REFLEXIONES ACERCA DEL ARTÍCULO: ÉTICA DE LA CIENCIA.

DE: VÍCTOR R. MARTÍN F.

La nueva era ha traído consigo en materia tecno-científica un gran cambio

en los modos de conducir su vida las personas, debido a que se han producido

transformaciones de muchos tipos, a nivel biológico, a nivel informático, de las

comunicaciones, etc. Por otro lado, este gran fenómeno llamado por unos el

“Big Science”, condiciona y atrapa muchas veces la forma en que las personas

actúan, conocen y valoran aspectos de su vida.

Muchas veces se ha escuchado que quien tiene el conocimiento lo maneja

todo, éste que es llamado el altísimo o todopoderoso en la ciencia,

paradójicamente ha incumplido en necesidades humanas como la justicia, la

salud, calidad de vida, educación, la paz, entre otras. De allí, que nace una

nueva corriente denominada la Post-ciencia, la cual se encargaría de analizar

profundamente esas actividades y resultados encontrados por los científicos

luego de sus intervenciones.

Esto serviría entonces, para aclarar de algún modo la forma en que han sido

tomadas ciertas decisiones y que afectan a muchos otros individuos

específicamente en necesidades como las mencionadas anteriormente.

Ahora bien, la ciencia ha tenido un gran impulso a lo largo del siglo XX, y un

papel protagónico lo tuvieron la física y la matemática al darle paso, por medio

de sus teoremas y fórmulas, a la informática, específicamente en áreas del

conocimiento de la vida en los seres humanos. Fue mucho el avance

tecnológico al respecto, desarrollándose técnicas que tendían a mejorar la

salud de las personas en problemas que se creían sin solución como

transplantes, clonaciones, entre otros. Pero, si todo esto trajo consigo

beneficios a la humanidad, también arrojó consecuencias en el sentido del

debate que generaría la responsabilidad tanto individual como institucional o

grupal de quienes manejaban ese conocimiento.

Debido a esto, para el siglo XXI se comenzó a cambiar la inteligencia

científica por una inteligencia mas avocada al ser humano, llamada inteligencia

social y otra inteligencia ética. Este tipo de inteligencia va dirigida a la

capacidad que tiene la misma, entre muchas otras, de permitir al ser humano

elegir entre lo que le conviene, lo que le parece correcto. Sin embargo, existen

algunos que la consideran además, como la potencialidad del humano para

resolver todo tipo de problemas y crear beneficios materiales para la sociedad.

Retomando el punto de la inteligencia ética, vale la pena destacar que se debe

tener suficiente compromiso formativo, dogmático, es decir, pedagógico para el

hombre que la utilice, pues muchas veces lo que pensamos no es igual a lo

que creemos. Razón por la cual, conviene para el mundo de hoy disminuir cada

vez más la brecha existente entre las ideas y las creencias, entre lo

tecnocientífico y lo social.

En este momento, es importante puntualizar que para lograr este cambio, no

solo se necesita la intención del querer disminuir tal brecha, sino internalizar

que es un proceso complejo en donde intervienen: cambio de conductas,

actitudes, paradigmas que no solo intervendrían en la inteligencia ética

comentada anteriormente sino también sobre la ciencia.

Actualmente, se está tratando que el pensamiento humano sea visto de otra

manera, esto quiere decir, hacer que las acciones del hombre en cuanto a la

construcción de la vida sean enrumbadas hacia el camino de la ética. Por otro

lado, las decisiones que se generen de los resultados que el hombre obtenga

de sus indagaciones no sean del todo finales sino que permitan la futura

búsqueda de otros productos para realizar futuras conjeturas pues, lo definitivo

resulta imposible. Así mismo, es de sobresaltar que la ciencia y la ética hoy por

hoy se encuentran en un grado de reconciliar a dos elementos fundamentales

del pensamiento humano y ellos son: las ideas y las creencias. Todo esto en

pro de unificar criterios para la solución de problemas importantes para la

sociedad.

Para finalizar, debo puntualizar lo siguiente, ciencia y ética en el mundo de

hoy deben ir unidas de la mano, debe existir responsabilidad y serio

compromiso por parte de la humanidad en cuanto al conocimiento que se

maneja y que de alguna manera culmina en el saber.