Cristalización de azúcar "Semillamiento completo", por Ingeniero Raúl Esparza . Tabares . . . . . . . . . . . . . . ... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3

Fórum -Azucarero Nacional ............... . 13

Sobre las condiciones geológicas de la formación de las lateritas en Cuba, por A. F. Adamovich y V. D. Chejovich . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . 17

Reseña sobre el Mapa Geológico de Cuba, por el Dr. A. A. Meyerhoff . . . . . . . . . . 30

Contestación a las críticas publicadas en "International Geology Review", por C. M. Judoley . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... . . . . . . . . . . 34

Aplicaciones de los semiconductores en la industria, por Tomás Gracia 37

Motores trifásicos de inducción 380 v, 50 hz conectados en redes de 380 v y 440v, 60 hz, por Eduardo Menéndez Cortiñas .. . .. .. .. . . .. .. .. .. .. .. . . .. .. . . . . . 47

Apuntes sobre combustión, por la Sección de Tecnología de la Empresa Consoli­dada del Petróleo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 52

Sistemas de calefacción para agua de alimentación de las centrales termoeléctri-cas, por Ingeniero A. Taylor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67

A nuestros lectores ...................... . 83

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A vanees de la ciencia y la técnica ........ .

Bibliografía .............................. .

Normalización (Gráficas) ................ .

Propuesta de la Norma Cubana - "Muestreo de minerales y concentrados a gra-. nel", por Jan M ichal C Se............ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91

VOL.II Septiembre Octubre 1964

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CADO EN CUBA A BASE DEL 50% DE BAGAZO DE CA"f!(A.

EL MAPA GEOLOGICO DE CUBA - ESCALA 1:1,000,000

CONTESTACION A LAS CRITICAS PUBLICADAS EN "INTERNATIONAL GEOLOGY REVIEW"

C. M. Judoley Dpto. Científico de Geología

Instituto Cubano de Recursos Minerales

En la revista "International Géology Review", vol. 6, no. 5, de mayo de este año, en las páginas 920-922, aparece un artículo, firmado por A. A. Meyerhoff, dedicado al análisis crítico del Mapa geológico de Cuba, ·publicado por el Instituto Cubano de Recursos Minerales en el año 1962. Dicho artículo está dividido en cuatro par­tes: Introducción. Origen de la Informa­ción. Exactitud geológica y otros comen­tarios.

Algunas de las obsei'vaciones realizadas por el autor son correctas; otras, son dis­cutibles y, por último, con algunas de ellas es imposible estar de acuerdo.

En primer lugar, comentaremos sobre el párrafo Origen de la información.

Consideramos que en un mapa geológico deben figurar sólo los nombres de los geó­logos que han trabajado para el mapa y no las compañías. Igualmente queremos expresar que los geólogos "rusos" no han pretendido en ningún momento adjudicar­se los méritos de los geólogos cubanos, nor­teamericanos y otros, que anteriormente han trabajado en Cuba.

Antes de confeccionar el Mapa geológico de Cuba, los geólogos cubanos y soviéticos que trabajaban en el Instituto Cubano de Recursos Minerales (J. Solsona, C. Judo­ley, Y. Mirolubov) visitaron y observaron los rasgos característicos de la geología de todo el territorio cubano. En la provincia de Pinar del Río fueron realizados trabajos geológicÓs detallados por N. Vologdin, que

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mostraron una estructura geológica com­pletamente diferente a la señalada por Mr. Hatten. En la región nordeste de la provin­cia de Oriente, trabajaron detalladamente A. Adamovich y V. Chejovich, cuyas la­bores contribuyeron, notablemente, al me­jor conocimiento de la geología de esa parte de Cuba.

C. Judoley, J. Solsona y Y. Mirolubov, revisaron en el campo cuidadosamente, to­dos los cortes típicos, contornos geológicos, contactos tectónicos e intrusivos y com­probaron otros datos y observaciones geo-

. lógicas, utilizados postériormente para la confección del mapa geológico. Especial­mente, los citados compañeros realizaron observaciones de campo en las provincias de Las Villas y Camagüey, comprobando la no existencia en esas regiones de los grandes corrimientos (charriage) supues­tos por C. H atten.

En cuanto al párrafo que se refiere a la exactitud geológica, queremos aclarar al­gunos aspectos:

a) Sobre la presencia del Paleozoico en Cuba, consideramos que esta era no está re­presentada en Cuba, porq_ue no hay fósi~ les que lo comprueben y porque conside­ramos que todas las rocas metamórficas, .son rocas jurásicas alteradas. Según reglas establecidas en la URSS, los autores del mapa deben expresar su opinión sobre las rocas cuya edad no está definida y reflejar esto en el mapa, por eso el macizo del

Escambray, Isla de Pinos, Este de Oriente, etc., aparecen señalados con J r2?. b) No estamos de acuerdo en que la For­mación San Cayetano, sea de edad Callo­viano - Bajociano, pues por .la fauna que contiene consideramos que el límite supe­rior de su edad es Bathoniano y no más joven. e) En el párrafo que dice: Spores from the evaporite -'red beds are pre-Aptian, post Paleozoic, and probably are Upper Tria­ssic- Middle Jurassic", existen contradic­ciones con un informe del Dr. Meyerhoff, Hatten y otros, (*) págs. 115-116; en el pá­rrafo Age, se dice, "The red shale, as stated previously, is considered to be Middle Ju­rassic in age from spore and polLen analy­sis by the American Museum of Natural History". Nosotros compartimos la opinióP.. del autor del artículo de la revista "Inter­national Geology Review", sobre la edad de esas capas en dicho informe y así lo seña­lamos en el mapa. d) Los mármoles de· Trinidad, están seña­lados como J 1-2? y no J 3 , como escribe el autor en su artículo, Mármoles análogos se encuentra en el este de la provincia de Oriente, por eso están señalados como J 1 -2? también. e) Próximamente publicaremos un nuevo mapa de Isla de Pinos, elaborado por geó­logos cubanos y soviéticos, en el cual el Dr. Meyerhoff podrá comprobar que su obser­vación sobre la dirección Norte-Sur de las rocas metamórficas no es acertada. f) En el mapa están indicadas las rocas del Jurásico Superior con la sigla J3 (Ca­lloviano ?, Oxfordiano, Kimmeridgiano y Tithoniano) que se refiere principalmente a las calizas que están desarrolladas al oeste de Viñales.

Al este de Viñales, sobre todo en la re­gión al norte de San Cristóbal, se encuen­tran calizas de edad Tithoniano (más o menos equivalente al Portlandiano de Imlay), cuyas equivalentes en edad están presentes en el norte de Las Villas y Ca­magüey. Según la opinión del autor del artículo, las rocas precretácicas deben di­vidirse en tres unidades: a) San Cayetano b) Diapiros salinos y e) Rocas metamórfi-

( •) Geology of Central Cuba, Eastern Las Villas and Western Camagüey provlnces, Cuba, 1958. Manuscdto. Archivo I.C.R.M.

cas; después menciona la caliza Viñales (Portlandiano-Cenomaniano, según la opinión del autor), pero nosotros queremos preguntarle, al Dr. Meyerhoff ¿dónde co­loca las calizas Oxfordianas- Kimmerid­gianas, con abundantes ammonites de esas edades muy bien representadas al oeste de Viñales, en Mogote Blanco, cerca de la carretera de Pinar del Río - Matahambre?. Allí se encuentran ammonites aun hasta los 100 m de la base de las calizas. Esta fauna de ammonites se encuentra amplia­mente distribuida en diversas regiones de Pinar del Río, probando fehacientemente la abundante presencia de rocas oxfordia­nas en Cuba.

Un hecho que sería conveniente que el Dr. Meyerhoff explicara es: ¿qué él en­tiende por Formación Viñales, dónde está el afloramiento típico y qué litologías comprende?

Otro aspecto interesante es la opinión del autor de sobre la presencia del Neo­comi.ano en Cuba, ¿qué faunas comprende?, ¿cuáles depósitos exactamente dotados puede él citarnos?. Según la escuela eu­ropea, el Ne-ocomiano comprende Ber?:ia­siano- Valanginiano- Hauteriviano­Barremiano; quisiéramos saber la opinión del autor del artículo, si él considera esta división aplicable en Cuba. Pues según nuestra opinión, los depósitos del N eoco­miano no están comprobados en Cuba. g) Sobre la presencia de faunas del Jurá­sico Superior, Neocomiano y Aptiano en las rocas efusivas del Sur de Cuba Central, realmente no la conocemos. En el Informe del Dr. Meyerhoff, Hatten y otros, págs. 37, 1958, la primera lista de fauna corres­ponde a la formación Serrucho y dice: "is believed to indicate a probable Upper Albian age". Igualmente, en el informe de G. Pardo, de la Cuban Gulf Oil Co., tampo­co se reportan evidencias precisas sobre la edad Cretácico Inferior en el Sur de Cuba Central. Se puede solamente suponer, que las rocas efusivas, que se observan debajo de las calizas del Cenomaníano, pertenez­can al Cretácico Inferior. No hay ninguna prueba de la existencia de rocas efusivas del Crétácico Inferior en las provincias de Pinar del Río y Oriente, Pm· tanto, la opi-

. nión. emitida por el Dr .. Meyerhoff de que la banda de rocas volcánicas que se extien-

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de por 750. Km, desde Oriente a Pinar del Río, cuya edad él supone del Jurásico Su­perior~ Cretácico Inferior y base del Cre­tácico Medio, solamente puede considerarse así, como una suposición. Los trabajos de geólogos cubanos y soviéticos, no han reve­lado la presencia de fauna del Cretácico Inferior en las regiones al sur de Santa Clara. Además, ningún dato que poseemos, indica la presencia de fauna del 1 urásico Superior en las rocas efusivas.

Debemos expresar que tampoco estamos de acuerdo con la opinión -del Dr. Meyer~ hoff, con su división del Cretácico en tres partes: Inferior, Medio y Superior, pues ningún Congreso Internacional ha acepta­do tal división. También queremos indicar, que en el mapa el Cretácico se ha dividido en 2 partes: Inferior y Superior y que apa­recen bien marcados los sedimentos mari­nos del Crétacico Superior, como facies de carbonatos y elásticos, entre los volcáni­cos del Sur de Cuba. Nosotros creemos, sinceramente, que las diferencias entre la opinión del autor del artículo y la nuestra, se debe a la forma en que él y nosotros dividimos el Cretácico.

h) Sobre la presencia del "flysch" y "wild­fl.ysch'' sinorogénicos, del Paleoceno -Eoceno Medio, nosotros diremos que, no quisimos señalar estas variedades litológi­cas, así como muchas otras en el mapa en escala 1: 1'000,000, ya que nos parecía poco conveniente.

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i) Sobre la observación que dice "there is no attempt to distinguish between ~everse, normal, and strike-slip .faults on the map", consideramos, que el territorio de Cuba no

· está aún tan detalladamente estudiado, como para realizar tales divisiones.

j) La observación de Meyerhoff, sobre el hecho de que en el mapa no están diferen­ciadas las rocas ígneas por su edad, en efecto, así es; pero en aquel momento la edad de dichas rocas no estaba muy clara para nosotros y por ello preferimos no emi­tir una opinión definitiva al respecto. Sin embargo, en e1 nuevo mapa de Yacimien­tos Minerales, más moderno, en escala 1:500,000, hemos hecho una tentativa de dividir más detalladamente esas y otras rocas.

Como resumen, queremos expresar, que las observaciones hechas por el Dr. Meyfr!­hoff son bastante objetivas y sin duda contribuirán a la mejor interpretación del mapa geológico de Cuba.

Agradecemos al autor de la crítica sus útiles observaciones y consideramos que todo ello redundará, sin duda, en un me­jor y mayor intercambio científico inter­nacional.

Por último, estimamos que alguna de las diferencias de opinión entre el Dr. Meyer­hoff y nosotros, se deben especialmente a que ambos pertenecemos a diferentes es­cuelas geológicas.