CSPxTfltO III

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Loa conquistadores.—Fnndacióu de Santafé de Antioquía.—Primeroecolonos y nuevas expediciones.—Regreso de Jorge Robledo y sumuerte.—Gaspar de Rodas, Jefe de la Colonia.—Insurrección delos indios catíoe.—Campanas de Gaspar de Rodas.—Erpedición deGómez Hernández—Auxilios de Francisco Martínez de Ospina.-Expedición de Andrés Valdlvia.—Ineurrección de loe Nutabee.-Creación de la Provincia de Aotioquia.—Fnndaci6n de las ciuda-des de Cáceres y Zaragoza.—División política del territorio, des-pués de la Conquista.

1En los primeros días del mes de Septiembre del

afio de 1541, un grupo de españoles, compuesto de cua-renta soldados de caballería y poco más de sesenta in-fantes, al mando del Capitán Jorge Robledo, acampa-ba en la falda de la cordillera, en la ribera oriental delrío Cauca, enfrente del lugar que ocupa hoy el pue-blo de Anzá.

La mayor parte de estos atrevidos viajeros habíaconcurrido, con el Adelantado Pedro de Heredia, 4 laconquista de la Provincia de Cartagena y venido áCali y Santana de los Caballeros con Juan de Badillo,Juan Graciano y Luis Bernal. La menor parte, con suJefe, pertenecía 4 los conquistadores del Perú, con-ducidos 4 Popayán por Sebastián de Belalcázar.

Poco menos de ocho meses bacía que hablan em-prendido esta campaña, desde Santana de los Caballe-ros, atravesado el río Cauca por Irrá y recorrido Jabanda derecha del río hasta el lugar en que los pro-sentámos 6 nuestros lectores.

Cubiertos de harapos, todos sus afanes los em-pleaban en cuidar de sus atinas y caballos, nueve po-rros y una piara de cerdos, conducidos desde Cartago.

La Historia ha conservado los nombres de algu-nos de estos aventureros: Jorge Robledo, Alvaro deMendoza, Juan Vallejo, Pedro Ciesa de León, Loren-zo Estopiñán y Figueroa, Jerónimo Luis Tejelo, Fran-cisco Avendaño, Hernando Barrios, Juan de Frades,Juan del Busto, Francisco Berrohí, Giraldo Gil, Bal-tasar de Ledesma, Pedro Matamoros, Diego Mendo-

HISTORIA DE AI4TIOQULA. Si

za, Francisco Pérez Sainbrano, Antonio Pimentel,Hernán Rodríguez de Sonsa, Pedro Velasco, Juan deTorres, Pedro Barrios, Juan Ruiz (le Noroña, MartínVesga, Alonso de Villacrecea ye! Capellán Fray Fran-cisco de Frías.

Dividióse allí el pequeño ejército en (los cuerposel Capitán Juan Vallejo, con cuareota soldados, tomóla dirección del Nordeste por la ciwa (le la cordillera,siguiendo las alturas de Ovejas, San Pedro y SantaRosa hasta el río Grande, en donde fue detenido en sumarcha por la resuelta actitnd (le los indios (le la co-marca. Robledo continuó por la ribera oriental del ríoCauca basta las proximidades del actual Distrito deSabanalarga. Aquí se reunieron los dos cuerpos al ca-bo de cuarenta y tres días; y debido á los informes quedio Vallejo de su expedición y á las noticias comuni-cadas por los soldados que hablan acompañado á Juande Badillo, resolvió la Columna conquistadora atrave-sar el río Cauca en balsas y ocupar el territorio del ca-cique Curumé. En esta localidad se construyó una fra-gua para reparar las armas y herrar las caballerías, yquedó el Capitán Alvaro de Mendoza con veintitréssoldados, entretanto que Robledo, con el resto, siguióá conquistar las tribus de Ebéjico, Guaramí, Penco yPurruto.

En esta corta campaña la actitud hostil de losindios fue dominada por la acción aterradora de losperros y de los caballos.

Robledo determinó fundar una ciudad como cen-tro de la colonización del territorio; y el doce de No-viembre, todos los soldados reunidos, echaron losfundamentos de la ciudad de Santafé de Antioquía, enel valle de Ebéjico, al pie del cerro de Buriticá.

El 8 de Enero de 1542 marchó Robledo con di-rección á España, por San Sebastián de Buena Vis-ta, con Pedro Ciesa de León, Juan de Frades, diezsoldados y algunos indios, dejando la nueva ciudad Licargo (le

yprimeras autoridades, que fueron: Alvaro

de Mendoza, Juan Vallejo, Francisco Avendaüo, Die-go Mendoza, Juan del Busto y Francisco Pérez 5am-brano.

r_ 1111WORIA DE ÁNTIOQIJIA

IIEl grupo de éolonos de la nueva ciudad, muy re

ducido para atender á fl%lá áonquist.a que se presenta-ha llena de dificultades, no tuvo en consideración efnúmero (le enemigos y sus condiciones guerreras, y ápoco tiempo se vio reduMo á los atrincboramiento&'(le la localidad que señhló Robledo á la ciudad. Men(loza, Valkjo, Avendaño y Pimentel lograron conte-ner el arrojo (le los indios; pero en vatio trataron de'reducirlos al reconoirniento de su póder.

En estas circunstancias, á mediados del citado'año, se presentó una expedición de cerca de doscientos soldados, conducidos, desde Cartagena de Indias,por el Adelantado Pedro de Reredia, quien tomó por

erza poae&i¿ni , de la Colonia como perteneciente á lajurisdtcói6n de su Gobierno ile Cartagena. Este reflier-io pÑporcion&nlr gran desahogo á los primeros colo-nos, i' se pudo arrojar á los indios á gran distauci&de la ciudad, bien escarmentados..

No hablan transcurrido aún dos méses cuando se'}keseutóuna nuéva expedición de cincuenta soldadosal mando? del. Capitán Juan do Cabrera, quien venía'desde Popayán, eh alcances de Jorge Robledo y 4tomar posesión d las conquistas de éste en nombre'de' Sebastiáñ de' Belaleázar. Ausentes (lela ciudad-latflayor parte de los soldados de Heredia, logró Cabro-'ra vencerle y tomarl&prisioue?o con el auxilio de los'primeros colonos:

Grandes inconvenientes presntab la' situacióz?de la ciudad, colocada en el centro de tribus indíge-'has, valerosas y atrevidas, que amenazaban con tinna-monte su existencia~ cuya razón determinó Oabre-i;á trasladarla al valle de Note, Llas márgenes del río'Tonusco, ocupan do'territorio del cacique Zaburruco,'k que se verificó sta grandes dificultades, pues en el'airso de un aüo póco-se había - adelantado en lacous-'fracción de la primitiva.

Cabteradejó lacivaad & cárg&del Bc1iIller Fran-disco de Madroñedo, y regresó áPopayán con su prizgion ero Heredia. -

Como es fácil de comprender, la nueva cólonia4uetló con una base (le población compuesta, en

HISTORIA DE ANTIOQUL( 33

'mayor parte, (le soldados de Cartagena, tanto por losprimeros compañeros de Robledi éomo por los recién.llegados con Heredia. En la tarea del repartimiento:de la tierra se prentarou gradúes (libcnitades té Ma-droüedo, pueS los habitantes se dividieron en (los han-.,los hostiles denominados "Cartageneros" y "Pernio-tos", con prÑensones (le exclusiva preponderancia,.Estas dificultades obligaron té Madroñedo té ocurrir,personaln;eute té Popa çán, dejando la

'Colonia té cargo,

del Capitán Isidro de Tapia, quien habla venido conCabrera..• En e! año de 144 ocupó Heredia, de nuevo ladudad sin resistencia alguna, hizo nuevos reparti-.mientes, llevó té efecto algunas expediciones y regre-.86 té Cartagena, djando por su Teniente en AtiLio-quia, al Capitán Gaspar Gallegos.

Esta nueva expedición proporcionó té los colonosmuchos artículos de Primer4 necesidad, de que caro-cían, y herramient As, armas y semilla

En una de las Oqediciones al Norte de la Colo-,nia,, en territorio de Norisco, de&cubri4, Heredia. tan,ext,aordtnario puente de bejucos, eontruIdo por losiSliós sobre el río Cauca y denominado "Bredunco",nombre que tomó el río y que 11 conservé por muchosáños como limite oficial del territorio antioqueño.

En 1545 regresó de Popayán 4 Bachiller Madre-ñedo y recuperé la ciudad como Teniente 4e B'elaleá-zar, toipando prisionero té Gallegos, -,a quien remitió té

Popayán:Poco tiempo después, una rebelión do los Carta-

generos arrebató el poder té Madroñedo, quieu,fue re-Óniplazado por Isidro de Tapia y remitido con otrosPeruleros té Cartagena.

En Junio de 1546 oúupó la cinilad el Mariscal,Jorge Robledo, té su regeso de Epaüa, con unos po-,qos compañeros; presentó los títulos de Teniente-Go-lorna4or que le habla conferido Miguel Díez de,Ar-.!Çrnndáriz, en cuyo carácter se hizo reconocer; y, Lo-ipando setenta soldados, siguió para Arma, AnseiinW% Cartagó, té hacerse recouoóer con el mismo carácter.

'Ir

Éútretai4to qüc . .ib ciudad de Sau6fé (le AutiQ-73,

34 HISTORIA DE ANTIOQUIA

quia era teatro de disputas sobre la posesión de suterritorio por los Gobernadores de Cartagena y Popa-yán, en esta última Provincia ocurrían notables acon-tecimientos que interesan 5 nuestra historia.

Ocupado Sebastián de Belalcázar en asegurar elGobierno de esta Provincia, supo, por Juan de Cabre-ra, la fundación (le la ciudad de Antioquía y el viajede Robledo para España, por cuyo motivo le declaródesertor. Pasó en seguida 5 visitar las ciudades deCartago y Ansernia y asegurar en éstas su autoridad,cuando tuvo noticia de la insurrección de los indiosCarrapas Picaraes y Pozos, y fue 5 debelarlos, lo queconsiguk fácilmente, aprovechando las rivalidadesentre estas tribus, que fueron casidestruídas por losPozos, que eran los más numerosos, atrevidos y crue-les. Dispuso fundar en el centro de estas comarcasuna ciudad que sirviese de base para mantener la re-ducción, y con este objeto ordenó á Miguel López Mu-ñoz que fundase la ciudad de Sántiago de Arma, enla que tomaron repartimientos muchos notables Ca-pitanes de los conquistadores de la Provincia do Po-payán.

Reclamados auxilios por el Virrey del Perú, Blas-co Núñez Vela, para hacer frente 5 la rebelión deGonzalo Pizarro, ocurrió Belalcázar con buen númerode soldados, y luchó gloriosamente, aunque con des-gracia, en el campo de Añaquito.

Hallábase de regreso de esta campaña, en Popa-yán, cuando llegaron ásu conocimiento los ateut*idoscometidos por el Mariscal Robledo en las ciudades (leArma, Ansernia y Cartago, con el fin de hacerse reco-nocer como Teniente de Gobernador, con títulos quele había otorgado el Visitador Miguel Díez de Ar-meudáriz, é inmediatamente se dirigió 5 su encuentro.

Algunos amigos de ambos jefes trataron de po-ner término amigablemente á estas desavenencias,con cuyo objeto pasaron al campamento de Belalcá-zar, quien les retuvo engañosamente para ocultar 5Robledo sus movimientos y propósitos.

Este, lleno de vacilaciones y con pocos soldadospara hacer frente al Adelantado, se situó en la Jomade Pozo 5 esperar el resultado de la comisión enco-mendada 5 Rut Venegas y Alvaro de Mendoza, pero

lirstoRtA DÉ AfllOQt'Ik SS

resuelto it regresar 6. Antioqula si las intenciones deBelalcázar eran de atacarle.

Este habla mantenido prisioneros 6. todos los co-misionados que hablan salido del campo de Robledo,y así logró sorprenderle al amanecer del dos de Octu-bre, sin que él ni sus soldados pudiesen oponer resis-tencia.

Un Consejo de guerra, reunido bajo las malévo-las inspiraciones de Francisco Hernández Girón, con-denó al Mariscal 6. la pena de muerte, que sufrió alamanecer del cinco de Octubre, con sus CapitanesBaltasar de Ledesma, Juan Márquez de Sanabria yHernán Rodríguez de Sousa.

Este drama sangriento puso definitivamente elGobierno de )a ciudad cte Antioquía bajo la autoridadde Belalcázar, quien nombró por su Teniente, en lareferida Colonia, al Capitán Gaspar de Rodas.

Este, con treinta soldados al mando del CapitánPedro Coello, la ocupó 6. fines (le Noviembre, y seapresuró á calmar los ánimos y t 't prevenir toda clasede venganzas en la ciudad, en donde las pasiones de-bían estar exaltadas por causa de los últimos aconte-cimientos.

La conducta de Rodas, que era uno de los másimportantes miembros de la ciudad, puso término átodas las contrariedades ocurridas, y así prineipió. 6.desarrollarse la población con mejores bases de paz yde progreso. Era una de sus más notables cualidadesla bondad para con los indios, 6. quienes procuró atraer-se por medio de amistosas relaciones y obtener recur-sos alimenticios de que se carecía con frecuencia porel terror que inspiraban los naturales á los colonos,quienes no podían salir, sin peligro, á considerabledistancia de la población.

Al cesar las disputas sobre la posesión del terri.tono, quedaron asegurados los repartimientos do latierra entre los primeros colonos, y éstos principiaroná tomar posesión (le SUS Encomiendas.

IVLa administración y el gobiérno de una Colonia

tan combatida por los odios y las pasiones, no pó'lladejar de presentar diñcnitades de alta consideración.

36 HISTORIA DE £NTIOQU1A

Así, en 1549 llegó á la ciudad el Capitán Mauro deCarvajal, nombrado Teniente (le Gobernador por elOidor Francisco Briceño, quien ejercía el Gobierno dela Provincia de Popayán y seguía el juicio á Belalcá-zar por la muerte dada á Robledo y sus compañeros.Bodas tuvo que ocurrir á su propia defensa por los ser-vicios prestados á Belalcázar, y con este fin se trasla-dó á Santafé del Nuevo Reino.• Bajo el Gobierno de Carvajal, los indios Oatíosse

insurreccionaron y dieron muerte á algunos espaúó-les. El alarma que, esto ocasionó llegó á conocimientode la Real Audiencia de Santafé del Nuevo Reino eónanuncios de la pérdida casi total de la Colonia. EsteTribunal, recientemente establecido, estaba bajo lterrible impresión producida por la silhlevacíón delbs Paecesy Pijaos y por Ja rebelión de Alvaro de'Oyón. Así, no vaciló en nombrar á Gaspar de RodMTeniente-Gobernador de Antioquía, con el fin de pacificar la comarca. Este tomó el Gobierno de manos'de Carvajal y quedó bajo la dependencia del Gober-nador (le Popay(in.

Y

Teniendo en consideración estos movimientos decolonos, todos con carácter poco amistoso, y saciandt'unos en otros sus rencores, seremos sin duda exage-rados si calculamós en seiscientos el número de espá-fioles á cuyo cargo quedó la contulsta en et año d&1'530.

No era menor de diez mil el número de indios Ca-tíos cuyas tribus habla conmovido violentamente elrestablecimiento de esta nueva raza en m?dio de snVpacíficas mótadas y como tos eran altivos y atrevi-dos en su totalidad y aquéllos estaban abrumados de'fieoesidades múltiples 4 imperiosas, el choque fue mL

mediato y violento.La necesidad de la subsistencia provocó el (l68&

jo de las escasas cosechas de los indios, quienes no se'prestaban voluntariamente á cederlas. Siguió la viórlencia para arrebatarles el oro y obligarles á trabajaten la construcción de la' ciudad y labores del campoLos repartimientos que marcaban Ja esclavitud y l&pnpiación (le SUS mujeres 6 hijas, eñ esta raza cel

HISTORIA DE ANTIOQL'IA 37

a hasta el extremo, colmaron la medida de los odios,La reacción se presentó violenta, y los Encomenderosy sus cohortes morían al traspasar los límites tic laciudad.

¡ El cacique Toné lanzó el grito (le guerra! Dii-paute cerca de treinta años escenas ¿le sangro y de,riieIila4 marcaron la conquista (te un territorio que,

lprincipiar el siguiente siglo, estaba casi totaimçnteo.jidoliado por los españoles á pesar 4e sus victo-

riaj.Desde las riberus del Tonnsco hasta las fuentes

del Siuú, entre los ríos Sucio y Cauca, se jercitó esteprimer esfuerzo de la conquista; y mw dos veces elatrcido colonizador echó las bases de una nueva du-daddenominó San Juan de Bodas, que eg vanotrat4 de sostener. En sus ensangrentadas selv .qs sólo

,qued el eco repitiendo los nombres de los valerosos•eaüdllos Catios: Sinago, Yuteqgo, Anuié, Bayaqui-mná, 'ncujur9.ugo, 1ecucé y Agvaba.

VI

ri el año de 1556 el Cwitán G-ówez Hernández,uno de los más uotables conquistadores 'le la Proyiwcj1a 4e Popayán y fundador de la ciudad de Caraman-ta, atLQrizado por la Audiencia para entrar en la con-qyista del Chocó, llevó sus fuerzas por las tierras deros tjrraos, luchó con el cacique Toné y continuó silçxpedición por el valle (le Peuderisco hasta el ríoAtrato, cuyas aguas le condujeron álá ciudad de Car-tagena.

Por los a4os de iSOi habla asomado por las tiepras de los Tqbamíes una columna colonizadora origi-.aria de las ciudades ¿le Mariquita y Victoria, coman-

¡dada pçr el Capitán Francisco Martínez de Ospina,¡quien, en medio de dificultades legales y odiosi4adespersonales, trataba de sostener un centro minero de-bominado Nqestra Señora de los Remedios, en terri-torio donina4p por el cacique Puchiná. RecIarnadopor Gaspar ¿le Rodas auxilios de aquel Jefe para aten-der á la guerra con los indios Oatíos, concurrió Martínez de Ospina con algunos compañeros; y después

4e cruda campaña lograron lanzarlos it gran distanile la Cojpnia, ycucidos pero no 4omoriz4doS.

33 HISTORIA DE ÁNTIOQI'L&

Este resultado animé á los nonibrados Capitanesá llevar una fuerte expedición á las fuentes del río Si.nú, cuya campaüa produjo considerable cantidad deoro, aunque la guerra que tuvieron qué sostener con losnaturales les causó notable pérdida de soldados. Estacampaña y los compromisos celebrados por razón de-los ánxilios prestados por Martíuez de Ospina, ocasio-naron grave desacuerdo entre los dos jefes, Ospina yRodas, lo que obligó á ambos 6 ocurrir á la Real Au-diencia de Santafé 6 dirimir la contienda. Entretan-to, quedó la Colonia 6 cargo de los Capitanes JuanVelasco y Leonel (le Ovalle, quienes, poco tiempodespués, entregaron el iriando á Alonso de MendozaCarvajal, nombrado 6 este efecto por el Gobernadorde la Provincia de Popayán.

En el año de 1.572 se presentó en la ciudad deAntioqula Andrés Valdivia, con título de Gobernadordel territorio comprendido entre los ríos Cauca y Mag-dalena, y situado al Norte de la jurisdicción de la Pro-vincia de Popayán. Las autoridades de la ciudad sedenegaron á reconocerle, por no hallarse comprendidaésta dentro de los títulos de su gobierno. Una recla-mación 6 la. Corte dio por resultado, 6 fines de 1573,la declaratoria en contra de las pretensiones de Val-(livia, quien sese vio en la precisión de trasladarse 6 labanda oriental del río Cauca y fundar tina poblaciónque sirviese (le asiento 6 su Gobierno. Ocupó el terri-torio del cacique Guareama y echó los fundamentosde una Colonia que denominó Ubeda, que prontamen-te so vio combatida por los indios y por los vecinos ylas autoridades de Antioquía, 6. quienes arrebátaba co-lonos y recursos indispensables para sostener las dospoblaciones de Antioquía y San Juan de Rodas. Agro-góse ti esto la prohibición que hizo el Gobernador dePopayán, Alvaro de Mendoza, de dejar que salieranrecursos de Auserma, de donde los esperaba Valdivia.Estas contrariedades exasperaron 6 este Gobernador,quien abandonó la poblaci.n de Ubeda y so lanzó enpersecución de los indios,con el único objeto de obte,ner oro. Estos, en número considerable, le arrollaron,vencieron y sacrificaron con cerca de setenta compa-ñeros en la región de los Cacamies, que lleva hoy sunombre, el 16 de Octubre do 1374.

HISTORIA DE ANTIOQUIA 30

La insurrección general de los indios Nutabes,comunicada á los Oatios, puso en inminente peligrola existencia de la ciudad de Antioqubs y ocasionó latotal destrucción de la (le San Juan de Bodas.

Bu estas circunstancias era indispensable tomaralguna resolución definitiva para asegurar la Colonia,á la cual, por confesión del Gobernador de Popayán,no era posible atender por la enorme distancia y por!os cuidados que demandaba la guerra con los Pijaosy Paeces.

En vista (le esto, la Audiencia de San tafó del Nue-vo Reino, nombró sucesor en el Gobierno de Valdi-via, vacante por su muerte, á Gaspar de Rodas, quiená la sazón se hallaba en Santafé; y como allí no ha-bía población ni elementos con qué atender al desea-do objeto, agregó á su Gobierno la ciudad de Antio-quía y su jurisdicción, quedando así una ¡nieva Pro-vincia, que se denominó de Antioquia. Dos años mástarde fue aprobada esta disposición por el Consejo deIndias y dado el Gobierno de la nueva Provincia áGaspar de Bodas por dos vidas como premio de susservicios.

El nuevo Gobernador so trasladó á Antioquia conalgunos elementos de armas y soldados de Santafé yentró en recia campaña contra los indios, ti quienesredujo al respeto por el terror de sus armas. Llevósus fuerzas vengadoras á las tierras de los Nutabes yechó los fundamentos de la ciudad de San Martín, delPuerto de Cáceres en 1576; y en 1581, llevó una ex-pedición por las márgenes del río Porce, desde el va-lle de Aburrá hasta el territorio de los indios Yame-síes, donde fundó la ciudad de Zaragoza de las Pal-mas. Consagróse en seguida ti desarrollar los ele,ueu-tos: de progreso de la nueva Provincia, hasta la época

su muerte, ocurrida por los años de 1590. Sucedió-le su yerno Bartolomé Suárez de Alarcón, descen-diente de uno de los fundadores de la ciudad de Tun-ja, Encomendero de Icabuco.

Los títulos de Bodas fueron: "Gaspar de Rodas,Gobernador y Capitán General de la Provincia deAntioquia, Yainesl y tierra do entre los dos ríos, porsu Majestad".

411 HI•ORIA DE ANTIOQULt

•VIILas camaas del Mariscal Jorge Robledo, desde

1539 hasta 1642, dieron por resultado la conquistailónizaéión del territorio comprendido : dentro (lo lis

4urisdiioues de lascitnlades (le Anserma, Cartago!Antioqjiia, Artp'a y Caramanta. ¿

Añserina «Santana ¿lo los ÇaballQos, fundadaen el año ¿le 1539, extendía sus límites dde lájnrisdicción de Cali basta el rjo Arqula.

Cartago, fundada eif 140, limitab9 con Popa-$n y el río Chinchiná.

$ant4'é de Antioquía, fundada en 141, llevó suslimites dksde los nacimientos delrio Murrí hasta laCulata del Qolfo de Urabá. 1

Santiago tic Armp, fundada en1,54 extendía sujurisdicción entre el rib Chiuchináy los nacimiento.délPereirh.• Oariúianta, fupdada en el año de 1548, )le yó suslímites desde el río Arquía hasta los iiaeiu4ntós delMurrí.• La fundación de Nuestra Seqra (le los Remedios,verificada en 1561 por colonós de' la ciudaa ¿le Ma-tiquita; extendió los límites Ae la Provincia fiel Nue-vo Reino de Granada, á cuya jurisdicción pértenecí4dicha cuidad, hasta el tío Nare.• El Gobierno que se otorgó Li Andrés Valdivia,comprendía el territorio que se extiende entrelos ríoSMagdalena y Cauca, desde las cabeceras del río Pereira y la línea del Nare. Así, piles, la Provincia dó.Antioquia, cuyo Gobierno se otorgó á Gaspar de Ro;das, compretidía el territorio (le la jurisdicción de laciudad (le An}ioquia y el que se otorgó á Valdivia.• Hasta el año ¿le 17li, por motivos de jurisdiccióneclesiástica, no vino á agregarse ufl parte de la juriilieción de Mariquita Li la Prbjuóia de Antioqula.

En 1777 se agregó á ésta Ii jurisdicción de laciudad de Arma, cuya cabecera se trasladó al sitio dSan Nicolás de Rionegro

En el año 13961 bajo It' administración del Presi-dente del Nuevo Reino (le Granada, Antonio Gonzá-lez, el Capitán Juan de Toro, provisto de autorizacio-hes bastantes y con gran número de elementos, llevóuna expedición para conquistar el territorio (le la (3I

HISTORIA DE ÁNT1O(UIA 41

¡p itarra. Entró con facilidad basta Guamocó y ob-tuvo considerable cantidad (le oro. PQcO después se leotorgó Oapitnlacjón Real para colonizar, y estableciógrandes trabajos ¿le miuq en qn centro que (lenorninó Remedios, ch memoria de la quo fundó Martínezde Ospjna, yá 4pstruíd. Esté territorio quedó poi"argo tiempo sometido' 4 la jqribdicción del NuevoReino 4e Grati4a.

Este era el estado (161 territorio al terminp.r el si-glo xii. Las ciudades ¿le Cácekes y jaragojiU no te;Wan tmites determinados á sus jurisdicciones, pues

t copsideraba9 como centros (le colonización Única;mente' Asegurada definitivamçpte la situación políticaOe lacolonia ptioqu'eña, principió el desarrollo de s4fapital con bases precisas y sin tener necesidad dqOcurrir 4. Poflyi%n poç cada peqiieio incidente queobrevenía. Deterin jpáronso las prqpiedades urbanas' ruráles por medio dé límites señalados; formáron-e pIzas y calles cap regularidad; se construyeron

los eflificios necesariós para despac4os (le lés emplea-'dos gte Gobierno y Real Hacienda; se edificaron doscapillas para el servicio religioso, y principió á usarsqtie Materiales sólidos, corno lapiedray la teja, para las»pevas construcgiones.'•" En este centro se reunían tod4s las fuerzas y ele-1PCfltOs que debían colonizar la Provincia, extendién-fibse lentamente y con la jirudenciq que exigía la con-d1ión de los indios, según lo dictaba la experiencid4 cincuenta años (le codquista. .it

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