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ORACIÓN VOCACIONAL DE LA CONGREGACIÓN Para el mes de marzo de 2012 La familia de las Misioneras y Lamis nos unimos en oración para pedir al Dueño de la Mies que envíe obreros a nuestra Congregación. Canto: El que nos parezca apropiado. Jesús llama: Lectura del Evangelio Juan. 1, 35-51 Elegido: Jeremias 1,4-10 Seducido: Jeremías 20, 7 ss. Silencio. Es un gran consuelo el pensar que, a pesar de nuestras miserias y de nuestra pequeñez, Nuestro Señor quiere servirse de nosotras como instrumentos para su gloria. Por eso, no pongamos límites a nuestro agradecimiento y entreguémonos confiadamente al amor que es nuestro único medio de honrarle. Cuando veamos en nuestra vida ese amor que todo lo ha conducido para nuestro mayor bien, no tenemos nada que lamentar ni que desear, porque es El, el que ha escogido lo mejor, para cada una de nosotras. María Teresa Dupouy. Silencio. Peticiones: Para que cada uno de los que formamos nuestra familia Misionera, comprendamos que la mejor pastoral vocacional que podemos hacer cada día es vivir con gozo y pasión nuestra vocación. Roguemos al Señor. Señor, enviado por el Padre, que viniste al mundo por medio de María, manda operarios a tu mies y que, como Ella, seamos fieles y perseverantes en tu servicio. Roguemos al Señor.

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ORACIÓN VOCACIONAL DE LA CONGREGACIÓN

Para el mes de marzo de 2012

La familia de las Misioneras y Lamis nos unimos en oración para pedir al Dueño de la Mies que envíe obreros a nuestra Congregación.

Canto: El que nos parezca apropiado.

Jesús llama: Lectura del Evangelio Juan. 1, 35-51

Elegido: Jeremias 1,4-10

Seducido: Jeremías 20, 7 ss.

Silencio.

Es un gran consuelo el pensar que, a pesar de nuestras miserias y de nuestra pequeñez, Nuestro Señor quiere servirse de nosotras como instrumentos para su gloria. Por eso, no pongamos límites a nuestro agradecimiento y entreguémonos confiadamente al amor que es nuestro único medio de honrarle.Cuando veamos en nuestra vida ese amor que todo lo ha conducido para nuestro mayor bien, no tenemos nada que lamentar ni que desear, porque es El, el que ha escogido lo mejor, para cada una de nosotras. María Teresa Dupouy.

Silencio.

Peticiones:Para que cada uno de los que formamos nuestra familia Misionera, comprendamos que la mejor pastoral vocacional que podemos hacer cada día es vivir con gozo y pasión nuestra vocación. Roguemos al Señor.

Señor, enviado por el Padre, que viniste al mundo por medio de María, manda operarios a tu mies y que, como Ella, seamos fieles y perseverantes en tu servicio. Roguemos al Señor.

Por todos los que han sido llamados y están en formación para que vivan con ilusión su vocación y se preparen para ser verdaderos misioneros. Roguemos al Señor.

Ayudanos Señor abrir los ojos a las necesidades de nuestros hermanos, que seamos capaces de salir de nosotros mismos para conmovernos por el dolor de los demás, que nuestras cosas y problemas no absorban nuestro corazón hasta el punto de hacernos sordos al grito del que sufre. Roguemos al Señor. Benedicto XVI mensaje para la cuaresma.

Al acercarnos a la fiesta de S. José le pedimos interceda por nosotros para que vivamos sus actitudes de obediencia, sencillez y amor al trabajo. Roguemos al Señor.

Peticiones espontáneas…

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ORACIÓN FINAL.

Me has llamado Señor, en esta etapa de la historia, a continuar el Reino que comenzó tu Hijo Jesús.Con los profetas, quiero gritar: Mira, Señor que no soy más que un niño que no sé hablar.Con María, quiero rezar: Aquí estoy. Hágase según tu palabra. Tu, conoces toda mi vida mis dudas y mi fragilidad, mis pasos vacilantes y mi confianza en ti.No puedo presumir de nada solo quiero que mi vida esté a disposición del Evangelio para que tu nombre sea conocido y ensalzado por todos.Señor, pon calor en mis palabras, coherencia en toda mi vida para que mis gestos y palabras interroguen al que busca, calienten el corazón de los fríos, animen los pasos de los que vacilan , aviven la vida de la comunidad.Que la fuerza del espíritu me acompañe siempre y me inspire lo que es justo y oportuno para hacer resonar tu mensaje a quienes confías a mis cuidados.Mantenme en actitud de escucha y diálogo contigo. Amen.