Últimamente se ha hecho énfasis en el tema de la exclusión social que re�ere al rechazo de algunas personas, ya sea por diferencias sociales, culturales, físicas, económicas, etc. Para evitar que esta proble-mática crezca debemos comprender que las diferen-cias forman partes de una diversidad social y que esta es la que permite el éxito de la inclusión dentro de una sociedad. Por lo anterior es necesario conocer el signi�cado de diversidad y su impacto dentro del ámbito educativo ya que no todos los estudiantes son iguales ni poseen las mismas capacidades, por ello el proceso de ense-ñanza-aprendizaje debe estar basado en el pluralis-mo democrático, la tolerancia y la aceptación de la diferencia, a través del cual se intenta promover el desarrollo y la madurez personal de todos los sujetos.

“Un tipo de educación fundamentada en los dere-chos humanos, en el máximo respeto hacia la dife-rencia, en la superación de barreras y en la apertura al mundialismo como respuesta al tipo de hombre y sociedad necesitada hoy en día. Por consiguiente, estamos planteando abandonar el anquilosado modelo asociado a la discapacidad y centrado en el dé�cit, cuyas prácticas educativas son gerenciales y burocráticas, para entrar en una ideología liberal, defensora de procesos de redistribución social y humana” (Sáez, 1997, 31).

INTRODUCCIÓN ¿QUÉ ES DIVERSIDAD?

¿QUÉ ES DIVERSIDAD?

“DIVERSIDAD Y EDUCACIÓN INCLUSIVA:UN DESAFÍO PARA LOS SISTEMAS

EDUCATIVOS ACTUALES”

La diversidad es una condición inherente al ser humano. Se sustenta en el respeto a las diferencias individuales y las tiene en cuenta a la hora de apren-der. Por tanto, en el proceso educativo encontrare-mos que los estudiantes pueden presentar diversi-dad de ideas, experiencias y actitudes previas, debido a que cada persona ante un nuevo conteni-do tiene unos registros previos diferentes; diversi-dad de estilos de aprendizaje, ocasionada por las diferentes maneras de aprender, ya se re�era a los estilos de pensamiento (inducción, deducción, pen-samiento crítico), a la estrategias de aprendizaje, a las relaciones de comunicación establecidas (trabajo cooperativo, individual) y a los procedimientos lingüísticos que mejor dominen; diversidad de ritmos, cada persona necesita un tiempo para asimi-lar el conocimiento; diversidad de intereses, motiva-ciones y expectativas, en cuanto a los contenidos y a los métodos; y diversidad de capacidades y de ritmos de desarrollo (Arnaiz, y Haro de, 1997).

la integración intercultural supone el respeto a la diversidad que implica pertenecer a una cultura minoritaria y el reconocimiento de los principios de igualdad de derechos y de deberes de los miembros de distintas culturas que conviven en una sociedad plural, en el polo opuesto se sitúa la asimilación, práctica bastante habitual que niega los rasgos propios de la cultura minoritaria para ser absorbida por la mayoritaria; la segregación, caracterizada por la exclusión o aislamiento social de los grupos mino-ritarios; y el racismo que implica la negación de toda forma de contacto o experiencia cultural entre grupos de distintas culturas. hecho que tiene una repercusión inmediata en el ambiente educativo. La pertenencia a una clase social determinada va a

tener una gran in�uencia para sus miembros, el modelo del dé�cit cultural aparece ligado a la desventaja social y de�ende que los alumnos en esta situación proceden de familias o de grupos sociales que viven en situación de discriminación económica o de marginación social; por tanto, desde su nacimiento expuestos a normas, lenguaje, valores y expectativas que determinan situaciones de desventaja con respecto a sus iguales y falta de estimulación y de experiencias.

La diversidad educativa es un proceso en el que toda la comunidad educativa tiene que estar comprometida (profesores, padres, alumnos, autoridades), puesto que no implica desarrollar procesos de enseñanza apren-dizaje mecanicistas, técnicos sino tener en cuenta cuestiones sociales, la idiosincrasia de cada grupo e incluso la propia biografía, circunstancias y características de los alumnos en desventaja dentro del grupo. Consiste en valorar la diferencia por cuanto la diversidad no solamente se encuentra entre los hombres de diferentes culturas, sino que las diferencias son de ámbito personal, nacional, regional y local.

Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, deldiferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social (Amorós y Pérez, 1993). Para desarrollar este plan-teamiento pedagógico de aceptación y respeto a la

diferencia, el centro en su totalidad debe plantearse y de�nir sus convicciones sociales, culturales y pedagógicas, es decir, debe explicitar cuáles son sus valores y metas, para elaborar una propuesta de actuación coherente con lo expresado.No se educa en la diversidad cuando seguimos insistiendo en que todos nuestros alumnos apren-den de la misma manera.

Stainback y Stainback (1999) de�nen una escuela inclusiva como aquella que educa a todos los estu-diantes dentro de un único sistema educativo, proporcionándoles programas educativos apropia-dos que sean estimulantes y adecuados a sus capa-cidades y necesidades, además de cualquier apoyo y ayuda que tanto ellos como sus profesores puedan necesitar para tener éxito. Pero una escuela inclusiva va más allá de todo esto, ya que es un lugar al que todos pertenecen, donde todos son acepta-dos y son apoyados por sus compañeros y por otros miembros de la comunidad escolar para que tengan sus necesidades educativas satisfechas.

Desarrollar sistemas de apoyo que colaboren con las escuelas y docentes en la atención a la diversi-dad del alumnado.

Desarrollar políticas intersectoriales que interven-gan sobre los factores externos que generan exclu-sión y marginación, como la pobreza, la segmenta-ción social y cultural, las desigualdades en las condi-ciones socioeconómicas y el capital cultural en los hogares, o la discriminación histórica de ciertos grupos sociales.

Cerrar las brechas existentes pasa necesariamente por aumentar la inversión pública en educación y en políticas sociales, estimando el costo de incluir a todos los estudiantes actualmente excluidos, llevando a cabo pactos sociales o acuerdos �scales e incrementando la carga tributaria, que en México es muy baja.

Eliminar las diferentes formas de discriminación para hacer efectivo el derecho a la educación.

Diseñar situaciones de aprendizaje accesibles a todos, considerando los diferentes niveles, ritmos y estilos de aprendizaje, los múltiples intereses inicia-

les y motivaciones de los estudiantes, la variedad de códigos de comunicación y las visiones y concep-ciones de las culturas de origen.

Lo anterior se re�ere a la atención de la diversidad como “a un proceso amplio y dinámico de construc-ción y reconstrucción de conocimiento que surge a partir de la interacción entre personas distintas en cuanto a valores, ideas, percepciones e intereses, capacidades, estilos cognitivos y de aprendizaje,etc., que favorece la construcción consciente y autónoma, de formas personales de identidad y pensa-miento, y que ofrece estrategias y procedimientos educativos (enseñanza-aprendizaje) diversi�cados y �exibles con la doble �nalidad de dar respuesta a una realidad heterogénea y de contribuir a la mejora y el enriquecimiento de las condiciones y relaciones sociales y culturales” (Jiménez y Vilà, 1999, 38).

Es importante la práctica de educación inclusiva en las escuelas, ya que permite la atención integral a los niños y niñas, cum-pliendo los propósitos de las políticas de equidad, calidad edu-cativa y ampliación de cobertura. Las escuelas deben ser y son para todos, que ningún alumno, sean cuales fueren sus caracte-rísticas, debe ser excluido de la escuela ordinaria.

Arnaiz, P. (2005). Sobre la atencion a la diverisdad. Costa Rica: EUNET.Echeita, g. (2006). educación para la inclusión o educación sin exclusiones. MADRID: NARCEA.Marchesi, Á. (2014). Avances y desafíos de la educación inclusiva en Iberoamérica. Madrid: OEI.Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesoradofrente a la integracion de niños/as con necesida-des educativas especiales al aula común. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 45.

INTEGRANTES:Mirian Sofía Noguera Mata

Akari Sauno EscutiaJaneth Alejandra González García

Últimamente se ha hecho énfasis en el tema de la exclusión social que re�ere al rechazo de algunas personas, ya sea por diferencias sociales, culturales, físicas, económicas, etc. Para evitar que esta proble-mática crezca debemos comprender que las diferen-cias forman partes de una diversidad social y que esta es la que permite el éxito de la inclusión dentro de una sociedad. Por lo anterior es necesario conocer el signi�cado de diversidad y su impacto dentro del ámbito educativo ya que no todos los estudiantes son iguales ni poseen las mismas capacidades, por ello el proceso de ense-ñanza-aprendizaje debe estar basado en el pluralis-mo democrático, la tolerancia y la aceptación de la diferencia, a través del cual se intenta promover el desarrollo y la madurez personal de todos los sujetos.

“Un tipo de educación fundamentada en los dere-chos humanos, en el máximo respeto hacia la dife-rencia, en la superación de barreras y en la apertura al mundialismo como respuesta al tipo de hombre y sociedad necesitada hoy en día. Por consiguiente, estamos planteando abandonar el anquilosado modelo asociado a la discapacidad y centrado en el dé�cit, cuyas prácticas educativas son gerenciales y burocráticas, para entrar en una ideología liberal, defensora de procesos de redistribución social y humana” (Sáez, 1997, 31).

CULTURAL

SOCIAL

EXISTEN DIVERSIDADES COMO…

La diversidad es una condición inherente al ser humano. Se sustenta en el respeto a las diferencias individuales y las tiene en cuenta a la hora de apren-der. Por tanto, en el proceso educativo encontrare-mos que los estudiantes pueden presentar diversi-dad de ideas, experiencias y actitudes previas, debido a que cada persona ante un nuevo conteni-do tiene unos registros previos diferentes; diversi-dad de estilos de aprendizaje, ocasionada por las diferentes maneras de aprender, ya se re�era a los estilos de pensamiento (inducción, deducción, pen-samiento crítico), a la estrategias de aprendizaje, a las relaciones de comunicación establecidas (trabajo cooperativo, individual) y a los procedimientos lingüísticos que mejor dominen; diversidad de ritmos, cada persona necesita un tiempo para asimi-lar el conocimiento; diversidad de intereses, motiva-ciones y expectativas, en cuanto a los contenidos y a los métodos; y diversidad de capacidades y de ritmos de desarrollo (Arnaiz, y Haro de, 1997).

la integración intercultural supone el respeto a la diversidad que implica pertenecer a una cultura minoritaria y el reconocimiento de los principios de igualdad de derechos y de deberes de los miembros de distintas culturas que conviven en una sociedad plural, en el polo opuesto se sitúa la asimilación, práctica bastante habitual que niega los rasgos propios de la cultura minoritaria para ser absorbida por la mayoritaria; la segregación, caracterizada por la exclusión o aislamiento social de los grupos mino-ritarios; y el racismo que implica la negación de toda forma de contacto o experiencia cultural entre grupos de distintas culturas. hecho que tiene una repercusión inmediata en el ambiente educativo. La pertenencia a una clase social determinada va a

tener una gran in�uencia para sus miembros, el modelo del dé�cit cultural aparece ligado a la desventaja social y de�ende que los alumnos en esta situación proceden de familias o de grupos sociales que viven en situación de discriminación económica o de marginación social; por tanto, desde su nacimiento expuestos a normas, lenguaje, valores y expectativas que determinan situaciones de desventaja con respecto a sus iguales y falta de estimulación y de experiencias.

La diversidad educativa es un proceso en el que toda la comunidad educativa tiene que estar comprometida (profesores, padres, alumnos, autoridades), puesto que no implica desarrollar procesos de enseñanza apren-dizaje mecanicistas, técnicos sino tener en cuenta cuestiones sociales, la idiosincrasia de cada grupo e incluso la propia biografía, circunstancias y características de los alumnos en desventaja dentro del grupo. Consiste en valorar la diferencia por cuanto la diversidad no solamente se encuentra entre los hombres de diferentes culturas, sino que las diferencias son de ámbito personal, nacional, regional y local.

Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, deldiferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social (Amorós y Pérez, 1993). Para desarrollar este plan-teamiento pedagógico de aceptación y respeto a la

diferencia, el centro en su totalidad debe plantearse y de�nir sus convicciones sociales, culturales y pedagógicas, es decir, debe explicitar cuáles son sus valores y metas, para elaborar una propuesta de actuación coherente con lo expresado.No se educa en la diversidad cuando seguimos insistiendo en que todos nuestros alumnos apren-den de la misma manera.

Stainback y Stainback (1999) de�nen una escuela inclusiva como aquella que educa a todos los estu-diantes dentro de un único sistema educativo, proporcionándoles programas educativos apropia-dos que sean estimulantes y adecuados a sus capa-cidades y necesidades, además de cualquier apoyo y ayuda que tanto ellos como sus profesores puedan necesitar para tener éxito. Pero una escuela inclusiva va más allá de todo esto, ya que es un lugar al que todos pertenecen, donde todos son acepta-dos y son apoyados por sus compañeros y por otros miembros de la comunidad escolar para que tengan sus necesidades educativas satisfechas.

Desarrollar sistemas de apoyo que colaboren con las escuelas y docentes en la atención a la diversi-dad del alumnado.

Desarrollar políticas intersectoriales que interven-gan sobre los factores externos que generan exclu-sión y marginación, como la pobreza, la segmenta-ción social y cultural, las desigualdades en las condi-ciones socioeconómicas y el capital cultural en los hogares, o la discriminación histórica de ciertos grupos sociales.

Cerrar las brechas existentes pasa necesariamente por aumentar la inversión pública en educación y en políticas sociales, estimando el costo de incluir a todos los estudiantes actualmente excluidos, llevando a cabo pactos sociales o acuerdos �scales e incrementando la carga tributaria, que en México es muy baja.

Eliminar las diferentes formas de discriminación para hacer efectivo el derecho a la educación.

Diseñar situaciones de aprendizaje accesibles a todos, considerando los diferentes niveles, ritmos y estilos de aprendizaje, los múltiples intereses inicia-

les y motivaciones de los estudiantes, la variedad de códigos de comunicación y las visiones y concep-ciones de las culturas de origen.

Lo anterior se re�ere a la atención de la diversidad como “a un proceso amplio y dinámico de construc-ción y reconstrucción de conocimiento que surge a partir de la interacción entre personas distintas en cuanto a valores, ideas, percepciones e intereses, capacidades, estilos cognitivos y de aprendizaje,etc., que favorece la construcción consciente y autónoma, de formas personales de identidad y pensa-miento, y que ofrece estrategias y procedimientos educativos (enseñanza-aprendizaje) diversi�cados y �exibles con la doble �nalidad de dar respuesta a una realidad heterogénea y de contribuir a la mejora y el enriquecimiento de las condiciones y relaciones sociales y culturales” (Jiménez y Vilà, 1999, 38).

Es importante la práctica de educación inclusiva en las escuelas, ya que permite la atención integral a los niños y niñas, cum-pliendo los propósitos de las políticas de equidad, calidad edu-cativa y ampliación de cobertura. Las escuelas deben ser y son para todos, que ningún alumno, sean cuales fueren sus caracte-rísticas, debe ser excluido de la escuela ordinaria.

Arnaiz, P. (2005). Sobre la atencion a la diverisdad. Costa Rica: EUNET.Echeita, g. (2006). educación para la inclusión o educación sin exclusiones. MADRID: NARCEA.Marchesi, Á. (2014). Avances y desafíos de la educación inclusiva en Iberoamérica. Madrid: OEI.Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesoradofrente a la integracion de niños/as con necesida-des educativas especiales al aula común. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 45.

INTEGRANTES:Mirian Sofía Noguera Mata

Akari Sauno EscutiaJaneth Alejandra González García

Últimamente se ha hecho énfasis en el tema de la exclusión social que re�ere al rechazo de algunas personas, ya sea por diferencias sociales, culturales, físicas, económicas, etc. Para evitar que esta proble-mática crezca debemos comprender que las diferen-cias forman partes de una diversidad social y que esta es la que permite el éxito de la inclusión dentro de una sociedad. Por lo anterior es necesario conocer el signi�cado de diversidad y su impacto dentro del ámbito educativo ya que no todos los estudiantes son iguales ni poseen las mismas capacidades, por ello el proceso de ense-ñanza-aprendizaje debe estar basado en el pluralis-mo democrático, la tolerancia y la aceptación de la diferencia, a través del cual se intenta promover el desarrollo y la madurez personal de todos los sujetos.

“Un tipo de educación fundamentada en los dere-chos humanos, en el máximo respeto hacia la dife-rencia, en la superación de barreras y en la apertura al mundialismo como respuesta al tipo de hombre y sociedad necesitada hoy en día. Por consiguiente, estamos planteando abandonar el anquilosado modelo asociado a la discapacidad y centrado en el dé�cit, cuyas prácticas educativas son gerenciales y burocráticas, para entrar en una ideología liberal, defensora de procesos de redistribución social y humana” (Sáez, 1997, 31).

ESCOLAR

La diversidad es una condición inherente al ser humano. Se sustenta en el respeto a las diferencias individuales y las tiene en cuenta a la hora de apren-der. Por tanto, en el proceso educativo encontrare-mos que los estudiantes pueden presentar diversi-dad de ideas, experiencias y actitudes previas, debido a que cada persona ante un nuevo conteni-do tiene unos registros previos diferentes; diversi-dad de estilos de aprendizaje, ocasionada por las diferentes maneras de aprender, ya se re�era a los estilos de pensamiento (inducción, deducción, pen-samiento crítico), a la estrategias de aprendizaje, a las relaciones de comunicación establecidas (trabajo cooperativo, individual) y a los procedimientos lingüísticos que mejor dominen; diversidad de ritmos, cada persona necesita un tiempo para asimi-lar el conocimiento; diversidad de intereses, motiva-ciones y expectativas, en cuanto a los contenidos y a los métodos; y diversidad de capacidades y de ritmos de desarrollo (Arnaiz, y Haro de, 1997).

la integración intercultural supone el respeto a la diversidad que implica pertenecer a una cultura minoritaria y el reconocimiento de los principios de igualdad de derechos y de deberes de los miembros de distintas culturas que conviven en una sociedad plural, en el polo opuesto se sitúa la asimilación, práctica bastante habitual que niega los rasgos propios de la cultura minoritaria para ser absorbida por la mayoritaria; la segregación, caracterizada por la exclusión o aislamiento social de los grupos mino-ritarios; y el racismo que implica la negación de toda forma de contacto o experiencia cultural entre grupos de distintas culturas. hecho que tiene una repercusión inmediata en el ambiente educativo. La pertenencia a una clase social determinada va a

tener una gran in�uencia para sus miembros, el modelo del dé�cit cultural aparece ligado a la desventaja social y de�ende que los alumnos en esta situación proceden de familias o de grupos sociales que viven en situación de discriminación económica o de marginación social; por tanto, desde su nacimiento expuestos a normas, lenguaje, valores y expectativas que determinan situaciones de desventaja con respecto a sus iguales y falta de estimulación y de experiencias.

La diversidad educativa es un proceso en el que toda la comunidad educativa tiene que estar comprometida (profesores, padres, alumnos, autoridades), puesto que no implica desarrollar procesos de enseñanza apren-dizaje mecanicistas, técnicos sino tener en cuenta cuestiones sociales, la idiosincrasia de cada grupo e incluso la propia biografía, circunstancias y características de los alumnos en desventaja dentro del grupo. Consiste en valorar la diferencia por cuanto la diversidad no solamente se encuentra entre los hombres de diferentes culturas, sino que las diferencias son de ámbito personal, nacional, regional y local.

Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, deldiferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social (Amorós y Pérez, 1993). Para desarrollar este plan-teamiento pedagógico de aceptación y respeto a la

diferencia, el centro en su totalidad debe plantearse y de�nir sus convicciones sociales, culturales y pedagógicas, es decir, debe explicitar cuáles son sus valores y metas, para elaborar una propuesta de actuación coherente con lo expresado.No se educa en la diversidad cuando seguimos insistiendo en que todos nuestros alumnos apren-den de la misma manera.

¿CUÁNDO EDUCAMOS EN LADIVERSIDAD Y CUANDO NO?

Stainback y Stainback (1999) de�nen una escuela inclusiva como aquella que educa a todos los estu-diantes dentro de un único sistema educativo, proporcionándoles programas educativos apropia-dos que sean estimulantes y adecuados a sus capa-cidades y necesidades, además de cualquier apoyo y ayuda que tanto ellos como sus profesores puedan necesitar para tener éxito. Pero una escuela inclusiva va más allá de todo esto, ya que es un lugar al que todos pertenecen, donde todos son acepta-dos y son apoyados por sus compañeros y por otros miembros de la comunidad escolar para que tengan sus necesidades educativas satisfechas.

Desarrollar sistemas de apoyo que colaboren con las escuelas y docentes en la atención a la diversi-dad del alumnado.

Desarrollar políticas intersectoriales que interven-gan sobre los factores externos que generan exclu-sión y marginación, como la pobreza, la segmenta-ción social y cultural, las desigualdades en las condi-ciones socioeconómicas y el capital cultural en los hogares, o la discriminación histórica de ciertos grupos sociales.

Cerrar las brechas existentes pasa necesariamente por aumentar la inversión pública en educación y en políticas sociales, estimando el costo de incluir a todos los estudiantes actualmente excluidos, llevando a cabo pactos sociales o acuerdos �scales e incrementando la carga tributaria, que en México es muy baja.

Eliminar las diferentes formas de discriminación para hacer efectivo el derecho a la educación.

Diseñar situaciones de aprendizaje accesibles a todos, considerando los diferentes niveles, ritmos y estilos de aprendizaje, los múltiples intereses inicia-

les y motivaciones de los estudiantes, la variedad de códigos de comunicación y las visiones y concep-ciones de las culturas de origen.

Lo anterior se re�ere a la atención de la diversidad como “a un proceso amplio y dinámico de construc-ción y reconstrucción de conocimiento que surge a partir de la interacción entre personas distintas en cuanto a valores, ideas, percepciones e intereses, capacidades, estilos cognitivos y de aprendizaje,etc., que favorece la construcción consciente y autónoma, de formas personales de identidad y pensa-miento, y que ofrece estrategias y procedimientos educativos (enseñanza-aprendizaje) diversi�cados y �exibles con la doble �nalidad de dar respuesta a una realidad heterogénea y de contribuir a la mejora y el enriquecimiento de las condiciones y relaciones sociales y culturales” (Jiménez y Vilà, 1999, 38).

Es importante la práctica de educación inclusiva en las escuelas, ya que permite la atención integral a los niños y niñas, cum-pliendo los propósitos de las políticas de equidad, calidad edu-cativa y ampliación de cobertura. Las escuelas deben ser y son para todos, que ningún alumno, sean cuales fueren sus caracte-rísticas, debe ser excluido de la escuela ordinaria.

¿CUÁNDO EDUCAMOS EN LA DIVERSIDAD Y CUANDO NO?

Arnaiz, P. (2005). Sobre la atencion a la diverisdad. Costa Rica: EUNET.Echeita, g. (2006). educación para la inclusión o educación sin exclusiones. MADRID: NARCEA.Marchesi, Á. (2014). Avances y desafíos de la educación inclusiva en Iberoamérica. Madrid: OEI.Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesoradofrente a la integracion de niños/as con necesida-des educativas especiales al aula común. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 45.

INTEGRANTES:Mirian Sofía Noguera Mata

Akari Sauno EscutiaJaneth Alejandra González García

Últimamente se ha hecho énfasis en el tema de la exclusión social que re�ere al rechazo de algunas personas, ya sea por diferencias sociales, culturales, físicas, económicas, etc. Para evitar que esta proble-mática crezca debemos comprender que las diferen-cias forman partes de una diversidad social y que esta es la que permite el éxito de la inclusión dentro de una sociedad. Por lo anterior es necesario conocer el signi�cado de diversidad y su impacto dentro del ámbito educativo ya que no todos los estudiantes son iguales ni poseen las mismas capacidades, por ello el proceso de ense-ñanza-aprendizaje debe estar basado en el pluralis-mo democrático, la tolerancia y la aceptación de la diferencia, a través del cual se intenta promover el desarrollo y la madurez personal de todos los sujetos.

“Un tipo de educación fundamentada en los dere-chos humanos, en el máximo respeto hacia la dife-rencia, en la superación de barreras y en la apertura al mundialismo como respuesta al tipo de hombre y sociedad necesitada hoy en día. Por consiguiente, estamos planteando abandonar el anquilosado modelo asociado a la discapacidad y centrado en el dé�cit, cuyas prácticas educativas son gerenciales y burocráticas, para entrar en una ideología liberal, defensora de procesos de redistribución social y humana” (Sáez, 1997, 31).

La diversidad es una condición inherente al ser humano. Se sustenta en el respeto a las diferencias individuales y las tiene en cuenta a la hora de apren-der. Por tanto, en el proceso educativo encontrare-mos que los estudiantes pueden presentar diversi-dad de ideas, experiencias y actitudes previas, debido a que cada persona ante un nuevo conteni-do tiene unos registros previos diferentes; diversi-dad de estilos de aprendizaje, ocasionada por las diferentes maneras de aprender, ya se re�era a los estilos de pensamiento (inducción, deducción, pen-samiento crítico), a la estrategias de aprendizaje, a las relaciones de comunicación establecidas (trabajo cooperativo, individual) y a los procedimientos lingüísticos que mejor dominen; diversidad de ritmos, cada persona necesita un tiempo para asimi-lar el conocimiento; diversidad de intereses, motiva-ciones y expectativas, en cuanto a los contenidos y a los métodos; y diversidad de capacidades y de ritmos de desarrollo (Arnaiz, y Haro de, 1997).

la integración intercultural supone el respeto a la diversidad que implica pertenecer a una cultura minoritaria y el reconocimiento de los principios de igualdad de derechos y de deberes de los miembros de distintas culturas que conviven en una sociedad plural, en el polo opuesto se sitúa la asimilación, práctica bastante habitual que niega los rasgos propios de la cultura minoritaria para ser absorbida por la mayoritaria; la segregación, caracterizada por la exclusión o aislamiento social de los grupos mino-ritarios; y el racismo que implica la negación de toda forma de contacto o experiencia cultural entre grupos de distintas culturas. hecho que tiene una repercusión inmediata en el ambiente educativo. La pertenencia a una clase social determinada va a

tener una gran in�uencia para sus miembros, el modelo del dé�cit cultural aparece ligado a la desventaja social y de�ende que los alumnos en esta situación proceden de familias o de grupos sociales que viven en situación de discriminación económica o de marginación social; por tanto, desde su nacimiento expuestos a normas, lenguaje, valores y expectativas que determinan situaciones de desventaja con respecto a sus iguales y falta de estimulación y de experiencias.

La diversidad educativa es un proceso en el que toda la comunidad educativa tiene que estar comprometida (profesores, padres, alumnos, autoridades), puesto que no implica desarrollar procesos de enseñanza apren-dizaje mecanicistas, técnicos sino tener en cuenta cuestiones sociales, la idiosincrasia de cada grupo e incluso la propia biografía, circunstancias y características de los alumnos en desventaja dentro del grupo. Consiste en valorar la diferencia por cuanto la diversidad no solamente se encuentra entre los hombres de diferentes culturas, sino que las diferencias son de ámbito personal, nacional, regional y local.

Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, deldiferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social (Amorós y Pérez, 1993). Para desarrollar este plan-teamiento pedagógico de aceptación y respeto a la

diferencia, el centro en su totalidad debe plantearse y de�nir sus convicciones sociales, culturales y pedagógicas, es decir, debe explicitar cuáles son sus valores y metas, para elaborar una propuesta de actuación coherente con lo expresado.No se educa en la diversidad cuando seguimos insistiendo en que todos nuestros alumnos apren-den de la misma manera.

Stainback y Stainback (1999) de�nen una escuela inclusiva como aquella que educa a todos los estu-diantes dentro de un único sistema educativo, proporcionándoles programas educativos apropia-dos que sean estimulantes y adecuados a sus capa-cidades y necesidades, además de cualquier apoyo y ayuda que tanto ellos como sus profesores puedan necesitar para tener éxito. Pero una escuela inclusiva va más allá de todo esto, ya que es un lugar al que todos pertenecen, donde todos son acepta-dos y son apoyados por sus compañeros y por otros miembros de la comunidad escolar para que tengan sus necesidades educativas satisfechas.

Desarrollar sistemas de apoyo que colaboren con las escuelas y docentes en la atención a la diversi-dad del alumnado.

Desarrollar políticas intersectoriales que interven-gan sobre los factores externos que generan exclu-sión y marginación, como la pobreza, la segmenta-ción social y cultural, las desigualdades en las condi-ciones socioeconómicas y el capital cultural en los hogares, o la discriminación histórica de ciertos grupos sociales.

Cerrar las brechas existentes pasa necesariamente por aumentar la inversión pública en educación y en políticas sociales, estimando el costo de incluir a todos los estudiantes actualmente excluidos, llevando a cabo pactos sociales o acuerdos �scales e incrementando la carga tributaria, que en México es muy baja.

Eliminar las diferentes formas de discriminación para hacer efectivo el derecho a la educación.

Diseñar situaciones de aprendizaje accesibles a todos, considerando los diferentes niveles, ritmos y estilos de aprendizaje, los múltiples intereses inicia-

les y motivaciones de los estudiantes, la variedad de códigos de comunicación y las visiones y concep-ciones de las culturas de origen.

Lo anterior se re�ere a la atención de la diversidad como “a un proceso amplio y dinámico de construc-ción y reconstrucción de conocimiento que surge a partir de la interacción entre personas distintas en cuanto a valores, ideas, percepciones e intereses, capacidades, estilos cognitivos y de aprendizaje,etc., que favorece la construcción consciente y autónoma, de formas personales de identidad y pensa-miento, y que ofrece estrategias y procedimientos educativos (enseñanza-aprendizaje) diversi�cados y �exibles con la doble �nalidad de dar respuesta a una realidad heterogénea y de contribuir a la mejora y el enriquecimiento de las condiciones y relaciones sociales y culturales” (Jiménez y Vilà, 1999, 38).

Es importante la práctica de educación inclusiva en las escuelas, ya que permite la atención integral a los niños y niñas, cum-pliendo los propósitos de las políticas de equidad, calidad edu-cativa y ampliación de cobertura. Las escuelas deben ser y son para todos, que ningún alumno, sean cuales fueren sus caracte-rísticas, debe ser excluido de la escuela ordinaria.

Arnaiz, P. (2005). Sobre la atencion a la diverisdad. Costa Rica: EUNET.Echeita, g. (2006). educación para la inclusión o educación sin exclusiones. MADRID: NARCEA.Marchesi, Á. (2014). Avances y desafíos de la educación inclusiva en Iberoamérica. Madrid: OEI.Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesoradofrente a la integracion de niños/as con necesida-des educativas especiales al aula común. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 45.

INTEGRANTES:Mirian Sofía Noguera Mata

Akari Sauno EscutiaJaneth Alejandra González García

¿CÓMO ATENDER LOSDESAFÍOS DE LA DIVERSIDAD?

EL POTENCIAL DE LAEDUCACION INCLUSIVA

Últimamente se ha hecho énfasis en el tema de la exclusión social que re�ere al rechazo de algunas personas, ya sea por diferencias sociales, culturales, físicas, económicas, etc. Para evitar que esta proble-mática crezca debemos comprender que las diferen-cias forman partes de una diversidad social y que esta es la que permite el éxito de la inclusión dentro de una sociedad. Por lo anterior es necesario conocer el signi�cado de diversidad y su impacto dentro del ámbito educativo ya que no todos los estudiantes son iguales ni poseen las mismas capacidades, por ello el proceso de ense-ñanza-aprendizaje debe estar basado en el pluralis-mo democrático, la tolerancia y la aceptación de la diferencia, a través del cual se intenta promover el desarrollo y la madurez personal de todos los sujetos.

“Un tipo de educación fundamentada en los dere-chos humanos, en el máximo respeto hacia la dife-rencia, en la superación de barreras y en la apertura al mundialismo como respuesta al tipo de hombre y sociedad necesitada hoy en día. Por consiguiente, estamos planteando abandonar el anquilosado modelo asociado a la discapacidad y centrado en el dé�cit, cuyas prácticas educativas son gerenciales y burocráticas, para entrar en una ideología liberal, defensora de procesos de redistribución social y humana” (Sáez, 1997, 31).

La diversidad es una condición inherente al ser humano. Se sustenta en el respeto a las diferencias individuales y las tiene en cuenta a la hora de apren-der. Por tanto, en el proceso educativo encontrare-mos que los estudiantes pueden presentar diversi-dad de ideas, experiencias y actitudes previas, debido a que cada persona ante un nuevo conteni-do tiene unos registros previos diferentes; diversi-dad de estilos de aprendizaje, ocasionada por las diferentes maneras de aprender, ya se re�era a los estilos de pensamiento (inducción, deducción, pen-samiento crítico), a la estrategias de aprendizaje, a las relaciones de comunicación establecidas (trabajo cooperativo, individual) y a los procedimientos lingüísticos que mejor dominen; diversidad de ritmos, cada persona necesita un tiempo para asimi-lar el conocimiento; diversidad de intereses, motiva-ciones y expectativas, en cuanto a los contenidos y a los métodos; y diversidad de capacidades y de ritmos de desarrollo (Arnaiz, y Haro de, 1997).

la integración intercultural supone el respeto a la diversidad que implica pertenecer a una cultura minoritaria y el reconocimiento de los principios de igualdad de derechos y de deberes de los miembros de distintas culturas que conviven en una sociedad plural, en el polo opuesto se sitúa la asimilación, práctica bastante habitual que niega los rasgos propios de la cultura minoritaria para ser absorbida por la mayoritaria; la segregación, caracterizada por la exclusión o aislamiento social de los grupos mino-ritarios; y el racismo que implica la negación de toda forma de contacto o experiencia cultural entre grupos de distintas culturas. hecho que tiene una repercusión inmediata en el ambiente educativo. La pertenencia a una clase social determinada va a

tener una gran in�uencia para sus miembros, el modelo del dé�cit cultural aparece ligado a la desventaja social y de�ende que los alumnos en esta situación proceden de familias o de grupos sociales que viven en situación de discriminación económica o de marginación social; por tanto, desde su nacimiento expuestos a normas, lenguaje, valores y expectativas que determinan situaciones de desventaja con respecto a sus iguales y falta de estimulación y de experiencias.

La diversidad educativa es un proceso en el que toda la comunidad educativa tiene que estar comprometida (profesores, padres, alumnos, autoridades), puesto que no implica desarrollar procesos de enseñanza apren-dizaje mecanicistas, técnicos sino tener en cuenta cuestiones sociales, la idiosincrasia de cada grupo e incluso la propia biografía, circunstancias y características de los alumnos en desventaja dentro del grupo. Consiste en valorar la diferencia por cuanto la diversidad no solamente se encuentra entre los hombres de diferentes culturas, sino que las diferencias son de ámbito personal, nacional, regional y local.

Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, deldiferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social (Amorós y Pérez, 1993). Para desarrollar este plan-teamiento pedagógico de aceptación y respeto a la

diferencia, el centro en su totalidad debe plantearse y de�nir sus convicciones sociales, culturales y pedagógicas, es decir, debe explicitar cuáles son sus valores y metas, para elaborar una propuesta de actuación coherente con lo expresado.No se educa en la diversidad cuando seguimos insistiendo en que todos nuestros alumnos apren-den de la misma manera.

Stainback y Stainback (1999) de�nen una escuela inclusiva como aquella que educa a todos los estu-diantes dentro de un único sistema educativo, proporcionándoles programas educativos apropia-dos que sean estimulantes y adecuados a sus capa-cidades y necesidades, además de cualquier apoyo y ayuda que tanto ellos como sus profesores puedan necesitar para tener éxito. Pero una escuela inclusiva va más allá de todo esto, ya que es un lugar al que todos pertenecen, donde todos son acepta-dos y son apoyados por sus compañeros y por otros miembros de la comunidad escolar para que tengan sus necesidades educativas satisfechas.

Desarrollar sistemas de apoyo que colaboren con las escuelas y docentes en la atención a la diversi-dad del alumnado.

Desarrollar políticas intersectoriales que interven-gan sobre los factores externos que generan exclu-sión y marginación, como la pobreza, la segmenta-ción social y cultural, las desigualdades en las condi-ciones socioeconómicas y el capital cultural en los hogares, o la discriminación histórica de ciertos grupos sociales.

Cerrar las brechas existentes pasa necesariamente por aumentar la inversión pública en educación y en políticas sociales, estimando el costo de incluir a todos los estudiantes actualmente excluidos, llevando a cabo pactos sociales o acuerdos �scales e incrementando la carga tributaria, que en México es muy baja.

Eliminar las diferentes formas de discriminación para hacer efectivo el derecho a la educación.

Diseñar situaciones de aprendizaje accesibles a todos, considerando los diferentes niveles, ritmos y estilos de aprendizaje, los múltiples intereses inicia-

les y motivaciones de los estudiantes, la variedad de códigos de comunicación y las visiones y concep-ciones de las culturas de origen.

Lo anterior se re�ere a la atención de la diversidad como “a un proceso amplio y dinámico de construc-ción y reconstrucción de conocimiento que surge a partir de la interacción entre personas distintas en cuanto a valores, ideas, percepciones e intereses, capacidades, estilos cognitivos y de aprendizaje,etc., que favorece la construcción consciente y autónoma, de formas personales de identidad y pensa-miento, y que ofrece estrategias y procedimientos educativos (enseñanza-aprendizaje) diversi�cados y �exibles con la doble �nalidad de dar respuesta a una realidad heterogénea y de contribuir a la mejora y el enriquecimiento de las condiciones y relaciones sociales y culturales” (Jiménez y Vilà, 1999, 38).

Es importante la práctica de educación inclusiva en las escuelas, ya que permite la atención integral a los niños y niñas, cum-pliendo los propósitos de las políticas de equidad, calidad edu-cativa y ampliación de cobertura. Las escuelas deben ser y son para todos, que ningún alumno, sean cuales fueren sus caracte-rísticas, debe ser excluido de la escuela ordinaria.

Arnaiz, P. (2005). Sobre la atencion a la diverisdad. Costa Rica: EUNET.Echeita, g. (2006). educación para la inclusión o educación sin exclusiones. MADRID: NARCEA.Marchesi, Á. (2014). Avances y desafíos de la educación inclusiva en Iberoamérica. Madrid: OEI.Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesoradofrente a la integracion de niños/as con necesida-des educativas especiales al aula común. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 45.

¿QUIERES UN RESUMEN?

INTEGRANTES:Mirian Sofía Noguera Mata

Akari Sauno EscutiaJaneth Alejandra González García

Últimamente se ha hecho énfasis en el tema de la exclusión social que re�ere al rechazo de algunas personas, ya sea por diferencias sociales, culturales, físicas, económicas, etc. Para evitar que esta proble-mática crezca debemos comprender que las diferen-cias forman partes de una diversidad social y que esta es la que permite el éxito de la inclusión dentro de una sociedad. Por lo anterior es necesario conocer el signi�cado de diversidad y su impacto dentro del ámbito educativo ya que no todos los estudiantes son iguales ni poseen las mismas capacidades, por ello el proceso de ense-ñanza-aprendizaje debe estar basado en el pluralis-mo democrático, la tolerancia y la aceptación de la diferencia, a través del cual se intenta promover el desarrollo y la madurez personal de todos los sujetos.

“Un tipo de educación fundamentada en los dere-chos humanos, en el máximo respeto hacia la dife-rencia, en la superación de barreras y en la apertura al mundialismo como respuesta al tipo de hombre y sociedad necesitada hoy en día. Por consiguiente, estamos planteando abandonar el anquilosado modelo asociado a la discapacidad y centrado en el dé�cit, cuyas prácticas educativas son gerenciales y burocráticas, para entrar en una ideología liberal, defensora de procesos de redistribución social y humana” (Sáez, 1997, 31).

La diversidad es una condición inherente al ser humano. Se sustenta en el respeto a las diferencias individuales y las tiene en cuenta a la hora de apren-der. Por tanto, en el proceso educativo encontrare-mos que los estudiantes pueden presentar diversi-dad de ideas, experiencias y actitudes previas, debido a que cada persona ante un nuevo conteni-do tiene unos registros previos diferentes; diversi-dad de estilos de aprendizaje, ocasionada por las diferentes maneras de aprender, ya se re�era a los estilos de pensamiento (inducción, deducción, pen-samiento crítico), a la estrategias de aprendizaje, a las relaciones de comunicación establecidas (trabajo cooperativo, individual) y a los procedimientos lingüísticos que mejor dominen; diversidad de ritmos, cada persona necesita un tiempo para asimi-lar el conocimiento; diversidad de intereses, motiva-ciones y expectativas, en cuanto a los contenidos y a los métodos; y diversidad de capacidades y de ritmos de desarrollo (Arnaiz, y Haro de, 1997).

la integración intercultural supone el respeto a la diversidad que implica pertenecer a una cultura minoritaria y el reconocimiento de los principios de igualdad de derechos y de deberes de los miembros de distintas culturas que conviven en una sociedad plural, en el polo opuesto se sitúa la asimilación, práctica bastante habitual que niega los rasgos propios de la cultura minoritaria para ser absorbida por la mayoritaria; la segregación, caracterizada por la exclusión o aislamiento social de los grupos mino-ritarios; y el racismo que implica la negación de toda forma de contacto o experiencia cultural entre grupos de distintas culturas. hecho que tiene una repercusión inmediata en el ambiente educativo. La pertenencia a una clase social determinada va a

tener una gran in�uencia para sus miembros, el modelo del dé�cit cultural aparece ligado a la desventaja social y de�ende que los alumnos en esta situación proceden de familias o de grupos sociales que viven en situación de discriminación económica o de marginación social; por tanto, desde su nacimiento expuestos a normas, lenguaje, valores y expectativas que determinan situaciones de desventaja con respecto a sus iguales y falta de estimulación y de experiencias.

La diversidad educativa es un proceso en el que toda la comunidad educativa tiene que estar comprometida (profesores, padres, alumnos, autoridades), puesto que no implica desarrollar procesos de enseñanza apren-dizaje mecanicistas, técnicos sino tener en cuenta cuestiones sociales, la idiosincrasia de cada grupo e incluso la propia biografía, circunstancias y características de los alumnos en desventaja dentro del grupo. Consiste en valorar la diferencia por cuanto la diversidad no solamente se encuentra entre los hombres de diferentes culturas, sino que las diferencias son de ámbito personal, nacional, regional y local.

Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, deldiferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social (Amorós y Pérez, 1993). Para desarrollar este plan-teamiento pedagógico de aceptación y respeto a la

diferencia, el centro en su totalidad debe plantearse y de�nir sus convicciones sociales, culturales y pedagógicas, es decir, debe explicitar cuáles son sus valores y metas, para elaborar una propuesta de actuación coherente con lo expresado.No se educa en la diversidad cuando seguimos insistiendo en que todos nuestros alumnos apren-den de la misma manera.

Stainback y Stainback (1999) de�nen una escuela inclusiva como aquella que educa a todos los estu-diantes dentro de un único sistema educativo, proporcionándoles programas educativos apropia-dos que sean estimulantes y adecuados a sus capa-cidades y necesidades, además de cualquier apoyo y ayuda que tanto ellos como sus profesores puedan necesitar para tener éxito. Pero una escuela inclusiva va más allá de todo esto, ya que es un lugar al que todos pertenecen, donde todos son acepta-dos y son apoyados por sus compañeros y por otros miembros de la comunidad escolar para que tengan sus necesidades educativas satisfechas.

Desarrollar sistemas de apoyo que colaboren con las escuelas y docentes en la atención a la diversi-dad del alumnado.

Desarrollar políticas intersectoriales que interven-gan sobre los factores externos que generan exclu-sión y marginación, como la pobreza, la segmenta-ción social y cultural, las desigualdades en las condi-ciones socioeconómicas y el capital cultural en los hogares, o la discriminación histórica de ciertos grupos sociales.

Cerrar las brechas existentes pasa necesariamente por aumentar la inversión pública en educación y en políticas sociales, estimando el costo de incluir a todos los estudiantes actualmente excluidos, llevando a cabo pactos sociales o acuerdos �scales e incrementando la carga tributaria, que en México es muy baja.

Eliminar las diferentes formas de discriminación para hacer efectivo el derecho a la educación.

Diseñar situaciones de aprendizaje accesibles a todos, considerando los diferentes niveles, ritmos y estilos de aprendizaje, los múltiples intereses inicia-

les y motivaciones de los estudiantes, la variedad de códigos de comunicación y las visiones y concep-ciones de las culturas de origen.

Lo anterior se re�ere a la atención de la diversidad como “a un proceso amplio y dinámico de construc-ción y reconstrucción de conocimiento que surge a partir de la interacción entre personas distintas en cuanto a valores, ideas, percepciones e intereses, capacidades, estilos cognitivos y de aprendizaje,etc., que favorece la construcción consciente y autónoma, de formas personales de identidad y pensa-miento, y que ofrece estrategias y procedimientos educativos (enseñanza-aprendizaje) diversi�cados y �exibles con la doble �nalidad de dar respuesta a una realidad heterogénea y de contribuir a la mejora y el enriquecimiento de las condiciones y relaciones sociales y culturales” (Jiménez y Vilà, 1999, 38).

Es importante la práctica de educación inclusiva en las escuelas, ya que permite la atención integral a los niños y niñas, cum-pliendo los propósitos de las políticas de equidad, calidad edu-cativa y ampliación de cobertura. Las escuelas deben ser y son para todos, que ningún alumno, sean cuales fueren sus caracte-rísticas, debe ser excluido de la escuela ordinaria.

Arnaiz, P. (2005). Sobre la atencion a la diverisdad. Costa Rica: EUNET.Echeita, g. (2006). educación para la inclusión o educación sin exclusiones. MADRID: NARCEA.Marchesi, Á. (2014). Avances y desafíos de la educación inclusiva en Iberoamérica. Madrid: OEI.Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesoradofrente a la integracion de niños/as con necesida-des educativas especiales al aula común. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 45.

Bibliografía

INTEGRANTES:Mirian Sofía Noguera Mata

Akari Sauno EscutiaJaneth Alejandra González García