LAS TRADICIONES PROFÉTICAS EN EL LIBRO DE BARUC

Al hablar de tradición en los profetas, es enfrentarse a un tema complejo, puesto que se tendría que hablar de su vida, obras y oráculos, tanto en colecciones recopiladas como también por vía oral; pero el objetivo de esta sinopsis es mostrar cómo el secretario y ocasional portavoz del profeta Jeremías (Cfr. Jr 32 12-13.16) ve la tradición profética hasta ponerse por escrito. Sin más preámbulo juzgue por sí mismo.

En todo esto se debe partir de un hecho fundamental y es que en Baruc, se visualiza patentemente el sufrimiento personal de los profetas que a su vez lo inserta dentro de su ministerio como parte integrante de una actividad, buscando un objetivo: es que pueda dar testimonio con su vida a quienes dirige.

En el libro de Baruc se encuentra palpablemente el género literario del “dicho profético” con su doble expresión, es decir que cuando va a dar un oráculo de amenaza divina, ligado a éste va un discurso de reprensión a quien se dirige; o ante una promesa dirigida, expresa un discurso parenético. Ejemplo claro de ello, se puede encontrar en Baruc 4.

Otra característica tradicional profética que se encuentra allí es que el profeta pone por escrito su mensaje en forma de testamento, con el fin de mostrar que sus palabras no se expresaron en vano y manifestar a las generaciones que si siguen con sus malas conductas acabarán destruidos como sus padres (Cfr. Baruc 2, 1-5).

Algo que a lo largo de la historia ha sido centro de interés en el libro de Baruc es la carta de Jeremías (Baruc 5, 9b- 6, 1-72). Aquí da una panorámica a cerca de la finalidad de Yahvéh que le ha expresado a Jeremías en cuanto su acción. En otras palabras Jeremías, quien se dirige a aquellos que van a ser deportados a Babilonia, busca mover los corazones de Israel a que se arrepientan, vuelvan el corazón a Dios y halla una profunda conversión dejando a un lado la idolatría y demás pecados y poder así recibir el perdón de Yahvéh.

Por último, lo que concierne al libro propiamente se puede encontrar una triple lectura en la narración.

1. La lectura del libro ante la asamblea, el ayuno, la colecta y la súplica a Dios, realizada en el año 605 (Cfr. Baruc 1, 3-6)

2. El interrogatorio de Baruc ante los altos funcionarios de la corte3. Toma realce el volumen o libro, al cual el rey lo rompe y lo arroja al fuego;

pero a pesar de esto, surge uno nuevo, pues la Palabra de Yahvéh no puede ser aniquilada.

“Ella es el libro de los mandamiento de Dios, la Ley que perdura por los siglos: todos los que la guarden vivirán pero los que la abandonen morirán” Baruc 4,1

CRISTIAN CAMILO CÁRDENAS AGUIRRESeminario Misionero del Espíritu Santo

Febrero 25 2012