La Poesía de Juan Gelman o La Ternura Desatada

8/19/2019 La Poesía de Juan Gelman o La Ternura Desatada

http://slidepdf.com/reader/full/la-poesia-de-juan-gelman-o-la-ternura-desatada 1/9

Saul Sosnowski is collaborating with JSTOR to digitize, preserve and extend access to Hispamérica.

http://www.jstor.org

La poesía de Juan Gelman o la ternura desatadaAuthor(s): Hugo AchugarSource: Hispamérica, Año 14, No. 41 (Aug., 1985), pp. 95-102Published by: Saul Sosnowski

Stable URL: http://www.jstor.org/stable/20539104Accessed: 03-01-2016 01:29 UTC

Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at http://www.jstor.org/page/ info/about/policies/terms.jsp

JSTOR is a not-for-profit service that helps scholars, researchers, and students discover, use, and build upon a wide range of contentin a trusted digital archive. We use information technology and tools to increase productivity and facilitate new forms of scholarship.For more information about JSTOR, please contact [email protected].

This content downloaded from 200.16.5.202 on Sun, 03 Jan 2016 01:29:30 UTCAll use subject to JSTOR Terms and Conditions

http://www.jstor.org/

http://www.jstor.org/publisher/sosnowski

http://www.jstor.org/stable/20539104

http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp






http://www.jstor.org/stable/20539104

http://www.jstor.org/publisher/sosnowski

http://www.jstor.org/



La poes?a de Juan Gelman ola ternura desatada

HUGO ACHUGAR

En 1963, hace m?s de veinte a?os, aparec?a en Buenos Aires Got?n,cuarto libro de poemas, de un poeta que comenzara a publicar en 1956:

Juan Gelman.1 Era la ?poca, seg?n Isaacson, del ?neo-humanismo? en

literatura.2 Se venia a proponer un modo de ser, as? en la poes?a como en

la vida social. Se trataba de transformar el mundo y no de fundar el mun

do por la palabra. No alcanzaba con interpretar o expresar el mundo y la

palabra sino, precisamente, era necesario transformar mundo y palabra.Otro poeta, Horacio Salas, ha apuntado de esa ?poca, no sin cierta

nostalgia que: ?Todav?a ? dec?amos con ingenuidad? la literatura

puede cambiar el mundo, y muchos de nosotros, convencidos, llen?ba

mos p?ginas y cajones de poemas, cuentos o ensayos...?.3 Conciencia yvoluntad que aparec?an en revistas, art?culos y ensayos. El editorial de la

revista Signo de Tucum?n afirmaba en 1961: ?...nadie puede discutir en

estos momentos, que uno de los rasgos que particulariza nuestra litera

tura, como a la de toda Am?rica Latina, es la de ser una literatura de ac

ci?n?4 y Andr?s Fidalgo afirmaba en 1959 en la revista Tarja: ?no perdemos de vista que la m?xima calidad del escritor se dar? cuando no se

desatienda su condici?n de hombre en el mundo?.5

Se escrib?a con el horror todav?a cercano de Hiroshima y Nagasaki;se escrib?a con la indignaci?n de Guatemala, con Corea, Argelia y los

procesos del senador McCarthy en la memoria y, sobre todo, con la

Poeta y cr?tico literario uruguayo. Autor de Ideolog?a y estructuras narrativas en Jos?

Donoso y de numerosos estudios sobre literatura hispanoamericana. Es profesor de North

western University.

1. Juan Gelman, Obra po?tica, Buenos Aires, Corregidor, 1975. Todas las citas corres

ponden a esta edici?n y de ahora en adelante s?lo se indicar? el n?mero de p?gina.2. Citado por Luis Ricardo Furl?n, Generaci?n po?tica del 50, Buenos Aires, Ministerio

de Cultura y Educaci?n, 1974, p. 20.

3. Horacio Salas, Generaci?n po?tica del sesenta, Buenos Aires, Ministerio de

Educaci?n, 1975, p. 9.

4. Citado por Furl?n, p. 27.

5. Citado por Furl?n, p. 28.






96 JUANGELMAN...

esperanza desplegada por la revoluci?n cubana. P?rez Jim?nez escapabaante la sublevaci?n del pueblo y una alegre confianza en la lucha del

hombre por la justicia social permit?a creer en el advenimiento de una

sociedad sin hipocres?as ni anacr?nicas celebraciones hollywoodenses del

ego?smo individualista. En San Francisco Ginsberg y los suyos irritaban

el contento de la clase media; en Nicaragua, Sandino? m?tico f?nix ?,renac?a de sus cenizas; irrump?a la est?tica de la ?nouvelle vague?; los

?parricidas? argentinos estallaban con iracundia; se remit?an al pasado

los horrores de Stalin; se rele?a la historia; los peronistas desplazados delpoder trabajaban en la clandestinidad; la izquierda argentina tomaba

distancia con la ortodoxia del Partido comunista. La imaginaci?n y la

utopia no parec?an ya ejercicios intelectuales.

Gelman se presentaba en Velorio del solo 1961), su tercer libro, as?:

Somos los que encendimos el amor para que dure,

para que sobreviva a toda soledad.

Hemos quemado el miedo, hemos mirado frente a frente al dolor

antes que merecer esta esperanza.

Hemos abierto las ventanas para darle mil rostros p. 69).

Era la ?poca en que las propuestas po?ticas de entre guerras? herederas

del simbolismo decimon?nico trasmutado por la vanguardia? comen

zar?an a ser disputadas por un neo-romanticismo que abandonando la in

genuidad est?tica reclamaba su lugar en el mundo contempor?neo. Hugo

Friedrich, a finales de los cincuenta, reduc?a la poes?a moderna a las

categor?asde

oscuridad,disonancia

y antisentimentalismo.6 La propuesta de Friedrich miraba hacia atr?s, y la nueva poes?a reclamaba un

presente in?dito. Gelman, pero tambi?n Nicanor Parra, Ernesto Carde

nal, Roque Dalton, Antonio Cisneros, Benedetti, Fern?ndez Retamar yotros muchos, comenzaban a apostar a una l?rica de lo cotidiano, de lo

claro, de lo sentimental, de lo ir?nico, de lo hist?rico y, sobre todo, de lo

social. Apuesta anacr?nica para los friedrich de Am?rica Latina que

pretend?an ignorar la poes?a de Brecht como parte de la historia moderna. Apuesta que disputaba la hegemon?a nerudiana de una l?rica ex

huberante y rechazaba en Canto general y en Odas elementales lo que la

ret?rica deb?a a su dicci?n anterior. Apuesta que rechazaba la poes?a

6. Hugo Friedrich, Estructuras de la l?rica moderna, Barcelona, Seix Barrai, 1959.






HUGO ACHUGAR 97

social de los treinta y de los cuarenta en lo que de expl?cito o de cartilla

ten?an; apuesta que encumbraba tanto al Vallejo de Poemas humanos y

Espa?a, aparta de mi este c?liz como al de Trilce. Apuesta que se

regodeaba con el Altazor de Huidobro pero buscaba atm?sferas y

espacios po?ticos que hicieran bien com?n los nuevos territorios que la

vanguardia hab?a ganado con excelencia mediante la dificultad.

?Apuesta populista? Quiz?s, aunque el t?rmino persiste sonando

peyorativamente en los o?dos latinoamericanos. Populista que no

demag?gica, la apuesta de cierta poes?a latinoamericana que irrumpe amediados de los cincuenta y alcanza su plenitud en los sesenta.7

Apuesta est?tica, proyecto ideol?gico, formalizaci?n l?rica que no

dej? de levantar sospechas y desagrados. En 1965, en la revista Zona

Franca de Venezuela se saludaban con entusiasmo las reflexiones de

Ludovico Silva contra lo que el cr?tico y poeta llamaba ?una nueva y

peor especie de formalismo, que en vocabulario pol?tico se llama

demagogia?. Dec?a Silva ?... buena parte de esas monta?as de poes?a queen Latinoam?rica nacen como respuestas a las crisis revolucionarias

pol?ticas. A fin de presentarse como aut?nticamente revolucionaria, esa

poes?a se cree siempre obligada a olvidarse de toda met?fora sospechosade belleza, para reducirse al estado de grito?.8 Los recelos y las sospechas

nac?an, m?s que del conocimiento cabal de poetas como Gelman, Parra,

Cisneros, Valera Mora, etc. de la igualaci?n indiscrimada de lo que siem

pre fue mala poes?a? sin distinci?n de tema o de po?tica ?, con una

poes?a que cuestionaba los fundamentos est?ticos de Friedrich, con

tinuador y te?rico tard?o, en ese aspecto, del neo-simbolismo quedomin? y, todav?a, perdura entre muchos de nuestros poetas. Nac?an,

fundamentalmente, de un sistema de valores est?ticos en el que la noci?n

de belleza es central y en el que, adem?s, belleza e historia tienen relaciones dif?ciles. Noci?n de poes?a y sistema de valores est?ticos que van

atr?s en la historia y tienen, entre otros, a Benedetto Croce como una desus inspiraciones.

Tambi?n en 1965 y en Zona Franca otro poeta y critico cuestionaba

indirectamente esta poes?a ?atenta al mundo?. Con el rigor y la inteligen

7. Utilizamos el t?rmino en el sentido que Ernesto Laclau desarrollo a partir de

Althusser en Pol?tica e ideolog?a en la teor?a marxista. Capitalismo, fascismo, populismo,

M?xico, Siglo XXI, 1980, 2da. edici?n.8. Ludovico Silva en Zona Franca, 1965.

9. Benedetto Croce, La poes?a, Bari, Editori Laterza, 1980. La relaci?n con Croce no es

de absoluta identidad pero las propuestas del critico italiano perduran m?s de lo que se

cree. V?ase al respecto, en particular, la secci?n ?La poes?a e la letteratura?.






98 JUAN GELMAN...

cia que siempre le ha caracterizado, Guillermo Sucre dec?a en un art?culo

de elocuente t?tulo, ?Algebra y fuego?, que: ?El poeta moderno asume la

responsabilidad de su actitud creadora, con su palabra intenta fundar un

mundo. Su poes?a es producto de la energ?a del esp?ritu, del entusiasmo

de la inteligencia y de la secreta fuerza del propio lenguaje; no es el

resultado de un magnetismo misterioso y universal que prende por azar

en el poeta. La idea de predestinaci?n po?tica es sustituida de este modo

por la idea de destino po?tico?.10 La sugerencia de Guillermo Sucre

bordea y se acerca al solipsismo po?tico de Octavio Paz. La fuerza delidioma funda un mundo, la poes?a se asume rigor y pasi?n, ?lgebra y

fuego, en el destino individual y po?tico.La poes?a de Gelman parec?a buscar un espacio menos enf?tico, un

tono m?s cordial ? del lat?n cor, cordis: coraz?n, esfuerzo, ?nimo ?,una situaci?n donde respirara el hombre de la calle y donde el h?roe

resultara de carne y hueso y no de bronce ecuestre o m?rmol paradigm?tico. La voz rescatada en sus poemas, ya desde 1956, tenia ?ganas de

charlar un rato/ de todo, de cualquier cosa, de nada. /De llorar a ra?z de

la cebolla / y de reir a punto en la cuchara? p. 38). Si la voz l?rica de

Odas elementales de Neruda proclamaba que venia a contar y a cantaruna aventura colectiva, si esa misma voz lloraba con la cebolla, su discurso no dejaba

? al igual que los textos de Nicol?s Guillen? de manejarseintertextualmente con poemas y po?ticas que ten?an sus ra?ces en el

prestigio del Siglo de Oro espa?ol. La narratividad y/o epicidad tanto de

Neruda como de Guillen es casi todo el tiempo canto y no charla. La voz

del otro, la voz colectiva, que aparece en el Son o en Canto general, si

bien puede formar parte de un proyecto pol?tico af?n o similar al de

Gelman, se distancia po?ticamente. El neo-romanticismo o neo

humanismo de Gelmany

muchos otrospoetas que surgen

en la d?cada

del 50 intenta adem?s una dicci?n cuyo populismo? en el sentido mane

jado por nosotros aqu? y que debe mucho a Laclau11 ? rechaza de hecho

tanto la tradici?n nerudiana como la tradici?n moderna de la que habla

Friedrich donde el sentimiento, o mejor el sentimentalismo, no tiene

cabida.

Gelman precisa ya en Velorio del solo en su ?Arte po?tica? que:

A este oficio, me obligan los dolores ajenos,

las l?grimas, los pa?uelos saludadores,

las promesas en medio del oto?o o del fuego,

10. Guillermo Sucre, ?Algebra y fuego?, Zona Franca, 1965.

11. Ver nota 7.






HUGO ACHUGAR 99

los besos del encuentro, los besos del adi?s,todo me obliga a trabajar con las palabras, con la sangre

Nunca fui due?o de mis cenizas, mis versos,

rostros oscuros los escriben como tirar contra lamuerte p. 78).

Trabajo, palabra y sangre. El destino y el origen po?tico del oficio

est? en ?dolores ajenos?. El dolor ajeno funda la palabra que funda un

mundo. En el principio no est? el Verbo fundando un mundo solipsistasino los Otros. Los otros de ?rostros oscuros? cuando se ?abren los

brazos de la ternura?. Demasiada carne, demasiado sentimentalismo

para las po?ticas intelectuales que exigen pura poes?a sin contaminaci?n.

Poes?a de la ternura, voz ajena y, sin embargo, tambi?n el rigor, el cono

cimiento y la tradici?n po?tica. As? en ?Diez? de Got?n dice:

Toda la bisuter?a po?tica subiendo la escalera,el do de pecho, el dol de pecho, el dolorazo

patr?n delpecho

y susadjuntosno alcanzan, nada sobran

para el infeliz que regresa a su casa a medianoche p. 105).

Conocimiento de la tradici?n pero no sujeci?n; la iron?a de esa ?bisuter?a

po?tica? relativiza el respeto hacia lo que el canon establece como

prestigioso. El ?dolorazo? est?tico ?no alcanzan, nada sobran/ para el

infeliz que regresa a su casa a medianoche?. Tradici?n, sin embargo, queGot?n encuentra en Vallejo y tambi?n en cierto Garcilaso ? el Garcilaso

romantic?n ?, en Homero Manzi, en C?tulo Castillo, en Enrique Santos

Disc?polo o en Le Pera. ?La cuchara de nuevo se le llenaba de rabia?dice ?Pedro el alba?il? con eco del Pedro Rojas de Vallejo y se dice tam

bi?n: ?voy a pasar toda la muerte tendido con su nombre/ ?l mover? mi

boca por ?ltima vez? que remoza los versos del soneto ?Escrito est? en

mi alma...? de Garcilaso. Tradici?n y tango d?ndose la mano en la ter

nura exhibida sin afeites ni verg?enzas. Lirismo acendrado y valoraci?n

del sentimentalismo ? a veces truculento ? del tango. Ternura

celebrada sin hipocres?as. Afecto exhibido y hasta proclamado.

Lo extra?o mucho verdaderamente,

sus ojos se llenaban a veces de desierto

pero sab?a callar como un hermano

cuando emocionado, emocionado

yo le hablaba de Carlitos Gardel p. 97).






100 JUAN GELMAN...

Dolor que osa decir su nombre como en ?mi buenos aires querido?:?Sentado al borde de una silla desfondada,/ mareado, enfermo, casi

vivo,/ escribo versos previamente Horados/ por la ciudad donde nac??

p. 104). Est?tica que toma lo marginal y anti-ret?rico, lo ?ntimo, lo coti

diano e ?intrascendente? trasmut?ndolo en la retorta de la narratividad ydel sentimentalismo de una nueva ret?rica donde lo sencillo, lo llano y lo

humilde se erigen como valores centrales. C?digo que no teme la even

tual cercan?a del clich? pues est? traspasado de iron?a y de humor.

C?digo que se ha llamado ?poes?a conversacional?12 y que se distanciade la llamada poes?a social o poes?a elemental por no entronizar la figuradel poeta el poeta en Gelman no es ni vate ni peque?o dios), y, en

especial, por desentronizar o desacralizar el Arte mediante el humor, la

iron?a y el ?exceso? de sentimentalismo.13

De modo que tom? a mi amor,le cort? un brazo, un pie, sus admin?culos,

hice un mazo de naipes

y ante la palidez de los planetasme lo jugu? una noche lentamentemientras mi coraz?n silbaba el distra?do p. 96).

Incluso, como se acaba de ver en el pasaje anterior del poema ?En la

carpeta?, escritura que no desde?a la parodia y puede jugar con po?ticasdonde la funci?n del sentimentalismo, si bien presente, escapa la esfera

real y se vuelve rigidez y estereotipo. As?, ese ?ante la palidez de los

planetas? parece re?rse de la grandi-elocuencia decimon?nica, de la

sinf?nica gestualizaci?n de los Veinte poemas... y del melodram?tico

universo del tango.14

12. Ver entre los muchos que se han ocupado del tema a Roberto Fern?ndez Retamar en

Para una teor?a de la literatura hispanoamericana, La Habana, Cuadernos Casa 16, Casade las Americas, 1975, y a Paul Borgeson, ?Lenguaje hablado/ lenguaje po?tico: Parra,Cardenal y la Antipoesia?, Revista Iberoamericana, Vol. XLVIII, nos 118-119, enero

junio 1982). As? como Hacia una caracterizaci?n de la poes?a conversacional en

Hispanoam?rica Tesis sin publicar), Caracas, Universidad Cat?lica ?Andr?s Bello?, 1982,de Rosa Amelia Sosa.

13. Humor similar puede verse tambi?n en la poes?a de Roque Dalton ver James Iffland,?Hacia una teor?a de la funci?n del humor en la

poes?a revolucionaria a prop?sito de Roque Dalton)? en Literature and Contemporary Revolutionary Culture)-, y tambi?n en la

poes?a de Mario Benedetti.

14. Adem?s de Cohen habr?a que pensar en Sklosvki quien originalmente propone estanoci?n de desfamiliarizaci?n y/o desviaci?n.






HUGOACHUGAR 101

El tratamiento del tema pol?tico tambi?n es peculiar. La poes?a de

Gelman asume la declaraci?n de fe pol?tica o el motivo pol?tico sin

temor; sin ?olvidarse de toda met?fora sospechosa de belleza?, como

lamentaba Silva, sino, por el contrario, erigiendo la consigna y el

vocabulario pol?tico en lenguaje po?tico. Ajustando discurso y dicci?n

po?ticos en la apuesta de la connotaci?n y de la polisemia. Sin rehuir el

nombre propio, la menci?n de circunstancias pol?tico-sociales o las

modulaciones coloquiales del lenguaje. Apostando a una l?rica que

desconoce la distinci?n entre poes?a pura y poes?a contaminada y que

postula un sistema metaf?rico que rechaza la ingenuidad o la inmediatez

anquilosante sin que por ello pretenda un discurso de puras realidades

creadas o met?foras de segundo grado. Pensamos en poemas como ?fi

del? o ?camilo cienfuegos?? as? con min?scula, ya que las min?sculas

dicen tambi?n en Gelman ? donde el lector encuentra pasajes como:

?dir?n exactamente de fidel/ gran conductor el que incendi? la historia

etc?tera/ pero el pueblo lo llama el caballo y es cierto? p. 109). Pasajesdonde la ?belleza? ?

categor?a esquiva y manoseada, a veces con afanes

puristo-eternizantes

? no vienecuajada

del arsenal de la modernidad

sino que se erige como paradigma cierta ?desviaci?n de la norma?

Cohen dixit) que constituye lo ?po?tico? a partir de un sistema de

?figuras? donde lo intertextual es elemento de primer orden.14 Intertex

tualidad que supone no el viejo criterio de la fuente sino la conjugaci?nde los discursos y, a veces, de los diversos niveles de un mismo discurso.

Asi, lo coloquial y lo ?literario?, el clich? y la ret?rica tangu?stica pueden

integrar l?xica o sint?cticamente diversos mundos.

En ?camilo cienfuegos? dir?:

despierto vivo entre las r?fagas del mar anda camiloentre madr?poras y monstruos con su barba

y asambleas de extra?as criaturas

y m?s adelante

camilo se fue al mar

el sastre el cara de palomase me fue sin decirme nada

del malec?n La Habana lo vimos una noche que sub?an del mar luces

como disparosel sastre dulce cose los retazos del dolor y el amor

su tarea est? lejos






102 JUAN GELMAN...

un d?a volver?

la gente se besar? de pronto contra la soledad de mis huesos p. 110).

Creemos que Gelman establece su l?rica desde una ?tica-est?tica o est?

tica-?tica ? tanto vale ?que rehuye lo l?dico, conoci?ndolo:

Alguna vez, de noche

se ve pasar a un poeta con camello,

ubro de p?stalos con crama espaminostas,

l?stima, l?stima, dicen las vecinas,

porque era un buen muchacho p. 96).

Y, sobre todo, desde una est?tica-?tica que apoy?ndose en los ?rostros

oscuros?, en la angustiada voz de quien se sabe uno entre muchos; voz

dividida, voz doble a sabiendas de que no hallar? ?la paz sino en su

polvo/ de manifestaci?n ya por la sombra?. Voz angustiada y, a la vez,entusiasmada por los dolores y los ?xitos de los peque?os seres.

Got?n es tango al rev?s. Es tango dicho en ?vesre?, esa jerga

popular del R?o de la Plata que escamotea el mensaje a censores, de ayer

y de hoy, como lo hac?a el lunfardo. En ese juego de mostrar y de ocultar

se desenvuelve Got?n; en ese juego de ocultar el sentimiento o ?volar

locamente por el techo del mundo?. Entre la frustraci?n y la esperanzasu lenguaje propone una poes?a de la ternura desatada: ?...oye c?mo se

mueve la ternura en la pieza/bajo sus ramas dormir? todav?a una

noche,/bajo sus ramas yacer? cuando caiga? p. 104). La ternura, sen

timental y coqueta, del tango asumi?ndose en una hora en que la Argentina y Am?rica Latina toda asist?an al nacimiento de la revoluci?n

cubana y al deterioro de tiran?as y democracias sup?rstites. La ternuracomo un modo de comprender a los otros, de mirar a los otros, de ser en

y por los otros: ?Rostros oscuros? que escriben sus versos como tirarcontra la muerte.

Unos pocos a?os m?s tarde, por si quedaran dudas, en C?lera bueyaparece un poema titulado ?Got?n?. Ah? se dice: ?Yo no escrib? ese libroen todo caso/ me golpeaban me sufr?an much?simo/ me sacaban palabras como sangre/ yo no escrib? ese libro, enti?ndanlo p. 131).

Hag?moslo a?n m?s expl?cito: fueron otros, los otros, quienesescribieron Got?n. Gelman, su escribidor, queda como uno de los

grandes poetas contempor?neos de Hispanoam?rica; distingui?ndose ydistanci?ndose de ese otro poeta m?ltiple que es el autor est?tico e

ideol?gico del libro Got?n.

This content downloaded from 200 16 5 202 on Sun 03 Jan 2016 01:29:30 UTC

La Poesía de Juan Gelman o La Ternura Desatada

Documents

Transcript of La Poesía de Juan Gelman o La Ternura Desatada