“LA EVOLUCION DEVICA” - Sociedad Teosofica...

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RAMA RAKOCZY RESUMEN DE LOS COMENTARIOS REALIZADOS EN EL SEMINARIO ACERCA DE “LA EVOLUCION DEVICA” Los Molinos (Madrid) 7, 8 y 9 de Noviembre 2008

Transcript of “LA EVOLUCION DEVICA” - Sociedad Teosofica...

RAMA RAKOCZY

RESUMEN DE LOS COMENTARIOS

REALIZADOS

EN EL SEMINARIO

ACERCA DE

“LA EVOLUCION DEVICA”

Los Molinos (Madrid) 7, 8 y 9 de Noviembre 2008

Deva, como adjetivo, significa:

Divino, celeste, glorioso, resplandeciente.

G. T.

INDICE

Tema 1 Qué es el Reino Dévico.

Tema 2 Devas y Elementales.

Tema 3 El Hombre y la Evolución Dévica.

Tema 4 Jerarquías de Devas y Elementales.

Tema 5 El Hombre - Deva.

Tema 6 El futuro del Reino Dévico y el Hombre.

Diagrama Evolución de la Vida

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Da comienzo el Seminario sobre La Evolución Dévica, a las 9,45 horas del día 7 de Noviembre de 2008, en los Molinos (Madrid).

Inicia la sesión Fernando Pérez Martín, haciendo una breve introducción al seminario, seguido de una invocación a los Grandes Seres y de una meditación a los Devas:

INTRODUCCION AL SEMINARIO

Cuando en el mes de Abril al término del Seminario sobre La Conciencia, se propuso la posibilidad de llevar a cabo otro trabajo grupal acerca de la Evolución Dévica y fue aceptada la propuesta, de forma inmediata pensé que lo acordado ofrecía retos no abordados con anterioridad y que, sin duda, el esfuerzo que íbamos a realizar significaba una osadía, pero, como en una ocasión dije, bendita osadía.

En efecto, tratar un tema que se produce mayoritariamente en planos de manifestación allende el físico, representa un gran reto habida cuenta de que la gran mayoría de los participantes, sino todos, no disponemos de la capacidad de observar personalmente a estas entidades y hemos de basarnos en cuanto nos han ofrecido u ofrecen quienes si que pueden tener ese contacto y recordarlo, con nuestros hermanos de esa evolución paralela.

Pero, aunque como vengo de decir, no seamos capaces de ver esos seres, aunque en el campo no es muy difícil ver a algunos elementales, es muy frecuente tener la sensación de estar en presencia de uno de ellos, es decir, sentir su presencia, lo que puede suceder en cualquier lugar donde uno se halle, sobre todo si se trata de reuniones como las que van a tener lugar este fin de semana.

Así pues, aunque sin duda usemos nuestra mente, y si puede ser la abstracta, tanto mejor, para interiorizar cuanto tratemos, para que consigamos un más favorable resultado, el trabajo ha de tener intención intuicional o buddhica, para lo cual no habremos de expresar internamente ninguna intención especial, la captación del trasfondo de cuanto tratemos se producirá de forma más intuitiva que intelectiva.

Hago votos para que nuestros esfuerzos en este Seminario nos conduzcan a un mejor conocimiento de los seres brillantes y un acercamiento más fraternal hacia ellos.

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INVOCACION

Que los Santos Seres cuyos discípulos aspiramos ser, nos muestren la Luz que buscamos y nos den la gran ayuda de su compasión y sabiduría.

Hay una paz que sobrepasa el entendimiento, mora en el corazón de aquellos que viven en lo eterno. Hay un poder que renueva todas las cosas, vive y actúa en aquellos que

reconocen la unidad del Ser.

Que esa paz descienda sobre nosotros y que ese poder nos eleve hasta que nos encontremos donde se invoca al Iniciador Único y veamos resplandecer Su estrella.

MEDITACION

La vida nos impulsa y nos conduce para que aprendamos ciertas lecciones, una de las más importantes es la referida a la Vida Una, la Unidad.

La Vida impulsa y dirige a nuestros hermanos devas para que construyan formas y así cumplan las Leyes de la naturaleza.

La Vida impulsa y dirige a los devas y a los seres humanos, para que al llegar el momento adecuado, ambas evoluciones, actúen como una Unidad.

¡Salve! Hermanos Devas.Rogamos vuestro auxiliopara que aprendamos a ayudar a la evolución,para que aprendamos que hemos de amar,para que aprendamos a ser fraternales,para que este estudio acerca de vosotros que hoy iniciamos,sea propicio a nuestros semejantes.

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Tema 1 - Que es el Reino Dévico – Introducción: Alfonso del Rosario.

Contemplar el Reino Dévico desde cualquier ámbito de la realidad, es adentrarse en los confines de la materia y de la energía, en los orígenes del Universo, de nuestro planeta, de la naturaleza, incluso del mismo hombre.

Si observamos desde el lado oculto cualquier manifestación o creación objetiva, ya sea humana, solar o planetaria, se puede apreciar siempre la unión e interrelación de dos evoluciones o reinos que impregnan con sus vidas el espacio inconmensurable del cosmos. Una de estas evoluciones es la de los Logos, que diseñan, planifican y crean hasta en los más mínimos detalles cómo va a ser el universo o planeta que van a materializar. La otra evolución es la de los Grandes Arcángeles o Mahadevas, los constructores de los mundos y universos, que con sus vidas impregnan e interpretan esas intenciones e ideas logoicas y las plasman y condensan, llevándolas a la manifestación tangible y objetiva en cualquier lugar del espacio.

En el macrocosmos septenario, el Logos viene a ser el Gran Arquitecto que en Su mente trascendente traza las líneas maestras de cómo, cuándo y en qué lugar del espacio va a tener lugar Su manifestación, planificando hasta en el más insignificante detalle, todas las posibles características y alternativas que se pueden presentar, a través de los arquetipos y leyes que va a poner de manifiesto en dicha manifestación. Los Arcángeles o Mahadevas junto a su cohorte casi interminable de devas y elementales subalternos de distintos grados y órdenes, crean y construyen cualquier planeta o universo, con arreglo a esa intención, leyes y diseños arquetípicos del Logos. De la misma forma, y a menor escala, en el microcosmos humano sucede lo mismo. Aplicando la Ley oculta de analogías y correspondencias, que dice… igual que es Arriba es Abajo... igual que es Abajo es Arriba…, podemos comprobar que el hombre es el maestro artesano, el creador por excelencia y los devas o ángeles junto con los elementales, son los obreros, que construyen y plasman objetiva y tangiblemente cualquier idea y pensamiento en el espacio y en el tiempo de nuestro mundo.

Hay dos axiomas o frases con un gran contenido oculto, que aclaran en gran medida este gran misterio de creación y construcción de formas, en donde se pueden constatar palpablemente que las relaciones humano-dévicas, son las bases sobre las que se asientan cualquier tipo manifestación, tanto subjetiva como objetiva. Los resultados, visibles o no, de la interrelación e interacción de estos dos reinos, el humano y el dévico, desencadenan toda una serie de acontecimientos causa-efecto, que inciden positiva o negativamente en todos los seres y reinos de la naturaleza, así como también en los elementos, tierra, aire, agua y fuego y por consiguiente, en la evolución de toda la vida planetaria.

Una de estas frases o axiomas, dice que… la energía sigue al pensamiento…, y la otra frase dice… el hombre crea y el deva construye… Estas dos afirmaciones, son a mí entender, muy esclarecedoras porque describen en sí mismas parte de las claves ocultas sobre las que se asientan el misterio y la magia de los grandes taumaturgos y adeptos que nos han acompañado a lo largo y ancho de la historia de la evolución de la humanidad y de nuestro planeta.

Estas dos frases si se analizan en profundidad, nos conducen a comprender de alguna manera, parte de las claves de la mecánica y funcionamiento de la evolución de las vidas y de las formas en el macrocosmos. En este sentido, la ciencia y la Sabiduría

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Antigua coinciden al contemplar el espacio, como la matriz del universo donde surgen, se crean y desaparecen galaxias, universos y planetas. Coinciden también ambas, ciencia y ocultismo, en afirmar, que el espacio está en constante proceso de expansión y de cambio y por tanto también de evolución.

Lo que queda todavía por descubrir a la ciencia, es que este permanente y constante proceso de transformación y evolución de cualquier tipo de materia y de forma a escala macrocósmica, se realiza siempre a través de la colaboración e interrelación de Logos y ángeles o devas. Este mismo hecho se puede trasladar también al microcosmos, donde la interrelación y colaboración humano-dévicas tienen los mismos fines y objetivos, que no es otro que el de la evolución de los reinos inferiores, el animal, vegetal y el mineral.

Antoine Lavoisier, con el descubrimiento y el enunciado de la Ley de la Conservación de la Materia, explicó muy sucintamente esta interrelación humano-dévica al decir que la materia o la energía, ni se crean ni se destruyen, solo se transforman.

Al considerar la ciencia que la materia, está constituida por átomos y subpartículas atómicas, cargadas de grandes cantidades de energía y que a su vez, la energía cuando se concentra en algún punto del espacio es capaz de dar lugar a la materia, confirma todo lo expuesto sobre este binomio universal masa-energía en el eterno proceso de transformación y evolución de las formas que tiene lugar en cualquier nivel de la realidad. Un caso típico de este hecho, lo tenemos en la liberación de energía que se desprende cuando el uranio o el plutonio se someten a un proceso de fusión nuclear.

Esta exposición científica, confirma la realidad oculta de que la materia y la energía sean cuales sean sus características o peculiaridades, está constituida en cualquier nivel de la realidad, por inteligencias en diferentes grados de desarrollo evolutivo y en constante proceso de transformación. Se puede deducir entonces que las partículas y subpartículas atómicas, son la base estructural sobre la que se sustenta cualquier forma, ya sea del macro o microcosmos y por tanto, expresan en sí mismas la realidad de estas entidades devico-elementales que encarnan y animan con sus vidas las estructuras materiales sobre las que se asienta nuestro planeta y el universo.

Indagar o tratar de explicar el origen de un reino o evolución como es el dévico, es como adentrarnos en el misterio insoslayable de la aparición por primera vez (si es que hubo una primera vez), de la manifestación del Gran Arquitecto Universal, Dios, o como queramos llamarlo, que como podemos suponer lógicamente, si es que hubo una primera vez, debió de estar acompañado desde entonces de ese otro excelso ser mahadévico o arcangélico y del interminable séquito de incontables entidades dévicas y elementales, que necesitaba para concretar y hacer tangible cada uno de los planos y subplanos del cosmos.

A nuestro nivel, al del hombre que lucha cada día por emanciparse de este mundo de dolor y sufrimiento y que tan difícil encuentra las oportunidades y condiciones para poder desarrollarse como un fiel colaborador del Gran Plan y como un humilde servidor de la Jerarquía Planetaria, la comprensión del mundo oculto, de su funcionamiento y de las repercusiones que nuestros pensamientos (que no dejan de ser invocaciones dévico-elementales), tienen en nosotros y nuestro entorno, son de vital importancia para su desarrollo espiritual. Debemos de llegar a entender y a comprender que el hombre es un microcosmos, una entidad septenaria, mitad hombre y mitad deva, que evoluciona en dos aspectos paralelos y complementarios, uno espiritual y el otro dévico. Que los

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hombres y los devas son integrantes de dos reinos que se interrelacionan íntimamente, ayudándose a evolucionar mutuamente, compartiendo conciencias egoicas y dévico-elementales, cada una de ellas con sus propios intereses e inclinaciones evolutivas, cuyo fin común es el de lograr, expandir dichas conciencias para dar el salto al siguiente reino. En el caso del hombre al quinto reino, el espiritual y en el de los elementales, al reino angélico o dévico, valiéndose de los vehículos periódicos que los devas elementales construyen al Ego para evolucionar en los planos inferiores.

Las características de pureza, sutilidad y orden jerárquico de los devas que colaboran a todos los niveles con el reino humano, lógicamente varían según la pureza, sutilidad y evolución de los hombres que invoquen cualquier actividad de estos seres, con sus pensamientos, deseos, emociones o aspiraciones. La calidad y cualidades de los vehículos periódicos del hombre y las entidades dévico-elementales que los conforman, afectan lógicamente también a los átomos permanentes que cada hombre posee, que como código genético-espiritual necesita para su evolución.

En esta presente etapa de la evolución planetaria, donde la confluencia y unión de las jerarquías dévicas de alto rango espiritual de la constelación de Acuario de características mentales e intuitivas y de las del 7º Rayo azul-violeta de la magia y ceremonial, darán como resultado en un próximo futuro a la aparición de un nuevo orden mundial, a una nueva era de trabajo y colaboración humano-dévico cada vez más conscientes y productivas, más estrechamente unidas en la manifestación de los grandes arquetipos divinos que convertirán a nuestro mundo en un planeta sagrado, facilitando así que la humanidad de ese gran salto hacia el quinto reino, el espiritual y a la vez facilitar que nuestro Logos, de a su vez también un gran salto evolutivo al conseguir una nueva iniciación a escala cósmica.

El triángulo planetario, constituido por el Logos en el vértice superior, manifestando Su voluntad, Su fuerza, Su poder e intención creativa. Por la jerarquía planetaria localizada en el vértice derecho, proyectando hacia el otro vértice, la inspiración del pensamiento, los planes, propósitos e intención del Logos. Y la focalización en el vértice izquierdo, de las dos jerarquías la humana y la dévica actuando como una sola entidad, activa y coherente en la construcción objetiva y tangible de los arquetipos y planes del Logos, es a mi modo de ver, una de las claves ocultas sobre las que se asienta el misterio de este próximo salto cualitativo y cuantitativo de todas las vidas que viven y evolucionan en este gran Ser, que es el Logos de nuestro planeta.

COMENTARIOS

• Los devas (no los elementales), usan la energía conscientemente.• Los elementales (no los devas), usan la energía inconscientemente, siguiendo las

leyes ocultas de la naturaleza.• En la India, los devas son llamados dioses, devas, etc, ¿por ignorancia o porque

les dan un más amplio sentido a dicha afirmación?• La energía es vida dévico-elemental, que evoluciona en simbiosis con la materia.• El hombre, los devas y los elementales se complementan como jerarquías

creadoras en nuestro planeta.• El hombre crea con sus ideaciones, pensamientos, sentimientos y emociones y

los devas y elementales se encargan de construir esas formas, energetizarlas y darles vida.

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• Existen tantos grados evolutivos de hombres como de devas. De la misma forma, hay tantos grados evolutivos de elementales como de animales.

• Los elementales “esperan” las órdenes de los humanos y de los devas por considerarlos superiores.

• El deva trabaja siempre en favor de la evolución, el hombre no. • El deva debe encarnar al menos una vez en el reino humano.• Los logos y los arcángeles o mahadevas, en el ámbito de creación y construcción

de mundos y estrellas, deben estar al mismo nivel evolutivo.• Hay un triángulo formado por los hombres, los devas y los elementales.• En la aplicación de las Leyes de la naturaleza, tanto los devas como los

hombres, propiciamos la actividad de los elementales:o Por los hombres, conscientemente, cuando han llegado a un cierto nivel

evolutivo.o Por los hombres, inconscientemente, que es el caso de la mayoría de la

humanidad actualmente.o Por los devas, siempre de acuerdo con el plan Divino.

• Los dos reinos, el humano y el dévico, contribuyen a la evolución de los elementales.

• La evolución dévica plasma en la manifestación los planes del Logos, los diseños arquetípicos. El Logos diseña los planetas que se van a materializar. Es el Gran Arquitecto, decide dónde, cuando y cómo se manifiestan los planetas a través de los arquetipos.

• Sería interesante hacer un estudio sobre la interrelación e integración Logos-devas y hombre-deva/elemental.

• La materia y la energía, ni se crea ni se destruye, está en constante proceso de movimiento, de cambio y de transformación.

• ¿Hubo una primera vez, de una gran manifestación? ¿Habrá una última vez de una gran manifestación?. Son preguntas que podríamos hacernos si somos capaces de oír en el silencio de nuestros corazones.

• ¿De qué forma se va desarrollando desde los reinos inferiores al humano y también en el reino dévico-elemental, la conciencia inconsciente a la conciencia consciente?

• Por la lógica de la Ley de la evolución, la Tierra se convertirá en un futuro en un planeta sagrado, como ya lo son algunos de nuestro sistema solar.

• ¿Por qué nos sentimos solos? ¿Será quizá porque nos falta esa otra mitad dévica que sólo la intuimos pero que no la vemos ni reconocemos?

• El universo “nos crea y nos absorbe”. Porque después de todo, somos Uno en el Todo.

• La mente nos hizo ser separativos. Los devas no son separativos porque no necesitan la mente para evolucionar. Quizá, pueda ser que en algún momento la tuvieran, y ya no les hace falta para evolucionar, como sucede a los altos iniciados de la Jerarquía planetaria.

• El efecto “vibración”, es el aspecto interno que atrae o repele a ciertas entidades dévico-elementales para colaborar con el hombre en su camino evolutivo de estructuración y creación de formas.

• Las aspiraciones, también crean y potencian la evolución dévica al crear una forma grupal en las reuniones, como las de este seminario.

• Somos hijos de la necesidad, porque somos necesarios para colaborar con los devas-elementales en el conjunto de la evolución planetaria.

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Tema 2 - Devas y Elementales - Introducción: Juan Rodríguez.

Durante nuestro recorrido en el tren de la vida, pasamos una y otra vez por las cuatro estaciones, primavera, verano, otoño e invierno, todas ellas proyectadas por el mismo Arquitecto, durante el viaje vemos como va cambiando el paisaje en la naturaleza, todas las formas que vemos y los cambios que se originan en ellas, son obra de los devas o ángeles, quienes interpretando correctamente el plan divino ponen de manifiesto fielmente la belleza y grandiosidad de Su obra, ayudados en su trabajo por los espíritus de la naturaleza o elementales.

Cuando la voluntad del Gran Arquitecto o el Logos se pone de manifiesto y proyecta su plan, a su mandato sagrado se movilizan infinidad de huestes y jerarquías dévicas o angélicas, desde los poderosos arcángeles regentes de cada uno de los planos del universo, hasta las pequeñísimas criaturas etéricas involucradas en el proceso de construcción de cualquier átomo de materia física. Su misión es la de construir todas las formas posibles de la naturaleza, dinamizan la sustancia etérica condensada, actuando posteriormente a manera de hábiles escultores, modelando y construyendo todas las formas imaginables, desde la del simple átomo químico hasta aquellas soberbias e indescriptibles estructuras que constituyen los cuerpos o moradas de los logos planetarios y aún del propio Logos solar, es decir, los planetas y el sol.

Son trabajadores incansables, no conocen la fatiga y siempre están dispuestos a colaborar, participando lo más estrechamente posible en todos los sectores de la vida humana y en todas sus actividades. Sus cuerpos y los de las hadas son más variados que los de los humanos, representan seres muy bellos, etéreos y con semejanza a los humanos.

Al igual que los seres humanos los devas son también seres que están evolucionando, son nuestros compañeros de viaje en el camino hacia la misma meta en este planeta y en este sistema solar, su evolución se desarrolla principalmente por medio del servicio, viven fraternalmente, su sentido impersonal es un inconveniente para su evolución y por tanto han de encarnar al menos una vez en el reino humano. Durante el viaje por el camino de la evolución nos acompaña en todo momento un hermano al que llamamos Ángel de La Guarda, ayudándonos y previniéndonos de cualquier tipo de peligro, en la medida en que seamos capaces de conectar con él.

Los espíritus de la naturaleza o elementales, son uno de los peldaños inferiores de la evolución dévica, Existe una gran variedad, su aspecto y sus gustos varían según su estado evolutivo, aunque pueden adoptar la forma que deseen, la típica que se halla en la base de cada especie y de cada familia es la humana.

En los primeros tratados que se hicieron, se les dio el nombre de nomos a los espíritus de la tierra, Ondinas a los del agua, Salamandras a los del fuego, Sílfides a los del aire, cada uno de estos cuatro grupos tienen infinidad de especies diferentes que varían en rasgos, colores, e inteligencia. Sus cuerpos son etéricos excepto los de las sílfides que son de materia astral.

Están sujetos a la rueda de nacimientos, y la duración de la vida varía muchísimo, en algunos es muy corta, mientras que en otros es mucho más larga que la del ser humano, no sienten temor a la muerte, desconocen la fatiga, el dolor, el miedo y no son conscientes del daño que en algunas ocasiones puedan hacer.

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Trabajan en la construcción de las formas y participan en todos los fenómenos de la naturaleza y mediante la relación y colaboración con los devas, trabajan para que los reinos mineral, vegetal y animal, evolucionen tanto en belleza como en sensibilidad, convertidos así en aprendices de los devas o ángeles, siguiendo sus instrucciones, trabajando a sus órdenes y por medio de la especialización alcanzan la individualización e ingresan en el reino dévico o angélico.

Son alegres y divertidos y el trabajo para ellos parece ser como un juego, el Sr. Hodson en una de sus observaciones cuenta que vio una amplia variedad de formas etéricas y astrales, grandes y pequeñas, trabajando juntas, cooperando entre sí de forma organizada, dando color a las flores, cerniéndose sobre hermosos lugares, jugando sobre la olas y las cascadas, danzando en el viento y en los rayos del Sol.

Evitan la compañía de los seres humanos, pues no comprenden ni les gusta nuestro comportamiento agresivo hacia la naturaleza, aunque no son todos los que la evitan, ya que por ejemplo los duendes prefieren habitar en las viviendas de éstos y son atraídos por afinidad de vibraciones con el grupo familiar.

Hay otro tipo de elementales que no tienen vida propia, creados artificialmente consciente o inconscientemente, cuya duración depende de la intensidad y frecuencia del pensamiento, los devas suelen crearlos y utilizarlos en algunos de sus trabajos.

COMENTARIOS

• Algunos elementales se individualizan como humanos por afecto a los hombres.• Los devas o ángeles conforman las almas grupales de los reinos inferiores,

animal y mineral.• Los elementales construyen lo que se denominan “Egregores” con los

pensamientos, deseos, emociones y sentimientos de los seres humanos.• Mientras que los devas o ángeles son los maestros artesanos, los elementales son

los obreros constructores.• Existe lo que se denomina morador del umbral, o ángel de la sombra, que es el

egregor-elemental creado por todos los aspectos negativos del hombre, al que se tendrá que enfrentar en el portal de la Iniciación junto al ángel de la presencia o ángel guardián, que también es otro egregor-elemental, creado en este caso por todos los aspectos positivos del hombre.

• ¿EL ángel de la guarda es un deva encadenado a cada uno de nosotros?• Los espíritus de la naturaleza, posiblemente actúan como la conciencia del reino

vegetal.• El reino vegetal está vivificado por la Vida Una y animado por los espíritus de la

naturaleza.• El espíritu de la naturaleza, se individualiza y se convierte en deva, después de

haber formado parte de un alma grupal.• El ángel solar, conocido en la tradición oriental como Nirmanakayas o Dhyan

Choanes, acompaña voluntariamente a los Egos de cada ser humano hasta su emancipación. Sacrifican su propia evolución, para convertirse, en su conciencia superior, hasta la conclusión de la rueda del Samara o de renacimientos, hasta que ingresan en el reino espiritual. Son los auténticos vigilantes silenciosos que ayudan a despertar al Ego hacia la Vida Superior.

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• El ángel solar forma parte del alma humana.• ¿Puede ser el ángel solar, el ángel caído?• El deva carece de mente, por lo que no puede crear formas mentales, pero sí dar

órdenes a los elementales, indicándoles cómo han de “trabajar”.• Los devas ¿mimetizan a los seres humanos?; ¿sienten cariño/amor a

determinados seres humanos? ¿Les ha llevado alguna vez a convertirse en seres humanos?

• ¿Los devas actúan como la conciencia de los seres vegetales? ¿Cada árbol tiene su deva?.

• Un deva es un ser individual.• Los altos devas de las almas grupales se apoyan en los devas de inferior rango y

en los elementales.• La “humanidad es un alma grupal” donde cada ser humano tiene conciencia de

si mismo.• El hombre evoluciona por el sufrimiento y el dolor, por su identificación con su

forma-elemental.• ¿Los devas sufren? ¿Todo lo que tiene forma debería sentir y sufrir o padecer?• La forma dévico-mental no tiene espacio ni tiempo, no “actúa” con arreglo a un

espacio-tiempo igual al nuestro.• El ser humano renunció a la evolución dévica por el conocimiento del bien y del

mal. El deva no sabe del bien y del mal, porque actúa sólo con arreglo a las Leyes de la naturaleza.

• Todo lo que se crea, se descrea, se destruye, desaparece en algún momento, como cualquier forma dévico-elemental.

• Lo que está evolucionando es la mónada humana, “encarnándose” en los reinos, mineral, vegetal, animal y humano.

• El miedo es sufrimiento, es dolor, es la identificación con la forma caduca y perecedera del cuerpo físico-elemental.

Se inicia la sesión a las 16,45 h. de la tarde, con una breve meditación dirigida por Maribel Gil:

En este lugar de belleza y paz,¡Os saludamos hermanos Devas!

Respiramos sonrientes el éter dador de Vida del Sol.

Sintonizamos nuestros oídos a la armonía del universo,al canto de Vida.

Ascendemos a las alturas de la Montaña Sagrada,donde el fuego puro florece.

Solitaria es la cima.

Reverenciamos al Señor de nuestro Espíritu.

El velo se rasga de arriba a bajo,

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y lo desconocido es revelado.

El corazón y la mente flotan sobre el océano de la creación.

La percepción aumenta.

La experiencia de la vida se expande,

Y con vosotros hermanos devas,aprendemos a amar.

Tema 3 – El Hombre y la Evolución Dévica - Introducción: José Luis Fernández.

Ante todo, he de reconocer que la primera tendencia que tiene uno, con respecto a este tema, es pensar que está familiarizado con todo lo que respecta a los devas, sus funciones, sus relaciones con el hombre y la naturaleza, etc. Son entidades que, por nuestra propia educación en nuestra infancia y nuestra ocupación a lo largo de nuestra madurez intelectual, nos parecen tan cercanas y, porqué no decirlo, tan queridas que, a menudo, nos lanzamos a relacionarnos con ellos mediante nuestras oraciones, rituales, etc. sin pararnos a pensar en profundidad cuál es su verdadera naturaleza, tanto física en su sutileza, si es que admitimos que pudieran llegar a tener forma, como espiritual, ya que son emanaciones del Uno, al igual que todo lo manifestado. Por ello, cuando llegó el momento de la verdad, el de enfrentarte al papel en blanco en el que desarrollar un tema acerca de la relación entre hombres y devas es cuando uno descubre el verdadero alcance de nuestra mente concreta para aprehender y plasmar mediante el lenguaje, una naturaleza de carácter absolutamente abstracto y, por tanto, lejos del lenguaje cotidiano; es imposible para la mente puramente humana su completa comprensión.

Solo mediante la experiencia directa o, de otro modo, a través de los lenguajes puramente simbólicos y netamente esotéricos como la Cábala, es posible llegar a comprender mínimamente la naturaleza, orden, funciones y, sobre todo, esencia espiritual de las huestes angélicas.

Decimos que devas y hombres son dos evoluciones paralelas y, en cierto modo, complementarias dentro del gran Plan. Pero, ¿hasta qué punto tan íntimo están unidas estas dos evoluciones?, ¿cuál es el secreto vínculo que une a hombres y devas?, ¿pueden llegar a unirse alguna vez estas dos líneas evolutivas?, ¿alguna vez lo estuvieron?, espero que este encuentro sirva para arrojar algo de luz sobre estas y otras cuestiones que lleguen a plantearse.

Lo que sí que puedo compartir con todos vosotros, son mis propias impresiones, mis sensaciones, mis más que dudosas convicciones. Entiendo que son entidades de pura energía, algunos tienen forma y otros no. Existen entidades dévicas a lo largo de todo el espectro evolutivo, desde el elemental y la mera forma mental, hasta el arcángel rector de mundos, todos ellos manifiestan el pensamiento único y divino.

Es probable que no los veamos, pero no cabe duda que alguna vez los hemos sentido y, cada vez que pensamos en ellos, acuden hasta nosotros. Si ponemos un interés cierto y constante en ello, no os quepa duda de que estarán allí donde les requiramos, en nuestras ceremonias, en nuestros rituales, en nuestras oraciones. Hemos de tener por

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cierta esta convicción, para que nuestro trabajo diario, nuestro afán de servicio, se vean favorecidos por estas entidades, ya que, de un modo que se me escapa, tengo la intuición de que cuánto más nos acercamos a ellos, cuanto más ponemos nuestra intención en trabajar junto a ellos, más cerca están ellos de nosotros y más retribuidos espiritualmente nos vemos, ellos y nosotros, en nuestra evolución.

¡PAZ A TODOS LOS SERES!

COMENTARIOS

• La aproximación entre hombres y el devas debe de partir del hombre ya que el deva siempre está dispuesto a colaborar, por considerar al hombre parte de la naturaleza y de la evolución.

• ¿Cómo podemos aproximarnos a los Devas?o Creer firmemente en nuestro interior de que existen.o Conocerlos bien, purificando nuestros vehículos para ponernos en

sintonía vibratoria con ellos.o Por el sacrificio, la simplicidad y a través del corazón.

• Los devas construyen y vivifican los arquetipos y los símbolos que el hombre, la Jerarquía planetaria o el Logos crean para hacer posible y llevar a la manifestación el Plan de la Evolución de nuestro esquema planetario.

• Para que los devas y elementales construyan esos arquetipos y símbolos altamente vibrantes e incluyentes, el hombre ha de estar en sintonía vibratoria con los más elevados niveles de los planos a los que tiene acceso a través de:

o La práctica de la impersonalidad.o La seguridad de que se van a conseguir los resultados deseados.o El olvido de los resultados.o La correcta intención.

• El reino humano y el dévico-elemental evolucionan al unísono, interactuando e interrelacionándose mutuamente.

• Si los pensamientos adquieren vida y forma propia, independiente del pensador, con el objetivo para desarrollar la función para lo que han sido creados, esto se debe a que los devas y/o elementarles encarnan, por decirlo de alguna forma, en esas estructuras mental-astralinas para energetizarlas con sus vidas y para que realicen la misión o cumplan con los objetivos para lo que fueron creados.

• Las formas mentales, en su casi infinita gama de tipos, expresan el grado y nivel evolutivo de las conciencias humano-dévicas que las encarnan.

• Cualquier tipo de energía es la manifestación objetiva de un determinado orden de devas.

• El hombre y el deva son el creador y constructor respectivamente dentro del microcosmos.

• Cualquier suceso de la naturaleza está controlado y ejecutado por las jerarquías de devas y elementales.

• La energía atómica, el sonido, el color, etc., son actividades dévicas que el hombre comienza a controlar.

• Existe una Jerarquía muy especial de elementales constructores que actualizan constantemente todo el entramado luminoso del código genético de los átomos permanentes, que van a servir para estructurar y dar forma en cada encarnación a los vehículos periódicos de manifestación del hombre.

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• Para el ángel todo es vida.• Para el hombre todo es forma.• El deva y más aún el elemental, por sus respectivas naturalezas, siguen el impulso

de las Leyes universales.• El hombre por el libre albedrío puede o no seguir las Leyes universales.• Quizá esté relativamente próximo la consciente colaboración entre los devas y los

hombres, uniendo sus fuerzas en la consciente aplicación de las Leyes de la naturaleza, para llevar adelante el plan del Logos.

• El campo de evolución de la raza humana es el plano físico-cósmico y el del reino dévico son los siete planos cósmicos.

• Todo ser en la manifestación “toma” una forma dévico-elemental determinada, para que pueda evolucionar la conciencia que la anima.

• Los devas tienen la plasticidad para que voluntariamente adopten la forma adecuada, utilizando los arquetipos de nuestra mente.

• No todos los tipos de devas tienen la capacidad de relacionarse con todos los seres humanos.

• ¿La luz tiene forma? Un “ser de luz” ¿tiene forma?. Seguramente no, probablemente adoptan voluntariamente una forma determinada para que “podamos verles”.

• El deva ¿se mueve más allá de las dimensiones espacio-temporales conocidas por nosotros?. O ¿es que hay evoluciones dévicas en todas las dimensiones espacio-temporales?

• ¿Cómo nos ve el deva?, ¿sólo con nuestras tres dimensiones? Probablemente en nuestra forma sutil, de energías que ellos ven e interpretan.

• Acercarnos a los devas a través del servicio, puesto que ellos son servicio en acción.

• La energía sigue al pensamiento, o sea, los devas (energías inteligentes) construyen los arquetipos o las creaciones mentales de los hombres (pensamiento-materia).

• El deseo de ayudar como intención de aproximarse a los devas. Usar la doctrina del corazón, no la del ojo (mente concreta) que no es admisible para determinado tipos de devas evolucionados.

• Cuando se hace una acción desinteresada, “alguien” te ayuda.• Lo semejante atrae a lo semejante.• Somos eslabones de otros eslabones, para la vida, la evolución y la creación.• Creer o no creer algo no niega, ni afirma, su existencia, como sucede con el

reino dévico-elemental.• Es más fácil invocar a un elemental que a un deva.

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Tema 4 - Jerarquías de Devas y Elementales – Introducción: Consuelo Merino.

DEVAS:

Palabra que abarca toda la escala evolutiva de los ángeles, desde los más elevados hasta el último espíritu de la naturaleza. Cada uno de ellos tiene un gran cometido a cumplir en la evolución de lo creado. Los superiores construyen los mundos pensados por la Ideación Cósmica e incluso las formas externas de ángeles y hombres.

Las Jerarquías dévicas se extienden desde los poderosos arcángeles y regentes de cada plano universal y construyen los mundos ocultos y los planos invisibles de la naturaleza: astral, mental búdico y átmico etc. Un tipo especializado de devas construye el cuerpo físico de todos los seres existentes; otra especie o familia estructura el vehículo astral de la sensibilidad de los mismos y un tercer tipo o especie crea los vehículos mentales de los seres humanos.

Existe una gran escala en la jerarquía dévica cubriendo todos los aspectos de la vida en evolución que le son asignados.

Usualmente habitan en árboles, ríos, plantas, pantanos, montañas, y minerales. Se encariñaron prácticamente con cada elemento de la naturaleza por lo que decidieron quedarse en apoyo de la evolución del planeta. En China, por ejemplo, se cree que los Devas enseñaron los caminos para descubrir los ciclos del cultivo del arroz, la fabricación de la seda, y otras cosas.

El culto de “Espíritu de Naturaleza”, no es una creencia moderna. Los griegos y los romanos creyeron que ciertas entidades habitaban cada valle, cada estrecho, cada piscina, y paraje al aire libre. Esta misma creencia era practicada por todas las religiones del paganismo original y se ha mantenido en todas las creencias animistas.Pertenecen también a la clasificación elemental los duendes que viven en bosques y a lo largo de zonas costeras, y los espíritus domésticos y algunas veces las hadas también forman parte de la categoría elemental.

ELEMENTALES:

Un grupo inferior dentro de los “Espíritus de la Naturaleza”, son los elementales considerados como la fuerza vital en todas las cosas vivas. Habitan en los cuatro elementos de tierra, en los planetas, las estrellas, y los signos del zodíaco; y las horas del día y la noche. Están gobernados por espíritus de mayor vibración como devas o arcángeles, ambos considerados como los guardianes de la naturaleza. La Grecia neoplatónica agrupó los elementales según los cuatro elementos de la naturaleza.

Los elementales o espíritus de la tierra son el paso previo a los ángeles en la evolución cósmica y su trabajo se realiza en los mundos externos; es decir protegiendo toda la naturaleza creada desde los mundos superiores y por poderosos devas, así que intervienen en los reinos mineral, vegetal y animal a cuyo cuidado están destinados.

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Sus numerosas razas y especies determinan la cualidad idónea en los diferentes elementos a los que está adscrita su actividad, por ejemplo: ondinas, salamandras, elfos, gnomos y un largo etc.

Al igual que en los devas, la búsqueda de conocimiento sobre los elementales comenzó en los albores de las civilizaciones cuya fe se basaba de la animación de todas las cosas y alcanzo su máximo esplendor posteriormente, a principios del Medioevo a raíz del interés de los alquimistas en experimentar sobre funcionamiento de las leyes de la naturaleza y sus poderes ocultos. Buena muestra de ello son los escritos de Paracelso (por citar el más popular), sobre los elementales.

COMENTARIOS

• ¿Cómo nacen y mueren los elementales y los devas?. Por expresarlo de alguna forma, “nacen” y “mueren”, de forma similar a los humanos, teniendo en cuenta las diferencias de su entorno existencial y de sus formas de evolucionar.

• Los devas y elementales deben tener su Devachán, o algo similar, lo mismo que el hombre, si nos atenemos a la Ley de Analogía. Deben de tener su tiempo de análisis y asimilación de su etapa vital para corregir errores y programar mejor sus futuras manifestaciones y encarnaciones.

• Los devas, nacen o encarnan, cuando se presenta en el espacio una forma mental propicia y afín a ellos, ya sea creadas por un Logos, un arcángel o por el mismo hombre, para animarlas energéticamente con sus vidas y hacer que cumplan con los planes, propósitos y objetivos de sus creadores. El ciclo vital de sus existencias variarán según la intensidad, propósitos y objetivos de sus creadores.

• Con las formas mentales sucede algo parecido, ante cualquier pensamiento, deseo, sentimiento, etc., encarnará, nacerá a la existencia un egregor-elemental, para animar energéticamente con su vida a dicha forma, para que cumpla con los planes y objetivos de su creador, el hombre. Su ciclo vital, lógicamente será más efímero que el de un deva, pero también va a depender de los propósitos y objetivos del que creó y formó dicha forma egregor-elemental.

• Todo lo que tiene forma desaparece ¿o desaparece la forma y el ser sigue su evolución?.

• El deva es energía que anima a la forma (materia) cuando se presenta la necesidad (analogía: la función crea el órgano). O sea, ni se crea ni se destruye se transforma.

• La forma dévica evoluciona como la humana (de niño a adulto).

Se inicia la sesión del día 9 a las 9,45 h. de la mañana, con una breve meditación dirigida por Ana María Coelho:

Respiremos calmamente, suavemente.

Invoquemos e saudemos as Hostes Angélicas.

Estamos em completo silêncio e sentimos uma Presença.

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Essa presença envolve-nos em Luz e Amor.

Que essa força e essa Luz transbordem de nós para o mundo.

Elevemos o nosso coração em gratidão pela força e Luz recebidas.

Paz a todos os Seres.

Tema 5 - El Hombre–Deva - Introducción: Raimundo Torres.

El ser humano vivió en un remoto pasado la gloria del contacto angélico, y se apartó de sus hermanos, los devas, de acuerdo a las leyes de involución que preceden. Como las sombras preceden a la luz, fue densificando sus cuerpos sutiles hasta llegar al cuerpo más denso, el físico conocido. Su misión, en la ruta evolutiva, es recobrar la sutilidad de percepción que haga posible en un nuevo y más elevado estado de conciencia, reconocer el mundo invisible de los devas y establecer contacto consciente con él, para ultimar, de acuerdo con el gran programa cósmico, el proceso de evolución planetaria que conduce a la Fraternidad Universal.

La vida de los devas estaba tan entrañablemente unida a la nuestra como el sistema nervioso y el sanguíneo lo están dentro del organismo humano. Ambas evoluciones —la dévica y la humana—, vienen a constituir como el corazón y la mente del Ser planetario, que rige los destinos de nuestro mundo. En un aspecto más elevado, tienen idéntica misión las gloriosas potestades dévicas y las altamente evolucionadas humanidades, en relación con el Dios del universo.

Los devas actúan como agentes vinculativos dentro del cuerpo social de la humanidad. Ninguna reacción psicológica humana, desde la más leve actividad física hasta el más elevado pensamiento místico, está desligada de la actividad natural de los devas. Los devas, “representan” estados supraindividuales del ser, son las potencias que portan en sí la unidad.

Estamos invocando funciones dévicas cada vez que realizamos un acto, o evocamos un sentimiento, o formulamos pensamientos, ya que toda actividad física, emocional o mental, para ser reconocida como tal debe afectar lo esencial, siendo la respuesta a estas impresiones la expresión psicológica o social de los devas como una respuesta a la necesidad humana.

Siguiendo el proceso de la evolución, cuando la mente humana haya alcanzado cierto nivel de percepción superior, comprende y hace suyo la razón que guía la expresión del proceso técnico de la vida moderna y percibirá la actividad oculta que lo motiva.

Los devas manipulan siempre la energía oculta que los hombres convierten en fuerza y movimiento a través de las actividades normales y corrientes de la vida cotidiana. La interrelación con los devas se realiza en distintos planos:• En el plano mental que debe producir comprensión espiritual;• En el astral que infundirá armonía y equilibrio psíquico, y • En el físico, cuya utilización creciente determinará la curación de todas las

enfermedades físicas de la raza humana.

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La objetividad de nuestro trabajo y la absoluta clave de su éxito residen en nuestro fervoroso sentimiento de buena voluntad y deseo de bien.

La Mónada, puede trabajar independientemente de todo el proceso dévico; Lo que hace el Iniciado conscientemente, nosotros lo hacemos inconscientemente.

“La igualdad hace la diferencia y ésta hace la unidad”

COMENTARIOS

• Devas y hombres en un remoto pasado trabajaban al unísono. La mente separó al hombre del deva. Aquél era el hombre-deva.

• Por Ley cíclica y por el curso de la evolución, hombres y devas están llamados a trabajar unidos. Quizá hoy ya existe el hombre-deva, es decir, un ser que participa de ambas evoluciones y de ambos reinos.

• El hombre por propia naturaleza de su constitución, ya de por sí, es mitad hombre, mitad deva. El hecho de tener vehículos creados por los elementales, bajo la dirección de especializados devas, le dan ese significado. Los vehículos de experimentación cíclica de los seres muy evolucionados, iniciados de elevado rango espiritual, están constituidos por entidades dévicas, no elementales.

• Las coordenadas espacio-temporales, que separan a hombres y devas, en los distintos mundos que habitan y que se interpenetran, son diferentes por la constitución atómico-molecular de los planos que habitan, esta razón es más que suficiente para considerar al tiempo y al espacio de otra manera, bajo otra óptica distinta y no de forma similar al ser humano. Así, de la misma forma que en su entorno existencial, por poner un ejemplo, hay orugas que su ciclo vital dura pocas horas, para otros animales, este ciclo dura muchos años. La “sensación”, de tiempo en cada caso está ajustado a su tipo de evolución y de conciencia. Por este motivo, no es del todo exacto decir que el deva tarda más tiempo en evolucionar que el hombre.

• Los Logos tienen también “Su tiempo”, que se corresponde con Su tipo y grado de evolución, incomprensibles para nosotros, con unos parámetros y valores imposibles de comprender por el hombre, pero que para Ellos, los Logos, la manifestación o manvántara, es simplemente una vida, una encarnación, física, salvando las grandes distancias evolutivas que nos separan, equiparables en algunos aspectos al del hombre.

• El Hombre-Deva es el ¿Yo Superior?• ¿Porqué otros seres disponen de la mente? ¿Es un experimento que el ser

humano disponga de mente?:1. ¿Por aquello de que antes ambas evoluciones devas-humanos y

devas evolucionaran con aparente más lentitud que los humanos?2. ¿Eran lo mismo antes?3. ¿Es un experimento por necesidad evolutiva?

• La “Madre del Mundo”, se vale de innumerables tipos de devas para ayudar a las mujeres en el parto.

• La separatividad no existe para el deva. El tiempo (al menos lo que nosotros entendemos como tal), no existe para el deva, para la naturaleza, es el ser humano el que pone esa “idea”.

• ¿Hay otras evoluciones que van por otros caminos distintos al del deva y el hombre?

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• El ser humano no es el “centro de la creación” si no existiera el ser humano seguiría habiendo evoluciones y actividades. No somos tan importantes, y a la vez sí lo somos.

• La falta de un eslabón (como el humano) en las Jerarquías Creadoras, afecta a la evolución.

• Nada es baldío en la naturaleza, todo se aprovecha en la evolución.• Lo destructivo/constructivo del ser humano, es una parte activa del Plan

Cósmico.• La evolución humano-dévica se comporta como una unidad necesaria, coherente

y activa a escala planetaria.• El Logos es “Perfecto” respecto a nosotros, pero a su nivel también hay fracasos

y debe evolucionar en otros ámbitos desconocidos por el hombre.• Si existiera la perfección, ¿se acabaría la manifestación a escala cósmica?.• ¿Existe hoy el hombre-deva?• ¿Cuáles son los conceptos de hombre-deva?, ¿Podría ser el ser andrógino?. • El concepto de hombre-deva, ¿puede ser el Maha Chohan?• Hay infinidad de conceptos ocultos en todos los ámbitos de la “realidad”,

incluido el dévico-elemental, que se nos escapan simplemente por no estar ATENTOS.

Tema 6 - Influencia Angélica en la Vida Humana Introducción (en Portugués) por: Ana María Coelho.

INFLUÊNCIA ANGÉLICA NA VIDA HUMANA

Existem na terra milhares de criaturas espirituaisInvisíveis, quer quando estamos acordados, quer quando dormimos.

John Milton

Os Anjos são não apenas seres transcendentes que se manifestam em planos superiores da existência, como também Desempenham um papel vital como mensageiros divinos na terra.

A Bíblia hebraica está repleta de relatos de encontros com anjos. É o caso de Abraão, de Jacob e do profeta Daniel. Assim, podemos encontrar nesse livro cuitas referências a anjos como guardiães e auxiliares dos homens que o merecem. Diz-se que podem acontecer encontros com anjos no meio da vida diária das pessoas.

Conta-se uma bonita história que diz o seguinte: “Está escrito que cada pessoa possui uma luz que brilha para ela no mundo lá de cima e que essa luz, pertença de cada um, é única. Quando dois amigos se encontram, as suas luzes unem-se e dessa união nasce um anjo. Mas esse anjo só tem força para sobreviver durante um ano, a não ser que a sua vida seja renovada quando os amigos se voltam a encontrar”. É o anjo da amizade.

Está claro que os relatos de encontros com anjos são fascinantes, mas a sua importância vai mais além. Estes encontros podem ajudar-nos a tornarmo-nos mais sensíveis à presença de uma orientação superior nas nossas próprias vidas. Há um aforismo que diz que “Deus habita onde o deixamos entrar”.

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Todos nós precisamos de orientação, de acompanhamento, em diferentes fases da nossa vida e o divino tem a sua maneira de nos enviar as mensagens de que necessitamos. Basta que aprendamos a escutar e sermos suficientemente humildes para merecermos essa dádiva.

Podemos pedir orientação durante a meditação quando o nosso eu interior se eleva e alcançamos uma região de luz pura, deslumbrante – o reino celestial dos arcanjos, onde, prestimosos, nos esperam. Todos ouvimos falar do poder radiante de Rafael, o arcanjo da cura, cujo nome hebraico significa “Oh Deus, curai-me!” Peçamos interiormente a Rafael que nos envie energias reparadoras, peçamos-lhe conselhos específicos que possam trazer um maior bem estar físico à nossa vida actual. Pensemos, também, num amigo ou em alguém muito amado que esteja a precisar de uma maior cura e peçamos auxílio a Rafael.

Depois, há a glória resplandecente de Miguel, o arcanjo da misericórdia. O seu nome hebraico significa “Tende misericórdia de mim, oh Deus!”. Peçamos interiormente a Miguel que encha o nosso coração de compaixão e gratidão e sintamos estas qualidades expandir-se dentro de nós.

Depois vem o esplendor de Uriel, o arcanjo da sabedoria. O seu nome hebraico significa evocativamente “Deus é a minha luz!” Peçamos interiormente a Uriel que encha a nossa mente de discernimento, intuição e compreensão; sentimos estas qualidades expandir-se dentro de nós. Peçamos então a Uriel o conselho específico de como podemos trazer mais consciência divina à nossa vida.

Por fim, abramo-nos ao tremendo poder de Gabriel, o arcanjo da coragem. O seu nome hebraico significa “Dai-me força, oh Deus!” Podemos pedir interiormente a Gabriel que encha a nossa alma com a audácia e fortaleza necessárias para imprimir a mudança desejada na nossa vida e que nos aconselhe em como despertar ainda mais estas qualidades internas.

Depois de cada visualização nunca devemos esquecer de agradecer a estes Auxiliares a sua influência física, misericordiosa e fortalecedora e o auxílio iluminador. Sabemos que estão ali, sempre prontos e ansiosos por virem em nosso auxílio. Uma tradição mística judaica lembra-nos que “As portas [celestiais] estão abertas a todas as horas e todos os que desejam entrar podem entrar”.

Os anjos/devas são os colaboradores na formação dos nossos corpos físicos; com certeza também terão a missão de nos ajudar em toda a fase de transição no caminho evolutivo. Embora ignorados e desconhecidos de muitos, a sua vibração toca os que são puros de coração, os que são movidos por um amor desinteressado, altruísta pela humanidade. De facto suprem energeticamente os mundos da forma com a energia oriunda do Mundo Espiritual. Também a ideia do “anjo da guarda” é pertença de todas as religiões. É, na verdade, muito querida aos corações dos homens, embora o verdadeiro Anjo da Guarda de cada um de nós seja a nossa Divindade interior. Também ouvimos falar dos Anjos que presidem ao Nascimento e à Morte.

Também se diz que estes Seres têm a capacidade de influir os pensamentos humanos para a Verdade, o Belo e o Bem. Quando passeamos na natureza, se formos perceptivos podemos sentir uma presença, sentir uma serenidade que nada perturba, uma receptividade pura à verdade das coisas – é a sensibilidade que começa a despertar. A

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sensibilidade vem com a quietude. Diz-se que onde existe harmonia, paz, serenidade, aí vivem os anjos.

Em A Voz do Silêncio lê-se: “Ajuda a Natureza e coopera com ela; e a Natureza ter-te-á por um dos seus criadores e tornar-se-te-á obediente. E ante ti ela abrirá de par em par os portais de suas câmaras secretas, e desvendará ante tua vista os tesouros escondidos no mais profundo do seu seio puro e virgem. Não maculada pela mão da matéria, ela mostra seus tesouros tão-só ao olho do Espírito – o olho que nunca se fecha, o olho para o qual não há véu algum em todos os seus reinos”.

Tema 6 - Influencia Angélica en la Vida Humana Introducción (en Español) por: Ana María Coelho.

INFLUENCIA ANGELICA EN LA VIDA HUMANA

Millones de criaturas espirituales caminan invisibles sobre la Tierra, tanto cuando estamos despiertos como cuando dormimos.

John Milton

Los Ángeles no sólo son seres trascendentes que se manifiestan en planos más elevados, sino que juegan también un papel vital como mensajeros divinos en la Tierra.

La Biblia hebrea está llena de relatos de encuentros angélicos, como sucede con Abraham, Jacob y el profeta Daniel. Así, en ese libro podemos hallar muchas referencias a los ángeles como guardianes y ayudantes de los humanos que lo merecían. Se afirma que los encuentros con ángeles les ocurren a los seres humanos en el centro del día.

Hay un bello cuento que dice: “Está escrito que cada uno tiene una luz que arde para él en el mundo superior y que la luz de cada uno es única. Cuando dos amigos se encuentran, sus luces se unen y de esta unión nace un ángel. Ese ángel posee energía para sobrevivir un año a no ser que su vida se renueve cuando los amigos se vuelvan a encontrar”. Éste es el ángel de la amistad.

Ciertamente, las historias de los encuentros con ángeles son fascinantes, pero tienen más importancia que esto. Esos encuentros pueden ayudarnos a ser más sensitivos a la presencia de una guía más elevada en nuestras propias vidas. Un aforismo reza; “Dios mora donde uno le permite”.

Todos necesitamos orientación en diferentes épocas de nuestra vida y la divinidad tiene un medio para enviarnos los mensajes que necesitamos. Solamente precisamos aprender a escuchar y a ser lo bastante humildes para merecer esa oferta.

Podemos solicitar consejo en nuestra meditación cuando nuestro ser interno se eleva y llegamos a un reino de pura y deslumbrante luz, el reino de los ángeles, en el que ellos nos esperan para ayudarnos.

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Todos hemos oído hablar del radiante poder de Rafael, el arcángel de la sanación, cuyo nombre en hebreo quiere decir “Sáname, OH Dios”. Pidamos internamente a Rafael que nos envíe energías elevadoras, demandémosle consejo específico para que pueda aportar mayor bienestar a nuestra vida presente. También podemos pensar en un amigo o en alguien querido que necesite ser sanado y pedir a Rafael que le ayude.

Está también la gloria radiante de Miguel, el arcángel de la gracia. El nombre en hebreo significa, “Tenga yo gracia, OH Dios”. Internamente solicitemos de Miguel que llene nuestros corazones de compasión y gratitud y sentir cómo esas cualidades se esparcen dentro de nosotros.

Después, viene el brillo de Uriel, el arcángel de la sabiduría. Su nombre en hebreo evoca el significado de “Dios es mi luz”. Interiormente solicitemos a Uriel que colme nuestra mente con discernimiento, intuición y comprensión y sintamos que esas cualidades se extienden en nuestro interior. Pidamos a Uriel orientación específica para hacer llegar más conciencia divina a nuestras vidas.

Finalmente, abrámonos al impresionante poder de Gabriel, el arcángel del valor. Su nombre en hebreo quiere decir “Dame poder, OH Dios”. De forma interna podemos pedir a Gabriel que ocupe nuestra mente con la audacia y la fuerza necesaria para producir cambios en nuestra vida y solicitar consejo, para más adelante, despertar esas cualidades internas.

Después de cada visualización no debemos olvidar agradecer a estos ayudantes su influencia significativa, llena de gracia y su ayuda iluminadora. Una tradición mística judía nos recuerda; “Las puertas celestiales están siempre abiertas, y todos los que lo desean, pueden entrar”

Si los ángeles/devas son los colaboradores en la formación de nuestros cuerpos físicos, es cierto que también tienen la misión de ayudarnos en cualquier fase transitoria en el sendero evolutivo. Aunque ignorados y desconocidos por la mayoría, sus vibraciones las sienten quienes son puros de corazón, quienes están animados por un amor impersonal e inegoísta hacia la humanidad. De hecho, ellos proporcionan al mundo de las formas energía del mundo espiritual. Por otro lado, la idea del “ángel de la guarda” es común a todas las religiones y es muy querida a los corazones de los seres humanos, aunque el verdadero ángel guardián en cada uno de nosotros es nuestra Divinidad interna. Conocemos también el trabajo de los ángeles del nacimiento y los ángeles de la muerte. Se dice asimismo, que esos seres tienen la capacidad de ejercer influencia sobre los pensamientos de los seres humanos hacia la verdad, la belleza y la bondad.

Cuando se pasea por el campo, si uno es receptivo, se puede notar una presencia, se puede sentir una serenidad imperturbable, una pura receptividad de la verdad de las cosas. Es el principio de una sensibilidad despierta. La sensibilidad llega con la quietud. Se dice que donde hay armonía, paz y serenidad, allí viven los ángeles.

La Voz del Silencio dice: “Ayuda a la naturaleza y trabaja con ella y la naturaleza te considerará como uno de sus creadores y te obedecerá. Y ante ti abrirá de par en par las puertas de sus recintos secretos, y pondrá de manifiesto ante tus ojos los tesoros ocultos en las profundidades mismas de su seno puro y virginal. No contaminados por la mano de la materia, ella sólo muestra sus tesoros al ojo del espíritu, el ojo que jamás se cierra, el ojo para el cual no existe ningún velo en ninguno de sus reinos”.

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COMENTARIOS

• La forma creada entre dos seres, por la mutua simpatía y atracción, es una forma mental/amorosa, de corazón a corazón, está construida y animada por un elemental.

• Cuando dos personas se encuentran y sintonizan sus auras, se crea una entiadad elemental, con vida propia y afectiva que se irá reforzando en el tiempo según sea de estrecha y de unida esta relación en el tiempo.

• Uriel, Gabriel, Rafael, son arcángeles, que encarnan los arquetipos de cualidades y virtudes espirituales que el hombre debe alcanzar en determinados estadios evolutivos.

• El hombre no es superior al deva, como el deva no es superior al hombre, ya que existen una variedad casi infinita de clases y tipos de estas entidades que abarcan desde el deva que habita los más bajos subplanos del plano astral, hasta los esplendorosos y muy elevados devas que habitan y evolucionan en los más elevados subplanos y planos de nuestro universo existencial. Lo mismo sucede con el hombre, existen aquellos que están muy poco evolucionados, como algunos aborígenes de la Amazonia o de Nueva Zelanda, así como aquellos seres humanos, altos iniciados que están próximos a abandonar el reino humano para ingresar en el reino espiritual.

• El hombre debe de tener la certeza y la absoluta seguridad, de que ante cualquier invocación, consciente o no, va a ser siempre atendido por una entidad dévico-elemental, para hacer objetivos y tangibles sus deseos más burdos y materiales, así como también, sus más altruistas y trascendentes aspiraciones.

• Los trabajos del reino dévico, se realizan sobre todo cuando la situación se hace propicia para prestar ayuda al reino humano, de muy diversas formas.

• Los devas tienen conciencia del karma humano por ser una Ley natural y parte de nuestra evolución.

• Los Lipikas o Señores del Karma, son unas muy especialísimas entidades dévicas que ejercen un absoluto control sobre el karma, para que se lleve a efecto las Leyes que rigen el karma planetario, a nivel de reinos, razas, especies y seres que lo integran.

• Se pueden generar formas mentales (elementales), por amistad entre dos seres.• Los arquetipos, “flotan” en el espacio y son “canalizados” o detectados por los

arcángeles/devas, para su manifestación objetiva.• Hay que “re-ligar” más conscientemente con los devas para cada acción humana.• Cuando pedimos, responden los devas-elementales, cuando se les invocan

acuden siempre a nuestra llamada pero hay que saber pedir para que sean más efectivos estos contactos; entre otras cosas hay que ser humilde.

• Lo igual atrae a lo afín (Ley Oculta); un ser humano no va a atraer a un deva superior en evolución a un ser humano concreto.

• Saber es importante, pero lo importante es ser.• La duda es un veneno mortal; si nos dejamos caer en la duda como medio y fin,

no conseguimos nada y menos atraer a un deva-elemental.• “Ganar el reino de Dios por la fuerza”, hacer que nos oigan y nos ayuden los

devas y elementales, significa que, o nos esforzamos o no llegaremos a ningún sitio, si no es por nuestra fuerza de voluntad.

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E VOLUCIÓN DE LA VIDA

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Espíritus SolaresDhyan Chohans

Devas sin Forma (Mental Superior)

Adeptos

Discípulos

Hombres

Devas con Forma (Mental Inferior)

Devas delPlano Astral

Nivel de Individualización

Sílfides Astrales

Salamandras

Animales Domésticos

Espíritus de las Nubes

Hadas de SuperficieEspíritus de las Aguas

Ondinas Etéricas Peces

Cefalópodos

Corales yEsponjas

Algas Marinas

Formas Etéreas(entre dos aguas)

Vagas Formas Etéreas

(abisales)

Reptiles Antediluvianos

MamíferosInferiores

Mamíferos

Arboles

Plantas Florales

Helechos

Musgos

Gnomos Aves

GnomosAmorfos

EntidadesEtéricas

Pequeños Reptiles

Insectos

Bacterias

Hongos

Abejas y Hormigas

Cereales

Hierbas

TIERRA (Materia Astral y Materia Mental antes de convertirse en Vida Mineral)AGUA (Vida Elemental)

Fin del Seminario sobre el Reino Dévico

y

¡Hasta muy pronto!

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