Las divisiones son destructivasStruan StevensonPresidente de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo. Eurodiputado del PPE (Escocia)

i objetivo principal desde que me heconvertido en presidente de laComisión de Pesca del Parlamento

Europeo es el de ser lo más honesto ytransparente posible en todas las decisionesque me vea obligado a tomar. Somos todosconscientes de que nuestra preocupaciónmás urgente es la conservación y la necesi-dad de lograr pesquerías sostenibles queaseguren la supervivencia de las comunida-des de pescadores.Considero que la importancia potencial de lasalianzas de Estado para el logro de este pro-pósito no debe ser subestimada y yo he a-puntado con frecuencia los numerosos ejem-plos de cooperación regional que ya existen.Las alianzas de Estado demuestran las dife-rentes condiciones de las diversas partes dela Unión. Creo que tales diferencias no

deberían ser interpretadas como una diver-gencia a la norma, sino, por el contrario,deberían ser materia de apropiadas estruc-turas de gestión que reflejen las necesida-des y opiniones de las partes implicadas encada región.Considero que la UF ha hecho progresossustanciales en el reconocimiento de losdiferentes tipos de regiones altamentedependientes de la pesca, y ahora existenayudas habilitadas en base a los reformadosfondos estructurales dirigidos a los proble-mas de cada región. En los casos en losque no se presta suficiente atención, es nor-mal que sean las autoridades nacionales yregionales las que se preocupen de recla-marla, en lugar de poner en duda la políticacomunitaria.Las alianzas entre grupos de Estados miem-

bros pueden ser una ayuda porque presen-tan un frente común que reduce el númerode puntos de vista y, por lo tanto, las posibi-lidades de elección para quienes toman lasdecisiones. De todas formas, las alianzasserán sólo útiles si clarifican los problemas yfacilitan la tarea de alcanzar un compromisoy asegurar un sector pesquero saludablepara toda la Unión. La formación de divisio-nes sólo puede ser destructiva.Después de todo, el mayor deseo de lascomunidades de pescadores de Escocia esla misma que el de las comunidades de pes-cadores de Galicia o de cualquier otro lugarde la UE: la supervivencia de su industria yun futuro a largo plazo para las personas alas que ocupa.Debemos trabajar juntos para que esto seaasí.

Una buena noticia frenteal abandonismo de la ComisiónRosa MiguelezVicepresidenta de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo. Eurodiputada del PSE (España)

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icen que la política haceextraños compañeros decama. Buscar aliados es

una condición indispensablepara defender nuestros propiosplanteamientos en organizacio-nes internacionales. Tambiénen la Comunidad Europea. Lacreación del grupo "Amigos dela Pesca" es una buena noticiaque no debería sorprendernos.En mis frecuentes contactoscon el sector pesquero de losdistintos países europeos hepercibido problemas comunese inquietudes similares expre-sadas en un mismo idioma, elde la pesca, se encontraran enGalicia, Irlanda o elMediterráneo francés. Sonmayores las coincidencias delsector pesquero comunitario yde los Estados miembros conintereses pesqueros que susdiferencias. Habremos de feli-citarnos si la conjunción deestos seis Estados miembros

consigue disipar las dudas dela Comisión y sus tentacionesde arrojar la toalla, tanto en eldesarrollo de las zonas depen-dientes de la pesca, a travésde la propia actividad pesque-ra, como en la necesidad demodernizar nuestra flota parahacerla más competitiva.Que el mundo pesquero esplural resulta evidente. En nin-guna región europea este sec-tor es homogéneo ya que en élactúan agentes con interesesdiversos. Pero todos reclamana la Comunidad una políticaactiva para asegurar el futurode la actividad, conciliando demanera inteligente la preserva-ción de los recursos con la nomenos necesaria moderniza-ción de la flota. "Amigos de laPesca" contará con el apoyodel Parlamento Europeo pararespaldar la presencia de laflota comunitaria en el mundo,a través de la participación de

la UE en las organizacionesregionales de pesca y de laratificación de acuerdos bilate-rales. En este sentido elabora-ré este año un informe de ini-ciativa en el PE que tendrágran trascendencia, puestoque permitirá analizar los pro-blemas que afectan a la flotade altura y gran altura y reca-bar el apoyo de las institucio-nes comunitarias.Que en el Consejo deMinistros europeo, ante lapasividad de la Comisión y laabsoluta falta de rumbo cohe-rente de su DG Pesca, seforme un núcleo activo es unabuena noticia. Resulta naturalque los países europeos conintereses pesqueros se entien-dan y diseñen una estrategiade cara a la reforma de laPCP Y normal que la primeradivisión se establezca entre losEstados interesados por lapesca y aquellos otros que,

importándoles menos, son par-tidarios de renacionalizar yahorrarse así los menguadosrecursos que Bruselas destinaa la PCP. Confiemos en queesta nueva alianza sirva paraabortar estas ansias renacio-nalizadoras que en nada bene-fician a nuestro sector ni alproyecto de construcción euro-pea.Claro está que entre españo-les, irlandeses o franceses losplanteamientos de cara a lareforma no son coincidentes,pero es un buen principio bus-car y encontrar puntos encomún. Cabe destacar laausencia del Reino Unido deeste grupo y la coincidenciacon los recientes ataques deMargaret Thatcher a la exis-tencia de una Política Pesque-ra Común. Las conclusionesdel grupo "Amigos de laPesca" pueden ser tachadasde vagas y de poco concretas,

PESCA internacional

pero al menos reflejan el inte-rés de seis Estados miembrospor la pesca y su intención dedesarrollar la PCP frente alabandonismo creciente de laComisión. El retraso de laComisión a la hora de presen-tar los reglamentos de lanueva PCP es una prueba deesa falta de dirección en los

asuntos pesqueros. Ni parauna reforma de mínimos hayacuerdo entre los responsa-bles políticos y entre los pro-pios funcionarios de laComisión.Tampoco el hecho de uniresfuerzos con otros Estadosmiembros interesados en man-tener la PCP debería suponer

para España la renuncia a susposiciones para lograr unaPolítica Común de Pesca másintegrada y acorde con el mer-cado único, para que la reglaen esta política deje de ser lasexcepciones a la libertad deestablecimiento y de acceso alos recursos.Es necesario unir todos los

esfuerzos para conseguir laviabilidad del sector pesquerocomunitario. Las Administra-ciones públicas, comunitaria,nacional y autonómica, han deasumir su responsabilidad yapostar por un sector que, sinel apoyo de las instituciones,está condenado en buenaparte a su desaparición.

La PCP debe preservarlos recursos y asegurar el futurode los profesionales de la pescaHugues MartinVicepresidente de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo. Eurodiputado del PPE (Francia)

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uando "Pesca Internacional" mepidió colaborar en su número espe-cial sobre la Política Común de

Pesca (PCP), me dije enseguida que erauna ocasión formidable de participar en undebate de extrema importancia.La PCP, tal como la conocemos actualmen-te, ha llegado a su término y se encuentraen un verdadero proceso de cambio: nosatisfizo a nadie y no ha conseguido, porotra parte, jugar su rol, que no es otro quepromover una pesca duradera.Una discusión en torno al Libro Verde de laComisión Europea ha tenido lugar en elParlamento europeo en el mes de enero de2002 y constituyó una primera ocasión dereflexionar sobre las acciones y prioridadesque deberán articular la nueva PCP Losdebates animados reflejaron la dificultad deencontrar soluciones a la ' de recursos y dedefinir medidas concretas.Yo no tengo soluciones milagrosas. Peroestimo que para estar en condiciones deresponder a los nuevos desafíos la futuraPCP deberá obligatoriamente girar en tornoa cinco objetivos incuestionables:1. Tendrá que ser capaz de preservar losrecursos. Pero las medidas deberán apo-yarse sobre datos científicos fiables, lo quetodavía no es el caso. A la fijación de lasTAC le falta hoy credibilidad. Nosotrosdebemos instaurar un diálogo permanenteentre las autoridades competentes, naciona-les y europeas, los científicos y los pesca-dores. Eso permitirá obtener su adhesión yponer a prueba su saber hacer. Los pesca-dores son profesionales responsables quetienen perfecto conocimiento de lo que estáen juego. Hace falta darles confianza. Esigualmente imperativo encaminar la búsque-da científica dándoles más medios.

2. La nueva PCP deberá también concen-trarse en los modelos de gestión de losrecursos. Una gestión de las TAC más flexi-ble, basada en la plurianualidad, me parecenecesaria, del mismo modo que el respetodel principio de estabilidad relativa. Al con-trario, pienso que los POP han demostradosu inutilidad y su peligrosidad y que esnecesario ahora tenerlo en cuenta. Sobreeste asunto, estimo que la proposición de laComisión de reducir la capacidad de la flotaun 40% es totalmente inaceptable e infun-dada. Existen soluciones alternativas. Hacefalta experimentarlas con urgencia: reduc-ción atinada de los días de pesca, paradastemporales de pesca indemnizadas paraciertas flotas (reposo biológico), introduc-ción de nuevos parámetros de medida de lacapacidad de pesca distintos al tonelaje o elkilovatio...3. La dimensión social deberá por otra parteser reforzada, de manera que proporcione alos pescadores las ayudas esenciales parasobrevivir. Hace falta asegurar el manteni-miento de la política estructural de ayuda alsector, teniendo como objetivo la moderni-zación y la adaptación de la flota comunita-ria a los nuevas exigencias, así como ladefensa de una actividad frecuentementeestablecida en zonas infradesarrolladas yperiféricas. La pesca es una actividadestructural del litoral, y participa en la plani-ficación del territorio.4. Es necesario también reforzar la dimen-sión internacional que constituye, en mi opi-nión, a través de los acuerdos de pesca conpaíses terceros, un elemento esencial de lanueva PCP. Eso significa posibilidades decapturas suplementarias para la flota comu-nitaria.5. Existe un último desafío, y no el menor:

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PESCA internacional

la inspección y el control. Los mecanismosson por el momento insuficientes, y yo creoque tarde o temprano se irá hacia la crea-ción de un cuerpo de guardacostas euro-peo. Su misión podría ser el control y la ins-pección de las actividades de pesca, la bús-queda y la persecución de las actividadesilegales efectuadas notablemente pornavíos bajo pabellón de conveniencia odesprovistos de pabellón, así como el con-trol del conjunto de la navegación.Yo espero que la Comisión Europea, a laque incumbe en el presente la presenta-ción de proposiciones dignas de ese nom-bre, será capaz de poner en marcha unareforma equilibrada, entre la preservaciónde los recursos y la seguridad de un ver-dadero futuro para los profesionales de lapesca que ejercen un trabajo a la veznoble y difícil.A través de la invitación de mi colega yamigo Daniel Varela Suanzes-Carpegna,yo mismo he tenido recientemente la oca-sión de visitar vuestra bella región deGalicia y un emplazamiento de conchylicul-tura. Sé hasta qué punto las esperanzas deesos profesionales, hombres y mujeres, songrandes. No se les puede defraudar.Aprovecho para recordar que la acuiculturano recibe de momento toda la atención quemerece. El informe de iniciativa que he sidoencargado de elaborar en los próximosmeses tomará en consideración su papelcreciente en el seno de la PCP. En mi crite-rio, es un sector que representa formidablespotencialidades para la pesca del siglo XXI.Sobre el conjunto de materias que prome-ten la llegada de tramitaciones, seré tam-bién, en el seno de la Comisión de Pescadel Parlamento Europeo, particularmentevigilante y activo. .1,