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Esa gente que soy y que conozco

Leganés a Juan Carlos Mestre

LA NOSTALGIA ES UN PÁJARO QUE ENCIENDE SU RUMOR EN LA NOCHE

Llueve, esa gente que soy y que conozco ha salido a la calle, al céfiro suave de los dialectos del monte. La noche ha puesto lámparas apagadas en los nidos vacíos, solitarios pastores en las tristes

cañadas del otoño.

De Antífona del otoño en el Valle del BierzoJuan Carlos Mestre

Juan Carlos Mestre (Villafranca del Bierzo, León, 1957), poeta y artista visual, es autor de varios libros de poesía y ensayo, como La visita de Safo y otros poemas para despedir a Lennon, Antífona del otoño en el Valle del Bierzo (Premio Adonáis, 1985), La poesía ha caído en desgracia (Premio Jaime Gil de Biedma, 1992) o La tumba de Keats (Edit.Hiperión, Premio Jaén de Poesía, 1999). Su obra poética entre 1982 y 2007 ha sido recogida en la antología Las estrellas para quien las trabaja (2007). Con La Casa Roja (Edit.Calambur, 2008), obtuvo el Premio Nacional de Poesía 2009. De reciente aparición es La bicicleta del panadero (Edit.Calambur, 2012) por el que recibió el Premio de la Crítica. Ha colaborado y hecho grabaciones discográficas con músicos como Amancio Prada, Luis Delgado, Cuco Pérez o Hugo Westerdahl así como realizado lecturas y performances en numerosos Festivales Internacionales de Poesía. En el ámbito de las artes plásticas ha expuesto su obra gráfica y pictórica en galerías de España, Europa, EE.UU. y Latinoamérica. En 1999 obtiene una Mención de Honor en el Premio Nacional de Grabado de la Calcografía Nacional, y semejante distinción en la VII Bienal Internacional de Grabado Caixanova 2002, Premio Internacional de Arte Gráfico Atlante 2009 y III Premio Internacional de Grabado Dinastía Vivanco en el 2010.LeganésGestióndeMedios

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Esa gente que soy y que conozco

Leganés a Juan Carlos Mestre

Esa gente que soy y que conozco \3

Índice

Presentación de Jesús Gómez 5

Carlos Ordóñez 9

IES Pedro Duque 12

Raquel Álvaro 15

joséagustín hayadelatorre 16

IES Pablo Neruda 18

José Hernández “Chiqui” 21

Jordi Doce 23

IES Salvador Dalí 24

Manuel G. Viñas 27

José Ángel Cilleruelo 29

IES Jose de Churriguera 30

Rafa Martín 33

Alexandra Domínguez 35

IES Isaac Albéniz 36

Paco Morillo 39

Antonio Méndez Rubio 41

IES San Nicasio 42

Luz Cortés M. 45

Javier Bello 46

Juan Carlos Mestre 49

IES La Fortuna 50

Guadalupe Grande 52

IES María Zambrano 54

Marta Agudo 57

IES Arquitecto Peridis 58

Raquel Ramírez de Arellano 60

IES Butarque 62

Miguel Ángel Muñoz Sanjuán 64

IES E. Tierno Galván 66

IES Siglo XXI 68

IES Julio Verne 70

IES Luis Vives 72

Santiago Gómez Valverde 74

Edita: AYUNTAMIENTO DE LEGANÉS LEGANÉS GESTIÓN DE MEDIOS S.A.

Diseño y Maquetación:LEGANÉS GESTIÓN DE MEDIOS S.A.Chema RiveroOlga Morillo

Coordinación Técnica: Concejalía de EducaciónEquipo técnico de Apoyo a la Escuela

Este libro ha sido posible gracias a lacolaboración de:• Los Institutos de Educación Secundaria de Leganés:

Arquitecto Peridis, Butarque, E. Tierno Galván, Isaac Albéniz, José de Churriguera, Julio Verne, La Fortuna, Luis Vives, María Zambrano, Pablo Neruda, Pedro Duque, Salvador Dalí, San Nicasio y Siglo XXI

• Alexandra Domínguez• Antonio Méndez Rubio• Carlos Ordóñez• Guadalupe Grande• Javier Bello• Jordi Doce• joséagustín hayadelatorre • José Ángel Cilleruelo• José Hernández “Chiqui”• Juan Carlos Mestre• Luz Cortés M.• Manuel G. Viñas • Marta Agudo• Miguel Ángel Muñoz Sanjuán• Paco Morillo• Rafa Martín• Raquel Álvaro• Raquel Ramírez de Arellano• Santiago Gómez Valverde

Editorial Calambur

Imprime: GRÁFICAS LE COQ D’OR S.L.Depósito legal: M-5907-2014

Portada:

Juan Carlos Mestre. La casa de la imaginación. 2007. Grabado al aguafuerte.

Queda prohibida, salvo excepción prevista por la ley, la reproducción (elecrtónica, química, mecánica, óptica de grabación o de fotocopia), distribución, comunicación pública y transformación de cualquier parte de esta publicación –incluido el diseño de cubierta– sin la previa autorización escrita de los titulares de la propiedad intelectual y de la editorial.


Queridos alumnos y vecinos de Leganés:

Un año más, tengo el honor de presentar el libro que editamos, desde el Ayuntamiento de Leganés, como homenaje a la poesía, en esta ocasión encarnada en la figura de Juan Carlos Mestre. Es un homenaje realizado por los alumnos que estudian en los institutos de nuestra ciudad, que expresa su forma de sentir, de acercarse a la poesía de un autor prolífico. Su obra ha recibido numerosos reconocimientos, entre ellos el Premio Nacional de Poesía en 2009 con La casa roja y Premio de la Crítica, con su obra reciente La bicicleta del panadero.

Juan Carlos Mestre es considerado uno de los mejores poetas españoles contemporáneos, con una obra cargada de fuerza. Sus brillantes imágenes y su inteligente uso de la metáfora nos remiten a un mundo poblado de referentes estéticos. El poeta de León hace gala de un fino sentido del humor y de enorme sutileza a la hora de abordar cuestiones de reciente actualidad.

Además de poeta y ensayista, Juan Carlos Mestre también ha demostrado su talento como artista plástico, ya que ha realizado notables colecciones de grabados.

Quiero agradecer la colaboración de autores y artistas de Leganés que han hecho posible esta edición y transmitir mi enhorabuena a los profesores y alumnos de los institutos de la ciudad que han interpretado, cada uno a su manera, la obra de Juan Carlos Mestre. Espero que este libro os anime a seguir leyendo poesía española y a mantener viva la curiosidad por la lectura.

Mi más cordial saludo,

Jesús Gómez Ruiz Alcalde de Leganés

LA NOSTALGIA ES UN PÁJARO QUE ENCIENDE SU RUMOR EN LA NOCHE

Miguel Ángel Escribano, Arturo Fernández,

Siham El Kadi, Miguel García, Alexandra Domínguez,

Jordi Doce, Raquel Ramírez de Arellano, Luz Cortés M.,

Isabel Hidalgo, Beatriz Díaz, Antonio Méndez Rubio, joséagustín hayadelatorre,

Santiago Gómez Valverde, José Hernández “Chiqui”, Carlos OrdóñezJosé Ángel Cilleruelo, Raquel Álvaro,

Rafa Martín, Carla del Viso, Hanin Mohamed, Guadalupe Grande, Marta Agudo, Manuel G. Viñas, Juan Carlos Mestre, Marta Muñoz , Celia

Martín, Javier Bello, Miguel Ángel Muñoz Sanjuán, Paco Morillo, María Cano, Ainhoa Rubio, Nerea

Real, Gregorio Sánchez, Antonio Elias Kinamvuidi, José Daniel Gonzalo, Ana Carrasco, Paula Cortés, Alba Jaramillo, Andrea Castillo, Carla Gómez , Carlos

Moreno, Daniel Mata, Enrique Bazán, Irene Villalobos, Jorge Flores, Juan Antonio San José, Juan Carlos Jimeno, Nicolás Casas, Noemí Cruz, Pablo Jiménez, Sandra Sánchez, Sara García, Siham Mhaouch, Sonia

Valentín, Carolina Martín-Francés, Ángel del Pino, Elena Andritchi, Ángel Morales, Marta Ribote, Valeria Sully Castillo, Carolina Fernández, Daniel

Torres, Ester Álvarez, Gerardo Pola, Madeleine Kabankaya, Marina Yunta, Nadir Yemlahi,

Nicole Solís, Nuria Rotund, Marina García-

Ballesteros, Beatriz

Burgoa


I. ANVERSO

Los poetas, ha dicho Juan Carlos Mestre, trabajan con la memoria. Memorizan sonidos en las canteras de lo invisible que luego adquieren la forma de un pájaro o de un acordeón. Mestre es un poeta que tiene pájaros en el corazón y sabe, como su admirado Rafael Pérez Estrada, que «volar es el resultado de una intensa pasión, nunca de su práctica». Por ello, su escritura es sideral: escribe en el aire, en la intemperie de las estrellas que él mismo trabaja como aquel que hace el fuego en la faena mientras escucha el orfeón de las abejas en la refundación del porvenir, traza versos que el cierzo subraya para alumbrar el camino de los errantes, dibuja el mar en la pupila de la aurora, canta el postergado amanecer de las revelaciones. Su poesía es búsqueda y persistencia, los límites se disipan, las palabras pueblan la inexistencia, son resonancias de las voces que desde el pasado nos recuerdan el imperativo categórico de la imaginación como realidad cotidiana frente a la banalidad y el sufrimiento.

En la casa donde nació Mestre, en Villafranca del Bierzo, no había libros. Había, eso sí, llaves de niebla para abrir las puertas del asombro y el arcón de los astros, había delicadas palabras en la voz de una madre que lo llevaba al granero para escuchar la conversación de los gorriones, había harina y migas de pan en los bolsillos, donde los muchachos suelen llevar adheridos los versos de John Keats y algo del frío que dormita en las páginas de El señor de Bembibre, había un encargo con las sílabas negras de Antonio Gamoneda recordando que «la belleza no es un lugar donde van a parar los cobardes», había una hogaza de pan hecha por el padre y las ruedas de una bicicleta en cuyo timbre aún resuena el corazón de las cigarras. Aprendió a leer en los prospectos de los medicamentos y quizás descubrió en ellos que hay esperanza y resplandor en las palabras, en las sonrisas balsámicas: el ácido acetilsalicílico tiene aquí la misma categoría que la palabra piedad; el taller blanco de la poesía se hace pan de la madrugada; el fulgor en los ojos de una mujer que limpia los pocillos del sueño es tesitura de un violín con el alma rota; el cuaderno Papyrus del monaguillo que persigue el zumbido de las luciérnagas es desobediencia que salpica en las

UNA HOJA DE VIENTO PARA JUAN CARLOS MESTRE

Esa gente que soy y que conozco \1110/ Esa gente que soy y que conozco

oscuridad, a tocar «la lepra sagrada de la oscuridad», a transitar en el extravío sin otra brújula que el propio extravío. No hay riesgo literario en ello, porque la Literatura —esa señora de bien— no ocupa el mismo lugar de lo poético: la poesía nos ocupa, como la claridad en el verso de Claudio Rodríguez, «haciendo de ella vida y labor propias». Nos ha enseñado Mestre que «la poesía es conciencia, acaso la conciencia de algo de lo que no podemos tener conciencia de ninguna otra manera que no sea la poesía», un salto en lo oscuro, ceniza gramatical que se resiste a la extinción. Y lo ha hecho sin otra aspiración que borrarse, porque «poeta es aquel que se borra», así lo ha proclamado como el Maestro que es sin pretenderlo, pues si hay algo que Mestre siempre ha rechazado es la idea de «ejercer todo derecho que implique alguna forma de autoridad artística sobre los demás». No otra sabiduría se espera de aquel que ha hecho de la poesía una casa de huéspedes, una casa donde lo sagrado está en alianza con las palabras recogidas ante las ruinas que el viento del progreso se obstina en esparcir, bajo las alas desplegadas de un ángel de la historia que sigue viendo hacia el pasado con el anhelo de recomponer los escombros. Por todo lo anterior, por muchas cosas que habitan en la memoria del corazón, cuando supe que escribiría estas palabras para hablar de Mestre, de su obra, del ejemplo vivo que representa para tantos poetas de nuestra generación, pensé en la palabra gratitud, porque en ella florece lo perdurable, porque el homenaje que aquí se le rinde es también para la poesía, pan del espíritu.

Río de Janeiro, enero de 2014Carlos Ordóñez

páginas donde se cumple el oficio de restituir aquellos significados que la usura y el poder han malversado. Junto a Mestre es imposible abdicar de toda herejía, su vida y su obra son formas de resistencia civil frente a los discursos autoritarios del orden y la razón, frente a los amos que han querido relegar al margen la belleza como derecho fundamental de los débiles. En sus versos fluyen el canto y el rezo de los antepasados que «atravesaron el mar en una cruz de palo», la voz de los exiliados por insistir en la música de lo erróneo contra la ronquera de la costumbre, la dignidad de aquellos que ante la ignominia del Holocausto y la Guerra Civil caminan, redimidos, por las luminosas alamedas de la mañana siguiente.

II. REVERSO

Conocí a Mestre en una ciudad cuyo nombre se bifurca en significados. Podría yo decir que nos conocimos «en el reino de las piedras puntiagudas» o «en la región de los cerros de los venerables ancianos» o «en el lugar donde está la aurora». Lo cierto es que fue en un país con nombre de abismo. En ese país, pasé mi infancia. Mi abuelo solía llevarme a ordeñar las vacas, íbamos hacia el otro lado del río antes del alba, cuando la noche quebradiza subsistía frente al ojo del tiempo. En el camino, a veces hablábamos de las estrellas. No conocíamos el nombre de las constelaciones, pero él solía nombrarlas con palabras vinculadas al oficio que emprenderíamos al amanecer: me hablaba del cuajo para nombrar un conjunto de estrellas muy tupidas, del pino1 para nombrar las más lejanas, de la pradera de leche para señalar un sendero de nebulosas. Muchos años después, en un recital, escuché en el temblor telúrico de la voz de Mestre unos versosde su Antífona del otoño en el Valle del Bierzo, ciertamente relacionados, para mí, a ese misterio con el que mi abuelo explicaba el firmamento: «Mis antepasados inventaron la Vía Láctea, / dieron a esa intemperie el nombre de la necesidad». Yo he vivido y he amado esos versos, he soñado en la casa de mis antepasados con miedo a la oscuridad y me he arropado con las palabras de Mestre como el niño sediento que espera en los intersticios del tejado una luz de agua. Pero la poesía de Mestre me ha enseñado a sumergir las manos en la

1. Maíz molido y tostado, al que se le agrega cacao o algún endulzante. Es propio de la región mesoamericana.


Elena Andritchi1.º BACHILLERATO. IES Pedro Duque

Ángel del Pino Jiménez1.0 BACHILLERATO. IES Pedro Duque

LOS USOS DE LA PALABRA (Sobre el poema “Elogio de la palabra”)

Una palabra muchas veces se ladra,

Otra palabra pocas veces se calla.

Decir palabra puede el que baladra

Callar palabra hace el menos canalla

Encuadrar palabra para no crear batalla

Avasallar palabra lo hace el que desmadra.

Una palabra muchas veces se ladra,

Otra palabra pocas veces se calla.

Algunas palabras se dicen con calma

Ya que una palabra es el grito del alma.

Inspirada en ECLIPSE CON RIMBAUD (La Casa Roja). Juan Carlos Mestre


Cavalo Morto es un lugar que existe en un poema de Lèdo Ivo. Un poema de Lèdo Ivo es una luciérnaga que busca una moneda perdida. Cada moneda perdida es una golondrina de espaldas, posada sobre la luz de un pararrayos. Dentro de un pararrayos hay un bullicio de abejas prehistóricas alrededor de una sandía. En Cavalo Morto las sandías son mujeres semi-dormidas que tienen en medio del corazón el ruido de un manojo de llaves.

[...]

Cavalo Morto es un lugar que existe en un poema de Lèdo Ivo. En Cavalo Morto cuando muere un caballo se llama a Lèdo Ivo para que lo resucite, cuando muere un evangelista se llama a Lèdo Ivo para que lo resucite, cuando muere Lèdo Ivo llaman al sastre de las mariposas para que lo resucite. Háganme caso, los recuerdos hermosos son fugaces como las ardillas, cada amor que termina es un cementerio de abrazos y Cavalo Morto es un lugar que no existe.

Juan Carlos Mestre

EL SASTRE DE LAS MARIPOSAS. 2014

Inspirada en CAVALO MORTO (La Casa Roja). Juan Carlos MestreRaquel Álvaro


DESINENCIAS

¿De qué metal es tu voz?

A esta hora llega el sastre del sol, volando en su bicicleta blanca, a tocar el acordeón. Yo lo acompaño, calibro la utopía del cuervo de ala blanca. Y en mi movimiento siembro médanos y corales, reparto el sueño de los peces, y disecciono del mendrugo la caries de oro del empoderado, del que se coloca la corona de rey y fabrica lisos botones con los huesos de sus hijos, aunque por el ojal de mis camisas y pantalones se oigan, puros, sus nombres.


Los pájaros llegan tras la lluvia, cuando despunta el alba con sordina, trompeta y saxofón. Yo los acompaño, labro la tierra donde cómodamente defecarán para luego cultivar algunos puñados de semillas. Y en mi movimiento arrastro troncos y otros maderos, que serán vigas, que serán traviesas, hacia las orillas del estuario, y disecciono del báculo las joyas, pues este será ahora bastón de ciegos o azadón: la oscuridad translúcida me guiará.


Bienvenido sea el pastor de las nubes, y su piano de luna y noche, a entregarnos resplandores y algunas tormentas. Yo lo acompaño, remanso las hélices de los torbellinos para dejar sujetas algunas raíces y luego dibujar un arco iris. Y en mi movimiento recolecto neblinas hasta su disolución, fortalezco los tallos nacientes en los barrancos, y disecciono de la capa bordados, broches y algunos rubíes, e hilvano un saco donde recoger el polvo de los días y un poco de brisa salina para limpiar mis heridas.


Pasen, pasen escrituras, ha llegado su tiempo y el rasgueo de violín y charango, en un territorio donde el idioma cambia todos los días. Yo las acompaño, pronuncio el mismo vocablo, la diferencia entre pirata y corsario, para esparcir viruta en las calles empapadas y recibir al que escribe sus cartas en el aire. Y en mi movimiento fundo mi nombre en la misma hoja de acero que lo ha inscrito, ahí, donde señala la luz, en la sombra, y disecciono de las bulas las palabras que dicen de un yo, de un me dije, de un les dije, de un nos dijeron.

Afinidad del escalpelo.

joséagustín hayadelatorre

para jcm


MIS SENTIMIENTOS

“Lo que sé de mí”

Yo he nacido en mi querida Españalos árboles ven pasar mi alegría,el mar me hace flotar en el agua salada.

Yo he nacido en el paraíso del verano,la soledad me guarda un profundo calory los familiares me dan amor.

Mi ciudad, mi ciudad, mi querida Getafela esperanza te aguarda en el ser del hombre,cada día te sueño en el sueño más alegre.

Yo he nacido en mi querida España,donde las aguas son tranquilas y revoltosas.

Son las montañas blancas como la nieve,el sol brillante como un diamantey los pájaros cantan una hermosa melodía.

Mi ciudad, mi ciudad, mi querida Getafela esperanza te aguarda en el ser del hombre,cada día te sueño, en el sueño más alegre y puro.

Enrique Bazán, Juan Carlos Jimeno, Sandra Sánchez, Alba Jaramillo, Andrea Castillo, Carla Gómez, Carlos Moreno, Daniel Mata, Irene Villalobos, Jorge Flores, Juan Antonio San José, Nicolás Casas, Noemí Cruz, Pablo Jiménez, Sara Garcia, Siham Mhaouch y Sonia ValentínPCPI. IES Pablo Neruda


Triste con alegría, siempre estoy alegre.Noche de pasión.Siempre me ayudan a ser más positivo.Y aunque todos los demás me ven de distinta forma,yo hago todo lo que puedo y más.


Sé que tus ojos son estrellas.También sé que nunca se apagarán. Todas las noches sueño contigo,sueño que estás a mi lado.Y sé que nunca te irás.

Veo que tu cara se iluminacon todo su esplendor.Y que todas las noches mi corazón bombea todo el amor, que siento y sentiré por ti,porque sé que tú serásla estrella de mi corazón.

Carolina Martín-Francés2.ºA IES Pablo Neruda

Inspirada en POEMA DEL LEJANO (Antífona del otoño en el Valle del Bierzo)Juan Carlos Mestre


LIBRO DE POEMAS DE LÈDO IVOInspirada en el poema CAVALO MORTO (La Casa Roja). Juan Carlos Mestre

José Hernández “Chiqui”

LIBRO DE POEMAS DE LÈDO IVO

… Cavalo Morto es un lugar que existe en un poema de Lèdo Ivo.En Cavalo Morto tiene su taller un doblador de líneas que construye dibujos imaginariosy en la oficina de arreglos de ropa, Lèdo Ivo remienda palabras con colores reciclados.

Sí, ‹seguramiente›, … en Cavalo Morto.

José Hernández “Chiqui”


NOTAS A PIE DE VIDApara Juan Carlos Mestre

1. i.e. de ojos claros.2. Término con el que, en ciertos ritos de paso, se invoca a una criatura benéfica

con lengua de serpiente, cola de ratón y buche de paloma torcaz.3. En aquella época, era costumbre regalar llaves a las embarazadas.4. Se refiere a los cerros de Úbeda.5. Dícese de la franja de luz que asoma por detrás de puertas entornadas. También

se aplica al cieno blando, suelto y pegajoso, de color oscuro, que se halla en algunos lugares del fondo del mar o de los ríos.

6. En inglés, baby squid.7. Minutos después de la medianoche del 24 de octubre de 1967, una banda de

grullas sobrevoló el hospital donde nuestro autor era dado a luz. Aunque el dato ha sido comúnmente desdeñado por los estudiosos, resulta de lo más sugestivo para entender esta etapa de su vida.

8. i.e. de pulgares largos y gruesos.9. De quien se decía que iba donando segmentos de su voz tras haberla cortado

con la hebra más fina de una cuerda de violín.10. En francés en el original.11. Vivió felizmente hasta los 111 años.12. «La escarcha ejerce su secreto oficio, / sin ayuda del viento» (S. T. Coleridge).13. Contrabajista de jazz y habitual en numerosas sesiones de los años noventa, en

2002 entró a formar parte de la banda estable del Club Green Mill de Chicago.14. Ropa vieja.15. Klaus Conrad, quien acuñó el término en 1959, lo define como «visión de

conexiones sin razón ni fundamento», acompañada de «experiencias en que, de modo anormal, se da sentido a lo que carece de él».

16. i.e. de pies pequeños.17. Dícese de los bancos de nieve que se forman a ambos lados del camino.18. De noche, en el estanque del pueblo, ponen a flotar peces de trapo. Entonces

remueven el agua con grandes pértigas de madera, lo que quiere decir que llaman a la puerta de los sueños de sus hijos.

19. Caparazón de las tortugas de agua o galápagos.20. El diccionario lo define como «tenue recubrimiento céreo que presentan las

hojas, tallos o frutos de algunos vegetales».

21. «Traedme un orinal / y veré dentro el mal» (Roman de Renart).22. Su amigo Guillaume recuerda que salieron de casa en plena ventisca para

traer leña del garaje y se vieron obligados a tender cuerdas entre el porche y la manilla del portón para no perderse.

23. i.e. uñas manchadas de tierra.24. Toda clase de arroz.25. Juncos de pescadores al atardecer.26. Según Alberto Magno, «el cerebro, tomado por sí solo, es muy frío».27. Forma de energía que liberan los alimentos básicos (pan, leche, legumbres)

cuando pasan de una mano a otra.28. Si hemos de creer a Arnold, fue entonces cuando el mundo de la música volvió

a tentarle.29. Fósiles de huellas de grandes reptiles ya extinguidos.30. Pasaje que evoca unos famosos versos apócrifos de Apollinaire: «Me aventuro

cual gato gris / por los tejados de París».31. Se trata, como es obvio, de una especulación sin fundamento.32. No se ha dicho que, según el mito, cuando los segmentos de voz se dejaban

caer sobre el agua (véase nota 9) se creaba una película muy fina donde era posible revelar los sueños de la noche precedente.

33. También conocidos como «los puertos grises».

Jordi Doce


Ángel Morales1.º BACHILLERATO. IES Salvador Dalí

Marta Ribote4.º ESO. IES Salvador Dalí

Olías a mil delicias. Sonaba la tela del Hanfu a cada tic-tac. Año nuevo chino, celebrar nuevas promesas. Pasó. Y todos los buenos presagios se hicieron añicos. Las galletas de la suerte mentían. Los olores se mezclan y los sonidos se vuelven ruido.Silencio en la cárcel de pino.

A jUAN CARLOS MESTRE

Para ti, hijo del Bierzo, que naciste ya entregado,poseído por las musas e inspirado por la aurora,

a ti, que creciste en aquellas tierras del Norte,gozando sus páramos vestidos de verde,

que bebiste de las límpidas aguas de las fuentesdescubriendo las veredas y los montes,

disfrutando estrellados cielos en la noche,creciendo tu amor apasionado por sus gentes.

A ti, trágico juglar, que reclama el pan de ayer,que publica los pesares de su pueblo

que, desterrado por la pobreza,vive sin corazón en lo lejano,

siempre pendiente de un regreso deseado que no llega,perdiendo el tren de la vida y de lo amado

y la dignidad que silba desde el cielo.

A ti, poeta, que has sentido lo que escribesy has escrito lo vivido,

que eres un hombre ante todo, entre los hombres,que has desgranado tus palabras y tus trovas,que has compartido tus romances y tus horas.

En mi corazón tallaste, como en madera o en roca, con tus versoshaciéndome sensible al universo,

despertando a la luz, tan consabida de la auroray trasladándome a donde solo pueden los sueños.

A ti, leonés, te dedico estos renglones sueltos,palabras de homenaje que he resuelto,

con humilde sapiencia de lo escritoy admirada actitud por lo leído


Hermanos os aseguro que el evangelio predicado por mí no es un producto humano. En este mismo instante un francotirador desde la ventana observa una abeja y la hierba que crece en el estadio de Maracaná es el pelo de Cristo.

Juan Carlos Mestre

Etimología de una pesadilla #4. Inspirada en EPíSTOLA A LOS

DÁLMATAS (La Casa Roja). Juan Carlos Mestre

Manuel G. Viñas


RomamestrarioSoneto desmigado en jaikus sobre el Cuaderno de Roma

Ensortijado TíberOjos de cónsul, lunaBarbilampiña

Pez ensartadoEn labios de poetaMigas de sombra

Los pies descalzosEn aire de teselasPiar de silencios

Sol azul, líquido,Esponjoso, marino,Dúctil, carmín

Trémulo paso de unicornioPor suelo leve, nacarado

Luz mariposaMemoria de crisálidaAmaneciendo

Derruido temploPeces sobre las losasEnmarañados

TitiriteraDeambulas sin dedosCaracoleas

Espina y nocheLas manos lo están viendoCon los colores

José Ángel Cilleruelo


Marta Muñoz Díaz1.º Bachillerato. IES josé de Churriguera

Celia Martín Morales1.º C ESO. IES josé de Churriguera

28 VERSOS

¡Acudid, antepasados!Acudid cual pájaros de nostalgiaen el rumor de la noche.El ídolo que sabe de mí se oculta en el valle del Alba.El pródigo huye del otoño en su citroneta.Ya está llegando a Villafranca.

¡Acudid, antepasados!antes que acabe el otoñoy vuelvan la necesidad y el hambre.Acudid cual pájaros de nostalgiaen el rumor de la noche,porque el hombre saciadoes un ser indolente.Volverá para reclamarnuestro viejo pacto,la alianza sellada con nuestra sed.Lejana es la geografía familiar.Tristezas e infelicidades fueron duras,pero no amigas de la inconsciencia.El pródigo navega el otoño con fuerza y tenacidad;liberado de su carga, tiene su nueva vida.Ya está llegando, podrá cantar al futurocomo yo le canto a él.Y a nosotros, que tambiénseremos antepasados. Inspirada en LECCIÓN DE GEOGRAFíA ( Antífona del otoño en el Valle del Bierzo).

Juan Carlos Mestre


Ya se sabe, cada poder tiene su aparato eléctrico, una encapuchada que monta un trineo tirado por aves rehuídas de las visiones. Pero la muerte sigue siendo exactamente vulgar: te quitan la ropa, te lavan, luego te mandan a orillear lo eterno recomendado por una pandilla de gilipollas.

Juan Carlos Mestre

NATURA MORTE. SERIE: IMÁGENES CON HISTORIA, 2013 Inspirado en VEINTE EUROS DE GELATINA DE CALABAZA (La Casa Roja). Juan Carlos Mestre

Rafa Martín


EL SEÑOR ROT

La gente que tiene casa suele barrer las hojas del jardín de su casa.

El señor Rot barre todas las mañanas las hojas del jardín de su casa.

La casa del señor Rot está pintada de blanco y tiene un magnolio a la entrada.

El señor Rot saluda los vecinos,

saluda efusivamente al repartidor de periódicos,

saluda al lechero y al vendedor de camarones de tierra.

Podría decirse que el señor Rot es un saludador profesional que barre las hojas del jardín de su casa.

Nadie hay en el barrio más experto en asuntos de saludo que el buen vecino Rot, barrendero de hojas del jardín de su casa. Un buen vecino es alguien que te trae por diciembre galletas de pascua y durante las vacaciones te recoge la correspondencia. El señor Rot separa en montoncitos las hojas, las que están todavía verdes, las que ya se han puesto amarillas, las rojas. Buenos días señor Rot, adiós señor Rot, hasta luego señor Rot.

El señor Rot es amable, el señor Rot es el padre de Rit y de mi amiga Rat. El señor Rot llegó a esta ciudad a finales del cuarenta y cinco y desde entonces no ha hecho otra cosa que barrer las hojas del jardín de su casa. Barre por la mañana, barre al atardecer, durante la noche barre.

Aparentemente esta es la historia del señor Rot, padre de Rit y de mi amiga Rat.

Alexandra Domínguez


Carla del Viso Guijarro4.ºB ESO. IES Isaac Albéniz

ECOS DEL POEMA TA TUNG DE jUAN CARLOS MESTRE

Te miraba boquiabierto sin saber qué decirEl gato de la suerte movía su pataComo si de un péndulo se tratase

Me hubiese pasado horas mirándoteDe no ser porque el arroz frito se enfriabaY supongo que contigo llegué a mi meta: ser feliz

Aunque fue todo tan breve Desde el cristal de este restaurante chinoEsta noche brillas más que la lunaEn ese cielo donde sé que me cuidas

Hanin Mohamed4.ºA ESO. IES Isaac Albéniz

Inspirada en TA TUNG ( La Casa Roja). Juan Carlos Mestre


Inspirada en LA MEDIDA (La Casa Roja). Juan Carlos MestrePaco Morillo

En Jerusalén los escribas hablan con las nueces de Pérej y las granadas de Badán, y los que llevan una piedra sobre la espalda llevan su piedra sobre la espalda.

Juan Carlos Mestre


DANDO LAS GRACIAS

¿Qué sucede? Aquel cielosin ayuda cruzó: sufin de luz cediósobre nosotrossiempre dentro de un plazo.……………………….Hoy hay quienes nos pasanantes de caer la nochepor delante,sin mirarnos,echándonos monedas.

Antonio Méndez Rubio


Valeria Sully Castillo La Torre2.ºA ESO. IES San Nicasio

Carolina Fernández Fernández4.ºC ESO. IES San Nicasio

Inspirada en LA NOSTALGIA ES UN PÁJARO QUE ENCIENDE SU RUMOR EN LA NOCHE

(Antífona del otoño en el Valle del Bierzo). Juan Carlos MestreInspirada en ANTEPASADOS (Antífona del otoño en el Valle del Bierzo).

Juan Carlos Mestre


Tú recuerdas los campos en vísperas de siembra,la hazuela estaba pura, nidia la besanadonde las campesinas alegres voleaban los granos.

Juan Carlos Mestre

Inspirada en EL PRÓDIGO (Antífona del otoño en el Valle del Bierzo). Juan Carlos Mestre

Luz Cortés M.


jUAN CARLOS MESTRE

El arte eterno tendría sus cometidos, del mismo modo en que los poetas son ciudadanos. La poesía dejará de poner ritmo a la acción; irá por delante de ella. ¡Existirán tales poetas! Cuando se rompa la infinita servidumbre de la mujer, cuando viva por ella y para ella, cuando el hombre, —hasta ahora abominable— , le haya dado la remisión, ¡también ella será poeta! ¡La mujer hará sus hallazgos en lo desconocido! ¿Serán sus mundos de ideas distintos de los nuestros? — Descubrirá cosas extrañas, insondables, repulsivas, deliciosas; nosotros las recogeremos, las comprenderemos.

Rimbaud

Entre la noche y la espuma la mujer que azota su larga cabellerano sabe que los hijos del tiempo volverán a poblar los últimos vagones,guardará entre gasas sus ojos atigrados como joyas extraídas del viejo cráneo marino.El tren carga su hambre hasta el patio execrable de las compuertas,la respiración se cierra en el húmedo estuche que llenan las cucharas.Habrá amanecer en las celdas de la máscara hasta descargar la mañana,el estómago de las provincias gobernadas por largos obeliscos dormidos.Habrá amanecer en las cosas sin dueño, entre las cosas sin dientes, naciones en la arena,los caballos tiritan por los cementerios como campanas robadas,el arrecife de papel escribe en el rosal de las mejillas y luego las destroza,el desastre celeste de la mirada carboniza el invierno, encorvados caminosdonde ninguna pregunta es contestada. Las Tablas de la Ley remontarán el ríopara adornar con guirnaldas la cabeza de la Declaración de los Derechos del Hombrey de la Mujer que trenza el coral de los pensamientos furtivoscon su triste coloración de infinito. La mujer inestable se ha vuelto traslúcidacomo el rizoma del cielo en las rodillas sucias, pan ácimo sobre el empedrado,el paladar profético anuncia el tiempo en que los labios se bifurcany aplaude a la primera canción que se come las lágrimas.Entonces la vi: un mosaico de luces frías sobre la expresión de la muerte,sentada en el carrusel de las ánimas como pétalos en la escombrera.Entonces la oí: el lenguaje de los pájaros a la altura del séptimo piso,el cuero burbujeante de las plazas que se pudren al llegar el verano.Esto es lo que hace el amor, le dije a mis entrañas:los padres cultivan en el Libro la carroña de sus hijos,las madres duermen bajo el río mirando las raíces de la muerte,una estación encinta donde la vida no es bella y escupe sus relámpagos,escupe un para siempre en las excavaciones, en la pared caliente de la glosolaliay la oreja que representa la horrenda genuflexión del orbe ante su Dios barbado.Para siempre se oye decir al profeta arrastrando sus bártulos por el camino de tierra,los perros aúllan a la comedia de los carromatos para siemprecomo la mujer azota sin piedad su triste cabellera.

Abre los ojos, imagina sus manos donde se congregan espejos y látigos, imagina su cara frotando con monedas y redecillas el moho de los sanatoriosante el polígrafo y los escaladores del miedo. Imagina sus ojos revueltosigual que el río y la arena, imagina el rebaño que brillaentre torres cubiertas de pelo, su espalda poblada de cicatricescomo una novia antes del trueno, el viento de agonía que sale de su sexo,las manos donde anida el harapo, el tiempo succionadopor las arañas que la miran desde los caminos sin cuervo. Abre los ojos, ciérralos,piensa en los párpados hinchados y en los nudillos débilesde la mujer que lleva sal al pantano, la soledad insalvabledel símbolo se hunde en la nieve, los puños del silencio, el nudo de los sauces,la muleta atraviesa el incendio rodeada de estibadores,el muñón sin alma visitado por su hermana en el hospital de los fósiles,la esclavitud de las madres amamanta la cuna del reflejo,la alambrada rebana los dedos, el cordero lame su manantial de lumbre,el acantilado se queda con los ojos sedientos, el viento enseña y arañala sonrisa que arrastran los lagartos, un declive donde la llave no mete su manocuando los árboles se atreven a chocar contra lo prohibidoy hacen reverencias al gallo con la rima solar en su tridente. La mujer inexactase hunde en la horca del primer frontispicio, sube a la buhardilla de los pies colgando,orina ángulos arbitrarios para el cuidado de esfínteresy el criadero con las inmensas costras. La partera se mete de cabeza a la herida,drena el pelaje delirante, recorta el talismán en las uñas de felpa, entre párpados librespone un huevo sobre la tierra caliente, deja caer la ponzoñosa visión del oráculo, el país de los amantes sin libro me obliga a seguir leyendo:un largo paréntesis de excelentes costuras representa el vacío minúsculoen el cual se revuelcan las figuras mudas, el rey enfermo de todas las islasy su hija ancestral con eléctricas ingles. Abre los ojos: la nariz que recogen las redestestifica ante el tiempo que sin mirar se deforma, una réplica esta oscura mañanadel dictado de Dios ante el asombro del puerto. Cierra los ojos: ataviada por los ritos del sueño,vigilada por los hornos que llevan al cielo, saqueada como la mano de los trabajos forzadosy el cerebro de las ceremonias que besa un pariente lejanola invisible revolotea desnuda entre los palimpsestos,de luto ante las preguntas que derriten los labios en el altar del remiendoriega el lecho donde encallaron los santos. Yo soy esa mujer que azota su larga cabelleraen todos los sentidos, contra todas las cosas, yo soy esa mujer que aguardaal final del poema envenenado entre la noche y la espuma.

Javier Bello


LA NOSTALGIA ES UN PÁjARO QUE ENCIENDE SU RUMOR EN LA NOCHE

En una ciudad de provincia. En una ciudad con tiendas de ultramarinos y ángeles que cruzan el cielo en bicicleta. Es una tarde de domingo, a eso de la tibia luz del anochecer cuando aún no han dado las ocho.

[...]

Lo que borda la ternura sobre los valles del Bierzo, lo que lentamenteabolido aún palpita como un rubí en el melodioso pico de los pájaros. Así os he sentido, libres y gozosos días donde viví cansado por la luz, radiante, estremecido, hijo de la tristeza y los relámpagos.

En una ciudad de provincia. En una ciudad con escaparates yjardines y trenes silenciosos. En una oscuridad amenazada por el muro cinerario de la aurora.

El otoño era bello, nuestros pensamientos tenían la sonrisa delniño que se baña en el río. Como nacidos del puente o de la torre, como la piedra, despacio, el deseo de la aventura fue huyendo de nosotros, como la albahaca de los oteros de junio, como el jaspe que lanzado por la honda silba brillante hacia los cielos.

Llueve, esa gente que soy y que conozco ha salido a la calle, al céfirosuave de los dialectos del monte. La noche ha puesto lámparas apagadas en los nidos vacíos, solitarios pastores en las tristes cañadas del otoño.

Ya lo sabéis, como esa postal borrada por el sol que guarda en suzurrón un cartero celoso.

Juan Carlos Mestre

La casa de la imaginación. Grabado al aguafuerte. 2007.Juan Carlos Mestre.


Gregorio Sánchez Recio2.ºB ESO. IES La Fortuna

Nerea Real Martín2.º C ESO. IES La Fortuna

Inspirada en LECCIÓN DE GEOGRAFíA (Antífona del otoño en el Valle del Bierzo). Juan Carlos Mestre

Inspirado en LO QUE LLEVA UN POETA EN LA MOCHILA (La Casa Roja). Juan Carlos Mestre

LO QUE TIENE UN POETA EN LA CABEZAA Juan Carlos Mestre

Tiene la cueva de los tigresEl Cementerio IncaEl portal de la vidaLa canción de las sirenasLos llantos de un cíclopeLa llamada de las cancionesEl zoo de los gigantesImaginación, sobre todo imaginaciónLas lágrimas de la soberbiaLas notas secretas de Joaquín BuxóEl color rojo de los labios de Marilyn MonroeLa puerta hacia la desesperaciónY teniendo todo eso en la cabeza…¡Qué raro sería que no tuviera este poema!


LA ZURCIDORA

Según esa voz el dolor humano es un montículo de hojas del árbol de la promesa. JCM

ante la fractura de cuatro hojas, John lleva en el reloj un trébol, en la otra, un andéncualquiera con tres manos de frente sabe que no son lo mismo,y lo más sencillo es llegar tarde a parte algunacualquiera, bálsamo o belleza, ha dejado de saber y escucha al pez enredado en la locomotora de la confusión.

ante el vaso roto que el ave del paraíso comparte con el gorrión, John ata con el pañuelo de su hermana un zapato al ánfora y lanza el otro al cable del telégrafo, cebo entre los tiburones de la ominosa omisión.

cualquiera sabe que hay cosas que es más fácil entender descalzo, como nadie sabe que un cordón sobre un pañuelo es el idioma a las puertas del mercado donde la mucha agua pasa bajo los puentes.

y no hay castigo ni perdón delante del día que se ha marchado dejándonos la cautela de todos sus donesdejándonos una idea fija en el aire, la rana nenúfar del fracaso y juventud de lo desconocido.

de eso no puedo estar segura, piensa Fanny, hoy un poco más tonta de lo habitual, creyendo que su dulzura puede zurcir un calcetín.

Guadalupe Grande

Guadalupe Grande


Sentada en el sofáoigo la lluvia caída de las melancólicas nubes, silenciadas durante todo este tiempo, por el refulgente sol.Es una tarde gélida de invierno.Mis sentimientos, están siendo arrojados hacia aguas saladas, donde el velero de mi esperanza,será sepultadopor falsas promesas.Rozado tal vez por el deseo, quizá en un momento de insensatez, surja la llama en el fondo del mar.Pude ver cómo los pájaros desvelaban el secreto del viento,como las nubes eran acariciadas por la brisa....QUIERO SER EL VIENTO.Quiero poder acariciarte suavemente donde quiera que estésquiero poder decidir el rumbo de mi veleroquiero poder viajar a los rincones más remotosquiero ser la voz del mundoQUIERO SER EL VIENTO....

Ana Carrasco2.º F ESO. IES María Zambrano

Paula Cortés 2.º F ESO. IES María Zambrano

Todo comenzó una mañana,como una fría lluvia en lo más recóndito de mis pensamientosconvertidos en desordenados legajos.Estaba transida, en mi propio camino, más bien desdeñada de estepor el que hacía poco había vagado contando su polvo.Ahora solo yacían en mi memoria múltiples paisajes del arrepentimiento,y, sumida en esa idea, lo único que apreciaba del camino era la búsqueda.Entonces, cuando ya iba a romperme en mi último suspiro, oí una voz crujir, como un céfiro que se me abalanzaba. Alguien, al fin, había encontrado este mar no descubierto, cual voz que nos conoce y nos acompaña. La que nos despierta por la mañana y así es.Todo empezó una mañana…


[ASUMIDO UN SOL…]

para Juan Carlos Mestre

Asumido un sol paralizado sólo queda la propia geografía. Geometrizar la memoria, hacer de la penumbra espacio de oleaje y dejar que todo vuelva al fin y transformado. La vida: retablo de fragmentos que encuentran su fluir en su vacío. No obstante, rehaces el curso de tus piezas y hallas su sola y posible ordenación: la pasión de tu figura. La cárcel insondable. Precisa y permanente.

(febrero, 2010)

Marta Agudo


Miguel Ángel Escribano3.ºB ESO. IES Arquitecto Peridis

Arturo Fernández3.ºB ESO. IES Arquitecto Peridis


LA MIGA DEL PRINCIPIO DE LOS TIEMPOS

A Mestre, poeta

Todas las milicianas prensamos lámparas de macramé a la altura de la noche y sepultamos el maullido de los abecedarios para alumbrar el vuelo de los estorninos.Es una pócima mágica para el entendimiento entre tuercas y tornillos, la tinta y la melancolía, la pluma y la sordera.

Acaban de dar las trece en punto en los relojes donde reside la añoranza y la música nos transporta al abismo del embarcadero al que van a varar todos los labios que regresan de un mar antiguo de crocanti y ron.

En las definiciones de las despedidas se acuna la aurora rodeada de cuarzo y alacranes. Ahora que es fácil suicidar caballos desde las almenas sin despeinarse el cuello de la camisa.

Te contaré cómo nace la miga del principio de los tiempos:

Hubo una vez un náufrago de doradas formas llamado Jam que cultivó el aroma de los dieciséis poros de un cuerpo y alcanzó la desolación en los orgasmos de Ophidia, del aire y de las dunas.Con sus alaridos azules, sus trescientas lenguas y su salvavidas para la resurrección. Domesticaba el tacto de terciopelo rojo con una brecha encendida: la clamorosa vía láctea donde se depositan los sedimentos del deleite; sin árbitros ni estancias en hoteles de lujo.Después llegaron los doce mil seiscientos veintisiete sacerdotes con su piel de sotana y sus mentiras curvas. Llegaron las catedrales del desconsuelo con aristas, perímetros y cursis vitrinas pigmentadas. Llegaron los tres Reyes Magos con sus concejales y sus sacos llenos de embustes.Llegó la muerte y con ella la dolorosa carne que tiñe las lápidas de roñoso betún; las bicicletas, Nimrod y la arquitectura inhóspita de la torre de Babel con sus esteras de hierba cultivada sobre la piel raída del otoño para invitar al idólatra a una cena íntima con canapés de envidia y sorbetes de fracaso.

Todos los camareros del exterminio apagan el placer igual que se apaga el estertor de las mareas en mitad de las ferias los meses de agosto.

Hubo una vez un náufrago llamado Yafet perteneciente al Hollywood de las

zapaterías. Yafet cosía las ventanas a los pliegues del viento para alterar el clima de la nieve. Con un aro y un dreidel fabricaba el mundo con la magnificencia del cuello de una garza. Un mundo hermoso como las artistas que alquilan por horas el sol en las cornisas.

Un milagro ocurrió allí: pasarela en la que afinan sus cuerdas las gargantas altivas de los gatospara deletrear las normas que dan de comer a la estética.Primera: Nada es el hueco que dejan las semillas y los lagartos ocelados entre las tiendas de campaña de los campistas, siempre que salen por la noche a ordeñar el canto de los grillos.Segunda: La mitad es el azogue convulso de los caminos que conducen a la encuadernación de las hipérboles.Tercera: Todos nos arropamos con acículas de abeto para que nos escuezan las grietas por donde se cuela la sorpresa de la tarde.Cuarta: Poner a calentar el océano para dar de comer a las siete infancias del destierro con la carne resbaladiza de sus peces, sin cargar con los escombros de la culpa.

El pago se hará al contado: un puñado de pasas o trescientas monedas de chocolate.

Al fin, la última vez de todas dentro del mundo en espiral de las quinientas veces, hubo un náufrago llamado Shem que alimentaba con el color del hielo el hilo transparente de las metáforas.Sin cifras, sin porcentajes ni ecuaciones de segundo grado. Un día abandonó el carruaje de las espaldas indómitas y con abarcas de paciencia echó a andar su luz hacia la antesala de la arena con hilvanes de pluma y zurcidos de ausencia.

Luego se anticipó la vida en la Atalaya y las estrellas en fila india determinaron que el amor debía ser encerrado en una cueva, al lado de su madre, y así, calladamente, perpetuaron el caos de las amapolas en la alianza de espigas de una mujer. Mujer o viento blanquecino que quema el cántaro que contiene el ciclo de las horas.

El resto de las cosas se ha quedado aparcado en otra orilla y vive encadenado a la voz donde tiene su cima el eco de una sola palabra.

De 365 granos de granada y una manzana con miel. Inédito. Raquel Ramírez de Arellano


Miguel García Gozalo4.ºB ESO. IES Butarque

Siham El Kadi4.ºB ESO. IES Butarque

YA REGRESÓ EL OTOÑO

Cuando los días son cortosy las noches largas.Cuando en la tibia luz del anochecerse oye cantar a los ángelesy una dulce pereza invade el ánimo.Cuando caminando por su ciudadlos árboles se desnudan a su paso,dejando ver un mundo de color.Cuando al amanecer, la brisa otoñaltañe su juventud con fragancias del pasado.Cuando la soledad y el silencio invadensu alma y solo le queda una melodía melancólica.Mientras buscando en la caja del anhelouna juvenil sonrisa y solo encuentrauna desgarrada nota.Mientras suspirando por el antaño de su juventudve como el tiempo fluye,y va declinando poco a poco.Solo le queda pensar: ¡Ya regresó el otoño!

Inspirada en EL VALLE (Antífona del otoño en el Valle del Bierzo). Juan Carlos Mestre


TRATADO 2014. Collage técnica mixta con tinta blanca.Miguel Ángel Muñoz Sanjuán

A juan Carlos Mestre

—Otro será las horas: las pisadas & sus días: otro será las manos: & otro las nuevas heridas: …: …: …: mas el tiempo no será otro: ni otra la palabra precisa: …: …: …: otro será los otros & otro las abisales orillas:

: &

otro: será los otros:

conversando: con Nadie: sin prisa:

Miguel Ángel Muñoz Sanjuán


Beatriz Díaz Rivas4.º ESO. IES Enrique Tierno Galván

Isabel Hidalgo Díaz4.º ESO. IES Enrique Tierno Galván

Inspirada en LA MUJER ABSTRACTA (La Casa Roja).Juan Carlos Mestre

Inspirada en LO QUE LLEVA UN POETA EN LA MOCHILA (La Casa Roja).Juan Carlos Mestre


Marina García-Ballesteros y Beatriz Burgoa1.º ESO. IES Siglo XXI

Daniel Torres, Ester Álvarez, Gerardo Pola, Madeleine Kabankaya, Marina Yunta, Nadir Yemlahi, Nicole Solís, Nuria Rotund1.º ESO. IES Siglo XXI

Inspirada en CAVALO MORTO (La Casa Roja).Juan Carlos Mestre

Inspirada en CAVALO MORTO (La Casa Roja).Juan Carlos Mestre


Ainhoa Rubio Lozano3.º A ESO IES julio Verne

María Cano Rubio2.º A ESO. IES julio Verne

… QUE SE LEVANTE

El que no haya visto el campo que se levante,yo se lo voy a enseñar.

Cerrad los ojos y sumergiros en una profunda oscuridad,comenzad viendo los árboles y su suave movimiento de hojas,luego, oíd el cantar de los pájaros a media mañana.

¿No os llega el olor de los lirios?

Quizá, deberéis introduciros un poco más.Ahora ya lo has visto,ahora es tu campo.

Inspirada en LA CITRONETA AZUL (La Casa Roja).Juan Carlos Mestre


José Daniel Gonzalo Rovira2.º Carrocería. IES Luis Vives

Antonio Elias Kinamvuidi Gombe2.º Diseño en Fabricación Mecánica. IES Luis Vives

EL ESPIRITUAL NO ES EL MATERIAL

El hombre material tiene una nave espacial,

el espiritual hace un viaje astral.

El hombre material se sirve de la telefonía,

el espiritual utiliza la telepatía.

El material tiene una televisión,

el espiritual ve a través de la imaginación.

El material se cura a base de vacunas,

el espiritual meditando y mirando a la luna.

El material guarda su riqueza de la gente,

el espiritual no revela los secretos de su mente.

El espiritual no tiene ni un céntimo en el banco,

por lo normal, el material la mente en blanco.

Inspirado en EL NIñO JOHN (La Casa Roja).Juan Carlos Mestre

Inspirado en EL OTOñO (Antífona del otoño en el Valle del Bierzo). Juan Carlos Mestre


EL SUR, 11 DE SEPTIEMBRE

Ayer he visto a Ángela escribir con los ojos en el aire una última proclama a la tristeza. Y era toda la ciudad como una lámpara que lentamente un pájaro encendía sobre el blanco silencio de los muros. Ayer he visto a Ángela cruzar la calle oscura al mediodía, silencio y multitud bajo la lluvia. La palabra era el mar, las soledades una tarde como hoy sin horizonte donde levanta vuelo la esperanza. Ayer he visto a Ángela en los altos corredores de las nubes saludar la libertad con un pañuelo. Veía pasar la vida despacio por el invierno, la lenta gota de arena de un corazón contra el miedo.

De La poesía ha caído en desgracia (Madrid, Visor, 1992)Juan Carlos Mestre

Santiago Gómez Valverde


Índice de Autores (alfabético)

Agudo, Marta 57

Álvarez, Ester 69

Álvaro, Raquel 15

Andritchi, Elena 13

Bazán, Enrique 18

Bello, Javier 46

Burgoa, Beatriz 68

Cano Rubio, María 70

Carrasco, Ana 55

Casas, Nicolás 18

Castillo La Torre, Valeria Sully 42

Castillo, Andrea 18

Cilleruelo, José Ángel 29

Cortés M., Luz 45

Cortés, Paula 54

Cruz, Noemí 18

del Pino Jiménez, Ángel 12

del Viso Guijarro, Carla 36

Díaz Rivas, Beatriz 66

Doce, Jordi 22

Domínguez, Alexandra 35

El Kadi, Siham 62

Escribano, Miguel Ángel 58

Fernández Fernández, Carolina 43

Fernández, Arturo 59

Flores, Jorge 18

García Gozalo, Miguel 63

García, Sara 18


García-Ballesteros, Marina 68

Gómez Valverde, Santiago 74

Gómez, Carla 18

Gonzalo Rovira, José Daniel 73

Grande, Guadalupe 52

hayadelatorre, joséagustín 16

Hernández “Chiqui”, José 21

Hidalgo Díaz, Isabel 67

Jaramillo, Alba 18

Jiménez, Pablo 18

Jimeno, Juan Carlos 18

Kabankaya, Madeleine 69

Kinamvuidi Gombe, Antonio Elias 72

Martín Morales, Celia 31

Martín, Rafa 33

Martín-Francés Santos, Carolina 19

Mata, Daniel 18

Méndez Rubio,Antonio 41

Mestre, Juan Carlos 49

Mhaouch, Siham 18

Mohamed, Hanin 37

Morales, Ángel 24

Moreno, Carlos 18

Morillo, Paco 39

Muñoz Díaz, Marta 30

Muñoz Sanjuán, Miguel Ángel 64

Ordóñez, Carlos 9

Pola, Gerardo 69

Ramírez de Arellano, Raquel 60

Real Martín, Nerea 50

Ribote, Marta 25

Rotund, Nuria 69

Rubio Lozano, Ainhoa 71

San José, Juan Antonio 18

Sánchez Recio, Gregorio 51

Sánchez, Sandra 18

Solís, Nicole 69

Torres, Daniel 69

Valentín, Sonia 18

Villalobos, Irene 18

Viñas, Manuel G. 27

Yemlahi, Nadir 69

Yunta, Marina 69

Esa gente que soy y que conozco - Ayuntamiento de Leganés · PDF filey que conozco...

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