Jorge Delis - Canto a Los Hombres Del Pan y otros poemas

8/19/2019 Jorge Delis - Canto a Los Hombres Del Pan y otros poemas

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Jorge Delis - Canto a los hombres del pan y otros poemas

Nacen, se reproducen, después, mueren.

Fueron cadetes de la industria,

albañiles de andamios,

fabricantes de cosas inútiles modernas,

paladines del aire y del martillo,

fregadores de pisos, humo de chimeneas.

Nacen, se reproducen, después mueren.¿Quién obtuvo sus sangres?

¿Quién destin sus vértebras?

¿Quién los puso de gallos en la aurora

caminando y gritando, pateando y acatando,

hirviéndoles la sangre compañera?

!o los he visto hastiados hasta decir no "uiero,

los he visto matando en frigor#$cos,

matando en primaveras

en "ue todo nac#a sin motivo aparente

como nacen las %ores&

lo he visto con bolsas,

moverse, traba'ando, cuando era

la hora de comer,

la hora egregia del amor y del descanso&

los he visto trepados a las torres,


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trepados a las vie'as torres,

d(ndoles cal, charlando con los (ngeles,

mirando un punto de la tierra,

un solo punto vivo

al cual pertenec#an

y por el cual hilaban sus d#as, sus esencias.

)os he visto volviendo a sus hogares

con la honrade* al hombro, mir(ndose las piernas,

detall(ndose niños y costumbres,algunas cosas "ue suceden,

pis(ndose las huellas,

holl(ndose los mar*os, los octubres,

los panes sin almuer*o, las amargas cosechas

del fr#o, las amargas recolecciones para otros

y las amargas siembras

del cobre "ue resuena en el alma

como un gran acorden tocando a $esta.

!o sé "ue nacen, s#.

!o sé+ se reproducen. !o sé+ se mueren.

é "ue suenan a cobre, sé "ue suenan

a rasgadoras $ebres, a pan hermoso y triste.

-ienen hi'os de cobre, muy sonoros&

tienen mu'eres recias,

cigarrillos baratos en los dedos,


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hondas causas vitales manchando sus o'eras.

st(n a"u# y all(.

uenan, resuenan.

on de una gama gris.

/ndan y trepan.

Naturalmente cobres, naturalmente solos,

tienen el sol cerrado sobre la mano abierta. ! un d#a caen tri*ados por el tiempo,

con unos o'os amplios hacia el norte

y un pan duro indicando sus presencias.

on esos hombres duros como el cobre.

uenan, resuenan.

-ranv#a 01

2uy solo en este vie'o tranv#a tan catorce

me prolongué hasta ti, como un amigo.

3aban las dos de la mañana

4en otro tiempo el vigilante de alguero estaba ya dormido5.


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4la 061 se estrenaba su arpege y su vestido5.


4un recuerdo beb#a de su copa en un rincn del 7ildo5.

8uente 9ustamante

8asabas tú, ba'ando, túy un nolopienses dicho hasta tu alma

y lluvias en es"uinas y mateos

y $nales tan dulces como las rosas dadas.

8asaba el puente mismo,

el morirse en las v#as, el despedirse en humo

y vo* entrecortada

y pasaba palermo, pringles, barrios pobres,

felices por el pie de tu *apato y el calor de tu cara.

-e dec#a "ue no

y te miraba.

:alent#n 7me* ;


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Au(ntas veces yendo y viniendo en torno a lo "ue amamos,

m(s libres "ue este raro olor a lino,

m(s prBimos, m(s 'ustos o acaso

m(s in'ustos

por pretender ba'ar la luna a nuestras manos

m(s comunes a todo

sin feste'os de s(bados

sin elegantes formas, sin pañuelos

diciendo adioses falsos

ac( estamos, ac(yendo y viniendo, entre un café y un trago,

muy simples, muy amigos,

dolidos y sonrientes, afectuosos, conversando

de largas cosas vivas.

)a puerta siempre abierta para /lmagro.

Cadiograf#a de /lmagro

Fue en una de las tantas tardes

en "ue pisando tiempo, cora*n o acera,

me incliné a tu ado"u#n y a tus paredes,

a tus camisas amplias de obreros o a tus polleras

tornasoladas de amor&

a tus tacos muy altos de niñas fabri"ueras,


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a tu heredad de gaita y mandolina,

a tu abecé de bares "ue te pueblan

y recog# tu gusto, tu palpitar de barrio

y me senté contigo en un umbral, como se sienta

un pobre diablo "ue ha encontrado

la única moneda.

Quiero cantar, decirte, llenarte hasta mi vaso,

cabecilla lunar de esta ciudad sin tregua,

punto $nal de chacras y de "uintas,"uintaesencia

de oeste en 9uenos /ires,

"uintaesencia

del ancho muro amargo de la vida, donde uno se para

y se golpea el cora*n, el aire y las maneras

y se sabe hasta a"u#,

tan me*clado de cielo y tan de tierra.

/"u# canté y lloré y anduve tu ado"u#n

con el alma doblada a tus umbrales y a tus puertas.

! tuve lasitudes de amor

y ganas de fumar y ganas de triste*a.

-ú me "uisiste siempre

como a un gorrin "ue 'uega.

! eso de andar, almagro, cobi'(ndome,


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es ga'e de tu o$cio de centinela.

8ara poder decirte enteramente

habr#a "ue beber, por ti, 'ugo de estrellas.

Dabr#a "ue charlar de cosas inocentes

como hacen tus niños al borde de la siesta.

E habr#a, acaso, "ue inventar un himno

m(s simple "ue la marcha de una escuela.

3e G9uenos /ires, mi ciudadH, 0IJ;K

Aanto a los hombres del vino tinto

!o sé "ue vendr(n, caminar(n,

vendr(n, caminar(n, dar(n la vuelta,

dir(n mi barco ballenero pesca en las Ercadas,

mi ve'e* es un canto de rayuela,

mi velador no ca*a mariposas,

vendr(n, caminar(n, dir(n cual"uiera

tiene un gorro frigio,

cual"uiera tiene un tango,

tiene un agua tanino&


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vendr(n, caminar(n, dir(n la palabrota "ue les "ueda,

vendr(n, caminar(n, dir(n del apio,

vendr(n, caminar(n, dir(n "ue salga pato o gallareta,

dir(n, caminar(n, dir(n "ué b(rbaro,

dir(n imbécil,

dir(n yo soy un hombre,

dir(n piso la tierra.

!o sé "ue ellos vendr(n, caminar(n.

3ir(n, caminar(n y cantar(n con la violetay cantar(n el a'o de los guisos

y el (bside, el gorrin, las a*oteas.

:endr(n, caminar(n, dir(n "ue antepasados

murieron en cadalsos o en hogueras,

murieron sobre camas de hospitales,

sobre catres sin lu* o sobre las veredas.

:endr(n, caminar(n,

con la antigua *o*obra

del al"uiler,

con la herramienta húmeda, oBidada&

vendr(n, caminar(n, vendr(n la siesta,

falseadores del sol,

halconeros audaces del de pronto,

vie'os amigos m#os, cantantes de violetas,

venteando lluvias coloradas,


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cayendo, decayendo, diciendo "ue vendr(n, caminar(n,

diciendo apenas

"ue a"u# vendr(n, caminar(n...

! un chapoteo dulce pica en la piel

y uno sabe "ue est(n como los muertos+

acostados y duros y sin pena.

Aomo los muertos duros.

)os muertos ya no tienen vanagloria. Ni problemas.

Ni decapitacin. Ni ley.Ni llave familiar para el altillo. Ni retratos de abuelas.

)os muertos tienen solamente

un raptado moverse entre las cosas y una cru* o$cial

y un pasado rumor de voces vivas en la ore'a.

! est(n ba'o el *apato del "ue vive,

"u#micamente amargos, naturalmente pobres y de tierra.

:endr(n, caminar(n. Ebservadores simples,

'ugadores de truco, sacr#legos del agua,

bicarbonatos, h#gados, con$dencias,

lo "ue yo siempre tuve es poca suerte,

vie'os amigos m#os, cantantes de violetas.

:endr(n, caminar(n.

-endr(n la mano abierta,

un ta'o de dolor hundiendo sus infancias,

una hermosura en vino y un vino en la moneda.


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:endr(n, caminar(n.

)a vida es tan correcta,

tan construida as# como esas casas de die* pisos,

tan dcilmente puesta

hacia la muerte

"ue al encontrarlos

uno se siente afuera.

:endr(n, caminar(n. Aaña, pescado, pipa.8elos en la nari*, buenas noches me voy la tengo enferma

yo le voy a contar la historia de mi pueblo,

"ué has "uedado pensando marivelcha.

!o sé "ue ellos vendr(n, caminar(n,

vendr(n, caminar(n, dar(n la vuelta.

-ienen cosas acaso "ue decir,

tienen "ué preguntar+ cu(ntas botellas,

cu(ntos lagares dulces,

cu(nta ocupada mesa,

cu(nto codo ra#do

o pantaln gastado en las veredas

o anoche me soñé vinado en un cad(ver

o anoche me soñé a mi 2ar#a muerta.

:endr(n, caminar(n.


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8or"ue donde fueron posible intervencin,

donde vieron la fruta sa*onada

al alcance del bra*o "ue enca'ona,

no dudaron de hacerlo.

8or"ue donde se hallaron

con guano, con petrleo,

con estaño sudado,

con ca'eras bonitas y f(bricas teBtiles,con sucios pescadores de lampreas,

con terrenos de caucho

o magros buscadores de oro en las riberas,

o pe"ueños patrones de chatas en los puertos,

o aun con simples piedras del paleol#tico&

donde hallaron lo útil,

la cl(sica ganancia para su impavide*,

lo embarcaron en anchas bodegas trasatl(nticas,

lo custodiaron mucho

y le dieron destino de usinas o de acciones.

8or suerte est(n muy le'os.

8or suerte ya no tienen talismanes "ue los salven

y hacen "ue otros abran sus ventanas,

sus vie'as banderolas,

vean de lleno el sol "ue fecund las mieses,


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vean de lleno obreros, cargadores,

muchachos sin comer,

'er(r"uicos pastores con la biblia al hombro,

catlicos creyéndolos

y raspa'es de muerte

en mu'eres "ueridas de turismo,

y entonces es posible "ue esos otros

los vean como son

y piensen libertades

y crean en el unto de amor de las familiasy bus"uen desprenderse.

4e desprenden5.

8or"ue ellos caen de pronto

>felices capataces de las tierras volc(nicas,

de las islas varadas en medio del océano,

de las "uintas cargadas de roc#o

donde crece el tomate como un co(gulo,

de la locomocin,

de la primera plana y el teléfono>

caen sin "ue nadie diga "ué importancia

tendr( darles, de m(s, metros de tierra.

8ero al caer transforman, miden, "uitan.

! con la venia dulce de la luna

se instalan mercaderes de los sueños.


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8or"ue acabadamente,

con letreros y avisos y empresarios

se hicieron democracia en el ocaso

y en el duro ma#*

y en la sal de los trpicos.

8or"ue rastreramente,

con la corbata chic del diplom(tico

intervinieron muelles, 'erogl#$cos,

lugares donde matan a cuadrúpedos,tallarines cantados, e'ércitos de negros.

8or"ue impecablemente

vinieron a llevarse bandoneones

y se fueron.

8or"ue tard#amente

dieron el oro a cambio del obrero

y con sus duros ganglios de bandidos

después de comprobarnos el declive

se nos fueron.

8or"ue pusieron pie y robaron tierra.

8or"ue nosotros somos

ese e'ército limpio de cachorros

con un diente en la lengua y un puño en cada lance


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y un amargo sudor donde acabadamente

han de caer los hombres de los dlares,

los ca'eros del caucho y del petrleo,

los "ue nos dieron lu* sin alumbrarnos,

los ricos mercaderes "ue creyeron

"ue /mérica no es de carne y hueso.

rnesto

rnesto,

hermano nuestro,

vino nuestro.

Day "ue nombrarte en risas, nue*, hino'o,

ado"uines cru*ados para dormir la siesta

y recostados codos en estaños.

Day "ue nombrarte arriba, en un andamio

>de all# te nos ca#ste>>

alegre de gorrin, cant(ndote vivas madrugadas,

saturando tu pecho de amistades.

! ahora, dime,

¿de "ué alpargata est(s en ese mundo,

en esa copa a*ul, en la mensa'er#a


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de estrellas y de vientos?

Day otro olor a casa en el boliche.

!a no est(n los barriles, las mesas malparadas,

ya no est( nadie, nada, todo cambi, se fue,

murieron los genioles, todo ha muerto.

-u paso est( en la calle, cru*ando el ado"u#n,

ado"uinando el barrio,

mir(ndote hacia adentro la cara del traba'o.

E en el andamio, cayéndote en estrella.

E en el vinoso amor a los muchachos.

E en nuestro cora*n derecho,

record(ndote.

l silln

2añana gris y nadie "uiere recogerte.

unto al cordn de la vereda,

tu bordadura de años, tus escombros.

¿Quién descans all#?

¿Qué fatiga encorvada de horno y pala?


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¿Qué rom(ntico amor caridolente

en tus primeras lunas de follet#n y arpa?

¿2i madre, con su rostro de hortensia entre las nubes?

4n las horas de siesta le gustaba

"uedarse en una sala con retratos5

¿2i abuelo? ¿E el primer gringo amigo de mi abuelo,

a"uel "ue ahorraba moneditas para comprar postales?

! en las veladas de peinetn y polca,

¿"ué tornadi*o a*ul torneado

co"uete en tu estreche* de nido de abanicos?

¿! "ué cosas tuviste cerca tuyo?

¿Qué relo' de cucú, "ué mirlo en 'aula,

"ué pec#olo ro'o, "ué digno piano?

¿Qué reli"uia clavada en la pared

te mir tanto tiempo con los o'os son(mbulos?

¿Qué torreones de sueños se ve#an

desde tu sitio? ¿Qué pesares borrados?

2i madre no desconoci tu historia.

Auando yo te llevé, se sonre#a.

Ona sonrisa llena de pasado.

2añana gris y nadie "uiere recogerte.

-odo tu tiempo ha terminado.


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Coberto /rlt

8ara él no fue el (gape, la peña, el capell(n,

el afrancesamiento afeminado,

ni el suplemento a*ul de los domingos,

ni los señores dulces biselados.

-uvo una cara de color de loco.tuvo una %auta de color estaño.

-repaba a los tranv#as,

andaba sin amor, sin pasamano,

$l#pica en el gesto,

virulencia en la mano.

)o"ue su cara de color de loco.

-oc su %auta de color estaño.

8escaba encanallados mercaderes,

blenorr(gicos puros, metodistas,

lesbianas, sueños desarticulados,

incorregibles vie'as con olor a cama,

incestuosos contentos, parricidas,

burdeles con sabor a llanto.


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9lasfem y escribi.

Aon todo el cora*n, todo el cansancio.

Aap#tulo a cap#tulo nos describi la piel,

nos mostr gorrioneras de hambre %aca, largos

galpones duros donde el dolor dol#a,

9uenos /ires cayéndose son(mbulo.

nca'on verdad, refriger la muerte.

Fum el pucho porteño, tom su trago.

Aon su cara de loco se fue un d#a.

Aon su %auta toc todo el estaño.

9oca uniors

Ono sabe el color bandera sueca

desarrancado gol grito del hincha,

vocacin de este 9oca boca llena,

tictac de historia de tablones

chuenga a chuenga

Ono siente la sangre de a*ul>oro

metiéndose en las venas

por un punto de m(s, por una nada.

! ocurre "ue ni almuer*o ni merienda

tienen algo "ue ver,


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ocurre "ue la novia *aguanera

o el padre encabe*ando los domingos

miran pasar la tarde bi*cochada

y esperan como espera,

pasivamente el lunes.

Ono se va volado, est( de loco al paso,

refuer*a el cora*n, grita sin grieta,

aplaude el gol sellado en la gambeta,

siente su af(n,

lo sigue hasta en la seBta ! siempre, cuando ese sol domingo color p('aro

le pega en la cabe*a,

cuando tiene en capilla la memoria

o en blanco la leyenda,

suelta nombres con nombres a medida

"ue los nombres lo sueltan+

tesoriere capando los penales,

bidoglio con refr(n en cada pierna,

la**atti semafrico a las puntas,

cherro $rmando la pelota para una ida y vuelta,

arico llev(ndola al desprecio,

varela en boina suelta,

sarlanga como dulce golosina,

angelillo maestro, $lsofo poeta.

/s#, de 9oca en boca,

lo inconsolable tiene


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consuelo de domingo por la siesta+

léBico libre, loco levantado, potrer#o de $esta.

Dacer la %or de boca'uniors,

hacerlo con belle*a,

hablar del pueblo pobre

"ue sin pedir permiso

se vuelca hacia la i*"uierda

es una primavera de cosas hipotéticas+

¿"ué pensar(n los cl(sicos,"ué pensar( la golondrina béc"uer,

"ué espronceda?

No sé.

8ero ese pueblo vivo "ue empu'a y desempu'a,

"ue parla y parlamenta

es el único eco de estas voces

y el único "ue cuenta.

:iéndolo andar de 9oca al hombro,

de cora*n con "uince estrellas,

de pasin sin corbata,

le digo este poema.

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