Pensando sobre la expresinira de Dios

Pensaba sobre losatributos de Dios y sobre la ira de Dios. Algunos atributos esenciales de Dios son Amor, Paz, Verdad, Justica, Santidad. Todos esos atributos son como un hornode fuegoque quema nuestro odio, nuestra ansiedad, nuestra mentira, nuestras injusticias, nuestra maldad. Cuanto ms nos acercamos a la Luz de Dios, con mayor claridad vemos los lados oscuros de nuestra alma y Su Espritu en nuestra conciencia acta como el fuego que quema, derriteyconsume estas actitudes pecaminosas. Se me ocurre pensar que cuando el clamor que hace a Dios la gente que sufre las consecuencias del pecado de otros es atendido, Dios desciende, como en el Sina. Aquellos en cuyo corazn hay maldad, son desnudados ante la santidad de Dios. Su maldad se consume ante Dioscomo la tela de un vestido viejo. Si existedentro deellos algn bien, si han guardado algn residuo de la imagen de Dios en ellosquedespierte laconciencia de su condicin pecaminosa, se doblegarn ante Diosarrepentidos. Poco quedar de ellos, pero podrn ser transformados por el poder creador de Dios. Si han perdido su identidad como criaturas de Dios, toda su maldadla cual han convertido en su nueva esencia-ser consumida ante la pura presencia de Dios; nada quedar de ellos cuando se enfrenten al fuego de la santidad divina.

Exo 19:20Y descendi Jehov sobre el monte Sina, sobre la cumbre del monte; y llam Jehov a Moiss a la cumbre del monte, y Moiss subi.Exo 19:21Y Jehov dijo a Moiss: Desciende, ordena al pueblo que no traspase los lmites para ver a Jehov, porque caer multitud de ellos.Exo 19:22Y tambin que se santifiquen los sacerdotes que se acercan a Jehov, para que Jehov no haga en ellos estrago.Exo 19:23Moiss dijo a Jehov: El pueblo no podr subir al monte Sina, porque t nos has mandado diciendo: Seala lmites al monte, y santifcalo.Exo 19:24Y Jehov le dijo: V, desciende, y subirs t, y Aarn contigo; mas los sacerdotes y el pueblo no traspasen el lmite para subir a Jehov, no sea que haga en ellos estrago.

Exo 20:18Todo el pueblo observaba el estruendo y los relmpagos, y el sonido de la bocina, y el monte que humeaba; y vindolo el pueblo, temblaron, y se pusieron de lejos.Exo 20:19Y dijeron a Moiss: Habla t con nosotros, y nosotros oiremos; pero no hable Dios con nosotros, para que no muramos.Exo 20:20Y Moiss respondi al pueblo: No temis; porque para probaros vino Dios, y para que su temor est delante de vosotros, para que no pequis.