Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

28
Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Nº 25 Julio-Septiembre 2001 (2ª época) Nos de Nos de Nos de Nos de Nos dej ó un amigo ó un amigo ó un amigo ó un amigo ó un amigo

description

Centre d'Estudis Interplanetaris. CEI

Transcript of Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Page 1: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 1

Papers d’OvnisPapers d’OvnisPapers d’OvnisPapers d’OvnisPapers d’Ovnis Nº 25 Julio-Septiembre 2001 (2ª época)

Nos deNos deNos deNos deNos dejjjjjó un amigoó un amigoó un amigoó un amigoó un amigo

Page 2: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

2

Papers D'ÓVNIS es una publicación del Centro de EstudiosInterplanetarios (CEI). Conserva su nombre en lengua catalana enmemoria de su creador Joan Crexell i Playà El CEI no compartenecesariamente las opiniones expresadas en estas páginas.El uso de los artículos originales aquí publicados es libre, siempreque se cite su procedencia y no tenga objetivos comerciales. PapersD'ÓVNIS está abierto a la colaboración de miembros del CEI y atodos los interesados por el Fenómeno OVNI.

PPPPPapersapersapersapersapers D'ÓVNIS D'ÓVNIS D'ÓVNIS D'ÓVNIS D'ÓVNIS

Staff:Staff:Staff:Staff:Staff: Jordi Ardanuy,Martí Flò, Josep MªOrta, Pere Redon, MªLuisa Romero, Mª.Carmen Tamayo

SUMARIOSUMARIOSUMARIOSUMARIOSUMARIOFALLECIÓ ANTONIO RIBERAPere Redon & la redacción 3UN OVNI EN NAVARRAInko Zubillaga 6UN OBJETO MUY IDENTIFICADOPere Redon 8UN ESCENÓGRAFO EN ESCENAJ. A. Cezón 9NUEVOS AVISTAMIENTOS ENLA SIERRA NORTE DE SEVILLAJosé Manuel García Bautista 13LA NOTICIA Y SU COMENTARIOLa redacción 18ALGÚN PLANETA PUEDE ESTAR HABITADOOscar Rey Brea 20OTROS PAÍSES, OTROS BOLETINESLuis R. González 25ALGUNAS NOTICIAS DE 1950Hemeroteca 26

Page 3: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 3

Nacido en Barcelona en1920 y residente en SantFeliu de Codinas desde 1970,Antoni Ribera i Jordá era hijodel escritor y lusofilo IgnasiRibera-Rovira, que en vidafue Presidente de la Asocia-ción de la Prensa de Barce-lona. Mantuvo un fuerte vín-culo con Miguel de Una-muno. También fue cónsul deRumania en Barcelona.

Ribera se formó en escue-las catalanistas tales comoBlanquerna, el Instituto Téc-nico Eulalia y en el Institu-to.-Escuela, tuvo profesorestan destacados como JaumeVicens Vives, Marçal Olivary Eduardo Valentí.

Durante la Guerra Civilfue movilizado ya que perte-necía a la «quinta del bibe-rón». Al finalizar el conflic-to, en 1939 se enfrentó conel intento de hacer desapare-cer la lengua y la cultura ca-talanas. Su medio de vida enaquellos primeros años de laposguerra fueron las traduc-ciones de textos ingleses,franceses, italianos y portu-gueses al castellano. Contes-tatario con el régimenimperante, conectó con la re-sistencia cultural y política yse convirtió en el portavoz de

El pasado domingo 23 de septiembre fallecía en Sant Feliu de Guixols nues-tro amigo y presidente de honor, Antoni Ribera i Jordà. Figura notable de lacultura catalana, intelectual insaciable, creu de Sant Jordi de la Generalitatde Cataluña en 1989, fue, por encima de todo, una buena persona. No porampliamente conocida dejaremos ahora de glosar, aunque sea de forma es-cueta, una biografía de nuestro ya eterno Antoni.

Falleció Antoni RiberaFalleció Antoni RiberaFalleció Antoni RiberaFalleció Antoni RiberaFalleció Antoni RiberaPere RedonPere RedonPere RedonPere RedonPere Redon

y la Redaccióny la Redaccióny la Redaccióny la Redaccióny la Redacción

Fotografía de 1968. Ese año Antoni Ribera fue elegido

presidente de honor del CEI.

Page 4: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

4

Agustí Bartra, que vivía exi-lado en México. Tambiénfueel corresponsal en Barce-lona de la publicacióncatalano-mexicana «LaNostra Revista», en la queescribió con el seudónimo deJoan de Malniu i Arnau deRibesalbes. Por aquel enton-ces vivía en una torremodernista situada en la ca-lle de Roca i Batlle (desapa-recida cuando se construyó elprimer cinturón). En su do-micilio se llevaron a cabomuchas reuniones clandesti-nas a las que acudían perso-nas ligadas a «Estat Catalá»(Viçens Borrell y JordiRenom, entre otros), así comotambién del «Front Nacionalde Catalunya».

En 1947 fue editor y di-rector de la revista clandesti-na cultural «Antología delFets, las idees i els Homesd’Occident», que tenía comoideal convertirse en el contra-punto de la publicaciónelitísta «Ariel» (tambiénclandestina). Consecuenciade esto Ribera fue detenido

por unos días. En 1950, conla excusa de que se publica-ba en Italia, comenzó a edi-tar la revista «Occident», dela que únicamente aparecie-ron seis números, desapare-ciendo como consecuencia dela penuria económica endé-mica en este tipo de publica-ciones.

En 1953 Ribera tradujo alespañol «The Silent World»

(«El Mundo del Silencio»)del Comandante Costeau.Consecuencia de esta expe-riencia fueron sus contactoscon los pioneros de la inmer-sión autónoma en Catalunya.Trabó amistad con EduardoAmetlla, y los hermanosVilarrúbia, fundadores delCRIS (Centro de Recupera-ción e Investigaciones Sub-marinas). Esta actividad le

Ribera en

1976, en una

aparición en el

afamado

programa La

clave de TVE.

(Imagen:

Archivo CEI).

Ribera junto a Hynek en 1984. (Imagen: Archivo CEI).

Page 5: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 5

Ribera en abril de

1997, celebrando el

40 aniversario de la

fundación del CEI,

junto a Carmen

Tamayo i Antoni

Pelegrí. (Imagen:

Archivo CEI).

llevó a escribir «Los hombrespeces» (1954), el primer li-bro que sobre este tema apa-reció en España. Poco des-pués conoció personalmentea Costeau y permaneció abordo del primer «Calipso»desde el cual aumentó susconocimientos del mundoacuático y submarino.

En 1958, junto a EduardoBuelta, Marius Lleget yAntoni Pelegrí, fundó el Cen-tro de Estudios Interpla-netarios (CEI), entidad quetras unos años de pleno fun-cionamiento entró en un pe-ríodo de inactividad, etapaque Ribera aprovecho parapublicar «El Gran Enigma delos Platillos Volantes» (1966)y otros libros del tema y deciencia-ficción. Reanudadade nuevo la acción del CEI,se convierte en su presidentede honor, participa en sus ac-tividades impartiendo unbuen número de investigacio-nes y conferencias públicas.En esa época publica «ElMisterio de UMMO» (1977),

al que seguirán otros muchosque se editan tanto en Espa-ña, como en varios países dela América del Sur y Europa.

Desde 1968 a 1971fue di-rector dela revista Horizon-te. En 1974 organiza la «Ope-ración Rapa-Nui», con la queviaja a la Isla de Pascua parainvestigar varios aspectos dela historia de ese territorioenclavado en pleno Pacífico.Allí también participa en laactividad submarina. Tras laaquella aventura escribió unlibro que llevó el título de laexpedición.

Centrado de nuevo en unode sus temas más queridos,el de los OVNIS, en 1977 in-

terviene en la organizacióndel I Congreso Nacional deUfología en Barcelona. En sufaceta como autor publica tí-tulos como «Secuestrados porExtraterrestres (1981) y mu-chos otros, de los que algu-nos se editan incluso en len-gua arabe. En esa época(1979) es introducido en laCámara los Lores británica(UFO Study Group), dondeda una conferencia.

Admirado por muchos ydenostado y envidiado porunos pocos, Ribera es consi-derado como el padre decuantos se han dedicado enEspaña a la investigación delos No Identificados.

Toda la prensa en

Cataluña publicó la

necrológica instada

por la Generalitat

de Cataluña, en su

condición de Creu

de Sant Jordi

Page 6: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

6

Un ovni en Navarra en 1998Un ovni en Navarra en 1998Un ovni en Navarra en 1998Un ovni en Navarra en 1998Un ovni en Navarra en 1998Inko ZubillagaInko ZubillagaInko ZubillagaInko ZubillagaInko Zubillaga

De entre todas publicaciones que el CEI recibe nos proponemos entresacar aquelloque nos parezca más interesante para nuestros lectores. En esta ocasión hemosrecogido del boletín MIZAR (nº 3, verano del 2000), editado por el grupo de investi-gación OVNI del mismo nombre, una encuesta titulada «¿Nodrizas» sobrevolandoNavarra?», realizada por uno de sus corresponsales, sobre un caso ocurrido en lasinmediaciones de la población navarra de Mendilibarri, en el verano de 1998.El haberlo traído a las páginas de «Papers» se debe, no sólo a la extrañeza delsuceso, sino también por el comentario inicial de los redactores de MIZAR. Delmismo modo que los hacen ellos, también nosotros queremos animar a nuestroslectores a realizar investigaciones de campo seria y ecuánime, con el fin de sacar ala luz sucesos extraños que hayan ocurrido en nuestro alrededor.

Son ya muchos los testi-monios acerca de avis-tamientos de «No identifica-dos» en la Comunidad deNavarra. Pero no por ello elfenómeno pierde interés, sinotodo lo contrario: cada testi-monio añade una nueva in-cógnita al que se ha denomi-nado como el enigma más in-quietante del siglo XX: losOVNI.

En estas páginas inclui-mos un nuevo relato con esosextraños aparatos como pro-tagonistas. El OVNI que de-bió sobrevolar la merindad deEstella hace algo más de tresaños tenía que ser necesaria-mente, según el testigo,«algo» externo a nuestro pla-neta. Y, por cierto, muy gran-de. ¿Una «nave nodriza», qui-zás...?

Un «cono de luz»

El protagonista de nuestrahistoria es José Ignacio Chas-co, vecino de Ancín, locali-dad situada a 14 km deEstella (Navarra). Nos contócomo cierta noche pudo ob-servar un enorme «cono deluz» que avanzaba haciaMendilibarri -localidad per-teneciente al municipio de

Línea

aproximada del

recorrido a

partir de la

descripción del

testigo.

N

Cartografia CEICartografia CEICartografia CEICartografia CEICartografia CEI

Escala 1:330.000

Page 7: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 7

Ancín- y se apagaba fortuita-mente, despertando su curio-sidad.

José Ignacio nos narró losdetalles de su observación.

-Aquello lo vi en el vera-no de 1998 -comienza-. Se-rían las 12 ó 1 de la noche.Recuerdo que había una fuer-te tormenta sobre la Sierra deLearza, a 5 km de Arín.

Yo me encontraba aposta-do en la trasera de un hangardel pueblo. Es un lugar librede farolas que te permite ob-servar el cielo tranquilamen-te.

En esto estaba cuando di-visé una potente y enorme luzcon forma de cono que pro-cedía de la sierra de Lóquizy se dirigía a Mendilibarriiluminando el suelo. En unprincipio pensé que se trata-ba de un helicóptero de laDiputación de Navarra, perome extrañaba que no se es-cuchara ningún tipo de ruidotípico de un helicóptero.

La luz, al llegar a

Mendilibarri, se apagó, y fueentonces cuando empecé asospechar...

-¿Cual era el color y la ve-locidad de la luz?

-La luz era de color blan-co normal, como la que pue-de proyectar una linterna delargo alcance en plena no-che, pero enorme y de «arri-ba abajo». Pude verla duran-te 10 minutos, hasta que lle-gó a Mendilibarri y se apa-gó.

-Por lo tanto iba muy des-pacio...

-Sí, porque la distancia dela sierra de Lóquiz a Mendi-libarri es muy poca (véase es-quema). Aquella luz debíaproceder de un punto en elcielo, pero no se apreciabadonde, debido a la oscuridad.

-¿Dices que no se escucha-ba ruido alguno?

-Eso es. A la luz no leacompañaba ningún tipo desonido, y el entorno estabamuy silencioso, a excepciónde los truenos procedentes de

la tormenta sobre la sierra.Tras apagarse, supuse quecontinuaría su camino en lí-nea recta, así que fijé la mi-rada en la sierra de Learza,donde se estaba desarrollan-do la tormenta (véase esque-ma). La sierra se iluminabacada pocos segundos debidoa los relámpagos. Sin embar-go, uno de los fogonazos,curiosamente más largo quelos demás, me permitió ver-lo.

Aquel disco se encontra-ba estático unos cuantos me-tros sobre la sierra, entreOlejua, uno de los pueblos depor allí, y el castillo deMonjardín. Era gigantesco.En un par de segundos queduró el relámpago, hice unanálisis comparativo entre eldisco y las luces del pueblode Olejua, y concluí queaquel aparato era bastantemayor que dicha localidad.

- ¿Como era aquel apara-to?

- Negro por completo e,

1. ANCÍN. Lugar de observación.2. MENDILIBARRI.3. Carretera general a Vitoria.4. Sierra de LÓQUIZ.5. Primer avistamiento.6. OLEJUA.7. Sierra de LEARZA.8. Castillo de MONJARDÍN.9. Segundo avistamiento.

Esquema original de Inko Zubillaga

Page 8: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

8

incluso, insisto, enorme. Laforma era circular, como dosplatos soperos puestos unoencima de otro, y se aprecia-ba una cúpula sobre él. Trasel relámpago, continué mi-rando, pero no lo volvía ver.

- ¿Sentiste miedo en aquelmomento¿

- Para nada. Unidamenteme encontraba totalmentesorprendido.

- ¿Se produjo algún fenó-meno inusual esa noche, trasel avistamiento?

- No, ninguno. Todo con-

tinuó en calma, ¡ como sinada hubiese pasado!

- ¿Crees que ese aparatopodía proceder a este mismoplaneta?

- No, en absoluto. Creoque estos artefactos nos lle-van miles de años de ventajay que, por lo tanto, no son dela Tierra.

Cuando se le cuestionó aJosé Ignacio la posibilidad deque hubiera más testigos, nosindicó que un conocido suyohabía observado posterior-mente el enorme cono de luz

y que al comentarlo en unareunión de amigos había sidoobjeto de chanzas, por lo queno quería saber nada más deltema. José Ignacio se negó adarnos el nombre de ese otrotestigo, para no traicionar suconfianza.

Asimismo, José Ignacio,que en ningún momento qui-so ser fotografiado, afirmabaque el «OVNI luminoso» seha dejado ver en diversas oca-siones por la comarca y quela gente no se atreve a hablardel tema.

UN OBJETO MUY IDENTIFICADOUN OBJETO MUY IDENTIFICADOUN OBJETO MUY IDENTIFICADOUN OBJETO MUY IDENTIFICADOUN OBJETO MUY IDENTIFICADO

Pere RedonPere RedonPere RedonPere RedonPere Redon

Las revistas comerciales, conese amplío y superficial criterioque las caracteriza, dan cabida ensus páginas a todo cuanto llega asus redacciones. En la actualidadtodos los medios de comunica-ción bien sean escritos, habladosy televisados, tienden a dar la pa-labra a cuantos lo solicitan, sien-do este el motivo de que enmuchisimas ocasiones leemos,oímos y vemos verdaderas bar-baridades. El espíritu crítico sen-cillamente no existe, y si alguienlo tiene lo sacrifica en aras al sen-sacionalismo o sencillamente afin de dar entrada a cualquier opi-nión. Y si no, que el lector juz-gue lo que dice el comunicantede la revista «Mas Allá», Octu-bre 1999.

OVNIS EN CEUTA

Quiero informarles de un ex-traño avistamiento ocurrido eldía 3 de junio de 1999, a las12.05 horas.

Me encontraba en la calleMarina Española, de Ceuta, queda directamente al Estrecho deGibraltar. Sobre la costa volabandos reactores y me detuve a ob-servarlos. Acaban de desapare-

cer los cazas cuando reparé enotro avión, mucho más grande,a reacción, tipo Jumbo, que vo-laba relativamente bajo. con tra-yectoria rectilínea, rumbo Oes-te-Este, a velocidad muy inferiora la de los pequeños reactoresdel Ejército. Lo sorprendente esque ese enorme avión ibaflanqueado por cuatro objetoscirculares y planos, en formaciónsimétrica triangular (dos objetosa cada lado).

Un día se me ocurrió filmarel planeta Venus con una cáma-ra de video de 220 aumentos, conel zoom casi al máximo, y el efec-to que obtuve fue casi igual aldel famoso «ovni» en forma degalleta emitido por televisión.

Sin otro particular e invitán-dola a que visite nuestra ciudadpara hacerle de cicerone, le sa-luda atentamente. Fdo: Emilio V.Pomares Martínez, CEUTA.

LA INTERPRETACIÓN

Lo observado por el vecinode Ceuta fue sencillamente laoperación de reabastecimiento envuelo de cuatro aviones de com-bate desde un avión cisterna.

Apuntaremos que el Estrecho

de Gibraltar está consideradocomo aguas internacionales, lomismo que ocurre con el espacioaéreo que se halla sobre él. Enesa superficie y espacio todos lospaíses tiene derechos de paso sintener que notificarlo a los reinoslimítrofes (España y Marruecos).Por ello no es de extrañar quecualquier marina o aviación mi-litar puedan evolucionar siempreque su actitud no sea hostil.

Estamos convencidos que loque vio el observador fue unavión cisterna norteamericanoKC-10 Extender o KC-135 (am-bos fabricados por Lockheed) enactitud de repostar a aviones decombate norteamericanos que vo-laban «de una tirada» desde losEstados Unidos o desde la GranBretaña hacia bases en ArabiaSaudita (o hasta cualquiera de lospaíses amigos del Golfo deOman). En el caso de un KC-135, esta avión cisterna puede re-abastecer a cuatro aviones decombate a la vez, gracias a lossistemas de «manguera y cesta»de que son portadores.

La maniobra es muy habitualy ni mucho menos excepcional,y menos en horas diurnas.

Page 9: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 9

Una vez más hemos acudido a nuestro notable archivo para entresacar algún casoque por su importancia, curiosidad o por el relieve de los testigos, pueda ser deinterés recordar.Traemos a estas páginas un suceso, muy simple por cierto, que tras dormir en lamemoria de un de los testigos durante bastantes años, surgió a la luz pública amodo de editorial de uno de los diarios más conservadores de Madrid, el «ABC»(26.10.97). El testigo, un miembro de la Real Academia de la Lengua, personaje deprestigio entre los intelectuales de nuestro país, no tuvo el menor reparo de contar,con diez años de retraso, lo que vio un día de finales de finales de los años setenta.A raíz de su publicación, un investigador madrileño, J. A. Cezón, viejo conocido delCEI, tomó los escasos datos que se daban a conocer y puso fecha al suceso, aña-diendo que otras personas pudieron apreciar la presencia de aquella extraña luzque todos situaron sobre el extrarradio de Madrid.En resumen, lo que hace curioso el avistamiento es, primero que el asunto constitu-yera a pesar de la lejanía del suceso, un editorial del diario «ABC». También lapersonalidad del/los testigos y la circunstancia de que tras un minucioso rastreo yunas lógicas conclusiones un investigador pudiera darle «oficialidad» al caso.Esperamos que lo que sigue sea del interés del lector.

era bien raro». En consecuen-cia su acompañante y conduc-tor, el poeta Francisco Brines,detiene el automóvil en queestaban atravesando el parquede El retiro de Madrid y per-manecen observando el fenó-meno durante 20 minutos, du-rante los cuales la luz realizaun rápido zigzagueo, que alescritor le parece que «Ni elavión más potente hubierapodido desplazarse con tantavelocidad». Sin embargo am-bos observadores convienenen que «tenían que demostrár-selo mejor» y en consecuen-cia siguen su camino satisfe-

chos de su «sereno juicio»...Al parecer la observación hatenido la utilidad de justifi-car un artículo diecisiete añosdespués. ¡Menos da una pie-dra! Además yo creo que sir-ve para mostrar que enCastilla siempre ha habidoabundancia de Sancho Pan-zas y escasez de Quijotes.Recordemos el lemanoventaiochista ¡Que inven-tes ellos! o mejor ¡Que inves-tiguen ellos!

El resto del artículo estalleno de juicios de valor enlos que, como digo arriba, noquiero entrar ni salir, así pues

Un escenógrafo en escenaUn escenógrafo en escenaUn escenógrafo en escenaUn escenógrafo en escenaUn escenógrafo en escena

El domingo 26 de octubrede 1997, el diario «ABC» pu-blicó un editorial titulado«OVNIS», firmado por Fran-cisco Nieva, de la Real Aca-demia Española y cuyo con-tenido adjunto. Por tal moti-vo no voy a comentar en de-talle el contenido del artícu-lo, del que cada uno puedesacar sus propias impresio-nes; voy a limitarme a seña-lar que el mencionado artí-culo consta de dos partes: laprimera refiere una observa-ción que el autor describecomo «...una extraña y poten-te luz...» y añade que «Todo

J. A. CezónJ. A. CezónJ. A. CezónJ. A. CezónJ. A. Cezón

Page 10: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

10

Consultado el FAECOM,elaborado, entre otros, por miamigo José Juan Montejo,compruebo que la abundan-cia de casos registrados enMadrid por el mencionadoCatálogo, aumenta considera-blemente a partir de 1978 yrecupera los bajos valores en1982, lo que resumo en la ta-bla siguiente:

1970 ..... 21971 ..... 01972 ..... 01973 ..... 11974 ..... 21975 ..... 11976 ..... 01977 ..... 31978 ..... 91979 .....151980 .....121981 .....101982 ..... 21983 ..... 11984 ..... 1

Esto coincide con la men-ción por parte del testigo de«...que la gente había visto

nos encontramos con una fi-cha que incluye los datos re-flejados en el siguiente cua-dro.

Fecha: próxima a un ve-rano de finales de los añossetenta.Lugar: Parque de El Reti-ro de Madrid.Orientación: Este (barriode Moratalaz).Objeto: luz muy potente.Distancia: lejana (Mora-talaz dista unos 25, km dellugar, que podemos iden-tificar como la Rosaledadel citado parque).Número de testigos: dosseguros y uno probable(taxista).Duración: veinte minutos.Movimientos extraños: si

también habrían percibido elhaz luminoso emitido (ver«Contactos Extraterrestres»,nº 6, páginas 208-209).2.- Sólo he considerado loscasos fechados entre mayo yoctubre incluidos, por consi-derar que sólo estos mesespueden considerarse, en Ma-drid, próximos al verano.

Resumiendo, el caso rela-cionado en primer lugar pa-rece adaptarse por completoal relato de los testigos,avalando en consecuencia leveracidad de su relato.

Para terminar diré algo delos testigos. Francisco Nievaes natural de Valdepeñas(¿percibo comentarios mali-ciosos?) y tenía en el año1978 cincuenta y un años.Autor teatral vanguardistacuyo teatro ha sido clasifica-do en tres apartados: furioso,de farsa y de calamidad. Vol-vió a España en los 60 y tra-bajó como escenógrafo deexcepcional calidad hasta1975, año en que estrenó,desde entonces sus méritoshan sido reconocidos con lospremios «Mayte» (1977), y«Nacional de Teatro» (1979),siendo nombrado académicode la Real Academia Españo-la en 1986. Su obra ha sidopublicada en 1991 y aún con-tinúa enriqueciéndose.

Francisco Brines nació enOliva (Valencia) en 1932, yha recibido los premios«Adonáis» y de la «Critica».Su obra publicada en 1984,analiza en profundidad laproblemática del hombre.

Ambos testigos son pues,de la máxima seriedad y es-tabilidad emocional.

En las dos páginas si-guientes reproducimos la edi-torial del ABC «OVNIS» deFrancisco Nieva de la RealAcademia Española de laLengua.

aparecer varios OVNI».Aunque no tengo la fechadel cierre al tráfico motori-zado del parque de El Reti-ro, dispuesto por el alcaldeTierno Galván, nombradoen abril de 1979, dispongode una guia de 1984, en laque se indica como posibleel trayecto efectuado pornuestros testigos, entre laspuertas del Angel Caido yde Granada o para quien noconozca dicho parque, des-de la Cuesta de ClaudioMoyano hasta la avenida deMenéndez Pelayo. En dichoaño ya se había cerrado elotro acceso del parque, porla puerta de Madrid y elpopular Paseo de Coches odel Duque de Fernán Núñez.

En consecuencia el suce-so quedaría limitado entrelos años 78 y 81, pero el tes-tigo data explícitamente los«finales de los 70», por loque podríamos suprimir el81, al menos.

Veamos ahora que casosnos encajan en la somera eincompleta descripción, te-niendo en cuenta que debe-rían ocurrir en fechas::«...próximas al verano» y aprimera hora de la noche:

1.- El domingo 25 de ju-nio de 1978, a las 11 de lanoche, se produjo, según eldiario «Pueblo», unavistamiento sobre Vallecas-Moratalaz.

2.- La noche del sábado10 de mayo de 1980 tambiénparece que hubo algo segúnel nº 13 de la revista «Con-tactos Extraterrestres».

Notas

1.- Desecho el caso de laavenida Aster, a las 04,00 deun día de mayo de 1979 porestar situado al NE de lostestigos, que los habrían vis-to en dirección Ventas y que

Page 11: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 11

O V N I S

Como trato de privarmede nada, yo también he vistoun OVNI o algo que se po-dría tomar por tal. Pero nocreo en los OVNIS y piensoque son uno de los sueños del«siglo», como lo fue el espi-ritismo en el siglo anterior,una general sugestión alenta-da por las novelas fantásticasy las revistas pseudo-cientí-ficas, que ni siquiera estasúltimas afirman concluyen-temente que los haya, sinoque presentan individualestestimonios de unos y otros,cosas tan imprecisas como lamía.

Hace ya muchos años,creo que a finales de los se-tenta, muy próximo al vera-no, se dijo en Madrid que lagente había visto aparecervarios OVNIS, salió en losperiódicos. El mismo día enque aparecieron esas noticias,por la noche, ibamos el poe-ta Francisco Brines y yo enun taxi, en dirección a Ato-cha, donde Paco había deja-do aparcado su coche, y eltaxista no hacía más que sa-car la cabeza por la ventani-lla, mirando el cielo, con loque estuvimos a punto dematarnos. -»Pero hombre,tenga usted cuidado» -»SonOVNIS. Loa ha visto mi cu-ñada, los he visto yo. Por dosveces». -»Ya. A la tercera nospodemos romper la cabeza.Conduzca usted como es de-bido».

Llegamos al aparcamien-to de Paco, tomamos su co-che en dirección a la avenidade Nazaret, donde estaba miestudio, atravesando el Reti-ro, que entonces podía hacer-se... Antes de salir del par-que, muy cerca de la últimapuerta que da salida a la ave-nida Menéndez y Pelayo, enun altozano, vimos una extra-

ña y potente luz por la partedel barrio de Moratalaz. Todoera bien raro. Paramos el co-che y nos quedamos miran-do. Era una luz potente perolejana. La vimos gravitandodurante un tiempo y, luego,se desplazó rápidamente -muchos kilómetros- hacia laderecha, pasado un breve ratootra vez a la izquierda y, alinstante, un poco más arriba.Ni el avión más potente hu-biera podido desplazarse contanta velocidad. ¿Que podíaser aquello? Un globo sondano se desplaza así. «¿Seráesto lo que la gente toma porun OVNI?», dije yo. -»Ve tu

a saber», contestó Paco, «es-tamos viendo lo que vemos,pero nos lo tendrían que po-ner más claro». Hicimos cien-tos de conjeturas y nos can-samos de ver lo mismo du-rante casi veinte minutos.Pasaron otros coches pero nose detenían y nosotros nadahicimos por llamarles la aten-ción. Cualquier mente exal-tada, por condicionamientoexterno, hubiera dictaminadoenseguida que era un OVNI,pudiéramos haberlo dicho no-sotros, pero es curioso que lospoetas sean materialistas res-pecto a todo menos a su in-terna condición de poetas,

Page 12: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

12

sobre todo si éstos son bue-nos y primerísimos, como era-y es- mi acompañante. Pacodijo: «Tenían demostrármelomejor» y llevaba más razónque un santo.. Adopté su se-reno juicio y nunca he visto,después de diecisiete años,que nadie haya demostradomejor la existencia de quesean OVNIS, tripulados porextraterrestres, esas luces oelementos desconocidos quese ven en los cielos.

¿Extraterrestres? ¿Señalesde otros mundos? ¡Por favor!Se desvalorizan por eso losgrandes adelantos, que hacenposible inspeccionar la super-ficie del planeta Marte«táctilmente», pues nuestrodedo cibernético tantea sucorteza y se halla en disposi-ción de analizarla. Una ma-yoría de seres fantasean y unaminoría, altamente cualifica-da, experimenta con la com-posición del cosmos, un au-téntico milagro humano.

Poner un pie en Marte nisiquiera está descartado, in-cluso tratar de producir unaatmósfera, llevar la vida allí.No es poco milagro que secomprueba, que se puedeexplicar perfectamente aquienes tengan suficiente ca-pacidad para ello. Nos fia-mos, al menos estamos segu-ros de una osa.

De lo que no estamos se-guros es de que, después detreinta años o poco menos -!treinta años¡- que se vienen«observando» platillos volan-tes, nada se ha podido avan-zar en la definición de cómosean estos en verdad. Unoslos ven de un modo y otrosde forma diferente. Demasia-do prólogo para anunciarsehan empleado los extrate-rrestres y, al parecer, si nosobservan, no tienen el menordeseo de desembarcar.

Ninguna época se libra de

delirios y supersticiones, yasean las brujas, los dragones,los espirítus... Con lo mila-groso y estupefaciente que esel mundo, aún se quiere irmás allá. Parece ser que lagente persigue el extraña-miento y el terror. sacerdotesde lo increible se levantan portodas partes, como por todaspartes se levantan gentes quequieren llamar la atención.«He visto un OVNI, he vistoa la Virgen, he visto... lo queno se puede nombrar». Detrásde todo esto puede existir, in-cluso, un buen negocio. ¿Nogozan ahora de una posiciónexcepcional en América, confincas y ranchos en plena ex-plotación, algunos «expertos»en OVNIS, que se han hechode oro contando patrañas conla seriedad y la eficacia téc-nica de un Hugo G. Wells?También podría haber pecesmenores por el mismo estiloen España. Y no quisiera se-ñalar.

El suelo «técnicos» de losOVNI es parejo al sueñoespiritísta del siglo románti-co, que tanto embargo al gi-gantesco Victor Hugo y almatrimonio de poetas inglésBarret-Browning. Estos últi-mos se pasaron casi la mitadde su vida citando a los espí-ritus de Shakespeare o deMilton a tomar el té... En al-gún sentido, dichosos los quecreen en cosas así, que le aña-den «salpichirri» a la vida.,que la novelizan, que la sus-penden de lo inefable. Nues-tro tiempo ha hecho nacer unmito científico, ha promovi-do la fantasía científica consu específica mitología demarcianos y de extraterretres,incluso ha intentado compo-ner y modelarles un tipo. Porcierto, un mal tipo, bastanterepulsivo, cabezón, de brazosmuy largos y dedos como tri-pas colgantes. Los humanos,

aún supuestamente invadidospor otros seres, conservamosun gran sentido de superiori-dad y no concebimos a unaextraterrestre con el tipo deNaomi Campbell, ni a un va-rón de aquella misma espe-cie con el apolinismo tunan-te de Brad Pitt. Nada de esonosotros somos los guapos yellos los listos y los malos.Algunas veces no, ellos «tam-bién» son listos y buenos,pero feos. Yo diría que feos arabiar.

La noche, como gran en-cubridora de misterios, hacemuy propicia la llegada deOVNIS, le confiere muchoénfasis a tal revelación y, ami, de veras me gustaría mu-chísimo ir por el campo alatardecer y encontrarme a unOVNI posándose en el sue-lo, con un extraterrestreenmarcado por la puerta desalida -como ese caballero ensombra de «Las meninas»-haciéndome señas de «paseusted y visite nuestra nave».

La creencia ha incubado amuchos fanáticos y no falta-rá quien exclame: «¡Cuántose engaña este hombre, conlas infinitas pruebas existen-tes de que los OVNIS son unhecho! Constan tales hechosen los archivos de la NASA,en los archivos aeronáuticosdel ejército, se mantienen se-cretos por razones tácticas ypolíticas». Ellos no lo puedenexcusar y no sólo creen conla fe del carbonero de la cien-cia, sino que ellos mismos«posan» de científicos, capa-ces de burlarse de los inca-paces que no creen en plati-llos volantes ni en nada quelo valga. El absurdo y la irra-cionalidad dominan nuestravida, no lo,podemos evitar.

J. A. Cezón, Yunquera deHenares, diciembre de1997.

Page 13: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 13

EncuentrEncuentrEncuentrEncuentrEncuentros en la noche con misteriosos objetosos en la noche con misteriosos objetosos en la noche con misteriosos objetosos en la noche con misteriosos objetosos en la noche con misteriosos objetos

El boletín de la Asociación Galileo-Einstein, en su edición número 7 (año 2000),publica un interesante trabajo debido a un joven investigador sevillano, quien conuna pulcritud desacostumbrada investigó un caso protagonizado por unos militaresdel Ejército del Aire que tuvieron la fortuna de tener un encuentro con un OVNI enenero del año 2000. La forma de trabajar y exponer el resultado de su investigaciónno nos ha pasado desapercibida dada sus reflexiones iniciales y sus conclusionesfinales. Desde aquí queremos dar soporte a su trabajo y animarlo a seguir en esalínea.

NUEVOS ANUEVOS ANUEVOS ANUEVOS ANUEVOS AVISTVISTVISTVISTVISTAMIENTOSAMIENTOSAMIENTOSAMIENTOSAMIENTOSEN LEN LEN LEN LEN LA SIERRA NORTE DE SEVILLA SIERRA NORTE DE SEVILLA SIERRA NORTE DE SEVILLA SIERRA NORTE DE SEVILLA SIERRA NORTE DE SEVILLAAAAA

José Manuel García BautistaJosé Manuel García BautistaJosé Manuel García BautistaJosé Manuel García BautistaJosé Manuel García Bautista

El fenómeno OVNI es porsu complejidad y extrañezamucho más que la pura inves-tigación de campo de deter-minados encuentros yavistamientos de testigos conmisteriosas luces y formasque rasgan los esquemasmentales de los mismos. Elfactor testigo debe de ser ri-gurosamente estudiado y ana-lizado ya que de la informa-ción obtenida a través de élse sentarán las bases de unainvestigación más rigurosa yal detalle. Los testigos -parala correcta investigación- de-ben de tener una credibilidadabsoluta y un grado de vera-cidad sin parangón... de locontrario nos enfrentariamosa una investigación confisuras y de dificil credibili-dad. Y repito la palabra CRE-DIBILIDAD ya que si se ca-rece de ella puede que nos en-frentemos a nuevos casos defraudes, a la caza de la fama,del dinero y -¿por que no?-del investigador.

Aún son muchos los queopinan que nos es tan impor-

tante analizar el factor testi-go ya que este es totalmentesubjetivo y está sujeto a múl-tiples factores externos e in-ternos que pueden distorsio-nar lo que perciben sus sen-tidos y ésta afirmación es to-talmente cierta pero se olvi-da de afirmar que, pese atodo, se debe «interrogar» alos testigos de un caso OVNIpara descartar esas posiblesanomalías que afectan a sussentidos y alteran su percep-ción.

Ninguna investigaciónque se precie de serlo lo essin analizar concienzudamen-te esta apartado en cuestión.¿De qué forma si no íbamosa conocer el grado de veraci-dad y verosimilitud que tie-ne un testigo y su testimoniosi no conocemos a éste? Elfactor testigo se ve alteradopor múltiples distorsionesque alteran el testimonio delmismo como bien lo pudie-ran ser:

- El consumo de alcohol, dro-gas o medicamentos con efec-

tos secundarios y que afectana los sentidos del sujeto.- Las fuertes tensiones emo-cionales y físicas.- El cansancio.- Alteraciones físicas o men-tales.- La subjetividad extrema.- La excesiva credulidad.- El ánimo de lucro o ansiasde protagonismo.- Situación familiar desequi-librada.- Falta de conocimiento sobreuna determinada materia queinduce a creer, a ciencia cier-ta, las teorías carentes de fun-damento para su observación.- Exageración de unos acon-tecimientos.- Errores visuales o per-ceptivos.- Especial motivación o men-talización para inducir alerror sobre un determinadosuceso.- Hablar de oidas introducién-dose en la historia de unavistamiento como su pro-tagonísta real.- Falta deinformación ade-cuada sobre determinados

Page 14: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

14

fenómenos en nuestra cúpu-la terrestre.- Desconocimiento del testi-go -y de la sociedad- de prue-bas con prototipos aéreos mi-litares. como los habitual-mente realizados en la basenorteamericana de Rota(Cádiz), Morón de la Fron-tera (Sevilla) y sus cernanías.

- .../...Serian algunas de esas ra-

zones por las que se debe con-trastar debidamente la infor-mación que se recibe del tes-tigo e incluso profundizar, enla medida de lo posible, enla psicología del mismo paraasí crear un perfil completodel sujeto.

Una investigación OVNIo sobre un determinado fenó-meno paranormal no se rea-liza en unas pocas horas o enunos días, una correcta inves-tigación es aquella que nospuede llevar semanas o me-ses de investigación y anali-zando todos los factores y cir-cunstancias -por muy remo-tas que parezcan algunas- quepueden afectar al observadory a su testimonio. Unacontrastación de cartas celes-tes, informes meteorológicos,astrnñomicos, aéreos, experi-mentales e incluso -si la cir-cunstancia lo exigiera- médi-co del testigo. Posteriormen-te vendrá el analizar posiblessimilitudes con otros casos yal final, sólo al final y trashaberlo analizado TODOconvenientemente, podremosdivagar sobre una posibleconclusión del caso. Comohemos podido comprobar, lainvestigación al testigo es unapieza muy importante encualquier investigaciónOVNI y paranormal. Por su-puesto el aporte de documen-tación y material fotográficoapoya tremendamente el tra-bajo de cualquier investiga-dor pero en éste terreno de las

pruebas argumentales no de-bemos olvidar que el fraudeestá presente en un porcen-taje muy elevado.

La correcta investigaciónes aquella que combina per-fectamente y en su justa me-dida la denominada Investi-gación de Campo con la In-vestigación Documental.Aquella investigación que sepresenta desequilibrada ha-cia alguno de estos dos ladospodría -y de hecho lo es/son-ser tildada de incompleta.parcialista o incorrecta.

EL CASO

En la madrugada (02,20min.) del día 22 de Enero (Sá-bado) del año 2000, dos mi-litares de graduación que sedirigían hacia Sevilla por lacarretera que une la localidadsevillana de Las Navasde laConcepción y La Puebla delos Infantes (en dirección aSevilla, a 93 km, y a pocoskilómetros dela unión conPeñaflor, en la carretera C-432) pudieron ver como a suinquierda (en sentido de lamarcha y en las proximida-des del Embalse de ElRetortillo habúa una luz deunos 120 metros y de aspec-to oval con una tenue luz en-tre el rojizo y el anaranjado.«La luz se hallaba suspendi-da en la nada, sencillamentese encontraba flotando en elaire de forma estática, perma-nente... Le pregunté a Miguelsobre que podía ser aquellaextraña luz a lo que no pudoresponderme, la imposibili-dad de equipos de construc-ción o vuelos constituía unacerteza además estaríamosinformados sobre los mis-mos... Aquello era muy ex-traño. Conforme avanzába-mos hacia La Puebla de losInfantes la luz se seguía man-teniendo estática, no había

señal de movimiento... Mi-guel me indicó que iba a de-tener el vehículo en el primersitio en el que pudiera hacer-lo y más adelante paró el co-che en un rellano en el queno entorpecía a otros vehícu-los (aunque la carretera a esashoras suele tener una circu-lación casi nula aparte de serbastante peligrosa e incómo-da de transitar por ella). Nosbajamos del coche y sacamoslos prismáticos del Migueldel maletero y nos pusimos aobservar la misteriosa luz. Enprincipio debo decirte queaquello era de lo más extra-ño que jamás he observado,carecía de marcas o señalesde las toberas de propulsióndel aparato, no había señal dechorro y existía un total si-lencio en el entorno. Las lu-ces estaban como dispuestasen una red de enlaces a tra-vés del fuselaje de la naveque era una especie de hue-vo aplanado, todas parecíanparpadear al unísono y cam-biando de tonalidad. Aquellopuedo decirtee con total se-guridad que no se trataba deninguno de nuestros aparatos,globos meteorológicoso ex-plicaciones por el estilo. JoséManuel, no te estoy diciendoque fuera una nave extrate-rrestre, Dios me libre, con sushombrecitos verdes dentro,sería ridículo, sólo te estoydicendo que aquello no eranada identificable con lo quehabitualmente trabajamos ysabes que conocemos perfec-tamente lo que hay por nues-tros cielos mejor que nadie...Chico, encasillalo en OVNIsi quieres pero en OVNI aten-diendo a lo que nos has ma-chacado durante nuestro re-corrido por el lugar -se refe-ría a Objsto Volador No Iden-tificado atendiendo a laliteralidad de esta denomina-ción, es decir, TODO lo que

Page 15: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 15

vemos y no sabemos lo quees, atrás quedaron explicacio-nes extraterrestres, noextraterrestres y demás conpoca base o fundamento porel momento-, no sería ni yoni Paco los que te dijéramosque aquello era una nave in-teligente tripulada por civili-zaciones estelares. Si te valenuestra opinión sólopodemosdecirte que en másde 25 años de servicio en elEjército del Aire jamás había-mos visto o sido testigos di-rectos de nada igual, historiasnos han contado muchas perojamás habiamos visto nadaigual».

Hasta aquí la opinión deuno de nuestros dos testigos,

su testimonio es refrendadopor su compañero, ¿qué de-cir ante esto? El grado de se-guridad y veracidad de lostestigos es ABSOLUTA. Sudisposición a colaborar coneste investigador de loufológico y paranormal fue yes absoluta.. Se realizarondiferentes entrevistas y entodas hubo una igualdad tre-menda... Su testimonio -sim-plemente- no tenía fisuras ypara mi es totalmente veraz,¿para que se iba a inventar,deformar, distorsionar o exa-gerar un militar unahistoriaasi en los niveles en que semueve? Nuestro testigo tie-ne un grado de equilibrio fí-sico y mental sencillamenmte

envidiable. No existían fac-tores que alteraran su percep-ción como lo sería el caso deconsumo de alcohol o medi-camentos. Pese a la hora, am-bos estaban lo suficientemen-te descansados como paradescartar la posible causa desu avistamiento aachacándolaal cansancio. Sin tensionesemocionales, ni presiones,conocedores perfectos de loque hay en nuestros cielos,sin motivaciones de dineo opublicidfad gratuita, sin po-sibilidad de errorperceptivo... sencillamentedos profesionales ampliosconocedores de nuestro cieloque tuvieron la posibilidad deobservar tranquila y detalla-

NC

art

og

rafi

a C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Escala 1:360.000

Page 16: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

16

damente una misteriosa for-ma oval de unos 120 metrosa la que envolvía una piel depequeños puntos luminosos(rojizos-anaranjados), quecarecian de marcas o señalesexternas de propulsión y queparecía suspendida en el airea unos 150metros de la super-ficie acuosa del Embalse deEl Retortillo en plena SierraNorte sevillana a unos 90 ki-lómetros largos de la capiotalhispalense.

El Instituto Nacioanal deMeteorología nos facilitóp elparte meteorológico del día yde la zona: noche fria (6ºC a2ºC) y despejada, sin preci-pitaciones, rachas de vientomoderadas y estabilidad ge-neral con posibles precipita-ciones en cotas altas. Visibi-lidad buena. No se mencio-nan fenómenos meteorológi-cos de relevancia o de tan sin-gular fenomenología.

El Instituto Nacional deTecnica Aerosespacial no rea-lizó experiencias en la zonay fuentes bien informadas nosratifican la misma informa-ción por un segundo conduc-to.

El Control de Vuelos deSevilla confirma la no presen-cia de tráfico aéreo en lazona, y menos aún a esa altu-ra y a esa hora. El Aeropuer-to de Sevilla cierra a media-noche, muy pocos vuelos seregistran pasada esa hora.

En helipuertos cercanosnos ratifican la no presenciade aparatos en la zona.

Según boletines de infor-mación de la NASA no huboreentrada de chatarra espacialvisible en nuestras latitudes...

El Ejército no realizó ex-periencias de vuelo nocturnoo «a ciegas» en la zona.

El Observatorio Astronó-mico de Sevilla no destacanada de especial relevanciaen nuestra cúpula celeste esa

noche que se ajuste a los cá-nones descritos por nuestrostestigos.

¿Qué era entonces lo vis-to por nuestros dos testigosen la noche del sábado 22 deenero del 2000 sobre las 2,20de la madrugada. en el entor-no del Embalse de ElRetortillo. Atendiendo a supropia definición: un OVNI.

La zona de la Sierra Nor-te sevillana está destacandoen estos últimos años por laalta casuística en aparicionesde misteriosas luces y obje-tos luminosos en sus cielos yen torno a la vasta extensiónde agua que conforma la zonade El retortillo, entre las lo-calidades de Las navas de laConcepción y San Calixto.No son pocos losavistamientos vistos desde lacarretera de El Cerro del Hie-rro, Constantina, Lora del Rioo las anteriormente citadaslocalidades. Recientementese produjo otro nuevoavistamiento en la mismazona con las siguientes carac-terísticas:

El día 12 de febrero del2000 se pudo observbar en laSierra Norte de Sevilla un

curioso artefacto romboidalen el que se distinguían 4fuertes focos de luz anaran-jada en cuatro teóricos vérti-ces. Volaba silencioso y amuy bajita altura -cifrada enunos 300 metros de altura-.La nave u objeto tenía unalongitud aproximada dd 30metros y se pudo observarsobre las 23,40 hasta las23,55 horas en el denomina-do CERRO DEL HIERROque une la localidad sevilla-na de Constantina con la tam-bién sevillana de Las Navasde la Concepción. Nuestrotestigo circulaba por la malacarretera que une estas doslocalidades y cuando llevabatransitados unos 6 kilómetrosfue sorprendido por esa for-ma aérea cuyos potentes fo-cos dejaron atónito a PepeAlvarez (el testigo que circu-laba con su 4L -Renault, elfamoso cuatro latas).En unasprimeras gestiones relámpa-go decir que no hubo vuelosen esa zona y mucho menos aesa altura ya que la topogra-fía del lugar es tremendamen-te irregular y es temerariointentar un vuelo a esa altu-ra. El tiempo fue bueno, con

N

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Ca

rto

gra

fia

C

EI

Escala 1:300.000

Page 17: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 17

bastante frio (entre 3º y 5ºC)y excelente visibilidad. Lanave u objeto seguía rumboNorte-Este y se dirigía al fa-moso -ufológicamente ha-blando- EMBALSE DE ELRETORTILLO. Otros testi-gos del pueblo dicen habervisto luces en la noche y a esahora, posiblemente se tratedel mismo avistamiento.Como observación decir queeste investigador estaba «insitu» en el pueblo (Cons-tantina debido a problemasfamiliares) y sólo vio una luzlejana ya que fue avisadocuando el fenómeno estabapasando. No se produjeronfenómenenos celestes de im-portancia o que se prestarana la confusión.

OTROSAVISTAMIENTOS

Con anterioridad tambiénse registraron numerososavistamientos como -en unabreve cronología- los siguien-tes:

1. Agosto de 1998. SanNiciolás del Puerto en las fa-mosas riberas de la SierraNorte: sobre las 02,15 horasde la madrugada. Cuatro tes-tigos, amigos y estudiantesdel último curso de la Facul-tad de Físicas (2), Derecho eIngeniería. Objeto observado:esfera luminosa describiendoextraños ángulos en el cielonocturno sevillano.

2. El 12 de junio de 1999,Joaquín Díaz circulaba por lacarretera local que une la lo-calidad sevillana de Las Na-vas de la Concepción con LaPuebla de los Infantes, era yade noche -sobre las 22,40horas- e iba de camino a sucasa tras visitar a unos fami-liares en la primera deellas.La carretera es muy tortuosay dificil y con la noche caidaD. Joaquín decidió reducir y

circular a una velocidad mo-derada.. Cuando llevaba unosquince minutos de conduc-ción nuestro testigo se viósorprendido por algo que lodejó perplejo: «Llevaba unbuen rato conduciendo cuan-do bajaba ya de camino a LaPuebla. Veía el Embalse deEl Retortillo que lo iba de-jando a mi izquierda, yo ibarodeándolo por la cerretera...En un momento vi un granobjeto salir del agua. Era muygrande, no se, debía tenerunos 30 metros. Salió de gol-pe, con mucha fuerza. Eramuy brillante, un blanco bri-llante parecido a los unifor-mes reflectantes de los bom-beros, era un color muy lu-minoso. Se levantó forman-do un círculo (esfera) inmen-so y fue dlblándose hasta quese quedó aplastado, era comouna gran moneda de cincoduros...» Preguntado a esteseñor si el objeto tenia algúnvolumen nos comentó: «No,no, era una cosa aplastada yredonda, era como una mo-neda. Salió y fue doblandohasta quedar flotando sobreel agua...» Joaquín represen-taba sus palaabras imitandoel movimiento del objeto conun tapón de cerveza... Pode-mos decir que el objeto saliódel agua alzándose sobre si yformando una perfecta cir-cunferencia de 180º grados,una vez emergió comenzo aestabilizar su posición viran-do sobre un costado (supues-to) y quedando suspendidosobre la superficie del lagohasta quedar visto como unafina línea de luz desde lacarretyera. La parte esféricadel cuerpo de este objeto que-daría «mirando» hacia la su-perficie del lago y el cielo...Asó permaneció el objetodurante escasos segundos (talvez 5 ó 10 minutos, no más)y tras emitir un leve parpa-

deo con cambio de color (delblanco al anaranjado) ascen-dió levemente para acelerary perderse en el cielo en unhaz de luz. Joaquín se quedomuy sorprendido tras lo vis-to y comenzó a sentir un grantemor. Lo que parecía un sen-cillo viaje de regreso a LaPuebla se convirtió en unadesenfrenada carrera por lle-gar a casa...

Estas esferas luminosas,navez romboidales, ovales,adimensionales... y todas ob-servadas cerca del embalse oen sus proximidades, cerca denuestro líquido elemento osobre él...

Todo el fenómeno OVNIentra en nuestro siglo XXIcon la vitola de misterio yenigma envolviendo al mis-mo. Se ha convertido por símismo, por sus detractores ypartidarios en el fenónemo denuestro siglo.

La visión del fenómenoOVNI en nuestra sociedadsigue y continúa siendo in-completa y mal formada, aunson muchos los que creen queun ufólogo va detrás de hom-brecillos verdes -permí-taseme la expresión- y de susnaves para hacerle una foto yuna entrevista... La verdaddel fenómeno OVNI es mu-cho más dificil y complejaque ésta «desenfocada» idea.El fenónemo OVNI abarcademasiados aspectos comopara globalizar, el aspectosocial, psíquico, contextual,físico y sus diferenteshipóteris y teorías de trabajohacen demasiado extensoéste apasionante tema comopara tender a flexibilizar pos-turas y descuidar o dejar deestudiar cualquiera de susmás insignificantes aspec-tos...

Sevilla, Febrero del 2000

Page 18: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

18

Decíamos hace algúntiempo en estas mismas pá-ginas (Núm. 15/18, mayo-di-ciembre 1999), que el espa-cio que rodea a la Tierra estácada día más controlado porlos sistemas de vigilancia delas grandes potencias.

En aquella ocasión nosreferíamos a que se habíadescubierto el origen de pe-queñas y breves luminariasprovocadas el la alta atmós-fera por rayos y relámpagosde origen desconocido. Estosfenómenos eléctricos, que es-tán siendo motivo de estudiopor la comunidad científicainternacional, podrían ser elorigen de buena parte de lasobservaciones OVNI mencio-nadas el todo el mundo. Perolo importante para nosotros,que motivó aquel comentario,fue el hecho de descubrir queson pocas las cosas que ocu-rren en esa zona del espacioque escapan a los sistemas decontrol y vigilancia.

Ahora la prensa mundialha divulgado el hecho de queexisten redes de detección deexplosiones que, aunque seande muy poca potencia, son re-gistradas y estudiadas parasaber su origen. Esto nos re-afirma que diversos sistemasciviles y militares estudianconstantemente lo que ocurrea nuestro alrededor, por loque seguimos pensando quede paso con estos mediostambién se estudia el fenó-meno OVNI.

DEFENSA/Sensores terrestres y aéreos

UN SISTEMA DE VIGILANCIA MILITAR

DETECTA LA EXPLOSION DE DOS

GRANDES METEORITOS

William Broad (NYT), Nueva York

Al anochecer del 23 de abril, mientras la capi-tal estadounidense comenzaba a relajarse tras lacrisis del avión espía en China, las alarmas sedispararon en el sistema militar para la detecciónde explosiones nucleares en la Tierra.

Satélites en órbita que vigilan posibles ataquesnucleares habían detectado una luz cegadora yrepentina sobre el Pacífico, varios miles de kiló-metros al suroeste de Los Angeles. En el suelo,las ondas resultantes eran suficientemente fuer-tes como para registrarse en medio mundo. Latensión aumentó hasta que el Pentágono pudoconfirmar al Gobierno que la luz no correspondíaa una explosión nuclear. Era un meteorito quehabía chocado contra la atmósfera de la Tierra, yexplotado con una intensa bola de fuego.

«Se produjo una enorme actividad», recuerdaDouglas O. Revelle, científico que colabora en elfuncionamiento de los detectores militares. «Acon-tecimientos como éste no se producen todos losdías». Según cálculos preliminares, señala Revelle,el intruso espacial era el tercero en tamaño des-de que el Pentágono comenzó a realizar observa-ciones por satélite hace un cuarto de siglo. Suexplosión en la atmósfera alcanzouna fuerza casiequivalente a la de la bomba atómica lanzada enHirosima.

LA NOTICIALA NOTICIALA NOTICIALA NOTICIALA NOTICIA

Y SU COMENTY SU COMENTY SU COMENTY SU COMENTY SU COMENTARIOARIOARIOARIOARIO

La RedacciónLa RedacciónLa RedacciónLa RedacciónLa Redacción

Page 19: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 19

El episodio demuestra que el sistema, diseñado para advertir de ataquescon misiles y de explosiones nucleares clandestinas, está evolucionandorápidamente para detectar también meteoros del tamaño de una bomba.Ahora los localiza una vez al es, por término medio, pero este ritmo aumen-tará. Revelle, científico del Laboratorio Nacional de Los Alamos, en NuevoMéxico, explicó en una entrevista que el sistema que se esta desarrollandoprobablemente descubra muchas más explosiones naturales en los próxi-mos años. «El número real es probablemente mayor» explica. «No hay dudaal respecto. Pero no sabemos en que medida es mayor».

El sistema ha demostrado ya que el planeta está siendo golpeado conti-nuamente por grandes y veloces rocas, y que el ritmo de bombardeo esmayor del que previamente se suponía. Los objetos rocosos llegan a tenerhasta 25 metros de diámetro. Se desvanecen en titánicas explosiones en laparte alta de la atmósfera y su gigantesca energía de movimiento se convier-te casi al instante en enormes cantidades de calor y luz, que nadie sueleobservar porque se producen sobre el mar o en áreas deshabitadas.

Las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos no hicieron público el sucesohasta finales de mayo, un mes después del hecho, y entonces se limitaron adecir que se observaron brillantes luces brillantes durante más de dos se-gundos. En un lacónico comunicado presentado en 25 de mayo, su Centro deAplicaciones Técnicas, en la Patrick Air Force Base, de Florida, afirmaba quela explosión era «no nuclear» y concordaba con explosiones de meteoritosobservados en el pasado.

Después de esta revelación, el Laboratorio Nacional de Los Alamos obtu-vo permiso para revelar su propia detección del acontecimiento de abril, asícomo otro similar del pasado 25 de agosto (2000). Sus sensores en tierrason incluso más sensibles a las repercusiones de las explosiones de meteo-ritos que los satélites en órbita. Estos sensores funcionan como sensiblesoídos que detectan las ondas sonoras de baja frecuencia, que se expande apartir de la roca que explota en un radio de hasta cientos y hasta miles dekilómetros.

Los sensores registran sonidos muy por debajo del rango de audiciónhumana, incluidos los producidos por pruebas nucleares subterráneas y porexplosiones atmosféricas. Revelle afirmó que las cuatro baterías de sensoresque tienen instaladas el laboratorio habían captado la explosión del pasadoabril. También la captaron otros detectores en EE.UU, Canadá, Alemania y elcontinente suramericano. La veloz roca media aproximadamente 3,5 metrosde diámetro, añadió.

«Hay personas que se preocupan por los impactos en la Tierra, y estascosas nos están dando un mejor conocimiento del ritmo de impactos», aña-de Revelle. «Este es el verdadero subproducto, científicamente hablando».Se está construyendo un oído mundial todavía más sensible, porque se in-tenta vigilar el cumplimiento del Tratado de Prohibición Completa de PruebasNucleares. Cuando esté terminado dentro de un año(junio 2002), serán 60las baterías de sensores que podrán detectar explosiones en cualquier lugardel mundo.(Fuente: EL PAIS, miércoles 6 de junio de 2001)

Page 20: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

20

En números anteriores hemos rescatado del archivo varios escritos de personasrelacionadas o no con el CEI, lejanas incluso en el tiempo como fue el caso de JosepComas i Solá, relacionados con la posibilidad de que exista vida en el espacio.Hoy hemos escogido a un autor e investigador de los años cincuenta y sesenta, elcoruñés Oscar Rey Brea (1923-1973), ingeniero de telecomunicaciones, quien du-rante varias décadas estudio el fenómeno OVNI desde su especialidad y como pen-sador.Este artículo procede de la revista ALGO, y fue publicado en octubre de 1969.Como colaborador de prensa este fue uno de sus múltiples, ya que era asiduo de«El Ideal Gallego» y «Pueblo».

VIDAVIDAVIDAVIDAVIDA EXTRA EXTRA EXTRA EXTRA EXTRATERRENATERRENATERRENATERRENATERRENA

Algún planeta puede estar habitado

Oscar Rey BreaOscar Rey BreaOscar Rey BreaOscar Rey BreaOscar Rey Brea

El día 12 de mayo del co-rriente año, a las dos y mediade la madrugada, «dos extra-ños objetos volantes», dos es-feras de considerable tama-ño e intensamente brillantes,después de un sibilante reco-rrido, se situaron sobre lavertical de La Coruña, dondepermanecieron estáticas porun espacio de tiempo cerca-no al minuto. Su desapariciónfue instantánea.

Pero la más extraordina-ria visita a esta capital y con-tornos de un ONI, platillovolante, nave extraterrestre ocomo quiera denominársele,se produjo dos meses des-pués, el 16 de julio último,festividad de la Virgen delCarmen. Tal máquina aéreacontempló hasta la saturaciónsi ello es posible, este trozode costa galaica, entre LaCoruña y el Ferrol del Cau-dillo, en que se arropan lasrías altas, huellas de la manode Dios, al decir de los can-tares; verdaderos valles su-mergidos que festonean elrico depósito de clorofila quees nuestra campiña. Trozo decosta que, un día en Oviedo,

siendo yo testigo anónimo, unrepresentante de comercioandaluz definía a un pedago-go canario como la sustitu-ción casi perfecta de aquellaprimera habitación que lasflamígeras espadas de los án-

Oscar Rey.

(Fotografia:

Archivo

CEI)

geles preservaron del hombredespués del pecado.

Ese día, festividad de laVirgen del Carmen, comodecía, exactamente a las vein-te horas y treinta minutos, unmédico amigo, gran aficiona-

Page 21: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 21

do a la Astronomía, contem-pló lleno de asombro, a tra-vés de la ventana de su casa,lo que en principio supusofuese una supernova, puestoque, a pesar de la plenitud deldía, aquella luminaria brilla-ba con una intensidad quecalculó entre menos cuatro ymenos cinco magnitud y acuarenta y cinco grados dealtura sobre el horizonte sur.Sospecha que se disipó alcomprobar que el objeto encuestión se desplazaba lenta-mente del Este-Sureste alOeste-Noroeste, pero decli-nando a mayor velocidad quepudiera hacerlo una estrella.Ya rodeado de su familia (sie-te personas) y ayudado porunos gemelos de teatro, deseis aumentos, pudo apreciarque «aquello» era una semie-sfera perfecta de un tamañoaparente y aproximado decinco minutos de arco. Cuan-do pretendió observarlo des-de la azotea, tan extraño ob-jeto había desaparecido.

Sin embargo, treinta mi-nutos después, en la vecinavilla de Sada, repletas suscalles de vecinos y forasteros,infinidad de personas pudie-ron contemplar llenos de

asombro, desde las veintiunahoras hasta las veintidós me-nos diez, un gran artefactoque, brillando con luz blan-co-amarilla y procedente delhorizonte, de un punto quepudiera situarse hacia la cer-cana ciudad de Betanzos(unos seis kilómetros en lí-nea recta), quedo estaciona-do sobre la vertical, tantoque, según testimonio exac-to, «había que echar la cabe-za atrás».

Un vecino pudo contem-plarlo a través de un peque-ño catalejo y lo calificó comoalgo de forma triangular y deun tamaño aparente similar alde la «mano de un niño ex-tendida» (digamos unos cua-tro grados); y al desaparecer,después de tornarse su colorblanco-amarillo en rojo y conaceleración totalmente verti-cal hacia el Cosmos, en muypocos segundos, como algomenor que el planeta Marte

en su mayor alejamiento dela Tierra (sigamos calculan-do a grosso modo en unoscuatro segundos).

Consecuencia:Los testi-monios expuestos nos permi-ten certificar la permanenciade un ONI (o dos) sobre LaCoruña y sus contornos porun espacio de tiempo; cuan-do menos, igual a una hora yveinte minutos.

Al querer plasmar en ca-racteres litográficos lo ante-dicho, no lo hice impulsadopor el deseo de convencersobre la existencia real denaves extraterrestres. Elasunto fue tan sobradamentemanido por mí y otros: Ribe-ra, Buelta, Lleget, etc. (par-ticularmente llevo dieciochoaños intentándolo), que elque no lo esté ya, es que suespíritu geocentrista ha incu-bado al respecto en él la su-ficiente cerrazón como paraque hasta la más diáfana

La parte superior del diagrama permitió al autorsuponer la oleada de ONIS correspondiente a 1952y, sucedida ésta, vaticinar públicamente, el 11 deabril de 1954, la que se habría de producir en elotoño-invierno de este año. (Ambas representadasigualmente en la parte inferior del diagrama.

Page 22: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

22

prueba sea incapaz de despe-jarla.

¡No! Simplemente lo hagocomo introducción, comoprólogo al monólogo que pre-tenderá buscar la proceden-cia de estas extrañas naves.

En principio: ¿Qué es lavida?... Pero no el sistema or-ganizado: la reproducción ymuerte. Me refiero al géne-sis, al inicio que algún díatuvo que ser.

¿Es un proceso casual o unsolo divino?

La respuesta para mí esobvia, pero a la pregunta meobliga, no sólo el materialis-mo, cada día con más fuerza,que impregna, consciente oinconscientemente, al inves-tigador; también el deseo debuscar sin las trabas que mepudiesen presentar mis pro-pias convicciones.

El principio modeladorpuede ser igual; el soplo vi-vificador puede cabalgar so-bre un rayo cósmico (sin queello quiera decir que fueraasí) y conformar por inciden-cia el organismo unicelularque contenga en potencia lafilogénesis en que el hombrepodrá leer su evolución. Pero,de ser ese rayo cósmico im-pulsado al efecto por la vo-luntad divina, a serlo por lacasualidad, notoria será ladiferencia: quién nos hizo a«su imagen y semejanza»puede usar de lo plural y delo singular; la casualidad,sólo de lo primero, conside-rando que las condicionesóptimas para el fenómeno enla Tierra tendría lógicamen-te una permanencia de miles,bien puede decirse millonesde años, y en tal lapso la idén-tica casualidad forzosamentetendría que prodigarse. Porconsecuencia, la Naturalezaviva no procedería sólo demutaciones progresivas o re-trógradas de único principio;

serían paralelismos de múl-tiples. Y, morfológicamentehablando, el humanoide es-taría representado a semejan-za de cadenas de montaje in-dustrial: con una simple mi-rada a su presente, podría versu casi total genealogía.

Es absurdo pensar que lacasualidad hubiese formadoesa armónica pirámide cons-tituida hoy por la flora y fau-na marina y terrestre, que vadel insignificante infusorio alcomplejo mamífero, con unasola excepción eréctil, demanos prensiles y con cere-bro suficientemente desarro-llado como para crear civili-zaciones: el Homo sapiens.Sin embargo, comodecía,estoy obligado a consi-derarlo como posible. Claroque ello será a costa, lógica-mente, de imaginar que esesistema piramidal sea el úni-co modo en que pudiese de-sarrollarse la vida en los pla-netas aptos. Que las dificul-tades de desarrollo sei n c r e m e n t a s e ngeométricamente, tanto cuan-to más se fuese ascendiendoen órdenes superiores.

La consecuencia es obvia:el azar está encadenado a unaley de posibilidades. Por con-siguiente, teniendo en cuen-ta que el hombre ha clasifi-cado unas novecientas mil,cerca del millón de formas yvariedades de vida, pero sos-pechando que haya unas diezveces más, resulta que sóloen uno de cada diez millonesde planetas habitables podríahaber surgido esa casualidadcapaz de asemejársenos.

Y ¿Cual sería su proximi-dad a nosotros?

Supongamos el númerototal de soles en la Galaxiaen cien mil millones, segúnlos cálculos más recientes deBart J. Bok y dejando de ladolos de Van Rhijn, bastante

más creíbles, de treinta y dosmil millones; sigamos supo-niendo que de ellos, usandodel supuesto más optimistade H. Spencer Jones, sólo unode cada millón contenga unplaneta apropiado para el de-sarrollo de vida organizadasuperior (recientementeSebastián von Hörner supo-ne uno por cada tres millo-nes); dado que esa lotería uni-versal que nosotros destaca-mos sólo premiaría a uno decada diez millones, nos en-contraríamos con que el tér-mino medio sería el de unplaneta como habitación dehumanoides por cada ciengalaxias, aproximadamente.

Prácticamente como si es-tuviéramos solos en la gran-diosidad de ese Cosmos. Sinla más microscópica posibi-lidad de contacto, incluido elhertziano.

Semejante vacuidad merepugna tanto como repugna-ba a Herschel. Como a él, meparece absurdo que esamagnifica y grandiosa estruc-tura estelar sirva sólo paramera contemplación de pun-tos tan impresionantementeesparcidos por el Universo.

Incomparablemente másatrayente para mí y más con-veniente para la idea de lapluralidad de mundos habi-tados, es sin duda el procesodirigido por la voluntad divi-na.

Casi copiando en este pá-rrafo a F. Lotze, diré que, asícomo en el óvulo y en el es-permatozoide existe la capa-cidad para que se desarrollentodas las fases embrionariashasta el adulto, así, por vo-luntad del Creador, pudieronllevar los organismosprimigenios una potenciafilogenética interna para suulterior desarrollo evolutivocon el fin de llegar a esa pi-rámide orgánica y en donde

Page 23: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 23

La linea quebrada inferior representa la situación relativade Marte con relación a la Tierra, con las oposiciones,o máximos acercamientos, y las conjunciones, omáximos alejamientos; y los triángulos superiores elvolumen de observaciones de ONI. Obsérvense las trescoincidencias: el ritmo de máximas observacionescoincide con las oposiciones; su volumen está acordecon el grado de separación de ambos planetas; y durantelas conjunciones, una falta absoluta casi absoluta(alguna muy esporádica) de tales visiones.

la «selección» fuera sólo unprincipio secundario, acceso-rio y subordinado en el cua-dro general de la biosfera.

Es decir, un proceso quenos lleve, cuando menos yantes de abandonarnos a«nuestro libre albedrío», a«su imagen y semejanza», olo que es igual, al instante enque como bien determina laEncíclica Humani Generis,de S.S. Pio XII, un ser hubie-ra adquirido determinado es-tado de perfección. en prin-cipio concebido, y le fue in-fundida el alma racional.

Por tanto, así como noso-tros podríamos se los únicosracionales del Universo, he-cho que no menoscabaría elsupremo poder de Dios, ytoda su obra ser sólo conce-bida para que tuviéramos unmotivo de elucubración, unejercicio para nuestra mente,

así también pudo construirhabitaciones infinitas con to-das las prerrogativas de lanuestra, cuando menos losplanetas que nosotros calcu-lamos aptos, que aptos sonasimismo por su Voluntad.

Es verdad que los escritosmosaicos nada indican en fa-vor o en contra, pero igual-mente nada indican sobre laexistencia de los leucocitoscon ser su equilibrio tan im-portante para nuestra viven-cia.

Quizás algún día el pro-yecto OZMA señale de modoconcluyente esa vecindad.Pero, ¿cuáles serían las posi-bilidades de un contacto per-sonal?

Para mayor sencillez, in-virtamos los términos. ¿Quéposibilidades tendremos no-sotros en un futuro, próximoo lejano, de salir de nuestro

sistema solar y viajar hacia,por ejemplo, el cuerpo incan-descente más cercano alnuestro: Próxima, en el sis-tema triple de Alfa Centau-ro, con su distancia de cuatroaños luz?

El más profundo de lospensadores de la antigüedad.,Aristóteles mismo que resu-citara, quedaría boquiabiertoante el «saber» de un bachi-ller actual, por muy pocoaventajado que fuera. Y, sinembargo, de su época a lanuestra sólo se han converti-do en utilitarias leyes y fenó-menos naturalespreexistentes; conocimientosque dentro de unos cientos deaños, si antes no sucumbenuestra civilización, se ha-brán multiplicado de modoinimaginable, pero nada he-mos creado ni crearemos.

Concedámonos técnicasde hibernación tal altamentedesarrolladas como para libe-rar al astronauta del monóto-no transcurrir del tiempo, consu secuela de transtornos dela psiques y consecuentemen-te somáticos; admitamosastronaves de dimensionestales que constituyan ciuda-des espaciales autónomas,

Page 24: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

24

capaces por sí solas de cubrirtodas las necesidades, inclui-das las del espíritu; e inclu-so, si se quiere, bordeando yael campo de la ciencia fic-ción, aceptemos la posibili-dad de vencer los inconve-nientes de la inercia hasta unextremo que nos permita ad-quirir, de modo instantáneovelocidades cualquiera. Sinembargo, !nunca se podrá su-perar el gran inconvenienteque la luz nos señala comolímite! Y no precisamente porconsiderar la negación quepretenden imponer losabstractismos matemáticosrelativistas. Simplementeporque ningún vehículo podrásobrepasar la velocidad deeyección de su propio propul-sor y ninguno hay que supereal fotónico.

La consecuencia es con-cluyente: con todas estas fa-cilidades a nuestro favor, unviaje de ida y vuelta a Próxi-ma (con la inmensa suerte deque la rodean planetas aptos)nos llevaría la friolera deocho largos años de vagar porun espacio en el que infini-dad de grandes cuerposerráticos constituirían peligromortal, puesto que tan extre-ma velocidad los convertiríaen indetectables, ya que losimpulsos electrónicos de unradar cualquiera nunca cami-narían a mayor velocidad queel vehículo en cuestión.

Y sólo por simple curio-sidad, como aparentan ser lasvisitas de estos ONI, consta-tadas desde hace miles deaños, ¿correríamos tanto ries-go?

Sin duda alguna, la habi-tación de los tripulantes delos ONI está mucho más cer-ca, dentro de nuestro propiosistema solar. En el planetaMarte.

Mucho más sensato esdesechar las imposibilidades

creadas por los especialistasen el estudio del rojo plane-ta, que defender el absurdode visitas procedentes deotros sistemas solares y mu-cho menos de las abismaleslejanías de otras galaxias.

En apoyo de mi afirma-ción, sobresale el carácter cí-clico de estas visitas, cicloque al descubrirlo me permi-tió, en conversación de ter-tulia, vaticinar, la oleada delverano de 1952 y, con poste-rioridad, ya públicamente, enel Ideal Gallego del 11 deabril de 1954, la siguientesucedida en el otoño-invier-no de ese mismo año; oleadaque igualmente señaló enParís Mach, dos meses des-pués, el francés AiméMichel.

Estos ciclos bianuales, opor mejor decir, de veintiséismeses, ciclos no precisamen-te rígidos en todas sus fases(fácilmente considerable si sepiensa que son producto dementes inteligentes y con téc-nicas sin duda altamente de-sarrolladas, más bien produc-

to de comodidad que de ma-terial imposibilidad), presen-tan un ritmo ascendente ydescendente, con sus máxi-mos en las proximidades delas oposiciones Tierra-Martey sus mínimos, a veces ausen-cias totales, casi generalmen-te, durante los seis o sietemeses que rodean a las fechasde conjunción. Y dentro deeste ciclo existe otro, tanto omás concluyente, de quincea diecisiete años, en que va-ría el volumen de visitas,acorde con las distancias queseparan a los dos planetas, encada una de las oposiciones,que va de los cincuenta y sie-te a los cien millones de ki-lómetros. Es decir, un míni-mo en la oposición de 1950 yun máximo en la de 1956,para volver al mínimo en lade febrero de 1963. En laoposición de agosto de 1971volverá el máximo de visitasastrales, si es que nosotros noestablecemos antes algunaclase de contacto con esosseres que ya Percivall Lowellsuponía existentes.

Primera

página del

artículo de

Oscar Rey.

Page 25: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 25

OTROS PAÍSES,OTROS PAÍSES,OTROS PAÍSES,OTROS PAÍSES,OTROS PAÍSES,

OTROS BOLETINES OTROS BOLETINES OTROS BOLETINES OTROS BOLETINES OTROS BOLETINES

Luis R. GonzálezLuis R. GonzálezLuis R. GonzálezLuis R. GonzálezLuis R. González MARZO 2001.

La única referenciaufológica del vol. 25 nº 1 delSkeptical Inquirer apareceen la columna de RobertSheaffer titulada “Reptoidesy Marcianos invaden el Va-lle del Silicio” en referenciaa un congreso ufológico de-sarrollado en California, don-de junto a charlas más o me-nos serias se incluyeron apersonajes tales como RobertDean, Peter Gersten o JaimeMaussan. Muchos ufólogosinsisten en querer buscar elapoyo de la Ciencia, pero sonincapaces de desvincularsede todos esos charlatanes queviven del cuento de losOVNIs.

La portada del número deFebrero 2001 (nº 143) deFortean Times presenta auno de esos visitantesextraterrestres cuya amenazaestá siendo cada vez másaceptada por la Ciencia: unmeteorito. Se trata de unareferencia a un interesanteartículo sobre la oleada debólidos sufrida en el veranode 1783 en Inglaterra, algu-nos de los cuales presentancaracterísticas tan extrañasque hoy en día no dudaríamosen identificar como OVNIs.Aprovechando esa excusatambién se incluye un inte-resante artículo sobre comolos científicos llegaron aaceptar la existencia de losmeteoritos caídos del cielo, ysus posibles enseñanzas para,

por ejemplo, los ufólogos.Entre las notas habitualessobre fenómenos extrañosdestacaré una posible expli-cación para el Triángulo delas Bermudas: emanacionesde metano desde el fondosubmarino que hacen dismi-nuir la flotabilidad del agua.Si ello ocurre al paso de un

barco, éste podría hundirserápidamente y sin previo avi-so. El nº 144 (Marzo 2001)incluye una foto del monoli-to aparecido en un parque deSeattle, junto con undesmitificador artículo sobrelos “orbs” atribuyéndolos alos flashes automáticos de lasmodernas cámaras digitales.

Page 26: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

26

Hemeroteca

Algunas noticias de 1950Algunas noticias de 1950Algunas noticias de 1950Algunas noticias de 1950Algunas noticias de 1950Esta sección que inició su publicación en el número 22, octubre-diciembre de 2000,pretende rescatar noticias de prensa relativas no sólo a observaciones de todo elmundo, sino también referencias al tema de los entonces denominados «platillosvolantes». Las que hemos seleccionado para este número se refieren a diversosaspectos de este mundo, tales como opiniones, columnistas de la prensa interna-cional y desmentidos, extraidas de los meses de marzo y abril del año 1950.

La Vanguardia,

23 de abril de 1950

El Noticiero Universal,

17 de abril de 1950

Diario de Barcelona,

marzo 1950

Page 27: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Papers d’Ovnis Julio-Septiembre 2001 nº 25 27

La Prensa,

marzo de 1950

Diario de Barcelona,

marzo de 1950

Page 28: Papers d'Ovnis núm. 25, 2a època

28

Bruc 88, Despatxos 13 i 14 08009 BARCELONA (SPAIN)

e-mail: [email protected] [email protected]

http://www.ctv.es/USERS/netcei

CENTRO DE ESTUDIOS INTERPLANETARIOSCENTRO DE ESTUDIOS INTERPLANETARIOSCENTRO DE ESTUDIOS INTERPLANETARIOSCENTRO DE ESTUDIOS INTERPLANETARIOSCENTRO DE ESTUDIOS INTERPLANETARIOS