NIVEL ÉTICO DE ESTUDIANTES Y EGRESADOS DE INGENIERÍA...

ResUMeN

El propósito de este trabajo es la formación ética en la educación Agronómica como fortalecedora de la capacidad crítica respecto de los acontecimientos agronómicos y como contribución a la toma de decisiones profesionales. Mediante una metodología descriptiva, en la que se enfrentaron estudiantes y egresados a una gama de problemas hipotéticos con salidas de acuerdo con las tipologías del razonamiento moral de Lawrence Kohlberg, se evaluaron cuatro grupos de estudiantes de Ingeniería Agronómica de diferentes grados universitarios (inicio, mediados y últimos semestres). Se determinó que los estudiantes de todos los niveles académicos y egresados de la carrera se ubican mayoritariamente en los niveles convencionales y posconvencionales, con algunas variantes dependiendo de la tipología evaluada y del proceso formativo de los estudiantes universitarios.

Palabras clave: razonamiento moral, valores agronómicos, bioética, estadios de Kohlberg.

aBstRaCt

etHiC LeveL OF stUDeNts aND GRaDUates OF aGRONOMiC

eNGiNeeRiNG OF tHe UNiveRsiDaD De CaLDas, MaNiZaLes, COLOMBia

The purpose of this paper is ethics formation in agronomic education in Agricultural education as empowering the critical capacity regarding agronomic events and as a contribution to making professional decisions. Using a descriptive approach, in which students and graduates faced a range of hypothetical problems with outputs according to the types of moral reasoning of Lawrence Kohlberg, four groups of students in Agricultural Engineering from different university degrees were assessed (start, middle and last semesters). It was determined that students of all academic levels and agronomists are mostly located in conventional and post-conventional levels, with some variations depending on the typology assesses and the educational process at University.

Key words: moral reasoning, agronomic values, bioethics, kohlberg levels.

agron. 22(1): 7 - 21, 2014ISSN 0568-3076

NIVEL ÉTICO DE ESTUDIANTES Y EGRESADOS DE INGENIERÍA AGRONÓMICA DE LA UNIVERSIDAD DE CALDAS, MANIZALES,

COLOMBIA

Cristian Camilo Luna García* y Elmer Castaño Ramírez**

* Ingeniero Agrónomo.** Ingeniero Agrónomo Esp. en Administración Agropecuaria. Profesor Titular, Universidad de Caldas. Manizales, Colombia.

Correo electrónico: [email protected]

Recibido: marzo 3 de 2014; aprobado: mayo 12 de 2014

Luna, C.C. & Castaño, E. 2014. Nivel ético de estudiantes y egresados de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas, Manizales, Colombia. Revista Agronomía. 22(1):7-21.

8Cristian Camilo Luna García y Elmer Castaño Ramírez

iNtRODUCCiÓN

La ética es una parte de la filosofía que estudia la esencia del desarrollo de la moral en la sociedad y el mundo interno del individuo (Chacón, 1999). Savater (1992) aduce que la ética no es más que un intento racional sobre cómo vivir mejor; se ocupa de lo que un individuo hace con su libertad. La ética es una actitud, una reflexión individual sobre la libertad propia en relación con la libertad de los demás. La ética tiene alcances humanísticos más radicales y profundos que las soluciones o propuestas desarrolladas desde la esfera política. Ética es una reflexión sobre las circunstancias en que vive el hombre en un mundo real y no un código que indica cómo movernos. Los modos de actuar éticos en un ámbito profesional, forman parte de lo que se puede llamar ética aplicada (Bolívar, 2005).

Para Chacón (1999) el sistema económico de una sociedad y las condiciones en que se realiza el trabajo, condicionan los rasgos característicos más generales de la moral y del código moral imperante (principios, normas y escalas de valores). No obstante, la división social y profesional del trabajo determina la existencia de particularidades en la moral de los oficios y carreras. La Ética propone principios válidos para todas las profesiones (dignidad, justicia, responsabilidad, etc.) y otorga los principios de la Ética General a campos determinados de actividad profesional (García et al., 2009).

Beauchamp y Childress (1999) se basan en el principialismo como marco de referencia para los juicios morales y la toma de decisiones, enfatizan en la autonomía del sujeto considerado capaz de tomar decisiones de valor, donde se reconozca la dignidad humana. Esos principios son: Respeto a la autonomía, No maleficencia, Beneficencia y Justicia.

Las universidades deben promover el desarrollo de las capacidades de los estudiantes para examinar situaciones complejas en que compiten varios valores, así como emplear un conocimiento sustantivo y

razonamiento moral para evaluar los problemas y valores implicados, desarrollar sus propios juicios sobre estos aspectos en diálogo con otros, y actuar de acuerdo con sus juicios (Colby et al, 2003). En el ambiente educativo, especialmente en las universidades, la ética juega un papel clave en el crecimiento y desarrollo de la sociedad, convirtiéndose en un aspecto necesario para la formación de profesionales (Farahani & Farahani, 2014).

Ahmad (2014) concluyó en los resultados de su estudio en profesionales del comercio que los valores culturales, personales y profesionales influyen en sus actividades de negocio. El nivel de estudio de los profesionales lleva a comprender mejor el valor profesional influyendo en el comportamiento ético y en la toma de decisiones (Ahmad, 2014).

Sarandón (2002) se mantiene en que es necesario un profesional con un fuerte espíritu crítico y una visión holística y sistémica, con un alto contenido ético, que permita cambiar el objetivo productivista y cortoplacista por uno sustentable a largo plazo: ecológicamente adecuado, económicamente viable y socialmente más justo. Para este autor, la profesión de Ingeniero Agrónomo debe tener incorporados una serie de objetivos éticos que dirijan hacia la sustentabilidad, dado que esta implica un compromiso con las futuras generaciones y las actuales (Sarandón, 2008).

“La falta de confianza en el futuro –junto con la desaparición de los grandes proyectos comunes al progreso de la modernidad, ya sea las ideologías de la emancipación, utopías y el ideal del progreso–, dejan un vacío que, a menudo es llenado por el pesimismo, la anomia o el desinterés, que conducen al hombre actual hacia un proceso de creciente aislamiento y desintegración social” (Villalobos, 2002, p. 87).

Ante tanto caos, nos preguntamos de qué forma poder dar estabilidad

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4Nivel ético de estudiantes y egresados de ingeniería agronómica de la Universidad de Caldas, Manizales, Colombia

a las personas y a las sociedades para recuperar en cierta forma la aparente estabil idad de épocas históricas anteriores. Una posible respuesta es fortalecer la educación en valores y la gestión ética del actuar humano, donde se puede imponer una suerte de racionalidad en el obrar de la persona. (Minte & Villalobos, 2006)

En el ejercicio de su profesión, el Ingeniero Agrónomo se encuentra en diversas situaciones dentro de su área de trabajo, en las cuales se ve obligado a tomar decisiones que impactan positiva o negativamente la sociedad y el medio ambiente; estas disposiciones están acompañadas de preceptos morales. Es a partir de estos escenarios que se analizó el nivel ético de estudiantes y profesionales recientemente egresados, acorde con los estadios establecidos por Lawrence Kohlberg.

etapas del Desarrollo Moral por Lawrence Kohlberg

Kohlberg (1992) definió tres niveles de razonamiento moral, que se definen a continuación:

Nivel I: moralidad preconvencional. En esta etapa los motivos por los cuales se obedecen las reglas son la evasión del castigo o la consecución de recompensas y el interés personal. Se actúa en función de controles externos.

Nivel II: moralidad convencional. Se anhela ser visto como “bueno”, agradar y complacer a los otros y mantener el orden social. Ante un dilema moral se tienen en cuenta las expectativas de la sociedad y sus leyes. Se observan patrones de otros que hasta cierto punto han sido interiorizados.

Nivel III: moralidad posconvencional. Durante esta etapa las personas hacen sus propios juicios sobre lo que es correcto, equitativo y justo, ya que se reconocen los conflictos existentes entre las normas aceptadas socialmente. El control de la conducta es interno y los juicios se basan en principios personales que no están definidos por las leyes de la sociedad necesariamente.

Cada uno de estos niveles de razonamiento moral se subdivide en dos estadios morales, que a su vez conforman los seis estadios del razonamiento moral:

Nivel I: moralidad preconvencional

Estadio 1: oralidad heterónoma. En este estadio las reglas son categorías de conductas, buena y mala, las cuales se generalizan y no admiten excepciones, ni consideraciones de necesidad o merecimiento. El castigo es visto como algo importante, puesto que se identifica con una mala acción; se busca evitarlo. Así, las personas son muy ortodoxas, egocéntricas y psicorrígidas. Además de estar regidas por el respeto a la autoridad y por el temor al castigo, consideran las cosas buenas o malas sin ninguna justificación, simplemente porque así están establecidas y no admiten excepciones (Kohlberg, 1992).

Estadio 2: moralidad individualista, instrumental. Se caracteriza por una conciencia de los intereses propios y también de los intereses individuales, es decir que, a diferencia del estadio 1, se reconoce que existe más de una perspectiva sobre una situación. Sin embargo, el objetivo propio de las personas ubicadas en este estadio es la consecución de los intereses personales con el fin de satisfacer sus deseos y necesidades a través de la propia acción y a través del intercambio de bienes y acciones con otros. Las acciones correctas o incorrectas no tienen valor: todo se explica en la búsqueda del bienestar personal exclusivo. Según Sepúlveda (2001), en su trabajo sobre teorías del desarrollo cognitivo-evolutivas, el individuo se sujeta a las normas según sus intereses y también tiene en cuenta lo que las demás personas puedan hacer por él, por lo que se dice hay una perspectiva individualista concreta.

Nivel II: moralidad convencional

Estadio 3: moralidad de la normativa interpersonal. El interés en este estadio radica en mantener la aprobación social y la confianza en sí mismo, lo cual se consigue a través del cumplimiento de un conjunto


de normas compartidas, que han sido creadas para la convivencia de las personas y que determinan un buen desempeño del rol. Dichas normas se sienten como obligatorias y mantienen la confianza, la lealtad y los cuidados entre los miembros del grupo (Kohlberg, 1992).

Estadio 4: moralidad del sistema social. En esta etapa se desarrolla una nueva perspectiva como miembro de la sociedad, basada en la concepción de un sistema social conforme un conjunto de códigos y procedimientos que son aplicados imparcialmente. Las normas que se comparten de manera informal en el estadio 3 son garantizadas por una estructura social, que incluye instituciones formales y roles sociales que buscan un bienestar común. Los juicios se hacen tomando como referencia instituciones legales y sociales, o morales y religiosas. Se obedece la ley aun sin estar de acuerdo con ella, puesto que esta procura el bienestar para la mayoría de las personas según normas de cooperación y contribución social (Kohlberg, 1992).

Nivel III: moralidad posconvencional

Estadio 5: moralidad de los derechos humanos y de bienestar social. Las personas que alcanzan este estadio logran reconocer que la gente tiene una diversidad de normas y valores, en su mayoría relativos al grupo. Cabe anotar que valores como la vida y la libertad, que son derechos no relativos, deben mantenerse siempre sin importar la opinión de la mayoría. Se desarrolla en cada persona un sentimiento de compromiso, libremente adquirido, con la ley y el contrato social, con las leyes que buscan el bienestar y la protección de los derechos de todos. Estas leyes se basan en la consigna: “lo mejor posible para el mayor número de gente”.

Estadio 6: moralidad de principio(s) ético(s) general(es), universalizable(s), reversible(s) y prescriptivo(s). Este es el último estadio de la teoría de razonamiento moral, que muy pocas personas logran desarrollar en tal grado de madurez moral. En esta etapa las personas actúan de acuerdo con normas y principios éticos

autoconscientes que cada individuo ha interiorizado, y que se aplican a todas las personas y situaciones. En este estadio el quebrantamiento de la ley es un acto aceptado siempre y cuando aquella afecte o interfiera alguno de estos principios universales como es, por ejemplo, la dignidad humana.

Ante el análisis de los valores de los estudiantes en su formación universitaria el objetivo de impartir “Un curso de Ética debe ante todo poder asombrar al estudiante”. En efecto, lo que más se necesita en este tipo de enseñanza es poder contar con un espacio de reflexión acerca de los valores implicados en el desarrollo, un tiempo para dudar y permitirse cambiar de opinión y de visión de la problemática social (Vallaeys, 2003).

Según Muñoz (2010), los resultados obtenidos en un estudio en el área empresarial reflejan que las decisiones son tomadas con base en el interés propio y en las expectativas que los demás tengan de la persona, lo que corresponde a los estadios 2 y 3 de moralidad de Kohlberg. Barba y Romo (2005) determinaron que el nivel de crecimiento moral de estudiantes de diferentes carreras y de distintas universidades, no supera el nivel 2 o moralidad convencional, ya que predominan mayoritariamente en los estadios 3 y 4, definidos por Kohlberg. Barba y Romo (2005) sugieren que se podría plantear la necesidad de que las instituciones traduzcan los postulados jurídico-filosóficos de carácter valoral en proyectos escolares que atiendan de manera eficaz la formación ética y el crecimiento moral. Impartir la ética en procesos educativos influye positivamente en el profesional, como lo indica Seghedin (2011 p 146), “el hacer la autonomía moral en los docentes debe estar vinculado a los puntos de referencia del nuevo ideal educativo, que, a su vez, hace hincapié en la evolución de la sociedad contemporánea”.

Un ejemplo en el campo de acción del Ingeniero Agrónomo se encuentra en el caso de las biotecnologías en donde la acumulación en pocas empresas de los recursos filogenéticos, útiles agronómicamente

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hablando, sujeta a intereses particulares, puede ser estratégicamente peligrosa para la humanidad. Hay un riesgo real de que las multinacionales capaces de efectuar inversiones monopolicen el mercado y segreguen a los países del Tercer Mundo de la capacidad de adquirir variedades mejoradas. Es moralmente sospechoso, por ejemplo, que una misma compañía venda una semilla resistente a un herbicida y que posteriormente venda dicho herbicida (De la Torre, 2012).

El amor por los seres humanos que se encuentra en el corazón de la práctica de una profesión y manteniendo todas las personas en armonía es realmente necesario para resolver muchos de los problemas que se tratan en el mundo actual. (Sahin et al., 2009, p 804)

Si bien se ha escrito mucho sobre ética y bioética, escasean los documentos sobre la formación ética de Ingenieros Agrónomos y son inexistentes los trabajos de investigación sobre el tema. La pregunta de base que guió este trabajo fue: ¿Cuál es el nivel ético de los estudiantes de primeros semestres, de mitad de la carrera, y últimos semestres del programa de Ingeniería Agronómica, y con qué nivel ético enfrentan las decisiones los recientemente egresados de la carrera? Para darle respuesta se trazaron como objetivos de este ejercicio de investigación, identificar el nivel ético de los estudiantes de Ingeniería agronómica de la Universidad de Caldas de acuerdo con la escala de Kohlberg, y sondear los recientemente egresados para conciliar el nivel ético de los estudiantes con respecto a la formación recibida dentro del programa de Ingeniería Agronómica.

MetODOLOGÍa

Mediante la metodología usada por Kohlberg, de proponer problemas para análisis y entregar salidas concordantes con cada nivel de la escala, se visualizaron los principios éticos de los estudiantes de primeros semestres, nivel medio de la carrera y

últimos semestres, y algunos egresados del programa de Ingeniería Agronómica de la Facultad de Ciencias Agropecuarias perteneciente a la Universidad de Caldas. Las situaciones problema se diseñaron en algunos de los campos profesionales como: social, económico, ambiental, formativo, científico, político y universitario donde se seleccionó un problema por área para los estudiantes de primeros semestres y mitad de carrera, y varios problemas por área para los estudiantes de últimos semestres y recién egresados. La herramienta para este trabajo se basó en un tipo de encuesta, en donde cada problema hipotético tuvo estructuras dilemáticas en campos de actuación de los Ingenieros Agrónomos; cada problema tuvo 6 soluciones para elegir, acordes con la escala de Kohlberg y se abrió el espacio para otras potenciales respuestas.

Un ejemplo de los problemas hipotéticos éticos planteados en la tipología social es:

En el caso de trabajar con una compañía de agroquímicos:

Vende más agroquímicos o promueve su uso en cultivos por encima de las necesidades del agricultor, para cumplir con las metas que le tiene su institución porque ella es la que le paga (nivel 1 preconvencional estadio 1).

Al encontrar un agricultor dispuesto a seguir sus recomendaciones como Ingeniero Agrónomo, sobrepasa las metas de ventas de agrotóxicos por encima de las necesidades del cultivo porque los ingresos personales por comisiones de ventas serán mayores (Nivel 1 preconvencional estadio 2).

Al encontrar agricultores dispuestos a seguir sus recomendaciones como Ingeniero Agrónomo, aumenta las ventas por encima de las necesidades de los agricultores, para ganar el respeto de los jefes y ascender en la empresa (Nivel 2 convencional estadio 3).

Al encontrar un agricultor dispuesto a seguir sus recomendaciones como Ingeniero Agrónomo, aumenta las ventas de agrotóxicos, por encima de las necesidades del agricultor, porque las normas de la empresa de la que dependo así lo exigen (Nivel 2 preconvencional estadio 4).


Como Ingeniero Agrónomo vendería solo hasta donde el agricultor lo requiera y no lo quiebre, así tenga disponibilidad para adquirir mayor cantidad de producto o mayor área para cultivar (Nivel 3 posconvencional estadio 5).

Como Ingeniero Agrónomo vendería solo lo que beneficie al agricultor y le represente ventajas, independientemente incluso de la compañía para la cual trabajo (Nivel 3 posconvencional estadio 6).

La población y muestra encuestada fue:

· Estudiantes primer semestre (N) 45, muestra: 37 y Estudiantes segundo semestre 45, muestra: 43 (Error muestral para primeros semestres: 4% con muestra de 80).

· Estudiantes mitad de carrera 45 (= N), muestra: 28 (= n) (Error muestral: 12%).

· Estudiantes noveno semestre 40, muestra: 19 (Error muestral 16%).

· Egresados encuestados por correo electrónico 290. Número de respuestas: 29.

Para la muestra de estudiantes de Ingeniería Agronómica, se empleó la siguiente fórmula:

Donde las letras corresponen a: N, es población (por cada grupo); n, muestra obtenida; p, proporción esperada del evento; q, es (1-p) probabilidad complemento (p y q para el estudio fue de 50%); Z, corresponde al percentil de la distribución normal estándar el cual determina el nivel de confiabilidad del estudio.

El error estadístico oscila entre 4% y 16% para los estudiantes regulares y el número de los profesionales de los últimos 5 años, por las dificultades en responder se convierte en un sondeo a egresados de quienes se disponía de correo electrónico, (10% de respuestas; 29 respuestas entre 290 enviadas). Los resultados se obtuvieron del promedio de las respuestas de la población encuestada.

ResULtaDOs

Los estudiantes de todos los grados académicos y egresados de la carrera se ubican en los niveles convencionales y posconvencionales en mayor porcentaje, con algunas variantes dependiendo de la tipología evaluada y del estado académico de los discentes.

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Figura 1. Razonamiento moral de los estudiantes de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas frente a situaciones sociales.

Las situaciones hipotéticas evaluadas con temática social demuestran que tanto estudiantes como egresados se ubican mayoritariamente en los estados posconvencionales de Kohlberg, demostrando que sin importar el nivel académico sus acciones pueden estar dirigidas hacia el bienestar social por encima de las consecuencias o las normas que les rijan.

Es destacable el alto porcentaje de los estudiantes de segundo semestre que se ubica en el nivel seis,

máximo establecido en la escala valoral de Kolhberg, duplican el resto de grupos evaluados, lo que puede deberse al tipo de asignaturas cursadas durante ese grado académico como “Analisis de Problemas Agropecuarios” (APA I y II) en las que se concientiza en profundidad a los estudiantes de primero y segundo períodos sobre la problemática social, económica y ambiental de la producción agropecuaria en pequeña y gran escala.

Figura 2. Razonamiento moral de los estudiantes de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas frente a situaciones de tipo económico.


En situaciones de tipo económico se observa una tendencia de los grupos de primeros semestres a ubicarse en el nivel convencional, en el estadio que se describe como moralidad debida a la normativa interpersonal, el cual se caracteriza por ser un estado en el que los individuos actúan buscando la aprobación social y se guían por un conjunto de normas que están diseñadas para mantener el orden y el bienestar social; esta inclinación se da por el tipo de situación planteada en la encuesta, en donde se sugerían pérdidas monetarias si se accedía a ayudar al agricultor en el suministro de un insumo por debajo del costo de producción. Los estudiantes se inclinaron hacia la opción de respuesta en la que se accede a ayudar al agricultor sin salirse de las normas y con tendencia a evitar las pérdidas económicas personales. Cabe destacar que un notorio porcentaje de los estudiantes de segundo semestre se ubica en el nivel posconvencional (se inclinan por decisiones que tienen como propósito el bienestar de los agricultores), lo que se podría relacionar con el impacto en primeros semestres de las asignaturas APA I, APA II e Historia y Geografía, todas asignaturas de debate con notoria inclinación social y económica. Se podrían aventurar

otras hipótesis como el impulso que les motiva, desde algunos colegios, a estudiar esta carrera.

A los estudiantes ubicados en la mitad de los cursos profesionales se les planteó una situación diferente en la cual no había posibilidad de pérdida económica, pero sí oportunidad de obtener ingresos adicionales ejerciendo en actividades que no son vistas socialmente como productivas; en esta situación los estudiantes se ubican mayoritariamente en los niveles posconvencionales, niveles que se caracterizan por ejercer acciones que favorecen a los menos aventajados económicamente y la búsqueda del bienestar social.

Estudiantes de noveno semestre y egresados evaluaron varias situaciones y mayoritariamente se ubican en niveles posconvencionales. Hay que resaltar que una buena proporción de estudiantes y egresados aparecen en otros niveles de razonamiento moral, tendencia hipotéticamente debida a decisiones en las que se eviten pérdidas económicas, o a la búsqueda de mayores beneficios sin importar las repercusiones de sus actos sobre los demás.

Figura 3. Razonamiento moral de los estudiantes de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas frente a situaciones de tipo ambiental.

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Los estudiantes de primeros semestres no tienen una inclinación definida en temas ambientales, hipotéticamente por desconocimiento de lo que se debe hacer en la situación planteada de la eliminación de residuos químicos (de acuerdo con la pregunta formulada); los estudiantes recién ingresados a la universidad se ubican dispersos en todos los niveles sin una mayoría definida hacia algún tipo de razonamiento moral. Los de segundo semestre se encuentran dispersos mayoritariamente entre los niveles 4, 5 y 6 y en un menor porcentaje en el resto. Similar situación ocurre con los otros grupos evaluados, con lo que reflejan un ascenso en la escala de Kohlberg a medida que el nivel académico aumenta, lo que indica que con los progresos académicos se forman principios ambientalistas, factor importante en el ejercicio profesional, ya que como Ingenieros Agrónomos las decisiones que se tomen tendrán impactos significativos sobre el medio ambiente y la salud de las personas. Llama la

atención el nivel 6, en donde a pesar de haber un buen número de estudiantes ubicados allí, no se encuentra el porcentaje esperado en lo que sería las acciones mejor vistas ambientalmente hablando.

Cabe resaltar porcentajes destacables de todos los grupos que se ubican en el nivel 4, en donde la opción de respuesta de las situaciones planteadas, actúa bajo las normas o leyes de las instituciones sin autonomía o criterio propio, lo cual contribuye a tomar decisiones que impacten sobre el medio ambiente y las personas.

Se debe resaltar un grupo que en suma supera 35% de egresados y estudiantes de últimos semestres ubicados en niveles preconvencionales y primer estadio convencional, con baja conciencia ambiental; según las opciones de respuesta en el dilema planteado para esta tipología serían acciones graves para el medio ambiente, la sociedad y el único beneficio sería conservar la estabilidad laboral personal.

Figura 4. Razonamiento moral de los estudiantes de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas frente a situaciones de tipo formativo.

Los grupos se encuentran ubicados mayoritariamente en el nivel 6, lo que se trasluce para los estudiantes y egresados en las situaciones planteadas para esta tipología (investigación, formación doctoral y publicaciones) en que se ubican de manera tal que

influirán positivamente en la sociedad. Cabe resaltar que, aunque los estudiantes de mitad de carrera en 25% se encuentran en el nivel 6, el resto de estudiantes de este grupo están dispersos en los demás niveles con valores cercanos al nivel 2 donde se sugieren ingresos


adicionales sin importar si tiene o no impacto social con las publicaciones y en el nivel 4 donde publicarían solo porque las normas lo exigen; en este tipo de

estudiantes no se exterioriza la conciencia sobre la importancia de la investigación y el impacto que trae para el desarrollo de la sociedad.

Figura 5. Razonamiento moral de los estudiantes de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas frente a situaciones de tipo científico.

Se ubican mayoritariamente en el nivel 6, lo que demuestra que se tiene conocimiento sobre los problemas de salud que traen los organismos modificados genéticamente (acordes con el dilema planteado), con el deber de ser cuidadosos en la promoción de este tipo de cultivos por los daños potenciales en las personas, o tener el cuidado debido desde las instituciones con la entrada indiscriminada de este tipo de materiales.

Igualmente, resalta un número superior a 30% de egresados y estudiantes de últimos semestres que se

ubican en el nivel 4, quienes se guiaron (siguiendo el problema dilemático planteado) por el hecho de ser un cultivo autorizado por las instituciones con las facultades para legalizar estos cultivos y sin la existencia de problemas en la promoción de cultivos transgénicos, además de darse como oportunidad laboral, sin importar el efecto que cause el consumo de estos alimentos sobre las personas o sin claridad sobre el principio de precaución que debiera estar presente en todos los casos.

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Figura 6. Razonamiento moral de los estudiantes de Ingeniería Agronómica de la Universidad de Caldas frente a situaciones de tipo político.

Se ubican en los niveles posconvencionales en asuntos políticos de temas agrarios, en esto queda claro que la mayor parte de estudiantes y egresados tienen una visión crítica de las políticas gubernamentales, y están dispuestos a promover cambios desde las instituciones con el fin de mejorar el bienestar y la calidad de vida de los agricultores.

Llama la atención los egresados, quienes en suma de resultados en los niveles preconvencionales y convencionales exhiben valores muy altos (con peso representativo de 40% del total), particularmente para este grupo por ser los que, desde cargos públicos o con posibilidades de ejercer una función pública, se resguardan tras sus posibilidades salariales o de estabilidad laboral, antepuestos sobre el bienestar de la sociedad rural.

Figura 7. Razonamiento moral de los estudiantes frente a situaciones de tipo universitario.


La mayoría de estudiantes de Ingeniería Agronómica se encuentran en los niveles posconvencionales en situaciones de movimientos estudiantiles, lo que demuestra que son consecuentes con que los movimientos estudiantiles generan principios democráticos, y creen que con la lucha y constancia logran cambios para el bienestar de la sociedad en general.

DisCUsiÓN

Se asume que existe relación entre la formación académica y las decisiones que tomarían los estudiantes evaluados, deducción soportada en el razonamiento moral para situaciones de tipo social observadas. Discentes de segundo semestre denotan tendencia marcada a ubicarse en el estadio 6; la razón más evidente es el tipo de asignaturas cursadas durante ese semestre (como APA I y II), en las cuales se concientiza sobre la problemática social, económica y ambiental de la producción agropecuaria. Igualmente, concilia con asignaturas como Historia, Constitución Política de Colombia y Agroecología lo que se traduce en que los estudiantes de los primeros semestres, en altos porcentajes, se encuentran ubicados en niveles posconvencionales. Se explicaría la ubicación en niveles preconvencionales y convencionales, por el hecho de no haber cursado asignaturas relacionadas con el contexto de la situación planteada o hipotéticamente por los motivos por los cuales ingresan a la universidad, como la idea de que, mediante la formación universitaria, van a crear la manera de crecer económicamente y por lo tanto las pérdidas económicas no se encuentran dentro de sus opciones.

Esto se confirma al observar los demás grupos evaluados que se van ubicando en niveles más altos dependiendo del nivel académico en que se encuentren. Con los estudiantes de grados universitarios más avanzados y egresados se asume que el haber visto asignaturas como las mencionadas anteriormente y otras de tipo social, económico y ambiental que ven, como Sociedad Rural, Sistemas

de Extensión, Política Agraria, Conflictos Agrarios, contribuye al cambio en el razonamiento moral de los discentes hasta el punto de ubicarles mayoritariamente en niveles posconvencionales.

Con las situaciones de tipo ambiental se presenta una tendencia similar, en donde estudiantes de primer semestre se encuentran dispersos, sin mayorías en niveles específicos de la escala de Kohlberg por desconocimiento del tema tratado en la situación dilemática planteada, y ya en semestres más avanzados se nota una inclinación hacia estadios más altos de la escala de Kohlberg, hipotéticamente por haber dispuesto de procesos formativos con asignaturas afines.

En la tipología formativa, los discentes tienen una mayor inclinación hacia el nivel posconvencional, sin embargo se destacan altos porcentajes en todos los grupos hacia los niveles preconvencionales y convencionales. Sería recomendable que en asignaturas que están dirigidas hacia la investigación como Metodología para la Investigación, Métodos Estadísticos, Diseño Experimental, etc., se haga énfasis en la formación en valores donde el ejercicio de investigación debe dirigirse hacia el desarrollo de la sociedad, aportando desde allí con investigaciones que generen impactos positivos en las comunidades rurales.

En la situación de tipo científico, específicamente en temas como transgénicos, agrotóxicos, usos intensivos de mecanización, eliminaciones de sombríos y otros se debería, desde las distintas asignaturas orientadas, formar en el principio de precaución para el uso de este tipo de soluciones agronómicas, en lo referente a los riesgos por consumos, contaminación, deterioro ambiental y perjuicio social que estas técnicas pueden generar, mas no se debe ignorar que buen porcentaje de estudiantes de todos los niveles académicos se ubican en los niveles superiores de la escala de Kohlberg.

Similar situación ocurre en los dilemas de tipo político en donde la tendencia es hacia los niveles altos de la

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escala de Kohlberg, no obstante relieva 40% de los egresados ubicados en los niveles pre y convencional, con baja conciencia sobre la necesidad de participar de las políticas que impacten positivamente y salirle al paso a las que afecten negativamente en las sociedades rurales.

En situaciones de tipo universitario, los estudiantes de Ingeniería Agronómica se comprometen con los movimientos estudiantiles por la formación en democracia que representan; no obstante, bajos porcentajes se ubican en niveles pre y convencional a quienes se les debería mostrar la importancia de la participación.

El caso de los egresados debe analizarse con mayor detalle, ya que los profesionales activos de Ingeniería Agronómica toman decisiones en donde prevalecen los intereses personales sobrepuestos a los de la colectividad y puedan afectar el medio ambiente y la sociedad. Es crítica esta situación teniendo en cuenta que el proceso formativo ya concluyó y los Ingenieros Agrónomos reversan las posiciones en la escala valoral de Kohlbeg, donde sus decisiones repercuten ya en el desarrollo de los habitantes rurales, en los procesos de seguridad alimentaria y sobre el medio ambiente con el empleo de técnicas de producción que los afectan. Una contribución sería ofrecer seminarios sobre bioética, biopolítica y la promoción de “códigos de ética profesional” como aporte al ejercicio de la Ingeniería Agronómica para que se tomen decisiones en beneficio de las sociedades rurales.

Formar los discentes en valores y a los egresados mediante la promoción del código de ética para sumergirles igualmente en valores debería ser una de las tareas del comité de currículo del programa, donde los egresados serían un grupo objetivo de alta importancia para inducirles en estos vitales aspectos de la formación profesional poco discutidos en su proceso de formación.

Gracias a la ubicación los estudiantes en los estadios posconvencionales, en la mayoría de las decisiones dilemáticas propuestas, no se debería considerar solo como una ganancia, sino como una buena base para seguir construyendo desde la academia a través de la apertura de espacios de discusión sobre bioética, biopolítica y legislación agraria y mediada por estudios de casos relevantes de decisiones agronómicas con afectación sobre las sociedades rurales.

Hay que decir con Castaño y Bernal (2006 p 122) que:

[…] la formación de un Ingeniero Agrónomo de perfil amplio requiere de una lógica basada en la integralidad multidisciplinaria de la educación, que le prepare para valorar los procesos científ ico-tecnológicos con una visión de futuro más fortalecida, con plena disposición para enfrentar una realidad donde los problemas de la ciencia y la tecnología tienen una articulación mucho más profunda con los contenidos sociales, políticos, culturales y con todo el pensamiento que se ha desarrollado en el siglo XX y principios del siglo XXI. Pero el sistema de formación en valores de la carrera de Ingeniería Agronómica solo se logra si se emplean formas de comunicación dialógicas entre los sujetos y su objeto de estudio.

O sea que, para poder formar en valores a los futuros profesionales del programa, se deben buscar las estrategias adecuadas para que desde las mismas asignaturas se realice una formación de Ingenieros Agrónomos para el bien de la sociedad en general (Castaño & Bernal, 2006).


ReFeReNCias

Ahmad, M.A. 2014. The relationships between personal cultural and professional values and marketing ethics among the academicians. Procedia - Social and Behavioral Sciences. 130:273-281.

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