades contratantes se les prohí-be preparar, diseñar, estructurar o dividir uncontrato de compra que no esté conforme alas obligaciones establecidas en el Acuerdo.
Además, el país debe otorgar a los provee-dores, mercancías y servicios de los demáspaíses Partes, el mismo trato que a los nacio-nales.
Para asegurar la transparencia y compe-tencia, se dispone la obligación de publicartoda reglamentación relacionada a la contra-tación pública y publicar las ofertas de contra-taciones futuras, estableciéndose un plazomínimo de 40 días entre la publicación de con-tratación futura y la fecha límite para presen-tar las ofertas.
Las entidades contratantes deberán facili-tar los documentos de contratación a los ofe-rentes interesados y elaborar especificacionestécnicas que no creen obstáculos innecesariosal comercio. En cuanto a los procedimientos ensí, deben efectuarse en principio, bajo lamodalidad de licitación abierta y adjudicarselos contratos al proveedor que, completandolos requisitos y criterios contenidos en losdocumentos de contratación, presente la ofer-ta más ventajosa y cuente con la capacidadnecesaria para ejecutar el contrato.
Se permite la revisión de las impugnacio-nes de los proveedores que no estén satisfe-chos, garantizando la no discrecionalidad enlos procesos de licitación. z
COMPRAS GUBERNAMENTALESEN EL DR-CAFTA
CONSULTA A LALIC. RUTH DELOS SANTOSSUBDIRECTORA DE LADIRECCIÓN GENERAL DE POLÍTICA Y LEGISLACIÓN TRIBUTARIA DE LA SECRETARÍA DE ESTADO DE HACIENDA
