Exceso Rigor Manifiesto.doc

105
UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES Materia: Derecho Constitucional Profundizado y Procesal Constitucional Tema: Arbitrariedad de sentencias por exceso ritual manifiesto Docente: Dr. Serantes Peña, Juan Manuel Comisión: 681 Alumnos: Bertozzi, Pablo Leiva, Gloria 1

Transcript of Exceso Rigor Manifiesto.doc

Page 1: Exceso Rigor Manifiesto.doc

UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES

Materia: Derecho Constitucional Profundizado y Procesal Constitucional

Tema: Arbitrariedad de sentencias por exceso ritual manifiesto

Docente: Dr. Serantes Peña, Juan Manuel

Comisión: 681

Alumnos: Bertozzi, Pablo

Leiva, Gloria

Luciani Otaño, Juan Martín

Sotelo, Julia Pamela

1

Page 2: Exceso Rigor Manifiesto.doc

2011

INDICE GENERAL DEL TRABAJO INVESTIGACION

Carátula……………………………………………………..pagina 1.

Índice General…………………………………....................pagina 2.

Introducción………………………………………………...pagina 3.

Concepto………………………………………....................pagina 4.

Distintas Manifestaciones

Formulismo…………………………………………...pagina 5.

Arbitrariedad………………………………………….pagina 5.

Abuso de Derecho…………………………………….pagina 6.

Violación de la garantía del debido proceso y del derecho de defensa en juicio………………………………………….pagina 8.

Análisis Jurisprudencial (1991-2011)………………………pagina 10.

Conclusión………………………………………………….pagina 63.

Bibliografía…………………………………………………pagina 65.

2

Page 3: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Introducción.

La finalidad del presente trabajo es analizar la doctrina de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y de tribunales inferiores en cuanto a la configuración de sentencia arbitraria y dentro de ésta la configuración por “exceso ritual manifiesto”.

Genaro Carrio dice que el “exceso ritual manifiesto” es una de las causales de configuración de sentencia arbitraría: que la arbitrariedad reside en los fundamentos, ya sea al establecer la norma, fundar los hechos o en el camino a la conclusión, pero que también hay casos, y son los menos, en la esta causal se encuentra acompañada por otras.

En el año 1957 la Corte Suprema de Justicia de la Nación introduce la doctrina sobre una nueva causal de arbitrariedad de sentencia, el caso “Colalillo”. Se trata de un juicio por indemnización de daños ocasionados por un accidente de tránsito, en el cual resultaba relevante establecer si a la fecha del accidente el actor tenía o no registro de conductor. El dato no puedo ser acreditado durante el periodo informativo, pero luego de dictada la sentencia de primera instancia que rechazó la demanda, y antes de su notificación, el actor acredito aquella situación, adjuntando a los autos un duplicado de la constancia del registro extraviado. En primera instancia como en la Cámara de apelación entendieron que el documento había sido agregado extemporáneamente, y en consecuencia, no procedía la modificación del fallo dictado. Llega el caso a la Corte se obtuvo una descalificación del pronunciamiento apelado.

La Corte, entre otras consideraciones, expresó que el proceso civil no puede ser conducido en términos estrictamente formales, y que la renuncia consciente a la verdad jurídica objetiva es incompatible con el servicio de la justicia.

Para comprender esta particular especie de arbitrariedad, es necesario tener en cuenta que el exceso ritual debe ser manifiesto y notorio, además de irrazonable; y que no puede alegarlo quién incurrió en negligencia en la defensa de sus derechos.

Mediante el presente trabajo práctico abarcaremos el concepto y las situaciones en que se da la causal de arbitrariedad de sentencia por exceso de ritual manifiesto.

El excesivo rigor formal constituye una de las manifestaciones posibles del abuso del proceso, y en tal línea conspira contra un proceso justo.

Expondremos cómo se presenta en el proceso, a través del formulismo, la arbitrariedad, el abuso del derecho y la violación a las garantías del debido proceso y la defensa en juicio.

El objetivo del presente trabajo es dilucidar qué entiende la Corte por "exceso ritual manifiesto" así como también diferentes consideraciones de otros fueros inferiores.

3

Page 4: Exceso Rigor Manifiesto.doc

A tal fin se han revisado los fallos en que la Corte declaró procedente el recurso extraordinario federal por dicha causal, desde el año 1991 hasta la actualidad inclusive. También nos ocuparemos de analizar la naturaleza jurídica de la sentencia arbitraria.

Concepto.

En 1957 la Corte Suprema de Justicia de la Nación introduce en la doctrina una nueva causal de arbitrariedad de sentencia. Esta nueva causal es  por "exceso ritual manifiesto".La arbitrariedad reside en: sus fundamentos, en establecer la norma, fundar los hechos o en la conclusión.Desde el caso Colalillo, la Corte Suprema de Justicia ha utilizado distintos términos, sinónimos,  para dirigirse a esta causal de arbitrariedad, a saber:1.- Exceso ritual manifiesto;2.- Notorio rigorismo formal;3.- Excesivo rigor formal;4.- Injustificado rigor formal;5.- Excesivo apego al texto de las formas;6.- Aplicación mecánica de las normas adjetivas;7.- Frustración ritual del derecho; rigorismo procesal irrazonable;8.- Ritualismo estéril;9.- Renuncia consciente a la verdad objetiva;10.- Predominio exagerado de las formalidades;11.- Ciego ritualismo;12.- Desnaturalización de las formas procesales; etc.Lo arbitrario surge al aplicar, de manera manifiesta, las formas, ciega e innecesariamente.

Estas no existen por capricho del legislador: su fin es poner orden en el proceso. Un orden que asegure a las partes un debido proceso, que respete sus garantías y derechos, y que culmine en una decisión conforme a derecho.

La arbitrariedad se encuentra configurada por el modo en que las formas son utilizadas, atendiendo únicamente a su texto, haciendo de ellas una aplicación mecánica.

Se olvida el fin por el cual ellas fueron creadas: contribuir a la más efectiva realización del derecho”.Nuestros tribunales, caracterizan al “exceso ritual” o “rigor excesivo”, como un fenómeno de abuso o de desnaturalización de lo formal.

Por su parte Bertolino, define al exceso ritual como “una exagerada sujeción a las normas formales, las cuales abusivamente son mal o indebidamente utilizadas (…)”

Las formalidades, son parte de todo proceso judicial y su finalidad es poner orden en el proceso, a los fines de asegurar a las partes un debido proceso, que respete sus garantías y derechos, y que culmine en una decisión conforme a derecho.

Pero ese formalismo debe ser limitado y condicionado por el interés primordial de la justicia, ya que, de lo contrario si las formas se desnaturalizan, utilizándoselas de manera anormal, atendiendo únicamente a su texto, haciendo de ellas una aplicación

4

Page 5: Exceso Rigor Manifiesto.doc

mecánica, y olvidando el fin connatural por el cual ellas fueron creadas, no podrá alcanzarse aquél objetivo.

Este instituto, ya incorporado definitivamente en nuestra cultura jurídica se manifiesta a través de distintas formas, ya sea a través de una irracionalidad formal injustificada (formulismo); la ciega aplicación del texto legal (arbitrariedad); de un abuso del derecho; o de la violación del derecho de defensa y/o de la garantía del debido proceso legal.

Lo que se intenta a través de esta doctrina es brindar algunas soluciones a los problemas frente a las limitaciones de las normas, ya que las mismas no pueden contener la solución exacta para todos los casos.

La doctrina del exceso ritual, será aplicable en aquellos supuestos singulares en que la aplicación al caso concreto, de la regla contenida en la ley en abstracto, importe desconocer razones de justicia y equidad.

A su vez, este carácter también implica que debe ser manifiesto, ya que debe ser percibido sin necesidad de interpretación en sentido estricto, es decir, que es percibido prima facie sin requerir de una capacidad, cuidado o esquema conceptual especial.

Distintas Manifestaciones.

a) Formulismo:

El orden tiene dos desvalores, el desorden, por carencia de orden, y el ritualismo, por exceso.

En este sentido se expresa que el ritualismo es el formulismo excesivo convertido en vana solemnidad dañosa porque no sirve como firmeza para la seguridad sino que la debilita como todo abuso.

Siguiendo esta línea de pensamiento, se diferencia entre forma y fórmula, la primera tiene un sentido teleológico, en aras de lograr la seguridad jurídica, la segunda presenta un valor eminentemente burocrático, carente de todo sentido.

En este orden de ideas, puede afirmarse que nuestros códigos procesales establecen formas y no fórmulas, en el cual el respeto estricto de las formas establecidas por la ley trae aparejado un resultado manifiestamente disvalioso por su evidente irrazonabilidad, la cual, implica un uso irregular de las formas, en el sentido de no adecuación a la finalidad para la que se han establecido.

La jurisprudencia y la doctrina han destacado reiteradamente que esa irrazonabilidad importa un daño para la administración de justicia, que provoca un ejercicio antifuncional de la jurisdicción.

De esta forma, cabe señalar que, en sus justos límites, la doctrina del exceso ritual manifiesto no descarta la importancia de las formas, sólo procura erradicar su aspecto patológico e irracional, a fin de que no obstaculice la obtención de la verdad, y que el juez resuelva con justicia en el caso concreto.

5

Page 6: Exceso Rigor Manifiesto.doc

b) Arbitrariedad:

La decisión jurisdiccional debe cumplir con el razonamiento práctico prudencial; es decir, debe explicar las razones en virtud de las cuales se acoge una pretensión y se rechaza la otra. De otro modo la resolución será arbitraria, pues habrá impedido la posibilidad de que ella sea criticada con eficacia, y con ello se eliminará el único medio con que cuenta el proceso para garantizar el acercamiento a la verdad.

Si bien, la arbitrariedad comienza como una forma de descalificar un pronunciamiento por no estar fundado en ley, en la doctrina en análisis abarca una noción en sentido contrario, o sea, desautorizando la validez de pronunciamientos que aplican a rajatabla el texto legal, sin reparar en la notoria injusticia que ello provoca en el caso particular.

En este orden de ideas, puede afirmarse que nuestros códigos procesales establecen formas y no fórmulas, en el cual el respeto estricto de las formas establecidas por la ley trae aparejado un resultado manifiestamente disvalioso por su evidente irrazonabilidad, la cual, implica un uso irregular de las formas, en el sentido de no adecuación a la finalidad para la que se han establecido.

La jurisprudencia y la doctrina han destacado reiteradamente que esa irrazonabilidad importa un daño para la administración de justicia, que provoca un ejercicio antifuncional de la jurisdicción.

De esta forma, cabe señalar que, en sus justos límites, la doctrina del exceso ritual manifiesto no descarta la importancia de las formas, sólo procura erradicar su aspecto patológico e irracional, a fin de que no obstaculice la obtención de la verdad, y que el juez resuelva con justicia en el caso concreto.

Concretamente, cuando hablamos de sentencia arbitraria por incurrir en excesos rituales, nos estamos refiriendo a una “sentencia injusta”, que es aquella que tiene forma de Derecho, pero le falta un ingrediente básico para serlo: servir a las justicia.

Una norma injusta no puede integrar válidamente el ordenamiento jurídico de un país, por ser inconstitucional.

Actualmente, el excesivo rigor formal constituye una causal fecunda y frecuente de arbitrariedad en la jurisprudencia de la Corte Suprema de la Nación, que procura corregir la alegación mecánica de las exigencias formales o procesales, que desvirtúan la finalidad de las normas que las instituyen y que por tal aplicación abusiva es fuente de sentencias inválidas.

c) Abuso del derecho:

Explica Borda, que “los derechos tienen un espíritu, que es la razón por la cual la ley los ha concebido; tienen una misión que cumplir contra la cual no pueden rebelarse; no se bastan a sí mismos, no llevan en sí mismos su finalidad, sino que ésta los desborda, al mismo tiempo que los justifica”. Y agrega, que cuando ellos han sido desviados de la finalidad que los inspira, dejan de merecer la protección legal.

6

Page 7: Exceso Rigor Manifiesto.doc

El “abuso” constituye una figura antijurídica, inconciliable con el sistema armónico de las relaciones.

El mal uso de una facultad puede engendrarlo, y necesariamente una sanción debe corregirlo.

Siguiendo esta línea de pensamiento, la doctrina sentada por el art. 1071 del C.C., encuentra también aplicación en el ámbito del proceso a partir de la recepción, en los cuerpos normativos formales, de los principios de moralidad, y sus derivados: lealtad y buena fe procesal.

Esta postura se confirma desde la perspectiva de la Teoría General del Proceso. Así, se parte de la idea de que las normas del derecho procesal, de carácter instrumental, y realizadoras por esencia delimitan y asignan los poderes de actuación de los sujetos procesales, con una óptica finalista, cual es la de la efectiva realización del derecho sustancial y la de hacer justicia.

Para que se configure el abuso del derecho en el ámbito procesal deben reunirse ciertas condiciones: 1) Que se ejercite una prerrogativa –facultad o potestad procesal; 2) Que se observe una desviación del fin con el cual esa facultad prerrogativa o potestad fue conferida por la ley; 3) Que dicha conducta no se encuentre prohibida por ninguna norma procesal.

Para que realmente podamos sostener que se ha cometido abuso del derecho, debe haberse realizado el acto procesal viciado, en forma contraria a la buena fe; de tal modo entonces, se podrá aplicar sanción al ímprobo, pues el litigante al actuar con mala fe se ha excedido del legitimo derecho de defensa y por lo tanto tal conducta podría ser sancionada.

En materia procesal la conducta abusiva puede provenir no sólo de las partes, de los terceros y sus auxiliares sino del propio Tribunal.

Al respecto se podría configurar esta última situación cuando el órgano jurisdiccional incurre en un exceso de rigor formal que redunda en negación de justicia.

De allí que sea tan o más importante el juzgamiento de la actividad del Tribunal, que la de los sujetos controvirtientes, puesto que siendo el órgano del Estado, que debe decidir el diferendo, no hay atenuantes o relativizantes de la conducta de quienes lo integran, atento a que su gestión debe ser absolutamente objetiva.

Cabe destacar, que el acto no sólo debe ser desviado, sino que, además debe generar un daño.

Así por ejemplo, aquel se configura con la denominada “dilación” o “retardo injustificado”, que produce el acto, durante el curso del proceso o cuando se exige la aplicación a ultranza de una norma procesal en desmedro del derecho de defensa incurriendo de este modo en un exceso rigor manifiesto.

7

Page 8: Exceso Rigor Manifiesto.doc

El exceso de rigor formal constituye un verdadero abuso del derecho ya que pone límites al ejercicio de un derecho subjetivo que atenta contra los fines que la ley tuvo en miras al reconocerlo.

d) Violación de la garantía del debido proceso y del derecho de defensa en juicio.

El proceso como forma justa del reparto autoritario configura lo que en derecho constitucional se llama la garantía formal del debido proceso y que requiere la concesión de audiencia a ambas partes, defensa correcta, jueces imparciales, etc.

Otra cosa, es la garantía del debido proceso sustantivo que abarca el principio de la razonabilidad de las leyes: una ley no razonable no es constitucional.

El ritualismo inficiona la garantía del debido proceso, ya que obstruye la correcta defensa del imputado, e incide sobre el principio de imparcialidad.

Muchas veces el debido proceso pierde batallas a causa de exageradas ritualidades que prescribe el legislador como condición de validez de los actos procesales.

Según parte de la doctrina, el derecho de defensa y el debido proceso legal funcionan como reglas de segundo grado, determinando la actividad legislativa y la aplicación del derecho.

Estos conceptos suelen ser expresados como un conjunto de reglas y procedimientos establecidos legislativamente que tienen el carácter de obligaciones para los órganos de decisión jurisdiccional; pero por otro lado tienen una parte indeterminada dada por la dificultad de establecer todos los modos en que se puede violar el derecho de defensa o el debido proceso legal, ya que el legislador se ve imposibilitado de prever todos los posibles casos en que se puedan afectar estos dos derechos dentro de un procedimiento judicial.

Lo que se critica a los fines de la aplicación de esta doctrina es que el juzgador no debió aplicar una norma determinada, porque al aplicarla viola el derecho de defensa o el debido proceso legal, que por su mayor fuerza institucional hacen que la norma internamente aplicable no lo sea externamente para el caso judicial.

El modo en que se utiliza el descalificativo de exceso de rigor formal está basado en lo que el tribunal superior (ad-quem) entiende es una violación a una regla de segundo grado (derecho de defensa o debido proceso legal) producida por un juez inferior al momento de aplicar un norma procesal (regla de primer grado).

De tal modo, siempre su uso está cuestionando la aplicación de una regla de primer grado por medio de una de segundo grado que la desplaza.

En el modo en que se argumenta su uso se puede reconocer una causa, no buscar la verdad jurídica objetiva, o no prestar un adecuado servicio de justicia, que tienen el efecto de violar la regla de segundo grado.

8

Page 9: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Es por ello que las lecturas meramente formales, opuestas a los resultados que la legislación procesal está destinada a alcanzar, deben ser descartadas ya que se oponen al principio constitucional de debido proceso legal.

Necesidad de Desnaturalizar el FormalismoLas partes acuden al procedimiento, ante la existencia de controversias jurídicas, que por razones de orden y seguridad, deben canalizar dentro del procedimiento (Bidart Campos).

Pero no son los únicos en participar también será necesario la existencia del los abogados y jueces, siendo estos últimos quienes resolverán conforme al rigorismo de la ley que tiene por finalidad lograr la solución justa y objetiva del conflicto.

En un proceso judicial es esencial la libertad reglada de los litigantes, en armonía con la interpretación y aplicación de modo razonable. Cuando el formalismo pierde ese sentido esencial del procedimiento y se maneja con un rigor excesivo, lo que es instrumental se convierte en sustancial y el proceso pierde su verdadera razón de ser.

El proceso no puede ser conducido mecánicamente, puesto que de esa manera, se logra ocultar la obtención de la verdad jurídica objetiva.

Renunciar a la verdad jurídica objetiva resultará incompatible con el adecuado servicio de la justicia que garantiza la defensa en juicio consagrada en el artículo 18 de la Constitución Nacional.

La noción de verdad jurídica objetiva se relaciona con la existencia de las circunstancias de hecho, pero no cualquier hecho, sino de aquéllos que, de un modo u otro, resultan relevantes o decisivos para la justa resolución de la causa.

El formalismo es un fenómeno que está presente en el ámbito procesal, manifestándose en la diferencia que existe entre la verdad formal y verdad material.

9

Page 10: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Análisis Jurisprudencial de los fallos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y Tribunales inferiores durante los años 1991-2011.

1.- “González Villar, Carmen c/ Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires” Corte Suprema de Justicia de la Nación - 18/06/1991

Hechos del caso: El intendente de la Ciudad de Buenos Aires dictó un decreto por el cual dispuso el cese de una agente como Directora del Jardín Zoológico, manteniéndola en el grupo y categoría de revista que tenía antes de ser limitada en la función de conducción. Promovida demanda judicial, la Cámara de Apelaciones decretó la nulidad del decreto municipal mencionado. La Municipalidad interpuso recurso extraordinario y, con motivo de su rechazo, un recurso de hecho.

Sentencia de la Corte Suprema: la Corte entiende que siendo el art. 9° de la ordenanza 33.650 de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires establecía que los agentes municipales tenían estabilidad en el grupo o categoría de revista alcanzado pero no en el ejercicio de las funciones de conducción que se les asignaran, requerir la expresa motivación como requisito de validez del acto por el cual se dispuso el cese de un agente en tales funciones, importa un ritualismo descalificante porque implica desconocer que la invocación de la norma de la estabilidad en los cargos de conducción revela inequívocamente el ejercicio de la facultad discrecional conferida por las razones que justificaron el dictado del aludido art. 9°.Asimismo, en cuanto a los agravios del recurrente interpretan que los mismos, revisten la calidad de cuestión federal suficiente para habilitar el recurso extraordinario pues, aunque se refieren a cuestiones de hecho y de derecho público local como es la declaración de cese de un agente municipal en las funciones que cumplía, la solución de la Cámara de Apelaciones ha incurrido en un exceso rigor formal, incompatible con las reglas del debido proceso y el adecuado servicio de justicia.Por ello, se hace lugar al recurso extraordinario y se deja sin efecto el pronunciamiento.

Conclusión: La Corte en cuanto a la cuestión planteada se remite a los fundamentos del fallo “Piaggio de Valero, María Elena c. Municipalidad de Buenos Aires”, del 7 de julio de 1988.Tanto en el presente caso como en el precedente, la Corte hace una interpretación del art. 9° de la ord. 33.640 según la cual, la finalidad perseguida por dicha norma fue, indudablemente, la de otorgar amplias facultades a la Administración para reestructurar y renovar sus cuadros directivos por razones de oportunidad, mérito o conveniencia que, como regla, no son revisables en sede judicial (doctrina de la causa T.145.XIX. "Tula, Guillermo c. Y. P. F. s/despido", consid. 3°, del 11/9/1986). En tales condiciones, requerir del Intendente la expresa motivación del acto como requisito de validez en función de lo dispuesto en el art. 7°, inc. e de la ley 19.549, constituye un ritualismo descalificante de lo resuelto, pues importa desconocer que la

10

Page 11: Exceso Rigor Manifiesto.doc

invocación de la norma reglamentaria de la estabilidad en los cargos de conducción revela inequívocamente el ejercicio de la facultad discrecional conferida por las razones que justificaron el dictado del aludido art. 9° (causa G.565.XIX. "Girardini, Marta S. de Brovelli c. Provincia de Santa Fe", consid. 5°, del 1/10/1985).

2.- “Recurso de Hecho deducido por la demandada en la causa Galmos S.A. c/ Parking Náutico S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 18/06/1991

Hechos del caso:El letrado de la demandada presentó una expresión de agravio -que importaba dejar sin efecto un proveído- invocando la condición de letrado patrocinante, cuando en realidad era apoderado del demandado de acuerdo a un poder. La Sala H de la Cámara de Apelaciones en lo Civil declaró desierto el recurso de apelación por no hallarse presentado en tiempo y forma el escrito de presentación, denegando así el recurso extraordinario.

Sentencia de la Corte Suprema: resulta objetable la decisión de la alzada por evidenciar un excesivo rigor forma, habida cuenta que el a quo debió haber hecho mérito de que quien había firmado la expresión de agravios e invocado la condición de letrado patrocinante era, en realidad, apoderado del demandado de acuerdo con un poder, lo cual debió haber llevado a considerar que el recurso había sido correctamente presentado no obstante el error material en que se había incurrido.Que por ser ello así, la denegación del recurso extraordinario resulta injustificada, pues el pedido de la actora debió haber tramitado por la vía incidental y la decisión adoptada debió haber sido notificada por cédula (arts. 240, primer párr.., y 135, inc. 13 del Cód. Proc. Civil), lo que lleva a considerar planteado en tiempo propio el remedio federal en examen. Por ello, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia.

Conclusión:La Corte hace lugar a la cuestión federal, pues aunque las decisiones que declaran la improcedencia de los recursos ante los tribunales de la causa, por su carácter fáctico y de derecho procesal, no justifican el otorgamiento de la apelación extraordinaria, cabe hacer excepción a esa doctrina cuando lo decidido revela un exceso ritual manifiesto, incompatible con el ejercicio del derecho de defensa en juicio (art. 18 de la Constitución Nacional).Al respecto cabe señalar que con arreglo a conocida jurisprudencia de la Corte, el proceso civil no puede ser conducido en términos estrictamente formales, pues no se trata ciertamente del cumplimiento de ritos caprichosos, sino del desarrollo de procedimientos destinados al establecimiento de la verdad jurídica objetiva, que es su note.

3.- “Gasparri y Cía. S.A. s/ demanda de repetición - ganancias y capitales” Corte Suprema de Justicia de la Nación - 30/07/1991

Hechos del caso:La Dirección General Impositiva rechazó la transferencia de saldos emergentes del impuesto al valor agregado que la actora invocó tener a su favor, así como la solicitud

11

Page 12: Exceso Rigor Manifiesto.doc

de compensación de parte de esos créditos con obligaciones en concepto de impuesto a las ganancias y sobre capitales. Ante este hecho la firma interpuso recurso de apelación (administrativo) previsto en el art. 74 del decreto 1397/79, que el organismo fiscal denegó e íntimo al pago de los gravámenes a cuya cancelación se había solicitado aplicar los referidos saldos. La firma contribuyente procedió a depositar los montos de impuestos respectivos, y comunicó a la Dirección General Impositiva que tal pago lo había efectuado bajo protesta. Asimismo, el Tribunal Fiscal declaró improcedente la demanda enderezada a obtener la repetición de lo pagado, en razón de considerar que se había omitido formular la reclamación administrativa previa que exige el art. 81 de la ley 11.683. La Sala I de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal confirmó el pronunciamiento del Tribunal Fiscal de la Nación que declaró la improcedencia del recurso, pero con diverso fundamento. Contra la sentencia, dedujo la parte recurso extraordinario que fue concedido.

Sentencia de la Corte Suprema:La Corte entiende que la decisión de la Cámara se basó en considerar que la denegación de transferencias de créditos, como la de compensación, comportan una decisión contraria al reclamo de repetición involucrado en dicho pedido, entendiendo el tribunal a quo que con el recurso deducido contra tal denegación había agotado el contribuyente la vía administrativa, en razón de haber ejercido la opción acordado por el art. 78 de la ley 11.683.Tal criterio prescinde de la adecuada ponderación de los hechos acreditados en la causa, ya que no se advierte que el recurso previsto en el art. 74 del decreto 1397/79 fuera interpuesto antes de efectuarse el pago, por lo que mal pudo tener por objeto la repetición de una suma que aún no había sido ingresada. Incluso si se coincidiera en calificar al recurso entonces intentado como de reconsideración, lo que estaba vedado al contribuyente era la interposición sin previo pago de un recurso de apelación ante el Tribunal Fiscal contra la resolución que había desestimado aquel remedio, ya que en tales condiciones y por haber ejercido la opción prevista en el aludido art. 78, habría agotado la posibilidad de ocurrir por vía administrativa. Por el contrario, frente a la aludida denegación y consecuente intimación de pago, el contribuyente procedió a ingresar las sumas reclamadas, e inició luego demanda de repetición ante el tribunal administrativo, por entender que el pago efectuado lo había sido a requerimiento del ente recaudador.En tal orden de ideas no cabe olvidar que la finalidad del reclamo administrativo previo es producir una etapa conciliatoria anterior al pleito, dar a la administración la posibilidad de revisar el caso, salvar algún error y promover el control de legitimidad de lo actuado (sentencia del 10 de mayo de 1988, in re: E.312.XXI “Empresa ‘La Estrella S.R.L. c/ Provincia del Chaco s/demanda contencioso-administrativa”).Así bien, en el caso, los términos de las resoluciones que rechazaron la solicitud de compensación y el recurso deducido ante tal rechazo, evidencian que la Dirección General Impositiva tuvo, por medio de un funcionario que revestía el carácter de juez administrativo, la oportunidad de revisar el caso y efectuar el aludido control, al considerar y rebatir prolijamente los argumentos en los que la actora fundó su petición.Es así que la Corte entendió que, en tales condiciones, la exigencia de un nuevo reclamo en el que se reitere el planteo ya desestimado por el organismo fiscal, importaría una decisión de injustificado rigor formal, en aras de un ritualismo que llevaría a un ilógico dispendio administrativo y jurisdiccional.

12

Page 13: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Conclusión:Que si bien la cuestión relativa a la procedencia de la vía escogidas para impetrar la repetición del impuesto atañe a la consideración de cuestiones de cuestiones fácticas y procesales ajenas a la vía art. 14 de la ley 48, dicho principio admite excepción cuando, como sucede en el caso bajo examen, ha mediado un apartamiento de las constancias de la causa y de la materia de agravios en que se sustentó la apelación ante Cámara; o bien cuando el examen de aquellos requisitos se efectúa con injustificado rigor formal que afecte la garantía de defensa en juicio y, además, la decisión en recurso ponga fin al pleito o cause un agravio de imposible o insuficiente reparación ulterior.Corresponde precisar, en primer término, que a la interpretación de normas procesales es aplicable el principio con arreglo al cual las leyes deben interpretarse teniendo en cuenta el contexto general y los fines que las informan, en tanto con ello no se fuerce indebidamente la letra o el espíritu del precepto que rige el caso.

4.- “Recurso de hecho Antoniak, Miguel c/ Instituto Municipal de Previsión Social” Corte Suprema de Justicia de la Nación - 29/09/1992

Hechos del caso:El apelante impugnó el criterio utilizado por la comuna en cuanto aceptó que una disminución del 22% del monto de la prestación jubilatoria motivada por el cambio del sistema de movilidad no revestía caracteres confiscatorios, en razón de que dicha propuesta se alejaba de la doctrina sostenida por la Corte en punto al tema, y que solicitó se declarara la inconstitucionalidad de las normas que habían provocado la disminución motivo del agravio.La Sala III de la Cámara Nacional de Apelaciones de la Seguridad Social declaró desierto el recuso deducido contra la resolución del Directorio del Instituto Municipal de Previsión Social que había denegado el reajuste del haber jubilatorio por no contener una crítica concreta y razonada de las partes de dicha decisión que se estimaban equivocas. Contra esa decisión, el interesado dedujo el recurso extraordinario cuya denegación dio origen a la presente queja.

Sentencia de la Corte Suprema: sobre el particular la Corte se ha pronunciado a favor de la necesidad de revisar los elevados porcentajes de reducción de los haberes previsionales, por entender que eran excesivos y confiscatorios los montos aceptados por los organismos previsionales (Fallos C.312 XXI “Caprile, Nélida Carmen s/ jubilación” y G.340 XXI “Gastañaga, Ricardo Ernesto s/ jubilación”).El tema ha sido reiteradamente propuesto y La Corte ha mantenido una constante doctrina favorable a la pretensión de los jubilados, circunstancia que conduce a declarar que la exigencia de mayores argumentos en el escrito de apelación se presenta como un excesivo rigor formal, incompatible con el derecho de defensa.

Conclusión:Que si bien es cierto que las resoluciones que declaran la improcedencia de los recursos deducidos por ante los tribunales de la causa, por vincularse con cuestiones de naturaleza común y procesal, son ajenas, en principio, a la instancia del art. 14 de la ley 48, tal doctrina no puede aplicarse de manera irrestricta cuando el escrito contiene argumentos sobre el tema que se pretende someter a conocimiento de la alzada en los que se encuentran contenidas las exigencias legales para sustentar la apelación.

13

Page 14: Exceso Rigor Manifiesto.doc

5.- “Recurso de Hecho Chaves, Rául Edgardo c/ Provincia de Buenos Aires (IOMA)” Corte Suprema de Justicia de la Nación - 24/11/1992

Hechos del caso:La Suprema Corte de la Pcia. de Buenos Aires rechazó in limine la demanda deducida a fin de que se declarara la nulidad de las decisiones emanadas del Directorio del Instituto de Obra Médico Asistencial, que aplicaron -para actualizar las recibidas como consecuencia de la correlación de cargos operada por aplicación de la ley 10.833- el procedimiento previsto por ésta, y rechazaron el recurso de revocatoria. El actor, agente del mencionado organismo, interpuso el recurso extraordinario, cuya denegación motiva la presente queja.

Sentencia de la Corte Suprema: la Corte entendió que a fin de rechazar in limine la demanda instaurada, el a quo consideró que no se presentaba en el sub examine una de las condiciones de admisibilidad de la acción procesal administrativa, toda vez que no se había vulnerado un derecho administrativo establecido en favor del reclamante por una ley, un decreto, un reglamento u otra disposición administrativa preexistente (art. 1° y 28, inc. 3°, de la ley 2961 de la Pcia. de Buenos Aires). Para así decidir la Corte provincial expresó que “es claro que el accionante no resulta ser titular del derecho que denuncia vulnerado, pues la especificidad del régimen indexatorio previsto por la ley 10.833 excluye la aplicación al caso del dec. 4239/89 en el que pretenden fundarlo”.Que en estas condiciones, la inteligencia de la norma local que ha efectuado el a quo, en tanto concluye in limine litis que ésta no le otorga expresamente al actor un derecho subjetivo de naturaleza administrativa que lo habilite a impugnar la resolución denegatoria y rechaza la aplicación del mecanismo de actualización establecido por el decreto 4239/89, importa una decisión de injustificado rigor formal que, al cercenar toda instancia judicial, vulnera la garantía consagrada por el art. 18 de la Constitución Nacional.Se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se revoca la sentencia.

Conclusión:La Cámara al apoyar su dictamen en la falta de una fundamentación normativa (administrativa) y en la respectiva falta titularidad del derecho (subjetivo) vulnerado, incurre en un excesivo ritualismo formal, ya que concede prioridad a la invocación de reglas de orden procesal, y/o normativo, por sobre la búsqueda de la verdad jurídica objetiva. Lo resuelto conduce, en principio, al examen de cuestiones de derecho público local, ajenas a la instancia extraordinaria en el caso existe cuestión federal suficiente para apartarse de dicha regla, en tanto la resolución que es objeto de remedio federal incurre en un injustificado rigor formal que atenta contra la garantía de defensa en juicio consagrada en el art. 18 de la Constitución Nacional.

6.- “Recurso de Hecho Mañoras, Agapito s/ pensión”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 24/03/1992

Hechos del caso:

14

Page 15: Exceso Rigor Manifiesto.doc

La Sra. Mañoras solicitó ante el Instituto Municipal de Previsión Social, la pensión derivada del beneficio otorgado a un ex agente con quien había convivido en aparente matrimonio, derecho que, según alegó, le reconocía la ord. 40.464.Si bien admitieron que la peticionaria cumplía con el requisito del plazo de convivencia establecido por la disposición, las autoridades del mencionado instituto no hicieron lugar al pedido pues, según explicaron, obstaba a su procedencia el hecho de que con anterioridad a solicitarlo hubiese contraído matrimonio con otra persona, dado que el art. 3° de la ord. 40.464 establecía que el derecho a pensión se extinguía si el beneficiario se unía matrimonialmente.Esta resolución del entre previsional fue confirmada por el intendente municipal, mediante dec. 5833/88 y ante la apelación de la interesada, por la Sala VI de la Cámara de Apelaciones del Trabajo. Los miembros de este tribunal expresaron que los argumentos esgrimidos en el recurso para criticar la decisión administrativa carecían de entidad para descalificarla, dado que el fundamento del acto, esto es, que si el contraer matrimonio posteriormente a obtenerlo extinguía el beneficio, el hecho de estar casado al solicitarlo impedía su otorgamiento, no aparecía como fruto de una interpretación restrictiva de la norma aplicable, ni podía calificarlo de arbitrario. Rechazaron además los jueces y por carecer del fundamento debido, el planteo de invalidez articulado respecto del inc. a) del art. 3° de la ord. 40.464, en cuanto disponía que la mentada circunstancia hacia perder la pensión.Contra aquí lo resuelto la accionante interpuso recurso extraordinario, cuya denegatoria motivó la presente queja.

Dictamen del Procurador General:Le asiste razón a la recurrente cuando alega que la posición de los magistrados actuantes, en cuanto rechazaron su planteo de invalidez, no resulta acertada. Ello es así, pues como lo tiene declarado en otras oportunidades esta Corte, en materia previsional la eficiencia de una tacha de este tipo no está ligada al empleo de expresiones sacramentales, sino a que se advierta cuál sea el designio del impugnante con la mira puesta en que se aparten aquellas disposiciones que impiden alcanzar la solución pretendida.Como, a mi juicio, el escrito presentado oportunamente por el actuando, contiene argumentos mínimos sobre el tema que permiten inferir la voluntad de la peticionaria de atacar la norma en cuestión, estimo que su planteo debe considerarse válidamente formulado y que lo resuelto por el a quo, aparece revestido de un excesivo rigor formal incompatible con el derecho de defensa del art. 18 de la Constitución Nacional.Cabe entender que el sentenciador se ha pronunciado implícitamente de forma adversa sobre el punto y que, por ende, la apelación en examen resulta procedente en tanto en autos se articuló la inconstitucionalidad del inc. a), del art. 3°, de la ord. 40.464, bajo la pretensión de ser contrario a la Constitución Nacional y a las leyes del Congreso y lo resuelto por el superior tribunal de la causa ha sido en favor de su validez (art. 14, inc. 2°, ley 48).Opina, que corresponde confirmar la sentencia apelada en cuanto fue materia de recurso.

Sentencia de la Corte Suprema: en cuanto a las impugnaciones referentes a la invalidez constitucional del art. 3° de ord. 40.464, suscitan cuestión federal para su consideración en la vía intentada, puesto que frente al planteo efectuado por la recurrente en la instancia ordinaria, no fue objeto de tratamiento por razones formales, a

15

Page 16: Exceso Rigor Manifiesto.doc

pesar de que por la índole del tema propuesto y la materia en examen resultaba necesario evitar los excesos rituales y proceder a su consideración por la alzada.Se declara procedente el recurso extraordinario y se confirma la sentencia.

Conclusión:La Cámara al no haber dado tratamiento al ataque de inconstitucionalidad del art. 3° de la ord. 40.464 incurrió en un exceso ritual manifiesto al justificar su dictamen en la falta de fundamento debido, ya que concede prioridad a la invocación de reglas de orden procesal, cuando es doctrina de la Corte que es garantía de todo proceso la búsqueda de la verdad jurídica objetiva.

7.- “Recurso de Hecho La Quietud S.R.L. c/ Malbeck S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 10/08/1993

Hechos del caso:Interpuesto un recurso extraordinario provincial, el Tribunal interviniente lo denegó con fundamente en que el recurrente no había acompañado copias de las actuaciones del proceso. El recurrente dedujo recurso extraordinario y, ante su rechazo, una queja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Sentencia de la Corte Suprema: corresponde señalar que la ley 2275 de la Pcia. de San Juan no exige como requisito para la admisibilidad de los recursos locales, la agregación de copias de las actuaciones del proceso, sino tan solo la “mención” de las que resulten pertinentes. Requerimiento que ha sido cumplido en el escrito de interposición de los recursos locales.Por ende, la exigencia de acompañar las copias señaladas en el fallo recurrido constituye un apartamiento injustificado del precepto legal aplicable, siendo doctrina de este Tribunal que la tarea de interpretación y aplicación de las leyes no debe adolecer de un excesivo rigor formal que desvirtúe el espíritu que las ha inspirado.Se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada.

Conclusión:La Corte entendió que la ley 2275 de la Pcia. de San Juan no exige como requisito para la admisibilidad de los recursos locales, la agregación de copias de las actuaciones del proceso, sino sólo la mención de las que resultaren pertinentes, la exigencia de acompañar las señaladas en el fallos recurrido, constituye un apartamiento injustificado del precepto legal aplicable y un exceso ritual manifiesto cuando las circunstancias que por la falta de dichas copias dice desconocer el a quo, surgen con claridad del escrito de interposición del recurso.Si bien los aspectos vinculados con la improcedencia de los recursos extraordinarios en el orden provincial son ajenos como regla y por su naturaleza, al remedio federal del art. 14 ley 48, tal circunstancia no impide invalidar lo resuelto cuando surgen con nitidez que el tribunal provincial se apartó injustificadamente del precepto legal aplicable y cometió un exceso ritual manifiesto, lo cual frustra la garantía constitucional de la defensa en juicio (art. 18 CN).

16

Page 17: Exceso Rigor Manifiesto.doc

8.- “Colegio Bioquímico del Chaco c/ Instituto de Previsión Social de la Provincia del Chaco s/ demanda contencioso-administrativa” Corte Suprema de Justicia de la Nación - 04/11/1993

Hechos del caso:El Colegio de Bioquímicos del Chaco se presentó ante el Instituto de Previsión Social solicitando el pago de una suma en concepto de intereses por mora en la cancelación de facturas por prestaciones efectuadas por los profesionales del sector y que, no resuelto este pedido, solicitó pronto despacho sin obtener decisión alguna. Articuló entonces un recurso de revocatoria y, vencido el plazo otorgado a la administración para pronunciarse, consideró expedita la vía judicial y promovió acción por la denegación tácita que se había configurado.El Superior Tribunal de Justicia de la Pcia. del Chaco, rechazó el reclamo del actor por considerar formalmente inadmisible la demanda contensiosoadministrativa de plena jurisdicción deducida, al hacer lugar a la excepción de caducidad opuesta por la demandada. Ante esto la actora interpuso el recurso extraordinario federal que fue concedido.

Sentencia de la Corte Suprema: la Corte entendió que para decidir de tal manera el a quo, por mayoría, sostuvo que, según dispone el art. 11 de la ley 848, si la autoridad administrativa que debe resolver un reclamo no se expide en el término de sesenta días contados desde su interposición queda por ese hecho expedita la vía contenciosa, que puede ser iniciada hasta treinta días después de vencido dicho plazo. En el sub judice, de acuerdo con las constancias del expediente administrativo, consideró el tribunal que la demandante había actuado una vez agotado aquel plazo.Como se desprende de lo expuesto, en el sub examine la actora luego de efectuar su reclamo, puso en dos oportunidades en conocimiento de la demanda que aquél no había resuelto. En estas condiciones, la conclusión de a quo de considerar que se había operado el plazo de caducidad frente al silencio del Instituto de Previsión, constituye una decisión de injustificado rigor formal y comporta una inteligencia de las reglas aplicables contraria al principio in dubio pro actione, rector en la materia y destacado reiteradamente por esta Corte. Ello es así, no sólo porque la mecánica aplicación del plazo previsto en el citado art. 11 de la ley 848 efectuada por el tribunal local omite valorar la puntual conducta puesta de manifiesto por la actora, sino porque premia la actitud negligente de la administración y hace jugar en contra del particular la figura del silencio administrativo instituida en su favor.Se declara procedente el recurso extraordinario y se revoca la sentencia.

Conclusión:Que si bien lo resuelto conduce al examen de cuestiones de derecho público local, ajenas a la instancia extraordinaria, en el caso existe cuestión federal bastante para apartarse de dicha regla en tanto la resolución impugnada incurre en un injustificado rigor formal que atenta contra la garantía de la defensa en juicio (art. 18 C.N.) y omite ponderar argumentos para una adecuada solución del litigio.

9.- “Recurso de Hecho Amestoy de Petraca, Beatriz Leonor c/ Estado Nacional - Ministerio de Defensa”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 05/08/1993

17

Page 18: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Hechos del caso:Procede el recurso extraordinario contra la sentencia de la Sala III de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal que revocó la sentencia de primera instancia y declaró prescriptos los reajustes del haber de pensión solicitados en virtud de lo dispuesto por el decreto 1897/85 y la resolución 500/85, del Ministerio de Defensa.

Sentencia de la Corte Suprema: el Tribunal Superior entendió que la alzada aceptó que las sumas en cuestión no revestían la calidad de “préstamo”, como lo establecían las normas, sino que eran incrementos en los haberes mensuales de los militares, por lo que correspondía aplicar la prescripción quinquenal del art. 4027 del Cód. Civil, conforme con la interpretación jurisprudencial invocada.Contrario a esto, la Corte declaró en los autos “Martínez, Marcelino Hilario c/ Estado Nacional (Ministerio de Defensa) s/ cobro de pesos”, que las sumas otorgadas al personal militar en actividad, en las condiciones establecidas por el decreto 1897/85 y la resolución del Ministerio de Defensa N° 500/85, no tenían naturaleza de préstamo sino de gratificación, de modo que al integrar los conceptos de haberes o asignaciones a los que aluden las disposiciones de la ley 19.191, debían también recibirlas los militares retirados.Por lo tanto, si se pondera la falta de publicación en el Boletín Oficinal del decreto y de la resolución respectiva, así como la cuestionada naturaleza de las sumas reclamadas, se advierte que la sentencia que computa el plazo de prescripción desde la fecha de dictado de las normas sin considerar el planteo de la actora respecto a la dificultad que tuvo para conocerlas, se encuentra revestida de un injustificado rigor formal, incompatible con el derecho de defensa (art. 18 C.N.).Se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada.

Conclusión:La actora dedujo el recurso extraordinario cuya denegación dio origen a la presente queja, que es procedente aún cuando los agravios se vinculan con cuestiones de hecho y de derecho no federal, puesto que al omitir el examen del planteo que controvierte el comienzo de curso de la prescripción, la Cámara emite una decisión que lesiona la garantía de defensa en juicio y priva a la interesada de un beneficio sin razones suficientes, óbice que sustenta la doctrina de la arbitrariedad, puesto que pone de manifiesto el nexo entre lo resuelto y las garantías constitucionales pertinentes (art. 17 y 18 C.N.).

10.- “Recurso de Hecho Siniawsky, Alejandro Rubén c/ Constructora Galante S.A.C.I.F.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 17/11/1994

Hechos del caso:La Sala E de la Cámara de Apelaciones en lo Civil declaró mal concedido el recurso que había deducido la demandada respecto del fallo de primera instancia. Oportunamente señaló que el art. 242 del Cód. Proc. Civil disponía que el monto mínimo para apelar se determinaría atendiendo exclusivamente al capital reclamado en la demanda, actualizado, si correspondiera, a la fecha de la resolución, por lo que al haberse deducido demanda por consignación del saldo de precio de una compraventa inmobiliaria, no correspondía actualización alguna y la sentencia resultaba inapelable

18

Page 19: Exceso Rigor Manifiesto.doc

por el monto. Esto motivo a que la demandada interponga recurso extraordinario que, denegado, dio motivo a la queja.

Sentencia de la Corte Suprema: la interpretación efectuada por la alzada con apoyo en que la demanda no contenía una pretensión de reajuste evidencia un excesivo rigor formal, pues tal pretensión no es compatible con el objeto perseguido en los juicios de consignación, aparte de que la solución propuesta se desentiende de la realidad económica del pleito y de los fines que tuvo en mira el legislador al establecer la restricción para apelar en los litigios de escasa trascendencia pecuniaria.Desde esa perspectiva, al determinar el valor cuestionado en el proceso A 1.681,000 a valores del mes de julio de 1989 -de acuerdo con el índice de precios mayoristas no agropecuarios hasta el 31 de marzo de 1991, según ley de convertibilidad- obtendría la suma de $14.043 que representaba una parte significativa del valor del departamento enajenado y excedía holgadamente el mínimo previsto en el art. 242 del Cód. Proc. Civil.Se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la decisión apelada en cuanto fue materia de agravios.

Conclusión:Las decisiones que declaran la improcedencia de los recursos ante los tribunales de la causa, por su carácter fáctico y de derecho procesal, no justifican el otorgamiento de la apelación extraordinaria, cabe hacer excepción a esa doctrina cuando lo decidido revela un exceso ritual manifiesto, incompatible con el ejercicio del derecho de defensa (art. 18 Constitución Nacional).La interpretación efectuada por la Cámara respecto del art. 242 del Cód. Proc. Civil concede prioridad a la invocación de reglas de orden procesal y/o normativo, cuando es doctrina de la Corte que es garantía de todo proceso la búsqueda de la verdad jurídica objetiva.

11.- “Recurso Extraordinario Amigo, Roberto P. c/ Asistencia Médica Social S.A. y otros s/ ordinario”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 17/11/1994:

Hechos del caso:Los recurrentes habían plantearon la nulidad del dictado de fondo atento a que a la fecha de su dictado no se había agregado el escrito de contestación de agravios que oportunamente habían presentado ante el tribunal, el cual no se encontraba en autos y que fue hallado traspapelado, con cargo y sin foliatura. La Sala K de la Cámara de Apelaciones en lo Civil dispuso rechazar la nulidad articulada por los codemandados Máspero, Espagnol, Del Sel, y Centro Traumatológico Uriburu, afirmando en primer lugar que el acto omitido no resultaba de imprescindible necesidad para el trámite procesal de la causa, desde que la contestación de agravios puede o no existir, y de existir no resultaría obligatoria su consideración, ni es necesaria su evaluación, ni el análisis de su contenido, en atención a lo prescripto por el art. 271 del Cód. Proc. Civil. En segundo término, el tribunal adujo que si bien la finalidad del traslado del memorial de agravios es asegurar la defensa de la persona y sus derechos, en virtud del principio de trascendencia no basta con la mera invocación de su violación, pues se debía demostrar que la consideración de alguno de los argumentos

19

Page 20: Exceso Rigor Manifiesto.doc

contenidos en el escrito no agregado hubiera variado sustancialmente el rumbo de la definitiva. Ante este pronunciamiento las partes dedujeron el recurso extraordinario, el cual fue concedido.

Sentencia de la Corte Suprema: en primer término, lo resuelto por la alzada con sustento en el art. 271 del Cód. Proc. Civil revela una comprensión inadecuada de la norma -que la desvirtúa y vuelve inoperante-, y conlleva un insostenible menoscabo de la garantía constitucional invocada. Ello es así pues, aun cuando la contestación de los agravios sea facultativa para la parte -en tanto su omisión no incide en el progreso de la instancia (conf. art. 267 del Cód. Proc. Civil)-, lo cierto es que si la vencedora hizo efectivo ejercicio del derecho conferido no es dable soslayar su responde, pues por dicho acto se intentó rebatir los agravios que se pretendía mantener. De lo contrario, tanto el traslado previsto en el art. 265 como la contestación del art. 267 se reducirían a rituales estériles, carentes de sentido y finalidad. Cabe destacar que si bien no es obligación del juzgado el seguir todos los argumentos de las partes -sino tan solo los conducentes para dirimir la cuestión-, bajo ningún aspecto ello implica que se pueda prescindir de la existencia misma de un acto alegatorio, cuyo contenido debe ser, al menos, conocido por el tribunal antes de emitir decisión susceptible de afectar -eventualmente- los derechos del litigante, quien de otro modo, se vería privado por esta vía de la efectiva oportunidad de ser oído.En segundo término, al exigir en el caso la acreditación del interés y del perjuicio sufrido en los términos ante indicados, la alzada aplicó mecánicamente un precepto formal fuera del ámbito que le es propio y por esa vía hizo gala de un ciego ritualismo incompatible con el debido proceso adjetivo. En efecto, imponer a la parte la demostración de la eficacia persuasiva de un responde no agregado en la etapa pertinente -o valorar tardíamente los argumentos defensivos ignorados-, son actitudes que no se corresponden con la gravedad de la omisión incurrida, imputable al a quo y por sí sola susceptible de generar una situación de indefensión, cuyo gravamen cabe presumir cuando -como en el caso- el pronunciamiento de la cámara admitió los agravios de la contraria y -al revocar la decisión de la anterior instancia- extendió la condena a los codemandados.

Conclusión:Los agravios de los apelantes suscitan una cuestión federal suficiente para su tratamiento por la vía intentada, pues si bien lo atinente a las nulidades procesales reviste el carácter de una cuestión de hecho y de derecho procesal, propia de los jueces de la causa y ajena, como regla, a la instancia extraordinaria, ello no es óbice para hacer en el caso excepción a dicha doctrina si con lo resuelto -con carácter definitivo- se ha incurrido en un rigor formal lesivo de la garantía de la defensa en juicio. Esta garantía consagrada en el art. 18 de la Constitución Nacional requiere que se otorgue a los interesados ocasión adecuada para su audiencia y prueba en la forma y con las solemnidades dispuestas por las leyes procesales; por tal motivo, su aspecto más primario se traduce en el principio de contradicción o bilateralidad -que se remonta al auditur alterapars romano- el cual supone, en substancia, que las decisiones judiciales deben ser adoptadas previo traslado a la parte contra la cual se pide, es decir, dándole oportunidad de defensa (de la disidencia del juez Fayt en la causa A.721.XXIV, “Apoderados y electores de la Alianza Frente de la Esperanza s/ acción constitutiva de tipo cautelar” de fecha 13 de mayo de 1993).

20

Page 21: Exceso Rigor Manifiesto.doc

12.- “Recurso de hecho Oblita Ramos, Nancy c/ Copla Cooperativa de Provisión de Servicios para Transportistas de Consumo y Crédito Limitada”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 17/11/1994

Hechos del caso:Contra el pronunciamiento de la Sala G de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil que, al revocar parcialmente la sentencia de primera instancia, redujo el monto de la condena por los daños y perjuicios derivados de un accidente de tránsito, la actora interpuso el recurso extraordinario cuya denegación motivó la presente queja.

Sentencia de la Corte Suprema: el presente tribunal ha incurrido en arbitrariedad al limitar la indemnización al importe señalado en la demanda, con la consiguiente lesión de las garantías constitucionales del debido proceso y defensa en juicio, pues, de tal suerte, se ha producido un apartamiento de las constancias decisivas para la solución del pleito, y consagrado un excesivo rigor formal en la interpretación de las normas procesales respectivas, prevaleciendo aquéllas sobre la necesidad de dar primacía a la verdad jurídica objetiva.Es doctrina de esta Corte Suprema, que una condena judicial no quebranta los términos de la litis ni decide ultra petita aun cuando exceda el importe indicado en la demanda, si la expresión de este último ha sido seguida de la reserva relativa a “lo que en más o en menos resulte de la prueba”.Se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada en lo que materia del recurso.

Conclusión:Los agravios de la recurrente suscitan cuestión federal suficiente para su consideración por la vía intentada pues, aunque remiten al examen a cuestiones de hecho y derecho procesal, ajenas -como regla y principio- a la instancia extraordinaria, tal circunstancia no constituye óbice para invalidar lo resuelto cuando la decisión recurrida traduce un exceso ritual manifiesto, apartándose además de las constancias del expediente.

13.- “Recurso de hecho Escudero, Carlos c/ Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 04/05/1995

Hechos del caso:La sentencia de Cámara, al modificar parcialmente lo resuelto en la instancia anterior, declaró la nulidad del decreto que dispuso el cese de un agente como Director General Adjunto y condenó a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires a reponer al actor en el cargo que ocupaba al tiempo de la baja. Contra este pronunciamiento, la comuna interpuso el recurso extraordinario, cuya denegación dio origen a la queja.

Sentencia de la Corte Suprema: es válido el acto por el que se hace cesar a los agentes de la Municipalidad de la Ciudad de Bueno Aires en la función de conducción, aunque carezca de un detallado orden de razones fácticas y normativas, toda vez que la exigencia de una específica motivación frente a las amplias facultades de superintendencia concedidas al intendente y la reglamentación de la estabilidad -art. 9° del estatuto aprobado por al ord. 33.640-, aparece como un ritualismo excesivo.

21

Page 22: Exceso Rigor Manifiesto.doc

La doctrina expuesta resulta de aplicación en el sub judice. Ello es así pues si requerir del intendente la referencia a los hechos que motivaron y la cita legal en que se apoya constituye un exceso ritual manifiesto -dado que importa desconocer que la invocación de la norma reglamentaria de la estabilidad en los cargos de conducción revela inequívocamente el ejercicio de la facultad discrecional conferida por las razones que justificaron el dictado del art. 9° de la ord. 33.640 por expresa- es también pasible de la misma tacha exigir del departamento ejecutivo municipal la motivación del acto por el que dispone la baja de un agente que ejerce altas funciones de conducción y cuyo cargo -por expresa disposición reglamentaria- se halla exento de la garantía de estabilidad en el empleo.Se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia.

Conclusión:Los agravios de la apelante suscitan cuestión federal bastante para habilitar la vía elegida, pues aunque se refieren a cuestiones de hecho y de derecho público local, materia ajena -en principio- a la instancia del art. 14 de la ley 48, tal circunstancia no configura óbice decisivo para abrir el recurso cuando, como en el caso, la solución de la Cámara incurre en un exceso rigor formal, incompatible con las reglas del debido proceso.

14.- “Recurso Extraordinario González, Heriberto s/ corrupción-casación” Corte Suprema de Justicia de la Nación - 04/05/1995

Hechos del caso:Contra la decisión del Tribunal Superior de Justicia de la Pcia. de La Rioja que declaró la nulidad absoluta de una resolución y, por su conexidad con ella, la de la requisitoria de elevación y de todos los actos cumplidos durante el juicio, a la vez que dispuso que el juez de instrucción corriese nueva vista al señor agente fiscal para que completase la calificación jurídica de los hechos descriptos al momento de promoverse la acción penal, la defensa del imputado Heriberto González interpuso el recurso extraordinario, el cual fue concedido.

Sentencia de la Corte Suprema: la Corte ha dicho que en materia criminal la garantía consagrada por el artículo 18 de la Constitución Nacional exige la observancia de las formas sustanciales del juicio relativas a la acusación, defensa, prueba y sentencia dictada por los jueces naturales.La decisión en un recurso, al incurrir en un excesivo rigor formal y retrogradar el proceso con sentencia ya dictada - después de cuatro años de su inicio- a la etapa instructora, debe ser descalificada al frustrar la garantía constitucional de la defensa en juicio invocada por el recurrente.Se deja sin efecto la resolución.

Conclusión: La Corte ha admitido por vía de excepción, que son equiparables a tal clase de sentencias los pronunciamientos anteriores a ella, que por su índole y consecuencias pueden llegar a frustrar el derecho federal invocado al ocasionar perjuicios de imposible o tardía reparación ulterior.

22

Page 23: Exceso Rigor Manifiesto.doc

15.- “Dahlgren, Jorge Eric c/ Cáceres Raúl Edgardo y/o A.T.E.CH s/ Querella”Corte Suprema de Justicia de la Nación – 10/12/1996.

Hechos del caso:La Sala segunda en lo Criminal y Correccional del Superior Tribunal de Justicia del Chaco resolvió anular todo lo actuado y lo decidido en la causa con respecto a la pretensión Penal por injurias y a la acción civil por daños y perjuicios y archivarla. Contra ese pronunciamiento el querellante interpuso el recurso extraordinario que fue concedido.El tribunal consideró que al haberse acreditado que las expresiones injuriosas provenían por parte del querellado como resultado de su actividad gremial y en su carácter de secretario de prensa, difusión y cultura de A.T.E CH, debido a esta situación se tenía que anular todo lo actuado porque el querellado estaba bajo el amparo de la ley 1272 modificada por la ley 1296, que prevé una inmunidad penal a los dirigentes gremiales.El tribunal agregó que aún cuando aquella ley local establece una inmunidad gremial Penal con categoría parlamentaria y constitucionalmente inválida, no se podía dejar de aplicar en razón de la limitación impuesta por el art. 9 de la Constitución Provincial, en cuanto determina la imposibilidad de invadir de oficio facultades propias de otro poder y de la actividad de la parte querellante.

Sentencia de la Corte Suprema: los agravios de la apelante suscitan cuestión federal para su consideración, porque aunque remiten a cuestiones de hecho y derecho procesal, que es materia ajena al art. 14 de la ley 48, tal circunstancia no constituye en elemento decisivo para invalidar lo resuelto cuando la decisión solo satisface en apariencia la exigencia constitucional de adecuada fundamentación e incurre en un injustificado rigorismo formal en la apreciación de las constancias de la causa, con agravio de imposible reparación ulterior y con un evidente menoscabo de la garantía del debido proceso. Al aplicar el interés tutelado por el art. 9° de la constitución provincial, a los supuestos de acción de inconstitucionalidad con efecto erga omnes y soslayar otros intereses de igual jerarquía, el tribunal permitió que por una ley local, que aplicó de oficio y que está en contradicción con la ley nacional 23.551 y, por lo tanto, viola los arts. 31, 75, inc. 12, y 126 de la Ley Suprema, se consagre una detracción de su función jurisdiccional, no obstante su obligación, por ser cabeza del Poder Judicial provincial, de afirmar y mantener su inviolabilidad y pese a las amplias atribuciones conferidas por el art. 151 de la constitución local para preservar su propia función y su independencia.Esta corte ha reiterado en reiteradas oportunidades que la garantía constitucional de la defensa en juicio exige que las normas procesales locales sean interpretadas de modo de evitar que los particulares queden fuera de la protección jurisdiccional, en situación de indefensión y que las formas instrumentales faciliten el esclarecimiento de los hechos y el logro de la verdad jurídica y no sirvan y se utilicen como un obstáculo a la defensa de la libertad y el honor.En tales condiciones surge que las normas a aplicarse deben interpretarse de manera coherente a fin de que armonicen entre ellas para que no traben el eficaz y justo desempeño de los poderes atribuidos al Estado para el cumplimiento de sus fines del modo más beneficioso para la comunidad.

Por ello corresponde descalificar lo decidido con arreglo a la doctrina de esta Corte sobre arbitrariedad de sentencias, toda vez que en desmedro de una adecuada hermenéutica de las normas en juego y un exceso ritual manifiesto en su interpretación

23

Page 24: Exceso Rigor Manifiesto.doc

el Superior Tribunal del Chaco ha sustentado su fallo sólo en argumentos aparentes con serio menoscabo de las garantías aseguradas por la Constitución Nacional.Se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia.

Conclusión:La Corte deja sin efecto la sentencia del Superior Tribunal del Chaco porque incurrió en un exceso ritual manifiesto al basarse en su fallo solo en argumentos aparentes.Además las normas deben interpretarse de una manera adecuada para que los particulares no queden sin protección de la justicia y que se vulnere las garantías del debido proceso.

16.- “Aceitera Gualeguaychú S.A., Goldaracena Hnos. S.A.C., Martem S.A., San Joaquín S.C.A., Forestal V.G.H. S.A. y otros en la causa Grupo Goldaracena Hnos. S.C.A. s/concurso preventivo”Corte Suprema de Justicia de la Nación – 30/04/1996.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento del Superior Tribunal de la Provincia de Entre Ríos que desestimó el recurso extraordinario Federal deducido por el grupo Goldaracena Hnos. S.A.C, este interpuso la presente queja. El Superior Tribunal fundó el rechazo de la apelación federal sobre la base de que la presentación en la que se lo dedujo era ineficaz en tanto había sido suscripta, en calidad de apoderado del grupo recurrente, por un letrado cuya matrícula provincial había sido cancelada.

Sentencia de la Corte Suprema: el fallo carece de una adecuada fundamentación y configura con claridad un exceso ritual manifiesto, toda vez que el Superior Tribunal de la provincia no ponderó razonablemente que la presentación también había sido firmada por otra apoderada del grupo, matriculada y que ya había sido parte en otras actuaciones.Si bien la apoderada solo suscribió el otrosí del escrito ratificando la actuación, esta ratificación es concomitante con el planteo Federal, su firma obra en el mismo escrito en que este se interpuso y bien podía haberse estampado en el cuerpo principal.Por ello la denegación del recurso no aparece debidamente fundada, por lo que se declara su nulidad.

Conclusión: Se incurrió en un exceso ritual manifiesto porque el superior Tribunal no ponderó razonablemente la presentación, porque la apoderada ya había sido tenida como parte en otras actuaciones judiciales.

17.- “Berardi Mario Alberto y otro c/ Hugo rosario Carnero y otros”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 16/12/ 1997.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento de la Sala Civil y Comercial del tribunal superior de justicia de la provincia de Córdoba, que al rechazar el recurso de revisión, confirmó la decisión de anterior instancia, en cuanto había desestimado la contrademanda deducida por

24

Page 25: Exceso Rigor Manifiesto.doc

nulidad del boleto de compraventa, los reconvincentes interpusieron el recurso extraordinario cuya denegación motiva la presente queja.En la reconvención los demandados habían aducido su inexperiencia en materia de transacciones inmobiliarias y la desproporción de las prestaciones derivadas del contrato de compraventa, ya que -a la fecha de su celebración- el precio acordado para una fracción de campo había sido aproximadamente un 60% inferior a su valor real, circunstancia por la que opusieron la nulidad de la operación en los términos del art. 954 del Código Civil.Esa parte ofreció como prueba pericial la tasación del inmueble objeto de la enajenación, para que se determine su valor a la fecha del contrato. La agregación de este medio probatorio una vez vencido el término de prueba motivó los recursos de reposición y apelación en subsidio de los demandantes.Esa parte ofreció como prueba pericial la tasación del inmueble objeto de la enajenación para que se determine su valor a la fecha de celebración del contrato.La decisión del Tribunal Superior de justicia de la provincia de Córdoba revela un enfoque excesivamente ritual en tanto hizo mérito del incumplimiento de una carga procesal cuya finalidad es proteger el derecho de defensa de la contraparte.Se configura de ese modo que el a quo manifestó defender una aplicación mecánica de las normas adjetivas y una renuncia consiente a la verdad jurídica objetiva.Por eso se hace lugar a la queja y se declara procedente el recurso extraordinario.

Conclusión: Renunciar a la verdad objetiva, se traduce en una evidente despreocupación por arribar en una decisión justa en el caso concreto, lo cual va en desmedro del propósito de afianzar la justicia, y vulnera las garantías del debido proceso.

18.- “Bulacio Alberto Miguel c/ Ares de Parga Juan José y otro”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 03/10/1997.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento de la Sala J de la Cámara de Apelaciones en lo civil que confirmó el fallo de primera instancia en razón de que la exención establecida en el art. 200 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, favorecía a quien había obtenido la carta de pobreza pero no alcanzaba al litigante que solo gozaba del beneficio provisional consagrado en el art. 83, el vencido interpuso recurso extraordinario, que denegado dio origen a la presente queja.La alzada ha incurrido en exceso ritual manifiesto incompatible con las reglas del debido proceso y adecuado servicio de justicia.Ello es así a la luz de la doctrina de esta corte según la cual el beneficio de litigar sin gastos es la franquicia que se concede a ciertos justiciables para actuar ante los tribunales sin la obligación de hacer frente, total o parcialmente, a las erogaciones que acarrea la sustanciación de un proceso. Ello abarca no solo el pago de impuestos y sellados sino también la posibilidad de obtener la traba de la medida cautelar solicitada sin el previo otorgamiento de la caución, pues lo contrario supondría desconocer los efectos provisionales de la carta de pobreza.Al no darse en el caso presunciones que inclinen a pensar que el beneficio será denegado, la solución del a quo frustra el objetivo perseguido por la institución reglamentada ya que al limitar el ámbito de aplicación a los casos en que se trate de impuestos y sellados de actuación, ha restringido la eficacia de una disposición cuyo fin

25

Page 26: Exceso Rigor Manifiesto.doc

específico es posibilitar el derecho de defensa que de otra manera se vería indebidamente cercenado.La negativa de relevar transitoriamente a la actora de la carga de la contracautela constituye un rigorismo procesal irrazonable que pone de manifiesto la relación directa e inmediata entre lo resuelto y la garantía constitucional invocada, de modo que se justifica eximir al peticionante de la caución, su exención no hace desaparecer la responsabilidad que le cabe al peticionario de una medida cautelar obtenida sin derecho.Por ello se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada.

Conclusión: Se incurrió en un exceso ritual manifiesto que vulnera las reglas del debido proceso ya que las erogaciones que abarca el beneficio de litigar sin gastos, no solo abarca el pago de impuestos y sellados sino también la posibilidad de obtener la traba de la medida cautelar sin el otorgamiento de la caución previa.La negativa de la Cámara de liberar a la actora de la contracautela restringe la eficacia de una disposición que tiene como fin posibilitar el derecho de defensa de algunos justiciables que de otra manera se vería impedido.

19.- “Mases de Díaz Colodrero, María Agustina c/ Estado de la Provincia de Corrientes s/ amparo”Corte Suprema de Justicia de la Nación – 1997

Hechos del caso: Contra la sentencia del Superior Tribunal de Corrientes, que al revocar la de anterior instancia, rechazó la acción de amparo promovida, la actora interpuso el recurso extraordinario federal que fue concedido.La Dra. Colodrero, en su condición de juez de primera instancia demandó a la provincia de Corrientes a fin de que se la condenase a cesar en todo acto que atentase contra la intangibilidad de las remuneraciones que le corresponden como magistrado y a incrementar el respectivo haber mensual, a partir de noviembre de 1989, agregando al monto nominal de los haberes el “plus” que resulte en concepto de desvalorización monetaria.El a quo consideró que el amparo no era la vía idónea para la reparación del agravio constitucional, sino que en su lugar debía promover la acción contenciosoadministrativa.La exclusión de la acción de amparo no puede fundarse en una apreciación meramente ritual, toda vez que la institución tiene por objeto la protección de los derechos más que una ordenación o resguardo de competencias.La remisión efectuada por el a quo de la acción contenciosoadministrativa traduce un exceso ritual manifiesto, porque resulta irrazonable prescindir de la abundante prueba documental e informativa agregada en autos, para someter la cuestión a los procesos ordinarios, cuando las partes no han alegado la existencia de otros procedimientos.Corresponde su descalificación como acto jurisdiccional en los términos de la conocida doctrina de esta corte sobre arbitrariedad.Por ello se declara procedente el recurso extraordinario y se revoca la sentencia.

Conclusión:

26

Page 27: Exceso Rigor Manifiesto.doc

La remisión efectuada por el a quo de la acción contenciosoadministrativa traduce un exceso ritual manifiesto, porque resulta irrazonable prescindir de la abundante prueba documental e informativa, para someter la cuestión a los procesos ordinarios, cuando las partes no han alegado la existencia de otros procedimientos.

20.- “Quintana de Barrientos, Jesús B y otras c/ Municipalidad de Florencio Varela”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 16/4/1998.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento de la Corte de la Provincia de Buenos Aires que intimó a las apelantes para que dieran cumplimiento al depósito previsto por el art. 280, del Código Procesal Civil y comercial de la Provincia de Buenos Aires, Bajo apercibimiento de declarar desierto el recurso deducido, aquellas interpusieron el recurso extraordinario cuya denegación origina la presente queja.Para resolver de esta manera el tribunal consideró que como el beneficio de litigar sin gastos otorgado a la madre no podía hacerse extensivo a sus dos hijas que habían llegado a la mayoría de edad, estas debían en forma individual y en la medida del valor de lo cuestionado por cada interesada cumplir con la carga procesal que establece el artículo mencionado.Los agravios de las recurrentes suscitan una cuestión federal en los términos del art. 14 de ley 48, no obstante las decisiones que declaran la admisibilidad o improcedencia de los recursos locales deducidos ante los tribunales de la causa no justifican como regla, el otorgamiento del recurso extraordinario, ello no es óbice para invalidar lo decidido cuando la resolución de la Corte Provincial carece de fundamentación y ha frustrado una vía apta para el reconocimiento de los derechos invocados, con menoscabo de la garantía de defensa en juicio reconocida en el art. 18 C.N.La Corte interpreta que respecto del art. 280 del Código Procesal y del beneficio para litigar sin gastos concedido en autos evidencia un excesivo rigor formal que justifica la vía intentada, ya que si bien es cierto que la franquicia de pobreza fue otorgada a Bernabé Jesús Quintana de Barrientos, también lo es que fue requerida para que pudiera litigar por sí y en representación de sus hijas menores- que también son apelantes- estaban beneficiadas por la resolución respectiva en cuanto partes con un interés personal.En cuanto a la referencia efectuada por la Corte Provincial acerca de que el beneficio no es extensivo a las recurrentes porque alcanzaron la mayoría de edad, es objetable ya que la circunstancia de haber cesado la representación legal bajo la cual habían solicitado el beneficio de litigar sin gastos no altera los efectos resultantes de la resolución que les concedió la franquicia, en la medida de que dicho pronunciamiento no estuvo fundado en la condición de incapaces de hecho de estas demandantes, sino en considerar que se encontraban comprendidas en la situación contemplada por el art. 78 del ordenamiento procesal local. Por ello se declara procedente el recurso extraordinario. Cómo se ha venido sosteniendo en cuanto a la materia que aquí se discute: tanto la tasa de justicia como los depósitos que son requeridos en las instancias recursivas, no deben ser exigidos en ningún caso como condicionantes previos del acceso a la jurisdicción. Sino que por el contrario para evitar todo tipo de cercenamiento de la garantía constitucional cualquier pago debe ser realizado al finalizar el pleito y por parte de quien haya resultado vencida

27

Page 28: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Ni la falta del otorgamiento del beneficio de litigar sin gastos, ni la carencia del pago del depósito previo pueden impedir el acceso al superior por parte de quién legítimamente está ejerciendo su derecho de defensa en juicio. Por ello se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la resolución apelada.

Conclusión: Con respecto al art. 280 del Código Procesal y del beneficio para litigar sin gastos concedido en evidencia un excesivo rigor formal que justifica la vía intentada, ya que la franquicia de pobreza fue otorgada a Bernabé Jesús Quintana de Barrientos, también fue requerida para poder litigar por sí y en representación de sus hijas menores- que también son apelantes y estaban beneficiadas por la resolución en cuanto partes con un interés personal.En cuanto a la referencia efectuada por la Corte Provincial acerca de que el beneficio no es extensivo a las recurrentes porque alcanzaron la mayoría de edad, es objetable ya que la circunstancia de haber cesado la representación legal bajo la cual habían solicitado el beneficio de litigar sin gastos no altera los efectos resultantes de la resolución que les concedió el beneficio , en la medida de que dicho pronunciamiento no estuvo fundado en la condición de incapaces de hecho de estas demandantes, sino en considerar que se encontraban comprendidas en la situación contemplada por el art. 78 del ordenamiento procesal local.

21.- “López de Meléndez, Irma c/ Instituto Municipal de Previsión Social”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 24/11/1998.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento de la Sala III de la Cámara Federal de la Seguridad Social que declaró desierto el recurso interpuesto contra la resolución del Instituto Municipal de Previsión Social que había rechazado el reajuste del haber jubilatorio en virtud de la reubicación escalafonaria solicitada, la actora dedujo el recurso extraordinario cuya denegación dio origen a la presente queja.Si bien es cierto que las objeciones planteadas por la apelante se vinculan con cuestiones procesales, ajenas- como regla y por su naturaleza- a la instancia del art. 14 de la ley 48, también lo es que tal doctrina no puede aplicarse de manera irrestricta cuando el escrito contiene argumentos suficientes, concretos y razonados sobre el tema que se pretende someter a conocimiento de la alzada, en los que se encuentran contenidas las exigencias legales para sustentar la apelación, máxime cuando lo decidido lleva al desconocimiento de las garantías establecidas por los arts. 14 bis, 16, 17 y 18 de la Constitución Nacional.La apelante Había obtenido el beneficio jubilatorio el 1º de junio de 1977, régimen que le aseguraba una movilidad permanente en función del cargo desempeñado en la actividad y del que fue desplazada con posterioridad al 31 de julio de 1978, objetó la constitucionalidad del sistema de movilidad y de actualización monetaria de los decretos 1645/78 y 481/81, y solicitó que se dictara una medida para mejor proveer, temas que no fueron tenidos en cuenta al dictar la sentencia.La omisión en entender los planteos expresados se presenta de rigor formal y resulta incompatible con el derecho de defensa en juicio, sobre todo si se atiende al hecho de que la naturaleza alimentaria del beneficio impone a los jueces actuar con suma cautela a fin de que no se vuelvan ilusorios los preceptos constitucionales que ampara esta

28

Page 29: Exceso Rigor Manifiesto.doc

materia. Por ello se hace lugar a la queja, se declara admisible el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada.

DISIDENCIA DEL SEÑOR PRESIDENTE DOCTOR DON JULIO S. NAZARENO:El recurso extraordinario, cuya denegación origina esta queja, es inadmisible (art. 280 del código procesal civil y comercial de la Nación) .Por ello se desestima la queja.

Conclusión: La omisión en entender los planteos expresados se presenta de rigor formal y resulta incompatible con el derecho de defensa en juicio, sobre todo si se atiende al hecho de que la naturaleza alimentaria del beneficio impone a los jueces actuar con suma cautela a fin de que no se vuelvan ilusorios los preceptos constitucionales que ampara esta materia.

22.- “Gouiric, Julio Alberto c/ Fernández Modesto”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 13/8/1998.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento de la Corte de Justicia de la Provincia de San Juan que, al desestimar el recurso de inconstitucionalidad y casación, dejó firme la sentencia de la alzada que había declarado extemporánea la apelación deducida por el actor, este último interpuso el remedio federal cuya denegación origina la presente queja. Los agravios del apelante suscitan cuestión federal para su consideración en la vía intentada, pues aunque las decisiones que declaran la improcedencia de los recursos ante los tribunales de la causa, por su carácter fáctico y de derecho procesal, no justifican el otorgamiento de la apelación extraordinaria, cabe hacer excepción a esa doctrina cuando lo decidido revela un exceso ritual manifiesto, incompatible con el ejercicio del derecho de defensa en juicio protegido por el art. 18 de la Constitución Nacional.Que, al respecto, cabe señalar que con arreglo a conocida jurisprudencia de esta Corte, el proceso civil no puede ser conducido en términos estrictamente formales, ya que no se trata ciertamente del cumplimiento de ritos caprichosos, sino del desarrollo de procedimientos destinados al establecimiento de la verdad jurídica objetiva. Que ello es así en el caso pues sin tener en cuenta que en materia de notificaciones tácitas la interpretación de los actos correspondientes debe ser restrictiva, el a quo convalidó una decisión que había efectuado una comprensión parcial y fuera de contexto de la presentación del actor para justificar un pedido de suspensión de términos procesales e intimación a la contraria para que devolviera las actuaciones que se encontraban fuera del juzgado. Que, por lo demás, el a quo no ponderó que el demandante había dejado nota en el libro de asistencia el mismo día en que se firmó la providencia que concedió el recurso -15 de marzo de 1996- ni que a partir de esa fecha lo hizo en forma ininterrumpida hasta que la contraria retiró el expediente en préstamo, circunstancia que revela su falta de contacto con las actuaciones y hace incierto el conocimiento tácito que se le atribuye respecto de la concesión del recurso.Por tal motivo se declara procedente el recurso el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada.

Conclusión:El a quo no ponderó que el demandante había dejado nota en el libro de asistencia el mismo día en que se firmó la providencia que concedió el recurso -15 de marzo de

29

Page 30: Exceso Rigor Manifiesto.doc

1996- ni que a partir de esa fecha lo hizo en forma ininterrumpida hasta que la contraria retiró el expediente en préstamo, circunstancia que revela su falta de contacto con las actuaciones y hace incierto el conocimiento tácito que se le atribuye respecto de la concesión del recurso. Por esto incurre en un exceso ritual manifiesto que vulnera las garantías del debido proceso.

23.- “Asociación de obras Sociales de Trelew c/ aguas y energía Eléctrica Sociedad del Estado y/o el interventor Nacional”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 16/3/1999.

Hechos del caso: Contra la sentencia de la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia que al confirmar la primera instancia, rechazó la excepción de inhabilidad de título y mandó seguir adelante la ejecución de aportes y contribuciones promovida por la asociación de obras sociales demandante, la demanda dedujo el recurso extraordinario cuya denegación originó esta queja.La Cámara Sostuvo que al no haberse negado la deuda no procede su planteamiento en atención a lo prescripto por el art. 544 inc. 4º in fine del código ritual por el, carácter de cosa juzgada formal de las sentencias ejecutivas.Con sustento en la doctrina de la arbitrariedad, la recurrente se agravia porque la Cámara, incurriendo en un manifiesto exceso ritual, prescindió totalmente de examinar la defensa basada en argumentos que, además de plantear que las planillas de liquidación agregadas con el certificado estaban incompletas y carecían de firmas- implicaban una clara negativa de la existencia de la deuda reclamada.Los juicios ejecutivos no resultan, en principio susceptibles del remedio intentado al no revestir el carácter de sentencias definitivas en los términos del art. 14 de la ley 48, ello no resulta óbice decisivo cuando lo resuelto trasunta un injustificado rigor formal en el tratamiento de las defensas opuestas, con agravio de imposible o muy difícil reparación ulterior, lo que redunda en menoscabo de la garantía del debido proceso y genera un dispendio de la actividad jurisdiccional.La corte ha dicho que los tribunales están obligados a tratar y resolver adecuadamente las defensas fundadas en la inexistencia de deuda que se plantean en los juicios de apremio, siempre que ello no presuponga el examen de otras cuestiones cuya acreditación exceda el limitado ámbito de estos procesos; en consecuencia no pueden ser considerados como sentencias válidas los pronunciamientos que omiten tratar la defensa mencionada toda vez que aquella ha de gravitar en forma decisiva en el resultado de la causa.La demandada opuso desde la primera presentación la defensa basada en la inexistencia de la deuda pues sostuvo que: durante el extenso período que aludían las planillas agregadas con el certificado, los trabajadores de esa empresa estatal habían estado afiliados a la “Mutual del Personal del agua y Energía Eléctrica de la Patagonia Sur”. La cual había prestado servicios asistenciales y se le habían pagado los aportes y contribuciones previstos en la ley. Además la reclamante carecía de aptitud para afiliar a trabajadores de empresas estatales.La Cámara eludió este planteo mediante la dogmática afirmación de que la ejecutada no había negado la deuda, pese a que la excepción articulada aludía a su manifiesta inexistencia al sostener que la actora no podía ser destinataria legítima de los aportes y contribuciones que habían sido efectuados a otra entidad. Al resolver así omitió considerar argumentos que fueron llevados a su conocimiento acerca de que la decisión

30

Page 31: Exceso Rigor Manifiesto.doc

de grado se había dictado sin sustanciar las pruebas dirigidas a demostrar las circunstancias invocadas. y que además consagraba un enriquecimiento sin causa a favor de una obra social que no había prestado los servicios asistenciales a los trabajadores durante el período aludido.Por tal motivo, corresponde la descalificación del fallo como acto jurisdiccional válido con arreglo a la doctrina del exceso ritual manifiesto, pues media en el caso la relación directa e inmediata entre lo debatido y resuelto y la garantía constitucional del debido proceso que se dice vulnerada. Por ello se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia recurrida.

Conclusión: Con sustento en la doctrina de la arbitrariedad, la recurrente se agravia porque la Cámara, incurriendo en un manifiesto exceso ritual, prescindió totalmente de examinar la defensa basada en argumentos que, además de plantear que las planillas de liquidación agregadas con el certificado estaban incompletas y carecían de firmas- implicaban una clara negativa de la existencia de la deuda reclamada.

24.- “F., M. J. y otros”Corte Suprema de Justicia de la Nación – 1999.

Hechos del caso: Contra la decisión de la Sala B de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Penal Económico que por voto de la mayoría confirmó la nulidad de la declaración de invalidez del auto que dispuso la iniciación del sumario y de dos órdenes de allanamiento, el representante del Ministerio Público interpuso recurso extraordinario cuya denegatoria dio origen a esta queja.

Dictamen del Procurador General:-El objeto del sumario consistía en la investigación del delito de contrabando que se habría cometido mediante irregularidades en la importación de un vehículo bajo el régimen de franquicias para discapacitados.-En su oportunidad el magistrado de Primera instancia que acogió el planteo de nulidad esgrimido por la defensa de los imputados, entendió que la causa 9086 había sido iniciada de oficio, por un decreto simple, y no por un auto fundado como lo ordena el art. 182 del código de procedimientos en materia penal.-En cuanto a los allanamientos efectuados sostuvo que habían sido dispuestos también por simples decretos careciendo de la fundamentación exigida por el art. 403 del código adjetivo.-El apelante funda su agravio en la doctrina de la arbitrariedad de sentencias, como medio eficaz para obtener el reparo de las garantías de defensa en juicio y el debido proceso que estima vulneradas, pues entiende que el pronunciamiento recurrido contiene defectos en su fundamentación normativa y en la consideración de extremos conducentes así como un apartamiento de las constancias de la causa y un exceso ritual manifiesto.-Considera que tanto la formación de la causa 9086, como los allanamientos dispuestos, encuentran adecuado fundamento en las constancias de la causa 9072 que el a quo omitió injustificadamente ponderar.-Señala que el auto cuya nulidad decretó el magistrado de primera instancia, y que luego refrendara la Cámara, no es aquel que disponía la iniciación del sumario. La

31

Page 32: Exceso Rigor Manifiesto.doc

averiguación del delito imputado a los procesados, se dispuso válidamente el 19 de febrero de 1991 en la causa 9072, por el auto que el recurrente se ocupó de transcribir a fs. 27 vta. (Auto fotocopiado a fs. 24 bis del incidente de nulidad), y no mediante el decreto de fs. 43 de la causa 9086, que sólo dispuso la separación o desprendimiento de las actuaciones por razones funcionales. De tal modo, sostiene que la falta de análisis de los antecedentes del caso que obran en la causa 9072, es lo que llevó a la Cámara a confirmar la nulidad, ya que si el referido desprendimiento no se hubiera efectuado, no habría motivos para decretar la invalidez de los autos mencionados, como no fueron impugnados ni declarados nulos todos los autos de la causa madre ordenando allanamientos, a pesar de que ambas causas siguieron tramitando por ante el mismo investigador.-Constituye un supuesto de arbitrariedad por falta de consideración de elementos conducentes para la adecuada solución del caso con el alcance que le ha dado la corte en numerosos precedentes.-Este supuesto de arbitrariedad debe ser corregido en esta instancia pues la decisión aparece así sin la adecuada fundamentación de acuerdo al derecho y a las circunstancias probadas en la causa. Por lo expuesto el Procurador Fiscal mantiene la queja deducida por el señor fiscal de la cámara. Luis Santiago González Warcalde.

Corte Suprema de Justicia de la Nación Buenos Aires, 21 de diciembre de 1999. - Vistos los autos: Recurso de hecho deducido por Ramiro Rodríguez Bosch (fiscal) en la causa F., M. A. y otros s/ averiguación contrabando s/ incidente de nulidad promovido por la defensa de M. A. J. y L. A. P. F. en la causa 9086, para decidir sobre su procedencia.

Hechos del caso: contra la resolución de la sala B de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Penal Económico por la que, con sustento en la falta de fundamentación, anuló la providencia de fs. 1 en cuanto disponía librar orden para allanar el domicilio de J.A.L., asimismo decretó la nulidad de todo lo actuado en consecuencia y sobreseyó definitivamente a M. A. F., L. M. P. F. y J. A. L., dedujeron recursos extraordinarios el representante de la Administración Nacional de Aduanas y el Fiscal de Cámara. Contra la denegación de los respectivos recursos, el acusador público interpuso la presente queja que fue mantenida por el señor procurador fiscal .Que en lo esencial, esta Corte comparte los fundamentos expuestos por el señor procurador fiscal, a cuyas conclusiones corresponde remitirse por razones de brevedad.Por ello, se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario del señor fiscal de Cámara y se revoca el pronunciamiento apelado. Hágase saber, agréguese la queja al principal y devuélvase a fin de que, por quien corresponda, se dicte nuevo pronunciamiento con arreglo a derecho.

DISIDENCIA DEL SEÑOR MINISTRO DOCTOR DON ENRIQUE SANTIAGO PETRACCHI. Considerando: 1º Que la sala B de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Penal Económico confirmó por mayoría la decisión de primera instancia, en cuanto había decretado la nulidad del allanamiento realizado en el domicilio de la calle Strangford..., Villa Celina, y de todo lo actuado en consecuencia, y sobreseído definitivamente a M. A. F., L. M. P. F. y J. A. L. El fiscal de Cámara interpuso recurso extraordinario contra dicha resolución, que fue denegado a fs. 141/142, lo cual motivó la presente queja, que fue mantenida por el procurador fiscal. 2º Que en la decisión apelada el a quo sostuvo que el decreto que ordenó el allanamiento mencionado (fs. 1, expediente principal)

32

Page 33: Exceso Rigor Manifiesto.doc

contrariaba lo dispuesto por el Art. 403 del cód. de procedimientos en materia penal, pues si bien el juez precisó la finalidad del registro domiciliario -constatar si J. A. L. poseía personalmente un vehículo BMW 520 ingresado al país bajo el régimen de licencias de la ley 19.279-, no expresó, ni siquiera de manera sucinta, cuáles eran sus fundamentos. En consecuencia, se ignoran, aun mínimamente, las razones concretas que se tuvieron en consideración para disponer de la medida. Asimismo, la Cámara indicó que el examen de las constancias de la causa 9072 (Conf. fotocopias agregadas al incidente de nulidad), de la cual se había desprendido la investigación ordenada respecto de L. y F., tampoco permitía revertir esa carencia, en tanto como antecedente del allanamiento citado sólo aparece el listado de todos los automotores importados en los años 1989, 1990 y 1991, bajo el régimen de la ley 19.279, aportado por la Administración Nacional de Aduanas. En tales condiciones, estimó que lo dispuesto no satisfacía las exigencias del ordenamiento procesal, y teniendo en cuenta que las disposiciones procesales sobre allanamiento de domicilio son directa reglamentación de la garantía de la inviolabilidad de domicilio (art. 18, Constitución Nacional), emitió la decisión en recurso. 3º Que el fiscal de Cámara sostuvo que la interpretación que el a quo hizo del art. 403 del cód. de procedimientos en materia penal es arbitraria, al haber incurrido en un excesivo ritualismo, y que, además, su fallo se apartó de las constancias de la causa. Según la recurrente, el pronunciamiento apelado no tuvo en cuenta que la causa 9086 es un desprendimiento de la otra, la 9072, y que el allanamiento del domicilio de L. habría sido ordenado sobre la base de lo actuado en esa investigación. 4º Que los agravios introducidos por el Ministerio Público no son susceptibles de ser examinados en esta instancia, en tanto remiten al análisis de cuestiones de hecho, prueba y derecho procesal común, pues únicamente se encuentran comprometidos los requisitos que las cámaras exigen a fin de poder controlar los allanamientos llevados a cabo por los jueces inferiores y las consecuencias procesales de su incumplimiento. 5º Que, por otra parte, la decisión recurrida cuenta con argumentos jurídicos bastantes para sustentarla.En efecto, del tenor de la decisión se advierte claramente que el a quo hizo mérito de diversas constancias de la causa 9072 y que las estimó insuficientes como fundamento para ordenar un allanamiento. Como consecuencia, declaró su nulidad, así como la de todos los actos que constituían su derivación. La ausencia de elementos que permitieran reconocer la necesidad de la medida constituyó el argumento central de la decisión, el cual no fue refutado por la recurrente, quien se ha limitado a expresar su discrepancia con el criterio de la alzada, sin indicar cuáles habrían sido, en concreto, las circunstancias de la causa, justificativas del allanamiento, que la Cámara habría omitido considerar. El recurso interpuesto carece, en este sentido, de la debida fundamentación, y corresponde, por lo tanto, su rechazo. Por ello, oído el señor procurador fiscal, se desestima la queja. Hágase saber y archívese, previa devolución de los autos principales. - Enrique S. Petracchi-.

Conclusión: El apelante funda su agravio en la doctrina de la arbitrariedad de sentencias, como medio eficaz para obtener el reparo de las garantías de defensa en juicio y el debido proceso que estima vulneradas, pues entiende que el pronunciamiento recurrido contiene defectos en su fundamentación normativa y en la consideración de extremos conducentes así como un apartamiento de las constancias de la causa y un exceso ritual manifiesto.

33

Page 34: Exceso Rigor Manifiesto.doc

25.- “Otto Garde y Compañía S.A.I.C.F. e I. c/ González, Teresa del Valle y otros”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 30/6/1999.

Hechos del Caso:Que el recurso extraordinario, cuya denegación origina esta queja, no se dirige contra una sentencia definitiva o equiparable a tal (art. 14 de la ley 48). Por ello, se desestima la queja y se da por perdido el depósito. Contra el pronunciamiento de la Sala A de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil que confirmó la desestimación in limine de las defensas planteadas con fundamento en la doctrina del abuso del derecho y la consiguiente sentencia que había ordenado llevar adelante la ejecución, los cofiadores Julia Rodríguez de Saludas y Pedro Domingo Saludas interpusieron el recurso extraordinario cuya denegación motiva la presente queja.Con fecha 24 de mayo de 1994 las partes habían firmado un contrato de locación por el término de 36 meses -a partir del 1° de abril de ese año-, donde los recurrentes se habían constituido en fiadores solidarios, codeudores lisos, llanos y principales pagadores de las sumas que pudiera adeudar el locatario, así como garantes de todas las obligaciones contraídas por éste (cláusula decimotercera. Mientras que la locataria había dejado de abonar el alquiler en el mes de septiembre de 1994, la locadora recién en abril de 1996 inició la ejecución de diecinueve mensualidades acumuladas, omitiendo en el período transcurrido todo tipo de comunicación a los fiadores respecto del incumplimiento incurrido por la inquilina. En dichas actuaciones la ejecutante trabó embargo sobre la única propiedad de los cofiadores y amplió la ejecución por el vencimiento de los meses subsiguientes, ascendiendo su importe a la suma de $ 70.750, y sólo en septiembre de 1996 -a veinticuatro meses de incumplimiento original- promovió la acción de desalojo por falta de pago de los arriendos, cuando restaban seis meses para la conclusión del contrato.Que según los recurrentes el tribunal soslayó la ponderación de la defensa fundada en el ejercicio abusivo del derecho sobre la base de consideraciones formales, y que dadas las circunstancias personales de los ejecutados- lo resuelto les ocasionaría un gravamen insusceptible de reparación ulterior, ya que se trata de personas enfermas y de avanzada edad, jubilados ambos cuyo único bien inmueble es el embargado -que constituye la sede de su hogar- y cuyo precio de venta resultará insuficiente para cubrir el crédito reclamado. Que los agravios expuestos suscitan cuestión federal para su consideración en la vía intentada, pues aunque remiten al examen de cuestiones fácticas y de índole procesal, ajenas -como regla y por su naturaleza- a la instancia del art. 14 de la ley 48, ello no impide la apertura de la instancia extraordinaria cuando la decisión objetada incurre en un rigor formal injustificado, lo cual redunda en menoscabo de los derechos tutelados por los arts. 17 y 18 de la Constitución Nacional y genera un agravio de imposible o insuficiente reparación ulterior. Que, en efecto, esta Corte hizo excepción a la ausencia de sentencia definitiva en el proceso ejecutivo cuando, sin desvirtuar la naturaleza del procedimiento y tratándose de la vivienda del deudor y su familia, se habían alegado defensas fundadas en las modificaciones en la política cambiaria. En tal caso -se dijo- "el carácter limitativo de las excepciones en los juicios de que se trata no puede llevarse al extremo de consagrar un exceso ritual manifiesto, incompatible con el ejercicio del derecho de defensa",Que, en tales condiciones, y sin perjuicio de lo que se decida respecto de la procedencia de las defensas interpuestas, media entre lo resuelto y las garantías constitucionales que se invocan como vulneradas, nexo directo e inmediato (art. 15 de la ley 48); por lo que cabe admitir esta presentación directa Por ello, se hace lugar a la queja, se declara

34

Page 35: Exceso Rigor Manifiesto.doc

procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia con el alcance indicado.Eduardo Moline O'Connor - Carlos S. Fayt – Guillermo A. F. López.

Conclusión: El tribunal soslayó la ponderación de la defensa fundada en el ejercicio abusivo del derecho sobre la base de consideraciones formales, y que dadas las circunstancias personales de los ejecutados- lo resuelto les ocasionaría un gravamen insusceptible de reparación ulterior, ya que se trata de personas enfermas y de avanzada edad, jubilados ambos cuyo único bien inmueble es el embargado -que constituye la sede de su hogar- y cuyo precio de venta resultará insuficiente para cubrir el crédito reclamado. Que los agravios expuestos suscitan cuestión federal para su consideración en la vía intentada, pues aunque remiten al examen de cuestiones fácticas y de índole procesal, ajenas -como regla y por su naturaleza- a la instancia del art. 14 de la ley 48, ello no impide la apertura de la instancia extraordinaria cuando la decisión objetada incurre en un rigor formal injustificado, lo cual redunda en menoscabo de los derechos tutelados por los arts. 17 y 18 de la Constitución Nacional y genera un agravio de imposible o insuficiente reparación ulterior. Que, en efecto, esta Corte hizo excepción a la ausencia de sentencia definitiva en el proceso ejecutivo cuando, sin desvirtuar la naturaleza del procedimiento y tratándose de la vivienda del deudor y su familia, se habían alegado defensas fundadas en las modificaciones en la política cambiaria. En tal caso -se dijo- "el carácter limitativo de las excepciones en los juicios de que se trata no puede llevarse al extremo de consagrar un exceso ritual manifiesto, incompatible con el ejercicio del derecho de defensa".

26.- “La Romería S.A.I y C. s/ incidente de revisión promovido por la concursada al crédito de Cattaroni Hnos. S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 19/09/2000

Hechos del caso: La Sala A de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial que, Al modificar parcialmente lo resuelto en la instancia anterior, por un lado desestimó el pedido de la concursada para que se aplicase a la cuota concordataria correspondiente a Cattorini Hermanos S.A. el procedimiento "desindexatorio" previsto en la ley 24.283 y, por otro, estableció cierta tasa de interés para el cálculo del crédito insatisfecho, la deudora interpuso el recurso extraordinario cuyo rechazo origina la presente queja.La recurrente atribuye arbitrariedad al fallo en ambos aspectos y cabe señalar que en cuanto al primero de ellos le asiste razón, toda vez que el a quo, al exigir el depósito de la suma que se reconocería adeudar como requisito previo de admisibilidad del pedido incurrió en el mismo defecto que en fallos 321-434.Aparece como un exceso ritual manifiesto la declaración de deserción del recurso por falta de critica razonada al fallo de la jueza de primer grado toda vez que el a quo, sobre la base de tal deficiencia evitó considerar los argumentos expuestos pormenorizadamente por la peticionaria en cuanto no era procedente denegar la aplicación de la citada ley con base en una eventual novación del crédito producida por la homologación del crédito, en tanto se había aplicado de manera retroactiva lo dispuesto en la nueva ley de concursos.

35

Page 36: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Que, en tales condiciones, corresponde declarar procedente el recurso extraordinario e invalidar lo decidido, pues media relación directa e inmediata entre lo resuelto y las garantías constitucionales que se dicen vulneradas (art.15, ley 48).

DISIDENCIA PARCIAL DEL SEÑOR VICEPRESIDENTE DOCTOR DON EDUARDO MOLINE O’CONNOR Y DE LOS SEÑORES MINISTROS DOCTORES DON GUILLERMO A. F. LOPEZ Y DON ADOLFO ROBERTO VAZQUEZA los efectos de fijar el interés que reconoció al crédito insinuado, la cámara se apartó de las pautas establecidas en el acuerdo preventivo homologado en razón de que, según expresó, la circunstancia de que se hubiera promovido un incidente de revisión respecto de dicho crédito -que se hallaba en trámite a la fecha del vencimiento de la única cuota concordataria-, no obstaba a la mora que atribuyó a la concursada, lo que habilitaba el aludido apartamiento y justificaba atenerse a la tasa que refirió, con su consecuente capitalización.Que ese razonamiento del sentenciante importó prescindir del texto legal aplicable al caso de autos, expresamente regulado en el Art. 58 de la ley 24.522 -que reproduce lo normado en el art. 69 de la anterior ley 19.551- mediante la adopción de un temperamento que no se compadece con la solución que le asignó el tribunal, lo que impone la descalificación del fallo por arbitrariedad. Que en efecto, de la citada disposición surge que si bien el recurso de revisión deducido contra los créditos admitidos no impide el cumplimiento del acuerdo homologado, esa posibilidad se supedita al previo requerimiento de los acreedores involucrados. Que, en ese marco, la mora que el tribunal atribuyó al deudor con sustento en lo sucedido antes de su presentación concursal, no pudo servirle de argumento para justificar el temperamento adoptado, habida cuenta de que, a estos efectos, lo relevante era determinar la morosidad de éste en el cumplimiento de la referida cuota concursal cuyos intereses -no los del crédito inicial- eran la cuestión a dilucidar. Que, a esos fines, debió el sentenciante ponderar lo dispuesto en la norma -supra referida- del estatuto concursal, examen que pudo haberlo llevado a concluir que no se hallaban cumplidos en el caso los requisitos legales para que al deudor le fuera exigible el cumplimiento del acuerdo homologado y, por ende, a descartar la mora de la que hizo mérito para fijar el interés cuestionado. Que, en tales condiciones, el rédito así dispuesto debe ser dejado sin efecto, lo que torna abstracto dilucidar si el temperamento adoptado en la sentencia importó -como sostiene el recurrente- violación de lo dispuesto en el art. 623 del Código Civil. Por ello, y lo dictaminado por el señor Procurador General, se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario interpuesto y se deja sin efecto la sentencia apelada.

DISIDENCIA PARCIAL DEL SEÑOR MINISTRO DOCTOR DON ANTONIO BOGGIANOCorresponde declarar procedente el recurso extraordinario e invalidar lo decidido, pues media relación directa e inmediata entre lo resuelto y las garantías constitucionales que se dicen vulneradas (art.15, ley 48). Por ello, y lo concordemente dictaminado por el señor Procurador General, se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario interpuesto y se deja sin efecto la sentencia apelada.

Conclusión: Aparece como un exceso ritual manifiesto la declaración de deserción del recurso por falta de crítica razonada al fallo de la jueza de primer grado toda vez que el a quo, sobre la base de tal deficiencia evitó considerar los argumentos expuestos

36

Page 37: Exceso Rigor Manifiesto.doc

pormenorizadamente por la peticionaria en cuanto no era procedente denegar la aplicación de la citada ley con base en una eventual novación del crédito producida por la homologación del crédito, en tanto se había aplicado de manera retroactiva lo dispuesto en la nueva ley de concursos.

27.- “Muñoz, María Luisa c/ ANSES s/ Reajuste por movilidad”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 09/11/2000

Hechos del caso: La Sala I de la Cámara Federal de la Seguridad Social declaró desierto el recurso el recurso de apelación interpuesto contra la sentencia de primera instancia que había reconocido el derecho de la titular a percibir sus haberes conforme a la ley 22.955.Contra ese pronunciamiento la Administración Nacional de la Seguridad Social, interpuso el recurso ordinario de apelación, que fue concedido y resulta formalmente admisible.El memorial de la recurrente solo presenta planteos genéricos relacionados con el exceso ritual manifiesto del fallo, pero no alcanzan a demostrar que la presentación ante la alzada contuviera críticas precisas y concretas del fallo atacado, por lo que solo se traduce con una mera disconformidad con lo resuelto por lo tanto corresponde declarar la deserción del remedio intentado

Conclusión: En este fallo solo hay una mera disconformidad con lo resuelto, los planteos que se hicieron acerca del exceso ritual manifiesto del fallo, no alcanzan a demostrar que la presentación ante la alzada tuviera criticas precisas y concretas del fallo atacado.

28.- “Scilingo, Adolfo Francisco c/ E.N. M°. de RR.EE. y Culto s/ amparo ley 16.986. o, Adolfo Francisco c/ E.N. M°. de RR.EE. y Culto s/ amparo ley 16.986”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 10/10/ 2000.

Hechos del caso: El señor Adolfo Francisco Scilingo, detenido en España, promovió acción de amparo contra el Estado Nacional, a fin de que el Poder Ejecutivo "me provea de los medios para mi supervivencia en Madrid, ante la situación de abandono en la que me encuentro por parte del Reino de España, y me brinde su formal intervención, asesoramiento, asistencia y protección para su solución, así como el apoyo jurídico y económico para mi abogado a efectos de que pueda terminar con el actual show jurídico-político-periodístico montado por el Juez Baltasar Garzón Real y un grupo de políticos y abogados, todos ellos denunciados y ordene al Embajador Carlos Amar y al Encargado de Negocios Juan Manuel Ortiz de Rozas que cesen en su trato discriminatorio y adopten la misma actitud que tuvieron con Humberto Roggero, dentro de lo normado por el Art. 16 de la Constitución Nacional". En ambas instancias, la acción fue acogida. En consecuencia, se ordenó que el "Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, para que por intermedio del Consulado General de la República Argentina en Madrid y en su caso la Embajada Argentina -y hasta tanto se levante la prohibición que rige a su respecto en punto al abandono del territorio español- preste al actor: a) asistencia alimentaria y de mantenimiento de su salud, que aseguren una supervivencia básica pero decorosa; b)

37

Page 38: Exceso Rigor Manifiesto.doc

albergue digno y seguro, de ser ello necesario por no hacerlo el Estado español como aparece informado; c) asistencia jurídica que asegure una adecuada defensa de sus derechos e intereses. La vencida, entonces, interpuso el recurso extraordinario federal que fue concedido en el caso.

Dictamen del Procurador General:-El pronunciamiento impugnado incurre en exceso ritual manifiesto al apreciar el escrito de expresión de agravios y concluir -con grave violación al derecho de defensa- que la apelante no había rebatido lo resuelta en primera instancia respecto de la obligación de asistir al actor en el Estado extranjero. En efecto, la lectura del escrito respectivo pone en evidencia que la demandada había postulado de modo suficiente que realizó todas las gestiones necesarias para atender los requerimientos de asistencia formulados por el actor con el alcance que surge de las normas que rigen el caso. Que mediante aquella genérica afirmación la cámara omitió valorar los instrumentos de, los cuales surge que el actor renunció al servicio jurídico de la mencionada entidad, para contratar profesionales de su confianza. Tal valoración resultaba imprescindible pues, de acuerdo con lo dispuesto por el art. 9, Inc. i, del Reglamento Consular -anexo aprobado por el decreto 8714/63- la obligación de representar a los connacionales opera cuando éstos se encuentran impedidos de defender oportunamente sus derechos e intereses. Que, en función de lo expuesto, corresponde descalificar lo decidido con sustento en la doctrina de la arbitrariedad, pues media nexo directo e inmediato entre lo decidido y las garantías constitucionales que se invocan como vulneradas (art. 15 de la ley 48).

Sentencia de la Corte Suprema: por ello, se declara admisible el recurso extraordinario y se deja sin efecto el pronunciamiento.

DISIDENCIASe rechaza el recurso extraordinario interpuesto. Costas por su orden en atención a la naturaleza de la cuestión debatida, se rechaza el recurso extraordinario interpuesto. Costas por su orden en atención a la naturaleza de la cuestión debatida (art. 68, segunda parte, del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación).

Conclusión: La vencida, interpuso el recurso extraordinario federal que fue concedido en el caso, el pronunciamiento impugnado incurre en exceso ritual manifiesto al apreciar el escrito de expresión de agravios y concluir que la apelante no había rebatido lo resuelto en primera instancia respecto de la obligación de asistir al actor en el Estado extranjero. En efecto, la lectura del escrito respectivo pone en evidencia que la demandada había postulado de modo suficiente que realizó todas las gestiones necesarias para atender los requerimientos de asistencia formulados por el actor con el alcance que surge de las normas que rigen el caso. Que mediante aquella genérica afirmación la cámara omitió valorar los instrumentos de, los cuales surge que el actor renunció al servicio jurídico de la mencionada entidad, para contratar profesionales de su confianza. Por ello corresponde descalificar lo decidido con sustento en la doctrina de la arbitrariedad.

29.- “Dirección Nacional de recaudación previsional c/ Sucesión Vidal de Ocampo, Aurora”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 06/2/2001.

38

Page 39: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento de la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán que no hizo lugar a un recurso ordinario deducido por la actora respecto de la regulación de honorarios efectuada a favor del procurador de la demandada, la Administración Federal de Ingresos Públicos interpuso la presente queja.La Cámara consideró que el importe del honorario regulado no alcanzaba el mínimo legal exigido por el art. 24, Inc. 6 del dec.-ley 1285/58 y la resolución 13/61 de esta corte.Según jurisprudencia de esta corte se tiene que demostrar el monto del agravio excede el mínimo legal al momento de su interposición.La recurrente sostiene que si bien el monto de la remuneración no alcanzaba dicho mínimo que el requisito aparecía cumplido si se le sumaba el importe controvertido de otras regulaciones ya realizadas a favor de los letrados de la demandada.

Dictamen de la Procuradora General Substituta:-La Cámara al rechazar el planteo únicamente porque surgía de un informe del actuario que en la alzada no se registraba el ingreso de incidentes de regulación de honorarios de otros letrados, incurrió en un exceso ritual manifiesto, lesionando el derecho de defensa en juicio. Ello es así porque a la fecha de la decisión impugnada, no sólo se habían regulado los honorarios de los letrados de la demandada sino que la regulación ya había sido apelada y en tanto el tribunal se desentendió de lo expuesto con referencia a que el trámite de apelación se había visto demorado por la necesidad de dictarse una aclaratoria del fallo de primera instancia.-Se declara la nulidad del pronunciamiento que denegó la apelación ordinaria.

Conclusión: La Cámara al rechazar el planteo debido a un informe realizado por el actuario que en la alzada no se registraba ingresos de incidentes de regulación de honorarios de otros letrados, incurrió en un exceso ritual manifiesto, lesionando el derecho de defensa en juicio. Ya que a la fecha de la decisión impugnada, no sólo se habían regulado los honorarios de los letrados de la demandada sino que la regulación ya había sido apelada y en tanto el tribunal se desentendió de lo expuesto con referencia a que el trámite de apelación se había visto demorado por la necesidad de dictarse una aclaratoria del fallo de primera instancia.

30.- “Ayala, Ofelia s/ tenencia de estupefacientes con fines de comercialización”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 07/12/2001.

Hechos del caso:La sala IV de la Cámara Nacional de Casación Penal no hizo lugar al recurso que había sido interpuesto por el fiscal general contra la decisión del tribunal oral Nº 2 de San Martín, que absolvió a Ayala, Ofelia del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización. Contra dicho pronunciamiento el representante del Ministerio Público interpuso recurso extraordinario, cuya denegación dio lugar a la presentación mantenida por el señor Procurador General de la Nación.Hechos del caso: una Comisión policial de la comisaría de Gregorio de Laferrere en las proximidades de las calles Chassaing y Río Cuarto, de la localidad de la matanza, interceptó el vehículo Renault 11 que manejaba Nicolás Antonio Abregu y que al revisar una mochila que llevaba la imputada Ofelia Ayala, descubrió y secuestró la

39

Page 40: Exceso Rigor Manifiesto.doc

cantidad total de 542,37 gramos de clorhidrato de cocaína y 10,67 gramos de marihuana.

Dictamen del Procurador General:-El apelante fundó el recurso extraordinario en la doctrina de la arbitrariedad. Estimó que el fallo impugnado se sustentaba en afirmaciones dogmáticas, tenía fundamentación aparente y había incurrido en un excesivo rigorismo formal al no hacer lugar al recurso de casación toda vez que impedía la revisión de la citada resolución absolutoria.-Además se realizó un examen parcial y fragmentario de la prueba sin que se hayan ponderado la totalidad de los elementos de convicción incorporados a la causa que debían haberle servido de fundamento para resolver el caso.-De este modo, al decidirse como se hizo sobre la base de fórmulas genéricas y abstractas, se omitió la consideración y valoración adecuada de aquellos elementos y circunstancias que eran decisivos para la debida dilucidación del tema debatido y cuya correcta evaluación hubiera variado esencialmente la solución del caso.-La resolución impugnada guarda nexo directo e inmediato con la garantía constitucional del debido proceso, por lo que resulta descalificable como acto jurisdiccional válido.

Sentencia de la Corte Suprema: se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto el pronunciamiento apelado.

DISIDENCIA DE LOS SEÑORES MINISTROS DOCTORES DON ENRIQUE SANTIAGO PETRACCHI Y DON GUSTAVO A. BOSSERT.Que el recurso extraordinario, cuya denegación origina la presente queja, es inadmisible (art. 280 del código procesal civil y comercial de La Nación).Por ello se desestima la queja.

Conclusión: Se produjo un exceso ritual manifiesto toda vez que la Cámara Nacional de Casación Penal, omitió la valoración y consideración de todos los elementos y circunstancias que eran necesarios para esclarecer el caso, además su correcta evaluación habría hecho variar la solución a la cual se arribó.Además la prueba no fue analizada en su totalidad, sino que se hizo un examen parcial y fragmentario, lo cual vulnera la garantía constitucional del debido proceso.

31.- “Rojas, Omar Andrés c/ Weinzenttel, José Antonio”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 15/05/2001.

Hechos del caso: Contra el pronunciamiento que declaró la caducidad de la instancia por haber transcurrido el plazo previsto por el art. 310 Inc. 2 del código Procesal Civil y comercial de la Nación, sin haber activado el trámite del recurso, la apelante dedujo recurso de reposición.La parte señala que el auto adolece de un exceso ritual manifiesto, pues el tratamiento de la queja estaba supeditado al resultado del beneficio de litigar sin gastos que se encontraba en trámite con una audiencia testimonial pendiente para el día 7 de marzo de 2001 y que no se le había fijado un plazo determinado para cumplir con el deber de informar sobre dicho proceso. Los argumentos mencionados no alcanzan para desvirtuar

40

Page 41: Exceso Rigor Manifiesto.doc

la motivación que contiene lo resuelto a fs. 68, ya que la parte no ha invocado razones de mérito suficiente para justificar su actitud de no informar en término sobre el estado del referido incidente, máxime cuando se le indicó expresamente que debía hacerlo con el objeto de demostrar su interés en mantener viva la instancia y evitar una eventual declaración de caducidad. Por ello, se desestima el recurso de reposición intentado. Conclusión: En este fallo los argumentos mencionados acerca del exceso ritual manifiesto no alcanzan para desvirtuar la obligación que la parte tenía de informar sobre el estado de ese proceso, ya que se le había indicado que debía hacerlo con el objeto de mantener viva la instancia y evitar una eventual declaración de caducidad de instancia.

32.- “Videla Dorna, Sarah Josefina c. Anses”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 06/02/2001.

Hechos del caso: La actora dedujo recurso extraordinario, que fue rechazado por la Cámara Federal de Apelaciones de la Seguridad Social, dio lugar al recurso de queja. Se agravia la actora a raíz de que la sentencia de primera y segunda instancia no habían valorado las pruebas por ella aportada, con el fin de que se reabra el proceso administrativo llevado a cabo por el Anses respecto de su jubilación y se la incluya dentro del régimen previsional de cronista parlamentario reglado por la ley 21.124. Menciona que las sentencias son lesivas a su derecho de propiedad, que durante el período de actividad aporto a la categoría que pretende se le reconozca, y en cambio percibe una jubilación como editorialista, lo que provoca una confiscatoria disminución de sus haberes jubilatorios.

Dictamen del Procurador Fiscal: -Manifiesta que la sentencia de la Cámara no atendió con el rigor que es menester los conducentes llevados por la demandada en su escrito de apelación.-La actora ha puesto de resalto las pruebas y las particularidades circunstancias del caso, que el juez de primera instancia no ha ponderado y la Cámara se limitó a sostener que el recurso careció de fundamentación no demostrando la actora la arbitrariedad suficiente para desvirtuar la sentencia atacada.-La decisión de la Cámara de declarar la no admisibilidad del recurso de apelación se vio revestida de un injustificado rigorismo formal, incompatible con el derecho de defensa.-Lo dicho tiene sustento, en la prueba, la cual indica que la Dirección de Ayuda Social para el personal del Congreso certifico que la actora ha pertenecido a ese organismo en carácter de periodista parlamentaria.

Sentencia de la Corte Suprema de Justicia: la Corte hace suyo los fundamentos del dictamen del Procurador Fiscal, si bien las resoluciones que declaran desierto un recurso ante el tribunal de alzada no son, en razón de su naturaleza fáctica y procesal, impugnables por la vía del art. 14 de la ley 48, cabe hacer lugar a la excepción cuando lo decidido revela un exceso ritual susceptible de frustrar la garantía de defensa en juicio. Remite los autos a la sala de origen a fin de que por quien corresponda, se proceda a dictar un nuevo fallo con arreglo de lo expresado.

Conclusión:

41

Page 42: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Si la Corte no hace la excepción, la decisión de primera como de segunda instancia conducen al menos cabo de la admisión de la verdad jurídica objetiva, concluyendo en desconocimiento de derechos de fondo y no valorando la prueba que indica que la Dirección de ayuda Social, certifica que la actora ha prestados servicios de periodista. Al no tener en cuenta la prueba aportada por la involucran una arbitraria interpretación, y una clara violación al derecho de la propiedad.

33.- “G.C.B.A. c. Román S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 14/06/2001.

Hechos del caso: El Gobierno de la Ciudad Buenos Aires promovió una ejecución fiscal, contra el propietario de un inmueble por más de $314.000 en concepto de diferencias por la contribución especial de alumbrado, barrido, limpieza, pavimentos, acera y ley 23514 por el período 1992/1996. El ejecutado opuso excepciones de pago e inhabilidad de título. Acogida la demanda en las instancias ordinarias, el contribuyente dedujo recurso extraordinario cuya denegación hizo que ocurriera por queja ante la Corte Suprema. El máximo tribunal declaró procedente el remedio federal y dejó sin efecto la resolución de Cámara.

Dictamen del Procurador General:-Estima que el remedio intentado era inadmisible y, correspondía rechazar la queja. -La naturaleza del proceso impedía el tratamiento por vía extraordinaria puesto que para ello se requiere la existencia de sentencia definitiva y, en el caso, quedaba el derecho a iniciar el juicio ordinario de repetición.-De las constancias de la causa no surgía si la deuda originaba en un nuevo revaluó con carácter retroactivo –como alegaba el recurrente- o si se trataba, de un cobro por diferencias ocasionadas por el mayor valor adquirido por la propiedad, debido a obras o mejoras introducidas por el propietario y no denunciadas al fisco.

Sentencia de la Corte Suprema: Aun cuando la apelación se dirige contra lo resuelto en un juicio de ejecución fiscal, la Corte ha admitido excepcionalmente la procedencia vía extraordinaria cuando resulta manifiesta inexistencia de deuda exigible, en razón de que lo contrario importaría privilegiar un excesivo rigor formal con grave menoscabo de garantías constitucionales.-El gobierno de la Ciudad, utiliza el mayor valor fiscal atribuido a los inmuebles para exigir el pago de contribuciones más elevadas por periodos anteriores al momento que se efectuó la revaluación, importa desconocer los efectos liberatorios de los pagos de tributos realizados por los contribuyentes e impone el reconocimiento de agravio constitucional, siempre que el error en la inicial valuación de los bienes no fuese imputable a aquellos o que hubiese mediado dolo o culpa grave de su parte.Declara admisible la queja, y se deja sin efecto la sentencia apelada. Con Costa.

Conclusión: En el presente caso, la Corte privilegio la justicia sobre las formas rígidas del proceso de ejecución fiscal. Resulta claro que el fisco local no puede pretender el cobro de las diferencias por revalúo de inmuebles en aquellos casos que no responda a construcciones o mejoras no declarada por el contribuyente, circunstancia que debe surgir necesariamente del trámite administrativo de determinación.

42

Page 43: Exceso Rigor Manifiesto.doc

34.- “Establecimiento Modelo Terrabusi S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 27/09/2001.

Hechos del caso: La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial confirmó una resolución de la Comisión Nacional de Valores que impuso sanciones por uso indebido de información privilegiada y no pública en el marco de negociaciones para la transferencia del paquete accionario de una empresa. Uno de los sancionados dedujo apelación ordinaria –que fue desestimada- y el resto recurso extraordinario, que al ser denegado motivó la queja. La Corte, por mayoría, declaró procedente la apelación extraordinaria, descalificando el fallo apelado con arreglo a la doctrina de la arbitrariedad.

Dictamen del Procurador General:-Tratándose de una figura novedosa del derecho penal administrativo, los elementos probatorios aportados deben ser examinados con mayor rigor que el habitual, requiriéndose una alta prudencia, y, para ello, una acreditación muy específica y puntual, que asegure de manera por demás inequívoca que la conducta de los supuestos infractores efectivamente infringe las disposiciones legales vigentes en la materia.-Se realizan afirmaciones con fundamento en hechos no acreditados y que en verdad no logran sino construir meras inferencias opinables, no susceptibles de considerarse como una acabada prueba de presunciones que, por su gravedad, concordancia y precisión, permitan tener por acreditadas las conductas que se imputan.-Una conclusión derivada de la sospecha del sumariante, que es factible pudiese ser cierta, pero como queda dicho, requiere una acreditación más suficiente, desde que no puede reducirse a la mera especulación de la falta a la verdad en los dichos de los declarantes, puesto que se halla en juego la imposición de sanciones de suma gravedad, siempre en el ámbito de una figura punitiva novedosa cuya eventual imprecisión linda con la afectación de garantías de inveterada raigambre constitucional que hacen tanto a las libertades individuales cuanto al natural desenvolvimiento del mundo de los negocios.-No obstante, el sumariante y el fallo, concluyen que los imputados conocieron el precio por medio de los negociadores y por ello operaron obteniendo ventajas de ese conocimiento, con lo cual se constituyen en transgresores de lo pactado en el instrumento de intención firmado por aquellos, y de las previsiones de la Resolución de la Comisión Nacional de Valores. Pero tampoco acá, se atiende a la circunstancia de que los imputados por la operación de compra y venta de acciones, que les eran propias o de terceros por quien operaron, no se hallaban afectados por la prohibición establecida en la carta de intención, disposición, que resulta claro, sólo estaba dirigida a los negociadores por sus propias tenencias, “vendedores", quienes no podían hacer conocer las condiciones a terceros, de lo que cabe colegir, que si los accionistas "llamados adicionales" no conocían el dato puntual, no existía dificultad para que negociaran sus tenencias, extremo que, como manifiestan, hacían desde siempre, cuando la acción registraba cambios de baja y/o suba.-El fallo parte de ciertas presunciones para fundamentar su decisión de que los imputados violaron la norma legal de reserva y se aprovecharon de tal circunstancia para obtener ventajas en el mercado bursátil, pero dichas presunciones se reducen a una suerte de concatenación de inferencias con apoyo en hechos pasibles de ser interpretados con diverso alcance.

43

Page 44: Exceso Rigor Manifiesto.doc

-Cabe considerar, que de darse por cierta la conclusión del sumariante y del fallo confirmatorio, de que los accionistas sancionados conocieron los datos puntuales del valor base y el final de las acciones a transferirse, no se explica, porqué no se consideró, que en el lapso cuestionado, no sólo compraron, sino que también vendieron, sin retener los volúmenes accionarios acrecentados, a la espera del cierre de la operación de venta, oportunidad en la que pudieron haber vendido a un valor superior al que vendieron. Ello, plantea una posibilidad que debió ser estudiada, frente a la presunción en que se apoya el fallo, por el sentenciador, en tanto fue alegada y probada por los recurrentes.-Es del caso también analizar, a los fines de resolver en justicia y dada la vinculación que se presenta entre la conducta de la recurrente con la del imputado, las otras posibilidades que se derivan de la situación planteada. El negociador habitualmente actuaba como transmisor de los pedidos de los otros accionistas para operar en la compra y venta de acciones, extremo que no se halla desvirtuado, ni probado lo contrario. Tampoco se probó fehacientemente que fue el transmisor del dato relevante y no respetó el acuerdo, lo que convierte estos hechos en una simple especulación del órgano sancionador, motivo por el cual considero que no existía óbice alguno para que continuara aceptando como natural el pedido de ordenar las compras y ventas al agente, siempre guardando el silencio al que se había comprometido.-Cabe concluir, que no se probó, que el sancionado negociador, haya transmitido la información relevante del precio de base y de cierre a los socios parientes o conocidos, que los restantes imputados hayan corroborado tal afirmación, que los mismos se hallaban impedidos de negociar sus acciones por el citado conocimiento, que hayan influido en la operatoria bursátil con su comportamiento en el mercado, ni que de ello se haya derivado un perjuicio a otros accionistas, a la confiabilidad del mercado o al comprador de las acciones, conclusiones que si bien no sirven de por si para exculpar en el marco de una figura punitiva de mero peligro vale para sumar mas dudas sobre el eventual conocimiento del precio, ya que en tal caso los perjuicios al mercado debieron ocurrir casi indefectiblemente.-Corresponde reiterar la loable iniciativa de los órganos administrativos de control, tendiente a asegurar la transparencia del mercado, mediante figuras como la del "insider trading", requiere un alto grado de prudencia y para ello una acreditación muy específica y puntual, que asegure inequívocamente que la conducta de los supuestos infractores se ha producido.-Lo contrario, importa provocar que, figuras abiertas y necesariamente ambiguas, propias de las dirigidas al accionar de actividades como las de participar en un mercado bursátil, permitan sancionar de modo grave a partir de una convicción meramente subjetiva, proveniente de circunstancias dudosas o que ofrecen diversa interpretación.-Opinó el entonces Procurador que ante la falta de acreditación fehaciente de que los imputados hayan infringido las normas de la Resolución de la Cámara Nacional de Valores, se debe revocar el fallo de la Cámara, declarando la absolución de la acusada por las imputaciones efectuadas y dejando sin efecto la sanción impuesta.

Sentencia de la Corte Suprema: Entendió que la Cámara al remitirse al dictamen del Fiscal de Cámara, no se hizo cargo de los agravios expresados por los sumariados, sobre la responsabilidad imputada a los recurrentes por la comisión de infracción del “insider Trading” y con respecto al negociador, consideró que habiendo estado en conocimiento de la información –intervino directamente en la operación- y por haber actuado en el mercado a nombre de un tercero, mientras aquella no se había hecho pública. Que debe ser descalificado el fallo apelado con arreglo a la doctrina de la arbitrariedad de la sentencias, puesto que al

44

Page 45: Exceso Rigor Manifiesto.doc

no tratarse concretamente los agravios de los recurrentes carece de decisiva fundamentación, lo que afecta gravemente la garantía legal de debido proceso legal, sin que lo expuesto implique pronunciamiento alguno sobre la solución que, en definitiva, corresponde otorgar a la causa.Se declara inadmisible el recurso ordinario de apelación concedido, sin costas en estas instancia pues la apelada no cuestionó la procedencia formal del mencionado recurso. Se hace lugar a la queja, se declara precedente el recurso extraordinario de los sancionados y se deja sin efecto la sentencia. Vuelven los autos al tribunal de origen a fin de que, por medio de quien corresponda, proceda a dictar nuevo fallo con lo arreglo a lo expresado.

Conclusión: En el presente caso la Corte Suprema no se expide sobre el fondo de la cuestión. Y no resuelve si el sumariado había actuado como comisionista o como simple mensajero, cuestión que debía ser objeto de un examen previo para llegar aquella afirmación. Además es importante mencionar que pese a las circunstancias acreditadas –carácter de accionista miembro del directorio, parentesco con el negociador de la venta del paquete mayoritario, etc.- el Procurador General entendió que dichos elementos sólo podían determinar presunciones que no acreditaban fehacientemente la violación de las normas de la Comisión Nacional de Valores. Por ultimo, es importante mencionar que el caso volvió a la Corte y está finalmente se expide sobre el fondo del asunto el 24/4/2007, falló por primera vez en un caso de insider Trading, fundamentando su decisión en los principios de transparencia y equidad que deben regir en el ámbito de la Oferta Publica y en la violación por parte de los administradores de los deberes de guardar reserva y en la prohibición de utilización relevante y no pública. Por lo cual estamos de acuerdo con lo resuelto por el máximo tribunal.

35.- “Caric Petrovic, Pedro y otros c. Báez, Juan y otro”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 28/05/2002.

Hechos del caso: Se entabló juicio penal por injurias contra el editor de una publicación periodística en la que había aparecido una carta abierta o solicitada firmada por su autor. La sentencia condenatoria fue recurrida por vía del recurso de inconstitucionalidad. Su denegatoria por el Superior Tribunal de Chaco motivó un recurso extraordinario federal que también fue desestimada. El interesado ocurrió por queja ante la Corte Suprema, que declaró procedente el remedio federal.

Dictamen del Procurador General:-La cuestión federal no puede ser invocada después de la sentencia definitiva, este principio general admite excepciones en los supuestos en que la misma surja directamente del fallo apelado y no pudo haber sido prevista y planteada por la parte con anterioridad.-El editor de una publicación periodística no debe responder por el delito de injurias si no se probó que conociera el contenido difamante de la nota.-El Superior Tribunal de Chaco Vulneró la garantía de defensa en juicio –art. 18 CN y 8.2, Convención Americana sobre Derechos Humanos- la resolución que denegó un recurso de inconstitucionalidad con sustento en que lo adecuado era el de

45

Page 46: Exceso Rigor Manifiesto.doc

inaplicabilidad de la ley, si este remedio contenía una limitación legal excluyente para el caso, relativa al “quantum” de la condena, pues priva la vía procesal al recurrente contra una sentencia que, es arbitraria.-La resolución del superior tribunal local, que rechazó el recurso de inconstitucional contra la sentencia de condena, desatiende la recomendación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para la salvaguarda del acceso a la revisión de las condenas penales, la cual satisface siempre y cuando el recurso no se regule, interprete o aplique con rigor formalista, sino que permita con relativa sencillez al tribunal, examinar la validez de la sentencia recurrida en general, así como el respeto debido a los derechos fundamentales del imputado, en especial los de defensa y debido proceso.-Es arbitraria la sentencia, a los efectos de la procedencia del recurso extraordinario federal, si mediante el rigor formal en la valoración de los requisitos de admisión del recurso de inconstitucionalidad deducido contra la sentencia de condena, vedó al imputado la posibilidad de acceder a una revisión plena del acto jurisdiccional en abierta contradicción con la doctrina desarrollada por la Corte Suprema.

Sentencia de la Corte Suprema: comparte los fundamentos del Procurador General y lo hace suyos los argumentos. Se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia recurrida. Vuelven los autos al tribunal de origen para que por quién corresponda, se dicte un nuevo fallo con arreglo al presente.

Conclusión: Se justifica ampliamente en el presente caso al remitirse al dictamen del Procurador, porque analiza con convincentes argumentos los distintos aspectos, procesales y constitucionales, que descalifican lo resuelto por el Superior Tribunal de Chaco, aportando los fallos pertinentes del Máximo Tribunal.

36.- “Nasif, Eduardo A. c. Administración Nac. De la Seguridad Social”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 29/08/2002.

Hechos del caso: La Cámara de la Seguridad Social revocó el fallo de la instancia anterior que había reconocido los servicios prestados por el titular en un frigorífico, por entender que no había reunido los quince años de servicios de aportes exigidos por el art. 28 de la ley 18037, pues sólo se habían acreditado algo más de 4 años, y no se había probado el lapso comprendido entre los años 1946 y 1958, denunciado como tiempo laboral efectuado por la empresa. Contra ese pronunciamiento, se interpuso recurso ordinario de apelación. La Corte Suprema, por mayoría, dejó sin efecto la sentencia apelada.

Sentencia de la Corte Suprema: le asiste la razón al apelante en cuanto la alzada ha valorado la prueba con un excesivo rigor formal sin considerar la ausencia de responsabilidad del afiliado en el incumplimiento del empleador, lo que da cuenta de que no ha actuó con la extrema cautela debida cuando están en juego derechos de naturaleza alimentaria.-La certificación de servicios del expediente administrativo fue confeccionada sobre la base de registros rubricados y fichas de personal, documentos que no fueron confrontados en sede administrativa mediante una adecuada verificación, lo que ha colocado al apelante en un estado de indefensión al haberse descartado, sin fundamentación, la única constancia documental que robustecía los dichos de los

46

Page 47: Exceso Rigor Manifiesto.doc

testigos que fueron concordes respecto de las modalidades de la relación laboral, fechas y lugar de trabajo.Por ello declara procedente el recurso extraordinario interpuesto, revoca la sentencia apelada y se confirma el fallo.

Conclusión: El empleado y el empleador están obligados a realizar el aporte correspondiente. El empleador es el responsable de retener e ingresar el aporte obligatorio que debe realizarse al empleado –sede administrativa-. La legislación laboral regula los derechos y garantías mínimas de los trabajadores, las que deben ser cumplidas por los empleadores. Es acertada la resolución del Corte y más cuando se encuentra en juego los derechos de naturaleza alimentaria.

37.- “Hutt, Gregorio J. y otro Sein y Cía S.A.I.C.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 31/10/2002.

Hechos del caso: La Suprema Corte de la Provincia de Buenos Aires, al desestimar el recurso local de inaplicabilidad de ley, dejó firme el rechazo de un incidente de nulidad articulado por los actores durante la etapa de ejecución, en el que alegaba violación a su derecho de defensa en cuanto al tribunal de trabajo había reducido sustancialmente en capital de condena sin oírlos previamente. Por tal motivo, se interpuso recurso extraordinario que fue concedido. La Corte desestimó la apelación federal por aplicación del art. 280 del Código Procesal. Contra ese pronunciamiento, se dedujo recurso de reposición, que fue acogido favorablemente.

Dictamen del Procurador General:-No puede omitir de señalar, y estima que son los miembros de la Corte, en su carácter de intérprete máximo y final de sus propios dichos, a quienes le compete el expedirse sobre el problema, dado que la Procuración no tuvo participación. Y en resguardo de la verdad jurídica objetiva, parecería que el planteo excedería el marco de la aplicación del art. 280.

Sentencia de la Corte Suprema: debe tenerse en cuenta el criterio de esta Corte según la cual, no obstante tratarse de una sentencia dictada con posterioridad a la que contempla al art. 14 de la ley 48, es posible acoger el recurso extraordinario cuando la solución de los planteos articulados se traduce en un agravio irreparable y vulnera las garantías de los art. 17 y 18 CN.-Es arbitraria, a los fines del recurso extraordinario federal, la sentencia que desestimó el recurso de inaplicabilidad de ley, dejando firme el rechazo de la nulidad articulada por los actores contra la resolución que, al acceder a un pedido de corrección efectuado por la demandada y sin correrles traslado, redujo el quatum que aquella debía pagar, pues al así decidir afectó el derecho de defensa en juicio de los recurrentes.-Si se afecta el derecho a la defensa, en el caso se redujo el quantum de la liquidación sin correr traslado a la contraria, constituye un rigorismo inaceptable obligar al recurrente al desarrollo de argumentos defensivos concretos al momento de proponer la nulidad fundada en esas circunstancias, dado que el breve plazo –en que procede- cuando el marco adecuado para ese pormenorizado tratamiento es aquel que se vio privado en el proceso principal el afectado por la indefensión.

47

Page 48: Exceso Rigor Manifiesto.doc

-La desestimación del recurso local, implicó un injustificado desconocimiento de la doctrina del Tribunal según cual los jueces no pueden exceder su jurisdicción expidiéndose sobre cuestiones que no fueron propuestas en debida forma y afectando de ese modo las garantías constitucionales de la defensa en juicio y de la propiedad. Se declara procedente el recurso extraordinario y se revoca la sentencia con el alcance indicado. Vuelven los autos al tribunal de origen para que, por quien corresponda, se dicte un nuevo fallo con arreglo a lo expuesto.

Conclusión: El derecho a peticionar ante las autoridades, tiene el correlato, el obtener respuesta, y ello implica ser oído, ósea le corresponde participar en el proceso judicial la posibilidad de los actores de poder exponer sus razones o defensas antes que la Justicia decida la cuestión que pueda afectarlos. En el presente caso por ej. no se corre traslado, es acertada la decisión de la Corte porque sino, no hacía lugar se traduciría en un agravio irreparable para los actores del proceso. Y violentaría la defensa en juicio.

38.- “Mato de Solari, Liliana I. y otros c. Kasa S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 10/04/2003.

Hechos del caso: El juez de grado declaró la caducidad de la instancia de conformidad con lo dispuesto por los arts. 310 y 311 del Código Procesal. La afectada apeló la resolución, diciendo que no había tomado efectivo conocimiento de la devolución del incidente conexo por parte del juzgado del fuero que lo había requerido, como tampoco de la reanudación de los plazos suspendidos. Confirmada la decisión de primera instancia, por la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, se interpuso recurso extraordinario Federal, cuyo rechazo motivó la queja. La Corte dejó sin efecto la sentencia apelada.

Dictamen del Procurador General: -Lo atinente a la caducidad de la instancia remite al estudio de cuestiones fácticas y derecho procesal, materia ajena al recurso extraordinario federal, admite excepción a esa materia cuando el examen de aquellos requisitos se efectúa con injustificado rigorismo formal que afecta la garantía de defensa en juicio y, además, la decisión en recurso pone en fin al pleito o causa un agravio de imposible o insuficiente reparación ulterior. Se advierte que la situación podría encuadrarse, a los efectos de prescripción, art. 3987 Cod. Civil, con lo cual el recurrente perdería la posibilidad de reiterar eficazmente su reclamo a instancias ordinarias.-La perención de la instancia debe responder a las particularidades del caso, por ser un modo anormal de terminación del proceso y de interpretación restrictiva, su aplicación debe adecuarse a ese carácter sin llevar ritualistamente el criterio que la que preside más allá del ámbito que le es propio, especialmente cuando el trámite se encuentra en estado avanzado y los justiciables lo han instado durante años.-Cabe dejar sin efecto la resolución que declaró la caducidad de la instancia si la inactividad en el proceso no obedeció a desinterés de la actora, en cuanto el llamamiento de autos para sentencia no fue dejado sin efecto por pedido de las partes, sino por el requerimiento de un incidente, ad effectum vivendi, por otro juzgado, razón por la cual ello no modificó sustancialmente el estado de la causa, la cual, devuelto el expediente, estuvo nuevamente en condiciones de ser resuelta.

48

Page 49: Exceso Rigor Manifiesto.doc

-En la etapa –art. 483 Cod. Proc.- la parte queda eximida de su carga procesal de impulso, y, por lo tanto, su inactividad no puede ser presumida como abandono de la instancia, ya que ello importaría responsabilizarla por una actividad que deben cumplir los funcionarios judiciales en virtud de su obligación legal de actuar oficiosamente.-La remisión de un expte. conexo a otro juzgado puede asimilarse a la suspensión de plazos por tiempo indeterminado –art. 135 inc. 7 del Cod. Proc.- si ello ocurrió cuando la causa se encontraba en condiciones de ser resuelta, dejándose sin efecto el llamamiento de autos para sentencia por una cuestión extraña a la actividad de las partes, y atento a que esta última resolución fue notificada por cedula y por Secretaría, no resultaba impropio esperar que la devolución del incidente fuera registrada en el principal y notificada de igual manera.

Sentencia de la Corte Suprema de Justicia: Se remiten a los fundamentos y conclusiones por el Procurador General. Hace lugar a la queja, declara procedente el recurso extraordinario y deja sin efecto la resolución apelada. Vuelven los autos al tribunal de origen para que, por quien corresponda, se dicte un nuevo pronunciamiento con arreglo a lo expresado.

Conclusión: En el presente caso coincidimos con lo que manifiesta la Corte, que se efectúo con un injustificado rigor formal violatorio de la garantía de defensa en juicio debido a que a raíz de la conducta de la actividad jurisdiccional, efecto la resolución que declaró la caducidad de la instancia si la inactividad en el proceso no obedeció a desinterés de la actora, en cuanto el llamamiento de autos para sentencia no fue dejado sin efecto por pedido de las partes, sino por el requerimiento de un incidente, ad effectum vivendi, por otro juzgado, razón por la cual ello no modificó sustancialmente el estado de la causa, la cual, devuelto el expediente, estuvo nuevamente en condiciones de ser resuelta. La caducidad de la instancia es un “modo anormal” de terminación del proceso que tiene lugar cuando las partes no impulsan el proceso dentro de los plazos determinados por la ley. La caducidad es de interés para las partes y la jurisdicción. El interés de la jurisdicción reside en no ver demorarlo su accionar por procesos cuyas partes han olvidado y abandonado; el interés de las partes reside en que no es lógico dejar abierto un proceso abandonado, porque ello implica pérdida de tiempo y de dinero para ellas.El fundamento de la caducidad de la instancia es la presunción de renuncia de la instancia de las partes; o en otras palabras: se presume la falta de interés de las partes en la instancia, lo cual se pone de manifiesto por la inactividad procesal prolongada.

39.- “Martínez Adalid, Jorge O.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 14/10/2003.

Hechos del caso: La Cámara de Casación Penal declaró mal concedido el recurso de casación interpuesto contra la sentencia que rechazó la excepción de falta de acción y ordenó recibir declaración indagatoria a dos funcionarios de la Comisión Mixta Argentino- Paraguaya del río Paraná, en orden al delito de malversación culposa de caudales públicos, justificando su decisión en el carácter de no definitivo de la decisión apelada. Contra ese pronunciamiento, se dedujo recurso extraordinario federal, cuya denegación dio origen a la queja, sustentada en la inmunidad de jurisdicción de los recurrentes. La Corte Suprema dejó sin efecto el fallo apelado.

49

Page 50: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Dictamen del Procurador General:-Las cuestiones debatidas resultan sustancialmente idénticas a la examinadas en la causa M. 475 XXXVI, a cuyo términos y conclusiones se remite en razón de brevedad.

Sentencia de la Corte Suprema de Justicia: Configura una cuestión federal de trascendencia, a los fines del recurso extraordinario, el planteo de los recurrentes relativo a la inmunidad de jurisdicción que le correspondería en su condición de funcionarios de un ente con personalidad jurídica de derecho de gentes, pues comporta la interpretación y aplicación de tratados internacionales y, el cumplimiento del Estado Nacional de las obligaciones asumidas por ellos.Es arbitraria, la sentencia de la Cámara Nacional de Casación Penal que declaró mal concedido el recurso de casación interpuesto contra la sentencia que dispuso rechazar la excepción de falta de acción y dispuso recibir la declaración indagatoria a funcionarios de Comisión Mixta Argentina-Paraguaya del río Paraná –en orden al delito de malversación culposa de caudales públicos-, toda vez que el apego estricto a las limitaciones contenidas en el art. 457 Cod. Proc. Penal conlleva un excesivo formalismo del que podría resultar la frustración definitiva del adecuado tratamiento de la cuestión federal involucrada en el conflicto.

Conclusión: Es acertada la solución de la Corte en cuanto no es aplicable si los recurrentes poseen inmunidad de jurisdicción por ser funcionarios de un ente con personalidad jurídica del derecho de gentes (en el caso, la Comisión Mixta Argentino Paraguaya del Río Paraná), en la presente causa se configura el vicio de arbitrariedad por exceso de rigor formal que conduce a la descalificar lo resuelto, y más cuando se encuentra en juego la aplicación de tratados internacionales, y el estado se vería afectado por su incumplimiento.

40.- “Sefina S.R.L. c. Banco de la Provincia de Buenos Aires”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 25/11/2003.

Hechos del caso: Una sociedad realizó tareas de graboverificación para una entidad bancaria de la Provincia de Buenos Aires la demandó a fin de obtener el pago de las facturas que en razón de aquellas actividades, entendía le eran debidas, solicitando también la nulidad de una resolución de dicho Banco por la que se rescindía el contrato. Contra el rechazo “in limine” efectuado por la Suprema Corte local al no haberse cumplido con la exigencia sentada por el propio Tribunal según la cual debía plantearse al menos un recurso administrativo contra el acto cuya validez se pretende enjuiciar, la actora interpuso remedio federal. La Corte, hizo lugar al recurso y revocó la sentencia recurrida.

Dictamen del Procurador General: -Procede el recurso planteado, en principio, lo resuelto conduce al examen de cuestiones de derecho público local, ajenas como regla general a la instancia ordinaria, existe cuestión federal bastante para apartarse de dicha regla, la resolución que es objeto de remedio federal incurre en un injustificado rigor formal, por lo que resulta lesionada la garantía constitucional de defensa en juicio.

50

Page 51: Exceso Rigor Manifiesto.doc

-La instancia anterior, no halla debido sustento en los antecedentes invocados por la superior instancia provincial y se ha traducido, en un cercenamiento de la garantía del art. 18 CN, en cuanto a que no se prive a nadie arbitrariamente de la adecuada y oportuna tutela de los derechos que pudieran eventualmente asistirle sino por medio de un proceso conducido en legal forma y que concluya en una sentencia fundada.

Sentencia de la Corte Suprema: comparte los argumentos y conclusiones del dictamen del Procurador General. Declara admisible el recurso extraordinario y se revoca la sentencia apelada. Devuelve a fin de que, por medio de quien corresponda, se dicte nuevo pronunciamiento con arreglo a derecho.

Conclusión: No nos parece acertado lo resuelto por la Corte a raíz, de que para poder acceder a la vía judicial, es necesario agotar la vía administrativa previamente, y esto no se puede llevar adelante si no se deducen en término los recursos administrativos. Para agotar la vía, basta en general, con la presentación del recurso jerárquico, sin que sea obligatorio haber deducido previamente el recurso de reconsideración. La articulación del recurso no suspende por ej. la ejecución de la resolución recurrida. Existiendo la posibilidad de solicitar la suspensión en sede administrativa o judicial. Sin embargo, se puede solicitar la suspensión del acto hasta tanto se resuelva el recurso argumentando, que su cumplimiento producirá un daño de dificultosa reparación ulterior. La solicitud se puede llevar adelante en el mismo recurso o en una presentación judicial.

41.- “Icardi, Lisandro M. y otro c. Nalco Argentina S.A.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 11/05/2004.

Hechos del caso: Las partes dedujeron reposición contra la resolución de Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, que declaró operada la caducidad de la segunda instancia. Rechazados tales remedios, el demandado interpuso recurso extraordinario por arbitrariedad cuya denegación motivó su presentación directa ante la Corte, que declaró formalmente admisible el remedio federal y dejó sin efecto la sentencia de grado.

Dictamen del Procurador General: -La perención de la instancia debe responder a las particularidades del caso, sin que su aplicación exceda, en forma ritualista, del ámbito que es propio- en el presente caso- se acogió el recurso extraordinario por arbitrariedad deducido contra la resolución que había decretado la perención, se trata de un modo anormal de terminación del proceso que debe interpretarse restrictivamente, y más cuando el trámite se encuentra en un estadio avanzado y los justiciables lo han instado durante años, hallándose la causa para dictar sentencia definitiva. –Mantiene la doctrina de los autos caratulados Mato Solari, Liliana sentencia del 10/4/2003-.-El llamamiento de autos para sentencia no se llevó a cabo por pedido de alguna de las partes, sino a raíz de requerimiento fiscal de turno. Está determinación, no modifico sustancialmente el estado del proceso, ya que, una vez contestado el oficio por el Fiscal -Cosa que no había ocurrido- si de él surge la iniciación de una acción criminal, deberá suspenderse el juicio civil por el art. 1001 del Cod. Civil. De modo, que no se advierte en ese estado, haya existido una obligación inexcusable para realizar lo que V.E. ha definido como “actividad idónea para impulsar el procedimiento”.

51

Page 52: Exceso Rigor Manifiesto.doc

-Se efectúo con injustificado rigor formal violatorio a la defensa en juicio, tras varios años de trámite de la causa se hallaba para dictar sentencia y solo quedaba pendiente una diligencia cuyo resultado podría acarrear la suspensión del proceso, poniendo dicha decisión fin al pleito u ocasionando un gravamen de imposible o insuficiente reparación ulterior.

Sentencia de la Corte Suprema de Justicia: los agravios del apelante han sido objeto adecuado del tratamiento por el Procurador General, a cuyos fundamentos se remite el tribunal. Declara formalmente admisible el recurso extraordinario y se deja sin efecto la resolución apelada. Costas por su orden en razón de que la decisión impugnada fue dictada de oficio y no existió oposición de parte. Vuelven los autos al tribunal de origen a fin de que, por medio de quién corresponda, proceda a dictar un nuevo fallo con arreglo a lo expresado.

Conclusión: En el presente caso coincidimos con lo que manifiesta la Corte, que se efectúo con un injustificado rigor formal violatorio de la garantía de defensa en juicio debido a que a raíz de la conducta de la actividad jurisdiccional, donde la causa se encontraba para dictar sentencia y ninguna de las parte solicito la caducidad sino todo lo contrario, lo han instado años. La caducidad de la instancia es un “modo anormal” de terminación del proceso que tiene lugar cuando las partes no impulsan el proceso dentro de los plazos determinados por la ley. La caducidad es de interés para las partes y la jurisdicción. El interés de la jurisdicción reside en no ver demorarlo su accionar por procesos cuyas partes han olvidado y abandonado; el interés de las partes reside en que no es lógico dejar abierto un proceso abandonado, porque ello implica pérdida de tiempo y de dinero para ellas.El fundamento de la caducidad de la instancia es la presunción de renuncia de la instancia de las partes; o en otras palabras: se presume la falta de interés de las partes en la instancia, lo cual se pone de manifiesto por la inactividad procesal prolongada.

42.- “El Soberbio S.A. s/ conc. Prev.”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 15/06/2004.

Hechos del caso: Deduce el recurso de queja la concursada originado por el rechazo del recurso extraordinario que interpusiera contra el pronunciamiento del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Misiones que, al hacer lugar a los recursos locales de inaplicabilidad de la ley de inconstitucionalidad, dejó sin efecto lo resuelto en la instancia anterior en cuanto se había admitido un pedido de rectificación del monto del crédito verificado por error aritmético.

Dictamen del Procurador General:-Que si bien la Corte tiene dicho que lo atinente a la existencia de cosa juzgada, es un problema de hecho y derecho procesal extraño a la instancia del art. 14 ley 48, ello no impide a la Corte, conocer en un planteo de esta naturaleza, cuando su examen por los tribunales de la causa extienden su valor formal más allá de los límites razonables y prescinden de una adecuada ponderación de las constancias relevantes del expediente, lo cual redunda en evidente menoscabo de las garantías.

52

Page 53: Exceso Rigor Manifiesto.doc

-Es procedente el recurso extraordinario respecto de la sentencia del Superior Tribunal provincial, al hacer lugar a los recursos locales de inaplicabilidad de ley y de inconstitucionalidad, rechazó el incidente de rectificación del crédito verificado promovido por la concursada, pues no admitir la corrección aritmética del monto verificado, más allá de la oportunidad procesal en que se realiza, solo da lugar a un beneficio para el acreedor con sustento en un error, perjudicando al concursado y a los terceros que verían disminuido el activo, lo que les da lugar a una concreta afectación a su derecho de propiedad y de igualdad de trato.-El cumplimiento de una sentencia informada por errores aritméticos o de cálculos, lejos de preservar, conspira y destruye la institución de la cosa juzgada de inequívoca raigambre constitucional

Sentencia de la Corte Suprema: De conformidad con el dictamen del Procurador General se hace lugar a la queja, se declara admisible el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia con el alcance indicado. Vuelven los autos al tribunal de origen a fin de que, por medio de quién corresponda, proceda a dictar un nuevo fallo con arreglo a lo expresado.

Conclusión: Es acertada la resolución del caso, a raíz que el cumplimiento de una sentencia informada por errores aritméticos o de cálculo, lejos de preservar, conspira y destruye la institución de la cosa juzgada de inequívoca raigambre constitucional.Excede los límites de razonabilidad para aplicar el principio de la cosa juzgada. No obstante, al no admitirse la corrección aritmética, más allá de la oportunidad procesal en que se realiza, generaría un beneficio para el acreedor hipotecario con sustento en un error, pero que tiene como consecuencia necesaria, producir un perjuicio no sólo al concursado, sino a los terceros, quienes por la equivocación del funcionario encargado de velar por los intereses del conjunto de los acreedores, verían disminuido el activo que constituye la garantía del pago de sus créditos, generando así la afectación al derecho de propiedad y de igualdad de trato, principios del procedimiento concursal.

43.- “Falcón, Ignacio c. Ministerio de Economía”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 19/08/2004.

Hechos del caso: El Estado Nacional apeló la resolución que le ordenó pagar obligaciones documentadas en títulos públicos en la moneda de origen o la cantidad de pesos necesaria para adquirir en el mercado libre de cambios. Dicho remedio se declaró desierto. Denegado el recurso extraordinario, el agravio ocurrió por queja ante la Corte Suprema, que dispuso la revocación de la sentencia de Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal.

Dictamen del Procurador General: -La Corte tiene reiteradamente dicho que las resoluciones que declaren desierto un recurso ante el tribunal de alzada, no son, debido a su naturaleza fáctica y procesal, impugnables por vía del art. 14 de la ley 48, salvo que lo decidido revele un exceso ritual susceptible de frustrar una garantía de la defensa en juicio.-Debe revocarse el pronunciamiento que declaró la deserción de la apelación contra la sentencia que había mandado pagar en moneda de origen ciertas obligaciones

53

Page 54: Exceso Rigor Manifiesto.doc

documentadas en títulos públicos, si además de incurrirse en excesivo rigor formal en la manera de apreciar la insuficiencia del recurso, se omitió tratar cuestiones oportunamente planteadas y conducentes para solucionar el caso, tales como la incidencia de la pesificación y validez constitucional de las normas de emergencia, pese a la percepción de las sumas reclamadas, ya que subsiste el agravio que habilita la apertura del recurso extraordinario.-Si bien la declaración de deserción de un recurso ante el tribunal de alzada, no es impugnable por la vía del recurso extraordinario federal –art, 14 ley 48-, cabe apartarse de tal principio cuando media exceso ritual manifiesto susceptible de frustrar la garantía de defensa en juicio, máxime si se omitió tratar cuestiones oportunamente planteadas y conducentes para la solución del pleito –incidencia de la pesificación y validez constitucional de las normas de emergencia-.

Sentencia de la Corte Suprema: el Tribunal comparte los fundamentos del Procurador General y se remite a ellos. Se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada. Se remite las actuaciones al tribunal de origen a fin de que, por quién corresponda, se dicte un nuevo fallo.

Conclusión: La defensa en juicio no sólo es instrumental, sino también sustantiva, por eso la Corte hace excepción al principio general sentado.

44.- “Cantera Timoteo S.A. c. Mybis Sierra Chica S.A. y otros”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 03/03/2005.

Hechos del caso: La Corte Suprema rechazó por extemporáneo un recurso de queja que fue presentado un minuto después de las dos primeras horas del día hábil intermedio posterior al vencimiento del plazo de cinco días. El interesado solicitó la reconsideración de lo resuelto. El máximo tribunal, por mayoría, admite la revocatoria y tiene por presentada la queja en término.

Sentencia de la Corte Suprema de Justicia: corresponde admitir la revocatoria y considerar presentada en término la queja que fue interpuesta un minuto después de las dos primeras horas del día hábil inmediato posterior al vencimiento del plazo de 5 días, ya que se invocado y acreditado de manera suficiente un hecho de fuerza mayor, aún cuando se interprete con criterio restrictivo el alcance de los art. 124 y 154 del Código Procesal, la expuesta es la solución jurídica más acorde con la garantía constitucional de la defensa en juicio.-Corresponde hacer una excepción a los principios de perentoriedad de los plazos procesales y aplicar el art. 157 Cod. Procesal, ya que una decisión diferente frustraría por excesivo rigor formal una vía eventualmente apta para obtener el reconocimiento del derecho invocado.-Las decisiones de la Corte por las que rechaza los recursos de queja por apelación denegada no son, como principio, susceptibles de reposición, cabe apartarse de dicho criterio en los supuestos pronunciamiento tenga clara incidencia en la garantía constitucional de la defensa en juicio.

Conclusión:

54

Page 55: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Cabe resaltar que en este fallo el tribunal fue compuesto por tres (3) conjueces y el resultado del voto de la mayoría fue de 5 a 4. Los 3 conjueces dieron la mayoría. Esto no debería ser visto como una justificación que legitime el cambio de jurisprudencia. El plazo de gracia no constituye una prolongación del término ya feneció a las 24 del día anterior, es un remedio para impedir consecuencias perjudiciales que podrían ocasionar una situación de fuerza mayor que no hubiese permitido hacer la presentación judicial en tiempo oportuno. Cualquier otra solución implicaría dejar librado a la discrecionalidad de los jueces cuál es el tiempo de demora admisible más allá de lo legal.

45.- “Rodríguez de Tramarit, Nelly S. c. Guerra, Marta B. y otro”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 29/09/2005.

Hechos del caso: Un letrado y su patrocinando fueron objeto de una sanción procesal. Interpuesta la apelación, ésta fue declarada mal concedida por la Cámara de Apelaciones en lo Civil, quién consideró que el monto cuestionado no excedía el previsto en el art. 242 del Código Procesal. El letrado interpuso recurso extraordinario, al cual adhirió su cliente. La Cámara concedió el recurso. La Corte Suprema admite ambos remedios federales y deja sin efecto la sentencia cuestionada.

Dictamen del Procurador General: -Debe admitirse la adhesión de una de las partes al recurso extraordinario interpuesto por su letrado patrocinante contra la resolución que declaró mal concedida la apelación tendiente a cuestionar la sanción procesal que le fue impuesta en forma conjunta, si se considerarse improcedente dicho planteo sólo porque no insertó su presentación en el encabezamiento del escrito y lo hizo una petición complementaria al pie de aquél y se le vedase de ese modo la vía recursiva declarada admisible respecto de quién suscribió.-Es procedente el recurso extraordinario interpuesto contra la sentencia que declaró mal concedida la apelación tendiente a cuestionar una sanción procesal, por considerar el tribunal de alzada que el valor cuestionado no excedía el monto señalado por el art. 242 Cod. Procesal, ya que la norma mencionada efectivamente establece que el límite para la apelación en razón del valor cuestionado, no se aplicará cuando se discuten tales cuestiones.

Sentencia de la Corte Suprema: los argumentos dados en el remedio federal, fueron objeto de adecuado tratamiento por el dictamen del Procurador General, cuyo fundamento la Corte comparte.Respecto al codemandado, quien en el mismo escrito, y con idéntico patrocinio letrado, adhirió al recurso extraordinario. La Corte ha expresado que resulta improcedente la adhesión al recurso extraordinario, de modo que redunde en una frustración ritual del derecho. Se declara procedente el recurso extraordinario, con el alcance indicado. Vuelvan los autos al tribunal de origen a fin de que, por quién corresponda, se dicte un nuevo pronunciamiento con arreglo al presente.

Conclusión: El encabezamiento de un escrito tiene por objeto de asegurar su correcta agregación a los autos y facilitar el despacho, todo escrito debe iniciarse con la expresión de su

55

Page 56: Exceso Rigor Manifiesto.doc

objeto, el nombre de quien lo presenta, su domicilio, etc.. Si bien el objeto del escrito, se indica en la parte superior del mismo un resumen de su contenido, cuando ello no resulta claramente de la expresión usada al efecto el juez, debe atenerse a los términos expresos en que se formulen las peticiones o se deduzcan los recursos respectivos. En el presente caso es acertada la solución de la Corte al remitir los autos al tribunal de origen, sino vulneraría la garantía del debido proceso.

46.- “Guzmán, Roberto L. c. Transportes Unidos de Merlo S.A.C.I. e I”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 03/05/2005.

Hechos del caso: Una empresa de transportes fue representada en diversos juicios por los abogados de su aseguradora. Posteriormente, debido al desequilibrio financiero de la aseguradora, la transportista denunció el contrato de seguro y asumió su defensa con letrados contratados por ella. Los abogados de la aseguradora le reclamaron el pago de honorarios, ante lo cual la transportista opuso excepción de inhabilidad de título y se acogió al decreto 260/97. Tales planteos fueron rechazados en ambas instancias, por lo cual interpuso sendos recursos de nulidad e inconstitucionalidad. La Suprema Corte de la Pcia. de Buenos Aires rechazó ambos recursos y confirmó la sentencia. La vencida interpuso un recurso extraordinario, cuya denegación motivó la queja. La Corte Suprema, por mayoría, admite los recursos y revoca la sentencia.

Dictamen del Procurador General:-Es procedente dejar sin efecto la sentencia de la Suprema Corte Provincial que desestimó los recursos extraordinarios y confirmó la admisión de la ejecución de honorarios de los ex letrados de una aseguradora contra la empresa de transporte asegurada, ya que está planeó cuestiones decisivas transcendencia como son la aplicación del contrato de seguro y de la ley 17418, que no fueron analizadas en la instancia inferior y merecieron el rechazo del Superior Tribunal local con el argumento de que el fallo estaba legalmente fundado, sin esbozar razón alguna para someterlo, por lo cual se ha incurrido en un rigorismo formal incompatible con el derecho de defensa en juicio.-Se omitió tratar el planteo de inconstitucionalidad del dec. 260/97 –posibilidad de pago de sentencia de 60 cuotas, con un periodo de gracias de 6 meses-, siendo que nuestro máximo tribunal tiene dicho que en los casos aptos para ser conocidos por ella según el art. 14 de la ley 48, la intervención del Superior Tribunal local es necesaria en virtud de la regulación que el legislador nacional hizo en el art. 31 de nuestra carta magna.-Las resoluciones recaídas en juicios ejecutivos y de apremio no son la sentencia definitiva a la que alude el art. 48, es equiparable a tal la decisión que al rechazar los recursos extraordinarios locales, confirmó la de primera instancia que admitió la ejecución de honorarios por los ex letrados de una aseguradora contra la empresa de transporte asegurada, causa un agravio de imposible reparación ulterior debido a que el recurrente se encuentra impedido, en el futuro, de replantear la aplicación de la ley 17418, dec. 260/97 y las cláusulas del contrato de seguro.Sentencia de la Corte Suprema: la mayoría comparte y hace suyos los fundamentos y conclusiones del Procurador General, haciendo lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y deja sin efecto la sentencia apelada con el alcance indicado. Vuelven los autos al tribunal de origen para que, por quien corresponda, se dicte un nuevo fallo con arreglo al presente.

56

Page 57: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Conclusión: La Corte en reiterada jurisprudencia sostiene que las resoluciones recaídas en juicio ejecutivos no constituye una sentencia definitiva a la que establece el art. 14 de la ley 48 la decisión en el presente caso es equiparable a tal por causar un agravio de imposible reparación ulterior. El máximo tribunal advierte que la sentencia cuestionada no atiende con el rigor que corresponde a las cláusulas del contrato firmado por la aseguradora y la aplicación de la ley 17418, y queda manifiestamente claro un injustificado rigorismo formal, contrario con el derecho de defensa. Es acertada la solución del caso.

47.- “Velardez, Rodrigo David s/ robo agravado por el uso de armas”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 15/08/2006.

Hechos del caso: La Suprema Corte de la Provincia de Buenos Aires desestimó el recurso de inaplicabilidad de ley presentado por la defensa oficial de Rodrigo David Velardez, contra la resolución de la Sala II del Tribunal de Casación Penal en la que, por mayoría, rechazó el planteo de esa parte vinculado con la falta de fundamentación de la declaración de reincidencia dictada por el Tribunal en lo Criminal Nº 1 de Morón que condenó al nombrado a la pena de 8 años de prisión, por considerarlo coautor y autor penalmente responsable de los delitos de robo agravado por el uso de armas en concurso real con el de robo simple. Contra esa decisión se articuló la vía extraordinaria federal, cuya denegación, originó la presente queja.En ocasión de celebrarse en la instancia de casación la audiencia informativa que dispone el artículo 458 del código procesal penal local, la defensora oficial adjunta, luego de mantener el recurso deducido por el defensor de juicio, basado en la errónea aplicación de los artículos 166, inciso 2º, 40 y 41 del Código Penal, expuso que la declaración de reincidencia dictada contra Velardez carecía de suficiente motivación, al no especificarse en la sentencia si la condena anterior fue total o parcialmente cumplida por el imputado en condición de penado o si, por el contrario, se la tuvo por compurgada con la prisión preventiva sufrida, ante lo cual consideró arbitraria la aplicación del artículo 50 ibídem.-Si bien el Tribunal de Casación admitió el recurso intentado, casó parcialmente el fallo condenatorio en relación a la determinación de la pena, reduciéndola a siete años y ocho meses de prisión, la mayoría de sus integrantes consideró extemporáneo este último planteo y, sin dar mayores fundamentos, lo rechazó por no integrar la impugnación de origen.Interpuesto el recurso de inaplicabilidad de ley, la defensa, respecto de su admisibilidad, solicitó la inconstitucionalidad federal del artículo 494 del Código Procesal Penal de la Provincia de Buenos Aires, al imponer como límite material para el uso de esa vía las transgresiones a ley sustantiva, y excluir de su objeto la materia federal que no refleje otro tipo de infracción normativa.En lo que hace al fondo del asunto, sostuvo que la postura adoptada por la mayoría de la casación, para rechazar el agravio vinculado con la falta de fundamentación de la declaración de reincidencia, resultó arbitraria, pues con exceso ritual manifiesto ese tribunal omitió conocer una cuestión propia de su competencia (si concurre el requisito exigido por el artículo 50 del Código Penal para la aplicación de ese instituto, relativo al cumplimiento total o parcial de la pena privativa de libertad), afectando las garantías de defensa en juicio y debido proceso del imputado.

57

Page 58: Exceso Rigor Manifiesto.doc

En ese sentido, afirmó que, pese a no estar incluido ese planteo en el recurso que motivó su actuación, la casación tenía jurisdicción para resolverlo, no sólo por tratarse de un supuesto de nulidad absoluta de la sentencia (artículo 434 del código de rito local), sino, fundamentalmente, porque su intervención resultaba posible merced a lo dispuesto en el artículo 435 ibídem que, al consagrar el principio que veda la reformatio in peius, admite expresamente que ese órgano revisor puede conocer ... "más allá de los motivos de agravio cuando eso permita mejorar la situación del imputado". Sostuvo, en consecuencia, que la casación provincial efectuó una interpretación que desnaturaliza las disposiciones de dicho artículo y, por ende, del alcance que cabe otorgar a esa garantía en el marco del proceso penal.

Conclusión:En este caso, se pretende dejar sin efecto la sentencia apelada basada en un exceso ritual manifiesto de parte del tribunal, ya que este omitió conocer una cuestión propia de su competencia, para que se dicte así un pronunciamiento conforme a derecho.

48.- "Salem, Julio Esam c/ Administración Federal de Ingresos Públicos"Corte Suprema de Justicia de la Nación - 15/08/2007. 

Hechos del caso: Los integrantes de la Sala I de la Cámara Federal de la Seguridad Social tuvieron por no presentado el recurso de apelación interpuesto contra la resolución de la División Revisión y Recursos de la Región Neuquén de la Administración Federal de Ingresos Públicos (A.F.I.P.), en virtud de que el escrito presentado carecía de firma de letrado. (del dictamen del señor Procurador Fiscal subrogante)Los sentenciantes efectuaron una aplicación excesivamente formal de las disposiciones contenidas en el artículo 56 del código de rito, omitiendo considerar elementos objetivos y conducentes para la correcta solución del caso. En efecto, de las constancias de autos surge que, si bien el recurso de apelación carecía de firma de letrado patrocinante, lo cierto es que, previamente a la intimación formulada por el tribunal, el actor acompañó junto con su letrado patrocinante - y con firma de éste - la póliza de seguro de caución emitida a favor del ente administrativo a fin de acatar lo ordenado en el artículo 15 de la ley 18.820 y evitar la deserción del remedio intentado. Por lo tanto, como resulta evidente que la omisión cometida al interponer el recurso de apelación quedó subsanada al adjuntar el documento mencionado, por cuanto de esta forma se cumplió con la ratificación por separado con firma de letrado a que hace alusión el artículo 57 de la normativa procesal, vale aceptar, entonces, la afirmación del recurrente respecto a que los actos efectivizados válidamente en forma posterior permitieron el cumplimiento de la finalidad perseguida por la norma al exigir la intervención de un profesional del derecho que asegure la plenitud del ejercicio de su defensa en juicio." (del dictamen del señor Procurador Fiscal subrogante).Las circunstancias hasta aquí reseñadas demuestran que el pronunciamiento en crisis aparece teñido de un formalismo extremo que lesiona los derechos garantizados por los artículos 17 y 18 de la Constitución Nacional, y, por ello, considero que corresponde declarar procedente el recurso extraordinario y revocar la sentencia apelada en cuanto ha sido materia de agravio (del dictamen del señor Procurador Fiscal subrogante)

Conclusión:

58

Page 59: Exceso Rigor Manifiesto.doc

En este caso, se pretende dejar sin efecto la sentencia apelada basado en un formalismo extremo de parte del tribunal, por aplicación excesivamente formal de un articulo del codigo procesal, para que se dicte así un pronunciamiento conforme a derecho.

49.- "Sepúlveda N.E. c/C.N.A. A.R.T. S.A. s/Inc. - Cas.".Suprema Corte de Justicia Mendoza - 28/02/2008 

Hechos del caso:La actora fue víctima de un robo a mano armada en el lugar de trabajo.  Las consecuencias lesivas que el evento delictivo generó en su salud le determinó una incapacidad laboral del 13%, según dictamen  emitido por la Comisión Médica.La ART demandada abonó el siniestro en los términos de la LRT pero también fue conminada a darle las prestaciones en especie consistentes en el tratamiento psiquiátrico establecido por el citado organismo administrativo.El incumplimiento de tal prestación determinó la correspondiente demanda por daño material y moral, la que fue acogida favorablemente por el Tribunal de mérito.La aseguradora de riesgos del trabajo demandada se agravia de la condena dispuesta en la causa e interpone los recursos extraordinarios de casación e inconstitucionalidad en forma conjunta.En este caso, se acompañó un poder para acreditar la personería invocada y el Tribunal consideró que el mismo resultaba insuficiente por lo que emplazó  a la parte actora en el término de diez días para acompañar el documento habilitante en forma, el cual debió ser notificado por cédula y en el domicilio legal constituido.Esta decisión es sin lugar a dudas violatoria del derecho de defensa y vulnera las garantías constitucionales del debido proceso.No obstante la nulidad dispuesta y advirtiendo que en la causa se ha producido la prueba ofrecida por la parte actora con la debida intervención de la demandada, respetándose adecuadamente el contradictorio, sin que haya mediado agravio por parte de la demandada que lesione la validez de los actos cumplidos, es que considero que los mismos deben ser ratificados y convalidados, debiéndose retrotraerse las actuaciones al momento de la contestación de la demandada al sólo efecto de su incorporación y producción de la prueba ofrecida y no rendida de la demandada y en la medida en que la misma sea admitida por el Tribunal subrogante y no afecte el principio de inmediación del proceso laboral.Se refiere a la correcta inteligencia y aplicación del art. 29 del C.P.C. relata que contestó en término la demanda incoada en su contra y que adjuntó en la oportunidad el poder para juicios otorgado a los letrados intervinientes, en un todo de acuerdo con las disposiciones del C.C.  (art. 1870, sgtes y cc).No obstante ello el Tribunal de la causa ordenó el desglose de la contestación por no encontrarse debidamente inscripto en el Registro Público de la Provincia.Por último, destaca que el poder agregado en autos  no fue impugnado en su validez por la actora.El recurso de inconstitucionalidad lo funda en los incs. 2, 3, y 4 del art. 150 del C.P.C., y alega que se le ha violado su derecho constitucional de propiedad y de defensa en juicio al ser condenado al pago de una indemnización que cubre un riesgo civil en violación de la obligación legal (LCT) y contractual asumida.

Conclusión:

59

Page 60: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Sostiene que la sentencia es arbitraria porque la ley no impone otra obligación sustancial que su extensión en instrumento público y que el requisito de registración requerido por la Cámara no invalida la existencia del acto ni sus efectos.

50.- “Tenembaun, Alberto Luis y otro c/ Moreira, Eduardo Luis y otro s/ ejecución de alquileres” CNCIV - 27/08/2009

Hechos del caso:En este caso en estudio cabe considerar que existe exceso ritual manifiesto cuando se ordena la devolución al interesado de la documentación acompañada por extemporánea –al amparo de rigorismos formales-, máxime cuando esta documentación fuera denunciada como glosada en el expediente que entre las partes tramita sobre desalojo, por ante el mismo juzgado.Tiene dicho la doctrina que se incurre en ritual manifiesto, no sólo en el dictado de sentencias definitivas, sino que también en resoluciones de mero trámite.Si bien es cierto que razones de seguridad jurídica que constituyen el sustento del principio de perentoriedad de los plazos procesales, colocan un momento final para el ejercicio de ciertos derechos, pasado el cual y sin extenderlos más, éstos han de darse, es obligación de los jueces ponderar con rigor la aplicación de los principios jurídicos pertinentes, a fin de no incurrir, con daño para la justicia, en una aplicación solo mecánica de estos principios.

Conclusión:En este caso queda mas que evidenciado el exceso ritual manifiesto, en este caso en una resolución de mero trámite, donde se ordena acompañar certificado de dominio, se establece que el acompañamiento fue extemporáneo, cuando de la causa surgía que el certificado se encontraba glosado en otro expediente que tramitaba entre las mismas partes por ante el mismo juzgado, con lo cual queda evidenciado el rigorismo formal.

51.- “Sociedad Argentina de Compositores de música c/ crazy confiterías”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 02/03/2011.

Hechos del caso:La Corte Suprema de la provincia de Santa Fe rechazó la queja interpuesta contra la decisión de la sala cuarta de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Rosario que denegó el recurso de inconstitucionalidad deducido contra el fallo que hizo lugar al reclamo de aranceles —en concepto de derecho de autor— por la suma resultante de aplicar, al 20% de los ingresos de la confitería demandada, la alícuota del 16% pretendida por SADAIC.La máxima instancia jurisdiccional local sostuvo que: 1) la crítica de la actora sólo trasunta disconformidad y pretende reabrir el debate de una cuestión de derecho común; 2) no demuestra que la alzada se haya expedido sobre una pretensión no introducida por las partes; 3) la determinación de los extremos litigiosos y el alcance de las pretensiones resulta extraño al remedio; 4) no se evidencia en la resolución, al margen de su acierto, fracturas lógicas, exceso u omisión en sus términos ni gravedad institucional.SADAIC interpuso el recurso extraordinario cuya denegación origina la presente queja. En esa presentación señaló que la decisión resulta arbitraria y compromete a la

60

Page 61: Exceso Rigor Manifiesto.doc

legislación federal pues soslaya reglas sobre el derecho de autor, la “Convención de Berna” y la garantía del art. 17 de la Constitución Nacional, al tiempo que suscita un supuesto de trascendencia institucional al involucrar, entre otros aspectos, la responsabilidad internacional del Estado y la posibilidad de subsistencia económica de la propia organización autoral. También cuestionó por irrazonable la interpretación que realizó la Cámara del art. 4º del decreto 5146/69 por considerar que —a diferencia de lo sostenido por el tribunal— el porcentaje del 20% establecido en el precepto implica un tope arancelario y no una base sobre la que debe calcularse el arancel que fije SADAIC. En este sentido, precisó que la decisión reducía los ingresos de la entidad a la quinta parte y le impedía afrontar las regalías de autores y compositores por su creación artística, contradiciendo la legislación común y federal (leyes 11.723, 17.251, 17.648, decreto 5146/69).Que si bien, en principio, la procedencia o improcedencia de los recursos locales no es materia susceptible de revisión por la vía prevista en el art. 14 de la ley 48, en virtud del carácter fáctico y procesal de las cuestiones que suscita, cabe hacer excepción de tal premisa cuando la solución adoptada redunda en menoscabo del derecho de defensa del recurrente —en tanto frustra una vía apta para obtener el reconocimiento del derecho invocado, cuando lo decidido revela un exceso ritual manifiesto incompatible con el derecho de defensa en juicio y omite ponderar argumentos conducentes para una adecuada solución del litigio.En consecuencia, la Corte local no pudo soslayar, sin incurrir en un supuesto de arbitrariedad, que la cámara, con su interpretación literal, omitió examinar el contexto normativo en el que la alocución “afectar” se encontraba inserta, del que claramente se desprende que las previsiones del art. 4º del decreto 5146/69 disponen los topes máximos del arancel que la sociedad de autores puede aplicar y no las bases sobre las que deberá calcularse el referido arancel.Por todo lo expuesto, y de conformidad con lo dictaminado por la señora Procuradora Fiscal, corresponde hacer lugar a la queja, declarar admisible el recurso extraordinario y dejar sin efecto la sentencia impugnada con el alcance indicado ELENA I. HIGHTON de NOLASCO (en disidencia)- CARLOS S. FAYT - ENRIQUE SANTIAGO PETRACCHI – JUAN CARLOS MAQUEDA - E. RAÚL ZAFFARONI

DISIDENCIA DE LA SEÑORA VICEPRESIDENTA DOCTORA DOÑA ELENA I.HIGHTON de NOLASCOQue el recurso extraordinario cuya denegación origina la presente queja, es inadmisible (Art. 280 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación). Por ello, se desestima esta presentación directa y se da por perdido el depósito.ELENA I. HIGHTON de NOLASCO.

Conclusión: La cámara revela un exceso ritual manifiesto porque con su interpretación literal, omite examinar el contexto normativo en el que la alocución “afectar” se encontraba inserta, del que claramente se desprende que las previsiones del artículo 4º del decreto 5146/69 disponen los topes máximos del arancel que la sociedad de autores puede aplicar y no las bases sobre las que deberá calcularse el referido arancel.Lo cual vulnera el derecho de defensa en juicio.

52.- “Zubizarreta Jorge c/ Arce Elice Elsa y otros/ ejecución especial”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 24/05/2011

61

Page 62: Exceso Rigor Manifiesto.doc

Hechos del caso: El apelante presentó recurso de reposición contra el pronunciamiento del Tribunal que desestimó el recurso de queja por no haber cumplido con el recaudo previsto por el artículo 1º del reglamento aprobado por acordada 4/2007.

La recurrente alegó que si bien la copia del remedio federal adjuntada en el recurso de queja no cumplía con el requisito exigido por el artículo 1º del citado reglamento en cuanto excedía el número de renglones permitidos, sí lo hacía el original del escrito presentado ante la alzada, por lo que solicitó que se revea la decisión a fin de resguardar las reglas del debido proceso.

Sentencia de la Corte Suprema: consideró admisible dicho recurso debido a que “se ha acreditado debidamente -con la adjunción de la copia respectiva- que la apelación federal presentada ante la cámara satisfacía los recaudos exigidos por el art. 1 del reglamento aprobado por acordada 4/2007, por lo que a fin de no incurrir en un excesivo rigorismo formal que vulnere la garantía de un debido proceso, corresponde hacer lugar a la revocatoria planteada por la demandada”.

De conformidad con lo dictaminado con el Señor procurador General se hizo lugar al planteo presentado, resolviendo “en cuanto a los planteos que hacen al fondo del asunto, el recurso extraordinario, cuya denegación origina la presente queja, es inadmisible (Art. 280 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación)”.

Conclusión: La apelación Federal presentada ante la Cámara cumplía con todos los requisitos exigidos por el Art. 1 de la acordada 4/2007, para no incurrir en un exceso ritual manifiesto se hace lugar a la revocatoria planteada, para no vulnerar la garantía del debido proceso.

53.- "Guerrero Estela Mónica por sí y sus hijos menores c/ Rubén Leandro Insegna s/ muerte por accidente de trabajo”Corte Suprema de Justicia de la Nación - 02/03/2011.

Hechos del caso:Sentencia de la Corte Suprema: resolvió declarar procedente el recuso extraordinario interpuesto por la accionante, previsto en el artículo 14 de la ley 48, dejar sin efecto la sentencia apelada y ordenar que los autos vuelvan a su origen para que por quien corresponda, se dicte un nuevo pronunciamiento de acuerdo a las consideraciones del Sr. Procurador General que hizo suyas la mayoría del Alto Cuerpo por considerarlas adecuadas decidiendo según lo expuesto. Que el recurso extraordinario fue concedido por el Superior provincial, sólo en lo atinente a la materia federal, por considerar que se hallaban en juego derechos federales que, aunque no fueron expuestos o planteados prolijamente por la parte, no pueden desconocerse como tales -arts 14 bis, 19 y 75 inciso 22 de la Constitución Nacional. Asimismo resaltó jurisprudencia del Máximo Tribunal de la Nación en la materia que fuera invocada oportunamente por la actora, y dejada de lado por su parte al momento de resolver. Que al expresar agravios la recurrente afirma que al rechazar el Superior Tribunal local el recurso de casación deducido por la parte incurrió en un excesivo rigor formal, dejó a la peticionante en total desamparo de hecho y de derecho al privarla de percibir una justa indemnización por el

62

Page 63: Exceso Rigor Manifiesto.doc

daño producido y que violentó el principio iuris novit curia. Que en todas las instancias, y así también al conocer de la causa el  Superior Tribunal de Justicia provincial, se sostuvo como fundamento del rechazo un erróneo encuadramiento legal del reclamo en función de una normativa derogada, obviando de esta manera la regla general según la cual los jueces tienen no sólo la facultad sino también el deber de discurrir los conflictos y dirimirlos según el derecho aplicable, subsumiendo la realidad fáctica el las normas jurídicas pertinentes, destacando que la Corte ha puesto de relieve que la facultad de la regla iura novit curia no comporta un agravio constitucional y por ello aun cuando la actora sustentó su reclamo en la ley 23428, disposición derogada al tiempo de la demanda, la Excma. Corte dispuso que correspondía al juez de la causa fijar el marco jurídico conforme al principio iura novit curia siendo lo expuesto el fundamento esencial del fallo de la Corte en este caso.Que en fallos análogos el Alto Cuerpo puso de manifiesto el concepto según el cual los jueces al decidir aplican todo el orden jurídico y así cuando -como en el caso de autos - se invoque como fundamento de los hechos narrados una norma errónea o derogada corresponde al Juez conforme lo normado en el art. 34 Inc. 5º del C.P.C.C.N habiéndose expresado que "La regla general que prohíbe proceder de oficio es aplicable solamente a los hechos, pues el derecho los jueces deben aplicarlo aunque las partes no lo invoquen o lo hagan erróneamente Así el principio iura novit curia, que según se afirma es un aforismo que nace en la edad media de una manera muy humorística, cuando un abogado defendiendo a su cliente hablaba tanto que el juez tuvo que interrumpir y decirle: remítase a los hechos que yo conozco el derecho, es una obligación que ningún magistrado puede eludir al momento de sentenciar por ser uno de sus deberes esenciales A mayor abundamiento remarcamos que sobre el particular se ha dicho: "Entre los poderes que puede ejercer el órgano judicial se encuentra el principio de iura novit curia, regla que establece la facultad y el deber del juzgador de discutir los conflictos litigiosos y dirimirlos según el derecho vigente, calificando autónomamente la realidad fáctica y subsumiéndola en las normas que la rigen, con independencia de los fundamentos o argumentos jurídicos que enuncien las partes. En cuanto al límite que tiene este principio al tiempo de su aplicación es que no puede alterar  lo peticionado por la partes ni  los hechos por ellas invocados pues son asuntos que no son de su incumbencia, el magistrado debe ejercerlo dentro de sus justos límites ya que si fuera usado como una herramienta que habilite a los jueces a eludir el relato de los hechos vertido por las partes en sus escritos pondría en grave riesgo el principio de congruencia. En suma conforme resulta del fallo desarrollado, la doctrina de la Corte, y argumentos dados,  cuando en el caso la parte no invoca el derecho o lo hace en forma desacertada corresponde que el juez con fundamento en el principio iura novit curia supla la omisión o error, aplicando las normas jurídicas que se correspondan con los hechos llevados a su conocimiento y decisión.

Conclusión: Al rechazar el Superior Tribunal local el recurso de casación deducido por la parte incurrió en un excesivo rigor formal, ya que dejó a la peticionante en total desamparo de hecho y de derecho al privarla de percibir una justa indemnización por el daño producido y que violentó el principio iuris novit curia.

Conclusión de Trabajo Práctico.

63

Page 64: Exceso Rigor Manifiesto.doc

En el presente trabajo ponemos de manifiesto que lo arbitrario surge al aplicar los jueces, de manera manifiesta, las formas excesiva, injustificada, ciega e innecesaria, las formalidades dentro de un proceso judicial.

Si bien el fin de estas formalidades es poner orden en el proceso, un orden que asegure a las partes un debido proceso, que respete sus garantías y derechos, y que culmine en una decisión conforme a derecho, lo que se resalta en este presente trabajo de investigación es el modo en que las formas son utilizadas, atendiendo únicamente a su texto, haciendo de ellas una aplicación mecánica, olvidándose el fin por el cual ellas fueron creadas.

A lo largo del examen de 53 fallos, y resaltando lo que la Corte manifestó en la causa "Industrias Camporesi SACIFI", que la función judicial no se agota en la letra de la ley con olvido de la efectiva y eficaz realización del derecho, para ello debe atenderse antes que a un criterio formalista, a la vigencia de los principios que ampara la Constitución Nacional;

Y así como también en autos "Manuel Gago v. Ferrocarriles Argentinos", que es deber de los jueces "custodiar las formas a que deben ajustarse los procesos, atendiendo en todo momento al fin último a que ellos se enderezan: contribuir a la más efectiva realización del derecho".

Es por ello que encontramos de importante valor esta herramienta sanativa legal, para que en cada caso se pueda acercar cada vez más a la verdad material.

64

Page 65: Exceso Rigor Manifiesto.doc

BIBLIOGRAFIA

-Barone Lorenzo, Recurso Extraordinario, 1ra. Edición, Alveroni Ediciones, Córdoba, 2006.

-Baudino María V. y Araya Romina S., El excesivo rigor formal como manifestación del abuso del proceso, elDial.com –DC16CF, Publicado el 26/09/11.

-Cayuso, Susana, El exceso ritual: necesidad de equilibrio entre el derecho de fondo y de forma, LL 1991-B, 137 –LLC 1991, 402.

-Garay, Alberto, El recurso extraordinario por sentencia arbitraria. Propuesto para un manejo más ágil. Sup. Const. 2010 (agosto), 27.

-Palacio, Lino Enrique, El recurso Extraordinario Federal, Teoría Técnica, Abeledo Perrot, 3ra. Edición actualizada.

-Spota, Alberto Antonio, Recurso Extraordinario, Estado y Evolución. Actual de la Jurisprudencia. Arbitrariedad – Certionari.

65