El Poder Psiquiatrico (Ciclo Lectivo 1973-1974)- M. Foucault

435
Traducción de HORACIO PONS

Transcript of El Poder Psiquiatrico (Ciclo Lectivo 1973-1974)- M. Foucault

Traduccin deHORACIO PONS

MICHEL FOUCAULT

EL PODERPSIQUITRICOCurso en el College de France (1973-1974)

Edicin establecida por Jacques Lagrange, bajo la direccin de Fran~ois Ewald y Alessandro Fontana

FONDO DE CULTURA ECONMICA MWco - ARGENTINA - BRASIL - COLOMBIA - CHILE - EsPAA

ESTADOS UNIDOS DE AJ..1RICA - PER - VENEZUELA

Primera edicin en francs, 2003 Primera edicin en espaol, 2005 Prrncra (cit11prcsin, 2007

Foucault, Michel El podcr psiquitrco ~ la ed. la reimp. - Buenos Aires: Fondo de Cultura Econmica, 2007.

448 p, ; 23jneJ aconseja utijizar una serie

de insrrumenros,

por

ejemplo "un semicrculo de hierro" en el extremo de 'una larga prtiga, de manera [al que, cuando el alienado queda fascinado por la altivez del vigilame, slo presta atencin a l y no ve que se le acercan, en ese momento, setiende en su direccin esa especie de lanza terminada en un semicrculo y se lo sujeta contra la pared, para dominarlo. Aqu tenemos, ~i quieren. la escena imperfecta, la reservada al vigilante, consistente en quebrar la fuerza desatada det alienado mediame una especie de violencia as{Uta y repentina. Pero es evidente que no se trata de la gran escena de la curacin. La escena de la curacin es una escena compleja. He aqu un ejemplo famoso del Trait mdico-philosophique de PineL Se refiere a un hombre joven "dominado por prejuicios religiosos" y que crea que, para asegurarse la salvacin, deba "imitar las abstinencias y monificaciones de los amiguos anacoretas", es decir, negarse no slo todos los placeres de la carne, desde luego, sino tambin toda alimentacin. Y resulta que un da rechaza con ms dureza que de cosrumbrt! una sopa que le sirven:El ciudad::l.OO Pussin se presenta al anochecer en la puerta de su celda, con un aparaLO ["aparaco" en el sentido del rdo eso es muy soportable, siempre que forme paree del tratamienro. SR Ahora bien, :qu Leuru va sin duda rns lejos que la mayora de: los psiquiatras de su poca, que en esencia demandaban -corno senal, por arra parte, de su omnipotencia Frente al pacienre- que el enfermo aceprara el tratamienco sin decir una palabnl . .tI tiene un pacieme que lo acepta y cuya aceptacin, en cierro modo, forma parte de la enfermedad. Leuret adviene que esa aceptacin es una mah seal para su teraputica: el tr:uamiento se reitera en el seno del delirio, Cuando lo duchan, el seor Dupr dice: "Aqu hay una que me insulu!"sp. 339-431 J, y en su arrcu!o "Maison d'alins", en DictiVn/ure des sciences mdict:!es, fra une socitt... , of. cit., r. x.,xx, 181S, pp. 47-95 (reeditado en ihid., L 11, pp. 432-538). 20 Jean-Baptis[e Parchappe de Vinay (1800-1866), designado en 1848 inspector general del Servicio de Alienados, elabora los planos de un asilo que permite la separacin de las categoras de enfermo~ y la puesta en accin de un proyecto terap!llicoj cE. Des principes awivre dans fa flndalion ~t la constmetion des asilrs d(fitns, Pars, Masson, 1853. Vase Jean George Hippolyte Manel, Parchnppe. Significntion d~ son reUl.m, Sd p/.IU dans I'voflltion & f'asullna pSJchifltriq~, Th. Md. Paris, 1965, nm. 108; Pars, R. Fou!on & Cie., 1965. 21 Henri Gitard de Cailleux (1814-1884), nombrado el 20 de junio de 1840 ll1~dico en jefe y direCtor del asilo de alienados de Allxerre, propone la construccin de asilus donde, de

CLASE DEL 9 DE ENERO DE 1974

213

calcub de I'al manera que el psiquiatra pueda estar virtualmeme en todos

la-

dos. Debe poder ver todo de una sola mirada y controlar la situacin de cada

uno de sus paciemes COIl una sola caminata; ser capaz de pasar en cualquier Illomemo una exhaustiva revista al establecimiemo, los enfermos, el personal, l mismo; debe verlo todo y estar informado de todo: lo que no puede ver por s mismo, los vigilames, dciles a su voluntad, deben decrselo, de manera que el psiquiatra est a cada insc3.lHe y perperuameme omnipresente en el asilo. Abarca con su mirada, sus odos y sus gestos todo el espacio asilar. Adems, el cuerpo del psiquiatra debe estar en comunicacin directa con rodos los imegranres de la administracin del asilo: los vigilames son, en el fondo, los engranajes, las manOS o, en codo caso, los instrumentOs direcmmenee puestos en manos del psiquiatra. Girard de Caillcux -el gran organizador de todos los asilos construidos en la periferia de Pars a partir de 1860_ 22 deca: "A travs de una jerarquia bien entendida, el i.mpulso dado por el mdico en jefe se comunica a rodas las partes del servcio; l es su regulador, pero sus subordinados son los engranajes e.senciales".23 En suma, podramos decir que el cuerpo del psiquiacra es el asilo mismo; en lma instancia, la maquinaria del asilo y el org::mismo del mdico deben constituir Ull3 nica y L:t misma cosa. Es lo que deca Esquirol en su tratado

conformidad con los principios del [ratamienro moral, se apliquen el aislamiento, la clasificacin y la obligacin de trabajo de los alienados. Desarrolla sus concepciones sobre codo en "De l'organis:uion et de I'administration de~ tablissemenrs d'alins", en AnnaLes lvfdico-Psychologiqtl~s, t. , sepdembre de 1843, pp. 230-260, Y "De la consrrucrion, de I'organisation et de la direction des asiles d'a1ins", en Annales d'Hygif:ne Publique et de MMcdne Ugak, (. 40, segunda parte, julio de 1848, pp. 5 Y 241. 12 De~gndo en 1860 por HaussJlunn en el cargo de inspector general del Servicio de Alienados del Sena, Cirard de Cailleux propone en 1861, en el marco de la reorganizacin del Servicio de Asisrencia a los Alienados, un programa de consuuccin de una decena de asilos en los suburbios parisinos, segn el modelo del esrablecimiemo de Auxerre, transformado por l luego de su designacin como direcror (vase la nota anterior). En mayo de 1867 abre sus pumas S;lilHe-Annc, seguido un alo despus por Yille-vrard, Perray-Vaucluse en 1869 y, Jll~S adelante, Yillejuif en 1884. ef.: Georges Daumezon, "Essai d'histoire cririque de J'appareil d'assisrance aux malades mentaux dallS le dpanemenr de la Seine depuis le dbtH du XI;( siede", fnfonnatioll psychi.ltriqlle, L 1, 5, 1960, pp. 6-9; Grard Bleandonu y Cuy Le G;llfey, "N:1issancc des asiles d'aJins (AuxcrreParis)", en Arma1es Ese, 1, 1975, pp. 93-126. 'l) H. Girard de CaillclJx, "De la construcdon, de J'organisarjon .. ", op. elt" p. 272.

214

ElI'ODER PSIQUITRICO

Des mafadieJ mentales: "El mdico debe ser, en cierro modo, el principio de vida de un ho!;pital de alienados. A travs de l todo debe ponerse en movimfenro; l dirige codas las acciones, llamado que est a ser el regulador de todos los pensamientos. Y hacia l, como Centro de accin, debe cncaUZarse rodo lo que interesa a Jos habitantes deJ esrablecimietl[Q".24 En consecuencia, me parece que la necesidad de marcar mdicarnente el asilo, la afirmacin de que ste debe ser un lugar mdico, significa ante todo -primera capa de significacin que podernos poner de manificsto- que el enfermo debe eStar, por as decir, ante el cuerpo omnipresente del nldico; debe estar, en definitiva, envudm en el interior del cuerpo de ste. Pero, usredes me dirn, por qu tiene que ser precisamente Un mdico? Y por qu no puede cualquier director desempear ese papel? Por qu es preciso que ese cuerpo individual que se convierte en el poder, ese cuerpo por el c~!aj pasa toda realidad, sea precisamente el de un mdico? Por curioso que parezca., el problema, aunque siempre se abord, nunca se debaci verdaderamente con todas las carcas sobre la meS;I. En los texTOS dd siglo XIX enConrramos la aflnnacin--repeticla como un principio o un ;1,'{ioma- de que es preciso qw: el asilo sea efectivamente dirigido por un mdico; si ste no asume su plena direccin, el asilo carecer de funcin teraputica. Y tambin vemos reaparecer sin cesar la dificultad para explcar ese principio y renacer la inquie[Ud de que, despus de todo, como se trata de un establecimiento disciplinario, tal vez baste con que haya un buen administrador. De hecho, durante mucho tiempo hubo un conflicto constante encre el director mdico del hospital, a cargo de la responsabilidad (eraputic:a, y el responsa.ble en el pla.no de la intelldencia la administracin del personal, la gestin, Ctc. El propio PiJlel tena desde el comienzo una preocupatin, pues deca:H Jean t.tielltle Oominique Esquirol. "Des maisons d'alins" (lB(8), op. cit., (. 11, pp. 227-228. Metfora desrlada a un magnifico porvenir. As, en 1946, Pat! Balve" ex direcror del hospital de Saim-Nban e iniciador del movimiento de psiquiatrb institucional, dedaraba: "El asilo es homogneo al psiqui:m:t que e5 su jefe. La condicin de jefe no es un grado administrativo: es un tipo de relacin orgnica con el cuerpo que uno gobierna [ ... j. Uno gobierna as como se dice que el cerebro gobierna los nervios. El asilo, en consecuencia, puede concebirse como el cuerpo del psiquima"; d. Paul Ba/vec, "De 1':([{0t10nlie de la pwfession psychi:miquc", en DOCl/mmts de I'lnformation pJchjatri'JII~, r. 11, ArI-d~/n. de tasik d'alins et de lhilpit(ti pJydJimrique, Pars, Ocsdc de Brouw~r, 1946, pp. 14-15.

CLASE DEL 9 DE ENERO DE 1974

215

en el fondo, eswy aqu para curar a los enfermos, pero, en definitiva, quien fue durance tantoS y can largos aos el porrero, el conserje, el vigiJantt de BiCc~[re, PU$sin, sabe tanto como yo; y a decir verdad, sin duda pude aprender [o que aprend gracias a haberme apoyado en su experiencia. 25 Trastad;da a otra escala, volvemos a encontrar esta situacin durante todo el siglo XIX, con la cuestin de quin debe imponerse fmaJnlenrc, el administrador o el mdico, en el funcionamiento dd hospital. Los mdicos responden, y sta es, en definitiva, la solucin adoptada en Francia: debe predorninar e1mdico,2G Como conclusin, la principal responsabilidad recaer en el

25 Nacido el 28 de septietnbre de 1745 en LOlls-lc-$aulnier, Jean-Bapriste Pussill, luego de haber desempdiado en 1780 d cargo de jefe de la divisin de 1lJS "varones encerrados" en Bki:[fe, es ascendido a gobcmad)r del sptimo "empleo" o empico de Saint-Prix, correspondiente a los "aloj.1micmos de los aJjenado$ agitados". Pille!. designado el 6 de agosto de 1793 COmo mdico en el hospicio de Bicetre, lo conoce all ;J asumir su puesto, el 11 de septiembre del

mismo ao. Nombmdo el 13 de mayo de 795 mdico en jefe del hospira1 de b Salperriere, Pine! obtiene el traslado de Pussin el 19 de mayo de 1802 y trabaj;l con l en la seccin de las locas hasla su muene el 7 de abril de [811. En "Recherches et observatiuns sur le trairement moral des alins", vp. cit. (cb~t": del 7 de noviembre de 1973, Ilota 13), Pille! elogia el saber Je Pussin y le reconoce la paternidad de las "primerJ.s elaboraciones dd tratarnienm mora!" (p. 220). En la edicin de 1809 del Trait mtdiro-philmophiqlu... , op. cit., aJJrma que, "lleno de confiall7.a en la rectitud y habilidad de:! jefe de la policb interna, le permita el libre ejercicio del poder que l deba desplegar" (p. 226). SoLre Pllssin, cf.: Ren Sel11daignc, "Pllssin", en Alinisus u phiftlnthropes... , op. cit., apndice, pp. 501-504; Eli1.abcth S. BixJer, "A forcrullner of psychiarric oUfsing: lean-Bapriste Pussin", en AJJJJa/s JvledicaJ HroTJ, 8, 1936, 1'1'_ 518519. Vanse rambin Miche:! Caire, "Pllssin avanr Pine\", en lnformaon [lJchiatriqlll', 6, }993, pp. 529-538; J. jl1che" )~':l{?-}:MI;Y{C Pussn e, P)})JJ(J(?C' P;ad Jo S;d-t,e ca } 793: ~we renconuc, une complicit, une dette", en Je::tn Garrab (comp.), Philippl' Pinl'l Pars, Les Em~ pechcurs de Penser en Rond, 1994, pp. 55-70, Y J. Jllchct y jacques ('aste!, "Le surveilbnt Jean-Baptiste Pussin", en Histoirl' de! Scienw Mdica/l'$, t. 30, 2, 1996. pp. 18~-198. 16 Con la sancin de la ley del 30 de junio de 1838 se inicia un debate sobre la naturaleza de los poderes que rigen en los asdos. As, el barn Haussmann, prefecto del Sena, establece el 27 de diciernlm.: de 1860 una comisin para "el mejoramienlo y las reformas quc deben erecruarse en los servicios de alienados": de febrero a junio de 1861, eSlC organismo dist;Ulc la necesidad de designar, junto a! mdico de asilo, a un director administrativo, o bien poner en manos de un mdico director Jos poderes mdico y adminisrrarivo, Segllll se prev en el artculo 13 de la ordenanza de aplicacin de la ley del 18 de diciembre de 1839. El 25 de noviembre

oJ

de 1861, el informe concluye que "sera especialmenre deseable que la aU[Qridad fuero. nica y

21G

EL PODER PSIQUITRICO

mdico, que se desempei1ar como c!irecm[, y junto a l habr una persona encargada -pero bajo su control y, has ca cierto pumo, su responsabilidad- de las tareas de gestin e intendencia. Enconces, por qu el mdico? Respuesta: porgue sabe. Pero porque sabe qu, habida cuenta de que, en verdad, SLl saber psiquitrico no es el que se pone efecrivameme en prctica en el rgimen asilar y no es el saber utilizado por el mdico cuando dirige el rgimen de los alienados? Cmo puede decirse, eJHonces, que hace Falta un mdico para dirigir un asilo, porque el mdico sabe? En qu sentido ese saber es necesario? Creo que lo que se estima necesario para el buen fllncion~mienro del asilo, lo que hace que ste deba estar, por fuerza, marcado mdicameme, es el efecto de poder complementario dado, no por el contenido de un saber sino por la marca del saber, aplicada con fuerza de ley. En ouas pahbr::ls, el poder mdico va a funcionar demro del a.~jlo, como poder necesariamt:nte mdico, por las marcas que designan en l la existencia de un saber, y slo por ese juego de marcas, cualquiera sea el concenido efecrivo del saber. Cules 5011 es;)..') marcas? Cmo se las hace actuar tn ese proroa.silo de los primeros aos del siglo XlX, y cmo actuarn, por oua parte, muchos aiios despus? Es bastante fcil seguir b serie de frmulas en virtud de las cuales actuaban esas m;ucas de s;ber en la organizacin yel Funcionamiento del hospitaL En primer lugar, Pine! deda:Cuando imerrogamos a un enFermo, es preciso ante todo estar informados sobre l, saber por qu ha venido, cules .'iun las quejas a su respecw, cul ha sido su biografa; debemos hacer previamente averiguaciones en su familia o sus allegados, de tal manera que, en el momCl1CO de interrogarlo, siempre SCp:U1lOS ms que l 0, al menos, sepamos ms de lo que l se imagina y, de ese modo, cuando venga a decirnos algo que consideremos como falto de ver;,cidad, podamos intervenir y hacer valer que sabernos de ello ms que l y rachamos su decir de mentira y ddirio. 27

rodo5

los elementos administrativos o mdicos

concurrie~ell,

impulsados por una m~IIl.cme? Aquel que no es otra COSa que b rcalidad de su locura; aquel en quien b mulriplicidad de los

Louis Le Guillant y Henti MignolH, "Problemes poss par la chronicit sur le plan des institutions psychi:Hriques", en XI( Congres de psychiatrie et ele neur%g de langue fmnft1ise (/v/arseille, 7-12 septemlm: 1964), Pars, M:\s~on, 1%4) .. El interrogante era entonces si "Ia mtta perseguida por la institucin [ ... ] es verdad~ramenre'cnforme a esa meta [;lj como podemos coincidir en formularla: la teraputica psiquitrica" (Lucien Bonnaf, "L(! milieu hospitaIier vu du paine de vue [hrapeutiqul.', ou rhcorie ct pratiqut' de I'hapital psychiatri-

que", en La Raon, 17, 1958, p. 26), Y se traraba de promo,"cr "la utilizacin del mismo medio hospitalario en cuantO tratamiento y !cadapr:1cin social" (bid., p. S). Pueden COI1mirarse artculos que incluyen bihliografas Je[alhd~s sobre el problema, entre ellos: Georges Daumc7.oll, Phi!ippe Paumcllc y Fran((ois Tosquelles, "OrganiS:J.tion rhrapeudque de I'hopiml ps)'chiatriq\\e. 1: Le fonctionnement thrapeulique", en Encyclopdie mdico-chirmgicale. Psychitltrie, (. 1, febrero de 1955, 37-930, A-IO,.pp. 1-8, Y Georges DaUJnezon )' Lucien Bonnaf, "Perspeclives de reforme psychiacrique en Franee ... ", op. C. (Sl/pra, clase del 21 de n.ovie.mbre '..h: 1973, nma "\). cr. nfra, "Situacin dd curso".

CU\SE DEL 23 DE ENERO DE I ~J71

301

snromas 0, al conrrario, su nivelacin, es tal que ya no se le puede atribuir una especificacin sintomtica que le sea caracterstica. El demente, por lo tarHO, es quien responde exactamente al funcionamiento de la institucin asilar, pues, por la va de 1:J. di~ciplir1.a, se han pulido wdos los sntomas en su especificidad: ya no hay ni m3nifesraciones, ni exteriorizacin, ni crisis. y, al mismo tiempo, el demente responde a lo que quiere el poder psiqui~ trico, porque realiza efecvamence la locura como realidad individual den~ tro del asilo. La famosa evolucin demencial que los psiquiarras del siglo XIX creyeron observar como un fenmeno n:Hural en la locura, no es otra cosa que la serie de efectos entrecruzados de una disciplina asilar que pule manifestaciones y sntomas, y la conminacin del poder mdico a ser un loco, a re;\ &. k~s ?S~q\.!..~1..tns, 1. "~(m~idR PSIQUlTRICO

Berghoff (Emanllel): 280 n. 23.

Brllon (EJgar): 333 n. 51. Berke (Joc): 50. 5 L[1. 1, 83 n. 2. Bernard (ebude): 321. Bernardin (AJexandre Edm Maurice): 2JO n', 16. Bcrnhcim (Hippolyte): 370 n. 49, 377 n. **, 390.

Bourgey (Louis): 282 n. 25. Bourgin (Georges): 93 n. 14. Bournevillc (Dsir Magloire): 160 n. 20,

Berlihe (Ursmcr): 82

Berchier (Picrn:): ,123. Bertoldo de Calabria: 86 n. Berrrand (Alexandre); 267 n. 6. BcsSe (JcJ.o Mania!): 83 ri. 3, 86 n. Bichar (Marie Franyois Xavier): 222, 223n.,

226 n. 39. 233 n. 7 y 10.23401 .. 240 n., 245 n. 31, 246 n. 34, 247 n. 36 11. 37 n. 38. 248 n. 42 n. 43. 250 n. 45. 255.256.257 n" 258 n. 62. 259. 260.373.377 n. 59. 379 n. 62. Bousqucr (J. B. E.): 327 11, 37. 13ouzoll (lean): IOR n. 33. Braguette (viuda de Brouilbrd, llamad:"!.) [paente]: 162. 163.331. Brad (James): 332. 333, 334.Staun (Lucien): 278 11. 20, 279 n. Brauncr (Alfred): 240 n. Bredcro (Adriaan Hendrik): 83 11. 2. Briand (Marcel): 247 n. 39. Brierre de Bosmonr (Alexandre ]acqlJes

340, 341, 342. 347. 380. 385.

Biner (Alfred): 75 n. 14. Bini (Lucio): 210 n. 17. Binswanger (Ludwig): 399 n. 7. B1. ler (Elizabeth S.): 215 n. 25. .... Bbnche (Esprir Sylvestre): 136 n. 37, 137 n., 139, 1l O, 170 n. 8. Bleandoou (Grard): 213 n. 22. Boerha:m: (Herrnann): 283 n. 27. Boissc~l.l' (Edrnund): 160 n. 20, 369 n. 18.

Fral\l;ois): 121n.8.

n.,

139, 140, 141, 170

BriFfaut Uean~Bapris(c Lodo"!s): 350 n. 18. 13riquet (Palll): 377 11. 59. Broca (Piern: bul): 332, 334, 339, 343n.

9. 344 n" 346. 348.

Boiss\cr de Sauvages (f[;lt1 yois): 234 11. Y n.9. Bollotte (GuSt:lVe): 114 n. 1. Bongert (Yvounc): 276 11. 15. Ronnar (Lucien); 58 o., 300 n.,"401, 402.407. 408 n. 36. Bordeu (Thophile): 282 n. Hor.sov (Vladimir): 401 [1. 18. Bornernan (Ernst): 182 n. Bonorneo (Carlos, san): 200 n. 2. Bouchardcau (G.): 262 11. Bouch~Leclercq (Auguste): 284 n. 29. Boucher (Louis): 206 n. 8. BOllche, (Camil!c): 169 n. 5, 219 n. 31. Boukovski (Wladimir): 402 n.

Brochin (Hippolyte): 168 n., 211 n., 2GG n.2. Brouardd (Palll): 377 fi. 60. Broussais (Fr:lO~ois): 397. Broussard 96 n, 18_ 13ru (Pau1): 20611.7. Rrucker (Joseph.): 85 11. 6, 91 n.

en;

Bruno (Ciordano): 279 n. 2l.

Bruccin

BU!ltz (Hcrwig):

354 n. 279 J1. 21. Burckhardt (Titus): 279 n. 21. Bl1rdin (Claude): 332 n. 49.BUrlan (Marc): 404 n. 24.

(Jc;J.n~Marie):

Bus (Csar de): 92 ll. 12. Burler (Cuthben): 84 11. Buvat-PochoI1 (Christine): 170 n.

fNDICE DE NOMBRES

433

Cabrol (Fernand): 83 n. 3, 277 n. 17. Caire (Miche!): 215 n. 25. Calmeil (Louis Florentin): 238 n. 19, 294 n. 43, 351 n, 19,C:lnguilhem (Gcorgcs): .230.

Cooper (David): 390, 394, 401 n. lB,

406 n, 31, 411, 412, 416 n, 55. CDprnico (Nicols): 164.Corvisan des Marc(s Otan Nicolas}: 342 11.7. Cculmiers (Fran~qis de): 207 n. 10. COLlsin (P.urice): 1>2 n. 1, 83 n. 2. Coureaux (J.): 206 n. 8. CDX (Joscph Mason): 35. 52, 53 n. 24,

Canivez (Joseph-Marie): 83 n. j . Caquot (Andr): 284 n. 29. Caro (E[me Marie): 201 n. Cuon (Michd): 279 n. 21. Caste! (Roben): 25 n., 112 n. *, 22R n. 41, 29611.,.410 n. 41. 411 n. 44, 413 n.49. Cele lJ"n), 74 n, 13, Cclina [paciente]: 375. 376 n. 57. CCfisc (Laurcm Alexis I'hiliben): 249 n. 44, 351n. 19. Cerleni (Ugo): 210 n. 17. Chagny (Andr): 207 n. 10. Chantraine (l'ierre): 270 n. 10, 2R2 n. 25. Chaptal Oean-Antaine, conde de Chameloup): 206 n. 8. Clureor (Jean-Martin): 120, 16 11. 20, 162, 163, 230, 231) 260, 302 n. 48, 309,337,339,340,341 n, 4, 351 n, 19,356, 357, 358, 359, 360 n" 361,

152,153, lj(" 1('4, 169 n. 7. Cranefield (P'll.d): 233 n. B. Cullen (Williarn): 233 n. 7, 353 n. 24.Daquin (JDseph): 134,168 n. 4, 232 n.

G, 233

n.

y n. 9.

Dan.:mbt.:rg (Charles Vierar): 281 n., 282 n. 26, 283 n. 27, 291 n. 37. Oarwin (Charles Roberr): 262 n. 70 y 71. Darwin (Emsmus): 169 n. 7. Daumezon (Gcorgcs): 58 n., 120 n.,

362,363, 364 n. 4\, 366 n. 46, 367n., 368, 369 n. 48, 370 n. 49, 371, 373,374,375,376,377,378,379, 380,388,389,391,414,416,417. Charlesworrh (Edward): 128 o. 18. Chassaignc (Marc): 710. "ID. Chastenet (Armand Marc JacCJues de. marqus de Puysgur): 330 n. 46. Christian (Jules): 306 n. Cindad (lean): 207 o. 10. Cochin (Auguste): 109 n. 35. Cochin Oeao Dcnys Marie}: 249 n. 44. Cognet (Louis): 60 n. 4, BR n. 9. ConJillac Ctl"ienne Bonnor de}: 102. Conolly (Joho): 128 n. 11>.

300 n, Davaine (Casimir Joseph): 239 n. Davenne (Henri Jean BapliS[e): 108 n. 33,238 n. 21, 245 n, 30, 249 n, 44, 259 n. Dcchambrc (Amde): 130 n., 162 n. 21, 16~ n, y n, 2, 239 n" 282 n. 25, 306 0.,320 n. 21. Defen (Daniel): 11,4511. 11.274 n. 13, 383 n. "'. Dcfradas (Jean): 2R4 n. 29. Deb~lUssy (Jacques): 109 n. 34. Dehove (Grard): 93 n. 14. Djcrinc (Joseph Jules): 262 n. 70, 310 n, 5, 356 n. 27. Delaauve (Louis): 364 n. 4l. DeJaye (Jean~Bap(is(e): 158 n. 18,351 n, 19. Oelcllrt (Marie): 270 n. 8 y 9. Dele llze (Gilles): 112 n. "'.

434

EL PODER PSIQULTRICO

Delsam (Picrre Joseph): 222 n. 38. Demersay (Alfred): 85 n. 6. 91 n. Dcmetz (FrdricAugustc): -109 n. 35. Derrida (jacques): 327 n. 39. Dcs