Ejerciciocuento

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Cuento de josue isaac tipo truman capote

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La cuenta

Josu Isaac Muoz NezEstaba bebiendo en la barra esperando que llegara Juan. En la tarde me haba llamado al trabajo pidindome nos viramos en el bar los Tres Ases. Era martes en la noche: el lugar estaba desierto y las sillas estaban sobre las mesas; me pareca pattico. Me acerqu al banco ms cercano y ped un whisky.

Escucho a Juan que grita mi nombre al entrar. Es alto, tiene todava el pelo negro a pesar de su edad, y la piel clara como la leche. Trae un traje azul marino que lo hace ver ms esbelto de lo que es. Me comenta que viene de una junta y se guarda una corbata roja en el bolsillo. Baja una silla y me invita a sentarme, mientras pide dos cervezas.

Te cit, porque mi hermano se encuentra en el hospital.

Qu le sucedi?

Tuvo un accidente por perifrico. Un idiota se le cruz y al esquivarlo se estamp en el muro. Fue a baja velocidad el impacto, as que slo sufri unas contusiones. Est estable, pero debo ayudarle a pagar las cuentas del hospital.

Mientras terminaba mi whisky, me cont que no poda pagar l solo toda la cuenta, necesitaba dinero. Me cont Juan que su divorcio, las colegiaturas de sus dos hijos, los caprichos de su amante y las medicinas de su mam lo tenan sin un quinto. Le coment que le ayudara con la mitad de la deuda. Su hermano era gran amigo mo: me ayudo a conseguir mi actual trabajo.

Escuch un bastn que pega con la punta en el suelo. Un vendedor de cigarros y chicles se nos acerca. Yo lo rechaz. Martn le toma dos cigarros para fumarlos a la salida. El vendedor es un anciano sin dientes con la piel arrugada color tierra; sus ojos, dos capulines, adems de llevar un sombrero color marfil. Llega un grupo de seores en camisa y sudados. Hacen alboroto, por lo visto festejan al ms joven su despedida de soltero.

Yo quisiera haber tenido una pre-despedida de soltero as.

A qu te refieres, Juan? Tuviste dos una en tu chamba y la otra

S, de acuerdo. Pero me refiero a algo espontneo, no planeado y que sea slo por el gusto de festejar. No por el deseo de estirar lo ms posible mis ltimos momentos de soltera y que mis amigos me lo recuerden con fiestas fabricadas.

Podemos seguir yendo a festejar as. Llmame cuando tengas ganas de salir y lo hacemos. Sientes que ya no somos espontneos o festivos?

Juan le da dos sorbos a su cerveza, golpea con su puo la mesa y me dice que estamos acabados. l ya no tiene dinero ni ganas. Sus mujeres lo tienen exhausto. Una no lo quiere volver a ver y la otra lo quiere slo para ella. Ambas me consumen, me dice. Se toma el pelo con las manos y se lo peina hacia atrs con desesperacin.

El anciano se acerca a los cuatro hombres que beben tequila. Un sujeto gordo y calvo le pasa el brazo por los hombros, toma un cigarro y le invita un caballito. El anciano se re mientras los otros le incitan a beber. l acepta y se pasa el trago sin chistar.

Juan ignorando lo que suceda a sus espaldas me cuenta que su padre muri en un accidente de carro. Los exmenes demostraron que haba bebido, sali positivo en alcohol. Toma la cerveza y bebindosela de un trago, me dice que ha de ser un castigo lo de su hermano. El tocadiscos se prende y se oye una cancin de la Sonora Santanera. Juan toma otra cerveza, pide dos caballitos y una michelada para m.

Te veo muy callado. Ahorita con la michelada te vas a refrescar. Ya vers.

Estaba bebiendo whisky. No tienes que preocuparte de m

Me doy cuenta que no escucha. Algo le hace tensar el cuello y los labios. Veo sus fosas nasales aspirar tanto aire como pueden.

Le acercan una silla al anciano. Deja con cuidado su bastn a un lado, en el suelo sus dulces y se sienta con una cerveza en la mano. El ms joven est rojo como jitomate. Lleva una pequea barba negra. Sus rasgos son finos, su nariz pequea y su mentn afilado. Le da un ataque de hipo que le hace escupir un poco de cerveza. Le dan palmadas y nimos. El anciano levanta la botella y grita salud, los dems le responden

Voy a fumar gustas? Me dice Juan sacando un encendedor de su bolsillo. Sale apresurado y pega contra una mesa. Estar borracho?

Sus bebidas seores, me dice el barman que est sirviendo solo. Al poner la michelada me pregunta si mi amigo volver. Moviendo la cabeza le aclar que s. Veo en su rostro la apata de tener que trabajar entre semana. Es tu chamba, si no te gusta, consguete algo mejor, le digo con la mirada. Se retira viendo hacia la mesa; como preguntando si lograremos bebernos todo lo que pedimos en martes. Juan, ya viste, cmo se divierten. Si quieres nos juntamos le digo en cuanto entra. Est plido y temblando.

Sin escucharme y casi a punto de llorar me dice que no quiere quedarse solo. Mi amante es una muchachuela que pronto me dejar por otro adinerado, y mi esposa nunca me perdonar. Mis hijos apenas comprenden el problema. Se muerde sus nudillos que estn rojos y a punto de sangrar. Es como si llevara semanas mordindose de ansias.

Se toma un caballito. En ese instante recuerdo que seguro trajo su carro. Le quito el segundo de la mano y la cerveza, ya siento sobre mi espalda la mirada encabronada del barman que para evitarle la queja me tom el caballito que me sabe a rayos. Me levanto con cerveza en mano, voy con los de la mesa contigua y brindo. Sus ojos llenos de bro y emocin me aceptan. Chocamos con fuerza las botellas, le doy un sorbo y la dej sobre la mesa. Voy al bao, les digo.

Adentro el olor a orines y vmito es penetrante. Ni es fin de semana y ya huele a podrido aqu dentro. He tomado una decisin: me llevar a Juan a un hotel y se quedar ah hasta que se le baje la borrachera o lo que sea que le pasa.

Al salir veo a Juan sentado junto al festejado. Levanta una cerveza que le acercan y me dice salud sin soltar sonido.

Me molesta que est bebiendo como si nada, cuando hace unos minutos no poda ni con su alma. Cmo puede ser que se haya puesto a beber estando como idiota.

Dame un sorbo de esa cerveza abriendo la boca como sorprendido se pone a hacer espavientos.

Fue la que dejaste. No te apures, pronto te nos pondrs al corriente Mi amigo dirigindose al grupo est muy sobrio para divertirse. Hay que hacerle entrar en calor.

Me acercan una silla, pero no me siento. En vez de sentarme voy directo a la barra a pedir la cuenta. El barman con una mirada de piedra me extiende un papel mientras me seala en la mesa la michelada y el otro tequila. S, ahorita me los tomo. Le comento al barman.

Escucho gritos y rechinidos de sillas arrastrndose. El barman se olvida de m y saca una macana. Atrs no s por qu ni cmo, pero el anciano est en el suelo boca arriba, mi amigo siendo sostenido por dos hombres y siendo golpeado por uno tercero, el joven est gateando por el bar y parece que va a vomitar.

Voy corriendo hacia el anciano que sonre. Me dice sonriendo, que lo tir sin querer mi amigo y que no pasa nada. Lo arrastr hasta una esquina. A mi espalda se escuchan golpes secos, dados en el estmago y en la cara. Luego, se empieza a escuchar la macana machacando una espalda. Al voltear veo dos sillas levantas y siendo aventadas contra el barman, el calvo se abalanza contra l. Agarro a Juan de las manos y lo arrastr hasta la puerta. Doy una ltima mirada al interior, veo al barman, ensangrentado de la cara, golpeando con todas sus fuerzas al tipo calvo mientras los otros dos seores se roban algunas botellas de la cantina, y veo al joven en el suelo vomitando a lado de la barra. Me da lstima verlo despedirse as de su soltera.

Salimos y tomamos un taxi.

Ya en el cuarto, le quito los zapatos y le doy un vaso de agua con hielos.

Ya me voy Juan. Por favor comprtate, ya no eres un nio y tampoco ya aguantas beber tanto se empieza a rer. Me dice que no lo volver hacer mientras se acuesta en la cama.

Antes de irme me comenta que su angustia viene de que su hermano vena de ver a su amante. Le da pavor que su hermano termine igual que l, ya que la amante imprudentemente puede ir a verlo estando su esposa.Mi experiencia debe servirle para entender que lo peor que te puede pasar es que alguien se lleve todo de ti.

Maana mismo habl con la amante de mi hermano, me comenta. Prend la tele y toma un cigarrillo. Le comento que lo mejor sera que ninguno de los dos se casara si iban a hacer pendejadas. Se re y toma un trago largo de agua, dando cuenta por lstima que no es alcohol.

Al salir, ya en el elevador, me digo que tal vez le marque maana.