Libros de CLM Nº141
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LIBROS Y NOMBRES DE
CASTILLA-LA MANCHA
CENTESIMO
CUADRAGÉSIMOPRIMERA
ENTREGA
141 Año IV/ 22 de noviembre de 2013
Nicolás del Hierro hace pública su
“Premonición de la esperanza”
La voz ama lo rojo. Tiene por ello la
misma querencia que los metales. Ama
lo rojo porque la voz busca forja,
porque busca la forma, la mano
hacedora que la perfile y la someta. En
esa tensión nació la poesía. La poesía es
lenguaje forjado. El trabajo del poeta es
muy similar al del herrero en su fragua.
Necesita la palabra estar lívida,
encendida cuando los golpes del poeta
la acometen hasta reducirla a la violenta
belleza de los versos. Para este menester
eligió la poesía a Nicolás del Hierro.
Nicolás, voz antigua de la tierra, que
diría León Felipe, fue elegido desde su
adolescencia por la poesía para no ser
nunca superviviente, sino joven con
ella. Nunca ha dejado de la mano la
poesía a Nicolás del Hierro, poeta que el
próximo 14 de noviembre presenta en la
Biblioteca de Ciudad Real su segunda
aventura editorial mexicana. Si hace
unos años le editaron en el país
hermano una antología comparada de su
poesía con la de José Hierro, en este
2013 ha sido la Casa Maya de la Poesía,
sita en Campeche, quien ha editado
“Premonición de la esperanza”. Es éste
un libro que reúne, en casi 150 páginas,
tres poemarios inéditos de distinta
pulsación, aunque hermanados los tres
por el denominador común de una mano
que no sabe de distracciones.
La mirada poética y humana de Nicolás
(Piedrabuena, 1934) nació y ha crecido
a la altura de los hombres, del dolor de
los hombres, y de su dignidad. Sabe que
la búsqueda del hombre en mitad de los
campos y los mares es una de las tareas
del poeta. Labor a la que acompañan
una veces la fe y otras la desolación.
Jardines y desiertos son paisajes
legítimos e imperecederos, que le
contemplan y se retan. Son mundos que
se encuentran a nuestro alrededor, en
lucha y configurándonos, por eso el
poeta duda en ocasiones del valor de su
oficio, de que la dura forja del metal, de
la voz, sea el útil preciso para cuestionar
las realidades de la naturaleza humana.
De eso trata en gran parte su penúltima
entrega, “El color de la tinta”, que
recoge, a más de una amplísima
selección de su obra completa, dos
libros inéditos. Con Nicolás del Hierro,
por razón de amistad y paisanaje, he
tenido la fortuna de compartir poemas y
días, afanes y sierras, tiempos de
conversación junto al Bullaque. Es
poeta de toque horaciano, componente
de aquella generación que él definiera
como nacida a flor de bala. Es poeta de
la Naturaleza, poeta que aún continúa
en la alegría de narrar cómo habita la
luz entre los hombres, qué misterios les
oculta o les revela, de qué manera
intentan repartirse esa luz, cómo las
sombra, qué memoria queda de su paso,
qué parte del camino recorremos
iluminados y qué parte a ciegas. A ese
torbellino atiende nuestro autor. Pedro
A. González Moreno ha dicho de él que
“es un poeta que ha permanecido
siempre al margen de esos ficticios,
confusos y a veces interesados mapas
que son los cuadros generacionales. La
suya es la obra de un poeta forjado a sí
mismo, que ha ido creciendo a lo largo
de cincuenta años bajo sus propios
impulsos creativos, y cuya voz,
cimentada sobre el yo autobiográfico,
ha estado siempre marcada por un fuerte
acento confesional e intimista”.
Los tres poemarios que componen
“Premonición de esperanza” surgen de
provocaciones distintas. Al amor, eje en
el primero de ellos, sucede la
preocupación existencial del segundo.
Ambos temas son esenciales en su obra,
basta recordar “Lejana presencia” o
“Este caer de rotos pájaros”. En la
tercera entrega que compone el libro,
titulada “Silencios abstractos”, la
circunstancia que lo genera es de una
gran intensidad: es una experiencia
vivida, es la lucha durante casi 30 días
con la muerte en la habitación de un
hospital. Lucha de la que el hombre y el
poeta han de salir indemnes y
triunfadores. Queda decir que el poeta
ha decidido, de cara a la presentación
del día jueves 14 de noviembre, destinar
a la asociación Afanión-Niños con
Cáncer la recaudación que la venta del
libro pudiera proporcionar.
Francisco Caro LANZA 9/11/2013
José Corredor Matheos
Sin ruido
Ed. Tusquets; Barcelona, 2013; 136
pags.; 13 €
DEL SILENCIO AL
INSTANTE, A LA NADA Y UN
TODO QUE ES MÚSICA
José Corredor-Matheos (Alcázar de san
Juan, 1929) es hoy uno de los más
destacados y originales poetas
españoles. Premio Nacional de Poesía
en 2005 por su libro El don de la
ignorancia, algunos de sus trabajos de
crítica de arte y de traducción son ya
canónicos. Sus últimos poemas,
reunidos bajo el título Sin ruido, acaban
de ser publicados por la radiante
colección “Nuevos textos sagrados” de
la barcelonesa editorial Tusquets. Esta
recientísima entrega comienza (“Estos
versos que brotan del silencio recogen
sensaciones del instante”) y termina
(“¿Pero no será éste el último destino de
todas tus palabras: hallar en el silencio
su total cumplimiento?”) tratando de
relacionar una poesía esencial con el
silencio, fundándola precisamente en el
silencio. Aunque Corredor, no mucho
tiempo después de compilar su poesía
completa en el grueso volumen
Desolación y vuelo, también editado por
Tusquets, no deja de “darle” a ese
silencio que defiende. Su poesía, más
bien, hunde sus cimientos en la concisa
proposición wittgensteiniana, por un
lado, y, por otro, en los más selectos
recursos orientados a la paradoja
poética y al contrastado factor sorpresa
frente a la realidad consuetudinaria;
factor que es audaz elemento capaz de
alzar sobremanera la estatura verbal del
poema, iluminándolo por completo.
Sin ruido se distribuye en siete
secciones que presentan, al agotarse
cada una, sendas composiciones en
prosa poética, aunque desenvueltas en la
escansión de unos ritmos establecidos
por la tradición métrica; composiciones
concebidas como remansos tras la
aguda dicción de los afilados versos. Se
reparte el conjunto en ostensibles
manchas temáticas: nubes, campos, el
mar, la muerte, la metapoesía, que
hacen que este nuevo libro se asemeje a
una exposición de gráciles dibujos en
una especie de extensión cromática tan
familiarizada con los géneros plásticos
tan bien comprendidos por Corredor-
Matheos.
Esos “versos que brotan del silencio”,
quizá, y que firmemente “recogen
sensaciones del instante”, constituyen
esas dos claves fundamentales y
altamente interpretativas de su poesía y
que al tiempo revelan la postura del
autor enfrentado a la figura de su propio
pensamiento. Es la poesía de Corredor-
Matheos una poesía que se crece y se
niega (“Sentirse desolado puede ser un
consuelo que debes rechazar”),
produciendo dinámica antítesis. La
exhibición de los metros breves de esta
su última poesía (y, desde hace tanto
tiempo, mucha de su poesía anterior)
denota ejemplarmente una bien
dispensada posesión de certezas, una luz
sabia administrando la dicción,
inoculada en el poema en muy precisas
dosis. La ceniza y el vuelo se conjugan
de maravilla en la amplia proyección
del espacio del poema, desproveyéndolo
de límites (“tú, sabiéndote ceniza, pero
ardiendo”). Muchas veces, Corredor
plasma sus poemas como un acto de
amor, aceptando el atesorar las
renuncias a través de un texto
soberanamente encajado (“La manera
que tienes de irte despidiendo de las
cosas, una a una, es también la de irlas
recibiendo”).
Esta posición muestra plenamente una
actitud sinuosa, fluctuante, que siempre
significa aptitud receptiva. Y en esto
consiste el gran lema de la poesía de
José Corredor-Matheos: llenarse con la
nada y vaciarse asumiendo el todo que
esa nada conforma (“El mundo ahora
está entrando en ti, llenándote,
vaciándote”). Si en estos poemas
corroboramos la descripción de plácidas
visiones, también sacuden nuestra
emoción como lectores ciertos
elementos que subvierten, de una
manera radical, esa realidad
contemplada. Sólido contrapunto que
siempre, en suma, debe ser notado para
salvar la lineal percepción, engañosa,
donde las cosas simulan su auténtica
presencia.
Amador Palacios
El poeta manchego Pedro A.
González Moreno gana el premio
nacional de poesía „José Hierro‟
El poeta manchego Pedro Antonio
González Moreno ha ganado el premio
nacional de poesía José Hierro 2013,
uno de los más prestigiosos que se
otorgan a nivel nacional, con el
poemario 'El ruido de la savia'.
El poemario presentado por Pedro A.
González (1960, Calzada de Calatrava,
Ciudad Real) ha logrado persuadir al
jurado del premio que ha elegido a 'El
ruido de la savia' como la mejor obra de
las 157 que se optaban al premio que
cada año convoca la Universidad
Popular José Hierro de San Sebastián de
los Reyes (Madrid).
El jurado del premio ha estado
compuesto por Pablo García Baena
(Premio Príncipe de Asturias, Premio
Reina Sofía de Poesía Iberoamericana),
Joaquín Benito de Lucas (Premio
Adonáis 1967, Premio Tiflos), Pureza
Canelo (Premio Adonáis 1970), Ángel
García López (Premio Adonáis 1969,
Premio Nacional de Literatura 1973) y
Antonio Hernández (Premio Jaime Gil
de Biedma 1993, Premio Nacional de la
Crítica en 1994).
Joaquín Benito de Lucas, portavoz del
jurado ha comentado que el poemario
de Pedro A. González destaca ante todo,
además de por estar muy bien escrito,
por la riqueza extraordinaria de lengua
que contiene.
Para Benito de Lucas, 'El ruido de la
savia' contiene elementos poéticos que
permiten asegurar que se trata de uno de
los grandes libros de poesía que han
aparecido por el premio José Hierro
desde que se viene celebrándose.
El poeta y escritor calzadeño, en
declaraciones a Lanza, ha comentado
que se trata de una obra, en cierto
sentido, distinta a la de sus libros
anteriores, al menos, por lo que respecta
a los temas que trata.
"Mis últimos libros giraban en torno al
tema de la muerte, mientras que en 'El
ruido de la savia' aparecen otras
preocupaciones que no son nuevas para
mí pero que sí encuentran ahora un
mayor desarrollo".
Por ejemplo, ha explicado, "el tema de
mi tierra y el de mis propias raíces
personales, que viene a actuar como una
especie de elemento de ambientación
escénica".
También aparece el motivo de la
memoria que, ha dicho, "aquí está
representado por ciertos lugares y
personas de mi pasado. En realidad se
trata de una evocación de escenas y
figuras fantasmales relacionadas con mi
infancia o con mi adolescencia, por lo
que podría decirse que el libro presenta
en algunos momentos cierto carácter
autobiográfico".
Pero ese motivo, ha advertido, "está
entrelazado también con el tema
amoroso, y todos esos temas, a su vez,
están integrados dentro del tema
metapoético, que es el que sirve para
darle unidad general al libro", ha
advertido el poeta.
Ha comentado que, dicho con otras
palabras, el ruido de la savia al que
alude el título, es el ruido de la higuera
de su patio manchego, pero es también
"el ruido de sus recuerdos y asimismo
es el ruido del propio poema".
Este libro, ha reconocido, para él
supone un cambio "gradual", aunque
"no radical" en sus planteamientos
poéticos, y quizás, ha dicho, "el avance
hacia una mayor desnudez expresiva".
Para Pedro Antonio González Moreno,
el ganar el premio José Hierro ha
supuesto una "satisfacción muy
especial", en primer lugar, porque
además de admirar al pota que da
nombre, tuvo la suerte de conocerlo, y
en segundo lugar, porque "se trata de un
premio en cuya nómina de ganadores
aparecen no sólo muy buenos poetas
sino también muy buenos amigos".
Licenciado en Literatura Hispánica y
profesor de Lengua y Literatura,
González Moreno dirigió de 1987 a
1999 el Aula Literaria "Gerardo Diego"
de Pozuelo de Alarcón. Parte de su
poesía aparece recogida en la antología
"La erosión y sus formas" (1986-2006).
Entre otras obras destacan los
poemarios "Señales de ceniza" (Premio
"Joaquín Benito de Lucas"),
"Pentagrama para escribir silencios",
(accésit del Premio Adonáis), "El
desván sumergido" (Premio "Villa de
Madrid-Francisco de Quevedo),
"Calendario de sombras" (Premio
Tiflos) o "Anaqueles sin dueño"
(Premio Alfons el Magnánim-2010).
Además, como ensayista es autor de
"Aproximación a la poesía manchega"
y en el ámbito de la narrativa ha
publicado "Los puentes rotos" (IX
Premio "Río Manzanares de novela") y
el libro de viajes "Más allá de la
llanura".
ANÍBAL de la Beldad C./Lanza /
CIUDAD REAL 9-11-2013
Tomás Néstor Martínez
LA POESÍA DE DIEGO JESÚS
JIMÉNEZ ANALIZADA POR
TOMÁS NÉSTOR
EN“LOS MARTES EN LA
ACADEMIA” de Cuenca
La voz del sin duda más grande poeta
conquense de los últimos tiempos,
Diego Jesús Jiménez, volvió sonar en
Cuenca con la presentación por parte de
Tomás Néstor Martínez de su tesis
doctoral sobre la obra del escritor
pricense, un trabajo que le valiera
además a su autor el prestigioso Premio
de Investigación Literaria “Gerardo
Diego” en su undécima edición y que ha
sido publicado por la editorial Pre-
Textos. El acto, en el salón de la Real
Academia Conquense de Artes y Letras
en su sede de la segunda planta del
edificio del número 2 de la calle de San
Lázaro, junto a la iglesia de la Virgen
de la Luz, forma parte del programa
“Los martes, en la Academia” que la
corporación conquense viene
desarrollando semanalmente en nuestra
capital. En su tesis, y bajo el título de El
sometimiento de la palabra poética. La
poesía de Diego Jesús Jiménez entre
“Fiesta en la oscuridad” e “Itinerario
para náufragos” Tomás Néstor
Martínez –profesor de instituto de
Lengua y Literatura, escritor y
empedernido animador cultural- analiza
paso a paso la trayectoria poética del
por dos veces Premio Nacional de
Poesía, Premio Adonais y Premio de la
Crítica, entre otros galardones,
destacando la importancia de su obra en
el panorama creativo y poético del siglo
XX, una obra “viva, abierta, fértil e
intensa, desasosegante y a la vez
reconfortante, capaz de reconciliar al
hombre con el pasado propio o ajeno,
sin perder de vista el presente de un
futuro”, repasando un hacer poético que
considera que está lleno “de vivencia,
no ficticia, personal y colectiva” en la
que no estaríamos “ante la poetización
abstracta de vivencias diseñadas sino
ante una escritura enraizada en lo más
hondo del ser humano, en la
sensibilidad que transmite lo vivido por
el hombre, tanto ahora como en el
presente del pasado” y en el que “lo
vivido y sentido servirán de alimento a
la razón” de forma que “el pensamiento
no será algo frío alejado del entorno del
sentimiento”; una poesía en la que “la
individualidad del yo poético, la
identidad personal son una excusa para
buscar al otro en un diálogo
permanente, para identificarse con los
demás, para ser voz de quien, ahora o
entonces, difícilmente habrá sido oído”
y en la que “desde la reflexión crítica la
palabra no buscará la comodidad sino la
rebeldía, no acatará imposición ética ni
estética sino el mantenimiento de una
conciencia crítica permanente”.
Blog de la RACAL
FOTO : AN A P ÉREZ HERRERA
Carmen Arnau desvela en Toledo los secretos del chamanismo en Siberia La antropóloga presentó sus libros
«Chamanismo entre los chorches de
Siberia» y «Confidencias de un
chamán siberiano»
La antropóloga toledana nacida en Polán Carmen Arnau Muro, ha impartido este viernes en la Librería Hojablanca una charla titulada «Chamanismo entre los chorches de Siberia», acto que aprovechó para presentar sus libros «Chamanismo entre los chorches de Siberia» y «Confidencias de un chamán siberiano». La charla sirvió para que los toledanos y todos los interesados conocieran los secretos del chamanismo en la región rusa de Siberia, en cuyos pueblos está especializada esta antropólgoga e historiadora polaneca. Arnau explicó que durante sus años de investigación ha trabajado con 40 chamanes de diferentes zonas de Siberia, de los cuales 22 eran mujeres, circunstancia que, en su opinión, se explica porque la labor sanadora y el cuidado de los familiares enfermos recae en la figura femenina. No obstante, destacó que «es muy difícil llegar a contactar con los chamanes porque son muy herméticos» debido a la persecución que han sufrido en las últimas décadas por parte de los diferentes gobiernos y de la Iglesia Ortodoxa rusa.
Aunque hay mucha variedad, Arnau señaló que la gran mayoría de los chamanes en Siberia son animistas y adoran a los elementos naturales, para lo cual realizan rituales festivos en lugares con mucha carga de energía y siempre con la presencia del fuego, entre otros símbolos. Otros elementos que caracterizan a los chamanes siberianos, indicó la antropóloga polaneca, son el tambor o pandero como instrumento musical, los trajes y los cánticos y letanías que entonan durante sus rituales, con los que dan gracias y realizan ofrendas. Carmen Arnau Muro nació en Polán en 1949, pero su segunda casa es Siberia, cuyos pueblos indígenas conoce gracias a su trabajo como antropóloga. En Toledo ha creado el Etnomuseo de los Pueblos Indígenas de Siberia en Las Ventas con Peña Aguilera y el Museo Etnográfico de su localidad natal, dos infraestructuras en las que ha invertido mucho dinero y tiempo.
El etnomuseo situado en Las Ventas con Peña Aguilera se encuentra en una finca de 4 hectáreas propiedad de Carmen Arnau Muro y está abierto los sábados de 11.00 a 18.00 horas y los domingos de 11.00 a 14.00 horas. En este espacio se recrean cuatro entornos básicamente ecológicos: la tundra, la taiga, la estepa y la zona alpina, cada uno con sus construcciones propias representadas en el museo. Por otro lado, está el Museo Etnográfico de Polán de 120 metros cuadrados, que es más convencional y dispone de vitrinas con instrumentos musicales, trajes, objetos, mapas, fotos y materiales audiovisuales. Además, hay una exposición de artesanía con corteza de abedul y una amplia bibliografía sobre los distintos trabajos realizados sobre los pueblos indígenas de Siberia. El horario de este museo es solamente los viernes de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.00 horas.
MARIANO CEBRIÁN@ABC_TOLEDO /
9/11/2013
Revista Lago y Montaña. Publicación Informativa de las
Asociaciones Cultural Lago de
Bolarque [y] Liga Naval de Castilla-La
Mancha, n.º 32 (Almonacid de Zorita,
Julio de 2013), 130 pp.
La Revista Lago y Montaña, también
conocida por las siglas A.C.L.B., venía
siendo el órgano informativo de la
Asociación Cultural Lago de Bolarque -
de ahí las siglas anteriores- hasta que,
con la edición de este número 32, se ha
convertido en la publicación
informativa de la Asociación Lago de
Bolarque y de la Liga Naval de Castilla-
La Mancha, gracias a que la mayor
parte de los socios de la primera lo son
también de la segunda, y con el fin de
aunar esfuerzos: “en cualquier caso,
parece conveniente que nuestro amplio
colectivo de socios y amigos, dispongan
de estas informaciones en una única
publicación. Así pues, os dedicamos
estas 130 páginas de información plural,
con la misma ilusión, trabajo y esfuerzo
editorial con el que venimos trabajando
desde nuestro primer ejemplar”.
Palabras que se cumplen al pie de la
letra en las páginas que la componen y
que hacen de ella una de las revistas
editadas por asociaciones de este tipo -
culturales- más amplias en lo que a
paginación se refiere.
Se abre, como es norma en ella, con un
editorial del que suele ser autor su
editor José Carlos Tamayo Gálvez, que
también se encarga del diseño,
maquetación y composición, y su
temática muy amplia y variada; desde
notas de interés comarcal como las
aportadas por el “Comité de
Información de la central nuclear José
Cabrera” acerca de la XIV reunión del
Comité de Información del 4 de abril de
2013, sobre las actividades de la
instalación desde la anterior reunión del
Comité, seguimiento y control del CSN
en el desmantelamiento de la central,
actuaciones de protección civil en el
entorno de la central, pruebas de
resistencia aplicadas y organización de
un simulacro en Almaraz, hasta la
celebración de distintas fiestas en la
zona, especialmente en Almonacid de
Zorita, municipio donde radican las dos
asociaciones editoras de la revista, así la
del Corpus con su alfombrado de calles,
pasando por otros muchos aspectos
relativos a otros municipios: por
ejemplo, sobre la biblioteca de
Fuentenovilla, noticias sobre la ciudad
visigótica de Recópolis (Zorita de los
Canes), Pareja y Albalate de Zorita y
otros datos como las referencias a
Almonacid conservadas en el Archivo
de Castilla-La Mancha, a través de
algunos documentos medievales que
fueron exhibidos y complementados con
imágenes procedentes del Archivo de la
Imagen de Castilla-La Mancha, de entre
los que selecciona una Carta de censo
por la que el Maestre de la Orden de
Calatrava otorga al Concejo de
Almonacid de Zorira la Casería de
Cabanillas y la Confirmación por el
Maestre Rodrigo Téllez Girón de la
merced concedida a Almonacid para
aprovechar el término común de Zorita,
todo ello dentro de los actos de
celebración del Día Internacional de los
Archivos en Castilla-La Mancha.
Aparte, se dedican otros espacios de la
revista a la fiesta nacional, bajo el
asesoramiento de Pedro Antonio
Cañadillas Fuentes, al humor y
pasatiempos y al ya tradicional Rallye
La Alcarria, que llega a su décima
segunda edición, sin que falten otros
aspectos siempre llamativos y curiosos
como los que en esta ocasión se
destinan al Refranero español, por
meses, o al conocimiento de dichos
populares como “A río revuelto
ganancia de pescadores”, “Arrimar el
ascua a su sardina”, “Atar los perros con
longaniza” o el origen del brindis,
además de algunos consejos para
defenderse de los rigores del verano y
las consabidas recetas gastronómicas.
Todo ello hasta la página 70, ya que
desde la siguiente el espacio se destina a
las noticias correspondientes a la Liga
Naval de Castilla-La Mancha, donde se
dan a conocer sus fundamentos e
intereses estatutarios; diversos
acontecimientos sociales celebrados en
los “Mares de Castilla” (condecoración
de damas y caballeros del mérito
náutico, incluyendo una amplia galería
fotográfica); las celebraciones de las
XII Jornadas Navales en la Costa de
Altomira y de la XII Procesión
Marinera del Lago de Bolarque,
declarada Fiesta de Interés Turístico
Provincial; “El mar y la formación
humana”; unos breves datos acerca del
Capitán de Navío “Ilustrísimo Señor
Don Blas de Salcedo”, nacido en
Fuentenovilla (Guadalajara) y fallecido
siendo Comandante de la fragata “Santa
María Magdalena” junto a otros barcos
de la Armada española y de la escuadra
inglesa, en la madrugada del 2 de
noviembre de 1810; Cartografía
Medieval (de los fondos documentales
de la propia Asociación Cultural Lago
de Bolarque-Liga Naval de Castilla-La
Mancha, que se han visto enriquecidos
recientemente con ocho mapas
pertenecientes al siglo de los Grandes
Descubrimientos, gracias a la
amabilidad del Seminario de
Descubrimientos y Cartografía: Mapa
de Toscanelli, de 1474; Carta náutica
de Colón, de 1494; Mapamundi de
Claudio Ptolomeo, del siglo XV; Mapa
de Piri Reis, ¿1513?; Mapa medieval,
de hacia 1540; el Portulano de
Tordesillas; una Carta náutica de 1503
con descubrimientos españoles, y el
Portulano de Medina del Campo, de
1494); la sección “Nuestros Socios nos
distinguen…”; unas “Noticias de la
Carta de Juan de la Cosa”, y otros
aspectos referentes al mar en la poesía,
en la pintura y en la música…
Aspectos todos que contribuyen a que
los habitantes de estas tierras “de
interior” se interesen por las cosas del
mar, que aunque no sea de agua salada,
no deja de ser una especie de milagro:
La unión de la tierra y el agua, que tanta
fertilidad dan a la cosecha intelectual.
José Ramón López de los Mozos
Pasión por Olías del Rey
Juan Sánchez Sánchez
Nada sugiere indagar aquí por
Maximiano Estanislao de Lucas. Sin
embargo, después de leer “Pasión por
Olías del Rey”, obra realizada por Juan
Sánchez Sánchez, las vivencias y
vitalidad del personaje no dejarán
indiferente a nadie.
El mencionado protagonista, „Estanis‟,
ocupa una investigación monográfica de
254 páginas que reconstruye la azarosa
vida como alcalde de este anónimo
protagonista que durante tres décadas
del siglo XX se entregó en cuerpo y
alma a servir a su pueblo, Olías del Rey,
a través de proyectos e iniciativas
surgidas desde la Corporación
Municipal.
El libro, como así se dice, rompe
tópicos. Hartos estamos de ver a
numerosos alcaldes y servidores
públicos contemporáneos inmersos en
desagravios sociales y fraudes
económicos parapetados entre
diligencias judiciales, cautivos de sus
desmanes y fechorías.
Aquí se nos narra que sin alharacas
Maximiano Estanislao, Estanis, desde
Olías del Rey rompió barreras
ideológicas y sociales poniéndose al
lado de su pueblo durante años y tirando
para adelante del carro municipal en
busca de dignificar la vida de su
población. Porque así, desde finales de
la II República, donde ya aparece como
concejal, lucha por una reconstrucción
de Olías para beneficio de todos
mientras trabaja contra todas las
dificultades de aquella cruel postguerra.
El libro no es una loa personalista ni
tampoco una reflexión con moraleja,
sino las crónicas de un pueblo a través
de un alcalde que escudriña
dificultosamente y encuentra cómo
beneficiar a su pueblo, mientras mira el
construir la escuela local, el
Ayuntamiento o la rehabilitación de la
iglesia parroquial y la Casa-cuartel de la
Guardia Civil.
A través de documentos y archivos, el
autor de la publicación rebusca en
hemerotecas, en la memoria de los
mayores de la localidad y en el
imaginario documental mostrando cómo
la iniciativa de Maximiano burla las
exiguas arcas provinciales y nacionales
invirtiendo su tiempo, su patrimonio y
su vida privada, que queda marcada por
treinta años de vida municipal contando
con el respeto de sus convecinos.
Con positiva actitud vital interviene,
auxilia, festeja o reivindica. Y con tesón
firme, y por derecho, es el primero en
arrimar el hombro dispuesto a servir a
su pueblo y no a servirse de éste ni
siquiera para una vana complacencia:
Estanis no se plantea quién pone el
cascabel al gato de las goteras de su
pueblo sino que toma decisiones que
eviten la precariedad humana buscando
la garantía del trabajo, encontrando
modos de amortización que faciliten la
convivencia y la conveniencia para
sacar a Olías de aquella tantísima
pobreza. Y así, abordando proyectos de
inversión antepuso siempre lo social, la
educación, también las fiestas claro que
sí, luchando de frente ante aquel
devorador tiempo, obra que hoy hemos
de leer no como anécdota curiosa sino
como reflexión ante este presente
histórico nuestro.
Sábado, 16 noviembre de 2013. La
Tribuna de Toledo JOAN GONPER
Mar Carrión:
Después de la lluvia
Eds. Versátil; 304 pags. 15,90 €
La novelista albacetense asegura
que «quería dar a entender que
después de la lluvia, de esos días de
poca luz, tristeza y melancolía,
termina por salir el sol»
La escritora albacetense Mar Carrión,
ganadora en 2012 dos premios DAMA,
a la mejor novela y autora nacional por
Trampas de Seda, publica ahora una
nueva obra, Después de la lluvia, en
Versátil Romántica, que presentó en el
Ámbito Cultural de El Corte Inglés de
Albacete, en la quinta planta del centro.
La autora comentó a La Tribuna de
Albacete aspectos de interés sobre su
novela.
¿Por qué el título, Después de la
lluvia?
Porque quería reflejar en la novela una
historia muy cotidiana, de personajes
que sufren y tienen sus problemas,
como los tenemos todos. Los
protagonistas están atravesando una
mala racha y quería hacer una especie
de metáfora, porque cuando
atravesamos una mala temporada, con
las cosas que nos van mal, es como si
todo lo viésemos gris, lluvioso, frío.
Quería dar a entender que después de la
lluvia, de esos días de poca luz, tristeza,
nostalgia y melancolía, siempre termina
por salir el sol. Ese es el mensaje de la
novela.
Mar Carrión nació en Albacete en
1974, ciudad en la que reside. Desde
muy pequeña fantaseaba con la idea de
ser escritora y con solo 13 años
comenzó a escribir sus primeras
novelas. En 2008 publicó la primera de
varias, Bajo el cielo de Montana, con la
que ganó el III certamen de novela
romántica de la editorial Terciopelo.
Ese mismo año ganó el I certamen de
novela corta de la editorial Harlequín
En 2012 se hizo dos premios Dama: a la
mejor novela nacional y a la mejor
autora nacional.
A. Díaz / La Tribuna de Albacete 15 de
noviembre de 2013