L A A S E S O RÍ A

Virginia García Romero -2006-

LA ASESORÍA DESDE UNA PERSPECTIVA

DINAMIZADORA


GIRO EN EL PAPEL DEL ASESOR/A

LA PERSONA ASESORA

COMO UN AGENTE DE CAMBIO

EXTERNO

LA PERSONA ASESORA

COMO FACILITADORDE CAMBIOS

CURRICULARES Y

ORGANIZATIVOS


DOS CONCEPCIONES DEL PAPEL ASESOR (Bolívar)

1- La de un técnico especialista o experto que domina determinados contenidos o habilidades en función de los cuales resuelve los problemas que se planteen.

2- La de un agente de cambio que trabaja conjuntamente con el profesorado, como colaborador en la identificación y solución de problemas, ejerciendo su principal función como dinamizador de los procesos de toma de decisiones del profesorado.


Este 2º enfoque de colaboración supone:

Crear una relación de igualdad entre asesoras/es y profesoras/es para que el intercambio comunicativo provoque una reflexión conjunta de la situación, deliberando de manera compartida sobre la situación y sobre las decisiones a tomar.


PERFILES DEL PAPEL ASESOR

Fernando Hernández señala que el o la asesora cuenta con una capacidad reflexiva que ayuda al análisis de la práctica profesional, de manera tal, que la construcción de la realidad se establece, mediante este intercambio entre el personal asesor y las personas que son asesoradas. Esta conceptualización permite superar visiones, en los cuales, la persona asesora es quien dice qué debe hacerse y establecerse, de manera lineal, los procedimientos y acciones por seguir.


persona centro

que asesora docente

PAPEL DE LA PERSONA ASESORA EN EL PROCESO DINAMIZADOR DE TOMA DE DECISIONES

Reflexión,Negociación

Y papelfacilitador


ARGUMENTOS A FAVOR DE ESTE NUEVO ENFOQUE

Jesús D. Segovia nos dice que el tipo de asesoramiento que implica el establecimiento de relaciones verticales con las personas asesoradas, viene fracasando en la educación.

Segovia propone que se debe ”dosificar con equidad el ejercicio del saber como poder, con el de la autonomía y profesionalidad del centro y sus profesores, hasta llegar a establecer un sabio y productivo consenso”.


ASPECTO A CONSIDERAR…

Si bien es cierto que no debe existir una relación vertical en el asesoramiento, tampoco debe caerse en el otro extremo de subvalorar el conocimiento y la experiencia de las personas asesoras, ya que éstas pueden aportar, mediante las capacitaciones, una visión general de los procesos la cual conlleve a un trabajo más independiente de los centros docentes.


Es en este sentido que Bolívar considera que la capacitación constituye una función muy importante, dentro de la labor asesora. El autor afirma que debe favorecerse la planificación de las acciones formativas, ya que mediante éstas, es posible aprender de la práctica. “En lugar de proporcionar medios o recursos puntuales, a la larga es más exitoso capacitar al profesorado para que pueda resolver, por sí mismo, los problemas cotidianos que, en estos ámbitos, se vayan presentando”.


ENFOQUES DE ASESORAMIENTO PEDAGÓGICO

La más completa y reciente revisión sobre los enfoques de asesoramiento pedagógico ha sido la realizada por Nieto que plantea cuatro:


1. INTERVENCIÓN: el asesor es un experto que ejerce su autoridad, está movido por intereses de productividad, rendimiento y control y actúa mediante un proceso técnico y lineal.


2. FACILITACIÓN: el asesor/a estimula al profesor/a y fomenta un contexto de comunicación, relevante y significativo para ambos. Su objetivo es que el profesorado alcance la autonomía y responsabilidad en la resolución de los problemas. Utiliza estrategias no directivas y concede gran importancia a las situaciones informales de asesoramiento ya las conversaciones personales.


3. COLABORACIÓN TÉCNICA: entre la persona asesora y el profesorado hay una corresponsabilidad práctica, adaptación mutua y convergencia de perspectivas. El asesor/a es un colega, pero, a diferencia del anterior, en el que se pone el énfasis en las perspectivas y significados de los profesores/as, en este enfoque los criterios de eficacia para la mejora son priorizados, en aras de la razón instrumental que dirige desde instancias superiores el cambio o innovación impuestos.


4. COLABORACIÓN CRÍTICA: el asesoramiento es una relación socialmente comprometida, de solidaridad. Las decisiones son participativas y democráticas. Hay una corresponsabilidad ideológica. La persona asesora es una coparticipante y una trabajadora social que se mueve dentro de un constructivismo emancipatorio.


DEFINICIÓN DE ASESOR (según Serapio Gª Cuesta y Salvador Guerrero)

Estos autores consideran al asesor/a como una figura clave en la formación permanente y tras analizar la evolución de éstos en los centros de profesores en los últimos años entienden por asesor/a :

“aquella persona capaz de ser un profesional del aprendizaje, así como un mediador entre los conocimientos y las personas que deben adquirirlos. El asesor /a debe ser coherente entre su teoría

y su práctica, y asumir personalmente los valores que pretende transmitir. Además, su actuación debe ser fugaz, en el sentido de que los

sujetos a los que forma devendrán en seres autónomos, y por tanto, prescindirán del asesor como elemento dinamizador.


DESTREZAS BÁSICAS CLAVES EN LA FORMACIÓN DEL ASESOR/A

1. FACILIDAD INTERPERSONAL: personas abiertas, comunicativas y con trato directo.

2. FUNCIONAMIENTO EN GRUPO: tener la capacidad de facilitar el trabajo entre compañeros/as conocimiento de estrategias de dinámicas de grupos, etc.

3. FORMACIÓN Y DESARROLLO DE CURSOS: ser capaz de organizar e impartir cursos interesantes sobre la materia en cuestión.

4. FORMACIÓN DE EXPERTO: amplia experiencia docente, con domino Del oficio de enseñar, diestro y conocedor de recursos.


5. CONOCIMIENTO CURRICULAR: tener un conocimiento profundo de la teoría curricular propia de su materia.

6. SER BUEN ORGANIZADOR: tener la capacidad de definir estructuras de trabajo, tiempo de las actividades,…en definitiva, saber organizar.

7. TENER INICIATIVA: proponer actividades y dirigir las acciones.

8. CREAR UN CLIMA DE SEGURIDAD Y CONFIANZA : desarrollar un sentido de apertura, sin miedos, tener buenas relaciones, promover el

sentimiento de confianza y eficacia.


9. MEDIADOR DE CONFLICTOS: ser capaz de resolver o mejorar situacionesen las que hay intereses encontrados.

10. LOCALIZADOR DE RECURSOS: conocedor de los recursos existentes, proporcionando información sobre los mismos.

11. DIAGNÓSTICO INDIVIDUAL: tener ideas claras sobre las necesidades de los profesores/as como miembros individuales de una organización.

12. DIAGNÓSTICO DE ORGANIZACIONES: tener ideas claras sobre las necesidades de la escuela como organización.


13. SER COLABORATIVO.

14. SABER GESTIONAR Y CONTROLAR TODO EL PROCESO DE MEJORA


ROLES DEL ASESOR/A (Killión y Harrison)

1. Formador/diseñador: especialista que ayuda a otros a adquirir

nuevos conocimientos,

destrezas y actitudes. Los asesores/as deben ser conocedores de teorías del aprendizaje y expertos en el currículum de su propio de su área.


2. Proporcionador de recursos.

3. Gestor de programas: El asesor debe promover, a veces, el desarrollo

de programas de innovación.

Esto supone un cierto liderazgo

así como capacidades de gestión

y coordinación.


4. Consultor: Es una persona

que tiene una posición

de influencia sobre personas

o grupos, que lo ven como un elemento referencial.


5. Facilitador de tareas y procesos:

Facilita los procesos de mejora y apoya el trabajo de grupos.


6.Catalizador de cambios:

Sugiere nuevas ideas, planteando nuevas formas de actuación más eficaces.


7. Seguimiento: Apoya a los profesores/as y a las escuelas

en la aplicación y

transferencia de

conocimientos en situaciones prácticas.


MODELO DE ASESORAMIENTO

1. Establecer una relación de colaboración, no imposición, con el profesorado a la hora de asesorarles/apoyarles en las decisiones educativas que tienen que realizar.

2. Partir de la premisa de que el cambio y la mejora en la escuela se produce desde dentro de ella, teniendo que ser éste, por tanto, sentido y planificado por todos sus integrantes.


3. Tener en cuenta las necesidades del profesorado, sus demandas, que sean ellas el objetivo prioritario de la intervención. Si una escuela no vive un tema como necesidad, no se implica en él, por mucho que el asesor incida para intentar solucionarla, es difícil que encuentre respuesta.


4. Abordar estas necesidades conjuntamente con el profesorado, buscando una corresponsabilidad en las posibles decisiones. El problema no es el asesor sino la escuela, y su intento de solución corresponde a todos los que la integran, utilizando sus recursos y posibilidades o estableciendo los medios de conseguirlos.


5. Conocer, reflexionar críticamente sobre la práctica docente, sus estrategias, concepciones teóricas que sirvan como punto de referencia para ir creando un lenguaje común y compartido persona asesora-profesorado.


6. Establecer una relación complementaria, no jerárquica entre profesorado-persona asesora. El asesor/a no es el que ha de dar las soluciones, sino que la búsqueda de ellas es una tarea conjunta.


7. Conocer y respetar los cauces formales de transmisión de información y toma de decisiones establecidos por la escuela.

8. Utilizar una metodología acorde, que apoye estos planteamientos, como puede ser la resolución de problemas.


9. Esta metodología debe incidir en la producción de procesos de participación, análisis, intercambio, sistematización y acotamiento de necesidades, así como de negociación de la planificación de las decisiones.


10. Las actuaciones de la persona asesora irían encaminadas a trabajar con la escuela de forma global, más que concreta; utilizar estrategias proactivas más que reactivas a los problemas; apoyar al profesorado en la contextualización del currículum, revisión y análisis conjunto de la práctica, fomento de la formación entre iguales, etc.


bibliografía

Bolívar, A. (1999). El asesoramiento curricular a los establecimientos educacionales: de los enfoques técnicos a la innovación y desarrollo interno.

Hernández, F. (1999). La construcción del saber del asesor. Revista de teoría, Investigación y Práctica educativa Qurrículum.


Segovia, J. (2003). El asesoramiento a centros educativos, una cuestión de saber, poder e identidad.

López G. Mª Luisa y Muñoz Deleito Pilar (1994). El asesor escolar ¿Es necesario un modelo?. Cuadernos de pedagogía nº 226

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