La Revolución Mística de la Poesía Hindú, por Alan Meller

download La Revolución Mística de la Poesía Hindú, por Alan Meller

of 16

Transcript of La Revolución Mística de la Poesía Hindú, por Alan Meller

A comienzos del segundo milenio de nuestra era surge en el sur de India un movimiento de ruptura contra los rgidos formatos e

La revolucin mstica de la poesa hind

A comienzos del segundo milenio de nuestra era surge en el sur de India un movimiento de ruptura contra los rgidos formatos en los que se vena desenvolviendo la prctica del hinduismo, el Virasaivismo. En la poesa, en las vacanas (poemas de verso libre), quedaron plasmados sus principios con una fuerza tan conmovedora y exttica como lo fueron Santa Teresa de vila y San Juan de la Cruz en el catolicismo. Sus postulados msticos generaron un cisma poltico similar a la que llev a cabo el protestantismo al interior del cristianismo.

Vacana significa diciendo o la cosa dicha y corresponde a la lrica religiosa en verso libre escrita en Kannada, lengua Dravidiana, una de las ms antiguas que se conservan hoy en uso.

Virasaivismo quiere decir militante o saivismo heroico o fe en Shiva. Shiva es el dios destructor de la trinidad hind, compuesta adems por Vishnu y Brahma. Brahma es el creador, Vishnu el encargado de la mantencin y Shiva de la destruccin. Si bien hoy Brahma ha sido olvidado prcticamente en la devocin cotidiana de los hindes, quedando relegado a apenas dos templos frente a los miles dedicados a Vishnu y Shiva alrededor de toda la India, su funcin en el Universo sigue siendo fundamental. Una de las metforas purnicas (textos sagrados posteriores a los vedas) ilustra con el paso de cada da la participacin de estos tres dioses en el equilibrio universal: El da nace, creado por Brahma; Shiva lo destruye y da paso a lo noche, hasta que Brahma vuelve a crear el da. Quien preserva la continuidad de este equilibrio es Vishnu. En el correr de los das la trinidad est presente. Si bien esta trinidad forma la cspide de la jerarqua divina hind no debe olvidarse que junto a ellos conviven 330 millones de dioses. Todo esto llevara a pensar a una persona de formacin judeo-cristiana, que el hinduismo es una religin politesta. Pero quien se adentre un poco ms en el espritu que ronda esta religin, no podra dejar de advertir que ello es una simplificacin producto del enfrentamiento del hinduismo desde un paradigma errado. Para ellos slo hay un Dios, y millones de formas del mismo Dios. Este Dios, a diferencia del judeo-cristiano, no se encuentra fuera del hombre, no est observndonos, con despectiva crueldad tomndose un whisky y rodeado de angelitos libidinosos desde las nubes. Cuando un hombre judeo-cristiano es afligido por una enfermedad, sus seres queridos imploran la ayuda de Dios, para que desde su divina comodidad produzca el milagro de la recuperacin, o para que nos d fuerzas y as poder soportar el dolor de la caprichosa decisin de Dios de quitarnos a nuestro amado. Dios desde lo alto observa nuestras vidas y si somos buenos y devotos a su crueldad, quizs nos de una manito para soportar lo que Mircea Eliade llamaba el terror a la historia. En el caso del hinduismo, lo dioses no estn afuera sino adentro. Son formas arquetpicas que se repiten desde la creacin en nuestro diario vivir. La construccin de una casa es la construccin del Universo. El nacimiento de un nio repite el nacimiento de un dios. El acto sexual reproduce el coito divino. La recuperacin del mito en la vida cotidiana lleva al hombre a vivir como si fuera un dios. Lakshmi no es una diosa a la que se le reza de manera supersticiosa (aunque los casos no faltan) sino que es la manifestacin de la virtud que el hombre debe perseguir cuando se relaciona con el dinero.

Un dios que se encuentra dentro de cada uno. En la filosofa mstica hind se han elaborado numerosas teoras para poder comprender este complejo sincretismo donde ms que discriminar entre las nociones para poder llegar a clasificaciones aristotlicas como acostumbramos a pensar en occidente, una a una se van adhiriendo numerosas explicaciones de los textos sagrados que an cuando parezcan contradictorias entre s, no se elaboran en base a oposiciones. Una de estas explicaciones considera que los tres venenos que sumen al hombre en un mundo de ilusiones, representados por el tridente (trisula) que Shiva tiene siempre en una de sus manos como una arma para destruirlos, son el conocimiento intelectual (ubicado en la mente), el conocimiento sensorial (a travs de los cinco sentidos) y el conocimiento emocional del mundo (ubicado en el corazn). Una vez que el hombre ha vencido estos productores del mundo ilusorio, es capaz de alcanzar la facultad discriminadora, es capaz de distinguir lo Real de lo Irreal, es capaz de habitar en la Verdad ltima y Primera, es capaz de descubrir a Shiva dentro suyo. Shiva es el hombre despojado de su ego, sus deseos, su odio, es la forma del hombre sin esos venenos, que cualquiera puede alcanzar.

En la poca en que surge la rebelin del virasaivismo, el hinduismo se encontraba en una situacin similar a aquella que en Europa produce la Reforma y la Contrarreforma en el Cristianismo. El hinduismo se haba vuelto una religin sistmica en sentido social. Dicho de otra manera, la tradicin se haba vuelto un sistema a travs del cual el hombre pretenda estabilizar el Universo para su utilizacin. Los rituales, las peregrinaciones, las ofrendas a los dioses y a los sacerdotes, no tenan otra intencin que la de manipular cuidadosamente el Universo del Seor para los propsitos personales, incorporando incluso un determinado precio para la salvacin del alma. Los santos Virasaivas sentan horror ante tales regateos, ante las manipulaciones y la arrogancia de las predicciones. El mundo del Seor es impredecible y las predicciones nacen de la ignorancia, sostenan. El mundo de los humanos, sometido a la discriminatoria divisin elaborada por los brahmanes, detentores polticos de la religin, capaces de destronar y destruir a un dios (como en el caso de Indra) se haba alejado, para los santos Virasaivas, de bhakti, la expresin personal, interna de la bsqueda religiosa. Protestan contra el sistema pblico de la religin en pro de una religin personal. Rechazan los sacrificios de animales y la adoracin de imgenes y de smbolos como el fuego. Si para la religin hind un templo es la representacin del cuerpo humano, los santos Virasaivas devuelven al cuerpo la condicin de templo. El templo es un cuerpo es un templo. El movimiento es expresin de la vida. La detencin es un intento ftil que busca perpetuar un estado de cosas que no puede permanecer. Nada permanece, todo se destruye para volver a surgir. El movimiento es expresin del cambio permanente y Shiva el dios que mejor ilustra esta condicin. Para los santos Virasaivas, la religin no es algo con lo que uno nace, oponindose absolutamente al sistema de castas tan defendido por los brahmanes para mantener el dominio que tenan sobre el resto de la sociedad. Para los brahmanes, uno no puede convertirse al hinduismo, sino que se nace o no hind. El proselitismo no tiene cabida. Para los defensores del bhakti, el correcto mirar y el correcto decir est al alcance de todos aquellos que busquen luz en un mundo oscurecido por las ilusiones.

A la literatura mstica clsica de la India con sus establecidas convenciones de lenguaje y elaborados patrones mtricos que mediatizan y despersonalizan las expresiones literarias, donde el ideal es la impersonalidad, las vacanas oponen una literatura personal, expresando conflictos reales, no a travs de una mscara, sino dejando hablar al poeta, en su dialecto local, como si fuese una conversacin o la explosin de un grito interno, centrndose ms en el sujeto que adora que en el objeto de adoracin, el Dios mitolgico, que en ltima instancia, una vez que se ha alcanzado el ideal virasaiva conforma una unidad entre sujeto y objeto. Como pueden los inmorales de este mundo conocer el milagro, la unidad de tu pie y el mo, Ramanatha.

Basavanna (1106-1167)

IPadre, en tu ignorancia me trajiste

a travs de los teros maternos

a travs de mundos no deseados

Fue un error tan slo nacer,

Oh Seor? Ten piedad de m por haber nacido

una vez antes.

Te doy mi palabra,

seor de los ros que se unen,

no volver a nacer jams.

II

Tiene importancia hace cunto

la roca se remoja en el agua:

llegar algn da a ablandarse?

Tiene importancia hace cunto

me dedico a la adoracin

cuando el corazn es inconstante?

Intil como un fantasma

hago guardia de pie sobre oro escondido,

O seor de los ros que se unen.

IIIEl rico

har templos para Shiva.

Qu podr yo,

un pobre hombre,

hacer?

Mis piernas son pilares

mi cuerpo el altar,

la cabeza una cpula

de oro.

Escucha, Oh seor de los ros que se unen,

las cosas levantadas caern,

pero las en movimiento, siempre permanecern.

IVLa vasija no es un bronce

y el espejo otro.

Vasija y espejo son un metal.

Devolviendo la luz

uno se transforma en espejo.

Consciente, uno es el Seor;

inconsciente, tan slo un humano.

Adora al seor sin olvidar,

al seor de los ros que se unen.

VMira aqu, querido amigo:

visto el ropaje de estos hombres

slo para ti.

A veces soy un hombre,

a veces soy una mujer.

Oh seor de los ros que se unen

Har guerras por ti

pero ser la novia de tus devotos.

VICuando una prostituta con su hijo

toma a un cliente por dinero,

ni el nio ni el libertino

tendrn suficiente de ella.

Ella ira a mimar al nio una vez,

y luego a acostarse con el hombre una vez,

ni aqu ni all.

El amor por el dinero es implacable,

mi seor de los ros que se unen.

VIILa vasija es un dios. El ventilador

es un dios. La piedra en la calle

es un dios. El peine es un

dios. La soga del ahorcado tambin es un

dios. La onza es un dios y el

borde de la copa es un dios.

Dioses, dioses, hay tantos

que no queda espacio

para un pie.

Slo existe

un dios. l es nuestro Seor

de los Ros que se Unen.

VIIIYo no s nada de golpes de tiempo y mtrica

ni de la aritmtica de las cuerdas y los tambores;

Yo no conozco el conteo ymbico ni dactlico.

Mi seor de los ros que se unen,

como nada podr herirte

Yo canto como amo.

IXEl cordero sacrificial trado para el festival

se comi las verdes hojas tradas para la decoracin.

Sin saber cosa alguna sobre la matanza,

slo quiere llenar su barriga:

nacido ese da, para morir ese da.

Pero dime:

acaso los asesinos sobrevivieron,

Oh seor de los ros que se unen?

XComo un mono en un rbol

saltando de rama en rama:

cmo puedo creer o confiar

en esta cosa ardiente, en este corazn?

que no me dejar ir

hacia mi Padre.

mi seor de los ros que se unen.

XIAntes

que el gris alcance las mejillas,

que las arrugas el curvo mentn

y que el cuerpo se vuelva una prisin de huesos:

antes que

con dientes cados

con la espalda torcida

t seas custodiado por alguien ms:

antes que

dejes caer tu mano hasta la rodilla

y aferres un bculo:

antes que

los aos corroan

tu forma:

antes que

la muerte te toque:

adora

a nuestro seor

de los ros que se unen!

XIIEn la casa del brahman

donde alimentan al fuego

como a un dios

cuando el fuego se descontrola

e incendia la casa

ellos arrojan sobre l

el agua de la acequia

y los desperdicios de la calle,

golpean a sus bestias

y llaman a la multitud.

Estos hombres olvidan sus rezos

e increpan su fuego,

Oh seor de los ros que se unen.

Devara Dasimayya

I

En el tero materno

el nio no conoce

el rostro de su madre

ni ella puede jams conocer

el rostro de l.

El hombre en el mundo ilusorio

no conoce al Seor

ni el Seor a l,

Ramanatha.

II

T has forjado

esta cadena

de dieciocho eslabones

y nos has encadenado humanos:

nos has arruinado

Oh Ramanatha

y nos hiciste perros para siempre

amarrados.

IIISi este es mi cuerpo

acaso no seguir mi voluntad?

Si este es tu cuerpo

acaso no seguir tu voluntad?

Obviamente, no es ni tu cuerpo

ni el mo:

es el caprichoso cuerpodel mundo en llamas que has creado,

Ramanatha.

IV

Yo soy quien tiene el cuerpo

t eres quien retiene el aliento.

T conoces el secreto de mi cuerpo,

yo conozco el secreto de tu aliento.

Por eso tu cuerpo

est en el mo.

T sabes

y yo s, Ramanatha,

el milagro

de tu aliento

en mi cuerpo.

V

Dios de mi clan,

no colocar mi pie

sino donde tu pie

haya estado antes:

no tengo pie

que sea mo.

Cmo pueden los inmorales

de este mundo conocer

el milagro, la unidad

de tu pie

y el mo,

Ramanatha?

VIEl fuego puede quemar

pero no puede moverse.

El viento puede moverse

pero no puede quemar.

Hasta que el fuego no se une con el viento

no puede dar un paso.

Acaso el hombre sabe

que as es

con el conocer y el hacer?

Mahadeviyakka

I

No una, no dos, no tres o cuatro,

sino a travs de ochenta y cuatro mil vaginas

he llegado,

he llegado

a travs de mundos improbables,

embriagada de

placer y de dolor.

Cualquiera que sean

todas las vidas anteriores,

mustrame piedad

en este da,

Oh seor

blanco como jazmn.

II

Como

el tesoro escondido en la tierra

el sabor en la fruta

el oro en la roca

el aceite en la semilla

el Absoluto se esconde

en el corazn

nadie puede saber

los caminos de nuestro seor

blanco como jazmn

III

Oh madre, ard

en un fuego sin llama

Oh madre sufr

una herida sin sangre

madre me sacud

sin placer:

amando a mi seor blanco como jazmn

vagu por mundos inexistentes.

IV

Mi cuerpo es sucio

mi espritu es espacio:

cul

debo aferrar, Oh seor? Cmo,

y qu,

debo pensar de ti?

Atraviesa

mis ilusiones,

seor blanco como jazmn.

VCuatro partes del da

me aflijo por ti.

Cuatro partes de la noche

estoy loca por ti.

Me tiendo perdida

enferma por ti, noche y da,

oh seor blanco como jazmn.

Desde que tu amor

fue sembrado,

he olvidado el hambre,

la sed y el sueo.

VI

Cuando no me conoca

dnde estabas t?

Como el color en el oro,

t estabas en m.

Vi en ti,

seor blanco como jazmn,

la paradoja de tu ser

en m

sin mostrar la orilla.

VIILo que vendr maana

haz que llegue hoy.

Lo que vendr hoy

haz que llegue ahora mismo.

Seor blanco como jazmn,

no nos entregues tus ahoras y despus!

VIII

l alter mi corazn,

saque mi carne,

reclam como tributo

mi placer,

se apoder

de todo mi ser.

Yo soy la mujer del amor

para mi seor, blanco como jazmn.

IX

Otros hombres son espinas

bajo la hoja suave.

No puedo tocarlos

ni acercarme a ellos, ni confiar en ellos,

ni hablar con ellos intimidades.

Madre,

porque todos ellos tienen espinas

en sus pechos,

no puedo tomar

a ningn hombre en mis brazos, mas que al seor

blanco como jazmn.

X

Hazme ir de casa en casa

con brazos extendidos para limosnas

Si mendigo, hazlos dar nada.

Si ellos dan, haz que se caiga al suelo.

Si se cae, antes que la recoja, haz que un perro la tome,

Oh seor

blanco como jazmn.

XI

Yo amo al Apuesto nico:

l no tiene muerte

deterioro ni forma

ni lugar ni costado

ni final ni marcas de nacimientos.

Lo amo Oh madre. Escucha.

Yo amo al Bello nico

sin vnculos ni temor

ni clan ni tierra

ni lmites

para su belleza.

Por ello el seor, blanco como jazmn, es mi marido.

Toma estos maridos que mueren,

se deterioran, y alimntalos

para los fuegos de tu cocina.

XII

Si l dice

que tiene que marcharse

a pelear batallas en el frente

yo lo entiendo y puedo quedarme tranquila.

Pero, como puedo tolerarlo cuando l est aqu en mis manos

justo aqu en mi corazn

y no me toma?

Oh mente, Oh memoria del pasado,

si no me ayudas a llegar a l

cmo podr jams tolerarlo.

Allama Prabhu (se desconoce su origen y su fecha de nacimiento)

I

Mira aqu

las piernas son dos ruedas;

el cuerpo es un carrolleno de cosas.

Cinco hombres manejan

el carro

y un hombre no es

como el otro.

A menos que t lo dirijas

con pleno conocimiento de sus rumbos

el eje

se quebrar,

Oh Seor de las Cavernas.

II

Si las montaas tiemblan en el fro,

con qu

las cubrirn?

Si el espacio va desnudo

con qu

lo arroparan?

Si el seor de los hombres se vuelve mundano

dnde encontrar la metfora,

Oh Seor de las Cavernas

III

Con un templo entero

en este cuerpo

dnde queda la necesidad

para otro?

Nadie pidi

dos.

Oh Seor de las Cavernas,

si t eres piedra,

qu soy yo?

IVAfuera de los lmites de la ciudad

un templo.

En el templo, mira!,

una mujer ermitaa.

En la mano de la mujer

una aguja,

en la punta del alfiler

los catorce mundos.

Oh Seor de las Cavernas,

yo vi una hormiga

devorarlo todo

la mujer, la aguja,

y los catorce mundos.

V

Si llueve fuego

t debes ser como el agua;

si es una inundacin de aguas

t debes ser como el viento;

si es el Gran Diluvio

t debes ser como el cielo;

y si es el ltimo Gran Diluvio de todos los mundos,

t debes abandonar el yo

y transformarte en el Seor.

VIBuscando tu luz,

yo sal:

era como el repentino crepsculo

de un milln de milln de soles,

un ganglio de relmpagos

para mi admiracin.

Oh Seor de las Cavernas,

si t eres luz,

no puede haber metfora.

VIIUn ro corriendo

es todo piernas.

Un fuego ardiendo

es bocas por todas partes.

Una brisa soplando

es toda manos.

Por ello, seor de las cavernas,

para tus hombres,

toda orilla es Smbolo.

VIII

En toda su bsqueda

ellos no pueden ver

la imagen en el espejo.

Arde en crculos

entre las cejas.

Quien esto sabe

tiene al Seor.

IXAlimenta al pobre

di la verdad

haz postas de agua

para el sediento

y construye estanques para un pueblo-

t debieras ir al cielo

despus de la muerte, pero no llegars a ninguna parte

cercana a la verdad de Nuestro Seor.

Y el hombre que conoce a Nuestro Seor,

no tendr ningn resultado.

XUno muere,

otro lo conduce hacia el entierro:

an otro toma a ambos

y los crema.

Nadie conoce al novio

y nadie a la novia.

La muerte cae sobre

el matrimonio.

Mucho antes que las decoraciones se destian

los novios estn muertos.

Seor, slo tus hombres

no tienen muerte.

XILa luz

devora la oscuridad.

Yo estaba solo

adentro.

Derramando

la oscuridad visible

Yo

era T blanco

Oh Seor de las Cavernas. Introduccin, traduccin, traicin y notas de Alan Meller sobre los poemas traducidos del Kannada al ingls por A. K. Ramanujan.

En los poemas Shiva es denominado Seor de los Ros que se Unen, Ramanatha, Seor Blanco como Jazmn, y Seor de las Cavernas.

A los 16 aos, este poeta mstico abandona su hogar, sus comodidades, sus riquezas, y renuncia a su casta, tras considerarla parte de un sistema encadenante y sinsentido y viaja al este hasta llegar a la unin de tres ros, que escoje como metfora de su dios. Shiva le habla en sus sueos y en una ocasin se manifiesta frente a l en su forma de lingam (representacin flica de Shiva, de la dualidad entre lo manifiesto y latente) brotando de una flor de loto en el medio de la estatua de un toro. As queda fundado el virasaivismo. La mayor parte de sus vacanas se centran en la lucha que libra el hombre con el mundo, sus enfermedades y tentaciones.

En este poema est presente la idea de la liberacin de la cadena de las reencarnaciones a travs del camino de la Realizacin (unin del individuo con la divinidad). Darle su palabra al Seor implica, para el poeta, formar un pacto con su propia condicin divina.

Los templos indios, tradicionalmente, se construyen a imagen del cuerpo humano. El ritual comienza excavando la tierra y plantando un pote de semillas. Se dice que el templo surge de las semillas, como el hombre. Los costados del templo son llamados manos, los pilares pies, el techo cabeza. Basavana en este poema clama por un retorno al origen de todo templo prefiriendo el cuerpo a la corporizacin. Existen en el poema dos oposiciones fundamentales: el rico har templos, mientras que el pobre ser un templo. Basavana se aleja del hacer ritulico, privilegiando un ser espiritual. Por ltimo la oposicin entre las cosas levantadas y las en movimiento o jangama, que por un lado refiere a la condicin de permanente peregrinacin de los virasaivas y por otro quiere decir imperecedero, inmortal.

La expresin del amor bhakti, la manifestacin personal del sentir religioso, para el virasaivismo, es bisexual.

El amor, en el hindusmo, es un sentimiento de compasin dirigido a la creacin en su conjunto. No puede prodigarse a alguien en particular ni puede adjudicrsele precio. Ello, lejos de ser amor, slo es deseo, y como tal, jams ser suficientemente retribuido.

No es de extraar que los misioneros cristianos se sintieran profundamente atrados a los textos del virasaivismo, llegando a traducirlos y a especular en torno al bhakti como el resultado de la influencia de un temprano cristianismo en el sur de la India. De la misma manera, muchos textos del nuevo Testamento y la vida de algunos santos son consideradas por un gran nmero de hindes como variantes del bhakti.

Las vacanas rechazan las formas premeditadas del arte, las formas establecidas y permanentes. No slo son un canto espontneo sino adems un canto por la espontaneidad.

La imagen del mono saltando de rama en rama se utiliza con frecuencia en la tradicin religiosa hind para representar la inconstancia de la mente que salta de idea en idea, de deseo en deseo, tan incontrolable como un mono. Es esta veleidosa condicin humana la que el poeta teme le impida seguir la senda al encuentro de su dios.

El fuego sacrificial pertenece a los ritos Vedas que el virasaivismo rechaza.

Lo ms seguro es que este haya sido el primer poeta de las vacanas. Durante una extensa penitencia asctica Shiva se le aparece para decirle que debe trabajar para l. Llama a Shiva Ramanatha, el que es adorado por Rama, una de las encarnaciones de Vishnu, estableciendo as la supremaca de Shiva frente a los otros dioses. Dasimayya lleg a ser un famoso maestro en el reinado de Jayasimha. Convirti al virasaivismo a la esposa del rey que era Jaina. l y sus seguidores, indignados, lo acosaron con pruebas. En una ocasin escondieron a un nio en el hueco de un rbol y le dijeron a Dasimayya que el dios de ellos estaba incluso en el rbol. Le pidieron al rbol que hablara, pero el rbol no hablo. El nio haba muerto, y la madre culpo a Dasimayya implorndole que le devolviera la vida, lo cual l hizo. En otra ocasin lo obligaron a beber de una jarra llena de veneno e inmudicia, y Dasimayya con la ayuda de Shiva removi las impurezas y bebi sin perjuicio.

Los dieciocho eslabones corresponden a las dieciocho ataduras tradicionales del hinduismo: los actos pasados, presentes y futuros; el cuerpo, la mente, la riqueza, la sustancia, la vida, y el egocentrismo; el oro, la tierra y la mujer; la lujuria, la ira, la codicia, la soberbia, el orgullo y la envidia.

Shiva es el Mahayogi, el gran asceta, en quien se centra la suprema perfeccin de la penitencia en austeridad y de la meditacin abstracta, a travs de los cuales se adquieren poderes ilimitados, el mximo conocimiento espiritual y eventualmente genera la unin con el gran espritu del universo.

El virasaivismo, especialmente para Dasimayya tena una funcin activa. La prctica del bhakti generaba un amor por toda la creacin que deba ponerse en movimiento a travs de su divulagacin.

A los dos aos esta poetisa fue iniciada en la adoracin de Shiva por un gur desconocido. Tiempo despus el rey Kausika se enamora de ella y consigue desposarla a la fuerza. Los poemas de Mahadeviyakka se refieren a Shiva como su amante ilcito o como su nico esposo legtimo. Tras una noche en que el rey fuerza su voluntad con violencia, Mahadeviyakka escapa y abandona su tierra, su familia, corta toda relacin con los hombres y se despoja de su ropas, ltima concesin al mundo masculino, cubrindose desafiante tan slo con sus extensos rastas. Err salvajemente, intoxicada con el amor por su dios, enamorada de l, mas sin hallarlo. Finalmente, tras abandonarse a s misma, lo encuentra. Sus vacanas manifiestan la bsqueda del amor, y sus tres fases en la tradicin india: el amor prohibido, el amor en separacin y el amor en unin. Segn la tradicin muere en unidad con Shiva cuando bordeaba los veinte aos.

84 y muchos de sus mltiplos son figuras familiares en la literatura mstica de la India. 84 es el nmero de posturas de un yogui; 84 el nmero de Siddhas (maestros de lo oculto); las enseanzas de Buddha son 8400; el alma recorre un ciclo de 84000 nacimientos. Bhakti y la fe en el Seor son la respuesta a la lgica inexorable del karma.

Madre puede ser la madre real u otra compaa femenina.

El cuerpo no es sucio entendido como pecaminoso, sino que es sucio como un lente que no deja ver. El cuerpo es la compuerta hacia el mundo ilusorio, sobrecargado de impurezas es un impedimento hacia la experiencia de la Realidad.

Existen dos versiones acerca de la vida de Allama. Una lo considera como Shiva mismo. La segunda versin cuenta de un Allama que es percusionista de un templo e hijo de un maestro de danza. Un da se enamora de Kamalate con quien se casa y conoce un amor sin comienzo, medio ni final; sumergidos en el deseo, sin peso ni impedimento. Pero un da Kamalate enferma y muere. Allama en su dolor vaga como un desquiciado, con los sentidos anestesiados, con su memoria eclipsada, llamando a la difunta Kamalate en el campo, en los bosques, en las villas. Una tarde mientras estaba sentado removiendo la tierra con su pie descubre un pinculo dorado, como si fuese la punta del pezn en el seno de la Diosa de la Libertad. Excava pero no dio con su amada Kamalate sino con un pequeo altar clausurado. Sin importarle las consecuencias pate la puerta y entr. Vio frente a s a un yogui en trance, concentrado en el lingam. Mientras lo observaba con asombro, el yogui coloc un lingam en las manos de Allama y expir. En el momento de la transferencia del lingam, Allama se ilumin y en adelante fue adnde el Seor lo necesitaba y enviaba. Por esta razn quizs Allama invoca a Shiva como el Seor de las Cavernas. Si Basavanna era el hermano mayor (anna) y Mahadeviyakka la hermana mayor (akka) Allama era Prabhu, el maestro de todos. Sus vacanas fueron todas escritas tras su iluminacin. En ellas casi no pueden verse huellas de lo que fueron los conflictos de su pasado. En un santo como Allama la mariposa no tiene memoria de la oruga.

Los cincos sentidos que nos comunican con el mundo de manera ilusoria.

Los lmites de la ciudad simbolizan los lmites fsicos del cuerpo; el templo, la forma interna de la mente. El poder de conocimiento es la mujer ermitaa, sosteniendo la mente (la aguja) sobre la cual se balancean los catorce mundos (para Asterin en la mitologa borgeana, catorce equivale a decir infinito). Cuando la gran iluminacin comienza (la hormiga) son devoradas todas estas distinciones.

Este poema alude a las catstrofes que sobrevienen al trmino de cada una de las cuatro eras por las que transita el ciclo de la creacin (toda la creacin corresponde a un da en la vida de Brahma). Actualmente vivimos en la cuarta y ltima era, kaliyuga, la era de la destruccin

En este poema se repite la oposicin luz-oscuridad. La luz simboliza la supraconsciencia alcanzada en la unin con Shiva y la oscuridad la ignorancia que producen los sentidos, las emociones y el intelecto.

A veces en las vacanas la bsqueda de una visin no mediatizada llega a un punto en el que el lenguaje, la lgica y las metforas no son suficientes.