El Quinteto de Los Milagros (Carlos Rodero)

8/6/2019 El Quinteto de Los Milagros (Carlos Rodero)

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El Quinteto de los Milagros 2006

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ELQUINTETO

DE LOSMILAGROS

Carlos Rodero

a partir del entremsElRetablo de las Maravillas de Miguel de Cervantes

Personajes que intervienen

Chanfalla , cmicoLa Chirinos , cmicaEscipin , cmicoPanini , la orquestaQuiones , ausente

que, a su vez, interpretan otros personajes como Teodoro Quilates el director de la oficina deimpuestos, el presidente , su mujer Leonarda, el predicador Panduro, Pancracia , AlgarroboOrtigosa el insigne crtico de arte y otros que ellos quieran.

1. La llegadaEl escenario, en penumbra, est completamente vaco. Al fondo, desde lejos se ve un pequeo

grupo de personajes que va avanzando con pasos pequeos, muy lentamente, hacia el centro delescenario. Al principio, vienen envueltos en sombras y parecen remotos. Apenas podemosdistinguirlos. A medida que se van acercando a nosotros podemos ver que son cuatro, doshombres y una mujer, y el cuarto de sexo indeterminado. Es una pequea compaa de cmicosen estado lamentable. Sucios, hambrientos, cubiertos de harapos, casi podemos percibir comolas pulgas van saltando de unos otros. Vienen cargados de maletas y bultos diversos. Cada unode ellos lleva una silla de tijera plegada, excepto Chanfalla que lleva dos. Uno arrastra un viejoarcn. Llevan tantos cachivaches que andar se convierte en algo lento y pesado. Vienen muy

juntos, formando una masa compacta y se desplazan como una gran oruga perezosa. Chanfalla,con la vista fija en el horizonte, mastica ortigas. La Chirinos, siempre con la mirada en el suelo,busca lagartijas. De vez en cuando encuentra alguna y la caza con gran agilidad, agarrndola

por la cola y metindosela en el bolsillo. Escipin va dejando una pipa de girasol en el suelocada veinte centmetros. Panini anda dormido, como si fuera sonmbulo y lleva su violn atadoa la cintura.

No se sabe de dnde vienen ni a dnde se dirigen.

Caminan.

ESCIPIN: Falta mucho?Nadie contesta.

Cunto tiempo llevamos caminando?Silencio.


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ESCIPIN: Era por aqu? Quiero decir si este es el camino. El buen camino. Si hemospasado antes por aqu... porque si no quiere decir que nos hemos perdido y, sinos hemos perdido... Cmo vamos a saber si hemos llegado o no?

CHANFALLA: Cllate.

Silencio.CHIRINOS: Falta mucho?CHANFALLA: Eso ya lo has dicho antes.ESCIPIN: Lo he dicho yo.CHANFALLA: Da igual.ESCIPIN: Si supiramos al menos cuando salimos y, por qu no, quizs tambin sera til

saber de dnde, aunque no tenemos ni idea de cunto tiempo llevamoscaminando y ese s que es un dato importante.

CHIRINOS: Algn tiempo.ESCIPIN: Algn tiempo?CHIRINOS: Llevamos as algn tiempo.ESCIPIN: Y no puedes ser ms concreta?CHIRINOS: Antes no hacas tantas preguntas. Simplemente ibas.ESCIPIN: Antes?

Silencio.

CHIRINOS: Cantamos algo para entretenernos?ESCIPIN: Por qu crees que necesitamos entretenimiento?CHIRINOS: Y Panini siempre est dispuesto a complacernos. No es verdad, Panini?

Se paran. Panini abre los ojos y bosteza.

CHANFALLA: Panini es un intil.ESCIPIN: El problema es que no tiene... que le falta un... un objetivo concreto, me

explico? Algo en lo que concentrarse...Entre los tres tratan de animar a Panini a tocar. La Chirinos y Escipin empiezan a tararear unameloda popular y Panini se pone a tocar mecnicamente. Continan caminando al ritmo de lamsica. De pronto se detienen bruscamente. Chanfalla se pone a gritar como un energmeno.

CHANFALLA: Me cago en la puta que me pari! Ya est! Algo tena que salir mal. Lo saba.Saba que algo saldra mal. Llevamos caminando... Mierda! Nosotros caminaque te camina. Todos. Sin parar, y ahora... Esto! Me cago en mis muertos, estono hay quien la aguante...

CHIRINOS: Una piedra.ESCIPIN: Es la misma de antes?CHIRINOS: No es tan grande.ESCIPIN: Chanfalla, es algo ms pequea...CHANFALLA: Y a mi que demonios me importa? Eh? T crees que a mi me importa una puta

mierda encontrarme una piedra en el camino? Crees que significa algo para muna jodida piedra?


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ESCIPIN: Y entonces qu hacemos?CHANFALLA: Eso. A ver. Qu hacemos. Puta vida.CHIRINOS: Podemos hacer lo mismo que hemos hecho antes.

Pausa.

ESCIPIN: La Chirinos ha encontrado una solucin. Qu hemos hecho antes, Chirinos?Pausa. Todos la escuchan expectantes.

CHIRINOS: Sortearla.Pausa.

ESCIPIN: Sortearla.CHANFALLA: S. Vamos a sortearla.Con gran habilidad, cada uno de ellos sobrepasa la supuesta piedra y siguen caminando ensilencio. De pronto, cuando ya han llegado ms o menos al centro del escenario, se paran. Muy

despacio, van dejando los brtulos en el suelo y miran con avidez y curiosidad a su alrededor. Seseparan y todos, menos Panini que se queda inmvil en el centro, se aventuran a explorar elespacio vaco que los envuelve.

CHIRINOS: Es aqu?CHANFALLA: Probablemente.ESCIPIN: Cmo lo sabes?CHANFALLA: No lo s.CHIRINOS: Es como las otras veces. Ms o menos igual.ESCIPIN: Pero, realmente, es aqu?CHANFALLA: Es ms o menos aqu.ESCIPIN: Ms o menos? Quieres decir que te da igual si es aqu o no.CHIRINOS: Escipin, no es necesario que seamos tan precisos.ESCIPIN: Ah, no? Si es aqu entonces es el sitio correcto. Si no es aqu, significa que

podemos estar en cualquier otro lugar y por lo tanto, estar en el lugarequivocado. Estar en el lugar equivocado sera una catstrofe de dimensionesincalculables. Has pensado en eso?

CHIRINOS: En realidad, todos los sitios son iguales. No te recuerda a nada?CHANFALLA: S. Es como los otros. Aqu est bien. Venga, Escipin, a trabajar.ESCIPIN: A trabajar?Todos, menos Panini que, aunque sigue de pie, se ha dormido profundamente, empiezan unmovimiento frentico en el que empiezan a desempaquetar sus cosas y a colocarlas por elescenario. Abren el arcn y sacan una enorme tela gastada de terciopelo rojo que dejan en elsuelo y unos andamios que irn montando progresivamente.

CHANFALLA: Hay que prepararlo todo lo ms rpido posible.CHIRINOS: Como lo hemos hecho siempre.ESCIPIN: Prepararlo todo?CHANFALLA: Venga, no te quedes ah parado.ESCIPIN: (Por Panini.) Y ste?


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ESCIPIN: Quiones?CHANFALLA: Dnde est ese hijo de puta?CHIRINOS: Se habr perdido.ESCIPIN: Pero, de qu estis hablando? Quiones, qu Quiones?CHIRINOS: No te acuerdas de Quiones?ESCIPIN: No me acuerdo de Quiones.CHANFALLA: Quiones, imbcil, es el que te da la rplica en esta escena.ESCIPIN: Y dnde est?CHANFALLA: Qu?ESCIPIN: Que dnde est.CHIRINOS: No est.CHANFALLA: Eso ya lo veo.CHIRINOS: Habr desaparecido.ESCIPIN: Si no est es porque ha desaparecido.CHANFALLA: Bien. Seguiremos sin l.ESCIPIN: Pretendes que interprete la escena sin Quiones?CHIRINOS: Ya se nos ocurrir algo. No es la primera vez que Quiones se ha esfumado.ESCIPIN: Interpretar? Pero qu es lo que estoy diciendo? Interpretar qu?(Coge de

nuevo el cuaderno y lee la primera pgina.) Retablo de las Maravillas.CHANFALLA: (Muy contento.) Eso es! Que alivio! No me acordaba del ttulo.ESCIPIN: Pero eso no es del siglo XVI?CHIRINOS: Siempre hemos hecho lo mismo.ESCIPIN: Siempre? Quieres decir que ya lo interpretbamos... entonces?CHIRINOS: Al menos es lo que se espera de nosotros. O lo que se esperaba de nosotros. Ya

lo hemos hecho otras veces. Simplemente tenemos que recordar.ESCIPIN: Habis perdido el juicio.CHANFALLA: Hemos venido hasta aqu para interpretarlo. Y vamos a hacerlo.ESCIPIN: Pero si no hay nadie. Para quin vamos a interpretar?

CHIRINOS: Ya vendrn.CHANFALLA: Venga. A trabajar.Vuelven a la actividad. Mientras estn montando lo que parece un teln, Escipin no dejar dehablar.

ESCIPIN: Que obsesin con eso de trabajar. El trabajo es una cosa que no tiene ningnsentido. De hecho me atrevera a decir que es incluso pernicioso y haperjudicado notablemente al ser humano llamado civilizado que ha enarboladosin dudarlo el estandarte de una idea turbadora y perversa. Aquella que ensalzael trabajo como una de las actividades ms nobles...

Terminan de montar el teln que colocan entre ellos y el pblico como cuarta pared.

CHANFALLA: Y ahora a esperar.


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ESCIPIN: Esperar.CHANFALLA: A que vengan.CHIRINOS: Vamos a sentarnos y esperar a que vengan.

Se sientan todos. Largo silencio. Cambian varias veces la disposicin de las sillas, el orden y la posicin en los que estn sentados.

ESCIPIN: No viene nadie.CHIRINOS: No. No vienen.CHANFALLA: Esperemos.ESCIPIN: Durante cunto tiempo?CHANFALLA: Esperaremos lo que haga falta. Esperaremos tanto tiempo como sea necesario.

Si es necesario esperaremos eternamente.CHIRINOS: Eternamente.

ESCIPIN: Eternamente?Pausa.

CHIRINOS: Hacemos algo?ESCIPIN: Mientras esperamos?CHANFALLA: Podramos.ESCIPIN: Esperar ya es en s misma una actividad agotadora.CHANFALLA: En eso te doy la razn.

Silencio.

ESCIPIN: Algo como qu?Silencio.

CHIRINOS: A mi no se me ocurre nada.CHANFALLA: A mi tampoco.

Silencio.

CHIRINOS: A Panini tampoco se le ocurre nada.ESCIPIN: Por qu no lo dice l eso?

Todos le miran.

Es mudo?CHIRINOS: Es perezoso.CHANFALLA: (Hojeando el cuaderno.) No han escrito su texto.ESCIPIN: Claro.CHIRINOS: Por eso.

Silencio.

ESCIPIN: Pues si no se nos ocurre nada no hagamos nada.CHIRINOS: Ser lo mejor.

CHANFALLA: No hagamos nada.


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Silencio.

Esperemos.

2. La preparacinHay un largo silencio. Cada uno de los personajes se distrae como puede.

CHIRINOS: Seguro que no te acuerdas de nada?ESCIPIN: Es muy molesto. Esta situacin es realmente molesta. Y lo ms molesto en

realidad es que... que... En realidad, no sabemos... no sabemos lo que, lo quetenemos que hacer. Y esta incertidumbre es... es molesta. Muy molesta. (Pocoa poco empieza a tener convulsiones que desembocan en un ataque terrible deepilepsia. Los dems tratan de ayudarle. De pronto se calma repentinamente,aunque ya no parece el mismo.) Oh t, quienquiera que fuiste, que fabricasteeste retablo con tan maravilloso artificio, que alcanz renombre de lasMaravillas por la virtud que en l se encierra, te conjuro, apremio y mando queluego incontinente muestres a estos seores algunas de las tus maravillosasmaravillas, para que se regocijen y tomen placer sin escndalo alguno!

CHANFALLA: Me cago en la puta.CHIRINOS: Se ha ido otra vez.CHANFALLA: A dnde?CHIRINOS: Est all.ESCIPIN: Ea, que ya veo que has otorgado mi peticin, pues por aquella parte asoma la

figura del valentsimo Sansn, abrazado con las colunas del templo, paraderriballe por el suelo y tomar venganza de sus enemigos.

CHIRINOS: Escipin...ESCIPIN: Tente, valeroso caballero; tente, por la gracia de Dios Padre! No hagas tal

desaguisado, porque no cojas debajo y hagas tortilla tanta y tan noble gentecomo aqu se ha juntado!(Se desmaya.)

CHANFALLA: Pero que mierda es esta...CHIRINOS: Escipin...CHANFALLA: ...que alcanz renombre de las Maravillas por la virtud que en l se

encierra...Poco a poco Escipin va recuperando el conocimiento.

CHIRINOS: Quieres ayudarme?CHANFALLA: Pero eso... Pero eso... Lo deca yo!CHIRINOS: Chanfalla!CHANFALLA: Maldito cabrn! Est diciendo mi texto!ESCIPIN: Ahora bien, contentarse ha el seor autor con que yo le d adelantados

media docena de ducados?(Trata de encontrar algo en sus bolsillos sin xito.)CHIRINOS: Eso era de su personaje.ESCIPIN: (Angustiado.) Dnde est?

CHIRINOS: Tranquilo.


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CHANFALLA: Dnde est qu?ESCIPIN: La bolsa. Yo tena una bolsa.CHANFALLA: De qu mierda ests hablando?CHIRINOS: La bolsa con el dinero.ESCIPIN: Media docena de ducados.CHANFALLA: Joder. Basta ya! Djate de historias y vuelve ahora mismo, me oyes? Ahora

mismo! O te parto la cara.ESCIPIN: Qu pasa? Por qu nos hemos parado?CHIRINOS: Escipin...ESCIPIN: Qu?CHIRINOS: Te has ido otra vez.ESCIPIN: Y ya he vuelto?CHANFALLA: Eso parece.CHIRINOS: Dime, Escipin, cmo era?ESCIPIN: Era... era en un lugar... como ste.CHIRINOS: No recuerdas nada ms? No has visto a nadie?ESCIPIN: S. Pero era... distinto.CHIRINOS: Distinto?ESCIPIN: Sus ropas...CHIRINOS: Cmo eran sus ropas?ESCIPIN: Antiguas. Muy antiguas.CHANFALLA: Djale, Chirinos. Sabes de sobra que no es la primera vez. Nunca nos cuenta

nada concreto. Adems, siempre se confunde y se apropia de mi texto. Esaparte siempre la he dicho yo.

CHIRINOS: Se la sabe de memoria.CHANFALLA: Quin sabe cuntas veces la habremos repetido. Siempre pasaba lo mismo.

(Pausa.) Ms o menos.ESCIPIN: Qu pasaba, Chanfalla?CHIRINOS: Llegbamos.ESCIPIN: (Haciendo un esfuerzo por recordar.) Llegbamos.CHIRINOS: No importaba dnde. Cualquier lugar serva. Eran todos iguales.ESCIPIN: No importaba dnde.CHIRINOS: Y preparbamos el retablo.ESCIPIN: (Recordando.) El retablo.CHIRINOS: Cuando ya habamos preparado el retablo, Panini pona las candilejas.(Panini

empieza a colocar una hilera de velas en el suelo, frente al teln, y las vaencendiendo.) Y t, Chanfalla, gritabas aquello de...

Chanfalla, de pronto, tiene un ataque parecido al de Escipin y de un salto, se sube a una silla y empieza a pregonar.


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CHANFALLA: Atencin, seores, que comienzo. Oh t, quienquiera que fuiste, quefabricaste este retablo con tan maravilloso artificio, que alcanz renombre delas Maravillas por la virtud que en l se encierra, te conjuro, apremio y mandoque luego incontinente muestres a estos seores algunas de las tus maravillosasmaravillas, para que se regocijen y tomen placer sin escndalo alguno!

ESCIPIN: Pero por qu hablas as?CHANFALLA: As cmo?CHIRINOS: La verdad es que suena un poco... arcaico.(Imita la actuacin de Chanfalla,

repitiendo algunas de las frases que ha dicho ste.) CHANFALLA: Arcaico? As se escribi, as me lo aprend y as lo he dicho siempre.CHIRINOS: Pero ahora es diferente.ESCIPIN: Ahora?CHIRINOS: Llevamos mucho tiempo caminando.

ESCIPIN: (Sin entender.) Ya.CHANFALLA: Qu pretendes? Que lo diga de otra manera?CHIRINOS: Podemos intentarlo.(Mirando fijamente a Escipin.) El primero en llegar era...

A ver... era... S! El director de la oficina de impuestos!ESCIPIN: ...de la oficina de impuestos. Pero, cmo lo hago?CHIRINOS: Djate llevar. Algo moderno.

Escipin improvisa una escena disparada.

Escipin... Qu haces?

ESCIPIN: Es un smbolo!CHANFALLA: (A Chirinos.) T dale cuerda...CHIRINOS: No, no. Es demasiado... alternativo. Ven, mira.(Le muestra cmo hacerlo.

Escipin copia sus movimientos.) Eso. As. Venga.Rpidamente, Escipin se convierte en Teodoro Quilates, tesorero del estado y director

principal de la oficina de impuestos.

QUILATES: Seores, no perdamos tiempo.CHANFALLA: Le estbamos esperando, seor...QUILATES: Teodoro Quilates.(Les da una tarjeta que coge la Chirinos.) Soy el responsable

de las cuentas del estado. No pretendern ustedes que el seor presidente sepague las diversiones de su bolsillo.CHANFALLA: Claro que no.CHIRINOS: Aqu dice Eufrasio Barbanegra.QUILATES: Era mi predecesor en el cargo. Pero como bien sabe usted, seorita, el estado

es deficitario y es preciso llevar una poltica de ahorro. Las usar hasta que seacaben y despus mandar imprimir las mas.

CHANFALLA: Ha trado usted lo que acordamos?QUILATES: Trescientos mil.

CHANFALLA: Eso no es lo que acordamos.


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QUILATES: Claro que no. Sera un cretino si le pagara lo que acordamos. El precio lo pongosiempre yo. Si a usted le hace ilusin pensar que est regateando conmigo...No, no. Yo le pago trescientos mil ahora, en calidad de adelanto y otrosdoscientos mil cuando hayamos terminado. Usted acepta o no acepta.

CHANFALLA: Acepto.QUILATES: Ha trado usted la factura?CHANFALLA: Qu factura?QUILATES: No ha trado usted la factura.CHANFALLA: Pues...QUILATES: No hay problema. Yo preparar una.CHANFALLA: Usted?QUILATES: Yo mismo. No se preocupe. Tengo mucha prctica.(Empieza a escribir en un

talonario.) Habr que calcular un porcentaje por debajo del Impuesto sobre elvalor aadido y otro por encima del impuesto de sociedades que cubra partedel valor que perdemos con la diferencia entre los dos porcentajes y descontarel otro porcentaje que tendrn ustedes que desembolsar el mes que viene sinolvidarnos de la retencin fiscal necesaria para afrontar este terrible ao deinflacin que se nos viene encima. Esto, descontando la Ayuda para la prontaliquidacin de la Deuda Externa y aplicando los clculos pertinentes nos quedaen... (Garabatea en el papel, lo arranca y se lo da a Chanfalla.)

CHANFALLA: Cuarenta mil?QUILATES: Oh. Perdone. Que despiste. He olvidado descontar la cantidad proporcional

para la Seguridad Social.(Corrige algunos datos en la factura.) Tenga.

CHANFALLA: Pero, hombre, no siga usted descontando...CHIRINOS: (Que ha cogido el papel.) Si esto sigue as al final tendremos que pagarle

nosotros.QUILATES: En ese caso pueden ustedes hacerlo en cantidades fragmentadas. Aqu tienen.

(Les de una bolsa de monedas. Estupor general.)

CHANFALLA: (Abre la bolsa y comprueba que son monedas antiguas.) Pero qu mierda esesto? Es que quiere usted estafarnos? Estas monedas ya no sirven.

QUILATES: Yo...CHANFALLA: Haga el favor de pagarnos en billetitos de uso corriente o tendremos un

disgusto.QUILATES: Claro, claro. Disculpe. No s lo que habr ocurrido.(Le da algunos billetes.)

Bien. Entonces, ya est todo preparado?CHANFALLA: S. S. Bueno. Estamos esperando que llegue el camin. Con los decorados. Ya

sabe.QUILATES: Decorados?CHIRINOS: Algo nico de verdad.QUILATES: Es necesario?CHANFALLA: Por supuesto. Nuestro espectculo no sera lo mismo sin unos decorados...

CHIRINOS: ...fastuosos...


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CHANFALLA: ...elegantes...CHIRINOS: ...costosos...CHANFALLA: ...rutilantes...QUILATES: Basta, basta. No se cansen conmigo. Pero actores... Hay actores?CHANFALLA: Vaya pregunta. Cmo se puede entender el teatro sin actores? Los mejores.QUILATES: Ver, yo no entiendo mucho de teatro.CHIRINOS: Ni falta que hace.QUILATES: Cmo?CHANFALLA: Mi colega quiere decir que no es necesario conocer los entresijos de nuestro

arte para apreciarlo como es debido. Para disfrutar de semejante espectculotan slo es necesario...

CHIRINOS: Un par de ojos.

CHANFALLA: Eso es. Y algo de... de...CHIRINOS: Imaginacin.CHANFALLA: Imaginacin. Es usted un hombre imaginativo?QUILATES: Desde luego que no.

Pausa.

CHANFALLA: Ah.QUILATES: Qu pasa? Hay algn problema?CHANFALLA: Para disfrutar de nuestro espectculo se necesita... se necesita imaginacin.

QUILATES: Pues yo, por suerte, he nacido sin ese defecto.CHIRINOS: Qu suerte.CHANFALLA: Bueno, en realidad, con, digamos, slo un poquito sera suficiente.QUILATES: Nada.CHANFALLA: Nada de nada?QUILATES: Ni lo ms mnimo. Soy un hombre sano, seorita. La imaginacin es una de las

peores lacras de la humanidad. Qu digo. La peor. Ha causado siempre lospeores desastres. Un hombre de nuestro tiempo no puede permitirsesemejantes debilidades.

CHIRINOS: Pues entonces creo que no va a disfrutar nada con nuestro espectculo.CHANFALLA: Chirinos, estamos aburriendo a este seor.QUILATES: No se preocupe por eso. De todos modos difcilmente hubiera podido apreciar

su espectculo.CHANFALLA: Ah, no?QUILATES: Soy miope. Profundamente miope.CHANFALLA: (A Chirinos.) Miope.CHIRINOS: (A Quilates, cogindole las gafas y ponindoselas.) Pero... miope miope?

QUILATES: Es imprescindible para hacer bien mi trabajo.(Chanfalla empieza a imitar losruidos de un camin que se va acercando.) Qu es ese ruido?


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CHANFALLA: Chirinos, el camin. Los decorados.QUILATES: Seorita, devulvame mis gafas.CHIRINOS: El camin. El camin.(Chanfalla va reproduciendo todos los sonidos: el motor,

los frenos, etc.)

CHANFALLA: Chirinos, cuidado con las gafas del seor. Si se caen al suelo las ruedas delcamin pueden aplastarlas.

QUILATES: No! Cuidado con mis gafas. Valen un dineral.CHANFALLA: Chirinos!Entre los dos pisotean las gafas de Quilates haciendo el ruido necesario para hacerle creer quelas ha aplastado el camin imaginario.

QUILATES: Qu ha pasado?CHANFALLA: Ya te lo dije, insensata. Devulvele las gafas al seor.

La Chirinos le da a Quilates lo que ha quedado de las gafas.

CHIRINOS: No sabe cunto lo siento...QUILATES: Mis gafas...CHANFALLA: Estamos consternados...CHIRINOS: Bueno, bueno. No es para tanto. Hay que ser optimista. Con lo que se ha

quedado usted de comisin se compra otras.QUILATES: Mis gafas...CHANFALLA: Ahora, con su permiso, vamos a descargar el camin y a montar los decorados.

Chirinos! Escipin! Rpido!

ESCIPIN: Pero yo no puedo. Estoy interpretando a Quilates. Eso tendra que hacerloQuiones.CHANFALLA: No digas estupideces. Quiones no est.ESCIPIN: Y qu hago con Quilates?CHANFALLA: Y a m qu me explicas? Sintalo ah.CHIRINOS: (A Quilates.) Sintese aqu, seor Quilates, hasta que hayamos terminado.Entre los tres representarn la pantomima de descargar y montar los aparatosos decoradosimaginarios antes la presencia de Quilates, que observar impasible, haciendo alguna

pregunta de vez en cuando, lo que obligar a Escipin a desdoblarse continuamente.

CHANFALLA: Qu le parece, seor Quilates? No me diga que no es digno de admiracin.QUILATES: Estoy convencido de que al seor Presidente le va a impresionar.CHANFALLA: Y no ha visto a usted la orquesta.QUILATES: No he visto nada.CHANFALLA: Nuestra Filarmnica.(Seala a Panini que est sentado sacndole brillo a su

violn.) Ms de 90 msicos. Todos ellos perfectamente compenetrados. Con unaseccin de cuerda de altsima calidad. Por no hablar de la seccin de vientoque... que... Y los percusionistas mundialmente reconocidos!

Va describiendo la composicin de esta orquesta imaginaria, ayudado por la Chirinos, que consus palabras y su pantomima la recrearn para Quilates interpretando una conocida sinfona.


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(A Escipin.) Aydanos, demonios.Escipin deja su papel de Quilates para unirse al juego de Chanfalla y la Chirinos. Termina lamsica. Escipin que ha terminado haciendo el papel del director de orquesta, totalmenteextenuado, recupera el personaje de Quilates.

CHIRINOS: Qu?CHANFALLA: Qu le ha parecido?QUILATES: Ver usted. Schubert me deja fro. Siempre tengo la sensacin de que era un

ser desquiciado, incapaz de controlar sus fluctuantes estados de nimo, quecompona como consecuencia de sus ataques manaco-depresivos y terminabacon los nervios destrozados. A nuestro presidente le va a encantar.

CHIRINOS: Entonces llegaba el gobernador. No. El presidente.ESCIPIN: No. No podemos continuar.CHANFALLA: Qu te pasa ahora?

Escipin recupera el guin de la obra y se lo muestra a Chanfalla.ESCIPIN: Mira. No podemos seguir sin Quiones. l era el que siempre haca de

gobernador. De presidente.CHIRINOS: Eso es verdad.CHANFALLA: No vamos a pararnos por una insignificancia como esa... Adems, pensad en la

de veces que hemos actuado sin Quiones. No le necesitamos para nada.CHIRINOS: Eso es verdad.ESCIPIN: Muy bien. Y entonces quin va a interpretar al presidente? Eh?

Pausa.

CHANFALLA: Yo.ESCIPIN: T?CHANFALLA: S. Yo.ESCIPIN: No me hagas rer.CHANFALLA: Qu insinas?ESCIPIN: Quieres saberlo?CHANFALLA: Claro que quiero saberlo.ESCIPIN: Olvdalo.CHANFALLA: Ni hablar.ESCIPIN: Es mejor que me calle.CHANFALLA: Di lo que ests pensando.ESCIPIN: En serio?CHANFALLA: En serio.

Pausa.

ESCIPIN: T no eres un buen actor.(Pausa.) Quiero decir que eres bastante malo.(Pausa.) No, Chanfalla, no me mires as. De hecho ni siquiera eres actor. Tusinterpretaciones siempre han sido mediocres, insulsas. Te falta... chispa. Eres


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ms bien mediocre. Y el personaje del presidente tiene que interpretarlo unbuen actor.

Pausa.

CHANFALLA: Conoces alguno?

ESCIPIN: Bueno. S. Desde luego. S. Veamos.(Pausa.) Yo.Silencio.

CHANFALLA: Y conoces alguna otra compaa que se muera de ganas de contar contigo?ESCIPIN: Qu quieres decir? Vamos, vamos. No te lo tomes as.CHANFALLA: Escipin.ESCIPIN: Dime.CHANFALLA: Quin es el empresario de esta compaa?ESCIPIN: Pero hombre...CHANFALLA: Quin, Escipin?ESCIPIN: T.CHANFALLA: Y dime, Escipin, qu piensas de m como empresario?ESCIPIN: Eres el empresario perfecto.CHANFALLA: Quin procura explotarte sin tener en cuenta tus necesidades?ESCIPIN: T.CHANFALLA: Quin te paga lo menos posible?ESCIPIN: T.CHANFALLA: Y quin toma las decisiones sin importarle una mierda lo que t opinas?CHIRINOS: Vamos, Chanfalla. Ests siendo demasiado duro con l. El pobre chico merece

una oportunidad despus de tanto tiempo.CHANFALLA: Chirinos, cierra tu maldita boca podrida ahora mismo.CHIRINOS: Por qu las cosas siempre tienen que ser iguales? Por qu no pueden cambiar?CHANFALLA: Chirinos, se me est acabando la paciencia.CHIRINOS: Tienes miedo?CHANFALLA: Miedo? De qu?

CHIRINOS: De que Escipin le de una, digamos, una nueva visin al personaje. Ms actual,ms... ms fresca...

CHANFALLA: Crees que tengo miedo de que este pedazo de mierda lo haga mejor que yo?CHIRINOS: Es una posibilidad.CHANFALLA: Muy bien. De acuerdo. Vale. Vamos a ver. Haremos una prueba. Y el mejor de

los dos se queda con el personaje. Os parece bien?ESCIPIN: Por mi, perfecto. Pero, quin juzgar el que lo haga mejor?CHIRINOS: Yo.CHANFALLA y ESCIPIN: T?CHIRINOS: (Por Panini.) No pretenderis que lo decida este tarado? Ser justa.


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Silencio.

Preparados? Panini. Msica.(Panini interpreta algo as como un himno.) Elseor presidente, despus de que el implacable partido de la oposicin hayapresentado su mocin de censura, se dispone a hacer su comparecencia en elParlamento para defender su gestin.

CHANFALLA: (Interpretando al Presidente que lee de un papel a gran velocidad.) Seoras yseores diputados. Agregando a la coyuntura su supuesta iniciativa deresolucin que con el debido respeto me dispongo a cotejar con las insalvablesy arduas prerrogativas del acuerdo, no sanciono sin la carga de significados quepueda contener la presente reivindicacin de derechos y libertades, sino que,con la consabida referencia a los marcos legales y administrativos vigentes,confirmo la lnea de prestaciones al requerimiento haciendo constar mi prontaadhesin a la decisin bilateral irrenunciable, as como a la aprobacin de lasmedidas consabidas en un plazo de algn tiempo poco ms o menos. Y con esto,dejo clara mi postura y la de mi partido.

La Chirinos y Escipin se convierten en periodistas que empiezan a acosar al presidente a preguntas.

PERIODISTA 1: Seor presidente, qu tiene que decir ante las constantes acusaciones demalversacin de fondos para la financiacin de su partido...

PERIODISTA 2: ...manipulacin ilegal del resultado de las ltimas elecciones...PERIODISTA 1: ...y encumbramiento de algunos cargos dentro del gobierno para devolver

antiguos favores?El presidente tratar de responder todas las preguntas fracasando estrepitosamente.

PERIODISTA 2: Son ciertos los rumores de que durante su juventud defenda la legalizacin dela marihuana y su promocin entre los miembros de la tercera edad?

PERIODISTA 1: Tiene una idea aproximada de lo que vale una barra de pan?PERIODISTA 2: Se han agotado los fondos del estado por culpa de sus constantes desmanes en

centros comerciales, salas de juego y locales de alterne?PERIODISTA 1: Un billete de autobs?PERIODISTA 2: Es cierto que ha humillado y maltratado en ms de un ocasin a Horacio, el

gatito de su hijo pequeo?PERIODISTA 1: Una botella de leja?PERIODISTA 2: Tiraba cubiertos y otra clase de utensilios de cocina al jardn de su vecino a

altas horas de la madrugada?Chanfalla, agotado, termina con la intervencin.CHIRINOS: Bravo! Escipin. Tu turno. Panini.(Se repite la misma msica.) El seor

presidente, despus de que el implacable partido de la oposicin hayapresentado su mocin de censura, etc., etc., etc.

ESCIPIN: (Pretende cogerle el papel del discurso a Chanfalla, pero este lo rompedelante de sus narices.) S. Bien. Seores diputados. Y seoras. En las actualescircunstancias slo puedo decir que mi gestin ha sido limpia y honrada. Todaslas medidas que hemos tomado han sido largamente meditadas y ahora hay quetener paciencia para comprobar los resultados. Pueden creer que mi inters esel bien de nuestro pas y que todo lo que hago lo hago pensando en mejorar lasituacin de los ciudadanos y, que, con su apoyo y ayuda, creo que lograremossuperar todas las dificultades y...


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Chirinos y Chanfalla le abuchean.

CHIRINOS: Ya. Y lo siguiente es que bajar los impuestos, subir los salarios y laspensiones, mejorar el sistema educativo, privatizar los hospitales y laSeguridad Social y llenar la capital de zonas verdes.

ESCIPIN: Estoy hablando completamente en serio.CHIRINOS: Muy bien. Hemos terminado. No hay preguntas.CHANFALLA: Entonces?CHIRINOS: Qu?ESCIPIN: Quin?CHIRINOS: Quin qu?CHANFALLA: Pues a quin coo eliges!CHIRINOS: Ah.(Silencio.) A Chanfalla. T no sirves como presidente.

ESCIPIN: Pero...CHANFALLA: Basta! Ya lo has odo. Yo interpretar al presidente. Venga. T a lo tuyo.

Escipin retoma el personaje de Quilates.

QUILATES: Seores. El seor presidente est a punto de llegar.Chanfalla se prepara para interpretar el papel del presidente y, entre Escipin y la Chirinosorganizan las cosas para recibirle. Extienden una larga alfombre roja y montan en el extremoun pequeo podium y un micrfono.

CHIRINOS: La muchedumbre exaltada espera ansiosa la llegada del seor presidente.Todos han venido a recibir a este hombre egregio y no cabe ni una aguja en la

plaza central de la ciudad. Aplausos y gritos de bienvenida. (Chanfalla, yacomo presidente, recorre la alfombra roja. La Chirinos, que se hacaracterizado como la puta Pancracia, camina junto a l, cogida de su brazo.

Junto al micrfono les espera Quilates.)

QUILATES: Seor presidente, por aqu...(Descubriendo a Pancracia.) Pero, quin es esta?PANCRACIA: (Al presidente.) Como te has portado muy bien conmigo tengo un regalito para

ti.PRESIDENTE: Un regalo?PANCRACIA: Ya vers como te gusta.PRESIDENTE: Para m? Dnde est?PANCRACIA: Qu impaciente es mi tigre.PRESIDENTE: Dime donde est, gatita.

Pausa.

PANCRACIA: Aqu.(Seala su escote.)PRESIDENTE: Aqu dentro?PANCRACIA: Est muy bien guardado.PRESIDENTE: Qu es? Venga, dime qu es.PANCRACIA: Tienes que cogerlo t solito.PRESIDENTE: S. Voy a cogerlo.


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PANCRACIA: (Se re.) Me haces cosquillas.PRESIDENTE: Te gustan las cosquillas.PANCRACIA: Me gustan tus dedos grandotes.QUILATES: Seor presidente, los actores nos estn esperando...PRESIDENTE: Qu suave ests, gatita.PANCRACIA: Qu fuerte eres, tigre mo.PRESIDENTE: Yo tambin tengo algo para ti.PANCRACIA: De verdad? Dnde?PRESIDENTE: Donde siempre.Pancracia mete la mano en el bolsillo del pantaln del presidente y saca una papelina de droga.

ESCIPIN: Bueno, basta.CHANFALLA: Qu pasa ahora?ESCIPIN: Esta no puede ser la mujer del presidente.CHIRINOS: Por qu no?ESCIPIN: Porque es... porque... Vamos, que es una... cualquiera.CHIRINOS: Qu te pasa? Ests celoso?ESCIPIN: Necesitamos otro tipo de mujer. Una mujer inteligente y calculadora, capaz de

apoyar a su marido en los asuntos de estado, independiente y decidida, querealice todo tipo de actividades paralelas a la gestin del jefe del estado.Paralelas, pero complementarias, que impulse la obra social y cultural y que lede hijos sanos capaces de sustituir a su padre si fuera necesario. Si el seorpresidente quiere divertirse, no debe preocuparse porque eso podemossolucionarlo. En privado. Pero para los actos pblicos necesitamos otro tipo demujer. Es esta en la que est usted pensando?

Chanfalla mira a Pancracia contrariado.

CHIRINOS: Pues interprtala t que eres tan listo.(Le tira la peluca a Escipin. Este se la pone y se convierte en la autntica mujer del presidente.)

LEONARDA: (Al presidente.) Rodrigo, La representacin est a punto de empezar y tienesque decir unas palabras. Lo que hemos preparado en casa, de acuerdo?

PRESIDENTE: Claro, claro.

Se acerca al micrfono. Leonarda se coloca a su lado y saca unos apuntes. Silencio. Parece queal presidente le cuesta mucho trabajo hablar. Se congestiona y empiezan a aparecer algunostics. Finalmente empieza a farfullar cosas que son imposibles de entender.

La mujer del presidente empieza a soplarle a su marido el discurso que debe decir.

LEONARDA: Queridos contribuyentes.PRESIDENTE: Mayonesa en las lentes.LEONARDA: Estoy orgulloso de estar hoy aqu con vosotros, despus de haber recibido en las

ltimas elecciones vuestro apoyo y confianza.PRESIDENTE: Amenizo el parto de ciento veintids potros, aunque no haya rezumado nada de

ese enano ni su inexplicable adivinanza.LEONARDA: Prometo liberar a este pas de la opresin econmica...


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PRESIDENTE: Amaso prolijo la crema de una berenjena ergonmica...LEONARDA: ...rebajar los impuestos y anular la deuda externa...PRESIDENTE: ...recrear los tiestos y romperme otra vez la pierna...LEONARDA: Muchas gracias a todos.PRESIDENTE: Tengo un saco de codos.QUILATES: Seor presidente, permtame que le presente a la compaa de actores... El

seor presidente en sus ratos libres escribe dramas.CHIRINOS: En serio? Tal vez nosotros podamos interpretar alguno.PRESIDENTE: Bueno... yo, no s. Es un pasatiempo. Pero, s. No est bien que yo lo diga...

pero hay alguno bastante bueno. Y eso que van a representar ustedes... Quines el autor?

CHIRINOS: Autor? No tiene autor.PRESIDENTE: Eso tiene mucho mrito.LEONARDA: Y qu es exactamente lo que vamos a ver, seorita?

Silencio. Parece que la Chirinos no sabe muy bien qu decir.

CHIRINOS: El mayor... y ms... increble espectculo del mundo.(Se queda parada, muy deprimida. Largo silencio.)

CHANFALLA: Qu pasa?ESCIPIN: Lo nunca visto. Ahora dice Lo nunca visto. Despus de El mayor y ms

increble espectculo del mundo. CHANFALLA: No, no. Despus de El mayor y ms increble espectculo del mundo vena

eso de Alabado unnimemente por la crtica. ESCIPIN: Te confundes. Dice Lo nunca visto. Lo de Alabado unnimemente por lacrtica es en la segunda parte.

CHANFALLA: Maldita sea.(Va a buscar el guin y lo consulta.) Aqu est. (Lee en voz alta.)El mayor y ms increble espectculo del mundo. Se queda parada, muydeprimida. Largo silencio. CHANFALLA: Qu pasa? ESCIPIN: Lo nunca visto.Ahora dice Lo nunca visto. Despus de El mayor y ms increble espectculodel mundo. CHANFALLA:No, no. Despus de El mayor y ms increbleespectculo del mundo vena eso de Alabado unnimemente por la crtica.ESCIPIN:Te confundes. Dice Lo nunca visto. Lo de Alabado unnimementepor la crtica es en la segunda parte. (Pausa.) Maldita sea.

Silencio. Desconcierto general. Se miran unos a otros con desesperacin. Chanfalla arranca una pgina del guin. Y lee el principio de la siguiente.

CHANFALLA: (A Escipin.) Y qu es exactamente lo que vamos a ver, seorita? LEONARDA: Y qu es exactamente lo que vamos a ver, seorita?CHIRINOS: Es un espectculo nico, seores. Pueden creerme. All donde lo hemos

representado ha tenido un xito sin precedentes.PRESIDENTE: Y por qu es tan bueno?CHIRINOS: Es muy...

QUILATES: Tiene que ser muy bueno. No me atrevo a decirle lo que nos ha costado, seorpresidente.


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ESCIPIN: Realista.CHIRINOS: S. Es muy realista.ESCIPIN: Excepcionalmente realista.CHIRINOS: Lleno de momentos sugerentes.ESCIPIN: De ideas profundas.CHIRINOS: Muy profundas.ESCIPIN: De... de... personajes de carne y hueso con una tragedia que contarnos. Una

tragedia muy... muy...CHIRINOS: Trgica.ESCIPIN: Y realista.CHIRINOS: S. Realista tambin.

Pausa.

PRESIDENTE: Me gustan mucho las obras realistas.CHIRINOS: Ah, s?PRESIDENTE: Mis obras tambin son realistas.CHIRINOS: Qu bien. Pero, seor presidente, tiene usted que saber algo.PRESIDENTE: Es una obra triste?CHIRINOS: Eso no es lo peor. La obra tiene tambin momentos cmicos.PRESIDENTE: Qu pena.CHIRINOS: Bueno. Cmicos pero en realidad muy tristes.PRESIDENTE: Eso es otra cosa.CHIRINOS: Ya sabe usted que la tragedia y la comedia son las dos caras de la mismamoneda.PRESIDENTE: Una moneda que siempre cae por la misma cara.CHIRINOS: Ya veo que me entiende. Usted es el espectador ideal.PRESIDENTE: Usted cree?CHIRINOS: Estoy segura. Es que, ver, nos ha pasado algunas veces, pero pocas, eso

tambin hay que decirlo, no muy a menudo, pero s a veces, algunas veces,pues han habido algunos espectadores que... que al final de la obra, cuando yahabamos terminado de representarla...

PRESIDENTE: Siga, seorita.CHIRINOS: Pues nos han dicho...PRESIDENTE: Qu?CHIRINOS: Qu no haban visto nada.PRESIDENTE: No me diga.CHIRINOS: Se lo juro.PRESIDENTE: Pero cmo es posible?

CHIRINOS: Este es el problema de nuestro tiempo, seor presidente. El ciudadano mediose ha entregado sin remedio a la tecnologa hasta el punto de que su mente se


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ha atrofiado de tal manera que le impide disfrutar de cualquier obra artsticadejando su espritu irremediablemente vaco y seco.

PRESIDENTE: Qu barbaridad.CHIRINOS: S. Es horrible.

PRESIDENTE: Y no se puede hacer nada?CHIRINOS: Creo que no.(Pausa.) Slo hombres como usted, seor presidente de la nacin,

que todava mantienen en su interior la llama de la creatividad encendida,pueden redimir de tanta mediocridad a sus conciudadanos y dar ejemplo detener una amplia visin que todo lo abarque.

PRESIDENTE: Puede usted contar con ello.CHIRINOS: No tenemos la menor duda de que usted podr apreciar nuestro espectculo

como se merece.PRESIDENTE: Desde luego que s.

QUILATES: La escenografa nos ha costado un rin.CHIRINOS: Acrquese, seor presidente.

Se acercan a la boca del teln. El presidente contempla absorto la nada. Largo silencio.

PRESIDENTE: Asombroso.CHIRINOS: Verdad?PRESIDENTE: Es... Es...CHIRINOS: Asombroso.PRESIDENTE: Y realista.

CHIRINOS: Qu le parecen esos telones sabiamente decorados con motivos renacentistaspero al mismo tiempo rabiosamente contemporneos?PRESIDENTE: Pues...CHIRINOS: Deliciosos.PRESIDENTE: Eso.CHIRINOS: Y esas escalinatas que giran sobre s mismas creando espacios continuamente

que se multiplican los unos a los otros?Pausa.

Sublimes.PRESIDENTE: Sublimes.

Panini se pone a tocar.

Es tan bonito que slo con verlo es como... como si escuchara una msica dulcey celestial...

CHIRINOS: De verdad?PRESIDENTE: S, s. La estoy oyendo ahora mismo.

Pausa.

CHIRINOS: Seor Presidente. Es usted nuestro hombre.Por la alfombra, llega ahora Escipin convertido en monseor Panduro. Camina despacio con unalzacuello y un libro grande y pesado entonando algo as como cantos gregorianos.


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CHANFALLA: (A Chirinos.) Dejemos al seor presidente contemplando nuestros decorados ydemos la bienvenida a monseor Panduro. (Caminan hacia l.) Ah. Bienvenido,monseor Panduro. Le estbamos esperando.

CHIRINOS: Ah. Bienvenido, monseor Panduro. Le estbamos esperando.

Les hace un gesto para que guarden silencio y termina la cancin.PANDURO: La paz con vosotros, hermanos. S. El seor ha hablado.(Pausa.) El seor me ha

hablado. Oh, s. (Pausa.) El seor habla conmigo. Y me dice...(Pausa.) Que medices, seor? Oigo tu voz y s que me hablas. Me hablas y me dices algo.(Pausa.) Me dices que te escuche. Que te escuche cuando hablas. Y... (Pausa.)Y me dice tambin, oh, s, que os comunique, que os comunique a todos y cadauno de vosotros aquello, aquello que me dice.

Chanfalla le da un manotazo a Escipin que sale de su personaje.

ESCIPIN: Qu haces?CHANFALLA: Me cago en la puta madre que te pari.(A Chirinos.) Lo ves? Lo est haciendo

otra vez?ESCIPIN: Qu estoy haciendo?CHANFALLA: Improvisar. Ests improvisando.ESCIPIN: Por qu dices eso?CHIRINOS: Escipin, esta entrada era ms corta. Ests improvisando.ESCIPIN: Bueno, a lo mejor un poquito, pero muy poco.CHANFALLA: Muy poco. Me he pasado la vida dicindote que eso es lo ltimo que hay que

hacer, que no se puede improvisar hombre, que te cargas la obra, que lo jodestodo, maldito exhibicionista de mierda, todo menos improvisar, entiendes?Nada de improvisar.

ESCIPIN: Vale, vale.CHANFALLA: Que no tenga que volver a decrtelo.CHIRINOS: Monseor, hemos preparado un espectculo que estamos seguros ser de su

agrado.PANDURO: No lo dudo. No lo dudo.CHIRINOS: Es muy edificante.PANDURO: Eso est bien.

CHIRINOS: Es un ejemplo para todos nosotros.PANDURO: Muy bien, hija ma. De qu trata?CHIRINOS: Mucha gente lo ha visto ya, monseor, aunque, y eso s que no nos lo

explicamos, se ha dado algn caso de... de... Mire usted que es raro.PANDURO: De qu? Habla, hija ma.CHIRINOS: No me atrevo, ante su presencia.PANDURO: Vamos, vamos.CHIRINOS: Quiz pueda usted aconsejarnos, la verdad es que estamos perdidos.

PANDURO: El que se ha perdido se encuentra en los brazos del seor.


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CHIRINOS: Pues es que resulta muy extrao, pero no se puede negar... No. No se lo puedodecir.

PANDURO: Venga, hija ma que estoy perdiendo la paciencia. Habla sin miedo. Nosotros,en el ejercicio de nuestra misin, hemos visto ya muchas cosas. Estamosacostumbrados a todo.

CHIRINOS: A todo, monseor?PANDURO: Qu intentas decirme?CHIRINOS: Pues resulta que... que algunas personas con... con problemas, digamos,

venreos...PANDURO: Venreos?CHIRINOS: S, ya sabe. Del sexo.PANDURO: Pobre gente. Afectados de enfermedades venreas...CHIRINOS: S, muy afectados. De enfermedades venreas. Por masturbarse tanto...PANDURO: Hija ma, las enfermedades venreas no son producidas por la masturbacin.CHIRINOS: Ah no?PANDURO: Claro que no. Hoy en da ya nadie cree en esas cosas. El abuso de la

masturbacin como mucho, provoca prdida de la visin.CHIRINOS: Eso. Prdida de la visin. Es eso lo que pasa. Las enfermedades venreas no

provocan tambin prdida de la visin?PANDURO: S, tal vez tengas razn.CHIRINOS: Y es que hay ms.

PANDURO: Muchacha, me ests asustando.CHIRINOS: El Sndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.PANDURO: Jess. La terrible plaga de nuestro siglo.CHIRINOS: Tambin afecta terriblemente a la visin.PANDURO: Y qu quieres decir con todo eso? A dnde vas a parar?CHIRINOS: Pues que los que padecen enfermedades venreas, se masturban demasiado y

tienen el... el Sndrome de Inmunodeficiencia Adquirida no pueden disfrutar denuestro espectculo.

PANDURO: Y por qu no?

CHIRINOS: Porque no lo ven.Silencio.

PANDURO: El seor tenga piedad de nosotros. No lo ven. Pobrecitos.CHIRINOS: S, pobrecitos.PANDURO: Estoy seguro de que eso tendr alguna explicacin cientfica. Prometo

ayudarte.CHIRINOS: Gracias, monseor. Qu reconfortante es hablar con usted.PANDURO: (Se sienta.) Bueno, bueno. No ha llegado el seor general?

Chanfalla entra a grandes zancadas por la alfombra con una gorra de general.


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GENERAL: Trece.(Pausa.) He contado trece. Trece hombres. Usted cree que sonsuficientes? Trece? Incrementamos el presupuesto para seguridad. Y slo haytrece hombres. Seguridad. Hay poca. Ninguna. No hay seguridad. Trecehombres son pocos. Trece. Es un nmero horrible. Es muy poco seguro.

CHIRINOS: General, ya estamos todos. Sintese aqu, por favor. No. En esa silla no. En esatampoco. Tampoco, tampoco. En sta. Sintese en esta silla. Cuando quieranempezamos con la representacin.

GENERAL: Teatro? El teatro me pone nervioso. Ms que la pera. Es inseguro. La pera esms segura. Puedo dormir ms tranquilo. En un rinconcito del palco. En elteatro estoy tenso. Cuando duermes eres vulnerable. Tambin me duermo en elteatro. Pero es un sueo intranquilo. No me siento seguro.

CHIRINOS: Pero si se duerme, mi general, no disfruta usted del espectculo.GENERAL: Yo no disfruto. Al contrario. Me pongo nervioso. Todo es confuso. Es irreal. Una

vez vi una obra despierto. Fue espantoso. Una experiencia terrible. Me dejtrastornado. Los personajes. Eran hombres? Eran mujeres? Todava no lo s.Los hombres parecan mujeres. Las mujeres parecan hombres. Todo erainseguro. No tengo nada contra el cambio de sexo. Soy un hombre moderno.Pero aquello. Aquello era una pesadilla.

CHIRINOS: Tal vez eran hermafroditas.GENERAL: Usted cree? Hermafroditas. Eso est bien. Todos deberamos ser

hermafroditas. Mi cuado el general de divisin es hermafrodita. Y JenaroCspedes. El jefe del Estado Mayor. Tambin es hermafrodita. Buenospatriotas. Yo no soy hermafrodita. Es una lstima. Pero me gustara. S. Megustara mucho.

CHIRINOS: Antes de empezar vamos a ofrecerles una copita de vino.

GENERAL: Vino. Buena idea. El vino es cosa de soldados. Nos alegra la vida. Yo siempretomo vino antes de ir al teatro o a la pera. Si no hay aguardiente.

CHIRINOS: Tenemos un vino excelente.Chirinos repartir copas e ir sirviendo a todos los personajes que sern los espectadores de la

farsa. El presidente, su mujer, Pancracia, Panduro y el general. Cada uno de ellos reaccionarde forma distinta y se preparar para ser sugestionado.

CHIRINOS: Seoras. Seores. Preprense. La representacin va a comenzar. La Filarmnicadar la entrada. (Panini despierta de su letargo y empieza a tocar. Chirinoscierra el teln y se sube a una silla.) En aquella ciudad gris sin lmites,envuelta en la niebla, a cuyas calles y plazas nunca llegaba la luz del sol... (Seva abriendo el teln lentamente. Chanfalla, sentado, parece ser el nicoespectador. Al fondo, por la cortina roja, llega Escipin encarnando unsiniestro personaje.)

ORTIGOSA: Un momento. Un momento. Detengan la representacin.CHANFALLA: Qu pasa? Ya est bien de tantas interrupciones. Tenemos que seguir.CHIRINOS: Es Ortigosa.CHANFALLA: El crtico?ORTIGOSA: Ya empezamos mal con esa msica. Demasiado blanda.(Le quita el violn a

Panini y mira concentrado en su interior.) A ver, pruebe otra cosa.

CHANFALLA: Escipin. Si no recuerdo mal, el personaje del crtico lo habamos quitado.


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ORTIGOSA: Parece que est hueco.ORTIGOSA: Debera usted poner algo aqu dentro.

Chirinos ha cogido el guin y se lo muestra a Chanfalla.

CHIRINOS: (Leyendo.) Debera usted poner algo aqu dentro. CHANFALLA: Mierda.(Se sienta como antes.)ORTIGOSA: No! Nada de dodecafonismo! No soporto el dodecafonismo! Es dodecadente.

Me saca de quicio.CHIRINOS: Un vasito de vino?ORTIGOSA: Yo no bebo jams. Y menos antes de una representacin. Anula mi espritu

crtico. A qu esperamos?Silencio. Panini repite la meloda anterior.

CHIRINOS: En aquella ciudad gris sin lmites, envuelta en la niebla, a cuyas calles y plazasnunca llegaba la luz del sol... (Se va abriendo el teln. Entre Chanfalla y Escipin, cambiando de sillas, van mostrando la galera de personajes queahora son los espectadores de la farsa.) ...los habitantes caminaban sin rumbofijo, con la mirada perdida y los corazones vacos. Nada pareca interesarles.Nada poda alegrarles.

Silencio.

ORTIGOSA: Nada nuevo. Es claramente una obra alegrica con esa detestable estticadecadente que est tan de moda. No parece que tenga mucha fuerza visual.Veamos.

LEONARDA: Pero, ha empezado ya?

CHIRINOS: Durante dcadas han estado bajo el yugo demoledor de una tirana abyectaque los ha sumergido en una existencia gris y rutinaria. PRESIDENTE: Pobrecitos.PANCRACIA: Qu pequeitos. Parecen hormigas.PRESIDENTE: Por qu visten todos igual?LEONARDA: (En voz baja.) No seas imbcil. Ah no hay nada.(Alzando la voz.) S. La verdad

es que no tienen muy buen aspecto.PANDURO: Dios nos ayude.QUILATES: Usted ve algo padre?

PANDURO: Desde luego que s. Son almas que necesitan de nuestra ayuda.PRESIDENTE: Miradlos. Son hombres y mujeres que necesitan... que necesitan...CHIRINOS: Son hombres y mujeres que necesitan encontrar algo que de sentido a sus

vidas miserables. Necesitan a alguien que luche por ellos y les brinde ese futurode esplendor que ni siquiera se atreven a soar.

LEONARDA: Qu le parece, general?GENERAL: (Dormido.) Vivamos tranquilos.PRESIDENTE: Y ese hombre?

LEONARDA: Calla.CHIRINOS: S?


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PRESIDENTE: El que est apoyado en aquella verja.PANDURO: El del abrigo?QUILATES: Qu hombre? De qu estn hablando?PANCRACIA: Se parece muchsimo a ti.CHIRINOS: En uno de los grises edificios del centro de la ciudad, apoyado en una verja,

hay un hombre esperando. QUILATES: El del abrigo?CHIRINOS: Lleva un abrigo negro y parece ansioso. Es joven, alto y corpulento. Todo l

emana un aura de fuerza y conviccin. No hay ninguna duda de que es unhombre carismtico.

PRESIDENTE: Qu coincidencia. Mi ltima obra empieza ms o menos as.LEONARDA: Cllate.PRESIDENTE: En serio. Hay una ciudad gris, con edificios grises, con hombres grises y un

hombre con un abrigo negro que espera a alguien.PANCRACIA: Pues yo lo veo todo de colores.ORTIGOSA: Esperemos que slo sea ese principio lo que ambas obras tienen en comn.CHIRINOS: Los habita ntes de la ciudad todava no lo saben, pero ese hombre, el del

abrigo, es aquel que por fin, tras tantas dcadas de tristeza y podredumbremoral, va a cambiar sus vidas. Aprovechando un momento en que la calle estvaca...

PRESIDENTE: Porque es de noche.CHIRINOS: ...y se ha hecho de noche, llega otro hombre y se acerca despacio hacia la

verja. En cuanto lo ve, nuestro hombre empieza a caminar hacia l con pasoseguro, Camina con la tranquilidad de quien est seguro de s mismo y tienemucho que ofrecer a sus semejantes. De pronto su rostro aparece bajo la luz deun farol.

PRESIDENTE: Soy yo!LEONARDA: Cmo vas a ser t, majadero?PRESIDENTE: Quiero decir que es como yo.QUILATES: De veras?PANCRACIA: T eres mucho mscool .

LEONARDA: Bueno, no vamos a negar que haya un parecido...PANDURO: Desde luego, seora presidenta, su marido tiene esas y otras muchas

cualidades.CHIRINOS: Los dos hombres hablan breve mente. Se estrechan la mano. Se dan un abrazo.

Este encuentro culmina horas y horas de interminables encuentros en los quejuntos han elaborado el plan. Parece que el futuro de la ciudad est decidido.

QUILATES: Si hay un descanso, seor presidente, no se olvide que tenemos que firmar lanueva ley sobre los presupuestos generales...

PANDURO: Ahora que hablamos sobre presupuestos, seor presidente, ha asignado ya una

cantidad para reforzar el apoyo espiritual de nuestros contribuyentes?QUILATES: ...reforzar las bases para el nuevo decreto sobre el impuesto de sociedades...


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PANDURO: ...de cuando el seor ilumin su interior.Quilates le dice algo al presidente en voz baja.

CHIRINOS: Esa est bien, seor presidente. Y por fin lleg el gran da. Millones deciudadanos llenaban la Gran Plaza frente al Parlamento para aclamar al que

haba de ser su lder despus de una victoria apabullante en las urnas. PRESIDENTE: Mira cunta gente! Como entonces. Qu gran da! No se me borra de la

memoria. Queridos amigos del crculo de empresarios...LEONARDA: (Le apunta.) Queridos ciudadanos.PRESIDENTE: S, s. Queridos ciudadanos!PANDURO: (Le apunta.) Queridos hermanos.PRESIDENTE: Queridos hermanos!LEONARDA: Me habis dado vuestra confianza y por eso no os defraudar.PRESIDENTE: Me habis dado vuestra confianza y por eso no os defraudar.PANDURO: Desde mi cargo reforzar las convicciones morales de nuestra ciudad.PRESIDENTE: Desde mi cargo reforzar las convicciones morales de nuestra ciudad.QUILATES: Por qu hay tanto ruido?PRESIDENTE: Por qu hay tanto ruido?LEONARDA: No dudis ni un momento en que sabr entregarme en cuerpo y alma a mi tarea

con esa voluntad de servicio que siempre ha guiado mis pasos desde quecomprend que nuestra ciudad tena una necesidad vital de abrir sus horizontesy de mirar hacia el futuro con fe y esperanza...

PRESIDENTE: No dudis ni un momento en que sabr entregarme en cuerpo y alma...PANCRACIA: Pero que guapo ests, tigre mo.PRESIDENTE: Pero que guapo ests, tigre mo.PANDURO: Y que con espritu de sacrificio devolver a nuestros ciudadanos al camino de la

defensa de los valores tradicionales y eternos que son y han sido la enseanzade nuestro Seor..., Dios mo no veo nada!

PRESIDENTE: Dios mo no veo nada!PANDURO: ...el nico capaz de iluminarnos en un mundo entregado a la corrupcin y a la

perversin de todo aquello que es sagrado...

PRESIDENTE: ...entregado a la corrupcin y a la perversin...QUILATES: Seor presidente, me est usted pisando...PRESIDENTE: Seor presidente, me est usted pisando...LEONARDA: ...que no dejar que os opriman las leyes injustas, los impuestos desmedidos...PRESIDENTE: ...dejar que os opriman las leyes injustas, los impuestos desmedidos...

(Quilates murmura algunas palabras al odo del presidente.) Dejo estascuestiones a hombres rectos y honrados de mi confianza que conocen elproblema y cuya sabidura sabr enfocar las cosas con la debida correccin.

GENERAL: Qu gritos son esos?

CHIRINOS: Y aquel hombre que estaba destinado a cambiar el rumbo de la nacin fueelegido por sus conciudadanos para gobernar con su sabidura aquella


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desdichada ciudad. Y hubo muestras de alegra por todas partes y se celebruna fiesta sin precedentes.

Escena de alegra. Todos elevan al presidente. Panini ataca una msica del lugar. Todos los personajes entran en una especie de delirio que tiene algo de orga.

CHIRINOS: A partir de ese momento se puso a trabajar con un espritu incansable, atentosiempre a las necesidades del estado. QUILATES: Seor presidente, antes de que me olvide. Recuerde que tiene usted que firmar

estos papeles.PRESIDENTE: (Mirando fijamente al escenario donde se supone que se desarrolla la farsa.)

Ese hombre es un mrtir. Slo vive para sus obligaciones de estado.Va firmando sin mirar los papeles que le pasa Quilates.

QUILATES: Una firmita aqu... Y otra ms, aqu. Muy bien.LEONARDA: Amor mo. Tienes que firmar esto. (Le va pasando algunos papeles que l firma

sin mirar.)PRESIDENTE: Qu abnegacin.LEONARDA: Esto tambin.PANCRACIA: Qu te pasa ltimamente, tigre mo? Ya no me haces caso.(Le pasa un

talonario de cheques para que lo firme.) PRESIDENTE: (Firmndolo todo.) No ests prestando atencin. Mira cmo trabaja ese gran

hombre.PANDURO: Seor presidente, ya sabe que cuenta usted con todo mi apoyo...(Le pasa

tambin algunos papeles para firmar.)

CHIRINOS: Aquella ciudad empez una poca de prosperidad hasta enton ces desconociday se dedic a disfrutar de la vida como nunca lo haba hecho antes. Pero llegun da terrible. Un da triste y aciago que sera recordado por las generacionesfuturas. En una pequea placita de la ciudad, recogida y tranquila, una maanasoleada de entre semana un grupo de hombres encapuchados empez a lanzargases contra la gente que paseaba tranquilamente por all.

Cunde el pnico entre los espectadores de la farsa. Todos corren, gritan y tratan de ponerse asalvo.

PRESIDENTE: Pero qu tienen en la cara?PANDURO: Seor, aydanos! Mirad esas caras!

PRESIDENTE: Y no solamente en la cara... Sus cuerpos!PANDURO: Es una plaga! Esos cuerpos contaminados por las enfermedades del pecado...

Llenos de llagas y bubones. Mirad que espectculo horripilante. Est antenosotros. Oh, s. Los enemigos del seor nos han declarado la guerra. Pero elseor nos protege. Est de nuestro lado. Y nos protege.

PRESIDENTE: Es horrible.GENERAL: (Se despierta sobresaltado.) Qu pasa?GENERAL: Seores. Tenemos que defendernos.LEONARDA: Y en qu est usted pensando?

GENERAL: En atacar. Atacar siempre. Devolverles el golpe. Es ms seguro.


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PANDURO: La razn est de nuestra parte. El seor nos protege.PRESIDENTE: Pues ataquemos.LEONARDA: Que no quede con vida ni uno de esos miserables.QUILATES: Esto nos va a costar un rin.CHIRINOS: Entonces la ciudad enva sus aviones hacia la tierra que cobija a los traidores y

los cubre con sus sombras. Silencio. Por el aspecto que tienen todos, parece que se est desarrollando ante sus ojos unespectculo de horror y muerte. Largo silencio. Una explosin que parece que proviene delescenario los tira de las sillas. Lentamente, se van recuperando y se acercan sigilosamente a laboca del escenario.

LEONARDA: Ya te he dicho que no haba nada.PRESIDENTE: Nada? Pero cmo puedes decir eso?ORTIGOSA: Nada! Nada de nada! Admirable! Ni actores ni escenografa... Teatro en

estado puro! Es el espectculo del ao!PANDURO: Yo juro por lo ms sagrado que lo he visto todo.QUILATES: Sabe usted cunto nos ha costado?(Le murmura una cifra al odo.)PRESIDENTE: Tanto?QUILATES: No se atreva a decir que no ha sido real.GENERAL: Es... es... indignante. No voy a volver. Al teatro. As no se puede dormir

tranquilo. Qu vergenza.PRESIDENTE: Es casi como en mi obra... Tiene muchos puntos en comn.

CHIRINOS: Me alegro de que le haya gustado, seor presidente.Largo silencio. Parece que, poco a poco, los personajes van recuperando sus identidades.Durante largo rato deambulan por el escenario sin saber qu hacer o qu decir.

ESCIPIN: Estis seguro de que era as?CHANFALLA: Y si no, qu pasa?CHIRINOS: Era as o era como lo recordamos. Qu ms da.ESCIPIN: Pero... Quiero decir, nunca descubran el engao?CHIRINOS: Estaba todo delante de sus narices.ESCIPIN: Y ahora?CHANFALLA: Ahora qu?ESCIPIN: No van a venir? Vamos a seguir esperndoles?CHANFALLA: Escipin, empiezas a cargarme con tus preguntas.(Panini se pone a tocar.) T.

Cllate.Largo silencio. Chanfalla y la Chirinos empiezan a recoger las cosas.

ESCIPIN: Y si no vienen?Silencio. Se sienta en una de las sillas que hay delante del teln, quedando as de cara al

pblico. Empieza a mirar con curiosidad. Parece que percibe algo.


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3. La representacinESCIPIN: Chanfalla.

Silencio.

Chanfalla.CHANFALLA: Qu.ESCIPIN: No te lo vas a creer.CHANFALLA: Y ahora qu te pasa?ESCIPIN: Estn ah.CHANFALLA: Estn? Quines?ESCIPIN: Ellos.

Chirinos se levanta en silencio y se acerca a la boca del escenario y observa.

CHANFALLA: Ellos? Quienes son ellos?ESCIPIN: No s. Pero estn ah.CHANFALLA: Dnde?(Escipin seala hacia el otro lado del teln.) Mierda. Escipin, te

ests pasando. Ya no tengo paciencia para aguantar ni una sola de tusestupideces. Me oyes? As que cierra la boca, estate quieto y espera.

ESCIPIN: Esperar qu?CHANFALLA: Esperar que vengan.CHIRINOS: Ya han venido.CHANFALLA: Basta!

CHIRINOS: Siempre han estado ah.ESCIPIN: Siempre?CHIRINOS: S. Desde el principio.CHANFALLA: Chirinos...CHIRINOS: Estn... donde no los esperbamos.ESCIPIN: Mira, Chanfalla. Mira bien.CHANFALLA: Ya lo entiendo. Estis jugando, no? Pretendis que pique como los pobres

imbciles a los que engaamos. Porque se trata de eso. Nosotros pretendemoshacer creer que ah hay algo. Que ah pasa algo. Pero no. No hay nada. Y ahoraqueris tomarme el pelo a m con el mismo cuento. Pero, es que os pensisque soy idiota?

ESCIPIN: Yo necesito descansar.CHIRINOS: Acrcate. Mira.

Chanfalla se acerca a la boca del teln y mira fijamente. Silencio.

CHANFALLA: Pero mira, vaya sorpresa... Si ha venido... y aquel de all es...(Empieza aenumerar nombres por orden alfabtico. Pausa.) No veo nada.

ESCIPIN: No es posible.CHANFALLA: Te digo que no veo nada. Est... oscuro.ESCIPIN: Claro que est oscuro. Pero an as se puede ver... se puede ver...


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CHANFALLA: Qu, Escipin? A ver, dime, qu se supone que se puede ver, eh?Pausa.

ESCIPIN: Gente.CHANFALLA: Pues yo no veo nada.CHIRINOS: Chanfalla, fjate bien. Tampoco escuchas nada?

Silencio largo.

ESCIPIN: Escucha! Alguien ha tosido.CHIRINOS: Y eso ha sido...ESCIPIN: Una carcajada!CHIRINOS: No exageres, Escipin, una carcajada no, ha sido algo... algo ms discreto.

Como una risita.ESCIPIN: Una risita, s.CHANFALLA: Una risita... Pero qu mierda os pasa? Os estis riendo de m?CHIRINOS: Claro que no, Chanfalla. Estn ah. Slo tienes que fijarte un poco. Y se

manifiestan. Tmidamente, es cierto, pero se manifiestan. Quiz si no fuerantan pasivos... se... se manifestaran de una forma ms... ms ruidosa.

ESCIPIN: Pero a mi no me apetece nada que se manifiesten de una forma ms ruidosa.De hecho ya me molesta bastante que estn ah, mirndonos.

CHANFALLA: Ah. Nos miran.CHIRINOS: Es cierto. Nos estn mirando.CHANFALLA: Y si estn ah, mirando, por qu no los hemos visto antes?ESCIPIN: Yo te juro, Chanfalla, que hasta ahora no haba visto a nadie.CHIRINOS: Quiz no los esperbamos.ESCIPIN: A lo mejor acaban de llegar.CHANFALLA: Y se han sentado todos juntos... ah... y se han puesto a mirarnos.CHIRINOS: Exacto.CHANFALLA: Todos?

Chirinos y Escipin miran.

CHIRINOS: S.ESCIPIN: S. Todos.(Pausa.) Bueno. Eso parece. Quiz haya alguno distrado.CHIRINOS: O mirando hacia otra parte.CHANFALLA: Y segn t, qu estn mirando?ESCIPIN: Eso. Qu estn mirando?CHIRINOS: A nosotros.ESCIPIN: A nosotros?CHANFALLA: A nosotros?CHIRINOS: S, a nosotros.ESCIPIN: Por qu?


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CHIRINOS: Esa est bien.ESCIPIN: Y ahora qu?CHIRINOS: Trala.ESCIPIN: Qu?CHIRINOS: Contra ellos.ESCIPIN: Quieres que les tire una silla?CHIRINOS: Con todas tus fuerzas.ESCIPIN: Pero... pero...CHIRINOS: Pero, qu?ESCIPIN: Que voy a... a herirles. A lo mejor muere alguien.CHIRINOS: Si son producto de tu imaginacin entonces no va a ocurrir nada.ESCIPIN: Y si no?CHIRINOS: Entonces podremos demostrarle a Chanfalla que tenemos razn y que son

reales.ESCIPIN: No s si podr.CHIRINOS: Claro que s.ESCIPIN: Puede que sean reales. Pero es posible que sean reales de otra... manera. Que

no sean reales como nosotros, que aunque somos reales, tenemos otra realidaddiferente a la suya... Quiz.

CHIRINOS: Escipin.

ESCIPIN: Qu.CHIRINOS: Es el momento de pasar a la accin.Resignado, Escipin se prepara para arrojar la silla contra el pblico. Toma impulso y con unmovimiento brusco tiene que provocar en el pblico la sensacin de que efectivamente va atirarla con mucha fuerza. Chanfalla se sobresalta y se acerca a la boca del teln.

CHANFALLA: Me cago en...ESCIPIN: Lo ves? Estn ah... Estn ah. Lo has odo?CHANFALLA: Por todos los demonios...ESCIPIN: Te lo hemos dicho, Chanfalla, te lo hemos dicho. Pero t nunca quieres

escuchar...CHANFALLA: Qu es eso, Chirinos?CHIRINOS: Te has puesto blanco.ESCIPIN: T nunca nos haces caso...CHANFALLA: Chirinos, por lo que ms quieras... qu significa esto?CHIRINOS: Tranquilzate.CHANFALLA: Cmo quieres que me tranquilice? Estn en nuestro escenario! Qu hacen ah?

Quin los ha puesto ah? Quiero que se vayan ahora mismo.CHIRINOS: No creo que resulte tan fcil...

Pausa.


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CHANFALLA: Son actores?ESCIPIN: Quiz. S. Actores.CHANFALLA: Pero es... es fantstico! Nuestro escenario est lleno de actores. Nuestro

espectculo es posible, puede hacerse realidad. Con actores de verdad. Bueno,

habra que echar a unos cuantos, no podemos permitirnos el lujo de pagar atanta gente... Pero podemos seleccionarlos, elegir a los mejores... yentonces...

CHIRINOS: Espera, espera, espera. No sabemos si pueden actuar. Hasta ahora han hechoruiditos y cosas as. Pero todava no han hablado. Ni siquiera No sabemos sipueden hablar.

CHANFALLA: Cmo que no?(Se acerca a la boca y empieza a gritar al pblico.) Eh!Vosotros! (Pausa.) No me os? Os estoy hablando a vosotros. S. A ver. Loshombres a un lado y las mujeres a otro. Vamos a hacer grupos por edades.Quin de vosotros tiene experiencia?(Silencio.) Qu pasa? No decs nada?

Silencio.ESCIPIN: Por alguna razn no pueden hablar.CHIRINOS: A lo mejor no tienen nada que decir.CHANFALLA: No puede ser. Veamos. Dejadme pensar. Si les dejamos que se preparen

podrn... actuar. Nosotros lo nico que tenemos que hacer es... sentarnos,sentarnos aqu (Los personajes, incluyendo a Panini se sientan todos dispuestosa convertirse en espectadores.) y darles algunas instrucciones. Vamos a ver.Venga. Por ejemplo, la escena del ataque terrorista. (Chirinos lo va explicandocon gestos.) Estis en el parque y de pronto, gas por todas partes. Os retorcis.Os cais al suelo. Alguno puede vomitar. Pero sin exagerar. Poco a poco os vaismuriendo asfixiados. Va. Preparados? De acuerdo.

Los cuatro observan muy atentamente al pblico a travs del teln. Largo silencio. De vez encuando irn hacindose algn comentario al odo. Tal vez reaccionarn con pequeos gestos orisas. Pero, obviamente no ocurrir nada especial. Se irn aburriendo, decepcionando o

preocupando. CHANFALLA: Pero qu demonios les pasa?CHIRINOS: Hay algo que no funciona.ESCIPIN: Eso est claro.CHANFALLA: Son intiles o qu? Qu desastre! Son malsimos.

ESCIPIN: Quiz no sean actores.CHANFALLA: Entonces qu son?ESCIPIN: Personajes?

Pausa.

CHIRINOS: Lo mejor ser que vayamos a comprobarlo.ESCIPIN: Qu? Chirinos, por favor, no hagas algo de lo que puedas arrepentirte

despus...CHIRINOS: Si no nos movemos de aqu, no sabremos que es lo que pasa...ESCIPIN: Ests segura de que quieres ir... all... con ellos?CHANFALLA: Me parece buena idea. Va, Chirinos. Te esperamos aqu.


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Chirinos se acerca a la boca del teln y lentamente la atraviesa ante la mirada expectante y aterrorizada de los otros. Largo silencio. CHANFALLA y ESCIPIN: Chirinos!

Pausa.

CHIRINOS: (Desde el patio de butacas.) Esto es... es...CHANFALLA y ESCIPIN: Qu?CHIRINOS: Que esto es increble.ESCIPIN: Chirinos, te omos muy mal.CHIRINOS: Pues yo os oigo perfectamente.ESCIPIN: Chirinos, qu te pasa? Ests muy rara. Por favor, vuelve ahora mismo. Esto no

me gusta nada.CHIRINOS: Aqu se est muy bien. Y vosotros... vosotros... Por qu os habis cambiado de

ropa? Por qu llevis esos calzones y esas botas tan antiguas?ESCIPIN: Chirinos. Qu hay ah?CHIRINOS: Vamos, venid. No tengis miedo.

Se levantan los tres.

CHANFALLA: T, no, Panini. Qudate aqu.Panini se sienta muy enfadado. Escipin y Chanfalla se deciden por fin a cruzar el teln parareunirse con Chirinos.

ESCIPIN: Me siento como ms... ligero.CHANFALLA: Dnde ests, Chirinos?ESCIPIN: Quiones!CHANFALLA: Qu dices, imbcil? Este no es Quiones.ESCIPIN: Ah, no? Claro que es Quiones.

(Improvisacin con el espectador que toman por Quiones.)

CHIRINOS: Escipin. Parece que no es l.ESCIPIN: Pues si no es l, es igual que l.CHIRINOS: Vamos.Los tres personajes se repartirn por la sala, mezclndose con el pblico y se sentarn en lassillas vacas que encuentren.CHIRINOS: Desde aqu las cosas se ven diferentes.ESCIPIN: Muy diferentes.CHANFALLA: Entonces, estn aqu?ESCIPIN: Quin?CHANFALLA: Nuestros personajes.CHIRINOS: Seguro. Tenemos que buscar bien.(Improvisacin. Cada uno de ellos, desde sus posiciones, ir encontrando entre el pblico

candidatos para el presidente, a Leonarda, Pancracia, el secretario de la oficina de impuestos,el general, etc. A medida que los vayan encontrando se lo irn diciendo unos a otros.


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Tratarn de hacerles subir al escenario para interpretar la farsa. Uno de ellos, por ejemploEscipin, puede acompaarles al escenario. Chanfalla y Chirinos se convierten en directoresque dan instrucciones a los espectadores sobre lo que tienen que hacer. Puede haber una peleaentre ellos sobre como se tiene que abordar una escena, dejando desvalidos a los que estn enel escenario. Escipin se va poniendo nervioso y al ver con impotencia como los espectadores no

hacen nada, los echa del escenario volviendo a bajar con ellos.)Desde el escenario, Panini empieza a hojear las pginas finales del cuaderno.

CHIRINOS: Chanfalla. Creo que no son personajes.CHANFALLA: Tampoco?ESCIPIN: Pero si no son actores y tampoco son personajes, entonces Qu son?CHIRINOS: Espectadores.

Silencio.

ESCIPIN: De teatro?

CHIRINOS: O de cualquier otra cosa.ESCIPIN: Quieres decir que quiz ni siquiera hayan venido a vernos a nosotros.CHIRINOS: Es posible.

Pausa.

ESCIPIN: Chirinos. Me estoy mareando.CHANFALLA: Yo tampoco me encuentro bien.Panini se levanta con el cuaderno en la mano y se acerca a la boca del escenario. Con unmovimiento en los labios ir siguiendo las siguientes rplicas de los personajes a medida queestos las vayan diciendo.

ESCIPIN: Deberamos volver.Poco a poco todos los tres personajes irn perdiendo la energa.

CHANFALLA: Qu est haciendo Panini?CHIRINOS: No s si llegaremos a tiempo.ESCIPIN: No llegaremos a tiempo.CHANFALLA: Claro que s. Tenemos que intentarlo.ESCIPIN: Lo conseguiremos?CHIRINOS: Depende.ESCIPIN: De qu?CHIRINOS: De cmo est escrito.

Pausa.

El final.Panini pasa la ltima hoja del cuaderno y muy lentamente se va cerrando el teln.

ESCIPIN: Panini!CHIRINOS: Panini, no.CHANFALLA: Ni se te ocurra, Panini. Estate quieto!ESCIPIN: No, Panini, no.


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CHIRINOS: No lo hagas!LOS TRES: Panini!!

Gritan e insultan agotando la energa que les queda. Se cierra el teln.

CHANFALLA: (Exhausto.) Me cago en su puta madre.ESCIPIN: Panini, Panini, abre el teln. Por lo que ms quieres.CHIRINOS: Panini!ESCIPIN: No podemos volver.CHANFALLA: Cmo que no podemos volver?CHIRINOS: No podemos volver.ESCIPIN: Vamos a quedarnos aqu?CHIRINOS: Si no hacemos algo...ESCIPIN: Qu?CHIRINOS: Panini, querido, abre el teln...CHANFALLA: (Se re forzadamente.) Qu bueno, s. Muy bueno. Me gusta tu sentido del

humor.ESCIPIN: No es una broma.CHANFALLA: Cllate, estpido. Bueno, bueno. Ya est bien. Nos hemos divertido mucho,

verdad? Ahora... abre, quieres?Panini se pone a tocar desde el otro lado del teln.

ESCIPIN: Va a dejarnos aqu.

CHANFALLA: Me cago en la Virgen y en la puta madre que te pari cabrn de mierda abreese maldito teln ahora mismo o por mis cojones que te reviento el alma...Panini sigue tocando.

CHIRINOS: Es intil. Vamos a quedarnos aqu.ESCIPIN: Siempre.CHIRINOS: Hasta que ellos quieran.ESCIPIN: Hasta que ellos quieran. Y qu haremos mientras tanto, Chanfalla?

Silencio.

Chanfalla? Dnde est Chanfalla?CHIRINOS: Ya no est?ESCIPIN: Cmo que no est? Chirinos...

Silencio. Panini sigue tocando.

CHIRINOS: Ya ves, Escipin, al fin y al cabo, bueno, tendramos que improvisar algo,...algo especial, no s si me entiendes... Escipin? Tenemos todava algo detiempo para... o quiz podramos seguir... caminando. Escipin? Ya no meoyes?

Silencio.

Escipin?


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La msica que est tocando Panini se va alejando y se hace cada vez menos audible al mismotiempo que se hace el

Oscuro.

El Quinteto de Los Milagros (Carlos Rodero)

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