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Mi preciosa y amada hija.Como lo dice tu nombre “Jehová obró con gracia”Llena eres de gracia, El Señor es contigo.En este día, quiero bendecirte, por el Dios de tu padre, el cual te ayudará, por el Dios Omnipotente, el cual te bendecirá con bendiciones de los cielos de arriba, con bendiciones del abismo que está abajo, con bendiciones de los pechos y del vientre.Con la estima que sobrepasa las piedras preciosas, confianza, credibilidad, integridad, rectitud.Declaro sobreabundancia de bienes sobre ti.Declaro que eres una mujer de bien y no de mal todos los días de tu vida.Yo declaro tu buena voluntad sobre las cosas que hagas y la bendición de toda obra de tus manos. Yo declaro honor sobre ti y tu casa.Proclamo que la fuerza y el honor sean tu vestidura.Desato sabiduría sobre ti.Te proclamo bienaventurada y llena de gracia y verdad.Declaro temor de Jehová sobre ti y tus hijos.Desato sanidad, medicina y salud de Dios sobre ti por siempre.Declaro sobre ti largura de días.Espíritu de verdad, de revelación, de conocimiento sean también sobre ti. Te declaro una vida dulce y agradable, llena de honra.Declaro la rectitud de tus caminos.Declaro tu sujeción a tus padres, maestros, líderes y en su tiempo a tu esposo.Declaro sobre ti maternidad sana, hijos sanos, enseñables por el señor.Declaro obediencia, fidelidad, santidad, fe sobre ti.Declaro orden sobre tu vida y la autoridad del nombre de Jesús sobre ti.Seas cubierta con un manto de amor, gracia, favor y misericordia.Sean esparcidos tus enemigos y puestos en evidencia los que contra ti conspiren. Lo declaro en el poderoso nombre de Jesús.

Amén AnaníNo hay nada más grande y más poderoso que una mujer llena del Espíritu Santo, alineada con la verdad de Dios y decidida a hacer lo que tiene que hacer. Una mujer restaurada, restaura sus hijos, su familia, su esposo, sus negocios.Una mujer restaurada y agradecida con el Señor, no desmaya hasta que se cumpla el propósito de Dios en su vida.Una mujer restaurada y decidida es la peor amenaza del diablo porque está establecido bíblicamente su enemistad, así como su señorío sobre él. Levántate y resplandece no temas ni desmayes, tu Dios, el que te esfuerza, no te dejará ni te desamparará. Yo, tu padre, declaro esta bendición sobre ti mi pequeña y amada Ananí.

Luis Cabrera

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ANANI

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