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CONSIDERACIONES ETICAS, MEDICAS Y LEGALES. OBJETIVOS: Analizar los antecedentes jurídicos nacionales e internacionales sobre el derecho a la salud. Identificar las principales situaciones operativas que pueden trascender a un ámbito jurídico. Conocer las diversas legislaciones que intervienen en la labor del Técnico en Urgencias Médicas. Señalar procedimientos jurídicos para el Técnico en Urgencias Médicas ante una autoridad judicial. Señalar la importancia de llenar eficazmente el informe escrito de servicio (FRAP) para comprobar documentalmente aspectos legales en atención prehospitalaria. INTRODUCCIÓN “Non est ad astra mollis e terris via” No hay camino fácil de la tierra a las estrellas. Las consideraciones médicas, legales y éticas son muy importantes en la vida del TUM no importa si está trabajando o descansando. Tal vez en este momento ya estas formulando algunas preguntas: ¿Debo detenerme a tratar a una víctima de un accidente aunque no esté en servicio?, ¿Debo dar información acerca de mi paciente a un abogado por el teléfono?, ¿Puedo dar cuidado a un niño cuando no haya un adulto presente?. Puedes comenzar a preguntarte si eres capaz de ofrecer atención de emergencias sin ser demandado. Para contestar estas preguntas hay que considerar el alcance de la práctica del TUM, las indicaciones para proceder, los aspectos del consentimiento del paciente y de la responsabilidad de actuar así como de otros factores. EL ÁMBITO DE LA PRÁCTICA La atención prehospitalaria de emergencia ha cambiado significativamente desde sus inicios. Una de las cosas que ha mejorado mucho es la calidad de entrenamiento que recibe el personal de emergencias hoy en día. El público y profesionales del cuidado de la salud así como el director médico de su SMU esperan a un TUM-B competente, que comprende y acepta su responsabilidad legal y ética hacia el paciente, sin embargo, en la labor cotidiana del TUM en escenarios urbanos enfrentará diversas situaciones que involucran consecuencias jurídicas y la probable comisión de delitos en los lugares que acuda a brindar su

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CONSIDERACIONES ETICAS, MEDICAS Y LEGALES.

OBJETIVOS: Analizar los antecedentes jurídicos nacionales e internacionales sobre el derecho a la salud. Identificar las principales situaciones operativas que pueden trascender a un ámbito jurídico. Conocer las diversas legislaciones que intervienen en la labor del Técnico en Urgencias Médicas. Señalar procedimientos jurídicos para el Técnico en Urgencias Médicas ante una autoridad judicial. Señalar la importancia de llenar eficazmente el informe escrito de servicio (FRAP) para comprobar documentalmente aspectos legales en atención prehospitalaria.

INTRODUCCIÓN “Non est ad astra mollis e terris via”

No hay camino fácil de la tierra a las estrellas. Las consideraciones médicas, legales y éticas son muy importantes en la vida del TUM no importa si está trabajando o descansando. Tal vez en este momento ya estas formulando algunas preguntas: ¿Debo detenerme a tratar a una víctima de un accidente aunque no esté en servicio?, ¿Debo dar información acerca de mi paciente a un abogado por el teléfono?, ¿Puedo dar cuidado a un niño cuando no haya un adulto presente?. Puedes comenzar a preguntarte si eres capaz de ofrecer atención de emergencias sin ser demandado. Para contestar estas preguntas hay que considerar el alcance de la práctica del TUM, las indicaciones para proceder, los aspectos del consentimiento del paciente y de la responsabilidad de actuar así como de otros factores.

EL ÁMBITO DE LA PRÁCTICA La atención prehospitalaria de emergencia ha cambiado significativamente desde sus inicios. Una de las cosas que ha mejorado mucho es la calidad de entrenamiento que recibe el personal de emergencias hoy en día. El público y profesionales del cuidado de la salud así como el director médico de su SMU esperan a un TUM-B competente, que comprende y acepta su responsabilidad legal y ética hacia el paciente, sin embargo, en la labor cotidiana del TUM en escenarios urbanos enfrentará diversas situaciones que involucran consecuencias jurídicas y la probable comisión de delitos en los lugares que acuda a brindar su

ayuda, o en su caso que el mismo TUM sea el presunto responsable de dichos delitos.

RESPONSABILIDADES LEGALES Por lo general, las leyes identifican el ámbito de la práctica del TUM-B con las acciones y el cuidado que legalmente están permitidas. Por ejemplo, la administración de oxígeno bajo las circunstancias apropiadas se encuentra incluida en el ámbito de la práctica del TUM-B, así como el control de las hemorragias y la reanimación cardiopulmonar. Sin embargo, la sutura de una herida no lo es y por lo tanto se considera ilegal, aún cuando el TUM-B sepa realizarla. Entre las fuentes empleadas para definir el ámbito de la práctica del TUM-B se encuentran los “Estándares Básicos de formación para el Profesional Técnico en Urgencias Médicas- Básico” de la Secretaría de Salud Federal, el cual refleja la currícula mínima que se propone para una aplicación en la República Mexicana. Otra fuente que se debe aplicar para definir el ámbito de la práctica del TUM- Básico son los protocolos autorizados por el director médico estatal y federal quien dentro del ámbito de la práctica en el estado, establece los parámetros bajo los cuales trabajarás, siguiendo las indicaciones prehospitalarias locales, lo que incluye la comunicación telefónica o por radio.

ANTECEDENTES. El contenido del artículo 1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos señala: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y en derechos, y dotado como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternamente los unos con los otros”. La Carta de la Organización de las Naciones Unidas aprobada dentro del marco de la Conferencia de San Francisco el 26 de junio de 1945 y firmada por 50 países, es la piedra angular que creó una importante conciencia sobre la importancia de los derechos humanos, así como de los derechos políticos, económicos, sociales y culturales, entre los cuales el derecho a la salud ocupó un lugar importante. El derecho a la salud de todos los mexicanos se encuentra plasmado en la máxima ley de México, siendo esta la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos la cual señala en su artículo 4: “Toda persona tiene derecho a la protección de la salud”. Es necesario señalar que el párrafo tercero del artículo 4° constitucional es la médula del programa de salud del Estado mexicano dirigido a reducir la desigualdad social existente, generar empleo, elevar los índices nutricionales, ampliar los niveles de educación, racionalizar los patrones de consumo, modificar las condiciones sociales que propician los accidentes y las enfermedades, mejorar

los controles sanitarios, modernizar a la Secretaría de Salud y al Sector Salud, abatir el mercantilismo propio de una sociedad capitalista y hacer más racional el proceso de desarrollo nacional. La fracción XVI del artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos señala la participación de la Federación y los Estados en materia de salubridad general y la legislación internacional, que de conformidad con lo dispuesto por el artículo 133 constitucional han pasado a ser ley suprema del país a pesar de las disposiciones en contrario que pueda haber en las Constituciones o leyes de los Estados, establecen el marco general en el cual el Estado Mexicano organiza y vigila la prestación de los servicios de salud en todo el país. De igual manera se señala en el Reglamento de la Ley General de Salud en materia de prestación de servicios de atención médica lo siguiente: La atención médica deberá llevarse a efecto de conformidad con los principios científicos y éticos que orientan la práctica médica. Con el fin de dar un espacio formal y continuidad de la implementación de acciones de colaboración para la formación de Recursos Humanos, en 1983 se crea la Comisión Interinstitucional para la Formación de Recursos Humanos para la Salud (CIFRHS) como órgano asesor de los sectores educativo y de salud, la que identificaría a su vez, los puntos en los que deberían colaborar de manera más estrecha en la materia. De ésta Comisión en 1984 se derivaron cuatro Comités, uno de ellos es el Comité de Formación de Personal Técnico (CFT). En nuestro país hoy existe un órgano rector de la salud llamado Consejo de Salubridad General cuyo funcionamiento se encuentra plasmado en el artículo 17 de la Ley General de Salud, algunas de sus competencias son: Fracción III: Opinar sobre programas y proyectos de investigación científica y de formación de recursos humanos para la salud. Fracción IV: Opinar sobre el establecimiento de nuevos estudios profesionales, técnicos, auxiliares y especialidades que requiera el desarrollo nacional en materia de salud. En estas dos fracciones se establece que sí existe de alguna manera el fundamento para regular y comenzar a legislar el trabajo del TUM y así contar con una base legal pero también con principios científicos y tecnológicos que permitan su reconocimiento en materia de salud nacional. La ley General de Salud establece el concepto de servicios de salud en su artículo 23: Para los efectos de esta ley, se entiende por servicios de salud todas aquellas acciones realizadas en beneficio del individuo y de la sociedad en general, dirigidas a proteger, promover y restaurar la salud de la persona y de la colectividad. Así mismo, el Reglamento de la Ley General de Salud en materia de Prestación de Servicios de Atención Médica define en su artículo 7 fracción I a la atención

médica como “ El conjunto de servicios que se proporcionan al individuo, con el fin proteger, promover y restaurar su salud”. Es necesario también señalar que el mismo reglamento en su artículo 10 señala que serán considerados establecimientos para la atención médica: Fracción V inciso B: Las ambulancias de urgencias... mismas que deberán sujetarse a las normas técnicas correspondientes... La Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y la Ley General de Salud señalan que corresponde a la Secretaría de Salud establecer y conducir la política nacional en materia de asistencia social, servicios médicos y salubridad general, así como vigilar su cumplimiento. El ejercicio médico, la prestación de servicios de salud, los derechos y obligaciones de los usuarios o pacientes, así como la responsabilidad de los médicos e instituciones de salud públicas y privada se encuentran reguladas por los siguientes ordenamientos: Ley General de Salud. Ley General de Profesiones. Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección del Ambiente. Ley de Responsabilidades de los Servicios Públicos, Federales y Locales. Ley del Sistema Nacional de Asistencia Social. Ley de Instituciones de Asistencia Privada para el Distrito Federal. Ley del Seguro Social. Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado. Ley del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas Leyes Estatales de Salud. Códigos Civiles. Códigos Penales. Reglamento de la Ley General de Salud en materia de Prestación de Servicios de Atención Médica. Es necesario señalar que no existe una normatividad específica que regule el trabajo del TUM como profesional de la salud en la medicina prehospitalaria, ya que este aspecto es regulado de forma errónea por legislaciones estatales de protección civil, de seguridad pública o reglamentos de salud que no dan un enfoque específico de la función del TUM en la sociedad pues no se reconoce como figura jurídica dentro de un marco legal. De igual manera no existe un régimen especial del TUM en la legislación laboral del país por lo que esta situación se presta a que haya una falta de claridad como profesional de la salud en México, así como una tendencia a la falta de criterios generales para establecer salarios que vayan de acuerdo a las necesidades y riesgos que corre el TUM en su ámbito de práctica. Sin embargo, la realidad nacional nos establece que existimos como Técnicos en Urgencias Médicas ya sea de forma voluntaria o remunerada y que llevamos a cabo funciones plasmadas en un programa nacional de salud, por tal virtud, son derechos del TUM, contar con los recursos físicos, tecnológicos y humanos que requiere para su práctica profesional con fundamento en los reglamentos, normas,

técnicas y leyes estatales vigentes. De no existir lo anterior no se le puede exigir al TUM que realice de manera eficaz su trabajo como profesional de la salud, pues las actividades que realiza son basadas en avances científicos dirigidos a la salud, la cual no puede atenderse con medidas improvisadas o buenas voluntades únicamente. Así mismo el TUM tiene derecho a abstenerse de garantizar resultados de la atención médica que ha brindado ante la gravedad de la lesión o enfermedad del paciente que trata. Es debido a esto que no existe una organización que defina a los servicios de urgencias médicas en México como parte del sector salud nacional, por lo que se hace la recomendación de conocer los protocolos locales de atención prehospitalaria así como la legislación municipal y estatal que de alguna manera regula los procedimientos y funcionamiento del Sistema de Atención Prehospitalaria de la Cruz Roja Mexicana. Uno de los avances que existen en torno a la regulación de los servicios médicos de urgencia lo comprende la Norma Oficial Mexicana NOM-237-SSA1-2004 que define lo que es una ambulancia aérea y terrestre, sus requisitos de funcionamiento así como la participación del Técnico en Urgencias Médicas. De igual manera se señala la necesidad de que el TUM conozca el contenido de la Norma Oficial Mexicana NOM-168-SSA1-1998 que se refiere al expediente clínico del paciente, y la Norma Oficial Mexicana NOM-190-SSA1-1999 sobre violencia familiar. De igual manera es preciso señalar como referencia el contenido del documento denominado PPrreehhoossppiittaall TTrraauummaa SSyysstteemmss.. WWoorrlldd HHeeaalltthh OOrrggaanniizzaattiioonn.. GGeenneevvaa.. 22000055.. EEnn ddiicchhoo ddooccuummeennttoo ssee ppllaassmmaann llaass nneecceessiiddaaddeess ddee llooss ssiisstteemmaass pprreehhoossppiittaallaarriiooss qquuee aaúúnn ssee eennccuueennttrraann eenn pprroocceessoo ddee rreeffoorrmmaass aaddmmiinniissttrraattiivvaass yy ooppeerraattiivvaass.. Es así que se hace la observación de que el TUM lleve a cabo protocolos autorizados únicamente por su Dirección Medica y que se encuentren fundamentados por estudios científicos ya sea en México o en el extranjero con el fin de tener medios de prueba que justifiquen sus acciones, ante esta situación deberá buscarse la manera de que dichos protocolos o directrices de atención cuenten con un registro o aval de las autoridades sanitarias locales. De igual manera el Técnico en Urgencias Médicas actúa con el fin de salvaguardar el bien jurídico supremo y regulado en las leyes penales, siendo este la vida de las personas, situación que constituye un deber de todos los mexicanos pero que por desconocimiento o miedo de la población a quedar involucrada en una investigación penal no lo hacen y evitan dar atención de primeros auxilios como Primeros Respondientes mientras se espera la llegada de la unidad móvil prehospitalaria En relación a las Comisiones Estatales y Nacionales de Derechos Humanos podrán conocer de quejas contra Técnicos en Urgencias Médicas de Cruz Roja Mexicana, sin embargo ante la figura jurídica de institución de asistencia privada

que nos regula, dichas comisiones no tienen una injerencia directa toda vez que su función es de investigar de violaciones de derechos humanos cometidas por servidores públicos federales o estatales contra ciudadanos, por lo que dichas quejas contra miembros de Cruz Roja Mexicana son turnadas a la autoridad respectiva, en su caso el ministerio público o comisiones estatales de vigilancia de los servicios de salud, por ejemplo. Otra de las legislaciones que nos ocupa es la Ley General de Salud en los artículos 343 y 344 que señala los momentos en que ocurre la pérdida de la vida y la muerte cerebral, lo anterior sin dejar a un lado el contenido de las legislaciones estatales que en materia de salud existen y que deben ser consultadas por el TUM para un mayor conocimiento del ámbito jurídico que lo regula. Pérdida de la Vida Artículo 343.- Para efectos de este Título, la pérdida de la vida ocurre cuando: I. Se presente la muerte cerebral, o II. Se presenten los siguientes signos de muerte: a. La ausencia completa y permanente de conciencia; b. La ausencia permanente de respiración espontánea; c. La ausencia de los reflejos del tallo cerebral, y d. El paro cardiaco irreversible. Artículo 344.- La muerte cerebral se presenta cuando existen los siguientes signos: I. Pérdida permanente e irreversible de conciencia y de respuesta a estímulos sensoriales; II. Ausencia de automatismo respiratorio, y III. Evidencia de daño irreversible del tallo cerebral, manifestado por arreflexia pupilar, ausencia de movimientos oculares en pruebas vestibulares y ausencia de respuesta a estímulos nociceptivos. Se deberá descartar que dichos signos sean producto de intoxicación aguda por narcóticos, sedantes, barbitúricos o sustancias neurotrópicas. Los signos señalados en las fracciones anteriores deberán corroborarse por cualquiera de las siguientes pruebas: I. Angiografía cerebral bilateral que demuestre ausencia de circulación cerebral, o

II. Electroencefalograma que demuestre ausencia total de actividad eléctrica cerebral en dos ocasiones diferentes con espacio de cinco horas. Es necesario señalar que el TUM no es un médico especialista que pueda determinar la hora de la muerte de una persona por lo que se recomienda evitar declaraciones y comentarios acerca de dicha situación lo único que puede determinar el TUM-B es la ausencia de ABC en el paciente y la falta de respuesta al tratamiento que se le está aplicando de acuerdo a los protocolos locales En relación a las comisiones de arbitraje médico las mismas tienen el carácter de mediadoras en un conflicto médico con el fin de que se llegue a un acuerdo entre las partes que intervienen, sin existir una intervención de la autoridad judicial en el proceso de negociación. De igual manera es importante establecer lo que se entiende como delito, siendo este un acto u omisión que sancionan las normas penales (Código Penal Federal, artículo 7) Por lo tanto, serán sancionados actos de “hacer o dejar de hacer” en la sociedad y específicamente en la conducta de TUM como profesional de la salud.

• Algunas de las situaciones más relevantes en las cuales se ve involucrado un TUM son:

Accidentes con varios lesionados Maltrato infantil Choques vehiculares Suicidios Atropellamientos Allanamiento de morada Lesiones Delitos sexuales Aborto Abandono de personas Homicidio Robo Daños Discriminación Delitos de peligro de contagio para la vida o la salud de las personas Ataques a las vías de comunicación Terrorismo Solicitud de dinero para brindar atención médica a una persona que lo requiere Delitos señalados por las leyes generales o estatales de salud. Aquellos delitos considerados dentro de Delincuencia Organizada, a los que el Servicio prehopitalario de Cruz Roja Mexicana responda como auxiliar de los servicios de salud estatales o federales.

De igual forma, el contenido de los delitos que enuncian las leyes podrán variar de Estado a Estado de nuestro país, ya que cada uno de ellos es autónomo en la creación de sus propias normas, variando en el castigo y reparación del daño como medida de subsanar la afectación a las víctimas. Por lo anterior, uno de los objetivos de este capítulo es que se señalen aspectos legales de índole general y que son aplicables a nivel nacional en toda la legislación penal mexicana y que el TUM conozca el contenido de su legislación local como parte de su proceso continuo de capacitación.

Responsabilidad para Actuar El concepto conocido como responsabilidad para actuar se refiere a tu obligación para dar atención en emergencias. Legalmente mientras te encuentras en servicio estas obligado a dar la atención a un paciente que lo requiere y lo acepta, además de ofrecer la mejor atención de emergencia posible con base en tus habilidades y entrenamiento, pero se debe de tomar en cuenta que no estamos obligados a lo imposible, es decir, la primera prioridad somos nosotros como personal de urgencias médicas por lo que no debemos realizar acciones temerarias o sin la presencia de las autoridades policíacas quienes en verdad y con fundamento en las leyes locales y federales sí tienen la obligación de resguardar la seguridad en el lugar de un accidente así como preservar en lo posible la evidencia que en ella se encuentra. Como ejemplo de lo anterior se señala el contenido del artículo 17 párrafo VIII de la Ley de Seguridad Pública del Distrito Federal que establece: Los elementos de los Cuerpos de Seguridad Pública del Distrito Federal, independientemente de las obligaciones que establecen la Ley Federal de Responsabilidades de los Servicios Públicos y otras leyes especiales deberán: VIII. Prestar el auxilio que les sea posible a quienes estén amenazados de un peligro personal, y en su caso, solicitar los servicios médicos de urgencia cuando dichas personas se encuentren heridas o gravemente enfermas, así como dar aviso a sus familiares o conocidos de tal circunstancia. En caso de que no te encuentres en servicio, en la mayoría de los Estados no tienes mayor obligación de la que posee cualquier otro ciudadano. Legalmente, si estás fuera de un horario de guardia, puedes proceder de la siguiente manera: Pararte y ofrecer ayuda a la victima del accidente en la escena. Pasar de largo la escena y llamar por teléfono para pedir ayuda en cuanto puedas. Pasar de largo la escena y no intentar llamar para pedir ayuda. Es de notarse que en algunos Estados si se obliga a los TUM’s a detenerse y ofrecer ayuda aún cuando no estén en servicio. Si te detienes a ayudar , entonces asumes ciertas responsabilidades legales. Por ejemplo, una vez iniciada la atención, no puedes abandonar la escena hasta que sea relevado por alguien con la misma experiencia que tú o incluso mayor, que exista un grave riesgo de resultar lesionado o perder la vida si continuas en ese lugar o hasta que una

autoridad de seguridad pública te ordene retirarte. También existe la responsabilidad mal entendida por la población de asegurar cualquier artículo personal que recojas del paciente. Por lo anterior se recomienda basarse en las leyes locales para determinar los protocolos de respuesta ante una llamada de urgencia con el fin de que el TUM-B no sea responsable de tener que atender a una persona a pesar de que las condiciones de escenario y seguridad sean adversas. En cierta medida se debe considerar el cambio de uniforme al término de la guardia, pues a veces resulta contraproducente salir a la calle terminando la guardia aún con el uniforme puesto.

Leyes del Buen Samaritano La primera de estas leyes entró en vigor en California, Estados Unidos de América, en 1959, específicamente para proteger de cualquier responsabilidad a “personas con licencia” (como médicos y cirujanos) quienes de buena fe proporcionan atención médica en una emergencia, dichas leyes los protegen de daños civiles como resultado de cualquier acto de omisión. Muchos otros estados han seguido este ejemplo con leyes propias, algunas de las cuales de manera específica se refieren a los prestadores de atención prehospitalaria de emergencia. Básicamente la Ley del Buen Samaritano ofrece protección a la persona de cualquier responsabilidad para aquellos actos realizados de buena fe y sin negligencia severa. Esto quiere decir que la persona que hace la demanda tiene que probar que la atención dada fue substancialmente menor del estándar de atención esperado de cualquier otro TUM-B con el mismo nivel de capacitación. (Esto se conoce como la prueba de persona razonable.) Sin embargo, en México no existe como tal una Ley del Buen Samaritano como ocurre en Estados Unidos, ya que la legislación penal y civil no señala como tal un apartado específico sobre la buena fe en la ayuda que se le presta a una persona herida o enferma, se establece únicamente en los códigos penales, la obligación de todo ciudadano de prestar ayuda a una persona. El aspecto legal a analizar en esta ámbito es que cada Estado tiene sus propios códigos civiles y penales, así como leyes locales de salud y en ninguno de ellos se establece la obligación del TUM-B para realizar procedimientos de emergencia médica en un escenario prehospitalario sin tener una licencia médica, tampoco proveen alguna forma de inmunidad para las enfermeras, médicos, supervisores u otro personal que da indicaciones a los TUM-B’s por radio o teléfono. Las leyes que gobiernan a los servicios públicos y privados puedan variar. Asegúrate de conocer las leyes establecidas en tu localidad. La mejor defensa contra las demandas civiles o denuncias penales es la prevención. Procura proporcionar el mejor cuidado médico con base en tus habilidades, haciendo ni más ni menos de lo que permite el ámbito de tu práctica y tu dirección médica directa, si es por medio de órdenes médicas en línea a través

de radio o teléfono) ó dirección médica indirecta si es por medio de protocolos y guías locales de atención prehospitalaria avaladas autorizadas. Si siempre trabajas teniendo en mente el bienestar de tu paciente, muy raramente o nunca, tendrás problemas.

Dirección Médica Tu derecho de desempeñarte como TUM-B está condicionado por la dirección médica. Cuando proporciones un cuidado en emergencias, debes: Seguir los lineamientos y protocolos, aprobados por la dirección médica. Establecer comunicación telefónica o por radio con la dirección médica. Comunicarte de manera clara y completa con la dirección médica y seguir las órdenes dadas en respuesta a tu llamada. Consultar con la dirección médica ante cualquier duda acerca de tu ámbito de práctica o de la forma de proceder. Muchas áreas tienen también protocolos para la cooperación entre las fuerzas se seguridad (policía) y el personal del SMU. RESPONSABILIDADES ÉTICAS Un código de ética es una lista de conducta ideal. El “Código de Ética” para los TUM’s fue emitido en los Estados Unidos de América por la Asociación Nacional de Técnicos en Emergencias Médicas (NAEMT) en 1978. Básicamente, si el bienestar del paciente es puesto sobre todas las cosas cuando se le provee atención médica, raramente se cometerá un acto no ético. Entre las responsabilidades éticas se incluyen: Servir a las necesidades del paciente con respeto por la dignidad humana, sin importar nacionalidad, raza, género, credo o posición social. Mantener las habilidades al mas alto nivel. Demostrar respeto por las habilidades de otros profesionales médicos. Mantenerse al día sobre los cambios en los SMU que afectan la atención al paciente. Asuma responsabilidad en la definición y mantenimiento de estándares profesionales. Revisar críticamente su desempeño, buscando formas para mejorar tiempos de respuesta, resultados del paciente y comunicación. Asuma responsabilidad por las acciones profesionales individuales y juicios emitidos. Reportar con honestidad. Mantener confidencialidad sobre toda la información obtenida en el curso del trabajo profesional a menos que sea requerido por ley el divulgar dicha información. Trabajar en armonía con otros TUM’s, enfermeras, médicos y otros miembros del equipo de atención médica.

CONSIDERACIONES SOBRE EL CONSENTIMIENTO Y LA NEGATIVA DE ATENCIÓN DEL PACIENTE INDICACIONES PARA PROCEDER Tu puedes ser llamado a atender pacientes en estados terminales. En algunos casos el paciente puede solicitar –y un médico puede ordenar- que no tengan lugar procedimientos de reanimación si el corazón y los pulmones dejan de funcionar. Legalmente, la indicación de “No Reanimar”, no es jurídicamente clara y reconocida en nuestro país. Esto documentaría el deseo del paciente enfermo crónicamente o terminal de no ser reanimado y permitiría legalmente al TUM-B no efectuar la reanimación. Una indicación para proceder tiene que ser acompañada usualmente por instrucciones escritas por un médico (verificar el protocolo local). Resulta parte de la revisión de estos pacientes el hecho de solicitar los documentos o el expediente médico con el que fue dado de alta del hospital que lo trató (alta por máximo beneficio, significa que como última opción de la institución de salud que le atiende proporciona un alta médica no debido a su mejoría o a la obtención de su estado de salud, sino como beneficio para el paciente de finalizar su enfermedad, ya sea por su estado crónico o por ser de carácter terminal en compañía de las personas que el desee y no internado en una sala hospitalaria) y señala el padecimiento y grado de avance de la enfermedad, así como las medidas que deben de tomarse con ese paciente cuando su situación empeora, el consejo es verificar ese contenido, tomar los datos del médico tratante para establecerlo en el parte de atención (FRAP) y obtener información de los familiares o amigos que se encuentren en el lugar. Una respuesta que es común que se presente es la negación por parte de la familia a la gravedad del paciente que se esta tratando, incluso ya cuentan con una explicación médica que les dice que su paciente ya se encuentra en una situación terminal, situación que es difícil de entender en los últimos momentos de esa persona, por lo que solicitan el servicio de ambulancia y consideran que es nuestra obligación trasladar a su paciente de vuelta una hospital. Se debe considerar que somos un servicio de medicina prehospitalaria de urgencias y por lo tanto atendemos situaciones que ponen en riesgo la vida de personas heridas o enfermas que tienen posibilidades de sobrevida de acuerdo a los protocolos establecidos y autorizados por la dirección médica, ya que el número de ambulancias es menor al requerido por la población se tiene la necesidad de señalar prioridades de atención prehospitalaria, toda vez que los gobiernos estatales y federal no cuentan con la cobertura total de este servicio de manera adecuada y el ISSSTE y el IMSS quienes atienden a una buena parte de estos pacientes no cubren sus necesidades de ambulancia de traslado o de urgencia por la falta de recursos. Cuando situaciones así son presentadas, es necesario determinar bajo el mejor de los criterios su validez, basados en varios niveles de enfermedades crónicas o estados terminales. Algunos pacientes pueden solicitar que sean efectuados solo ciertos cuidados de emergencia o procedimientos para el confort. Típicamente, la administración de

oxígeno es considerada una medida estándar de confort y de soporte para el paciente. Asegúrate de conocer y aprender el protocolo local y de conocer el funcionamiento de los servicios de salud locales y federales en tu población.. Las indicaciones para proceder están llenas de problemas para los proveedores prehospitalarios, en este aspecto es necesario señalar que la eutanasia se encuentra prohibida en México, pues se equipara al delito de homicidio. Primero, por su naturaleza, ya que en una situación prehospitalaria se cuenta con poca información de la persona y su enfermedad o padecimiento a diferencia de un ambiente institucional, como en un asilo u hospital, donde los prestadores de cuidados médicos están prevenidos sobre esto y conocen al médico que esta tratando al paciente y que firma las indicaciones médicas. Adicionalmente, muchas indicaciones para proceder requieren que más de un médico verifique la condición del paciente –un requisito que puede ser difícil de cumplir en el campo, aún si la indicación para proceder es localizada. Finalmente, el tiempo tomado para verificar una indicación para proceder puede quitar preciosos momentos al intentar salvar la vida del paciente. Ante esta serie de legislaciones que se presentan y los diversos tipos de urgencias que deberá de atender un TUM se recomiendan los siguientes puntos: Apuntar en el área de observaciones nombres y datos de testigos (familiares, policías, amigos del lesionado o enfermo, etc.,) que presenciaron las acciones del TUM en la escena con el fin de corroborar el trabajo y los esfuerzos realizados y así fundamentar todo lo que se hizo. En el caso de negase el servicio o en la situación anterior, preferentemente y de acuerdo a las posibilidades y seguridad de lugar además de la firma de la persona acompañarse su nombre escrito por el mismo y que reafirma que estuvimos en el lugar, ya que es muy fácil dibujar un garabato que ante un proceso judicial podría negarse, sin embargo con el nombre puesto de puño y letra de la persona estamos en la posibilidad de incluso solicitar un prueba grasfoscópica a nuestro favor que nos permita comprobar que se trata de los mismos trazos de la persona que dice que no firmo nada. Incluso se da la recomendación de que en el caso de personas que no saben leer o escribir plasmen su huella digital en el FRAP. En caso de pacientes muy graves y escena caóticas o peligrosas es primordial el trabajo en equipo para recabar la mayor cantidad de datos acerca de lo que ocurrió en el lugar en el menor tiempo posible. De igual manera es de vital importancia anotar en el reporte escrito de atención el número de patrulla que acudió al lugar esto con el fin de comprobar que hubo personal de seguridad publica en el accidente o escenario y en el caso de ser necesario ofrecer como testigos ante una autoridad judicial a los oficiales de policía que acudieron a ese llamado. Salvo en caos excepcionales en que se tenga que hacer entrega a alguna autoridad de las pertenencias del paciente se deben poner datos generales de las cosas que recogemos de la persona, ya que se podría favorecer que sus pertenencias sean cambiadas por otras de inferior calidad o con otras características y se nos acuse de robo o de otra conducta delictuosa. Por lo

anterior, si se entregan a una autoridad, personal administrativo de los hospitales o familiares y amigos se deberá de hacer una relación específica de las cosas, debiendo apuntarse en el parte de atención con nombre y firma de la persona que se hace responsable. En situaciones con armas de fuego se debe evitar manipularlas ya que no conocemos su funcionamiento o mecanismo y eso puede tener como consecuencia lesiones o la muerte para el TUM. Asimismo se debe evitar manipular armas punzo cortantes, en el caso de que así sea deberán ser depositadas en bolsas de plástico y posteriormente selladas, manteniéndolas alejadas del personal para evitar accidentes, mismo criterio que debe ser seguido con armas de fuego. En escenarios como este es recomendable la presencia de un policía con el propósito de que sea él quién se haga cargo de las posibles armas que sean encontradas en el paciente. Evita ingresar solo a los lugares oscuros o que de acuerdo a la evaluación de la escena representen un peligro para la seguridad del TUM, ya que pueden sufrir una agresión y no contarán con los recursos necesarios para enfrentarla por lo que debes trabajar en equipo y en colaboración con las autoridades policíacas, otra manera de poder ingresar a estos lugares con un mayor rango de seguridad es involucrando a testigos o vecinos del lugar pidiéndoles que nos sirvan de guía al lugar de la urgencia. Hoy es parte fundamental de la capacitación del TUM el curso de Acceso Seguro, que no sólo involucra casos como este, sino también el análisis de situaciones de índole político y social que hacen insegura la escena de un accidente para un TUM. Cuando ingreses a casas procura que sea en presencia de testigos, esto con el fin de disminuir las posibles acusaciones de daños, robo o allanamiento de morada. Procura buscar todas las salidas posibles para el caso de tener que abandonar rápidamente ese lugar. De igual manera se recomienda que en el caso de que el paciente lleve entre sus cosas pastillas o sustancias que se presuman puedan ser drogas, estas deberán ser puestas en bolsas de plástico y sellarlas para entregarlas a la autoridad respectiva o médico responsable en su caso. Asimismo no nos consta que se trate de drogas ilícitas por lo que nunca asumiremos que son tales por lo que las reportaremos como pastillas de colores, bolsa o sobres con polvo, contenedores de plástico con líquido, etc. En las escenas con varios lesionados y presencia de cadáveres será necesario moverlos con el fin de obtener acceso a las personas heridas, por lo que se procederá a realizar los movimientos requeridos para tal fin, ya sea utilizando levantamientos en bloque, sillas ó una extracción rápida en la situación de choques vehiculares, siempre respetando la integridad del cadáver, colocándolo en lugares que permitan una libertad de movimiento, ya que los cadáveres no serán objeto de propiedad y siempre serán tratados con respeto, dignidad y consideración. (Artículo 346. Ley General de Salud) En zonas de alto riesgo se debe esperar la llegada de los cuerpos policiacos para que aseguren el área, esto con el fin de no convertirse el TUM en victima y problema y evitar el daño a posible evidencia o material sensible que involucra estudios criminalísticos.

En lo referente a la atención prehospitalaria brindada a una persona de la cual se tiene duda a cerca del padecimiento real que tiene, es mejor trasladarlo a un hospital para su valoración que dejarlo en el lugar para que después seamos llamados al mismo servicio pero ahora con el paciente en un situación medica más critica colocándonos en un caso de omisión de socorro o ayuda, Sin embargo, esto se puede confundir con uno de los problemas que enfrenta el SMU en México y que es la falta de ambulancias y personal paramédico que puedan dar atención a la gran cantidad de personas que se atienden a diario, algunos de ellos derechohabientes del IMSS, ISSSTE o institutos estatales de salud pero que no se encuentran en la clase de enfermedad grave o trauma sino que son pacientes que lo único que requieren es un traslado al hospital donde se encuentran siendo tratados para continuar con sus revisiones o tratamiento, por lo que no ameritan como tal una ambulancia de urgencias como los son las de nuestra institución, entendiendo por urgencia lo que señala el artículo 72 del Reglamento de Prestación de Servicios de Atención Médica de la Ley General de Salud lo siguiente: Se entiende por urgencia, “todo problema médico-quirúrgico agudo, que ponga en peligro la vida, un órgano o una función y que requiera atención inmediata,” tales decisiones de no trasladar a la persona por no ser una urgencia ocasiona malestar en la gente que solicita el servicio , no tomando en cuenta que es también una obligación de dichos institutos o centros de salud proporcionar el servicio de traslado terrestre a sus derechohabientes, por lo que se hace necesario que se lleven a cabo acuerdos interinstitucionales con el fin de brindar el apoyo como una posibilidad de colaboración pero contando con los recursos materiales para responder a tales servicios. Asimismo, se requiere establecer que en el ámbito de la práctica del TUM se pueden presentar situaciones como la negligencia, la que ocurre cuando el TUM no cumple con la obligación de emplear en forma adecuada los medios necesarios para atender a un paciente, es decir, cuando tiene los conocimientos y recursos necesarios para hacerlo y no los utiliza por descuido u omisión, asimismo si la atención provista se desvía de los estándares de atención aceptados y se causa una mayor lesión al paciente. La negligencia es definida como, la falta de cuidado, no poner atención, descuido, no advertir algo, o desestimar que fue accidental pero evitable. De igual manera cuando al atender a un paciente el TUM no posee los conocimientos técnicos y científicos que su preparación académica exige, se comete impericia y se incurre en dolo cuando, por ejemplo, con el fin de obtener algún beneficio, el TUM no informa claramente al paciente sobre los procedimientos diagnósticos o terapéuticos que pueden emplearse en su tratamiento, lo que significa que quiere inducir a error al paciente o mantenerlo en él. La negligencia, la impericia y el dolo se contemplan en las diversas leyes de los estados y se explican en el Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Prestación de Servicios de Atención Médica, además de diversas normas que regulan parte de los servicios médicos.

Una negligencia médica sólo puede probarse luego de que un equipo de expertos realiza el análisis de las obligaciones que debe cumplir el TUM ante una situación dada, de acuerdo con la ciencia, la ética y la norma establecida. Por lo tanto, para diagnosticar una negligencia se deben tener conocimientos médicos para saber si el TUM actuó bien o mal, lo que significa que “el paciente no está calificado para hacerlo” y por lo tanto es necesario un tercero calificador que determine la situación. Para que se den las anteriores situaciones deben considerarse los siguientes términos: El TUM-B tuvo el deber para actuar • El paciente fue lesionado física o psicológicamente. • El TUM-B violó el estándar de cuidados razonablemente esperado de un TUM-B con preparación y entrenamiento similar. • La acción o falta de acción del TUM-B al violar el estándar de atención causó o contribuyó a la lesión del paciente. Para determinar negligencia, el juzgador tendría que considerar seis aspectos críticos:

• ¿El TUM-B actúo o no actúo? • ¿El paciente sufrió daño físico, psicológico o financiero? • ¿La acción o no-acción del TUM-B causó o contribuyó a la lesión por violar el

estándar de cuidados razonablemente esperados por un TUM-B? • ¿El paciente contribuyó a la lesión? • ¿El TUM-B violó el deber para actuar por el paciente?

RECUERDA La mejor defensa contra la negligencia es mostrar competencia y actitud profesionales, proveer consistentemente un alto estándar de atención y documentar correcta y completamente los servicios que presta, independientemente de ofrecer pruebas documentales de protocolos avalados y reconocidos por la dirección médica, así como las declaraciones de testigos o peritos en la materia con experiencia en el área de medicina prehospitalaria, situación que no todos los médicos conocen. Asimismo, es necesario señalar la importancia que involucra el término de “Abandono” que significa que te detuviste a ayudar y no continuaste atendiendo al paciente sin asegurarte de que cuidados equivalentes o mejores pudieran ser provistos. Bajo disposiciones legales de abandono, una vez que comenzaste a proveer el servicio de emergencia a un paciente, debes continuar hasta que otro profesional médico con al menos

la misma experiencia que tú se haga cargo a menos que el personal policiaco te ordene abandonar la escena o exista un grave riesgo en el lugar.

En octubre de 2002 la Secretaría de Salud presentó la Carta de los Derechos Generales de los Médicos, la cual busca vincular la práctica de esta disciplina con los derechos de los pacientes. Tomando como base dicha carta el TUM “debería” tener los siguientes derechos: Ejercer su profesión libremente Laborar en instalaciones que garanticen su práctica Contar con los recursos necesarios para realizar su trabajo Abstenerse de garantizar resultados Recibir un trato respetuoso Tener acceso a educación médica continua Tener acceso a la investigación y a la docencia Ser miembros de asociaciones profesionales Salvaguardar su prestigio profesional Recibir una remuneración por los servicios prestados en el caso de laborar para alguna empresa privada o sector gobierno. Los anteriores preceptos deben ser los derechos esenciales de los Técnicos en Urgencias Médicas a nivel nacional, es tarea de todos lograr su reconocimiento y aplicación en el Sistema Nacional de Salud, logrando así también el reconocimiento legal de la Carrera de Técnico en Urgencias Médicas a nivel nacional.

Es muy impotante que el TUM reconozca los 10 puntos contemplados en la Carta de los Derechos Generales de los Pacientes, que son:

• Recibir atención médica adecuada. • Recibir trato digno y respetuoso. • Recibir información suficiente, clara, oportuna y veraz • Decidir libremente sobre su atención • Otorgar o no su consentimiento válidamente informado • El médico tiene la obligación de manejar con estricta confidencialidad la

información que le confían sus pacientes. • Contar con facilidades para obtener una segunda opinión. • Recibir Atención médica en caso de urgencia cuando está en peligro la

vida, un órgano o una función. • Contar con un expediente clínico. • Ser atendido cuando se inconforme con la atención médica recibida.

PRESENTACIONES ANTE AUTORIDADES JUDICIALES En lo que se refiere a presentarse ante una autoridad judicial, el TUM acudirá en calidad de: Probable responsable. Parte acusadora. Testigo. Cuando se acude como testigo generalmente se manda llamar a la tripulación que cubrió el servicio con el fin de que rindan una declaración individual acerca de los hechos que ocurrieron en relación a la investigación que se está llevando a cabo, sin embargo es muy importante señalar que EL ALUMNO DEL CURSO TUM NO DEBE SER EL RESPONSABLE DE ATENCION MEDICA A BORDO DE LA AMBULANCIA, es decir, el encargado directo es el TUM conocido como jefe de servicio, es él quién firma el reporte escrito de atención médica (FRAP) y no el alumno, por lo que es la primera persona que debe acudir al llamado de la autoridad ministerial. Ante eventos de esta índole pocas cosas del servicio que se nos pregunta por la autoridad nos constan, ya que mucha información que obtenemos es de carácter subjetivo pues es dada por testigos o personas que supuestamente presenciaron los hechos o conocen a las personas que se encuentran involucradas por lo que puede haber intereses de por medio. Es importante mencionar que la misma persona enferma o lesionada puede proporcionarnos información pero no hay que pasar por alto que la misma puede encontrarse alterada emocionalmente debido al evento por lo que cursa manifestando un estado de conciencia no muy claro por el efecto de un trauma de cráneo o ya sea bajo la influencia de alcohol o drogas. Por lo anterior, al rendir una declaración como testigo ante Ministerio Publico o Juez debemos señalar aspectos generales del servicio, sin involucrarnos en el proceso, asimismo al comparecer ante el Ministerio público se deben declarar cosas que nos constan ya que de acuerdo a la mayoría de la legislación penal de los Estados de la Republica, la falsedad de declaraciones ante una autoridad judicial es un delito sancionado con prisión o considerado como grave. En caso de acudir como probable responsable de un delito deberá existir un ordenamiento por escrito que solicite la presentación del TUM ante el Ministerio Público en su caso ante lo que se conoce en la mayoría de los estados de nuestro país como mesa investigadora la cual se encarga de llevar a cabo averiguaciones sin detenido, toda vez que para que exista una detención debe de existir lo que se conoce como flagrancia, es decir, que los elementos policíacos hablando de una situación en la calle observen expresamente que el TUM está haciendo acciones u omisiones que presumiblemente pueden constituirse en un delito en el ejercicio de sus funciones como profesional de la salud ó en su caso que exista una acusación directa contra el TUM, por lo cual la autoridad policiaca procede con la detención y presentación del profesional de la salud ante la autoridad respectiva. Sin embargo la mayoría de las investigaciones se realizan sin estar detenido, por lo que el TUM al acudir ante la mesa investigadora tiene derecho a lo siguiente: a) Saber quién o quienes lo acusan.

b) Cuál es el delito que presuntamente cometió c) Acudir con abogado o persona de confianza d) Reservarse el derecho de declarar para que presente su declaración por escrito en los siguientes días que le determine el Ministerio Público, solicitando copias del escrito en que se encuentra la acusación así como a ofrecer pruebas que legitimen las acciones que realizó. El TUM en muchos servicios actúa bajo una circunstancia conocida como “Estado de Necesidad”, que constituye una causa de justificación, es decir, lleva a cabo acciones que a pesar de su apariencia, resultan conforme a Derecho, un ejemplo de lo anterior lo constituye el hecho de romper un vidrio o dañar una puerta para lograr el acceso a una persona que se encuentra tirada en una casa herida e inconsciente ó sangrando a bordo de un automóvil, estamos hablando de una situación actual y real de peligro para un bien jurídico que en este caso es la vida de la persona desmayada y para lo cual se tendrá que dañar la puerta y lograr un acceso para brindarle atención. Se debe recordar que el TUM de la Cruz Roja Mexicana no es un servidor público, ya que no percibe un salario del presupuesto municipal, estatal o federal de la Nación por lo que se deber estar muy atento a evitar en todo momento en un proceso judicial la violación de las garantías individuales de libertad y seguridad jurídica derechos fundamentales consagrados a nivel constitucional y que ante su violación por parte de la autoridad o una ley procederá lo que se conoce como juicio de amparo, la queja ante la Comisión de Derechos Humanos Estatal o Federal y la queja ante la Contraloría Interna que se encarga de velar por el trabajo apegado a derecho de los Ministerios Públicos o autoridades policíacas. En el caso de acudir como parte acusadora se tendrá la opción de brindar la declaración ya sea de forma verbal o presentándola por escrito y ratificando lo que contiene ante el Ministerio Público, con la posibilidad de que en ambas formas se puede ampliar la declaración, ofrecer testigos y pruebas de diversa índole. También se requiere señalar el papel que desempeñan las compañías aseguradoras en el ámbito de la atención médica prehospitalaria ya que son ellas las que también responden al llamado de una persona si es que cuenta con seguro médico cuando ha sufrido un accidente, por lo que en ocasiones se le dice al TUM que acudió a atender dicha persona que espere la llegada del ajustador o representante de la aseguradora con el fin de hacer los trámites respectivos y le de un pase de ingreso a determinado hospital que es la parte de los beneficios de la póliza de seguro contratada, sin embargo en el caso de que el lesionado se encuentre en estado critico el TUM no debe de esperar la llegada de dicho servicio, tendrá que tomar la decisión de irse no sin antes haber tomado los datos necesarios para su reporte escrito y canalizar al paciente a algún hospital para su atención y de esta manera evitar cualquier responsabilidad penal por falta de atención médica, se recomienda tomar datos del número de póliza, compañía aseguradora y nombre y número del agente ajustador de ser posible.En caso de

que el paciente se niegue a ser trasladado y quiera esperar a su seguro se le debe de indicar que nuestro servicio de ambulancias es para uso de la población en general y que nuestro objetivo es brindar atención médica prehospitalaria de urgencia, de igual manera hay que expresarle la condición médica en la que se encuentra, ya sea al propio paciente o a los acompañantes, por lo que no estamos al servicio de compañías privadas de seguros ya que ellas también cuentan con ambulancias particulares que acuden a llamadas de las aseguradoras cuando se presenta un accidente. De persistir su negativa se le pedirá que escriba su nombre con apellidos así como su firma en nuestro parte de atención FRAP, señalando que se niega a recibir atención médica y que le ha sido explicada la situación en que se encuentra. Por lo anterior se recomienda realizar acuerdos interinstitucionales de manera local con las aseguradoras que laboren en los estados del país donde el TUM se desempeña como profesional de la salud, con el fin de hacer de forma conjunta protocolos de respuesta ante estas situaciones y así brindar una mejor atención médica al paciente por parte del la Cruz Roja Mexicana y de las compañías de seguros que le brindan una cobertura de gastos médicos a sus asegurados. Otro aspecto fundamental es el que se refiere a los pacientes infectocontagiosos, ya que existe el delito de riesgo de contagio y que consiste en que una persona que tiene conocimiento de padecer una enfermedad infecciosa y que a pesar de saberlo no lo comunique y ponga en riesgo la vida de otro, en este caso del TUM, por lo anterior, es muy importante que el Técnico en Urgencias Médicas lleve a cabo sus protocolos de protección y medidas de seguridad para evitar posibles infecciones ya que su vida es primero antes que cualquier otra cosa. La Ley General de Salud en su articulo 142 establece: Los profesionales, técnicos y auxiliares de la salud al tener conocimiento de un caso de enfermedad transmisible, están obligados a tomar las medidas necesarias, de acuerdo a la naturaleza y características del padecimiento, aplicando los recursos a su alcance para proteger la salud individual y colectiva. Se recomienda de la misma manera revisar las leyes locales con el fin de conocer la manera en que se encuentra plasmada esta conducta así como las sanciones que la conforman.

TIPOS DE CONSENTIMIENTO De acuerdo a las diversas disposiciones existentes, el paciente tiene el derecho de aceptar o rehusar los cuidados médicos de emergencia. Por lo tanto, es necesario obtener consentimiento o permiso, antes de proveer tales cuidados. Antes de que el cuidado de emergencia sea efectuado, el paciente tiene que ser informado del cuidado que será previsto y de los riesgos asociados y sus consecuencias. Al consentimiento así obtenido se le denomina consentimiento informado. Si fuera a tocar el cuerpo del paciente o su ropa sin obtener primero el consentimiento apropiado, puedes ser denunciado por delitos contra la vida o la integridad corporal, incluyendo el uso de la fuerza (provocar miedo, daño corporal o tocar

ilegalmente a una persona), también se aplica a cualquiera que provea cuidados de emergencia cuando el paciente no apruebe el tratamiento especifico. Existen tres tipos de consentimiento: consentimiento explicito (hablado), consentimiento implícito y consentimiento en menores o de un adulto mentalmente incompetente. El consentimiento explicito tiene que ser obtenido de cada adulto consiente y mentalmente competente antes de comenzar con el tratamiento. El paciente tiene que ser de edad legal, capaz de realizar decisiones racionales e informando del procedimiento que se efectuará y de todos los riesgos relacionados. Básicamente, el paciente tiene que recibir, en términos que pueda entender, toda la información que vaya a influir para aceptar o rehusar el tratamiento. El consentimiento verbal, una señal, o un gesto afirmativo constituyen un consentimiento válido. El consentimiento implícito ocurre cuando se asume que un paciente que no responde o es incapaz de tomar una decisión racional (por ejemplo, un paciente desorientado debido a heridas en la cabeza) consentiría la aplicación de cuidados de emergencia para salvarle la vida. El consentimiento implícito también aplica a pacientes que inicialmente rehusaron el cuidado, pero llegan a un estado de no respuesta o irracionalidad debido a enfermedad o heridas. En una verdadera emergencia donde el paciente esta en riesgo de muerte, invalidez, o deterioro de sus condiciones, la ley asume que el paciente que no responde daría su consentimiento, pues el bien primordial que tutelan las leyes penales es la vida de las personas. El consentimiento para tratar a un menor o a un adulto mentalmente incompetente tiene que ser obtenido de un padre o tutor. Dependiendo de la ley Estatal (verificar el protocolo y leyes locales) un menor es un joven que no ha cumplido18 años. Sin embargo, no se necesita consentimiento del padre o tutor para tratar a un menor emancipado- normalmente uno que es casado, una embarazada, un padre de familia, o independiente financieramente y que vive fuera de su casa. Nota que si la condición amenaza a la vida y el padre o tutor no esta disponible para dar su consentimiento, deberá de proveerse tratamiento de emergencia bajo el principio del consentimiento implícito. Es necesario señalar que el artículo 29 del Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Prestación de Servicios De Atención Médica señala: Todo profesional de la salud estará obligado a proporcionar al usuario y, en su caso, a sus familiares, tutor o representante legal, información completa sobre el diagnóstico, pronóstico y tratamiento correspondientes.

Competencia Se define como adulto competente a aquel que esta lúcido y es capaz de tomar decisiones. Por ejemplo, gente que muestra un estado mental alterado o que está mentalmente enfermo, bajo la influencia de drogas o alcohol puede ser considerado como no competente. Un adulto competente tiene el derecho de rehusar tratamiento — verbalmente, o retirándose, sacudiendo su cabeza, gesticulando, o empujando al prestador de atención médica. Un

adulto competente también puede abandonar el tratamiento después de que este ha comenzado. Por lo tanto, para rehusar tratamiento o transporte, un paciente tiene que ser informado y entender completamente el tratamiento y todos los riesgos y consecuencias involucradas en su decisión. Después de la explicación y de que el paciente entiende las posibles consecuencias por rehusar, se tiene que obtener su firma en una forma oficial de "liberación de responsabilidad" La forma firmada - o un testigo del rechazo del paciente para firmar la forma - tiene que ser parte de la documentación del caso. De igual manera se recomienda que la persona que rechaza el tratamiento y el testigo en su caso, escriban su nombre completo así como su firma. Se establece con base en el artículo 81 del Reglamento de Prestación de Servicios de Atención Médica de la Ley General de Salud que “en caso de urgencia en que no se pueda obtener del paciente la autorización escrita para practicarle procedimientos médicos, los médicos del hospital de que se trate, previa valoración del caso y con el acuerdo de por lo menos dos de ellos, llevarán a cabo el procedimiento terapéutico que el caso requiera, dejando constancia por escrito, en el expediente clínico”. El párrafo anterior es una base de partida para crear cambios en los protocolos locales y trabajar en conjunto con la dirección médica de cada estado con el fin de que haya una comunicación efectiva entre la ambulancia y el hospital receptor y se informe adecuadamente sobre la condición del paciente y sobre todo un médico pueda estar enterado que dicho paciente se niega expresamente a recibir el tratamiento, de igual manera sobre su condición crítica y un tratamiento diferente que se le pueda dar a bordo de la unidad de soporte básico o avanzado. * Cuando exista duda, siempre proceder en favor de proveer cuidados al paciente. Protéjete!! Una documentación completa y precisa es un factor clave para protegerse de repercusiones jurídicas por negligencia, lesiones, homicidio o abandono cuando un paciente se niega a recibir tratamiento. Procede de la siguiente manera antes de abandonar la escena: • Trata nuevamente de persuadir al paciente de aceptar tratamiento o transporte al hospital. Dile al paciente por qué el tratamiento o el transporte es esencial. Hay que ser especialmente claro al explicar las posibles consecuencias de rechazar la ayuda. Documenta las consecuencias, y procura que el paciente lea en voz alta el reporte para verificar que entendió, asimismo, da aviso a tu central de radio para dejar constancia de la decisión en el parte de servicios de dicho turno, se recomienda también que se tomen datos de los cuerpos policiacos que acudieron también al lugar y llamarlos para que sean testigos del rechazo de ayuda. De igual manera se recomienda una modificación a los informes escritos en el cual se deberá anexar la siguiente información en el caso de que el paciente se niegue a recibir ayuda médica, operando lo que se conoce como consentimiento informado: Yo (nombre y apellidos de la persona), en pleno uso de mis facultades mentales, manifiesto que he sido informado de que requiero asistencia médica y que el rechazo de dicha ayuda y transportación puede resultar en un daño grave o irreparable para mi salud. Sin embargo manifiesto mi negativa al tratamiento o transporte a un centro hospitalario y asumo todos los riesgos y consecuencias de mi decisión y libero de toda responsabilidad legal a la CRUZ ROJA MEXICANA, I. A. P., SUS EMPLEADOS Y VOLUNTARIOS.

FIRMA DEL PACIENTE FECHA NOMBRE Y FIRMA DEL TESTIGO NOMBRE Y FIRMA DEL TUM-B Asegúrate de que el paciente es capaz de tomar una decisión racional con base en la información provista (Consentimiento informado). Un paciente discapacitado emocional, intelectual o físicamente, por una enfermedad o accidente puede ser incapaz de entender la información provista. Asegúrate de que el paciente es competente y no está bajo la influencia de drogas, alcohol, o alguna otra sustancia que altere el estado mental. • Solicita indicaciones médicas de acuerdo a lo requerido por el protocolo local. • Si el paciente aún rehusa, procura que firme el formato de rechazo. En algunas áreas la forma tiene que estar firmada por testigos (siga el protocolo local). Si el paciente rehusa firmar la forma, obtén declaraciones firmadas de testigos de que el paciente se negó a firmar. De alguna manera se tiene la opción de utilizar cámaras fotográficas o de video con el fin de tener pruebas sobre el rechazo de atención por parte del paciente, así como la situación en que se encontró al mismo en el escenario, sin embargo esto puede tener un aspecto negativo ya que los testigos o familiares pueden reaccionar de manera agresiva, por lo que no un recurso que deba ser utilizado, sobre todo considerando los principios del curso Acceso Seguro a un escenario peligroso. Caso importante lo componen también los servicios prehospitalarios que son proporcionados en áreas donde habitan comunidades indígenas, lo anterior constituye un reto por el problema que se presenta al no conocer la lengua y tradiciones de estas comunidades, por tal virtud, es necesario establecer procedimientos en conjunto con los representantes de dichas comunidades para lograr ofrecer servicios de calidad y bajo condiciones de seguridad, asimismo, se recomienda involucrar a los integrantes de las comunidades indígenas en programas de capacitación en primeros auxilios, prevención de accidentes y conocimiento del movimiento internacional de la Cruz Roja. Nuestras comunidades indígenas son el origen de lo que hoy somos cada uno de nosotros, el mostrar respeto a su ideología y conformación refleja la gran riqueza cultural que tenemos como pueblo y tu nivel de profesional de la salud. • Antes de abandonar la escena, motiva al paciente para que busque ayuda si se presentan ciertos síntomas. Si es posible, trata de ser específico. Dile cosas como " si le arde el estómago" o "si comienza a ver doble". Evita términos técnicos que el paciente no pueda entender. Documenta el hecho de que motivaste al paciente a buscar ayuda posterior. Como se menciono anteriormente, es nuestro deber atender a cualquier paciente que requiera y solicite los servicios médicos de urgencia, mientras nos encontramos en servicio. sin embargo, todo lo anterior dentro de nuestras capacidades humanas y materiales. En algunos casos la obligación de prestar el servicio puede estar implícita. Por ejemplo, un paciente puede solicitar una ambulancia, y un despachador puede confirmar que una

ambulancia será enviada. Como parte del equipo de la ambulancia que responde, tendrás la obligación legal de proveer tratamiento al paciente, siempre y cuando los recursos a tu alcance lo permitan, ya que puede ocurrir que existan urgencias que ameriten más la presencia de una ambulancia y se tenga que recurrir a una categorización de prioridades de atención (triage), la cual no es un delito que cometa el TUM-B, pues en todo caso es una necesidad mayor a la que se tiene que dar respuesta, ya que la mayoría de los sistemas estatales o locales de salud no cuentan con los recursos suficientes para atender todas las emergencias que se presentan en su localidad. En otros casos, la obligación es formal. Por ejemplo, un servicio de ambulancia puede tener un convenio escrito con el municipio que contenga cláusulas especificas respecto a cuándo un servicio de ambulancia tiene que ser provisto o puede ser rehusado, sin embargo en el caso del SMU de Cruz Roja Mexicana se debe analizar primero si dichos convenios o contratos no vulneran o van en contra de los principios fundamentales de la institución.

OTROS ASPECTOS LEGALES DE LA ATENCIÓN DE EMERGENCIA MÁS ACERCA DEL DEBER PARA ACTUAR El título Cuarto de la Ley General de Salud regula lo que se refiere a los recursos humanos para los Servicios de Salud, estableciendo las reglas a las cuales están sujetas las profesiones técnicas y auxiliares y especialidades de la salud, lo que abre la discusión a poner en marcha todos los medios y recursos necesarios para lograr el reconocimiento legal dentro de las actividades de la salud del Técnico en Urgencias Médicas.

TITULO CUARTO Recursos Humanos para los Servicios de Salud CAPITULO I Profesionales, Técnicos y Auxiliares Artículo 78.- El ejercicio de las profesiones, de las actividades técnicas y auxiliares y de las especialidades para la salud, estará sujeto a: I. La Ley Reglamentaria del Artículo 5o. Constitucional, relativo al ejercicio de las profesiones en el Distrito Federal; II. Las bases de coordinación que, conforme a la ley, se definan entre las autoridades educativas y las autoridades sanitarias; III. Las disposiciones de esta Ley y demás normas jurídicas aplicables, y IV. Las leyes que expidan los estados, con fundamento en los Artículos 5o. y 121, fracción V, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Artículo 79.- Para el ejercicio de actividades técnicas y auxiliares que requieran conocimientos específicos en el campo de la medicina, odontología, veterinaria, enfermería, laboratorio clínico, radiología, terapia física, terapia ocupacional, terapia del lenguaje, prótesis y órtesis, trabajo social, nutrición, citotecnología, patología, bioestadística, codificación clínica, bioterios, farmacia, saneamiento, histopatología y embalsamiento y sus ramas, se requiere que los diplomas correspondientes hayan sido legalmente expedidos y registrados por las autoridades educativas competentes. Artículo 80.- Para el registro de diplomas de las actividades técnicas y auxiliares, la Secretaría de Salud, a petición de las autoridades educativas competentes, emitirá la opinión técnica correspondiente. El TUM tiene derecho a lograr el acceso a actividades de investigación y docencia en su campo profesional, la Ley General de Salud en su Capítulo III establece las bases para la Formación, Capacitación y Actualización del Personal que labora en el Sector Salud. CAPITULO III Formación, Capacitación y Actualización del Personal Artículo 89.- Las autoridades educativas, en coordinación con las autoridades sanitarias y con la participación de las instituciones de educación superior, recomendarán normas y criterios para la formación de recursos humanos para la salud. Las autoridades sanitarias, sin perjuicio de la competencia que sobre la materia corresponda a las autoridades educativas y en coordinación con ellas, así como con la participación de las instituciones de salud, establecerán las normas y criterios para la capacitación y actualización de los recursos humanos para la salud. Artículo 90.- Corresponde a la Secretaría de Salud y a los gobiernos de las entidades federativas, en sus respectivos ámbitos de competencia, sin perjuicio de las atribuciones de las autoridades educativas en la materia y en coordinación con éstas: I. Promover actividades tendientes a la formación, capacitación y actualización de los recursos humanos que se requieran para la satisfacción de las necesidades del país en materia de salud; II. Apoyar la creación de centros de capacitación y actualización de los recursos humanos para la salud; III. Otorgar facilidades para la enseñanza y adiestramiento en servicio dentro de los establecimientos de salud, a las instituciones que tengan por objeto la

formación, capacitación o actualización de profesionales, técnicos y auxiliares de la salud, de conformidad con las normas que rijan el funcionamiento de los primeros, y IV. Promover la participación voluntaria de profesionales, técnicos y auxiliares de la salud en actividades docentes o técnicas. Artículo 91.- La Secretaría de Salud y los gobiernos de las entidades federativas, en sus respectivos ámbitos de competencia, coadyuvarán con las autoridades e instituciones educativas, cuando éstas lo soliciten, en: I. El señalamiento de los requisitos para la apertura y funcionamiento de instituciones dedicadas a la formación de recursos humanos para la salud, en los diferentes niveles académicos y técnicos, y II. En la definición del perfil de los profesionales para la salud en sus etapas de formación. Artículo 92.- Las Secretarías de Salud y de Educación Pública y los gobiernos de las entidades federativas, en sus respectivos ámbitos de competencia, impulsarán y fomentarán la formación, capacitación y actualización de los recursos humanos para los servicios de salud, de conformidad con los objetivos y prioridades del Sistema Nacional de Salud, de los sistemas estatales de salud y de los programas educativos. En el Capítulo Quinto de la citada Ley General de Salud, se establecen las bases para la investigación en salud, lo que incluye el análisis de técnicas y métodos para la prestación de servicios de salud, lo anterior se debe prestar al análisis con el fin de generar centros de investigación del trauma y urgencias médicas que tengan entre algunas de sus actividades actualizar la medicina prehospitalaria de nuestro país basándonos en la evidencia de casos y las mejoras que recomiendan las autoridades de salud para el trabajo del TUM a bordo de una unidad de urgencias. TITULO QUINTO Investigación para la Salud CAPITULO UNICO Artículo 96.- La investigación para la salud comprende el desarrollo de acciones que contribuyan: I. Al conocimiento de los procesos biológicos y psicológicos en los seres humanos; II. Al conocimiento de los vínculos entre las causas de enfermedad, la práctica médica y la estructura social;

III. A la prevención y control de los problemas de salud que se consideren prioritarios para la población; IV. Al conocimiento y control de los efectos nocivos del ambiente en la salud; V. Al estudio de las técnicas y métodos que se recomienden o empleen para la prestación de servicios de salud, y VI. A la producción nacional de insumos para la salud. Artículo 97.- La Secretaría de Educación Pública, en coordinación con la Secretaría de Salud y con la participación que corresponda al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología orientará al desarrollo de la investigación científica y tecnológica destinada a la salud. La Secretaría de Salud y los gobiernos de las entidades federativas, en el ámbito de sus respectivas competencias, apoyarán y estimularán el funcionamiento de establecimientos públicos destinados a la investigación para la salud.

CONFIDENCIALIDAD Muchas jurisdicciones no tienen leyes específicas sobre la confidencialidad, intimidad personal y revelación de secretos. Por lo anterior, no hables con la prensa, su familia, amigos, u otros miembros del público acerca de detalles de los cuidados de emergencia que suministraste a un paciente. Si hablas acerca de la emergencia, no tienes que relatar cosas específicas acerca de lo que el paciente dijo, con quién estaba el paciente, algo inusual acerca del comportamiento del paciente, o una descripción de la apariencia personal del paciente. La misma restricción se aplica a la información recibida de otros miembros del sistema de SMU. La confidencialidad se aplica no solo a casos de lesiones físicas, sino a casos que posiblemente involucren enfermedades contagiosas, otras afecciones y emergencias emocionales y psicológicas. El liberar información confidencial requiere de una forma escrita firmada por el paciente o tutor. No debes liberar información confidencial escrita o hablada acerca del paciente a cualquiera que sostenga ser el tutor hasta que se haya establecido su tutoría legal. Por ley, estas capacitado para liberar información confidencial de un paciente sin el permiso del paciente o su tutor si: • Otro prestador de servicios médicos necesita conocer la información para continuar con los cuidados médicos. • Eres requerido por la policía para proveer la información como parte de una investigación criminal potencial. Puede ocurrir que haya leyes estatales, que requieran el reporte de incidentes de violación, abuso sexual, y de algunos otros delitos. • Eres requerido por citatorio legal para proveer la información en juzgados locales o federales.

SITUACIONES ESPECIALES Donadores y Recolección de Órganos En esencia, los órganos pueden ser donados solamente si existe un documento legal firmado dando permiso para colectarlos. Una tarjeta de donador firmada es considerada un

documento legal sin embargo esto involucra la activación de protocolos para que el hospital receptor se encuentre listo ante dicho caso, se recomienda conocer las guías de procedimientos locales. Un donador potencial de órganos debe ser tratado igual que cualquier otro paciente que requiera atención de emergencia. Recuerda que el individuo es primero un paciente y al último un donador de órganos. Además de proveer el cuidado adecuado, puede participar en el procedimiento de recolección de órganos con lo siguiente: • Identifica al paciente como un donador potencial basado en el tipo de lesiones o enfermedades y en el tratamiento provisto. Los pacientes cercanos a morir o aquellos muertos poco tiempo antes son donadores potenciales de órganos. En cada caso, sin embargo, el personal del hospital y la familia del paciente toman la última decisión. • Solicita apoyo médico sin importar la posibilidad de una donación de órganos, puedes iniciar este proceso alertando al personal del departamento de urgencias del hospital a donde es transportado el paciente, el cual contactará a los departamentos necesarios. • Proporciona cuidados de emergencia, como la RCP, que ayudará a mantener los órganos vitales en caso de que la recolección sea intentada. Esto es mejor logrado tratando a cada paciente igual de bien. Se reitera, conoce el protocolo local para la activación de guías para donadores de órganos.

Dispositivos de Alerta Médica Dispositivo de alerta médica. Pacientes en condición crítica. Un paciente con una condición médica grave, como una alergia, diabetes o epilepsia, puedes estar usando o portando una identificación médica, como un brazalete, collar, o tarjeta, búscalos durante la revisión. Nota que la identificación médica puede traer también un número telefónico al cual llamar para obtener los requerimientos de tratamiento especifico y medicación.

Pacientes en Estado Terminal. Un TUM tiene ciertas obligaciones legales cuando trata con moribundos o pacientes enfermos en estado terminal. Familiarízate con las leyes de tu jurisdicción. Estas variarán de acuerdo a la situación. Si una persona está muerta de manera obvia — decapitada, marcada por el rigor mortis, en descomposición o rodeada en lagos hemáticos sin movimientos obvios- se te puede solicitar que dejes el cuerpo en el sitio si existe una posibilidad de que la policía o servicios periciales tengan que investigar. En otras situaciones, se te puede solicitar que arregles el transporte del cuerpo para que un médico o el servicio médico forense pueda pronunciar oficialmente muerto al paciente, situación que no se recomienda pues somos servicios de urgencias médicas prehospitalarias y no unidades de traslado forense. Aprende los protocolos locales. (ATENCIÓN: Sólo un médico puede determinar la muerte de una persona en el lugar de los hechos, nosotros sólo indicamos, en el caso de haber aplicado procedimientos de medicina prehospitalaria que “el paciente no está respondiendo al tratamiento y en todo caso, que no respondió al tratamiento que se le aplicó, por lo que no respira y no tiene pulso”. No certificamos la muerte de una persona.

El Escenario de un Delito Siempre que un TUM es llamado a un sitio potencial donde se cometió un delito, el despachador debe notificar también a la policía. Reconocer un posible escenario criminal requiere un alto índice de sospecha. Como guía general, el lugar de los hechos se entiende como el espacio físico en el que presuntamente se cometió un ilícito, es un escenario criminal que pueda requerir soporte policiaco, incluyendo la escena de un acto potencial o actual como suicidio, homicidio, sobredosis de drogas, disputa doméstica, delitos sexuales, accidente vehicular, robo, ataque a las vías de comunicación, terrorismo o cualquier escena que involucre armas de fuego o instrumentos potencialmente peligrosas. Recuerda que hasta las suelas de tus botas pueden contaminar la escena de un delito. La primera preocupación al acercarse a la escena de un delito debe ser por tu propia seguridad. Si sospechas que un crimen esté en proceso o que un criminal aún se encuentra en el sitio, no trates de proveer atención a ningún paciente. Espera hasta que la policía llegue y te diga que la escena es segura. Una vez que el sitio es seguro, tu prioridad es la atención de emergencia al paciente. Sin embargo, trata de evitar mover cualquier cosa de la escena que pueda ser considerada evidencia. Los lineamientos básicos incluyen: Toca solo lo que necesites tocar. Mueve sólo lo que necesites mover para proteger al paciente y para proveer cuidados de emergencia apropiados. No uses el teléfono a menos que la policía te otorgue permiso para hacerlo. Mueve al paciente solo si está en peligro o tiene que ser movido para que le puedas proveer el servicio. Observa y documenta cualquier cosa inusual en la escena. Si es posible, no cortes a través de agujeros en la ropa del paciente causados posiblemente por proyectiles de arma de fuego o armas punzocortantes. No cortes a través de cualquier nudo en una cuerda o corbata (una pista posible). Corta lejos del nudo. Si se trata de delitos sexuales, no laves al paciente o permitas que el paciente se lave. Indica al paciente que no se cambie la ropa, no use el baño, o tome cualquier cosa por la boca, porque puede destruir la evidencia. No puedes forzar a una persona a que no realice éstas actividades, pero explica las razones para no hacerlo. Procura proteger las posibles evidencias que hubiese en las manos y bajo las uñas. Si tienes que subir escaleras, procura no hacerlo por el centro del escalón, sino por el lado cercano a la pared, no pises el primer escalón, pues éste es el que probablemente utilizó el delincuente y puede contener polvo u otras materias dejadas por el autor del delito como huellas del zapato o manchas. Es importante señalar la importancia de proveer apoyo psicológico a estos pacientes, sin embargo eso no debe ser un distractor para atender nuestras prioridades en medicina prehospitalaria como son el adecuado manejo de la vía aérea y el control de las hemorragias que pueda tener ese paciente y que provoquen un peligro potencial para su vida. Recuerda que como TUM, puedes tener la responsabilidad legal de reportar ciertas situaciones en las cuales una lesión pudo haber resultado de un acto criminal. Aprende los protocolos locales.

Situaciones Especiales a Reportar Aunque las leyes varían de estado a estado, se te puede requerir para reportar ciertas condiciones. Familiarízate con los requerimientos de tu Estado. Las situaciones a reportar comúnmente incluyen: • Abuso. La legislación penal de los estados establece la necesidad de reportar cualquier sospecha de abuso infantil. Algunos Estados tienen requerimientos muy amplios, mientras otros solicitan reportes solo de médicos. Tales estatutos frecuentemente proporcionan inmunidad contra demandas por calumnias o difamación, siempre y cuando el reporte cumpla con las disposiciones legales que se establezcan al respecto. En algunos estados, también existen leyes para reportar otros tipos de abuso, como el abuso de los adultos mayores y abuso del consorte. Conoce qué exigen las leyes de tu localidad. • Delitos especiales. Asimismo, puede haber estados de la República que requieran que el TUM reporte heridas que puedan haber resultado de un crimen o que reporte heridas hechas por arma de fuego, cuchillo o envenenamiento. Por ejemplo. El ámbito local de tus normas penales puede también requerir que reportes cualquier lesión que sospeches haya sido causada por delitos de tipo sexual. Otras situaciones que pueden ser necesarias de reportar incluyen sospecha de exposición a enfermedades infecciosas, uso de la restricción de un paciente para tratarlo o transportarlo contra su voluntad, casos en los cuales un paciente parece estar mentalmente incompetente o intoxicado, intento de suicidio y mordidas de perro. Aprende las leyes de tu estado y familiarízate con los tipos de situaciones que debe reportar.

RESUMEN • Lo que anotes en el reporte escrito (FRAP) es lo que le hiciste al paciente, de no ser

así, a pesar de haber brindado una excelente atención pero no la documentaste para efectos legales es como no haber hecho ni una sola intervención.

• Tu informe escrito debe contar con nombres, firmas y sellos necesarios de acuerdo a

los protocolos de los hospitales de recepción o las indicaciones de las oficinas del Ministerio Público adjuntas a hospitales donde se deje una copia del mismo.

• Por tu propia seguridad evalúa adecuadamente la escena y no te conviertas en

víctima y problema.

• Mantente alerta con las pertenencias del pacientes y de ser necesarios documéntalas con el fin de que haya un antecedente escrito de ellas así como de la persona a quien se entregan. Se recomienda señalar aspectos generales de las pertenencias, por ejemplo, decir que se recoge un reloj amarillo y no de oro pues no nos consta que sea de tal material, en el mismo caso de posibles drogas que traiga el paciente, señala que se trata de pastillas blancas o verdes por ejemplo, pero sin entrar en detalles.

• No manipules armas punzocortentes, armas de fuego o paquetes que contengan

sustancias desconocidas o aparenten ser explosivos.

• Procura no alterar evidencia en la escena ya que después del trabajo del TUM intervendrán equipos de peritos en criminalística para la búsqueda y levantamiento de material sensible como casquillos, sustancias corporales, polvos o huellas digitales.

• En lugares donde haya violencia o no sea seguro ingresar espera la llegada de grupos

especiales de la policía para que aseguren el área y se permita tu trabajo, misma recomendación para aquellas zonas donde se presuma una contaminación con materiales peligrosos, deberás esperar la llegada del cuerpo de bomberos con el equipo especializado de Hazmat.

• Ante la duda acerca del padecimiento de un paciente es mejor trasladarlo que dejarlo en

el lugar. Conoce la legislación de tu localidad con el fin de saber de qué manera se encuentra regulado el desempeño del TUM, las conductas consideradas como delitos que puede cometer en el ejercicio de sus funciones y los medios de defensa legales con los que cuenta.

• Establece rutas de escape siempre que ingreses a un escenario, lo más importante en

una urgencia ERES TU.

• Documenta adecuadamente tus acciones y busca la intervención de testigos que observen tu actuar en una escena, busca siempre los números de matrícula de las patrullas que intervinieron en el lugar.

• Procurar llevar a cabo reuniones con tus compañeros de guardia a fin de analizar los

casos que se atendieron con el fin de generar puntos de comparación o establecer diversos puntos de vista que te ayuden a mejorar tu atención en futuros servicios.

• Espera siempre la llegada de los servicios policíacos o equipos especiales, recuerda que

El Acceso Seguro a un escenario potencialmente peligroso es fundamental.

• Utiliza tu equipo de protección y uniforme completo, tu seguridad comienza cumpliendo estos puntos.

• No proporciones información de manera abierta, sigues las recomendaciones sobre la

liberación de la misma.

• Busca las alertas médicas en tu paciente, son de vital trascendencia para una adecuada atención.

• Conoce la legislación de tu localidad así como las autoridades respectivas con el fin de

establecer procedimientos de respuesta de acuerdo a las necesidades del lugar y que no vayan contra los principios fundamentales de nuestra institución.

• De igual manera busca la forma o los escenarios adecuados para proponer ideas que

permitan regular de manera concreta y ordenada el Servicio Médico de Urgencias, procurando la colaboración de grupos de trabajo interinstitucionales de la sociedad en la

que vives, con la finalidad de involucrar a las autoridades en la solución y apoyo a las necesidades del Técnico en Urgencias Médicas.

• Hoy se vuelve necesario que cada escuela estatal de Técnicos en Urgencias Médicas

cuente con un asesor legal que facilite el entendimiento del ámbito del derecho a los alumnos en proceso de formación, asimismo para que les brinde asesoría cuando se encuentran cubriendo servicios de urgencias pero aún no son personal operativo.

• Se debe procurar implementar pláticas sobre criminalística con el fin de facilitar la labor

de TUM en un escenario y no complicar su trabajo por manipular objetos o áreas que no debe.

Ten siempre en la mente que poca gente entiende tu labor como TUM, sin embargo la vida te enseñará que las grandezas de esta profesión no se encuentran en la cantidad de servicios que atiendas en una guardia o en haber sido el primero en llegar a la mayor clave 3 de tu localidad, sino en la humildad de reconocer tus errores y mejorar la calidad con la que brindes tus servicios con base en la educación continua y aplicando lo último en conocimientos científicos avalados por la dirección médica de nuestro servicio médico de urgencias.

Bibliografía Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. H. Congreso de la Unión. Editorial Sista Editores. 2006. Código Penal Federal. H. Congreso de la Unión. Editorial Sista Editores. 2006. Código de Procedimientos Penales en el Distrito Federal. Cámara de Diputados. Editorial Porrúa. 2006. El Laberinto de la Investigación Criminal. Charles Marcel Mengotti. Editorial Porrúa. 2003. Lineamientos Elementales de Derecho Penal. Fernando Castellanos Tena. Editorial Porrúa. 2004. Modelos y el Procedimiento Penal. Fernando Fuentes Díaz. Editorial Sista. Novena Edición. 2004. Tolerancia Cero. Howard Safir. Editorial Plaza & Janes. 2004. Paramedic Emergency Care. Bryan E. Bledsoe. Brady. Third Edition. 1997. Critical Care Paramedic. Bryan E. Bledose and Randall W. Benner. Brady. 2005 Paramedic. On the Front Lines of Medicine. Peter Canning. Random House. 1998.

http://www.jems.com/data/pdf/2006salarysurvey.pdf. 2006 Jems Salary & Workplace Survey. David M. Williams MS. http://www.who.int/violence_injury_prevention/publications/services/39162_oms_new.pdf Entrevista con el doctor Gabriel Manuel Lee. Subcomisionado de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed). Salud: México 2002. Información para la rendición de cuentas, Secretaría de Salud- www.conamed.gob.mx Entrevista con Agustín Ramírez, Subcomisionado Jurídico de la Conamed. Carta de los Derechos Generales de los Pacientes.