Pap blog
-
Upload
ccastroc -
Category
Health & Medicine
-
view
1.432 -
download
0
Transcript of Pap blog
¿Qué hacer luego de un sismo?:
Primeros Auxilios Psicológicos, una llave ante la crisis.
Luego del terremoto grado 8,4 que sacudió el 16 de septiembre pasado el norte de Chile, son numerosas
las réplicas perceptibles que han sucedido en la zona central, situación que en algunas personas genera
altos montos de ansiedad, temor y/o preocupación. La evidencia sugiere que en Chile durante el primer
año post terremoto (2010), 30 a 40% de los damnificados, 10 a 20% de los involucrados en las labores de
rescate y 5 a 10% de la población general podría presentar secuelas psicológicas, dentro de ellos un tercio
continuarán sufriendo tales consecuencias una década después. Estas cifras podrían ser aún mayores en
mujeres, niños y población damnificada (García y Mardones, 2011).
La información disponible habla de números claros y
preocupantes, por lo cual a continuación ponemos a
disposición tanto de prestadores de salud como de
población en general información que puede ser de
utilidad ante las réplicas de gran magnitud o la presencia
de un nuevo sismo: Los Primeros Auxilios Psicológicos
(PAP).
Los PAP corresponden a la primera atención que reciben las personas afectadas por algún tipo de
incidente crítico como pueden ser fallecimientos, catástrofes naturales o accidentes cotidianos, entre otros,
que se aplica durante las primeras horas tras el impacto. Son de gran utilidad ante la presencia de
afectados como niños, personas de la tercera edad y sujetos en general que tengan reacciones intensas
ante estos acontecimientos.
Los PAP están diseñados para lograr tres objetivos: Reducir el nivel de estrés inicial causado por el evento
traumático; Fomentar la adaptación a corto, medio y largo plazo y Potenciar las estrategias de
afrontamiento.
Pueden ser aplicados por cualquier persona que haya sido capacitado en ello. Sin embargo, a continuación
te ofrecemos a modo de resumen información con técnicas básicas que te permitirán como prestador de
salud ayudar a otros, o en caso de ser público general, gestionar mejor tus propias reacciones.
Para una correcta aplicación de los PAP, es
necesario estar con los afectados en un lugar
idealmente amplio, cómodo, seguro, con acceso a
agua y alimentación, alejado del incidente crítico.
Sin embargo, en muchas ocasiones estas
condiciones óptimas no son posibles, por lo que
debemos intentar que sean lo más seguras y
cómodas posibles, sin posibilidad de caída de
elementos.
Una vez que tengamos un lugar apto para la
realización, podemos proceder con las fases de los
PAP:
1. Contacto y presentación: Esta fase no es necesaria si a quién prestamos PAP es alguien a quien
conocemos y que nos conoce, sin embargo, si los es al realizarlos con personas desconocidas. Aquí
debemos presentarnos amablemente, de modo no intrusivo, evitando el contacto físico, con la cara
visible, diciendo nuestro nombre y explicando que nos hemos acercado para facilitar ayuda si es que la
necesita con un tono de voz tranquilo y pesquisando si los afectados están receptivos.
2. Alivio y protección: En esta fase es esencial cubrir necesidades vitales básicas como por ejemplo
ofrecer alimentos y agua, algún medicamento de urgencia, etc. Es útil informar la ubicación de baños.
3. Contención*: Esta fase muchas veces no es necesaria, sin embargo, ante personas muy afectadas
emocionalmente si lo es. Aquí debemos realizar una contención emocional, indicando orientación
temporal y espacial con indicaciones sencillas como la hora y el día. Debemos tener información clara
respecto a lo ocurrido, por lo que también hay que evitar dar falsas esperanzas y frases hechas como
“todo va a estar bien” o “haremos todo lo que necesite”.
4. Recogida de información: En la cuarta fase es imperante preguntarles a los afectados qué información
es la que desean saber. Aquí se debe actuar con sinceridad, sin ser ofensivo, quitarle importancia al
asunto o inventar información. Se les debe hablar con respeto, reconociendo si hay información que
desconocemos y abriendo el diálogo en todo momento, para lo cual es importante preguntarles sobre la
familia, si están todos, si han sufrido otros acontecimientos vitales estresantes previamente, si algún
miembro requiere de algún medicamento especial, identificar con quién y donde están los hijos, pagar
un estacionamiento, entender lo que pasó, etc.
5. Asistencia práctica: Aquí con la información recogida anteriormente se procede a reordenar las
peticiones descritas, planificándolas en orden de alcance y realizando acciones para llevarlas a cabo.
Por ejemplo, si la persona está preocupada por contactar a los hijos, podemos facilitar algún móvil para
realizar las llamadas o utilizar mensajería instantánea. Es importante ser sinceros y siempre decir la
verdad sobre lo que podemos y no podemos hacer, si desconocemos alguna información es de suma
relevancia decirle a la persona que no sabemos pero que luego podemos solucionar sus dudas cuando
recabemos más información.
En esta fase, es esencial potenciar que los afectados sean quienes propongan la solución en función de
sus experiencias previas en situaciones similares si es el caso.
6. Conexión con la red social de apoyo: En esta fase debemos fomentar la conexión con su red social
de apoyo, para lo que resulta útil recolectar y llamar a los números de la familia, amigos y comunidades
cercana a la persona afectada si es posible, o mensajería de texto.
7. Pautas de afrontamiento: Una vez que ya hemos satisfecho las necesidades vitales e inmediatas de la
persona afectada, es importante hablar respecto a las pautas de afrontamiento que corresponde a
informar sobre las reacciones básicas de estrés (tanto físicas como psicológicas) y tiempos esperables
luego de un incidente crítico, junto con información alusiva al autocuidado y algunas técnicas de auto
relajación:
Si usted ha sufrido un incidente crítico, esta información le puede ser de utilidad.Sintomatología esperada. Pautas de autocuidado. Técnicas de relajación.
Si usted ha sufrido recientemente un incidente crítico es posible que tenga ciertas reacciones físicas, psicológicas y conductuales que le puedan parecer extrañas pero que son esperablesy normales, como:
Hiperactivación motora. Problemas con el sueño (hipersomnia o
insomnio). Disminución de la concentración. Irritabilidad, cólera. Llanto incontrolable. Eventos de reexperimentación como
sueños, visiones, recuerdos súbitos, rumiación de ideas, etc.
Conductas de evitación como sentimientos aplanados.
Dolores difusos y múltiples.
Entre otros, todos los cuales son NORMALES Y ESPERABLES luego de un
incidente crítico.
*Si advierte que pasado unos dos a tres meses luego del incidente la sintomatología no disminuye. Pida ayuda a un profesional.
Es necesario que usted mantenga ciertas pautas que permitan paulatinamente ladisminución de la sintomatología, como:
Mantenerse hidratado y alimentado. Evitar el consumo de drogas y alcohol. Mantener la higiene personal. Realizar actividad en contacto con la
naturaleza. Realizar deporte. Establecer rutinas diarias. Tener momentos de relajo y
desconexión. Tener actividades sociales, culturales y
de ocio. Tomar sol. Hacer actividades de goce. Hablar si se considera necesario.
Le puede ser de utilidad usar ciertas técnicas cuando sienta una alta ansiedad, temor o angustia, como lo son controlar la espiración, hacer actividades al aire libre, entre otras.
* Si la angustia, temor o angustia se sienten como incontrolables luego de unos minutos, es importante contactar a algún profesional.
Si existen temas de duelo, es recomendable hablar sobre las fases esperadas, comenzando con la
negación y sentimiento de irrealidad que puedan estar sintiendo en el momento, normalizando también
reacciones posteriores de ira, negación, depresión y posterior aceptación del proceso.
Si existen niños involucrados, es importante recalcar que los niños y adolescentes pasarán por etapas un
tanto diferentes a los adultos, por lo cual se les dice a los mayores que deben suministrar información clara
a los más pequeños, adecuando el lenguaje a uno que puedan entender, sin mentirles y hablando del
modo más calmado posible. Serán los padres o tutores quienes hablen con ellos. Luego de explicarles lo
sucedido, es importante dejarlos expresar sus emociones, que pueden ser demostradas como ira sin
motivo aparente, llanto, juego de accidentes, dibujos, etc. no hay que asustarse, es el modo en que los
más pequeños se expresan.
En el caso de los adolescentes quizás se muestren renuentes a hablar, sin embargo, no es recomendables
obligarles a que lo hagan o a asistir a lugares como el tanatorio u otros. Siempre hay que considerarlos a
ellos y al grupo de pares en esta etapa evolutiva y en la elaboración del duelo.
8. Conexión con servicios externos: Una vez realizado los pasos anteriores, es esencial dejar
conectados con profesiones expertos en el tema como pueden ser los médicos o psicólogos, poniendo
énfasis en contactar en caso de crisis, afectación del día a día o de que los tiempos de remisión superen
los esperados.
Una vez realizados los pasos y dejando a la persona lo más acompañada y conectada posible, podemos
decir que hemos completado los PAP.
Si bien los PAP los debe realizar alguien capacitado para ello, es posible establecer ciertos lineamientos
generales relacionados que pueden servirle a usted como público general a afrontar incidentes críticos o
catástrofe como los movimientos sísmicos:
Evite el aislamiento: Genere pequeñas redes de apoyo sociales con familiares, vecinos, amigos,
etc. Manteniendo una comunicación activa.
No reprima sus emociones: No reprima las emociones como la pena, el enojo, etc.
Concéntrese en lo importante: Un equilibrio entre emoción y pensamiento permite hacernos
funcionar debidamente, analice las necesidades y recursos disponibles, intentando priorizar en todo
momento.
Normalice reacciones: El diario vivir ante acontecimientos estresantes de alto impacto es
modificado, por lo que es normal que experimente diversas reacciones que por lo general no son
para alarmarse.
Infórmese desde fuentes oficiales: La información es un elemento esencial para la calma, sin
embargo, debe evitar exponerse a fuentes poco fiables o a la sobreexposición.
Hable con sinceridad ante los niños: No intente hacer como que nada ha pasado, hable con la
verdad, adecuando el lenguaje a algo sencillo y entendible para ellos.
Intente seguir con las rutinas: Si es posible, vuelva paulatinamente a su vida cotidiana. La sana
distracción aminora los efectos negativos luego de algún hecho traumático.
Blanca Amo Galaz.
Interna de Psicología.
Universidad Central de Chile.
Fuentes:García, F. y Rincón, P. (2011). Prevención de Sintomatología Postraumática en Mujeres con Cáncer de
Mama: Un Modelo de Intervención Narrativo. Terapia psicológica, 29(2), 175-183. Recuperado el 26 de
septiembre de 2015, desde http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-
48082011000200004&lng=es&tlng=es. 10.4067/S0718-48082011000200004.
Universidad Autónoma de Barcelona. (2015). Diplomado de Primeros Auxilios Psicológicos. España:
Barcelona.
.