La Llanura 52

download La Llanura 52

of 12

Transcript of La Llanura 52

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    1/12

    No nos parecen estos tiempos que

    nos ha tocado vivir los ms favorablespara el mantenimiento y conservacindel Patrimonio comn, sobre todo enlo que atae a los inmuebles. A unperiodo de obras casi faranicas, nosiempre acertadas al menos en cuantoal aspecto esttico, en nuestros edi-cios y construcciones emblemticas,parece que le va a suceder un periodono corto de tiempo en el que invertiren el mantenimiento y conservacindel Patrimonio va a resultar muy dif-cil de ver.

    Sabemos de las dicultades paramantener edicios pblicos, sobre todolos de titularidad municipal, debido ala escasez de recursos. Por eso cree-mos llegado el momento de gestionarcon otras perspectivas dichos espacios.Ahora es cuando conceptos como sos-tenibilidad, equilibrio presupuestario,racionalidad de uso, participacin ciu-dadana, etc., toman un protagonismoesencial. En esa limitacin de recursoses donde se encuentra, a nuestro juicio,el mayor peligro, porque mucho de loinvertido con anterioridad, tambin seacert en numerosas ocasiones, co-rre serio riesgo de perderse. O puedeocurrir que edicios como el antiguoColegio de los Jesuitas terminen sien-do unas ruinas de la peor clase, las quecarecen de dignidad.

    Pensamos que habr que buscarfrmulas que permitan no perder elvalor de lo ya invertido en numerososinmuebles municipales. Tal vez el pri-mer paso sea crear un espacio de par-

    ticipacin, en el que asociaciones detoda naturaleza, colectivos, empresase incluso particulares, intervengan enel debate y proposicin de alternativas.Es preciso que profundicen y nos per-

    mitan avanzar en la consecucin del

    logro de preservar la mayor parte denuestro Patrimonio en las mejores con-diciones. Ser en ese foro en el que lasideas deben debatirse y buscar, entretodos, la mejor salida hacia el porvenirde esta ciudad y su comarca. Convienemarcar las lneas maestras que debendirigir la accin encaminada a lograrque la ciudad se convierta en ese focode inters para el exterior. Arvalo ciu-dad de eventos, ciudad de la Cultura,atractiva al visitante, diferenciada deotras ofertas de la regin, agradable

    para los que en ella viven, amable paralos que nos visitan. Debemos encon-trar entre todos la forma de desarrollarla economa conservando el Patrimo-nio y asegurando el legado a nuestrasgeneraciones futuras. Los edicioshistricos juegan un papel decisivo enesa labor de promocin turstica, cultu-ral, econmica, etc.

    Un inmueble sin uso, cerrado,abandonado a su suerte, se deteriorairremisiblemente. Por ello un uso ra-

    cional de los mismos permitira mante-nerlos en un mejor estado de conserva-cin. Una solucin que planteamos yque puede servir es la cesin de uso dealguno de ellos a asociaciones o colec-tivos que por medio de sus propios re-cursos, o aquellos que sean capaces degenerar, garanticen la supervivencia deunos inmuebles que tienen seriamente

    comprometido su futuro. La colabora-cin de asociaciones, colectivos y em-presas, asumiendo la responsabilidadque nos atae en el mantenimiento yconservacin del Patrimonio, puedeser una va para lograr el objetivo. Deltrabajo conjunto, buscando usos com-patibles y que generen los recursos ne-cesarios que permitan mantener lo yainvertido, debe partir la tarea de poneren valor nuestro Patrimonio.

    Del mismo modo, las autoridadeslocales deben ver en los colectivos yempresas de la comarca unos aliadosen la tarea que les ha sido encomen-dada: el buen gobierno de la ciudad.

    Trabajar abiertos a las propuestas delos ciudadanos, buscando que sientanestos de forma efectiva lo que son:propietarios de ese Patrimonio co-mn, responsables de su conservacin,comprometidos con las futuras gene-raciones para entregarles en las me-jores condiciones posibles un legadode siglos. El futuro del Patrimonio esde alguna manera nuestro propio fu-turo, por ello somos responsables defomentar el dilogo y la participacinefectiva y ecaz en su gestin. Acortar

    las distancias entre la ciudadana y loscentros de decisin. Todo lo que hagafalta con la intencin de que no tenga-mos que lamentar lo que ya hace casidos aos, en el n 31 de nuestra revista,para explicar el compromiso que nues-tra asociacin haba contrado quedescrito: Oh ciudad de Arvalo, tanbella y tan perdida.

    AO V

    TERCERA POCA NMERO 52

    ARVALO SEPTIEMBRE DE 2013

    http://lallanura.es

    El futuro del Patrimonio

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    2/12

    pg. 2 la llanura 52 - septiembre de 2013

    El da 21 de agosto tuvimos la satis-faccin de reunir a los cinco hermanosSanz Lpez de Aldeaseca de Arvalo,acompaados de algunos de sus hijosy del nico hermano poltico que vive.

    El encuentro se produjo en Pea-randa de Bracamonte ya que el herma-no mayor vive all y era ms difcil sutraslado. Todos juntos disfrutamos deuna merienda en El Oso y el Madroo,bien servida y con mucha delicadezapor parte de dicho restaurante a quienquiero reiterar mi agradecimiento.

    Esta magnca idea fue de Cande-las, hija de la hermana ms pequea, ala que todos apoyaron con mucha ex-pectacin y entusiasmo.

    Qu alegra ver a todos los herma-nos juntos! El mayor con 90 aos y lapequea con 77. Se abrazaban, se be-saban y hasta alguna lagrimilla aso-m por el rostro. No s quien disfrut

    ms, si ellos o nosotros vindoles vivirese momento.

    Me gustara reivindicar desde estaspginas la importancia de la atencinque se merecen nuestros mayores, aellos les debemos todo lo que somos:esos valores que un da nos supieroninculcar, el respeto, la colaboracin, laresponsabilidad, el afn de superacin,la empata, la amistadvalores quenos aportaron y que ahora debemostransmitir.

    Por este motivo es muy importanteel contacto con nuestros mayores, paraque nuestros hijos puedan sentir y re-conocer esas enseanzas que solo ellosles pueden aportar.

    Yo no he tenido la suerte de cono-cer a mis abuelos, pero me encanta es-cuchar a mi marido esas historias quele contaba su abuelo Severiano o esemimo y cuidados que le profesaba su

    abuela Esperanza.Disfruto mucho cuando mis hijos

    recuerdan ese guiso tan exquisito quenadie hace como lo haca su abuelaMily o ese recuerdo de su abuela Mi-lagro cuando le daban un beso para ir

    al colegio y le decan: Abuela, rezaun rosario que tengo un examen. A loque ella siempre responda: Vete tran-quilo que ahora mismo le rezo y segu-ro te saldr bien.

    El contacto con nuestros mayoresnos hace grandes como personas ysu recuerdo har que siempre estn anuestro lado, que siempre los sintamoscerca y continuemos disfrutando deellos.

    Por eso, es necesario que seamos ca-paces de hacerles sentir ese beso con

    el que ellos, cuando ramos nios, nosdespertaban; ese beso lleno de ternuraque solo unos padres saben dar.

    Esperanza lvarez Sez

    Los mayores, el mejor legado

    LA LLANURA de Arvalo.

    Publicacin editada por:La Alhndiga de Arvalo,

    Asociacin de Cultura y Patrimonio.Avda. Emilio Romero, 14-B - 05200 Arvalo

    [email protected]

    Nmero 52 - septiembre de 2013Depsito legal: AV-85-09

    Director:Fernando Gmez Muriel

    Redaccin:ngel Ramn Gonzlez Gonzlez

    Javier S. SnchezJos Fabio Lpez SanzJuan A. Herranz LpezJuan C. Lpez PascualJuan C. Vegas SnchezJulio Jimnez Martn

    En este nmero: Esperanza lvarez Sez,Jos Mara Manzano Callejo, Luis JosMartn Garca-Sancho, Elas Gonzlez Mo-reno, y Nicasio Hernndez Luquero.

    Fotografas:Juan C. Lpez,Chuchi Prieto,Asociacin Amigos de Madrigal, ngelRamn G. Gonzlez, Luis J. Martn Garca-Sancho, Juan Antonio Herranz y archivo de

    La Alhndiga.Diseo y maquetacin: La Alhndiga,Asociacin de Cultura y Patrimonio.

    Imprime:Imprenta Cid

    El da 15 de agosto nalizaba laSemana Cultural, con la ya tradicionalMisa a Nuestra Seora de la Asunciny la jota que ante Ella bail un grupode joteras ataviadas con los manteostpicos de Castilla.

    Entre las muchas actividades quese han llevado a cabo en dicha semana,merece una mencin especial el Pa-seo en bicicleta desde nuestro puebloa Orbita y a Espinosa de los Caballe-ros.

    Un grupo muy numeroso de niosy mayores salimos a las siete de la tar-de hasta Espinosa haciendo la primeraparada en la iglesia. All nos espera-ba Amelia con las llaves y con muchaamabilidad nos explic hasta el ltimodetalle.

    En la iglesia nos esperaba ngelRamn que de forma sencilla y di-dctica para los ms pequeos intentintroducirnos en el arte de esta bonitaiglesia.

    Admiramos la belleza de su bsidey los pequeos pudieron disfrutar delas vistas que la fantstica torre mud-jar nos brindaba.

    Desde all salimos hacia Orbitadonde ngel Ramn tambin nos ex-plic desde fuera las diferentes partesy construcciones de la iglesia.

    En el prtico nos mostr, con tododetalle, cmo qued demolida unabuena parte de la iglesia y su recons-truccin.

    En el interior, de la.mano.. dengel Ramn, mediante una .magn-ca explicacin, descubrimos todas lasbellezas que encierra esta bonita igle-sia, terminando con la subida al cam-panario, donde pudimos disfrutar deunas magncas vistas castellanas.

    Ya se pona el sol cuando regres-bamos a Gutierre-Muoz donde nosesperaba Maite para explicarnos y ha-cer resaltar, sobre todo para los mspequeos, lo ms interesante de nues-tra bonita iglesia.

    La actividad result interesantsimay cuando regres ya anocheciendo a micasa, recordaba conversaciones que endiferentes ocasiones haba tenido conmi amigo Jos Antonio en las que dis-cutamos sobre: semana cultural?Qu tiene esta semana de Cultural?

    A m me parece que muchas activi-dades adems de entretener y divertir,pueden ser culturales Por qu no!

    No cabe duda que esta visita y el

    breve recorrido por los tres pueblosnos acerc un poco ms al arte, a lahistoria y, en denitiva, a la cultura.

    Esperanza lvarez Sez

    Semana cultural de Gutierre-Muoz

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    3/12

    Recital potico a Fray Luis deLen en Madrigal de las AltasTorres. El sbado 23 de agosto cele-

    bramos una hermosa velada potica or-ganizada por las asociaciones Amigosde Madrigal y La Alhndiga de Ar-valo en torno a la gura de Fray Luis de

    Len.El acto se realiz en el espacio impresio-nante del claustro del que fue conventode San Agustn en Madrigal de las AltasTorres, conocido tambin como Extra-muros. En la velada, que estuvo coordi-nada por Segundo Bragado, participarondiversos poetas y rapsodas de Madrigalde las Altas Torres y de Arvalo. Deigual forma el Coro de Voces de la Pa-rroquia de Madrigal interpret algunascanciones.

    Excursin al yacimiento ar-queolgico de los Henrenes. Elmartes 13 de agosto nos acercamos hastala localidad de Cilln para conocer lostrabajos arqueolgicos que se han es-tado llevando a cabo en el yacimiento

    medieval de Los Henrenes. De la manode Jorge Daz de la Torre nos adentra-mos en algunas de las particularidadesque ofrece este despoblado medieval; se

    encarg de explicarnos los pormenores yhallazgos realizados en la casa nmero 8de este complejo arqueolgico. Pudimoscontemplar algunos de los fragmentosde cermicas, pizarras inscritas y uten-silios metlicos. Ms tarde, nuestro guacomparti con nosotros las hiptesis que

    plantean las tumbas encontradas en ple-na Caada Real.

    Apertura del castillo de Narrosde Salduea. El pasado 31 de agosto,y en el contexto de un concierto de m-sica medieval a cargo del grupo TaniaFolk, tuvo lugarde manera excepcionalla apertura del patio de armas del castillodel Duque de Montellano, situado en lalocalidad de Narros de Salduea. Hace-mos mencin a la excepcionalidad de laapertura dado que, segn nos dicen, esmuy difcil poder acceder a dicho cas-tillo. As mismo nos indican que tienela particularidad de ser uno de los mslamentables pastiches perpetrados al pa-trimonio histrico.

    La deciente iluminacin delCastillo de Arvalo. Hace ya mu-chos meses que la iluminacin posteriordel castillo de Arvalo fue arrancada poralgn o algunos desaprensivos. Pens-

    bamos que al celebrarse en Arvalo, enel ao 2013, nuestra particular edicin

    de Las Edades del Hombre, se iba aser mucho ms diligente a la hora detener en perfecto estado la iluminacinde este Monumento, al igual que la delresto. A fecha de hoy no ha sido as. La

    parte posterior de nuestro Castillo siguesin repararse. Aprovechamos tambin

    para indicar que algunos de los focospertenecientes al resto de iluminacinmonumental, por ejemplo los correspon-dientes al puente de Medina, estn igual-mente averiados.

    Acto potico con San Juan dela Cruz en Medina del Campo.Asistimos, como en aos anteriores, alItinerario potico con San Juan de laCruz que anualmente organizan en lavilla de Medina del Campo los compo-nentes de Tertulias Literarias en Tierrasde Isabel la Catlica. Coordinadas porAlfonso Hernndez Martn y MarianoGarca Psaro han contado este ao conla participacin de Juan Antonio Quin-tana Martnez y Carlos Recio Torre. Elacto tuvo lugar al lo de la medianochedel pasado 14 de agosto y tuvo su ini-cio junto a la estatua de Fray Juan de la

    Cruz, siguiendo el recorrido por el Con-vento de la Magdalena, el Monasterio deSan Jos y terminando en la capilla deSan Juan de la Cruz.

    Exposicin de pintura de JosAntonio Arribas en Palacios deGoda. Hemos podido ver entre el 31 deagosto y el 15 de septiembre, en el salndel ayuntamiento de Palacios de Goda,la exposicin de pintura Desastres Ico-nogrcos de Juan Antonio Arribas. Enla muestra se poda escuchar, asimismo,la grabacin de una excepcional entre-vista que realizaron al pintor, reciente-mente fallecido, en el ao 2011.

    pg. 3la llanura 52 - septiembre de 2013

    Registro Civil:

    Movimiento de poblacin agosto/2013

    Nacimientos: nios 4 - nias 1Matrimonios: 5Defunciones: 4

    Actualidad

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    4/12

    pg. 4 la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Hace 25 aos que la catedral Metro-politana de Valladolid acoga una expo-sicin en la que se mostraba una selec-cin de obras de arte religioso que seencontraban repartidas por las iglesiasy monasterios de las once dicesis deCastilla y Len. Bajo el ttulo de LasEdades del Hombre comenzaba unprograma de exposiciones, que en uncuarto de siglo se ha convertido en unode los acontecimientos culturales msimportantes, no slo en Castilla y Len,sino en Espaa.

    Las Edades del Hombre nacieroncuando el sacerdote Jos Velicia, y su

    amigo el escritor Jos Jimnez Lozano,idearon un programa de exposicionesen el que, adems de la primera en lacapital del Pisuerga, realizara otra enBurgos de Libros y Documentos, ascomo una en Len para mostrar la M-sica de la Iglesia, para nalizar en Sala-manca con un Congreso, evento al quetras el xito de las exposiciones anterio-res le acompa otra muestra.

    Con posterioridad se unieron al pro-yecto el arquitecto Pablo Puente, la his-toriadora del arte Elosa Garca de Wat-

    tenberg y el diseador Adolfo Calleja.Este se pudo poner en marcha graciasel apoyo de Consejera de Cultura de laJunta de Castilla y Len, siendo conse-jero Javier Len de la Riva, contandocon el patrocinio de la Caja de Sala-manca siendo presidente el economistaSebastin Battaner.

    Culminado este primer proyecto ytras el xito obtenido, las dicesis cas-tellano-leonesas deciden continuar conel proyecto, para lo que crean la Fun-dacin Las Edades del Hombre, en-tidad que desde su creacin organizanexposiciones en todas las catedrales dela regin. Adems Las Edades salen de

    Espaa con una muestra en la catedralde Amberes y otra en Nueva York.

    Finalizadas las exposiciones en lascatedrales, nace un tercer ciclo que tras-lada las muestras a otras poblacionesque tengan un atractivo patrimonial ehistrico. As surgen las ediciones dePonferrada, Soria, la conjunta en Me-dina del Campo y Medina de Rioseco,Oa, y la que se est desarrollando ac-tualmente en Arvalo, ciclo que termi-nar en 2014 en Aranda de Duero. LaFundacin y la Junta de Castilla y Lentienen previsto un nuevo plan cuatrienalpara el periodo 2015 y 2018.

    Ahora, con el eslogan Las Edadesdel Hombre, 25 aos construyendoidentidad se desarrollarn en Vallado-lid una serie de actos conmemorativosque coinciden en el tiempo con Credo,la dcimoctava edicin que se celebraen Arvalo. Habr conciertos como elque da 20 de septiembre abre el ani-versario en el auditorio Miguel Delibesde Valladolid en el que la OSCYL recu-perar una cantata que ya son en LasEdades del Hombre en 1994 con m-sica de Pedro Aizpura y texto de Jos

    Jimnez Lozano. Tambin se estrenaruna pieza que la Fundacin Edadesdel Hombre ha encargado al afamadocompositor Cristbal Halffter que llevapor ttulo Sones del pre-barroco espa-ol para octeto de metales y que estinspirada en los maestros Cristbal deMorales, Antonio de Cabezn y AlonsoMudarra.

    La Catedral de Valladolid, por suparte albergar de nuevo una exposi-cin en la que adems de una serie defotografas que pretenden condensarestos veinticinco aos de trayectoria semostrar una seleccin de obras repre-sentativas de cada una de las dicesis de

    Castilla y Len. Est previsto que estase inaugure el 30 de octubre.

    Tambin se celebrar un ciclo deconferencias que tendrn lugar en Va-lladolid. La primera la impartir JosRamos, quien abordar la importanciade Las Edades del Hombre desde elpunto de vista religioso. En la segunda,el profesor Luis Csar Herrero realizarun anlisis del impacto econmico queel proyecto de Las Edades ha tenido ysigue teniendo en el tejido econmicode la Comunidad. En la tercera, Cle-mentina Julia Ara se encargar de larepercusin cultural de Las Edades del

    Hombre desde sus inicios en 1988 hastael momento presente en el que tiene lu-gar en la ciudad de Arvalo la decimoc-tava edicin titulada Credo. El ciclolo cerrar Carlos Aganzo quien centrarsu conferencia en el aspecto social delproyecto y en su relacin con las gentesde nuestra Comunidad en la que, a lolargo de los siglos, el arte y la historiadel hombre forman un todo imposiblede separar.

    Finalmente se editar el libro LasEdades del Hombre, veinticinco aos

    construyendo identidad estructuradoen tres apartados. El primero lo com-pondrn una serie de testimonios depersonas vinculadas a Las Edades delHombre o a alguna de sus exposiciones.El segundo apartado estar compuestopor cuatro estudios que analizarn elfenmeno de Las Edades del Hombredesde el punto de vista sociolgico,cultural, religioso y econmico, cuyosautores son los ponentes de las confe-rencias. El tercer apartado constar deun recorrido por todas las exposiciones

    organizadas por la Fundacin Las Eda-des del Hombre.

    Fernando Gmez Muriel

    Las Edades del Hombre celebran sus bodas de Plata cons-truyendo identidad

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    5/12

    Hace cincuenta o sesenta aos en elmes de agosto y septiembre nuestroscampos se haban convertido en unagran extensin de tierras recin sega-

    das que escondan entre las pajas losrestos de espigas y granos de trigo ycebada, para que los rebaos pastaransin descanso. Era la poca de la rastro-jera. Los trminos municipales se divi-dan entre los pastores del pueblo y losque venan de fuera, a los que llamba-mos los arrendaos, para que todos enperfecta armona disfrutaran del cerealque haba quedado sin recoger. Habaterminado la siega en el mes de julio,las cuadrillas de segadores gallegos,zamoranos y serranos haban regresa-

    do ya a sus lugares de origen, despusde la dura faena. En las eras se trillabala mies, se limpiaba el grano que des-pus se guardaba en las paneras, mien-tras que la paja se meta en los pajares.

    Con la mecanizacin de la agricul-tura este mundo rural de la siega y latrilla desaparece, all por los aos 60 70 del pasado siglo, pero todavadurante un pequeo periodo de transi-cin, la agricultura y la ganadera lanarextensivas se prestaron mutuo apoyo,

    como haba ocurrido desde tiempo in-memorial, en una estrecha relacin deinterdependencia y colaboracin. Serompi el pacto o alianza entre ambas,que, a pesar de frecuentes problemasy litigios, haba perdurado a travs delos siglos. Esta ruptura ha supuesto enmuchos pueblos moraegos la totaldesaparicin de la ganadera. Poste-riormente, a esta primera etapa de re-volucin agrcola ha seguido una fasede nuevas concentraciones de tierras,impulsada por la puesta en regado de

    campos que tradicionalmente habansido campos de secano.

    Me reero principalmente a la ribe-ra derecha del Adaja con motivo delembalse de las Cogotas, pues la riberaizquierda ya inici hace tiempo el re-gado aprovechando la abundancia deagua en sus acuferos y el terreno msarenoso y propicio por la facilidad dedrenaje. Estos campos de la ribera de-recha jams vieron el agua en verano,aunque en invierno surgan frecuentesembalsamientos debido a su carcterlimoso-arcilloso. Es por esto por loque aqu se ha producido de repenteun cambio espectacular en el paisajeagrario. Se ha pasado de una cultura

    agraria del cereal de secano a una cul-tura agraria del regado que ha roto losesquemas de algunos agricultores tra-dicionales. Donde antes se sembraba

    exclusivamente trigo, cebada, avenao centeno, ahora surgen por doquiercampos de maz, de remolacha, de ce-bollas, patatas o judas. Hemos pasa-do de unas tierras sedientas de agua aunas tierras rebosantes de agua, puestiende a embalsarse y corre generosa,en pleno mes de agosto, por las zanjasy los arroyos regando arbustos y cho-pos de las riberas.

    Pero este cambio radical no sloafecta al paisaje vegetal, sino que est

    afectando tambin a las infraestructu-ras viales, a la potente maquinaria em-pleada en el regado. Enormes cabezasde riego nos sorprenden por doquier ycon sus potentes brazos lanzan el aguaalrededor formando curiosos crculosy espirales. Nada que ver con aquellaimagen infantil de las espigadoras bus-cando la escondida espiga entre el ras-trojo o de los rebaos careando, juntoal camino de Montejuelo, en la Carran-cha, en la Verduga o en las Ilejas. Enestos pagos lo que ahora predomina

    son automovilistas que circulan porlos nuevos caminos para abrir o cerrarlas llaves de sus hidrantes. Los distin-tos tonos verdes del regado se alternancon los dorados de los campos del ce-real que ya ha sido cosechado.

    Otro aspecto no menos importante aconsiderar es que se est produciendouna intensa capitalizacin de las ex-plotaciones agrarias. Ha desaparecidoel minifundismo tradicional y cada vezhay menor nmero de propietarios demayor nmero de hectreas. Ha surgi-do por tanto una concentracin de tie-

    rras en manos de unos pocos, que enparte excluye a antiguos propietariosque no pueden competir con algunoscapitales forneos. Este fenmeno nocreo que est lo sucientemente estu-diado, pero sin duda va a dejar profun-da huella en el paisaje humano por el

    abandono de la poblacin rural, que yadesde hace dcadas estaba en fase ag-nica. Los que promovieron estos pla-nes de regado tal vez no pensaron enque este fenmeno se fuera a intensi-car, sino ms bien el contrario. No veopor ningn sitio sntomas de arraigo nide jacin.

    Se trata por tanto no solo de unatransformacin del paisaje estticao medioambiental, sino de algo msprofundo, que es necesario analizar en

    toda su complejidad. Habra que ana-lizar las consecuencias que estas alte-raciones estn produciendo y ver losresultados que se prevn en un futuroinmediato. Los cambios fundamenta-les afectan al medio ambiente, al posi-ble despilfarro del agua, que es un biencomn, a la rentabilidad de los nuevoscultivos teniendo en cuenta las fuertesinversiones que hay que hacer para ob-tener benecios razonables, a la exclu-sin de antiguos agricultores que van aquedar fuera de circulacin, con las re-

    percusiones demogrcas de desarrai-go y abandono que esto pueda traer almedio rural. Se trata de contemplar eltan manoseado desarrollo sostenible yel impacto medioambiental tantas ve-ces predicado como quebrantado, losaspectos econmicos de rentabilidad,produccin y mercado, los aspectosdemogrcos y los aspectos sociales.Todo un campo de anlisis y estudiopara nuestros cientcos, socilogos,empresarios agrcolas, polticos, etc

    ngel Ramn Gonzlez Gonzlez

    pg. 5la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Rastrojeras y maizales

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    6/12

    pg. 6 la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Que La Lugareja es una piezaexcepcional de nuestro PatrimonioHistrico-Artstico es algo que estfuera de toda discusin.

    Ya Gmez Moreno, en su CatlogoMonumental de la Provincia de vila,nos dice que del ex-monasterio de San-ta Mara solo queda la cabecera dela iglesia, uno de los ms bellos e in-teresantes monumentos de lo mudjarde la Moraa y que ha llegado intactopor fortuna. Arma a continuacinque mejor que descripciones, dan ideade l las fotografas y trazados que elautor nos adjunta en su obra.

    Esta es, sin duda, la mejor deni-cin que puede darse de lo que nos hallegado de la iglesia de Santa Mara deGmez y Romn. Por muchas explica-ciones que demos de ella, solo llegare-mos a percibir un atisbo de la verdade-ra dimensin arquitectnica que tieneesta joya del arte mudjar.

    Fernando Chueca Goitia nos ha-bla de ella en los siguientes trminos:Esta fuerte volumetra, unida a laorganizacin de los lienzos, curvos oplanos, por medio de arqueras ciegas

    de ladrillo, dan a esta iglesia su formi-dable apariencia que conduce nuestraimaginacin hacia construcciones dela vieja Babilonia. Empujado por ellenguaje metafrico me atrev a decirque La Lugareja era un extrao meteo-rito llegado del planeta babilnico.

    Gutirrez Robledo nos explica que:El perfecto juego de volumen de suscomponentes, el elegante ritmo de susarqueras, el buscado contraste cro-mtico entre los ladrillos y las llagas

    de mortero molduradas en ngulo, sonel alto ejemplo que aquellos sabiosartesanos de Arvalo del siglo XIII,aquellos humildes albailes, dejaron alos constructores de hoy. Vano ejem-plo!...

    Muchos arevalenses guardamos enel recuerdo aquellas tardes de romeraque se celebraban el domingo despusdel de la Ascensin. Recordamos s,con nostalgia, a esos cuarenta y doscofrades con su traje dominguero, sucorbata encarnada y su vara de ho-

    jadelata, trayendo y llevando proce-sionalmente a la santsima Virgen dela Asuncin, del Lugarejo al Real y delReal al Lugarejo, haciendo un alto en

    la ermita de la Caminanta para rezaruna salve mientras el tambor y la dul-zaina repiten el estribillo de

    La Caminanta, / La Lugareja,La Caminanta, /nias y viejas,mozos y mozas / forman pareja...

    Fiesta campestre. Muchedumbrereidora y jaranera entregada de lle-no, sin distincin de clases, al retozo,a las libaciones, al bailoteo. Merien-das, muchas meriendas en la verdosapradera y abajo, en los molinos, en-tre ores silvestres, rboles copudos,arroyuelos paralticos y trinos de rui-seores, tenderetes, puestos de frutas,

    golosinas, juegos, diversiones, ocu-rrencias de cosecha propia y euforia yregocijo en todos.

    Hace ya algunos aos algo cambi.Se inici, al parecer, un conicto entreel Obispado y los propietarios del Lu-garejo. La Romera dej de hacersey poco a poco el encono fue subiendode tono. Las visitas al Monumento seocializaron en un horario mnimo:los mircoles de 13,00 a 15,00 horas.El Lugarejo se cerr con una valla

    metlica y en el camino de acceso alaltozano se instal una puerta con sucorrespondiente candado. A da de hoyes bastante complicado poder visitar laiglesia de Santa Mara de Gmez Ro-mn, salvo en el horario establecido.

    Desde nuestra Asociacin, desdeLa Alhndiga, consideramos que LaErmita de La Lugareja, es, con todaprobabilidad, uno de los elementosarquitectnicos ms importantes delPatrimonio Histrico-Artstico de Cas-tilla y Len. Somos tambin conscien-

    tes de que un nmero muy grande de

    visitantes que llegan a Arvalo lo ha-cen con la intencin, demasiadas vecesfrustrada, de poder ver, con sus propiosojos, esta impresionante construccin.

    Ya en otras ocasiones hemos mani-festado nuestro deseo de que se busqueuna solucin que permita la visita, enun horario amplio y racional, al Mo-numento.

    Ahora, pasado con creces el Ecua-dor de nuestra edicin de Las Edadesdel Hombre y a la vista de que nadaha cambiado, hemos considerado ne-cesario enviar una carta a Alicia GarcaRodrguez, Consejera de Cultura y Tu-rismo de la Junta de Castilla y Len yresponsable ltima, por tanto, de todolo que tiene que ver con el PatrimonioHistrico de nuestra Comunidad Aut-noma.

    Le manifestamos que ella tiene po-testad para buscar una solucin queresuelva este conicto que venimosarrastrando desde hace ya varios aosy que tan perjudicial est siendo parael desarrollo del Turismo de Arvalo yde su Tierra.

    De igual forma, le pedimos quetome este asunto, de forma personal,como prioridad fundamental, inste aque se promuevan reuniones negocia-doras con los propietarios de las ncasen que est la citada Ermita y haga quese pueda llegar, de una manera rme,estable y seria, a algn tipo de conve-nio que permita que La Lugareja seaen el futuro prximo, y lo ms cercanoposible, un monumento abierto, acce-sible, visitable, en un horario perfecta-mente racional para todos.

    Juan C. LPEZ

    De La Lugareja y su horario de visitas.

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    7/12

    pg. 7la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Digenes naci en Sinope (Grecia)en el ao 413 A.C. Tuvo una infanciasin necesidades, ya que su padre era unbanquero importante de la ciudad. En

    su adolescencia los griegos estaban enguerra con los persas y Sinope era unaciudad abocada a caer en manos persas.Digenes y su padre acudieron al orcu-lo y este les indic que deban hacer algopara que la administracin de la ciudadno les resultara sencilla a los persas, porlo que acuaron mucha moneda falsa yla pusieron en circulacin. La conquis-ta persa se demor, y la administracingriega se percat de la falsa moneda.Como castigo les impuso el exilio a Ate-nas.

    En Atenas, Digenes quiso hacer-se discpulo de Antgenes, que era unlsofo perteneciente a la escuela cni-ca, pero este le rechaz argumentandoque un cnico se dedica a vivir la vida,no a tener aprendices. An as , Dige-nes le persigui da y noche hasta quepuso tan nervioso a Antgenes que estele amenaz con un bastn, Digenes leofreci su cabeza para que le diera conl, y as fue como Antgenes le acept.

    Tras lo aprendido con Antgenes,Digenes comenz a impartir su loso-

    fa por las calles de Atenas. Argumen-taba que el nico camino en la vida erala austeridad extrema y la morticacin.Viva en la calle, dorma al aire libre ta-pado por su capa y tena por casa un ba-rril, estas dos eran las nicas posesionesmateriales de Digenes.

    Digenes no dej escrita ningunaobra, ya que su vida era su obra. Unda se puso a masturbarse en el gora,quienes le reprendieron, tuvieron una desus cnicas respuestas: Ojal frotn-dome, terminara con el hambre de unamanera tan dcil. En otra ocasin unadinerado hombre de la ciudad le invita su mansin a comer. Cuando iba a em-pezar a comer le advirtieron que esa erauna casa decente y que no poda escupiren el suelo, Digenes le escupi en lacara al hombre adinerado y argument:No he encontrado un sitio ms suciodonde hacerlo

    Trab cierta amistad con Platn,que le llamaba Scrates delirante. Encierta ocasin ambos discutieron sobre

    lo que realmente era un hombre, Platnsentenci diciendo que el maestro S-crates haba denido al hombre comoun bpedo implume. Das despus deesta discusin, Digenes fue al mercado

    rob un pollo, lo desplum y lo solt enuna de las clases de Platn a sus disc-pulos mientras gritaba:Maestro, aqutienes un hombre!

    Digenes era amante de los perros,tena muchos y paseaba con ellos porAtenas. l fue quien acu la frase:Cuanto ms conozco al ser humano,ms quiero a mi perro. Digenes eratambin conocido por su trato con losvagabundos de la ciudad. Un da, uno deestos vagabundos se acerc a l y le pre-gunt por qu la gente le daba limosna alos pobres, pero no se la daba a los l-sofos, Digenes de una manera cnicacontest: Eso es porque piensan queen algn momento ellos pueden acabar

    siendo pobres pero nunca piensan quevan a ser lsofos.

    En uno de sus viajes, Digenes fueapresado por unos piratas y fue vendi-do como esclavo. Cuando le pusieron ala venta, un comprador se acerc a l yle pregunt que qu saba hacer, Dige-nes respondi Mandar. Comprueba sialguien quiere comprar un amo. Fuecomprado por un tal Xeniades de Corin-to, que al comprobar que era un hombresabio le hizo tutor de sus dos hijos y aca-b liberndolo.

    El resto de su vida la pas en Corintoexponiendo su losofa a sus habitan-tes. Un da Alejandro Magno y sus ejr-citos llegaron a Corinto. El magncogeneral vio a Digenes arengando a lasmasas y qued tan impresionado con laoratoria y la sabidura de este hombre,que terminado su discurso, se acerca l maravillado y dijo: Seor, me hequedado completamente impresionadocon usted. Me gustara ayudarle. Pue-do hacer algo por usted? A lo que Di-genes contest: S, muvete un pocohacia un lado que me ests tapando elsol. La respuesta fue tan sorprendente,que Alejandro Magno dijo Si algn datengo que regresar a la tierra, le pedira los dioses que no me conviertan enAlejandro, sino que me conviertan enDigenes.

    El complejo de Digenes constitu-ye un fascinante objeto de estudio paralos clnicos cuyas primeras descripcio-nes en la literatura cientca son muyrecientes, y datan de 1966 y 1975. Se

    ha descrito fundamentalmente en an-cianos, aunque existen algunos casos enla literatura en personas ms jvenes.Describe un patrn de conducta caracte-rizado fundamentalmente por un extre-

    mo abandono del autocuidado, tanto lahigiene como la alimentacin y la salud(viviendo en condiciones higinicas in-salubres), acumulacin de basuras y ob-

    jetos inservibles, autonegligencia, mar-cado aislamiento social y sin concienciade enfermedad.

    Hasta el momento la investigacinen este campo es escasa, e incluso se hallegado a cuestionar la validez de estediagnstico. De hecho, no est recono-cido en los manuales diagnsticos inter-nacionales y puede aparecer en distintasenfermedades psiquitricas y neurolgi-cas.

    Se han descrito dos tipos de Sn-drome de Digenes segn su compor-tamiento respecto a la acumulacin deobjetos: el tipo Activo o recolector deobjetos que acumula en su domicilio yel tipo Pasivo que, pasivamente, se dejainvadir por el acmulo de sus propiasbasuras.

    Existen autores que denominan altipo Activo Sndrome de Acumula-cin y describe a personas que suelenacumular objetos inservibles por si aca-so los llegan a necesitar en un futuro,pero no acumulan basura ni heces. Tra-

    tan de mantener estas cosas en ordenpero cuando el volumen de objetos esmuy grande, el desorden se apodera dela vivienda y sin querer comienzan aacumular basura. A diferencia del com-plejo de Digenes, los que padecen deacumulacin compulsiva no descuidansu higiene personal ni su aspecto, porlo que cuando salen a la calle no llamanmucho la atencin, solo son percibidoscomo personas poco sociables. En algu-nos casos la acumulacin compulsivapuede terminar en Sndrome de Dige-nes. Cuando la vivienda est atestadade objetos, se comienza a acumular labasura, y la persona comienza a des-cuidar su higiene personal. En Espaa,se calcula una prevalencia de 1,7/1.000de los ingresos en personas mayores de65 aos y una incidencia de unos 1.200nuevos ingresos/ao. La mayor parte delos casos descritos se reeren a personasancianas (promedio 75 aos). Entre untercio y la mitad cursan con demencias(habitualmente se asocia a alteracio-nes frontales en las demencias fronto-temporales) o de algn tipo de trastorno

    mental (ms frecuentemente esquizofre-nia).

    Jos M MANZANO CALLEJOProfesor Asociado de Psiquiatra.

    Universidad Complutense. Madrid.

    Mitologa y Psiquiatra (II): Complejo de Digenes

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    8/12

    pg. 8 la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Le invitaban a asistir a cursos ycongresos. Le pedan colaboracin enartculos relacionados con las aves. In-cluso le encargaban algunos trabajos

    de campo.Pens que podra vivir de ello.

    Se equivoc.

    Despus de un montn de censosde aves acuticas, cigeas, avutardas,rapaces... y artculos publicados endiferentes revistas naturalistas, pensque, quizs, tendra cabida en futurostrabajos relacionados con el mundo delas aves. Pero pronto le pusieron en susitio.

    La Comunidad Europea dara sub-venciones a aquellos agricultores querespetasen el hbitat de la avutarda ydems aves esteparias. Slo haba quehacer una propuesta con las reas quese pudieran beneciar de esas ayudas.Utilizaron los datos de los trabajosde campo que haba organizado. Perole dejaron fuera. Pidi que, al menos,le permitieran revisar el borrador deaquella propuesta por si pudiera aportaralgo pero, ni eso. Le dijeron: djanosa nosotros negociar con polticos y sin-dicatos agrarios y t sigue trabajandoen el campo de forma voluntaria, comohasta ahora. En estos casos, la labor al-truista y desinteresada del voluntariadoes imprescindible. Cierto, no voy a seryo el que lo niegue, pero quien eso de-ca cobraba por ello.

    Despus de aquel desencuentro si-guieron otros. Una entidad bancariaque hasta entonces haba pagado la

    publicacin de los cuatro nmeros dela revista El Cervunal que recoga

    todos los trabajos de campo del grupoecologista Adecab, se neg a costear elquinto nmero, un monogrco sobrela estepa cerealista abulense, en el quequedaban plasmados una buena par-te de los trabajos de campo que habaorganizado o en los que haba partici-

    pado.

    Entonces decidi dejar sus trabajosde campo. Si era incapaz de darlos aconocer, para qu servan?

    En realidad, le resultaba difcil dejar

    aquello en lo que tanta ilusin y tiempohaba depositado. En esas estaba, es de-cir, retirndose del mundo de las aves,cuando Asodema, una asociacin en-cargada de gestionar y repartir fondos

    de la Unin Europea para destinarlosal desarrollo rural de la Tierra de Ar-valo y La Moraa, le propuso escribirun libro sobre las aves de la comarca.

    Sera coordinado por un bilogo, y unfotgrafo naturalista aportara las im-genes. Los de Asodema le caan bien

    pero con alguno de los que formaranparte del equipo haba tenido encontro-nazos en el pasado. Estuvo a punto derechazar la oferta pero antes consultcon Ana. Le dijo que aceptara, que eralo que siempre haba deseado.

    As lo hizo. Corra el ao 1997.

    Durante la elaboracin del librotuvo algunos roces, por lo que lleg a

    llamar al coordinador por telfono paracriticar su labor. Tal vez no deberahaberlo hecho pues aquel bilogo le

    puso en su sitio. Le dijo que por qupretenda hacer la labor de un arquitec-to cuando no era ms que un pen quese crea el ombligo del mundo. Que ledejara a l dirigir la obra y que se de-dicara nicamente a poner los ladrillos.El coordinador acab diciendo que nole volviera a llamar nunca ms.

    As lo hizo. Tambin termin suparte del libro que, nalmente, fue pu-blicado en 1999.

    Entonces se dio cuenta de la rea-lidad. Baj de la nube. Slo era unnaturalista mediocre, con algunos co-nocimientos ornitolgicos pero muylimitados. Y lo peor de todo es que eraautodidacta. La nica Universidad a laque haba asistido para adquirir esosconocimientos era la de la naturaleza,la nica realmente pblica y gratuita.Durante todos esos aos haba aprendi-do del rbol y del pjaro, del agua y de

    la rana, de la arena y de la culebra, delaire y del insecto. Esa Facultad estabasiempre abierta, todos los das del ao.

    As que, despus de aquella seriede patinazos relacionados con la es-

    pecie humana, decidi que ya era horade acabar sus estudios. Dej de anotarcada especie que vea, su conducta, lo-calizacin, nmero, medio en el que seencontraba, fecha, hora, clima y has-ta temperatura... A partir de entoncescomenz a salir al campo sin mtodo,

    sin cuaderno de campo. Salir por salir.Slo para disfrutar.

    Bastantes aos despus de aquelladecisin, una maana cualquiera delverano de 2009 le fue a visitar a la tien-

    da Fabio, uno de los redactores de unarevista local. Le dijo que en la ltimareunin de la Asociacin La Alhn-diga, haban pensado en alguien que

    escribiera sobre medio ambiente enLa Llanura de Arvalo y que habasalido su nombre. Enseguida le dijo aFabio que admiraba y aplauda la laborque hacan con la revista, pero que lera como un dinosaurio, que no esta-

    ba en activo, que haca varios aos quese haba desvinculado de los temasambientales, que no crea que pudieraaportar nada fresco. Fabio insisti enque, precisamente, ellos pensaban todolo contrario y que sus pensamientos ovivencias como dinosaurio ambien-

    tal podran tener cabida en la revistamensual. Que se lo pensara, que no eraningn compromiso y que si le gustaba

    podra, incluso, contar con una pginamensual dedicada al medio ambiente ocualquier tema relacionado con la na-turaleza.

    Qued en pensrselo.

    Como cuando compr los prismti-cos o el telescopio o, incluso, cuandoco-escribi la gua de las aves de LaMoraa y Tierra de Arvalo, lo consul-

    t con Ana. A ella, como casi siempre,le pareci bien y entonces pens:

    - Coo, y por qu no?

    Despus... Llovi.

    Nota: Cualquier parecido con larealidad es posible e intencionado.

    En Arvalo, verano de 2013por:Luis J. Martn Garca-Sancho

    As empez todo (IV) Lo que empieza, acaba

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    9/12

    pg. 9la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Hola, me llamo Jos Luis y tengo 6aos. Lo digo porque ahora los niosse llaman Kevin y las nias Letizia, yporque aqu solo escribe gente mayor.

    Hoy he ido al colegio, con los ma-yores. Bueno, eso me dijeron, perosigo yendo con los de mi edad. Yo creoque era para que no me quejase cuandome ha colgado mi madre una mochilallena de libros, y cuadernos, y lpicesde colores, y ms cosas.

    Hace ya quince das, para que mefuera mentalizando, decan, fuimos acomprar las cosas del colegio, pensan-do que me iba a poner muy contento.Todo el mundo hablaba de lo caro queest todo y de la gratuidad de la ense-anza. Creo que lo mismo que el aopasado por estas fechas.

    -Hay que ver!, deca mi madrecada vez que abra el bolso para pagar.Cada ao cuestan ms los libros! Porqu no le sirven los de su hermano?El librero la miraba con cara de mu-cha atencin, pero seguro que estabapensando en la pueta que le hacen lasgrandes supercies con el 25 por cien-to de descuento.

    Hicimos una buena gira para com-prar el chndal y las zapatillas, eluniforme y la plastilina. Hasta quellegamos a una tienda donde vendanmochilas. Yo haba visto a los mayo-res, a esa clase a la que yo iba a per-tenecer, cargar con estos fardos que separecan a los que llevan los soldadosen la tele. La verdad, no me gustabaninguna, pero se empeaban en ense-arme de muchos colores, sin darsecuenta de que no era el color lo que no

    me gustaba, sino las mochilas.Hoy, he ido al colegio con mi mo-

    chila, azul clarita con fotos de un can-

    tante con rizos que yo no s quien es.Dentro llevaba seis libros, seis cuader-nos de actividades, dos lpices porsi se me perda uno, dijo mi madre-,una goma de nata, doce rotuladores,

    una regla pequea, plastilina de cuatrocolores, tijeras de las de no cortarse,una lupa- que regalaban con la caja derotuladores-, doce pinturas de palo, unsacapuntas que me regal mi to, y doscromos de Cristiano Ronaldo, en unocon gomina y en otro conduciendo uncoche negro.

    He llegado al colegio y he vistoque algunos sonrean, otros mirabana ningn sitio, y la mayora presumade que su mochila pesaba ms que lasde los dems. Yo creo que la ma erala que ms pesaba, porque me duelela espalda y tengo marcas en los hom-bros. Pero no he dicho nada, ni me hequejado porque ayer me dijo mi padreque, como iba a ir con los mayores, yano tena que llorar.

    Haba un documental en la 2 y lohe visto con mi padre hasta la hora dela merienda. Hablaban de unos seo-res que vivieron hace muchos millonesde aos. Me he jado bien, y he vistoque los ltimos de la la iban muy de-

    rechos erguidos, decan, pero esapalabra todava no la he dado. Pero losprimeros iban agachados, como si bus-

    casen algo en el suelo. Pero siempreiban agachados. Tenan unos nombresmuy raros; solo s que todos sus nom-bres acababan en us, o en ecus.

    He preguntado a mi padre por quunos iban derechos y otros no. Me haempezado a contar una historia que nohe entendido muy bien. Yo creo que ltampoco quera que me enterase de laverdad; pero yo dira que los que ibanderechos mandaban ms, y los otroseran los que llevaban las mochilas. Loque no s todava es si llevaban tijerasde no cortarse y plastilina. Yo creo quelo que no llevaban era libro de Manua-lidades, ni de Religin...

    Ha dicho la seo que maana no

    llevemos los rotuladores, que no ha-cen falta. Y tampoco la plastilina rojay la amarilla. Me ha quitado un pesode encima. Bueno, al nal ha venido eldirector y ha dicho que llevemos unacarpeta con chas de dina cinco, yfolios de dina cuatro. Habla muyraro el director.

    Hasta otra! Y perdonen que hayaempezado todos los prrafos con lahache, pero es la letra que hemosdado hoy en el colegio, y nos ha dicho

    la seo que practiquemos, aunque tam-bin ha dicho que no sirve para nada.

    Javier S. SNCHEZ

    Homo Mochila

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    10/12

    El peregrino

    Caan las hojas muy lentascon losca y suave armona,del rbol que transmite su agonaa la savia reseca y macilenta.

    Una rfaga helada y cortanteazota la cara del dbil peregrino,que en el campo raso y sin abrigocamina con ardor en cada instante.

    Mira al Cielo que se torna encapotadode nubes que presagian la tormenta,una quietud su mente alerta,dirigiendo sus pasos al poblado.

    Los primeros copos le sorprenden,cuando cruza la primera encrucijada;y la senda que de nieve est cuajadasus pasos desorientan, y se pierde.

    Deambula el peregrino muy cansadopor la dura y despiadada estepa,dirige la vista al Cielo, y rezaporque est su corazn muy preocupado.

    Presiente la dureza de lo heladode los pies que al tropezar denotan,en la dura nieve que engarrota

    las plantas del pobrsimo calzado.Su mirada ya turbia y perdidasolo ve caer los copos despiadados,no topando sus huellas con pobladoque le pueda dar tierna acogida.

    Las fuerzas ya le faltan al mendigoy sus pasos vacilantes le torturan,en suplicio se torna su andaduraperdiendo ya del todo su camino.

    En su inconsciencia el peregrinopalpa el pomo de la puerta bien cerrada,casi no puede dar la aldabonadaque alerte al morador de su destino.

    Un hilo de voz entrecortada

    sale del mendigo suplicante,llegando inoportuna e insultanteal altivo corazn que all moraba.

    Vyase el mendigo a otro lugar!son una voz potente y despiadada,no despierte a mis hijos y a mi amaday djeme tranquilo descansar.

    Se fue el mendigo perdindose en la nochecon su alma ms que el cuerpo dolorida,produciendo la altivez profunda heridacayendo sin sentir ningn reproche.

    Sali a cazar el soberbio castellanoen la maana glida y cortante,con brioso corcel y recio guanteportando el halcn en ruda mano.

    En un recodo de la borrada sendaentre nieve y barro casi sumido,se encontraba inerte el peregrinoy en su mano mostraba una encomienda.

    Mi corazn te perdona y te bendigo,y pido a Dios que siempre te conceda;si llamares a otra puerta y fuere ajena,

    su morador te d mejor destino. Elas Gonzlez Moreno

    pg. 10 la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Pgina potica

    C/ Palacios de Goda, 7 (Polgono Industrial) Arvalo

    Tfno. y Fax: 920 303 254 - Mvil: 667 718 104

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    11/12

    pg. 11la llanura n 52 - septiembre de 2013

    AGENDA DE ACTIVIDADESApertura de la exposicin Credo para grupos:La Fundacin Las Edades del Hombre informa de que a par-tir del da 23 de septiembre de 2013, se atender los lunes alos grupos que reserven visita guiada en el telfono 920 300646. La apertura de la exposicin se limitar, en el horarioestablecido, a estas reservas.

    Biblioteca Pblica de vila: Exposicin Perma-

    nencia en el TrnsitoHasta el prximo 30 de septiembre, en la Biblioteca Pblicade vila, Irene Araus expone pinturas y grabados sobre poe-mas del ltimo libro de Miguel Velayos.

    Concierto de La Coral AMICUS MEUS de vilaSbado, 21 de septiembre a las 21.00 h. Iglesia de Santo Do-mingo

    Festival de TeatroDel 19 de octubre al 9 de noviembre. Los sbados en el CineTeatro Castilla. Las obras se anunciarn en programasaparte

    Asociacin de Familiares de enfermos de Alzehimer

    de Arvalo y ComarcaLa asociacin informa que la cena que se celebra anualmenteen benecio de los enfermos de alzehimer se realizar, esteao, el da 26 de octubre de 2013.

    Narros del Castillo, localidad si-tuada en el Norte de la provincia devila, con una poblacin de 195 habi-tantes sorprende por muchas cosas.

    Cuando llegamos a esta localidadno podemos dejar de admirarnos conesa iglesia mudjar, la de San JuanBautista, como incrustada en los des-carnados argamasones de lo que fueraen otro tiempo castillo.

    Narros nos llama la atencin porsu sonoro y antiguo nombre: Naha-rros de Bebn, cuya traduccin, mso menos idealizada, podra ser Nava-rros guardianes de la puerta fortica-da.

    Sorprende por haber guardado, en-terrado en el suelo de su plaza, un anti-guo rollo de justicia, del que sabamosde su existencia al aparecer fotograa-do por Gmez Moreno en El CatlogoMonumental de la Provincia de vila.

    Pero, si por algo nos est impresio-nando, de forma especial, esta locali-dad es por el programa de actividadesque ao tras ao y desde hace ya ocho,vienen proponiendo sus vecinos en elcontexto de un nombre: Al sol quems calienta. No es una asociacinconstituida, no son un grupo especcode personas. S hay unos responsablesque concretan las actividades, pero, ala postre, es todo el pueblo, todos ellos,los que organizan uno de los veranosculturales ms sorprendentes tanto por

    la diversidad como por la calidad delos actos que conforman el programa.

    Hemos hablado con algunos de

    ellos e insisten en que son todos, todosy cada uno de los vecinos de Narrosdel Castillo, los que participan de laorganizacin de sus veranos culturales.

    Conciertos de msica tradicional,exposiciones, conferencias, activida-des deportivas, teatro, cuenta-cuentos,veladas poticas, bailes, talleres, con-cursos de disfraces, desles de moda,una cena benca, karaoke e inclusoun notable mercado medieval.

    En este ao 2013, entre las fechas

    que median entre el 31 de julio y el 25de agosto, se ha desarrollado este Oc-tavo Verano Cultural y entre las acti-vidades que se han organizado no po-demos dejar de resear las siguientes:

    - Conciertos musicales: Msica tra-dicional castellana a cargo del grupoEcos de la Moraa, Coral de la Mo-raa, msica castellana a cargo delgrupo vallisoletano Alquitara, Ma-yalde o el grupo Manantial Folk.

    - Actividades deportivas: Ciclo-marcha, futbito y Frontenis.

    - Exposiciones: De tallas y ma-quetas, Filatelia en aos composte-lanos, El tren tambin es nuestro.

    - Talleres: De reanimacin cardio-pulmonar, de abalorios, de pintura, de

    limpieza de cutis, de decoracin de ca-misetas.

    Teatro: Grupo de Teatro de Mua-na, Grupo Diamante.

    Destacar que el 8 de agosto, entre

    otras actividades, estaba previsto dis-frutar de un recital de poesa en home-naje a Antonio Machado.

    En lo que se reere a sus ciclos deconferencias, creemos necesario haceruna mencin especial. Tres conferen-cias de altsimo nivel han conformadoeste apartado del Verano Cultural deNarros. El da 6 de agosto el profesorEmilio Rodrguez Almeida ofreci laconferencia titulada Castilla entreCastillos. El 13 de agosto fue Sera-fn de Tapia el encargado de impartirla conferencia titulada Relacin entrela ciudad de vila y los pueblos de la

    Moraa en la Historia. Termin elciclo de conferencias el Doctor en His-toria Julio Snchez Ban que depar-ti sobre Las milicias concejiles de

    vila en la Edad Media.

    En el contexto de la reivindicacinmantenida por Narros del Castillo conrespecto al horario de paradas del trense propuso un Concurso de Muralesbasado en esta demanda.

    En denitiva, Narros del Castillonos encandila, un ao ms, por el alt-simo nivel de excelencia que conere asu Verano Cultural, que es para mu-chos de nosotros un ejemplo de cmose deben hacer las cosas.

    Juan C. Lpez

    Al Sol que ms calienta

  • 7/29/2019 La Llanura 52

    12/12

    pg. 12 la llanura n 52 - septiembre de 2013

    Una carta

    Sr. D. ngel Macas Rodrguez; en

    ArvaloMi querido amigo y compaero:

    Tu noble, altsimo propsito dedesbrutalizar cerebros secos y prestarun poco de pasto selecto a los vidosde gustarle, en esa querida y pobre tie-rra de prosa que ha educado a sus hijosqu pena! en un srdido senti-miento de goce y suma satisfaccinsolo ante la positiva y oronda realidadde los cuartos sonantes y las rentas sa-nas quien sabe a costa de cuantas

    escrupulosidades no tenidas en cuen-ta es un propsito acreedor a la mssincera loa.

    Y yo, amigo, te loo sinceramente.

    Crea, s, una revista... Pero una re-vista libre, que huya como del morbode todo aire de oez, que no tenga elhilo de su vitalidad en tensin el ca-pricho tcito de sus mantenedores pe-cuniarios los suscriptores. Unarevista moderna, de espalda violen-

    tamente a todo convencionalismo y atoda idea encasillada.

    Rompe muchas cuartillas que teentregue el correo y donde trasluzcascon tu claro raciocinio y tu buen golpede vista, cualquier visible o encubier-ta idea de pan llevar o chabacanera,que, vive el cielo, se cuecen abundan-tes bajo muchos crneos de apariencia!

    Abre en puerto franco de amplitudhospitalaria a cuantas tendencias nova-doras quepan por sus anchos, las co-

    lumnas liberales de tu publicacin engerminal. A todas las tendencias: lite-rarias, artsticas, sociales, poticas, de

    la ciencia o de las cosas, de la cienciaabsoluta, del recto, libre, espontneosentir de los hombres sanos...

    Proscribe asimismo de sus pginaslos consabidos, malolientes: Hemossaludado con gusto..., En breve severicara..., Se proyecta para labrevedad..., Ha visitado nuestracasa..., Ayer cumpli..., Reciba

    nuestro psame..., siempre que lacosa llegada, la por llegar, la proyecta-da, la que te visite, la que est en efe-mrides saliente, la que haya muerto,no sea una alta cosa de espritu, o estamisma cosa: un espritu alto, selecto ynoble...

    Ten indiferencia para los dogmas;indiferencia, no rencores; ni frecuen-tes, sino escasas acometividades sau-das. Toda cosa siempre en blanco deataque, aun cuando la merezca eterna-

    mente lleva la conmiseracin a ciertosespritus, de por s poco analticos. Yesto puede perjudicar, que son mayo-

    ra.

    Haz, pues, querido Macas, una la-bor progresiva, inusitada ah, de peso,fecunda, de rebelda. Crea una revistamoderna, no un periodiqun ms, pro-vinciano, y si esto lo presumes imposi-ble o topas positivamente con la impo-sibilidad a las primeras gestiones, y nomiras quin sabe de circunstancias

    en vivires ajenos? nada con ojos debuen seor prctico, hazme caso, nola crees. Asesnala en embrin... Re-sgnate y echa un desengao ms, unanueva ilusin rota al cesto que todo so-ador que se estime tiene a este tristen, y que alguno ay! a pesar de nues-tros aos de juventud, tantas veces mi-ramos melanclicamente, casi llenos.

    Perdn por la homila. Te abrazafraternalmente.

    Nicasio Hernndez Luquero.De La Moraa, de Arvalo.

    3 diciembre 1908 - N 14

    Clsicos Arevalenses