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EXCLUSIVO: FOTOS INÉDITAS DE PORFIRIO DÍAZ EN EUROPA

EL PASADO Y EL PRESENTE SON NUESTROS

BiCentenario el ayer y hoy de México

BICENTENARIO. EL AYER y HOY DE M ÉXICO Revista trimestral publicada por el Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora. Volumen 7, núm. 28, abril-junio de 2015

CoNSEJO EDITORIAL Ana Rosa Suárez Argüello, Graziella Altamirano Cozzi, Diana Guillén, Laura Suárez de la Torre, Guadalupe Villa Guerrero y Héctor Luis Zarauz López. Iconografía: Ramón Aureliano Alarcón. Asistente editorial: Norberto Nava Bonilla. Edición: Darío Fritz. Diseño editorial: Héctor Gómez.

REDACCIÓN, ADMINISTRACIÓN Y SUSCRIPCIONES Instituto de Investigaciones Dr. José M aría Luis Mora, calle Plaza Valentín Gómez Farías 12, Colonia San Juan Mixcoac, Del. Benito Juárez, C.P. 03730, México, D . F. Tels. 5598 3777 1 3037 Fax 5615 0675 www.mora.edu.rnx Comentarios y sugerencias: www.revistabicentenario.com.rnx [email protected]

INSTITUTO DE INVESTIGACIONES D R. JosÉ MARíA Luis MoRA Directora General: Dra. Diana Guillén Directora de Investigación: Dra. Cristina Sacristán Gómez Director de Docencia: Dr. Gerardo Gurza Lavalle Director de Vinculación: Lic. Ricardo Reynoso Serralde Director de Administración y Finanzas: Lic. Miguel Bautista Hernández Titular del Órgano de Control Interno: Ing. Carlos-Ladrón de Guevara Rivero

BrCENTENARro. EL AYER y HOY DE MÉXICO, volumen 7, núm. 28, abril-junio de 2015, es una publicación trimestral editada por el Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, calle Plaza Valentín Gómez Farías 12, Colonia San Juan Mixcoac, D el. Benito Juárez, C.P. 03730, México, D. F. Tels. 5598 3777 13037 Fax 5615 0675 www.mora.edu.mx ·. Editora responsable: Ana Rosa Su :frez Argüello. Reservas de Derechos al Uso Exclusivo No. 04-2013-061212050700-203, ISSN 2007-2775, otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor. Licitud de titulo No. 14276 y Licitud de Contenido No. 11849, ambos otorgados por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Impresión digital en Impresora y Encuadernadora Progreso, S. A. de C. V. (IEPSA), San Lo­renzo Tezonco 244, Paraje San Juan, Delegación lztapalapa, 09830, México, D. F. Este número se terminó de impdmir en diciembre de 2015. Los artículos firmados son responsa­bilidad de los autores.

Fotografía de portada: Frida Kahlo durante unas fiestas populares, ca. 1950. Archivo Casasola, inv. 498388. S!NAFO, CONACULTA-INAH-MÉx. Reproducción autorizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.

Toda reproducción de imágenes de Monumentos Arqueo­lógicos, Históricos y Artísticos y Zonas de dichos Monu­mentos está regulada por la Ley y su Reglamento por lo que deberán tramitar ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia el permiso correspondiente.

Se prohíbe la reproducción parcial o total sin la expresa au­torización del Consejo Editorial de la revista.

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S UM AR I O

EDITORIAL POR DARÍO FRITZ

CORR EO DEL LECTOR

A RT ÍC UL OS .~-El dilema contrainsurgente de Dios, el rey y la patria.

JoAQUÍN E. EsPINOSA AGUIRRE

Una plaga y dos naciones. Lurs ALBERTO ARRIOJA DíAz VIRUELL

La visita imperial de Carlota a Campeche. JosÉ MANUEL ALCOCER BERNÉs

Las protectoras de la Casa de Matérnid;.d. MARíA ELENA CRESPO ÜROZCO •.

El Universal. Una voz aliada al poder. B ERNARDO MASINI AGillLERA

Erich Fromm en México. TAMARA GLEASON FREIDBERG

DESDE HOY El PAN: oposición y ejercicio del poder. MARIO VIRGILIO SANTIAGO JrM ÉNEZ

TESTIMONIO Los secretos de un elevador. GRAZIELLA fuTAMIRANO Cozz¡

ARTE La relación de Frida Kahlo con el mundo del cine. ARTURO GARMENDIA

CUENTO HISTÓRICO Los desvelos de Raúl. SILVIA L. CuEsY

ENTREVISTA Manuel Gómez Morin: constructor de ciudadanos. LORENA P ÉREZ HERNÁNDEZ

ALEJANDRA GóMEZ MoRIN FuENTES

SEP IA Líneas. DARÍO FRITZ

A RT IC Ul O

LUIS ALBERTO ARRIOJA D íAZ VIRUELL

EL CoLEGIO D E MicHoAcÁN

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ET

GU ATE MALA

l (NA cp LA GA y DOS

:J(4CIONFJ MÉxico Y GuATEMALA ADOPTARON POLÍTicAs DIFERENTES PARA

AFRONTAR UNA INVASIÓN DE LANGOSTAS QUE SE EXTENDIÓ POR

AMPLIAS ÁREAS FRONTERIZAS DE SUS TERRITORIOS A MEDIADOS

DEL SIGLO XIX. Los RESULTADOS DE LAS MEDIDAS NO FUERON LOS

MEJORES.

A mediados de r852, tras un verano seco y

sofocante, los corregidores de Jutiapa y Chi­

quimula se dirigieron al presidente de Guate­

mala, Rafael Carrera (r84o-r865), para infor­

marle la emergencia que enfrentaban debido

a que una plaga de langosta había invadido

y devastado sus departamentos . Poco a poco,

las comunicaciones registraron el avance y los

daños que causaban estos insectos en la cu­

bierta vegetal. La experiencia fue tan desola­

dora que, en tan sólo cinco meses, invadieron

la porción centro-occidente de Guatemala e

incluso alcanzaron los territorios mexicanos

de Chiapas, Oaxaca, Tabasco y Yucatán. Por

si esto no fuera suficiente, la plaga acarreó una

serie de problemas que se tradujeron en esca­

sez de alimentos, acaparamiento de semillas,

incremento de precios, mortandad de anima­

les y desplazamientos de población. Frente a

lo sucedido, los gobernantes guatemaltecos

y mexicanos intentaron resarcir los daños:

unos, instaron a la población a perseguir y

exterminar los insectos; otros, obligaron a los

funcionarios a denunciar el acaparamiento y

la especulación de alimentos.

Un análisis de lo acaecido en Guatemala

pone al descubiqt~ que la plaga apareció en

mayo de r852 y se mantuvo activa hasta no­

viembre de r8s6, especialmente en los depar­

tamentos de J utiapa, Chiquimula, Santa Rosa,

Escuintla, Suchitepequez, Qyetzaltenango,

San Marcos y Retalhuleu. Se tiene conoci­

miento que este fenómeno impactó en todos

los sectores sociales y económicos del país.

Los añileros de Jutiapa y Chiquimula, por

ejemplo, observaron cómo sus plantaciones

sucumbieron ante la voracidad de los insec­

tos; los productores de caña de Santa Rosa

y Escuintla experimentaron la devastación

de sus plantaciones; por su parte, los hacen­

dados de Qyetzaltenango y San Marcos no

BICENTENARIO. EL AYER Y HOY DE MÉXICO

sólo perdieron sus cosechas de granos sino

también padecieron el desamparo de sus tie­

rras al tiempo que los insectos se posiciona­

ron en ellas para reproducirse e inocular sus

huevecillos. Obviamente, esta plaga afectó

numerosos pueblos de indios cuyas econo­

mías estaban orientadas a la producción para

el autoconsumo.

En el caso de México, la la~gosta arribó

en septiembre de r853 y se mantuvo con vida

hasta diciembre de r857. Al igual_ que en Gua­

temala, los acrídidos dañarol!-las plantaciones

de maíz y cacao en Chiapas, los cultivos de

algodón y las nopaleras de grana en Oaxaca, los

platanales y las huertas cacaoteras de Tabasco,

así como los sembradíos de maíz, algodón y

henequén de Yucatán. Una muestra inmediata

de sus efectos fue la carencia de alimentos, el

sobreprecio en las semillas, la propagación de

enfermedades epidémicas y la crisis en las eco­

nomías regionales. Dada la porción territorial

que invadió, no fue casualidad que los pueblos

indígenas fueran severamente perjudicados.

EL INFLUJO DE LA PF.H

Existen muchas semejanzas en lo que respecta

a la aparición y los efectos que tuvo la plaga

de langosta en ambas naciones. De entrada,

la presencia y evolución de los insectos debe

explicarse en lo que la historia ambiental ha

denominado Pequeña Edad de Hielo (PEH)

y, específicamente, en la última oscilación que

integró esta secuencia climática, entre r83o y

r86o, que se distinguió por una serie de irregu­

laridades ambientales en la porción norte del

hemisferio como movimientos bruscos en las

temperaturas, aparición de sequías estivales

y propagación de especies que afectaban la

cubierta vegetal. Los daños causados por la

langosta, por su parte, deben refl.exionarse en

lo que se conoce como dimensión histórica

... Thunot Duvotenay, Mex1que er Guar mala, a. 1850, litografía Colección particula1.

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ARTICULO

<11>

P. Langlois, Rio Usumacinta -Vista del Paso Yaxchilán, frontera con Guatemala , litografía en Élisée Reclus, Nouvelle Geographie Universe/1, Paris, Librairie Hachette et Cie., 1891. Un1vers1ty of Connecticut Librarles.

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de los desastres naturales; es decir, una pers­

pectiva que no se limita a examinar las pla­

gas en su aspecto biológico, sino que toma en

consideración el contexto en que surgieron

y evolucionaron con la finalidad de mostrar

que este tipo d_~ desastres es resultado de la

confluencia. de yarios elementos: naturaleza,

sociedad, economía y política.

Sobre las consecuencias Y: las reacciones que

suscitó esta plaga, puede decirse que la escasez

de alimentos fue un problema que intentaron

atender las autoridades nacionales . En la fase

inicial de la plaga, el presidente de Guatemala

elaboró instrucciones, circulares y contratos

para afrontar la emergencia e impedir que la

población muriera de hambre. También orde­

nó que los corregidores permanecieran en sus

departamentos para vigilar la evolución de los

insectos y proporcionar toda la información

posible sobre los daños que causaba en la agri­

cultura. De la misma manera, promovió una

serie de leyes para regular las conductas usu­

reras de los hacendados y de paso apuntalar

el papel de su gobierno como protector de la

ciudadanía. Por su parte, los presidentes mexi­

canos Antonio López de Santa Anna (r8sJ­

I8Ss),Juan Álvarez (1855) e Ignacio Comonfort

(ISss-1857) afrontaron este fenómeno natural

con instrucciones encaminadas a remediar la

escasez de granos.

Hasta donde puede observarse, dichas me­

didas fueron una copia de las utilizadas en la

etapa colonial para sortear la crisis agrícola que

irrumpió entre 1785 y 1786, y para combatir la

plaga de langosta de 1799-I8o7. En general,

pretendían detener el desabasto de semillas,

controlar los precios del maíz, perseguir la

especulación, garantizar la provisión de las

ciudades y fomentar los cultivos de temporal.

De la misma manera, recomendaban a la po­

blación observar la naturaleza de los bichos,

interrumpir su ciclo biológico, destruirlos en

su etapa embrionaria e impedir que alcanzaran

la fase migratoria. Si bien es cierto que estos

recursos mitigaron el problema, también es

verdad que no lograron erradicar la condición

gregaria y endémica de los insectos.

D E PL A C A A C AT Á STROF E NATURAL

Frente a lo sucedido en Guatemala y México,

cabe preguntarse ¿en qué momento esta plaga

de insectos se transformó en una catástrofe

natural? Sin duda, esto ocurrió al tiempo en

que confluyeron la conducta gregaria de los

acrídidos y la vulnerabilidad de ambas naciones.

Es decir, la catástrofe fue resultado de factores

que ante la presencia de una amenaza natural

agudizaron la magnitud de la plaga. En el caso

de Guatemala, resulta evidente la negativa que

desplegaron los hacendados para colaborar con

las campañas que intentaban extinguir la lan­

gosta, ya sea al negarse a facilitar la fuerza de

trabajo o los recursos económicos destinados

para esta empresa. Otro factor que acrecentó

la desgracia tuv;_> qui· ver con las conductas

usureras que desplegaron los comerciantes

de tintes y granos, quienes vislumbraron en

la catástrofe una oportunidad para resarcir la

crisis prolongada que enfrentaba el comercio

de grana cochinilla, añil, azúcar y café; con­

ductas que apostaron por la perpetuidad de la

plaga a cambio del beneficio económico. Un

tercer factor que contribuyó en el desarrollo

de esta catástrofe tuvo que ver con hechos

políticos y militares de un país que se debatía

entre conformar instituciones e integrar cua­

dros gobernantes; hechos que imposibilitaron

a las autoridades involucrarse plenamente en

la destrucción de este flagelo natural.

UNA PLAGA Y DOS NACIONES

En lo que respecta a la experiencia mexi­

cana, bien puede decirse que la plaga alcanzó

un nivel catastrófico cuando los gobernantes

consideraron que este fenómeno natural no

merecía una inversión de recursos económicos

Una muestra inmedi~ta de sus efectos fue la

carencia de alimentos~ el sobreprecio en las

semillas, la propagt;zcirjn de enfermedades

epidémicas y la criSis en las economías

regionales. CJJada la porción territorial que

invadió, no fue casualidad que los pueblos

indígenas fueran severamente perjudicados.

y científicos para contenerlo. Y también cuan­

do los habitantes afectados de Chiapas, Oa­

xaca, Tabasco y Yucatán se percataron de que

carecían de las herramientas, los antídotos, los

recursos económicos y la energía humana para

romper el ciclo biológico de los insectos. A lo

anterior se sumó una serie de acontecimientos

ligados a la formación del Estado nacional que,

dada su importancia, las autoridades priori­

zaron en menoscabo de combatir la langosta

en el sureste del país. Así, bien puede decirse

que una serie de factores ajenos a la naturale­

za de los insectos fueron determinantes en el

desarrollo de esta catástrofe.

... La Langosta, litog rafía en Manuel O rtega, Boletín de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, t . VI ,

1858. Retoque a color: Ramón Aureliano Alarcón.

1 S

ARTICULO

16

UNA PLAGA Y DOS NACIONES

... Guatemala, l1tografía en John Whetham, Across Central Amenca, Londres, Hurst and Blackett publishers, 1877. The Bntish Library.

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ARTI C ULO

.. SIGUIENTE PÁGINA

La CIUdad de Guatemala, litografía e n Arthur Morelel, Travels in Centra l America, Londres, Trübner & Co., 1871. Biblioteca "Ernesto de la Torre Vi llar", Instituto Mora.

LA OFENSIVA

Otros contrastes dignos de resaltar entre lo

acaecido en Guatemala y México tienen que

ver con la influencia religiosa al momento de

adoptar decisiones. En el c~so de Guatemala,

la propagación de acrídidos puso al. descubierto

dos posiciones: por un ladQ,.las autoridades

civiles explicaron el fenómeno con argumen­

tos apegados a la biología y, paradójicamente,

con ideas cimentadas en el providencialismo

religioso. Sobre esto último, conviene decir

que desde r853 hasta r856 el presidente Ca­

rrera instruyó al arzobispo de Guatemala,

Francisco de Paula García Peláez, para que

:f'rente a lo sucedido en guatemala y México,

cabe preguntarse ¿en qué momento esta plaga

se transformó en una catástrofe natural? Jin

duda, ocurrió al tiempo en que confluyeron

la conducta gregaria de los acrídidos y la

vulnerabilidad de ambas naciones.

.. SIGUIENTE PÁGINA

Frederick Catherwood, Antigua Guater¡¡ala, litografía.

DERECHA

Antigua Guatemala , litografía a color.

Ambas imágenes en John Lloyd Stephens, lncidents o{ Travel in Central America, Chiapas and Yucatan , Nueva York, Harper & Brothers, 1844. Biblioteca "Ernesto de la Torre Villar", Instituto Mora.

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todos los párrocos solicitaran a sus feligreses

el arrepehtimiento de sus pecados y el perdón

celestial. "Mandó realizar misas, procesiones,

novenarios, penitencias y rogativas invocando

la intermediación de San Lázaro, San Vicente '

Ferrer, San Roque y San Francisco de Paula.

Así, por más de tres años, la república y la

Iglesia guatemalteca insistieron en que la plaga

de langosta era una advertencia para que los

feligreses dejaran de pecar. De manera especial

se dirigieron a indios y ladinos por su apego a

vivir entre la lujuria, el alcohol, la mentira, la

ociosidad y la blasfemia; y a los hacendados

por su inclinación a la usura y explotación.

En contraste, los presidentes mexicanos

redujeron su interpretación del fenómeno a

la naturaleza destructiva de los insectos y al

hecho de que esta desgracia no tenía control

en el país vecino. Vislumbraron la plaga como

un problema menor que solamente afectaba

una porción del territorio nacional. En cambio,

los habitantes de Chiapas, Oaxaca, Tabasco y

Yucatán cuestionaron esta postura y eviden­

ciaron que la catástrofe era mucho más grave

de lo que se pensaba. La Iglesia, por su parte,

se mantuvo al margen de explicar o juzgar este

fenómeno. Por ~1 contrario, tan pronto cono­

cieron la desgraci; , los obispos de Oaxaca y

Yucatán respaldaron a los pueblos afectados y

los consolaron con plegarias y rezos. En este

mismo orden, la respuesta de los párrocos se

encaminó a preservar el orden y bienestar de

sus f~ligreses.

La plaga de langosta en Guatemala y Mé­

xico ofrece muchos elementos para comparar.

No obstante, lo que importa decir es que no fue

un acontecimiento secundario e inadvertido.

De entrada, debe entenderse como parte de

los cambios climáticos que acarreó la PEH en

su etapa terminal. También debe visualizarse

como un fenómeno que tuvo la capacidad su­

ficiente para destruir cultivos y plantaciones en

una franja territorial que iba desde el departa­

mento de Chiquimula, en Guatemala, hasta

el estado de Yucatán, en México. Finalmente,

debe decirse que esta plaga se convirtió en ca­

tástrofe al tiempo en que invadió dos naciones

que estaban inmersas en problemas sociales,

económicos y políticos, e imposibilitadas de

sortear la conducta voraz de los insectos. Se

sabe que la langosta desapareció entre r856 y

1857 debido a las lluvias torrenciales y los fríos

atípicos que se apoderaron del área. Estos fac­

tores climáticos rompieron el ciclo biológico

del insecto y provocaron su desaparición.

ARRIOJA DíAz VIRUELL, Lms ALBERTO, "Enjambres y nubarrones en el campo oaxaqueño: las plagas de langosta de 1802 y 1853", pp. 161-213, en Relaciones. Estudios de HiStoria y Sociedad, vol. XXXln, núm.

129, México, invierno de 2012.

DíAz ARIAS, DAviD Y RoNNY VIALES HURTADO (eds.), "Independencias, Estados y política(s) en la Centroamérica del siglo XIX", Las huellas históricas del bicentenario, Costa Rica, crHAC,

2012.

WoooWARD, RALPH LEE}. R, Rafael Can·era y la creación de la República de Guatemala, 1821-1871, Guatemala, CIRMAIPlumsock Mesoamerican Studies, 2002.

UNA PLAGA Y DOS NAC I ONES

SISTACH, XAVIER, Bandas, enjambres y devastación. Las plagas de langosta a través de la historia, Barcelona, Almuzara, 2007.

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ISSN 2007-2775 >

BiCentenario el ayer y hoy de M éxico

28 EN ESTE NÚMERO

ARTÍCULOS

El dilema contrainsurgente de Dios, el rey y la patria.

Una plaga y dos naciones.

La visita imperial de Carlota a Campeche.

Las protectoras de la Casa de Maternidad.

El Universal. Una voz aliada al poder.

Erich Fromm en México.

DESDE HOY

El PAN: oposición y ejercicio del poder.

TESTIMONIO

Los secretos de un elevador.

ARTE

La relación de Frida Kahlo con el mundo del cine.

CUENTO HISTÓRICO

Los desvelos de Raúl.

ENTREVISTA

Manuel Gómez Morin: constructor de ciudadanos.

S E P 1 A

Líneas.

u-iPWm Instituto

Mora

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