Cmo he vivido la educacin en Colombia?

Equipos Docentes de Colombia

Esas historias muestran sin reparos el tedio de las

clases y las enseanzas inolvidables de algunos

maestros, el vaco del tiempo perdido para otros

aprendizajes deseados y necesarios, el

reconocimiento de los especiales recursos

educativos con que algunos contaron y las tristezas

y sufrimientos de otros que no les permitieron

recoger los buenos momentos escolares,

escuchamos los reclamos, las nostalgias, los

testimonios, los reconocimientos, las huellas claras

y los rastros escondidos, que nos ensean y nos

presentan el camino de nuestra tarea.

Relatos de

nios y

nias en la

escuela

La educacin como la he vivido ha sido un continuo devenir de dificultades y logros,desde la infancia la educacin ha sido para m una herramienta pero cuando pasa eltiempo, deje de ver esa herramienta para verla como instrumento de sumisin, merefiero a la educacin como institucin no la del aprendizaje libre en la cual yo decidaque quiero aprender, fue un proceso de nuevos descubrimientos y atrasos en lapoca de colegio, la universidad brinda nuevos procesos y comenc a apreciar laeducacin tanto que descubr un nuevo camino que antes no haba visto, pero esecamino se estaba nublando por un nuevo de concepto, desaprender, tengo queolvidar todo lo aprendido durante el colegio y lo que estaba aprendiendo en launiversidad? Ms adelante entend este concepto al iniciar prcticas, entoncesfragmentar el conocimiento y encontrar los puntos dbiles y as fortalecer y seguiraprendiendo por que al desfragmentar lo aprendido, siempre se encuentra con nuevospensamientos e ideas, es un proceso por el cual considero que estoy iniciando.

Relatos de maestros en situacin de

conflicto

El profesor que ensea sonidos de paz

El profesor Edinson Fernando Lpez dibuja con su dedo ndice, en el aire, lo que sus ojos verdes vieron en un dibujo infantil varios aos atrs:tres lneas curvas que anhelaban parecerse a unas montaas, algo que se semejaba con mucho acierto a un helicptero, rayitas en picada queno eran gotas de lluvia sino balas y varios trazos ms cuyas lneas resultaban inconfundibles: unos rifles de asalto.

Era un dibujo triste, pero extraamente bello. Lo haba plasmado en cartulina una de sus alumnas como resultado de un ejercicio simple: losnios de la clase deban recrear lo que para ellos era Toribo. Y vea usted que para todos, en ese saln, Toribo era eso: un puebloacostumbrado a sentir las balas que descienden a cada rato desde las montaas y a veces, tambin, desde el cielo.

Para el resto de Colombia es casi lo mismo: una poblacin del nororiente del Cauca que ha sido crucificada en las secciones de orden pblicode los peridicos con la fama triste de ser el municipio del pas ms atacado por la guerrilla. Las cifras, como los nios, no mienten. Desde1979, grupos de izquierda alzados en armas, especialmente las Farc, han realizado unos 600 hostigamientos y se ha tomado el pueblo en 100oportunidades. As que la vida de los toribianos ha consistido, durante los ltimos 30 aos, en remendar su pueblo con paciencia de costurera,una y otra, y otra vez.

Lo sabe de sobra el profesor Edinson, cuya imagen de piel blanca y ojos verdes no deja claro, una vez lo conoces, que se trata de un hombreque naci entre estas montaas, hace 37 aos, en el resguardo de San Francisco, conformado como el 98% de los habitantes de Toribo porindgenas nasa.

No es que el dibujo de su alumna lo haya sorprendido, aclara. Es que, en vez de armas, l hubiese preferido que los chicos dibujaranclarinetes, flautas traversas, guitarras, trombones o cualquiera de los instrumentos a los que a diario los enfrenta en la Escuela de Msica deToribo.

A esa escuela lleg diez aos atrs, convocado por el Ministerio de Cultura y un ambicioso programa que an existe y se conoce como PlanNacional de Msica para la Convivencia. Y en ella est sentado justo ahora, en una oficina ordenada y pulcra, preparando sus clases al pie deun computador.

La escuela, que solo cuenta al ao con un presupuesto de 22 millones de pesos, tiene su sede en una casa estrecha, de dos plantas, ubicadajusto frente a la pequea plaza del pueblo y a pocos pasos de la Iglesia San Juan Bautista. En el primer piso donde estamos ahora funcionala Casa de la Cultura, hay varios salones desnudos y uno, oscuro, especialmente abarrotado de instrumentos, guardados con cuidado enestuches negros; la segunda planta es una seguidilla de oficinas pblicas, desde la Umata hasta la Secretara de Salud.

Es una maana de viernes y, mientras el profe conversa, afuera los beneficiarios del programa Familias en Accin cobran con celeridad susubsidio pues el humor del cielo ha empezado a descomponerse y amenaza con una de esas lluvias de llanto incontenible. Usted y elfotgrafo dice el profe vinieron en buena poca. Llevamos mes y medio de una calma hasta sospechosa, muchos creen que tanto silencio,tanta ausencia de bala, se debe a que de pronto la guerrilla se est preparando para hacer un ataque peor.

Es una sospecha bsica de la supervivencia en Toribo. Una seal, al parecer, igual de inequvoca al hecho de que pase un da entero sin ver unsolo carro subiendo hacia el pueblo. Algo malo va a ocurrir, se cree enseguida. Es que los 32 mil toribianos, pese a tantos aos de guerra,tantos das de sangre y terror, no han aprendido a dopar el sentimiento del miedo. Cree uno, ms bien, que lo han domesticado.

El simple sonido seco de un tambor logra alterar los nervios, hacer que la gente se tire al suelo temiendo el inicio de una nueva emboscada.Fue lo que sucedi el pasado Jueves Santo, minutos antes de una procesin nocturna. Los unos decoraban santos, las seoras ponan flores.Alguien hizo sonar el tambor de una banda, invitada desde Jambal, y la escena que sigui a continuacin qued grabada en las retinas deeste maestro obstinado: gente corriendo en todas las direcciones y personas acurrucadas buscando refugio.

Solo vinieron a salir de la duda cuando se escuch el sonido dulce de una lira. No era, pues, el inicio de uno de esos conciertos de balas queen los das ms pedregosos del conflicto se prolonga hasta dos das. Eran sonidos de paz. El pueblo respir aliviado

Y eso ocurre pocas veces. No fue as, por ejemplo, el 11 de julio de 2011, cuando un bus escalera, de esos que conocemos como chivas elmedio de transporte ms comn en la zona, despus de las motos vol por los aires al pie de las trincheras ubicadas cerca de la estacin dePolica.

Fue un sbado, da de mercado. Al disiparse la humareda, los toribianos supieron que cien de ellos haban quedado heridos. El cerrajero, ungallero y el carnicero haban muerto. Un sargento de la polica acab tan destrozado que de l solo hallaron una pierna. Se contaban en msde un centenar las casas que quedaron destruidas, como dispuestas para una autopsia.

Y la escuela? La escuela del profe Edinson? Varias partes de la chiva que salieron disparadas tras la detonacin fueron a caer en un salntrasero, cuyo techo no resisti y se fue al suelo. Por fortuna, no fue una maana de clases. Los instrumentos resultaron ilesos. Fue como si elcriminal accionar de las Farc se hubiera permitido la debilidad de no daar del todo el lugar donde el maestro les ensea a sus muchachossonidos de la vida. Sonidos de la paz.

HALLAZGOS ENCONTRADOS EN LOS RELATOS DE LOS ESTUDIANTES.

Los Valores que se aprenden En el aspecto pedaggico Aporte al Proyecto de Vida

Aprender a respetar, a conocernos como

personas y a proteger los derechos como

estudiantes.

Tolerancia, Honestidad, responsabilidad,

aprender a convivir, la igualdad.

El sentido social de los actos, La tica y el

cuidado de los otros.

El aporte al desarrollo de la Vida Espiritual,

cultural y en valores. El entablar una sana

convivencia y reflexionar sobre la vida.

Aprender conocimientos cientficos. Realizar

evaluaciones, tareas, y saber utilizar

diferentes materiales.

El conocimiento como seres humano, el

aprender nuevas cosas y mantener una

buena comunicacin.

Aprender cada da algo nuevo, aprender del

error para ser mejores personas.

Identificar los diferentes talentos para ejercer

profesiones.

Orientar el proyecto de vida para ser mejor

persona.

Ser mejores personas, el cuidado del medio

ambiente, tener un futuro exitoso y bueno.

El cuidado y desarrollo de la vida cotidiana y

espiritual. La formacin para el futuro y

poder hacer alguien en la vida.

Y DE LOS RELATOS DE LOS MAESTROS..

La escuela de hoy apoya los procesos de proyecto de vida como eje transversal en todas las reas,medio ambiente, movilidad, comprensin lectora, riesgos, entre otros, que junto con la cognicinhacen del estudiante un ser integral.

Cada estudiante es impactado por cada uno de estos saberes y aquellos que poseen algunadificultad son remitidos a centros especializados que le brindan el apoyo pertinente.

Sin embargo, se hace imprescindible el apoyo permanente de los padres de familia y/o acudiente. La tarea de formar ciudadanos para el mundo de hoy del maana. Fortalecer la cadena de valores

que caracterizan a una persona y comunidad. La conciencia del mundo que se vive hoy parapropender por un mejor maana en el mundo, la tierra y el entorno que nos rodea.

La escuela es la institucin fundamental de los procesos educativos, all se planifican y desarrollan,a veces se evalan las actividades para potenciar el desarrollo del ser humano, individual y social.Por lo tanto, los procesos son parte del desarrollo personal y social.