LOS ACTOS JURÍDICOS
-
Upload
erika-cruz -
Category
Documents
-
view
158 -
download
8
Transcript of LOS ACTOS JURÍDICOS
LOS ACTOS JURÍDICOS
Los actos jurídicos tienen condiciones de existencia y de validez, señaladas en la ley; si
faltan las primeras, el acto no nace a la vida jurídica, si faltan las segundas, el acto nace
pero con vicios. Las condiciones de existencia de los actos jurídicos son: Voluntad, objeto,
causa y solemnidades, y las de validez son: Voluntad sin vicios, capacidad de las partes,
objeto lícito y causa lícita.
Para la completa eficacia jurídica de la voluntad se requiere que sea consciente y no
viciada; cuando hay ausencia total de voluntad, el acto jurídico no existe; pero cuando
existe voluntad viciada, el acto es anulable.
NULIDAD ABSOLUTA Y NULIDAD RELATIVA DEL ACTO JURÍDICO:
La nulidad puede ser absoluta, si la omisión es de un requisito que se exige en
consideración al acto en sí mismo, es decir, a su naturaleza o especie y no a la calidad o
estado de personas que lo ejecutan o acuerdan. Es nulidad relativa, si la omisión es de un
requisito exigido en atención a la calidad o estado de esas personas. La nulidad absoluta
se ha establecido en interés de la moral y de la ley, en cambio, la nulidad relativa se ha
establecido en interés de ciertas personas; por eso en sus efectos también son diferentes:
la nulidad absoluta surte efectos erga omnes y debe ser declarada, aún de oficio; en
cambio la nulidad relativa sólo existe respecto de determinadas personas, su alcance es
limitado.
Como consecuencia de lo anterior, la nulidad absoluta puede ser alegada por todo el que
tenga interés en ella, excepto el que ha celebrado el acto o contrato, y la nulidad relativa
puede ser alegada por aquellos en cuyo beneficio la han establecido las leyes.
La nulidad siempre proviene de algún vicio que se incorpora al acto desde su nacimiento a
la vida jurídica, porque es principio fundamental que la nulidad se produce en la
generación del acto o contrato, y ello porque la nulidad es la sanción a la omisión de los
requisitos de existencia y de validez de un acto, requisitos que deben concurrir en la
celebración del contrato, y no con posterioridad a ella, porque o bien el acto nace
perfecto, con todos los requisitos que la ley exige, o bien nace imperfecto, debido a la
falta de uno o más de ellos.
"La celebración de un acto jurídico es algo unitario e indivisible, que no puede
fraccionarse, por eso en dicha celebración deben concurrir, a un tiempo, las diversas
condiciones que la ley exige para que dicho acto o contrato tenga plena eficacia jurídica".
"En consecuencia, es imposible imaginar un acto o contrato, que en un principio fue
válido, debido a la concurrencia de todos los requisitos que la ley prescribe, sea nulo por
causas posteriores a su celebración, porque tal acto mantiene su validez indefinidamente,
y difícil es concebir que uno de los requisitos legales que no faltó en el momento de su
generación, falte después por cualquier causa, y produzca la nulidad superveniente de él.
De lo dicho, resulta que en materia de nulidades, es principio fundamental que el vicio
que acarrea la nulidad de un acto o contrato debe producirse en su ejecución o
celebración, y no con posterioridad, porque un acto que nació válido, no deja de serlo por
causas posteriores a su generación, estas causas supervenientes no pueden afectar a la
ejecución del negocio jurídico, ni pueden alterar el hecho que el acto fue celebrado con la
concurrencia de todos los requisitos que la ley exige." (Alessandri Besa, Arturo- La Nulidad
y la Rescisión en el Derecho Civil Chileno-Tomo I-Segunda Edición- Págs. 101 y 102).
(Sentencia de la SALA DE LO CIVIL, Ref. 93-C-2006 de las 11:00 horas del día 14/3/2007).
SENTENCIAS 1992
EN EL AÑO 1992 NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN
RELACIÓN A NINGUNO DE LOS CRITERIOS CON RESPECTO A LA
SALA DE LO CIVIL.
SENTENCIAS SALA DE LO CONSTITUCIONAL 1992
NULIDAD
REF: 43-A-91
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las
diez horas y diez minutos del día siete de septiembre de mil novecientos noventa y dos.
PRETENSIÓN: Nulidad del instrumento
CAUSA PRETENDI
La sala declara Sentencia definitiva, recaída en Juicio Civil Ordinario de Nulidad de Título
Municipal a favor del mencionado señor y Tránsito Amaya Pérez o Tránsito Amaya, del
inmueble objeto del juicio de inquilinato; adjuntándole fotocopia certificada de la
demanda de fs. Uno y documentos antes mencionados.-" Y termina su informe reiterando
que la señora Juana Amaya probó los extremos de su demanda y en base a ello se falló
accediendo a lo solicitado por la demandante.
ANALISIS DE ARTÍCULO
El artículo 11 de la Constitución consagra la principal garantía de seguridad jurídica que es
la conocida en nuestro medio como garantía de audiencia, cuyo objeto es proteger al
gobernado contra la privación arbitraria de cualquier clase de derechos subjetivos de los
que sea titular; estableciendo para tal efecto los procedimientos necesarios en los que se
concede al gobernado la oportunidad de ser escuchado en su defensa por las autoridades
encargadas de la aplicación de las mismas. La sala analiza si realmente ha existido
privación al derecho de propiedad alegado por el impetrante. Es reiterada jurisprudencia
de esta Sala, que para que proceda acceder a amparar al impetrante es requisito
indispensable probar por parte del agraviado o quejoso ser titular del derecho subjetivo
violado por el supuesto acto inconstitucional, además que se han cometido los actos de
autoridad que reclama y que las acciones u omisiones en qué consisten dichos actos violan
determinados derechos constitucionales. En el presente caso, el demandante en ningún
momento ha probado ser titular del derecho de propiedad que afirma le ha sido violado
por la Juez Segundo de Primera Instancia de Cojutepeque, ya que por una parte la prueba
documental que presentó (fs. 3,4,5,63-66), no comprueban su calidad de propietario, pues
el título Municipal en que basa su derecho fue declarado nulo en sentencia definitiva del
juicio correspondiente, la cual aparece inscrita en el Registro de la Propiedad Raíz e
Hipoteca; y, por otro lado, los testigos que presentó, solamente declaran sobre posesión y
no sobre propiedad, que es el derecho alegado por el impetrante.
SENTENCIAS 1993
EN EL AÑO 1993 NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN
RELACIÓN A NINGUNO DE LOS CRITERIOS CON RESPECTO A LA
SALA DE LO CIVIL.
SENTENCIA SALA DE LO CONSTITUCIONAL 1993.
REF: 7-M-92
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las
diez horas y cinco minutos del día quince de marzo de mil novecientos noventa y tres.
PRETENSIÓN:
Nulidad de título de propiedad
CAUSA PRETENDI
Se declara nulidad absoluta de un Título de Propiedad noventa y ocho promovido
inicialmente por el doctor Edgar Romeo Herrera y seguido por el licenciado Alberto
Menocal Girón como Apoderados de la señora Alba Judith Martínez, contra el licenciado
José Saúl Martínez Barrientos, en concepto de Curador de la Herencia Yacente de la
señora Josefina Martínez
Análisis del artículo y de la prueba
Esta Sala ha sostenido que la garantía de audiencia, principal garantía de seguridad
jurídica, consagrada en el artículo 11 de nuestra Ley Fundamental, protege al gobernado
contra toda privación arbitraria de cualquiera de sus derechos subjetivos, sean estos
reales o personales. Como se puede advertir, y así lo señala el jurisconsulto mexicano
Ignacio Burgoa en su obra "Las Garantías Individuales", la garantía de audiencia está
compuesta de diferentes manifestaciones: (1) A que en contra de la persona, a quien se le
pretende privar de alguno de sus bienes jurídicos tutelados, se siga un juicio; (2) Que
dicho juicio se sustancie ante tribunales previamente establecidos; (3) Que en el mismo se
observen las formalidades esenciales del procedimiento; y (4) Que el fallo se dicte
conforme a las leyes existentes con anterioridad al hecho que hubiere motivado el juicio.
En términos generales, puede señalarse que existe violación a la garantía de audiencia
cuando el gobernador no ha tenido la oportunidad real de defensa, privándosele de un
derecho sin el correspondiente juicio o cuando en el mismo no se cumplen las
formalidades la oportunidad probatoria. Dichas formalidades encuentran su razón de ser,
en la necesidad que el gobernado pueda defender sus derechos y que el Tribunal que
tenga a su cargo el proceso tenga los suficientes elementos de juicio para resolverlo, por
lo que, en ausencia de los mismos, no podría estimarse que una persona haya sido oída y
vencida en juicio con arreglo a las leyes.
Análisis de prueba
En este orden, y tomando en cuenta los documentos presentados por la demandante,
entre ellas, certificación extendida por el Registrador de la Propiedad Raíz de Sonsonate,
en la que aparece que el inmueble en disputa se encuentra legalmente inscrito a favor de
la señora Blanca Estela Martínez de García, certificación que fue presentada por el
apoderado de la señora Alba Judith Martínez en el juicio civil ordinario de nulidad ya
relacionado, se puede comprobar que el juez, no obstante haber tenido conocimiento de
dicha situación, no le dio a la impetrante la oportunidad procesal de defender su derecho
de propiedad.
De lo anterior se colige que en el juicio civil ordinario de nulidad de título de propiedad,
existe una clara irregularidad procesal que trasciende al ámbito constitucional, por
cuanto, al no oírse en el juicio a la impetrante se le coloca en estado de indefensión, pues
dicho fallo le priva de su derecho de propiedad. Tal situación constituye, evidentemente,
una violación a los derechos mencionados, por lo que procede conceder el amparo
solicitado.
SENTENCIAS 1994
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO DE
LOS CRITERIOS CON RESPECTO A LA SALA DE LO CIVIL.
SENTENCIAS 1995
INEXISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
NULIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTE CRITERIO.
RESOLUCION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA A CERCA DE ESTA CAUSAL.
REVOCACION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA CAUSAL.
RESCILIACION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTTE A ESTA CAUSAL.
TERMINACION
Recurso de casación sobre juicio civil ordinario de terminación de contrato y
desocupación.
Referencia: 1039. Del Valle vrs. Cámara tercera de lo civil de la primera sección del
centro.
Tribunal: Sala de lo Civil, de la Corte Suprema de Justicia.
Fecha: 8 de agosto de mil novecientos noventa y cinco.
Hora: 09:10:00
Pretensión.
La principal pretensión del licenciado del Valle es que case la sentencia recurrida, previo
los tramites de ley por la razones de fondo en las que él ha argumentado dicho recurso de
casación, y que se pronuncie la sentencia que conforme a derecho corresponde.
Causa de pedir.
Los hechos en que se basa dicha sentencia son los siguientes: el 13 de febrero de 1975, el
doctor Rubén Ventura Gomar dio en arrendamiento al señor Roberto Granados, un
inmueble urbano propiedad del Dr. Ventura Gomar y dos porciones de terreno propiedad
de la Sociedad Concretera S.A de C.V dicho contrato se otorgó en escritura pública,
contrato que no fue inscrito en el registro de la propiedad raíz correspondiente.
Posteriormente el Dr. Ventura Gomar el día 30 de septiembre de 1977, vendió a la
Sociedad VENMUY SA de CV, el inmueble de su propiedad y que es el mismo que había
arrendado al señor Granados, debido a lo anterior la Sociedad VENMUY S.A de C.V
demando al señor Granados en el Juzgado Quinto de lo Civil de San Salvador, en juicio de
terminación de contrato y desocupación del inmueble arrendado, únicamente en lo
relacionado al inmueble que le había arrendado el Dr. Ventura Gomar, tomando como
base para demandar el Art. 1738 No 3 C que establece que el arrendamiento expira por la
extinción del derecho del arrendador y el Art. 1750 No2 C, que consigna que están
obligados a respetar el arriendo todo aquel a quien se transfiere el derecho del
arrendador, a título oneroso, si el arrendamiento ha sido contraído por documento
inscrito, dicho contrato de arrendamiento no fue inscrito en el registro de la propiedad
raíz correspondiente, como consecuencia el nuevo propietario es decir, la Sociedad
VENMUY no está obligado a respetar el contrato de arrendamiento. El juez de primera
instancia que conoció de dicho proceso emitió un fallo en el cual dio por terminado el
contrato de arrendamiento entre el Dr. Ventura Gomar y el señor Granados, en lo
relativo exclusivamente al bien inmueble que era propiedad del Doctor Ventura,
quedando vigente el contrato en mención, en lo que respecta al inmueble de propiedad
de la sociedad Concretera, S.A. de C.V. fallo que fue confirmado por la Cámara Tercera de
lo Civil de la Primera Sección del Centro. No conforme con dicha resolución el licenciado
Manuel del Valle Menéndez, en su calidad de apoderado general judicial, del señor
Roberto Granados interpuso el recurso de casación.
El recurso lo fundamento en el Artículo Dos, Literal a) de la Ley de Casación, causa
genérica consistente en Infracción de Ley y alego como motivos específicos los contenidos
en los numerales Primero, Sexto y Octavo, todos del Artículo Tres de la misma Ley: 1) Por
contener el fallo violación de ley; 2) Por ser el fallo contrario a la cosa juzgada sustancial; y
3) Por error de derecho en la apreciación de la prueba. La violación a la ley se da porque
según él se ha violentado el artículo 11 de la constitución que dispone que ninguna
persona puede ser enjuiciada dos veces por la misma causa; porque se dejo de aplicar
según el dicha disposición por la errónea aplicación del artículo 445 del código de
procedimientos civiles que determina cuando una sentencia adquiere calidad de cosa
juzgada, todo esto debido a que anteriormente se había dado un proceso con muchas
similitudes en el cual se había demandado a la misma persona por la terminación de
contrato de arrendamiento y la desocupación del inmueble en todas sus dimensiones.
Esta falsa elección a que se ha referido, generó según el demandante que ese Tribunal no
aplicara lo preceptuado por el Artículo 11 de la Constitución Política, por cuanto su
mandante ha sido enjuiciado dos veces por la misma causa, al haber intentado la Sociedad
VENMUY, SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE la Terminación del Contrato de
Arrendamiento celebrado entre el Doctor Rubén Ventura Gomar como arrendante y el
Señor Roberto Granados como arrendatario, por segunda vez ante el Señor Juez Quinto de
lo Civil, no obstante que ya se había intentado en el primer juicio, iniciado ante el Señor
Juez Primero de lo Civil, la Terminación del mismo Contrato de Arrendamiento, alegando
en ambos procesos la misma "causa pretendi" y habiendo resultado afectado en el primer
proceso y que a observación del licenciado Manuel del Valle Menéndez, la en ambos
procesos que ha promovido VENMUY, SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE en
contra de su mandante es el mismo.
El segundo fundamento en que basa el recurso de casación es que el fallo es contrario a la
cosa juzgada sustancial; aludiendo que el tribunal infringió el mismo artículo 11 de la
constitución de la republica, debido a que dicho tribunal argumento que no había cosa
juzgada y que no era aplicable dicha disposición debido a que el objeto de la pretensión
era otro, argumento en que no está de acuerdo debido a que según él cuando se habla de
objeto se entiende el bien corporal o incorporal que se reclama en juicio y cuando se
habla de objeto en la cosa juzgada, se alude al bien jurídico disputado en el proceso
anterior y el bien jurídico disputado en los dos procesos promovidos por VENMUY,
SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE, es el mismo.
El tercer fundamento a que hace referencia es el error de derecho en la apreciación de la
prueba, se comete este vicio cuando el juez con vista de un documento autentico o
publico sostiene que no hay prueba, este alega que su poderdante través de su
Apoderado General Judicial que le representó en el Tribunal de Primera Instancia, si
acreditó la autoridad y eficacia de la cosa juzgada que alegó como excepción contra la
acción intentada por la parte actora, por lo cual acompaño a la interposición de dicha
excepción la certificación expedida por el juez que conoció del primer proceso y que
contiene la sentencia definitiva pronunciada por él; Esta Certificación a que se ha hecho
referencia, conforme al Artículo 260 Número 4 del Código de Procedimientos Civiles es
considerada como un Documento Auténtico, por cuanto ha sido expedido por Autoridad
Pública en lo que se refiere al ejercicio de sus funciones, confiriéndole el Artículo aquí
citado la robustez de plena prueba y al haber declarado el tribunal el fallo que la parte no
acreditó la prueba referente a la cosa juzgada alegada como excepción, se ha incurrido
según Lic. Del Valle en la infracción del Artículo en comento.
Criterios y lineamientos jurisprudenciales:
La Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia resolvió sobre este asunto del modo en
explico su opinión de los 3 alegatos en los que la parte que presento el recurso
fundamento dicho escrito, dicho criterios jurisprudenciales son los siguientes:
En el primer fundamento del recurso (por contener el fallo violación de ley) en el cual
recurrente afirma que el tribunal infringió el artículo 11 de la constitución de la republica
que establece que ninguna persona puede ser enjuiciada dos veces por la misma causa; de
lo anterior la Sala estima que no existe tal violación alegada, porque el Tribunal de
Segunda Instancia no dejó de aplicar el Art. 11 constitucional por haber falsamente
elegido y aplicado el Art. 445 Pr., como afirma el recurrente, porque ni siquiera mencionó
como argumento ni aplicó como fundamento del fallo ese artículo. El razonamiento de la
Cámara se orienta más a analizar los elementos de la cosa juzgada como tal, que a aplicar
una determinada disposición legal.
En cuanto al segundo alegato que hace el recurrente de que el fallo impugnado es
contrario a la cosa juzgada sustancial la sala de lo civil hace algunas consideraciones;
primero que para que pueda válidamente invocarse como excepción perentoria la cosa
juzgada sustancial, se requiere que entre el primer juicio y el nuevo proceso exista,
identidad total entre sujetos, objeto y causa de pedir; pero si falta esta triple identidad la
excepción no puede prosperar y debe ser rechazada. En este caso el demandado opuso la
excepción de cosa juzgada y la fundamento en la certificación emitida por el juzgado
primero de lo civil de San Salvador que conoció del primer caso de terminación de
contrato de arrendamiento y desocupación del inmueble, juicio en el que en primera
instancia se sentenció declarando terminado el contrato de mérito; en segunda instancia
se revocó tal sentencia y se declaró inepta la acción incoada contra el demandado señor
Granados, y en Casación se declaró sin lugar el recurso que al efecto se interpuso,
quedando con ello firme la sentencia de segunda instancia que declaró inepta la acción,
como antes se ha relacionado. La Cámara Primera de lo Civil con su sentencia
desestimatoria se abstuvo de decidir sobre el objeto directo de la litis, y al no
pronunciarse sobre ello dejó abierta la posibilidad legal para que en un juicio posterior
pudiera plantearse de nuevo el conflicto tal como efectivamente ocurrió, precisamente
porque no había recaído sobre aquel litigio sentencia capaz de adquirir calidad de cosa
juzgada, por lo tanto esta sentencia no pudo haber adquirido calidad de cosa juzgada
sustancial.
En el tercer fundamento del recurso referido al error de derecho en la apreciación de la
prueba, porque según afirma la cámara de segunda instancia no le dio a la certificación
agregada a la pieza principal, el valor de documento auténtico, que por ley tiene debido a
esto no pudo ser probada la excepción de cosa juzgada que interpuso. Sobre esto la sala
hace las siguientes consideraciones: esta explica que se comete error de derecho en la
apreciación de la aprueba, cuando una vez aceptada una prueba como tal yerra al
ponderarla o valorarla en el sentido de su eficacia y su fuerza de convicción, al darle un
valor probatorio que por ley no le corresponde, ya sea porque mal interpreta o aplica mal,
las normas legales que fijan los requisitos de admisibilidad, pertinencia, idoneidad y
eficacia de los medios de prueba; con lo anterior expuesto la sala estima que la cámara de
segunda instancia no cometió dicho error debido a que dicho tribunal no ha negado en
ningún momento la certificación antes mencionada ni le ha quitado el valor que según la
ley le corresponde ni se le ha atribuido un sentido diferente al que le corresponde. Lo que
hace la sala es cuestionar si con el mismo se puede establecer la existencia de los tres
elementos necesarios para el perfeccionamiento de la cosa juzgada sustancial y que por
vía de excepción alegaba el recurrente, concluyendo que con tal documento no era
posible establecer tal extremo, conclusión con la que concuerda en un todo esta Sala.
Fallo de la Sala.
La sala de lo civil de la Corte Suprema de Justicia resolvió de acuerdo a las razones antes
dichas y conforme a los Arts. 427, 428 y 432, Pr. y 23 de la Ley de Casación, declaro no ha
lugar a casar la sentencia recurrida, y condeno al recurrente señor Roberto Granados en
los daños y perjuicios a que hubiere lugar. De igual forma condeno en costas de este
recurso al Licenciado Manuel del Valle Menéndez.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTE CRITERIO.
SENTENCIAS 1996
INEXISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
NULIDAD
Sentencia de casación sobre juicio civil ordinario de nulidad de inscripción registral.
Referencia: 1024 96. Portillo vrs. Zúñiga.
Tribunal: Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia.
Fecha: 22 de agosto de mil novecientos noventa y seis.
Hora: 15:00:00
Pretensión.
La pretensión de la parte recurrente es que se case la sentencia por los siguientes motivos
antes expuestos: por el Quebrantamiento de las formas esenciales del juicio, y por la
Infracción de Ley como motivos específicos: violación de Ley, fallo incongruente y error de
hecho en la apreciación de la prueba.
Causa de pedir.
Los hechos en que fundan su recurso los doctores Carlos Fernando Chávez Ortiz y Luis
Salvador Peña, es en el quebrantamiento de formas esenciales del juicio, reconocidas en
la letra b) del Art. 2 de la Ley de Casación, porque fue denegada una prueba legalmente
admisible y como consecuencia el fallo que dicto el tribunal de segunda instancia produjo
perjuicios al derecho de la persona que la solicito. Cuando la cámara de segunda instancia
se dispuso a dictar sentencia noto que el documento no había sido agregado
formalmente, a pesar de que fue pedida la agregación por el actor, y que el juez de
primera instancia ya la había ordenado para que fuera agregada; según el recurrente se
debió dar aplicación al Art. 1299 del código de procedimientos civiles que manda a la
cámara a completar una prueba que ya estaba ordenada, dicha diligencia no fue hecha
por el juez de primera instancia, y la cámara mando a la parte actora a que reiterara la
petición por escrito, por cual según el recurrente se infringió esta disposición y como
consecuencia al no ser agregado el documento fue denegada una prueba que era legal.
Otro hecho en el fundamenta el recurso es que existe infracción de ley, causa reconocida
en la letra a) del Art. 2 de la Ley de Casación, por ser el fallo del tribunal de segunda
instancia incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes debido a que la
cámara incurrió en error de hecho en la apreciación de la prueba, resultante de
documentos auténticos, esto se da según el recurrente porque el tribunal infringió, los
Arts. 421 y 1026 ambos del Código de Procedimientos Civiles; y el Art. 717 C. Este último
en su inciso segundo, prescribe que deben admitirse en juicio los títulos que no estén
registrados, cuando se presenten para pedir la declaración de nulidad o la cancelación de
algún asiento que impida verificar la inscripción de aquel instrumento. La infracción de ley
se da según el recurrente porque La parte demandada incriminó de inepta la demanda
porque a su criterio si el actor señor Francisco Portillo "ratificó" una "venta" realizada por
el tercero, sin ser dueño, siendo el actor único dueño, esa ratificación privó a este del
dominio del inmueble que se describe en ambos instrumentos; y por lo tanto, no siendo
dueño, no puede tener interés para obrar, de lo que resulta que la demanda en inepta;
este es el punto en que los apelantes fundamentaron su recurso y fue el punto en el que
la cámara no resolvió solamente esquivo dicho punto.
El recurrente también afirma que la cámara de segunda instancia violo los Arts. 1333,
1553 y 1552 del Código Civil los cuales disponen que es competencia del juez declarar la
nulidad absoluta de un acto en el que aparece de manifiesto dicha nulidad sin ser
necesaria la petición de parte, en esta parte la Cámara al constatar el estado ruinoso de la
inscripción debió mandar anular y cancelar la inscripción; cosa que no hizo, De esta
manera, si con la inscripción y en ella se ha producido una infracción al derecho público
salvadoreño, porque estaba prohibido el registro del documento impugnado, la
inscripción es nula, de nulidad absoluta, de acuerdo con el Art. 10, 713 y 1552 del Código
Civil. Dicha inscripción es nula debido a que en la certificación registral que a juicio de la
Cámara no merece fe, consta que en el instrumento autorizado por el notario Carlos
Humberto Henríquez López, no se hizo la venta del inmueble que en él se describe, como
tampoco la tradición a favor de la demandada. Y no obstante ello fue registrado en esto
estriba la nulidad del acto jurídico que alega el recurrente.
Criterios y lineamientos jurisprudenciales.
La sala de lo civil de la corte suprema de justicia resolvió únicamente sobre el primer
punto de la pretensión que es el quebrantamiento de las formas esenciales del juicio, que
se da porque los tribunales que conocieron del proceso no diligenciaron una prueba, que
había sido pedida por la parte actora para que se agregara al expediente del proceso,
dicha sala resolvió de la siguiente manera:
La sala dejo en claro que la falta de agregación legal de la certificación registral dicha, que
la Cámara sentenciadora detectó efectivamente existió, y que en efecto, no resulta en
términos generales lógica ni legalmente congruente, que frente a una evidente omisión
del tribunal de practicar una diligencia pedida y ordenada, sean las partes o alguna de
ellas las que soporten los efectos perjudiciales de ello, que es lo que ocurrió en dicho
proceso. Lo que se tenía que hacer es que la diligencia que se dejó de practicar sin
ninguna fundamentación por el Juez de Primera Instancia debió oficiosamente haberla
practicado la Cámara de Segunda Instancia, como imperativamente dispone el Art. 1299
del Código de Procedimientos Civiles.
De igual forma la sala considera que al no haber negligentemente el tribunal de primera
instancia practicado la diligencia que el mismo ordeno, y al no haber cumplido la cámara
de segunda instancia con lo que dispone el Art. 1299 del Código de Procedimientos Civiles,
se le negó al litigante la práctica de una diligencia de prueba válidamente admisible, pues
no obstante haberse ordenado la agregación del documento que solicitaba la parte
recurrente, su desahogo probatorio e incorporación de el al proceso como prueba no llegó
nunca a realizarse; y como consecuencia afecto a dicha parte a tal punto que la cámara de
segunda instancia pronuncio una sentencia inhibitoria de ineptitud.
En lo referente a los otros motivos de la pretensión la Sala de lo Civil se abstuvo de
pronunciarse.
Fallo de la sala.
El fallo que dicto la sala fue:
a) que se casase la sentencia recurrida.
b) que se ordenara a la Cámara Primera de lo Civil de la Primera Sección del Centro,
reponer la diligencia de agregación de la certificación registral de la escritura de
compraventa presentada por el doctor Carlos Fernando Chávez Ortiz como apoderado del
señor Francisco Portillo, Art. 1299 Pr.
c) que se devuelvan los autos al Tribunal de origen, con certificación de esta resolución
para los efectos legales correspondientes.
RESOLUCION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA A CERCA DE ESTE CRITERIO.
REVOCACION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA A CERCA DE ESTE CRITERIO.
RESCILIACION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA A CERCA DE ESTE CRITERIO.
TERMINACION
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA A CERCA DE ESTE CRITERIO.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA A CERCA DE ESTE CRITERIO.
SENTENCIAS 1997
INEXISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
NULIDAD
Numero de referencia: 1027
Nombre del tribunal sala de lo civil
Fecha de la resolución 14/02/1997
Hora de Resolución: 9.07
Pretensión nulidad de juicio civil ordinario
Causa a pedir
Se pide la nulidad de la escritura pública del inmueble por falta de los requisitos que
pide el articulo 1552 sobre la nulidad absoluta del contrato, también porque según el
articulo el Art. 1553 C. expresa, que la nulidad absoluta puede Y DEBE ser declarada
por el Juez, aún sin petición de parte, cuando aparece de manifiesto en el acto o
contrato.
Criterios
Análisis de los artículos y de la prueba
La sala declara nulo la escritura pública por no cumplir con los requisitos necesarios
exigidos por la ley, y por notar una falsedad del notario que otorgo la escritura del
inmueble por notarse la falsedad material debido a que extendió un testimonio de
contrato dando fe del mismo sabiendo que este contrato no se había presentado al
registro en la fecha de dicha escritura.
La Sala estima que es irrelevante examinar si el tribunal sentenciador cometió error de
derecho en la apreciación de la prueba instrumental aportada por la parte demandante
para establecer la falsedad de una escritura pública de compraventa y tradición de
inmueble, si dicha prueba no es conducente. En tal caso, de existir el error denunciado, el
fallo no cambiaría en nada, la sentencia del tribunal de casación sería idéntica a la
recurrida
Podemos concluir, que también es nulo el contrato de compraventa realizado en día
primero de Agosto, pues en la escritura matriz se da fe, de que ese día, comparecieron
ante el Notario Dr. Aguirre, el señor Morán y el Dr. Cruz, a otorgar ese contrato y la
presentación que de la copia de la escritura matriz o testimonio, se hizo un día anterior,
comprueba la falsedad de contenido de dicho contrato y la falta de cumplimiento de las
formalidades y requisitos legales, lo que conlleva la nulidad de dicho contrato
No existiendo el vicio denunciado, tal como se ha dejado expuesto, no es procedente
casar la sentencia por este motivo.
Numero de referencia 61
Nombre Del Tribunal Sala De Lo Civil
Fecha de resolución 30/06/1997
Hora de la resolución 12.05
Pretensión juicio civil ordinario de nulidad de contrato de compraventa
Causa a pedir
Nulidad absoluta de contrato de compraventa de inmueble debido a que el señor José
María Osegueda se apropió del inmueble de una manera ilegal pues al ganarse la
confianza de la propietaria se aprovechó de la invalidez , de la ceguera y de avanzada
edad abuso de la confianza que la señora María Murillo por ser su arrendatario le había
brindado se presentó cierto día y le sustrajo sus documentos personales y las escrituras de
las propiedades que esta situación ha sido notoria por todos los lugareños de Jiquilisco. La
señora murillo nunca le vendió la propiedad al señor Osegueda, debido a que la señora
vivía del arrendamiento de la propiedad,
Criterios
Concepto
Nulidad absoluta
La nulidad producida por un objeto o causa ilícita, y la nulidad producida por la omisión de
algún requisito o formalidad que las leyes prescriben para el valor de ciertos actos o
contratos, en consideración a la naturaleza de ellos y no a la calidad o estado de las
personas que los ejecutan o acuerdan, son nulidad absolutas
Análisis del artículo y de la prueba
La nulidad absoluta de contrato de compraventa de inmueble debido a que el señor José
María Osegueda se apropió del inmueble de una manera ilegal pues al ganarse la
confianza de la propietaria se aprovechó de la invalidez , de la ceguera y de avanzada
edad abuso de la confianza que la señora María Murillo por ser su arrendatario le había
brindado se presentó cierto día y le sustrajo sus documentos personales y las escrituras de
las propiedades que esta situación ha sido notoria por todos los lugareños de Jiquilisco. La
señora Murillo nunca le vendió al señor Osegueda, ya que ella vivía del arrendamiento de
la propiedad,
Se tienen que declarar nulidad porque no existió el consentimiento de una de las partes
para que se realizará el contrato de compraventa a la cual Hace referencia el artículo 1316
ord° 2 CC . Artículo 1553 C. la nulidad producida por un objeto o causa ilícita, y la nulidad
producida por la omisión de algún requisito o formalidad que las leyes prescriben para el
valor de ciertos actos o contratos, en consideración a la naturaleza de ellos y no a la
calidad o estado de las personas que los ejecutan o acuerdan, son nulidad absolutas, la
sala confirmo que no existían motivos de fondo y error de hecho con forme a la prueba
presentada por el demandado
En caso contrario el demandante si presentó prueba testimonial pues todo el pueblo era
testigo la mala fe del demandado al querer apropiarse de la propiedad de la señora María
Murillo.
Que el número de la Cédula de Identidad Personal con que se identifica en las
compraventas a dicha señora, no es el que realmente le corresponde, según el Registro de
Ciudadanos que lleva la Sección de Cédula de Identidad Personal de la Alcaldía Municipal
de esta ciudad tal como lo comprobaré oportunamente. d) Que las firmas que calzan los
diferentes instrumentos de compraventa no tienen similitud con la firma de la señora
María Murillo según el Registro de Ciudadanos que lleva la Sección de Cédula de Identidad
Personal de la Alcaldía Municipal de esta ciudad tal como se comprobará mediante el
dictamen de expertos. e) Que en dichas compraventas jamás hubo precio por lo que no
podríamos estar en presencia de una compraventa, pues los precios que se mencionan en
cada una de las escrituras no le fue entregado a la señora María Murillo. f) Aunque el
precio se hubiere pagado por las compraventas antes mencionadas resulta ilógico, creer
causando a la vez una lesión enorme, ya que el valor comercial de esa época pasaba del
millón de colones; y de conformidad con la doctrina que informa nuestro Código, sabemos
que la lesión enorme es el perjuicio pecuniario que experimenta una persona a
consecuencia de un acto jurídico.
En una compraventa, el vendedor sufre lesión enorme cuando el precio que recibe es
inferior a la mitad del justo precio de la cosa que se vende, por lo tanto y de conformidad
con la ley y la doctrina es un vicio del consentimiento. (Curso de Derecho Civil, las Fuentes
de las Obligaciones en Particular, de Arturo Alessandri Rodríguez y Manuel Somarriva
Undurraga, páginas 172 y 173). Mi demanda tiene fundamento legal en los siguientes
artículos 1322, 1551, 1552, 1605 y 1673, todos del Código Civil, que literalmente dicen:
Artículo 1322 C. Los vicios de que puede adolecer el consentimiento, son: error, fuerza y
dolo. Artículo 1551 C. Es nulo todo acto o contrato a que falta alguno de los requisitos que
la ley prescribe para el valor del mismo acto o contrato, según su especie y la calidad o
estado de las partes. La nulidad puede ser absoluta o relativa. Artículo 1553 C. la nulidad
producida por un objeto o causa ilícita, y la nulidad producida por la omisión de algún
requisito o formalidad que las leyes prescriben para el valor de ciertos actos o contratos,
en consideración a la naturaleza de ellos y no a la calidad o estado de las personas que los
ejecutan o acuerdan, son nulidad absolutas. Hay así mismo nulidad absoluta en los actos o
contratos de personas absolutamente incapaces. Cualquier otra especie de vicio produce
nulidad relativa, y da derecho a la rescisión del acto o contrato. Artículo 1605 C. La venta
se refuta perfecta, desde que las partes han convenido en la cosa que es objeto de la
venta y el precio, salvo las excepciones siguientes; y las contenidas en las leyes especiales.
Artículo 1673 C.
Al examinar la sentencia recurrida, la Sala constata que la Cámara sentenciadora siempre
en el considerando IV se expresa: """Después de todo lo expresado queda como única
prueba la confesión extrajudicial del demandado, pero de acuerdo con la ley es una
semiplena prueba, y no la prueba completa que le exige para tener por demostrado algo."
Para la Cámara ad quem, en el caso de autos, la única prueba que existe es la confesión
extrajudicial del demandado, pues para dicho tribunal no hay más pruebas en el proceso,
con olvido de la presunción judicial que se extrae de las declaraciones de los cinco testigos
presentados por la parte actora. Evidentemente, la Cámara, al no relacionar la confesión
extrajudicial del reo con la prueba presuncional, que debió advertir o percibir, cometió el
error de hecho denunciado.
Si la Cámara hubiese unido la confesión extrajudicial verbal del demandado con la
presunción judicial que se extrae de las declaraciones de los cinco testigos que declararon
en el proceso, necesariamente habría encontrado que existe en el juicio la prueba plena y
perfecta para fallar la causa y llegado a un resultado diferente. Con la presunción judicial
unida a la confesión extrajudicial verbal del demandado, se establece plenamente que la
señora María Salomé Peña Murillo no celebró o mejor no consintió en los contratos de
compraventa impugnados de nulos, siendo falsas las escrituras públicas que aparecen
otorgadas por dicha señora ante los oficios del Notario Carlos Humberto Reyes Mónico.
Siendo esto así, tales contratos no reúnen los requisitos para su existencia o validez y
conforme a lo dispuesto en los artículos 1551 y 1552 C., dichos contratos son nulos de
nulidad absoluta.
Demostrado que la Cámara sentenciadora, en la sentencia recurrida, ha cometido los
errores de derecho en la apreciación de la prueba testimonial y de hecho al apreciar la
confesión del demandado sin relacionarle con otras pruebas existentes en el proceso,
procede casar la sentencia impugnada por esos motivos y pronunciar la legal.
Número De Referencia 562
Nombre Del Tribunal Sala De Lo Civil
Fecha De Resolución 8/8/1997
Hora De La Resolución 8.13
Pretensión Nulidad De Escritura Pública De Compraventa
Causa a pedir
Se pide nulidad de escritura pública de compraventa por haberse infringido el artículo
1552 del CC y el articulo 385 numeral 3 del código de procedimientos civil.
Criterios
Concepto
Violación de la ley Cuando se deja de aplicar la norma que debía aplicarse, haciéndose
una falsa elección de otra", por ello dicho motivo no puede darse ante cualquier caso de
simple falta de aplicación de una disposición, ya que se requiere que tal caso ocurra a
consecuencia de haberse elegido otra norma para resolver el caso concreto, norma que
resulta ser la no correcta para fallar.
Análisis del artículo y de la prueba
La nulidad de contrato de escritura pública de contrato de compraventa por existir
infracciones al artículo 385 numeral 3 del código de procedimientos civiles pues la señora
compradora afirma que ella no pacto ningún precio antes del otorgamiento de escritura
de compraventa y que pago en presencia del notario y 1552 del Código Civil, también por
falta de aplicación de tal precepto al caso discutido; lo que así considero por lo siguiente:
Si bien es cierto que las instituciones de la inexistencia y la nulidad jurídica de un acto o
contrato son diferentes, al darse la primera de ellas, es necesario que sea reconocida por
un Juez, para que tal decisión produzca el efecto jurídico de dejar sin valor los actos que la
inexistencia produjo a la luz del Derecho. Bien cierto es que la falta de precio, produce la
inexistencia de la compra venta; y si ésta produce efectos en el mundo del Derecho tal
inexistencia debe ser declarada por un Juez para que cesen tales efectos; y a falta de un
procedimiento específico tiene que seguirse el procedimiento de la nulidad establecida en
la disposición antes referida, o sea el Art. 1552 del Código Civil, que en lo pertinente a la
letra dice "la nulidad producida por un objeto o causa ilícita, y la nulidad producida por la
omisión de algún requisito o formalidad que las leyes prescriben para el valor de ciertos
actos y contratos, en consideración a la naturaleza de ellos, y no a la calidad o estado de
las personas que los ejecutan o acuerdan, son nulidades absolutas", en el caso de autos no
hubo precio, en consecuencia no existe el requisito de existencia para la compraventa
como es el pago del precio de la tradición del dominio de la cosa vendida; tal contrato
podría presumirse de inexistente; pero el procedimiento para declararlo tiene que ser el
de la nulidad, ya que para que exista compraventa debe de existir precio y cosa vendida; al
faltar alguno de estos elementos el contrato puede ser cualquier otra cosa menos compra
venta. La Cámara en sus considerandos sostiene la tesis doctrinaria de la diferencia entre
nulidad e inexistencia, pero esta última en nuestro cuerpo de leyes que es el Código Civil
solo aparece en el Art. 1572, que en lo pertinente dice: "La falta de instrumento público
no puede suplirse por otra prueba en los actos y contratos en que la ley requiere de esta
solemnidad, y se mirarán como no ejecutados o celebrados...."; aparte de esta disposición
la institución de la inexistencia no aparece más en el Código Civil, y para ilustrar tal
aseveración, me permito poner el siguiente ejemplo: Si la compra venta de un inmueble
se hiciere y autorizara en documento privado autenticado, y el Registrados erróneamente
inscribiese tal documento, para cancelar la inscripción registral que se hizo en forma
indebida, no podrían por si las partes pedirle al Registrador que siendo inexistente el
contrato de compra venta por la falta de formalidad del instrumento público, cancele la
inscripción y declare inexistente dicho instrumento; si no que tendría el interesado que
ocurrir a un Juez de lo Civil, para que este declare la nulidad del contrato y ordene
cancelar la inscripción registrada; pues lo inexistente produjo efectos de derecho, y para
que estos cesen en cuanto a sus efectos, es necesaria la decisión judicial. En consecuencia
de lo anterior la infracción a tal norma por parte del juez y la Cámara fue su no aplicación
en el caso de autos y por consiguiente existe violación a tal precepto.
REVOCACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
RESCILIACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
TERMINACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
SENTENCIAS 1998
INEXISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
NULIDAD
Numero De Referencia 1075
Nombre del tribunal Sala De Lo Civil
Fecha de la resolución 3/2/1998
Hora de la resolución 8.46
Pretensión Nulidad De Diligencias De Título Supletorio
Causa a pedir
Se pide la nulidad de diligencias de título supletorio a favor de la señora Marta Elena
Arévalo Barraza por haber sido aprobados por dicho notario Kelly Echeverría.
Criterios
Análisis del articulo y de prueba
Se está viendo la nulidad de las diligencias de título supletorio solicitadas por la señora
Marta Elena Arévalo en contra de la sociedad ALVARENGA y compañía
La sala declaro nulidad del título supletorio a favor de la señora Alvarenga .Que dichas
diligencias de jurisdicción voluntaria de título supletorio, seguidas por medio de la Ley del
Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras Diligencias, ante la Notario
KenyPatsy Echeverría Cruz, adolecen de nulidad absoluta, por las siguientes razones: a) la
porción de terreno de 265,544 Metros cuadrados que ha pretendido titular la señora
Marta Elena Arévalo Barraza conocida por Marta Arévalo de Arriola y por Marta Arévalo
Barraza, no está descrito técnicamente como debería de ser lo correcto y está
comprendida dentro de la propiedad que mi cliente compró a la Sociedad Centro
Inmobiliario, S.A. de C.V., y que se relaciona en el literal II) de la presente demanda; y las
construcciones a que se refiere en el supuesto título supletorio, son las mismas que la
Sociedad Centro Inmobiliario, S.A. de C.V., le vendió junto con el terreno a la señora JULIA
BARRAZA DE MARTINEZ CALDERON; b) en las diligencias respectivas no se citó al
Representante Legal de mi mandante a la práctica de la inspección para establecer los
linderos y mojones del terreno que pretendía titular, dicho requisito es de fondo y
necesario para la validez del título supletorio tal como lo señala el inciso tercero del
Artículo 703 del Código Civil; c) los testigos de las diligencias de jurisdicción voluntaria del
título supletorio señores Germán Ernesto Cantoral, María Celia Chicas y Lauro Portillo,
fueron sorprendidos tanto por la señora Arévalo Barraza como por la notario KenyPatsy
Echeverría Cruz ya que cuando firmaron en el expediente respectivo se les manifestó que
se trataba de titular otro inmueble situado en el mismo cantón y que es propiedad de la
Señora MARTA ELENA AREVALO BARRAZA y que se encuentra inscrito a favor de ella al
número 63 T 4117 del Registro de la Propiedad de este Departamento, que tiene un área
de Media Manzana o sean 35 áreas comprobado al señor Horacio Chicas conocido por
Horario Chicas Estrada por la suma de Diez Mil Colones el día diecisiete de septiembre de
mil novecientos noventa, además al momento de la supuesta inspección no se presentó
donde los testigos la Notario KenyPatsy Echeverría Cruz, sino que solamente se hizo
presente la señora Marta Elena Arévalo Barraza conocida por Marta Arévalo de Arriola y
por Marta Arévalo Barraza, quien les pidió a los testigos que le hicieran el favor de firmar
porque se trataba del inmueble que le había comprado al señor Horacio Chicas conocido
por Horacio Chicas Estrada, y que se le denomina "LA ZACATERA"; d) el Artículo 16 inciso
Segundo de la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras Diligencias,
que se refiere a la obligación que tiene el Notario en las diligencias de Título Supletorio de
inmediatamente que se presenta la solicitud del titulante, pedir el informe a que se refiere
el Artículo 35 de la Ley de Catastro, el cual no fue cumplido; y este es un requisito de
validez para expedir el título en el Acta Notarial de Resolución Final que protocolizó, el
notario en ningún momento manifiesta.
En segundo lugar el demandante mesclo dos disposiciones que no tiene absolutamente
nada que ver en común salvo el término "nulidad" que se utiliza para identificar tanto un
vicio en materia civil como a otro en materia procesal, pero que responden unos y otros a
parámetros diferentes. En el Derecho Civil, la nulidad de un acto descansa, en cuanto al
aspecto de formas o solemnidades se refiere, en aquellas circunstancias o elementos
formales propios del acto o contrato, que le pertenecen intrínsecamente, como parte
integrante del mismo, para que pueda el tener validez o existencia
Consecuente con lo antes expuesto, aunque la Cámara sentenciadora seleccionó
falsamente los artículos 221 Pr. y 1552 C. y dejó de aplicar las normas legales que los
impetrantes consideran violadas en el sentido que lo manifiestan en su escrito de
interposición, el fallo no cambiaría en nada, porque la Sala siempre tendría que decretar la
nulidad del título supletorio expedido a la demandada, en aplicación de los artículos 703,
706, 10 C. y 35 de la Ley de Catastro y 16 de la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción
Voluntaria y de Otras Diligencias.
De lo dicho se colige que es irrelevante con relación al fallo la falsa elección que hizo la
Cámara sentenciadora de los artículos 221 Pr. y 1552 C.
Por ello la Sala estima que no procede casar la sentencia recurrida por el motivo
específico de violación de ley invocado.
También los impetrantes se quejan que en la sentencia recurrida la Cámara sentenciadora
cometió error de derecho en la apreciación de la prueba testimonial y consideran
infringido el artículo 321 Pr. Al expresar el concepto de la infracción del precepto legal
citado, los impetrantes dicen que la demandada ha probado con cuatro testigos mayores
de toda excepción, conformes y contestes en personas, hechos, tiempos y lugares y
circunstancias esenciales, que la demandada es poseedora por más de veinticinco años en
forma quieta, pacífica e ininterrumpida posesión, del inmueble a que se refiere el título
supletorio cuya nulidad ha demandado la sociedad actora, tiempo suficiente para adquirir
por prescripción la propiedad de dicho inmueble, sin necesidad de añadir la posesión
ejercida por la antecesora, que al no darle la Cámara el valor de plena prueba al dicho de
los cuatro testigos, cometió el error de derecho que denuncian. Que el tribunal
sentenciador comete error de derecho en la apreciación de la prueba testimonial cuando
estando plenamente probada la excepción de prescripción adquisitiva del dominio,
opuesta y alegada, no le da a esa prueba el valor que la ley le concede, Art. 321 Pr.
Numero de referencia 1052
Nombre del tribunal Sala de lo Civil
Fecha de la resolución 12/5/1998
Hora de la resolución 9.30
Pretensión Nulidad de Instrumento
Causa a pedir
Se pide lo que es la nulidad de instrumento de compraventa celebrado entre Juan Rodolfo
Barrios como vendedor y Gilberto Barahona como comprador por estar viciado de la
voluntad de los contratantes con dolo, debido a que el señor barrios fingió como dueño de
la propiedad al señor Barahona, no obstante ya había vendido el mismo inmueble pues
estaba vendiendo una cosa que ya era ajena que no le pertenecía.
Criterios
Análisis del articulo y de la prueba
La sala declaro nulidad de contrato de compra venta celebrados entre el señor Juan
Rodolfo Barrios y el señor Gilberto Barahona debido a que señor vendedor actuó de mala
fe fingiendo ser el dueño de la propiedad que estaba vendiendo, debido a que
anteriormente ya había vendido esa propiedad a otra persona .
La cámara declara al respecto lo siguiente: "Aun cuando se hubiere comprobado que las
ventas realizadas se trataban de un mismo inmueble, no sería nula la segunda venta, es
decir, la venta realizada por el señor Barrios al señor Barahona, ya que de acuerdo al Art.
1619 C. C. la venta de cosa ajena produce entre las partes las obligaciones propias de la
compraventa. Además el simple contrato de compraventa no perjudica a terceros si esta
no se inscribe en el correspondiente Registro.
Con esto concluimos, que la prueba por inspección solicitada era inconducente, ya que el
asunto que se pretendía esclarecer con la misma, no era en absoluto determinante para
darle un giro diferente al fallo, pues como se infiere de la sentencia, el criterio que motivó
el fallo de la Cámara fue otro, y que en nada tiene relación con el punto que la inspección
aclararía, por lo que no siendo conducente la prueba que se solicitó en Segunda Instancia,
no podía producir perjuicios al derecho o defensa de la parte que la solicitó, requisito
indispensable, como se dijo en un principio, para casar la sentencia por el motivo de forma
alegado, por lo que no procede casar la sentencia por este motivo, pasando a
continuación a estudiar el motivo de fondo.
En cuanto a la admisibilidad de la prueba en el presente caso, se hace necesario hacer el
siguiente análisis: la ley establece en determinados casos el tipo de prueba que debe
producirse, atendiendo a la naturaleza de los hechos discutidos y pertinencia de la misma
en relación precisamente, a aquellos hechos, de modo que si la prueba se deniega
produce nulidad; así lo establece el Art. 1117 Propiedad ya no le pertenecía ya era una
cosa ajena.
Cabe observar que el motivo invocado exige el cumplimiento de dos hipótesis: la primera,
se refiere al hecho de que la prueba que se solicita deber ser legalmente admisible, y la
segunda se refiere a que la denegación de la misma debe producir un perjuicio real al
derecho o defensa de la parte que la solicitó, de suerte que si uno de dichos requisitos no
se cumple, no habrá lugar a casar la sentencia por ese motivo.
La legalidad se relaciona: a) con el hecho que la prueba solicitada sea permitida, b) con el
tiempo en que la ley establece para que esa prueba sea producida, y c) con la forma de su
ofrecimiento; condiciones que no son punto de discusión en el presente caso, pues la
prueba aquí solicitada es legalmente admisible
No existiendo en la sentencia recurrida ninguno de los vicios, tanto de forma como de
fondo alegados, no procede casarla, por lo que así debe declararse, con las condenaciones
de ley, quedando firme la sentencia referid
Numero de referencia 1096
Nombre Del Tribunal Sala De Lo Civil
Fecha de la resolución 28/05/1998
Hora de la resolución 9.35
Pretensión Nulidad de instrumento
Causa a pedir
Nulidad del instrumento de compraventa debido que la tradición es solo un modo de
adquirir las cosas ,en ningún momento hace alusión a la circunstancia de que para que la
tradición opere se requiere de la publicidad registral, pues como es sabido los requisitos
de la tradición, son nada más: a) presencia de dos personas: tradente y adquirente; b)
capacidad del tradente y adquirente, c) título traslaticio de dominio; d) entrega material...
Criterios
Concepto
Tradición
Tradición" se debe entender, tal como lo manifiesta el Art. 651 C. Como...modo de
adquirir el dominio de las cosas y consiste en la entrega que el dueño hace de ellas a otro,
habiendo por una parte la facultad e intención de transferir el dominio y por otra, la
capacidad e intención de adquirirlo"
Análisis de artículos y de la prueba
La sala declara no al lugar al juicio interpuesto debido a que sean encontrado falta de
congruencia en los términos utilizados
En efecto, como es sabido en nuestra legislación para que el derecho real de dominio o de
propiedad se transfiera de su actual titular hacia una nueva persona, se requiere de 1) un
título traslaticio de dominio, como la compraventa, donación, permuta, aporte en
propiedad a una sociedad; 2) Un modo de adquirir, que en el caso de los títulos traslaticios
de dominio mencionados, es la tradición; o por "Tradición" se debe entender, tal como lo
manifiesta el Art. 651 C. Como,"""" ....modo de adquirir el dominio de las cosas y consiste
en la entrega que el dueño hace de ellas a otro, habiendo por una parte la facultad e
intención de transferir el dominio y por otra, la capacidad e intención de adquirirlo" y
nada más, nótese que el Art. 651 Pr. C., en ningún momento hace alusión a la
circunstancia de que para que la tradición opere se requiere de la publicidad registral,
pues como es sabido los requisitos de la tradición, son nada más: a) presencia de dos
personas: tradente y adquirente; b) capacidad del tradente y adquirente, c) título
traslaticio de dominio; d) entrega material.... ii) Por otra parte, si se acepta la
interpretación errónea que este Alto Tribunal hace de Arts. 667 y 683 C., se llega al
absurdo de considerar al primer comprador y a quien primero se hizo la tradición, como
"un tercero", (?); cuando no cabe duda que si se sigue tal criterio, "tercero" será la
persona a quien por segunda vez, se hizo la tradición de la cosa, en el presente caso, a la
demandada, señora NELLY ESTRADA LOPEZ, por lo demás el Artículo 1621 C. es muy
claro.""""... Si alguien vende separadamente una cosa a dos personas, el comprador a
quien se haya hecho la tradición será preferido al otro; si ha hecho la tradición a los dos,
aquel a quien se haya hecho primero será preferido y si a ninguno se ha hecho, el título
más antiguo prevalecerá"""". En el caso de autos el vendedor hizo la venta y tradición a
dos personas; por ello, sin necesidad de acudir al efecto publicitario del Registro, de
acuerdo a la disposición, a quien se haya hecho primero la tradición será preferido. En el
caso de que se trata es la venta y tradición hecha a mi poderdante, don Pablo Martínez
García, es la que prefiere. Nótese también que el Art. 667 C. exige como requisito propio
de la tradición de bienes raíces (así como el Art. 1605 C. lo exige respecto de la
compraventa) es la solemnidad legal ordinaria del otorgamiento de la misma, en
instrumento público, en que el tradente exprese verificar la tradición y el adquirente,
recibirla, pudiendo en todo caso ser un mismo instrumento el de contrato como el que
contenga la tradición. A continuación el Artículo 667 C., expresa: el instrumento que
contenga la compraventa y tradición,"""... para que surta efectos contra terceros (no para
que valga la tradición) deberá inscribirse en el Registro Público de la Propiedad."""" y en
los recursos utilizados
El Art. 667 C. expresa lo siguiente: "La tradición del dominio de los bienes raíces y de los
derechos reales constituidos en ellos, salvas las excepciones legales, se efectuará por
medio de instrumento público en el que el tradente exprese verificarla y el adquirente
recibirla. Este instrumento podría ser el mismo del acto o contrario, y para que surta
efectos contra terceros deberá inscribirse en el Registro de la Propiedad". De la lectura del
citado artículo se observa que se agrega un requisito, formal en la tradición de bienes
inmuebles; es decir, la condición de que la misma conste en escritura pública, requisitos
que conforman la validez de este modo de adquirir en cuanto a las partes contratantes.
Hasta este punto el caso objeto de la presente disputa, cumple con todos los requisitos
legales para afirmar que la tradición efectuada entre el señor Pablo Martínez García y la
Sociedad demandada
En el presente caso el impetrante no inscribió el contrato de compraventa celebrado
entre el y la sociedad demandada en el correspondiente registro como lo exige la ley, por
lo que si bien es cierto el recurrente tiene la razón en cuanto alega que "la tradición entre
ellos existió desde el momento de otorgarse el instrumento público de compraventa";
esta validez quedó limitada únicamente entre las partes contratantes, al no cumplirse con
el requisito de la publicidad registral, lo que limitó su eficacia frente a terceros) Toca ahora
analizar el segundo punto: "quienes tiene la calidad de terceros para nuestra legislación",
esto en relación a la "interpretación errónea" que alega el recurrente del Art. 683 C. y que
literalmente expresa: "La tradición del dominio de los bienes raíces y su posesión, no
producirá efecto contra terceros, sino por la inscripción del título en el correspondiente
registro". Dicha infracción se argumentó en los siguientes términos: "El requisito de la
publicidad registral es para terceros y ni mi mandante ni la sociedad demandada son
terceros en el contrato de compraventa otorgado entre ellos, ante los oficios del Notario
Jaime Benjamín Trabanino Llobel, por lo que la tradición entre ellos existió desde el
momento de haberse celebrado el contrato".
Ahora bien, se consideran como terceros para nuestra legislación, según el Art. 680 C. inc.
2º.""", aquel que no ha sido parte en el acto o contrato a que se refiere la inscripción"""",
es decir, que desde el momento en que se inscribe un contrato en el Registro
correspondiente, todo aquel que no forma parte de ese acto o contrato se vuelve un
tercero en relación a las partes que han intervenido en ese contrato inscrito. En el
presente caso, la Sociedad "Construcciones de Oriente S.A. de C.V." celebró dos contratos
de compraventa del mismo inmueble con dos personas distintas, el primero a favor del
ahora recurrente señor Pablo Martínez García el día siete de diciembre de mil novecientos
noventa y tres ante los oficios del notario Jaime Benjamín TrabaninoLlovel; y el segundo a
favor de la señora Nelly Estrada López ante los oficios del Licenciado Elmer Jackson Parada
Cardona el día once de abril de mil novecientos noventa y cuatro, siendo este segundo
contrato el que se inscribió en el Registro de la Propiedad, situación que despojó al primer
comprador señor Pablo Martínez García, del derecho latente que como dueño del
inmueble podía hacer efectivo contra terceros y lo convirtió en un tercero frente a las
partes del segundo contrato
En conclusión, los argumentos aportados por el recurrente y que fundamentan la
"interpretación errónea" de los Arts. 667, 683 y 1621 C. alegada, no han sido
probados, por lo que no procede casar la sentencia recurrida, y así debe
declararse. Numero de referencia 243
Nombre del tribunal sala de lo civil
Fecha de la resolución 12/11/1998
Hora de la resolución12:30:00
Pretensión Nulidad De Título De Dominio
Causa a pedir
Se pide la Nulidad de título supletorio en contra de la señora Santo Fidelina Caballero
"cuya propiedad la ha adquirido la titulante quieta y pacíficamente por posesión ejercida
por más de diez años consecutivos sin que persona alguna haya interrumpido como
dueña". Como la solicitante, señora Santos Fidelina Caballero de Flores, no reunió todas
las condiciones que la Ley exige, resulta que la solicitud era inadmisible, sin embargo se
admitió pero contra Ley expresa y terminante.
Criterios
Concepto
Violación de la ley
VIOLACION DE LEY. Según el numeral primero del Art. 3 de la Ley de Casación "Hay
violación cuando se deja de aplicar la norma que debía aplicarse, haciéndose una falsa
elección de otra
Error de derecho en la aparición de la prueba.
El error de derecho en la apreciación de la prueba consiste en la equivocación del
Juzgador al valorar la prueba atribuyendo a la misma un valor que no tiene, con infracción
de las normas legales valorativas de la prueba.
Análisis del artículo y de la prueba
La solicitud de título supletorio no reunió todos las condiciones referentes a 1. el modo de
adquirir la posesión, 2. no menciono el nombre, el apellido, la profesión y el domicilio de
la persona o personas de quienes adquirió la posesión expresando si aun vivan o ya habían
muerto.
La señora Santos Fidelina Caballero de Flores, no reunió todas las condiciones que la Ley
exige, resulta que la solicitud era inadmisible, aunque haya estado viviendo en la
propiedad por más de diez años de manera pacífica.
En el caso de autos, al título municipal que el Alcalde de Sociedad expidió a la señora
Santos Fidelina Caballero de Flores, le hacen falta varios de los requisitos que establece el
artículo 2 de la Ley Sobre Títulos Urbanos, ellos son: el estado de familia, la profesión y
domicilio de la solicitante, el valor del inmueble, el modo como lo adquirió, el nombre,
profesión y domicilio del quien lo adquirió y si éste está vivo o muerto. También le hace
alta al título, si fue pagado en el Diario Oficial la publicación del edicto respectivo y si el
Alcalde tuvo a la vista la nominación catastral o la certificación de no estar catastrado el
inmueble a que se refiere, tal como lo exige, penal de nulidad, el artículo 35 de la Ley de
Catastro.
Por otra parte, la facultad del Alcalde, conocida por la Ley Sobre Títulos de Predios
Urbanos, para expedir títulos de propiedad, falta cuando el inmueble titulado ya ha sido
inscrito con anterioridad a nombre de la otra persona o del mismo titulante
De lo dicho se colige que no procede casar la sentencia recurrida por violación de los
preceptos legales que los impetrantes consideran infringidos
En cuanto a la violación de los artículos 428 y 427 Pr., la Sala estima que estas normas
legales regulan la actividad del juzgador al pronunciar la sentencia y su infracción no
tienen la virtud de hacer variar lo resuelto, por cuanto al pronunciarse la sentencia de
fondo se cumpliría con lo establecido por las mismas, de donde resulta irrelevante analizar
si fueren o no violadas.
Los impetrantes también se quejan que fueron violados, los artículos 713 y 688 C., por no
haberse aplicado; pero en su escrito de interposición del recurso no han demostrado la
infracción de esas disposiciones legales, lo que equivale a no expresar en forma concreta y
precisa el concepto de la infracción y por ello es improcedente casar la sentencia.
De lo dicho se colige que no procede casar la sentencia recurrida por violación de los
preceptos legales que los impetrantes consideran infringidos. Declárase que no ha lugar a
casar la sentencia de que se ha hecho mérito.
RESOLUCIÓN
Numero de referencia 1049
Nombre Del Tribunal Sala De Lo Civil
Fecha de la resolución 06/07/1998
Hora de la resolución 12.05
Pretensión Resolución De Contrato De Arrendamiento Con Promesa De Venta
Causa a pedir terminación del contrato de arrendamiento con promesa de
compraventa por incumplimiento de una de las partes
La Cláusula VI del contrato disponía: "El incumplimiento por parte del arrendatario de
cualquiera de las estipulaciones convenidas o la mora en el pago de los cánones del
arrendamiento y sus intereses, en su caso, hará caducar el presente contrato, y el
arrendante tendrá derecho a recobrar el inmueble arrendado sin necesidad de desahucio,
término del mismo ni providencia judicial ni administrativa alguna, renunciando el
arrendatario a sus beneficios y sin que tenga el arrendante en caso alguno la obligación de
reintegrar algún valor recibido en razón de este contrato". Pese a tales obligaciones, el
señor León Escobar no pago las cuotas a partir de junio de mil novecientos noventa y uno
ni cumplió con los demás términos del contrato. Por ello, en calidad de apoderado del
señor Urbina promovimos un juicio ordinario de resolución del contrato de arrendamiento
con promesa de venta ante el Juzgado Segundo de lo Civil de este Distrito Judicial
Análisis de artículo y de la prueba
La sala en su follo dijo Cásase la sentencia pronunciada por la Cámara Primera de lo Civil
de la Primera Sección del Centro, a las quince horas y cuarenta y cinco minutos del día
treinta y uno de mayo de mil novecientos noventa y cinco, en el juicio civil ordinario de
resolución de contrato de arrendamiento con promesa de venta, del que se ha hecho
mérito; b) Declárase resuelto, finalizado o terminado, el contrato de arrendamiento con
promesa de venta celebrado a las once horas del día seis de junio de mil novecientos
ochenta y nueve por el señor Roberto Urbina como arrendante y el señor German León
Escobar como arrendatario, ante los oficios del Notario Carlos Amílcar Amaya, c) Ordénase
la desocupación del inmueble arrendado y condénase al señor German León Escobar a
pagar al señor Roberto Urbina los cánones de arrendamiento pactados a partir del mes de
junio de mil novecientos noventa y uno, hasta la desocupación del inmueble arrendado y
a indemnizar al señor Roberto Urbina los perjuicios que el incumplimiento de las
obligaciones pactadas en el referido contrato de arrendamiento con promesa de venta
hubiere irrogado a su acreedor; d) No hay condenación en costas, e) Extiéndase la
ejecutoria de ley.
También porque en las cláusulas de los contratos se obligan las partes a cumplir con lo
pactado y como quedo claro la parte demandada incumplió con la cláusula numero VI del
contrato que dice lo siguiente
El incumplimiento por parte del arrendatario de cualquiera de las estipulaciones
convenidas o la mora en el pago de los cánones del arrendamiento y sus intereses, en su
caso, hará caducar el presente contrato, y el arrendante tendrá derecho a recobrar el
inmueble arrendado sin necesidad de desahucio, término del mismo ni providencia
judicial ni administrativa alguna, renunciando el arrendatario a sus beneficios y sin que
tenga el arrendante en caso alguno la obligación de reintegrar algún valor recibido en
razón de este contrato.
De acuerdo, con las razones antes dichas, disposiciones legales analizadas Art. 18 y 23 de
la Ley de Casación, es procedente casar la sentencia de que se ha recurrido y
consecuentemente se ha de dictar la sentencia que corresponde.
REVOCACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO DE
LOS CRITERIOS.
RESCILIACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO DE
LOS CRITERIOS.
TERMINACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO DE
LOS CRITERIOS.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO DE
LOS CRITERIOS.
SENTENCIAS 1999
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO DE
LOS CRITERIOS.
SENTENCIAS 2000
INEXISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA EN RELACIÓN A NINGUNO
DE LOS CRITERIOS.
NULIDAD
Referencia: 1225-2000
Tribunal: Sala de lo Civil
Tipo de resolución: Sentencia Definitiva
Fecha: 08/02/2000
Hora: 15:18:00
Pretensión: Declaración De Nulidad Absoluta Del Testamento Abierto.
Causa de pedir:
El Tribunal en primera instancia resolvió que De conformidad a las razones expuestas,
artículos citados y Artículos 417, 421, 422, 427 Pr. y 1551 C se declaro nulo absolutamente
el testamento además de declarar nula la declaratoria definitiva de herederos, nulidad de
las inscripciones se dejo sin efecto la revocatoria del testamento.
El fallo en segunda instancia resolvió que de conformidad a las disposiciones legales
citadas y Arts. 421, 422, 428. 439, 1089 y 1090 Pr.C., a nombre de la República de El
Salvador, DIJERON: 1°) Confirmase la sentencia venida en apelación pronunciada por el
señor Juez Quinto de lo Civil de este distrito judicial, a las catorce horas del veinte de abril
del año en curso, por encontrarse arreglada a Derecho; y, 2°) Condenase a la parte
perdidosa al pago de las costas de ley.
El motivo de interponer recurso de casación fue por
A) Por infracción de Ley, causa genérica, Art. 2 Literal A de la Ley de Casación B) El motivo
en que me fundo, causa específica, Art. 3 Numeral Uno Ley de Casación La HONORABLE
CAMARA TERCERA DE LO CIVIL no aplicó los Artículos 321 inciso Segundo del Código de
Procedimientos Civiles que literalmente dice:..."Para probar la falsedad de un instrumento
se necesitan cuatro testigos idóneos sin excepción, si fuere público o auténtico, y dos, si
fuere privado. Mas en los instrumentos públicos tendrá el Juez en consideración su
antigüedad, su concordancia con el protocolo y la buena o mala conducta del escribano o
Notario", no aplicó el Art. 344 del Código de Procedimientos Civiles que literalmente dice:
"Los peritos deben tener título en la ciencia o arte a que pertenezcan el punto sobre que
ha de oírse su juicio, si la profesión o el arte estuvieren legalmente reglamentados" y no
aplicó el Art. 412 del Código de Procedimientos Civiles que en lo pertinente dice: "Son
pruebas semiplenas: la comprobación de letras"
C) El concepto en que dichos preceptos han sido Infringidos: Para llegar a la convicción o
establecer plenamente probada la nulidad absoluta, en el presente caso, es necesario
establecer plenamente probada la falsedad del documento, en el caso es un instrumento
público que según nuestra legislación tiene su normativa establecida para obtener la
prueba plena de su falsedad. En el presente caso se ha cometido la infracción: 1- Se
considera que la prueba vertida por dos peritos neófitos, catecúmenos o legos en la
materia es un dictamen pericial vertido por personas profesionales en grafotecnia, lo cual
lo estima la HONORABLE CAMARA por motu propio, sin tener prueba de su obtención de
su título académico sobre la materia; y para instruirles HONORABLE SALA, no existe como
Carrera Universitaria o Técnica dicha especialidad de Grafo técnico en el departamento de
Coordinación Nacional de Educación Superior del Ministerio de Educación. 2- El dictamen
de peritos en el presente caso es el contemplado en el Cotejo de Letras y el valor
probatorio del mismo es, que constituye una SEMI - PLENA PRUEBA y la infracción consiste
en que la HONORABLE CAMARA basó su sentencia en el hecho de que los peritos son
profesionales en la materia sin serlo y especialmente en que dicha prueba constituye una
plena prueba, cuando la ley expresamente en el Art. 412 Pr.C. le da el valor de SEMI -
PLENA PRUEBA habiendo elegido falsamente el Art. 363 Pr.C. y no el Art. 412 Pr. C. que es
el que debió aplicar. Y por todo lo anteriormente expuesto y disposiciones citadas, se
pide Remitir los autos donde corresponda, Art. 11 de la Ley de Casación.-Por auto de las
diez horas del día dos de febrero de mil novecientos noventa y nueve, la Sala admitió el
recurso de Casación y se pasaron los autos a la Secretaría, para que las partes
presentaran, dentro del término de ocho días, sus alegatos.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
ANÁLISIS DE ARTICULOS Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia queda casada por el siguiente análisis:
Con respecto al Art. 321 inc. Segundo Pr., el interponente expresa que la Cámara
sentenciadora no aplicó dicha norma legal que dice: "Para probar la falsedad de un
instrumento se necesitan cuatro testigos idóneos sin excepción, si fuese público o
auténtico, y dos, si fuere privado. Más en los instrumentos públicos tendrá el Juez en
consideración su antigüedad, su concordancia con el protocolo y la buena o mala
conducta del escribano o notario", no obstante lo anterior, oportunamente presentó tres
testigos, todos profesionales de la Ciencias Jurídicas, con los cuales comprobó la buena
conducta de la notaria ante cuyos oficios se otorgó el instrumento.
Como es de notar, de la exposición del recurrente no aparece cual es el concepto de la
infracción en relación al Art. 321 Pr.; por otra parte, la Cámara no pudo aplicar dicha
disposición en su sentencia por cuanto el demandante no introdujo al proceso prueba
testimonial de ninguna clase, y los testigos que fueron presentados por la parte
demandada sí fueron valorados por la Cámara sentenciadora. En consecuencia, no
procede casar la sentencia por violación del Art. 321 Pr.
En relación con la violación de los Arts. 344 y 421 Pr., se dice en el escrito de interposición
que el dictamen de peritos del presente caso es el contemplado en el cotejo de letras y el
valor probatorio del mismo es de semiplena prueba, consistiendo la infracción en que la
Cámara basó su sentencia en el hecho de que los peritos los consideró como profesionales
en la materia sin serlos y especialmente en que dicha prueba constituye una plena prueba,
cuando la ley de manera expresa en el Art. 412 Pr. le da el valor de semi plena prueba,
habiendo elegido falsamente el Art. 363 Pr. y no el 412 Pr. que es el que debió aplicarse.
Efectivamente la Cámara dice en la sentencia que a fs. 959 de la quinta pieza aparece el
material dubitado que sirvió de base para practicar el cotejo en las firmas de los
instrumentos que se indican. Más adelante dice: concluyendo su examen los peritos
señores José Vladimir Pablo Ventura y Roberto Antonio Valladares García así: " La firma
objeto de análisis, descrita en el material dubitado no proviene del puño gráfico de la
persona que elaboró las firmas tenidas para comparación". Se expresa luego, que con ese
dictamen pericial uniforme practicado por los peritos, " se corrobora en resumidas
cuentas, que la firma estampada en la escritura matriz número cuarenta y seis, del libro
catorce del Protocolo de la Doctora Blanca Vilma Ayala de Frohlich, no proviene del puño
gráfico del Doctor Raúl Alfredo Velásquez" y que es "oportuno subrayar que el dictamen
uniforme de dos peritos o el de uno sólo, forman plena prueba en la parte facultativa o
profesional, Art. 363 Pr. C.; y en el caso que nos ocupa, el dictamen ha sido suscrito
justamente por dos profesionales de grafotecnia del Laboratorio de Investigación
Científica del Delito. En tal virtud, pues, considerando que la parte actora ha probado los
extremos de su demanda y que la parte demandada no probó los extremos de su
contestación, es procedente confirmar la sentencia recurrida".
Para probar la nulidad del testamento, el actor solicitó la práctica de la experticia
caligráfica de la firma que aparece en dicho testamento, el cual se redarguye de nulidad
absoluta, expresando que "para hacer la comparación de dichas firmas presenta los
siguientes documentos, que deberán tenerse como material indubitado, de conformidad a
lo dispuesto en el Art. 350 N° 1° y 3° Pr. C. "Tal peritaje fue ordenado por el Juez a-quo y
se practicó por dos peritos, los Bachilleres Roberto Antonio Valladares García y José
Vladimir Pablo Ventura, quienes parecen contar con conocimientos de grafo técnica, pero
que no son profesionales en el punto objeto de análisis, y tal profesión no está
reglamentada en El Salvador.- En consecuencia, al peritaje de autos, si hubiere sido
practicado conforme a la ley, ésta le reconoce un valor probatorio especial, esto es, el de
constituir una prueba semiplena, de acuerdo con el Art. 412 Pr., y por todo ello no le es
aplicable al Art. 363 Pr. que indica "El dictamen uniforme de dos peritos o el de uno solo
en los casos previstos por la ley, forma plena prueba en la parte facultativa o profesional."
Prueba semiplena es, pues, de acuerdo con el Art. 236 Pr., una prueba incompleta, que
por sí sola no instruye lo bastante para decidir, necesitándose otra u otras pruebas
semiplenas que puedan unirse y ser suficientes para resolver, toda vez que de la unión de
ellas resulte que no pudo menos de ser la cosa como la prueba anuncia, Art. 413 Pr.; es
decir, que en todo género de causas es indispensable la prueba plena y perfecta para
resolver por ella la cuestión, Art. 422 Pr.
En consecuencia, estima la Sala que efectivamente en el presente caso se ha violado el
Art. 412 Pr., aplicando en su lugar el Art. 363 Pr. que ha valorado la experticia relacionada
como prueba plena, cuando debió aplicar la disposición que la reconoce como prueba
semiplena, y por ello procede casar la sentencia recurrida por el error injudicando
denunciado y pronunciarse la legal.
PORQUÉ SE CASO LA SENTENCIA
Las disposiciones legales citadas, Arts. 417, 418, 421, 422, 428, y 1060 Pr. y 18 de la Ley de
Casación, a nombre de la República de El Salvador, DIJERON: a) Cásese la sentencia
definitiva de que se ha hecho mérito; b) Declarase que no ha lugar a la excepción
perentoria de ineptitud de la acción de petición de herencia; c) Absuélvase a las
demandadas señoras Rosa del Carmen Bolaños Hernández y Rosa Margarita Velásquez
Martínez, de la acción de nulidad absoluta del testamento abierto otorgado por el Doctor
Raúl Alfredo Velásquez, en esta ciudad, a las quince horas del día ocho de diciembre de
mil novecientos noventa y dos, ante los oficios de la Notaria Blanca Vilma Ayala de
Frohlich, según escritura pública asentada al número cuarenta y seis, del Libro catorce del
Protocolo de dicha Notaria; d) Absuélvase a las demandadas señoras Rosa del Carmen
Bolaños Hernández y Rosa Margarita Velásquez Martínez, de la acción de petición de
herencia y, en consecuencia, declarase sin lugar la restitución de los bienes herenciales
solicitada; e) Ordenase cancelar las anotaciones preventivas de la demanda, número
ciento trece del Libro doscientos cuarenta y seis del Registro de Propiedad Raíz e
Hipotecas del Departamento de San Salvador, y número cero seis - Número M cero un
millón treinta y seis mil trescientos cincuenta del Registro Social de Inmuebles; f)
Condenase al Licenciado Raúl Alfredo Velásquez Hidalgo, en las costas procesales de las
dos instancias y de este recurso; y g) Devuélvase el proceso al Tribunal de origen, con
certificación de esta sentencia; y líbrese la ejecutoria de ley.
Número de Referencia: 1184-2000
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Tipo de Resolución: Sentencias Definitivas
Fecha de Resolución: 26/05/2000
Hora de Resolución: 14:30:00
PRETENSIÓN: La Nulidad De Inscripción Registral
CAUSA PETENDI:
El fallo de primera instancia dijo: "FALLO: a) Declarase sin lugar la Nulidad de la
Inscripción Número VEINTITRES del Libro MIL SESENTA Y CINCO, Inscripción hecha en el
Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Tercera Sección de Occidente que ampara
la compra y venta del inmueble de naturaleza rústica, reducido al derecho de reserva a
una extensión superficial de CIENTO VEINTIOCHO HECTAREAS VEINTISIETE AREAS CERO
CENTIAREAS equivalentes a CIENTO OCHENTA Y TRES MANZANAS CINCO MIL DOSCIENTAS
OCHENTA Y SIETE PUNTO DIECISIETE VARAS CUADRADAS, otorgada por la Sociedad El
Almendro, Sociedad Anónima, a favor de la Sociedad AGROIN LA JOYA, SOCIEDAD
ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE, por no existir la inseguridad jurídica sobre el objeto a
que alude el demandante y por no ser este el indicado para ejercer la nulidad a que alude.
b) Declarase que no ha lugar la excepción de ilegitimidad del demandante, por haber
comprobado éste su calidad de accionistas con los documentos presentados. C) Cancélese
la Anotación Preventiva inscrita al Número OCHENTA Y TRES DEL LIBRO TREINTA Y
CUATRO de Anotaciones Preventivas, ordenada por este Tribunal a petición de la parte
actora. D) Líbrese al efecto oficio al Registro de la Propiedad Raíz relacionado para su
correspondiente cancelación.- No hay costas.
En segunda instancia dijo: "POR TANTO: En base a las razones dichas, disposiciones legales
citadas y a lo preceptuado por los Arts. 421, 422, 428, 431, 1089 y 1092 Pr. C., esta
Cámara a nombre de la República, FALLA: a) Revocase la sentencia definitiva venida en
apelación en todas sus partes; b) Declárese nula la inscripción N° 23 del Libro 1065 del
Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Tercera Sección de Occidente y en
consecuencia, cancélese la referida inscripción; oportunamente, líbrese oficio al
Registrador de la Propiedad Raíz de la referida Sección, para que tenga debido
cumplimiento lo aquí resuelto; c) Condenase a la parte demandante, al pago de las costas
de ambas instancias. En su oportunidad devuélvase el proceso al Juzgado de origen con la
certificación de ley.- Esta sentencia ha sido formada con los votos de los Magistrados Atilio
Rigoberto Quintanilla y Jorge Armando Ángel Calderón.
La casación se fundamenta en las causas siguientes: a) infracción de ley; y b)
Quebrantamiento de algunas de las formas esenciales de Juicio.- Art. 2 literales a) y b) Ley
de Casación.- 1.- La infracción de Ley la motiva el fallo que contiene violaciones de ley y
error de Derecho en la apreciación de la prueba, Art. 3 numerales 1 y 8 Ley de Casación.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
CONCEPTOS:
VIOLACION DE LA LEY:
Cuando se deja de aplicar la norma que deba aplicarse, haciéndose una falsa apreciación
de otra.
ANÁLISIS DE ARTÍCULO Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia queda casada por el siguiente análisis:
Como es de notar, de lo transcrito y del contenido del escrito de interposición, no aparece
clara y específicamente señalado cuál ha sido el precepto violado por la Cámara, esto es,
la disposición o disposiciones legales que debían haberse aplicado al caso de autos para
resolver y que se ignoraron por el tribunal ad-quem, pues los artículos a que se refiere el
recurso son los que ha aplicado la Cámara para fallar, siendo tales disposiciones los Arts.
680 Ord. 1°, 713, 732 C., 15 del Reglamento del Registro de la Propiedad, en relación con
el Art. 58 del Reglamento de la Ley de Reestructuración del Registro de la Propiedad Raíz e
Hipotecas. Y la relación que hace la Cámara respecto a los Arts. 62 letra f), 63 letra b) y
124 del Reglamento últimamente citado, es con el único fin de aclarar sus razonamientos
y no como base para emitir su fallo; y aunque así hubiera sucedido, tales normas no han
sido señaladas como infringidas, sino que, como dicen los impetrantes, son las normas
que se eligieron "falsamente" para decidir el caso en cuestión.-
En consecuencia, la Sala sostiene que, no habiéndose señalado cuál o cuáles son las
normas legales dejadas de aplicar por la Cámara y que debieron de aplicarse al presente
caso, el motivo invocado no llena los requisitos exigidos por la Ley de Casación y por ello
no procede casarse la sentencia por dicho motivo.
En cuanto al otro motivo específico alegado, o sea, el error de derecho en la apreciación
de la prueba, los recurrentes la hacen consistir en que el demandante ha fundamentado
su acción en el supuesto derecho que como accionista de la Sociedad "El Almendro, S.A.
de C.V." le corresponde, entrando así, el Juez y la Cámara a conocer en materia mercantil,
por tratarse de la calidad de accionista y sostienen que de conformidad a los Arts. 654,
655, 660, 661 y 623 Com. el actor no ha probado que es accionista en la mencionada
sociedad, y que careciendo por lo tanto de derecho de actor carece de acción; sostienen
también, que el demandante no tiene interés y que al derivarse este supuesto interés de
la tenencia de un título valor cuya legitimación no se ha comprobado, tanto el Juez como
la Cámara apreciaron erróneamente la prueba.
De conformidad a los alegatos esgrimidos por los impetrantes, configuran la falta de
legitimación del actor para ejercer la acción de nulidad que pretende, de acuerdo al Art.
713 C., tal como lo ha fundamentado la Cámara ad-quem en su sentencia, por lo que se
hace necesario analizar cómo se entabló la demanda por parte del Doctor Oscar Antonio
Rodríguez como apoderado judicial del señor Alex Alfonso Salaverría Lagos. Al respecto el
demandante dice en su demanda, que el señor Salaverría Lagos es accionista de la
Sociedad "El Almendro, S.A.", sociedad que vendió la propiedad relacionada en la escritura
de compraventa, a favor de la Sociedad "Agroín La Joya, S.A. de C.V." y cuya inscripción en
el Registro de la Propiedad respectivo es nula, porque en la escritura no existe ni la
situación exacta, ni los linderos del inmueble objeto de la inscripción, de lo que resulta
que la inscripción que se haga con esa omisión o inexactitud es penada con nulidad de
acuerdo al Art. 713 C., ya que hay una inseguridad absoluta sobre el inmueble inscrito, así
como los derechos que emanan del mismo, en base a lo cual pide la nulidad de la
inscripción de la referida escritura de compraventa. Para ejercer su acción, presentó como
documentos para probar su calidad de accionista y consecuentemente su interés para
ejercer dicha acción: fotocopia certificada de la escritura pública de protocolización de la
resolución pronunciada en las diligencias de aceptación de herencia testamentaria del
señor Raúl Antonio Salaverría Durán, por la cual se declara como único y universal
heredero testamentario definitivo al señor Alex Alfonso Salaverría Lagos, inscrita en el
respectivo Registro de la Propiedad y fotocopia certificada del certificado de cuatrocientas
acciones de la Sociedad "El Almendro, S.A.", pertenecientes al causante señor Raúl
Salaverría Durán, manifestando el actor en su demanda, que dichas acciones por herencia
ahora le pertenecen al señor Salaverría Lagos, y que de conformidad con tales
documentos la Cámara ad-quem estimó que el referido señor Salaverría Lagos es titular de
la acción que ha ejercido. Al respecto se advierte que el título valor presentado es una
acción nominativa, cuyas características son: que se expida a favor de persona
determinada, cuyos nombres han de consignarse, tanto en el texto de los documentos
como en el registro de los mismos que deberá llevar el emisor; ningún acto u operación
referente al título nominativo surtirá efectos, contra el emisor o contra terceros, si no se
hace constar en el documento y en el registro, Art. 654 Com. Dicho título valor para su
transmisión, necesita de ciertas formalidades especiales, por endoso seguido de registro o
por cualquier otro medio establecido en el Derecho Civil, siempre seguido del registro,
como en el caso de transmisión por herencia, Arts. 665, 660 y 661 Com.; para el caso de
mérito, en el certificado de acciones presentado no tiene la razón del Juez de que fue
traspasado por sucesión a nombre del señor Alex Alfonso Salaverría Lagos y tampoco
aparece la razón de que dicho traspaso se encuentra en el registro de accionistas de la
Sociedad, Art. 654 Com., así que en este caso la Cámara ad-quem ha supuesto prueba
donde no la hay, porque los títulos valores son los documentos necesarios para hacer
valer el derecho literal y autónomo que en ellos se consigna, y el señor Salaverría Lagos no
ha probado ser accionista de la Sociedad "El Almendro, S.A.".-
El alegato anterior, tal como puede estimarse, hace relación a un error de hecho en la
apreciación de la prueba y no a un error de derecho en la apreciación de la misma.
Cuando se alega error de derecho, debe señalarse con precisión la prueba que a juicio del
recurrente fue estimada con equivocación, indicarse así mismo en que consiste este error
y citarse la ley infringida que se relaciona con la estimativa probatoria. En el caso de autos
no se cuestiona la prueba en cuanto al valor que le manda la ley para efecto de resolver,
sino que lo que se discute es la prueba misma, la cual, de acuerdo con el recurrente, no
existiría, puesto que el certificado de acciones no está legalmente traspasado al
demandante, por carecer de inscripción a su favor en el Registro de la Sociedad; es decir,
que "la Cámara ad-quem ha supuesto prueba donde no la hay, porque los títulos valores
son los documentos necesarios para hacer valer el derecho literal y autónomo que en ellos
se consigna," y la preterición de prueba constituye un error de hecho en la apreciación de
la misma. El error de derecho supone siempre la infracción de una norma legal que da
determinado valor probatorio a un documento. En cambio, en el error de hecho, hay una
desfiguración del contenido del documento, que hace llegar a conclusiones inexactas.-
En razón de todo lo dicho, debe también desestimarse el motivo específico de error de
derecho en la apreciación de la prueba que se ha alegado y de esta manera debe de
resolverse.-
PORQUÉ SE CASO LA SENTENCIA
POR TANTO: Por las razones expuestas, disposiciones legales citadas y Arts. 428, 423 Pr. y
23 de la Ley de Casación, a nombre de la República de El Salvador, la Sala RESUELVE:
Declárese que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito. Condenase a la
recurrente Sociedad "AGROIN LA JOYA, S.A. de C.V." en los daños y perjuicios a que
hubiere lugar y a los doctores Marietta Suárez Gutiérrez y Oscar Mauricio Carranza, en las
costas del recurso como abogados firmantes del escrito de interposición. Devuélvase el
proceso al tribunal de origen con certificación de esta sentencia, para los efectos de ley.
Número de Referencia: 1243-2000
Nombre del Tribunal: Sala de lo Civil
Tipo de Resolución: Sentencias Definitivas
Fecha de Resolución: 30/05/2000
Hora de Resolución: 10:20:00
PRETENSIÓN: Nulidad Del Título Municipal De Dominio Y Cancelación De La
Inscripción Del Mismo.
CAUSA PETENDI:
La declaración de nulidad de título de dominio extendido por la alcaldía municipal a favor
del señor Meléndez Quintanilla además de la cancelación de las demás inscripciones que
el inmueble posee celebradas también por el señor Meléndez Quintanilla ya que el título
que el señor poseía fue obtenido ilícitamente dicho inmueble fue desmembrado y una
porción fue vendida a “EDITORA EL MUNDO S.A” la editorial lo inscribió a su favor en el
registro inmobiliario de esa sección. Pero el señor Meléndez Quintanilla compareció a la
alcaldía solicitando para sí la extensión del título de dominio este inmueble fue vendido al
señor por personas que carecían de escritura registrada a su favor por lo que no existía
antecedente escrito de dicho inmueble en referencia.
La alcaldía municipal extendió el titulo solicitado y se inscribió en el registro inmobiliario a
favor del señor Meléndez Quintanilla, y así dicho inmueble tuvo varias desmembraciones
y enajenaciones de un inmueble ya titulado teniendo así diversas inscripciones por
diversas personas y a pesar que en el expediente de titulación, existía la suficiente
información para denegar la extensión del título fue extendido. Provocando con ello la
situación de la interposición de la demanda contra el titulante y todos aquellos que al
mismo tiempo han adquirido porciones del inmueble ilegítimamente titulados.
El fallo en primera instancia dijo: ""POR TANTO: razones expresadas, prueba relacionada y
artículos l55l, 1552,1553 C. 417,421,422,439,521 y siguientes Pr.C. a nombre de la
República de El Salvador, FALLO: a) Se declaran sin lugar las excepciones perentorias
alegadas por los demandados b)declarase nulo el título de dominio extendido por la
Alcaldía Municipal de esta ciudad, a favor del señor RICARDO MELENDEZ QUINTANILLA,
inscrito a su favor en el Registro de la Propiedad de esta Sección bajo el Sistema del Folio
Real al Número CERO UNO-CERO NOVENTA Y SEIS MIL CUATROCIENTOS VEINTINUEVE -
CERO CERO CERO,INSCRIPCION UNO, siendo el inmueble titulado por el demandado
MELENDEZ QUINTANILLA, de naturaleza urbana ubicado en la Quince Avenida Norte y
Diagonal Universitaria de esta ciudad y Departamento de un área aproximada de dos
hectáreas cuatro áreas sesentiséis centiáreas de extensión superficial, cuya descripción
detallada aparece en el Título relacionado; c) Cancélese la inscripción de dicho título
NUMERO CERO UNO-CERO NOVENTA Y SEIS MIL CUATROCIENTOS VEINTINUEVE-CERO
CERO CERO INSCRIPCION UNO, y las inscripciones en el Registro de la Propiedad
relacionadas que corresponden a las porciones segregadas del inmueble titulado por el
señor RICARDO MELENDEZ QUINTANILLA y traspasadas a las siguientes personas: l) CLEO
CASTELLO ESCRICH DE SAMAYOA, AL NUMERO CERO UNO-CIENTO OCHO MIL
NOVECIENTOS DOCE-CERO CERO CERO; 2) HECTOR ALCIDES MERLOS RODRIGUEZ y GUIDO
RENE SAMAYOA ESCRICH, inscrita al NUMERO CERO UNO-CIENTO DIEZ MIL
CUATROCIENTOS OCHENTA Y CINCO-CERO CERO CERO; 3) la inscrita a favor de ARGEL
CLARIBEL RAMIREZ DE MORALES al NUMERO CERO UNO-CIENTO OCHO MIL QUINIENTOS
NOVENTA Y UNO-CERO CERO CERO, 4) la inscrita a favor de MERCEDES MILAGRO
MURILLO MURILLO al NUMERO CERO UNO-CIENTO OCHO MIL QUINIENTOS NOVENTA Y
UNO-CERO CERO CERO, INSCRIPCION DOS; 5) la inscrita a favor de FILIBERTO ROMAN
OSEGUEDA ARIAS (Hipoteca) inscrita al NUMERO CERO UNO-CIENTO OCHO MIL
QUINIENTOS NOVENTA Y UNO-CERO CERO CERO, INSCRIPCION TRES; d) Cancélese la
anotación preventiva de la demanda hecha en las inscripciones anteriormente
relacionadas; para tal efecto, líbrese oficio con inserción de la sentencia del presente
juicio al señor Registrador de la Propiedad Raíz e Hipotecas de esta Sección y
Departamento para que haga las cancelaciones relacionadas. Se condena al pago de las
costas procesales correspondientes a los demandados.
El fallo de segunda instancia dijo: ""POR TANTO. En base a las razones expuestas,
disposiciones legales citadas y a lo preceptuado por los Arts. 1089 y 1091 Pr.C., esta
Cámara a nombre de la República, FALLA: Reformase el fallo de la sentencia definitiva
venida en apelación de la siguiente manera: 1°) Confirmase el literal a) de la misma que
declara sin lugar las excepciones perentorias alegadas por los demandados; asimismo se
confirma la primera parte del literal d) en donde se ordena la cancelación de la anotación
preventiva de la demanda ordenando librar el oficio correspondiente con inserción del
fallo de la sentencia definitiva al señor Registrador de la Propiedad Raíz e Hipotecas. 2°)
Revocase los literales b) y c) del fallo de la sentencia recurrida y en su lugar se resuelve: a)
declarase sin lugar la nulidad pedida en la demanda, del título Municipal expedido el día
dieciséis de septiembre de mil novecientos noventa y dos por el Alcalde Municipal de esta
ciudad, a favor del señor Ricardo Meléndez Quintanilla, inscrito al número cero uno-cero
cuatro sesenta y cuatro veintinueve-cero cero cero, inscripción uno, según la demanda, y
al número cero uno-cero noventa y seis mil cuatrocientos veintinueve-cero cero cero,
inscripción uno, según el informe registral de folios trescientos cuatro; en consecuencia
también se declara sin lugar la cancelación de la inscripción del referido documento; b)
declarase sin lugar la cancelación de las inscripciones siguientes: l°) Matrícula número cero
uno-diez ochenta y nueve doce-cero cero cero a favor de la demandada señora Cleo
Castello Escrich de Samayoa. 2°) Matrícula número cero uno-once cero cuatro ochenta y
cinco-cero cero cero, a favor de los demandados Héctor Alcides Merlos Rodríguez y Guido
René Samayoa Escrich y 3°) Matrícula número cero uno-diez ochenta y cinco noventa y
uno-cero cero cero, inscripción uno, dos y tres respectivamente, a favor de los señores
Argel Claribel Ramírez de Morales, Mercedes Milagro Murillo Murillo y Filiberto Román
Osegueda Arias. No hay condenación en costas. ---En su oportunidad vuelva el proceso al
Juzgado de su origen con la certificación de ley.
El motivo por el que se funda el recurso es: Infracción de ley (Art.2° de la Ley de Casación)
Interpretación errónea de los Arts.699 y 688 No.4.del Código Civil, en cuanto a estas
disposiciones se les da un sentido del cual carecen, atribuyéndoles como exigibles e
indispensables para la eficacia de un título inscrito, circunstancias no consideradas como
tales (Art.3 No.2º. de la Ley de Casación). Interpretación errónea del Art.692 del Código
Civil y del Art. 18 del Reglamento del Registro de Propiedad Raíz e Hipotecas. Error de
derecho en la apreciación de la prueba instrumental, de peritos y de inspección ocular, en
cuanto no se reconoce a cada uno de estos medios el valor de prueba plena que la ley les
confiere.(Arts. 258, 260 Nos. l° y 4°., 363 y 370 Pr.; y 3 No. 8° de la Ley de Casación). Error
de hecho resultante de instrumentos auténticos y públicos, en cuanto no se les considera
como medios probatorios, teniendo tal carácter (Arts. 258 y 260 No. l°. Pr.; y 3 No.8° de la
Ley de Casación). Interpretación errónea del Art. 7l7 del Código Civil, en cuanto
equivocadamente se entienden sus previsiones como aplicables al título de dominio hecho
valer por la actora. Violación del Art.713 del Código Civil, en cuanto deja de aplicarse lo
que en éste se previene a la inscripción del derecho de dominio a favor de la actora,
invocada en el caso sub lite (Art.3 No. L°. de la Ley de Casación). Violación del Art. 422 del
Código de Procedimientos Civiles en cuanto no se aplica el predicado de la norma, no
obstante el establecimiento formal y material del supuesto hipotético de la misma. (Art. 3
No. L° de la Ley de Casación). Preceptos infringidos y concepto en que cada uno de los
mismos se ha infringido. La infracción de los Arts. 684, 695 y 688 C.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
ANÁLISIS DE ARTÍCULO Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia queda casada por el siguiente análisis:
El recurso de casación se admite por la causa genérica de infracción de ley y por los
motivos específicos siguientes: l. Por interpretación errónea: a) de los Arts. 669 y 688
ord.4° C. y b) de los Arts. 692 C y l8 del Reglamento del Registro de la Propiedad Raíz e
Hipotecas; 2- Por error de derecho en la apreciación de las pruebas: Arts. 258, 260 Ord. l°
y 4°, 363 y 370 Pr.; 3- Por error de hecho por preterición de prueba, Arts. 258 y 260 Ord.
1° Pr.; 4- Por interpretación errónea del Art.7l7 C.; y 5- Por violación: a) del Art.7l3 C., y b)
del Art. 422 Pr.
Interpretación errónea de los Arts. 669 y 688 Ord. 4° C.-
Señala el impetrante que la "Cámara, luego de relacionar la transferencia del inmueble del
Doctor Borja Morán a sus herederos, advertís que el título de dominio del causante
contiene tal razón y la de su traspaso a sus herederos, mas no se indica quiénes son esos
herederos; es decir, no se les identifica con su nombre y apellidos; y que tal circunstancia
es indispensable para que el instrumento haga fe respecto a la titularidad del dominio,
cuando este derecho se hace valer frente a terceros; conclusión ésta que decís se infiere
de lo dispuesto por los Arts. 669, 688 N° 4° y 717 del Código Civil."
Continúa indicando el recurrente que "el título de dominio registrado a favor del causante
con la razón de su traspaso a los herederos de aquél, debidamente inscrito; el testamento
otorgado por el mismo, también debidamente inscrito; y la declaratoria judicial de sus
herederos, también debidamente inscrita y que identifica, uno a uno, a aquellos que
tienen esa calidad, comprueban perfectamente cuál es el inmueble adquirido a ese título y
quiénes son, individualizados, los titulares del derecho de dominio sobre el mismo, el cual,
de esa manera, los habilita para oponerlo eficazmente frente a terceros", y que por ello, la
interpretación que ha hecho la Cámara de los artículos que señala como su fundamento,
es una interpretación errónea, al darles a los mismos una connotación que el legislador no
tuvo en mente al dictarlas.
Al respecto la Sala expresa: que de acuerdo con el Art. 688 C, toda inscripción que se haga
en el Registro, expresará las circunstancias siguientes: ….4ª, "El nombre, apellido,
profesión y domicilio del que transmite o constituya el derecho que ha de inscribirse y las
mismas designaciones de la persona a cuyo favor se haga la inscripción". Lo anterior es
determinante para los casos generales, pues faltando tales requisitos habría una
incertidumbre jurídica; pero en el caso de los traspasos por sucesión, los herederos
necesitan inscribir, además del testamento en su caso, la declaratoria judicial de
herederos y el inmueble que estando inscrito a nombre del causante, habrá que inscribirlo
a favor del o de los herederos. Lo anterior indica que, aun cuando en el traspaso no
aparezcan los nombres de los herederos, éstos complementan su título y su derecho con
la inscripción de la declaratoria de herederos, que se anota marginalmente en la
inscripción del inmueble. Por lo expuesto, la interpretación del Art. 688 Ord. 4° debe de
tener esta connotación de amplitud y no restringida como lo hace la Cámara, resultando
que la interpretación de la disposición aludida es errónea.
Interpretación errónea de los Arts. 692 C., y 18 RRPRH
La Sala expresa que, aunque generalmente aparece en los títulos la orden de "inscríbase"
que autoriza el Registrador, en ninguna disposición, aplicable a este caso, se exige tal
procedimiento, actuación que sí se exige cuando se deniega una inscripción, Art. 693 C. El
Art. 688 C. indica las circunstancias que debe llenar una inscripción para ser tenida como
tal y la señalada y exigida por la Cámara, para tener por jurídicamente establecida la
inscripción, no aparece; como tampoco está contenida en el Art. 18 del Reglamento del
Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, que indica cuales son las actuaciones que el
Registrador autorizará con su firma.
Error de derecho en la apreciación de la prueba, Arts. 258, 260 ords. 1° y 4°, 363 y 370 Pr.
La Sala estima, como ya se ha dejado relacionado, que la prueba documental con la cual
se pretende comprobar el derecho de dominio del inmueble que nos ocupa, de parte de
los herederos del causante Doctor Alfonso Borja Morán, son los idóneos y necesarios para
tal fin y, consecuentemente, deben ser aceptados y valorados como lo indica la ley, es
decir, capaces de probar plenamente los hechos alegados.-
Con respecto a la prueba pericial, se considera que los peritos han actuado correcta y
responsablemente, pues es de estimar que dicho inmueble, desde la fecha en que
adquiere la propiedad el doctor Borja Morán (1952) a la fecha de la inspección (1996) ha
sufrido cambios en su conformación física de linderos y capacidad en atención a los planes
urbanísticos del Gobierno Central que efectivamente han incidido en el inmueble; de allí
que, indagar sobre tales circunstancias en nada desvirtúa el dictamen pericial, sino por el
contrario, lo hacen más verosímil y con mayor grado de responsabilidad de parte de los
peritos, para llevar al Juez mayores datos de ilustración y conseguir la verdad real en el
presente caso. Los razonamientos que aparecen en el dictamen, han sido básicos para que
los peritos puedan cumplir con el Art. 360 Pr. que exige que el dictamen se forme con una
relación motivada. Por todo ello, el tribunal ad-quem debió valorar como plena prueba,
Art. 363 Pr., la prueba pericial presentada en el proceso.-
Respecto a la inspección personal del Juez, la Sala estima que el requisito que la Cámara
exige para tomarla como prueba, no lo exige la ley, pues es de suponer que se determina
el inmueble cuando, en base a direcciones y pruebas del proceso, el Juez y partes
concurren a un determinado inmueble y realizan la diligencia; de lo contrario, cualquiera
de las partes protestará porque la inspección no se efectúa en el inmueble objeto del
litigio.
Interpretación errónea del Art. 7l7 C.
Efectivamente esta Sala considera que el Tribunal sentenciador ha interpretado
erróneamente el Art. 7l7 C. pues, tal como se ha indicado al analizar en el apartado l de
este considerando jurídico, para probar el traspaso de los bienes a favor de los herederos,
hace falta presentar también la inscripción que debe hacerse de la respectiva declaratoria
de herederos; y sostener, como lo dice la Cámara, que en base en el Art. 7l7 C., que el
documento de traspaso inscrito a favor de los herederos no debe tomarse en cuenta
porque hace falta en dicho documento los nombres de tales herederos, es darle a dicha
norma legal un alcance que no tiene, ya que el artículo citado no establece tal exigencia.-
Violación del Art. 7l3 C.
Efectivamente para esta Sala, los documentos ya analizados y con los cuales se ha
comprobado el derecho de dominio por traspaso de los bienes herenciales a favor de los
herederos que nos ocupa, satisfacen los requerimientos de ley y no ocasionan ninguno de
los efectos que contiene la norma legal aquí citada.-
Violación del Art. 422 Pr.
La Sala considera, con lo expuesto hasta hoy, que efectivamente existe dentro del proceso
la prueba necesaria, plena y perfecta, para que la Cámara hubiera podido resolver a favor
de los demandantes; pero ello no ocurrió así, pues desatiende tales pruebas, resuelve
absolviendo a la parte demandada, violando de esta manera el Art. 422 Pr. que expresa:
"Es necesaria la prueba plena y perfecta en todo género de causas para resolver por ella la
cuestión";en consecuencia, al no aplicar esta norma que es la que debería haberse
aplicado, la Cámara incurrió en el motivo específico invocado de violación de ley.
Por todo lo expuesto, la sentencia recurrida debe casarse, por todos los motivos
específicos denunciados y analizados, debiéndose dictar la sentencia que corresponde, de
acuerdo con el Art.l8 de la Ley de Casación.
Cabe indicar que cuando el motivo por el que se casa la sentencia recurrida es de fondo, y
que aún siendo varios los motivos invocados, se casase por uno solo de ellos, el efecto que
produce es anular, (casar) la sentencia impugnada y, en consecuencia, la Sala debe
pronunciar la sentencia que en derecho corresponde.
La Cámara sobre este punto ha sostenido que el documento de traspaso del inmueble
propiedad del Doctor Alfonso Borja Morán a favor de sus herederos no puede apreciarse
como prueba del dominio sobre el inmueble cuya propiedad se atribuyen los
demandantes sucesores del señor Borja Morán; pero por otra parte y de manera expresa
sostiene que: ""no puede decirse lo mismo respecto de la prueba del dominio del
inmueble vendido a Editora El Mundo, S.A. por los herederos del señor Alfonso Borja
Morán, ya que aún cuando no se presentó el documento original del cual se obtuvo la
fotocopia certificada presentada en primera instancia, la parte actora presentó en esta
instancia y agregada de fs. 157 a 167, testimonio de la matriz respectiva al cual le aparece
la razón de inscripción por certificación y se manifiesta claramente que el titular del
dominio es la demandante Editora El Mundo, S.A. De lo dicho resulta claro que la sociedad
antes mencionada es la única que ha probado el primer requisito o presupuesto de
estimación de la pretensión", requisito que según la misma Cámara es, de que los
demandantes sean dueños de un determinado inmueble.-
La segunda cuestión a dilucidar es si el inmueble propiedad de los demandantes es el
mismo que ha titulado el señor Ricardo Meléndez Quintanilla. Efectivamente se
comprueba lo anterior, con las pruebas siguientes:
Prueba pericial: Los peritos nombrados para practicar inspección en el inmueble objeto
del litigio, esto es, el ubicado en la Quince Avenida Norte y Diagonal Universitaria de esta
ciudad, con la finalidad de que manifiesten si efectivamente este inmueble que pretenden
como suyo los herederos del doctor Alfonso Borja Morán es el mismo que el titulado por
el señor Ricardo Meléndez Quintanilla, fueron los señores Ingeniero Ronald Wilfredo Ruíz
Hernández y Técnico en Ingeniería Civil Carlos Alfonso Cubías Trinidad, quienes dieron su
dictamen a los veintiocho días del mes de agosto de mil novecientos noventa y seis, que
expresa y literalmente dice: """ Nosotros: RONALD WILFREDO RUIZ HERNANDEZ y CARLOS
ARTURO CUBIAS TRINIDAD, ambos nombrados peritos para practicar inspección en el
inmueble situado en la Quince Avenida Norte y Diagonal Universitaria de esta Ciudad, al
respecto le manifestamos que: De acuerdo a los documentos proporcionados por su
persona el día de la inspección, el primero correspondiente a un Título Municipal inscrito a
favor del señor RICARDO MELENDEZ QUINTANILLA, bajo Matrícula de Folio Número Cero-
Uno-Noventa y Seis Mil Cuatrocientos Veintinueve del Registro de la Propiedad de este
departamento. El segundo, correspondiente a un inmueble ubicado, según lo dice el
mismo, en el sitio denominado Los Potreros en el Barrio San José, hoy San Miguelito,
inscrito al Número Treinta y Seis del Libro Tres Mil Novecientos Sesenta y Tres a favor del
Doctor ALFONSO BORJA MORAN.
Este peritaje está basado en documentos presentados en el proceso, como son: el título
municipal extendido a favor del señor Ricardo Meléndez Quintanilla; la escritura de
propiedad a favor del Doctor Alfonso Borja Morán, y la escritura de compraventa otorgada
a favor de Editora El Mundo, S.A., detallándose en esta última, con medidas técnicas,
cuales son las ventas que se realizaron a favor del Estado de El Salvador para derechos de
vías; cual la porción que se desmembra y vende a Editora El Mundo, S.A. y las porciones
que quedan a favor de los herederos del Doctor Borja Morán.
Por todo lo anterior, la Sala considera que el peritaje efectuado cumple con los requisitos
que exigen los Arts. 360 y 363 Pr., pues informa suficientemente al juzgador sobre la
identidad de los inmuebles, ya que está debidamente motivada la conclusión de su
peritaje, "" de que ambos documentos proporcionado corresponden al terreno
inspeccionado". En consecuencia, constituye este peritaje prueba plena para decidir la
cuestión que nos ocupa.
PORQUÉ SE CASO LA SENTENCIA
POR TANTO:
Después de todo lo dicho en base a la disposiciones citadas y. 417, 418, 428, 432 y 1060
Pr.; 712, 714 y 732 C.; y 18 de la Ley de Casación. la sala caso la sentencia y se pronunció
legal, declaro sin lugar las excepciones de ineptitud de la demanda y de prescripción
adquisitiva de dominio opuestas por los demandados, declaro nulo de nulidad absoluta el
título de propiedad extendido por la alcaldía municipal a favor del señor Meléndez
Quintanilla y en razón a esto se canceló la inscripción del título de propiedad anulado,
además por vía de consecuencia por haberse declarado la nulidad del título de propiedad
y la cancelación de su inscripción de donde se derivaron posteriores traspasos y
gravámenes también se ordenó la cancelación de las inscripciones a favor de las personas
demandadas.
Se canceló la anotación preventiva de la demanda hecha en las inscripciones de los
demandados y condenar en costas a los demandados en primera y segunda instancia.
Devolviendo así el expediente al tribunal de origen con la certificación de esta resolución y
extendiéndose la ejecutoria ley.
Número de Referencia: 1074-2000
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Tipo de Resolución: Sentencias Definitivas
Fecha de Resolución: 23/06/200
Hora de Resolución: 10:23:00
PRETENSIÓN: Nulidad De Instrumentos.
CAUSA PETENDI:
El motivo de pedir la nulidad de instrumentos es porque la sociedad FOX S.A de S.V
adquirió unos inmuebles vendidos por el señor Echeverría Mancía este señor había
adquirido los inmuebles de la sociedad POMPANO S.A de S.V. la cual había efectuado la
tradición y dominio de cada uno de los inmuebles recibiendo a cambio esta sociedad el
precio convenido por los mismos. Pero resulto que 17 días después de hecha la venta de
los inmuebles por la sociedad el POMPANO esta sociedad aparece vendiendo de nuevo los
mismos inmuebles a la señora Rebeca Elizabeth Delgado Castillo de Guirola y a la menor
hija legítima de ésta, Florence Elizabeth Guirola Delgado. Es por este motivo que se está
pidiendo la nulidad de instrumentos otorgados a las señoras antes mencionadas
El fallo de Primera Instancia dice así: "POR TANTO: de acuerdo a lo antes expuesto y a las
disposiciones legales antes citadas y Arts. 421, 422, 427 y 439 Pr. a nombre de la
República, FALLO: a) DECLARASE que las fechas de otorgamiento de las ventas y
tradiciones consignadas en las escrituras números TREINTA, TREINTA Y UNO Y TREINTA Y
DOS del Libro DECIMO de Protocolo del notario Roberto Antonio Flores Granados,
otorgadas por "POMPANO, SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE", a favor de la
señora REBECA ELIZABETH DELGADO CASTILLO DE GUIROLA en su carácter personal y
como representante de su menor hija FLORENCE ELIZABETH GUIROLA DELGADO, han sido
alteradas después del día diecisiete de diciembre de mil novecientos noventa, fecha en la
cual se extendieron bajo el sistema de fotocopias los primeros testimonios de las mismas
sin alteración alguna, consistiendo aquella alteración en consignar como fecha de
otorgamiento, el día veintinueve de tal mes y año, cuando realmente fueron otorgadas el
día catorce de ese mismo mes y año; b) DECLARASE sin lugar la ineptitud de la demanda
pedida por la parte demandada; c) DECLARASE: sin lugar la nulidad de las compraventas y
tradiciones de los inmuebles descritos en las escrituras números TREINTA, TREINTA Y UNO
Y TREINTA Y DOS del Libro DECIMO de Protocolo del Notario Roberto Antonio Flores
Granados, relacionadas en el literal "a" de este fallo; d) DECLARASE: sin lugar la
cancelación de la inscripción número CUARENTA del Libro UN MIL QUINIENTOS SETENTA Y
SEIS de la Propiedad del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Cuarta Sección del
Centro, relativa a la venta y tradición del inmueble relacionada en la Escritura número
treinta y uno del Libro Décimo de Protocolo del Notario Roberto Antonio Flores Granados;
y d) DECLARASE: sin lugar la restitución de los inmuebles relacionados en la demanda y en
el literal "a" del fallo de esta sentencia. No hay costas, por haber sucumbido la parte
demandante en todos los puntos de su demanda, y la parte demandada en lo que
concierne a la ineptitud de la demanda.
El fallo de Segunda Instancia expresa: "POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas,
doctrinas y disposiciones legales citadas y Arts. 1089 y 1091 Pr. a nombre de la República
de El Salvador, DIJERON: Reformase la sentencia venida en apelación en el literal a) de
dicho fallo en el sentido: 1°) Declárese la falta de legitimidad por carecer de fecha cierta
de los siguientes testimonios de escrituras de compraventa y tradición; a) número treinta
otorgada en San Salvador a las nueve horas del día veintinueve de diciembre de mil
novecientos noventa, ante los oficios notariales del doctor Roberto Antonio Flores
Granados, por la Sociedad Pompano, S.A. de C.V., representada en esa época por el señor
Carlos Alberto Guirola Klein, a favor de la señora Rebeca Elizabeth Delgado Castillo de
Guirola y menor Florence Elizabeth Guirola Delgado; b) número treinta y uno, otorgada en
San Salvador, a las once horas del día veintinueve de diciembre de mil novecientos
noventa, ante el mismo notario y los mismos otorgantes; y c) número treinta y dos,
otorgada en esta ciudad a las quince horas del día veintinueve de diciembre de mil
novecientos noventa ante el mismo notario y las mismas partes comparecientes; 2°)
confirmase el fallo en cuanto se absuelve a la Sociedad Pompano, S.A de C. V.,
representada por el señor Jorge Enrique Guirola Meardi, a la señora Rebeca Elizabeth
Delgado Castillo de Guirola y menor Florence Elizabeth Guirola Delgado, de la demanda de
nulidad de los contratos de compraventa y tradición relacionados anteriormente
interpuesta en su contra por la Sociedad "FOX, Sociedad Anónima de Capital Variable,
representada por el señor Carlos Alberto Santamaría; 3°) cancélese la anotación
preventiva inscrita en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Cuarta Sección del
Centro, con sede en Nueva San Salvador, número cuarenta y dos Libro mil seiscientos
treinta y ocho de Propiedad del Departamento de La Libertad; y 4°) condenase a la parte
apelante en las costas procesales.--- Vuelva la pieza principal al Juzgado de origen con
certificación de Ley."
El recurso de casación se interpuso por los siguientes motivos:
i- motivos de fondo: 1.1. Causa genérica: infracción de ley (arts. 2 a) de la ley de casación)
1.2 motivos específicos: 1.2.1. Fallo incongruente con las pretensiones deducidas por los
litigantes, en cuanto no hace declaración respecto de algunos extremos. (Art. 3 n° 4° de la
ley de casación) (arts. 421 y 428 pr.) 1.3. Preceptos infringidos y concepto en que los
mismos se han infringido: 1.3.1. La infracción de los arts. 421 y 428 pr.---- las disposiciones
que se citan como infringidas por vuestro fallo, honorable cámara, son aquéllas que le
indican al juzgador la manera en como habrá de resolver los casos sometidos a su
conocimiento, al momento de pronunciar su decisión final. El primero de los artículos
mencionados--- el 421--- claramente establece que éstas recaerán sobre las cosas litigadas
y en la manera en que han sido disputadas, sabida que sea la verdad por las pruebas del
mismo proceso..."""el otro artículo --- 428--- prescribe, en su parte final; y referida
específicamente a la segunda instancia que contendrán la confirmación, reforma,
revocación o nulidad y lo demás dispositivo que corresponda en derecho.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
ANÁLISIS DE ARTÍCULO Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia queda casada por el siguiente análisis:
Esta Sala considera lo siguiente: por una parte, la sociedad actora demandó: a) que se
declare la nulidad absoluta de tres contratos de venta y tradición a que se refiere en la
misma demanda; b) como consecuencia de la nulidad, que se ordene la cancelación de la
inscripción número cuarenta del libro un mil quinientos setenta y seis del registro de la
propiedad de la cuarta sección del centro, así como el asiento de presentación número
dos mil setecientos noventa y dos del tomo seiscientos noventa del diario de
presentaciones de esta sección registral y c) que se ordene a las demandadas que
entreguen a la sociedad actora los seis inmuebles que están poseyendo, además de los
frutos y demás accesorios, en los términos consignados en los arts. 909 y 1557 c.
El juez en su fallo resolvió todas las peticiones de las partes, excepto una: la cancelación
del asiento de presentación número dos mil setecientos noventa y dos del tomo
seiscientos noventa del diario de presentaciones de esta sección registral, es decir, de la
primera sección de centro. la cámara de segunda instancia al sentenciar, reformó
parcialmente el fallo del juez inferior y lo confirmó en su mayoría así: a) reformó sólo el
literal a) del fallo en el sentido de que declaró la falta de legitimidad no de las escrituras
sino sólo de los testimonios, dejando sin resolver lo relativo a las escrituras matrices; b)
confirmó el fallo del juez, en cuanto absuelve a las demandadas de la demanda de nulidad
de los contratos de venta y tradición relacionados, y ordenó cancelar la anotación
preventiva de la demanda inscrita al número cuarenta y dos del libro un mil seiscientos
treinta y ocho del registro de la propiedad del departamento de la libertad. Con la prueba
pericial que aparece en autos han quedado evidenciadas las alteraciones hechas al
Protocolo del Notario Roberto Antonio Flores Granados, de las escrituras números treinta,
treinta y uno y treinta y dos, sobre todo a fs. 163 En donde hay un acercamiento del texto
que se lee "veintinueve" y debajo de tal palabra se alcanzan a ver claramente las palabras
"día catorce" que fueron borradas parcialmente, con lo cual no hay lugar a dudar que la
fecha de otorgamiento de tales escrituras fue el día catorce de diciembre de mil
novecientos noventa, prueba que aunada a los tres testimonios presentados a que se ha
hecho alusión en el párrafo anterior, los cuales están agregados al proceso de fs. 108 v. a
114, hacen plena prueba, doblemente, de la fecha de otorgamiento y de la existencia de la
alteración
Con la prueba pericial e instrumental vertida en el proceso no se ha demostrado la nulidad
de las escrituras de venta y tradición por falta de consentimiento, como se pide en la
demanda; al contrario, se ha comprobado, por un lado, la existencia de la alteración
material de las mismas, hecha con posterioridad a su otorgamiento, y por otro, la
existencia válida y perfecta de las ventas y tradiciones consignadas en ellas; por lo que
necesariamente se ha de concluir que los tres instrumentos de venta y tradición
conservan la plenitud de su existencia y validez y que la falsedad material cometida con
posterioridad al otorgamiento sólo ha perjudicado un elemento de la escritura, el cual es
su fecha y a tenor del Art. 33 de la Ley de Notariado no invalida al instrumento porque hay
evidencia de haber sido suscrito por los otorgantes y autorizado por el Notario, de
conformidad con la citada Ley.
Esta Sala considero que la Cámara violó los Arts. 421 y 428 Pr., por lo que ha lugar a casar
la sentencia, pronunciando la correcta.
PORQUÉ SE CASO LA SENTENCIA
Por las razones expuestas, disposiciones legales citadas y arts. 417, 418, 428,432 y 1060
pr. y 18 de la ley de casación, esta sala fallo: a) casase la sentencia definitiva de que se ha
hecho mérito; b) declarase sin lugar la ineptitud de la demanda pedida por la parte
demandada; c) declarase que las fechas de otorgamiento de las ventas y tradiciones
consignadas en las escrituras números treinta, treinta y uno y treinta y dos del libro
decimo de protocolo del notario Roberto Antonio flores granados, otorgadas por
"pompano, sociedad anónima de capital variable" a favor de la señora rebeca Elizabeth
delgado castillo de Guirola en su carácter personal y como representante de su menor hija
Florence Elizabeth Guirola delgado han sido alteradas después del día diecisiete de
diciembre de mil novecientos noventa, fecha en la cual se extendieron bajo el sistema de
fotocopias los primeros testimonios de las mismas, sin alteración alguna, consistiendo
aquella alteración en consignar como fecha de otorgamiento el día veintinueve de tales
mes y año, y declarase como fecha verdadera de su otorgamiento el día catorce de
diciembre de mil novecientos noventa; d) absuélvase a la sociedad "pompano, s.a. de
c.v.", a la señora rebeca Elizabeth delgado castillo de Guirola y a la menor Florence
Elizabeth Guirola delgado, de la demanda de nulidad absoluta incoada por la sociedad fox,
s. a. de c. v. , de los contratos de venta y tradición a que se refiere la demanda o sean las
escrituras números treinta, treinta y uno y treinta y dos del libro decimo de protocolo del
notario Roberto Antonio flores granados, a que se refiere la letra c) de este fallo; e)
cancélese la anotación preventiva de la demanda inscrita al número cuarenta y dos del
libro un mil seiscientos treinta y ocho del registro de la propiedad del departamento de la
libertad, para lo cual deberá librarse el oficio correspondiente; f) declarase sin lugar la
cancelación de la inscripción número cuarenta del libro un mil quinientos setenta y seis
del registro de la propiedad del departamento de la libertad, relativa a la venta y tradición
del inmueble relacionado en la escritura número treinta y uno del libro décimo de
protocolo del notario Roberto Antonio flores granados; g) como consecuencia de lo
anterior, rectifíquese la inscripción registral mencionada en la letra f) de este fallo, en el
sentido de que la fecha verdadera de otorgamiento de la escritura de venta y tradición del
inmueble que ampara, es el catorce de diciembre de mil novecientos noventa y no el
veintinueve de los mismos mes y año; para tal efecto deberá librarse oficio al registrador
de la propiedad raíz e hipotecas de la cuarta sección del centro, a fin de que dé
cumplimiento a este fallo, h) ordenase al registrador de la propiedad raíz respectivo para
que, al momento de mandar a inscribir los Testimonios de las escrituras de venta y
tradición de dominio números treinta y treinta y dos, del protocolo décimo del notario
Roberto Antonio flores granados, lo haga con la fecha verdadera de su otorgamiento, esto
es, el día catorce de diciembre de mil novecientos noventa, tal como se deja declarado en
la letra c) de este fallo; i) declarase sin lugar la restitución de los inmuebles relacionados
en la demanda y que están amparados en las escrituras relacionadas en la letra c) de este
fallo, y j) no hay condenación en costas.-
Devuélvase el proceso al tribunal de origen con la certificación de ley, para los efectos
consiguientes. Expídase la ejecutoria correspondiente.
Número de Referencia: 104-2000
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Tipo de Resolución: Sentencias Definitivas
Fecha de Resolución: 30/06/2000
Hora de Resolución: 09:00:00
PRETENSIÓN: De Nulidad De Titulo Supletorio, Cancelación De Inscripción Y
Reivindicatorio
CAUSA PETENDI:
En el presente caso los señores Evaristo de Jesús Fátima Amaya, conocido por Evaristo de
Jesús Fátima Amaya Ponce y Oscar Rubelindo Amaya conocido por Oscar Rubelindo
Amaya Ponce, por medio de su Apoderado Judicial Edgar Ladislao Rosales Cornejo han
demandado al señor Eduardo de Jesús Mejía Vargas, en proceso ordinario de nulidad de
título de dominio Municipal de un inmueble formado por dos porciones ubicados en el
Barrio El Calvario de la ciudad de Sensuntepeque, demandando además la cancelación de
la inscripción correspondiente y la reivindicación de dicho inmueble
En Primera Instancia, la sentencia fue favorable a los demandados, ya que dichas acciones
fueron declaradas sin lugar, por no haberse probado los extremos de la demanda y de no
existir ley que prevenga expresamente que las infracciones señaladas por la parte actora,
sean causales de Nulidad del título de dominio Municipal que las contiene, habiéndose
absuelto al señor Mejía Vargas. La sentencia de Segunda Instancia revocó la de primera,
declaró nulo el título extendido a favor del demandado Eduardo de Jesús Mejía Vargas,
habiéndose ordenado librar Oficio al señor Registrador de la Propiedad Raíz e Hipotecas
de la Segunda Sección del Centro en San Vicente, para que cancelara el asiento N° 73 del
libro 299 de Propiedad de Cabañas, así como la anotación preventiva de la demanda,
condenando a la parte demandada a que restituya a la parte demandante, el inmueble
objeto del presente juicio.
El fallo de Primera Instancia dice:""POR TANTO: De acuerdo a las consideraciones
relacionadas y fundándose en los Arts. 240, 417, 421, 422, 427, 429, 434, 439 y 1115 y
siguientes Pr. C., a nombre de la República de El Salvador, FALLO: Declárese sin lugar las
acciones intentadas por los señores Evaristo de Jesús Fátima Amaya, conocido por
Evaristo de Jesús Fátima Amaya Ponce y Oscar Rubelindo Amaya, conocido por Oscar
Rubelindo Amaya Ponce, por medio de su apoderada general judicial, licenciada Ana
Cristina González de Rodríguez, en contra del señor Eduardo de Jesús Mejía Vargas, en
vista de no haber probado los extremos de su demanda y de no existir ley que prevenga
expresamente que las infracciones señaladas por la parte actora, sean causales de nulidad
del título de dominio municipal que las contiene; en consecuencia ABSUELVESE al señor
Eduardo de Jesús Mejía Vargas de las acciones incoadas contra él. Al quedar ejecutoriada
esta sentencia, líbrese oficio al señor Registrador del Registro de la Propiedad, Raíz e
Hipotecas de la Segunda Sección del Centro, a fin de que cancele la anotación preventiva
ordenada por auto de folios veintitrés frentes del presente juicio. Condenase a la parte
actora al pago de las costas procesales. HAGASE SABER."""
En Segunda Instancia se pronunció el fallo que literalmente dice:""POR TANTO: De
acuerdo a las disposiciones legales citadas, a las consideraciones relacionadas y
fundándose en los Arts. 417, 421, 422, 428, 429, 439, 1026, 1077, 1089 y 1092 todos del
Pr. C., a nombre de la República de El Salvador este Tribunal FALLA: 1) Revocase en todas
sus partes la Sentencia Definitiva pronunciada por el Señor Juez de Primera Instancia del
Distrito Judicial de Sensuntepeque, a las quince horas del día ocho de Enero de mil
novecientos noventa y siete, en el Juicio Civil Ordinario de Nulidad de Título de Dominio
Municipal, promovido por el Licenciado Edgar Ladislao Rosales Cornejo, en calidad de
Apoderado General Judicial de los Señores Evaristo de Jesús Fátima Amaya conocido por
Evaristo de Jesús Fátima Amaya Ponce y Oscar Rubelindo Amaya conocido por Oscar
Rubelindo Amaya Ponce, y continuado en la misma calidad por la Licenciada Ana Cristina
González de Rodríguez contra el Señor Eduardo de Jesús Mejía Vargas, representado
judicialmente, primero por el Doctor Rubén Alfonso Valenzuela Hernández y
posteriormente por el Doctor Roberto Lara; 2) Declárese nulo el Título extendido a favor
del demandado Señor Eduardo de Jesús Mejía Vargas, a que se refiere esta litis; 3) Líbrese
oficio al Señor Registrador de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Segunda Sección del
Centro en San Vicente, para que cancele el Asiento N° 73, fs. 359 al 365 del Libro 299 de
Propiedad de Cabañas, así como la anotación preventiva de la demanda; 4) Condenase a
la parte demandada a que restituya a la parte demandante el inmueble objeto del
presente juicio y 5) Condenase también a la parte demandada a pagar las costas
procesales.
El recurso de casación se interpuso por el siguiente motivo: error de derecho en la
apreciación de la prueba; el precepto que se consideró infringido es el art. 276 PrC. el
otro motivo es la interpretación errónea de la ley art. 1 ley de sobre títulos de predios
urbanos.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
ANÁLISIS DE ARTÍCULO Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia no quedo casada por el siguiente análisis:
El impetrante impugna la Sentencia por un motivo genérico y primeramente por el motivo
específico de error de derecho en la apreciación de la prueba. Sostiene el impetrante en
cuanto a este primer motivo, que considera vulnerado el Art. 276 del Código de
Procedimientos Civiles ya que de fs. 6 A 8 y de 10 a 12, de la pieza principal, aparecen
agregadas, dos fotocopias certificadas de inscripción de inmuebles, extendidas por el
Registrador de la Propiedad e Hipotecas de la Segunda Sección del Centro y que estos
documentos, por ciertas características que presentan suelen confundirse con los
instrumentos públicos extendidos por Notario y que el intérprete que no está atento
puede darles valor probatorio cuando en realidad no lo tienen. Y continua sosteniendo
que tales documentos podrían tener valor probatorio pero para que ello ocurra es
necesario que se den ciertos requisitos, tales como: que se compruebe la pérdida casual
del protocolo, que se compruebe la pérdida de la escritura original y que no exista ningún
testimonio legalizado y que si eso no se comprueba, tales copias indefectiblemente no
hacen fe, que es lo que pasa en el caso de autos, y que por ello el Tribunal Ad-quem, ha
infringido el Art. 276 Pr. ya que ha tenido por establecido con dichas copias certificadas
que Don Salvador Amaya o Salvador Amaya Ávila, tenía inscritos a su favor los inmuebles
objeto de este litigio y que por su fallecimiento y consecuente aceptación de su herencia
por la parte actora, sean estos los dueños de dichos inmuebles, lo cual arguye no es cierto
y que la parte actora para comprobar su dominio, debió presentar, testimonios de
escrituras públicas, o sea copias sacadas de la escritura matriz ó fotocopias certificadas de
los testimonios expresados, los cuales si hacen fe; que por lo anterior se ha cometido por
la Cámara sentenciadora error de derecho en la apreciación de la prueba instrumental,
por haberle dado valor probatorio a esas fotocopias certificadas, que no tienen,
teniéndose por probado el dominio de la parte actora, cuando legalmente no lo está,
siendo necesario probar tal circunstancia para comprobarse el interés jurídico.
El segundo motivo usado por el recurrente, es el de interpretación errónea de ley, siendo
el precepto infringido el Art. 1° de la Ley de Titulación de Predios Urbanos, el cual a la letra
dice: "Art. 1° Todo poseedor de inmuebles o predios urbanos situados en poblaciones de
la República y que según las Leyes comunes sea poseedor de buena fe y carezca de Título
de Dominio, solicitará por escrito, en papel común al Alcalde del lugar donde estuviere
situado el inmueble o ante Notario, se le extienda Título de Propiedad, no pudiendo
extendérsele Título Supletorio."
El impetrante considera que el texto de dicho artículo es claro debiendo interpretarse
según su tenor literal, y de ello concluye que los interesados en titular un inmueble
urbano en cualquier población de la República, pueden pedir la expedición de un título
ante los Alcaldes o ante los Notarios, debiendo seguir ante ellos, los trámites
correspondientes; considera que la Cámara sentenciadora ha hecho uso de la norma
correcta pero al interpretarla, su sentido ha sido restringido, pues afirma que al incorporar
la ley al Notario en dicho artículo, cuando se reformó el mismo, no se estaba facultando a
tales Notarios a expedir títulos Municipales a que dicha ley se refiere, ya que ellos solo
podrían extender títulos Municipales de inmuebles urbanos, cuyas inscripciones deberían
efectuarse en la Unidad del Registro Social de Inmuebles del Registro Inmobiliario, que
estén comprendidos dentro de los proyectos de interés social. Continua el impetrante
manifestando, que la Cámara dijo que el Notario no actuó de conformidad con la ley, por
extralimitarse en sus funciones, por no estar autorizado para llevar a cabo dichos actos
jurídicos, como el que el Notario había realizado, y por ello, el requisito (sic) de que
adolece el título expedido a favor del titulante demandado, es la falta de capacidad de la
persona que lo autoriza, por lo que el título expedido es legalmente inexistente y que por
ello la Cámara ha infringido la norma que dice "Cuando el sentido de la ley es claro, no se
desentenderá ser tenor literal a pretexto de consultar su espíritu". Finaliza el impetrante
considerando que dicha interpretación no se deduce del texto de la ley, ni de los
considerandos que sirven de base a la reforma del artículo 1° en la que se incluyó a los
Notarios para que expidieran títulos urbanos; consideró además que si el artículo 16 A de
la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de otras Diligencias ya establecía
que los Notarios podían extender títulos de predios urbanos, que estén comprendidos en
proyectos de interés Social, con las modificaciones que dicha ley expresaba, los Notarios
podían hacer tal cosa sin necesidad de reformar la ley de titulación de predios urbanos,
concluyendo que no era lógico ni tenía sentido reformar la Ley sobre Títulos de Predios
Urbanos, ya que no era necesario hacerlo y por ello si la reforma se hizo fue para que el
Notario pudiera extender ambas clases de títulos, fundamentándose en las dos leyes
relacionadas.
Porqué se Casó la Sentencia
POR TANTO: Como base en las razones expuestas, disposiciones legales citadas y los
artículos 417, 418 y 428 Pr. y 23 de la Ley de Casación, la Sala falla: a) Declarase que no ha
lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito; b) Condenase a la parte recurrente
señor Eduardo de Jesús Mejía Vargas, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar y a las
costas del recurso, al abogado Roberto Lara, como firmante del escrito; y, c) Vuelvan los
autos al Tribunal de origen con certificación de esta sentencia, para los efectos de ley.
Número de Referencia: 1129-2000
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Tipo de Resolución: Sentencias Definitivas
Fecha de Resolución: 28/08/2000
Hora de Resolución: 10:07:00
PRETENSIÓN: Hecho De Nulidad
CAUSA PETENDI:
Es porque el señor Talles Mata vendió un inmueble a la sociedad SERVICIO AGRICOLA
SALVADOREÑO, S.A dicho señor era fiador y codeudor solidario y nunca pensó que el
deudor principal nunca pagaría la deuda y que por lo tanto embargarían el inmueble
vendido a la sociedad SERVICIO AGRICOLA SALVADOREÑO, S.A y por ende hay un objeto
ilícito en la enajenación pues el inmueble poseía una embargo judicial mucho antes de
haber sido anotado en la propiedad del registro de la propiedad. El motivo de presentar el
recurso fue por interpretación errónea de la ley.
El fallo de Primera Instancia dice: ""POR TANTO: con base en los considerandos anteriores
y en los artículos 717 Inc. segundo, 731, 732 ordinal cuarto C.C., 41 de la Ley de
Reestructuración del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, 237, 417, 421, 422, 427, y
439 y 521 y siguientes Pr. C., a nombre de la República de El Salvador, FALLO: a)
DECLARASE sin lugar la ineptitud de la demanda alegada por el Licenciado GUILLERMO
ANTONIO PRADO PINEL, b) Declárese NULA la inscripción número SESENTA Y NUEVE del
Libro CUATRO MIL CINCUENTA Y CUATRO, de Propiedad de este Departamento e inscrita
por traspaso a favor de los señores CELIA MARIA TELLES RAUDA o CELIA MARIA TELLES
HOY DE BRITO, ARMANDA JUANA TELLES RAUDA HOY DE SMITH, ERNESTO TELLES RAUDA,
RAUL ANTONIO TELLES RAUDA, NORMA TELLES RAUDA, JAIME RAFAEL TELLES RAUDA,
JUAN JOSE TELLES y LIGIA RAQUEL TELLES RAUDA.- Líbrese oficio al señor Registrador de
la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Primera Sección del Centro a fin de que cancele la
inscripción número SESENTA Y NUEVE del Libro CUATRO MIL CINCUENTA Y CUATRO; y
oportunamente levántese la Anotación Preventiva de la demanda anotada bajo el número
CUATRO del Libro DOSCIENTOS CUARENTA de Anotaciones Preventivas debiendo librar
para tal efecto el oficio pertinente. CONDENASE a los demandados al pago de las costas
procesales correspondientes a esta instancia.- HAGASE SABER.
El fallo de Segunda Instancia expresa: ""POR TANTO: en base a las razones expuestas,
disposiciones legales citadas y Arts. 1089 y 1090 Pr. C., esta Cámara a nombre de la
República FALLA: Confirmase la sentencia emitida por la Juez Cuarto de lo Civil de este
Distrito Judicial a las nueve horas del día quince de abril del presente año. Condenase a la
parte apelante al pago de las costas surgidas en esta instancia.---Oportunamente
remítanse los autos al Tribunal de origen, con la Certificación de Ley respectiva.
El recurso de casación se interpuso por los siguientes motivos:
Con fundamento en el artículo tres de la ley de casación. Causa genérica: infracción de ley,
causa específica: a) interpretación errónea de la ley, (art. 3 n° 2° l. casación), es decir, por
basarse el fallo impugnado en interpretación errónea de ley. b) violación de ley (art. 3 n°
1° l. de casación). Conceptos infringidos: a) en cuanto a interpretación errónea de ley,
artículos 1416 c, 1438c, 1349c, y 1335 n° 3 c.---b) en cuanto a la violación de ley, artículos
1552 y 1553c. Conceptos de las infracciones.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
Conceptos
Interpretación errónea:
Consiste en darle a la norma un sentido distinto del que legalmente tiene, o una
interpretación equivocada, desatendiendo su tenor literal y los demás elementos de
interpretación, tergiversando los efectos jurídicos de la misma.
ANÁLISIS DE ARTÍCULO Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia no queda casada por el siguiente análisis:
En cuanto a la interpretación del Art. 1416 del Código Civil, por parte de la Cámara se dijo:
que en dicha disposición se regula la llamada resciliación; que dicha forma de extinguir las
obligaciones opera cuando nos encontramos ante la presencia de un contrato no
cumplido; que la compraventa entre el señor José Ernesto Telles Mata y Servicio Agrícola
Salvadoreño, S.A. de C.V., se perfeccionó el mismo día de su otorgamiento; en
consecuencia la resciliación que se pactó en el convenio, es antijurídica y no existe, no
opera, no tiene ninguna validez jurídica.
La Sala considera que la Cámara interpreta con suficiente corrección el Art. 1416 C., pues
efectivamente se refiere al caso de los contratos, cuyos efectos aún están pendientes de
cumplirse y que por lo tanto, pueden las partes hacer cesar su cumplimiento, por un
nuevo convenio en el cual estipulen darlo por terminado; esto quiere decir que puede
darse la resciliación a condición de que el contrato no se haya ejecutado. Este modo de
extinguir los contratos, también llamado disenso mutuo, opera sólo, como ya se dijo,
cuando no se han cumplido las obligaciones, pues lo contrario sería un pago que es otro
modo distinto de extinción de obligaciones.
La Cámara no ha interpretado erróneamente el Art. 1349 y no procede casar la sentencia
por ese motivo. Por lo que atañe a la interpretación errónea del Art. 1335 Ord. 3° C., la
Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, expuso: "para que exista
objeto ilícito, la anotación del embargo debe ser anterior a la celebración del contrato de
compraventa entre los contrayentes y no posterior; y en el presente caso la compraventa
se perfeccionó ante la ley, al hacerla constar en escritura pública, la cual se otorgó a las
diez horas del día seis de noviembre de mil novecientos ochenta y uno; y el mandamiento
de embargo fue presentado al Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas el trece de
septiembre de mil novecientos ochenta y dos. El hecho que esta escritura haya sido
presentada al Registro de la Propiedad posteriormente a la presentación e inscripción del
embargo recaído sobre el bien inmueble vendido, no constituye, bajo ningún punto de
vista, objeto ilícito en la venta"
Se afirma que sí hubo objeto ilícito en la enajenación del inmueble a favor de Servicio
Agrícola Salvadoreño, S.A. de C.V., debido a que el inmueble ya estaba embargado por
decreto judicial y el embargo había sido anotado mucho antes de que el Registro de la
Propiedad tuviera noticia de la enajenación, es decir, mucho antes de la presentación al
registro de la escritura de enajenación.
La Sala estima que la Cámara ad-quem, ha interpretado el artículo 1335 Ord. 3° C. en
forma correcta, pues el tenor literal ha sido entendido en su sentido natural y obvio. La
hipótesis normativa que dicho precepto contiene, es clara; en su redacción no aparecen
mayores dificultades para su inteligencia, por lo que es poco probable que sea
interpretada erróneamente.
La explicación que da el abogado recurrente acerca de cómo debe entenderse la norma,
no es la correcta. En efecto: la ley dispone que hay objeto ilícito en la enajenación de las
cosas embargadas por decreto judicial, salvó que preceda autorización judicial o el
consentimiento de las partes; pero aún en tales casos no podrá alegarse lo ilícito del
objeto contra terceros de buena fe, si el embargo no se hubiera anotado con anterioridad.
El licenciado afirma que los Magistrados de la Cámara le dieron un significado diferente
del que lógicamente tiene el Art. 1335 inc. 3 C., cometiendo interpretación errónea del
mismo. Dice él que la disposición citada establece que el embargo debe anotarse con
anterioridad a la enajenación cuando se trata de terceros de buena fe, pero no cuando
esos terceros no existan, y la Cámara ha aceptado que los herederos del señor Talles
Mata, no son, terceros; muy a pesar de esa aceptación, la Cámara dice el licenciado Prado
Pinel, interpreta erróneamente el artículo indicado, pues manifiesta que no hay objeto
ilícito en las enajenaciones tantas veces señalada.
En el caso de mérito, la Cámara de Segunda Instancia ha hecho un relato exacto de los
tiempos en que se han dado los distintos actos jurídicos que, según el recurrente, encajan
en el tipo legal contenido en el Ord. 3° del Art. 1335 C. El inmueble se enajenó el día seis
de noviembre de mil novecientos ochenta y uno, a esa fecha no había recaído embargo
sobre el bien enajenado y el mismo se encontraba libre de gravamen. En efecto, el
embargo fue presentado al Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas el trece de
septiembre de mil novecientos ochenta y dos. En consecuencia, no se dio en los hechos lo
que la norma indica como presupuesto para que haya objeto ilícito. De lo dicho se
concluye que el Art. 1335 Ord. 3° no ha sido interpretado erróneamente. Si la escritura
pública que contiene la compraventa, no puede inscribirse por haber en el Registro de la
Propiedad una anotación preventiva que lo impide, ello no quiere decir que hubo objeto
ilícito en la enajenación, puesto que el embargo se inscribió como ya se dijo, el trece de
septiembre de mil novecientos ochenta y dos, fecha posterior al acto de enajenación del
inmueble; así pues, no se dio el vicio que podría acarrear la nulidad de la venta, y no
procede casar la sentencia por este motivo.
Por las razones expresadas la sentencia recurrida está arreglada a derecho y no es
procedente casarla por el motivo de interpretación errónea invocado, lo que así debe
declararse, con las consecuencias legales.
PORQUÉ SE CASO LA SENTENCIA
POR TANTO: De acuerdo a las razones dichas y Arts. 428 y 432 del Código de
Procedimientos Civiles y 23 de la Ley de Casación falla: a) No ha lugar a casar la sentencia
de que se ha hecho mérito; b) Condenase a los recurrentes : Celia María Talles Rauda,
conocida por Celia María Talles de Brito, Armanda Talles Rauda de Smith, Raúl Antonio
Talles Rauda, Jaime Rafael Talles Rauda, Norma Talles Rauda, Rafael Talles Rauda, Ernesto
Talles Rauda, Juan José Talles Rauda y Ligia Raquel Talles Rauda, en los daños y perjuicios
a que hubiere lugar; c) Condenase al Licenciado Guillermo Antonio Prado Pinel, en costas,
como abogado que firmó el escrito de interposición del recurso: y d) Devuélvanse los
autos al Tribunal de origen, con la certificación correspondiente, para los fines de ley.
RESOLUCI ÓN
Número de Referencia: 1195-2000
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Tipo de Resolución: Sentencias Definitivas
Fecha de Resolución: 28/08/2000
Hora de Resolución: 11:35:00
PRETENSIÓN: Resolución De Contrato.
CAUSA PETENDI:
Se pide la resolución del contrato conforme al art. 1665 C.C porque existe de parte del
comprador la obligación de pagar el precio convenido en el lugar y tiempo estipulado y
todo contrato legalmente celebrado es obligatorio para los contratantes El actor y el
Ingeniero Iraheta Flores, celebraron Contrato; habiéndose pactado el pago del precio
conforme lo establece su cláusula IV, es decir por medio de abonos, siendo su último
abono el día treinta y uno de Diciembre de mil novecientos noventa y tres, por el valor de
SESENTA MIL COLONES, Cláusula V, establece que transcurrido tres meses después de la
mora en el pago de cualquiera de las cuotas estipuladas los vendedores tendrán derecho a
dar por terminado el Contrato y a exigir de inmediato la desocupación del inmueble sin
necesidad de trámite alguno quedando las cantidades pagadas a beneficio de los
vendedores como precio de arrendamiento simple.
El fallo de primera instancia reza así: "POR TANTO: en base a las razones expuestas y Arts.
417, 421, 422, 427, 432, 439, Pr. C., y Art. 1360 C.C., a nombre de la República de El
Salvador, FALLO: 1) Declárese sin lugar la excepción perentoria de Ineptitud de la
demanda alegada y puesta por el Licenciado IMMAR ORLANDO CHAVEZ PICHE; 2)
Declárese resuelto el contrato de Promesa de Venta con Reserva de Dominio, en relación
al derecho proindiviso que le corresponde a la señora MARIA DEL CARMEN CASTILLO DE
LOPEZ, en el inmueble ubicado en el Cantón San José Ahuacatitan, Jurisdicción de San
Marcos; es decir la tercera parte de dicho inmueble; celebrado ante los oficios del Notario
MIGUEL ANGEL JUAREZ, el día nueve de marzo de mil novecientos noventa, entre los
señores MIGUEL ANGEL CASTILLO NAVES, MARIA DEL CARMEN CASTILLO DE LOPEZ Y ANA
VILMA CASTILLO DE NAVES, y el señor JORGE ALBERTO IRAHETA FLORES; 3) Sin lugar
condenar en Daños y Perjuicios solicitada por la parte demandante, en virtud de no
haberse probado los mismos en el proceso; 4) Condenase a la parte demandada al pago
de las costas procesales de esta instancia por no haber probado la excepción que alegó.
El fallo de segunda instancia dice así: "POR TANTO: de conformidad con las razones
expuestas, disposiciones legales citadas, Arts. 439,1089 y 1092 Pr.C., a nombre de la
República de El Salvador DIJERON: a) Revocase la sentencia apelada; b) Declárese inepta la
demanda de Resolución de Contrato intentada por la señora ANA VILMA CASTILLO DE
LOPEZ contra el Ingeniero JORGE ALFREDO IRAHETA FLORES, Y c) Condenase en costas,
daños y perjuicios a la parte que sucumbió en sus pretensiones.---Vuelva la pieza principal
al Juzgado de origen con certificación de ley.
La razón por la que se interpuso el recurso de casación fue la siguiente:
Infracción a la Ley Art. 2 Literal A de la Ley de Casación. Precepto Infringido: Art. 1360,
1673, 1674, 1675, del Código Civil. Concepto en que ha sido violado: Art. 3 número 1 de la
Ley de Casación. Se ha violado la Ley porque se ha dejado de aplicar la norma que debía
aplicarse, haciéndose una falsa elección de Otra.
La acción que se promueve en el Juicio Principal es de Resolución de Contrato conforme al
Art. 1675 C.C. porque existe de parte del comprador la obligación pagar el precio
convenido; y el precio deberá pagarse en el lugar y tiempo estipulado Art. 1674 C.C.
CRITERIOS O LINEAMENTOS JURISPRUDENCIALES
ANÁLISIS DE ARTÍCULO Y DE LA PRUEBA
Esta sentencia no queda casada por el siguiente análisis
La Cámara sentenciadora en los considerandos de la sentencia, hizo un análisis de los
requisitos necesarios para que opere la condición resolutoria tácita, contemplada en el
Art. 1360 C. y también de la forma como opera el Art. 1423 C. y así manifiesta que son dos
las condiciones que la doctrina indica para que se configure la acción resolutoria: ausencia
de culpa del actor y la mora del contratante demandado, esto es que para que la acción
prospere requiere que el actor, a su vez, no haya incurrido en falta respecto a sus
obligaciones que el contrato bilateral le impone; de lo contrario podría resultar enervada
la acción mediante la excepción de contrato no cumplido. En el caso que se examina, dice
la Cámara, los otorgantes pactaron que la entrega de la cosa se haría de inmediato, pero
la tradición del dominio de ella se haría hasta completar el pago del precio. En todo caso
es necesario que cada una de las partes cumpla con sus obligaciones inmediatamente que
éstas se hagan exigibles. Según se evidencia de la prueba vertida en autos, los vendedores
al celebrar el contrato, aun no habían sido declarados herederos en la sucesión de don
Salomón Castillo Soriano conocido por Salomón Castillo, ni habían inscrito el inmueble a
su favor; los vendedores en este caso se obligaron a hacer la tradición del dominio una vez
que se hubiera inscrito su derecho y el comprador debería hacer el pago del resto del
precio convenido. Al analizar la mora del contratante demandado, la Cámara estima que
cuando se ha fijado plazo para el cumplimiento de una obligación, el deudor tiene que
cumplirla a su vencimiento, si no lo hace incurre en retardo; pero esto solamente no
basta, es necesario para que el deudor incurra en mora que el acreedor requiera al deudor
para que cumpla con la obligación, mediante la acción judicial. Como se ve, dice la
Cámara, esta es la simple aplicación de las reglas contenidas en los Arts. 1360 y 1341 C.
que sufren modificación conforme lo señala el Art. 1423 C. o sea cuando ambas partes han
incurrido en mora, en cuyo caso ninguna de las partes está en mora dejando de cumplir lo
pactado. Consideró la Cámara que el demandado fue diligente al tratar de cumplir con su
obligación y agrega que constituye una falta a la buena fe contractual, la pretensión de la
actora de que se declare resuelto el contrato por incumplimiento del otro contratante,
cuando éste se ha allanado a cumplirlo mediante una oferta de pago al actor, que no ha
sido aceptada por éste, pues en este caso es el actor el que incurre en mora crediticia, que
también purga la mora del demandado, sin que sea necesario que éste haya formulado
una oferta judicial de pago por consignación. Es decir, que para que prospere la acción
resolutoria se requiere que el demandante no haya incurrido en mora crediticia que
impide el allanamiento del deudor demandado. Continúa, manifestando la Cámara que en
el caso sub-judice, se advierte con claridad, cuando dos de los vendedores hicieron ya la
tradición del dominio al actual demandado y al declararse resuelto el contrato que es uno,
necesariamente afectaría derechos de terceros que no han sido discutidos y por lo tanto
no debe alcanzarlos, con violación de la garantía constitucional contenida en el art. 11 Cn.
Estimó la Cámara que por todas las razones expuestas debía revocar la sentencia de
primera instancia y pronunciar la conveniente.
Sobre los razonamientos anteriores, la Sala considera que lo pedido en la demanda es la
resolución de un contrato de compraventa con reserva de dominio, celebrado entre los
tres herederos del dueño del inmueble vendido, señor Salomón Castillo Soriano conocido
por Salomón Castillo y el demandado. Al analizar el documento base de la acción resulta
que se trata de un contrato bilateral.
PORQUÉ SE CASO LA SENTENCIA
POR TANTO, de conformidad con las razones expuestas, disposiciones legales citadas, y
Arts. 428, 429 y 432 Pr. y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República la Sala FALLA:
a) declarase que no ha lugar a casar la sentencia pronunciada por la Cámara Primera de lo
Civil de la Primera Sección del Centro, a las once horas del veintiséis de marzo de mil
novecientos noventa y ocho, en el juicio civil ordinario seguido por la señora María del
Carmen Castillo de López y no Ana Vilma Castillo de López, como aparece
equivocadamente en el fallo de la sentencia recurrida; b) condenase a la señora MARIA
DEL CARMEN CASTILLO DE LOPEZ a los daños y perjuicios a que hubiere lugar, y al
licenciado Jorge Alberto Magaña Elías, en las costas, como abogado firmante del escrito
de interposición del recurso; c) devuélvanse los autos al tribunal respectivo, con la
certificación correspondiente, para los efectos de ley.
INEXISTENCIA.
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
REVOCACIÓN.
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
RECILIACIÓN.
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
TERMINACIÓN.
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
RESCISIÓN.
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
INOPONIBILIDAD.
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
SENTENCIAS 2001
NULIDAD
Número de Referencia: 158-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 12/01/2001. Hora de Resolución: 10:02:00
Pretensión: Nulidad de título de propiedad
Causa de pedir: Se ha declarado nulo el título de propiedad expedido al señor
Miguel Pérez por la Alcaldía Municipal de San Pedro Masahuat, porque al título de
propiedad expedido le hace falta la correspondiente ficha catastral, es decir que no
se le dio cumplimiento al artículo 35 de la Ley de Catastro. Es por ello que se pide
que se le devuelva la calidad de propietario al mandante.
Criterios.
Concepto: Error de hecho: ¨Se necesita, para apreciar el error de hecho, la
existencia en el Juicio de un documento o acto auténtico del cual resulte la
equivocación evidente del juzgador¨
Análisis del artículo, y análisis de la prueba:
Se declara nulo el título de propiedad que ampara el dominio del inmueble donde
actualmente el mandante habita, ya que el mismo no reúne los requisitos legales; La Sala
consideró que en autos no se ha probado que el terreno titulado por el demandado señor
Miguel Pérez es de naturaleza ejidal, situación que se convierte en necesaria para que el
señor Alcalde Municipal de San Pedro Masahuat haya procedido a extender el título de un
terreno rústico, ya que por regla general solo es procedente la titulación municipal,
respecto de terrenos urbanos y por exclusión, respecto de los rústicos, siempre que sean
ejidales. Por ende la sentencia dictada por la primera y segunda instancia no han
infringido el artículo 35 de la ley de Catastro, al apreciar un error de hecho en el título de
propiedad, por lo cual no se perfila el vicio de que se ha acusado a la Cámara, y por lo
tanto con base a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y artículos 428 y 432
Pr. y 23 de la Ley de Casación, se falla, no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho
mérito.
Número de Referencia: 1219-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 09/02/2001. Hora de Resolución: 08:05:00
Pretensión: Nulidad de Hipoteca y contratos del mutuo
Causa de pedir:
Piden que se declare la nulidad de la hipoteca abierta y de los contratos de mutuo con
garantía hipotecaria otorgados por el señor José Antonio Villeda Hernández a favor del
doctor José Armando de Paz Ayala y que las instancia anteriores resolvieron que no existía
nulidad alguna, y con la cual se cometió Infracción de Ley y por los motivos específicos:
Violación de Ley e Interpretación Errónea de Ley. Las disposiciones legales infringidas son:
en relación al primer motivo, el Art. 1554 Com. Y para el motivo Interpretación Errónea de
Ley los Arts. 1316 No. 2, 1319 y 2179, todos del Código Civil. En relación a ello se pide que
se pronuncie lo que fuese legal, declarando nulos la hipoteca abierta y los tres mutuos
relacionados.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
El Tribunal superior en grado en su sentencia considera que no existe nulidad alguna, ya
que la garantía hipotecaria tiene su asidero legal en el Art. 2179 C. y además está
justificada legalmente la representación del señor José Antonio Villeda Hernández,
concluyendo que tanto los mutuos como la garantía hipotecaria son válidos, por lo cual no
puede hablarse de nulidad de los contratos y mucho menos de nulidades absolutas como
se sostiene, ya que la ratificación que habla el Art. 1920 C. no sería posible al tratarse de
ese tipo de nulidades, de conformidad a los Arts. 1552 y 1553 C .El Art. 2179 C. es la
disposición legal que sustenta la legalidad al crédito otorgado, sobre el poder especial el
cual cumple con los requisitos que ahí se establecen. No existe pues la interpretación
errónea que alega el impetrante, ya que además dicho artículo 2179 C. que cita no hace
distingo alguno sobre a favor de quien puede constituirse hipoteca, la distinción que hace
el recurrente se encuentra en el Art. 1554 del Código de Comercio que también cita, que
habla precisamente a favor de quienes puede otorgarse hipotecas abiertas, tampoco en
este punto hay nulidad alguna, porque nuestra legislación lejos de prohibir este tipo de
contratos entre personas naturales, lo regula en el Art. 2179 C. ya referido ; en todo caso,
los contratos de hipoteca y mutuos celebrados reúnen los requisitos legales. Este Tribunal
considera que no se ha incurrido en ninguna de las infracciones de ley alegadas por el
impetrante, por lo que no procede casar la sentencia de mérito.
Número de Referencia: 1205-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 12/02/2001. Hora de Resolución: 11:00:00
Pretensión: Juicio sumario, previa terminación del contrato.
Causa de pedir:
Debido al fallo de las instancia el cual se fundó en un trato directo ha sido resuelta por
medios directos, ya que por una parte el Ministerio de Economía ofreció una cantidad
de dinero para ponerle fin al conflicto, y por su parte el Arquitecto MAURICIO BUKELE
la aceptó, desde luego que recibió la suma ofrecida, mediante trato directo, como
etapa previa al arbitraje… por lo que no es procedente la instalación de un tribunal de
Arbitraje como lo pretende el demandante". Habiendo declarado sin lugar el Arbitraje
a que nos sometimos originalmente en el contrato y cláusulas compromisorias
voluntaria y expresamente establecidas que el mandante realizo que es el
comprobante de descargo de la Orden de Pago, dice: ""... pago final de gastos…" igual
es el concepto de la Orden de Pago y no dice pago final del contrato, asimismo aclarar
que el concepto de indemnizar significa REPARACION LEGAL DE UN DAÑO O PERJUICIO
CAUSADO, que en este caso, fue causado por el Instituto Salvadoreño de Comercio
Exterior al no permitir la terminación de la obra contratada, tampoco se menciona que
ese pago se trate para ponerle fin al conflicto como lo menciona la Sentencia Apelada,
menos se menciona que el Contrato queda Rescindido por común acuerdo, pues para
ello, debió legalizarse tal circunstancia por la Corte de Cuentas, tal como lo exigía los
artículos 31,32 y 33 de la Ley Orgánica de la Corte de Cuentas de la República; En el
segundo caso, cuando se reclamaba ¢ 3,347.359.16 se comprendía los gastos
comprobados y los intereses de los créditos obtenidos para iniciar los trabajos. Y la
solicitud del Dr. Flores y Flores al citar la suma reclamada, es calculada en 1982 a 1984,
pero al no ser escuchadas estas peticiones, el daño emergente incluido en la
compensación justa ha crecido enormemente debido a que el Ministerio de Economía
se tardó trece años en resolver en sede administrativa, habiendo gestionado
activamente por cuenta del señor MAURICIO BUKELE, y por razón del tiempo
transcurrido y para ser justa la compensación que comprende lucro cesante y daños
emergentes, hay derecho a reclamar la Rescisión del Contrato previa indemnización de
daños y perjuicios ya que el contratista aún no ha percibido su ganancia a que se hizo
acreedor en su oportunidad, ganancia que si se hubiere pagado oportunamente o se
hubiere permitido ejecutar totalmente la obra contratada, no se hubiere recurrido a la
instancia del Arbitraje, por lo que se reclama con Legítimo Derecho, el cumplimiento
de las obligaciones contraídas referentes al daño económico causado durante más de
diecinueve años
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba
Resuelve la Sala con base en los documentos auténticos que se han relacionado, concluye
que el contrato C-3-80-GOES BCIE y su ampliación están vigentes, porque no aparece
ninguna prueba en el juicio que demuestre ni que se han rescindido ni que se hayan
cumplido. La prueba de pago alegada y aportada por el Agente Auxiliar del señor Fiscal
General de la República, de fs. 76, se refiere al pago final de gastos por trabajos realizados
al Instituto Salvadoreño de Comercio Exterior por el contratista arquitecto Mauricio
Bukele, concepto diferente del invocado por el actor en su demanda. La Resolución No.3l6
que se ha mencionado, al declarar sin lugar las solicitudes del arquitecto Bukele en las que
reclama suma de dinero por la suspensión de los contratos C/3-80 de primero de marzo
de mil novecientos ochenta, y sin número del veinte de mayo de mil novecientos ochenta
y uno, demuestra que las partes no han llegado a acuerdo sobre el pago de la
compensación por la suspensión del contrato, por lo que de conformidad con las cláusulas
contractuales, el asunto debe someterse a arbitraje. Por ello la Cámara que conoció en
primera instancia, estimó que el pago recibido por el contratista Mauricio Bukele es el
resultado del trato directo entre las partes y que ya está pagado todo lo debido al
contratista. Realmente el pago final de gastos por trabajos realizados al Estado es
resultado del trato directo entre las partes; así como también la negativa del Estado, por
medio del Ministerio de Economía, de declarar sin lugar las peticiones del actor de recibir
una cantidad de dinero por la suspensión del contrato con base en la cláusula contractual
mencionada o sea la 6-09 Sección VI, Terminación del Contrato, en su literal "c" Fuerza
Mayor, a lo que se opone el Agente Auxiliar del señor Fiscal General de la República en sus
escritos. Esta Sala considera, como se expresó antes, que el pago hecho al demandante es
por una razón diferente a la compensación solicitada por él y al no existir acuerdo con el
Estado, el caso debe someterse a arbitraje y es procedente acceder a lo solicitado en la
demanda. De conformidad con las razones expuestas, y Arts. 427, 428, 429, 439, 958 y
1026 Pr. la Sala falla asi. Revocase en todas sus partes la sentencia definitiva recurrida,
Sométase a arbitraje la petición del arquitecto MAURICIO BUKELE sobre los aspectos
pedidos en su demanda.; Condénase al Estado de El Salvador en el Ramo de Economía a
pagar las costas de este juicio, en las dos instancias.
Número de Referencia: 1343-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 12/03/2001. Hora de Resolución: 14:30:00
Pretensión: Nulidad de título municipal y de reivindicación
Causa de pedir:
En relación infracción de ley con fundamento en el Art. 2.- letra a) de la Ley de Casación y
los requisitos que exige el Art. 10 de la misma ley los cumplo de la siguiente manera, y se
considera infringido es el contenido en el Art. 745 Inc. 2° del Código Civil; Por contener el
fallo violación de ley al dejar de aplicar las normas que debían aplicarse, haciendo una
falsa elección de otras (Art. 2 N° 1 LC. Es que existe inconformidad con la sentencia
recurrida por el hecho de que la parte actora no ha probado la propiedad del inmueble a
que se refiere el título municipal declarado nulo y como tanto demandante como los
demandados han reconocido la posesión de éstos, se presume que los demandados son
los dueños del indicado inmueble, pues en el proceso no existe justificación legalmente
válida que demuestre lo contrario, o sea que el demandante es el propietario de dicho
inmueble; y que la Cámara ad-quem se equivocó al tener por probado la propiedad del
inmueble disputado con las escrituras de compraventa y tradición y la descripción
correcta del mismo con la escritura de rectificación, ambas escrituras presentadas al
proceso por el demandante; que la Cámara sentenciadora viola las disposiciones legales
antes citadas al no haberlas aplicado.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Los instrumentos presentados por el actor, y la inspección y peritajes practicados en el
proceso, se ha establecido plenamente que la parte actora es la propietaria del inmueble
en disputa… debe advertirse que, siendo la escritura de rectificación y ratificación
complementaria de la escritura de venta y tradición del inmueble respectivo, ambas
deben verse en su conjunto; la primera prueba la venta y tradición del inmueble, y la
segunda, la descripción exacta del inmueble respectivo…La circunstancia de que el
inmueble titulado a favor del demandado es el mismo que ampara el título de propiedad
del actor, se ha probado plenamente con las inspecciones y peritajes practicados en
primera instancia… En razón de lo dicho la Cámara dice que el demandante es el
propietario del bien inmueble titulado por la parte demandada. Estando probadas tales
circunstancias y siendo que el título de propiedad del actor es de fecha anterior a la de la
expedición del título municipal del demandado, resulta claro que éste último no era el
propietario del inmueble que ampara el título municipal que presentó en el juicio, y por
ello el Alcalde respectivo como ya se dijo, carecía de facultades para expedir el título de
mérito. Hay violación de ley cuando el Tribunal sentenciador desconoce el texto de una
norma legal o la deja de aplicar a un caso regido por ella. La violación de las disposiciones
legales por las cuales se admitió el recurso de casación, es inexistente, pues aunque no se
citan en la sentencia recurrida, implícitamente fueron aplicadas por la Cámara ad-quem, al
reconocer que el demandante es el propietario del inmueble en disputa y que el modo de
adquirir del mismo se ha establecido con la escritura de compraventa y tradición y la
descripción correcta de dicho inmueble con la escritura pública de rectificación y
ratificación, siendo esta última escritura complementaria de la primera. La posesión del
demandado en el inmueble disputado es un hecho aceptado únicamente por él no por la
sentencia recurrida; y aplicando el principio doctrinario que se ha dejado establecido, la
Sala no puede tener la posesión alegada como hecho establecido por no haber sido
reconocido por la sentencia que se impugna. La inconformidad del impetrante con la
sentencia de que ha recurrido en casación, la encuentra en el hecho de que se ha tenido
como dueño del inmueble al demandante, quien, dice, con sus dos escrituras no ha
justificado o probado ser el propietario. Su inconformidad gira en derredor de la falta de
prueba del dominio del inmueble disputado, el cual el Tribunal sentenciador lo tuvo por
establecido con las escrituras de compraventa y tradición y de rectificación. De modo que
el recurrente debió atacar el fallo por error en la apreciación de la prueba y no por la
violación de ley que no necesita de los hechos para demostrarla, por ser un ataque directo
a la norma misma. Por que el impetrante no ha podido demostrar el error de fondo
denunciado, y por lo mismo no procede casar la sentencia recurrida, y en base a las
razones expuestas y aplicando los artículos 428 y 432 Pr. y 23 de la Ley de Casación.
Número de Referencia: 270-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 13/03/2001. Hora de Resolución: 10:00:00
Pretensión: Nulidad de titulo supletorio
Causa de pedir:
Se pide que se declare nulo el título supletorio a nombre de la causante de la demandada,
con fundamentación en la causa genérica Infracción de Ley, Art. 2 literal a) de la Ley de
Casación, y los motivos específicos que lo condicionan son: a) El fallo de la sentencia de
que recurro no hace declaración respecto de algún extremo, pues no resuelve nada sobre
la excepción perentoria de prescripción extraordinaria adquisitiva de dominio opuesta y
alegada en el proceso por la parte demandada. Art. 3 ordinal 4° de la Ley de Casación. b)
El fallo de dicha sentencia contiene violación de Ley, Art. 3 ordinal l° de la Ley de Casación.
El cual también infringió los Arts. 42l y l092 Pr.; y en lo tocante al motivo específico
violación de ley, dicho Tribunal infringió los Arts. 203 y 1301 Pr., 2237, 2239, 2250 y 2256
C. y los Art. 203 y 1301 Pr. 2237, 2239,2250 y 2256 C.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Cuando el prescribiente es el demandado, debe oponer la prescripción en una
reconvención y ha de hacerlo por vía de acción. En consecuencia, cualquiera que sea la
posición procesal del prescribiente nunca puede entablar la prescripción adquisitiva como
excepción perentoria. Los que aceptan la existencia de la acción de prescripción
adquisitiva dicen que la forma de oponerla es precisamente reconviniendo, deduciéndola
en reconvención. Además, la prescripción debe alegarse en términos concretos, aplicables
al caso de que se trata, pues el juez no puede declarar de oficio los elementos con que
debe ser alegada para poder decidir si es procedente. El segundo motivo específico
alegado, es la violación de ley, Art. 3 No.1 Cas., siendo las disposiciones legales infringidas
los Arts. 203 y 1201 Pr. 2237, 2239, 2250 y 2256 C. En relación a la violación del Art. 203
Pr. la recurrente expresa que el juez inferior resuelve lo no pedido, porque la demandada
alega y opone la excepción perentoria de prescripción extraordinaria adquisitiva de
dominio, como medio de extinguir las acciones judiciales, y en su fallo el juez declara la
excepción de prescripción extintiva de la acción, es decir que se declara un tipo de
prescripción con el fundamento de otro tipo de prescripción y con ello resolvió lo no
pedido por la demandada. Efectivamente Art. 203 Pr. obliga al juez a suplir las omisiones
de las partes, si pertenecen al derecho. En el presente caso no ha habido omisión que
suplir, por consiguiente no ha existido la violación alegada. La violación del Art. 1301 Pr.
porque según lo manifiesta la recurrente, parece que se planteó la duda de si la
demandada había opuesto y alegado la excepción de prescripción adquisitiva de dominio
o la excepción de prescripción extintiva de la acción de dominio, " debió aplicar el Art.
1301 Pr., el cual dispone que, en caso de duda en la aplicación del derecho, se debe
resolver el asunto a favor del demandado; al no hacerlo así se dio la violación alegada que
también es decisoria de la litis. La Cámara sentenciadora en sus considerandos no expresa
ninguna duda sobre la excepción opuesta por la demandada. Sobre tales razonamientos,
esta Sala estima que la Cámara analizó las dos clases de prescripción y el sentido en que
fueron propuestas; analizó también la prueba vertida en el proceso y llegó a la conclusión
de que se probó posesión material del inmueble por más de treinta años lo cual sería
fundamento de la prescripción adquisitiva de dominio y no de la prescripción extintiva,
por lo cual arribó a la conclusión de que era procedente revocar la sentencia apelada y
declarar la nulidad del título supletorio solicitada en la demanda, al no constar ninguna
duda en la sentencia de la Cámara, no había por qué aplicar el Art. 1301 Pr.; por
consiguiente no existe la violación alegada. La violación del Art. 2256 C. que establece:
"Toda acción por la cual se reclama un derecho se extingue por la prescripción adquisitiva
del mismo derecho", si incurrió en la violación alegada. La Cámara sentenciadora no se
refirió a la disposición legal citada, ni tampoco hizo consideraciones referentes a ella.
Sobre tales alegaciones la Sala considero que ciertamente el Art. 2256 C. determina que la
prescripción adquisitiva de un derecho, extingue la acción por la cual se reclama el mismo
derecho, y precisamente, debe haber un reconocimiento de la existencia de esa
prescripción, para que el dominio sea reconocido en las manos del prescribiente,
extinguiéndose así el derecho en las manos del anterior dueño y con él, la acción
mediante la cual se reclama. Ese reconocimiento de la prescripción adquisitiva debe ser
solicitado por la parte interesada; en este caso debió ser solicitado por la parte
demandada, sin embargo, no hizo esa contrademanda, solamente opuso la excepción de
prescripción adquisitiva como perentoria, y ya se dijo con anterioridad que esta especie de
excepción no puede hacerse valer como excepción perentoria sino que para que
realmente surta efectos debe ser opuesta en una contrademanda. Por consiguiente la
Cámara no podía declarar lo que no se le había pedido aunque hubiera prueba en el juicio
de la posesión de más de treinta años. En consecuencia no existe violación del Art. 2256 C.
porque no se podía aplicar, a causa de no existir la contrademanda indispensable para
reconocer la prescripción adquisitiva. Reclama además la violación de los Arts. 2237, 2239
y 2250 C. y dice que la Cámara en la sentencia reconoce que la demandada en el proceso
desarrolló el fundamento de la prescripción adquisitiva de dominio y eso es así en virtud
de la omisión de la demandada en citar las disposiciones expresadas que son los artículos
aplicables a los hechos; La Cámara de Segunda Instancia tomó en cuenta los Arts. 2237 y
2250 C. para apoyar sus razonamientos en cuanto a los conceptos y diferencias de las dos
clases de prescripción: extintiva y adquisitiva.
Se resuelve según disposiciones legales citadas y Arts. 417,418 y 428 Pr. y 18 Cas. Cásase
la sentencia recurrida por el primer motivo alegado o sea por existir fallo que no hace
declaración respecto de algún extremo, en consecuencia pronúnciase la que corresponde,
declárase improcedente la excepción perentoria de prescripción extraordinaria adquisitiva
de dominio como medio de extinguir las acciones judiciales, alegada y opuesta por la parte
demandada, declárase nulo el Título supletorio inscrito en el Registro de la Propiedad Raíz
e Hipotecas de la Primera Sección de Oriente, del Departamento de La Unión a favor de la
señora Alicia Cruz, ya fallecida, como también las demás inscripciones derivadas de la
citada inscripción, debiendo hacerse las cancelaciones respectivas; restitúyese el inmueble
objeto del litigio a los actores señores Salomón Cruz García, Carmen Juvenilia Cruz García,
Adela Cruz García de Urrutia y Rosa Huberlinda de Sorto. Declárase que no ha lugar a
casar la sentencia recurrida por el segundo motivo específico alegado o sea por violación
de ley.
Número de Referencia: 90-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 19/04/2001. Hora de Resolución: 09:10:00
Pretensión: Nulidad de inscripción
Causa de pedir:
Debido al error de derecho en la apreciación de la prueba de los Arts. 1117 y 271 Pr. C. y
se admitió por los motivos específicos interpretación errónea del Art. 717 Inc. 2° C.C. y por
violación de los Arts. 195 Pr. C. y 44 Ley de Notariado. El apelante pide la nulidad de
inscripción de propiedad y todas aquellas que fueren su consecuencia.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Cuando el señor Gálvez Torres al haber aceptado herencia y realizar los traspasos de los
bienes dejados por la de-cujus, no puede afirmarse que lo hizo de mala fe, pues lo que
sucedió es que los adquirentes de dichos bienes y que lo hicieron por compra directa de la
señora Torres de Gálvez, no presentaron sus testimonios para inscripción en el Registro de
la Propiedad Raíz, así, los bienes aparecían libres de traspasos y gravámenes y
consecuentemente operaba el traspaso a favor del heredero declarado, dando paso así a
la teoría absolutista de derecho, primero en tiempo es primero en derecho y que recoge
nuestro Código Civil en el Art. 712. Esta Cámara sentenciadora, se apoyó en el Art. 717
C.C. que dice: "No se admitirá en los Tribunales o Juzgados de la República, ni en las
oficinas administrativas, ningún título ni documento que no esté registrado, Con todo,
deberá admitirse un instrumento sin registro, cuando se presente para pedir la
declaración de nulidad o la cancelación de algún asiento que impida verificar la inscripción
de aquél instrumento". La interpretación que la Cámara sentenciadora hace del Art. 717
Inc. 2° y que es la disposición que toma como fundamento de su fallo, a criterio de esta
Sala es incorrecta, en razón de que lo que pretende el legislador en tal norma es que no se
le vede el derecho de acción que el tenedor de un título no inscrito tiene, o sea pues, que
no obstante no hacer fe, pueda ser útil para la parte respectiva con el único fin de que
pueda ejercer lo que se denomina postulación procesal, o sea que le abre la posibilidad de
actuar en juicio y discutir contenciosamente el derecho que pretende. La disposición
violada el Art. 195 Pr no aparece de la misma que sea un requisito sine qua non, ni que las
copias de la demanda lleven las firmas de las partes en original; y si ese fuera el caso, el
recurso debió entonces interponerse por error de forma y no de fondo como se ha hecho,
en cuanto al Art. 44 de la Ley de Notariado en este caso la Sala se ve inhibida de
calificarlos en relación al motivo invocado como infringido y es en ese sentido que no
aparece que el tribunal ad-quem haya violado tal disposición, pues no lo ha aplicado por
una parte, y por otra no se impugnó dicha prueba. Considerando esta Sala, que en todo
caso, el motivo que debió invocarse en el recurso de que se conoce pudo ser el de error
de hecho en la apreciación de la prueba, de modo que por el motivo invocado no procede
casarse la sentencia de que se recurre. Por lo que se resolvió, Cásase la sentencia
impugnada y pronúnciese la legal; Declárase sin lugar la nulidad pedida en la demanda, de
la inscripción del Registro de la Propiedad RAIZ e Hipotecas; en consecuencia también se
declara sin lugar la cancelación de la inscripción del documento respectivo.
Número de Referencia: 1346-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 24/07/2001. Hora de Resolución: 14:00:00
Pretensión: Nulidad de Escritura de Mutuo garantizado con hipoteca
Causa de pedir:
El concepto en que dicho Art. 982 Pr. considero que ha sido infringido por esa Honorable
Cámara en la Sentencia, consiste en negarme la facultad que me concede la referida
disposición por tratarse de un derecho reconocido contra la faleabilidad de los Jueces;
afirmando en la Interlocutoria que la sentencia venida en apelación no me ha causado
ningún agravio. Que no es cierto lo dicho por el Tribunal de Segunda Instancia (Declaro
improcedente el Recurso de Apelación,); Que el derecho de apelar lo concede el Art. 982
Pr. C. a cualquier interesado en la causa.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
puede concluirse, que el interés de la recurrente en que se le conceda la apelación, no es
positivo, no es moral y no es cierto; tampoco es directo o inmediato, sino que es remoto y
mediato, puesto que la sentencia de nulidad parcial del mutuo hipotecario, no afecta en
modo alguno su derecho de propiedad proindivisa. La conducta de la recurrente
contraviene los principios procesales de lealtad, probidad y buena fe. Se añade a esto el
que a nadie le está permitido venir contra sus propios actos, lo que significa que si
voluntariamente compareció a otorgar el contrato de mutuo hipotecario a favor del señor
Daniel Campos Rivera, no puede pretender ahora que se le libre de la obligación contraida
a través de una nulidad que no le afecta. Otro principio de derecho que viola es el de que
nadie puede enriquecerse sin causa, situación que tendría lugar si se accediese a su
pretensión de nulidad total del acto jurídico a que nos referimos. Es también procedente
tomar en cuenta que si su exigencia fuera atendida, se estaría en contra de lo dispuesto
en el Art. 1553 C. Por las razones que se han expuesto, no es procedente casar la
sentencia interlocutoria de que se ha hecho mérito, y así debe declararse con las
consecuencias legales.
Por lo que de acuerdo a las razones dichas y Arts. 420 y 423 del Código de Procedimientos
Civiles y 23 de la Ley de Casación, No ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho
mérito.
Número de Referencia: 1268-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 08/08/2001. Hora de Resolución: 09:30:00
Pretensión: Nulidad.
Causa de pedir:
Con el presente recurso se pretende darle eficacia a la supuesta nulidad absoluta alegada,
transciende la aplicación del Art. 645 inc.2° Pr. violando la seguridad jurídica y también
declara nula la venta otorgada posteriormente a favor del señor Carlos Atilio Quintanilla,
así como el asiento número cuatrocientos treinta y siete tomo setecientos cuarenta y dos
del libro diario de hipotecas, a favor de Gerardo Castillo Cornejo, sin reparar si estas
terceros fueron oídos y vencidos en juicio con arreglo a la ley. Ello por violación de ley,
siendo el precepto infringido el Art. 645 inc.-2° parte final del Código de Pr C.
Criterios.
Concepto: La nulidad absoluta: Esta puede y debe ser declarada por el Juez, aun sin
petición de parte, cuando aparece de manifiesto en el acto o contrato
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Se puede decir que efectivamente no se aplico el inciso 2º, parte final del artículo 645 del
Código de Pr C. en un primer momento con dicho artículo, hay la intención de dar certeza
y seguridad a la venta en pública subasta, pero no menos cierto es que ante determinados
eventos, esta situación puede ceder y procederse a la revocabilidad o declaratoria de
nulidad de tal actuación; la Cámara Sentenciadora, lo que desea destacar es el momento
procesal máximo en que procede la redención de los bienes del ejecutado, sin
menospreciar desde luego la certeza que se desea imprimir al acto jurídico celebrado, lo
cual tampoco obsta a que dicho acto pueda ser impugnado como consecuencia de un acto
nulo o inexistente celebrado con anterioridad, como es el caso de autos.
La Cámara no tenía porque aplicar el Art. 645 inc.2° Pr. Tampoco es cierto que no se haya
oído a los señores Carlos Atilio Quintanilla y Gerardo Castillo Cornejo como lo dice la
impetrante, puesto que tales señores según consta en el proceso, han sido debidamente
emplazados, cuya fehaciencia consta a fs. 39 vuelto de la pieza principal, por lo que no es
procedente casar la sentencia de que se ha recurrido por el motivo de violación de ley y
así habrá de declararse. Por lo que con base en las razones expuestas, disposiciones
legales citadas y Arts. 428, 432 Pr. y 23 Ley de Casación, la Sala dice, no ha lugar a casar la
sentencia recurrida
Número de Referencia: 615-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 07/09/2001. Hora de Resolución: 15:30:00
Pretensión: Nulidad del título municipal.
Causa de pedir:
Se interpone del recurso, para que se case la sentencia recurrida y se modifique en el
sentido de tenerse por establecida y probada la excepción perentoria de Prescripción
extraordinaria adquisitiva de dominio a favor de la representada; se confirme en lo
referente a la declaratoria de nulidad relativa al Título Municipal expedido a favor de
ROSA HILDA MARTINEZ y se cancelen las inscripciones de dicho Título, tanto en el Libro de
Inscripción de documentos privados, como en el Registro de la Propiedad Raíz; se extienda
la certificación correspondiente que le sirva de Título de Propiedad a la expresada señora
y se condene en las costas procesales, ya que el tribunal de segunda instancia concluyó
que hay nulidad en el referido título, expedido a favor de mi mandante.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
La Cámara de Segunda Instancia, al referirse a la excepción perentoria de Prescripción
Extraordinaria Adquisitiva de Dominio, afirma que de conformidad con el Art. 2231 C., se
puede adquirir mediante prescripción, las cosas ajenas, en virtud de haberlas poseído por
cierto lapso de tiempo; El presente juicio no es controversia de dominio, si no de nulidad
de Título Municipal, y sobre eso debe versar la disputa, así como la resolución. La defensa
de la parte demandada debe tender a extinguir la acción de nulidad planteada por la parte
actora. La excepción de prescripción adquisitiva extraordinaria que se ha opuesto, tiene
por objeto el reconocimiento del derecho de dominio, en manos de la demandada, pero
ello no extingue la acción de nulidad del Título Municipal, éste continúa siendo nulo, de
conformidad con las razones expuestas en los considerandos de la sentencia de la Cámara
de Segunda Instancia, reiterado este concepto, por el reconocimiento que de la nulidad
del Título Municipal hizo y solicitó declarar, el apoderado de la demandada, en su escrito
de expresión de agravios, lo cual consta de fs. 14 v. y 15 del expediente de apelación. Es
decir, que la parte demandada ha pretendido en ejercicio de su defensa, desvirtuar la
pretensión de los actores, oponiendo la excepción de prescripción adquisitiva
extraordinaria de dominio del inmueble titulado, asunto que no es pertinente, ya que la
demanda no es de dominio, y por lo mismo, no amerita más análisis. Con la prueba
instrumental presentada por la parte actora, se ha establecido la legitimidad del
instrumento por el cual adquirió el bien inmueble a que se hace referencia, comprobando
también que dicho inmueble tiene antecedentes inscrito en el Registro de la Propiedad
Raíz competente, frente al Título Municipal cuya nulidad se solicita; por otro lado, con la
inspección judicial realizada, se ha establecido que el inmueble descrito en el Título
Municipal, cuya nulidad se pide, es el mismo a que se refiere la escritura pública de
compraventa que ampara el dominio de la parte actora.
Por lo que la sentencia de la Cámara, que se ha recurrido, está arreglada a derecho y no
contiene violación al Art. 2250 C., porque esta disposición no es aplicable al caso, por lo
que no es procedente casarla, quedando intactos los derechos y acciones de la parte
demandada para hacerlos valer en el juicio correspondiente.
Número de Referencia: 1156-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 12/09/2001. Hora de Resolución: 11:00:00
Pretensión: nulidad de enajenación de inmueble y cancelación de Inscripción
Registral
Causa de pedir:
Se pide declara nula la enajenación del inmueble y la escritura otorgada entre sí por las
demandadas; y Se declara nula absolutamente la matriz número 12 del libro 34 de
Protocolo del notario..; que Se mande cancelar totalmente la inscripción, como
consecuencia de la nulidad del título en cuya virtud se hizo la inscripción (732 N° 2° C); y
Se condene a las demandadas en el pago de las costas procesales, Y a que se considera
que hubo infracción de ley contenido en el Art. 3 L. C. , por los motivos específicos: fallo
incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes, error de hecho en la
apreciación de las pruebas, ser el fallo contrario a la cosa juzgada sustancial y violación de
ley, prescritos en los ordinales 4°, 8°, 6° y 1° de la disposición citada.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Para poder ejercer una acción, el que la promueve tiene que ser poseedor legitimo del
derecho discutido, esto es, tiene que evidenciar un interés propio. Dicho en otro giro:
acreditar la ventaja de orden precuniario que le importa el ejercicio del derecho a la
acción
Existe la causal de "incongruencia" contemplada en el Art. 3 N° 3 L.C., cuando existe
diferencia entre la situación jurídica que se pretende y la que reconoce el juzgador o
cuando es distinta la extensión entre el derecho reclamado y el concedido. En nuestro
ordenamiento procesal el Art. 421 Pr. "Las sentencias recaerán sobre las cosas litigadas y
en la manera que han sido disputadas, sabida que sea la verdad por las pruebas del mismo
proceso…", o sea, que si bien es cierto que dicha norma regula el principio de congruencia
procesal, para el caso en análisis, dicha congruencia se rompe al carecer el señor Francisco
Portillo de legitimidad procesal, pues le falta el elemento esencial denominado
modernamente postulación procesal y siendo así por el motivo invocado no procede casar
la sentencia de que se recurre, por este motivo. El señor Francisco Portillo no era legitimo
contradictor y como consecuencia de ello, la demanda era inepta, ya no podía entrar a
conocer del fondo del asunto, pues la ineptitud declarada destruía de raíz la pretensión
incoada, en virtud de no existir una idónea forma de relación procesal, entonces el
Tribunal de alzada inhibido de hacer declaración alguna sobre lo principal, por lo que
tampoco por este motivo puede la Sala casar la sentencia impugnada. En la prevención
que se le hizo, se limitó a citar los Arts. 695 C.C. y 43 del Reglamento de la Ley de
Reestructuración del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, no dando un
razonamiento convincente del porque considera, que el Tribunal ad-quem emitió su fallo.
A criterio de esta Sala los argumentos del recurrente carecen de las motivaciones jurídicas
que habrían dado lugar a la interposición misma del recurso. Resulta entonces que es
inadmisible casar por el motivo invocado y así debió haberse declarado en su momento,
pero que es válido aún hacerlo a tenor del Art. 16 L. C. Al examinar la sentencia de la
Cámara no aparece que dicho Tribunal haya cometido violación de las disposiciones antes
señaladas. En los considerandos que antecedieron al fallo, no se observa que el Tribunal
sentenciador omitiera alguna de las disposiciones enunciadas como infringidas o aplicado
otras diferentes. Y es lógico que tal circunstancia no se diera, pues no existió posibilidad
para ello; el Tribunal ad-quem, al analizar la situación jurídica procesal de las partes
materiales, concluyó que el actor no era legítimo contradictor y careciendo de dicho
presupuesto de validez, la demanda incoada, era inepta. Al fallar de tal manera, se vió
imposibilitado de conocer el fondo de la contienda procesal, de modo que ante tal
imposibilidad, la Cámara no pudo cometer la violación que se le atribuye. Por tal razón no
procede a juicio de esta Sala, casar la sentencia recurrida, lo que así se declarará.
RESCISIÓN
Número de Referencia: 36-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 26/09/2001. Hora de Resolución: 12:00:00
Pretensión: Rescisión de Contrato de compraventa de un inmueble
Causa de pedir:
La parte demandante pide la rescisión del contrato de compraventa celebrado entre
las sociedades vendedoras y los señores Medina, fundamentado en los vicios
redhibitorios y reclamando, asimismo, la indemnización de daños y perjuicios. Ya que
se falló a favor de la parte actora en ambas instancia.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
En cuanto a la ineptitud, que la Cámara omitió pronunciarse sobre la misma, bajo la
excusa de ser una excepción perentoria a la cual no se aportó probanza alguna durante el
litigio, sosteniendo que esa es la base fundamental para infirmar el fallo por la comisión
de ese error conceptual, la ineptitud de la demanda no es una excepción perentoria, sino
que es un requisito de procedibilidad en todo juicio, un presupuesto procesal. Al respecto
la Sala estima que esto no podría ser motivo de casación. Considera que ha quedado
agotado el punto relativo a la causal de incongruencia del fallo, en cuanto no hace
declaración en el mismo, respecto de uno de los extremos, deducidos por la parte
demandada, y que ha sido alegado por el recurrente.
La Cámara sentenciadora efectivamente ordenó el dictamen pericial, debiéndose
contestar sobre los puntos siguientes: "si los daños estructurales que presenta la vivienda
y que se anotan en la demanda, existían al catorce de noviembre de mil novecientos
noventa y cuatro o fueron posteriores a esa fecha y si por esos vicios la vivienda no sirve
para uso habitacional como se proyectó conforme los planos y especificaciones aprobadas
por las Oficinas correspondientes". Textualmente dijo: "a) Habitabilidad, b) daños
existentes C) seguridad estructural de la vivienda
Expresado en otras palabras: la experticia practicada, causó tal convicción de certeza en el
ánimo de los Magistrados, que le concedieron el valor que mencionan en la sentencia.
Sobre este tema, esta Sala desea reiterar lo expresado en sentencias anteriores, en el
sentido de que las pruebas son de la exclusiva incumbencia y apreciación de los Tribunales
de instancia y sólo prosperará el recurso de casación, cuando su interpretación haya sido
irracional abusiva y absurda, por lo que en este caso y, siendo que la apreciación e
interpretación de la prueba ha sido racional, a juicio de la Sala, no es procedente casar la
sentencia recurrida y así ha de declararse. Con base en las razones expuestas,
disposiciones legales citadas y artículos 428 y 432 Pr., y 23 L. de Casación, Declárase que
no ha lugar a casar la sentencia recurrida por ninguno de los motivos alegados.
TERMINACIÓN
Número de Referencia: 1131-2001
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 26/06/2001. Hora de Resolución: 09:00:00
Pretensión: Terminación de Contrato de arrendamiento
Causa de pedir:
Recurso se interpone por los motivos específicos de Fallo Incongruente con las
pretensiones deducidas por los litigantes, por no hacer declaración respecto de un
extremo, Art. 3 Ord. 4º Ley de Casación, citándose como preceptos infringidos los arts.
417 y 1026 Pr. C. y Violación de Ley Art. 3 Ord. 1º Ley de Casación citándose como
preceptos infringidos los artículos 1356 inc. 2º, 1431 y 1352, todos Código Civil
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Fallo Incongruente: Art. 417 Pr. C. y 1026 Pr. C: el recurrente en base a este motivo alega,
que la demanda contiene dos acciones, la de terminación o resolución de contrato Art.
1360 C. y la acción de repetición o restitución de los cánones de arrendamiento pagados
anticipadamente por el demandante al demandado, antes de la vigencia del contrato; Lo
que no es cierto, en cuanto a que son dos las acciones entabladas en la demanda, pues
como claramente se observa, el demandante pide la terminación del contrato de
arrendamiento como única acción, y como consecuencia de la misma, la restitución de los
sesenta mil colones recibidos en forma anticipada, por el demandante al demandado, así
como los intereses de los mismos y la respectiva indemnización de daños y perjuicios. En
tal virtud, habiéndose declarado inepta la acción, por considerar que el actor no tenía el
derecho de reclamar la resolución del contrato base del litigio, implícitamente la Cámara
estaba conociendo de la segunda de las peticiones rechazando la misma. No procede
casar la sentencia recurrida, por este motivo
Violación de Ley: Art. 1352 inc. 1º C: Dicho Art. establece como uno de los casos en los
que se tendrá por fallida la condición, aquél en el que la persona de cuya voluntad
depende, no quiere o no puede cumplirla, circunstancia que se suscita en el presente
caso, en el que, habiendo transcurrido más de dos años desde la fecha del contrato, el
arrendante, señor Francisco José Velasco Cabeza, no instaló el servicio de agua potable,
condición que dependía exclusivamente de él, estaba imposibilitando con este acto de su
voluntad, el cumplimiento de la condición, circunstancia que hace que la condición
suspensiva se vuelva fallida, por falta de voluntad en el arrendante de cumplirla, situación
que se encuentra regulada en el Art. 1352 inc. 1º C., alegado por el recurrente como
Violado. Por ello declarar fallida la condición, por lo que al no hacerlo, violó la disposición
alegada, y en consecuencia procede casar la sentencia por el motivo de violación de ley
cometido en el art. 1352.
Violación de Ley: Art. 1356 inc. 2º C. La disposición citada como violada dice lo siguiente:
"Todo lo que se hubiere pagado antes de efectuarse la condición suspensiva, podrá
repetirse mientras no se hubiere cumplido", regula el derecho de repetir lo dado en pago
antes de efectuarse la condición, estableciendo como único requisito para que nazca este
derecho, que la condición suspensiva no se hubiere cumplido, para lo cual, la ley no
establece término, ni declaratoria judicial que lo acredite, basta con que la condición se
encuentre pendiente, para reclamar lo pagado. Por lo que procede casar la sentencia por
el motivo de violación de Ley cometido en el Art.
Violación de Ley: Art 1431 C: La disposición que cita como violada, no tiene aplicación en
el presente caso, ya que ésta regula aquellos casos en los que la intención de las partes al
contratar, difiere de lo establecido en el contrato, situación que no sucede en el caso de
autos, en el que la intención de los contratantes se encuentra claramente establecida en
el mismo, la cual fue, que el plazo del arriendo comenzaría a correr a partir del día en que
se instalara el servicio de agua potable, condición que se encuentra expresamente
contemplada en el contrato, por lo que, no existe ninguna contradicción o diferencia entre
lo expresado por las partes y la intención de las mismas al contratar; El recurrente por el
contrario, en base al artículo analizado, pretende atacar el fallo, Por ende no se ha
producido la violación del art. 1431 C., no tiene aplicación al caso de autos; no procede
casar la sentencia recurrida por ese motivo. En virtud de las razones expuestas, Cásase la
sentencia recurrida por "Violación de ley", cometida en los Arts. 1356 inc. .2º C y 1352 inc.
1º C.; Declárase la terminación del contrato de arrendamiento.; Ordénase al arrendante,
que reintegre la suma que dicha sociedad le entregó en concepto de pago por cinco
cuotas de arrendamiento del inmueble expresado, más los intereses legales que tal suma
haya generado desde la fecha de su pago; y Condénase al señor en los daños y perjuicios a
que hubiere lugar.
INEXISTENCIA.
EN ESTE AÑO NO SE ENCONTRÓ NINGUNA SENTENCIA SOBRE DE ESTA INSTITUCIÓN.
RESOLUCIÓN.
En este año no se encontró ninguna sentencia sobre de esta institución.
REVOCACIÓN.
EN ESTE AÑO NO SE ENCONTRÓ NINGUNA SENTENCIA SOBRE DE ESTA INSTITUCIÓN.
RESCILIACIÓN.
En este año no se encontró ninguna sentencia sobre de esta institución.
INOPONIBILIDAD.
EN ESTE AÑO NO SE ENCONTRÓ NINGUNA SENTENCIA SOBRE DE ESTA INSTITUCIÓN.
SENTENCIAS 2002
NULIDAD
Número de Referencia: 1319-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 11/01/2002. Hora de Resolución: 11:30:00
Pretensión: Nulidad de Testamento y de Acción de Petición de Herencia
Causa de pedir:
Se pide que sea declare ha lugar a la Nulidad del Testamento impugnado y a la acción de
petición de herencia incoada por mi Poderdante. Debido a que se declaró sin lugar la
nulidad de testamento y sin lugar la restitución de la herencia por lo que se hA apelado
diciendo que se dio una Violación de Ley" respecto de los artículos 32 numeral 5°, 33 y 34
de la Ley de Notariado; y por "Error de derecho en la apreciación de la prueba, alegándose
como preceptos infringidos los Arts. 260 numeral 3 y 262 ambos del Código de
Procedimientos Civiles.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Del análisis de los preceptos infringidos, en relación al motivo específico de "Violación de
Ley", la Sala según exposición del impetrante en relación al concepto de las infracciones
antes citadas, no es posible deducir en qué consisten tales infracciones, ya que los
argumentos invocados, no aportan ningún elemento que permita a la Sala hacer un
análisis de las violaciones alegadas en relación a la sentencia recurrida, pues en lo que se
refiere al primero de los preceptos infringidos, no es posible valorar la infracción
únicamente refiriéndose a los argumentos expuestos para otro precepto, a que cada
Artículo regula hechos diferentes, para los cuales es necesario expresar un concepto
específico en relación a la forma en que se considera violado cada precepto. Y, en relación
al segundo de los artículos violados, el recurrente no especifica de que forma considera
que dicho precepto ha sido violado, lo cual hace imposible entrar a valorar el presente
recurso por la "Violación de ley" alegada, en relación a los artículos 33 y 34 Ley de
Notariado. En virtud el presente recurso debió declararse inadmisible en lo que respecta a
la violación de los artículos antes citados. Art 16 Ley de casación, debiendo así declararse.
En consecuencia, declarase inadmisible el presente recurso por el motivo de violación de
ley en relación a los arts. 33 y 34 Ley de Notariado.
Violación de Ley Art. 32 numeral 5° Ley de Notariado. La Cámara ha tomado en cuenta
dentro de sus considerandos la disposición que se cita como infringida, es decir, el art. 32
No 5 Ley de Notariado, haciendo un análisis detallado en base al mismo, concluyendo que
el error cometido por el Notario, al consignar los números de las cédulas de identidad
personal de la testadora, señora, y de la testigo, no acarrea la nulidad del instrumento,
por cumplir éste, con los requisitos de validez prescritos por el Art. 33 de la Ley de
Notariado. En consecuencia, habiendo sido considerada por la Cámara, la disposición que
se cita como violada Art. 32 No 5 Ley de Notariado, dentro de los argumentos en los que
fundamenta su sentencia, no es posible que se haya cometido la Violación del precepto
invocado por el recurrente, pues dicha violación presupone en principio, que el precepto
que se considera infringido no haya sido aplicado por la Cámara sentenciadora para basar
su fallo, hecho que, como ha quedado demostrado, no ocurrió en el presente caso. En tal
virtud no procede casar la sentencia recurrida por el motivo de Violación de Ley cometido
en el art. 32 numeral 5° Ley de Notariado.
Error de derecho en la apreciación de la prueba: Art. 260 No 3 y 262 Pr. C. Analizando el
argumento en que basa el recurrente el motivo invocado, en relación a la sentencia
pronunciada por el Tribunal Ad-quem, se advierte lo siguiente: La prueba en que
fundamenta el recurrente el error de derecho alegado, lo constituyen la certificaciones de
los Registros de las Cédulas de Identidad Personal presentadas, en donde consta que los
números relacionados en la escritura matriz, no corresponden a los de la testadora ni al de
uno de los testigos. Del estudio de la sentencia de la Cámara, se observa que dicha prueba
en ningún momento ha sido valorada por ese Tribunal, lo que hace imposible que el error
de derecho alegado por el recurrente se haya cometido, ya que dicho motivo hace referir
la infracción, al hecho que al valorar una determinada prueba 113 Cámara le dé un valor
distinto al que la Ley le asigne, lo que presupone en principio, que la prueba que se
alegue, haya sido valorada. En tal virtud, no procede casar la sentencia recurrida por el
motivo de "error de derecho en la apreciación de la prueba. Por lo que en base a las
razones antes expuestas disposiciones legales citadas, y con fundamento en los arts. 428 y
432 Pr. C. y 23 Ley de Casación, se dicta: No ha lugar a casar la sentencia recurrida por los
motivos de "Violación de ley" y "error de derecho en la apreciación de la prueba".
Número de Referencia: 645-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 21/03/2002. Hora de Resolución: 11:15:00
Pretensión: Sumario de nulidad
Causa de pedir:
Se falló que se revocase la interlocutoria sumario de nulidad, y se declaro inadmisible la
demanda intentada por el Doctor José María Méndez, en el carácter de supuesto
representante legal de la asociación, por falta de legitimación de su Personería. Por lo que
se pide: se tenga como parte por cumplida la prevención que esa Honorable Sala me hace
en la resolución antes mencionada y se me admita el Recurso de Casación interpuesto, se
le dé el trámite de ley y en su oportunidad se case la sentencia recurrida.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
por la Cámara sentenciadora en su considerando jurídico, cuando manifiesta que si el Art.
27 Inc. 2° de la Ley de Asociaciones y Fundaciones sin fines de lucro, es determinante en
cuanto a exigir la acreditación de la personería de los representantes legales de las
personas jurídicas por ella regulados, debidamente inscrita en la oficina correspondiente,
tal exigencia constituye un requisito formal, "y que si el señor Seferino Esquino o Ceferino
Esquino no ha cumplido, no puede probar legalmente ser el representante legal de ANIS,
mucho menos puede en tal carácter conferir poderes".
El recurrente cometió una falla al interponer el recurso de casación por el motivo
planteado, pues tal como él aprecia el accionar de la Cámara sentenciadora, ésta no
cometió entonces la infracción que se le atribuye, pues el haber omitido la prevención que
él argumenta, lo que hizo el Tribunal de alzada fue ignorar lo que le ordenaba el Art. 1.131
Pr. C. y en ese sentido, no quebrantaba las formas esenciales del juicio como lo sostiene el
recurrente, sino que con tal omisión la Cámara violó la norma citada cometiendo entonces
una infracción de fondo y no de forma como lo plantea el impetrante.
Es necesario referirse a la interlocutoria de que se ha recurrido. De conformidad a lo que
prescribe el Art. 1 L. C., admiten recurso de casación las providencias que dicha
disposición señala. Pero en el caso de autos, la providencia recurrida no aparece entre las
que admiten casación, ya que se trata de una interlocutoria que no le pone término al
juicio y como consecuencia no hace imposible su continuación. La Cámara ad-quem al
fallar lo que ha dicho es que se declara inadmisible por falta de requisitos en la demanda
planteada por el actor, señalados en el Art. 27 Inc. 2° de la Ley de Asociaciones y
Fundaciones Sin Fines de Lucro; de tal manera que el juicio puede volverse a iniciar, o sea
que no se tiene por acabada la acción, observación que este Tribunal tuvo que haber
hecho antes de admitir el recurso de que se conoce, pero que no obstante haberse
admitido indebidamente de conformidad al Art. 16 L.C. deberá declararse improcedente
en el fallo de mérito
Por las razones expuestas y Arts. 428 y 432 Pr. y 16 de la Ley de Casación: Declárase
inadmisible el recurso de casación de que se ha hecho mérito por improcedente.
Número de Referencia: 1103-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 02/04/2002. Hora de Resolución: 12:30:00
Pretensión: Nulidad y de Cancelación de registro de la marca de fábrica y de
comercio "VISOL",
Causa de pedir:
Con la prueba aportada se pide que se declare la nulidad del registro de la marca "VISOL"
inscrita en el libro de Marcas de Fábrica, por haberse inscrito en contravención a las
disposiciones del Convenio Centroamericano para la Protección de la Propiedad Industrial
que es Ley de la República y que se ordene la cancelación dicho registro mediante el oficio
correspondiente al señor Registrador de la Propiedad Industrial, adjuntándole la
certificación de la sentencia ejecutoriada correspondiente. Se condene al señor
Registrador de la Propiedad Industrial, denominado indistintamente Registrador de
Comercio, Departamento de la Propiedad Industrial, Artística y Literaria o Registro de la
Propiedad Intelectual, a las costas, daños y perjuicios a que hubiere lugar, como
funcionario responsable de esta ilegalidad y subsidiariamente al Estado de El Salvador."
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Vista la sentencia recurrida, así como las consideraciones expuestas por la parte apelante
en la expresión de agravios, la Sala hace las consideraciones siguientes: el trámite para el
registro de una Marca de Fábrica y de Comercio, es esencialmente de naturaleza
administrativa y está regulado en el Convenio Centroamericano para la Protección de la
Propiedad Industrial; las autoridades competentes para conocer del mismo son el Registro
de la Propiedad Industrial y la Dirección General de Registros, cuando sea necesaria su
intervención. Ahora bien el Convenio no deja sin defensa al interesado en la oposición,
porque si no hizo uso del recurso de queja, el mismo Convenio le concede el derecho de
apelar de la resolución definitiva que otorga la inscripción de la marca y ordena el registro
de la misma, tal como lo prescribe el Art. 158 del Convenio con relación al Art. 980 Pr. C.,
recurso que deberá tramitarse de conformidad a los Arts. 27, 28 y 41 de la Ley de la
Dirección General de Registros.- Los razonamientos antes expuestos son los que la Cámara
tuvo en consideración para pronunciar la resolución de la cual se apela. No consta en los
pasajes expresados en la certificación ninguna resolución por la cual el Registro haya
resuelto sobre la oposición interpuesta y tampoco se relaciona ningún otro escrito que
haya presentado el Doctor Novoa relativo a la oposición que presentó en las diligencias
del registro de la marca VISOL. Y en el presente caso el Registrador de la Propiedad
Industrial no hizo saber su decisión sobre la oposición, por lo que, sí era procedente la
acción contencioso administrativa. El presente caso tiene su origen en un trámite de
naturaleza administrativa, del cual conocen las oficinas que el Estado pone al servicio de
los interesados y que, por el hecho de la inscripción de una marca de fábrica, el Estado no
adquiere ningún beneficio en particular, sino que, pone a disposición de las personas los
servicios para obtener la inscripción de la marca; si bien es cierto que el recurrente, tiene
el derecho de incoar la demanda de nulidad presentada, debe hacerlo contra legítimo
contradictor debiendo además dirigir su demanda al Juez competente por razón de la
materia y de la función o grado respectivo, por lo que al no saberlo hecho en esa forma, se
tipifican varios de los casos en que la demanda es improponible por lo que así debe
declararse, ya que los hechos en los cuales sustenta el demandante su petitorio, no son
idóneos para solicitar la actuación del organismo jurisdiccional, en miras a la satisfacción
de un interés concreto, careciendo entonces la Cámara sentenciadora de la facultad
absoluta de juzgar en el presente caso.
En base a las razones dichas, disposiciones legales citadas y lo preceptuado en los Arts.
197, 417, 421, 422, 428, 431, 432 y 1089 Pr. C. Revócase la sentencia interlocutoria venida
en apelación, por no encontrarse arreglada a derecho; Declárase improponible la
demanda interpuesta por el Doctor Carlos Edmundo Novoa como apoderado de la
Sociedad Valmont Inc. contra el Estado de El Salvador, representado legalmente por el
señor Fiscal General de la República.
Número de Referencia: 622-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 30/04/2002. Hora de Resolución: 12:00:00
Pretensión: Nulidad de contrato de compraventa
Causa de pedir:
Debido a la infracción de ley, Art. 2 No.l.Cas., por los motivos específicos siguientes: l)
violación de ley, Art. 3 No.1 Cas., siendo las disposiciones infringidas los Arts. 1557 y 1649
C.; 2)fallo incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes, Art. 3 No.4 Cas.,
siendo la disposición legal infringida el Art. 1557 C., y 3) fallo que no hace declaración
respecto de algún extremo, Art.3 No.4 Cas., siendo la disposición legal infringida el Art.
1026 Pr.; habiendo declarado inadmisible el recurso relacionado, por los motivos
específicos siguientes; l) fallo que otorga más de lo pedido, Art. 3 No. 4 Cas., porque no
manifestó los conceptos en que fueron violados cada uno de los Arts. 1308, 1597 y 1649
C., y 2) fallo que no hace declaración respecto de algún extremo, Art. 3 No.4 Cas., porque
no expresó los conceptos en que fueron infringidos cada uno de los Arts. 421 Pr. y 2065 C.
Se pide que cumplidos los trámites legales previos, case la sentencia recurrida por los
motivos invocados y en la parte impugnada, pronunciando la que conforme a derecho
corresponde; esto es, la que acceda a lo pretendido por mis poderdantes.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Se considera que la "violación de ley" consiste en la no aplicación de la norma vigente que
era aplicable al caso concreto; es la negación o desconocimiento del precepto legal, de la
voluntad abstracta de la ley, del derecho objetivo, cuya defensa es uno de los fines de la
casación. Se debe analizar como estaban las cosas antes del otorgamiento de la venta
declarada nula. no se debe desconocer que el vínculo jurídico nacido entre el Banco de
Tierras y los cuarenta y ocho deudores, a consecuencia del mutuo que consta en autos, ya
está extinguido, por haberse acogido los deudores a los beneficios establecidos en el Art.
3 de la Ley de Reestructuración de la Deuda Agraria, tal como consta en los documentos
auténticos presentados en fotocopia certificada por Notario, por el apoderado de los
actores, en segunda instancia, antes de la sentencia, los cuales aparecen agregados; no
violó el Art. 1557 C., sino todo lo contrario, lo aplicó en forma correcta al ordenar que el
vendedor, señor Jorge Atilio Magaña Arriaza, devuelva el precio de la venta al Banco de
Tierras, razón por la cual no existe la violación alegada.
En relación a la violación del Art. 1649 C., la Cámara se refirió a la disposición legal citada,
ni al saneamiento por evicción: de conformidad con el Art. 1639 C., el saneamiento por
evicción es una de las obligaciones del vendedor, derivada del contrato de compraventa y
tiene por objeto amparar al comprador en el dominio y posesión pacífica de la cosa
vendida. Según lo dispone el Art. 1640 C., hay evicción de la cosa comprada cuando el
vendedor es privado del todo o parte de ella, por sentencia judicial. Según lo determina el
Art. 1654 C., el comprador a quien se demanda la cosa vendida, lo que debe hacer es citar
al vendedor judicialmente para que comparezca a defenderla; y si nada puede obtener
porque el derecho del tercero era mejor, puede entonces el comprador solicitar la
resolución de la venta y en virtud de la resolución recibirá la devolución del precio. Se
afirmar que la restitución del precio de la venta que debe hacer el vendedor señor
Magaña Arriaza, no la hará como consecuencia del saneamiento por evicción, sino porque
la nulidad declarada del contrato de compraventa, hace volver las cosas al estado anterior
a la celebración del contrato nulo, que no existe la violación del Art. 1649 C.
Con la falta de congruencia, Fallo incongruente con las pretensiones deducidas por los
litigantes, se presenta cuando no existe conformidad de lo resuelto en el fallo con las
pretensiones hechas valer en el juicio por las partes. La falta de congruencia se ha
estimado por la doctrina como "error in procedendo", el cual puede presentarse en tres
formas: l) Cuando se otorga más de lo pedido; 2) Cuando se otorga algo distinto a lo
pedido y 3) cuando se deja de resolver algo pedido. La sentencia puede ser entonces plus
o ultra petita. El Fallo de la Cámara confirmó la sentencia apelada en cuanto a la nulidad
del contrato de compraventa declarada, por encontrarse arreglada a derecho y la reformó
en cuanto ordenó la devolución del precio al Banco de Tierras, decisiones que
corresponden a solicitudes hechas por las partes, por lo que no se configura la
incongruencia o "extra petita" señalada por el recurrente y es improcedente casar la
sentencia, de conformidad con el Art. 1026 Pr. las sentencias definitivas de segunda
instancia se circunscriben a los puntos apelados y a aquellos que fueron propuestos y
ventilados por las partes en primera instancia y a pesar de ello no fueron decididos por el
Juez. Según aparece en el escrito de expresión de agravios del apelante, el punto apelado
fue el fondo del asunto, o sea la nulidad del contrato de compraventa a que se refiere la
demanda, así como la devolución del precio a los cuarenta y ocho compradores. Por lo
que es procedente casar la sentencia recurrida y pronunciar la que fuere legal.
De conformidad con las razones expuestas, disposiciones legales citadas y Arts. 428 y 432
Pr. y 18 Cas. Se ordeno: Cásase la sentencia recurrida, pronunciada por la Cámara,
Declárase sin lugar la excepción perentoria de ineptitud de la demanda, alegada por el
señor Jorge Atilio Magaña Arriaza, por medio de su apodo, Por contener objeto ilícito,
declárase la nulidad absoluta de la compraventa otorgada en esta ciudad, , ante los oficios
del Notario, a favor de los actores, por consiguiente vuelvan las cosas al estado en que se
encontraban antes de la compraventa nula; Como consecuencia de lo anterior, cancélense
en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, así como las que fueren su consecuencia:
Condénase al demandado, señor Jorge Atilio Magaña Arriaza, a devolver la cantidad de un
millón cuatrocientos dieciséis mil novecientos setenta y un colones, cero cuatro centavos,
al Instituto Salvadoreño de Transformación Agraria, suma que constituye el precio de la
venta cuya nulidad se ha declarado en el presente fallo; la cantidad antes mencionada se
devuelve al citado Instituto, con el objeto de que satisfaga, exclusivamente las
necesidades de tierras de los 48 actores en el presente juicio que se han mencionado en
este Fallo; Declárase sin lugar, por improcedente, la pretensión de la parte actora de ser
ellos quienes recibieran la devolución del precio de la venta; Declárase sin lugar, por
improcedente, condenar al Banco de Tierras a pagar daños y costas a las dos partes;
Declárase sin lugar la petición del tercero excluyente, de entregar el precio de la venta al
Estado, por ser improcedente; Declárase que no ha lugar a la condenación de daños,
perjuicios e intereses legales, Condénase al demandado, al pago de las costas procesales
de primera y de segunda instancia.
Número de Referencia: 1387-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 03/06/2002. Hora de Resolución: 09:15:00
Pretensión: Nulidad.
Causa de pedir:
Se pide que se tenga como parte por evacuada la prevención que se le hizo, y que se
continué con el procedimiento correspondiente al Recurso Extraordinario de Casación
hasta el pronunciamiento de la sentencia definitiva, en la cual se ordene casar la sentencia
definitiva pronunciada por la Honorable Cámara. Ello por infracción de ley, literal a) Art. 2
L.C. y como motivo específico Violación de Ley, Art. 3 ordinal 1° L.C. y como precepto
infringido el Art. 732 N° 4 C.C.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
El derecho de todos los traspasos que se han efectuado sobre el inmueble en discusión;
además se hace relación del informe de peritos que se nombraron al efecto por el Juez A-
quo, con el fin de identificar el inmueble titulado por el señor Alejandro Sigüenza Mena,
con el adquirido por compraventa por el señor Héctor Felipe Milián, concluyendo que se
trata del mismo bien, cuya inscripción en el Registro de la Propiedad y que como
consecuencia tiene derecho preferente el señor Milián o Milián España.
Ahora bien, en relación a la violación que aduce el impetrante del Art. 732 N° 4 C.C., es
necesario aclarar que existe violación de ley cuando se omite la norma jurídica que
hubiera podido ser aplicada, pero debiéndose tal omisión a la falsa elección de otra
norma. Al analizar la nulidad solicitada se basó estrictamente en el tracto sucesivo de las
inscripciones realizadas del inmueble en disputa, como lo ordena el Art. 695 inciso
primero del Código Civil, de tal manera que la escritura otorgada por la Sociedad
Consultores Legales y Económicos, Sociedad Anónima, a favor de Héctor Felipe Milián,
tiene derecho preferente sobre el título supletorio expedido a favor del señor Alejandro
Sigüenza Mena.
En relación a la violación atribuida por el recurrente del Art. 732 N° 4 C.C., dicha
disposición expresa: La cancelación, ya sea total o parcial, procede: ….N° 4: cuando se
justifique mejor derecho por un tercero, aunque su título no esté inscrito. Al efecto, debe
interpretarse en su más clara acepción dicha norma, en el sentido que de conformidad al
ordinal cuatro procederá la inscripción "Si en el juicio promovido de conformidad con el
Art. 717, el que demanda con base a un título no inscrito obtiene sentencia favorable,
procederá a inscribir su título y para ello se hace necesario la cancelación de la inscripción
la cual obtendría como consecuencia de su demanda.
En el caso en examen los supuestos de la violación a dicha disposición alegado por el
recurrente de parte del tribunal de alzada, no se han cometido, en el que tiene derecho
preferente a la inscripción del título supletorio del señor Alejandro Sigüenza Mena, de
suerte que por el motivo alegado no procede casar la sentencia de que se ha recurrido y lo
que así deberá de declararse. De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales
citadas y Arts. 428, 432 Pr. y 23 de la Ley de Casación. Declárase que no ha lugar a casar la
sentencia de que se ha hecho mérito; Condénase al señor Alejandro Sigüenza Mena, en
los daños y perjuicios a que hubiere lugar; y al licenciado José Rodolfo Aguilar Bolivar en
las costas como abogado que firmó el escrito de interposición del recurso.
Número de Referencia: 322-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 28/10/2002. Hora de Resolución: 09:00:00
Pretensión: Nulidad de titulo
Causa de pedir:
La Nulidad del documento y la cancelación de la inscripción del documento en el Registro,
motivado por el Error de Derecho en la apreciación de la prueba, infringiendo el Art. 717 C
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Error de Derecho en la apreciación de la prueba. Precepto infringido: Art. 717 C.
Para que tenga aplicación el inciso segundo del artículo 717 C. alegado, el que se deba
admitirse un documento sin registro cuando se presente para pedir la declaración de
nulidad o la cancelación de algún asiento que impida verificar la inscripción de aquel
instrumento; es condición sine qua non, que conste en el proceso el documento que se
pretende hacer valer, la parte actora debió agregar en autos, la escritura pública de
remedición del inmueble disputado, con el objeto de que se inscribiera dicho documento,
como lo expone el artículo ya referido.
En el presente caso, no consta en el proceso el documento de remedición que se pretenda
hacer valer, por lo que la descripción actual del inmueble relacionada en la demanda,
únicamente debe considerarse como un dato adicional, sin que pueda alegarse en base a
dicha descripción, la aplicación del inciso segundo del Art. 717 C. pues como se dijo
anteriormente, este artículo se refiere expresamente a "un instrumento sin registro" y en
el presente proceso dicho instrumento, es decir, la escritura de remedición que ampare
las medidas actuales del inmueble, no fue agregado al proceso, en tal virtud, no existe
error de derecho en la apreciación de la prueba, por no haberse valorado las medidas
actuales del inmueble, ya que la simple descripción técnica agregada a la demanda, no
está contemplada dentro de la excepción a que se refiere el Art. 717 inc. 2º C. Siendo éste,
motivo para confirmar que no procede casar la sentencia recurrida por el motivo de error
de derecho alegado por el recurrente, debiendo así declararse.
POR TANTO: En base a las razones expuestas y con fundamento en los arts. 428 y 432 Pr.
C. y 23 Ley de Casación, Declárase que no ha lugar a casar la sentencia recurrida;
RESOLUCIÓN
Número de Referencia: 280-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 14/06/2002. Hora de Resolución: 11:30:00
Pretensión: Declaración de Resolución de Contrato
Causa de pedir:
Declaración de resolución de contrato por incumplimiento de una de las partes que se
habían obligado, y por el motivo específico de "Interpretación Errónea de la Ley, Art. 3
ordinal 2º L.C., indicándose como precepto infringido el Art. 1425 ordinal 3º del Código
Civil; posteriormente se dio traslado a las partes a fin de que expresaran sus respectivos
alegatos, en el término de Ley, no habiendo hecho uso de este derecho ninguna de las
partes.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Se observa que en el contrato de promesa de venta, es un contrato bilateral, en el que
existe obligación tanto del promitente vendedor de entregar y hacer la tradición del
inmueble objeto de la promesa, como por parte del promitente comprador de entregar el
precio convenido.
En el caso particular que nos ocupa, el promitente vendedor adquirió una obligación
adicional a las ya establecidas, esta era, tener en el plazo de dos meses, los documentos
pertinentes de las declaraciones de herederos presentadas en legal forma al registro
correspondiente, obligación cuyo cumplimiento le correspondía probar, a fin de alegar la
mora del promitente comprador.
En el presente caso, consta de autos que la parte actora probó con las declaraciones de
testigos presentadas, el incumplimiento por parte del demandado, de su obligación de
pagar el resto del precio convenido, al llegar el plazo estipulado; pero no consta en el
proceso, que el actor haya cumplido por su parte, con la obligación que le correspondía,
es decir, tener en legal forma las declaraciones de herederos presentadas al registro
correspondiente, en la sucesión del Coronel Ricardo Arango Carías, ya que el mismo actor
ofrece probar tal circunstancia, pero el único documento solicitado para tal efecto, es una
certificación del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, agregada a fs. 71 de la pieza
principal, en la que consta información general, en relación a los asientos de presentación
de diferentes documentos, seis de ellos referentes a traspasos, dos de testamentos, uno
de modificación de testamento y dos de declaratorias de herederos, de las cuales, no es
posible determinar la prueba que se pretende establecer, ya que ninguno de ellos hace
referencia específica de que se trata de la declaratoria de heredero en la sucesión del
Coronel Arango Carías, y que esta haya sido presentada en el término de dos meses que
se estipuló, condición indispensable para alegar la resolución del contrato de promesa en
base al art. 1360 C. ya que, para demostrar que el promitente comprador se encontraba
en mora, era indispensable probar que de su parte existía solvencia en el cumplimiento de
la obligación que le correspondía; y no habiéndose comprobado en el proceso, que en el
plazo de dos meses la parte actora tenía la documentación que se le había exigido, no es
posible alegar la resolución del contrato atacando la mora por parte del demandado, ya
que ésta no existe, mientras el actor no hubiere probado que cumplió por su parte con la
obligación pactada. Lo anterior en base al principio que establece "la mora purga la mora".
contenido en el Art. 1423 C. el cual expresa: "En los contratos bilaterales ninguno de los
contratantes está en mora dejando de cumplir lo pactado, mientras el otro no lo cumple
por su parte, o no se allana a cumplirlo en la forma y tiempo debido". En razón de lo antes
expuesto, en virtud de haber trascurrido el plazo estipulado por las partes para la
realización del contrato prometido, sin que éstas hubieren cumplido con su obligación
correlativa, es procedente declarar la resolución del contrato de promesa, exonerando a
ambas partes del cumplimiento de la cláusula penal, por no haberse demostrado en el
proceso en cuál de las partes recayó la mora en el cumplimiento del contrato. Casase la
sentencia recurrida, declarase resuelto el contrato de promesa de venta.
TERMINACIÓN
Número de Referencia: 1416-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 25/06/2002. Hora de Resolución: 10:15:00
Pretensión: Terminación de Contrato de Arrendamiento
Causa de pedir:
Terminación de contrato de arrendamiento, por la Causa Genérica: Infracción de ley,
literal a) del Art. 2 L.C., por los Sub-motivos siguientes: 1) Fallo Incongruente con la
pretensiones deducidas por los litigantes, Art.3 No 4 L.C., indicándose como preceptos
infringidos los Arts. 421, 428 y 1026 Pr.C., 2) Violación de ley, Art.3 No 1º L.C., señalándose
como disposiciones infringidas, los Arts. 421, 1090 Pr.C., 1431,1738 No 2º y 1744 C.C., 3)
Error de Hecho en la apreciación de la prueba instrumental, Art.3 No 8º L.C., indicando
como preceptos infringidos los Arts. 258 Pr.C. y 1571 C.C.; y, 4) Interpretación errónea de
ley, Art. 3 No 2º L.C., invocándose como disposición infringida el Art. 1425 C.C. En la
misma resolución se ordenó pasar los autos a la Secretaría, para que las partes
presentaran sus alegatos dentro del término de ocho días, contados desde el siguiente al
de la última notificación.
Criterio:
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
en otras palabras, congruencia entre lo pedido y lo resuelto, ya que, no obstante haber
hecho las anteriores consideraciones respecto del contenido del contrato suscrito por las
partes, su conclusión o fallo se dio en los mismos términos del decretado por el Juez de
Primera Instancia, pues se limitó a confirmar la sentencia de vista, la cual a su vez, declaró
sin lugar la terminación del contrato de arrendamiento simple, que fue la pretensión
hecha valer por el actor en el libelo de su demanda. En ese sentido, no es cierto como lo
dice el impetrante, que en la sentencia no se haya hecho declaración alguna sobre un
extremo de la demanda, pues es ése precisamente el que se analizó y sobre el que recayó
el fallo
La cosa litigada en el presente proceso era la terminación de un contrato de
arrendamiento entre apelante y apelada y no hay lugar a duda alguna que en ello se
centró exclusivamente la actividad de las partes. Sin embargo, os apartáis de ese mandato
y resultáis al final declarando que la actora se encuentra obligada para con la demandada
en virtud del arrendamiento con promesa de venta existente entre ambas a otorgar la
venta prometida, Hay aquí una ruptura lógica y legal del proceso discursivo del
razonamiento acorde a la técnica jurídica, pues el punto debatido no era si la apelante
debía o no cumplir el contrato prometido. Nunca hubo entre las contratantes voluntad
expresa de persistir en el arriendo. El Art. 1470 del citado Código señala las formas que
debe revestir una oferta de pago para que sea válida; formalidades que no se observaron
y que servirían para cuestionar incluso la eficacia de las diligencias respectivas o concluir
que se trata de un pago mal hecho; pero, al margen de tal omisión; hecha la oferta hay, de
parte del juez para el acreedor, una intimación de recibir lo consignado
En base a lo anterior la sala fallo diciendo no al lugar a casar la sentencia por violación a la
ley por pretensiones incongruentes deducidas por los litigantes, violación de la ley.
Número de Referencia: 1530-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 30/09/2002. Hora de Resolución: 12:20:00
Pretensión: Terminación del contrato
Causa de pedir:
Terminación de contrato de promesa de venta
Criterios.
Concepto:
Contrato es una convención en virtud de la cual una o más personas se obligan
para con otras u otras, o recíprocamente, a dar, hacer o no hacer alguna cosa
Clausula penal La cláusula penal es aquella en que una persona, para asegurar el
cumplimiento de una obligación, se sujeta a una pena que consiste en dar o hacer
algo en caso de no ejecutar la obligación principal o de retardar su ejecución
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
Se está pidiendo la terminación del contrato de promesa de venta debido aunque el
comprador no cumplió con el pago debido en las fechas establecidas debido a esto el
comprador cayo en mora
Es entendido entre las partes que si el comprador dejare de pagar por lo menos dos
mensualidades en la forma antes indicada, éste contrato caducará y se dará por
terminado, y la vendedora no devolverá las cantidades de dinero pagadas"
En vista de lo anterior la sala en su fallo dijo no al lugar a casar la sentencia
Número de Referencia: 1380-2002
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 11/11/2002. Hora de Resolución: 12:30:00
Pretensión: Terminación de Contrato de Arrendamiento y Desocupación
Causa de pedir:
Que se declaré no ha lugar a la excepción perentoria de falta de legítimo contradictor, y se
dé por terminado el contrato de arrendamiento celebrado el motivo por el cual se pide es
por interpretación errónea del artículo 346 Pr.
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
La interpretación errónea del art. 346 Pr. C., alegada por el recurrente, no ataca en sí el
verdadero fundamento de la sentencia; pues como quedó establecido anteriormente,
fueron tres los elementos que consideró el Tribunal Ad-Quem, para concluir que no
procedía la condena por los daños y perjuicios ocasionados en el inmueble arrendado;
elementos que no se vieron desvirtuados con el alegato del recurrente, el cual no fue lo
suficientemente claro, ni válido, para establecer una certeza en relación a los daños y
perjuicios ocasionados en el inmueble arrendado. En ese sentido, siendo un requisito
indispensable para que proceda el motivo de interpretación errónea de Ley, que la norma
que se cite como infringida, afecte el verdadero fondo del asunto planteado, lo cual como
ha quedado demostrado, no se cumple en el presente caso, no es procedente casar la
sentencia recurrida por el motivo de interpretación errónea del art. 346 Pr. C., debiendo
así declararse.
Según las disposiciones legales citadas y Art. 417, 418 y 428 Pr. C. y 23 Ley de Casación, No
ha lugar a casar la sentencia recurrida por el motivo de interpretación errónea del Art. 346
Pr. C
INEXISTENCIA.
EN ESTE AÑO NO SE ENCONTRÓ NINGUNA SENTENCIA SOBRE DE ESTA INSTITUCIÓN.
NULIDAD RELATIVA.
En este año no se encontró ninguna sentencia sobre de esta institución.
REVOCACIÓN.
EN ESTE AÑO NO SE ENCONTRÓ NINGUNA SENTENCIA SOBRE DE ESTA INSTITUCIÓN.
RESCILIACIÓN.
En este año no se encontró ninguna sentencia sobre de esta institución.
INOPONIBILIDAD.
En este año no se encontró ninguna sentencia sobre de esta institución.
SENTENCIAS 2003
Inexistencia
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL.
Nulidad: absoluta1
Referencia:
Número de Referencia: 109B-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 26/09/2003
Hora de Resolución: 08:30:00
Pretensión:
Nulidad de Titulo supletorio.
Causa Pretendí:
El demandante señor Juan Antonio Velasco interpone un Juicio Civil Ordinario de Nulidad
de Título Supletorio en contra de señor Juan Antonio Galindo por existir ya un Título
Supletorio inscrito a favor de SANTOS VELASCO y Otros, por ende existe Nulidad Absoluta.
Primera Instancia falla: DECLÁRASE QUE: 1) NO HA LUGAR, las excepciones perentorias
de PRESCRIPCIÓN EXTINTIVA, PRESCRIPCIÓN ADQUISITIVA E INEPTITUD DE LA DEMANDA,
opuestas y alegadas por el Doctor Vidal Antonio Flores Lara, en su carácter de apoderado
general judicial del demandado JUAN ANTONIO GALINDO VELASCO. ABSUÉLVESE al señor
JUAN ANTONIO GALINDO VELASCO, de la acción incoada en su contra, por el señor JUAN
ANTONIO VELASCO.
Cámara FALLA: 1) Confírmase la sentencia venida en apelación, pronunciada a las nueve
horas del día veinte de julio del corriente año, por el señor Juez de Primera Instancia de
Sensuntepeque, en cuanto absuelve al demandado Juan Antonio Galindo Velasco, de la
acción de nulidad de Título Supletorio intentada en su contra, y declara sin lugar las
1 Sentencia s 1508-2003 , 1508-2003 , 109B-2003, 110-2003 y 1459-2003.
excepciones opuestas y alegadas por la parte demandada, quedando a salvo el derecho de
las partes para hacer valer sus pretensiones por la vía legal correspondiente.
No conforme con la sentencia definitiva pronunciada por la Cámara Ad-quem, el señor
Juan Antonio Velasco, interpuso recurso de casación, por el motivo de Violación de Ley
expresa.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
Error de Derecho en la Apreciación de las Pruebas, respecto del Art. 260 ordinal 2° Pr. C.
y el inciso 5° del Art. 35 del Reglamento de la Propiedad Raíz e Hipotecas. El recurrente
hace recaer el vicio que se denuncia, respecto del ordinal 2° del Art. 260 Pr. C., en el hecho
de que dicho precepto dispone que los documentos auténticos tienen valor probatorio
pleno y la Cámara Ad-quem no le ha dado a la certificación literal –agregada de fl. 34 al 37
P. P.- dicho valor. Considera el impetrante que con la referida certificación "se le probó a
la Honorable Cámara, que el inmueble que Titula el señor Juan Antonio Galindo, es nulo
absolutamente porque el mismo ya tiene Título inscrito a favor de Santos Velasco".
Asimismo, en cuanto a la infracción del inciso 5° del Reglamento del Registro de la
Propiedad Raíz e Hipotecas, sostiene el impetrante que dicha disposición atribuye a las
certificaciones literales –expedidas por el registrador respectivo- el mismo valor que el
título primitivo inscrito y que "no obstante ser clara dicha disposición la Cámara no la
toma como prueba de la existencia del Título Supletorio del señor Santos Velasco,
cometiéndose grave violación.
Porque se casó la Sentencia.
Esta Sala FALLA: a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho
mérito; y, b) Condénase al señor Juan Antonio Velasco Castillo, a pagar los daños y
perjuicios a que hubiese lugar; y al Licenciado Mauricio Ruíz Soriano, en las costas del
recurso, como abogado que firmó el escrito de interposición del mismo.
Devuélvanse los autos al Tribunal respectivo, con certificación de esta sentencia para los
fines de ley.
Referencia :
Número de Referencia: 110-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 24/10/2003
Hora de Resolución: 10:15:00
Pretensión:
Nulidad Absoluta en contrato de compraventa con pacto de retroventa.
Causa Pretendi:
El Juicio Civil Ordinario de Nulidad, promovido inicialmente por el señor Andrés Guerra
Leiva y continuado por los ahora recurrentes en calidad de herederos del primero (Andrés
Nelson Guerra Mejía y señora Paula Antonia Mejía de Guerra), contra los señores
Concepción José Cornejo o Concepción José Cornejo Espinoza y Pedro Mártir Reyes Peña.
Porque para que el señor PEDRO MÁRTIR REYES PEÑA pudiera vender al señor
CONCEPCIÓN JOSÉ CORNEJO ESPINOZA, el inmueble que el primero había adquirido con
pacto de retroventa de Andrés (sic) Guerra Leiva, debió notificar a éste de la intención de
vender el inmueble. no se cumplió con la formalidad de dar noticia anticipada al señor
Andrés (sic) Guerra Leiva. Consecuentemente la venta es nula por faltar uno de los
requisitos esenciales.
Primera Instancia, FALLO: Absuélvase a las partes demandadas Señores Pedro Mártir
Reyes Peña y Concepción José Cornejo o Concepción José Cornejo Espinoza de la acción
intentada en su contra por el Señor Andrés Guerra Leiva. Condénase en las costas
procesales al demandante ANDRÉS GUERRA LEIVA. HÁGASE SABER.
La Cámara de la Segunda Sección del Centro, por medio de sentencia definitiva de las
nueve horas y cinco minutos del treinta de abril del año en curso, resolvió: ""POR TANTO:
En congruencia con la motivación que antecede, disposiciones legales citadas y Arts. 417,
428, 429, 431, 432, 1089, y 1090 Pr., a nombre de la República de El Salvador, esta Cámara
Falla: 1) Confírmase en todas sus partes la Sentencia vista en apelación, pronunciada a las
nueve horas cincuenta minutos del día veintidós de mayo de dos mil dos, por la Señora
Jueza de Primera Instancia de Ilobasco…
No conforme con dicha sentencia, los señores Andrés Nelson Guerra Mejía y Paula
Antonia Mejía de Guerra, interpusieron recurso de casación, por "Infracción de ley o de
doctrina legal".--- Nosotros invocamos como causa genérica, la infracción de ley.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
El sub-motivo interpretación errónea de ley: se configura cuando el juzgador aplica la
norma legal que debe aplicar al caso concreto, pero otorgándole una interpretación
equivocada.
Único sub-motivo Interpretación Errónea de Ley, Arts. 1683, 1151 y 1679 C. C.
Interpretación del Inc. 2° Art. 1683 C. C .,
"En lo concerniente a la nulidad absoluta invocada por los apelantes, misma que ha sido
fundada en que no le fue notificado al vendedor primitivo Andrés Guerra Leiva, que se
pretendía enajenar el inmueble; al respecto esta Cámara, estima que ha existido una
interpretación errónea del Inc. 2° Art. 1683 C. C., ya que la exigencia procesal de "La
noticia anticipada", a la que alude el legislador es clara en que opera a favor del
comprador, en este caso al señor Pedro Mártir Reyes Peña, y no por el contrario, a favor
del vendedor Guerra Leiva, además es de traer a colación, que el inmueble fue vendido
por el señor Reyes Peña, cuatro años, un mes, después de haber celebrado el contrato de
compraventa primitivo, superando en mucho los diez meses pactados, ya que de acuerdo
a dicha disposición es el vendedor –para el caso concreto- señor Andrés Guerra Leiva que
en el supuesto ejercicio de la acción derivada del pacto de retroventa, durante un período
no mayor a diez meses a partir del seis de julio de mil novecientos noventa y uno, el que
tenía que dar noticia anticipada al comprador señor Pedro Mártir Reyes Peña de su
intención de recobrar el inmueble objeto del proceso de mérito. Debiendo ser dicha
anticipación de seis meses.”
Porque se casó la Sentencia.
Habiendo dado por parte del Tribunal Ad-quem, la interpretación que legalmente
corresponde al Art. 1683 C. C., la infracción denunciada en la sentencia de que se ha
hecho mérito es inexistente; consecuentemente, no es procedente casar la sentencia por
el sub-motivo interpretación errónea de ley.
Esta Sala FALLA: a) Declárase Inadmisible el recurso por el sub-motivo Interpretación
Errónea de Ley, Arts. 1551 y 1679 C. C.; b) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia
de que se ha hecho mérito; y, c) Condénase al señor Andrés Nelson Guerra Mejía y a la
señora Paula Antonia Mejía de Guerra, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar; y al
Licenciado Tito Sánchez Valencia, en las costas del recurso, como abogado que firmó el
escrito de interposición del mismo.
Referencia:
Número de Referencia: 1459-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 17/11/2003
Hora de Resolución: 15:00:00
Pretensión:
Nulidad absoluta
Causa pretendi
Doña CLEO CASTELLO ESCRICH DE SAMAYOA promueve un juicio civil ordinario de nulidad,
contra el doctor CARLOS ALFREDO RAMOS CONTRERAS Tiénese por parte en su carácter
de Apoderado General Judicial de EDITORA EL MUNDO, SOCIEDAD ANÓNIMA. El título de
propiedad extendido por la Alcaldía Municipal de San Salvador, a las once horas del día
tres de septiembre de mil novecientos noventa y dos, a favor del señor Ricardo Meléndez
Quintanilla, y se ordenó la cancelación de la inscripción UNO del Folio Real CERO UNO-
CERO NOVENTA Y SEIS MIL CUATROCIENTOS VEINTINUEVE- CERO CERO CERO, que
ampara dicho Título, y entre otras, la inscripción a favor de la actora señora Cleo Castello
Escrich de Samayoa, quien busca invalidar el documento de propiedad a favor de EDITORA
EL MUNDO, SOCIEDAD ANÓNIMA, y al mismo tiempo se evidencia que, con la anulación
del título y la cancelación de las inscripciones ordenadas.
Primera instancia, RESUELVE:---A) Ha lugar al rechazo de la demanda interpuesta por la
señora CLEO CASTELLO ESCRICH DE SAMAYOA, B) Líbrese oficio al Registro de la Propiedad
Raíz e Hipotecas de la Primera Sección del Centro, a efecto de que cancele la Anotación
preventiva ordenada a fs. 155 inscrita bajo el asiento 0008 de la matrícula MO55128005.
C) Archívese el presente proceso.
Cámara RESUELVE: Confirmase la interlocutoria recurrida. Condenase en costas a la
apelante.
La parte apelante, estando inconforme con lo resuelto, interpuso recurso de casación por
el motivo de infracción de la ley.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
Concepto:
La demanda, debemos entenderla no únicamente como el acto formal de iniciación del
proceso, sino que también a la posibilidad de que esta lleve implicita la pretensión. En
otras palabras lo proponible o improponible será calificado tanto para la forma como para
el fondo de lo pretendido. Es importante aclarar que dentro de la improponibilidad que
van incorporadas las diferentes figuras que actualmente reconocen como inadmisibilidad,
procedencia e ineptitud, puesto que los tres, en puridad, constituyen un rechazo de la
demanda.
Doctrina:
Bajo la sombra de concepciones modernas, se encuentra la específica figura, creada en
principio, como despacho saneador de la demanda, evitando situaciones o incidentes que
hacen abortar al proceso por indebida gestión, denominada la improponibilidad de la
demanda, conocida en algún sector de la doctrina como rechazo sin trámite completo.
Vale aclarar que quienes llama así a esta facultad contralora la hacen atinadamente, pues
de esa manera no se reduce tal facultad a un rechazo a inicio del proceso, es decir limini
litis, sino en general a un pronunciamiento en cualquier estado del mismo, es decir no solo
limini litis, sino incluso in persecuendi litis, por vicios o defectos en la pretensión (motivo
de fondo) o demanda (motivos de forma) inhibiendo al juzgador que provea una sentencia
satisfactiva, aun cuando se resuelva en la sentencia definitiva. 2
Porque se casó la Sentencia.
En relación al motivo invocado, interpretación errónea de ley, esta Sala en reiteradas
resoluciones ha sostenido que existe interpretación errónea, cuando el Tribunal
sentenciador le da a la norma relacionada un sentido que realmente no tiene, debido a
diferentes causas que lo llevan a darle una interpretación equivocada, independiente de
toda cuestión de hecho.
Tomando en cuenta lo dicho por el recurrente y lo expresado por la Cámara
sentenciadora, se hacen las siguientes consideraciones: La demanda es un acto de
iniciación del proceso, que sirve para diferenciarla del resto de peticiones que dentro de
un proceso puedan surgir. Una demanda con algún defecto de proposición o de
fundamentación originará un proceso en el cual el Organo Jurisdiccional podrá poner de
manifiesto tales vicios. Entonces la demanda débese entender, strictu sensu, como el
2 Revista de Derecho Constitucional N° 20 pág. 23, 24.
mero acto de iniciación formal, típico de parte; en cambio, la pretensión es aquella
manifestación de voluntad enmarcada como queja social, que se eleva a las cumbres
jurisdiccionales.
Esta Sala FALLA: a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho
mérito por ninguno de los motivos invocados.
Resolución 3
Referencia:
Número de Referencia: 1263-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 10/01/2003
Hora de Resolución: 09:44:00
Pretensión:
Resolución de Contrato de Donación
Causa Pretendi:
Hernán Rosa Berríos, conocido por Hernán Rosa, en su carácter personal, el juicio Civil
Ordinario de Resolución de Contrato de Donación, contra el Estado y Gobierno de El
Salvador.
En primera instancia se resolvió de la siguiente manera: DECLARASE resuelto el contrato
de Donación celebrado entre el doctor Hernán Rosa Berríos, conocido por Hernán Rosa, y
el "Estado y Gobierno de El Salvador", según escritura pública otorgada en esta ciudad, a
las once horas del cinco de mayo de mil novecientos setenta y siete, en los oficios del
3 Sentencias 263-2003, 1411-2003 y 1632-2003
notario José Mario Bolaños Orellana, respecto al inmueble que se relaciona en dicho
instrumento, e inscrito a favor del donatario al número diecisiete, Libro doscientos catorce
del Registro de la Propiedad Raíz del departamento de Morazán.
Y no conforme con el mismo, la representación Fiscal interpuso recurso de apelación y al
expresar agravios manifestó: """La representación fiscal es de la opinión que la sentencia
impugnada no esta pronunciada conforme a derecho, ya que el Tribunal que conoció en
primera instancia al decidir sobre el fondo del asunto lo hizo sin tomar en cuenta las
disposiciones legales relacionadas a los hechos que demandante había planteado en el
libelo de su demanda.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales
Concepto:
La donación podría definirse como un acto jurídico entre vivos por el cual una persona
(donante) transfiere a otra (donatario) gratuitamente el dominio sobre una cosa y el
donatario acepta.
Análisis de prueba:
El fin de esa donación según lo dicho por el actor en la demanda que es el donante en
dicho instrumento fue la necesidad en razón de la guerra, de instalar en esa zona una
antena repetidora de la Radio Nacional. El punto medular, es que tal como lo manifestó el
mismo, la finalidad para la cual se otorgó la donación no consta por escrito en el referido
contrato, por lo que orientó la prueba hacia ese punto.
Para ello presentó en primera instancia tres testigos, Por otro lado, se practicó inspección
en el inmueble y la Jueza respectiva corroboró que no existía una antena repetidora en el
lugar, manifestando asimismo que las construcciones que se observan están en mal
estado ó estado de abandono.
En el texto de la escritura respectiva agregada a fs. 8 de la pieza principal, se dice: "Que
por este medio dona de manera irrevocable al Estado y Gobierno de El Salvador, por
medio del Poder Ejecutivo, en el ramo del Ministerio de la Presidencia y de manera pura y
simple la porción del inmueble descrito y desmembrado anteriormente del inmueble
general." pero es evidente que hubo un vacío en el contrato, pues las cláusulas que el
actor alega que se pactaron no constan en el documento, y tampoco aparece en ninguna
parte del contrato la finalidad de la donación, constituyéndola entonces, en una donación
pura y simple, no sujeta a condición ni finalidad alguna.
Doctrina:
Luis Claro Solar, analiza que "por regla general, las palabras de que los contratantes se
han servido, expresan con exactitud su pensamiento; y por consiguiente, cuando el
sentido de estas palabras es evidente y razonable, no hay ningún otro elemento de prueba
que pueda hacer conocer con mayor seguridad la voluntad de las partes". En el presente
caso, el punto que se ha tratado de probar es que la intención de las partes no se consignó
totalmente en el texto del documento, pero se torna muy difícil que ahora se pretenda
probar con testigos la finalidad que no se reflejó en la declaración de voluntad ni del
donante ni del donatario. 4
Por qué se casó la Sentencia.
Decisión de la sala: POR TANTO: De conformidad con las razones expuestas, disposiciones
legales citadas, y Arts. 427, 428, 429, 432, 1089 y 1090 Pr. C., a nombre de la República,
DIJERON: a) Revócase la sentencia venida en apelación; b) Declárase que no ha lugar a la
resolución del contrato de Donación celebrado entre el doctor Hernán Rosa y el "Estado y
Gobierno de El Salvador", según escritura pública otorgada en esta ciudad, a las once
horas del cinco de mayo de mil novecientos setenta y siete; b) Condénase al actor Dr.
Hernán Rosa en las costas de ley
Referencia;
4 Claro Solar, Luis. ("Explicaciones de Derecho Civil y Comparado", Vol. VI)
Número de Referencia: 1411-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 05/09/2003
Hora de Resolución: 09:15:00
Pretensión:
Resolución de Contrato de Compraventa
Causa pretendi:
Los licenciados Rodolfo Antonio Parker Soto y Gregorio Enrique Trejo Pacheco Midence,
abogados, de este domicilio, como apoderados generales judiciales de la "Compañía de
Alumbrado Eléctrico de San Salvador, Sociedad Anónima de Capital Variable", antes
denominada "Compañía de Alumbrado Eléctrico de San Salvador, Sociedad Anónima", de
este domicilio, emprende un Juicio Ordinario de Resolución de Contrato de Compraventa
contra "Empresa Salvadoreña de Inversiones, Sociedad Anónima", abreviadamente
"EMSALIN, S.A
El fallo de Primera Instancia dice: "POR TANTO: En base a las consideraciones anteriores y
a los Arts. 661, 1358, 1360, 1427, 1428 y 1675 C.C.; y Arts. 268, 421, 422, 427, 429, 432, y
439 Pr.C., a nombre de la República, FALLO: A) Declárase sin lugar las excepciones
perentorias de pago y de extinción de la obligación por Novación. B) Declárase resuelto y
sin ningún efecto los contratos de Compraventa y por ende el Reconocimiento de Deuda
celebrado entre la EMPRESA SALVADOREÑA DE INVERSIONES, S.A. y la COMPAÑÍA DE
ALUMBRADO ELECTRICO DE SAN SALVADOR, S.A. de C.V., antes COMPAÑÍA DE
ALUMBRADO ELECTRICO DE SAN SALVADOR, S.A., por Escrituras Públicas Números
SESENTA, SESENTA Y UNO y SESENTA Y DOS otorgadas la primera a las quince horas
treinta minutos; la segunda a las dieciséis (sic.) horas y la tercera a las diescisiete horas,
respectivamente del día seis de noviembre de mil novecientos ochenta y seis; C) Vuelvan
los bienes a la situación jurídica en que se encontraban antes de la celebración de los
contratos que se resuelven; D) Ordénase la cancelación de la Inscripción a favor de la
demandada en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de este Departamento, en el
Libro de Presentaciones Número TRES MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA Y CINCO, Folio
CUATROCIENTOS CINCO Tomo SEISCIENTOS CUARENTA Y TRES al quedar ejecutoriado
este fallo, CH) Condénase a la demandada al pago de los daños y perjuicios ocasionados; y
E) Condénase a la Sociedad EMPRESA SALVADOREÑA DE INVERSIONES, S.A. al pago de las
costas procesales de esta instancia".
El fallo de la Cámara dice; "POR TANTO: En base a las consideraciones anteriores y de
acuerdo a lo dispuesto en los Arts. 1089 y 1091 Pr.C., esta Cámara, a nombre de la
República de El Salvador, FALLA: a) Confirmase lo resuelto en el literal A) del fallo de la
sentencia impugnada, en cuanto declara sin lugar las excepciones perentorias de pago y
de extinción de la obligación por novación; b) Declárase sin lugar la excepción de ineptitud
de la demanda alegada en esta instancia; y c) Refórmase lo resuelto en los literales B) y C)
del fallo antes dicho, de la siguiente forma: B) Declárase resuelto el contrato de
compraventa otorgado por escritura pública número sesenta, celebrado a las quince horas
y treinta minutos del día seis de noviembre de mil novecientos ochenta y seis, ante los
oficios del notario César Augusto Calderón, por la Empresa Salvadoreña de Inversiones, S.
A. y la Compañía de Alumbrado Eléctrico de San Salvador, S.A.; C) Vuelvan las cosas al
estado jurídico en que se encontraban antes de la celebración del contrato. Condénase a
la parte demandada en las costas procesales de esta instancia. En su oportunidad vuelvan
los autos al Juzgado de origen con la certificación de ley. HÁGASE SABER"
No conformes con el fallo de la Cámara, los doctores Alejandro Leonel Gómez Vides y
Mario Héctor Salazar Mena, interpusieron recurso de casación por motivo de infracción
de la ley.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
Análisis de artículo:
La parte recurrente ha alegado la violación del Art. 1678 fnc.2° C, por no haberse aplicado.
Al analizar esta disposición legal, ubicada en el Capítulo De las Obligaciones del
Comprador, resulta que de su texto aparece que ella otorga acción a las partes en el
contrato de compraventa, contra terceros poseedores, en el caso de probarse falsedad o
nulidad de la escritura donde consta que se pagó el precio, pero no concede acción a las
partes entre sí, por lo que esta disposición no es aplicable al caso de autos y no tenía el
tribunal Ad quem, razón alguna para someter el caso a ella.
Análisis de artículo según doctrina:
La doctrina analiza la disposición así: "La cláusula inserta en una escritura pública de venta
de un inmueble, que dice el vendedor tiene recibido el precio, es necesario examinarla
desde un doble punto de vista: entre las partes y con respecto a terceros." Dice el autor,
que el Art. 1934 del Código Civil Colombiano, cuya letra es idéntica a del Art. 1678 del
Código Civil salvadoreño, no se aplica entre las partes, porque rigurosamente se aplica
respecto de terceros, tal como "lo demuestra su texto mismo al decir que sólo en virtud
de la prueba de falsificación podrá instaurarse alguna acción contra terceros poseedores
(o sean las personas que han adquirido la cosa del comprador), con base en una escritura
en que figura pagado el precio. ------- La jurisprudencia colombiana confirma estos puntos
de vista, pues en forma reiterada ha afirmado que la cláusula de haberse pagado el precio,
consignada en una escritura pública, sólo tiene valor entre las partes; pero también ha
sostenido que la contra estipulación privada no afecta a los terceros cuando se haya
hecho para declarar que el precio que figura como pagado, no lo ha sido en realidad, y de
esto se deduzca la resolución del contrato o sobrevenga alguna situación jurídica que
lesione los derechos de aquellos. En el fondo esta distinción sólo obedece a la necesidad
de proteger la buena fe de los terceros" (VALENCIA ZEA, ARTURO- DERECHO CIVIL- Tomo
IV De los Contratos-Tercera Edición- Editorial TEMIS - Bogotá, Colombia- 1970-Págs. 107 y
108).
Sala estima, que no se ha incurrido en la infracción de ley alegada por los recurrentes,
por lo que no procede casar la sentencia de mérito.
Referencia
Número de Referencia: 1632-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 22/10/2003
Hora de Resolución: 08:00:00
Ca. 1632 S.S.
Pretensión:
RESOLUCIÓN DE CONTRATO DE PROMESA DE VENTA.
Causa pretendi:
El licenciado Jorge Alberto Iglesias López, como apoderado general judicial del señor
Adolfo Antonio Espinoza, conocido por Adolfo Antonio Espinoza Peñate promueve el
JUICIO CIVIL ORDINARIO DE RESOLUCIÓN DE CONTRATO DE PROMESA DE VENTA contra
Rogelio Miguel Ángel Tobar, conocido por Rogelio Tobar.
El fallo de Primera Instancia, en lo principal dice: "POR TANTO: En base a los anteriores
considerandos y a lo dispuesto en los Arts. 1356, 1360, 1423, C.C. y Arts. 417, 421, 422,
427, 429, 432 y 439 Pr. C., a nombre de la República de El Salvador, FALLO: A) DECLARASE
QUE NO HA LUGAR A LA EXCEPCION PERENTORIA DE COSA JUZGADA; B) DECLARASE
RESUELTO EL CONTRATO DE PROMESA, celebrado entre los señores ADOLFO ANTONIO
ESPINOZA y ROGELIO MIGUEL ANGEL TOBAR, CONOCIDO POR ROGELIO TOBAR…
Por afectar los intereses de su representado, la licenciada Vilma Yanira Buruca
Hernández, actuando en el carácter indicado, interpuso recurso de apelación de la
anterior sentencia; y la Cámara mediante fallo de las quince horas treinta minutos del
cuatro de marzo anterior, resolvió: "POR TANTO, de conformidad a los razonamientos
antes efectuados, disposiciones legales citadas y Arts. 1089 y 1092 Pr.C., a nombre de la
República de El Salvador, DIJERON: 1) Confirmase la sentencia recurrida en el literal A) y se
revoca, en todo lo demás; 2) Dec1árase sin lugar la resolución del Contrato de Promesa de
Venta celebrado entre los señores ADOLFO ANTONIO ESPINOZA y ROGELIO MIGUEL
ANGEL TOBAR, conocido por ROGELIO TOBAR, en esta ciudad, a las diez horas del día trece
de septiembre de mil novecientos noventa y uno ante los oficios del notario Jesús Antonio
Portillo Anchissi; 3) Declárase ha lugar a la Reconvención o Mutua Petición interpuesta por
la licenciada Vilma Yanira Buruca Hernández como mandataria del señor Rogelio Miguel
Angel Tobar, conocido por Rogelio Tobar, y en consecuencia, el señor ADOLFO ANTONIO
ESPINOZA, debe otorgarle al señor ROGELIO MIGUEL ANGEL TOBAR, conocido por
ROGELIO TOBAR, la escritura pública de compraventa del cincuenta por ciento del total de
los inmuebles de su propiedad situados en jurisdicción de El Rosario, Departamento de La
Paz, inscritos bajo el número CIENTO VEINTIDÓS de libro CIENTO CUARENTA de propiedad
del departamento de la Paz; Condénase en las costas procesales de ambas instancias, a la
parte actora señor ADOLFO ANTONIO ESPINOZA.
El licenciado Iglesias López, como apoderado del demandante, interpuso recurso de
casación y el cual fundamentó en los siguientes términos: "2. PRIMER MOTIVO EN QUE
FUNDAMENTO EL RECURSO. Infracción de ley. Art. 2 literal a) "Ley de Casación". SUB
MOTIVO. Violación de ley. Art. 3 ord. 1°. "Ley de Casación".
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
VIOLACIÓN DE LEY RESPECTO DE LA INFRACCION DEL ARTICULO 260 ord. 4° Pro C.
La disposición que se cita como violada EXPRESA: "Art. 260.- Hacen plena prueba, salvo los
casos expresamente exceptuados, los instrumentos auténticos. Se entienden por tales: ...
4°) Las certificaciones de las actuaciones judiciales de toda especie, las ejecutorias y los
despachos librados conforme a la ley."
Aunque el concepto de inaplicación no sea empleado por la ley, actualmente lo admite la
jurisprudencia del mundo casacional, que construye al lado de una violación positiva,
referida a las características generales de la norma que se maneja, una violación negativa,
o por no aplicación, que es la que verdaderamente da sentido a la figura que nos ocupa.
Cabe señalar que si bien la Cámara Ad quem, no eligió en todo el recorrido de su
sentencia, aunque fuese en forma errada una norma para aplicarla al caso sub lite, ignoró
por completo, esto es, pretirió traduce el Art. 260 ord. 4° Pr C., Obvio que con tal
proceder, jurídicamente incurrió dicho tribunal, en una Violación de Ley, cuando se deja
de aplicar la norma que tribunal, en una Violación de, Ley, vale decir, en una debía
aplicarse, haciéndose una falsa elección de otra, con mayor razón incurre el juzgador en
tal vicio, cuando no aplica la norma que correcta y legalmente debió haber sido aplicada
(Violación Negativa).
Concepto:
La ejecutoria, autoridad de cosa juzgada y su principal efecto es, entre otros, la ejecución
en caso de que sea de condena y él no es más que la resolución judicial que ha adquirido
vencido no acate el mandato de la justicia.
Consiguientemente, se impone casar la sentencia por el referido submotivo de Violación
de Ley.
INTERPRETACIÓN ERRÓNEA DE LA LEY INFRACCION DEL ARTICULO 1443 INC. l° C.
Concepto:
La interpretación errónea como sub-motivo de casación consiste en darle a la norma un
sentido distinto del que lógicamente tiene, o una interpretación equivocada,
desatendiendo su tenor literal y los demás elementos de interpretación, tergiversando los
efectos jurídicos de la misma.
El Art. 1443 inc. 1° C. manda: "Puede pagar por el deudor cualquiera persona a nombre
del deudor, aun sin su conocimiento o contra su voluntad, y aún a pesar del acreedor.
Ya que el legislador al preceptuar que puede pagar por el deudor cualquiera persona,
incorporó también el requisito: que esa persona lo haga "a nombre del deudor", ello por
una parte; y por otra, el legislador también previó: "aún sin su conocimiento o contra su
voluntad", refiriéndose al conocimiento o voluntad del deudor y no de la(s) personas que
pagan por él.
La Cámara cuando dice que "en este caso las nominadas personas pudieron haber
cancelado la deuda, ignorando o a sabiendas que el señor Rogelio Miguel Ángel Tobar,
conocido por Rogelio Tobar, se había comprometido al pago de las mismas, quedándoles a
dichos señores a salvo su derecho para hacer lo que consideren pertinente", se está
limitando a narrar la forma en que los hechos probablemente se sucedieron, y no está
haciendo una interpretación del Art. 1443 inc. 1° en lo que respecta al pago de una deuda
sin el consentimiento o contra la voluntad del deudor.
En ese sentido, no es procedente casar la sentencia recurrida por el motivo de
interpretación errónea del Art. 1443 inc. 1°C., debiendo así declararse.
INTERPRETACIÓN ERRÓNEA DE LA LEY. INFRACCION DE LAS CLAUSULAS "II", "III"
"IV" Y "V" DEL CONTRATO DE PROMESA DE VENTA CELEBRADO ENTRE EL SEÑOR
ADOLFO ANTONIO ESPINOZA y EL SEÑOR ROGELIO MIGUEL ANGEL TOBAR.
Concepto:
Son partes en un contrato las personas que intervienen en su celebración, cuyo
consentimiento le dio vida. Debe considerarse también como partes, a aquellos que sin
intervenir personalmente en el contrato, actuaron debidamente representados.
El Art. 1416 C. EXPRESA: ""Todo contrato legalmente celebrado es obligatorio para los
contratantes, y sólo cesan sus efectos entre las partes por el consentimiento mutuo de
éstas o por causas legales."" Tales expresiones indican de una manera singularmente
enérgica, la fuerza obligatoria del contrato para las partes. Y, es que para éstas, el
contrato constituye una verdadera ley particular, a la que deben sujetarse en sus mutuas
relaciones, del mismo modo que a las leyes propiamente dichas.
La interpretación formulada por parte de la Cámara Ad quem, a juicio de esta Sala, no es
la correcta, por no ser conforme con lo estipulado en forma expresa por los intervinientes
en la cláusula "III" de dicho contrato.
Obviamente se impone casar la sentencia de que se trata por el sub motivo de que el
fallo se basa en una Interpretación Errónea de Ley.
ERROR DE DERECHO INFRACCION DEL ARTICULO 240 Pr.C.
Concepto:
El error de derecho en la apreciación de las pruebas se configura cuando el juzgador no da
a los medios de pruebas impugnados el valor que jurídicamente les corresponde según la
ley, es decir, que el juzgador debe dar a la prueba producida legalmente el valor que la ley
le asigna.
En el caso en cuestión, la Cámara no le ha dado a la prueba controvertida un valor distinto
al que la señala la ley; tampoco ha aplicado incorrectamente el sistema preferencial de
pruebas que el Código de Procedimientos Civiles señala; ni tampoco se deduce una
apreciación arbitraria de la prueba. Si el recurrente se encuentra en desacuerdo con la
Cámara sentenciadora por haber considerado pertinente esa prueba al momento de fallar,
esa situación se escapa o se sale del supuesto contemplado por la Ley de Casación como
error de derecho en la apreciación de las pruebas.
En suma, pues, habida cuenta las razones dichas no procede casar la sentencia recurrida
por los motivos alegados.
Por qué se casó la Sentencia.
POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y Arts. 421,
422 Y 428 Pro C. y 18 de la Ley de Casación, a nombre de la República, DIJERON: 1°
Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito, por el motivo
Infracción de Ley y el sub motivo Interpretación Errónea de Ley: precepto infringido Art.
1443 inc. 1° C.; y, asimismo, por el motivo Infracción de Ley y sub motivo Error de
Derecho: precepto infringido Art. 240 Pr. C.; 2° Cásase la sentencia recurrida por el motivo
Infracción de Ley y el sub motivo Interpretación Errónea de Ley: cláusulas infringidas, "II",
"III", "IV" Y "V" del contrato de Promesa de Venta, celebrado entre los señores Adolfo
Antonio Espinoza y Rogelio Miguel Ángel Tobar, conforme escritura pública otorgada en
los oficios del notario Jesús Antonio Portillo Anchissi, a las diez horas del trece de
septiembre de mil novecientos noventa uno; y, consiguientemente, pronuncié se la legal;
3° Declárase que no ha lugar a la Reconvención o Mutua Petición interpuesta por la
licenciada Vilma Yanira Buruca Hernández, como mandataria judicial de don Rogelio
Miguel Ángel Tobar, conocido por Rogelio Tobar; 4° Declárase resuelto el contrato de
Promesa de Venta otorgado entre dichos señores, de conformidad a la escritura pública
celebrada en esta ciudad, a las diez horas del trece de septiembre de mil novecientos
noventa y uno, en los oficios del notario Jesús Antonio Portillo Anchissi, relativo a los
inmuebles sitos en jurisdicción de El Rosario, Departamento de La paz;
consecuentemente, ordénase la cancelación de la presentación de dicho documento y, al
efecto, líbrese oficio al Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Tercera Sección del
Centro, con sede en Zacatecoluca, Departamento de La Paz; y condénase a don Rogelio
Miguel Ángel Tobar, a la indemnización de perjuicios; y, 5° Condénase al pago de las
costas de ley a la parte perdidosa.
REVOCACIÓN
NO SE ENCONTRÓ JURISPRUDENCIA SOBRE ESTA CAUSAL
DE INEFICACIA EN LOS CONTRATOS.
RESCILIACIÓN
NO SE ENCONTRÓ JURISPRUDENCIA SOBRE ESTA CAUSAL
DE INEFICACIA EN LOS CONTRATOS.
TERMINACIÓN 5
Referencia:
Número de Referencia: 1513-2003
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 29/07/2003
Hora de Resolución: 10:15:00
1513 Cas. S.S.
Pretensión:
TERMINACIÓN DE CONTRATO
Causa pretendi:
Rodrigo Aguilar González, de este domicilio, actuando como Apoderado de "AMANCO EL
SALVADOR, SOCIEDAD ANÓNIMA", abreviadamente "AMANCO EL SALVADOR, S.A." ó
"AMANCO S.A.", de este domicilio, promueve el JUICIO CIVIL ORDINARIO DE
TERMINACIÓN DE CONTRATO contra "PARQUES DE DIVERSIONES, S.A. DE C.V." ó
"PARDISA, S.A. DE C.V.", de este domicilio, a fin de que en sentencia definitiva se declare
terminado el contrato de arrendamiento celebrado entre ambas partes, ordene la
desocupación del inmueble y se le condene al pago de los cánones adeudados hasta su
completa desocupación y al pago de las costas procesales.
El Fallo de Primera Instancia, en lo principal dice: " POR TANTO: De conformidad a lo
expresado y con base a lo dispuesto en los artículos 1573, 1730, 1738 y 1765 C.C., 127,
417. 421, 422, 427, 429, 432, 439, 521 y siguientes del Pr.C., a nombre de la República de
El Salvador, FALLO: a) DECLARASE TERMINADO el Contrato de Arrendamiento, existente
entre las Sociedades AMANCO EL SALVADOR, SOCIEDAD ANÓNIMA, que puede abreviarse
5 1513-2003
AMANCO EL SALVADOR, S.A. ó AMANCO S.A., y PARQUES DE DIVERSIONES, SOCIEDAD
ANÓNIMA DE CAPITAL VARIABLE, que se abrevia PARQUES DE DIVERSIONES, S.A. DE C.V…
Por afectar los intereses de su representada, el doctor José Antonio Mena, interpuso
recurso de apelación de la anterior sentencia; la Cámara, por sentencia de las doce horas
del veintisiete de febrero del presente año, resolvió lo siguiente: "POR TANTO: De
conformidad a las razones expuestas y disposiciones legales citadas y Arts. 1089 y 1091
Pr., a nombre de la República de El Salvador, DIJERON: a) Declárase sin lugar la excepción
de ineptitud de la demanda, así como de la nulidad absoluta de la sentencia definitiva
recurrida; b) Confírmase la sentencia en el literal b), en el sentido que no ha lugar a la
desocupación del inmueble arrendado, por estar éste ya desocupado, así como el literal
c), en cuanto a que los intereses por mora, se deberán pagar hasta el día de la entrega del
inmueble arrendado. Condénase en costas al apelante. Vuelva la pieza principal al Juzgado
de su origen con certificación de ley."
No conforme con dicha resolución, el doctor José Antonio Mena, actuando en el carácter
indicado interpuso recurso de casación por el quebrantamiento de las formas esenciales
del Juicio.
Criterios o lineamiento jurisprudenciales:
POR FALTA DE APERTURA A PRUEBA EN SEGUNDA INSTANCIA", CON INFRACCION
DE LOS ARTS. 1014, 1019 Y 1020 PR.C.
la Cámara dijo: " Por alegada y opuesta de parte del doctor José Antonio Mena, la
excepción de ineptitud; y sobre la solicitud de apertura a prueba declárase sin lugar, ya
que de conformidad al Art. 1019 Pr., la apertura a prueba en Segunda Instancia tiene
carácter excepcional y taxativo por estar específicamente señalando los motivos por lo
que tiene lugar y del escrito del doctor Mena, no puede apreciarse cuál es la causa de las
contempladas en el artículo citado para fundamentar la recepción a pruebas". Asimismo,
al resolver sobre la revocatoria de dicha resolución, solicitada por el doctor Mena.
Es más, la litis quedó limitada por la demanda y la contestación, conforme a los Arts. 201 y
228". Pues bien, la apelación en nuestra legislación procesal, constituye una fase del
juicio, no un juicio nuevo, en ese sentido, el legislador estableció la prueba con carácter
excepcional, determinando en forma taxativa los casos en que procede. Se dice, pues, que
se admiten ciertas pruebas y la probanza de ciertas excepciones, de ciertos puntos, con
excesiva limitación, sin poder alegarse nuevos hechos; y, procurando no alterar la
naturaleza de la causa principal.
Asimismo, el recurrente sostiene que la Cámara, con su argumentación, quiso imponerle
la presentación de una determinada prueba, olvidando que son las partes las que deciden
qué tipo de prueba aportar. Respecto de ello esta Sala estima necesario puntualizar, que si
bien las partes tienen el derecho subjetivo de probar, éste se limita en cada proceso a las
nociones de conducencia, pertinencia y utilidad de la prueba.
El caso planteado por el recurrente no está comprendido en los enumerados
taxativamente por las precitadas normas, no siendo suficiente además, para abrir a
pruebas, haberla solicitado en el tiempo que para ello requiere el Art. 1020 Pr.C.; por
consiguiente, no existiendo el vicio atribuido por el impetrante, no procede casar la
sentencia por este motivo.
"VIOLACIÓN DE LEY", RESPECTO DE LOS ARTS. 1416, 1736 y 1737 PR.C.
Infracción del Art. 1416 C.C.
Carece de fundamento, en tanto que, el hecho de que como el mismo lo afirma, el plazo
del contrato ya había expirado al momento de la presentación de la demanda, no significa
que el arrendatario no esté obligado a pagar ningún canon de arrendamiento, ni intereses
por mora, por el hecho de que el contrato había dejado de surtir efectos. Lo anterior, en
virtud de que, en el caso de que se trata, no obstante finalizado el plazo del
arrendamiento, el arrendatario incurrió en mora en el pago de los cánones de
arrendamiento desde el doce de marzo del año dos mil, es decir, más de tres meses antes
de vencerse aquél, por lo que el arrendante está en todo su derecho de pedir el pago de
los cánones adeudados y los intereses pactados por la mora. La Cámara no ha incurrido en
violación de la precitada disposición, no procediendo casar la sentencia por este motivo.
Infracción del Art. 1736 C.C.
El Art. 1736 C.C. establece la manera en que debe hacerse la restitución de la cosa raíz
arrendada, y al respecto dice: "La restitución de la cosa raíz se verificará desocupándola
enteramente, poniéndola a disposición del arrendador y entregándole las llaves". De lo
anterior se colige que la restitución implica tres aspectos: a) La desocupación; b) El poner
a disposición del arrendador la cosa arrendada; y, c) Entregar las llaves (si las hubiere). En
el caso en estudio, debido a que la cosa raíz objeto del arriendo es un inmueble sin
construcciones, obviamente solamente debieron concurrir para tener por restituido éste,
los primeros dos elementos; es decir, la desocupación y la entrega del mismo al
arrendante. En otras palabras, ponerlo a su disposición, lo que implica, además, poner al
arrendador en posesión del inmueble.
Como ha quedado demostrado en autos y como lo afirma la Cámara en la sentencia
impugnada, el inmueble arrendado únicamente fue desocupado, pues el acta notarial que
se levantó no se hizo a presencia del arrendante, no siendo suficiente para tener por
restituido el inmueble, que se haya desocupado, ya que debió haberse puesto a
disposición del arrendante, haciéndole de su conocimiento oportunamente de la
desocupación del mismo. En tal virtud, no habiéndose dado los presupuestos exigidos por
la norma citada, a juicio de esta Sala, la Cámara ad-quem no incurrió en el vicio que se le
atribuye, por lo que, al igual que en el sub-motivo anterior, no procede casar la sentencia
por este sub-motivo.
Infracción del Art. 1737 C.C.
Al respecto se advierte, que el Art. 1737 C.C. establece como requisito para que el
arrendatario incurra en mora de la restitución de la cosa arrendada, que se haya hecho el
requerimiento para tal efecto de parte del arrendante. Ciertamente no se ha establecido
en el proceso, que, previo a la interposición de la demanda, el arrendante haya requerido
al arrendatario la entrega del inmueble; sin embargo, pertinente es señalar, que al
interponerse la demanda en contra del arrendatario y serle notificado y emplazado de la
misma, se le dio la oportunidad de apersonarse al juicio, pudiendo, en consecuencia,
alegar los hechos o excepciones en su defensa, no habiendo hecho uso, oportunamente,
de su derecho de defensa, tramitándose el juicio en rebeldía, por lo que la omisión por
parte del arrendante, respecto a la falta de requerimiento de restitución del inmueble
previo a la demanda, se subsanó con el llamamiento hecho judicialmente a efecto de
apersonarse al juicio y controvertir los hechos que se le atribuían en la demanda. En tal
virtud, habiéndose establecido en autos, que el arrendatario no ha hecho entrega al
arrendante del inmueble objeto del arriendo, es decir, ponerlo a disposición del mismo,
tal como lo afirma la Cámara, éste continúa vinculado al contrato base de la pretensión,
debiendo cancelar los cánones desde la fecha en que incurrió en mora hasta el día en que
verifique la entrega del inmueble arrendado. Por ende, la Cámara no ha incurrido en la
infracción de la citada disposición habiendo dictado la sentencia de mérito conforme a la
ley, por lo que tampoco procede casar la sentencia por este sub-motivo.
Por qué se casó la Sentencia.
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y Arts. 417,
418, 428 y 432 Pr. C. y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República, esta Sala
FALLA: a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito; y, b )
Condénase a "PARQUES DE DIVERSIONES, S.A. DE C.V." abreviadamente "PARDISA, S.A.
DE C.V.", de este domicilio, a pagar los daños y perjuicios a que hubiese lugar; y al doctor
José Antonio Mena, en las costas procesales, como abogado que firmó el escrito de
interposición del recurso.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA CON RELACION A ESTA
CAUSAL.
SENTENCIAS 2004
Ineficacia en los contratos
Inexistencia
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA REFERENTE A ESTA
CAUSAL
NULIDAD: ABSOLUTA 6
Referencia:
Número de Referencia: 1730-2004
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 30/04/2004
Hora de Resolución: 10:30:00
N° 1730 S.S.
Pretensión:
Nulidad absoluta
Causa Pretendi:
La señora Mercedes Rosa Henríquez de la Cruz, conocida por Mercedes Rosa Henríquez
Hernández, promueve el juicio civil ordinario de nulidad contra los señores Francisco José
Chavarria Kleinhenn y Héctor Dionisio Alvarenga.
La sentencia pronunciada por el Juez Primero de lo Civil de esta ciudad dice así:"""POR
TANTO: En base a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y artículos 417, 421,
422, 427, 429, 439, 514 y siguientes del Pr. C., a nombre de la República de El Salvador,
FALLO: 1) Declárase inepta la demanda presentada por el Abogado EDWARD SIDNEY
BLANCO REYES en su calidad de apoderado de la señora MERCEDES ROSA HENRIQUEZ DE
CRUZ conocida por MERCEDES ROSA HENRIQUEZ HERNANDEZ en contra de los señores
HECTOR DIONISIO ALVARENGA conocido por DENNIS HECTOR ALVARENGA y FRANCISCO
JOSE CHAVARRIA KLEINHENN…
La resolución pronunciada por la Cámara Primera de lo Civil de la Primera Sección del
Centro dice:""""POR TANTO: En base a lo antes expuesto, disposiciones legales citadas y
6 Sentencias :1730- 2004, 1254-2004 , 1365-2004 y 247-C-2004
Arts. 1089 y 1092 Pr. C., a nombre de la República de El Salvador, DIJERON: A) Revócase el
numeral 1) de la sentencia venida en apelación por no estar ajustado a derecho; B)
Absuélvase a los demandados doctor FRANCISCO JOSE CHAVARRIA KLEINHENN y señor
DIONISIO ALVARENGA, conocido por DENIS HECTOR ALVARENGA, de la demanda
intentada en su contra, en nombre de la señora MARCEDES ROSA HENRIQUEZ DE CRUZ,
conocida por MERCEDES ROSA HENRIQUEZ HERNANDEZ; C) Confírmase los numerales 2) y
3) de la sentencia de que se conoce; y D) Condénase en las costas de esta instancia a la
apelante.
La parte apelante, encontrándose inconforme con lo resuelto, interpuso recurso de
casación.
Criterios o lineamiento jurisprudenciales:
Los recurrentes hacen descansar su inconformidad con la sentencia impugnada en el
hecho de que la Cámara sentenciadora no le dio valor probatorio a una certificación
expedida por el Juez Cuarto de lo Penal de este Distrito Judicial.
Del estudio del proceso aparece que no es cierto lo afirmado por los recurrentes, pues en
el libelo de la sentencia de segunda instancia, consta que el Tribunal de alzada hizo el
estudio de la certificación presentada y que contiene los pasajes del juicio penal contra
Donaldo Alvarado y José Arturo Castro González; además le dan el valor de plena prueba,
citando la disposición que consideran infringida los impetrantes,. Art. 260 ordinal 1° Pr. C.,
afirmando que con ello no se probaron los hechos alegados por la parte actora en su
demanda.
Además se menciona que en dicho documento aparecen declaraciones de testigos, que no
puedan ser valoradas como prueba, ya que éstos deben declarar ante el Juez que conoce
de la causa, o por requisitoria, de conformidad al Art. 305 Pr. C.
A criterio de este Tribunal para que pueda existir igualdad de condiciones y de
oportunidades procesales a las partes, es necesario que sea ante el Juez del proceso, ante
quién se viertan las pruebas, a fin de que éstas puedan ser controvertidas por aquéllos; y
sobre todo, para que no se rompa el principio de inmediación de la prueba que regula el
Art. 305 Pr. C., por lo que los argumentos de la Cámara sentenciadora los comparte esta
Sala en virtud de haber adecuado su proceder judicial a la norma de mérito.
Consecuentemente a juicio de esta Sala, no existe el error de derecho alegado, porque se
pretendió probar hechos con prueba impertinente. Por ende no cometió infracción la
Cámara sentenciadora al no darle el valor que los recurrentes pretendían se le diera. De
manera, pues, que no existe el sub motivo para casar la sentencia impugnada y lo que
así deberá de declararse.
Referencia:
Referencia: 1254-2004
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 23/08/2004
Hora de Resolución: 12:24:00
N° 1254 S.S.
Pretensión:
Nulidad de escritura de mutuo Hipotecario y su inscripción registral.
Causa Pretendi:
El licenciado Fredy Armando Jiménez Gómez, en su carácter de apoderado de la señora
María Isabel Balseiro Acuña, ahora de Hecht, conocida por Isabel Balseiro Acuña y
continuado por el doctor José Napoleón García Ramírez, promueven un juicio civil
ordinario de nulidad de escritura de mutuo Hipotecario y su inscripción registral contra el
señor Francisco Alas Sánchez.
el fallo de primera instancia dijo:""""POR TANTO: De conformidad a los considerandos
anteriores y Arts. 417, 421, 422, 427, 439 y 127 Pr. C., 1571, 1577, 1902 del Código Civil, a
nombre de la República de El Salvador FALLO: Declárase sin lugar la Nulidad de Escritura
Pública de Mutuo Hipotecario solicitada por el Licenciado Fredy Armando Jiménez Gómez,
en su calidad de Apoderado General Judicial de la señora MARIA ISABEL BALSEIRO ACUÑA,
ahora de HECHT, conocida por ISABEL BALSEIRO ACUÑA, en consecuencia absuélvase al
demandado señor FRANCISCO ALAS SANCHEZ de la acción entablada en su contra…
El fallo de segunda instancia dice:"""POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas,
disposiciones legales citadas y Arts. 1316, 1319, 1551, 1569 y 1902 C.; 237, 421, 1089 y
1090 Pr. C., a nombre de la República de El Salvador, DIJERON: 1) CONFIRMASE la
sentencia venida en apelación dictada por el señor Juez Quinto de lo Civil de esta ciudad, a
las nueve horas del doce de noviembre del año retro próximo, por encontrarse arreglada a
derecho….
No conforme con dicho fallo, el doctor José Napoleón García Ramírez en la calidad
indicada interpone el recurso de casación.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
El recurrente alega como primer motivo de su recurso violación de ley.
Este Tribunal en reiteradas sentencias ha sostenido que "existe violación de ley cuando el
Juzgador en la sentencia desconoce el texto de una norma o la deja de aplicar a un caso
concreto, independiente de toda cuestión de hecho; por lo que el tribunal de casación
debe tener como hechos los reconocidos en la sentencia".
El impetrante sostiene que la Cámara sentenciadora pretende en su sentencia que por el
"hecho de que en el Poder General Judicial, se introdujo supuestamente en aplicación del
artículo 1902 C. una cláusula especial en la que se autoriza a la apoderada para hipotecar
un inmueble determinado, la apoderada tenía facultades para también adquirir
obligaciones por el monto, condiciones y estipulaciones que libremente determinen, a fin
de garantizarlos con hipotecas sobre el inmueble identificado, lo que obviamente es una
aplicación indebida del Art. 1902 C.; por lo que la Cámara cometió la infracción de ley por
violación de la misma, al no aplicar, debiéndolo hacer, de acuerdo al planteamiento de la
demanda interpuesta, los artículos 1316, 1892, 1551 y 1552 C.C. aplicando en cambio, en
forma errónea los Arts. 1319 y 1902 C.C.
que se encontraba apegada a derecho, siendo lo esencial de la sentencia vista en
apelación lo siguiente: ""La parte actora no probó" los extremos de la demanda, puesto
que establece que doña María Isabel Balseiro Acuña, ahora de Hecht, conocida por Isabel
Balseiro Acuña, no otorgó el poder especial para hipoteca, suscrito por ella ante los oficios
notariales del doctor Oscar García, pues falta probar que la firma que calza el poder
mencionado es falsa y por ende la mandataria María Juana Acuña y Vásquez, no podía
hipotecar el inmueble ahora en litigio a favor del demandado Francisco Alas Sánchez"; -y
continúa–"pues al decir la escritura de poder especial para hipoteca que confería la
facultades contenidas en el artículo ciento trece del Código de Procedimientos Civiles el
numeral sexto de dicho artículo ya derogado facultaba conceder el mandato para recibir
cantidades de dinero y otorgar escritura de cualquier clase, por lo que es lógico y evidente
que si no fijó un valor especial para hipotecar el inmueble especificado en la cláusula en
mención, es por que aceptaba fijarlo mediante mutuo acuerdo con el acreedor, fuese
quien fuese de acuerdo al Art. 113 Pr. C. que ahora está reformado, porque en la época en
que se otorgó el poder bastaba que se englobaran las facultades, manifestándose que se
otorgaban las facultades generales que dicha disposición prescribía, argumento que acoge
esta Sala por ser acordes al punto planteado.
Inc. 1° del Art. 1316 C.C. al expresar: que no se reconoce la falta de consentimiento
existente en el contrato; porque "si" la Cámara hubiera centrado su análisis en el punto
referido a la falta de consentimiento alegada, hubiera examinado y aplicado dicha
disposición, pero no fue así.
No se pronunciará por cuanto en el razonamiento que dá en la prevención que se le hizo,
no fue claro y en ese sentido fue indebidamente admitido el recurso por violación en el
Art. 1316, y como consecuencia el Art. 1892 C.C. que es la disposición que vincula al 1316
C.C., no se aclaró, ni mucho menos se dijo cómo es que la Cámara lo infringió, lo que así
deberá de declararse.
Se evidencia que aplicó el Art. 1551 C.C. y que con respeto al Art. 1552 C.C., si bien no lo
aplicó, no por ello lo violó; pues para el caso de autos no era trascendental hacerlo y es
más, el contrato suscrito por la señora María Juana Acuña Vásquez no adolece de nulidad,
pues llena todos los requisitos señalados en el art. 1316 C.C., lo que la Cámara puntualiza
en su sentencia al afirmar: ""en el caso en examen difícilmente se evidencia que el
instrumento base de la pretensión no adolece de nulidad", de tal manera que dadas las
razones expresadas, no procede casar la sentencia por el motivo de violación invocado lo
que así deberá de declararse.
Hace descansar su argumento en el sentido que desconoció el valor probatorio a la
certificación registral y fotocopia certificada por notario, presentados como pruebas en el
proceso ordinario, así como la compulsa practicada respecto del mutuo hipotecario y
poder, con base al cual se acreditó la personería de la compareciente en dicho
instrumento, siendo los preceptos infringidos los Arts., 258 y 260, ambos Pr. C., así como
el Art. 30 de la "Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras
Diligencias", pues no se les reconoce según el interponente valor probatorio alguno a los
documentos que si lo tienen.
No ha lugar a casar la sentencia por los sub motivos alegados.
Referencia:
Número de Referencia: 1365-2004
Origen: SALAS
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 10/11/2004
Hora de Resolución: 09:00:00
1365 S.S.
Pretensión:
Nulidad de Escritura Pública de Compraventa.
Causa pretendi:
En el Juicio Civil Ordinario de Nulidad de Escritura Pública de Compraventa, promovido por
el Licenciado MARCOS WILSON OVIEDO, como apoderado del señor JOSE ARSENIO
MOLINA, contra el señor JOSE MARIA SIBRIAN conocido por JOSE MARIA SIBRIAN
ORELLANA.
Primera instancia. FALLO: Declárase sin lugar las excepciones perentoria de ineptitud de la
demanda, Absuélvase al Señor JOSE MARIA SIBRIAN conocido por JOSE MARIA SIBRIAN
ORELLANA de la demanda de nulidad de la escritura pública de compraventa celebrada en
la ciudad de San Salvador.
El fallo de segunda instancia expresa: POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas,
disposiciones citadas, y Arts. 417, 418, 421, 422, 427, 432, y 439 Pr. C., a nombre de la
República de El Salvador, DIJERON: Confirmase en todas sus partes la sentencia venida en
apelación.
No conforme con la sentencia de segunda instancia, el Licenciado MARCOS WILSON
OVIEDO, en el carácter en que comparece, interpuso recurso de casación.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
Al desestimar la prueba pericial, acudiendo a argumentos carentes de base y falaces, la
Cámara Sentenciadora ha cometido el vicio que se denuncia. Error de derecho en la
apreciación de la prueba pericial, por lo que procede casar la sentencia por este motivo,
que es decisorio en cuanto al fallo que debe recaer en el proceso.
Que la escritura pública otorgada en San Salvador, a las ocho horas del ocho de diciembre
de mil novecientos noventa y siete, en los oficios de la notaria ROSA MARIA GUZMÁN, no
fue suscrita por el señor JUAN JOSE ARSENIO MOLINA, desde luego que mediante la
prueba pericial y de confesión se determina manifiestamente, que dicho señor, no
compareció al otorgamiento del citado instrumento. Que la Cámara sentenciadora,
incurrió en los vicios denunciados, tanto en la violación de ley como en el error de
derecho y de hecho en la apreciación de la prueba.
Número de Referencia: 247-C-2004
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 05/05/2005, 09:00:00
Pretensión: que se declare la nulidad del contrato de compraventa así como la
nulidad de la tradición del dominio que se hizo en virtud de ese título traslaticio.
Causa Pretendi:
Se pide la nulidad del contrato de compraventa del inmueble en litigio ya que la
persona que compareció a celebrar el contrato suplantó a la señora Teresa Noemí
Contreras Castro (la señora es la dueña del inmueble) durante la celebración de la
compraventa con pacto de retroventa.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
Doctrina: "La buena fe es mucho más que lo contrario de la mala fe. En cuando
admite una visión subjetiva, como creencia, respeto a la apariencia, y otra objetiva,
como comportamiento leal, honesto y probo. Sin dejar de lado la bueno fe como
criterio de interpretación y como pauta de integración de los. Negocios …."
( MOSSET ITURRASPE, Jorge:, "Contratos Simulados y Fraudulentos", Tomo II,
Rubinzal-Culzoni Editores, Buenos Aires, 2001, Págs. 14 y 15).
Análisis de artículos:
La disposición señalada como infringida no es aplicable para resolver este caso en
particular. El Art. 1560 C. establece que las acciones rescisorias y resolutorias no se darán
contra tercero de buena fe que haya inscrito el título de su respectivo derecho.
Doctrinariamente, y nuestra legislación así lo incorpora, la nulidad relativa es llamada
también anulación o rescisión, como ejemplo podemos citar el Art. 1562 C. que establece
el cuadrienio para ejercer la acción rescisoria o de nulidad relativa. Por otro lado, la acción
resolutoria es un modo de disolver los contratos en el caso de que exista incumplimiento
culposo a cargo de una de las partes.
De lo anterior fácilmente se colige que la disposición señalada como infringida no guarda
ninguna relación con la acción de nulidad absoluta ejercida.
Resolución de la sala:
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y
artículos 421, 428 y 432 Pr. C. y 13 y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República, la
Sala FALLA: a) No ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito por el motivo
de violación de ley, respecto del Art. 1560 C.; b) Condénase al señor Osear René Garza
Heredia, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar; y al licenciado Oscar Mauricio
Torres Sosa, en las costas del recurso
RESOLUCIÓN 7
Número de referencia: 30-AP-2004
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 17/05/2005, 15:00:00.
Pretensión: resolución de contrato y pago de los daños y perjuicios ocasionados
por el incumplimiento del contrato.
Causa Pretendi:
En razón de la suscripción de dicho contrato, y habiéndole sido entregado dicho contrato
el día 16 de octubre de 1980, la Sociedad Comercial de Alimentos S.A. comenzó a cumplir
sus compromisos contractuales e inicio las labores del suministro y la instalación
correspondiente de los mismos en el lugar indicado, que para tal efecto era el Hospital
Regional de San Miguel. Pero el Ministerio de Salud Pública y Asistencia no cumplió con el
contrato en lo que a ello corresponde ya que no pagó por los servicios prestados por la
sociedad de alimentos con la cual se obligó, causando agravios al señor MAURICIO BUKELE
–representante legal de la sociedad comercial de alimentos.
Lineamientos o criterios jurisprudenciales:
Concepto:
o El daño significa el detrimento, perjuicio o menoscabo que por acción de otro se
recibe en la persona o en los bienes. El daño puede provenir de dolo, de culpa o de
caso fortuito, según el grado de malicia, negligencia o casualidad entre el autor y el
efecto". ---(Pág. 109, Diccionario Jurídico Elemental. Guillermo Cabanellas de
Torres, Editorial Heliasta, decimoquinta edición, 2001, Argentina.
o Daños y Perjuicios "Constituye este concepto uno de los principales en la función
tutelar y reparadora del derecho. Ambas voces se relacionan por completarse;
puesto que todo daño provoca un perjuicio, y todo perjuicio proviene de un daño.
7 Sentencias 30-AP-2004 Y 205-AP-2004
En sentido jurídico se considera daño el mal que se causa a una persona o cosa,
como una herida o la rotura de un objeto ajeno; y por perjuicio, la pérdida de
utilidad o de ganancia, cierta y positiva, que ha dejado de obtenerse; pues el
herido, por ejemplo, ha perdido sueldos u honorarios, o la máquina rota ha dejado
de producir tal artículo".---
Doctrina: En la doctrina clásica se distingue entre el cumplimiento normal de la
obligación, que implica la exacta ejecución de la prestación debida, y el
incumplimiento anormal, que supone la falta de cumplimiento o el cumplimiento
inexacto o defectuoso; a aquel se le denomina incumplimiento propio y a esta
incumplimiento impropio.----El incumplimiento propio puede tener su origen en
causas independientes de la voluntad del deudor, como podría ser el caso fortuito
o fuerza mayor, o de causas que dependen de esa voluntad, tal como sucede
cuando concurre dolo, que supone voluntad y conciencia en el incumplimiento, o
culpa, que implica la mera negligencia. .----René Abeliuk Manasevich, sostiene en
su obra "LAS OBLIGACIONES", Tomo II, en la página 709, lo siguiente: "hay
incumplimiento cuando la obligación no se cumple, se cumple imperfectamente o
se retarda su cumplimiento; dicho de otra manera, cuando se falta íntegramente al
pago, o se infringe alguno de los requisitos de este".
Análisis de artículos:
El Art. 1360 C.C. disposición que expresamente dice: " en los contratos bilaterales va
envuelta la condición resolutoria de no cumplirse por uno de los contratantes lo pactado.
Pero en tal caso podrá el otro contratante pedir a su arbitrio o la resolución o el
cumplimento del contrato, con indemnización de perjuicios en uno u otro caso"
Resolución de la sala:
El alegato del apelante descarta la condena efectuada por la Sala de lo Constitucional de
esta Corte, en la que responsabiliza al Estado por la violación a los derechos reconocidos
por la Constitución y que son el de audiencia y estabilidad laboral. Basta leer el fallo de la
Sala Constitucional, para entender que tanto la Cámara, como hoy esta Sala, debemos
respetar la vía allí indicada para demandar, y por ende, hay motivo suficiente para
confirmar la sentencia impugnada.
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas, y Arts.
2253, 2254 y 2257 C.C., 428, 429, 432, 439, 1089 y 1090 Pr.C y 960 Pr.C; 245 Cn, 35
L.Pr.Cn., a nombre de la República, la Sala FALLA: a) Confírmase la sentencia pronunciada
a las quince horas del veintiuno de septiembre de dos mil cuatro, por la Cámara Segunda
de lo Civil de la Primera Sección del Centro; y, b) Confírmase la sentencia venida en
apelación, pronunciada a las once horas del siete de julio del año retropróximo, por estar
arreglada a Derecho;
Número de referencia: 205-C-2004.
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 21/06/2005, 09:15:00.
Pretensión: que se declare la resolución del contrato de arrendamiento celebrado
entre los señores Ana Elizabeth Girón viuda de chacón y Hossein Asgarian.
Causa Pretendi:
La resolución del contrato de arrendamiento celebrado entre los señores Ana
Elizabeth Girón viuda de chacón y Hossein Asgarian el día diecisiete de diciembre del
año dos mil dos, del inmueble ubicado en Lomas de San Francisco, Calle Tres, casa
número Cuatro, de esta ciudad. Se pide porque a señora Ana Elizabeth Girón viuda de
chacón no cumplió con su obligación en la fecha estipulada para el pago del arriendo
del inmueble por lo cual el señor Hossein Asgarian pidió la resolución del contrato y el
pago de los cánones del arrendamiento.
Lineamientos o criterios jurisprudenciales.
Análisis de artículos:
En el caso del Art. 391 Pr. C., el argumento de la infracción dado por el recurrente, es que
la Cámara sentenciadora no cumplió con el requisito procesal contenido en esa norma,
consistente en que cuando se presente una confesión calificada, esta deba ser aceptada o
no, por la parte contraria antes de la sentencia, de lo contrario, la confesión calificada no
debe ser valorada. Y lo que la Cámara hizo, fue haber apreciado la confesión de la
arrendante como simple, aún cuando acepta a fs. 32 de la 2ª. Pieza que es calificada; y esa
infracción es precisamente Interpretación errónea de ley, y no error de derecho en la
apreciación de la prueba, como equivocadamente lo ha denunciado el recurrente, en
consecuencia, no procede casar la sentencia recurrida por el motivo aquí invocado,
debiendo así declararse.
En cuanto al caso del Art. 375 Pr. C., dice el recurrente que la infracción se produce
porque la Cámara dividió la confesión del arrendante, y que aunque aceptó que es
calificada, solamente valoró la simple, es decir, la Cámara no aplicó la norma que se dice
vulnerada, la cual regula que la confesión es indivisible, y es precisamente esa
argumentación del recurrente la que no corresponde al error de derecho invocado, sino
que a violación de ley, pues ésta se da cuando se deja de aplicar la norma que debía
aplicarse al caso concreto, haciéndose una falsa elección de otra, en consecuencia, no se
acertó en el sub motivo invocado, por lo que no ha lugar a casar la sentencia impugnada y
así habrá que declararlo.
Análisis de la prueba:
Error de hecho en la apreciación de la prueba.
INFRACCION DEL ART. 422 PR. C.
Al respecto, la Cámara sentenciadora expresó que con el contrato de arrendamiento
agregado en autos, y con el acta notarial presentada por la parte demandante, se ha
probado por parte del arrendatario, que él si cumplió con su obligación, la cual era de
entregar el precio del arrendamiento, más el depósito de garantía, así como la de
apersonarse al lugar donde esta el inmueble para recibirlo, y que éste no fue entregado
por el arrendante, en la fecha estipulada en dicho contrato. Además, agrega la Cámara
que la arrendante no ha demostrado en el proceso, que haya estado pronta a cumplir con
su obligación para no incurrir en mora, y que en ningún momento desvirtuó el valor
probatorio del acta notarial, por lo que a juicio de la Cámara, se ha demostrado en autos,
el incumplimiento del contrato de arrendamiento por parte de la demandada.
Error de derecho en la apreciación de la prueba de confesión.
INFRACCIÓN DEL ART. 375 PR. C.
Por su parte, la Cámara al fundamentar su fallo manifestó: "Que la arrendante no ha
demostrado en el proceso que haya estado pronta a cumplir con su obligación para no
incurrir en mora, y que en el pliego de posiciones absueltas por ella, confesó no haber
visto al arrendatario el primero de febrero de dos mi tres, y que si bien es cierto que
agregó que el arrendatario nunca se presentó a tomar posesión de la casa, esto convierte
a la confesión en calificada, la cual no fue aceptada por la parte actora antes de la
sentencia, por lo que debe tomarse en cuenta únicamente la confesión simple, esto es, el
hecho de haber admitido no haber visto al arrendatario en ese día".
Resolución de la sala:
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y Arts 428,
429 Pr C., y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República, la Sala FALLA: 1) Declárase
que no ha lugar a casar la sentencia recurrida por el sub motivo: Error de hecho en la
apreciación de la prueba resultante de documento público, Arts. Infringidos 237 y 422 Pr.
C.; 2) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia impugnada por el sub motivo: Error
de derecho en la apreciación de la prueba de confesión, Arts. infringidos 391 y 375 Pr. C.;
y, 3) Condénase a la recurrente, Ana Elizabeth Girón Viuda de Chacón, al pago de los
daños y perjuicios a que hubiere lugar, y al abogado firmante del escrito, Licenciado René
Alfonso Padilla y Velasco, a las costas del recurso.
REVOCACIÓN 8
Referencia:
Número de Referencia: 1310-2004
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 30/04/2004
Hora de Resolución: 09:00:00
1310 S.S.
Pretensión:
Revocación de Donación.
Causa pretendi:
En el Juicio Civil Ordinario de Revocación de Donación, promovido por el licenciado
MIGUEL ARTURO GIRÓN FLORES, como Apoderado General Judicial de la señora
FRANCISCA CÓRTEZ DE HENRÍQUEZ, contra los señores MARIA EUGENIA HENRÍQUEZ
CORTEZ DE BASAVILBASO y MIGUEL ANGEL BASAVILBASO GARCÍA, representados
judicialmente por el Licenciado WALTER ANTONIO RIVAS FERNANDEZ en calidad de
apoderado.
8 Sentencia 1310-2004
El fallo de Primera Instancia, Declárase sin lugar la revocatoria de la donación irrevocable
otorgada por la señora FRANCISCA CORTEZ DE HENRIOUEZ a favor de los señores MARIA
EUGENIA HENRIQUEZ CORTEZ DE BASAVILBASO y MIGUEL ANGEL BASAVILBASO GARCIA,
ante los oficios del Notario José Mario Denis Molina, por no haberse probado los extremos
de su demanda, tal como se ha expuesto en el considerando jurídico de esta sentencia.
El fallo de segunda instancia, DIJERON: 1°) REVOCASE la sentencia de que se ha hecho
mérito, pronunciada por el señor juez Quinto de lo Civil de esta ciudad, a las ocho horas y
veinte minutos del catorce de julio retro próximo, por no encontrarse arreglada a
Derecho, habida cuenta las razones subrayadas en el considerando respectivo; 2°)
Consecuentemente, revócase la Escritura Pública de Donación otorgada en esta ciudad, a
las once horas y cinco minutos del siete de diciembre de mil novecientos noventa y seis,
en los oficios del notario José Mario Denis Molina, por doña Francisca Cortez de
Henríquez, a favor de los señores María Eugenia Henríquez Cortez de Basavilbaso y Miguel
Ángel Basavilbaso García, ordenándose la cancelación de la inscripción número TREINTA Y
OCHO del Libro CUATRO MIL SEISCIENTOS SESENTA Y UNO del Registro de la Propiedad
Raíz de este Departamento.
No conforme con el Fallo, el licenciado Walter Antonio Rivas Fernández, interpuso recurso
de Casación.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
Violación de Ley, siendo el precepto infringido el Art. 962 del Código Civil.
Es indubitable inferir que la hija de la donante y el esposo de ésta, con los hechos
acreditados y relacionados en la controversia, desde una óptica legal y ética, no solo han
sido ingratos sino indignos respecto del beneficio que les concediera doña Francisca
Cortez de Henríquez, al haberles donado el inmueble objeto de la disputa.
La Sala considera que respecto a este motivo de casación el impetrante no ha esgrimido
suficientes argumentos para resaltar la no aplicación del Art. 962 C. C., más bien lo que ha
hecho es referirse a cuestiones probatorias, las cuales debieron de haber sido atacadas
por el motivo de error de Hecho o de Derecho en la Apreciación de las pruebas por lo que,
no siendo congruente el motivo o causa alegada con lo expuesto en los argumentos, el
recurso por este motivo debió de declararse inadmisible desde un principio, por lo que la
Sala de acuerdo al Art. 16 de la Ley de Casación, lo considera inadmisible y así deberá
declararse.
Error de Derecho en la Apreciación de la Prueba Testimonial, siendo el precepto
infringido el Art. 318 Pr. C.
Que la parte actora en primera Instancia presentó cuatro testigos con los que pretendía
comprobar los extremos de la demanda. El Juez de Primera Instancia desechó sus
deposiciones, pero la Sentencia de Segunda Instancia les dió plena validez, y al hacerla,
incurrió en un error de derecho, infringiendo el Art. 318 del Código de Procedimientos
Civiles, que preceptúa que el testigo de oídas no hace fe.
Estos fueron contestes y unánimes en acentuar que doña Francisca Cortez de Henríquez, -
donante-, no reside en la casa que precisamente le donó a su hija María Eugenia
Henríquez Cortéz, y a su yerno Miguel Ángel Basavilbaso García, inmueble del cual se
reservó el derecho de habitación de por vida, sino que vive en la casa de otros hijos, en
una pieza de dicha casa. Asimismo consta de las deposiciones, que los citados donatarios
cambiaron la chapa de la puerta de la casa donada, sin avisarle a la donante y sin
proporcionarle la llave respectiva; que la señora Cortéz de Henríquez en unión de su
esposo, tenían que esperar por largo tiempo que regresaran los donatarios a fin de poder
ingresar a la casa en que ella tenía el derecho de habitación de por vida""; por lo que de
todo lo expuesto la Cámara llegó a una conclusión final y dijo: ""Considerando que la parte
actora ha probado los extremos de su demanda, Art. 237 Pr. C., y que la reo no comprobó
ninguna excepción que extinguiera el derecho del actor o enervase su acción principal
poniéndole fin al litigio, se impone acceder a la pretensión contenida en la demanda.
Respecto al pretendido error de Derecho en la apreciación de la prueba testimonial, cuyo
precepto infringido es el Art. 318 Pr C.
Que las deposiciones de los cuatro testigos en su conjunto son debidamente armónicas e
ilustran y convencen satisfactoriamente a esta Sala sobre la comprobación de los hechos
alegados; ahora bien, efectivamente se hizo repreguntas a cada uno de ellos por parte del
abogado de los demandados, y el hecho de que más de alguno de ellos haya fallado en
alguna repregunta, no le resta valor y mérito a sus deposiciones; es más, la valoración de
la prueba corresponde a los tribunales de Instancia y el recurso solo procederá cuando se
le haya dado valor en forma abusiva y absurda lo que no ha ocurrido en el presente caso y
a mayor abundamiento, la parte actora ha presentado 4 testigos, por lo que en el
supuesto de haber fallado dos de ellos -que no ha sucedido- la plena prueba se formaría
con los otros dos restantes; por todas las razones anteriores esta Sala considera que la
Cámara no ha cometido el error que se le atribuye por lo que en su oportunidad, deberá
declararse que no ha lugar a casar la sentencia recurrida.
Finalmente, y en cuanto al error de derecho en la apreciación de la prueba el impetrante
mencionó en una especie de relación, el Art. 969 No. 3 del C. C., el cual a la letra dice: "Art.
969.- Son indignos de suceder al difunto como herederos o legatarios: 3°. "El cónyuge o
consanguíneo dentro del cuarto grado inclusive, que en el estado de enajenación mental o
de indigencia de la persona de cuya sucesión se trata, no la socorrió pudiendo", y siendo
que de cuya transcripción no aparece' que dicho artículo sea una norma valorativa de
prueba, el recurso debe declarase inadmisible.
Por qué se casó la Sentencia.
Fallo: Declárase que no ha lugar a casar la sentencia por error de derecho en la
apreciación de la prueba, siendo el precepto infringido el Art. 318 del Pr C.; c) Declárase
inadmisible el recurso por error de derecho en la apreciación de la prueba, siendo el
precepto infringido el Art. 969 numeral 3 del Código Civil.
RESCILIACIÓN 9
Referencia:
Número de Referencia: 298-2004
Origen: SALAS
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
fecha de Resolución: 26/05/2004
Hora de Resolución: 09:00:00
298 S.M.
Pretensión;
Resciliación de Contrato.
Causa pretendi:
En el Juicio Civil Ordinario de Resciliación de Contrato, promovido por el doctor LUIS
REYES SANTOS, como apoderado de los señores: ROSA MARIAN MORALES DE ESCOBAR,
ABEL MORALES TURCIOS, ENRIQUE AMILCAR MORALES, ELSA ELVIRA CONDE conocida por
ELSA CONDE, ALBA ARGENTINA CONDE LAZO conocida por ALBA CONDE DE LAZO,
FRANCISCO TURCIOS conocido por FRANCISCO TURCIOS RIVERA, IDALIA DELVIA GARCIA
DE TURCIOS, MANUEL DE JESÚS MARTINEZ CHICAS conocido por MANUEL DE JESÚS
CHICAS, SANTOS BURUCA MORENO conocido por SANTOS BURUCA, quien representa a
los menores WILFREDO Y RUDIS ANTONIO ambos de apellido BURUCA, contra los señores:
TOMAS CHICAS conocido por TOMAS CHICAS YÁNEZ Y GLORIA EMPERATRIZ CHICAS DE
SIERRA.
Fallo de primera instancia: Que han cesado en sus efectos las escrituras de compraventa,
otorgadas por la señora Emperatriz Turcios de Chicas, a favor de los señores Tomás Chicas,
9 Sentencia 298-2004
conocido por Tomás Yánez o Tomás Chicas Yánez, y Gloria Emperatriz Chicas, ante el
Notario Jesús Antonio Núñez Franco, bajo los números 19, 21, 22, 23 Y 245, durante los
días veintisiete y veintiocho de mayo de mil novecientos noventa y uno, en el Libro
Primero de Protocolo que llevó el expresado Notario en el año en mención, en virtud de
haber sido resiliado (sic) éstos contratos por consentimiento expreso de las partes, de
acuerdo al Art. 1416.
Segunda instancia FALLA: a) REVOCASE en todas sus partes la sentencia definitiva venida
en apelación; b) DECLARANSE perfectos, válidos y consecuentemente inscribibles en el
Registro Inmobiliario respectivo, los contratos de compraventa otorgados por la señora
Emperatriz (sic) Turcios de Chicas a favor de los señores Tomás Chicas, conocido por
Tomás Yanez o Tomás Chicas Yánez y Gloria Emperatriz (sic) Chicas, ante los oficios del
Notario Jesús Antonio Núñez Franco; c) CONDENASE a la parte actora al pago de las costas
procesales de la primera instancia…
No conforme con el fallo anterior el Doctor Luis Reyes Santos en la calidad en que actúa,
interpuso recurso de casación.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
La resciliación opera cuando el contrato aún tiene efectos pendientes de cumplirse, pero
no cuando el acto jurídico está completamente agotado en sus efectos, o sea lo que en
doctrina se llama el "acto jurídico perfecto". Consecuentemente, es menester que esta
Cámara se pronuncie en el sentido de que los contratos de compraventa celebrados entre
los señores Emperatríz (sic) Turcios de Chicas, Tomás Chicas c/p Tomás Yánez y Gloria
Emperatríz (sic) Chicas, son perfectos y válidos y lógicamente pueden ser inscribibles en el
Registro Inmobiliario, revocando el fallo del Tribunal inferior en todas sus partes y
condenando a la parte actora en las costas procesales de la primera instancia.
Interpretación errónea de la ley, concepto:
La interpretación errónea se comete cuando se da a la norma un sentido distinto del que
lógicamente tiene, o una interpretación equivocada, desatendiendo su tenor literal y los
demás elementos de interpretación, tergiversando los efectos jurídicos de la misma.
Resciliación:
Puede darse las resciliación a condición de que el contrato no se haya ejecutado. Dicho
modo de extinguir los contratos, también llamado disenso mutuo, opera sólo, como ya se
dijo, cuando no se han cumplido las obligaciones, pues de lo contrario sería un pago que
es otro modo distinto de extinción de obligaciones. (Sentencia 1129 S. S. de las diez horas
y siete minutos del veintiocho de agosto de dos mil).
Que si por muta consenso se pretendía dejar sin efectos los contratos de venta otorgados
y que motivan el actual proceso, la manera adecuada y legal era volver a efectuar una
compraventa entre las partes que comparecieron en las primeras, lo cual, según aprecian
los jueces de instancia, no se hizo.
Así, pues, vistas las argumentaciones anteriores no se dio el vicio denunciado y no
procede casar la sentencia recurrida por este motivo.
Si el fallo fuere incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes, otorgue
más de lo pedido o no haga declaración respecto de algún extremo.
El vicio denunciado se comete por el juzgador cuando se presentan una de tres
situaciones procesales: a) Cuando se otorga más de los pedido; b) Cuando se da algo
distinto de lo pedido; y, c) Cuando se deja de resolver sobre algo pedido.
Al estudiar con detenimiento la redacción del fallo impugnado, no se advierte que el
Tribunal de Segunda Instancia, se haya pronunciado sobre algo más de lo que se le pidió,
pues el que haya dicho que los contratos son perfectos, válidos y consecuentemente
inscribibles en el Registro Inmobiliario, no es otra cosa que la consecuencia lógica de la no
declaración de nulidad que se planteó en la demanda, de tal forma que no se infringió el
Art. 421 Pro C. y no procede casar la sentencia por este sub motivo.
ERROR DE DERECHO EN LA APRECIACIÓN DE LA PRUEBA.
Los contratos de compraventa y la resciliación se contradicen. Que este último acto
jurídico no es el adecuado para dejar sin efecto un contrato de compraventa, que ya surtió
plenos efectos. Lo pertinente hubiese sido el otorgamiento de una venta a la inversa, lo
cual, obviamente, no ha sucedido en este caso, y en consecuencia no se ha dado el vicio
denunciado, ni se infringió el Art. 268 Pr C.
ERROR DE HECHO EN LA APRECIACIÓN DE LA PRUEBA.
El Tribunal de Segunda Instancia, cometió error de hecho en la apreciación de la prueba,
pues no apreció que los vendedores devuelven el dominio y le hacen la tradición y entrega
de los inmuebles a la señora EMPERATRIZ TURCIOS DE CHICAS y ésta acepta la devolución
que se le hace y se da por recibida de los inmuebles objeto de la resciliación.
No es la forma jurídica adecuada el acudir a una resciliación, si lo que procedía era otorgar
una venta a la inversa, con todos sus elementos, incluido el precio, para que se
configurase dicho contrato.
De lo expuesto se concluye que no se ha dado el error de hecho invocado y no procede
casar la sentencia por tal sub motivo.
De las consideraciones consignadas anteriormente, se infiere que no procede casar la
sentencia recurrida por ninguno de las causas que cita el impetrante y así debe
declararse.
TERMINACIÓN 10
Referencia:
Número de Referencia: 1738-2004
Nombre del Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Fecha de Resolución: 30/07/2004
Hora de Resolución: 11:15:00
N° 1738 S.S.
Pretensión:
Terminación de contrato.
Causa pretendi :
En el juicio civil ordinario de terminación de contrato promovido por el doctor José
Antonio Mena, apoderado del señor Mauricio Rolando Safie Miguel contra "P. C.
INVERSIONES, SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE y de don José Rodolfo Cardoza,
en el Juzgado Segundo de lo Civil de este distrito judicial.
Primera Instancia, FALLO: A) DECLÁRASE QUE NO HA LUGAR a las excepciones planteadas
por la parte demandada de falta de calidad del objeto de arrendamiento, y el dolo a mala
fe del demandante. B) DECLÁRASE TERMINADO el contrato de arrendamiento celebrado
entre el señor MAURICIO ROLANDO SAFIE MIGUEL Y EL SEÑOR LUIS RAFAEL
BUENAVENTURA POSADA SOTO actuando en nombre y representación en su calidad de
Director Presidente de la Sociedad PC INVERSIONES SOCIEDAD ANONIMA DE CAPITAL
VARIABLE, que se abrevia PC INVERSIONES S.A. DE C.V. mediante escritura pública
celebrada en esta ciudad, a las quince horas del día veinte de octubre de mil novecientos
10 Sentencia 1738-2004, 241-2004 y 283-C-2004
noventa y nueve, ante los oficios del Notario JOSE MILTON APARICIO VILLACORTA, sobre
un inmueble urbano situado en esquina formada por Boulevard Constitución y calle de
acceso a Residencial Valparaíso, cantón San Antonio Abad, San Salvador. C) CONDÉNASE a
la Sociedad antes mencionada al pago de los cánones adeudados de CUATROCIENTOS
NOVENTA Y TRES MIL SETECIENTOS SETENTA Y DOS COLONES más el valor del IVA
correspondiente. Así como al pago de OCHENTA Y NUEVE MIL COLONES en concepto de
cláusula penal, y al pago de las costas procesales.----NOTIFÍQUESE"""
El fallo de segunda instancia resolvió: """POR TANTO: en base a las consideraciones
hechas, disposiciones legales citadas, Doctrina de los Expositores del Derecho y Arts. 1089
y 1091 Pr. C. a nombre de la República DIJERON: a) Decláranse sin lugar las nulidades
alegadas en esta instancia por los apelantes; b) Confírmase la sentencia venida en
apelación, con la reforma en el sentido de que se ordena la desocupación del inmueble a
que se refiere la demanda; y c) condénase en costas procesales a la parte apelante.----
Vuelva la pieza principal al Juzgado de origen con certificación de ley.
No conforme con el fallo de segunda instancia, el licenciado Luis Rafael Buenaventura
Posada Soto interpuso recurso de casación.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales:
El contrato de arrendamiento, es un contrato en que las dos partes se obligan
recíprocamente, la una a conceder el goce de la cosa y la otra a pagar por este goce, obra
o servicio, un precio determinado.
En el arrendamiento de cosas, la persona que proporciona el goce de la cosa se llama
arrendador y la persona a quien se le confiere y paga la renta, arrendatario:
Entre los requisitos esenciales, se encuentra los elementos siguientes:
1) El consentimiento; 2) Que una de las partes proporcione a otra el goce de una cosa
y, 3) Que la otra parte pague por esta cosa un precio;
el contrato de arrendamiento es de tracto sucesivo, por ser de aquellos cuyas obligaciones
se van renovando y extinguiendo sucesivamente. Y, así se tiene que si se trata del
arrendamiento de una casa, mes a mes se va extinguiendo la obligación del arrendador de
proporcionar el goce de la cosa y la obligación del arrendatario de pagar el precio, y,
extinguida la obligación de un mes nace la obligación del otro mes. Además por tratarse
de un contrato de tracto sucesivo, podría darse el caso de que se llegara a aplicar en él la
doctrina de la imprevisión.
El arrendador reclama del arrendatario los cánones de arrendamiento pactados, los que a
la fecha de la interposición de la demanda no habían sido cancelados de parte del
arrendatario, debido a que según los argumentos de éste, la cosa arrendada, no pudo ser
utilizada para el fin que se contrató, cuál era la instalación de una estación de servicios,
debido a que de acuerdo a estudios realizados por el Ministerio de Economía, en base a la
Ley Reguladora del Depósito, Transporte y Distribución de Productos de Petróleo, denegó
el proyecto para el funcionamiento de la proyectada gasolinera, así como la oficina de
planificación del área metropolitana de San Salvador que estimó que la dimensión del
terreno no cumplía con los mínimos requisitos para este tipo de proyectos.
El Art. 1416 C.C. dice: todo contrato legalmente celebrado es obligatorio para los
contratantes, y sólo cesan sus efectos entre las partes por el consentimiento mutuo de
éstas o por causas legales. El Art. 1703 C.C. prescribe: "El arrendamiento es un contrato en
que las partes se obligan recíprocamente, la una a conceder el goce de una cosa, o a
ejecutar una obra o prestar un servicio, y la otra a pagar por este goce, obra o servicio un
precio determinado.---Deberán constar por escrito los arrendamientos cuyo precio total y
único excede de doscientos colones o sea indeterminado, y aquellos en que se hubiere
estipulado un precio periódico que exceda de doscientos colones en cada período.
Violación de la ley, concepto: la violación de ley es una infracción peculiar que no debe
confundirse con cualquier preterición u omisión de normas jurídicas, resultantes de una
causa jurídica distinta de la falsa elección de otra norma. Es una infracción de las
denominadas directas porque atañen a la premisa mayor del silogismo jurídico, o sea la
norma misma, sin relación alguna con los hechos.
El contrato de arrendamiento fue celebrado el veinte de octubre de mil novecientos
noventa y nueve y que el convenio de uso de nombre institucional y de participación
celebrado entre P.C. INVERSIONES, S.A. de C.V. y la Asociación de Empresarios del
transporte en taxis Salvadoreños (AETS), lo fue el treinta y uno de agosto de mil
novecientos noventa y nueve, de lo cual sostiene el tribunal de alzada, que se tenía en
proyecto la instalación de estación de servicios privados para la venta de gasolina a
empresas de taxis en el inmueble objeto del arrendamiento, por lo que para ese tribunal
existe responsabilidad de la arrendataria, al "no tener el mínimo cuidado de investigar
previamente si el inmueble objeto del arriendo le iba a ser útil para lo proyectado y que
ese hecho no procede ser imputado al arrendante.
No lo comparte esta Sala, porque la situación de imposibilidad que se dió en el inmueble
objeto del arrendamiento, fue por el estudio hecho por las oficinas encargadas de otorgar
el permiso correspondiente para el uso que se necesitaba; y al no haberse concedido tal
autorización, la arrendataria se vio imposibilitada de explotar el servicio que pretendía
ofrecer, lo que la ha llevado a pedir que se de por terminado el contrato, sin
responsabilidad para la sociedad arrendataria.
Equivaldría a tomar una posición parcial, en contra de una de las partes, en este caso de la
arrendataria, es decir, que según dicho argumento, la sociedad arrendataria tenía que
haber gestionando ante la oficina respectiva una investigación previa para tomar la
decisión de arrendar o no el inmueble, cuestión que no contempla el Art. 1720 C.C.; y aún
más, tal disposición va más allá al prescribir…. sea que el arrendador conociese o no el mal
estado o calidad de la cosa al tiempo del contrato; y aún en el caso de haber empezado a
existir el vicio de la cosa después del contrato; pero sin culpa del arrendatario, o sea, pues,
que lo que la norma requiere es que no haya habido mala fé al momento de contratar, lo
que a través del proceso no se vislumbra, por lo que atribuirle responsabilidad a la
arrendataria, va en menoscabo de su patrimonio, por un hecho que sobrevino después de
firmado el contrato, lo que ha quedado demostrado con la prueba pericial que obra en
autos.
La Cámara sentenciadora, si ha cometido la violación del Art. 1720 C.C. que se le atribuye
y consecuentemente procede casar la sentencia por el vicio denunciado.
VIOLACIÓN DEL Art. 416 Pr.C.
El Art. 416 Pr. C. dice: ""Cuando ambas partes presenten pruebas del mismo género se
absolverá al demandado. La calificación anterior de las pruebas tendrá lugar en los casos
en que respectivamente sean admisibles, según el Código Civil.
No la ha cometido, aun cuando haya omitido aplicar la norma citada como infringida, pues
los instrumentos que aparecen presentados en el proceso, de ninguna manera pueden
valorarse con igualdad de calidad de pruebas, como lo pretende el recurrente, pues el
documento expedido por la oficina de planificación del área Metropolitana de San
Salvador, como la resolución del Ministerio de Economía, así como los planos relativos al
trazo de la línea de construcción de la calle que afecta la capacidad y calidad del inmueble
arrendado, y en el que se emite opinión desfavorable para la instalación de tanques para
consumo privado de gasolina especial, gasolina regular y aceite diesel, constituyen a
criterio de esta Sala prueba pericial; y la presentada por la parte actora, prueba
instrumental en que consta el contrato de arrendamiento, de donde se colige que no es
cierto lo argumentado por el impetrante de que se trata de prueba de igual categoría,
bastando para confirmar lo expresado con la prelación de prueba que prescribe el Art. 415
Pr. C., de tal manera que por este motivo no es posible casar la sentencia por no haber
cometido el tribunal de alzada el vicio denunciado.
Porque se casó la Sentencia: La Sala FALLA: a) Cásase la sentencia recurrida; b)
Declárase terminado el contrato de arrendamiento…
Número de referencia: 241-C-2004
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 18/03/2005, 12:00:00
Pretensión: Que se declare la nulidad de escrituras públicas
Causa Pretendi:
El demandante Lic. Mejía Medrano, sostuvo en su demanda, que su mandante fue
declarado heredero definitivo con beneficio de inventario en su calidad de hijo de la
causante MARINA DEL CARMEN MORALES, QUE TAL DECLARATORIA NO SE LA
INSCRIBIERON, porque el inmueble de la causante, a las once horas del diecisiete de
agosto del año dos mil, ante el notario LUIS RODRIGUEZ MEDRANO MERCADO,
compareció la señora MARINA DEL CARMEN MORALES RODRIGUEZ, identificándose con
todas sus generales y con su cédula de identidad personal, haciéndole venta de ese
inmueble al señor CARLOS ALBERTO ORTIZ, escritura que fue debidamente inscrita, quien
a su vez lo traspasó a favor de la señora CARLOTA RAMIREZ DE ORTIZ, ante el notario JOSÉ
MAURICIO ROBLES BERNAL, la que también fue inscrita, pero que la señora MARINA DEL
CARMEN MORALES, a la fecha de la primera venta ya tenía doce días de estar enterrada.
Pero ante el Notario se presentó físicamente una persona que concordaba con la cédula y
con el testimonio en mano de la escritura de propiedad a otorgar la venta a favor de mi
poderdante CARLOS ALBERTO ORTIZ, quien obviamente pagó el precio de venta, inscribió
su escritura y tomó posesión del inmueble.
Criterios o lineamientos jurisprudenciales
Análisis de artículos
Esta Sala considera que a tenor del Art. 3 N° 8 Caso el error de hecho en la apreciación de
la prueba se estima cuando resulta de documentos auténticos, públicos o privados
reconocidos, o de la confesión cuando haya sido apreciada sin relación con otras pruebas.
El error de hecho sólo se puede alegar en casación, cuando se tiene por probado un hecho
sin tomar en cuenta que obra en autos un documento, de los expresados, el cual
establece lo contrario, o, a la inversa, cuando no se tiene por probado un hecho, no
obstante existir en autos, uno de esos documentos que lo establece, es decir que el
motivo alegado siempre tiene relación con lo que aparece en instrumentos de los
mencionados, o en confesión.
Análisis de la prueba
En el caso de autos, la resolución del tribunal Ad quem se ha basado, precisamente, en la
prueba que aparece en instrumentos públicos y auténticos, de los cuales consta la nulidad
absoluta pedida por el actor en la demanda, es decir que la prueba instrumental ha sido la
base para resolver; se ha tenido por probado un hecho que consta en instrumentos
públicos, como lo son los testimonios de las escrituras de compraventa, y en un
instrumento auténtico, como lo es la certificación de partida de defunción de la
vendedora, días antes del otorgamiento de la primera escritura. Lo que aparece probado
en instrumentos públicos y auténticos se ha tomado en cuenta para resolver. Distinto
sería el caso en que se hubiera tenido por probado un hecho, constando lo contrario en
instrumentos públicos o auténticos, o que no se hubiera tenido por probado un hecho,
constando éste en instrumentos de la misma clase. De tal manera que no se configura el
error de hecho en la apreciación de la prueba, porque si algún defecto existe en la
redacción del acta de inspección, como lo afirma el recurrente, ello daría lugar a otro
motivo, pero no al error de hecho en la apreciación de la prueba. Consecuentemente, no
es procedente casar la sentencia.
Resolución de la sala:
POR TANTO: de conformidad con las razones expuestas, disposiciones legales citadas y
Arts. 428 y 429 Pro C. y 23 Cas, a nombre de la República, la Sala FALLA: 1) Declárase que
no ha lugar al recurso de casación interpuesto; 2) Condénanse al doctor FELIPE RIVERA
AYALA a las costas del recurso, como abogado firmante del escrito, y a los señores CARLOS
ALBERTO ORTIZ y CARLOTA RAMIREZ DE ORTIZ, a los daños y perjuicios a que hubiere
lugar; y 3) Vuelvan los autos al tribunal de origen, con certificación de esta sentencia, para
los efectos consiguientes.
Número de referencia: 283-C-2004
Tribunal, fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 04/05/2005, 09:15:00
Pretensión: terminación del contrato y restitución de la cosa dada en comodato.
Causa Pretendi:
El fallo de primera instancia, en lo principal dice: """"""POR TANTO: En atención a las
razones expuestas y en base a los artículos 417, 421, 422,427,439, del Código de
Procedimientos Civiles, a nombre de la república de El Salvador: FALLO: DECLARASE
INEPTA LA DEMANDA INCOADA EN CONTRA DE LOS SEÑORES ANA RAMONA FLORES
ARCE, CARMEN FLORES CONOCIDA POR CARMEN ROJAS, como JOSE MANUEL FLORES,
todos de las generales antes dichas y en JOSE ALBERTO ROJAS, MANUEL DE JESUS FLORES,
demandado carácter antes indicado, CONDENASE a la parte actora a las COSTAS y DAÑOS
Y PERJUICIOS.
Por afectar los intereses de su mandante, el licenciado José Francisco Domínguez Ruiz
interpuso recurso de apelación de la anterior sentencia; la Cámara, por sentencia de las
doce horas y tres minutos del veintitrés de noviembre de dos mil cuatro resolvió lo
siguiente: "POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas
y los Arts. 1089 y 1092 del Código de Procedimientos Civiles, a nombre de la República de
El Salvador, esta Cámara FALLA: a) Declárase sin lugar por improcedente lo solicitado por
JOSÉ ROBERTO RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ, en su escrito de contestación de agravios,
respecto a revocar la declaratoria de ineptitud de la demanda y absolver a los
demandados; b) Revócase en todas y cada una de sus partes la resolución venida en
apelación, por no estar arreglada a derecho; c) Tiénese por terminado el Contrato de
Comodato otorgado por la demandante, señora MARINA CONCEPCIÓN ROJAS, conocida
por MARINA CONCEPCIÓN DE ROSAS, a favor de los demandados, señores ANA RAMONA
FLORES ARCE, CARMEN FLORES, conocida por CARMEN ROJAS, Y de JOSÉ MANUEL
FLORES, todos de las generales antes dichas; en consecuencia, Condénase a los
mencionados demandados a restituirle a la demandante, señora ROJAS o ROJAS DE
ROSAS, el inmueble dado en comodato y que es objeto del presente juicio: d) Declárase
sin lugar la condena de indemnización por daños solicitado por la parte adora;
Criterios jurisprudenciales:
Análisis de artículos
La Cámara en lo pertinente dijo: "XII.- El Art. 266 Pr.C., establece que toda persona
a quien se opone un instrumento privado (como en el presente caso), está obligado a
confesar o negar formal y categóricamente su letra o firma; de lo anterior se deduce que
si la persona no confiesa o niega categóricamente su letra p firma puesta en el
instrumento privado que se le opone, se tiene por reconocido, pues así lo establece el Art.
265 Ord. 3° Pr.C.; por lo tanto, el instrumento privado adquiere valor de escritura pública,
según el Art. 264 Pr.C., en ese sentido, tal como ya se mencionó en párrafos anteriores, el
documento privado se tiene por reconocido y produce efectos jurídicos entre las partes
que lo suscribieron".
El Art. 266 Pr.C. textualmente dice: "Aquel a quien se opone un instrumento
privado está obligado a confesar o negar formal y categóricamente su letra o firma, o que
de su orden se ha puesto, o si reconoce o no la obligación contenida en el instrumento
presentado, sin permitir el Juez, bajo su responsabilidad personal, ninguna contestación
dudosa o evasiva. Sus herederos pueden declarar que no conocen la letra o firma de su
autor. (...)"
Análisis de la prueba
La Cámara, por su parte, dijo: "d) El no reconocimiento de las firmas y las
obligaciones contenidas en el documento aludido, la parte apelada lo hace con base al Art.
266 Pr.C., pero tal negación la hace de la forma simple, sin llevar a cabo las acciones
correspondientes; el Código de Procedimientos Civiles, a partir del Art. 287 al 291,
establece lo que se llama INCIDENTE DE FALSEDAD, el cual puede suscitarse dentro de un
proceso; así tenemos que si bien es cierto que de conformidad al Art. 226 Pr.C., le asiste el
derecho a la parte apelada para negar la firma y no reconocer las obligaciones que se
encuentran en el documento en cuestión, también la misma ley establece el camino a
seguir y es redargüir de falso un instrumento público o privado, lo cual en el presente caso
pudo probarse con dos testigos, de conformidad al Art. 321 Inc. 2° Pr.C. y era el Juez de la
causa quien tenía que resolver sobre el asunto principal y sobre la falsedad." Más adelante
dice; " XIII.- En ese orden de ideas, se concluye que en virtud de que los demandados no
negaron categóricamente que las firmas puestas al pie del instrumento base de la acción,
sean suyas, sino que tal como se ha mencionado contestan de forma evasiva sobre la
existencia de dicho instrumento privado, ya que únicamente manifiestan no reconocer las
firmas ni las obligaciones contenidas en el documento base de la acción, y no hacen uso
del trámite del incidente de falsedad; por lo que hace plena prueba en el presente caso
(...). XIV.- En consecuencia, teniéndose por reconocido tácitamente de parte de los
demandados el instrumento privado que contiene el contrato de comodato celebrado
entre la parte actora y los demandados, se concluye que está plenamente comprobada y
justificada la pretensión del actor, en consecuencia lo que a derecho corresponde es dictar
la sentencia accediendo a la pretensión de la parte adora (...)""""
A juicio de este Tribunal, la Cámara sentenciadora no ha cometido el vicio que se le
atribuye por cuanto le dio al Art. 266 Pr.C. el sentido que verdaderamente tiene. Y es que,
la parte demandada, al referirse al documento base de la acción, en su escrito de alegatos
de buena prueba, dijo: "Respecto al documento privado, mi mandante me ha
encomendado que manifieste en estos alegatos, que desconoce las obligaciones y las
firmas contenidas en dicho documento y que tiene dudas sobre la legitimidad del mismo,
por no recordar haber contratado con la parte actora, mucho menos haber firmado un
documento o contrato de comodato". Tal manera de manifestarse no es categórica como
la disposición citada lo requiere. Categórica es decir algo en forma clara, precisa, rotunda;
es decir, sin lugar a dudas. Significa que lo que se dice se hace de manera concluyente. Lo
anterior evidentemente no se ha dado en el caso de autos, pues el decir que tiene "dudas
sobre la legitimidad del documento", o que "no recuerda haber contratado con la
demandante", en manera alguna se puede considerar que está negando categóricamente
la autenticidad del documento o que no es suya la firma que calza el mismo. Ello es una
manera confusa y vaga de expresarse la cual no es permitido por la ley, pues la persona
que niega debe estar totalmente segura de que no es suya dicha firma o que dicho
documento no es veraz y así debe exponerlo al Juez, no basta con decir que lino recuerda
haber contratado", debe decirse con precisión si contrató o no con la persona que le
opone el documento y si es o no su firma la que calza en él, en forma precisa e inequívoca.
Resolución de la sala:
POR TANTO. De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y
Arts. 417, 418, 428 y 432 Pr. C. y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República, esta
Sala FALLA. a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito; y,
b) Condénase a los señores: Ana Ramona Flores Arce y Manuel de Jesús Flores, conocido
por José Manuel Flores, al pago de los daños y perjuicios a que hubiere lugar; y al
licenciado José Roberto Rodríguez Rodríguez, abogado firmante del recurso, al pago de las
costas de procesales. Art. 23 de la Ley de Casación.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRÓ JURISPRUDENCIA SOBRE ESTA CAUSAL.
SENTENCIAS 2005
INEXSISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO
Número de Referencia: 80-C-2005
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 18/10/2005, 09:30:00.
Pretensión: la Resolución del Contrato de Arrendamiento con Promesa de Venta.
Causa Pretendi:
Celebración del contrato de arrendamiento con promesa de venta entre la señora
MARIA ANGELICA BARAHONA VIUDA DE RENDEROS conocida por MARIA ANGELICA
BARAHONA DE RENDEROS y el señor TRANSITO RICARDO PAREDES MEDRANO,
habiéndose constituido dicho contrato de arrendamiento con promesa de venta, sobre
el derecho proindiviso equivalente al cincuenta por ciento de un inmueble de
naturaleza rústica, de una extensión aproximadamente de ochenta manzanas de
extensión superficial, como cuerpo cierto, conocida como Hacienda "LOS POTREROS",
Cantón Tilaza, jurisdicción de Huizúcar, Departamento de La Libertad, por escritura
pública otorgada por los señores MARIA ANGELICA BARAHONA VIUDA DE RENDEROS
conocida por MARIA ANGELICA BARAHONA DE RENDEROS y TRANSITO RICARDO
PAREDES MEDRANO, el día diez de enero de dos mil uno, ante los oficios del notario
JUAN JOSE GARCIA AGUILAR. Se pide la resolución del contrato antes mencionado por
el incumplimiento de la cláusula 9° del contrato '''IX.- En caso de mora el señor
Transito Ricardo Paredes Medrano, reconocerá el cinco por ciento de interés mensual
sobre las mensualidades en mora y el no pago de dos cuotas en el plazo y forma
convenido, hará caducar el plazo y dará derecho a la señora María Angélica viuda de
Renderos a dar por terminado el presente contrato de arrendamiento con promesa de
venta y a recuperar inmediatamente la posesión de dicho inmueble, sin tener la
obligación de devolver, cancelar o reconocer cantidad de dinero alguna al señor
Tránsito Ricardo Paredes Medrano, quien se compromete a devolver a la señora María
Angélica Barahona viuda de Renderos la posesión de dicho inmueble” por lo cual la
parte actora pide que se de la resolución del contrato según lo establece el art 1360 C.
Lineamientos o criterios jurisprudenciales.
Concepto: Se reconoce que el principal efecto de la resolución es que las cosas
vuelvan al estado anterior existente a la celebración del contrato y las partes
deben reintegrarse lo que se hubiesen entregado.
Doctrina: la argumentación doctrinaria, en la que se apoya la cámara y que
pretende imponer, en el caso de finalización de un contrato bilateral de tracto
sucesivo la palabra terminación y no la palabra resolución como lo ordena en
forma imperativa el art. 1360 C
Análisis de artículos
Preciso es aplicar el Art. 1360 C.C. a todo contrato bilateral, pues su texto habla de
resolución de los contratos bilaterales in genere, sin distinguir entre contratos de tracto
sucesivo o de ejecución instantánea, de tal manera que al restringir el alcance y contenido
de dicha norma, el Tribunal ad quem, está cometiendo la infracción denunciada, esto es,
la interpretación errónea de ley, por lo que es procedente casar la sentencia por este sub
motivo, y así habrá que declararlo.
Cabe aclarar, que cuando el Tribunal de Segunda Instancia sostiene que el actor ha
cometido error de derecho al plantear su demanda, porque pidió la resolución del
contrato y no su terminación, lo cual originó la declaratoria de ineptitud de dicha
demanda, sobre el particular la Sala no comparte dicho criterio, pues con base en los
argumentos ya esbozados, se llega a la conclusión de que si se pide la resolución de un
contrato bilateral, sea éste de ejecución instantánea o de tracto sucesivo -pues ya se dijo
que el legislador no hizo tal distingo-, tal demanda debe tenerse por correctamente
planteada, ya que genéricamente se ha hecho uso de la acción pertinente.
Resolución de la sala:
En síntesis, pues, considerando que la sentencia pronunciada por la Cámara Ad quem,
será casada por el sub motivo de interpretación errónea del Art. 1360 C.C., este tribunal,
con fundamento en la Ley de Casación, pronunciará la que conforme a Derecho
corresponde.
POR TANTO: De acuerdo con las razones expuestas, disposiciones legales citadas, y Arts.
417, 418 y 428 Pr. C.; y 18 L. C., a nombre de la República, la Sala RESUELVE: a) Declárase
que no ha lugar a casar la sentencia recurrida por el sub motivo de Violación de Ley,
precepto infringido Art. 1431 C. C.; b) Cásase la sentencia de que se trata, por el sub
motivo de interpretación errónea de ley, precepto infringido Art. 1360 C.C., pronunciada
por la Cámara Tercera de lo Civil de la Primera Sección del Centro, a las nueve horas y
quince minutos del veinte de febrero de dos mil cinco, en el Proceso Civil Ordinario de
Resolución de Contrato de Arrendamiento con Promesa de Venta, y de la que se ha hecho
mérito; c) Declárase resuelto, finalizado o terminado, el contrato de arrendamiento con
promesa de venta celebrado en esta ciudad, a las once horas y treinta minutos del diez de
enero de dos mil uno, por la señora María Angélica Barahona Viuda de Renderos,
conocida por María Angélica Barahona de Renderos, como arrendante y don Tránsito
Ricardo Paredes Medrano, como arrendatario, ante los oficios del Notario Juan José
García Aguilar; d) Ordénase la desocupación y restitución (devolución) de la posesión del
inmueble dado en arrendamiento con promesa de venta, a que se refiere el contrato en
análisis, no teniendo obligación el actor de reintegrar cantidad de dinero recibida en
virtud de lo convenido en la cláusula de dicho contrato.
Número de referencia: 135-C-2005
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 25/10/2005, 09:00:00.
Pretensión: que se Declare la nulidad de titulo supletorio y se cancele su
respectiva inscripción en el Registro de Propiedad Raíz e Hipotecas de Cabañas: la
escritura pública de compraventa celebrada por los señores SIGFREDO PLEYTEZ y
MIGUEL ANGEL AYALA LOPEZ.
Causa Pretendi:
Según lo manifestado por la señora Beltrán Viuda de Reyes, a inicios de mil novecientos
ochenta y siete, mediante acuerdo verbal, concedió en arrendamiento al señor Pleitez
unos inmuebles de su propiedad. El demandado tituló supletoriamente a su favor tales
inmuebles en octubre de mil novecientos ochenta y ocho, inscribiendo el título en febrero
de mil novecientos ochenta y nueve bajo el número noventa y ocho del Libro ciento
setenta y tres del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas del Departamento de
Cabañas. Según escritura matriz número cincuenta y nueve del Libro veintidós de
Protocolo del Notario Felipe de Jesús Jaimes Aguilar, otorgada en esta ciudad, a las quince
horas del día uno de agosto de mil novecientos noventa y cuatro, el demandado otorgó
una compraventa sobre los inmuebles en disputa a favor de la Asociación Cooperativa de
Producción Agropecuaria "Nueva Heroica Santa Marta", de Responsabilidad Limitada,
instrumento que fue inscrito en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Segunda
Sección del Centro. La demandante sostiene que nunca concedió en venta al señor
Pleytez. Los inmuebles en discusión, y que no es acorde a la verdad el hecho de que él
afirmara, al momento de titular, que su posesión sobre los terrenos excedía los diez años.
Análisis de artículos:
La primera norma legal señalada como violada dispone: "Art. 421.- Las sentencias
recaerán sobre las cosas litigadas y en la manera en que han sido disputadas, sabida que
sea la verdad por las pruebas del mismo proceso. Serán fundadas en las leyes vigentes; en
su defecto, en doctrinas de los expositores del Derecho; y en falta de unas y otras, en
consideraciones de buen sentido y razón natural". El Art. 422 Pro que se considera que
también ha sido violado ordena: "Es necesaria la prueba plena y perfecta en todo género
de causas para resolver por ella la cuestión."
Análisis de la prueba:
La Sala estima que el juez tiene como principa1 misión descubrir la verdad y para ello
debe echar mano de todos los medios habilitados para tal efecto. Comparte, pues, la
opinión de la Cámara en el sentido de considerar que el acta de inspección no adolece de
ningún vicio que le reste valor probatorio, y éste acto procesal unido a la prueba
documental, a la ficta confessio del demandado y a la prueba testimonial, constituyen
plena prueba sobre la identidad de los inmuebles en discusión. El peritaje cuestionado, no
ha sido tomado en cuenta por la Cámara para emitir su fallo, es decir no se le ha
concedido ningún valor probatorio.
Resolución de la sala:
Es evidente que la Cámara ha fallado conforme a derecho, en base a las pruebas vertidas,
por lo que no procede casar la sentencia por el motivo de violación de ley alegado.
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y articulos
421, 428 Y 432 Pr. C. y 13 Y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República, la Sala
FALLA: A) No ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito por los motivos de:
a) Error de derecho en la apreciación de las pruebas, respecto de los Arts. 370 y 363 Pr. C.;
y b) Violación de ley, respecto de los Arts. 421 y 422 Pr.C.; B) Condénase al señor Sifredo
Pleitez y a la Asociación Cooperativa de Producción Agropecuaria "Nueva Heroica" de
Responsabilidad Limitada, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar.
SENTENCIAS 2006
INEXISTENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTA CAUSAL
NULIDAD
Número de Referencia: 48-C-2006
Tribunal fecha y hora: SALA DE LO CIVIL, 18/07/2006, 14:10:00
Pretensión: Declárese la Nulidad Absoluta del Contrato de Mutuo con garantía
hipotecaria.
Causa Pretendi:
La sentencia definitiva pronunciada en Primera Instancia dice: "POR TANTO: En base a las
anteriores consideraciones, disposiciones Legales citadas y Arts: 33 y 63 Ley de Notariado,
10, 568, 714, 721, 732, 1552 CC, y 321, 417, 418, 422, 427, 429, 439 Pr.C, a nombre de la
República de El Salvador, FALLO a) Declárase Nulo de Nulidad Absoluta el Contrato de
Mutuo con Garantía Hipotecaría celebrado por los señores NIDIA ELENA GALVEZ DE
LINARES PEÑATE, conocida por NIDIA ELENA GALVEZ DE LINARES . MARCIAL DE JESOS
LINARES, conocido por MARCIAL LINARES PEÑATE y el señor JOSE ALEJANDRO RUANO
SALEH, en la Escritura matriz número TREINTA del Libro SETENTA Y DOS del Protocolo del
Notario ULISES SALVADOR ALAS.
El fallo de Segunda Instancia expresa: "POR TANTO, de conformidad a los razonamientos
efectuados, disposiciones legales citadas y Arts. 1089 y 1092 PR.C., a nombre de la
República de El Salvador, DIJERON: a) Rovócase la sentencia venida en grado con
excepción de los literales "b) y d)"; B) Absuélvese al demandado señor JOSE ALEJANDRO
RUANO SALEH de la demanda de Nulidad Absoluta intentada en su contra por lo señores
NIDIA ELENA GALVEZ DE LINARES PEÑATE, conocida por Nidia Elena Gálvez de Linares y
señor MARCIAL DE JESÚS LINARES, conocido por Marcial Linares Peñate;
No conforme con dicha resolución, el doctor Antonio Amaya Lozano, apoderado de los
señores Nidia Elena Gálvez de Linares Peñate, conocida por Nidia Elena Gálvez de Linares,
y Marcial de Jesús Linares, conocido por Marcial Linares Peñate, interpuso recurso de
casación en los siguientes términos: "La sentencia definitiva pronunciada por este Tribunal
a las catorce horas con cuarenta minutos del día veintisiete de enero de dos mil seis,
contiene en su fallo los siguientes puntos: a) Se revoca la sentencia apelada; y b) Se
absuelve al demandado señor José Alejandro Ruano Saleh, de la demanda que se le
promueve. En razón de que no estoy conforme con la sentencia pronunciada,
INTERPONGO CONTRA ELLA, RECURSO DE CASACIÓN, para ante la Honorable Sala de lo
Civil de la Corte Suprema de Justicia. Se perfectamente que el presente Recurso es de
estricto derecho, pero sin que se tenga lo que a continuación expresaré a la Honorable
Cámara, como un alegato innecesario, considero indispensable exponerlo como un
preámbulo a los motivos que fundamenta mi recurso de casación y lo cual manifiesto con
el debido respeto.
Criterios jurisprudenciales
Análisis de los artículos
VIOLACIÓN DE LEY RESPECTO DE LA INFRACCION DEL ARTICULO 1316 ORDINAL 2°
C.C.
La Cámara considera que el impetrador debió haber alegado la declaratoria de nulidad
relativa y no la de nulidad absoluta como lo hizo al plantear su pretensión, ya que a su
parecer el Art. 1552 C. no contempla dentro de las causales de nulidad absoluta la falta de
consentimiento, y al ser esta una enumeración taxativa debe incluirse este motivo de
invalidación de los actos jurídicos dentro de las nulidades relativas, donde sí está
contemplado el consentimiento y los vicios que puedan afectarlo. La Cámara arguye,
además, de que cuando el demandante en sus escritos hace alusión a la expresión "vicio
del consentimiento", debió probar que existió error, fuerza o dolo, y así poder darle
trámite a la nulidad que correspondía.
Sobre lo anterior, la Sala hace las siguientes consideraciones: De acuerdo a lo planteado
en nuestra normativa civil y en consonancia, también, con la doctrina sostenida por los
expositores del Derecho, son requisitos sine qua non para la existencia del acto jurídico: 1)
El consentimiento; 2) El objeto; y, 3) La causa. La ausencia de cualquiera de las
condiciones anteriores redunda en la inexistencia del acto jurídico.
Por otra parte, para que un acto jurídico que ha nacido a la vida sea válido es menester
que concurran los siguientes requerimientos: 1) La capacidad legal de las partes
intervinientes; 2) Consentimiento libre de vicios; 3) Objeto lícito; y, 4) Causa lícita.
La Sala estima que los argumentos del recurrente sobre este punto son atendibles, debido
a que la Cámara de haber aplicado el Art. 1316 ordinal 2° C., hubiese arribado a una
conclusión totalmente diferente. Es de hacer notar que el Tribunal de alzada en su
sentencia, carente de la fundamentación debida, se limitó a citar fuera de contexto la
expresión "consentimiento viciado" que en algún momento la actora utilizara dentro de
sus escritos, y de ahí que sin mayor explicación le hace ver que debió, en su oportunidad,
haber probado que en el consentimiento de sus representados operó ya sea error, fuerza
o dolo, sin considerar -en manera alguna- que el Art. 1316 C. dispone con claridad
absoluta que la falta de consentimiento dentro de un acto jurídico trae como
consecuencia que una persona no se obligue para con otra, es decir, que esa falta de
manifestación de la voluntad trae aparejada la inexistencia del acto jurídico, siendo
procedente por tanto la declaratoria de nulidad absoluta en los términos que con
anterioridad se han dejado anotados.
De lo anterior se colige que la Cámara ha incurrido en la violación del Art. 1316 ord. 2° C.,
y así debe declararse.
VIOLACIÓN DE LEY RESPECTO DE LA INFRACCION DEL ARTICULO 33 LEY DE
NOTARIADO
El abogado recurrente estima que esta disposición legal fue inaplicada por la Cámara pues
dentro del proceso se vertieron las pruebas pertinentes que demostraron la no
comparecencia ante notario, de sus representados, para el otorgamiento del mutuo
hipotecario objeto del juicio de nulidad absoluta, y a pesar de ello el Tribunal superior
falló en contrario a sus pretensiones.
Analizados que han sido por el Tribunal Casación los argumentos anteriores y la sentencia
de Segunda Instancia, se concluye que la violación alegada ha tenido lugar, pues no
obstante haberse comprobado plenamente que las personas que se relacionan en el
instrumento de mutuo hipotecario en calidad de deudores e hipotecantes jamás
comparecieron a su formalización ante el notario que lo autorizó, la Cámara no se
pronunció sobre ello, haciendo caso omiso del Art. 33 de la Ley de Notariado que ordena
la invalidación del instrumento notarial que no estuviere suscrito por los otorgantes, tal y
como es el caso que nos ocupa.
La vía procesal adecuada para restar validez al instrumento público cuestionado es, a
todas luces, la que se instauró por el recurrente, es decir, la de la nulidad absoluta.
De lo dicho resulta evidente que el Art. 33 de la Ley de Notariado ha sido violado y así se
declarará.
Análisis de la prueba.
Las disposiciones del Código de Procedimientos Civiles apuntadas como infringidas rezan:
"Art. 321.- Dos testigos mayores de toda excepción o sin tacha, conformes y contestes en
personas y hechos, tiempos y lugares y circunstancias esenciales, hacen plena prueba.
Para probar la falsedad de un instrumento se necesitan cuatro testigos idóneos o sin
excepción, si fuere público o auténtico, y dos, si fuere privado. Más en los instrumentos
públicos tendrá el Juez en consideración su antigüedad, su concordancia con el protocolo
y la buena o mala conducta de escribano o Notario."; "Art. 412.- Son pruebas semiplenas:
la comprobación de letras, la deposición de un solo testigo idóneo, la confesión
extrajudicial verbal probada por dos testigos, la presunción judicial y los testimonios o
copias de que habla el artículo 275."; y "Art. 415.- Cuando por ambas partes se produzca
en juicio plena prueba, se estará a la más robusta según el orden siguiente: ...9° La prueba
pericial en los casos que tiene lugar; 10° La prueba testimonial;.. ."
El abogado recurrente aduce que la Cámara erró al restar todo valor a la prueba
testimonial que oportunamente presentó, así como también a la de comprobación de
letras practicada.
El Tribunal Casacional, analizados los argumentos vertidos en el escrito de interposición
del recurso, estima que debido al criterio equivocado sustentado por la Cámara respecto a
la procedencia de la nulidad relativa para el presente caso, y que fue el que aplicó al
sentenciar, incurrió en el defecto alegado ya que desestimó la prueba producida en el
transcurso de la Primera Instancia. Ni la prueba testimonial ni la prueba pericial de
comprobación de letras fueron consideradas para resolver el caso planteado.
Respecto del Art. 415 ordinal 9° y 10° Pr.C., la Sala observa que tal normativa no fue
infringida por el ad quem, ya que la disposición en comento se refiere al caso en el que el
Tribunal sí valora la prueba, y únicamente se produciría el error de derecho si la Cámara
hubiese procedido a aplicar incorrectamente el sistema preferencial de pruebas que ahí se
regula, lo que es contradictorio con la afirmación sostenida por el recurrente en el sentido
de que la Cámara lo que hizo fue desestimar la prueba que él menciona.
En conclusión la Sala estima que se produjo el error de derecho atribuido a la Cámara
respecto de los Arts. 321 inc. 2° y 412 Pr. C., y así se declarará.
En definitiva, pues, considerando que procede casar la sentencia de que se trata, se
impone pronunciar la que fuere legal, siempre que el recurso se haya interpuesto por
error de fondo. Art. 18 L. de C.
Resolución de la sala.
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y artículos
421, 422, 428, 432 y 18 de la Ley de Casación, a nombre de la República, la Sala FALLA: A)
Cásase la sentencia definitiva de que se ha hecho mérito, habida cuenta el razonamiento
subrayado en los considerando s respectivos; B) Declárase nulo, de nulidad absoluta, el
contrato de mutuo con garantía hipotecaria que aparece celebrado por los señores NIDIA
ELENA GALVEZ DE LINARES y MARCIAL DE JESÚS LINARES, conocido por MARCIAL LINARES
PEÑA TE, y el señor JOSE ALEJANDRO RUANO SALEH, según escritura matriz número
TREINTA, del LIBRO SETENTA Y DOS, otorgada en la ciudad de San Salvador, en los oficios
del Notario ULISES SALVADOR ALAS, a las once horas del diez de septiembre de dos mil
uno; C) Declárase nula, de nulidad absoluta, la escritura matriz número TREINTA, del
LIBRO SETENTA Y DOS del Protocolo del Notario ULISES SALVADOR ALAS, otorgada en esta
ciudad, a las once horas del diez de septiembre de dos mil uno; D) Cancélese la anotación
preventiva de la demanda decretada por el Juzgado Primero de lo Civil de esta ciudad e
inscrita en el asiento CERO CERO CERO CUATRO de la matrícula M CERO CINCO MILLONES
CIENTO SESENTA Y NUEVE MIL NOVENTA Y SIETE del Registro de la Propiedad Raíz e
Hipotecas de la Primera Sección del Centro; E) Cancélese la hipoteca que aparece
otorgada por los señores NIDIA ELENA GALVEZ DE LINARES y MARCIAL DE JESÚS LINARES,
conocido por MARCIAL LINARES PEÑATE, a favor de don JOSE ALEJANDRO RUANO SALEH,
según escritura matriz número TREINTA del LIBRO SETENTA Y DOS, del Protocolo del
Notario ULISES SALVADOR ALAS, otorgada en esta ciudad, a las once horas del diez de
septiembre de dos mil uno, inscrita en el asiento CERO CERO CERO DOS de la matrícula M
CERO CINCO MILLONES CIENTO SESENTA Y NUEVE MIL NOVENTA Y SIETE, del Registro de
la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Primera Sección del Centro; F) Líbrense los oficios de
rigor al Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Primera Sección del Centro.
SENTENCIAS 2007
NULIDAD
REF: 9-C-2006
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las once horas del
catorce de marzo de dos mil siete.
PRETENSIÓN:
Nulidad De Instrumento y Reivindicatorio.
CAUSA PRETENDI:
Se declara la Nulidad Absoluta de la Escritura número cuarenta y cuatro otorgada por los
Señores Antonio Commandari Zimmeri conocido por Antonio Commandari Zimeri ante los
oficios del Notario Doctor Miguel Palacios Rodríguez otorgado en la ciudad de Miami,
estado de Florida, Estados Unidos de América, en las que se produjeron en consecuencia
las ventas hechas a los Señores Carlos Alejandro Escalante Alfaro y Ana del Carmen
Vásquez de Alfaro de dos porciones de la Hacienda Las Huertas. Así mismo se pide la
Reivindicación de estos inmuebles favor del Señor Antonio Emilio Commandari Zimmeri
conocido como Antonio Commandari Zimeri Representante Legal de la Sociedad Antonio
Comandari Hijos y Compañía.
CRITERIOS.
Conceptos:
Violación de la Ley:
Como sub motivo de Casación consiste en la no aplicación de la ley que debía
aplicarse, es la negación o desconocimiento del precepto legal.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
La Sala de lo Civil al realizar el análisis respectivo sobre los artículos que la Cámara de lo
Civil ha inaplicado o tiene desconocimiento del precepto legal, la Sala hace una serie de
consideraciones al respecto de las disposiciones impugnadas los cuales son los artículos
1183, 1184, 1185 y 1186 PrC. Establecen lo que son los procedimientos para establecer los
impedimentos y excusas de los Magistrados de Cámaras de Segunda Instancia.
Según el art.1184 PrC. Dice textualmente que las Cámaras Seccionales “tendrán la facultad
de conocer de los impedimentos o excusas de sus propios Magistrados” y en este y en los
demás artículos antes citados, da competencia al Magistrado Propietario y a uno de los
Suplentes o a los dos Suplentes según sea el caso para conocer del impedimento.
Para conocer de los impedimentos y de las excusas, la Sala de lo Civil en el caso en que
tanto los dos Magistrados Propietarios como los dos suplentes tengan impedimento o
excusa y es precisamente el caso en que la Sala de lo Civil debe de conocer por el mandato
expreso del artículo 54 N° 4 de la Ley Orgánica Judicial en donde se colige que la ley nueva
reconoce la vigencia de la ley antigua, es decir que se reconoce la facultad que concede
los artículos del Código de Procedimientos Civiles. Por consiguiente la Sala de lo Civil
considera que la Resolución pronunciada por los Magistrados suplentes respecto del
impedimento se debe respetar y cumplir ya que no existe el motivo de Violación de la Ley.
Error de Derecho en la Apreciación de las Pruebas:
El error de derecho en la apreciación de las pruebas se presenta, cuando al estimar el
mérito que tienen de conformidad a la ley, se les da un valor equivocado, diferente del
que les determina la ley.
La jurisprudencia sostiene que la causal de casación de error de derecho en la apreciación
de la prueba, se produce cuando el juzgador aprecia incorrectamente una prueba,
dándole un valor distinto al que le asigna la ley, negándole todo valor, desestimando una
prueba producida, aplicando incorrectamente el sistema preferencial de pruebas que
establece la legislación procesal, o cuando la apreciación de la prueba efectuada por el
juzgador ha sido arbitraria, abusiva o absurda; todo en relación con el sistema de prueba
tasada. (Sentencia de la SALA DE LO CIVIL, Ref. 95-C-2006 de las 12:05 horas del día 20/4/2007).
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
La Sala de lo Civil al analizar el art. 28 de la Ley de Notariado prescribe que “el protocolo
no podrá presentarse en juicio ni hacer fe de él…”. La parte actora solicito durante el
término de la prueba, solicito al Juez que practicará en la Sección de Notariado de la Corte
Suprema de Justicia, la Compulsa11 del libro tercero del protocolo del doctor Miguel
Rodríguez Palacios de la escritura número cuarenta y cuatro, fs. 51 al 57, para lo cual se
delegó al Juez Segundo de lo Civil de esta ciudad, quien al diligenció el exhorto de
conformidad con las disposiciones legales. La compulsa “per se” no es especie de prueba,
sino que es un medio para obtener la prueba instrumental. El valor probatorio de los
instrumentos compulsados será el que las leyes señalen según el caso.
El Tribunal Ad quem al estimar que la compulsa constituye una inspección, ha cometido
un error conceptual explica la Sala, pero al momento de apreciar el valor probatorio, le ha
estimado el valor de plena prueba de conformidad con el art. 370 PrC. Por lo que no existe
el error de Derecho alegado ni tampoco en relación con las disposiciones del art. 28 Not.
que integrado con los artículos 258 y 271 PrC. Permiten a las partes la obtención de
prueba instrumental que tendrá valor probatorio según sean los casos.
La Sala en el caso del art. 410 PrC. Da el valor de plena prueba a dos presunciones que no
dependen una de otra y que concurran al hecho principal, si cada una de ellas, se deduce
de un hecho legalmente probado. Una sola presunción puede tener valor de principio de
prueba o de semiplena prueba.
11 La compulsa es un medio que la ley franquea a las partes para la obtención de documentos que deben aportar al proceso, cuando aquéllas no los tienen a la mano porque se encuentran en poder de un tercero o en un protocolo, en un archivo público, o son actuaciones judiciales.
La suposición o presunción del Tribunal Ad quem se basa en lo que es en una parte el
cotejo de letras que tiene un valor probatorio de semiplena prueba según el art. 412 PrC.
y por otro lado en el hecho que conforme a las disposiciones legales, el Protocolo está
bajo custodia del Notario y posteriormente de la Corte Suprema de Justicia por lo que no
concibe que el Señor Comandari haya tenido lo que es el acceso al protocolo
subsiguientemente ya que después de haber sido firmado, mientras no se prueba lo
contrario la presunción se supone verdadera.
Interpretación Errónea de Ley:
La interpretación errónea de ley se presenta, cuando al aplicar la disposición adecuada al
caso juzgado, el juzgador desatiende el tenor literal de la ley, o bien va más allá de su
verdadero sentido o puede haberla restringido, a pretexto de consultar su espíritu.
También puede presentarse el sub motivo cuando, al interpretar el espíritu de la ley no se
dio con el verdadero sentido, o porque no se supo resolver la contradicción entre dos
normas o porque tratándose de una norma sujeta a varias interpretaciones, se escogió la
que menos convenía al caso concreto.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
La Sala de lo Civil al analizar la interpretación errónea de la Ley establece que los actos
jurídicos tiene lo que son condiciones de existencia y de validez, las cuales están
establecidas en la ley; si faltan las primeras, el acto no nace a la vida jurídica, si faltan los
segundos, el acto nace pero con vicios.
Para la eficacia de la voluntad se requiere que sea consciente y no viciada; cuando hay
ausencia de la voluntad en su totalidad el acto jurídico no existe; pero cuando la voluntad
ha sido viciada, el acto es anulable.
Al analizar este caso de autos resulta que la escritura pública de compraventa cuya
nulidad se alega en la demanda se otorgó con todos los requisitos de existencia y validez
que son necesarios, es decir, que el acto jurídico de compraventa existió, nació a la vida
jurídica cuando fue firmado por las partes. El vendedor expreso al contestar el pliego de
posiciones que le fue presentado por la parte demandada que “ciertamente firmó lo que
es la escritura de compraventa a favor del Señor Héctor Miguel, pero que en el mismo
acto se anuló porque no estaba dentro del convenio la venta de dicha propiedad”, y que al
poner “está firma no vale” lo cual no se puede tomar lo que es como confesión porque
esta es el reconocimiento que hace una persona contra si misma sobre la verdad de un
hecho y esta verdad expresada por el actor perjudica sino que lo beneficia en cuanto va en
abono a su petición de nulidad hecha en la demanda.
Lo que perjudico al actor o vendedor no es la validez ni la existencia del acto jurídico de
compraventa sino lo que le hizo fue perjudicar materialmente un instrumento público,
hecho que da lugar a otra clase de acciones; es decir que la compraventa en este caso
queda perfectamente válida.
Porque se casó la Sentencia.
De lo anterior resulta que el procedimiento realizado por la Sala de lo Civil al momento de
analizar el caso en concreto sobre la exposición de los sub motivos del porqué del Recurso
de Casación interpuesto por la inconformidad de la parte actora, la Sala de lo Civil decide:
1. No CASAR la sentencia por el sub motivo de Violación de la Ley ya que la resolución
pronunciada por los Magistrados Suplentes respecto del impedimento se debe de
respetar y cumplir ya que no existe el motivo de violación alegado por impetrante.
2. La Sala al analizar el siguiente sub motivo que trata sobre el Error de Derecho en la
Apreciación de la Prueba decide NO casar la sentencia ya que por este motivo no
se tipifica la infracción al art. 350 N°3 PrC. alegada y por tal explicación no es
procedente hacer.
3. Con respecto al sub motivo de Interpretación Errónea de la Ley, la Sala explica que
es Procedente casar la sentencia ya que al declarar la Nulidad de la escritura de
compraventa y de las demás que se citan en el Fallo, el Tribunal A quo interpretó
mal los artículos 1551 y 1552 C.C dándoles un sentido que no tienen.
REF: 51-C-2006
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL, CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las catorce horas
quince minutos del trece de abril de dos mil siete.
PRETENSIÓN:
Nulidad de Títulos y Reivindicatorio de Dominio
CAUSA PRETENDI:
Se pide la Nulidad de Títulos y Reivindicatorio, promovido por los licenciados JUAN
RAMON RIVAS MENJIVAR y OSCAR JAVIER PORTILLO, en calidad de apoderados generales
judiciales de la señora NUBIA ESTELA RIVAS DE RIVAS, contra la señora MARIA LUZ DERAS
y la "ASOCIACION COOPERATIVA DE LA REFORMA AGRARIA SAN CARLOS DE
RESPONSABILIDAD LIMITADA", hoy denominada "ASOCIACION COOPERATIVA DE
PRODUCCION AGROPECUARIA SAN CARLOS, DE RESPONSABILIDAD LIMITADA", Y contra
los señores ROBERTO ANTONIO PADILLA PINTO Y conocido por ROBERTO ANTONIO
PADILLA, RICARDO ANTONIO PADILLA PINTO, conocido por RICARDO ANTONIO PADILLA,,
Y RAFAEL ANTONIO PADILLA PINTO, conocido por RAFAEL ANTONIO PADILLA.
CRITERIOS.
Conceptos:
Sentencia Definitiva: (art. 132 PrC.)
Es aquella en que el Juez, concluido el proceso, resuelve el asunto principal, condenando o
absolviendo al demandado, y que es en estas sentencias que se resuelven las excepciones
perentorias; de donde se desprende que existen sentencias definitivas que resuelven el
asunto principal, y sentencias definitivas que resuelven excepciones perentorias.
Violación de la Ley.
Como sub motivo de Casación consiste en la no aplicación de la ley que debía aplicarse, es
la negación o desconocimiento del precepto legal.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
En relación con esta infracción (art. 237 PrC.) la Sala hace esta consideración al respecto
de las probanzas producidas por la parte actora, las cuales están constituidas por
instrumentos públicos y auténticos, así como testimoniales, probanzas que según el
Principio de comunidad de la Prueba, en este sentido el Juez al analizarlas, pudiendo estas
producir provecho a la parte contraria, a pesar que no hayan sido producidas.
La Sala observa que los recurrentes fundamentan su alegato de infracción, en que el
tribunal Ad quem en ninguna parte de su sentencia, manifiesta que la parte demandada
probó por medio alguna excepción perentoria alegada. Sin embargo, en la sentencia
impugnada consta que la Cámara Sentenciadora analizó lo que es la prueba instrumental
vertida en el proceso y conforme al principio antes mencionado que los títulos
municipales y supletorios cuya nulidad se solicita en la demanda lo inscribieron así: El de la
señora MARIA LUZ DERAS el día siete de enero de mil novecientos cuarenta y cuatro; y, el
del señor FEDERICO MARCIAL PADILLA, el día cuatro de marzo de mil novecientos sesenta
y tres. Y que en el primero de los casos, ha transcurrido hasta esta fecha sesenta y un
años, y en el segundo cuarenta y dos años.
En virtud de lo siguiente, la Sala considera que transcurrido el tiempo de la primera acción
judicial, la cual se inició en el año de mil novecientos noventa y siete, habiendo
transcurrido ya cincuenta y tres años en el primer caso y treinta y cuatro en el segundo y
que considerando el tiempo que extingue las acciones ordinarias es de veinte años el art.
2255 inc. 1° la acción intentada está prescrita.
En relación al art. Infringido 132 PrC., la Sala de lo Civil estima que lo alegado por el
recurrente, es decir que existe la violación de la ley porque la Cámara Ad quem, en la
sentencia definitiva no conoció del fondo del asunto sino que solamente resolvió lo que
son las excepciones perentorias alegadas por el demandado. Acerca de estas alegaciones,
la Sala en reiteradas ocasiones ha manifestado que de conformidad con los arts. 218 y 132
PrC.
En cuanto al art. infringido 2232 C.C, la Sala explica lo que es la Violación de la Ley y está
consiste en la no aplicación de una norma vigente que era aplicable al caso concreto,
haciéndose una falsa elección por otra; de manera que cuando el recurrente alega que
existe la violación porque la parte demandada no contra demando, para lograr lo que es la
declaración de la prescripción adquisitiva y con ello obtener el reconocimiento de un
Derecho con lo cual estaría extinguiendo la acción entablada.
El precepto infringido se refiere a que el que quiera aprovecharse de la prescripción debe
alegarla y que el Juez no puede declararla de oficio.
Error de Hecho en la Apreciación de las Pruebas:
Es necesario que el juzgador haya equivocado de manera evidente los términos literales
de un documento auténtico, público o privado reconocido, teniendo por acreditada cosa
distinta de lo que aparece en ellos o admitiendo la certeza de un hecho diferente o
contrario a su contenido, es decir, que ve prueba donde no la hay, o habiéndola no la
valora.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
La Sala hace las siguientes consideraciones ya que los dos arts. 258 y 260 N°1 PrC. tienen
relación con el vicio invocado y a la vez estos serán analizados en conjunto.
El recurrente alega que existe error de hecho porque la Cámara Ad quem nunca valoro
prueba alguna para desvirtuar la prescripción extintiva de la acción, excepción perentoria
interpuesta por el demandado. La Sala considera que la prescripción extintiva solo puede
desvirtuarse por interrupciones civiles o naturales, las que no han sido probadas dentro
del proceso.
En el caso en estudio y considerando el concepto de infracción invocada, la Cámara
Sentenciadora no ha cometido el vicio denunciado, pues para declarar que ha lugar a la
prescripción extintiva alegada por el demandado, lo ha hecho fundamentándose en lo que
es la prueba vertida en el proceso, siendo está el título municipal y supletorio de los
Señores Deras y Padilla respectivamente.
Porque se casó la Sentencia.
La Sentencia NO se casa porque el sub motivo de violación de la Ley por los arts. 237 PrC.,
132 PrC. y 2232 C.C, ya que la Sala de lo Civil considera que la Cámara Sentenciadora no ha
cometido la violación de la ley alegada por el recurrente, es decir que el art. 237 PrC. de
conformidad al principio de Comunidad de la prueba al que hace referencia el art. Si se ha
aplicado pues la excepción alegada ha sido probado por los instrumentos vertidos en el
proceso.
En el art. 132 PrC. la Sala expresa que la Cámara Sentenciadora si aplico la norma que se
dice ser infringida, pues consta en todos los autos que se han desarrollado todas las
etapas procesales de la instancia y que precisamente en sentencia definitiva que se
resolvió las excepciones perentorias planteadas por la parte demandada, por lo tanto es
un error que la Cámara no ha cometido con relación al inciso segundo del art. 132 PrC.
Con relación al art. 2232 C.C la Sala considera que la parte demandada si alego como
excepción perentoria la declaración de la prescripción extintiva de la acción, lo cual es
razón suficiente para considerar que la Cámara Ad quem si aplicó la norma que se invoca
infringida.
En virtud del sub motivo alegado por el error de hecho en la apreciación de las pruebas, la
Sala decide NO casar la sentencia ya que habiendo la Cámara declarado la prescripción
extintiva de la acción con base en la prueba instrumental, es preciso advertir que
cualquier tipo de prueba amparada en una acción prescrita la convierte en impertinente e
ineficaz pues estando prescrito el Derecho de Acción se vuelve ineficioso conocer y valorar
cualquier tipo de prueba pues no hay pretensión que probar.
REF: 126-C-2006
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL; CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, San Salvador, a las doce horas
quince minutos veintisiete de noviembre de dos mil siete.
PRETENSIÓN:
Mero Derecho De Nulidad
CAUSA PRETENDI:
Se pide de Mero Derecho la Nulidad por el Licenciado Sergio Ernesto Chicas Mejía,
apoderado del Fondo Fiduciario Especial para atender a los afectados de las
operaciones ilegales realizadas por el grupo financiero INSEPRO, que se abrevia
FEAGIN contra la Señora María del Tránsito Flores de Villeda.
CRITERIOS.
Conceptos:
Violación de Ley
Cuando se omiten los preceptos legales que debieron ser aplicados al caso
controvertido, por la falsa elección de otros. La violación no tiene relación con los
hechos, los que no se tornan en cuenta para juzgar, si existe o no la infracción y por
ello hacer depender de éstos, el vicio denunciado equivale a dar un concepto
equivocado del mismo, que es igual ha no expresado.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
El Tribunal Ad-quem no aplicó las normas que se consideran infringidas, en razón de que
no eran aplicables al caso cuestionado, sobre todo por existir un instrumento anterior en
el registro, que es la compraventa tantas veces mencionada con relación a los Arts. 2160
C.C. y 117 de la Ley de Bancos y Financieras derogadas.
Error De Hecho En La Apreciación De La Prueba
Es necesario que el juzgador haya equivocado de manera evidente los términos literales
de un documento auténtico, público o privado reconocido, teniendo por acreditada cosa
distinta de lo que aparece en ellos o admitiendo la certeza de un hecho diferente o
contrario a su contenido, es decir, que ve prueba donde no la hay, o habiéndola no la
valora.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
En el presente caso, eso no ha sucedido, porque la Cámara de apelación apreció en toda
su magnitud la prueba documental aportada, por lo que llegó a la conclusión comparando
la prueba aportada por el actor y el demandado, que la cesión del mutuo hipotecario
precedía a la ya referida compraventa, por lo que no pudo el mencionado tribunal
cometer la infracción atribuida. En consecuencia, tampoco hubo error de derecho en la
apreciación de la prueba, ya que ésta se comete cuando el juzgador aprecia
incorrectamente una prueba, dándole un valor distinto al que le asigna la ley o negándole
todo valor, lo que no ha sucedido, pues en los considerandos de la sentencia recurrida, se
puede apreciar el análisis que de la prueba realizada.
Interpretación Errónea de Ley:
La interpretación errónea de ley se presenta, cuando al aplicar la disposición adecuada al
caso juzgado, el juzgador desatiende el tenor literal de la ley, o bien va más allá de su
verdadero sentido o puede haberla restringido, a pretexto de consultar su espíritu.
También puede presentarse el sub motivo cuando, al interpretar el espíritu de la ley no se
dio con el verdadero sentido, o porque no se supo resolver la contradicción entre dos
normas o porque tratándose de una norma sujeta a varias interpretaciones, se escogió la
que menos convenía al caso concreto.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
El recurrente estima que la Cámara infringió los Arts. 680 C.C. y 41 del Reglamento de la
Ley de Reestructuración del Registro de la Propiedad, pues según su argumentación la
Cámara le dio a la cesión de crédito hipotecario, la calidad de documento registrable,
cuando no lo era, por lo que a su criterio existe interpretación errónea de ambas
disposiciones.
Para que exista interpretación errónea es necesario que el Juzgador le haya dado a las
normas aplicadas, un sentido distinto al que la ley les asigna, pudiendo encontrarse
incluso tal interpretación en el hecho de que no se tomaron en cuenta al verificarla todos
los elementos de la interpretación, de los que todo intérprete debe echar mano,
gramatical, lógico, histórico y sistemático. En el caso sub-litem, no aparece que el tribunal
sentenciador le haya dado a ambas normas que se citan como vulneradas, una
interpretación equivocada; muy al contrario, la Cámara las analiza y llega a la conclusión
de que el apelante no tiene razón en sus argumentos, puesto que la cesión del crédito, era
anterior a la compraventa, y así fueron presentados para su inscripción.
Porque se casó la Sentencia.
En virtud de lo dicho, pues, la Cámara no cometió ninguna de las infracciones que le
atribuye el recurrente, como es violación de los Arts. 117 de la Ley de Bancos y Financieras
(derogada), 2160 C.C., ni de error de hecho en la apreciación de la prueba documental,
Art. 260 N° 2 Pr. C., como tampoco error de derecho en la apreciación de la prueba. Art.
421 y 422 Pr. C., así como también no se cometió interpretación errónea de los Arts. 680
C.C. y 41 del Reglamento de la Ley de Reestructuración del Registro de la Propiedad,
desde luego que la Cámara sentenciadora hace un análisis pormenorizado de todo lo
acontecido en autos en su sentencia la cual comparte esta Sala.
En razón de lo anterior, no es posible casar la sentencia, por ninguno de los sub motivos
denunciados lo que así deberá de declararse.
POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas, y Arts. 428
y 432 Pr. C. y 23 Ley de Casación, la Sala a nombre de la República, FALLA:
a) No ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito; y,
b) Condenase en los daños y perjuicios a que hubiere lugar a la señora María del Tránsito
Flores de Villeda; y al doctor Joel Ruíz en las costas del recurso, como abogado firmante
del mismo.
RESOLUCIÓN
REF: 30-C-2007
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las nueve
horas y quince minutos del dieciocho de octubre de dos mil siete.
PRETENSIÓN:
Resolución de Contratos
CAUSA PRETENDI:
Se pide la Resolución de Contratos de Promesa de Venta celebrados entre el ingeniero
Tomás Enrique Moreno y el Señor Lorenzo Enrique Rosales, los cuales fueron celebrados
ante el notario José Edilberto Velásquez Gómez y que corresponde a los instrumentos
número cincuenta y cinco y cincuenta y cuatro del Libro Noveno del Protocolo.
CRITERIOS.
Conceptos:
Error de Derecho en la Apreciación de las Pruebas
Respecto al sub-motivo Error de Hecho en la apreciación de la prueba, éste se configura a
consecuencia de que el juzgador no ha tomado en consideración la eficacia probatoria
resultante de documentos auténticos, públicos o privados reconocidos, o de la confesión
al ser apreciada sin hacer relación a otras pruebas. Consiguientemente, para que exista
dicho sub-motivo, es necesario que el aplicador de la ley haya equivocado de manera
evidente los términos literales de un documento, teniendo por acreditada cosa diferente
de lo que aparece en él; o, a contrario sensu, teniendo por no acreditado lo que sí aparece
en el mismo.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
El impetrante respecto al sub-motivo en estudio, ha señalado la infracción del Art. 269 Pr.
C. Al analizar el concepto de la infracción, tanto en el escrito de interposición del recurso
como en el de aclaración presentado, adviértese que el recurso por dicho precepto fue
admitido ilegalmente, dado que con el concepto de la infracción desarrollado la Sala no
tiene claridad indubitable de cómo fue que el Tribunal Ad-quem infringió la disposición en
estudio a la luz de lo que la ley de la materia entiende por el sub-motivo de que se trata.
En tal virtud, por el Art. 269 Pr. C. procede declarar la inadmisibilidad del recurso en el
fallo de esta sentencia. Art. 16 L. Cas.
Error de Derecho en la Apreciación de las Pruebas
En cuanto al sub-motivo Error de Derecho en la Apreciación de la Prueba, advierte la Sala
que la admisión del recurso por el Art. 113 Pr. C. ha sido también ilegal, ya que tal
precepto no desarrolla reglas de valoración de pruebas, pre-requisito sine qua non para
denunciar la infracción de determinado precepto por el sub-motivo en estudio.
Consecuentemente, deberá declararse su inadmisión en el fallo de esta sentencia.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
En cuanto a la infracción del Art. 415 Pr. C. atribuida a la Cámara Ad quem, sostiene el
interponerte que dicho precepto "se refiere a cuando por ambas partes se produzca en
juicio plena prueba, se estará a la más robusta según el orden siguiente:--- 1°.) La
Presunción de Derecho;--- 2°.) El Juramento Decisorio;--- 3.) La Confesión Judicial;--- 4°.) La
Inspección Personal en los casos en que tiene lugar;--- 5°.) Los Instrumentos Públicos y
Auténticos;--- 6°.) Los Privados Fehacientes; 7°.) La Confesión Extrajudicial Escrita;--- 8°.)
La Confesión Extrajudicial verbal con otra semiplena;--- 9°.) La Prueba Pericial en los casos
en que tiene lugar;--- 10°.) La Prueba Testimonial;--- 11°.) Las semiplenas pruebas de
diverso género que hacen prueba perfecta;--- 12°.) Las presunciones cuando hacen plena
prueba.
--- La presunción legal no tiene entonces lugar porque cede a la prueba contraria; salvo la
presunción de derecho de que habla, el número 1°."--- La Honorable Cámara, expresa que
no hay confesión de parte de la Licenciada maría (sic) Elena. Flores e ignora la existencia
de el (sic), afirmando que más bien se trata de reconocimiento de un hecho, y solo (sic)
aprecia los instrumentos públicos aplicando el numeral 5° del Artículo citado y no aplica el
numeral 3° que es el legalmente aplicable. De esa manera la Honorable Cámara viola el
Artículo citado, o sea la preferencia de las pruebas establecida en él.--- Por esa
circunstancia en Segunda Instancia, alegué que los contratos de promesa de venta
adolecen de nulidad, y es del caso notar que la Honorable Cámara, no haya hecho la
observación existente en los dos contratos de promesa de venta: hubo una hora entre un
contrato y el otro, otorgados ante el mismo notario, por el señor Tomás Enrique Moreno,
en donde en uno aparece como Representante de la Sociedad vendedora y en el otro en
forma personal.---De esta manera la Cámara sentenciadora ha cometido error de derecho
en la apreciación de las pruebas, ya que éste se configura cuando el juzgador infringe las
normas valorativas de la prueba, esto es cuando no da a ciertas pruebas el valor que les
asigna la ley o cuando se infringe el régimen legal de preferencia de Las pruebas. Error de
Derecho en la Apreciación de la Prueba atribuido a la Cámara Ad-quem, afirma el
interponerte que ha sido infringido por la Honorable Cámara, al considerar que en este
caso no existe confesión judicial de la Licenciada María Elena Flores, en su actuación en
este proceso.""""
El Tribunal Ad-quem en la sentencia que nos ocupa, en lo que a la confesión se refiere
sostiene que: """Confesión es la declaración o reconocimiento que hace una persona
contra sí misma sobre la verdad de un hecho"""; de ahí que tal afirmación no tiene
carácter de confesión más bien se trata del reconocimiento de un hecho. Aunado a ello,
se debe de tomar en cuenta que dentro del Juicio existen dos contratos de promesa de
venta, mismos que se han venido relacionando con anterioridad; instrumentos, que en
esta instancia, han sido considerados válidos; es decir, que la prueba instrumental ha sido
la base para resolver la petición de la nulidad alegada por el apelante; y se ha tenido por
probado un hecho que consta en instrumentos públicos, como lo son los testimonios de
las escrituras de promesa de venta. Además es necesario advertir, que si el apelante
quiere impugnar la validez de ese instrumento público, tiene que tramitar previamente el
correspondiente Juicio Civil Ordinario de Nulidad y presentar en este proceso como
prueba fehaciente la sentencia definitiva ejecutoriada que declare la nulidad de ese
instrumento público, lo cual no ha ocurrido en el presente caso.""""
La Sala, es unánime en cuanto a que la cuestionada afirmación de la apoderada del actor
no constituye confesión (dado que ella no ha intervenido directamente en la celebración
de los convenios o contratos objetos del presente proceso, que den lugar a que conozca
los hechos jurídicos controvertidos), y la misma es irrelevante al momento de analizar el
incumplimiento de dichos convenios, pues la obligación del promitente vendedor se
circunscribía a otorgar los contratos de compraventa a favor del demandado, una vez
fuera cancelada la suma adeudada en la fecha convenida (cuestión que se ha establecido
en autos no se dio, por haber incurrido en mora el ahora recurrente). Da igual si los
inmuebles estaban embargados o no; si los pagos tenían que verificarse en el Banco o
personalmente o por interpósita persona al promitente vendedor, ya que ello no se pactó
expresamente en el contrato; lo relevante en el caso de autos, es que una vez cancelada la
suma adeudada en la fecha convenida, el promitente vendedor se iba a encontrar en la
obligación de otorgar a favor del demandado las escrituras de compraventa de los
inmuebles objetos de los documentos base de la pretensión.
Violación de Ley
Se comete violación de ley, cuando se omiten los preceptos legales que debieron ser
aplicados al caso controvertido, por la falsa elección de otros. La violación no tiene
relación con los hechos, los que no se tornan en cuenta para juzgar, si existe o no la
infracción y por ello hacer depender de éstos, el vicio denunciado equivale a dar un
concepto equivocado del mismo, que es igual a no expresarlo. (Sentencia de la SALA DE LO
CIVIL, Ref. 126-C-2006 de las 12:15 horas del día 26/11/2007)
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
Las Arras se definen como "La prenda o señal que se da en fe y seguridad del
cumplimiento de alguna cosa". En otras palabras, se dan o entregan en señal de buena fe,
en el cumplimento del convenio o contrato celebrado y las mismas pueden entregarse
antes o después de perfeccionado el convenio o contrato. Es de acentuar, que las arras
deben de estar expresamente estipuladas en los convenios de promesa de venta, porque
de lo contrario a la hora de rescindir o resolver el convenio, por incumplimiento de una de
las partes, no se puede pretender su devolución en los términos del Art. 1677 inciso 2° C.
C., porque tales simplemente son inexistentes; tal como se ha dejado sentado no fueron
convenidas y menos entregadas en señal de cumplimiento.
Porque se casó la Sentencia.
POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas, y Arts.
417, 418, 428 y 432 Pr. C.; y, 16 de la Ley de Casación, a nombre de la República, la
Sala FALLA:
a) Declárase Inadmisible el recurso de mérito, por el sub-motivo Error de Derecho en
la Apreciación de la Prueba, Art. 113 Pr. C. y Error de Hecho en la Apreciación de las
Pruebas, Arts. 269 Pr. C. y 1577 C. C.;
b) Declárase no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito; y,
c) Condénase en los daños y perjuicios que hubiere lugar, al señor Lorenzo Enrique
Rosales y al doctor Luis Reyes Santos en las costas de ley. Art. 23 L. Cas.
RESCISIÓN
REF: 158-C-2006
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
Sala de lo Civil, Corte Suprema de Justicia, San Salvador a las nueve horas y diecisiete
minutos del veinte de diciembre de dos mil siete.
PRETENSIÓN:
Rescisión De Contrato De Compraventa
CAUSA PRETENDI:
En dicho proceso se demanda rescindir el contrato de compraventa por el cual don
Alfredo Armando Villatoro Velásquez vendió un inmueble, objeto del juicio, a María
Santana García Reyes, documento otorgado a las dieciséis horas del tres de julio de dos
mil tres, ante los oficios notariales del licenciado Luis Alfonso Valle Deras.
CRITERIOS.
Conceptos:
Interpretación Errónea de Ley:
La interpretación errónea de ley se presenta, cuando al aplicar la disposición adecuada al
caso juzgado, el juzgador desatiende el tenor literal de la ley, o bien va más allá de su
verdadero sentido o puede haberla restringido, a pretexto de consultar su espíritu.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
En cuanto al precepto contenido en el Art. 2215 del Código Civil, el cual considera, que
respecto de los actos ejecutados antes de la cesión de bienes o la apertura del concurso,
se observaran las siguientes reglas: señalando en el numeral 1° lo siguiente: que los
acreedores tendrán derecho para que se rescindan los contratos onerosos y las hipotecas,
prendas y anticresis, que el deudor haya otorgado en perjuicio de ellos, estando de mala
fe el otorgante y el adquirente esto es, conociendo ambos el mal estado de los negocios
del primero..., considerando el impetrante que la letra de la ley, es clarísima al sostener
que los acreedores pueden demandar la rescisión de los actos o contratos fraudulentos
iniciados por el deudor, antes de la cesión de bienes o de la apertura del concurso por lo
que, el requisito que establece dicha norma, es que se reclamen los actos o contratos
fraudulentos, antes de la cesión de bienes o de la apertura del concurso.
sosteniendo el impetrante que para interpretar correctamente el Art. 2215, no hay
necesidad de recurrir al Art. 2214 como hace la Honorable Cámara Ad-quem, puesto que
se trata de dos disposiciones que regulan circunstancias diferentes: el Art. 2214 dice
claramente, que los traspasos y gravámenes realizados después de la declaratoria del
concurso o quiebra, son nulos de pleno derecho; en cambio, el Art. 2215 regula el caso de
los actos o contratos hechos en perjuicio de los acreedores, antes de que se inicie el
concurso del acreedor, ratificando que para interpretar el 2215 no es necesario partir del
supuesto del Art. 2214, porque ambas disposiciones regulan dos momentos diferentes,
esto es, antes y después de la cesión de bienes o de la apertura del concurso. Asevera
quien recurre, que la Cámara sentenciadora incurrió además en un error de interpretación
por adición, porque agregó un requisito que la ley no ha contemplado o previsto,
considerando que interpreta, que es requisito de procesabilidad que se inicie el concurso
de acreedores, cuando el legislador lo único que ha regulado es lo que sucede con los
actos o contratos realizados antes de la iniciación del concurso de acreedores, o lo que es
igual, en ningún momento el legislador ha previsto que la apertura del concurso de
acreedores sea requisito necesario para el ejercicio de la acción pauliana, considerando
que de la letra de la misma, se entiende que el sentido de dichas disposiciones dista de lo
otorgado, por el ente jurisdiccional y la doctrina así lo regula, es decir, que para el ejercicio
de la acción pauliana, no se requiere que el deudor haya sido declarado en quiebra o sus
bienes hayan sido sometidos a concurso voluntario o necesario.
La Acción Pauliana:
La acción pauliana puede ser instaurada, aunque no haya cesión de bienes, ni concurso
durante un año contado desde que la realización del acto o contrato que causa perjuicio a
los acreedores se efectúa." (Los subrayados son míos. Ob. Cit. Pág. 632, 635.---En el
CURSO DE DERECHO CIVIL, de Alessandri y Somarriva (tomo III DE LAS OBLIGACIONES,
edit. Nacimiento, Stgo., Chile, 1941, versión redactada y puesta al día por Antonio
Vodanovic H., Págs. 252 – 253).
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
Esta Sala, considera que esta disposición es distinta del contenido del artículo 2214 del
Código Civil, el cual se está refiriendo, cronológicamente, a un momento distinto de las
oportunidades sancionadas y que la Cámara ha hecho precisamente por ello, una relación
que en nada le sirve para resolver el caso de autos. En efecto, el presente caso de
compraventa se ha dado en un momento en que no consta que haya habido cesión de
bienes o apertura de concurso; es más, se ignora si se dará o no cualquiera de esas
situaciones, pero en cualquier momento que sea (con exclusión de los eventos dichos), el
acreedor tiene la facultad de demandar la rescisión (entiéndase la resolución), en este
caso del contrato oneroso de compraventa, entre el señor Villatoro Velásquez y la señora
Santana Reyes, estando como se dirá, si el caso es necesario, de mala fe comprador y
vendedor, conociendo ambos los malos negocios del primero, debiendo entenderse,
recalcamos, antes de la cesión de bienes o la apertura del concurso, no constando en este
caso que se haya dado ninguno de esos acontecimientos e ignorándose si van a suceder o
no, diferenciándose esta acción de la de nulidad que se puede pedir, respecto de los actos
ejecutados por el deudor, en relación a los bienes, ocurridos después de que ha hecho
cesión o de que se ha abierto concurso a los acreedores.
Esta Sala, transcribe lo que sobre el particular, ha dicho el tratadista chileno Ramón Meza
Barros, en su manual de Derecho Civil, de las obligaciones, 6° Edición, de la Editorial
Jurídica de Chile, cuando a las páginas 332 y 333 bajo el N° 462, textualmente dice:
"""""Para intentar la acción no es menester que el deudor esté en quiebra o haya hecho
cesión de bienes.- El art. 2467 (2214 Ley salvadoreña) dispone que "son nulos todos los
actos ejecutados por el deudor relativamente a los bienes de que ha hecho cesión o de
que se ha abierto concurso a los acreedores ".
". La Ley de Quiebras ha reemplazado el concurso por la quiebra, aplicable hoy tanto a los
deudores civiles como comerciantes.---Sancionados con la nulidad los actos del deudor
posteriores a la cesión de bienes o a la declaratoria de quiebra, se ocupa al art. 2468 (2215
del Código Civil salvadoreño) de la suerte de los actos anteriores que son atacables por la
acción revocatoria, ejecutados en perjuicio de los acreedores y en fraude de sus
derechos.---Fraude y perjuicios son los fundamentos de la acción y nada justifica que, para
intentarla, sea menester que el deudor haya sido declarado en quiebra o haya hecho
cesión de bienes. "(el subrayado es de la Sala)
Porque se casó la Sentencia.
En ese sentido, la Sala no tiene ningún reparo en subrayar que la Cámara sentenciadora,
interpretó erróneamente la Ley, al exigir requisitos adicionales a los solicitados por el
legislador y declarar por ello la ineptitud de la pretensión, por lo que así habrá de
declararse, casándose la sentencia de mérito y pronunciándose, la que conforme a
derecho corresponda, por interpretación errónea del N° 1 del Art. 2215 del Código Civil.
De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas, Arts. 1089 y siguientes
del Código de Procedimientos Civiles y 18 de la Ley de Casación, la Sala en nombre de la
República FALLA:
1°.) Cásase la sentencia recurrida por el sub motivo de Interpretación Errónea de Ley,
siendo el precepto vulnerado, el contenido en el Art. 2215 N° 1 del Código Civil;
2°) Rescíndese (revócase) el contrato de compraventa verificado en los oficios del notario
Luis Alfonso Valle Deras, a las dieciséis horas del tres de julio de dos mil tres, por el cual,
don Alfredo Armando Villatoro Velásquez, vendió a la señora María Santana García Reyes,
el siguiente inmueble: `predio urbano ubicado en el Barrio San José de la Ciudad de San
Marcos de las medidas y linderos siguientes: AL ORIENTE: Veinticuatro metros, lindando
con Calle vecinal con predios de María Teofila Crúz y Sara Cortez; AL NORTE: Veintiocho
metros diez centímetros con predio de Jerónima Hernández, cerca de izotes y alambrado
de por medio del predio que se describe AL PONIENTE: Veintiséis metros veintitrés
centímetros con predio de Tomás Pérez cerca de izotes y alambrada de por medio de la
solicitante y AL SUR: Veintitrés metros catorce centímetros con el lote de Romilia Angel
Crúz, alambrado en medio de la colindante, habiendo también un borde. En este predio
hay construida una casa de tejas sobre horcones y paredes bajareque de doce metros
sesenta centímetros de largo por doce metros ochenta centímetros de ancho inclusive dos
corredores que están al Norte y tiene la capacidad dicho predio de SEISCIENTOS
CUARENTA Y TRES METROS CINCUENTA Y SIETE CENTIMETROS CUARENTA Y CUATRO
MILIMETROS CUADRADOS." Inscrito en el sistema de folio Real computarizado en la
matricula número seis cero cero seis cero siete dos siete cero cero cero cero cero, asiento
dos, siendo un lote sin número;
3°) Reintégrese al patrimonio de don Alfredo Armando Villatoro Velásquez, el inmueble en
referencia;
4°) Cancélese la inscripción de dicho inmueble a favor de la señora María Santana García
Reyes; así como la anotación preventiva de la demanda número dos cero cero tres cero
seis cero nueve cero nueve ocho cero, librándose para tal efecto los oficios
correspondientes al señor Registrador de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Primera
Sección del Centro, para lo cual la parte actora deberá cancelar los derechos regístrales
correspondientes, y,
5°) No hay condena especial en costas.
SENTENCIAS 2008
INEXSIETENCIA
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTA CAUSAL.
NULIDAD.
REF: 46-CAC-2008.
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador a las nueve horas
del dieciséis de octubre de dos mil ocho.
PRETENSIÓN:
Nulidad Testamento
CAUSA PRETENDI
Se pide la Nulidad de dos testamentos abiertos otorgados por el señor Efraín Alfredo
Martínez Guerra, promovido por el licenciado Gustavo Adolfo López Rodríguez como
Apoderado General Judicial del señor Efraín Antonio Martínez Salguero, y del cesionario
del derecho litigioso Oscar Enrique Ríos contra José Orlando Medina Rodríguez nombrado
Curador Especial de la señora Elsa Matea Rico, quien es la Representante Legal de su
menor hijo Eric Alfredo Martínez Rico, a efecto de declarar nulos los testamentos.
CRITERIOS.
Conceptos:
Violación de la Ley:
La violación de ley, como sub motivo de casación, se configura cuando se omiten los
preceptos legales que debieron ser aplicados al caso en litigio, habiéndose hecho una falsa
elección de otras normas. Se trata, pues, de una infracción peculiar, que no debe
considerarse como cualquier omisión de ciertas normas jurídicas, sino que debe ser, la
omisión de aquella norma que resuelva el caso discutido, así como de haber elegido
falsamente otras normas.
(Sentencia de la SALA DE LO CIVIL, Ref. 166-C-2006 de las 14:30 horas del día 23/10/2007)
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
Efectuado el estudio del proceso la Sala advierte que el demandado es el menor de edad
Eric Alfredo Martínez Rico; que se ignora el paradero de su madre señora Elsa Matea Rico
representante legal del mismo; que en la demanda se señaló como legitimo contradictor
al licenciado José Orlando Medina Rodríguez, quien ostenta el cargo de curador especial
de la señora Elsa Mateo Rico a quien se declaró ausente, siguiendo para esto los tramites
prescritos por el Art.141 Pr.C. incurriendo en el error de nombrar un curador especial ad
litem al representante legal y no al demandado, tal como consta en el romano III de la
demanda, el que literalmente manifiesta: CURADOR AD LITEM.- Que a raíz de la presente
demanda, dado que el demandado ERICK ALFREDO MARTINEZ RICO, es menor de edad y
su representante legal, es decir, la señora ELSA MATEA RICO, es actualmente de paradero
desconocido, mediante Diligencias al efecto, y en este mismo Tribunal, se le nombró un
Curador ad Litem, en virtud de haberse declarado su ausencia, habiendo resultado
nombrado como Curador Especial el Licenciado JOSÉ ORLANDO MEDINA RODRIGUEZ,
mayor de edad, Abogado, de este domicilio, portador de su tarjeta de identificación de
abogado número mil setecientos cuarenta y tres, según aparece de las Diligencias
clasificadas con el número DNC- CIENTO TREINTA Y SEIS/DOS MIL CUATRO. Adjunto para
comprobarlo, certificación literal original extendida por este Tribunal de las Diligencias,
para que se agreguen.""
Pero es el caso que cuando un menor haya de ser demandado y carezca de representante
legal, o se ignore el paradero de éste, el procedimiento adecuado lo señala el Art. 20 de la
"Ley Procesal de Familia" determinando que el legítimo contradictor, en todo caso, es el
Procurador General de la Republica a través de sus auxiliares.
De manera que al haberse señalado en la demanda un contradictor que no es legítimo,
dicha demanda es inepta, y así habrá de declararse, ya que se ha predeterminado por la
Sala: "que la ineptitud se presenta básicamente, en tres casos: a) Cuando falta el legítimo
contradictor; b) Cuando el actor en la causa carece de interés, y; c) Cuando existe error en
la acción, es decir, cuando la vía utilizada para el ejercicio de la pretensión, no es la
correcta. (Sentencia de Civil ref. 287SM de fecha 27 de Noviembre de 2001)"
Porque se casó la Sentencia
POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas Arts. Pr.C.
20 Código Procesal de Familia, 23 Ley de Casación, a nombre de la Republica la Sala FALLA
a) Declárase inepta la demanda incoada por el licenciado Gustavo Adolfo López Rodríguez
como Apoderado General Judicial del señor Efraín Antonio Martínez Salguero, contra José
Orlando Medina Rodríguez nombrado Curador Especial de la señora Elsa Matea Rico y en
consecuencia, casase la sentencia recurrida b).-Condenase al señor Oscar Enrique Ríos en
los daños y perjuicios a que hubiere lugar; y c) Condenase en costas de ley al doctor Rene
Padilla y Velasco hijo, como abogado que firmo el escrito de interposición del recurso.
REF: 152-CAC-2008
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las once horas
cuarenta y cinco minutos del veintiséis de noviembre de dos mil ocho.
PRETENSIÓN:
Nulidad de Título y Reivindicatoria
CAUSA PRETENDI:
Se pide la Nulidad de Título y Reivindicatoria por parte del licenciado Rigoberto Belarmino
Díaz Arévalo, actuando en su carácter de apoderado de las señoras Irma Etelvina Tobar
López, conocida por Irma de Polanco, Irma Etelvina Tobar de Muñoz y por Irma Etelvina
Tobar Viuda de Muñoz; Mayra Corina Muñoz Tobar y Gloria Cristina Muñoz Tobar.
CRITERIOS.
Conceptos:
Violación de la Ley:
Se comete violación de ley, cuando se omiten los preceptos legales que debieron ser
aplicados al caso controvertido, por la falsa elección de otros. La violación no tiene
relación con los hechos, los que no se tornan en cuenta para juzgar, si existe o no la
infracción y por ello hacer depender de éstos, el vicio denunciado equivale a dar un
concepto equivocado del mismo, que es igual a no expresarlo.
(Sentencia de la SALA DE LO CIVIL, Ref. 126-C-2006 de las 12:15 horas del día 26/11/2007)
Análisis del artículo y análisis de la prueba.
En cuanto al primer sub motivo argumentado, violación de ley, no se le formuló al
impetrador ninguna observación pues precisó en el escrito original de interposición del
recurso el sub motivo en que funda el recurso, el precepto quebrantado y el concepto de
tal infracción, de lo que se deduce que no se han dado los supuestos que el Art. 12 de la
ley de materia requiere.
No obstante lo anterior, el recurrente al contestar la prevención formulada no se limitó a
sanear el reparo puesto por la Sala, sino que por iniciativa propia decide replantear la
violación de ley invocada, cambiando el precepto que considera infringido y por ende en
alguna medida el concepto de la infracción que originalmente se vertió se vio modificado,
cosa que no es posible pues ya sea en beneficio o en detrimento del recurrente, en el
escrito original mediante el cual se introdujo el recurso a la Sala se cumplieron todos los
supuestos del Art. 10 L. de C. y por tanto en cuanto a la violación de ley, el recurso quedó
listo para el análisis de admisión. En consideración a las razones antes dadas, la Sala hará
caso omiso a las modificaciones al recurso original intentadas por el Lic. Díaz Arévalo en lo
atinente a la violación de ley y dictaminará su procedencia o no en base al primer escrito
presentado por dicho abogado.
Sobre esa premisa el Tribunal de Casación repara que en cuanto al sub motivo de violación
de ley, el recurrente exteriorizado las razones por las cuales se considera inconforme con
la decisión de la Cámara pero en manera alguna ha clarificado a este Tribunal Casacional
por qué la norma que cita como infringida, es decir el Art. 428 Pr. C., es la que el juez
debió elegir para resolver el caso sometido a su conocimiento, no explica la razón por la
que esa disposición legal era la pertinente o necesaria para fallar en este caso concreto. El
concepto de la infracción dado es insuficiente, lo que redunda en que la Sala no quede
sabedora a ciencia cierta sobre aquellos aspectos respecto de los que debería
pronunciarse, no cumpliéndose en este caso una de las exigencias de carácter técnico a
que se refiere el Art. 10 L. de C. El recurso, en consonancia con lo anterior, es inadmisible
por el sub motivo de violación de ley y así se declarará.
En lo tocante al error de hecho argumentado por el recurrente, en el escrito mediante el
cual solventa la prevención que oportunamente se le formuló, afirma que la norma que
considera infringida es el Art. 415 Pr. C. que atañe al mecanismo de prelación de pruebas
en nuestro sistema procesal, y razona que las pruebas presentadas o vertidas dentro del
juicio: instrumental, confesión, testimonial y pericial, no han sido valoradas por la Cámara.
Como fácilmente se advierte al contrastar el escrito original del recurso con el de
contestación de la prevención, el concepto de la infracción dado por el recurrente es
confuso pues por una parte alude brevemente a una apreciación equivocada del juez de
documentos presentados en juicio, y por otra parte al contestar la prevención con detalle
apunta una a una las pruebas que considera no fueron valoradas por la Cámara, lo que
demuestra que su argumento está referido no al error de hecho que pudiera resultar de la
prueba documental o de la confesión cuando no es apreciada con relación a otras
pruebas, sino que denuncia el hecho de que la Cámara no le dio a las pruebas que señala
en su escrito ningún valor, y ello compete ya al ámbito del error de derecho y no de
hecho. En conclusión, el recurso de casación por este sub motivo analizado tampoco
cumple los requisitos del Art. 10 L. de C. por lo que es inadmisible y así se declarará.
Porque se casó la Sentencia
En tal virtud, la Sala RESUELVE: A) DECLÁRASE INADMISIBLE el recurso de que se trata por
la causa genérica de Infracción de ley, y por los sub motivos específicos de: a) Violación de
Ley, Art. 3 N° 1 L. de C., con infracción del Art. 428 Pr. C.; y b) Error de Hecho en la
apreciación de la prueba, Art. 3 N° 8 L. de C., con infracción del Art. 415 Pr. C.; B)
Condenase a los señores Irma Etelvina Tobar López, conocida por Irma de Polanco, Irma
Etelvina Tobar de Muñoz y por Irma Etelvina Tobar Viuda de Muñoz; Mayra Corina Muñoz
Tobar y Gloria Cristina muñoz Tobar, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar y al
licenciado Rigoberto Belarmino Díaz Arévalo en las costas del recurso, como abogado
firmante del escrito de interposición del mismo. Art. 23 L. de C.
REF: 55-C-2008
FECHA Y HORA DEL TRIBUNAL:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las diez horas
cinco minutos del veintinueve de abril de dos mil ocho.
PRETENSIÓN:
Nulidad de Instrumento Público
CAUSA PRETENDI:
Se pide la Nulidad de Instrumento Público, promovido por el señor Miguel Ángel Mendoza
Quintanilla, en su carácter personal, contra la señora María Ofelia Contreras de Mendoza,
del domicilio de Santiago Nonhualco, Departamento de La Paz.
Han intervenido en Primera Instancia, el señor Miguel Ángel Mendoza Quintanilla como
parte actora y la licenciada Mirla Guadalupe Carbajal Amaya como su apoderada, no así la
señora María Ofelia Contreras de Mendoza, quien fue declarada rebelde.-
CRITERIOS.
Conceptos:
Interpretación Errónea De Ley:
La interpretación errónea de ley, como motivo específico de casación, se configura cuando
el Juzgador, no obstante haber elegido adecuadamente la norma aplicable al caso de que
se trata, le da un sentido, alcance o limitación que no tiene. En ese contexto, para que se
dé el vicio que se atribuye al Tribunal ad quem, es presupuesto indispensable que la
disposición que se cita como infringida, haya sido aplicada, y, consecuentemente,
interpretada en forma errónea.
(Sentencia de la SALA DE LO CIVIL, Ref. 259-C-2005 de las 09:12 horas del día 11/6/2007)
Análisis del artículo y análisis de la prueba.
La primera disposición legal que el casacionista considera ha sido erradamente
interpretada por la Cámara dice: "Art. 242.- Las pruebas deben producirse en el término
probatorio, con citación de la parte contraria y ante el Juez que conoce de la causa o por
su requisitoria, pena de no hacer fe. Se exceptúan los casos expresamente determinados
por la ley."
El error, a criterio del recurrente, radica en que el ad quem ha hecho una interpretación
de la disposición transcrita en el sentido de considerar que hay una exigencia de producir
la prueba ante el juez de la causa. Alega el impetrador que tal exégesis normativa es ilegal
y contraria a derecho "pues a lo que obliga efectivamente la ley es que ante el juez que
conoce deban recibirse y producirse las pruebas que en ese instante suceden", agrega el
recurrente que esa interpretación no aplica para la prueba preexistente.
En el caso sub judice, se pretende la nulidad de un instrumento público que contiene la
donación de un derecho proindiviso que recae sobre un inmueble, contrato otorgado,
según dicha escritura, por el señor Miguel Ángel Mendoza Quintanilla a favor de la señora
María Ofelia Contreras de Mendoza.
En su oportunidad, el señor Mendoza Quintanilla, entabló proceso penal ante el Juez
Octavo de Paz de San Salvador por el delito de Falsedad Documental Agravada en contra
del notario autorizante y de la señora Contreras de Mendoza. En dicho proceso penal se
practicó prueba pericial por expertos de la Policía Nacional Civil que determinaron que la
firma del donante no procede del puño y letra del señor Miguel Ángel Mendoza
Quintanilla. En el proceso civil que posteriormente se inició a efecto de declarar la nulidad
del instrumento público cuestionado, se presentó como única prueba por parte de la
actora, la certificación del proceso penal seguido previamente ante el Juez Octavo de Paz
de San Salvador, y en el que corre agregada la prueba grafotécnica practicada por la
policía.
La Cámara, en su sentencia, ha sido categórica en sostener que la prueba de conformidad
con el Art. 242 Pr. C. debe practicarse dentro del término probatorio con la finalidad de
garantizar el principio de contradicción, y que, además, la prueba debe producirse -de
manera inexcusable- ante el juez de la causa, amén de las excepciones que contempla la
ley.
La Sala respalda la interpretación que de la norma citada ha hecho el ad quem, pues en los
términos claros y precisos en que se encuentra redactado el Art. 242 Pr. C. queda al
margen cualquiera otra que pretenda lo adverso.
Al analizar el recurso de mérito, la Sala advierte que el problema de fondo planteado por
la recurrente, no radica en la interpretación que el tribunal de alzada hizo de la norma que
se señala como infringida, sino más bien en que la única prueba presentada ante el juez
que conoció de la demanda de nulidad del instrumento público fue de carácter
instrumental consistente en la certificación de un proceso penal fenecido que contiene los
folios en que se plasmó la prueba pericial practicada sobre la firma del ofendido. Es decir,
que lo que se pretende es hacer valer a través de esa certificación, la prueba pericial que
ante el Juez de lo Penal y no ante el Juez de la causa civil se llevó a cabo.
Es necesario tomar en cuenta que la certificación de un proceso presentada en otro
diferente, prueba plenamente la existencia del juicio a que se refiere, su naturaleza, la
clase de resolución vertida en la instrucción del mismo, la autoridad que la emitió, su
fecha. A contarlo sensu, la certificación de dicho proceso penal no constituye prueba en
otro juicio diferente de los hechos que en él constan como admitidos.
En conclusión, la certificación del proceso penal instruido ante el Juez Octavo de Paz, no
puede probar más allá de lo dicho en el párrafo anterior, y lo que la recurrente pretende
es que el Juez de lo Civil de Zacatecoluca tome como plena prueba el peritaje verificado en
sede penal, lo cual evidentemente se contrapone al Art. 242 Pr. C. lo cual violaría las
garantías que en el fondo éste salvaguarda.
No resulta ser atinado lo afirmado por la licenciada Carbajal Amaya cuando dice que, de
acuerdo al criterio de la Cámara, solo sería admisible la prueba que deba producirse en el
proceso, llegando al extremo de concluir que los nacimientos, matrimonios y contratos
para probarse deberán de producirse durante el juicio en el que se pretenden probar.
Es innegable que las certificaciones de partidas de nacimiento o de matrimonio, o los
testimonios de los contratos que constan por escrito tienen el carácter de prueba
preexistente, pues son hechos pasados y que a través de los documentos respectivos lo
que se logra es poner a disposición del juez la información necesaria acerca de tales
hechos. Como bien se afirma en doctrina, el documento contiene para el futuro un hecho
presente.
La certificación del proceso como documento auténtico que es constituye plena prueba en
los términos en que se ha dejado anotado en párrafos anteriores, pero lo que el
impetrador pretende es dar valor dentro de un proceso civil a la prueba pericial practicada
en el proceso penal, y esa si no reviste el carácter de preexistente. En la prueba pericial el
juez de la causa citará pena de nulidad a las partes para que concurran a su práctica,
opinar lo contrario significa vulnerar el principio de contradicción.
De lo dicho se infiere que la Cámara no ha interpretado erróneamente el Art. 242 Pr. C. y
así se declarará.
La otra norma señalada como interpretada erróneamente por parte de la Cámara, es el
Art. 321 Pr.C. que literalmente dice: "Art. 321.- Dos testigos mayores de toda excepción o
sin tacha, conformes y contestes en personas y hechos, tiempos y lugares y circunstancias
esenciales, hacen plena prueba. Para probar la falsedad de un instrumento se necesitan
cuatro testigos idóneos o sin excepción, si fuere público o auténtico, y dos, si fuere
privado. Mas en los instrumentos públicos tendrá el Juez en consideración su antigüedad,
su concordancia con el protocolo y la buena o mala conducta del escribano o Notario."
Sobre lo anterior, la Sala no entrará al análisis de este vicio que se le atribuye a la
sentencia de alzada, habida cuenta que el precepto legal que se señala como infringido no
tiene eficacia legal para modificar el fallo. Debemos recordar que la recurrente
únicamente presentó -en su oportunidad-prueba documental para respaldar su
pretensión, y que ésta ha sido desestimada en atención al Art. 242 Pr. C., por lo que no
tendría ningún sentido que la Sala se pronuncié sobre la infracción del Art. 321 Pr. C. que
está referido a la prueba testimonial. La conclusión a que pudiera arribar este Tribunal de
Justicia en relación a la interpretación del Art. 321 Pr. C. no podría modificar en manera
alguna el fallo de la Cámara.
Porque se casó la Sentencia
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y artículos
421, 422, 428 y 432 PrC.., y 13 y 23 de la Ley de Casación, a nombre de la República, la
Sala FALLA: A) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito,
por la causa genérica de infracción de ley, por el sub motivo de Interpretación Errónea de
Ley, con infracción de los Arts. 242 y 321 Pr. C.; y, B) Condenase al señor Miguel Ángel
Mendoza Quintanilla, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar; y a la licenciada Mirla
Guadalupe Carbajal Amaya, en las costas del recurso, como abogada que firmó el escrito
de interposición del mismo.
Devuélvanse los autos al Tribunal de origen, con certificación de esta sentencia, para los
efectos de rigor. Expídase la ejecutoria de ley.
RESOLUCIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
REVOCACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
RESCILIACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
TERMINACIÓN
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
INOPONIBILIDAD
NO SE ENCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
SENTENCIAS 2009
INEXISTENCIA
NO SE ENCCONTRO JURISPRUDENCIA SOBRE ESTE CRITERIO.
NULIDAD
Referencia : 225-CAC-2008:
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL, DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las once horas
y treinta minutos del nueve de octubre de dos mil nueve
Pretensión: Nulidad Absoluta
Causa Pretendi:
Nulidad Absoluta de Testimonio de Escritura Pública promovido por las señoras Lidia
Vargas o Lidia Vargas Zelaya, Amalia Vargas viuda de Benítez y María Isaura Vargas o
María Isaura Vargas Zelaya en contra del señor Carlos Alfredo Robles y de la señora
Luscinia Robles o Lucinia Robles
Criterios:
Concepto de NULIDAD ABSOLUTA: Cuando un acto es nulo, afectando una norma de
orden público y vulnerando a toda la sociedad, no tiene ningún efecto jurídico, y
cualquier juez, puede por lo general, declarar la nulidad de oficio. Se le conoce como
nulidad absoluta o insaneable.
Análisis del artículo y análisis de la prueba:
Analizado el escrito de interposición del recurso y el de aclaración, la Sala considera que el
recurso de que se trata no reúne los requisitos de forma a que alude el Art.10 de la "Ley
de Casación", ya que en la denuncia de violación del precepto del Art. 1089 Pr.C. no
explica de que forma la no aplicación de ese precepto incidió en el fallo recurrido, y cual
sería de haberse aplicado; la denuncia de la violación de los preceptos de los Arts.427, y
428 Pr.C. la hace consistir en una supuesta estimación errónea de prueba, no siendo
coincidente el concepto de la infracción con el sub motivo denunciado,
Sobre los demás Arts. citados el recurrente no expuso por cuál de los submotivos han sido
infringidos, imposibilitando la admisión del recurso, por ser omiso de las formalidades
legales que lo caracterizan, ya que el recurso de casación por ser un medio de
impugnación extraordinario es formalista y restrictivo, obliga al recurrente a citar las
disposiciones legales que considere infringidas con precisión y claridad, esto es
señalando , puntualizando no solo las normas que estime haber sido infringidas, sino
especialmente debe precisar respecto de cada norma la causal bajo la cual se ha
producido la infracción de la ley y el submotivo por el cual se ha incurrido en ella, de tal
manera que la Sala tenga certeza de los cargos formulados contra la sentencia recurrida.
Porque se casó la Sentencia:
inadmisible el presente recurso, y condenase a las recurrentes señoras Lidia Vargas o
Lidia Vargas Zelaya, Amalia Vargas viuda de Benítez y María Isaura Vargas o María Isaura
Vargas Zelaya, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar y al licenciado Demetrio
Antonio Turcios Núñez, como abogado firmante del escrito, en las costas procesales del
recurso.
Fecha y hora de la resolución: 09/10/2009 - 11:30:00
Referencia: 117-CAC-2008
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA San Salvador, a las doce
horas del veinticinco de febrero de dos mil nueve.
Pretensión: NULIDAD ABSOLUTA
Causa Pretendi:
JUICIO CIVIL ORDINARIO DE NULIDAD DE TÍTULO MUNICIPAL, en contra de los señores
MARIA DE LA PAZ GIRÓN Y FAUSTO GÁLVEZ, señalando las inscripciones y pidiendo la
Anotación Preventiva de la Demanda, en dicho juicio ese Juzgado resolvió declarando la
NULIDAD ABSOLUTA DEL TITULO MUNICIPAL, expedido por la Alcaldía Municipal de
Jucuarán, inscrito en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Segunda Sección de
Oriente al Número: DOS DEL TOMO MIL TREINTA Y OCHO, a favor de la señora MARIA DE
LA PAZ GIRÓN AMAYA y número TREINTA Y SEIS del Tomo MIL CIENTO SETENTA Y SEIS, a
favor de FAUSTO GALVEZ. Que de esa resolución se Apeló y la Honorable Cámara de la
Segunda Sección de Oriente de Usulután, resolvió: DECLÁRESE INEPTA LA DEMANDA
INCOADA por el Doctor José Gregorio Ascencio, Apoderado General Judicial de la señora
ANA LILIAN ORELLANA conocida por ANA LILIAN APOLONIA VALLE ORELLANA, contra los
señores MARÍA DE LA PAZ GIRÓN AMAYA Y FAUSTO GÁLVEZ quienes han sido
representados por su Apoderado Licenciado TOMAS FRANCISCO GALDAMEZ HERNÁNDEZ
por carecer la parte actora de legitimación procesal suficiente en el presente juicio.
Análisis del articulo y analisis de la prueba:
La demanda del juicio principal, fue anotada preventivamente en las inscripciones sujetas
a su anulación según Matricula M CERO UNO CERO SIETE TRES CUATRO SIETE SIETE Y M
CERO UNO CERO SIETE TRES CUATRO SIETE SEIS del sistema Registral Uno del Registro
Social de Inmuebles, cuando este Registro se domiciliaba solamente en la ciudad de San
Salvador.- Eso fue, dicen los Abogados aludidos, porque el señor FAUSTO GÁLVEZ, había
hecho una Remedición de inmueble y ésta se encontraba inscrita en ese Registro de San
Salvador, que posteriormente se trasladan esas inscripciones del Sistema Registral Uno del
Registro Social de Inmuebles de San Salvador, al Registro Social de Inmuebles de San
Miguel, pero que al hacer ese traslado se inscribió el inmueble del señor GÁLVEZ en la
Matrícula SIETE CINCO CERO CERO CERO OCHO SEIS CINCO UNO del Registro Social de
Inmuebles de San Miguel y que ese Registro omitió dicen los mismos abogados,
VOLUNTARIAMENTE O MALICIOSAMENTE HACER EL TRASLADO DE LA MATRÍCULA DE LA
ANOTACIÓN PREVENTIVA y así fue como el señor FAUSTO GÁLVEZ vendió al señor JOSÉ
LUIS DÍAZ una porción de terreno, haciéndose constar en esa Escritura que dicho
inmueble general estaba inscrito a favor del señor FAUSTO GÁLVEZ al asiento CERO CERO
DOS de la Matrícula CERO CERO UNO CERO SIETE TRES CUATRO SIETE SIETE, del Registro
Social de Inmuebles del Departamento de San Miguel, inscribiéndose dicha escritura de
segregación a favor del señor JOSÉ LUIS SAZ, a la Matrícula número: SIETE CINCO CERO
UNO DOS SIETE SEIS CERO- CERO CERO CERO CERO CERO del mencionado Registro.- Que
también el señor FAUSTO GÁLVEZ, vendió a los señores SALVADOR HERIBERTO VANEGAS
ARAGÓN Y GERMAN MORENO VILLATORO, otra porción de terreno, habiéndose inscrito a
favor de ellos, dicha segregación al asiento UNO de la Matricula SIETE CINCO CERO UNO
CERO NUEVE CERO SIETE- CERO CERO CERO CERO CERO. ----- Ahora bien, esos Abogados
con ese FALLO DE LA HONORABLE SALA DE LO CIVIL DE LA HONORABLE CORTE SUPREMA
DE JUSTICIA, en vez de presentarse con la Ejecutoria a pedir el CUMPLIMIENTO DE
SENTENCIA, lo que hicieron fue presentarse con una Demanda en JUICIO CIVIL DE
NULIDAD DE INSCRIPCIONES, en la primera vía, de cumplimiento de Sentencia NO TENÍAN
QUE PROBAR NADA, sólo presentar su Ejecutoria y pedir el cumplimiento, porque ya todo
estaba probado y discutido, pero como optaron por un nuevo JUICIO CIVIL ORDINARIO DE
NULIDAD DE INSCRIPCIONES, a efecto de que en Sentencia Definitiva se declare la nulidad
de las inscripciones números 75008651 a favor del señor FAUSTO GÁLVEZ: (sic) 75012760,
a favor del señor JOSÉ LUIS DÍAS y 75010907 a favor de la señora MIRIAM STELLA VIVAS
DE ROMERO, inscripciones todas que son diferentes de las señaladas en el FALLO
Ejecutoriado y pasado en Autoridad de Cosa Juzgada de la Sentencia de la Sala de lo Civil
referido(sic), luego es lógico que el señor Juez de lo Civil de Usulután, les exigiera el
cumplimiento de los extremos procesales de su Demanda, siendo uno de ellos el Probar
ser su Demandante la propietaria del inmueble general, situación que está regulada por la
Ley, indicando cual es el instrumento idóneo para probar tal situación, prueba que no
presentaron ni en primera, ni en segunda instancia, pero en el JUICIO CIVIL ORDINARIO DE
NULIDAD DE INSCRIPCIONES, el Juez de lo civil de Usulután, resolvió: DECLÁRESE INEPTA
LA DEMANDA INCOADA por el Doctor TITO SÁNCHEZ VALENCIA Y EL LICENCIADO JOSÉ
OSCAR CABALLERO PEÑATE, ambos de las generales antes dichas, en contra de los señores
FAUSTO GÁLVEZ, JOSÉ LUIS DIAZ Y MIRIAM STELLA VIVAS DE MORENO, también de las
generales antes mencionadas
• Porque se casó la Sentencia:
Declárase no haber lugar al recurso de casación de que se ha hecho mérito; 2)
Condénanse, al licenciado ROBERTO ARMANDO ROMERO QUINTANILLA a las costas
del recurso, como abogado firmante del escrito, y a los señores FAUSTO GÁLVEZ, JOSÉ
LUIS DÍAZ CARRANZA y MIRIAN STELLA VIVAS DE MORENO, en los daños y perjuicios a
que hubiere lugar; 3) Vuelvan los autos al tribunal respectivo, con certificación de esta
sentencia, para los efectos consiguientes.
Fecha y hora de la resolución: 25/02/2009 - 12:00:00
• Referencia: 232-CAC-2008
• Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las once horas del
ocho de mayo de dos mil nueve.
• Pretensión: Nulidad Absoluta
Causa Pretendi:
Declarase nula los escrituras públicas de mutuo hipotecario celebradas entre el banco
Cuscatlán, sociedad anónima, señores miguel ángel gallardo Larios, José Roberto
gallardo cornejo, y la fundación doctor Manuel gallardo, en consecuencia cancélense las
inscripciones: a) número 54 del libro mil quinientos veintinueve, b) numero 17, del libro
mil quinientos veintinueve, ambas del registro de la propiedad raíz e hipotecas de la
cuarta sección del centro, ciudad
Criterios:
La nulidad absoluta puede y debe ser declarada por el Juez, aún sin petición de parte,
cuando aparece de manifiesto en el acto o contrato; puede alegarse por todo el que tenga
interés en ello, excepto el que ha ejecutado el acto o celebrado el contrato, sabiendo o
debiendo saber el vicio que lo invalidaba.
Análisis del articulo y análisis de la prueba:
La FUNDACIÓN DOCTOR MANUEL GALLARDO, a través de su representante legal MIGUEL
ÁNGEL GALLARDO LARIOS, quien por la calidad que ostenta necesariamente debió
conocer todo el cuerpo normativo que regía en aquella época para la Fundación,
principalmente en lo relativo a los alcances de los actos de administración que estaba
facultado para ejecutar. En ese orden de ideas, es perfectamente aplicable al caso de
autos la restricción a que alude el artículo 1553 C., en el sentido de que la nulidad de las
escrituras —si es que existe— podrá ser alegada por todo el que tenga interés en ello,
pero nunca por la FUNDACIÓN DOCTOR MANUEL GALLARDO pues si ello se acepta, se
estaría avalando una actuación fraudulenta de quien pretende eludir sus obligaciones
aduciendo haber contratado sin tener facultades para ello, acción engañosa que se denota
aún más si se toma en cuenta que el representante legal de la Fundación tanto en la fecha
en que se suscribieron los contratos que se predican de nulos como en la actualidad, sigue
siendo el mismo MIGUEL ÁNGEL GALLARDO LARIOS. Si la FUNDACIÓN DOCTOR MANUEL
GALLARDO, a través de su representante legal consideraba que no tenía facultades para
obligarse, sencillamente debió, ab initio, desistir de la contratación en ese concepto, para
no perjudicar los Intereses de los otros contratantes de buena fe.----c) ACERCA DE QUE
EXISTE ERROR DE DERECHO EN LA VALORACIÓN DE LA PRUEBA, Y DE QUE EX FALTA DE
MOTIVAC DE LA SENTENCIA. Finalmente, estos dos motivos de agravio si guardan relación
entre ellos, por lo que deben evacuarse en una misma oportunidad, lo que hace la Cámara
sosteniendo que en la sentencia impugnada ciertamente existe falta de motivación, pues
luego de hacer unas consideraciones legales y doctrinales genéricas acerca de la nulidad y
la capacidad de las personas jurídicas, el Juez A quo llega a la conclusión de que los
mutuos hipotecarios de que trata este juicio están viciados de nulidad absoluta, porque el
representante legal de la FUNDACIÓN DOCTOR MANUEL GALLARDO tenía incapacidad
absoluta para constituirla como codeudora solidaria, sin explicar el Juez en qué forma se
concibe la falta de capacidad para obligar a dicha persona jurídica.----Adicionalmente a la
poca motivación que el Juez A-quo hace, debe añadirse el error en la valoración de la
prueba recogida en el juicio, pues ciertamente los documentos certificados notarialmente
que se presentaron por la parte demandante no debieron admitirse en el proceso, o en el
mejor de los casos requerirse a la parte la presentación de los documentos originales,
toda vez que el artículo 30 de la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria
dispone que:----"En cualquier procedimiento, las partes podrán presentar en vez de los
documentos originales copias fotográficas o fotostáticas de los mismos, cuya fidelidad y
conformidad con aquéllos haya sido certificada por notario. Esta disposición no tendrá
lugar en el caso del juicio ejecutivo o cuando se trate de documentos privados.----Lo
anterior no obsta para que, en cualquier estado del procedimiento, el Juez prevenga a la
parte la presentación de los documentos originales, sea de oficio o a solicitud de la
contraria, so pena de no hacer fe las fotocopias admitidas (el subrayado es de la
Cámara)".----A primera vista aparece que las certificaciones notariales presentadas por la
parte demandante no se confrontaron con sus originales, pues en cada una de las páginas
certificadas aparece estampado el sello del Juzgado Segundo de lo Mercantil de San
Salvador, concluyéndose -como lo dice el señor JOSÉ ROBERTO GALLARDO CORNEJO—
que lo que el Notario certificó no fueron los documentos originales sino las copias
entregadas para efectos de notificación por el Juzgado Segundo de lo Mercantil de San
Salvador, con ocasión del Juicio Ejecutivo Mercantil que allí se ventila por las acciones
derivadas de los contratos de mutuo que se anuncian como nulos por la parte
demandante. En ese sentido, el Juez A-quo debió requerir a la parte interesada, aún
oficiosamente de acuerdo a la facultad que le concede el artículo 30 de la Ley antes citada,
la presentación de los documentos originales.----Por último, el Juez A-quo también ha
errado cuando revierte la carga de la prueba al demandado, afirmando que como éste no
alegó ni opuso excepción alguna, es procedente condenarlo.
Porque se casó la Sentencia.
Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito; b) condénase a
la fundación Doctor Manuel Gallardo en los daños y perjuicios a que hubiere lugar y al
licenciado Jaime Arrieta Gálvez en las costas del recurso como abogado que firmó el
escrito de interposición del mismo; e) Devuélvanse los autos al tribunal de origen con la
certificación de ley para los efectos de rigor
• Fecha y hora de la resolución: 08/05/2009 - 11:00:00
Referencia: 44-CAC-2009
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las once horas del
dieciocho de septiembre de dos mil nueve
Pretensión: NULIDAD ABSOLUTA.
Causa Pretendi
Se ha pedido que se declare la nulidad absoluta de dos instrumentos detallados en ella, ya
que por ser falso el primero, por no haber concurrido el comprador al otorgamiento de la
escritura de compraventa, tal circunstancia acarrea la nulidad de la segunda escritura,
todo de conformidad con los Arts. 1551 y 1552 C.C.
Análisis del articulo y análisis de la prueba:
Si no concurrió el verdadero comprador al otorgamiento de la escritura respectiva, lo cual
deberá probarse en el proceso correspondiente, se han producido los efectos señalados
en la ley. La afirmación de la Cámara, de que tal situación constituye nulidad relativa de
conformidad con el Art. 1552 C.C., no ha sido la base para resolver el recurso de
apelación, sino que ha sido fundamentada en los Arts.1553 C.C. y 197 Pr.C., según se
expresó en las consideraciones jurídicas de la sentencia del Ad quem, a Fs. 17 in fine, del
expediente de apelación.
La afirmación de la Cámara, citada por el recurrente en casación, como la infracción
cometida en la sentencia, es una apreciación que en nada afecta lo resuelto en ella, pues
el ad quem confirmó en todas sus partes la resolución del juez que declaró improponible
la demanda, improponibilidad que sólo tiene relación con la nulidad absoluta, a tenor del
Art. 1553 C.C.
Por otra parte, lo resuelto por el Ad quem se ha fundado en leyes vigentes, como ordena
el Art. 421 Pr. C. y se refiere al asunto planteado en la demanda, el cual no se ha debatido
todavía en su fondo, puesto que no ha habido ni admisión de ella ni emplazamiento,
simplemente, se ha analizado si la demanda cumple con los requisitos de admisibilidad
ordenados por la ley y después de su análisis se ha estimado que no es proponible porque
la acción intentada en ella no le corresponde a quien la está ejerciendo, y eso es lo que ha
confirmado el Ad quem.
Por consiguiente, la resolución corresponde exactamente a lo pedido en la demanda, en el
sentido en que ésta sea admitida, análisis y resolución que están apegados a la ley, Art.
197 Pr. C., no presentándose, por consiguiente, la infracción al Art. 421 Pr. C. que ha
señalado el recurrente.
Porque se casó la Sentencia
La Sala FALLA: 1) Declárase que no ha lugar el recurso de casación de que se ha hecho
mérito; 2) Condénanse en las costas del recurso al licenciado ASTOR ADRIÁN GARCÍA
QUINTANILLA, como abogado firmante del escrito, y a la señora MARÍA GUADALUPE
VALLE LÓPEZ al pago de los daños y perjuicios a que hubiere lugar; 3) Vuelvan los autos al
tribunal de origen, con certificación de esta sentencia, para los efectos consiguientes.
Fecha y hora de la resolución: 18/09/2009 - 11:00:00
Referencia: 238-CAC-2008
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las doce
horas del veinticinco de septiembre de dos mil nueve.
Pretensión: NULIDAD ABSOLUTA
Causa Pretendi:
Declárase nula de nulidad absoluta la escritura de compraventa, otorgada en la ciudad
de Jiquilisco, a las once horas del día ocho de abril de mil novecientos noventa y nueve,
por el señor José Vicente Mejía Sánchez a favor del señor José Hernán Díaz Sánchez, y
como consecuencia de dicha nulidad, cancélase la inscripción de dicha escritura de
compraventa, inscrita en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Segunda
Sección de Oriente, bajo el Número Veinticuatro del Tomo Mil Quinientos Setenta y
Seis, de Propiedad; Declárase Improponible la demanda presentada por la Licenciada
Sonia del Carmen Monterrosa Quintanilla, en el carácter en que actúa, únicamente en
cuanto a la Reivindicación solicitada; Condenase a la parte perdidosa al pago de las
costas procesales de esta instancia. Oportunamente, devuélvase el proceso principal al
Juzgado de origen, con certificación de la presente resolución.
Criterios:
Existen varias especies de nulidad, así: 1) en cuanto a su eficacia, nulidad absoluta y
relativa; 2) en cuanto a su amplitud, nulidad completa y parcial, y 3) en cuanto a su
evidencia o prueba, nulidad manifiesta y la que debe probarse.
La nulidad parcial es la que se refiere a determinadas cláusulas de una convención o tan
solo a algunos aspectos de un negocio jurídico, cuya esencia y estructura general pueden
subsistir con eficacia en Derecho, así: la nulidad parcial de una disposición de un acto, no
perjudica a las otras disposiciones válidas, siempre que sean separables. La nulidad parcial
afecta la amplitud del acto o disposición de que se trata, no en su totalidad, sino en parte;
como resultado, el acto parcialmente nulo, queda parcialmente válido y surte los efectos
correspondientes. Como consecuencia, es legal y correcto pedir la declaratoria de nulidad
parcial de actos jurídicos, siendo éste un punto que pertenece al derecho.
Análisis del articulo y análisis de la prueba:
En primer lugar se analizará la nulidad parcial de la escritura de compraventa, y
posteriormente, la nulidad parcial de la inscripción registral.
La escritura de compraventa a que se refiere la demanda, cuya certificación de la
inscripción registral aparece a fs. 17 v. 19 p.p., fue otorgada en Jiquilisco, a las once horas
del ocho de abril de mil novecientos noventa y nueve, ante los oficios del Notario Tránsito
Antonio Barrera, inscrita al número VEINTICUATRO del Libro MIL QUINIENTOS SETENTA Y
SEIS, a favor del comprador.
En tal instrumento el vendedor JOSÉ VICENTE MEJÍA SÁNCHEZ manifestó que, según
diligencias de aceptación de herencia, donde se le declaró heredero definitivo, "...es
dueño y actual poseedor de un inmueble de naturaleza rústica, situado en el punto
denominado Lomas del Taburete, de la jurisdicción de Jiquilisco...", el cual vendió por el
precio de cuatro mil colones que ya tenía recibido, al señor JOSÉ HERNÁN DÍAZ SÁNCHEZ,
habiéndose omitido expresar que el vendedor era dueño sólo del derecho que le cabía en
la sucesión de la causante Teresa de Jesús Sánchez de Mejía, conocida por Teresa Sánchez,
como consta en la inscripción del antecedente en el Registro de la Propiedad Raíz a favor
del vendedor.
En el acta judicial de absolución de posiciones del demandado JOSÉ HERNÁN DÍAZ
SÁNCHEZ, de fs. 138, consta que él confesó haber comprado un porcentaje del derecho
hereditario que correspondía a su primo JOSÉ VICENTE MEJÍA SÁNCHEZ, en la sucesión de
la señora Teresa de Jesús Sánchez de Mejía, ya que sabía de la existencia de los herederos
con derecho a la misma herencia señores JOSÉ PEDRO MEJÍA SÁNCHEZ y JOSÉ ISRAEL
MEJÍA SILVA, porque todos estaban de acuerdo; todo lo cual excluye la mala fe del
comprador.
Se debe tener en cuenta que la compraventa es un contrato que se perfecciona desde que
las partes han convenido en la cosa que es objeto de la venta y en el precio, y cuando se
trata de bienes raíces, debe otorgarse en escritura pública e inscribirse en el Registro de la
Propiedad Raíz correspondiente, para que surta efectos contra terceros.
En el caso de autos, según las voces de la escritura de compraventa, el heredero declarado
vendió todo el inmueble y así fue comprado; pero según la confesión del demandado José
Hernán Díaz Sánchez, que consta en el proceso, él compró el porcentaje del derecho que
correspondía al vendedor. Lo anterior revela que hubo acuerdo parcial entre las partes,
sólo respecto al derecho que le correspondía al vendedor, pero no lo hubo respecto del
resto del dominio sobre el inmueble, que corresponde a los otros herederos, que es la
apariencia de la escritura. Ese desacuerdo evidencia la imperfección parcial del contrato
de compraventa, ya que el acuerdo respecto a la cosa vendida es de la esencia del
contrato, el cual, por faltarle un elemento esencial para su existencia, deriva en nulo
parcialmente, de conformidad con los Arts. 1551 y 1552 C. y así debe declararse. Ya ha
sido aceptado por nuestra jurisprudencia, que por no estar regulada la inexistencia de los
actos jurídicos en la legislación salvadoreña, tal defecto se sanciona con nulidad absoluta,
quedando perfectamente válida la compraventa respecto de la parte que correspondía al
vendedor, sobre la cual sí hubo acuerdo entre vendedor y comprador.
La inscripción registral del derecho a favor del comprador, como consecuencia de la
nulidad parcial de la compraventa, resulta con inexactitud, lo cual, de conformidad con el
Art. 713 C. acarrea nulidad de la inscripción número VEINTICUATRO del Libro MIL
QUINIENTOS SETENTA Y SEIS del Registro de la Propiedad Raíz de la Segunda Sección de
Oriente y así debe declararse; y como consecuencia de tal nulidad debe cancelarse la
inscripción de conformidad con el Art. 732 N° 2 C. y ordenarse una nueva, según lo
dispone el Art. 714 C. por los derechos que le corresponden al comprador en el inmueble
respectivo.
También se mencionó en la demanda que se planteaba la reivindicación del inmueble,
como consecuencia de la nulidad.
La acción reivindicatoria, de conformidad con el Art. 891 C. es la que corresponde al
dueño de una cosa singular, de la que no está en posesión; por consiguiente es necesario
comprobar en el proceso: a) el derecho de dominio sobre la cosa que se reivindica, b) que
la cosa reivindicada sea una cosa singular y c) que no está en posesión de ella. El derecho
de propiedad de los herederos recae sobre la universalidad de los bienes de su causante,
comprendidos en la masa hereditaria; por consiguiente, mientras no se singularice la parte
que corresponde a cada heredero, éste no puede reivindicar. En este proceso no consta
esa singularidad de la cosa reivindicada, en manos de los actores, por lo que la acción
reivindicatoria deriva en improcedente y así debe declararse.
Porque se casó la Sentencia
La Sala FALLA: 1) Cásase la sentencia definitiva de que se ha hecho mérito; 2) Decláranse
improcedentes las excepciones de Ineptitud de la Demanda, Ilegitimidad de la Parte
Actora y No Ser el Demandado Legítimo Contradictor, alegadas por la parte demandada;
3) Declárase sin lugar la nulidad parcial del traspaso por herencia y de la inscripción
registral número VEINTICUATRO del Tomo MIL QUINIENTOS SETENTA Y SEIS del Registro
de la Propiedad de la Segunda Sección de Oriente, a favor del demandado JOSÉ VICENTE
MEJÍA SÁNCHEZ; 4) Declárase la nulidad absoluta parcial del contrato de compraventa
celebrado en Jiquilisco, a las once horas del ocho de abril de mil novecientos noventa y
nueve, ante los oficios del notario Tránsito Antonio Barrera, entre los demandados JOSÉ
VICENTE MEJÍA SÁNCHEZ y JOSÉ HERNÁN DÍAZ SÁNCHEZ; 5) Declárase la nulidad de la
inscripción número VEINTICUATRO del Libro QUINIENTOS SETENTA Y SEIS del Registro de
la Propiedad de la Segunda Sección de Oriente, y como consecuencia ordénase su
cancelación; 6) Ordénase al Registrador correspondiente que extienda una nueva
inscripción a favor del señor JOSÉ HERNÁN DÍAZ SÁNCHEZ, por los derechos que a éste
corresponden en el inmueble comprado; 7) Declárase improcedente la reivindicación
pedida en la demanda por los actores JOSÉ ISRAEL MEJÍA SILVA y JOSÉ PEDRO MEJÍA
SÁNCHEZ; 8) NO HAY CONDENACIÓN EN COSTAS; 9) Líbrese el oficio correspondiente al
Registrador de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Segunda Sección de Oriente, para que
cumpla con la sentencia; 10) Vuelvan los autos al tribunal de origen para los efectos
consiguientes.
Fecha y hora de la resolución: 25/09/2009 - 12:00:00
Referencia: 188-CAC-2008
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL, CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, San Salvador, a las once horas y
cuarenta y nueve minutos del veintinueve de septiembre de dos mil nueve
Pretensión: NULIDAD PARCIAL DE TITULO SUPLETORIO
Causa Pretendi:
Declárase sin lugar por improcedente lo solicitado por el abogado ROBERTO CARLOS
GALINDO AVALOS, en su escrito de contestación de agravios de fs. 10 Y 11 del presente
incidente, en cuanto a confirmar la sentencia definitiva venida en apelación; b)
REVOCASE en todas y cada una de sus partes la Sentencia Definitiva de ineptitud de la
Demanda, venida en grado de apelación, por no estar arreglada a derecho; c)
DECLARASE Nulo, de Nulidad Absoluta, en forma parcial, el Titulo Supletorio, inscrito a
la Matricula 75047409-00000, asiento Uno, del Centro Nacional de Registros de este
Departamento, expedido a favor de la señora MARÍA CASIMIRA RODRÍGUEZ VIUDA DE
GUZMÁN, únicamente en la parte del inmueble propiedad de la señora MARÍA CRISTINA
COREAS DE CARRANZA, inscrito a favor de ésta a la Matricula 75057618-00000, Asiento
Uno, del Centro Nacional de Registros de este Departamento; en consecuencia,
CANCÉLESE PARCIALMENTE la inscripción de la Matricula 75047409-00000, Asiento Uno,
del Centro Nacional de Registros de este Departamento, a favor de la señora MARÍA
CASIMIRA RODRÍGUEZ VIUDA DE GUZMÁN; y d) Condénase a la parte perdidosa al pago
de costas procesales
Criterios:
Debe tenerse en cuenta que el Articulo setecientos seis del Código Civil, establece que
todo aquel que se opone a un Titulo Supletorio, y su oposición la fundare en documento
inscrito, el juez sin mas trámite, declarará sin lugar el Titulo; de lo cual se infiere que no
puede Titularse Supletoriamente una propiedad de la cual existe antecedente inscrito; y si
ya se hubiese otorgado Titulo Supletorio e inscrito el mismo en el Registro de la Propiedad
respectivo, debe declararse la nulidad del mismo, por haberse otorgado en contravención
a la Ley; pues el Articulo diez del Código Civil establece que son nulos y de ningún valor los
actos que prohíbe la ley; y el otorgamiento de un titulo supletorio sobre un inmueble del
que existe antecedente inscrito, en un acto que prohíbe la Ley. - como se puede observar
la Cámara cae en violación de Ley porque para resolver el litigio en cuestión se basa
únicamente en el Articulo setecientos seis del Código Civil en relación con el Articulo diez
del mismo cuerpo de Ley, y deja de aplicar el Articulo seiscientos sesenta y siete inciso
segundo del Código Civil norma que al no aplicarse en el presente proceso afecta el
verdadero fondo del asunto que estamos tratando, y éste es el meoyo(sic) del presente
Recurso ya que la Honorable Cámara se ha quedado corta pues ha violado la Ley al dejar
de aplicar el Articulo seiscientos sesenta y siete inciso segundo del Código Civil, artículo
que valida las compraventas privadas de donde se origina el Título Supletorio de Dominio
a favor de mi representada
Análisis del articulo y analisis de la prueba:
La señora MARÍA CASIMIRA RAMÍREZ VIUDA DE GUZMÁN; que dicha señora se considera
dueña de su inmueble; que no le permite el acceso al mismo, y que con ello le está
violentando el derecho de propiedad que le corresponde; que por esas razones, promueve
juicio de nulidad parcial del título supletorio.
La demandada tituló supletoriamente ante notario, dos mil cuatrocientos cinco metros
cuadrados, el uno de noviembre de dos mil cinco. Dicho título se inscribió el once de
noviembre del mismo año.
La actora, según escritura de compraventa, el nueve de marzo de dos mil seis, adquirió un
inmueble de una capacidad superficial de un mil trescientos cuarenta y nueve metros
veinte decímetros cincuenta centímetros todos cuadrados, el cual se había segregado de
uno de mayor capacidad, siendo este de cuatro mil trescientos treinta y ocho punto
veintinueve metros cuadrados se inscribió el dieciocho de mayo del mismo año.
El Juez de Primera Instancia declaró inepta la demanda, fundamentado en que la ficha
catastral que sirvió de base para titular supletoriamente el inmueble objeto del juicio,
menciona que no se encontró documento inscrito que relacione a dicho inmueble, y que
en consecuencia, el terreno que compró la señora MARÍA CRISTINA COREAS DE
CARRANZA, no es parte del inmueble que tituló supletoriamente la demandada.
El Tribunal Ad quem revocó la ineptitud de la demanda, y declaró nulo, de nulidad
absoluta en forma parcial, el titulo supletorio, únicamente en la parte del inmueble
propiedad de la demandante, fundamentando su fallo, folio 17 2a pieza, en el informe del
perito nombrado por el Juez a quo para realizar la inspección personal, en el que según
criterio de la Cámara, ese informe, agregado a fs. 125 al 127 p.p, deja claro que el título
supletorio abarca o incluye el inmueble propiedad de la demandante. Asimismo, ordenó
cancelar parcialmente la inscripción.
Porque se casó la Sentencia.
La Sala FALLA: 1) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia recurrida por el sub
motivo de fondo de Violación de ley, precepto infringido Art. 667 Inc. segundo, C.C.; y, 2)
Condénase a la recurrente, MARÍA CASIMIRA RAMÍREZ VIUDA DE GUZMÁN, al pago de los
daños y perjuicios a que hubiere lugar; y al abogado firmante del escrito, Licenciado
ROBERTO CARLOS GALINDO AVALOS, a las costas del recurso.
• Fecha y hora de la resolución: 29/09/2009 - 11:49:00
SENTENCIAS 2010
NULIDAD
Referencia: 124-CAC-2009
Fecha y Hora del tribunal:
San Salvador, a las nueve horas del dieciséis de julio de dos mil diez.
Pretensión: NULIDAD POR VICIOS DE FONDO
Causa Pretendi:
Se presenta escrito de apelación por el actor EN EL QUE NO ALEGÓ LA FALTA DE
APERTURA A PRUEBAS
ALEGA LA NULIDAD ya que si se cometió la infracción por parte del Juez A quo de no
ordenar la apertura a prueba cumpliéndose con ello el principio de especificidad o
taxatividad y Que en ninguno de los escritos del apelante se advierte que haya alegado
dicha nulidad sino por el contrario el (sic) la propicio al pedir sentencia a sabiendas de que
no había habido apertura a pruebas por un lado y por el otro que yo en nombre de mi
representada tampoco la alegué por considerar que el fallo del Juez A quo no perjudicaba
los intereses de mi representada, por lo que TÁCITAMENTE SUBSANAMOS LA NULIDAD
RELATIVA DE LA FALTA DE RECEPCIÓN A PRUEBAS COMETIDA POR EL JUEZ A QUO; Que
de lo anterior se advierte de que no hay ni había nulidad que declarar ya que si bien había
infracción esta había sido subsanada por el principio de convalidación previsto por el
Artículo 1126 P.C. pues nadie la había alegado
Criterios
Concepto: VICIO DE FONDO
Es el que se produce cuando se afecta la esencia del acto jurídico, en cuyo caso decimos
que el acto está viciado de nulidad absoluta, por ejemplo: Un acto que contenga la
voluntad de una persona que no cuenta con la edad exigida en la ley para expresarla por si
mismo, ya sea por ser menor de edad, o haber sido sometido a interdicción civil.
Análisis del artículo y análisis de la prueba
Se da contra ley expresa y terminante", nulidad que se comete NO EN EL PROCEDIMIENTO
SINO ESPECIFICAMENTE EN LA SENTENCIA por lo que cuando existe esta causal no se
anula alguna diligencia en el procedimiento sino que se anula solo la sentencia y se dicta la
que corresponda. Fundamento fáctico. En cuanto al supuesto. Recordemos que, como ya
relacioné, ninguna de las partes había alegado la nulidad en ninguno de los escritos
agregados al proceso desde que se cometió la infracción de no abrir a pruebas y que por
ello la misma estaba subsanada; Recordemos que la sentencia venida en casación decía en
su fundamentación a la letra en lo pertinente "Al omitir la apertura a pruebas ha infringido
el artículo 245 Pr.C. sancionado con la nulidad que contempla el Art1117, y en atención a
los artículos 1095 y 1130 se enmarca en un caso de nulidad absoluta por haberse
pronunciado contra ley expresa y terminante,..." En cuanto a la consecuencia Jurídica.
Recordemos que la sentencia venida en casación decía en su parte resolutiva o dispositiva
a la letra en lo pertinente "lo cual trae como consecuencia que se declare nula la sentencia
dictada, así como todo lo actuado a partir del auto de fs. 219 a 220 fte., y todo lo que sea
su consecuencia inmediata, mandándose a reponer a costa del funcionario que dictó la
sentencia aparte.
En el caso de autos, luego de darle a la parte demandada treinta días de plazo para que
rindiera la cuenta solicitada por el actor, lo cual no hizo; éste presentó una declaración
jurada en la cual manifiesta el monto que a su juicio se le debe por parte de la
demandada; de dicha "cuenta jurada" se le corrió traslado que establece el inciso segundo
del Art. 569 Pr.C. para que en los siguientes seis días se pronunciara al respecto, haciendo
los reparos u observaciones que considerara pertinentes. La demandada no contestó
tampoco dicho traslado por lo que la parte demandada solicitó expresamente que se
dictara sentencia, lo cual así hizo el a-quo. La sentencia fue contraria a los intereses de la
parte actora por lo que éste apeló de la misma; pero, al expresar los agravios en ningún
momento alegó la falta de apertura a pruebas, lo que atacó fue el argumento del a-quo
relativo a que la declaración jurada presentada tenía carácter de cuenta jurada y
suficiente para dictar la sentencia a su favor. Tampoco la parte demandada alegó en
manera alguna violación al procedimiento. La Cámara, por su parte declaró de oficio la
nulidad por falta de apertura a pruebas.
Porque se casó la Sentencia
CÁSASE LA SENTENCIA de que se ha hecho mérito; b) DECLARASE INEPTA LA
DEMANDA interpuesta contra la señora ANA ELÍZABETH RIVAS DE BARRIENTOS, por el
señor SANTOS BARRIENTOS SALGUERO, conocido por JOSÉ SANTOS BARRIENTOS
SALGUERO y por PEPE SANTOS; c) Déjase a salvo al actor la facultad de ejercer sus
derechos a través de la vía procesal idónea conforme a la ley; d) Condénase al señor
SANTOS BARRIENTOS SALGUERO, conocido por JOSÉ SANTOS BARRIENTOS SALGUERO
y por PEPE SANTOS en las costas de ley.
Fecha y hora de la Resolución: 16/07/2010 - 09:00:00
Referencia: 284-CAC-2009
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL, CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, San Salvador, a las once horas, dos
minutos del veintitrés de julio de dos mil diez.
Pretensión: Nulidad de Testamento.
Causa Pretendi:
Que se declare la nulidad del testamento otorgado por la señorita ELVIRA ESPINOZA,
conocida por ELVIRA ESPINOZA MENCIA, a favor del señor RAFAEL ANTONIO GOMEZ
MENCIA, invocando como motivos de nulidad la fuerza y el justo temor.
Criterios
Concepto:
Testamento:
El testamento es un acto más o menos solemne, en que una persona dispone del todo o
de una parte de sus bienes para que tenga pleno efecto después de sus días, conservando
la facultad de revocar las disposiciones contenidas en él mientras viva.
El testamento una vez otorgado, disfruta de la presunción de validez; y mientras por la
justicia ordinaria no haya sido declarado total o parcialmente nulo, a petición de quien
tenga interés jurídico o del ministerio público, producirá los efectos pretendidos.
El testamento se presenta como acto jurídico unilateral de carácter solemne, la omisión
puede comprometer su validez.
La nulidad testamentaria es una situación genérica de invalidez del acto jurídico, procede
cuando faltan los requisitos básicos de validez del testamento, con lo cual se declara nula
la manifestación de voluntad del causante respecto del destino que han de tener sus
bienes en el momento de su fallecimiento. Es aquella imperfección que le impide producir
sus efectos propios.
Modalidades
La nulidad testamentaria se presenta en dos modalidades:
Nulidad absoluta, interna o de fondo: todo cuanto afecte o vaya en detrimento de los
requisitos de fondo por vicios del consentimiento del testamento acarrea esta nulidad la
que invalida el testamento como negocio jurídico
Análisis del articulo y análisis de la prueba
Durante el proceso se presentó prueba instrumental, testimonial práctica de compulsa y
de confesión provocada del señor Rafael Antonio Gómez Mencia, habiéndose declarado
en Primera Instancia absuelto el demandado señor Rafael Antonio Gómez Mencia, pues se
alegaba que el testamento fué otorgado con vicio del consentimiento consiste en haberse
empleado fuerza en la testadora.
Porque se casó la sentencia.
a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia recurrida por el sub motivo error de
derecho en la apreciación de la prueba, con violación del Art. 321 del Código de
Procedimientos Civiles, así como tampoco por violación de ley en el Art. 421 Pr. C
b) Condénase en los daños y perjuicios a que hubiere lugar, a los señores Edmundo
Enrique Mencia Pauler, conocido por Edmundo Enrique Mencia Paula; Rodrigo Alfonso
Mencia Pauler, conocido por Rodrigo Alfonso Mencia Paula, Carlos Humberto Mencia
Pauler, conocido por Carlos Humberto Mencia Paula; Eduardo Alfonso Mencia Pauler,
conocido por Eduardo Alfonso Mencia Paula y José Daniel Mencia Pauler, conocido por
José Daniel Mencia Paula
c) No hay costas del recurso, por ser hermanos entre sí, las partes de este proceso
Fecha y hora de la Resolución: 23/07/2010 - 11:02:00
Referencia: 51-CAC-2010
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las diez horas
del once de agosto de dos mil diez.
Pretensión: REIVINDICACION E INEXISTENCIA.
Causa Pretendi:
Que se le sea devuelto el inmueble de naturaleza rústica situado en el lugar denominado
Vega de la Cecilia y Almendras, en el Caserío Los Naranjos, Cantón Santa Rosa, Jurisdicción
de Villa de Agua Caliente, Departamento de Chalatenango, de una extensión superficial de
una manzana tres cuartos de manzana equivalente a ciento veintidós áreas y media,
inscrito a su favor bajo el número cincuenta y uno del Libro ciento cinco de Propiedad del
Registro de la Propiedad respectivo
Criterios:
Concepto de INFRACCION LEY: Transgresión, quebrantamiento de una norma o de un
pacto
Análisis del articulo y análisis de la prueba:
Que un inmueble de naturaleza rústica situado en el lugar denominado Vega de la Cecilia y
Almendras, en el Caserío Los Naranjos, Cantón Santa Rosa, Jurisdicción de Villa de Agua
Caliente, Departamento de Chalatenango, de una extensión superficial de una manzana
tres cuartos de manzana equivalente a ciento veintidós áreas y media, inscrito a su favor
bajo el número cincuenta y uno del Libro ciento cinco de Propiedad del Registro de la
Propiedad respectivo. Afirma el demandante que los señores Arístides Hernández,
Juventina Tejada y Amanda Hernández se apropiaron de manera ilegal y arbitraria de
dicho inmueble en un período en el que su poderdante encontraba fuera del país , por lo
que demanda en juicio civil ordinario reivindicatorio a los señores Arístides Hernández,
Juventina Tejada y Amando: Hernández. La parte reo al contestar la demanda lo hizo en
sentido negativo y alegó la excepción perentoria de ineptitud de la demanda en virtud de
que los nombres correctos de sus mandantes son Alfonso Arístides Hernández Rivera, Jubi
Amanda Tejada de Flores y Luz Amanda Hernández Rivera, además de que el inmueble
ocupado por la parte reo por un lapso superior a los veinte años es propiedad del señor
Camilo de León Hernández Tejada. La prueba que corre agregada dentro del proceso es la
siguiente:
DOCUMENTAL:
La parte actora aportó los siguientes documentos:
1) Certificación literal extendida por el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la
Quinta Sección del Centro, con la que comprueba su calidad de propietario. (Fs. 4-6 p.p.)
2) Copia certificada del testimonio de la escritura de compraventa a favor del señor Oscar
Eleazar Palacios, con certificación de su inscripción en el Registro de la Propiedad
respectivo. (Fs. 45 a 47 p.p.)
La demandada presentó por su parte:
1) Fotocopia certificada del título de propiedad del señor Camilo de León Hernández
Tejada, debidamente inscrito en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas. (Fs. 25-27 y
92-94 p.p.)
2) Fotocopia simple del Testimonio de la escritura de compraventa otorgada por la señora
María Natalia Tejada Maldonado y otros a favor del señor Camilo de León Hernández
Tejada (Fs. 95 a 99 p.p.)
3) Certificación catastral de inmueble propiedad de Tomás Rivera Maldonado (F. 100 p.p.)
TESTIMONIAL:
-La parte demandada presentó como testigos a los señores Pedro Estrada, Juan Ramón
Quintanilla, Pedro Palacios, Leonel Rivera Ramos y José Geremías Menjívar Santos, prueba
que el Tribunal inferior desestimó por impertinente. (fs. 62 y siguientes p.p.)
INSPECCIÓN:
Acta de inspección practicada por el Juez de Primera Instancia de Tejutla, Departamento
de Chalatenango, a las nueve horas treinta minutos del dieciocho de enero de dos mil
ocho. (Fs. 64 a 65 p.p.)
-Acta de inspección practicada por el Juez de Primera Instancia de Tejutla, Departamento
de Chalatenango, a las diez horas del dieciocho de julio de dos mil ocho. (Fs. 88 a 89 P.P.)
PERICIAL:
Informes técnicos rendidos por los peritos Oscar Lizanne Baide y José Matías Cisneros
Hércules (Fs. 106 y siguientes P.P.)
CONFESIÓN:
La parte demandada fue declarada confesa por no haber comparecido a la segunda cita
que se le efectuó. (Fs. 135
Porque se casó la Sentencia.
La Sala FALLA: a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha recurrido,
por la causa genérica de Infracción de Ley, y por los submotivos específicos de: 1)
Violación de Ley, Art. 3 ordinal 1° L. de C., con infracción de los Arts. 385 Nº 1 y 1093
Pr. C.; 2) Interpretación Errónea de Ley, Art. 3 ordinal 2° L. de C., con infracción del Art.
897 C.; y 3) Error de Hecho en la Apreciación de las Pruebas, Art. 3 ordinal 8° L. de C.,
con infracción de los Arts. 891 y 895 C.; y b) Condénase al señor Oscar Eleazar Palacios,
en los daños y perjuicios a que hubiera lugar, y al licenciado José Mario Hernández
Portillo en las costas del recurso como abogado firmante del mismo.
Fecha y hora de la resolución: 11/08/2010 - 10:00:00.
Referencia: 4-CAC-2009
Fecha y hora del tribunal:
SALA DE LO CIVIL, CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, San Salvador, a las doce horas y cinco
minutos del veintisiete de agosto de dos mil diez.
Pretensión: LA NULIDAD ABSOLUTA DE LA SENTENCIA DEL JUICIO EJECUTIVO, LA
NULIDAD ABSOLUTA DE LA VENTA EN PUBLICA SUBASTA Y LA RESTITUCIÓN DE
INMUEBLE
Causa Pretendi: Se quiere la restitución de inmueble.
Criterios
Concepto de LA PRUEBA DE LA ANULABIDAD: El error, El dolo y La violencia, cada uno de
estos requiere que la prueba esté dirigida y sea suficiente para demostrarlo, por la
particularidad que los identifica, es decir, en cada supuesto es necesaria la demostración
de factores que convenzan al Juzgador de que se encuentra efectivamente frente a un
vicio establecido en nuestro ordenamiento y que el contrato por ende debe ser declarado
nulo, si la parte actora (vendedor) se limita a invocar dicha nulidad, sin fundamentar ni
demostrar las razones por las cuales debe considerarse nulo el aludido contrato de
compra venta, resultará vencido en juicio.
Análisis del articulo y análisis de la prueba
El actor fundamenta su pretensión, en virtud de haber quedado firme la sentencia
proveída por la Cámara de lo Civil de la Primera Sección en la que se declaraban nulos los
dos mutuos con garantía hipotecaria y la cancelación de sus respectivas inscripciones, así
como del embargo recaído en el inmueble del ejecutado. Fs. 41 y 42 p.p.
El Juez de Primera Instancia declaró nula la sentencia definitiva dada en el Juicio Ejecutivo
Civil promovido en ese mismo Tribunal, así como también declaró nula la venta en pública
subasta realizada a la señora LUCIA MONTOYA: y, ordenó la cancelación de la inscripción
del acta de venta en pública subasta.
La Cámara de Segunda Instancia, revocó la declaratoria de nulidad de la sentencia
definitiva dada en el Juicio Ejecutivo Civil; confirmó la declaratoria de nulidad de la venta
en pública subasta, y ordenó la cancelación de la inscripción de dicha acta. Asimismo,
ordenó la restitución del inmueble, y dejó expedito el derecho de la compradora para
entablar la acción correspondiente, a fin de recuperar el dinero de la compraventa.
Porque se casó la Sentencia.
La Sala FALLA: 1) Cásase la sentencia impugnada por el motivo genérico de infracción de
ley, sub motivo específico: Violación de ley, precepto infringido, Art. 1115 Pr. C.; b)
Declárase IMPROPONIBLE la Pretensión incoada por el señor MARIO ERNESTO VELIS
contra EDUARDO ANTONIO MINA y LUCIA MONTOYA.
Fecha y hora de la resolución: 27/08/2010 - 12:05:00
SENTENCIAS 2009 de la SALA DE LO CONSTITUCIONAL
NULIDAD
• Referencia: 116-2007
• Fecha y hora del tribunal:
Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia: San Salvador, a las doce
horas con seis minutos del día nueve de febrero de dos mil nueve.
• Pretensión: NULIDAD RELATIVA
• Causa Pretendi
Que la detención provisional impuesta a las favorecidas era violatoria de su derecho a la
seguridad jurídica porque se basó en actas que mostraban discordancias respeto de las
fechas en ellas consignadas. Así, afirmaron los pretensores, que aparece en el proceso
penal un acta de fecha veinticinco de marzo de dos mil siete, en la cual se apuntó haber
recibido la llamada de una persona desconocida que suministró información acerca del
tráfico ilícito de drogas perpetrado por una de las ahora beneficiadas.
Lo anterior se comunicó a la Fiscalía General de la República, quien, a su vez, el día
veintisiete de marzo de dos mil siete ordenó al Jefe de la División Antinarcóticos de la
Policía Nacional Civil iniciar la investigación correspondiente.
• Análisis del artículo y análisis de la prueba:
Sin embargo, existe un acta de fecha once de marzo de dos mil seis, en la cual se anotó
que se estaban investigando hechos referidos en una llamada recibida el día veinticinco de
marzo de dos mil siete; por tanto, indicaron los peticionarios, el acta en comento "fue
levantada ONCE meses, con CATORCE días antes de que se tuviera conocimiento de la
presunta existencia del ilícito atribuido a nuestras representadas, y ONCE MESES con
QUINCE días de la existencia de la Dirección Funcional Girada por la Fiscalía General de la
República, es decir, la diligencia que consta en dicha acta (…) adolece de nulidad relativa,
pues la misma se realizó fuera del término de la dirección funcional".
De igual manera, los solicitantes señalan que en el acta de fecha 14/IV/2007 también
existen incongruencias, pues se apuntó que determinados agentes salieron del local de su
división policial a las doce horas de ese día, para efectuar diligencia de vigilancia en un
lugar específico, pero se anotó que llegaron a dicho lugar a las diez horas, es decir según
los solicitantes "CUARENTA MINUTOS antes de haber salido del lugar de origen, situación
que (…) evidencia malicia en las diligencias previas de investigación"; y, según los
pretensores, tales inconsistencia provocan la nulidad de las actas referidas.
Otro punto alegado en el presente hábeas corpus es la realización de allanamiento en la
propiedad de la señora Blanca Lidia González de Castillo, el cual, si bien fue autorizado por
el Juez de Paz de Nejapa, se llevó a cabo sin la intervención de un defensor que asistiera a
las ahora beneficiadas, a partir de ello, a criterio de los impetrantes, se vulneraron los
derechos de seguridad jurídica y defensa técnica de las beneficiadas.
Finalmente, los solicitantes argumentan que, pese a que se mostraron parte en calidad de
defensores en el proceso penal instruido contra las señoras Blanca Lidia González de
Castillo y Claudia Azucena González, no fueron notificados del señalamiento de lugar y
hora para la realización de prueba pericial en parte del presunto decomiso obtenido en el
allanamiento antes relacionado; diligencia que se llevó a cabo sin tomar en cuenta que en
los documentos mediante los cuales fueron designados para ejercer la defensa técnica de
las ahora beneficiadas, estas pidieron que se les notificara del nombramiento respectivo y
de cualquier otra diligencia a realizarse en el proceso penal; lo cual, según los pretensores,
provocó que dentro del proceso penal se soslayaran los principios de contradicción e
igualdad, se transgredieran la seguridad jurídica y se pusiera en indefensión a las señoras
Blanca Lidia González de Castillo y Claudia Azucena González Fuentes, pues no se respetó
el nombramiento hecho por ellas.
• Resolución:
a) Sobreséese en el presente hábeas corpus solicitado a favor de las señoras Blanca Lidia
González de Castillo y Claudia Azucena González, respecto de lo apuntado en el número
"1" del considerando I de esta sentencia, por tratarse lo argüido de asuntos de mera
legalidad; b) declárase no haber existido vulneración constitucional en relación a lo
anotado en los números "2" y "3" del acápite I de esta sentencia; c) certifíquese esta
sentencia y envíese al Juez de Instrucción de Apopa; d) certifíquese esta providencia
jurisdiccional y remítase junto con el expediente del proceso penal al Tribunal Primero de
Sentencia de San Salvador
• Fecha y hora de la resolución: 09/02/2009 - 12:06:00
• Referencia: 763-2008
• Fecha y hora del tribunal: Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de
Justicia: San Salvador, a las doce horas con quince minutos del día quince de mayo
de dos mil nueve.
• Pretensión: NULIDAD ABSOLUTA
Causa Pretendi:
Ante las autoridades demandadas en lo pertinente a su reclamo de indemnización por
daños morales, solicitando finalmente que se levante la medida cautelar impuesta y,
se declare, no ha lugar el presente proceso de amparo y se condene al Banco
Agrícola, Sociedad Anónima, al pago de costas y daños y perjuicios.
• Criterios
Se alega violación al derecho de defensa procesalmente concebido, el cual consiste ante
todo en el derecho de contradicción que es posible ejercer respecto de la pretensión
planteada, y que es componente esencial del derecho de audiencia o derecho a ser oído.
En efecto, el derecho de defensa tiene especial connotación al ejercerse por la parte
demandada debido a su amplitud, ya que puede materializarse en múltiples formas y
contenidos, tantos como sea posible legalmente contradecir u oponerse a la pretensión
del actor. Una de esas formas es la alegación del derecho de excepción en cuyo ejercicio el
demandado puede dirigir la contradicción o defensa, primero, respecto de la relación
jurídica procesal, o segundo, respecto a la supuesta relación sustantiva o asunto de fondo.
En el orden indicado, a las primeras se les denomina excepciones dilatorias y, a las
segundas, se les denomina excepciones perentorias. En su caso, la excepción de
incompetencia por la materia, procura evitar en defensa del que alega, la producción o
andamiento de un proceso nulo viciado de nulidad absoluta. La defensa en tal caso es de
incidencia estrictamente procesal para evitar un juicio inútil o dispendio de la función
jurisdiccional.
La seguridad jurídica es concebida como una emanación de las leyes, habida cuenta que a
partir de su vigencia existe la certeza y seguridad de que sus preceptos son de efectivo
acatamiento. Esta concepción tiene especial relevancia al tratarse de leyes de orden
público, caracterizadas por resguardar la seguridad jurídica, pues por su observancia
estricta, aseguran la no alteración del orden legal establecido. En consecuencia, los
derechos subjetivos, así como los deberes u obligaciones derivables de las leyes,
adquieren certeza jurídica respecto de los sujetos a quienes les conciernen. Debido a lo
anterior, la falta de acatamiento de las leyes de parte de autoridades o de funcionarios a
los que corresponde obedecer o hacer obedecerlas, da lugar a violar la seguridad jurídica
• Análisis del articulo y análisis de la prueba
Respecto a lo expresado por la parte demandante, en lo pertinente a los componentes
esenciales de la fundamentación de su pretensión, es procedente citar lo siguiente: que
por haber promovido el Banco Agrícola S. A., un proceso mercantil ejecutivo contra la
señora María Eugenia Morales de Campos y haber sido declarada inepta la pretensión de
pago formulada, el referido Banco fue condenado a indemnizar daños y perjuicios a la
expresada señora, de acuerdo al Artículo 439 del Código de Procedimientos Civiles. Que la
señora Morales de Campos fundamentándose en la referida condena, ha entablado una
demanda de indemnización de daños morales contra el Banco Agrícola S. A., actor de este
amparo. Que de la demanda en referencia está conociendo el Juez Quinto de lo Mercantil,
ante quien el Banco Agrícola S. A. ha alegado nulidad del emplazamiento por carecer de
jurisdicción por razón de la materia; que la Cámara Tercera de lo Civil de la Primera
Sección del Centro conoció de un recurso de apelación por la denegativa de la nulidad
planteada ante el Juez Quinto de lo Mercantil como se ha indicado, y dicha Cámara en su
oportunidad declaró improcedente el recurso mencionado. Que con la actuación de los
tribunales demandados se pretende que un Juez de lo Mercantil: 1) conozca de un asunto
eminentemente civil con infracción de las disposiciones legales reguladoras de la
competencia; 2) no advierta en este asunto la improponibilidad de la demanda; 3) se
permita la conversión de una especie de responsabilidad civil concretable en daños y
perjuicios patrimoniales en responsabilidad moral. Se agrega: que la Constitución recoge
el tema de los daños morales en el Artículo 2, limitándose a indicar que " Se establece la
indemnización conforme a la ley, por daños de carácter moral", pero no existe ley que
regule esa situación, razón por la que no puede proseguirse un juicio para hacer esa
reclamación. Que con todo ello se vulneran el principio del Juez Natural, el debido
proceso, el derecho de defensa, la seguridad jurídica, el principio de legalidad y el derecho
de propiedad.
• Resolución:
Ha lugar el amparo solicitado por Banco Agrícola, Sociedad Anónima, que puede
abreviarse Banco Agrícola, S. A., contra providencias del Juez Quinto de lo Mercantil de
San Salvador, por violación a las categorías jurídicas de seguridad jurídica, defensa en
juicio, y propiedad, en conexión con el principio de juez natural, en los términos
expuestos; (b) vuelvan las cosas al estado en que se encontraban antes del acto
reclamado, en el sentido que se retrotrae el proceso ref. 33-SM-07 hasta antes del
pronunciamiento de la providencia dictada a las doce horas con veinte minutos del día
veinticinco de enero de dos mil ocho en la que se declaró sin lugar la nulidad del
emplazamiento por falta de jurisdicción por razón de la materia interpuesta por la ahora
actora, con la finalidad de que se reponga ésta, de conformidad con los parámetros de
constitucionalidad indicados en esta sentencia. En consecuencia, déjase sin efecto
también la declaratoria de improcedencia de la apelación planteada contra la resolución
en comento, pronunciada por la Cámara Tercera de lo Civil de la Primera Sección del
Centro a las doce horas con cuarenta minutos del quince de abril de dos mil ocho; (c)
declárase sin lugar el amparo solicitado contra actuaciones de la Cámara Tercera de lo
Civil de la Primera Sección del Centro, por las razones señaladas; (d) queda expedito el
derecho de la parte actora de promover ante el tribunal competente y conforme a la
legislación procesal común, el proceso civil de daños y perjuicios, directamente contra el
Juez Quinto de lo Mercantil de este distrito judicial, por haberse comprobado las
violaciones constitucionales alegadas, en concordancia con lo prescrito en el artículo 245
de la Constitución de la República; y (e) notifíquese.
• Fecha y hora de la resolución: 15/05/2009 - 12:15:00
• Referencia: 138-2007
• Fecha y hora del tribunal: Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de
Justicia: San Salvador, a las doce horas con veintidós minutos del día veintidós de
septiembre de dos mil nueve.
• Pretensión: NULIDAD RELATIVA
• Causa Pretendi: Que se le proteja según el HABEAS CORPUS.
• Criterios:
Principio "stare decisis" –estarse a su decisión– y siendo que en la jurisprudencia
sostenida por esta Sala se ha expresado que los actos de investigación, al no poseer la
calidad de anticipo de prueba y además en el caso particular, el favorecido no ha sido
el objeto del elemento probatorio, no se requería la presencia de un defensor en su
recolección, por lo que este Tribunal determina no haberse vulnerado el derecho de
defensa del señor Sánchez Ramírez, durante las diligencias iniciales de investigación
realizadas en sede policial y fiscal, ya que las entrevistas realizadas a la víctima y a la
ofendida, sirvieron para sustentar la tesis de la imputación, brindando un indicio de
probabilidad acerca de la participación delincuencial del imputado.
• Análisis del articulo y análisis de la prueba:
La licenciada Velásquez Linares alega que el señor Sánchez Ramírez se encuentra detenido
injustamente por los motivos que a continuación se señalan:
En el año dos mil cuatro la menor víctima y su madre ofendida denuncian en sede policial
al favorecido, rindiendo sus respectivas declaraciones, obviándose nombrar defensor al
imputado; en consecuencia, dichas entrevistas fueron proporcionadas en contravención al
principio de contradicción.
El favorecido no fue proveído de un defensor desde que tuvo la calidad de imputado,
tanto en las diligencias realizadas por la policía, como en las diligencias realizadas por la
representación fiscal; razón por la cual en las entrevistas, la ofendida y la víctima
declararon sin la presencia de un defensor que ejerciera la defensa técnica del imputado;
por lo tanto, la prueba ha sido incorporada al proceso penal en mención de manera
irregular.
Lo expuesto se traduce en una inobservancia al inciso 2° parte final del artículo 12 de la
Constitución.
Como otro punto, sostiene que el día trece de abril de dos mil cuatro, se citó al favorecido
para que compareciera a una audiencia de reapertura del proceso penal, sin embargo,
dicha cita no fue vista ni recibida por el beneficiado, razón por la cual no acudió a la
realización de la diligencia mencionada; arguyendo lo siguiente: "(…) que al ser citado mi
defendido, éste no fue encontrado y los vecinos no quisieron tomar dicha cita para
entregársela a mi defendido, pero en realidad las citas no son simplemente actos
procesales sino actos de COMUNICACIÓN que deben revestir garantías para que el
imputado sepa y conozca sobre que se le está procesando, y desde el año 2004 que inició
el proceso, es hasta el año de 2007 que es capturado mi defendido y que se da cuenta
porque es que lo están procesando, ya que mi defendido consideraba que aún lo
procesaban por el delito de violación."
Finalmente, la impetrante alega que la audiencia preliminar se ha suspendido en
repetidas ocasiones, por causas imputables a la Sección de Traslado de Reos de la Corte
Suprema de Justicia, razón por la cual considera injusto que el imputado esté detenido en
forma preventiva cuando el proceso penal adolece de nulidad absoluta.
Y es que, si esta Sala se pronunciase sobre la nulidad absoluta de un proceso penal,
estaría excediendo los límites de su competencia, y en consecuencia desnaturalizando el
proceso de hábeas corpus, convirtiendo a este Tribunal con competencia constitucional
en una instancia más dentro del proceso penal; por consiguiente, es procedente
sobreseer respecto del presente punto en estudio
• Resolución:
a) Sobreséese el presente proceso constitucional de hábeas corpus iniciado a solicitud de
la licenciada Elsa Margoth Velásquez Linares, a favor del señor Douglas Vladimir Sánchez
Ramírez, en virtud de lo expuesto en el apartado III números 1 y 2 de la presente
resolución; b) no ha lugar al hábeas corpus en razón de lo resuelto en el número 3, del
considerando III de la presente resolución; c) certifíquese esta resolución y remítase junto
con la certificación del proceso penal al Juzgado de Instrucción de Ciudad Delgado,
Departamento de la Libertad.
• Fecha y hora de la resolución: 22/09/2009 - 12:22:00
SENTENCIAS 2011
NULIDAD
Referencia: 199-CAC-2010
Fecha de Resolución: 18/03/2011
Hora de Resolución: 11:00:00
Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Pretensión: Nulidad de Contrato de Compraventa con Pacto de Retroventa.
Causa pretendí:
Vistos en casación de la sentencia definitiva, pronunciada por la Cámara Segunda de lo
Civil de la Primera Sección del Centro, en San Salvador, a las nueve horas treinta minutos
del veinte de agosto de dos mil diez, en el Juicio Civil Ordinario de Mero Derecho de
Nulidad de Contrato de Compraventa con Pacto de Retroventa, incoado por los doctores
Carlos Amílcar Amaya y José Leonel Tovar, en concepto de apoderados generales
judiciales del señor MANUEL RAFAEL VIEYTEZ o MANUEL RAFAEL VIEYTEZ MELÉNDEZ,
contra los señores GABRIEL FRANCISCO VIEYTEZ VALLADARES, FAUSTO ARTURO VERGARA
SUÁREZ y RAFAEL ANTONIO AGUILAR SANTOS.
Criterios.
Conceptos:
Error de Derecho en la apreciación de la Prueba: se presenta cuando, al apreciar las
pruebas, es decir al apreciar el valor que conforme a la ley tienen, se les aplican
erradamente las normas establecidas para ello, infringiéndose por consiguiente los
preceptos que la ley ha establecido para valorarlas. Por consiguiente, las disposiciones
legales señaladas como infringidas, deben necesariamente señalar valor a las
probanzas que aparecen en el proceso.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
El Art. 1578 C. prescribe en el inciso primero, que las escrituras privadas hechas por los
contratantes para alterar lo pactado en escritura pública, no producirán efecto alguno
contra terceros; a contrario sensu, sí producen efecto entre las partes. En el inciso
segundo la disposición en comento ordena que tampoco producirán efecto las
contraescrituras públicas, cuando no se ha tomado razón de su contenido al margen de la
escritura matriz cuyas disposiciones se han alterado, o sea en el protocolo del Notario
autorizante, y en el testimonio en cuya virtud ha obrado el tercero. Es decir que en este
segundo inciso también se protege la buena fe del tercero. Y en el tercer inciso ordena
una diligencia para publicidad de la contraescritura, siempre con el objeto de resguardar
los derechos de terceros. Es premisa fundamental para aplicar el Art. 1578 C., que las
contraescrituras, tanto privadas como públicas, hayan sido otorgadas por "los
contratantes", es decir por todas las partes que participaron en la primera escritura.
En vista de lo anterior, a juicio de esta Sala, el AD QUEM cometió error en la
interpretación del instrumento público contentivo de la segunda escritura pública, al decir
que contenía contrato bilateral, de donde resulta evidente error en la apreciación del
contenido de tal instrumento público, lo cual constituye otro submotivo de casación,
diferente del alegado por el recurrente, y el tribunal de Casación no tiene facultades de
oficio para casar una sentencia recurrida, por un submotivo que no haya sido alegado por
el recurrente, ya que se trata de un recurso extraordinario de mero derecho.
En cuanto al error de derecho en la apreciación de la prueba, relacionado con el
Art. 258 Pr. C., el recurrente ha expresado que el Ad quem no le dio valor de plena prueba
al instrumento que contiene la contraescritura pública.
Esta Sala estima que el Art. 258 Pr. C. atribuye el valor de plena prueba, a las
escrituras públicas y a los testimonios sacados de ellas por autoridad de Juez competente
y con citación contraria. En los razonamientos de la Cámara, que aparecen en su
sentencia, consta que sí le da el valor de plena prueba, al igual que a la escritura de
compraventa con pacto de retroventa que se pide anular, por los efectos que atribuye a la
segunda escritura. Ello se evidencia cuando el Ad quem afirma, que en la segunda
escritura o sea en la contraescritura, se pactó por las dos partes contratantes, una nueva
forma de pagar el precio, sin dañar la primera escritura, o sea la de compraventa con
pacto de retroventa. Es decir, que el Ad quem sí le da a la segunda escritura el valor de
plena prueba, puesto que le da los mismos efectos que a la primera escritura Razón por la
cual no se tipifica el submotivo de casación Error de Derecho en la apreciación de la
prueba instrumental.
Violación De Ley
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
El recurrente ha manifestado que conforme al Art. 1613 Inc. 2° C., el precio de la venta
debe fijarse por las dos partes contratantes, de lo contrario, el contrato de compraventa
no tiene existencia legal porque no habría consentimiento. Además, agrega el recurrente,
el Art. 1605 C. prescribe que la venta se reputa perfecta, desde que las partes han
convenido en la cosa objeto de la venta y en el precio; que por otra parte, el Art. 1612 C.
ordena que el precio debe ser determinado por los contratantes; que de tales
disposiciones puede concluirse que en nuestra legislación civil se exige la determinación
del precio por ambos contratantes; y a su vez se prohíbe imperativamente que se deje
dicha facultad al arbitrio de uno solo de ellos, siendo la razón para tal exigencia que, para
que exista consentimiento en la fijación del precio, dicho acuerdo debe ser tomado por
ambos contratantes, de lo contrario, el contrato de compraventa no tendría existencia
legal o podría degenerar en otro contrato, puesto que dicho contrato se forma cuando
ambas partes han convenido en la cosa objeto de la venta y en el precio, es decir, cuando
han concurrido ambas voluntades para establecer esos elementos esenciales para la
formación de la venta.
Agrega el impetrante, que el Art. 1613 Inc. 2° C. contiene una prohibición, la cual
encaja perfectamente en el supuesto normativo del Art. 10 C. que establece "Los actos
que la ley prohíbe son nulos y de ningún valor. Y adiciona el recurrente, que si la Cámara
hubiera aplicado concordantemente los Arts. 1613 y 10 C.C. hubiera llegado a la ineludible
conclusión de que, habiéndose fijado por el vendedor el precio de la venta como consta
en la escritura de mérito, la venta adolecía de nulidad.
El Ad quem en su sentencia ha expresado que en ambas escrituras hubo
estipulación del precio de la venta, la única diferencia es que en la segunda escritura se
estipuló la forma de pago del precio convenido y además que, en caso de no considerarse
necesario la entrega del resto del dinero, se entendería que el precio de la venta fue por
ciento cincuenta mil dólares. Agrega que no debe olvidarse que ambas escrituras
contienen contratos bilaterales, por lo tanto, las partes se han obligado en ellos
recíprocamente; por ello no es cierto que el precio de la venta lo decidiría únicamente el
vendedor.
La Sala considera que el submotivo Violación de Ley consiste en la no aplicación
del precepto legal o de la doctrina legal que, en su caso, debían aplicarse.
El Art. 1613 Inc. 2° C. prescribe que no podrá dejarse el precio al arbitrio de uno de
los contratantes, lo cual contiene la prohibición de hacerlo, y de conformidad con el Art.
10 C. los actos prohibidos por la ley son nulos y de ningún valor.
En el caso analizado, en el contrato de compraventa del inmueble, que consta en el
testimonio de la escritura de compraventa con pacto de retroventa, a fs. 24 Fte. y Vto., del
expediente de primera instancia, aparece que ambas partes estuvieron de acuerdo en la
cosa vendida y en el precio y que, además, el vendedor hizo la tradición del dominio a los
dos compradores y estos la aceptaron. Por consiguiente, ese contrato existe y es
perfectamente válido. El hecho que treinta minutos después de otorgado el referido
instrumento, solamente los dos compradores otorgaron otra escritura, en la que hicieron
declaraciones y convinieron pactos referentes al precio, no significa que sea una
contraescritura, ni mucho menos que tal pacto modifique el precio de la compraventa y
que lo deje al arbitrio de uno de los contratantes. Para tales efectos hubiera sido
necesario que la segunda escritura hubiera sido otorgada por las dos partes en la
compraventa, constituyendo una contraescritura; pero no ha sido así. La segunda
escritura contiene estipulaciones que sólo vinculan a los dos compradores que la
otorgaron, no así al vendedor y mucho menos afecta al contrato de compraventa, el cual
es válido.
Porque se casó la Sentencia.
POR TANTO, de conformidad a las disposiciones legales citadas y Arts. 428 y 429 Pr. C. y 23
Cas., a nombre de la República, la Sala FALLA: 1) Declárase que no ha lugar a casar la
sentencia de que se ha hecho mérito, por el motivo Infracción de Ley, Art. 2 Lit. a) Cas.,
por los submotivos: 1) Error de Derecho en la apreciación de la prueba instrumental, Art. 3
N° 8 Cas., por infracción a los Arts. 1578 C. y 258 Pr. C.; y 2) Violación de Ley, Art. 3 N° 1
Cas., por infracción a los Arts. 1613 Inc. 2° y 10 C.; 2) Condénanse: a) a los doctores JOSÉ
LEONEL TOVAR y CARLOS AMILCAR AMAYA, en las costas del recurso, como abogados
firmantes del escrito, y b) al señor MANUEL RAFAEL VIEYTEZ MELÉNDEZ o MANUEL
RAFAEL VIEYTEZ, a los daños y perjuicios a que hubiere lugar por el recurso; 3) Vuelvan los
autos al tribunal de origen, con certificación de esta sentencia, para los efectos de rigor.
Referencia: 180-CAC-2010
Fecha de Resolución: 06/05/2011
Hora de Resolución: 10:00:00
Tribunal: SALA DE LO CIVIL
Pretensión: Nulidad y Cancelación de hipoteca
Causa Pretendi:
Vistos en casación la sentencia interlocutoria pronunciada a las once horas del veintiocho
de julio de dos mil diez, por la Cámara de la Cuarta Sección del Centro, que resuelve en
apelación la sentencia definitiva pronunciada por la Juez de lo Civil de Quezaltepeque, a
las diez horas treinta minutos del diez de marzo de dos mil diez, en el Juicio Ordinario
Reivindicatorio, de Nulidad y de Cancelación de Hipoteca, promovido por el licenciado
René Adán Hernández Sánchez contra la señora Juana Mercedes Gabriela Contreras de
Vanegas o Juana Gabriela Mercedes Contreras de Vanegas.
La Sala, por auto de las ocho horas del seis de diciembre de dos mil diez, resolvió: «I) ADMITESE el
recurso de que se trata, interpuesto por la causa genérica de Infracción de Ley, y por el submotivo
específico de Interpretación Errónea de Ley, Art. 3 ordinal 2° L. de C., con infracción del Art. 197
Pr. C.»
Criterios.
Análisis de los artículos y análisis de la prueba:
INTERPRETACIÓN ERRÓNEA DE LEY CON INFRACCIÓN DEL ART. 197 Pr. C.
El Art. 197 Pr. C. estipula: "Si al recibir el tribunal la demanda, estimare que es
manifiestamente improponible, la rechazará, expresando los fundamentos de su decisión.
"
El recurrente sostiene que el señor Gallegos Escobar, que es la persona que falta
demandar para que el litis consorcio necesario que la Cámara reclama quede conformado,
no conserva ningún derecho sobre el inmueble que vendió a la demandada, y que en caso
de una sentencia estimatoria a favor del demandante lo que corresponde ejercer a la
compradora perdidoso contra la parte que le vendió el inmueble es la acción de
saneamiento, por lo que a su entender la improponibilidad manifiesta de que habla la ley
no tiene lugar en el presente caso.
La Cámara ha especificado en sus considerandos que la actora ha pedido en Primera
Instancia la nulidad absoluta de la escritura de compraventa otorgada por el señor
Gallegos Escobar a favor de la demandada, así como también de su antecedente, el cual
consiste en un título municipal inscrito a favor de don José María Gallegos Escobar, y
como consecuencia de lo anterior solicita reivindicar la porción de terreno en disputa.
El Tribunal que conoció de la alzada ha valorado el hecho de que al haberse demandado
únicamente a la señora Juana Mercedes Gabriela Contreras de Vanegas excluyéndose de
la acción intentada al señor Gallegos Escobar, cabría la posibilidad de que éste
eventualmente sufra afectación en sus derechos, particularmente en el de propiedad, sin
haber sido oído y vencido en juicio, violentándose la garantía de audiencia que tiene rango
constitucional.
La Sala comparte el criterio expuesto por la Cámara pues es fundamental preservar la
garantía de audiencia para todos aquellos posibles perjudicados por un fallo judicial. Con
buen tino, en el presente caso, la Cámara ha argumentado la necesidad de que se
configure el litis consorcio pasivo necesario, pues el señor Gallegos Escobar podría verse
afectado con la nulidad de su título y correspondiente inscripción solicitadas por la actora,
por lo que su participación resulta necesaria no en función de la protección de los
derechos de la demandada sino en función de la defensa de sus propios intereses pues en
esencia la actora pide también la anulación del sustento de su derecho de dominio sobre
el inmueble en controversia, derecho en virtud del cual ha procedido a otorgar un
instrumento de transferencia de dominio, amén de la posibilidad de emitirse fallos
contradictorios al discutirse en juicios separados las pretensiones de la actora.
De acuerdo al Art. 11 de la Constitución toda privación de derechos deber ser precedida
por un proceso seguido conforme a la ley, consecuentemente conocer del fondo del juicio
reivindicatorio y de nulidad en la forma en que ha sido planteado conllevaría una
actuación judicial con inobservancia de la Constitución.
De lo dicho es evidente que la Cámara ha actuado dentro de los parámetros legales, no
ampliando ni restringiendo en manera alguna la disposición que se estima quebrantada
sino aplicándola en su exacto contenido, sentido y alcance, por lo que no procede casar la
sentencia de mérito por este sub motivo y así se declarará.
Porque se casó la Sentencia
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas, y Arts. 417
y 428 Pr. C. y Art. 23 L. de C. a nombre de la República, la Sala FALLA: a) Declárase que no
ha lugar a casar la sentencia de que se ha recurrido, por la causa genérica de Infracción
de Ley, por el sub motivo específico de Interpretación Errónea de Ley, Art. 3 ordinal 2° L.
de C., con infracción del Art. 197 Pr. C.; b) Condénase al señor René Adán Hernández
Sánchez, en los daños y perjuicios a que hubiera lugar, y al abogado René Adán Hernández
en las costas del recurso como abogado firmante del mismo.