PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN SUPLETORIO DE ... Diagnosis ambiental..... 63 3.4 Características de la...

141
PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN SUPLETORIO DE AGAETE ADAPTACIÓN A LAS DIRECTRICES DE ORDENACIÓN GENERAL Y DEL TURISMO AVANCE MEMORIA INFORME DE SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL

Transcript of PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN SUPLETORIO DE ... Diagnosis ambiental..... 63 3.4 Características de la...

PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN SUPLETORIO DE AGAETE

ADAPTACIÓN A LAS DIRECTRICES DE

ORDENACIÓN GENERAL Y DEL TURISMO

AVANCE

MEMORIA INFORME DE SOSTENIBILIDAD

AMBIENTAL

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance.

1

ÍNDICE

MEMORIA INFORME DE SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL .....................................................................1

1. JUSTIFICACIÓN DEL CONTENIDO AMBIENTAL ASUMIDO ....................................................1

1.1 Introducción ..............................................................................................................................1 1.2 Marco legislativo de aplicación: Ley 9/2006 .............................................................................1 1.3 Papel del ISA en el proceso de ordenación del PGO de Agaete .............................................2

2. INVENTARIO AMBIENTAL...........................................................................................................3

2.1 Geología ...................................................................................................................................3 2.2 Geomorfología ..........................................................................................................................7 2.3 Clima ...................................................................................................................................... 11 2.4 Edafología .............................................................................................................................. 18 2.5 Red hidrográfica e hidrología ................................................................................................. 23 2.6 Flora y Vegetación ................................................................................................................. 29 2.7 Fauna ..................................................................................................................................... 40 2.8 Calidad visual del paisaje ...................................................................................................... 48 2.9 Impactos preexistentes .......................................................................................................... 50 2.10 Patrimonio cultural ........................................................................................................... 52 2.11 Riesgos Naturales ............................................................................................................ 58

3. OBJETIVOS Y CRITERIOS DE LA ORDENACIÓN .................................................................. 60

3.1 Objetivos y criterios generales ............................................................................................... 60 3.2 Objetivos y criterios del desarrollo del PGO .......................................................................... 60 3.3 Diagnosis ambiental............................................................................................................... 63 3.4 Características de la problemática ambiental ........................................................................ 66

3.4.1 Diagnosis de potencialidad ........................................................................................................ 69 3.4.2 Situación del medio ambiente en función del inventario y diagnóstico ambiental realizado ....... 73

4. OBJETIVOS DE PROTECCIÓN AMBIENTAL Y CRITERIOS DE PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO NATURAL Y CULTURAL ........................................................................................... 73

4.1 Justificación de la adaptación de los objetivos ambientales de instrumentos de ámbito superior ............................................................................................................................................ 75 4.2 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales y criterios de los instrumentos de rango autonómico ...................................................................................................................................... 78

4.2.1 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales de las DOG ................................................... 79 4.2.2 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales de los Espacios Naturales Protegidos .......... 81 4.2.3 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales y criterios del Plan Insular de Gran Canaria . 81

5. EVALUACIÓN DE LAS CONSECUENCIAS AMBIENTALES DE LAS DETERMINACIONES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE .................................................................. 90

5.1 Síntesis de contenidos de la evaluación de las consecuencias ambientales de la clasificación de suelo propuesta por las diferentes alternativas ..................................................... 90 5.2 Identificación de las determinaciones de las diferentes alternativas potencialmente generadoras de impacto .................................................................................................................. 91 5.3 Análisis del grado de adecuación entre las determinaciones del planeamiento y los objetivos ambientales, la calidad ambiental y capacidad de las unidades afectadas para acoger los diferentes usos propuestos............................................................................................................ 100 5.4 Examen y análisis de las diferentes alternativas contempladas ......................................... 101

5.4.1 Alternativa 0 ............................................................................................................................. 102 5.4.2 Alternativa 1 ............................................................................................................................. 106 5.4.3 Alternativa 2 ............................................................................................................................. 112

5.5 Análisis comparativo de las alternativas e integración ambiental ....................................... 116

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance.

2

5.6 Valoración detallada y signos de los impactos de las determinaciones potencialmente generadoras de impacto de las diferentes alternativas ................................................................. 118 5.7 Viabilidad económica de las alternativas ............................................................................. 122

6. MEDIDAS AMBIENTALES CORRECTORAS Y PROTECTORAS PARA REDUCIR LOS EFECTOS DE LAS DETERMINACIONES DEL PLAN GENERAL SOBRE EL MEDIO AMBIENTE 122

7. ESQUEMA DE LA NORMATIVA BÁSICA APLICABLE EN SUELO URBANO, URBANIZABLE Y RÚSTICO ............................................................................................................ 136

8. RESUMEN NO TÉCNICO ........................................................................................................ 136

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 1

1

MEMORIA INFORME DE SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL

1. JUSTIFICACIÓN DEL CONTENIDO AMBIENTAL ASUMIDO

1.1 Introducción

El análisis de la sostenibilidad debe ser el reflejo de la sostenibilidad establecida por los distintos elementos que conforman el Sistema de Planeamiento de Canarias, los cuales, como instrumentos de ordenación deben considerar la sostenibilidad como fin último de la ordenación propugnada en los mismos. Así, el Modelo de Ordenación que plantea el presente documento, es el reflejo de una Ordenación Territorial y de los Recursos Naturales plasmada por el instrumento de ordenación territorial y coherente con la ordenación de los recursos naturales del ámbito insular dónde se inserta. A su vez, este Modelo de Ordenación propugnado es el fruto de la plasmación de un Sistema Territorial y una Estrategia de Transformación Territorial planteada para el ámbito del municipio. Estas piezas formadas por el Modelo de Ordenación, el Sistema y la Estrategia por el presente PGO se engloba dentro de la Estrategia planteada para la Isla de a nivel insular, por el Plan Insular de ordenación. Con base a esto, se plantea un modelo de ordenación que no puede ser miope ante la realidad propiciada por las actuaciones de las distintas Administraciones Públicas y por aquella devenida a causa del movimiento internacional, comunitario, nacional y autonómico, todo ello bajo el prisma que nos lidera de la política sobre Ordenación del Territorio emanada de Europa por la propia Unión Europea, encauzamiento de los valores plasmados en este documento. La sostenibilidad planteada, tiene su base en aspectos, connotaciones y determinaciones de aplicación en un territorio limitado pero lleno de valores a preservar y desarrollar, planteándose la ordenación sobre un desarrollo económico y social de sus habitantes sosteniblemente con el medioambiente que lo rodea.

1.2 Marco legislativo de aplicación: Ley 9/2006

Tal y como se ha expuesto anteriormente y en virtud de la Ley 9/2006, de 28 de abril, sobre evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente, todo plan o programa que pueda tener efectos significativos sobre el medio ambiente, en los que se incluye aquellos relativos a la “ordenación del territorio urbano y rural o del uso del suelo” (artículo 3.2.a. in fine) como el presente Plan General de Ordenación, debe realizar una evaluación ambiental con el objeto de promover un desarrollo sostenible, conseguir un elevado nivel de protección del medio ambiente y contribuir a la integración de los aspectos ambientales. Esta evaluación ambiental es de aplicación específica a los instrumentos de ordenación, frente a la evaluación ambiental establecida por el Real Decreto Legislativo 1302/1986, de 28 de junio, de evaluación de impacto ambiental a nivel nacional, así como, por la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico, en el marco de la comunidad autónoma de Canarias. Esta evaluación ambiental es considerada por la Ley 9/2006 (Artículo 2.d.) como “el proceso que permite la integración de los aspectos ambientales en los planes y programas mediante la preparación del informe de sostenibilidad ambiental, de la celebración de consultas, de la consideración del informe de sostenibilidad ambiental, de los resultados de las consultas y de la memoria ambiental, y del suministro de información sobre la aprobación de los mismos”, por lo que el Informe de Sostenibilidad es una pieza esencial del proceso, configurándose como “parte integrante de la documentación del plan” debiendo ser “accesible e inteligible para el público y las administraciones públicas y contendrá un resumen no técnico de la información a la que se hace referencia el Anexo I”.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 2

2

En el transcurso de la redacción de este Informe de Sostenibilidad Ambiental en desarrollo, entra en vigor la Ley 21/2013, de 9 de diciembre, de Evaluación Ambiental. En este sentido, la Disposición Final undécima de la citada Ley, dispone que las Comunidades Autónomas que dispongan de legislación propia en materia de evaluación ambiental deberán adaptarla en lo dispuesto en esta Ley, en el plazo de un año desde su entrada en vigor, momento en el que, en cualquier caso, serán aplicables los artículos de esta Ley, salvo los no básicos, a todas las Comunidades Autónomas. Igualmente el apartado 1 de la Disposición transitoria 7ª de la Ley 14/2014, de 26 de diciembre, de Armonización y Simplificación en materia de Protección del Territorio y de los Recursos Naturales dispone que“ Los procedimientos de evaluación ambiental estratégica iniciados antes de la entrada en vigor de esta Ley, como el presente, se regirán conforme al principio de unidad de procedimiento, por la normativa conforme a la cual comenzaron su tramitación, en concreto, Ley 9/2006, de 28 de abril, de Evaluación Ambiental Estratégica de Planes y Programas, y el Reglamento de Procedimiento de los Instrumentos de Ordenación del Sistema de Planeamiento de Canarias, aprobado por Decreto 55/2006, de 8 de mayo” En definitiva, el único objetivo de este análisis, es dar cumplimiento e integrar en el presente Plan General de Ordenación, el Informe de Sostenibilidad Ambiental, en cumplimiento de las determinaciones de la Ley 9/2006.

1.3 Papel del ISA en el proceso de ordenación del PGO de Agaete

La Directiva 2001/42/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de junio, relativa a la evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente, establece determinaciones para “conseguir un elevado nivel de protección del medio ambiente y contribuir a la integración de aspectos medioambientales en la preparación y adopción de planes y programas con el fin de promover un desarrollo sostenible, garantizando la realización, de conformidad con las disposiciones de la presente Directiva, de una evaluación medioambiental de determinados planes y programas que puedan tener efectos significativos en el medio ambiente”. Esta normativa europea se traspuso al derecho interno con la promulgación de la Ley 9/2006, de 28 de abril, sobre evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente, que se concreta en el derecho autonómico en el desarrollo reglamentario que hace el Reglamento de Procedimientos de los instrumentos de ordenación del sistema de planeamiento de Canaria, aprobado mediante Decreto 55/2006, de 9 de mayo. Así, el referido Reglamento de Procedimientos establece en su artículo 24.1: “Serán objeto de evaluación ambiental, de conformidad con lo establecido en la Ley 9/2006, de 28 de abril, sobre evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente, la formulación, revisión o modificación sustancial, de la totalidad de los Planes que integran el Sistema de Planeamiento de Canarias.” Por tanto, la Ley 9/2006, introduce en la legislación española la evaluación ambiental de planes y programas, también conocida como evaluación ambiental estratégica, en el proceso de ordenación, como un instrumento de prevención que permita integrar los aspectos ambientales en la toma de decisiones de planes y programas públicos, basándose en la larga experiencia en la evaluación de impacto ambiental de proyectos, tanto en el ámbito de la Administración General del Estado como en el ámbito autonómico, e incorpora a nuestro derecho interno la Directiva 2001/42/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de junio de 2001, relativa a la evaluación de los efectos de determina dos planes y programas en el medio ambiente. Los fundamentos que informan la Directiva son el principio de cautela y la necesidad de protección del medio ambiente, a través de la integración de esta componente en las políticas y actividades sectoriales. Y ello para garantizar que las repercusiones previsibles sobre el medio ambiente de las actuaciones inversoras sean tenidas en cuenta antes de la adopción y durante la preparación de los planes y programas en un proceso continuo, desde la fase preliminar de borrador, antes de las consultas, a la última fase de propuesta de plan o programa.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 3

3

El proceso de evaluación ambiental acuñado por esta nueva Ley 9/2006, no ha de ser una mera justificación de los planes, sino un instrumento de integración del medio ambiente en las políticas sectoriales para garantizar un desarrollo sostenible más duradero, justo y saludable que permita afrontar los grandes retos de la sostenibilidad como son el uso racional de los recursos naturales, la prevención y reducción de la contaminación, la innovación tecnológica y la cohesión social.

2. INVENTARIO AMBIENTAL

Este epígrafe se encuentra ampliamente desarrollado en el capítulo 3 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. A continuación se desarrollan de forma sintética los contenidos correspondientes a las variables ambientales:

2.1 Geología

Esta variable ambiental se encuentra ampliamente desarrollada en el apartado 3.2 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. El municipio de Agaete se enmarca entre las porciones insulares denominadas Neocanaria, término que alude a la presencia de la isla nueva, sobre la que han prevalecido los procesos constructivos del relieve, y Paleocanaria o Tamarán, expresiones referidas a la isla antigua donde se evidencia el desmantelamiento del sustrato rocoso. De este modo, la superficie del municipio muestra algunas manifestaciones del vulcanismo reciente, especialmente en su mitad Norte. Sin embargo, la mayor parte del territorio municipal se ha visto afectado por prolongadísimos periodos erosivos que han determinado su condición marcadamente abrupta y han provocado la acumulación de algunos depósitos coluviales y aluviales. La interacción de los procesos constructivos y erosivos a lo largo de los más de 14 millones de años de existencia de la isla emergida ha originado en el municipio un relieve extremadamente abrupto, incidido por una red hídrica marcadamente dendrítica, que converge en una amplia proporción en los valles de Agaete, Guayedra y El Risco. Ciclo I Antiguo En este ámbito y en sus inmediaciones se localiza buena parte de las rocas que han conformado el territorio insular a lo largo de una amplia secuencia volcanogeológica que se inició a mitad del Mioceno, hace 14,5 millones de años, cuando la isla emergió del mar, configurándose como un extenso escudo volcánico, ya desde entonces de planta circular, formado por el sucesivo apilamiento de multitud de flujos lávicos y piroclásticos, sin apenas interrupción. Las rocas emitidas durante este dilatado periodo se encuentran casi restringidas a la porción suroccidental de la Isla. No obstante, en el municipio de Agaete afloran masivamente en los escarpes de los macizos de Tamadaba y Tirma, hasta alcanzar el mar. También lo hacen, aunque de forma más discreta, en las vertientes septentrionales del Barranco de Agaete, desde Montaña Blanca, sobre la villa de Agaete, al entorno de Los Berrazales. Así pues, en el municipio de Agaete y en su entorno inmediato, los sustratos geológicos generados a lo largo del primer ciclo geológico de la Isla son los que siguen:

- Diques básicos intrusivos. Aparecen con cierta frecuencia en las inmediaciones del Roque de Cha Pina y en el entorno de Los Berrazales.

- Lavas basáltico–olivínicas. Constituyen el soporte sobre el que se asientan las restantes formaciones geológicas. Su aspecto más característico es el apilamiento de coladas pahoehoe, bastante alteradas, con potencias que oscilan entre 1,5 y 3.5 metros, que alternan con coladas escoriáceas, de tipo “aa”. Se localizan en casi la totalidad de la mitad exterior del ámbito municipal desde Las Borriqueras hasta el Barranco de Agaete.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 4

4

- Depósitos y sedimentos aluviales antiguos. Aparecen de forma dispersa en los cauces de los barrancos y rellenando las concavidades del relieve previo del entorno de Aguadulce, de las inmediaciones de El Risco y de La Hoya de la Higuera. Su potencia oscila entre 50 y 70 metros.

- Domos fonolíticos-nefeliticos. Muestran disposición circular, siguiendo aproximadamente los límites externos del área de influencia del «cone sheet». Estas intrusiones constituyen la última actividad ígnea del primer ciclo volcánico de la Isla. Se encuentran emplazados en el entorno de Punta Gorda. Su textura es traquítica, con presencia de muy escasos fenocristales aislados y microfenocristales cuadrangulares y hexagonales.

- Lavas basálticas, olivino–pirxénicas, ankaramíticas, basaníticas y tefríticas. Se encuentran

emplazadas en la porción nororiental del territorio municipal, ocupando en su mayor parte los grandes llanos del entorno de Piletas. Se disponen en forma de coladas, que contienen distintas proporciones de fenocristales olivínico-piroxénicos.

Las tobas ignimbríticas y las coladas riolítico–traquíticas, son los sustratos que aparecen con mayor frecuencia en el ámbito territorial que ordena este Plan General. Ocupan una amplísima franja que recorre el espacio comprendido entre Los Reventones y Los Berrazales. Se trata de coladas masivas, con potencias visibles inferiores a los 200 metros. Se encuentran conformadas por rocas con grandes placas de feldespato y escasos fenocristales. Ciclo II, o Roque Nublo La actividad volcánica se reanudó hace unos 5 millones de años, durante el Plioceno inferior, con las primeras emisiones basálticas del ciclo Roque Nublo, procedentes de un estratovolcán que ocuparía, aproximadamente, el centro de la isla, que discurrieron por los barrancos tallados sobre el relieve previo. Estas lavas pueden ser observadas en los escarpes de la cabecera del Valle de Agaete, en torno a la Hoya de Las Tabaibas y a los barranquillos de Palomino y Las Zarzas, sobre la localidad de El Sao. Las coladas basálticas, en resalte por la erosión diferencial, muestran, en sección, un aspecto bastante fresco. Adoptan una disposición fundamentalmente subhorizontal, con espesores que rondan el centenar de metros. Con frecuencia, además, presentan disyunción columnar. Se trata de rocas de textura muy masiva y de composición petroquímica francamente básica. Durante el Plioceno, y a lo largo de 0,7 millones de años, la actividad efusiva coincidía con violentas explosiones que originaban avalanchas de nube ardiente que fluían por los valles, y que en la actualidad conforman una porción de las vertientes mencionadas en el párrafo anterior, en la cabecera del Barranco de Agaete. Pertenecientes a este Ciclo, se consignan en Agaete los siguientes materiales:

- Facies deslizadas de la brecha Roque Nublo, emplazadas en los andenes que discurren entre El Laderón y Las Zarzas. Se trata de brechas similares a las observadas en el sector central de la Isla, que han sufrido un deslizamiento del Este al Oeste. Se encuentran constituidas, fundamentalmente, por fragmentos tefríticos y fonolíticos de los ciclos I y Roque Nublo, dispuestos en depósitos cuya potencia oscila entre 5 y 60 metros.

- Depósitos epiclasticos, dispersos en el entorno de Las Zarzas. Están conformados por depósitos disgregados de naturaleza heterogénea cuyo origen se encuentra en la erosión de edificios volcánicos del Ciclo I y de las coladas que emitieron.

- Edificio Roque Bermejo. Pequeño cono de tefra emplazado en las vertientes de Tamadaba, próximo al límite con la caldera de Tejeda. Situado a una cota de 640 metros, de planta elipsoidal y con un diámetro en su eje mayor que alcanza 250 metros, se encuentra cosntituido por depósitos de lapilli semi compactados.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 5

5

- Niveles fluvio–marinos. Aparecen de forma dispersa en el entorno del Barranco de Agaete, a una altitud que oscila entre los 80 y los 100 metros sobre el nivel del mar. Se trata de depósitos arrastrados por un tsunami provocado por un cataclismo que generó el deslizamiento en masa de las vertientes del Valle de Güimar, en la isla de Tenerife. Se ha constatado su presencia en las inmediaciones del cementerio de la Villa de Agaete, en el frente litoral de los Llanos de Turmán y en un talud generado por el trazado de la carretera que conduce a La Aldea de San Nicolás. La existencia de fósiles marinos de la fauna del Plioceno entre los conglomerados basálticos que los constituyen, le confieren un elevado interés palentológico. Estos depósitos se asientan sobre sustratos basálticos del primer ciclo y del ciclo post Roque Nublo Los restos faunísticos identificados corresponden a algo más de medio centenar de especies, indicadoras de unas circunstancias climáticas similares a las actuales.

Ciclo Reciente o Post Roque Nublo Al finalizar el ciclo Roque Nublo comenzó un nuevo periodo erosivo que se prolongó a lo largo de 0,9 millones de años. La incisión de las aguas reexcavó los barrancos, seccionando los estratos volcánicos y los depósitos aluviales. Este proceso originó nuevos depósitos de deslizamientos gravitacionales, constituidos por brechas conformadas por cantos de muy distinta naturaleza. Aún en el Plioceno, hace unos 2,8 millones de años, se iniciaron las emisiones fisurales cuaternarias del ciclo post Roque Nublo que se sucedieron a lo largo del Pleistoceno hasta hace alrededor de algo más de 2.000 años, cuando surgen los volcanes del entorno de Los Berrazales y sus respectivas y muy prolongadas coladas lávicas, que se encuentran entre las últimas manifestaciones volcánicas de la Isla. Durante ese intervalo, los vertidos masivos de lava procedentes de centros eruptivos de carácter estromboliano, que siguen un eje estructural de dirección NO.-SE., cubrieron con distinta potencia el relieve previo de la porción septentrional del municipio, homogeneizándolo. Se trata de lavas básicas, de composición fundamentalmente basanítica y, en menor medida, nefelinítica y basáltica. La sucesión de coladas lávicas fueron adoptando una disposición subhorizontal, con buzamientos muy tendidos, hacia la costa. La posterior incisión de los barrancos de Agaete y del Juncal fue dejando en resalte sus restos apilados, a modo de testigos. De este modo, acabaron por delimitarse los llanos de Piletas y del Turmán. A excepción de la Montaña de Las Moriscas, emplazada entre el Barranco del Juncal y el Barranquillo de La Caleta, en el extremo noroccidental del municipio, que se yergue desafiando el paso del tiempo, aunque muestra sus perfiles modificados por la erosión, los centros eruptivos plio-pleistocénicos que se encontraban dentro de los límites del término municipal han sido desmantelados por la acción erosiva de las aguas de escorrentía. Los restos del cono volcánico permiten contemplar los lapillis, las bombas y las escorias que lo conforman, aunque se hallan muy compactados y notablemente oxidados. Los últimos eventos geológicos que han condicionado la fisiografía del término municipal fueron las erupciones estrombolianas que, durante el Holoceno, originaron los centros de emisión de las Cuevas de Bohodén, entre los barrancos de Los Berrazales y El Sao; de Los Berrazales-Caideros, constituido por dos bocas eruptivas abiertas en el mismo episodio volcánico, que se encuentran adosadas a la vertiente occidental del Barranco de los Berrazales, y de los Berrazales, constituido por escorias gruesas y bombas, de tonalidades rojizas, con un elevado grado de compactación. Su estado de conservación es precario, al encontrarse muy desmantelado. Sólo este último se encuentra en el municipio de Agaete. Los restantes se encuentran en Gáldar, aunque muy próximos al límite que separa sendos términos municipales. Previamente, durante el pleistoceno superior, se produjo una erupción volcánica en el Valle de Agaete que dio lugar al cono de montaña de Berbique, apostada sobre la vertiente norte del macizo de Tamadaba. Del conjunto Los Berrazales-Caideros se derramaron coladas muy escoriáceas, a modo de cascada, que descendieron por las vertientes hasta llegar al barranco, por donde se canalizaron hasta alcanzar el mar, junto al actual Puerto de Las Nieves.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 6

6

Simultáneamente, la actividad erosiva ha dado lugar a la formación de terrazas aluviales, muy aisladas, en torno a los cauces y a las desembocaduras de los principales barrancos que surcan el municipio, donde, conformados por arcillas, limos, arenas y cantos heterométricos, alcanzan potencias de varios metros; a la disposición de depósitos sedimentarios detríticos sobre las vertientes labradas sobre sustratos del primer ciclo volcánico. Los extensos tramos acantilados del litoral del municipio han sido esculpidos por los embates del océano sobre sustratos del primer ciclo volcánico de la Isla, creando en ocasiones paredones casi verticales. La existencia de cambios del nivel marino de naturaleza eustática y epirogénica ha provocado la regresión de la línea de costa respecto al lapso temporal en el que se originaron estos acantilados y su consiguiente inactividad. Las playas que alberga el municipio están conformadas por acumulaciones de callaos y bloques de naturaleza basáltica y fonolítica, fundamentalmente, y redondeados por la erosión marina. La arena, siempre escasa, y de tonalidades negruzcas, es originada por la denudación de sustratos basálticos, preferentemente. De este modo, en el territorio municipal y en su entorno inmediato, los sustratos generados a lo largo de este lapso temporal son los que siguen a continuación:

- Piroclastos de dispersión de naturaleza basanítica, emplazados en el norte del municipio, donde se acumulan lapillis y escorias, vinculados a la erupción, durante el Pleistoceno inferior, de la montaña de Las Moriscas.

- Los edificios volcánicos de montaña Berbique y del entorno de Los Berrazales, surgidos

durante el Pleistoceno superior y el Holoceno, respectivamente. Las erupciones que les dieron origen fueron de naturaleza estromboliana. El segundo, a pesar de ser más reciente, se encuentra muy desmantelado por efecto de la erosión. Previamente, durante el pleistoceno superior, se produjo una erupción volcánica en el Valle de Agaete que dio lugar al cono de montaña de Berbique, apostada sobre la vertiente norte del macizo de Tamadaba.

- Lavas basaníticas holocenas, que ocupan, a modo de retales dispersos, el cauce del Barranco

de Agaete, procedentes de las erupciones que se registraron en su cabecera, de las que solo la de Los Berrazales se encuentra emplazada en el municipio. Son coladas de composición basanítica con textura porfídica y matriz micro o criptocristalina, aunque también existen variedades de matriz hialopilítica. La presencia de fenocristales de olivino es muy abundante.

- Depósitos y terrazas aluviales, dispuestos en torno a los cauces y a las desembocaduras de los

principales barrancos que drenan el municipio, aunque se constata una mayor concentración en las inmediaciones de San Pedro, en la vertiente oriental del Valle de Agaete. Se encuentran seccionados aquí por el cauce actual del barranco. Presentan típicas estructuras sedimentarias de régimen fluvial. Las dimensiones de los cantos, de naturaleza basáltica, traquítica y sienítica que los conforman, oscilan entre 4 y 6 cm, a fondo de los depósitos, y del orden de 1 cm, a techo.

- Depósitos de ladera. Se encuentran apostados sobre vertientes labradas sobre sustratos del primer ciclo geológico de la Isla. Adoptan morfologías alargadas -siguiendo la pendiente- y en abanico. Su potencia es escasa. La naturaleza geológica de los clastos que los conforman es muy heterogénea.

- Playas de arenas con cantos. Salpican de forma dispersa el litoral acantilado del municipio,

seccionado por barrancos en cuyas desembocaduras se han ido conformando. Están conformadas por acumulaciones de callaos y bloques de naturaleza basáltica y fonolítica, fundamentalmente, y redondeados por la erosión marina. La arena, siempre escasa, y de tonalidades negruzcas, es originada por la denudación de sustratos basálticos, preferentemente.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 7

7

- Depósitos de barranco. La actividad erosiva ha dado lugar a la formación de terrazas aluviales, muy aisladas, en torno a los cauces y a las desembocaduras de los principales barrancos que surcan el municipio, donde, conformados por arcillas, limos, arenas y cantos heterométricos, alcanzan potencias de varios metros.

- Depósitos sedimentarios indiferenciados y suelos, alcanzan un gran desarrollo a causa del elevado volumen de piroclastos que albergan algunos sectores del municipio.

Áreas de interés geológico El municipio de Agaete exhibe una elevada singularidad geológica. A continuación se exponen los enclaves que muestran un mayor interés científico y didáctico, a causa de albergar sustratos distintivos, que contribuyen a dilucidar la génesis de la isla. - El municipio alberga algunos domos de composición fonolítica haüynica, producto del incremento de la inyección magmática durante la última etapa de actividad del primer ciclo volcánico de la isla. El conjunto de domos, denominados pitones cuando en su ascenso emergen sobre la superficie del terreno, se extienden desde el entorno de las Tierras de Manuel, siguiendo una banda con dirección N-S, hasta el roque del Puerto, junto a la playa del Juncal, en el límite con el municipio de Gáldar. El que surgió junto a las Tierras de Manuel, en el tramo superior del Barranco de Agaete, emitió una colada de la que aun se conservan sus restos. En el entorno de Los Berrazales adoptan una disposición semicircular. Otro pitón, denominado Roque del Puerto, está parcialmente desmantelado por la erosión marina, junto a la playa del Juncal, en el límite con el municipio de Gáldar. - El edificio volcánico estromboliano emplazado en el entorno de Los Berrazales es uno de los testimonios del vulcanismo más reciente de Gran Canaria. Previamente, durante el pleistoceno superior, se produjo una erupción volcánica en el Valle de Agaete que dio lugar al cono de montaña de Berbique, apostada sobre la vertiente norte del macizo de Tamadaba. - Los afloramientos rocosos de naturaleza ácida, denominados “azulejos”. Se trata de tobas, ignimbritas y coladas riolítico-traquíticas peralcalinas, con niveles de alteración hidrotermal, que determinan la aparición de tonalidades azuladas, verdosas, rosáceas y amarillentas. Su origen remite al contacto de estas emisiones volcánicas, sometidas a elevadísimas temperaturas, con grandes acuíferos que que provocaron la modificación de su composición mineral. - Los depósitos de tsunami del valle de Agaete, cuyo origen se encuentra en el gigantesco deslizamiento que, durante el Pleistoceno, tuvo lugar en el Valle de Güimar, en la vecina isla de Tenerife. La plasmación cartográfica de esta variable ambiental se localiza en el Plano IA. 03 “Geología y áreas de Interés Geológico” de este Documento.

2.2 Geomorfología

Esta variable ambiental se encuentra ampliamente desarrollada en el apartado 3.3 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. El relieve constituye el escenario en el que se desarrollan las sociedades humanas, que, condicionadas por su presencia, han adoptado mecanismos de adaptación ante las limitaciones y posibilidades que ha impuesto a lo largo de la historia. El municipio de Agaete se ha visto condicionado en un grado muy elevado por la presencia de una orografía abrupta que se desarrolla en torno a dos valles fértiles que han acogido el poblamiento desde la primera ocupación humana del territorio, y que se han constituido en vías de penetración al interior del municipio. De los dos destaca por su amplitud el Valle de Agaete, que acoge a la capital municipal. Por consiguiente, el relieve no sólo dibuja los rasgos fundamentales del paisaje, sino que ha condicionado el devenir histórico de estos parajes.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 8

8

Los factores que determinan el modelado del relieve son fundamentalmente la variedad litológica, la edad de los sustratos y los agentes geodinámicos que han venido actuando a lo largo de la historia geológica de la isla, de modo que a cada sustrato le corresponden formas concretas. A pesar de la amplia variedad litológica que registra el municipio, la vasta superficie que ocupan los sustratos correspondientes a los basaltos miocénicos, que conformaron el basamento de la isla, y los pertenecientes a la formación traquítico-riolítica, ambos emitidos durante su primer ciclo volcánico, que cubren la mayor parte del territorio municipal, ha condicionado en un grado muy elevado sus geoformas. La naturaleza abrupta del relieve municipal se encuentra determinada por la marcada incisión de la red hídrica, encajada sobre las líneas de debilidad de aquéllos sustratos. A grandes rasgos, han sido identificadas en el municipio tres grandes unidades de relieve:

- El macizo antiguo, correspondiente con la porción del de Tamadaba que se extiende sobre en término municipal. Incluye sus cotas más elevadas. Su formación se remite a la aparición de la isla emergida, durante el Mioceno.

- Los barrancos, que seccionan, fundamentalmente, una porción del edificio en escudo que conformó en un primer momento la isla emergida, de edad mio-pliocénica.

- Los escarpes, tallados por la marcada incisión de la red hídrica, encajada sobre las líneas de

debilidad de los basaltos miocénicos y, especialmente, de los correspondientes a la formación traquítico-riolítica, ambos emitidos durante el primer ciclo volcánico de la isla, y por el desmantelamiento del macizo de Tamadaba, a causa de la acción erosiva del mar y de las alteraciones tectónicas.

En los dominios de cada una de estas tres macroformas se han identificado unidades geomorfológicas básicas, que se recogen en la cartográfica temática, y que son descritas a continuación. Formas constructivas Son las estructuras derivadas de los procesos volcánicos que ha experimentado este sector de la isla. El macizo de Tamadaba muestra rasgos morfológicos que se encuentran a medio camino entre los macizos basáticos y los traquifonolíticos. Desde una crestería que conforma el eje del macizo, que se alterna con algunas superficies de aplanamiento, de la que forman parte la cotas más elevadas del municipio, como los picos de La Bandera (1.444 metros sobre el nivel del mar) y de La Diferencia (1.224 metros de altitud) y el Roque Faneque (1.027 metros de altitud), que cae casi cortado sobre el océano, parte una profusa red de drenaje y abruptas vertientes que muestran paleovalles y superficies de arrasamiento, testigos de la evolución geomorfológica de la isla. Ambas morfologías son indicadoras de la existencia de diferentes fases del modelado erosivo. Los potentes escarpes que delimitan el macizo, cuya formación ha sido propiciada por la existencia de una intrincada de diques que lo flanquea, refuerzan su carácter montano. El macizo es un testigo subaéreo del basamento insular, muy accidentado, con marcadas pendientes y elevadas cimas. El contacto con el mar se resuelve mediante espectaculares acantilados que, en Faneque, superan ampliamente los 500 metros de altitud. Desde el mar, y a través del cantil, se aprecia la estructura interna del primer escudo volcánico que dio origen a la isla, conformado por la superposición de una multitud de coladas de lava, alternadas con estratos piroclásticos y conos sepultados, salpicado todo de una densa malla de diques, que hicieron las veces de chimeneas del magma, en su ascenso. El paulatino retroceso del litoral acantilado ha ocasionado la aparición de barrancos colgados, a una notable altitud. Montaña Blanca, en cuya vertiente meridional se encuentra emplazada la capital del municipio, es un relieve residual basáltico, correspondiente al primer basamento de la isla, de morfología suavizada, que ha quedado en resalte a consecuencia de la erosión diferencial.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 9

9

Un interfluvio en rampa flanquea el límite septentrional del municipio, desde las inmediaciones del Roque de Maninidra, a una cota que supera los 600 metros de altitud, hasta el llano de las Moriscas, en la franja costera. Esta divisoria de aguas, que delimita los barrancos Hondo y de Agaete, se encuentra labrada sobre lavas basálticas pleistocénicas. Los conos volcánicos salpican de forma muy dispersa la mitad septentrional del municipio. Su cronología se enmarca en el ciclo post-Roque Nublo. Los que tienen edad pleistocénica se encuentran desgastados por efecto de la erosión. Es el caso de la montaña de Las Moriscas, casi en el límite septentrional del municipio, en su litoral; de montaña de Berbique, apostada sobre la vertiente norte del macizo de Tamadaba y, especialmente, del emplazado en la punta del Turmán, que se encuentra completamente desmantelado. Los últimos eventos que han modelado la fisiografía del término municipal fueron las erupciones estrombolianas que, durante el Holoceno, originaron los centros eruptivos de las Cuevas de Bohodén, entre los barrancos de Los Berrazales y El Sao; de Los Berrazales-Caideros, constituido por dos bocas de emisiones, abiertas en el mismo episodio volcánico, que se encuentran apostadas sobre la vertiente occidental del Barranco de los Berrazales, y de los Berrazales, constituido por escorias gruesas y bombas, de tonalidades rojizas, con un elevado grado de compactación. Este último, el único emplazado en el municipio de Agaete, se encuentra muy desmantelado. El centro eruptivo de Caideros muestra planta circular. Su altura no supera los diez metros. Se encuentra conformado por escorias. Del conjunto Los Berrazales-Caideros se derramaron coladas muy escoriáceas, a modo de cascadas, que descendieron por las vertientes hasta llegar al barranco, por donde se canalizaron hasta alcanzar el mar, junto al actual Puerto de Las Nieves. De la emisión de las coladas, que discurrieron a lo largo de algo más de 7 kilómetros, por el lecho del barranco, permanecen como testigos algunos retazos de malpaís holoceno que salpican el fondo del valle. Los depósitos de sedimentos aluviales y las sucesivas sorribas del malpaís con tierra de préstamo con objeto de incrementar la superficie cultivada, han acabado por casi hacer desaparecer los vestigios de aquellas erupciones subhistóricas. Formas erosivas Son el producto del efecto del intemperismo sobre los diferentes sustratos emitidos durante la historia volcánica de la isla. Los barrancos de Agaete y de El Risco, conforman sendos valles en artesa, de fondo plano, que facilitan el desague de ambas cuencas. Las terrazas aluviales, a modo de retazos, se han ido apostando en torno a los dos cauces. Sus sedimentos constituyen los suelos más fértiles del municipio. En las vertientes se han observado dos tipos de glacis, generados durante el Pleistoceno, con unas condiciones climáticas sensiblemente distintas de las actuales. Los glacis-coluviones, más escasos, adoptan desde una perspectiva cenital una planta triangular, con el vértice agudo apuntando hacia el sector superior del depósito. Se encuentran asociados a los escarpes generados sobre los sustratos basálticos del municipio, en la vertiente noroccidental del macizo de Tamadaba, y en la septentrional del Barranco de Agaete, en torno a Las Chobicenas. Los glacis traquitofonolíticos muestran mayor longitud. Están asociados a los grandes escarpes del macizo de Tamadaba-Tirma. Desde el núcleo central del gran macizo de Tamadaba parte una profusa red de drenaje radial conformada por numerosos cursos hídricos, entre los que destacan los barrancos de La Palma, de Guayedra, de María y del Ingenio. Se trata de cursos encajados que, en su escaso recorrido, salvan una marcadísima pendiente. Formas de acumulación En torno a los cauces de los barrancos de Agaete, del Risco, y en menor medida, de los lechos de los cursos hídricos de La Palma, de Guayedra, del Juncal, y de los barrancos de María y del Ingenio, tributarios del curso de Agaete, se han ido acumulando depósitos aluviales que constituyen los suelos más fértiles del municipio.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 10

10

Formas de origen marino Un acantilado, labrado sobre sustratos traquibasálticos, producto del progresivo desmantelamiento del macizo de Tamadaba a causa de la acción erosiva del mar, de las alteraciones tectónicas y de la fuerza de la gravedad, se prolonga entre la playa de Las Nieves y El Cuervo, en el límite costero con el municipio de La Aldea de San Nicolás, y sólo se ve interrumpido por la presencia de algunas playas que se extienden sobre los desagues de los principales cursos hídricos que diseccionan este tramo del macizo. El imponente cantil permite contemplar los estratos de coladas lávicas superpuestas que lo conforman. Sus dimensiones, que en ocasiones superan los 500 metros sobre el nivel del mar, le confieren un elevado valor morfológico y paisajístico. Otro cantil de menores dimensiones recorre el litoral septentrional del municipio, desde el encuentro de los Llanos del Turmán con el mar hasta el Roque del Puerto, junto a la desembocadura del Barranco del Juncal. En este caso, el acantilado se encuentra esculpido sobre una amplia gama de sustratos pertenecientes a todos los ciclos volcánicos que han conformado la isla. Áreas de interés geomorfológico En este municipio, son espacios de singular valor por la peculiaridad de sus rasgos gemorfológicos los siguientes: - La porción del macizo de Tamadaba inserta en el término municipal, que muestra rasgos morfológicos que se encuentran a medio camino entre los macizos basáticos y los traquifonolíticos. Desde una crestería, que se alterna con algunas superficies de aplanamiento, de la que forman parte las cotas más elevadas del municipio, parte una profusa red de drenaje y abruptas vertientes que muestran paleovalles y superficies de arrasamiento, testigos de la evolución geomorfológica de la isla. Los potentes escarpes que delimitan el macizo, cuya formación ha sido propiciada por la existencia de una intrincada red de diques que lo flanquean, refuerzan su carácter montano. El macizo es un testigo subaéreo del basamento insular, muy accidentado, con marcadas pendientes y elevadas cimas. - El acantilado, labrado sobre sustratos traquibasálticos, producto del progresivo desmantelamiento del macizo de Tamadaba a causa de la acción erosiva del mar, de las alteraciones tectónicas y de la fuerza de la gravedad, que se prolonga entre la playa de Las Nieves y el límite costero con el municipio de La Aldea de San Nicolás. El imponente cantil permite contemplar los estratos de coladas lávicas superpuestas que lo conforman. Sus dimensiones, que en ocasiones superan los 500 metros sobre el nivel del mar, le confieren un elevado valor morfológico y paisajístico. - Los últimos eventos que han modelado la fisiografía del término municipal fueron las erupciones estrombolianas que, durante el Holoceno, originaron cuatro centros eruptivos, del que sólo el de los Berrazales se encuentra en Agaete. Se encuentra constituido por escorias gruesas y bombas, de tonalidades rojizas, con un elevado grado de compactación, aunque se encuentra muy desmantelado por efecto de la erosión. Desde los cuatro centros de emisión se derramaron coladas muy escoriáceas, a modo de cascadas, que descendieron por las vertientes hasta llegar al Barranco de Agaete, por donde se canalizaron hasta alcanzar el mar, junto al actual Puerto de Las Nieves. Del transcurrir de las coladas, que recorrieron algo más de 7 kilómetros, por el lecho del barranco, permanecen como testigos algunos retazos de malpaís holoceno, que salpican el fondo del valle. Los depósitos de sedimentos aluviales y las sucesivas sorribas del malpaís con tierra de préstamo con objeto de incrementar la superficie cultivada, han acabado por casi hacer desaparecer los vestigios de aquellas erupciones subhistóricas. - Los barrancos de Agaete y de El Risco, conforman sendos valles en artesa, de fondo plano, que facilitan el desague de ambas cuencas. En cualquier caso, todos los barrancos del municipio poseen un elevado interés geomorfológico, al vertebrar el territorio, especialmente (además de los dos grandes cursos mencionados), la densa red de drenaje que desde el núcleo central del gran macizo de Tamadaba se dispersa con disposición radial. Se trata de cursos encajados que, en su escaso recorrido, salvan una marcadísima pendiente.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 11

11

- En torno a los cauces de los barrancos de Agaete, del Risco, y en menor medida, de los lechos de los cursos hídricos de La Palma, de Guayedra, del Juncal, y de los barrancos de María y del Ingenio, tributarios del curso de Agaete, se han ido depositando sedimentos que han acabado por configurar terrazas aluviales que albergan los suelos más fértiles del término municipal. La expresión cartográfica de esta variable ambiental se encuentra en el Plano IA. 04 “Geomorfología y áreas de Interés Geomorfológico” de este Documento.

2.3 Clima

Esta variable ambiental se encuentra ampliamente desarrollada en el apartado 3.4 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. El municipio de Agaete se localiza en la mitad septentrional de Gran Canaria, a caballo entre sus dos grandes dominios bioclimáticos, denominados Alisiocanaria, que se encuentra sometido a la influencia de los Alisios, en contraposición a Xerocanaria, que ocupa la mitad suroccidental de la isla. El término municipal se extiende con una disposición trapezoidal, desde el Atlántico hasta las cumbres del macizo de Tamadaba, donde se sitúa su vértice superior, en el pico de La Bandera (1.442 metros de altitud). La marcada oscilación altitudinal del municipio ha propiciado la existencia de una variabilidad climática muy notable, que incluye sectores muy áridos, en torno a la línea de costa, hasta enclaves que registran precipitaciones que rondan los 700 mm anuales. Tipos de tiempo El clima de Canarias es producto, a grandes rasgos, de la interacción de situación en el contacto de dos dominios climáticos: la circulación del Oeste de la latitud templada y las altas presiones subtropicales. La interacción de esta dinámica atmosférica con los condicionantes orográficos de las islas genera tres tipos de tiempo fundamentales en el archipiélago: el régimen de alisios, las situaciones de inestabilidad y las advecciones de aire sahariano. Precipitaciones La franja costera Desde el nivel del mar hasta los 300 m. los registros pluviométricos son muy exiguos, aunque en el entorno que se extiende desde el Barranco de Guayedra hasta Faneroque rebasan ligeramente los 200 mm. de media anual, a causa de las lluvias orográficas propiciadas por las cercanas cumbres del macizo de Tamadaba A excepción de estos enclaves, el resto de los sectores costeros poseen un clima de evidentes rasgos desérticos. La humedad ambiental, tanto por su proximidad al mar como por el frecuente estancamiento en los sectores más elevados del macizo, es elevada, en torno al 71%; además, su posición expuesta a la incidencia de las grandes borrascas que alcanzan la isla con una componente meridional provoca que el macizo de Tamadaba, y el resto de la mitad sur del municipio se vean afectados por las precipitaciones que estas perturbaciones originan. En la Villa de Agaete, a sotavento de la influencia de estas borrascas, las lluvias son escasas (Agaete, con 188,7 mm. de precipitación media anual). Las medianías y las cumbres del municipio Por encima de los 400 metros de altitud, aproximadamente, las lluvias comienzan un incremento exponencial a medida que se asciende. Se entra, de este modo, en la franja altitudinal correspondiente a las medianías y cumbres. Los rasgos climáticos de las medianías altas y de las cimas del municipio, como sucede con el territorio de la mitad norte de la isla, está condicionado por la orientación septentrional de una una apreciable porción de sus vertientes, que provoca su exposición al mar de nubes que arrastran los Alisios. Conforma la estampa húmeda del municipio.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 12

12

La variada gama de registros pluviométricos viene determinada por las diferentes orientaciones de los enclaves y por la desigual altitud. Las medianías altas y las cumbres del municipio ofrecen una exposición favorable a todas las situaciones de inestabilidad atmosférica que afectan al archipiélago, donde confluyen especialmente los efectos de la advección del frente polar y de las profundas borrascas que generan vientos del tercer cuadrante y que afectan preferentemente a los sectores suroccidentales y a las cumbres de las islas más montañosas, especialmente a las áreas más próximas a la gran divisoria de vertientes que delimita las dos grandes unidades ambientales de la isla: Xerocanaria y Alisiocanaria, provocando copiosas precipitaciones. La mejor disposición orográfica de las cumbres occidentales ante la llegada de perturbaciones de componente norte y la incidencia del mar de nubes en la franja de máxima condensación determina una mayor regularidad de los registros pluviométricos. Sin embargo, ésta es una afirmación relativa que hay que enmarcar dentro de un contexto regional de acusada irregularidad. A un año lluvioso pueden antecederle o seguirle otros de marcada aridez. Así sucedió, en un caso extremo de discontinuidad interanual, entre los años 1952 y 1953. Durante el primero se recogieron en Tamadaba 438,1 mm, mientras que durante el año siguiente se registraron 1.158,9 mm, una cifra 116,3% superior. La distribución mensual de las precipitaciones muestra también un comportamiento geográfico diferenciado, según sea la altitud de la localidad analizada. En los sectores de medianías, aquellos donde la influencia de los alisios y de las perturbaciones septentrionales es más relevante, el mes más lluvioso es Diciembre, seguido de Noviembre y Enero. La irregularidad estacional muestra un comportamiento similar. Todas las estaciones señalan al invierno como el periodo más lluvioso; sin embargo, se observan diferencias. Los inviernos de las medianías no alcanzan el 50% de las precipitaciones, mientras que la cumbre y la franja litoral superan este porcentaje. El otoño muestra valores, en todos los casos, en torno al 30%. Los porcentajes de la primavera son, como sucede con los invernales, superiores en las medianías -con cifras próximas al 20%- que en las cumbres y en la costa, con valores ligeramente superiores al 15%. Durante el verano todas las estaciones pluviométricas registran una marcada sequía, rasgo este que confiere un carácter mediterráneo al clima del archipiélago; sin embargo, resulta más acusada en la costa, con cifras que en ningún caso alcanzan el 1% de la precipitación anual, mientras que en las cumbres del municipio, los porcentajes se aproximan al 3%. De la exposición de estas cifras se deduce que los sectores de medianías muestran un régimen pluviométrico más regularizado; la causa habría que buscarla en la exposición favorable a la práctica totalidad de las situaciones que causan inestabilidad atmosférica en el archipiélago y a la óptima orientación frente a la incidencia de los Alisios, que confiere valores relativamente relevantes a las precipitaciones veraniegas. La franja comprendida entre los 700 metros y las cumbres del municipio registra la influencia directa del mar de nubes que queda patente tras observar los registros pluviométricos recogidos a lo largo del verano climatológico, con valores superiores a los 15 mm. Además, es preciso considerar que a diferencia de lo que sucede durante el verano, en los meses de otoño e invierno la inversión térmica asociada a los Alisios incrementa su cota, haciéndolo también, por tanto, la capa húmeda que, en su ascenso adiabático, puede generar precipitaciones de cierta entidad. Durante la mayor parte de los años, que se estima en torno al 80% de los de las series analizadas, se registran el las medianías altas y en las cumbres del municipio precipitaciones superiores a los 50 mm, considerada la cantidad mínima susceptible de causar dificultades de orden geomorfológico, social y económico, aunque la presencia de una significativa cubierta vegetal en Tamadaba provoca que la cifra establecida sea superior. Las precipitaciones más copiosas se registran en los mismos sectores donde se alcanzan los valores pluviométricos medios anuales más elevados, esto es, en las medianías altas y en las cumbres del municipio, donde los valores máximos en 24 horas superiores a los 100 mm resultan frecuentes. La torrencialidad de las precipitaciones se pone de manifiesto al estimar la traducción porcentual mensual

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 13

13

y anual de los eventos pluviométricos diarios. En el pinar de Tamadaba, durante el año 1955, el 35% de las lluvias registradas lo hicieron en un solo día del mes de octubre; la cifra consignada (326 mm) supuso el 63,7% de las precipitaciones recogidas a lo largo del citado mes. Aunque no se dispone de información recogida al efecto en las estación pluviométrica emplazada en el pinar de Tamadaba, las nevadas en sus cumbres pueden resgistrarse a lo largo del invierno, especialmente en los meses de Enero y Febrero, aunque la aparición de este meteoro resulta aquí sumamente inhabitual. Ver en el anexo la Tabla 4.1. “Precipitaciones medias mensuales y anuales (mm.) (1981-2010)”. Los efectos de las precipitaciones torrenciales Un rasgo destacable de las precipitaciones que se registran en la isla es el de la gran intensidad horaria, de modo que en los casos más extremos pueden sobrepasarse los 300 mm en 24 horas, originando efectos negativos sobre los sectores afectados. El municipio posee una red de barrancos que salvan importantes desniveles y actúan como canales de desagüe, por lo que pocas áreas presentan posibilidades de inundación. Sin embargo, esa pendiente facilita la pérdida de suelo, puesto que este tipo de precipitaciones posee un alto grado de capacidad erosiva que puede verse agravada por la acción del hombre de diversas formas: Precipitación horizontal Cuando las nubes son transportadas por los vientos Alisios, la interceptación de las gotitas que conforman la niebla puede producirse por la vegetación o por otras superficies. La vegetación se comporta como un obstáculo que provoca la condensación y la caída del agua. El grado de condensación depende del contenido de humedad de la nube, de la velocidad del viento que la transporta y de las propiedades físicas del obstáculo, de su localización y orientación. En un bosque el efecto de interceptación decrece a medida que la niebla penetra hacia el interior de éste. Michaeli (1973) llevó a cabo un estudio sobre los efectos de la precipitación horizontal en el archipiélago, analizando el papel que desarrollan los bosques en este proceso. En Tamadaba se realizó un estudio comparativo a través de medidas diarias de la precipitación registradas en un área descubierta y bajo un pino. El incremento de la precipitación obtenida bajo el árbol resultó tres veces superior al registrado en el área abierta. Esta diferencia podría ser aún mayor en sectores más expuestos. Michaeli, aunque apunta la posibilidad de que podría consignarse un margen de error negativo a causa de la mala ubicación del pluviómetro bajo el árbol, no duda de la existencia del fenómeno descrito. Afirma, además, que la influencia de las criptoprecipitaciones en el ámbito potencial del monteverde y de los pinares húmedos en Gran Canaria, como el de Tamadaba, resulta muy notoria, puesto que su dominio coincide con el área de incidencia del mar de nubes que arrastran los alisios. Este autor considera las criptoprecipitaciones de vital importancia en el balance hídrico de estos sectores de la isla, puesto que aportan un altísimo volumen de vapor de agua, atenúan la insolación y atemperan las temperaturas; todo ello influye de forma positiva en el mantenimiento y en la recuperación de los bosques. Temperaturas La escasez de registros termométricos y la distribución aleatoria de las estaciones de las medianías y cumbres del norte de la isla dificulta un análisis detallado de esta variable. El comportamiento de las temperaturas en estos sectores responde fundamentalmente a factores de índole geográfico, como son la cota sobre el nivel del mar, la exposición con respecto a la incidencia de

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 14

14

la capa de estratocúmulos que arrastran los Alisios y a las perturbaciones que alcanzan la isla con una componente septentrional. Siempre que las localidades se hallen en la misma fachada, la variable con mayor entidad que determina las fluctuaciones termométricas es la altura sobre el nivel del mar. Sin embargo, es necesario considerar otro factor que introduce variaciones en la regularidad del gradiente térmico vertical, se trata de la inversión térmica generada por la presencia de los Alisios, que queda situada en torno a los 1.300 metros, aunque con variaciones estaciónales. Las cimas de Tamadaba, se verían afectadas por ésta, especialmente durante los meses del verano. De este modo resulta comprensible la presencia de valores más elevados de las temperaturas mínimas medias de los meses más cálidos; además, es preciso considerar que las irregularidades térmicas provocadas por la aparición de movimientos diarios del aire, las denominadas brisas de valle, provocan que durante la noche el aire que desciende desde las montañas sea más frío que el circundante. Las temperaturas máximas absolutas aparecen durante las invasiones de aire sahariano. Los elevados valores que se registran en el Valle de Agaete durante estos eventos están provocados por el calentamiento adiabático de la masa de aire que supera el macizo de Tamadaba. Estos valores afectan especialmente a los sectores de medianías orientados a sotavento de la dirección de estos vientos. Las heladas, en diferente grado, afectan durante los meses del invierno a los sectores emplazados por encima de los 1.000 metros de altitud. Las temperaturas medias anuales no obedecen sólo a la elevación sobre el nivel del mar. A veces aparecen irregularidades térmicas que pueden ser interpretadas como resultado de la interferencia de factores de índole local, tales como la influencia de vientos periódicos, en concreto las brisas de valle y de montaña, y la presencia de nieblas ocasionales relacionadas con la llegada de perturbaciones oceánicas durante el invierno, que afectarían fundamentalmente a los enclaves más elevados. La desaparición durante el periodo invernal de la inversión térmica incide en la irregularidad termométrica. Las máximas absolutas de las cumbres de Tamadaba oscilan entre los 18° C del mes más frío y los 32° C del mes de agosto. Todo ello incide directamente en la determinación de la amplitud térmica que confiere mayor grado de continentalidad a las estaciones situadas en la cumbre del municipio Ver en el anexo la Tabla 4.2. “Régimen termométrico de Agaete (ºC) (1982-2012)”. Ver en el anexo la Tabla 4.2. “Régimen termométrico de Tamadaba (ºC) (1951-1970)”. Vientos El comportamiento de esta variable se halla condicionado por la inserción del archipiélago en una latitud subtropical afectada por la incidencia del régimen de los Alisios; sin embargo, el intrincado relieve del municipio, además del efecto de las brisas periódicas, modifica sustancialmente, en numerosos casos, la circulación general del régimen de vientos. Además, en las áreas de montaña el dominio a lo largo del año corresponde a los vientos de componente WNW, aunque se acentúa durante la primavera. Las elevadas cotas provocan, además, la intensificación de la velocidad que resulta especialmente evidente en las divisorias de vertiente y de modo más concreto en las degolladas (collados), aspecto éste que debe tenerse en consideración en el momento de planificar infraestructuras en localizaciones de este tipo. Aquí la velocidad puede superar sin dificultad los 100 Km/h. coincidiendo con la llegada de perturbaciones al archipiélago durante los meses invernales. La escasez de estaciones que recojan información del comportamiento de los vientos limita un análisis detallado de esta variable. En la franja costera los vientos dominantes son del primer cuadrante. Éstos presentan un porcentaje mayoritario, que se aproxima al 70% de los registros totales. La mayor frecuencia en la aparición de vientos de esta componente se registra durante los meses de verano: junio, julio y agosto, por este orden, con el 83%, en los dos primeros y el 77% en el último mes. Las calmas representan el 5% de los

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 15

15

registros anuales, que se corresponde con algo menos de un mes de duración, especialmente durante el otoño climático; ésto es, septiembre y octubre, por este orden. Los vientos del segundo y tercer cuadrante suelen estar ausentes durante el periodo veraniego y presentan mayor frecuencia de aparición a lo largo del invierno, especialmente durante el mes de enero. El porcentaje anual de los vientos registrados con estas direcciones es del 3,8% en los vientos del tercer cuadrante y del 6,2% para los del cuarto. Éstos muestran una frecuencia de aparición superior en las medianías y las cumbres del municipio. Aunque poseen una distribución relativamente homogénea a lo largo del año, es especialmente durante el otoño y el invierno cuando lo hacen con más frecuencia. El porcentaje anual medio de aparición es del 21,4%.

Climas locales de medianías y cumbre La presencia en el municipio de una intrincada red de barrancos origina la presencia de irregularidades térmicas provocadas por la aparición de movimientos diarios del aire. Durante la noche las brisas que descienden al fondo de los barrancos son más frías que las temperaturas circundantes y durante el invierno provocan el aumento del riesgo de heladas en el entorno de las cumbres de Tamadaba. Las brisas de valle provocan que el fondo de los barrancos registre valores mínimos nocturnos inferiores a los consignados en las cresterías y en las laderas altas colindantes. Este fenómeno ha de ser considerado en la planificación de ciertas actividades. El riesgo de heladas se incrementa en los fondos de las depresiones de las cumbres de Tamadaba orientadas en dirección Norte-Sur, debido a que anochece antes y amanece más tarde, con lo que el periodo de embolsamiento del aire frío es más prolongado. Las laderas conforman un cinturón térmico donde el riesgo de heladas es menor. Las áreas cubiertas de bosques sufren modificaciones en los parámetros climáticos generales. El bosque desempeña el papel de un islote frío que obliga a las corrientes de aire a desviarse en su trayectoria. En su interior, la humedad relativa es elevada a causa de la continua transpiración y a la disminución de las corrientes de aire. La temperatura media diurna desciende y con ella la oscilación térmica.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 16

16

Índices climáticos Índice de Lang Lang estableció un índice climático general denominado Regen-faktor (1915) que se obtiene del cociente de la precipitación media anual en mm y de la temperatura en °C (P / T), en función del cual se establecen diferentes áreas climáticas, desde los desiertos a las zonas superhúmedas. Para la estación de Agaete se obtiene la cifra:

Agaete P / T = 27,1 Valor que se inserta en el intervalo de los climas áridos (P / T entre 20 y 40) Para la estación de Tamadaba se obtiene el siguiente registro:

Tamadaba P / T = 56,7 Cifras que se insertan en el intervalo de los climas húmedos de estepas y sabanas (P / T entre 40 y 60), pero muy próximos al intervalo de los climas de zonas húmedas de bosque claro. Índice de Martonne Este parámetro conocido también como "Índice de Aridez", se utiliza para llevar a cabo estudios hidrológicos. Su expresión matemática es:

A = P/T + 10 Donde P es la precipitación media anual en mm y T la temperatura en °C. El valor de A correspondiente a la estación de Agaete es de 4,7. Esta cifra se se encuentra dentro del intervalo de los climas hiperáridos. El resultado obtenido para la estación de Tamadaba es de 20,3, que corresponde a climas con humedad suficiente, aunque próximo al umbral de los climas con tendencia a la sequedad. Este índice se puede completar con otro mensual que se corresponde con la siguiente ecuación:

a= 12 p/t + 10 Donde p corresponde a la pluviometría mensual en mm y t a la temperatura media mensual en ºC. El análisis mensual pone de manifiesto la existencia de un periodo extremadamente seco que comienza en el mes de abril y se extiende durante los meses veraniegos, hasta bien avanzado el otoño. El resto del año, esto es, los meses del invierno climático, además de marzo y noviembre pertenecen a la categoría de áridos. Sólo diciembre, el mes más húmedo, corresponde a la categoría de mes con tendencia a la sequedad. En la estación de Tamadaba, el periodo crítico (clima hiperárido), mucho más recortado que en la estación costera, se prolonga a lo largo de los meses del verano climátológico (desde junio hasta agosto). El final de la primavera y el comienzo del otoño (mayo y septiembre) muestra rasgos áridos. El resto de los meses; esto es, octubre, noviembre y los correspondientes al invierno y al comienzo de la primavera presentan humedad suficiente. Abril es el único mes con tendencia a la sequedad en Tamadaba. Ver en el anexo la Tabla 4.3. “Índice de Martonne. Agaete”. Ver en el anexo la Tabla 4.3. “Índice de Martonne. Tamadaba”.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 17

17

Índice de termicidad Rivas-Martínez a través del Índice de Termicidad (It) relaciona el régimen térmico con la delimitación de los pisos bioclimáticos de la Macaronesia. El índice es el resultado de la suma de la temperatura media anual, de las medias del mes más frío y del más cálido, todo multiplicado por 10. La expresión matemática es:

It = (T+ m+ M) x10 Y los pisos bioclimáticos que propone son: Ver en el anexo la Tabla 4.4. “Pisos bioclimáticos”. El índice de termicidad adquiere para las estaciones consignadas los siguientes valores y horizontes: It (Agaete) = (20,6 + 14,6 + 20,6) x 10 = 558 Infracanario inferior It (Tamadaba) = (17,35 + 9,5 + 14) x 10 = 408,5 Termocanario superior Tipo de invierno Se establece a partir de un intervalo de la temperatura media de las mínimas del mes más frío. En el caso que nos ocupa quedan definidos como muy cálido (9 - 14° C), en el caso de Tamadaba, con un valor de 9,6° C. La villa de Agaete y el litoral del municipio se incluyen en el intervalo de inviernos extremadamente cálidos (> 14° C) (14,6° C, en Agaete). Tipos de ombroclimas Dentro de cada piso bioclimático, en función de la precipitación media anual (P) registrada, se distinguen diferentes unidades ombroclimáticas que, en la región macaronésica, presentan los siguientes umbrales: Ver en el anexo la Tabla 4.5. “Tipos de ombroclimas”. En las estaciones analizadas los ombroclimas son los que siguen: Agaete: P = 145 mm Árido El Risco: P = 168,3 Árido Tamadaba: P = 555,1 Subhúmedo Balance hídrico De la relación de los registros térmicos y pluviométricos se obtienen índices definitorios de las condiciones climáticas de las estaciones referidas. En el análisis del balance hídrico se ha tomado como referente el concepto de Evapotranspiración Potencial que se define como la cantidad de agua que perderá una superficie de suelo completamente cubierta de vegetación en crecimiento activo si, en todo momento, existe humedad suficiente para su uso por las plantas. El cálculo de la evapotranspiración potencial se ha llevado a cabo aplicando el método de Thornthwaite, expresado en las fichas hídricas. Las cifras obtenidas apuntan la presencia de un periodo deficitario de humedad que, en Agaete, se prolonga durante todo el año, mientras que en Tamadaba, además de a todos los meses del verano climatológico, afecta al último de la primavera y al primero del otoño.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 18

18

Durante estas temporadas no quedan cubiertas las necesidades hídricas del suelo y de la vegetación, con lo que ésta adopta mecanismos adaptativos que garantizan su conservación. Ver en el anexo la Tabla 4.6. “Balance hídrico de Agaete”. Ver en el anexo la Tabla 4.6. “Balance hídrico de Tamadaba”. La representación cartográfica del clima de Agaete se encuentra plasmada en el Plano IA. 05 “Clima” de este Documento.

2.4 Edafología

Esta variable ambiental se desarrolla en el apartado 3.6 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. Los suelos constituyen la plasmación física de la interacción de las variables abióticas y bióticas. Se trata de un recurso de difícil renovación, soporte del desarrollo de los ecosistemas terrestres y fundamento esencial en el desenvolvimiento de la actividad agraria. El conocimiento de sus potencialidades, de sus limitaciones de uso y de los riesgos que corre su integridad facilita en un grado elevado la planificación del territorio, especialmente en un espacio donde los usos agrarios tienen una destacada relevancia, como sucede en el territorio que aborda en este documento. La composición del sustrato geológico, la disposición orográfica, los rasgos climáticos -especialmente la variable pluviométrica- y la cubierta vegetal son los factores de orden natural que determinan la aparición de la gama de suelos. El análisis de los suelos del municipio se acomete a partir del trabajo elaborado por el edafólogo Juan Sánchez Díaz quien, en 1976, publicó un estudio de los suelos de Gran Canaria mediante la aplicación de la nomenclatura estadounidense que tipifica las unidades edáficas según orden, suborden, gran grupo y subgrupo. Desde la óptica de la estrategia de planificación y de la ordenación territorial, el aspecto más relevante del estudio es el establecimiento de la capacidad de uso agrícola de los suelos, una vez son clasificados mediante clases y subclases agronómicas. Esta clasificación permite establecer los rangos de calidad de los suelos desde la perspectiva de su aprovechamiento agrícola y los riesgos de erosión que presentan en virtud de las limitaciones existentes: pendiente, exceso de material grosero, presencia de afloramientos rocosos, exceso de agua y permeabilidad. Unidades edáficas Son doce las unidades edáficas consignadas en el término municipal de Agaete. Para determinar su capacidad agrológica se han considerado los siguientes factores: la pendiente, la profundidad y la textura del suelo. Las principales restricciones para el uso agrícola de los suelos son la erosión, el exceso o la carencia de agua y las circunstancias climáticas que les afectan.

Vertisoles

Se desarrollan en torno a los cauces de los barrancos de Agaete, Guayedra y El Risco. Se encuentran constituidos, fundamentalmente, por sedimentos con una elevada proporción de arcillas. Se trata de suelos muy productivos, con una capacidad agrológica elevada.

Entisoles

Se distribuyen por todo el territorio municipal, pero especialmente por su mitad septentrional. Son suelos de escaso desarrollo, conformados, fundamentalmente, por sustratos sedimentarios. Experimentan con frecuencia procesos de salinización. Poseen una moderada capacidad agrológica. Su mayor limitación estriba en la relativa ausencia de materia orgánica.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 19

19

Cambisoles

Ocupan los sectores más elevados del municipio, especialmente el pinar de Tamadaba. Se desarrollan sobre un amplio abanico de sustratos, entre los que destacan los depósitos aluviales y coluviales. No alcanzan una capacidad agrológica elevada a causa de su escasa potencia, como resultado de las marcadas pendientes sobre los que se desarrollan.

Cambisoles éutricos

Presentan las mismas características que los cambisoles, aunque solo se desarrollan sobre sustratos rocosos y no superan 50 cm de potencia. Su presencia se restringe en Agaete al entorno de Las Guirreras.

Fluvisoles

Como revela su nombre, se trata de suelos que se desarrollan sobre depósitos fluviales recientes, fundamentalmente. Son suelos profundos, derivados de la presencia de depósitos aluviales, que no muestran evidencias relevantes de procesos pedogenéticos, salvo la acumulación de materia orgánica. Suelen presentar una sucesión de horizontes bien delimitados, con texturas y colores diferentes, originados por el depósito de sedimentos de naturaleza variable, tras ser transportados por las aguas de escorrentía. Su presencia en el municipio se circunscribe a los mayores barrancos que lo seccionan; esto es, los de Agaete, de El Risco y de Guayedra. Estos suelos, acondicionados mediante drenaje y regadío, alcanzan una capacidad agrológica moderada.

Inceptisoles

Son suelos jóvenes, en evolución, que comienzan a mostrar el desarrollo de sus horizontes edáficos. Se desarrollan en enclaves sometidos a elevadas pendientes y en derrubios de ladera. En el municipio han sido consignados de forma dispersa en sectores elevados y en las planicies que se extienden entre Troya y Piletas. Su capacidad agrológica es moderada.

Luvisoles

Se desarrollan en sectores llanos y de pendientes tendidas, con una estación caracterizada por la existencia de registros pluviométricos elevados que permite el lavado de las arcillas que acaban por acumularse en los horizontes inferiores, como revela su enrojecimiento por la acumulación de óxidos de hierro. Son, junto con los entisoles, los suelos más abundantes en el municipio. La elevada lixiviación a la que son sometidos reduce notablemente su capacidad agrológica, que es baja o muy baja.

Calcisoles

El término calcisol deriva del vocablo latino "calcarius", que alude a la sustancial acumulación de caliza que registra este tipo de suelo. Se desarrollan en entornos sometidos a ombroclimas áridos y semiáridos, con relieves muy erosionados. Son suelos muy pobres en materia orgánica. La infiltración de agua durante los periodos húmedos es muy escasa. La intensa evaporación a la que se ven sometidos estos sectores durante la prolongadísima estación árida propicia la acumulación de sales carbonatadas en superficie. Su capacidad agrológica es baja o muy baja. En el municipio se desarrollan, fundamentalmente, en su franja costera, especialmente en el entorno del lomo de Las Moriscas, en las inmediaciones de Guayedra, en la Cruz del Tabaibal y en El Palmito.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 20

20

Regosoles

Son suelos desarrollados sobre materiales no consolidados. Presentan una escasa evolución, a causa de su reciente formación. Se localizan exclusivamente en el extremo suroeste del municipio. Su capacidad agrológica es baja.

Aridisoles

Ocupan, fundamentalmente, sendas vertientes del tramo inferior del Barranco de Agaete. Son suelos que contienen escasa materia orgánica. Se desarrollan en sectores sometidos a condiciones climáticas muy áridas. La mayor parte de los aridisoles del municipio muestran encostramientos calcáreos (caliches). Su capacidad agrológica es baja o muy baja.

Litosoles

Son suelos no evolucionados, resultado de una intensa erosión o de la acumulación reciente de aportes coluviales. Constituyen la etapa primaria de formación del suelo. Se localizan en terrrenos sometidos a pendientes muy acusadas, donde las condiciones ecológicas para la formación de suelo son inapropiadas. No hay, por tanto, edafogénesis, ni aparecen perfiles superficiales, sino un estrato C, que corresponde con la roca madre y que impide cualquier actividad de laboreo.

Antrosoles

Son suelos generados por la actividad humana. En el municipio se localizan en enclaves severamente antropizados. Su capacidad agrológica es muy baja. Capacidad agrológica del suelo La capacidad de uso agrario se refiere a la interpretación de las cualidades y características del suelo desde una óptica agronómica. Para establecer la calidad agrológica de los suelos del municipio, que permita abundar en una precisa planificación territorial; esto es, su potencialidad para su uso agrario, se ha consultado la cartografía del potencial del medio natural de Gran Canaria y las fichas asociadas. La clasificación, que contempla el establecimiento de cinco clases, parte de la establecida en Portugal (Azevedo y Cardoso, 1962), que desarrolla una previa, más compleja. Las que afectan al municipio de Agaete son las que siguen:

Clase B: Uso agrícola moderadamente intensivo

La capacidad de uso agrícola es elevada; sin embargo, presenta mayor número de limitaciones y de restricciones que los suelos de la Clase A, y requiere una explotación más cuidadosa, que debe incluir prácticas de conservación. La principal limitación física que presenta es la salinidad. Los valores de erosión actual son muy bajos a causa del suave relieve sobre el que se asientan. El déficit hídrico que experimentan desde la mitad de la primavera hasta el comienzo del otoño, y la aparición de elementos groseros y afloramientos rocosos que afectan al uso de maquinaria, constituyen restricciones moderadas al aprovechamiento agrícola.

Clase C: Clase agrícola con restricciones

Comprende suelos susceptibles de ser sometidos a una utilización agrícola poco intensiva, que requieren de una explotación cuidadosa y de la aplicación de prácticas de conservación. Los tipos de cultivo y el número de rotaciones que aceptan son inferiores a los de las clases A y B. El motivo estriba en las limitaciones de uso derivadas de la escasa potencia edáfica, de la presencia de sales y de la carencia de agua. El riesgo de erosión potencial es bajo en áreas de escasa pendiente, unas 16

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 21

21

toneladas por hectárea y año; aun así resulta pertinente el mantenimiento de la agricultura con el fin de evitar la pérdida de suelo. El contenido en materia orgánica, que alcanza porcentajes en torno al 4%, es elevado, y la textura, equilibrada. Los entisoles, los cambisoles, los fluvisoles y los inceptisoles son los suelos que en el término municipal de Agaete se encuentran incluidos en esta clase.

Clase D: Uso agrícola muy limitado

Corresponde a suelos que presentan limitaciones severas a su puesta en explotación agrícola. El riesgo erosivo resulta elevado o muy elevado. El contenido en materia orgánica es inferior al 2%. La potencia edáfica oscila entre 30 y 50 cm. La salinidad es baja. Presentan textura con fracción dominante y deficiente permeabilidad. Muestran pocas o, a lo sumo, moderadas limitaciones para la explotación ganadera. Los luvisoles, los regosoles y los cambisoles éutricos son las categorías edáficas predominante en el ámbito territorial que aborda este documento. Algunos tramos de las vertientes de los barrancos que cruzan el ámbito territorial del municipio, que muestran pendientes relativamente enérgicas, han sido tradicionalmente objeto de explotación agrícola mediante la construcción de bancales con la finalidad de ampliar la superficie cultivada. El equilibrio alcanzado resulta frágil. El abandono de la agricultura en las vertientes provoca el deterioro del suelo e incluso su pérdida. De este modo, debiera preservarse el paisaje agrícola tradicional. La elevada erosión que experimentan algunos sectores pudiera atenuarse mediante la restauración de la vegetación.

Clase E: Uso agrícola con limitaciones severas Abarca suelos poco evolucionados, de escasa potencia y limitaciones severas para el desarrollo radicular de las plantas a causa de la existencia de pendientes muy acusadas, que no favorecen la génesis edáfica. Los valores de la erosión son altos. El contenido en materia orgánica no alcanza el 2%. La potencia oscila entre 10 y 30 cm. La salinidad es baja y la textura, equilibrada. En algunos casos se encuentran irreversiblemente erosionados. No son aptos para la explotación agrícola; sin embargo, pueden servir de soporte para la restauración de la vegetación. Valor agrícola y áreas de interés agrícola El concepto de valor agrícola alude, no sólo a la calidad agrológica de los suelos, sino a su productividad, que incluye también la infraestructura desplegada para poner en producción el recurso edáfico. De este modo, las zonas de mayor valor agrícola suelen coincidir con las áreas donde se ha llevado a cabo una mayor capitalización de las explotaciones. En el municipio de Agaete, estos espacios conforman un paisaje agrícola con un parcelario que se ha visto sometido a un proceso de franco abandono desde las últimas décadas del pasado siglo, aunque el lecho del Barranco de Agaete y, en menor medida, el de El Risco, aun albergan parcelas destinadas a sostener una agricultura intensiva cuya producción se destina a abastecer el mercado insular y, en menor medida, el exterior. Así pues, resultan predominantes en el término municipal los terrenos agrícolas que un día sostuvieron cultivos de exportación (plátanos y tomates, fundamentalmente) sometidos a un abandono prolongado, que supera con frecuencia los 30 años. Así sucede en el lomo de Las Moriscas, en el llano homónimo, y en los llanos del Turmán, de Troya y de Antonio Mendoza, y, lejos de aquí, en algunos tableros emplazados en la desembocadura del Barranco de El Risco, que albergaron parcelas destinadas al cultivo del tomate, cubiertas con frecuencia de invernaderos. La fácil adaptación del cultivo del tomate a medios áridos, con suelos poco evolucionados y de escasa capacidad agrícola, propició su implantación en estos enclaves, creando un paisaje agrario característico, surcado de acequias y salpicado de cuarterías destinadas a acoger a los aparceros. En cambio, la platanera ocupó los mejores suelos del Barranco de Agaete, aunque a causa de la limitación que imponía al cultivo la presencia de la colada lávica emitida por las bocas efusivas

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 22

22

emplazadas en la cabecera de la cuenca hidrográfica, fue parcialmente sorribado con tierra de préstamo. Son estos suelos, junto a los que jalonan los cauces de los barrancos de Guayedra y El Risco, los que albergan un mayor valor agrícola. Aunque con una calidad inferior, también se ha delimitado como áreas de interés agrícola los llanos que se extienden entre las localidades de Troya y Piletas, en el extremo noroccidental del municipio, y el conjunto del terrazgo que se desarrolla en torno a las localidades de El Sao y El Hornillo, en sectores sometidos a una marcada pendiente, que ha propiciad el abancalamiento de las vertientes. En la actualidad, buena parte de las parcelas se hallan abandonadas, aunque conservan muros, bancales e infraestructura hidráulica de valor etnográfico. Las parcelas que se mantienen en cultivo producen, fundamentalmente, papas, hortalizas y frutales destinados al autoconsumo y al abastecimiento del mercado local e insular. Áreas agrícolas en la periferia urbana En cumplimiento de la Directriz 58.2, apartado c, y tras considerar la naturaleza del territorio que es objeto de este análisis ambiental, especialmente su variable edáfica, se han establecido las zonas de interés agrícola en periferias urbanas, definidas por la proximidad a los asentamientos de población de los terrenos que albergan una elevada capacidad agrícolas, y que han sido tradicionalmente puestos en cutivo. Puesto que el emplazamiento original de los principales caseríos históricos del municipio se encuentra estrechamente vinculado a la presencia de tierras fértiles, sus entornos cuentan con frecuencia con terrenos que albergan una destacada capacidad agrológica, especialmente cuando la pendiente es tendida (inferior al 10%). No obstante, y a causa de la exigua capacidad de expansión urbana de los asentamientos del término municipal como resultado de la amplia extensión de superficie protegida, debe realizarse un esfuerzo con objeto de discriminar los suelos de muy elevada capacidad agrológica, de aquellos cuya fertilidad resulta más discreta, para que, cuando se considere inevitable y se justifique de modo suficiente, sean estos últimos los que sostengan los nuevos crecimientos urbanísticos. Aspectos metodológicos El mapa de “capacidad agrológica” expresa la capacidad de uso agrario de cada clase edáfica con el propósito de establecer su potencialidad agrícola. El mapa de “usos actuales del suelo” plasma los núcleos de población cuya periferia es objeto de este análisis, que introduce el concepto del grado de explotación de las áreas agrícolas aledañas a los asentamientos. Con toda esta información, se ha llevado a cabo un análisis que ha permitido delimitar y cualificar las áreas agrícolas en las periferias urbanas, su nivel de explotación y su interés para el uso agrícola. Exposición de resultados El municipio cuenta con 798.486 hectáreas destinadas al uso agrícola en los entornos urbanizados, de los que el 32,9% se encuentra en explotación (209.521 hectáreas). Del conjunto de la superficie, se estima que tienen interés para su uso agrícola, el parcelario que se extiende sobre sectores de pendiente tendida y de capacidad agrológica alta y muy alta, que se constituyen en entornos de elevada potencialidad agrícola. Estos espacios se desarrollan, fundamentalmente, en torno a los cauces de los principales barrancos que surcan el territorio municipal (Agaete, Guayedra y El Risco), sobre las terrazas aluviales que flanquean los cursos hídricos, y, con una calidad agrológica inferior, en algunos tableros, emplazados en las medianías bajas del municipio; especialmente, en el entorno de Piletas. El reflejo cartográfica de esta variable ambiental se puede observar en los planos IA. 07 “Suelos y Capacidad Agrológica” y IA. 8 “Áreas agrícolas en periferia urbana”, de este Documento.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 23

23

2.5 Red hidrográfica e hidrología

Esta variable ambiental se halla ampliamente desarrollada en el apartado 3.5 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. Una adecuada caracterización hidrológica del municipio contribuye de forma determinante, tras evaluar sus aspectos más relevantes, a corregir desequilibrios y a obtener un modelo de ordenación integral del ciclo del agua. Recursos superficiales Son los generados por la interceptación y el almacenamiento de la escorrentía superficial que discurre por los cauces de los barrancos, producto de las precipitaciones que se registran en sus cuencas. Desde la óptica de la planificación hidrológica, el inventario de los recursos hidráulicos superficiales permite cuantificar y localizar la infraestructura de captación y almacenamiento, lo que facilita el conocimiento de los caudales aprovechados; además, hace posible definir los aspectos medioambientales a los que la planificación hidrológica no debe permanecer ajena, como sucede con la caracterización de avenidas y de procesos erosivos. Características de la cuenca de Agaete y de los principales barrancos del municipio La cuenca de Agaete es la más amplia del municipio. Algunos de los barrancos que la conforman alcanzan el orden 4, como sucede con el de Agaete. Sus aguas son embalsadas en las presas de Lugarejos, Los Pérez, Las Tierras de Manuel y Samsó. El Valle de Guayedra alberga algunos barrancos cuyos cauces alcanzan el orden 3, como sucede con el extenso curso de Los Palos Blancos. El Barranco de Guayedra llega a alcanzar el rango 5 en su desembocadura. Sus aguas son recogidas en algunas balsas. La cuenca de El Risco, en la que solo se emplaza la pequeña presa de El Vaquero, es la que menor capacidad de embalse posee; sin embargo, tras la de Agaete, es la segunda cuenca más extensa del municipio. En consecuencia, su red hídrica se encuentra muy vertebrada. La mayor parte de los cursos hídricos que la conforman son de orden 1 y 2, aunque el Barranco de Chajunco alcanza el orden 4. Con el objeto de describir las características de las dos grandes cuencas que surcan el municipio se han trazado curvas isócronas mediante la consideración de las velocidades medias del agua de escorrentía, estimadas en tres tramos de cada gran barranco. Para el cálculo de las velocidades y para determinar los coeficientes de escorrentía se han utilizado los mismos valores adoptados en los "Estudios de Máximas Crecidas". En todas las cuencas el tiempo de concentración (TC), obtenido del trazado de las isócronas, es superior al que resulta de emplear algunas de las fórmulas convencionales, como la de Giandotti. Esta diferencia se debe a los arrastres sólidos que transporta la avenida, que menguan la velocidad media de propagación. Se definen estos valores en diferentes tramos, diferenciándose tres sectores: alto, medio y bajo. No se especifican los límites de éstos, salvo que coincidan con los intervalos de cota especificados para la adopción de las velocidades medias del agua. Con el fin de simplificar el procedimiento de cálculo se ha optado por hacer coincidir estos límites con algunas líneas isócronas, comprobándose que el coeficiente de escorrentía resultante coincidía con el definido en los "Estudios de Máximas Crecidas". La distribución de intensidades a lo largo de cada hipótesis de duración del temporal es la siguiente: una intensidad constante para los temporales de 1 y 2 horas de duración. Tras 3 horas, la intensidad permanece uniforme durante las dos primeras, y decrece un 20% durante cada hora añadida, hasta alcanzar un mínimo de un 20% en los temporales de 6 ó más horas.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 24

24

A efectos comparativos, se han calculado los caudales máximos de las avenidas en cada cuenca y para cada periodo de retorno considerado, siguiendo el método racional. La información relativa a las ramblas no ha sido abordada al carecer de fuentes que desarrollen la cuestión. Ver en el anexo la Tabla 5.1. “Datos de la cuenca de Agaete”. Ver en el anexo la Tabla 5.2. “Coeficientes de escorrentía (Cuenca de Agaete)”. Ver en el anexo la Tabla 5.3. “% de la precipitación de 24 h. (Cuenca de Agaete)”. Ver en el anexo la Tabla 5.4. “Cálculo de las máximas avenidas en m3/sg. (Cuenca de Agaete). Método racional”. Ver en el anexo la Tabla 5.5. “Cálculo de las máximas avenidas en m3/sg. (Cuenca de Agaete). Método isocronas”. Aprovechamientos y volúmenes La única estimación de los recursos hidráulicos superficiales de la isla se estableció durante la confección del SPA-15. Partiendo de los datos pluviométricos y estimando la evapotranspiración se dedujo una aportación superficial entre los 64 y 85 Hm

3, según diferentes referencias. El mismo estudio

ya expresa cautelas sobre la validez de los datos. El número de aprovechamientos autorizados en la cuenca de Agaete y en las dos intercuencas que se internan en el municipio asciende a 47, que se corresponden con un caudal de 77.619 l/sg. autorizados a derivar, que equivalen a un volumen de 8.003.755 m

3, cifra que también incluye la de las presas. La

cuenca de Agaete cuenta con 12 aprovechamientos, que representa el 3% del total de la isla. El volumen autorizado en obras de captación de la cuenca de Agaete ha sido estimado en 4.323.907 m

3.

Es preciso considerar que esta cifra es muy inferior a la capacidad real de embalse existente, puesto que el volumen autorizado se refiere al que se permite derivar a lo largo de un año. Los datos sobre los aprovechamientos por cuenca e intercuencas hidrográficas pueden verse en la tabla que sigue. Ver en el anexo la Tabla 5.6. “Aprovechamientos autorizados”. Con objeto de almacenar las aguas de escorrentía se han desarrollado infraestructuras de captación, entre las que destacan las presas, que retienen el agua de algunos barrancos. Ver en el anexo la Tabla 5.7. “Embalses consignados en el municipio de Agaete”. Ni el Plan Hidrológico, ni ninguno de los documentos confeccionados para abordar específicamente las características hidrológicas de la isla desarrolla la procedencia de las aguas utilizada en las actividades económicas; esto es, si el agua empleada tiene su origen en la extracción subterránea, en la captación superficial o en métodos no convencionales. La información referida a los aprovechamientos de agua superficial desglosados por municipios puede observarse en el cuadro adjunto. El municipio de Agaete cuenta con 19 aprovechamientos autorizados de aguas superficiales, con un caudal autorizado a derivar estimado en 33.250 l/sg., que se traducen en el 3% del total insular; una cifra discreta en el contexto de los municipios de la isla. El término municipal con mayor caudal autorizado a derivar es el de Firgas, con 667.669 l/sg. y el 59% del conjunto, con evidente diferencia sobre los demás. Ver en el anexo la Tabla 5.8. “Aprovechamientos autorizados”.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 25

25

Con objeto de comprobar la adecuación entre las autorizaciones concedidas y las posibilidades reales de captación del agua superficial en cada cuenca, y a falta de registros rigurosos de la escorrentía, se han comparado las concesiones con la pluviometría, tras convertir los volúmenes autorizados y la precipitación media en caudales, suponiéndolos constantes a lo largo del año. Las comparaciones pueden observarse en la tabla correspondiente. En el conjunto de la cuenca y las dos intercuencas que ocupan el municipio de Agaete, la diferencia entre los caudales autorizados y la precipitación media es de 118.510 m

3 a favor de los primeros, cifra

que representa un 16.417% sobre el valor de las precipitaciones. Aún considerando esta cifra sólo de modo orientativo, resulta evidente que existe una grave distorsión entre el volumen autorizado y el que realmente se aprovecha. Analizando los resultados por cuenca e intercuencas se observan casos realmente alarmantes, como sucede con la intercuenca de Agaete-Moya, con un 10.691% de exceso autorizado sobre las precipitaciones. Ver en el anexo la Tabla 5.9. “Autorizaciones concedidas y posibilidades reales de captación del agua superficial”. El número total de obras de almacenamiento, asciende a 195, con una capacidad total de 2.651.404 m

3. La inmensa mayoría corresponde a la intercuenca de Agaete-Moya, con 193 y el 27% del total de la

isla, seguida a una enorme distancia de la intercuenca de La Aldea-Agaete, con 2 obras. La cuenca de Agaete no cuenta con ninguna obra de almacenamiento. En lo que se refiere a la capacidad, el orden por cuencas coincide con el del número de obras de almacenamiento. Sobresale la intercuenca de Agaete-Moya, con 2.621.004 m

3 y el 18% del conjunto de

la isla. Ver en el anexo la Tabla 5.10. “Capacidad de almacenamiento”. Agrupadas las obras de almacenamiento por términos municipales, el municipio de Agaete cuenta solo con 2 obras, un porcentaje irrelevante del conjunto de Gran Canaria. La capacidad de almacenamiento de estas obras es de 30.400 m

3.

Ver en el anexo la Tabla 5.11. “Obras de almacenamiento”. En el cuadro adjunto se resumen los datos relativos a las grandes presas de las cuencas que forman parte del municipio. Se han contabilizado 14 embalses con una capacidad de 6.246.150 m

3. La mayor

concentración de presas se registra en la intercuenca de Agaete-Moya con 8 unidades que representan el 13 % del conjunto de la isla y que pueden albergar un volumen de 1.806.500 m

3; le sigue la cuenca

de Agaete, con 5 embalses (8% de los embalses de la isla) y con una capacidad de 4.075.609 m3. La

intercuenca La Aldea-Agaete sólo alberga una presa. Ver en el anexo la Tabla 5.12. “Capacidad y número de grandes presas”. Gestión de las aguas superficiales Con el conocimiento actual de los aprovechamientos de aguas superficiales se deben adoptar diversas medidas. Así, el Plan Hidrológico propone proteger y preservar la capacidad de embalse existente, el aprovechamiento del recurso y su calidad. En las zonas en las que se dispone de conocimientos que indican la no conveniencia de levantar embalses, pero si existen recursos aprovechables, se debe incentivar su explotación mediante tomaderos. Se hace preciso fomentar el agrupamiento de los particulares que capten recursos superficiales dentro de una misma cuenca.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 26

26

En los cálculos vinculados con la gestión de los cauces y con el aprovechamiento de la escorrentía superficial debe quedar establecido el criterio de la existencia de sólidos en suspensión en un 20% del flujo, al menos. Además, las actuaciones que impliquen la modificación de la sección del cauce han de estimarse las máximas avenidas correspondientes a un periodo de retorno de 500 años. En las obras de almacenamiento, las dimensiones se calcularán tras un estudio de episodios lluviosos con una duración equivalente a la vida útil de la obra. El Plan Hidrológico de Gran Canaria estima que en las concesiones de ocupación de cauces se dará prioridad a las solicitudes cuyo fin sea el uso público. La documentación que acompañe a la solicitud deberá contener un estudio de las consecuencias ambientales que las obras provocarían. Se hace necesario elaborar un Plan Especial de Aprovechamientos de Áridos en Cauces Públicos. Quedará prohibido el uso de aguas superficiales, destinadas al consumo turístico. Se han de prever actuaciones que corrijan el riesgo de inundación en las intersecciones de los barrancos de Agaete y de Cho Vicente con la Autovía del Norte (GC-2) y con la carretera que pone en contacto el puerto de las Nieves con la villa de Agaete (GC-172), y de los cursos hídricos que jalonan el litoral del municipio con la carretera de La Aldea (GC-200). Urge llevar a cabo las obras necesarias que solucionen los riesgos de inundación en aquellos puntos en los que se ha detectado su existencia. Recursos subterráneos. Características del acuífero El rasgo que mejor define el acuífero de la isla es la elevada heterogeneidad hidrogeológica a causa de la interacción de parámetros físicos y antrópicos. Entre los primeros se encuentran la naturaleza de las emisiones volcánicas, su composición química, la morfología de los depósitos, las fracturaciones y rellenos, y las relaciones espaciales entre las formaciones geológicas y los elementos distorsionadores del flujo (diques, pitones, y almagres). Los antrópicos derivan de los aprovechamientos que el hombre despliega para la obtención del agua, que con frecuencia modifican los flujos, comunican los acuíferos y provocan la sobreexplotación del recurso. Ante tal diversidad de condicionantes, la situación actual muestra una gran complejidad que a grandes rasgos muestra los siguientes rasgos: Flujo radial desde el centro hasta los bordes con gradientes hidráulicos variables en función de la litología. Niveles costeros iguales a los del mar en una franja perimetral de 3 a 6 Km. de anchura, con zonas deprimidas hasta 50 m. bajo el nivel del mar. En las formaciones antiguas, poco permeables, la dificultosa infiltración condiciona un flujo muy lento, un recorrido largo hacia la costa y un tiempo prolongado de residencia de las aguas en los acuíferos, lo que provoca altos niveles de conductividad. En la franja litoral existen áreas de salida de agua dulce al mar, y se observa con claridad la influencia de las litologías y la permeabilidad en los fenómenos de carga y descarga. Así, los afloramientos de la Formación Sálica que llegan al mar, por su baja transmisividad, actúan de barrera ante una probable intrusión salina, que sí se produce cuando las formaciones permeables alcanzan el mar. Características hidrogeológicas Siguiendo un orden cronológico, los grandes conjuntos geológicos que han conformado la isla y su comportamiento hidrogeológico son los que siguen:

Formación Basaltos Antiguos Compone un elevado volumen de materiales donde alternan coladas y escorias. Aunque al tratarse de productos efusivos, con desarrollo de escorias, deberían conformar un notable acuífero, su valor queda

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 27

27

devaluado a causa de los procesos naturales a los que han sido sometidos, fundamentalmente compactación y fracturación sellada. Los diques, abundantes en la serie, suelen comportarse como planos de preferente circulación vertical. En los basaltos antiguos, los afloramientos de agua se producen en las intercalaciones entre coladas.

Formación Sálica Incluye coladas traquiriolíticas, fonolíticas y piroclásticas. Las dos primeras, aunque de recorridos cortos, pueden desarrollar diaclasado vertical y niveles escoriáceos que favorecen la circulación del agua. Según sea la localización de los materiales emitidos, éstos se denominan intra o extracaldera. Los primeros no se localizan en el ámbito territorial del municipio. Las características texturales de los productos extracaldera sólo han dependido de su flujo. Las facies finales han originado los materiales más permeables (ignimbritas no soldadas, brechas y tobas), siempre que no hayan sido sometidos a procesos de compactación.

Formación “Roque Nublo” Incluye lavas tefríticas, basaníticas y basálticas; aglomerados brechoides y fonolitas, con las que concluye el ciclo. Las coladas, de poca potencia, han desarrollado niveles escoriáceos a techo y muro. La superposición de coladas facilita una zona de circulación. Éstas constituyen el mejor conjunto de la formación desde una óptica hidrogeológica. La limitación hídrica proviene de su forma de emplazamiento; Se observa un cambio brusco entre las permeabilidades de las zonas escoriáceas y las de las paredes (generalmente pertenecientes a la Formación Sálica) en las que se encajan las coladas. Los pitones fonolíticos y los diques actúan como barreras al flujo horizontal, mientras que los almagres, cuando se desarrollan, resultan impermeables y limitan la circulación vertical.

Formación Post Roque Nublo y Basaltos Recientes Su carácter básico, la juventud de los materiales emitidos y su localización sobre las demás unidades facilitan que las emisiones presenten excelentes condiciones de porosidad. Las coladas de tipo aa, que caracterizan la formación, desarrollan potentes bases y techos escoriáceos y presentan además una acusada disyunción columnar y esferoidal, circunstancias que favorecen un buen comportamiento hidrogeológico. Los almagres, algunos niveles piroclásticos oxidados y compactados y los diques radiales son los elementos que dificultan la circulación, compartimentando las coladas. Las coladas del Ciclo Reciente y los piroclastos asociados, al haber sufrido un menor grado de alteración, conservan intactas sus cualidades acuíferas.

Formaciones Sedimentarias Generadas durante las fases de inactividad volcánica, estos depósitos presentan una elevada heterometría que favorece el flujo hidráulico. Los sedimentos actuales (terrazas, playas y dunas) muestran los mejores parámetros hidrogeológicos pero, a causa de su escaso desarrollo, su repercusión queda atenuada. En conclusión, la antigüedad de los materiales incide de forma negativa en las características hidrodinámicas. Los productos efusivos muestran mejor comportamiento que los intrusivos, y los de carácter básico, mejor que los ácidos. Los productos escoriáceos presentan mayor porosidad que los lávicos que, sin embargo, mejoran sensiblemente cuando están fracturados.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 28

28

En la isla, el 40% de los pozos explotan total o parcialmente la formación de Basaltos Antiguos, el 36% la Sálica, el 15,4% las formaciones Roque Nublo, el 26% las formaciones Post Roque Nublo y Basaltos Recientes y el 13,2% explotan total o parcialmente las formaciones sedimentarias. En síntesis, más del 75% de las explotaciones se realizan en las formaciones más antiguas (Basaltos Antiguos y Sálica). Esta circunstancia influye en el descenso del acuífero. Distribución zonal de las explotaciones Queda reflejada de la siguiente manera, sin que necesariamente se trate de zonas de extracción autorizadas:

- Los basaltos antiguos son explotados en los principales barrancos del municipio.

- La formación sálica es aprovechada de forma aislada en los sectores más elevados del término municipal.

- La explotación de la formación Roque Nublo queda casi circunscrita al entorno de las localidades de El Sao y El Hornillo.

- La formación post Roque Nublo y los basaltos recientes se explotan de forma masiva en los llanos de Las Moriscas, de Agaete, de Troya y de Piletas.

- Las formaciones detríticas se explotan casi exclusivamente en la desembocadura de los dos grandes barrancos que atraviesan el municipio.

Ver en el anexo la Tabla 5.13. “Parámetros hidráulicos de los sustratos geológicos”. Aprovechamiento de los recursos subterráneos Los principales acuíferos del término municipal se sitúan en la base de las coladas del ciclo post-Roque Nublo, superpuestos a la brecha volcánica Roque Nublo. La temperatura de las aguas subterráneas oscilan entre 20 y 25º C. Los acuíferos presentan CO2 libre con contenidos que fluctúan entre 25 y 600 mg/litro. El contenido de Cl, medido al final del periodo de recarga, es superior a los 300 mg/litro. Las sales disueltas presentan valores superiores a los 2.000 mg/litro. Al Sureste de Agaete se ha detectado cobalto y níquel en el acuífero. Las aguas subterráneas de este sector de la isla son cloruradas, con álcalis dominantes en la franja costera, a excepción de la cuenca del Barranco de Agaete, donde son sulfatadas, con álcalis dominantes en el tramo inferior y alcalinotérreo aguas arriba. Se trata de aguas “muy duras” para ser destinadas al abasto público. Puntos de captación de agua Hasta las primeras décadas del pasado siglo, Agaete contaba con numerosos manantiales. Fue muy célebre un naciente que se encontraba emplazado en las inmediaciones de la villa de Agaete, en una época en la que las aguas subálveas circulaban sobre el lecho del barranco. Esta surgencia sirvió para el abasto municipal hasta el siglo pasado. Sólo el tramo superior del Valle de Agaete cuenta con nacientes, como sucede en el entorno de Los Berrazales, a cuyas aguas ferruginosas y carbonatadas, resultado de la actividad volcánica subhistórica, se les ha atribuido carácter medicinal, lo que condujo a la construcción de un balneario y de una embotelladora de agua mineral en los albores de los años treinta del siglo XX. La plasmación cartográfica de esta variable ambiental se encuentra en el Plano IA. 06 “Red Hidrográfica e Hidrología” de este Documento.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 29

29

2.6 Flora y Vegetación

Esta variable ambiental está desarrollada con detalle en el apartado 3.7 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. Distribución y caracterización de los paisajes potenciales

Piso basal xerófilo Se extiende por la franja de territorio comprendida entre la línea de costa y los 300 metros de altitud, aproximadamente. Las precipitaciones son aquí escasas, entre 100 y 250 mm anuales, y se presentan con una acusada irregularidad interanual y una marcada estacionalidad. La evapotranspiración supera con creces al conjunto de las precipitaciones. Extrapolando datos térmicos de la estación de Agaete, la temperatura media anual se encuentra en torno a los 20°C. La vegetación que se desarrollaría en esta área estaría adaptada a unas condiciones de acusada xerofilia. En el contexto del archipiélago ésta sería el tabaibal-cardonal, definido por diversas facies. En torno a la franja intermareal, sin embargo, se desarrollaría un matorral de evidente afinidad halófila (Frankenio ericifoliae-Zygophyllum fontanesii / Frankenio ericifoliae-Astydamietum latifoliae), caracterizado por la presencia de especies muy adaptadas a limitación ambiental, que condiciona aquí de forma determinante el desarrollo vegetal; esto es, la presencia masiva de sales en el suelo y en el aire a causa de la presencia inmediata del océano. Sobre vertientes expuestas a la incidencia de la maresía las especies vegetales han desarrollado mecanismos de adaptación a estas condiciones ambientales. En estas circunstancias, se desarrollaba un matorral (Astydamio-Euphorbietum aphyllae), en el que las especies dominantes serían (como lo son en la actualidad), la tolda (Euphorbia aphylla), la servilleta o lechuga de mar (Astydamia latifolia) y la siempreviva de costa (Limonium pectinatum). Los tabaibales dulces (Euphorbietum balsamiferae) cubrían, fundamentalmente, las vertientes de solana con presencia de suelo, dentro del dominio xerocanario y de transición al termocanario. En su composición florística era dominante la tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera) que llegaba a alcanzar un porte arbustivo (1-3 metros), como aún sucede en parajes donde esta especie se ha desarrollado con escasas interferencias con las actividades del hombre. Asentado sobre sustratos rocosos y pedregosos del ámbito xerocanario y en vertientes rocosoas de solana del área de transición al termocanario, se desarrollaba un matorral (Aeonio percarnei - Euphorbietum canariensis), caracterizado por la presencia dominante del cardón (Euphorbia canariensis). En las zonas de mayor disponibilidad hídrica en el suelo, relacionada con la circulación de aguas sub-superficiales, en las proximidades de los cauces de los barrancos y sobre los terrazas aluviales se desarrollarían extensos palmerales (Periploco laevigatae - Phoenicetum canariensis), sin solución de continuidad. Sobre suelos salinos, en las desembocaduras de los barrancos y en la franja litoral, donde resultaba patente la humedad edáfica, los tarajales (Tamarix canariensis) caracterizarían la formación vegetal (Atriplici ifinensis - Tamaricetum canariensis).

Piso montano termófilo Estaría situado aproximadamente entre los 350 y 600 metros sobre el nivel del mar, prolongándose en las vertientes de solana hacia cotas superiores. Las precipitaciones están comprendidas entre 300 y 550 mm y la temperatura media anual, extrapolando datos referidos al archipiélago, oscilaría en torno a unos 17° C. La vegetación, referida al estrato superior, llegaría a alcanzar un porte arborescente y respondería a la tipología termoesclerófila, caracterizada por la presencia dominante de almácigos, acebuches y, en menor medida, lentiscos (Pistacio lentisci - Oleetum cerasiformis). A partir de la cota

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 30

30

de 500 metros sobre el nivel del mar, en vertientes de umbría y en las proximidades a los cauces de los barrancos aparecerían especies que denotarían una facie de transición al monteverde (Visneo mocanerae - Arboretum canariensis), que estaría caracterizada por la presencia del mocán (Visnea mocanera), el madroño de Canarias (Arbutus canariensis), el peralillo (Rhamnus glandulosa), el laurel de Canarias (Laurus novocanariensis), el barbusano (Apollonias barbujana) y el marmulán (Sideroxylon canariense), presentes actualmente en el término municipal de Agaete. En la orla superior de este piso bioclimático, por encima de unos 650 metros en los enclaves orientados a la incidencia del Alisio, se desarrollaba una formación arbórea (Pinetum canariensis - Ericetosum arborae), caracterizada por la presencia preeminente del pino canario (Pinus canariensis). En las localidades emplazadas a sotavento de la humedad que transportan los Alisios, y sobre una cota aproximada de alrededor de 500 metros, el pinar se aclaraba (y aun lo hace) y se veía desprovisto de la cohorte vegetal de carácter mesófilo que caracteriza el pinar húmedo (Pinetum canariensis - Ericetosum arborae), que es sustituida por elementos vegetales de franco carácter xérico. Comunidades rupícolas (Adiantom capilli-veneris / Cheilanthion pulcheae / Sonchus-Aenion / Greenovion aureae), conformadas, entre otros, por los géneros que engloban a los veroles (Aeonium), los taginastes (Echium), las cerrajas (Sonchus), los cardos de Cristo (Carlina) y los mato riscos (Allagopappus), especializados en colonizar escarpes con pendientes muy acusadas compartían protagonismo con dragos (Dracaena draco) y sabinas (Juniperus turbinata spp. canariensis), en el dominio bioclimático termocanario. En riscos con exposición de umbría eran abundantes pequeños helechos de los géneros Davallia, Adiantum, Cheilanthes y Polypodium. En el ámbito bioclimático mesocanario, los roquedos y escarpes se encontraban colonizados, fundamentalmente, por pasteles de risco (Greenovia aurea). En torno a los cauces de los barrancos por los que circulaba el agua de forma permanente se extendía una formación ligada exclusivamente a esta circunstancia (Scirpo globiferi - Juncetum acutí / Lemnetea / Potametea / Rubo - Salicetum canariensis). En el estrato arborescente se desarrollaba el sauce (Salix canariensis), como aun sucede en enclaves similares. En contacto con el agua aparecerían juncos (Juncus acutus) y aneas (Typha domingensis). Tapizando pequeños escarpes, como aún se contempla, se extendía el hediondo (Bosea yerbamora), mientras que algunas palmeras dispersas se asentarían en las orillas sobre las que se había depositado suelo.

Piso montano mesófilo Abarcaría una amplia franja del territorio comprendido entre los 700 y los 1.200 metros sobre el nivel del mar. Las precipitaciones oscilan aquí, entre los 550 y los 600 mm anuales, a las que hay que añadir la lluvia horizontal, originada por la incidencia de la niebla sobre la vegetación. La temperatura media anual se situaría en torno a los 16° C. Esta área se encuentra inmersa, con una notable frecuencia en el mar de nubes que generan los vientos Alisios; esta circunstancia provoca, además de la precipitación horizontal, el incremento de la humedad relativa en relación a las condiciones higroscópicas de los pisos inferiores. La formaciones vegetales que en Canarias se adaptan a estas condiciones ambientales quedan englobadas en la categoría del monteverde (Lauro novocanariensis - Perseetum indicae), que ocuparía las áreas favorecidas por un mayor aporte de humedad; esto es, vertientes de marcada umbría e inmediaciones de cauces de barrancos con presencia, en ambos casos, de una elevada humedad edáfica, y estaría caracterizada por la presencia de especies arbóreas, entre las que destacaba, y aun lo hace de forma muy dispersa, el exigente viñátigo (Persea indica), que requiere de la existencia de una elevada humedad ambiental y edáfica. La facie del monteverde más desfavorecida a causa de una menor presencia de humedad, que exige a las especies que la conforman de una eficiente adaptación ante la aparición de ciertas condiciones xéricas, estaría caracterizada por la aparición de los elementos más resistentes de la laurisilva. Esta variante del monteverde se desarrollaría sobre interfluvios y vertientes de solana, en áreas sometidas a vientos moderados y fuertes, y a una mayor insolación. Se trata de una formación vegetal (fayal-brezal) que aun cuenta con representación en el municipio, conformada, fundamentalmente, por la faya

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 31

31

(Morella faya) y el brezo (Erica arborea), a las que se les añadían los elementos del bosque de lauráceas de mayor valencia ecológica. Es el caso del laurel (Laurus novocanariensis) y del acebiño (Ilex canariensis), capaces de adaptarse a condiciones ambientales adversas, dentro de su ámbito bioclimático. Caracterización de los paisajes vegetales actuales Las formaciones vegetales climácicas han sido sustancialmente modificadas por la intervención humana desde la ocupación del territorio por las primeras comunidades humanas que alcanzaron estos parajes. A pesar de ello, las condiciones ambientales y físicas continúan estructurándolas a grandes rasgos; esto es, los distintos pisos de vegetación han visto recortadas sus manifestaciones potenciales, sin embargo, siguen siendo los factores abióticos los que en última instancia, y a grandes rasgos, siguen determinando su distribución. Este planteamiento no resulta aplicable para las especies vegetales que poseen una mayor valencia ecológica, o para aquellas otras vinculadas estrictamente a la actividad humana. Formaciones relícticas moderadamente degradadas Se encuentran localizadas en áreas marginadas de la actividad productiva, en terrenos que no albergan capacidad agrícola: sobre pendientes pronunciadas, o, cuando aparecen en torno a las parcelas cultivadas, como sucede con algunos palmerales dispersos en fincas agrícolas, lo hacen delimitando las parcelas. Su vinculación con las formaciones climácicas resulta aún evidente.

Tarajaleda (Atriplici ifinensis Tamaricetum canariensis) En torno a los últimos tramos de los cauces de los barrancos de El Juncal, del barranquillo de Caleta, junto a los llanos del Turmán, y de los barrancos de Agua del Buenaleñal y de El Risco se desarrollan las tarajaledas más emblemáticas del municipio de Agaete. Se trata de rodales casi monoespecíficos de Tamarix canariensis, que adoptan una disposición sinuosa, siguiendo la disposición de los cauces hídricos. Los tarajales muestran un porte arbustivo o arborescente, a lo sumo. Su emplazamiento revela la preferencia de la especie por colonizar suelos salinos que se extienden por las desembocaduras de los barrancos, de las trasplayas y de los llanos endorreicos. Cuando los tarajales se disponen en rodales, la cobertura es densa. Sobre el suelo, la materia orgánica en descomposición es abundante. Las tarajaledas se constituyen, en definitiva, en una formación cerrada, sombría e impenetrable, prácticamente monoespecífica, en la que sólo se adentran algunas especies como el saladillo (Atriplex glauca ssp. ifniensis), el espino de mar (Lycium intricatum), la brusca (Salsola divaricata) y el salado blanco (Schizogyne sericea).

Tabaibal de tolda (Astydamio Euphorbietum aphyllae) Desde el Roque de El Puerto, en el límite del litoral septentrional de Agaete, hasta los acantilados de Las Moriscas; en los escarpes de Faneroque, y en los que se extienden entre las playas de El Risco y de El Cuervo, en el límite suroccidental del municipio, se desarrolla una formación vegetal, endémica de Gran Canaria, que ocupa entornos similares del litoral del norte y del resto del occidente insular. Se trata de enclaves sometidos a la incidencia de la maresía. Esta circunstancia ha determinado que los elementos florísticos que la componen hayan desarrollado mecanismos de adaptación a estas condiciones ambientales. La especie que caracteriza la formación es la tolda, o tabaiba parida (Euphorbia aphylla). La presencia de la lechuga de mar, o servilleta (Astydamia latifolia), de las dos variedades de siempreviva costera (Limonium pectinatum var. pectinatum y Limonium pectinatum var. corculum) y del tomillo sapo (Frankenia laevis), especies que también se circunscriben exclusivamente a ambientes costeros, denotan la aproximación de la comunidad al óptimo climácico. No resulta rara la aparición en el estrato subarbustivo de elementos representativos de la colindante asociación Aeonio-Euphorbion canariensis, como sucede con la tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera) y el tasaigo (Rubia fruticosa).

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 32

32

El verode (Kleinia neriifolia), la aulaga (Launaea arborescens) y el espino (Lycium intricatum) aparecen ocasionalmente, formando parte del estrato subarbustivo. Su mayor valencia ecológica es indicativa de una cierta degradación de algunos de estos espacios.

Tabaibal dulce (Euphorbietum balsamíferae) Casi siempre a sotavento de la incidencia de la maresía y salpicando las vertientes de solana de los barrancos de El Juncal y de Agaete, de la hoya del Sombrerillo; de la vertiente septentrional del tramo inferior del Barranco de Guayedra; de la hoya del Tabaibal y de los barranquillos de Aguadulce y del lomo del Trigo, en las inmediaciones de la desembocadura del Barranco de El Risco, sobre pendientes que fluctúan en torno a 45° y sustratos constituidos, fundamentalmente, por basaltos miocénicos, se desarrolla un matorral caracterizado por la dominancia de la tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera). Su composición florística presenta una sorprendente homogeneidad en toda su área de desarrollo. La tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera) ofrece, en todos los casos, una mayor cobertura en el estrato subarbustivo, alrededor de un 30%; no obstante, llega a alcanzar un porte arborescente con un menor recubrimiento. En ocasiones, la presencia en la formación de la lechuga de mar (Astydamia latifolia) y de la tolda (Euphorbia aphylla) resulta indicadora de la influencia -aunque algo atenuada- del spray marino. Sin embargo, donde la influencia de la maresía se hace más patente, alrededor del límite con la comunidad halófila, Euphorbia balsamifera muestra un porte más achaparrado. Otras especies que poseen un marcado carácter recolonizador dentro del ámbito xerófilo, y que están representadas en esta unidad, son el verode (Kleinia neriifolia), del que se observan individuos aislados; la espina blanca (Asparagus pastorianus), más frecuente en la porción occidental del dominio del tabaibal; el tasaigo (Rubia fruticosa), y el salado (Schizogyne sericea), especie halófila que se muestra como transgresiva en el piso basal bajo condiciones de presencia de sales nitrogenadas en el sustrato sobre el que se asienta, señalando facies de degradación de las comunidades xerófilas. La aparición esporádica, en los sectores más elevados del dominio del tabaibal dulce del balillo (Sonchus leptocephalus) parece indicar cierto cambio de las condiciones ambientales que propiciaría el desarrollo de una facie de transición dentro del piso basal xerófilo ante la creciente influencia del ámbito termófilo. La asociación ha retrocedido drásticamente como consecuencia de las roturaciones agrícolas y la expansión de la urbanización, aunque en la actualidad la dinámica es progresiva, como refleja la presencia de las especies más representativas del óptimo climácico en el estrato herbáceo y la progresiva recolonización de espacios limítrofes ante la menor presión antrópica que se ejerce en estos sectores.

Cardonal grancanario (Aeonio percarnei Euphorbietum canariensis) A caballo entre los dominios xerófilo y termoesclerófilo, entre los 100 y los 600 metros sobre el nivel del mar que se alcanzan en el Paso del Canario, en las inmediaciones de Tirma, y con un escaso desarrollo edáfico que propicia el afloramiento de sustratos sálicos, basálticos y los correspondientes a los retazos de la colada lávica holocena que discurrió por el lecho del Barranco de Agaete, esta formación vegetal, caracterizada por la presencia dominante del cardón (Euphorbia canariensis), ocupa, además, algunas de las vertientes escarpadas de los barrancos de Cho Vicente, de Agaete, de Tirma y de la porción noroccidental del macizo de Tamadaba, en las inmediaciones de su encuentro con el mar. Dentro del ambiente bioclimático xerocanario, siempre que la pendiente permita cierta edafogénesis, y en entornos no excesivamente alterados, el cardón suele asociarse con la tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera), el binomio clásico que conforma el paisaje vegetal árido por antonomasia del archipiélago.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 33

33

Cuando la formación se adentra en ambiente bioclimático termocanario, la ausencia de suelos y su exposición de solana crea las condiciones óptimas para una mayor adaptabilidad de una formación con apetencias xéricas. El cardón (Euphorbia canariensis) es la especie preponderante, especialmente en el estrato arbustivo, alcanzando en ocasiones portes francamente sorprendentes; sin embargo, algunos ejemplares muestran señales de haber sido quemados. La relativa degradación de este espacio queda puesta de manifiesto por la profusión de la tabaiba amarga (Euphorbia regis-jubae), que, al tratarse de una especie que no es consumida por el ganado, muestra un desarrollo que revela la tradicional explotación pastoril de estos parajes. Las pitas (Agave americana) exhiben en algunos sectores un notable recubrimiento. Esta especie fue profusamente plantada desde los inicios del siglo XIX con objeto de extraer su fibra para confeccionar sogas, con la finalidad de servir de linderos de las parcelas y con la intención de retener suelos de las vertientes expuestas a la erosión, tras la desaparición de la cubierta vegetal originaria. Su apreciable difusión se ha visto favorecida por las circunstancias abióticas apuntadas. La aparición del herbáceo cerrillo (Hyparrhenia hirta) y de la gamona (Asphodelus fistolosus) denota el pasado carácter ganadero de estas tierras. La presencia de ejemplares de cardón en este estrato, confirma la dinámica progresiva de la formación, avalada también por referencias orales que corroboraron el crecimiento de la unidad tras el parcial abandono del pastoreo. Los cardones sirven de refugio de los individuos más sensibles a la presencia del ganado, creando además unas especiales condiciones ambientales que favorecen su desarrollo. Así, se sirven de la protección que esta especie ofrece, el cornical (Periploca laevigata) que, tras la reducción de las prácticas ganaderas, se ha extendido por toda la unidad; el balillo (Sonchus leptocephalus), el bejeque (Aeonium percarneum var. percaneum), el tasaigo (Rubia fruticosa) y la esparraguera (Asparagus umbellatus).

Palmeral (Periploco laevigatae-Phoenicetum canariensis) Sobre terrazas aluviales y depósitos coluviales de los barrancos de El Risco, de Guayedra, y de sus tributarios: el Barranco de Sandico y el de Los Juncos, donde se constata la existencia de una mayor disponibilidad hídrica a causa de la circulación de aguas subsuperficiales en torno a los cauces que proporcionan a los sustratos de una apreciable humedad edáfica, se desarrollan los palmerales más emblemáticos del municipio, que se encuentran notablemente enriquecidos por la presencia de numerosos rodales de almácigos (Pistacia atlantica), especialmente en los cursos hídricos de la cuenca de Guayedra. Ocupan, fundamentalmente, retazos más o menos lineales que delimitan con frecuencia fincas agrícolas que se extienden sobre las terrazas aluviales que jalonan los barrancos. La potencialidad de la formación se constata al observar la regeneración de las palmeras en torno a las arboledas de las fincas abandonadas. La atenuación de las pendientes de estos enclaves propicia un mayor desarrollo del sustrato edáfico y mejores condiciones para el establecimiento de la vegetación, pero también una mayor accesibilidad para el desarrollo de actividades antrópicas. La palmera canaria (Phoenix canariensis) es dominante. El almácigo (Pistacia atlantica) también se erige en protagonista de la formación, especialmente en el entorno de Guayedra. La presencia de palmeras datileras (Phoenix dactylifera) es casi testimonial. Junto a estas especies intervienen elementos procedentes de las formaciones vegetales aledañas. Las más representativas son el cornical (Periploca laevigata), las tabaibas dulce y amarga (Euphorbia balsamifera y Euphorbia regis-jubae), el tajinaste blanco (Echium decaisnei) y el verode (Kleinia neriifolia).

Comunidad de góngaro grancanario (Aeonietum virginii) Sobre algunas de las vertientes del cono volcánico de montaña Berbique, a unos 600 metros sobre el nivel del mar, se desarrolla una formación vegetal singularizada por la abundancia del endemismo grancanario denominado góngaro (Aeonium virgineum). Se trata de una comunidad de afinidad rupícola, en la que también ha sido consignada la presencia de otro verol (Aeonium undulatum), de la

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 34

34

espinosa Carlina salicifolia ssp. salicifolia (malpica o cardo de Cristo), de los helechos Davallia canariensis y Polypodium cambricum ssp. macaronesicum y de las cerrajas Sonchus acaulis y Sonchus congestus. La formación deriva de la degradación de una muestra de un bosquete termoesclerófilo húmedo (Mayteno-Juniperion canariensis), donde los elementos leñosos que lo caracterizaban han sido desmontados; sin embargo, la potencialidad que exhibe el paisaje vegetal para la recuperación de la formación climácica es elevada.

Bosquetes y matorrales termoesclerófilos (Pistacio lentisci-Oleatum cerasiformis). Bosquete termófilo con predominio de almácigos (Pistacia atlantica)

En el entorno bioclimático termocanario, y en enclaves del xerocanario favorecidos por un aporte extra de humedad ambiental y edáfica se desarrollan formaciones de carácter termoesclerófilo que, en el caso del municipio, están caracterizadas, fundamentalmente, por la presencia del almácigo (Pistacia atlantica). La formación, potencialmente, contacta en su umbral altitudinal superior con el pinar canario. No obstante la dominancia de Pistacia atlantica, también se desarrollan los arbustos Olea cerasiformis y, en muy menor medida, Juniperus turbinata ssp. canariensis. En torno a los bosquetes y rodales suele aparecer la palmera (Phoenix canariensis), fundamentalmente sobre terrazas aluviales. Los almacigales del municipio se desarrollan en torno a las terrazas aluviales de los cursos hídricos. Su cortejo florístico está predominantemente conformado por especies del matorral xero-termófilo, como Rubia fruticosa, Periploca laevigata, Asparagus umbellatus, Euphorbia regis-jubae y Kleinia neriifolia, Asparagus plocamoides y Blupeurum salicifolium ssp. acyphyllum. Fisionómicamente, la formación se asemejaría en su estado climácico al bosque mediterráneo. En la actualidad, y a causa de la profunda transformación que ha experimentado el territorio correspondiente a su distribución potencial, los bosques y matorrales termoesclerófilos han experimentado un severo recorte de la superficie que ocupaban antes de la interacción antrópica. El acebuchal más emblemático del municipio se desarrolla en la cañada de Las Lechugas, que se abre en la hoya de Los Orobales, inmediatamente al norte del espigón de Faneque. Además, algunos bosquecillos y numerosos rodales de almácigos se extienden entre la localidad de Vecindad de Enfrente hasta las vertientes del espigón de La Cardonera. Los almácigos exhiben una elevada cobertura en la incisión hídrica denominada La Culata, emplazada entre los dos enclaves mencionados.

Comunidad de saladillo de risco (Camptoloma canariensis) Los Riscos es la denominación que reciben los escarpes que se alzan sobre la localidad de El Hornillo, en cotas que oscilan en torno a los 750 metros sobre el nivel del mar. Su orientación de umbría y la presencia de algunos rezumaderos de agua propician el desarrollo de esta formación vegetal, en la que la presencia del saladillo de risco (Camptoloma canariensis) es dominante, una planta rupícola subarbustiva, de pequeñas hojas redondeadas, carnosas y siempreverdes, especializada en colonizar este tipo de ambientes. Aunque se trata de una formación casi monoespecífica, también ha sido consignada la presencia de otras especies que muestran afinidad por desarrollarse en enclaves de esta naturaleza, como sucede con Aeonium virgineum, Davallia canariensis, Hypericum reflexum y Lobularia canariensis.

Monteverde seco (Visneo mocanerae-Arbutetum canariensis) Sobre la localidad de El Hornillo, a una altitud aproximada de 900 metros sobre el nivel del mar, sobre sustratos de brecha volcánica “Roque Nublo”, en un emplazamiento orientado a la incidencia del mar de nubes que arrastran los Alisios, e inserto en un ambiente bioclimático termocanario en transición al mesocanario, se desarrolla una formación vegetal caracterizada por la presencia en el estrato arborescente de especies que resultan indicadoras de halllarnos en los antiguos dominios del monteverde de Gran Canaria.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 35

35

Se ha consignado aquí la presencia del laurel (Laurus novocanariensis), del brezo (Erica arborea) y, de forma más aislada, del barbusano (Apollonias barbujana), de la faya (Morella faya) y del acebiño (Ilex canariensis). Otros elementos de más amplia valencia ecológica componen el cortejo florístico de la formación, como sucede con el granadillo (Hypericum canariense), que presenta un aspecto que difiere de los emplazados en vertientes de solana: el color es de un verde más acusado y el porte, muestra tallas generalmente más elevadas. En los estratos inferiores se desarrollan especies que, como los helechos denominados batatilla (Davallia canariensis) y polipodio del país (Polypodium cambricum ssp. macaronesicum), los veroles Aeonium virgineum, Aeonium undulatum y Aeonium manriqueorum, la esparraguera (Asparagus scoparius), los taginastes Echium strictum y Echium decaisnei y las cerrajas Sonchus acaulis y Sonchus congestus, son indicadoras de la existencia de condiciones abióticas que propician un desarrollo más profuso de la vegetación. Esta formación, enriquecida por especies de carácter de más elevada mesofilia, se desarrolla de forma aislada en los barrancos que conforman la cabecera de las cuencas de Guayedra (Barranco Oscuro y de los Palosblancos) y de La Palma (Barranco del Aderno). Además de las especies mencionadas en la localidad emplazada en la cabecera del Barranco de Agaete, se ha constatado la presencia en los estratos superiores del viñátigo (Persea indica), del aderno (Heberdenia excelsa), del mocán (Visnea mocanera), del palo blanco (Picconia excelsa) y del madroño (Arbutus canariensis).

Pinar de pino canario (Pinetum canariensis)

Formación que se desarrolla sobre los pisos bioclimáticos de transición xero-termocanario, termocanario y mesocanario. En el municipio de Agaete tiene su óptimo climácico sobre el macizo de Tamadaba, donde conforma uno de los más espléndidos bosques de esta especie del archipiélago canario. Sobre los sectores de Tamadaba expuestos a la humedad transportada por los Alisios se desarrolla un pinar húmedo (Cytiso proliferi-Pinetum canariensis subass. ericetosum arboreae) que se extiende sobre un triángulo que ocupa unas 376 hectáreas, delimitado por los lomos de Faneque y de la cañada de Cho Marco y por el pico de Tamadaba. Se trata del pinar florísticamente más rico de la isla y uno de los de mayor relevancia científica del archipiélago. El sotobosque se halla conformado por Erica arborea, Morellla faya, Phyllirea angustifolia, Hypericum canariense, Micromeria pineolens, Micromeria lanata, Micromeria benthamii, Polycarpaea aristata, el diminuto helecho Ophioglossum lusitanicum y un rico cortejo de líquenes epífitos. Los entornos de Tamadaba emplazados a sotavento de la incidencia de los Alisios albergan un pinar seco (Cytiso proliferi-Pinetum canariensis subass. cistetosum symphytifolii), cuyo sotobosque lo conforman el escobón del sur (Chamaecytisus proliferus ssp. meridionalis) y el jarón (Cistus symphytifolius var. leucophyllus).

Sauzal (Rubo-Salicetum canariensis) Comunidad riparia estrictamente ligada a s que conducen agua durante, al menos, buena parte del año, como sucede en el municipio con los cursos hídricos de Palomino y de Las Goteras. Se trata de una formación azonal que se desarrolla desde el piso bioclimático xerocanario hasta el mesocanario superior. Se encuentra singularizada por la presencia dominante del sao (Salix canariensis). La zarza (Rubus ulmifolius), la caña (Arundo donax) y la invasora exótica Ageratina adenophora constituyen su cortejo florístico. Formaciones degradadas y severamente antropizadas Ocupan las áreas que han mostrado menos dificultades para el establecimiento de actividades antrópicas, fundamentalmente aquellas con pendientes menos pronunciadas y las que, ofreciendo limitaciones para el acceso, poseen condicionantes ambientales (abióticos) que no propician el desarrollo vegetal, como sucede en vertientes con exposición de solana, con sustratos minerales

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 36

36

brutos o de naturaleza ácida, donde tras la intensa deforestación, las posibilidades de recuperar el paisaje vegetal originario se ven dificultadas. La explotación secular a la que ha sido sometido el territorio, ha modificado la cobertera vegetal, de modo que la interpretación de ésta permite obtener claves para realizar una lectura diacrónica del espacio. Las formaciones originales que ocupaban el municipio se han ido viendo sustituidas por matorrales formados por especies transgresivas que aprovechan los cambios de las condiciones ecológicas del medio para colonizar el territorio, al mostrar una marcada afinidad con las nuevas condiciones establecidas.

Ahulagar-Saladar blanco (Launaeo arborescentis-Schizogynetum sericeae) La alteración de los suelos de algunos sectores de la franja litoral del municipio, como consecuencia de su remoción y de la explotación agrícola y ganadera a la que han sido sometidos, ha provocado que las formaciones vegetales que los ocupaban se hayan visto reemplazadas, en diverso grado, por comunidades conformadas por especies de carácter ruderal-nitrófilas, que se adaptan a las nuevas circunstancias ambientales. La facie nitrófila la protagonizan la barrilla (Messembrianthemum crystallinum), el cosco (Messembrianthemum nodiflorum), el tabaco moro (Nicotiana glauca), la ahulaga (Launaea arborescens), el salado blanco (Schizogyne sericea), la tunera india (Opuntia dillenii) y un tapiz herbáceo de especies anuales que prospera a costa del incremento de sales solubles. En la dinámica progresiva que experimenta esta formación, y al atenuarse la interferencia antrópica, aparecen especies de elevada valencia ecológica, procedentes de unidades limítrofes, indicadoras de la evolución hacia la potencialidad. Así sucede, entre otras, con el espino (Lycium intricatum), el verode (Kleinia neriifolia), el corazoncillo (Lotus tenellus), el salado (Salsola divaricata) y la tabaiba amarga (Euphorbia regis-jubae).

Tabaibal amargo (Facies de Euphorbia regis-jubae en: Euphorbietum balsamiferae, Aeonio percarnei - Euphorbietum canariensis, Pistacio lentisci - Oleatum cerasiformis, Artemisio thusculae - Rumicion lunariae)

La explotación forestal y ganadera de las primeras estribaciones del macizo de Tamadaba ha sido de tal magnitud que los procesos erosivos por arroyada han provocado la desaparición en amplias áreas del soporte edáfico. El resultado es el masivo afloramiento del sustrato rocoso y la consiguiente pérdida de la cubierta vegetal de entidad que aquí se desarrollaba antes de la incidencia antrópica. Aun así, se desarrollan especies de acusada valencia ecológica, como sucede con la tabaiba amarga (Euphorbia regis-jubae), el cornical (Periploca laevigata) y las exóticas, agresivas y omnipresentes en estos enclaves pitas (Agave americana) y tuneras (Opuntia spp.). El drástico descenso de las actividades agrarias ha traído consigo la progresión de los elementos que caracterizaban potencialmente este entorno: el cardón (Euphorbia canariensis), el almácigo (Pistacia atlantica) y el acebuche (Olea cerasiformis), y la ocupación por especies que se adaptan a las nuevas condiciones del medio. La facie nitrófila la protagonizan la vinagrera (Rumex lunaria) y el incienso morisco (Artemisia thuscula), que no excluye ningún tipo de soporte para su desarrollo.

Inciensal-vinagreral (Artemisio thusculae-Rumicetum Iunariae) En cauces de barrancos; en eriales, antaño sometidos a pastoreo, y sobre antiguas parcelas agrícolas emplazadas en distintas localidades del Valle de Agaete, fundamentalmente, en los ambientes bioclimáticos xerocanario y termocanario, se desarrolla un matorral arbustivo de sustitución, conformado por especies de amplia valencia ecológica que han colonizado estos espacio al mostrar afinidad con las nuevas condiciones ambientales surgidas con la explotación del territorio. El abandono de las actividades agrarias ha llevado consigo la ocupación de este espacio por especies que se adaptan a las nuevas condiciones del medio. La facie nitrófila la protagonizan la vinagrera (Rumex lunaria), que prospera con gran profusión, y el oportunista incienso morisco (Artemisia

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 37

37

thuscula). Además, ha sido consignada la presencia de la salvia morisca (Salvia canariensis), del mato risco (Lavandula canariensis ssp. canariae) y de la magarza (Argyranthemum frutescens ssp. frutescens), fundamentalmente.

Cañaveral. Comunidad de Arundo donax En torno a algunos tramos de los cauces de los barrancos del municipio, pero especialmente en el de Agaete, se desarrolla una comunidad florística, caracterizada por la dominancia de la caña (Arundo donax), que prospera a causa de la elevada humedad edáfica del sustrato. Se trata de una especie introducida en un pasado remoto, que muestra una elevada dinámica invasora. Conforma un paisaje vegetal de muy elevada cobertura, que impide o dificulta el tránsito en su interior. Cuando los cañaverales crecen en el ámbito bioclimático termocanario y, especialmente, en el mesocanario, se ven enriquecidos por la aparición de las también invasoras azucarera (Ageratina adenophora) y zarza (Rubus ulmifolius).

Jaral (Euphorbio regis-jubae-Cistetum monspeliensis) Asociación que en el municipio se desarrolla, fundamentalmente, sobre suelos decapitados y pedregosos, de naturaleza sálica, de la orla del pinar que se desarrolla en el macizo de Tamadaba. Su expansión parece tener su origen en la degradación del pinar de Pinus canariensis, como resultado de su tala o de la pasada introducción de ganado. Son matorrales abiertos, con una cobertura que a lo sumo alcanza el 75%. Se caracteriza por la presencia dominante del jaguarzo (Cistus monspeliensis). En menor medida, aparece la tabaiba amarga (Euphorbia regis-jubae) y otros elementos de afinidad termófila, como sucede con el tajinaste blanco (Echium decaisnei ssp. decaisnei), el mato risco (Lavandula canariensis ssp. canariae) y el tomillo común (Micromeria varia ssp. canariensis). Como indicadoras de la antropización de la formación ha sido consignada la presencia de la melosa (Ononis angustissima ssp. longifolia) y de la salvia (Salvia canariensis), cuya proliferación denota cierto grado de nitrificación de los suelos, a consecuencia del pastoreo secular. La constatación de la existencia de las facies del tomillo gris (Micromeria benthami) y del tajinaste blanco (Echium decaisnei), revela el empobrecimiento florístico de la formación.

Retamar, codesar y escobonal de monte (Telino canariensis-Adenocarpion foliolosi- Chamaecytiso canariae)

Las áreas antaño cubiertas por el monteverde y por el pinar húmedo, emplazadas, fundamentalmente en el tramo alto del Valle de Agaete, sometido a la incidencia de las nieblas que arrastran Los Alisios, han sido ocupados por una formación de leguminosas caracterizada por la dominancia del escobón (Chamaecytisus proliferus ssp. proliferus var. canariae, Chamaecytisus proliferus ssp. proliferus var. proliferus y Chamaecytisus proliferus ssp. meridionalis), del codeso (Adenocarpus foliolosus) y de la retama amarilla (Teline microphylla). Estas especies conforman un matorral arbustivo que crece sobre suelos desarrollados y bien estructurados. Su expansión corrió paralela a la desaparición del monteverde y del pinar húmedo, mediante la tala, los incendios y el pastoreo intensivo. En los enclaves más húmedos, la saturación de agua del suelo durante los meses lluviosos provoca que la formación vegetal ceda terreno a los zarzales (Rubio-Rubetum) de Rubus ulmifolius y a los helechales de Pteridium aquilinum, mejor adaptados a esta circunstancia ambiental.

Plantaciones de especies forestales y agroforestales

Algunos enclaves de Tamadaba y el entorno de Los Berrazales han sido objeto de algunas repoblaciones forestales que salpican el macizo. Aunque predominan las efectuadas con el pino autóctono (Pinus canariensis), se constata la presencia de pinos exóticos en Samsó (Pinus pinea y Pinus radiata) y en Tirma (Pinus halepensis y Pinus pinea). Más antiguas son las plantaciones de eucaliptos (Eucaliptus globulus). Algunas forman pequeñas arboledas dispersas inmediatamente al norte de El Sao y en el no muy lejano andén de Las Cuevas.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 38

38

Las dimensiones de algunos ejemplares denotan su antigüedad. El efecto que la mortífera epidemia de gripe causó en la población de la isla a comienzos del siglo XX, la creencia de su carácter salutífero y su óptima adaptación a condiciones ambientales adversas promovió su difusión. En Tamadaba, en las inmediaciones de la finca de Samsó, en el denominado lomo de la cañada de Cho Marcos y en Los Ancones, sobre terrenos sobre los que incide el mar de nubes que arrastran los Alisios, y emplazados en cotas que oscilan entre los 900 y los 1.200 metros sobre el nivel del mar, en un entorno propicio para su desarrollo, los antiguos propietarios de la finca decidieron introducir castañeros (Castanea sativa) hasta el punto de configurar rodales y dos pequeños bosquetes, donde la especie que singulariza la formación alcanza notables tallas. Sobre la vertiente de umbría de La Culatilla, en las inmediaciones de San Pedro, el paisaje vegetal queda singularizado por la presencia de la mayor formación de almendreros (Prunus dulcis) del municipio. La especie, introducida en el siglo XIX, ha acabado por tomar carta de naturaleza en el paisaje de este sector del término municipal.

Pastizales y formaciones extremadamente antropizadas Los pastizales y tapices vegetales que aparecen sobre eriales y campos de cultivo abandonados podrían considerarse el último eslabón en la facie degradatoria de la vegetación del municipio y se corresponderían con la fortísima presión antrópica que han sufrido algunos de sus parajes. Es el caso del barrillal (Mesembryanthemetum crystallini), una formación caracterizada por la presencia de elementos de porte rastrero; fundamentalmente, la barrilla (Mesembryanthemum crystallinum) y, en menor medida, el cosco (Mesembryanthemum nodiflorum). La formación está vinculada con terrenos alterados, removidos y muy nitrofilizados. Resulta común en la franja costera que se extiende en torno al Barranco de El Risco y en llanos endorreicos del interior del municipio, sobre sustratos salinos. El herbazal nitrófilo de cenizos y malvas (Chenopodio muralis - Malvetum parviflorae), una comunidad acusadamente nitrófila, que se desarrolla sobre parcelas agrícolas abandonadas del entorno de los llanos de Turmán, fundamentalmente en antiguas fincas de tomateros. En una sucesión progresiva, la formación evoluciona hasta conformar un matorral caracterizado por el predominio de ahulagas (Launaea arborescens) y matos (Suaeda vera). Algunas especies vegetales de elevado potencial de dispersión experimentan una súbita expansión, obstaculizando la recuperación de la vegetación potencial en sus antiguos dominios. Así sucede con las tuneras (Opuntia sp.) y las pitas (Agave americana), que han acabado por invadir el entorno de las parcelas abandonadas. En las últimas décadas, el rabo de gato (Pennisetum setaceum), una especie invasora de muy elevada capacidad de expansión sobre terrenos insertos en ambientes bioclimáticos xero y termocanario, ha ido colonizando amplias superficies de terreno de las cuencas de Guayedra y de El Risco. El cerrillal-panascal (Cenchro ciliaris- Hyparrhenietum sinaicae) conforma un pastizal constituido por diversos hemicriptófitos gramínicos que se desarrollan, preferentemente, en terrenos aclarados, rocoso-arcillosos, del dominio potencial del tabaibal dulce. En el municipio la formación alcanza un apreciable desarrollo junto al barranquillo de Las Lajas, sobre la localidad de San Pedro, en el Valle de Agaete. Ver en el anexo la Tabla 7.1. “Inventario de la flora vascular del territorio del municipio de Moya no incluido en ENP”. Categorías de protección de la flora vascular Se recogen las establecidas en la legislación vigente:

- Catálogo Canario de Especies Protegidas (CCEP), creado por la Ley 4/2010, de 4 de junio.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 39

39

- Catálogo Español de Especies Amenazadas (CEEA), regulado por el Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas.

- Orden de 20 de febrero de 1991 sobre protección de especies de la flora vascular silvestre de

la Comunidad Autónoma de Canarias.

- Directiva 92/43/CEE del Consejo de 21 de mayo relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestre (Directiva Hábitat).

- Convenio de 19 de septiembre de 1979, acerca de la conservación de la vida silvestre y del

medio natural en Europa (Convenio de Berna).

- Convenio sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestre, publicado en Washington, el 3 de marzo de 1973 (CITES).

- Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, reglado por el Real Decreto 42/2007, de 13 de

diciembre. Ver en el anexo la Tabla 7.2. “Categorías de protección y grados de amenaza de la flora vascular”. Áreas de interés florístico Se corresponden con la práctica totalidad de las denominadas, en el epígrafe 3.8.2.1 “formaciones relícticas moderadamente degradadas”; fundamentalmente con las que muestran una mayor singularidad; esto es, con los tabaibales de tolda (Astydamio-Euphorbietum aphyllae) que se desarrollan entre el Roque de El Puerto, en el extremo de litoral septentrional de Agaete, y los acantilados de Las Moriscas; en los escarpes de Faneroque, y los que se extienden entre las playas de El Risco y de El Cuervo, en el límite suroccidental del municipio; con el tabaibal dulce (Euphorbietum balsamiferae) que salpica las vertientes de los barrancos de El Juncal y de Agaete, de la hoya del Sombrerillo; del tramo inferior del Barranco de Guayedra; de la hoya del Tabaibal y de los barranquillos de Aguadulce y del lomo del Trigo, en las inmediaciones de la desembocadura del Barranco de El Risco; con el cardonal (Aeonio percarnei-Euphorbietum canariensis) que ocupa algunas de las vertientes escarpadas de los barrancos de Cho Vicente, de Agaete, de Tirma y de la porción noroccidental del macizo de Tamadaba, en las inmediaciones de su encuentro con el mar; del palmeral (Periploco Iaevigatae-Phoenicetum canariensis) que se desarrolla en torno a los principales cursos hídricos de la cuenca de Guayedra, donde se ve notablemente enriquecido por la presencia de numerosos rodales de almácigos (Pistacia atlantica); con los bosquetes y matorrales termoesclerófilos (Pistacio lentisci-Oleatum cerasiformis), especialmente con el acebuchal más emblemático del municipio, que se desarrolla en la cañada de Las Lechugas, inmediatamente al norte del espigón de Faneque, y con los bosquecillos y rodales de almácigos se extienden entre la localidad de Vecindad de Enfrente y las vertientes del espigón de La Cardonera; con la comunidad de saladillo de risco (Camptoloma canariensis), un endemismo grancanario que se desarrolla profusamente en los rezumaderos de agua de los escarpes que se alzan sobre la localidad de El Hornillo; con el pequeño relicto de monteverde seco (Visneo mocanerae-Arbutetum canariensis) que se desarrolla sobre la localidad de El Hornillo, a una altitud aproximada de 900 metros sobre el nivel del mar, y los que, enriquecidos por la presencia de especies de más elevada mesofilia, se asientan de forma dispersa por los barrancos que conforman la cabecera de las cuencas de Guayedra (Barranco Oscuro y de los Palosblancos) y de La Palma (Barranco del Aderno); con el pinar natural de pino canario (Pinetum canariensis) que, en el municipio de Agaete tiene su óptimo climácico sobre el macizo de Tamadaba, donde conforma uno de los más espléndidos bosques de esta especie del archipiélago canario; con los sauzales (Rubo-Salicetum canariensis) que discurren por los cauces húmedos de los barrancos de Palomino y de Las Goteras, en las inmediaciones de la localidad de El Sao, y con la muy accidentada vertiente occidental del macizo de Tamadaba, que alberga numerosos endemismos locales e insulares. La plasmación cartográfica de esta variable ambiental se encuentra en el Plano IA. 09 “Comunidades Vegetales y Áreas de interés floristico” de este Documento.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 40

40

2.7 Fauna

Esta variable ambiental se ha desarrollado con detalle en el apartado 3.8 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. Fauna vertebrada terrestre La elevada antropización de la porción del municipio que no se encuentra incluida en el Parque Narural de Tamadaba mengua la diversidad de ámbitos ecológicos y limita el desarrollo de la fauna vertebrada. Los grupos representados son aves, anfibios, reptiles y mamíferos. Aves Aves cuya nidificación está asociada a la presencia de acantilados y escarpes Incluye los hábitats constituidos por acantilados y roquedos de la franja litoral y por escarpes que se internan en el territorio municipal. Todas estas formas de relieve sirven de soporte a la nidificación de aves que muestran una elevada fragilidad. Aunque no existe constancia que en la actualidad el guincho (Pandion haliaetus) nidifique en Agaete, numerosas fuentes citan su antigua presencia en sus cantiles costeros. Algo similar ocurre con el petrel de Bulwer (Bulweria bulwerii). Aunque no existen pruebas fidedignas de su cría en la isla, en las últimas décadas han sido observados algunos ejemplares en el litoral del municipio, en el Valle de Agaete y en el pinar de Tamadaba. Si se ha confirmado la cría de unas cinco parejas de charranes (Sterna hirundo) en las inmediaciones de Roque Partido, junto al Dedo de Dios. No se descarta que la especie nidifique en otros enclaves del litoral del municipio. En los escarpes del Barranco de Agaete y en los acantilados próximos a la localidad de El Risco se consignó en la primera mitad del pasado siglo la presencia del halcón tagorote (Falco pelegrinoides), otra especie estrechamente ligada a los cantiles y a las vertientes escarpadas, donde en condiciones óptimas forma colonias que agrupan numerosos individuos. El nido lo confecciona en una pequeña depresión en el suelo emplazada en pequeñas oquedades y repisas de lugares inaccesibles. En los últimos años se han observado parejas en algunas localidades de la costa occidental. Se estima que la población de la isla ronda las 10 parejas. Resulta más frecuente el avistamiento de pardelas cenicientas (Calonectris diomedea) y de gaviotas patiamarillas (Larus cachinnans), que forman colonias en los acantilados que jalonan el litoral del término municipal y en las más inaccesibles vertientes de los tramos inferiores de los mayores cursos hídricos que lo surcan. Larus cachinnans es una especie marcadamente oportunista, como se constata al observar su presencia alrededor de vertidos orgánicos. La especie recorre durante el día considerables distancias para, al anochecer, regresar a sus nidos. Su carácter agresivo la convierte en ocasiones en un depredador temible de otras aves y en un fiero competidor por el control de las áreas de cría. Algunos acantilados y los escarpes de los mayores barrancos que atraviesan el municipio sirven de soporte preferente a la nidificación de la lechuza (Tyto alba alba), una especie que, en Gran Canaria, ha sufrido una merma significativa de sus poblaciones. Se trata de un ave que suele frecuentar los campos cultivados e internarse en pueblos y ciudades. La lechuza es un depredador de roedores, aunque en ocasiones puede especializarse en la captura de pequeñas aves. Su espectro alimenticio incluye también reptiles, anfibios e insectos. El ratonero común (Buteo buteo insularum), denominado aguililla en el archipiélago, presenta en estas islas una subespecie endémica. Se trata de una de las rapaces más abundantes de Canarias. Se encuentra ampliamente distribuida, aunque muestra preferencia por sobrevolar áreas abruptas y accidentadas. En Agaete es común en torno a sus mayores barrancos. Aunque no desdeña los

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 41

41

ambientes forestales, se le observa con mayor frecuencia en la orla inferior del monteverde y en los pinares. En cotas muy bajas y poco accidentadas escasea o se halla ausente. El cernícalo (Falco tinnunculus canariensis) es la rapaz más abundante del archipiélago. La subespecie es un endemismo de las islas centrales y occidentales, de las islas Salvajes y de Madeira. Se trata de un ave que ha desarrollado tonalidades del plumaje que facilitan su mimetización. Es abundante en áreas de la orla costera y de las medianías del municipio e, incluso, no resulta difícil avistarla planeando sobre sus asentamientos de población. Las áreas de enérgico relieve del municipio también sirven de soporte a la nidificación del cuervo (Corvus corax canariensis), que en Gran Canaria ha sufrido una drástica reducción de sus efectivos, hasta el punto de encontrarse en peligro de extinción, como revela la constatación de que en poco más de 10 años se ha pasado de contabilizar 162 parejas, a las poco más de 20 que han sido censadas recientemente. Existen citas, que se remontan a 1958, de la presencia en Tamadaba de grupos de esta especie que alcanzaban los 48 individuos. Al menos hasta 1971, el cuervo era abundante en el mismo Puerto de Las Nieves.

Aves asociadas a matorrales y pastizales xerófilos y xerotermófilos Los matorrales xerófilos del municipio sirven de soporte al desarrollo de una comunidad ornítica muy característica. Son frecuentes el alcaudón real (Lanius excubitor koenigi), un ave de tamaño medio y pico poderoso que depreda pequeños reptiles, ratones y pajarillos, a los que ensarta en arbustos espinosos, y la curruca tomillera (Sylvia conspicillata orbitalis), que muestra preferencia por asentarse en tabaibales y matorrales xerófilos de sustitución, aunque no desdeña las áreas cultivadas, los jardines y los espacios periurbanos. El bisbita caminero (Anthus berthelotii), considerado el ave más común de Canarias, confecciona el nido en el suelo, al amparo de matorrales, entre gramíneas o al abrigo de piedras, al igual que lo hace la subespecie del alcaraván presente en Gran Canaria (Burhinus oedicnemus distinctus), un endemismo de las islas centrales y occidentales del archipiélago que prefiere asentarse sobre llanos pedregosos y parcelas de cultivo abandonadas del litoral y de las medianías bajas, al norte del Valle de Agaete, en torno a Las Moriscas y a Las Rozas. La presencia de la perdiz roja (Alectoris rufa) es el resultado de las introducciones llevadas a cabo tras la conquista de la isla. También fue incorporada con fines cinegéticos, pero más recientemente, la perdiz moruna (Alectoris barbara koenigi). Ambas especies pueden ser avistadas sin dificultad en las medianías bajas del municipio. La abubilla (Upupa epops) es también un elemento propio de entornos áridos que, en el municipio, puede ser observado de forma esporádica. En los llanos de Las Moriscas ha sido constatada la existencia de poblaciones de terrera marismeña (Calandrella rufescens). La especie muestra afinidad por asentarse sobre llanos pedregosos, parcelas de cultivo abandonadas y bordes de malpaíses, siempre con un cierto desarrollo del estrato arbustivo y herbáceo. El camachuelo trompetero (Bucanetes githagineus amantum) es una rareza endémica del archipiélago. Su hábitat se circunscribe a entornos rocosos y a parcelas agrícolas abandonadas, inmersas en ambientes áridos. Hasta las primeras décadas del siglo XIX su presencia quedaba restringida a las islas de Fuerteventura y Lanzarote, desde donde se ha ido expandiendo por el resto del archipiélago. En Gran Canaria, casi relegado a la mitad meridional de la isla y al espacio comprendido entre Agaete y Gáldar. El triguero (Miliaria calandra calandra) frecuenta estos parajes. La especie estaba considerada hasta los primeros años del pasado siglo una de las aves más comunes de Canarias. Su hábitat se circunscribe a zonas abiertas del piso basal y de las medianías del norte de la isla, aunque puede alcanzar terrenos que se encuentren en torno a los 1.500 metros de altitud. Su población experimenta marcadas fluctuaciones. En años secos se ve drásticamente reducida. Requiere gran cobertura en el estrato herbáceo.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 42

42

Aves asociadas a barrancos con vegetación higrófila y a la presencia de láminas de agua de riego. Invernantes regulares en la franja litoral

A lo largo de cursos hídricos que albergan acequias, o en los que discurren de forma esporádica o frecuente agua corriente, y en torno a las terrazas aluviales que los flanquean, se desarrolla una formación vegetal de elevada cobertura que prospera a costa de la humedad edáfica y ambiental que se genera. De este modo, se articula un ecosistema singular, que se constituye en soporte de una comunidad ornitológica en la que participa la alpispa (Motacilla cinerea canariensis), una subespecie endémica del archipiélago, estrechamente ligada a la presencia de agua dulce que, en los últimos años, viene sufriendo las consecuencias del entubamiento del agua que circulaba por las acequias y el creciente desuso de los estanques. Desde que a comienzos del pasado siglo se constató la cría en Gran Canaria y Tenerife del chorlitejo chico, o zarapico (Charadrius dubius curonicus), una especie que hasta entonces era exclusivamente migrante e invernante, parece haberse ido extendiendo por presas y charcas de orillas fangosas. Nidifica en una pequeña depresión del terreno, revestida con abundantes piedrecillas, emplazada en llanos próximos a las superficies acuáticas, aunque en ocasiones lo hace en los muros de contención de los embalses del norte del municipio. Los avistamientos de garzas blancas (Egretta garzetta garzetta) y de garzas reales (Ardea cinerea cinerea), dos migrantes regulares, son frecuentes durante los meses de invierno. Aunque estas especies muestran preferencia por ocupar los bajíos costeros, no desdeñan las charcas y presas del norte de Gran Canaria. La estrecha franja litoral del municipio también sirve de soporte a otros invernantes de paso regular, como sucede con el chorlitejo grande (Charadrius hiaticula), avistado sin dificultad en los meses de invierno, y con el vuelvepiedras (Arenaria interpres), que con su pico voltea pequeños callaos en busca de alimento.

Aves asociadas a matorrales y bosquetes termoesclerófilos, y a relictos de monteverde En torno a los palmerales y a los rodales de almácigos y acebiches, restos de los antiguos bosques termoesclerófilos que cubrían las medianías bajas del municipio, se desarrolla una comunidad ornítica en la que participan el canario de monte (Serinus canarius), un endemismo macaronésico que también se introduce en los relictos de monteverde, en los pinares e, incluso, en los campos cultivados. A diferencia del canario, el pardillo (Acanthis cannabina meadewaldo) evita las áreas boscosas. La subespecie es un endemismo de las islas centrales y occidentales del archipiélago que resulta común en sectores que albergan matorrales desarrollados y en terrenos de cultivo. Las currucas cabecinegra (Sylvia melanocephala leucogastra) y capirotada (Sylvia atricapilla heineken) muestran afinidad por áreas que contengan matorrales y bosques termófilos. A causa del drástico retroceso que en el municipio han registrado estas formaciones vegetales ambas especies, paulatinamente, han ido ocupando otros entornos. La primera, un endemismo canario, se ha ido extendiendo por parajes xéricos, relictos de monteverde, donde llega a ser común, y áreas cultivadas. Además, no resulta raro avistarla en los rodales de tarajales de la franja costera. La curruca capirotada posee una mayor capacidad de adaptación, aunque exige cierto desarrollo del estrato arbóreo. No es raro observarla en jardines y parques, en cultivos de frutales, en relictos de monteverde y en cauces de barranco con presencia de vegetación arbolada. Su presencia en pinares, siempre con un notable desarrollo del sotobosque, es ocasional. La población canaria de búho chico (Asio otus canariensis) constituye una subespecie endémica. Esta rapaz nocturna, ampliamente distribuida por la isla, tiene su hábitat óptimo en las medianías bajas orientadas al norte, aunque llega a ocupar todos los ambientes, que incluye los núcleos urbanos. Resulta escasa en el ámbito potencial del monteverde. La subespecie de herrerillo (Parus caeruleus teneriffae) que aparece en la isla es un endemismo de Tenerife, La Gomera y Gran Canaria. Aunque se trata de un elemento que muestra preferencias por asentarse en relictos de monteverde y en pinares, se interna en campos de cultivo, próximos siempre a entornos boscosos, e, incluso, llega a alcanzar, a través de los barrancos, los tabaibales y cardonales, siempre que muestren un adecuado desarrollo.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 43

43

El mirlo (Turdus merula cabrerae) presente en la isla es una subespecie endémica de los archipiélagos macaronésicos de Madeira y Canarias. Se trata de un ave tremendamente oportunista que, si bien tiene por hábitat natural los relictos de monteverde y de pinar húmedo, muestra afinidad también por entornos de marcada antropización, como sucede con parques, jardines, campos de cultivo, donde se constituye en plaga, y núcleos urbanos. Su presencia ha sido detectada, incluso, en las tarajaledas próximas a la franja litoral del municipio. El petirrojo (Erithacus rubecula superbus) se presenta en la isla con una subespecie endémica que comparte con Tenerife. Es un ave eminentemente forestal que tiene su hábitat preferente en los relictos de monteverde, aunque también es común en la porción húmeda del pinar de Tamadaba. A causa de la tala masiva del monteverde de la isla, se ha establecido, además, en los castañares y en las áreas limítrofes con el bosque, e incluso se expande por los tramos inferiores de los barrancos, donde la vegetación conserva cierta exuberancia. Su presencia ha sido consignada, también, en el dominio termoesclerófilo. El pinzón común, (Fringilla coelebs canariensis) muestra una llamativa afinidad en su distribución con la especie precedente. La subespecie es un endemismo de Gran Canaria, Tenerife y La Gomera. Es un ave común en el monteverde, en la porción húmeda del pinar de Tamadaba, en los castañares y en áreas de cultivo aledañas a estas formaciones. También es abundante en pinares de repoblación. En el municipio de Agaete se extiende hasta las inmediaciones de la franja costera, siguiendo los cauces de los barrancos que albergan saucedas y cañaverales. La chocha perdiz (Scolopax rusticola) es una especie de hábitos nocturnos y crepusculares. Esta circunstancia, unida a su eficaz mimetización, gracias a un plumaje que se confunde con la hojarasca, y a su costumbre por permanecer completamente inmóvil ante la presencia de personas, ha dificultado el conocimiento de su distribución y el estado de sus poblaciones. La especie muestra preferencia por ocupar relictos de monteverde, castañares, pinares húmedos de exposición septentrional, incluso de repoblación, matorrales de leguminosas de las medianías altas, zarzales y pastizales, como los que se extienden en torno a las cumbres de El Sao, al Hornillo y a Tamadaba, donde en 1996 fue localizado un ejemplar juvenil muerto.

Aves asociadas a los jaguarzales (jarales), escobonales y retamares de Teline Sobre matorrales de notable densidad se desarrolla una comunidad avifaunística conformada, entre otras especies, por el mosquitero común (Phylloscopus canariensis), una de las aves más abundantes y ubiquistas de Canarias. Ocupa una gran diversidad de hábitats, desde la franja litoral hasta el matorral de leguminosas de las cumbres del municipio. Sólo evita las áreas más xéricas, con muy escaso desarrollo de la vegetación. Esta especie es un endemismo de las islas centrales y occidentales del archipiélago.

Aves asociadas a los pinares En los pinares con sotobosque patente y de apreciable riqueza florística, que tienen en las cumbres de Tamadaba una excelente muestra, se articula una asociación de la avifauna de llamativa singularidad. Es este el hábitat del pico picapinos (Dendrocopos major thanneri), un endemismo grancanario estrechamente ligado a los pinares más desarrollados de Pinus canariensis. Por el borde inferior puede internarse en áreas cultivadas. Resulta muy común en el pinar de Tamadaba. A diferencia de la subespecie tinerfeña es corriente avistarla fuera del pinar, en zonas cultivadas, en castañares, e incluso en palmerales y cañaverales. Llega a nidificar en el monteverde, donde parece haberse asentado en los últimos años. Una de las rapaces más emblemáticas de la isla corona los cielos de Tamadaba. Se trata del gavilán, cuya subespecie (Accipiter nisus granti) es un endemismo de Canarias y Madeira, que tiene su hábitat preferente en relictos de monteverde y en los pinares húmedos, de exposición septentrional, con presencia de abundante sotobosque.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 44

44

Tamadaba alberga una de las joyas ornitológicas del archipiélago: el pinzón azul de Gran Canaria (Fringilla teydea polatzekii), una subespecie que se diferencia de la especie clásica, que tiene su hábitat en la isla de Tenerife (Fringilla teydea teydea). Aunque desde su descubrimiento, en 1905, el hábitat clásico de Fringilla teydea polatzekii han sido los pinares de Ojeda, Inagua y Pajonales, en 1958 su presencia es confirmada por vez primera en Tamadaba, donde siempre ha resultado escasísima. Las últimas citas del pinzón azul para Tamadaba datan de los años 1994 y 1995. Con posterioridad, en noviembre de 2002 se procedió a la reintroducción de 6 individuos en el marco del Programa Life. Ver en el anexo la Tabla 8.1. “Inventario de aves del término municipal de Agaete”. Mamíferos De las tres especies de quirópteros citadas para la isla de Gran Canaria, el territorio municipal acoge dos de ellas: los murciélagos montañero (Hypsugo savii) y de borde claro (Pipistrellus kuhlii). Desde el inicio de los años noventa del pasado siglo ambos mamíferos han incrementado sus efectivos y sus poblaciones en la isla. En el municipio que es objeto de este análisis ambiental ocupan escarpes del entorno de las Casas del Camino y de los Berrazales, en el Valle de Agaete; del corazón del pinar de Tamadaba, y de las inmediaciones de la localidad de El Risco. Las restantes especies que han sido consignadas en el municipio son de marcado carácter cosmopolita y han sido introducidas por el hombre. Algunas podrían estar usurpando nichos ecológicos de elementos de la avifauna que muestran escasa competencia en la colonización de áreas sensiblemente antropizadas. Sucede así con las ratas negra y gris (Rattus rattus y Rattus norvegicus), el ratón (Mus musculus domesticus) y el gato asilvestrado (Felis silvestris catus). En entornos con un componente natural más elevado aparece con frecuencia el conejo (Oryctolagus cuniculus) y el erizo moruno (Atelerix algirus). El primero fue introducido tras la conquista de la isla con una finalidad estrictamente cinegética, causando el deterioro de la flora autóctona y la merma de la producción agrícola. Ver en el anexo la Tabla 8.2. “Inventario de mamíferos silvestres y asilvestrados del término municipal de Agaete”. Reptiles Tres especies endémicas, dos de distribución insular y otra macaronésica, con una subespecie también endémica de la isla, están presentes en el municipio. El lagarto de Gran Canaria (Gallotia stehlini), que con frecuencia supera los 50 cm. de longitud, muestra preferencia por ambientes pedregosos, cercanos a asentamientos humanos, aunque se extiende por toda la isla, desde zonas de poca altitud asociadas al cardonal-tabaibal y al bosque termófilo, hasta las cumbres del municipio. El perenquén de Boettger (Tarentola boettgeri) se distribuye por las islas de Gran Canaria (ssp. boettgeri), El Hierro (T. boettgeri hierrensis), y el pequeño archipiélago portugués de las Salvajes (T. boettgeri bischoffi). En Madeira se extinguió a principios del siglo XX. De hábitos nocturnos, es una especie abundante en la franja costera y en las medianías, rara por encima de los 750 m y ausente en cotas superiores a los 1.000 metros. La lisa (Chalcides sexlineatus), es un endemismo grancanario que muestra una elevada variedad morfológica. A pesar de tratarse de un reptil abundante, su comportamiento discreto no hace fácil su observación. En el municipio de Agaete puede observarse desde las localidades costeras hasta las cumbres del término municipal; sin embargo, presenta una mayor densidad en los enclaves de las medianías sometidos a la incidencia del mar de nubes que arrastran Los Alisios. Sorprendentemente, resulta rara en el pinar de Tamadaba. Su atractiva coloración, la convierten en un reptil codiciado por terrariófilos y colectores. Esta circunstancia ha conducido a incluirla en el Catálogo Español Especies Amenazadas, con la categoría de Interés Especial. Ver en el anexo la Tabla 8.3. “Inventario de reptiles del término municipal de Agaete”.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 45

45

Anfibios Mientras la rana común (Rana perezii), está vinculada a la presencia permanente de agua, la ranita de San Antonio (Hyla meridionalis), abandona con frecuencia el entorno acuático; desarrolla parcialmente su vida en sectores de abundante humedad, y regresa al agua para su reproducción. Ambas especies han sido introducidas en el archipiélago. Ver en el anexo la Tabla 8.4. “Inventario de anfibios del término municipal de Agaete”. Categorías de protección de la fauna vertebrada terrestre En la relación adjunta, a cada una de las especies cuya presencia ha sido constatada se le asigna los grados de amenaza y protección que contemplan documentos que siguen la normativa dictada por las administraciones públicas nacionales y por los convenios internacionales suscritos por España. Se recogen las establecidas en la legislación vigente:

- Catálogo Canario de Especies Protegidas (CCEP), creado por la Ley 4/2010, de 4 de junio.

- Catálogo Español de Especies Amenazadas (CEEA), regulado por el Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas.

- La Directiva 79/409/CEE de 2 de abril, relativa a la conservación de las aves silvestres (D-AVES).

- El Convenio de Bonn (C. BONN) de 23 de junio de 1979 sobre conservación de especies migratorias.

- Convenio de 19 de septiembre de 1979, acerca de la conservación de la vida silvestre y del medio natural en Europa (Convenio de Berna).

- Convenio sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestre, publicado en Washington, el 3 de marzo de 1973 (CITES).

- Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, reglado por el Real Decreto 42/2007, de 13 de diciembre.

Ver en el anexo las siguientes tablas: Tabla 8.5. “Categorías de amenaza y régimen de protección de aves nidificantes y migrantes del término municipal de Agaete”. Tabla 8.6. “Categorías de amenaza y régimen de protección de mamíferos silvestres y asilvestrados del término municipal de Agaete”. Tabla 8.7. “Categorías de amenaza y régimen de protección de reptiles del término municipal de Agaete”. Tabla 8.8. “Categorías de amenaza y régimen de protección de anfibios del término municipal de Agaete”.

Fauna invertebrada terrestre Ligadas a diferentes ecosistemas se desarrollan comunidades diferenciadas. En función de la época del año en la que se realicen los inventarios aparecerán distintas especies y en diferente proporción.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 46

46

Muchos de los elementos fueron introducidos de forma voluntaria o fortuita y su hábitat coincide en buena medida con los asentamientos humanos. Al tratarse de un espacio que experimenta un alto grado de antropización, la fauna invertebrada se ha visto severamente afectada. El listado expuesto en la tabla 8.9. pretende ser una mera estimación de la fauna invertebrada que alberga el municipio, a falta de la realización de estudios más detallados mediante una metodología de muestreo apropiada y una rigurosa revisión bibliográfica. Grado de endemicidad de la fauna invertebrada terrestre El grado de endemicidad y, en consecuencia, de singularidad de la fauna invertebrada del municipio es muy elevada (en torno al 45% del conjunto de las especies). La mayor parte de los endemismos son compartidos por los archipiélagos de Madeira y Canarias. Se trata de especies que muestran una gran afinidad con la fauna invertebrada paleomediterránea, desaparecida del continente durante las crisis climáticas ocurridas durante el Pleistoceno y el comienzo del Holoceno y que encontraron en sendos archipiélagos entornos adecuados para su supervivencia. Ver en el anexo la Tabla 8.9. “Fauna invertebrada y grado de endemicidad del término municipal de Agaete”. Categorías de protección de la fauna invertebrada terrestre A pesar del elevado número de endemismos macaronésicos y canarios de la fauna invertebrada, sólo cuatro se encuentran incluidas, exclusivamente, en uno de los catálogos de protección. A pesar del elevado número de endemismos macaronésicos y canarios de la fauna invertebrada, sólo cuatro se encuentran incluidas, exclusivamente, en el Catálogo Canario de Especies Protegidas (CCEP), creado por la Ley 4/2010, de 4 de junio. Ver en el anexo la Tabla 8.10. “Categorías de protección de la fauna invertebrada del término municipal de Agaete”. Áreas de interés faunístico Son espacios de elevada fragilidad ante la existencia de especies singulares de la avifauna los acantilados de la orla litoral del municipio y los escarpes del interior, que han servido de soporte a la nidificación, entre otras, del guincho, o águila pescadora (Pandion haliaetus), del que existen numerosas citas de su antigua presencia en los cantiles de Agaete; del petrel de Bulwer (Bulweria bulwerii), del que en las últimas décadas han sido observados algunos ejemplares en el litoral del municipio, en el Valle de Agaete y en el pinar de Tamadaba; del halcón tagorote (Falco pelegrinoides), otra especie estrechamente ligada a los cantiles y a las vertientes escarpadas, donde en condiciones óptimas forma colonias que agrupan numerosos individuos; de la pardela cenicienta (Calonectris diomedea). Los escarpes de los barrancos que surcan el término municipal se constituyen en ocasiones en áreas de cría de la lechuza (Tyto alba alba), una especie que, en Gran Canaria, ha sufrido una merma significativa de sus poblaciones; del ratonero común (Buteo buteo insularum), denominado aguililla en el archipiélago; del cernícalo (Falco tinnunculus canariensis), la rapaz más abundante de Gran Canaria, y del cuervo (Corvus corax canariensis), que en los últimos veinte años ha sufrido una drástica reducción de sus efectivos en la isla, hasta el punto de encontrarse en peligro de extinción. Los sectores escarpados del entorno de las Casas del Camino y los Berrazales, en el Valle de Agaete; del corazón del pinar de Tamadaba, y de las inmediaciones de la localidad de El Risco acogen los murciélagos montañero (Hypsugo savii) y de borde claro (Pipistrellus kuhlii). Desde el inicio de los años noventa del pasado siglo ambos mamíferos han incrementado sus efectivos y sus poblaciones en la isla.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 47

47

Los matorrales y pastizales xerófíticos del municipio sirven de soporte al desarrollo de una comunidad ornítica muy característica, algunas de cuyas especies se encuadran dentro del grupo de las aves esteparias. Es el caso de la subespecie del alcaraván presente en Gran Canaria (Burhinus oedicnemus distinctus), un endemismo del las islas centrales y occidentales del archipiélago que, en el municipio, prefiere asentarse sobre llanos pedregosos y parcelas de cultivo abandonadas del litoral y de las medianías bajas, al norte del Valle de Agaete, en torno a Las Moriscas y a Las Rozas; de la terrera marismeña (Calandrella rufescens), y del camachuelo trompetero (Bucanetes githagineus amantum), una rareza endémica de Canarias que, además de en las localidades citadas, ha sido avistado en las parcelas de cultivo abandonadas de los lomos del Trigo y de Jerónimo, próximas a la desembocadura del Barranco de El Risco. Cuando se incrementa el estrato arbustivo, el entorno se torna favorable para la aparición de la curruca tomillera (Sylvia conspicillata orbitalis), que muestra preferencia por asentarse en tabaibales y matorrales xerófilos de sustitución, aunque no desdeña las áreas cultivadas, los jardines y los espacios periurbanos, y del alcaudón real (Lanius excubitor koenigi), un ave de tamaño medio y pico poderoso que depreda pequeños reptiles, ratones y pajarillos, a los que ensarta en arbustos espinosos. Las formaciones vegetales termoesclerófilas, que incluyen los palmerales de las cuencas de Guayedra y de El Risco; el acebuchal más emblemático del municipio, emplazado en la cañada de Las Lechugas, inmediatamente al norte del espigón de Faneque, y los rodales de almácigos se extienden entre la localidad de Vecindad de Enfrente y las vertientes del espigón de La Cardonera; además de los relictos de monteverde que se desarrollan sobre la localidad de El Hornillo y los que se asientan de forma dispersa por los barrancos que conforman la cabecera de las cuencas de Guayedra (Barranco Oscuro y de los Palosblancos) y de La Palma (Barranco del Aderno), acogen una nutrida comunidad ornítica en la que participan el canario de monte (Serinus canarius), las currucas cabecinegra (Sylvia melanocephala leucogastra) y capirotada (Sylvia atricapilla heineken), el búho chico (Asio otus canariensis), el herrerillo (Parus caeruleus teneriffae), el mirlo (Turdus merula cabrerae), el petirrojo (Erithacus rubecula superbus), el pinzón común (Fringilla coelebs canariensis) y la chocha perdiz (Scolopax rusticola). El pinar natural de pino canario que, en el municipio de Agaete tiene su óptimo climácico sobre el macizo de Tamadaba, se articula una asociación de la avifauna de llamativa singularidad. Es este uno de los más relevantes hábitat del pico picapinos (Dendrocopos major thanneri), un endemismo grancanario estrechamente ligado a los pinares más desarrollados de Pinus canariensis. Una de las rapaces más emblemáticas de la isla corona los cielos de Tamadaba. Se trata del gavilán, cuya subespecie (Accipiter nisus granti) es un endemismo de Canarias y Madeira. Tamadaba alberga una de las joyas ornitológicas del archipiélago: el pinzón azul de Gran Canaria (Fringylla teydea polatzekii). Aunque desde su descubrimiento, en 1905, el hábitat clásico de Fringylla teydea polatzekii han sido los pinares de Ojeda, Inagua y Pajonales, en 1958 su presencia es confirmada por vez primera en Tamadaba, donde siempre ha resultado escasísima. Las últimas citas del pinzón azul para Tamadaba datan de los años 1994 y 1995. Con posterioridad, en noviembre de 2002 se procedió a la reintroducción de 6 individuos en el marco del Programa Life. Todas estas circunstancias han conducido a que el parque natural de Tamadaba haya sido incluida en el área de importancia para las aves (IBA) nº 355, al constatarse que cumple los criterios A2, B2 y C6.

- Criterio A2: El área acoge una parte significativa de un grupo de especies cuyas áreas de cría definen una EBA (Área de Aves Endémicas).

- Criterio B2: Cuenta con especies con un estado de conservación desfavorable en Europa.

- Criterio C6: El área es una de las cinco más importante en cada “región europea” para una especie o subespecie del Anexo I de la Directiva Aves.

La plasmación gráfica de esta variable ambiental se localiza en el Plano IA. 10 “Fauna: Áreas de interés faunístico” de este Documento.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 48

48

2.8 Calidad visual del paisaje

Esta variable ambiental está desarrollada con detalle en el apartado 3.9 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. El análisis de esta variable se fundamenta en los valores estéticos que se perciben en el paisaje. La elevada carga de subjetividad que conlleva su estimación queda matizada mediante la utilización de procedimientos metodológicos diseñados al efecto. Aspectos metodológicos Se ha establecido, mediante la utilización de tecnologías de información geográfica, una propuesta metodológica de valoración indirecta, cuya aplicación resulta válida en el territorio que aborda este documento, y con la que se pretende agilizar el proceso de evaluación de la calidad visual. Esta metodología requiere establecer previamente la delimitación de unidades homogéneas de paisaje, en las que se considera, por un lado, la calidad visual intrínseca del paisaje de cada unidad, considerando el grado de integración de las actuaciones humanas en el territorio y, por otro, la calidad visual extrínseca del paisaje de cada unidad, que considera el fondo escénico; esto es, de qué modo el valor del paisaje de cada unidad se ve influido por el circundante. Las unidades delimitadas conforman tres grandes grupos:

- Unidades del espacio edificado, en las que confluyen las actividades urbanas. Cuentan con una morfología física y una funcionalidad propia.

- Unidades del espacio agrícola. Incluyen las áreas agrícolas en explotación y en abandono.

- Unidades con predominio de elementos naturales. Son unidades escasamente transformadas, en contraposición al entorno urbano.

Con la valoración de la calidad visual del paisaje se cuantifica la incidencia visual de los elementos territoriales. Con el propósito de objetivizar los resultados se han establecido fórmulas de valoración ponderada, para luego aplicarlas a las unidades de paisaje: Exposición de resultados Tras analizar las unidades conforme a su tipología se concluye que, con respecto a las correspondientes al espacio edificado, el 17,2% de su superficie posee un valor bajo. Afecta a unidades que han sufrido un cambio de tipología constructiva que conduce con frecuencia a incrementar el aspecto caótico del conjunto edificado. El 58,6% de la superficie de las unidades del espacio edificado muestra un valor moderado, que resulta predominante a lo largo del entorno edificado del lecho del Barranco de Agaete. El 16,3% cuenta con un valor alto, especialmente en los núcleos rurales del interior. El valor muy bajo, que representa el 7,9% de la superficie de este tipo de unidades, afecta exclusivamente al entorno que conforman las viviendas unifamiliares emplazada en Las Hoyillas, donde los solares abandonados, los desmontes y los vertidos de residuos sólidos generan un muy evidente impacto visual. Una amplia superficie de las unidades que conforman el espacio agrícola (el 38,5%) posee una calidad visual moderada. Se trata de espacios conformados por parcelas que ocupan los lechos de los principales barrancos que surcan la superficie municipal, e incluyen algunas edificaciones. Las unidades que cuentan con un valor bajo ocupan el 32,8% de las incluidas en la tipología agrícola. Engloba unidades que albergan parcelas abandonadas que fueron explotadas de forma extensiva y que en la actualidad constituyen eriales. Al 17,9% de la superficie de las unidades agrícolas se les ha asignado un valor muy bajo. Son parcelas emplazadas en la franja costera, entre los llanos del Turmán y El Goteo, que en el pasado fueron destinadas a sostener cultivos intensivos (tomate, fundamentalmente). El 10,8% de la superficie de las unidades agrícolas posee un valor alto. Su localización se circunscribe al entorno de Los Berrazales, fundamentalmente, donde las parcelas,

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 49

49

armoniosamente integradas en el entorno que las circunda, están destinadas al autoconsumo y al abastecimiento del mercado local. Los valores de la calidad visual de las unidades con predominio de elementos naturales resultan notablemente desiguales. Predomina el valor muy alto, que corresponde al 37,6% de la superficie de este tipo de unidades, especialmente en las emplazadas en el pinar de Tamadaba. El valor alto se extiende sobre el 32,5% de la superficie de estas unidades e incluye espacios que muestran cierto grado de antropización que merma levemente su calidad visual. La superficie de las unidades que cuentan con calidades visuales moderada y baja representan el 15,9 y el 14%, respectivamente. Conforman espacios degradados, que adolecen de una adecuada integración visual. Áreas prioritarias para su ordenación paisajística En cumplimiento de la directriz 113.1, correspondiente a las Directrices de Ordenación General de Canarias, la determinación de las áreas prioritarias para su ordenación paisajística se ha llevado a cabo tras el análisis de la calidad visual del paisaje y el inventario de los impactos detectados en el territorio municipal. De este modo, se han cartografiado como áreas prioritarias para su ordenación paisajística (Plano IA.12 “Áreas Prioritarias para su Ordenación Paisajística”), las que cuentan con calidades visuales baja y muy baja y las afectadas por impactos significativos y visibles desde los enclaves más transitados. Zonas con alta prioridad para su ordenación paisajística

Áreas agrícolas. Cuando a través de la Autovía del Norte de Gran Canaria (GC-2) se accede al municipio, en el entorno de Las Moriscas y El Turmán, se observan extensas parcelas de cultivo abandonadas que sostuvieron tomateros hasta hace algunas décadas, e instalaciones agropecuarias que se encuentran en estado ruinoso. El conjunto genera un impacto visual de signo negativo y de intensidad significativa.

Soporte natural.

Montaña Blanca, sobre cuyo flanco suroccidental se asienta la villa de Agaete, se encuentra intensamente antropizada. La presencia de pequeñas canteras y de numerosos desmontes, visibles desde la Autovía del Norte de Gran Canaria (GC-2), incide en la pérdida de calidad paisajística.

Espacio edificado.

Las urbanizaciones de El Turmán y Las Hoyillas demandan una eficaz integración paisajística, a causa de la escasa calidad visual que exhiben, agravada por la existencia de notables impactos derivados de la edificación y del deterioro del espacio no urbanizado. Zonas con moderada prioridad para su ordenación paisajística

Áreas agrícolas.

Entre Las Nieves y Las Torres, en el último tramo del Barranco de Agaete, se extienden algunas parcelas de cultivo abandonadas, de notables dimensiones, que incluyen infraestructuras y edificaciones vinculadas con la pasada actividad agrícola, que se encuentran con frecuencia en estado ruinoso y generan, en consecuencia, un relativo impacto visual. Se les asigna una prioridad moderada, por encontrarse en un entorno territorial que mantiene cierta capacidad para absorber cambios que se integren de manera positiva desde una óptica paisajística.

Soporte natural.

Ocupa la vertiente meridional del Barranco de Agaete, desde la Hoya de La Palmita, en la desembocadura, hasta El Toscón, aguas arriba, junto a la localidad de Vecindad de Enfrente. A pesar

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 50

50

del predominio de los elementos naturales, se consigna la presencia dispersa de movimientos de tierra, de algún vertedero incontrolado y de infraestructuras de carácter urbano, inadecuadamente integradas. Sin embargo, estos impactos no impiden que este sector del municipio constituya un espacio integral de calidad paisajística moderada.

Espacio edificado.

La urbanización “La Suerte”, emplazada en la vertiente septentrional del Barranco de Agaete, muestra evidencias visuales de un progresivo deterioro y de la aparición de impactos generados por la implantación de infraestructuras, que debieran conducirla a su ordenación paisajística, con una prioridad moderada. Zonas con baja prioridad para su ordenación paisajística

Áreas agrícolas. El paisaje agrícola que se extiende sobre los Llanos de Agaete, entre las localidades de Piletas y Troya, cuenta con una calidad visual aun estimable, a pesar de que el proceso de abandono de los cultivos se encuentra muy avanzado y se han implantado algunas infraestructuras que adolecen de una adecuada integración paisajística. La visibilidad de este sector desde el espacio circundante es escasa.

Soporte natural. En el tramo superior de la vertiente meridional del Barranco de Agaete, entre El Laderón y El Cañón, algunas edificaciones dispersas, mal integradas desde una óptica paisajística, quiebran la armonía de un espacio en el que predominan los elementos naturales. Se le asigna una prioridad baja a causa de la escasa visibilidad del enclave.

Espacio edificado. Las edificaciones emplazadas en el entorno de Los Berrazales son susceptibles de una mejora paisajística que las integre visualmente en el entorno circundante, especialmente el hotel Princesa Guayarmina que, en la actualidad, presenta un evidente deterioro. El reflejo cartográfico de esta variable ambiental se encuentra en los planos IA. 11 “Calidad visual del paisaje” y IA.12 “Áreas Prioritarias para su Ordenación Paisajística” de este Documento.

2.9 Impactos preexistentes

Esta variable ambiental se encuentra desarrollada con detalle en el apartado 3.11 de la Memoria de Información Ambiental de este Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. A causa de su emplazamiento en el área de influencia difusa y no inmediata de la capital de la isla, el municipio de Agaete sólo se ha visto afectado en los últimos años, desde que el trazado de la Autovía del Norte de Gran Canaria (GC-2) alcanzara la Villa de Agaete y se abriera la línea marítima de tráfico comercial entre los puertos de Agaete y de Santa Cruz de Tenerife, en los años noventa del pasado siglo, por procesos de urbanización que ha conducido a la aparición de viviendas habitadas por efectivos poblacionales procedentes de Las Palmas de Gran Canaria, que desarrollan allí su actividad laboral y que, a modo de péndulo, se trasladan diariamente entre los dos municipios, y al discreto despegue de la urbanización turística del entorno del Puerto de Las Nieves. En cualquier caso, la mayor parte de los impactos que sufre el municipio están vinculados al relevante desarrollo agrícola que detentó y que en las últimas décadas ha menguado radicalmente. El avanzado proceso de abandono que experimenta ha conducido a que el espacio agrícola del término municipal registre procesos e impactos puntuales que vienen ocasionando una alarmante merma de su calidad ambiental, especialmente en el tramo inferior del Valle de Agaete, entre la capital municipal y Las Nieves.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 51

51

Tras el análisis de los procesos observados, se establece la clasificación que sigue: Impactos relacionados con las alteraciones del relieve y el suelo En este grupo se han considerado las alteraciones de las formas del relieve y del sustrato edáfico, vinculadas, fundamentalmente, con la actividad extractiva, con la implantación de infraestructuras, especialmente de la red viaria, y con el desarrollo de actividades agrícolas.

Áreas extractivas abandonadas.

Taludes.

Desmontes.

Cultivos abandonados. Impactos relacionados con la degradación ecológica Cualquier actuación sobre el territorio es susceptible de originar su degradación ecológica; esto es, el deterioro de las comunidades florísticas y faunísticas que sostiene, hasta llegar a provocar la pérdida de especies y de hábitats.

Comunidades vegetales invasoras. Impactos relacionados con las edificaciones y construcciones La proliferación de la edificación dispersa con modelos constructivos escasamente integrados en el entorno circundante ocasiona un marcado impacto paisajístico. Además de la carencia de dotaciones y equipamientos adecuados, la condición caótica de la urbanización dificulta su emplazamiento. Además, en los últimos años el crecimiento del área urbanizada se hace a costa de terrenos de elevada calidad agrícola, como sucede en el tramo inferior del Valle de Agaete, donde todos estos fenómenos se observan con frecuencia.

Mal estado de conservación.

Exceso volumétrico y del número de plantas.

Ubicación inadecuada por razones ambientales y paisajísticas.

Escasa integración visual del borde urbano.

Construcciones en precario. Impactos relacionados con las infraestructuras Aunque a causa de su carácter extensivo sobre el territorio municipal no han sido reflejadas cartográficamente, la apertura indiscriminada de pistas incide en la aparición de procesos de erosión remontante que se concretan en la aparición de cárcavas que canalizan la pérdida de suelo fértil. A este fenómenos no son ajenos siquiera los terrenos que conforman el Parque Natural de Tamadaba. Al margen de esta consideración, los que se detallan a continuación son los impactos ambientales y paisajísticos ocasionados por la red de infraestructura viaria, de telecomunicaciones y alumbrado y de saneamiento.

Inadecuación del soporte viario.

Antenas con escasa integración paisajística.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 52

52

Soportes de tendido eléctrico y telefónico escasamente integrados.

Elementos del saneamiento escasamente integrados. Impactos relacionados con los espacios libres

Mobiliario urbano en mal estado.

Falta de mantenimiento de zonas ajardinadas.

Parcelas con escasa integración paisajística. Impactos relacionados con la contaminación ambiental

Percepción constante de malos olores.

Vertidos sólidos de basuras y escombros.

Vertidos líquidos de tierra al mar. La plasmación cartográfica de esta variable ambiental se encuentra en el Plano IA. 14 “Impactos Ambientales” de este Documento.

2.10 Patrimonio cultural

Esta variable ambiental se ha desarrollado con detalle en el apartado 3.10 de la Memoria de Información Ambiental del presente Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. El territorio que ocupa el municipio de Agaete alberga una llamativa riqueza patrimonial. Estos parajes albergaron un elevado contingente de población indígena, que quedaba concentrado, en su mayor parte en torno al Valle de Agaete y a los principales barrancos que atraviesan el actual término municipal, donde la presencia de agua corriente y de suelos de estimable calidad agrícola propiciaban el poblamiento permanente. Posteriormente, en 1481, durante la conquista de la isla, el capitán Alonso Fernández de Lugo erige, no lejos de la desembocadura del Barranco de Agaete, el fuerte que se constituye en cabeza de puente decisiva en el sometimiento de la isla a la corona castellana. Años más tarde, en 1486, poco después de la conquista de la isla, Alonso Fernández de Lugo, que durante los años de guerra que acabaron con la incorporación de la isla a la corona de Castilla, fue nombrado alcaide de la fortaleza de Agaete. Su destacado papel en la conquista de Gran Canaria fue recompensada con las más fértiles tierras de las riberas del barranco recorre el Valle de Agaete. Con objeto de analizar el patrimonio histórico de Agaete, además de mantener entrevistas con los técnicos del servicio de patrimonio histórico del cabildo de Gran Canaria, se han consultado la carta arqueológica del municipio, los catálogos de bienes etnográficos y arquitectónicos, la guía del patrimonio arqueológico de la isla de Gran Canaria, la base de datos Patrinet del Cabildo de Gran Canaria y la documentación que atesora la Fundación para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria (FEDAC). La elevada singularidad de algunos elementos del patrimonio histórico del municipio en el contexto del archipiélago, como sucede con la necrópolis del maipez, con el tríptico de Las Nieves, o con el ingenio que mandó edificar el conquistador Alonso Fernández de Lugo, han acabado por incorporarlos al circuito turístico de la isla tras haber sido habilitados de forma exquisita. Patrimonio arqueológico La ley 4/99, de 15 de Marzo, de Patrimonio Histórico de Canarias, determina que los yacimientos arqueológicos del archipiélago deberán ser identificados, localizados e inventariados mediante cartas arqueológicas de ámbito municipal. Las cartas permiten planificar la gestión y tutela del patrimonio arqueológico y paleontológico.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 53

53

Las actividades desempeñadas por las comunidades prehispánicas han dejado numerosos testimonios materiales. Poblados en superficie, constituidos por casas de piedra labrada; cuevas excavadas eb el sustrato, silos, necrópolis o canteras de molino son algunos de los restos de la presencia de las comunidades de indígenas canarios que ocuparon este sector de la isla a lo largo de más de un milenio. El municipio de Agaete cuenta con 65 yacimientos arqueológicas catalogados, siete (7) de ellos han sido declarados o incoados “Bienes de Interés Cultural” (BIC).

Risco de los Dos Ojos.

Roque Bermejo.

Ermita de San Sebastián.

Lomo de Troya (Montaña Blanca).

Risco de Las Chobicenas-La Suerte.

Risco de La Escalera.

Cuevas de La Culata.

Andén de Las Cuevas (Cabuco).

Casa del Acantilado (Casa de Segura).

El Risco II: Lomo del Risco (La Montañeta).

La Degollada.

Solapones del Risco.

Lomo de La Aulaga.

Hoya del Tabaibal.

Playa del Risco.

Lomo Gregorillo.

Risco Faneque.

Guayedra II: Morrete de Sandico.

Cuevas del Hornillo.

Guayedra V: Conchero De Guayedra.

Lomo del Manco.

Las Moriscas.

Roque y túmulo de La Fortaleza.

Cueva-corral en el Barranco de Piso Firme.

Necrópolis del Maipés de Abajo.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 54

54

El Palmeral.

La Palmita.

Casa Fuerte (La Torre).

Iglesia de Nuestra Señora de La Concepción.

Agaete Casco Urbano.

Las Candelarias.

Necrópolis del Maipés (Maipés de Arriba).

Cantera de La Calera.

Baños de Agaete.

Guayedra I: Casas de Guayedra.

Guayedra II: Majada de Altabaca.

Guayedra IV: El Roque.

Cuevas del Barranco del Juncal.

Guayedra VI: Barranco de La Palma.

Guayedra VII: Guayedra Alta.

Cuevas del Moro.

Punta del Turman.

Ermita de Las Nieves.

Solapones de Guguy Grande.

Ladera Blanca.

El Aguadulce.

Cruz del Tabaibal.

Los Acarraderos.

Las Longueras.

Birbique.

El Risco I: Lomo de Los Canarios. Patrimonio etnográfico La Ley 4/99, de Patrimonio Histórico de Canarias, define el patrimonio etnográfico del archipiélago, como “aquel compuesto por todos los bienes muebles e inmuebles, los conocimientos, técnicas y

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 55

55

actividades y sus formas de expresión, que son testimonio y expresión relevante de la cultura tradicional del pueblo canario”. El municipio cuenta con 396 bienes inmuebles de carácter etnográficos inventariados que quedan estructurados, desde una óptica funcional, de la forma que sigue: - Bienes de carácter hidráulico

Acequias (11).

Acueducto.

Albercón.

Aljibe (5).

Caidero (4).

Campana.

Canal (2).

Cantonera (15).

Charqueta (2).

Decantadora (2).

Estanque (61).

Fuente (3).

Galería.

Laguna.

Lavadero (10).

Mareta (6).

Mina.

Naciente.

Pozo (13).

Presa (4).

Riego (2).

Tomadero.

- Bienes de carácter agrícola

Cadenas de cultivo (12).

Cuarto de aperos (5).

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 56

56

Era (24).

Finca (4).

Huerto.

Pajero (5).

Vivero (2).

Vivienda (35). - Bienes de carácter ganadero

Abrevaderos (2).

Alpendre (57).

Chiquera.

Corral (6).

Goro (6).

Majada.

Refugio de pastores (2).

Solapón (4).

- Bienes vinculados con la industria agroalimentaria

Horno de pan (4).

Molino (7).

Panadería (2).

- Bien vinculado con las industrias extractivas y recolectoras

Aserradero.

Carbonera (4).

Horno de cal (5).

Horno de ladrillos.

Horno de tejas (5).

Salinas.

- Bienes vinculados con la pesca artesanal

Cofradía de pescadores.

Lonja.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 57

57

Muelle. - Bienes vinculados con el comercio

Almacén (7).

Bar (3).

Farmacia.

Ferretería.

Restaurante (2).

Tienda (4).

- Bienes vinculados con el transporte

Puente (11).

Túnel (2).

- Conjuntos de interés

Lugar de interés etnográfico.

Paisaje de interés (2).

- Otras áreas significativas

Balneario.

Ermita (2).

Cueva (10).

Bienes de Interés Cultural (B.I.C.) La Ley 4/1999, de 15 de marzo, de Patrimonio Histórico de Canarias, indica que “se declararán Bienes de Interés Cultural del Patrimonio Histórico Canario aquellos bienes que ostenten notorios valores históricos, arquitectónicos, artísticos, arqueológicos, etnográficos o paleontológicos o que constituyan testimonios singulares de la cultura canaria”. La misma ley, en su artículo 20, recoge que la incoación de expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural, determinará la aplicación provisional del mismo régimen de protección previsto para los bienes declarados de interés cultural y su entorno, en su caso. Agaete alberga 8 bienes del patrimonio histórico (tres monumentos y cinco zonas arqueológicas) que han sido declarados bienes de Interés cultural o se hallan en fase de incoación para su posterior declaración.

- Zona arqueológica del santuario de Tirma

Se incoa expediente para su declaración de Bien de Interés Cultural por Decreto de 22 de mayo de 2003.

- Zona arqueológica “Valle de Guayedra”

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 58

58

Se procede a la delimitación del Bien incoado mediante anuncio por el que se hace público, en el Decreto de 16 de mayo de 2001.

- Zona arqueológica “Lomo de Los Canarios-lomo del Risco” Se incoa expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural, según decreto de 25 de junio de 2001.

- Zona arqueológica de La Palmita Se le incoa expediente de declaración de Bien de Interés Cultural, por Resolución de 5 de marzo de 1990.

- Zona arqueológica de la necrópolis del Maipez o Maipez de Arriba Fue declarada Bien de Interés Cultural por el Decreto 1866/1973, de 5 de julio (BOE nº181, de 30.07.1973).

- Monumento histórico “Ermita de Las Nieves” Fue declarado Bien de Interés Cultural el 11 de febrero de 1972.

- Monumento histórico “Ermita de San Sebastián” El 10 de febrero de 2004 se incoó expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural de esta ermita, emplazada en la plaza de San Sebastián, entre las calles Pescadores y Buenavista.

- Sitio histórico “Casa Fuerte de Agaete” El lunes 17 de febrero de 1992, el boletín oficial de Canarias nº 23, mediante Resolución de 18 de diciembre de 1991 de la Dirección General de Patrimonio Histórico, incoaba expediente de declaración de sitio histórico, Bien de Interés Cultural, a favor de la Casa Fuerte de Agaete, por lo que se convertía en un “lugar o paraje natural vinculado a acontecimientos o recuerdos del pasado, a tradiciones populares, creaciones culturales o de la naturaleza y a obras del hombre, que posean valor histórico, etnológico, paleontológico o antropológico” La representación cartográfica de esta variable ambiental se encuentra en el Plano IA. 13 “Patrimonio Cultural” de este Documento.

2.11 Riesgos Naturales

Esta variable ambiental se desarrolla con detalle en el apartado 3.12 de la Memoria de Información Ambiental de este Plan General, incluida en el Tomo I del Documento de Información. Atendiendo a las determinaciones de la directriz 50 sobre prevención de riesgos, correspondiente a las Directrices de Ordenación General de Canarias, se han evaluado los riesgos previsibles en el ámbito territorial de este Plan General. De este modo, se pone en valor el vínculo entre la ordenación y la prevención de riesgos, implantando en el proceso de planificación un instrumento objetivo que contribuye a la toma de decisiones territoriales. Aspectos metodológicos De las tipologías de riesgos naturales, se han evaluado las áreas con potencial de desprendimientos, de avenidas e inundaciones con afección sobre espacios urbanos, los sectores expuestos al fuerte oleaje y las zonas con riesgo potencial de incendios.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 59

59

Los criterios utilizados para evaluar los riesgos naturales han sido los siguientes: Áreas con potencial de desprendimientos: Se han considerado como áreas susceptibles de generar procesos de desprendimientos y dinámicas de vertiente aquellas en las que se den las siguientes circunstancias:

- Terrenos arcillosos con una pendiente superior a 22,5º.

- Depósitos sedimentarios con una pendiente superior a 27º.

- Terrenos de piroclastos con una pendiente superior a 36º.

- Macizos rocosos de baja resistencia con una pendiente superior a 40,5º.

- Áreas constituidas por roca volcánica con una pendiente superior a los 45º. Zonas con riesgo potencial de avenidas e inundaciones: Han sido delimitadas atendiendo a la incidencia que los caudales tendrían sobre las áreas urbanizadas. Zonas expuestas al oleaje fuerte: Incluyen la franja litoral sometida a las inclemencias del mar por episodios de oleaje muy enérgico. Para su delimitación se ha tomado como referencia la cota de 5 metros sobre el nivel del mar y la interpretación del terreno. Zonas con riesgo potencial de incendios: Los estragos causados por los incendios forestales sobre bienes materiales, sobre el patrimonio natural y la integridad de las personas exigen una precisa delimitación de las áreas que pueden estar sometidas a este tipo de eventos catastróficos. Exposición de resultados Una vez delimitadas las áreas con potencial para albergar algún riesgo natural, se constata el predominio de los riesgos por desprendimientos y por incendios sobre los restantes. Áreas con potencial de desprendimientos: La intersección de algunos trazados viarios con vertientes escarpadas, genera espacios críticos, donde el riesgo de desprendimientos pudiera, no sólo ocasionar daños severos sobre las vías, sino, en el peor de los casos, afectar a la integridad de las personas que las transitan, especialmente cuando a estas circunstancias se les añade la presencia de una meteorología adversa, con precipitaciones torrenciales y prolongadas en el tiempo, y con rachas de viento muy fuertes. Así sucede con la carretera que comunica Agaete y La Aldea de San Nicolás (GC-200), que durante un prolongado tramo de su recorrido se encuentra trazada bajo vertientes inestables de acusada pendiente, que en ocasiones se aproximan a la verticalidad. La probabilidad de la generación de desprendimientos de roca y de movimientos en masa que afecten a la vía, resulta recurrente durante los episodios de lluvias torrenciales, con la caída de grandes piedras sobre la calzada que acaban conduciendo al cierre de la vía. Zonas con riesgo potencial de avenidas e inundaciones: Debido a que el Sistema Nacional de Cartografía de Zonas Inundables (SNCZI), del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, no incluye hasta el momento ningún estudio de este riesgo en la isla de Gran Canaria, se ha llevado a cabo su análisis en las zonas expuestas del municipio de Agaete. La ocupación de los fondos de barranco, unido en muchos casos a un ineficaz sistema de regulación de las aguas de escorrentía, producirá que el efecto acumulativo y de concentración de avenidas en periodos de lluvias torrenciales ponga en riesgo a la población que ocupa sus márgenes. Zonas expuestas al fuerte oleaje: Antes de la implantación del puerto comercial, la localidad de Las Nieves se encontraba sometida a los embates de los grandes temporales que alcanzaban la isla desde el cuarto cuadrante, que en ocasiones, cuando coincidían con mareas vivas, provocaba daños sobre viviendas y el paseo marítimo. En la actualidad es el muelle el que sufre las embestidas del oleaje hasta el punto de provocar daños de consideración en esta infraestructura portuaria.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 60

60

Zonas con riesgo potencial de incendios: Los incendios forestales afectan ineludiblemente a variables naturales de difícil reposición: obviamente, a la propia vegetación y, por consiguiente a la calidad paisajística, a la fauna que se sirve del soporte vegetal para su desarrollo, a la integridad de los suelos que, descarnados, quedarían expuestos a la erosión por las aguas de escorrentía, y, de forma indirecta, a la integridad socioeconómica de la población local. El municipio de Agaete cuenta con uno de los pinares de pino canario más emblemáticos del archipiélago. Además, los matorrales discontinuos de variada cobertura pueden ser también pasto de las llamas. Estos espacios pudieran ocasionar incendios de suficiente entidad territorial que pongan en riesgo la integridad de bienes materiales y personas. El riesgo derivado de la aparición de incendios forestales que afecten a los bosques y matorrales de elevada cobertura del municipio se estima que pueda presentarse con una probabilidad y magnitud elevadas, especialmente durante los meses de verano. La representación cartográfica de esta variable ambiental se encuentra en el Plano IA. 15 “Riesgos Naturales” de este Documento.

3. OBJETIVOS Y CRITERIOS DE LA ORDENACIÓN

3.1 Objetivos y criterios generales

El Plan General tiene como objetivo fundamental la adecuación de la política urbanística municipal al modelo de desarrollo sostenible y equilibrado propuesto en las Directrices de Ordenación General y las Directrices de Ordenación del Turismo de Canarias, aprobadas mediante la Ley 19/2003, de 14 de abril, y en el resto de la legislación sobrevenida. Para alcanzar este propósito, el presente Plan General se plantea:

1. Lograr un equilibrio entre el desarrollo social y económico y la protección medioambiental, propiciando un uso racional y eficiente del territorio, y la conservación de la biodiversidad.

2. Proteger el litoral, considerándolo como una zona de valor natural y económico estratégico, incidiendo en la adecuada ordenación del espacio litoral, previendo la conservación de las áreas de valor ecológico o paisajístico y garantizando su uso público.

3. Establecer una adecuada articulación entre el medio rural y el medio urbano.

4. Promover un crecimiento sostenible, compacto y ordenado.

5. Establecer un modelo territorial integrado y sostenible, cuyos objetivos están en sintonía con los previstos en la Directriz de Ordenación General 54.

6. Plantear áreas de centralidad que aglutinen una gran variedad de servicios y de dotaciones

públicas, con las que se reduzcan las necesidades de movilidad y se facilite el acceso a espacios de encuentro o convivencia vecinal.

7. Conservar, rehabilitar y potenciar los elementos de interés natural y patrimonial, garantizando

la conservación de sus valores y su disfrute público.

3.2 Objetivos y criterios del desarrollo del PGO

El presente Plan General de Ordenación, partiendo de la información ambiental y urbanística así como, el diagnóstico realizado, aborda los siguientes objetivos:

1- Implantar un modelo territorial equilibrado y sostenible social, económica y ambientalmente.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 61

61

2- Impulsar la conservación, restauración y mejora del paisaje y del patrimonio histórico municipal. Agaete tanto por el clima, su litoral, su patrimonio, como por la cantidad y calidad de Espacios Naturales Protegidos que se encuentran en su territorio, cuenta con un entorno privilegiado del cual debe beneficiarse a la vez que velar por su cuidado y protección.

3- Proteger el litoral, considerándolo como una zona de valor natural y económico estratégico,

controlando la ordenación del mismo de cara a integrar los impactos derivados de las urbanizaciones turísticas y otras presiones de usos, previendo la protección específica de las áreas de valor ecológico o paisajístico y garantizando su uso público.

4- Mantener los grupos sociales tradicionales así como sus usos y actividades características.

5- Preservar los recursos agrícolas y fomentar la puesta en cultivo de áreas abandonadas como

método que evite la pérdida de recursos edáficos y de sostenimiento del paisaje agrario. Los criterios adoptados tienden a priorizar la actividad agrícola frente a la urbanizadora en aquéllas áreas que se muestran más susceptibles de ser recuperadas para esta actividad, y el destino urbano en aquellos terrenos o parcelas que limitan con suelos urbanos o en los que la justificación de su ocupación viene dada por la necesidad de desarrollo socioeconómico municipal, y siempre que no se observe viable la reactivación de la actividad agrícola en dichas bolsas de terreno, debiéndose en todo caso establecer las correspondientes medidas correctoras o compensatorias.

6- Detectar, delimitar y ordenar los asentamientos rurales y agrícolas que por sus características

puedan ser reconocidos como tales y disponer para los mismos una dotación de servicios mínimos. Potenciar el paisaje de los enclaves de población rural que gozan de mayor estética paisajística y ambiental, y también, potenciación y puesta en valor del patrimonio etnográfico que se concentra en estos espacios, incrementando su atractivo paisajístico sin que se pierdan las señas de identidad del mundo rural.

7- Mejorar las condiciones de vida en los núcleos de población, de la interrelación entre los

diferentes núcleos, así como dotarlos de las infraestructuras necesarias para ello, etc.

8- Fomentar el desarrollo comercial e industrial derivado o vinculado a las instalaciones portuarias, y de los valores históricos, naturales y tradicionales.

9- Intensificar el carácter lúdico, cultural, residencial y turístico de Agaete, aumentando para ello

los equipamientos y servicios urbanos que la población demanda, con ofertas de ocio, cultura, deporte, medio ambiente, para el residente y el turista que se aloje en el término municipal y para el que va de paso. El desarrollo del producto turístico, conjugará la variable ambiental con la búsqueda de un producto viable y competitivo a escala local y comarcal, teniendo presentes las potencialidades y limitaciones del espacio municipal para estos fines, y en particular el sector de la isla en que se emplaza.

10- Conservar la infraestructura relacionada con los recursos hídricos, tanto de las redes de riego y

drenaje como de almacenamiento (pequeñas balsas, presas y estanques), no sólo por su papel de apoyo a los usos agrícolas a potenciar, sino también en la conservación de especies, en particular, de la avifauna.

11- Potenciar los procedimientos de obtención de recursos hídricos mediante depuración y

desalinización.

12- Recuperar y restaurar las áreas degradadas por actuaciones humanas, y mantener la calidad visual del territorio evitando y corrigiendo elementos discordantes y la práctica de actividades con incidencia negativa desde el punto de visa paisajístico.

13- Mejorar la comunicación viaria, creando recorridos alternativos que no discurran por el centro

de los núcleos urbanos. Mejorar y diferenciar los viarios principales de dichos núcleos para que

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 62

62

creen una estructura reconocible así como establecer alternativas a la conexión viaria con el Puerto de Las Nieves y una circunvalación a Agaete para el acceso hacia el interior del valle.

En lo que respecta a los objetivos relativos a la protección y mejora del patrimonio natural y cultural que recoge el Plan General, figuran los siguientes:

1- La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales que perviven en la isla, evitando su merma, alteración o contaminación.

2- El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso, garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

3- La armonización de los requerimientos del desarrollo social y económico con la preservación y

la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural, asegurando a todos una calidad de vida digna.

4- La promoción de la integración y la cohesión sociales, así como de la solidaridad autonómica, insular e intermunicipal. En especial, la promoción social, económica y cultural de la población asentada en el Espacio Natural Protegido y sus zonas de influencia.

5- La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad biológica de modo que produzcan mayores beneficios para las generaciones actuales, sin merma de su potencialidad para satisfacer las necesidades y aspiraciones de las generaciones futuras.

6- El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de

recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles o irreparables.

7- La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

8- La conservación, restauración y mejora ecológica de los hábitats naturales.

9- La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico existente, tanto arqueológico

como etnográfico y arquitectónico.

10- Potenciar los valores arqueológicos, etnográficos y arquitectónicos del municipio, impulsando la conservación, restauración y mejora del patrimonio, garantizando la conservación de sus valores y su disfrute público, resaltando además su función de su recurso turístico.

11- La conservación, restauración y mejora del paisaje.

Los objetivos y criterios ambientales específicos que establece el presente Plan General de Ordenación son los siguientes:

1- Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos y culturales en presencia, con remisión, en el caso del territorio adscrito al Parque Natural de Tamadaba, en lo referente a usos y actividades, al correspondiente Plan Rector de Uso y Gestión.

2- En cuestión de valores patrimoniales, adoptar mecanismos que contribuyan a la preservación, recuperación y, puesta en valor, de los elementos del patrimonio histórico - cultural del municipio.

3- Incrementar la cobertura vegetal del municipio por medio de criterios que combinan propuestas

de regeneración natural o de reforestación con especies endémicas que sean características de los pisos bioclimáticos en los que se localicen las áreas destinadas a tal fin.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 63

63

4- Respecto al paisaje, se pretende mantener la mayor superficie posible de zonas liberadas, aunque no tengan valor alguno en presencia.

5- Respecto al litoral, se pretende dotar al municipio para el disfrute de la población en las áreas

de posible acceso público, y tratar de conservar la mayor parte posible de los espacios de costa y playas naturales.

3.3 Diagnosis ambiental

Este punto del diagnóstico se desarrolla exhaustivamente en el epígrafe denominado “Diagnóstico Ambiental” del Tomo III Memoria de Diagnóstico, del PGO de Agaete. El diagnóstico ambiental del PGO de Agaete justifica que el análisis de partida de las distintas variables ambientales, son el punto de partida para la delimitación de las Unidades Ambientales Homogéneas así como, que la delimitación y descripción de estas unidades, sintetiza los estudios realizados en el inventario ambiental, constituyendo la base que permitirá tomar las decisiones de ordenación más adecuadas para compatibilizar el desarrollo económico y social del municipio con la conservación de sus valores naturales y culturales. Una vez definida y descritas las unidades que caracterizan el municipio se expone de manera sintética cuál ha sido la dinámica de ocupación y transformación del territorio, responsable de la situación ambiental descrita a lo largo del texto, situación que se resume en otro apartado para cada uno de los recursos naturales como estado preoperacional o problemática ambiental previa al plan, concretamente en el apartado 3 del Tomo III Memoria de Diagnóstico. Posteriormente se diagnostica las potencialidades de cada unidad a través de la valoración de la calidad y fragilidad ambiental lo que nos conduce al mapa de calidad para la conservación. Por tanto, para el municipio de Agaete se describieron las Unidades Ambientales Homogéneas que, se presentan a continuación:

- Unidad 1. Cantil costero labrado sobra lavas basálticas holocenas.

- Unidad 2. Cantil costero y rasa litoral labrados sobre cono volcánico pleistocénico.

- Unidad 3. Rasa litoral, playa de callaos y cantil costero desmontado, muy alterados por la acción antrópica.

- Unidad 4. Playa de callaos.

- Unidad 5. Playa de callaos y arena.

- Unidad 6. Sucesión de barranqueras e interfluvios, de marcada pendiente (muy abruptos), en vertiente de umbría de valle de perfil transversal en U, con tabaibas dulces, cardones, acebuches y lentiscos dispersos.

- Unidad 7. Sucesión de espigones, barranqueras y escarpes, de muy marcada pendiente (muy abruptos), en vertiente de solana de barranco de perfil transversal en V, con codesos y escobones dispersos.

- Unidad 8. Sucesión de espigones, barranqueras y escarpes, de muy marcada pendiente (muy abruptos), en vertiente de solana de barranco de perfil transversal en U, con cardones, tabaibas amargas, acebuches y lentiscos dispersos.

- Unidad 9. Porción de cono volcánico pleistocénico, con pastizal de herbáceas anuales y tabaibal de tolda.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 64

64

- Unidad 10. Cauce de barranco de perfil transversal en V con rodales de tarajales y palmeras canarias dispersos.

- Unidad 11. Cauce encajado de barranco con rodales de palmeras canarias, acebuches y almácigos.

- Unidad 12. Vertiente acarcavada de cono volcánico pleistocénico, parcialmente desmantelada, con tabaibal de tolda.

- Unidad 13. Vertiente de solana de barranco de notable pendiente, con tabaibal dulce.

- Unidad 14. Vertiente de solana de barranco, de moderada pendiente, con matorral xerófilo de sustitución (ahulagar-saladar blanco-tuneral de Opuntia dillenii).

- Unidad 15. Vertiente de umbría de barranco, de notable pendiente, con tabaibal de tolda, tarajales en torno al cauce y matorral xerafilo de sustitucicn en parcelas agrícolas abandonadas.

- Unidad 16. Vertiente de umbría de barranco, de moderada pendiente, con tabaibal de tolda y cardones y tabaibas dulces dispersos.

- Unidad 17. Vertiente de umbría de barranco, de moderada pendiente, con cardones y tabaibas amargas dispersas.

- Unidad 18. Vertiente de umbría de barranco, de moderada pendiente, con tabaibal amargo, jaguarzos, y lentiscos y acebuches dispersos.

- Unidad 19. Vertiente de solana de barranco, de moderada pendiente, con tabaibal dulce y tuneras indias dispersas.

- Unidad 20. Retazo de colada lávica holocena (malpaís), con cardones dispersos y parque arqueológico vinculado con la presencia de vestigios indígenas (necrópolis).

- Unidad 21. Antiguas parcelas agrícolas abandonadas sobre tablero interfluvial, con procesos de recolonización vegetal protagonizados por la tabaiba amarga y el jaguarzo.

- Unidad 22. Relieve residual, parcialmente desmontado (cantera), labrado sobre sustrato basáltico miocénico, con matorral xerófilo de sustitución protagonizado por la aulaga y el salado blanco.

- Unidad 23. Barranco, escasamente incidido, de perfil transversal en V, de vertientes de moderada pendiente, parcialmente abancaladas (parcelas agrícolas abandonadas), con tabaibas dulces y amargas, y cardones dispersos.

- Unidad 24. Vertiente de umbría de barranco, de notable pendiente, parcialmente abancalada y desmontada (cantera), con predominio de tabaibal de tolda y matorral xerófilo de sustitución, con ahulagas y salados blancos.

- Unidad 25. Vertiente de umbría de barranco, de pendiente tendida, mayoritariamente abancalada (parcelas agrícolas abandonadas), con tapiz de herbáceas anuales y tabaibas dulces y cardones dispersos.

- Unidad 26. Terrazas aluviales con parcelas agrícolas en proceso de abandono, y vertiente tendida de barranco con tabaibal dulce.

- Unidad 27. Vertiente de solana de barranco, de acentuada pendiente, con cardonal disperso y actividad agrícola marginal, sobre bancales abandonados.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 65

65

- Unidad 28. Tablero interfluvial, con actividad agrícola en proceso de abandono y asentamientos dispersos vinculados a las explotaciones agropecuarias.

- Unidad 29. Tablero interfluvial, con parcelas agrícolas abandonadas, colonizadas por un tapiz de herbáceas anuales.

- Unidad 30. Tablero interfluvial muy transformado, con urbanizaciones turísticas y residenciales de nueva planta y presencia masiva de acopios de vertidos y movimientos de tierra.

- Unidad 31. Tablero interfluvial, con parcelas agrícolas abandonadas, colonizadas por un tapiz de herbáceas anuales, e instalación ganadera de explotación intensiva.

- Unidad 32. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco y bancales sobre derrubios de ladera, con parcelas agrícolas en proceso de abandono y presencia de palmeras, acebuches, lentiscos y almácigos en los linderos.

- Unidad 33. Terraza aluvial aledaña a cauce de barranco, con parcelas agrícolas, mayoritariamente en explotación intensiva.

- Unidad 34. Terrazas aluviales sobre cono de deyección de barranco, con parcelas agrícolas, mayoritariamente abandonadas, palmeras canarias dispersas, y edificaciones vinculadas con la antigua explotación agropecuaria.

- Unidad 35. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco, con parcelas agrícolas mayoritariamente en explotación intensiva, palmeras canarias y edificaciones residenciales dispersas.

- Unidad 36. Terrazas aluviales sobre cono de deyección de barranco, con parcelas agrícolas, mayoritariamente abandonadas y desmontadas, y palmeras canarias dispersas.

- Unidad 37. Cauces de barranco de perfil transversal en U y matorral xero-termófilo de sustitución.

- Unidad 38. Terrazas aluviales vinculadas a cauce subsidiario de barranco, con parcelas agrícolas, mayoritariamente abandonadas, colonizadas por pastizal de herbáceas anuales.

- Unidad 39. Cauce de barranco y terrazas aluviales con parcelas agrícolas a cielo abierto y bajo invernadero, en proceso de abandono, y tabaibas dulces, amargas y cardones dispersos.

- Unidad 40. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco y depósitos de ladera, con parcelas agrícolas abandonadas colonizadas por pastizal de herbáceas anuales.

- Unidad 41. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco y depósitos de ladera, con parcelas agrícolas en proceso de abandono.

- Unidad 42. Terraza aluvial en cono de deyección de barranco, con parcelas agrícolas en explotación y rodales de palmeras canarias.

- Unidad 43. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco y depósitos de ladera con parcelas agrícolas, mayoritariamente en explotación intensiva.

- Unidad 44. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco y depósitos de ladera, con parcelas agrícolas abandonadas y matorral xerófilo de sustitución, con ahulagas y salados blancos dispersos.

- Unidad 45. Terrazas aluviales aledañas a cauce de barranco, con parcelas agrícolas, mayoritariamente en explotación intensiva, palmeras canarias dispersas, y edificaciones vinculadas a la actividad agropecuaria.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 66

66

- Unidad 46. Superficie de terreno desmontada y aplanada, vinculada a urbanización de nueva planta.

- Unidad 47. Vertiente meridional de cono volcánico pleistocénico, de pendiente tendida, con parcelas agrícolas abandonadas.

- Unidad 48. Vertientes de marcada pendiente (abruptas), parcialmente abancaladas, con parcelas agrícolas en proceso de abandono, vinculadas con asentamiento histórico (El Hornillo) y escobones y codesos en los linderos.

- Unidad 49. Urbanización residencial de nueva planta asentada sobre terrazas aluviales de elevada potencialidad agrológica.

- Unidad 50. Núcleo de población histórico y origen agrario apostado sobre vertiente de barranco.

- Unidad 51. Núcleo de población histórico y origen agrario, parcialmente apostado sobre vertiente de barranco.

- Unidad 52. Porción de núcleo de población histórico y origen agrario, asentado sobre colada lávica holocena.

- Unidad 53. Núcleos de población histórico, de emplazamiento litoral y origen pesquero, en proceso de súbita expansión.

- Unidad 54. Cabecera municipal, administrativa y comercial, y núcleo de población histórico, de origen agrario asentado sobre vertiente de relieve residual.

- Unidad 55. Urbanización residencial apostada sobre vertiente de barranco.

- Unidad 56. Infraestructuras e instalaciones portuarias.

Dicha información está representada cartográficamente en el Plano DA.01 “Unidades ambientales”, de los Planos de Diagnóstico Ambiental.

3.4 Características de la problemática ambiental

Con respecto a este apartado, que se encuentra ampliamente desarrollado sus características y metodología en documento Información y Diagnóstico del presente PGO, en el apartado 6 de la Memoria de Diagnóstico del presente plan general. Se analiza la problemática ambiental existente, valorando los impactos ambientales preexistentes en la etapa previa a la redacción del PGO, representados cartográficamente en el Plano DA.02 “Problemática ambiental”, de la Memoria de Diagnóstico. Los problemas ambientales en el municipio son inherentes al desarrollo socioeconómico y por tanto, inciden en gran porcentaje el avance de las actividades antrópicas que se han llevado a cabo en los últimos 40 años en el municipio de Agaete. Es por ello que este Plan General, pretende definir como un objetivo básico en su contenido ambiental, el desarrollo sostenible y equilibrado del entramado estructural actual y los valores naturales y paisajísticos que le son inherentes al municipio. Los impactos ambientales localizados en el ámbito municipal objeto de estudio, derivan de dos aspectos importantes, por un lado la expansión de la urbanización y el trazado de nuevas vías, y por otro, el continuo abandono de la actividad agrícola. En el primero de los casos, es obvio que en los últimos años el municipio, se ha visto salpicado de urbanizaciones de nueva planta. Se trata de núcleos vinculados a la existencia de vías de circulación, y de un notable disperso edificatorio relacionado con la explotación agrícola y la expansión residencial y turística. Este auge edificatorio y por tanto, aumento poblacional, ha llevado aparejado el trazado de nuevas carreteras, que han generado la aparición de

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 67

67

taludes, aunque de pequeñas dimensiones, ha facilitado el depósito de vertidos que incluyen basuras y escombros, y ha provocado la consolidación en torno a las vías de edificación espontánea y autoconstrucción así como, de chabolas e infraviviendas, con modelos arquitectónicos de escasa calidad,. Igualmente, la ausencia de vinculación de las nuevas edificaciones con los núcleos tradicionales municipales, agrava el efecto ambiental y las dificultades logísticas derivadas de la demanda de infraestructuras y servicios de los nuevos asentamientos, poniendo en peligro la integridad del paisaje rural del municipio. En lo que respecta al segundo aspecto, otro reflejo del deterioro del ámbito municipal, es el progresivo abandono de las parcelas antaño cultivadas, provocando la pérdida de calidad de un paisaje agrícola de medianías de elevado valor estético y paisajístico así como, el deterioro de la infraestructura asociada y un patrimonio centenario que sufre el riesgo de arruinarse definitivamente. Finalmente otro factor a señalar es, la proliferación de edificaciones, las cuales originan una pérdida sustancial de la calidad del paisaje y la ocupación irreversible de suelos productivos. Además, muchas de estas edificaciones muestran tipologías que nada tienen que ver con el medio rural donde se ubican generando así, numerosos impactos paisajísticos. Los impactos evaluados y tenidos en cuenta, para la valoración de la problemática ambiental de las unidades ambientales delimitadas, para el municipio de Agaete, son los que a continuación se enumeran y describen: IMPACTOS DERIVADOS DE ALTERACIONES DEL RELIEVE Y DEL SUELO. 1.- Deslizamientos y/o desprendimientos.

2.- Áreas extractivas en uso. 3.- Áreas extractivas abandonadas.

4.- Movimientos de tierras. 5.- Taludes. 6.- Desmontes. 7.- Pérdida de suelo con aptitud agrícola. IMPACTOS DERIVADOS DE ALTERACIONES DE LA BIOCENOSIS. 8.- Introducción de vegetación alóctona. 9.- Área afectada por incendio forestal. IMPACTOS DERIVADOS DE LAS EDIFICACIONES Y CONSTRUCCIONES.

10.- Mal estado de conservación. 11.- Exceso volumétrico y/o del número de plantas. 12.- Tratamiento inadecuado de fachadas. 13.- Ubicación inadecuada por razones ambientales y/o paisajísticas. 14.- Escasa integración visual del borde edificado con respecto al medio no ocupado.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 68

68

15.- Construcciones en precario. 16.- Construcciones en ruina.

IMPACTOS DERIVADOS DE LAS INFRAESTRUCTURAS.

17.- Inadecuación del soporte viario. 18.- Antena con escasa integración visual. 19.- Concentración de tendido eléctrico y/o telefónico. 20.- Elementos del saneamiento escasamente integrados.

IMPACTOS DERIVADOS DE LOS ELEMENTOS DE LOS ESPACIOS LIBRES.

21.- Degradación del mobiliario urbano. 22.- Falta de mantenimiento de zonas ajardinadas. 23.- Parcelas con escasa integración paisajística.

IMPACTOS DERIVADOS DE LA CONTAMINACIÓN.

24.- Percepción de malos olores. 25.- Vertidos de tierras y escombros. 26.- Vertidos de residuos sólidos urbanos. 27.- Chatarras. 28.- Vertidos de aguas residuales al mar.

La valoración de la problemática ambiental de las unidades ambientales delimitadas, se basa en la evaluación de una serie de variables, que se relacionan conforme a la importancia que cada una de ellas tiene, en la generación de dicha problemática. En este sentido, mediante un algoritmo se pondera el aporte que a la problemática ambiental de cada unidad, realiza el número de impactos detectados así como, el grado o nivel de la magnitud y la reversibilidad de los mismos. No obstante y en lo que respecta, a las unidades ambientales urbanas, están formadas por espacios en los que, la energía que mantiene su estructura es principalmente antrópica, predominando los elementos antrópicos sobre los bióticos y abióticos. Por tanto, son ámbitos que reflejan la presencia de procesos de ocupación urbana significativos dentro de la unidad y que, responden a poblamientos concentrados. Así que, en esta tipología se han incluido las áreas con cualquier porcentaje de urbanización, siempre y cuando predomine la presencia de infraestructuras, equipamientos, suelo de carácter industrial u otros usos relacionados con la dinámica urbana. Por todo lo descrito, se entiende desde este análisis que tales unidades urbanas reúnen dentro de sus límites, toda una gama de impactos que le son inherentes al propio desarrollo de la actividad urbana, dígase (trazado de carreteras y pistas, redes de telecomunicaciones, tendido eléctrico aéreo y antenas, infraestructuras, escombros, residuos sólidos urbanos, etc…., todos ellos de carácter muy puntual. Este carácter puntual, es por lo que subyace que, la valoración para todas ella debe ser la de Moderada. Unidades con dominio de la problemática relacionada con los elementos.

A- Unidades con dominio de la problemática relacionada con la alteración de las condiciones geoecológicas originales.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 69

69

B- Unidades con dominio de la problemática relacionada con la explotación de recursos naturales. C- Unidades con dominio de la problemática relacionada con la estética y adecuación ambiental de edificaciones y construcciones. D- Unidades con dominio de la problemática relacionada con las infraestructuras. E- Unidades con dominio de la problemática relacionada con los elementos de los espacios libres públicos y con los espacios urbanos no ocupados. F- Unidades con dominio de la problemática relacionada con la degradación ambiental y paisajística. Los resultados se encuentran reflejados en la siguiente tabla:

A B C D E F

1 X X X

3 X X

4 X X

5 X

7 X

8 X

10 X

11 X X X

17 X X X

18 X X X

21 X X

22 X

23 X X X X

25 X

26 X

27 X

28 X X

29 X

30 X X

31

32 X

33 X X

34

35 X X X

37 X

38 X X X X

39 X X

En esta tabla únicamente se han recogido las unidades ambientales afectadas por limitaciones de uso

3.4.1 Diagnosis de potencialidad

Con respecto este apartado, se haya ampliamente desarrollado sus características y metodología en Documento de Información y Diagnóstico del presente PGO, en el apartado 7 de la Memoria de Diagnóstico. Este parámetro de análisis del diagnóstico, se define como la posibilidad que posee un ámbito, para absorber una u otras actividades. Es decir, constituye una optimización de la capacidad de carga de un territorio, orientado a los usos que sobre el mismo puedan desarrollarse y marcando las directrices de la ordenación territorial.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 70

70

La diagnosis de potencialidades del Plan General de Ordenación de Agaete se concreta mediante dos parámetros de análisis fundamentales: uno es la Calidad para la conservación, entendida como la valoración de la aptitud de un territorio, para ser preservado en las condiciones existentes y el otro, las limitaciones de uso, pensada como la evaluación de la importancia de los elementos presentes en el territorio y que, puedan presentar limitaciones físicas para la ordenación prevista por el Plan. Para ello, se han utilizado como referencia las unidades ambientales homogéneas delimitadas para el municipio de Agaete, por lo que los criterios están siempre referidos al conjunto de las unidades delimitadas. Calidad para la conservación En el apartado 3. Unidades Ambientales del Diagnóstico Ambiental, para las unidades ambientales de Agaete se diferenciaron cinco tipos de unidades ambientales homogéneas natural, agrícola, residencial, infraestructura y mixtas. El plano de valoración de la Calidad para la Conservación (Plano DA. 04) tiene como objetivo prioritario, el análisis del estado del paisaje de cada unidad ambiental descrita, que viene dado por la conjunción de los siguientes aspectos: características fisiográficas (desniveles, pendientes, complejidad topográfica), tipo y proporción superficial de masas vegetales naturales, usos del suelo, cuencas visuales, estado de conservación de los elementos definitorios del tipo de unidad y el grado de afección de las actuaciones implantadas en el territorio. Los aspectos analizados para la calidad para la conservación de las distintas unidades ambientales, se ha establecido exclusivamente a partir del valor de los elementos que componen el territorio municipal, sin haber mediado análisis comparativos con elementos de valor del resto del ámbito insular. En este caso, se han tenido en cuenta como criterios para determinar la calidad para la conservación, los siguientes:

1- Áreas con endemismos y presencia de especies singulares. 2- Elementos geológicos y geomorfológicos singulares. 3- Calidad visual del paisaje. 4- Problemática ambiental. 5- Capacidad agrológica del suelo.

En el apartado 3 del Diagnóstico Ambiental, para las unidades ambientales de Agaete se diferenciaron 2 tipos de unidades ambientales homogéneas: natural y mixtas. Así en lo que respecta, a las unidades naturales, su calidad se establece en función del estado de conservación de los elementos bióticos y abióticos, de su singularidad o fragilidad. En el aspecto metodológico, se encuentra ampliamente explicado en la Memoria de Diagnóstico, siendo una propuesta metodológica de valoración indirecta, que sea válida para la tipología del ámbito de estudio y que a su vez agilice el proceso. Esta metodología se fundamenta en el diagnóstico del territorio mediante los aspectos estudiados en la etapa de análisis, que concurren en las unidades ambientales previamente establecidas y adaptadas al ámbito de actuación. De los resultados alcanzados, de la calidad para la conservación de las unidades ambientales definidas, se deriva la siguiente gradación en cuanto a los resultados de la valoración de cada tipo de unidad, cuyo resultado es el siguiente:

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 71

71

Unidades naturales

Unidades agricolas

Unidades residenciale

Unidades de infraestructuras

Unidades Mixtas

CALIDAD PARA SU

CONSERVACIÓN

Alta Alta Alta

-Moderada Moderada Moderada

- Baja Baja Baja-

La representación gráfica de los resultados obtenidos en el análisis de la Calidad para la conservación de la totalidad de las unidades ambientales, se encuentra en el Plano de Diagnóstico DA.04 Calidad para la conservación. Valor Cultural Con respecto este apartado, que se encuentra ampliamente desarrollado sus características y metodología en documento Información y Diagnóstico del presente PGO, en el apartado 7.3 de la Memoria de Diagnóstico del presente Plan General. La evaluación de la realidad territorial de Agaete, debe incluir una referencia clara al destacado patrimonio cultural del municipio, el cual incluso forma parte de la organización paisajística del mismo. En este sentido, se han definido para el Diagnóstico unos Ámbitos de Interés Cultural que aúnan el rico patrimonio arqueológico y etnográfico municipal, permitiendo discriminar, de cara a la Zonificación posterior, aquellos sectores del municipio que requieren de una atención especial para asegurar la conservación de ese rico legado. En consecuencia, las referencias a los espacios arqueológicos, sus estructuras, registro material de superficie, etc se basan en un conocimiento parcial, segmentado por la realidad temporal de los datos de procedencia, lo cual limita el análisis de todos los aspectos que interviene en la interpretación preliminar y diagnóstico patrimonial. Además, como quiera que estos componentes han sido específicamente descritos en el apartado 3.10 Memoria de Información, ahora serán evaluados en el Diagnóstico de este Plan, resulta fácilmente valorable el interés cultural de dichos ámbitos, que coinciden total o sectorialmente con las unidades ambientales previamente delimitadas. La representación gráfica de los resultados obtenidos en el diagnóstico del valor cultural de las unidades afectadas, se encuentra en el Plano de Diagnóstico DA.06. “Valor Cultural”. Definición de las Limitaciones de Uso derivadas de algún parámetro ambiental Con respecto este apartado, que se halla ampliamente desarrollado sus características y metodología en Documento de Información y Diagnóstico del presente PGO, en el apartado 8 de la Memoria de Diagnóstico del presente plan general. Las limitaciones de uso permiten la evaluación de la importancia de los recursos naturales de interés así como, de los usos actuales presentes en el ámbito municipal, como área de partida, objeto del Avance del Plan General. Por tanto, la coincidencia, en cada unidad delimitada, de un cierto número de recursos o limitaciones físicas de los factores analizados, determinará el grado de restricción para el desarrollo de la ordenación propuesta, que implique una transformación sustancial de las condiciones actuales del municipio. Para ello, se han utilizado como referencia las unidades ambientales homogéneas, por lo que los criterios están siempre referidos al conjunto de las unidades delimitadas, estando resumidas en la siguiente tabla:

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 72

72

Limitaciones de Uso

Limitaciones de uso derivadas de su calidad para la conservación

1, 6, 7, 8 , 9, 11, 12, 13, 14, 16, 19, 21, 22, 25, 25, 28,

30, 31, 32, 33, 34, 36, 37, 40, 41, 45 y 46.

Limitaciones de uso derivadas del Valor Cultural. 8, 12, 19, 20, 31 y 45

Limitaciones de uso derivadas del grado de pendiente. 2, 7, 14, 17, 20, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 32, 36, 37,39, 40, 41, 43 y 45.

Limitaciones de uso derivadas de la calidad visual. 1, 2, 3, 4, 5, 7, 8, 9, 12, 13, 14, 16, 17, 19, 20, 22, 23, 26, 28, 30, 31, 32, 33, 34, 38, 40, 41, 42, 43, 45 y 46

Limitaciones de uso derivadas de los Riesgos Naturales. 45 y 46

La representación gráfica de los resultados obtenidos en el análisis de Las limitaciones de uso de la totalidad de las unidades ambientales, se encuentra en el Plano de Diagnóstico DA.03 “Limitaciones de uso”. Capacidad de uso La capacidad de usos de un territorio está directamente relacionada con las condiciones y características ecológicas y geográficas de las que dispone el mismo. Además, existe una estrecha relación entre las limitaciones derivadas de diferentes parámetros territoriales y la capacidad de uso o acogida que pueda tener el espacio que se ordena de tal manera que, resulta a veces imposible separar limitaciones y capacidad de usos del territorio. Dos son las formas más propicias para establecer las unidades ambientales: realizar un análisis particular de cada uno de los elementos del medio, para posteriormente proceder a su superposición; o bien realizar un esfuerzo de síntesis inicial estableciendo unidades ambientales, tal y como corresponde a una metodología de estudio integrado del paisaje, según la cual se integran en el estudio, tanto los elementos físicos del paisaje entendido éste como “sistema”, como los procesos que forman parte del paisaje e interrelacionan los distintos elementos. La segunda de las posibilidades fue descartada en consideración de los objetivos perseguidos por este estudio y la orientación del mismo hacia la ordenación territorial. Es por este motivo que una vez que se procedió a recopilar o realizar según fuera el caso, la información territorial de cada uno de los distintos elementos del medio físico, se ponderaron los elementos más significativos para establecer, a partir de ellos, las distintas unidades ambientales. Toda vez que se caracterizaron estas unidades se procedió a evaluar su calidad para la conservación y, seguidamente, establecer unas capacidades de uso orientadas a las pretensiones del trabajo. En el consiguiente mapa de capacidad de uso se definieron las siguientes categorías:

Capacidad de uso

Alta capacidad de uso para la conservación de valores geoecológicos y paisajísticos.

Alta capacidad de uso para el ocio y esparcimiento.

Alta capacidad de uso residencial. 38,39

Alta capacidad de uso urbano-turístico. 38

Alta capacidad de uso para la preservación del paisaje y producción agrícola.

5, 11, 12, 16, 17, 19, 20, 24, 25, 27, 29, 31, 32, 33, 34, 36

Alta capacidad de uso para la rehabilitación paisajística e integración de actuaciones impactantes.

1,3,7,11,18,21,22,25,26,28,29,30,33,35

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 73

73

3.4.2 Situación del medio ambiente en función del inventario y diagnóstico ambiental realizado

Tras la consideración de la calidad parcial por unidades, puede decirse con certeza que el municipio de Agaete presenta un estado de conservación de sus valores bastante aceptable, que podría concretarse como Moderado. Existen unidades con valores bajos para su conservación, aquellas zonas cercanas a núcleos poblacionales y turísticos principalmente. No obstante, y a pesar de esto, se han detectado procesos de deterioro de zonas de alto valor natural, agrícola o paisajístico, no tanto por el tipo de actividades como por su magnitud. Son seis, en concreto, los tipos de actuaciones que están conduciendo a esta minoración de la calidad ambiental del municipio y sobre las que habría que adoptar medidas prioritarias de actuación:

a) Los vertidos de tierra y escombreras de inertes a lo largo de todo el territorio municipal, junto con la transformación del suelo para usos residenciales, e industriales.

b) La transformación de los sistemas tradicionales de cultivo y de la propia actividad agrícola

(nuevos desmontes sobre suelos estables en ladera para conseguir superficies llanas, considerable aumento de volumetría de las instalaciones agrícolas, escasa integración de las actuaciones, etc.).

c) La densificación del disperso y la tipología y altura de las edificaciones, no tratándose en este

caso de un problema puntual sino totalmente repartido por el término municipal.

d) Los procesos incontrolados de edificación en áreas periurbanas.

e) La apertura indiscriminada de pistas de tierra, para la circulación de vehículos todoterreno o motos.

f) El desmonte de laderas de una pendiente considerable para la implantación de edificaciones

de carácter turístico, en su mayoría.

4. OBJETIVOS DE PROTECCIÓN AMBIENTAL Y CRITERIOS DE PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO NATURAL Y CULTURAL

Los objetivos ambientales observados por Plan General de Ordenación, que afectan al medio urbano y natural, tienen como finalidad la integración ambiental del documento, haciendo que sus determinaciones puedan incidir en una organización de los usos del suelo y del desarrollo municipal coherente con las condiciones y dinámicas territoriales. Como objetivo principal se puede enunciar el establecer una distribución de actividades en el espacio, y en particular, una clasificación urbanística del suelo compatible con las condiciones naturales y capacidad de acogida del medio. Este objetivo genérico se ha de materializar en el cumplimiento de los siguientes objetivos ambientales, y criterios de protección del patrimonio natural y cultural, como ejes estructurales para el desarrollo de las actuaciones derivadas de su propuesta de ordenación: La conservación de los entornos naturales, agrícolas o culturales, y la mejora de las condiciones en los entornos urbanos y rurales, son de forma somera los objetivos principales de desarrollo del PGO de Agaete Estos se desarrollan en la propuesta de modelo de ordenación del PGO a través de actuaciones ambientales dirigidas a la conservación, recuperación y mejora de las características naturales y paisajísticas del territorio municipal, relacionadas con la protección y restauración de hábitats, formaciones vegetales y poblaciones de especies amenazadas, repoblaciones, restauración de áreas degradadas y alteradas, la corrección de impactos y la restauración y mejora del paisaje de Agaete.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 74

74

De forma esquemática se enumeran los objetivos ambientales para la adecuada ordenación del municipio:

- La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales que perviven en la isla, evitando su merma, alteración o contaminación.

- El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso,

garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

- La armonización de los requerimientos del desarrollo social y económico con la preservación y

la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural, asegurando a todos una calidad de vida digna.

- La promoción de la integración y la cohesión sociales, así como de la solidaridad autonómica,

insular e intermunicipal. En especial, la promoción social, económica y cultural de la población asentada en el Espacio Natural Protegido y sus zonas de influencia.

- La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad

biológica de modo que produzcan mayores beneficios para las generaciones actuales, sin merma de su potencialidad para satisfacer las necesidades y aspiraciones de las generaciones futuras.

- El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de

recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles o irreparables.

- La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

- La conservación, restauración y mejora ecológica de los hábitats naturales.

- La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico existente, tanto arqueológico

como etnográfico y arquitectónico.

- La conservación, restauración y mejora del paisaje. Además de los anteriores, el Plan General de Ordenación asume como propios los criterios ambientales estratégicos y principios de sostenibilidad emanados del artículo 3 del Texto Refundido de las Leyes de Ordenación del Territorio y de Espacios Naturales de Canarias (Decreto Legislativo 1/2000, de 8 de mayo, por el que se aprueba el Texto Refundido), y de la Directriz 3 de la Ley de Directrices, que se concretan en:

- La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales, evitando su merma, alteración o contaminación.

- El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su

diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

- La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad

biológica.

- El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 75

75

- La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

- La conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales.

- La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

- La conservación, restauración y mejora del paisaje.

- La conservación, restauración y mejora sostenible de las explotaciones agrarias de carácter

extensivo.

4.1 Justificación de la adaptación de los objetivos ambientales de instrumentos de ámbito superior

El marco de actuación del presente Informe de Sostenibilidad Ambiental debe ineludiblemente analizar las distintas políticas y legislaciones vigentes en el contexto internacional, comunitario y nacional, así como el propio autonómico, como inspiradoras de los procedimientos de evaluación ambiental al que se somete el presente Plan General de Ordenación y, por tanto, también de los criterios y objetivos que han de guiar su modelo de intervención. Ámbito Internacional A nivel internacional, se han tenido en cuenta los objetivos que se plantean en la declaración de la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria. El Objetivo general que persigue esta declaración, es consolidar la viabilidad a largo plazo de la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria, a través del compromiso de la comunidad local y el resto de interlocutores del territorio con las funciones de la Reserva: Conservación, Desarrollo y Conocimiento. Como objetivos específicos se plantean los siguientes:

- Formar e informar a la comunidad y el estamento político locales, y a la población en su conjunto, acerca de la Reserva, su naturaleza, valores y principales retos.

- Realzar y potenciar los valores naturales y culturales que construyen la sostenibilidad en la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria.

- Concienciar y movilizar a la comunidad y el estamento político locales en torno al concepto de "desarrollo sostenible" de su territorio.

Relación con los objetivos del Plan General de Ordenación: Los objetivos relacionados tienen plena cabida en los considerados por el Plan General de Ordenación, en particular en los siguientes:

- Preservar la biodiversidad, promoviendo la conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales y evitando la merma de sus valores.

- Proteger y conservar el patrimonio cultural existente, tanto arqueológico como etnográfico y

arquitectónico.

- La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad biológica.

- La conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales.

- La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 76

76

Ámbito Comunitario En el ámbito Comunitario se tiene en cuenta lo que establece la Directiva 2001/42/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de julio de 2001, relativa a la evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente. La Directiva persigue dos objetivos que la insertan en la política de medio ambiente establecida por el Tratado de la Unión, cuando señala: “los requisitos de protección ambiental deben integrarse en la definición de las políticas y actividades comunitarias, con vistas sobre todo a fomentar un desarrollo sostenible”. Estos requisitos son los siguientes:

Conseguir un elevado nivel de protección ambiental.

Contribuir a la investigación del medio ambiente en la elaboración y aprobación de aquellos planes y programas que puedan tener efectos ambientales significativos; todo ello orientado a promover un desarrollo sostenible.

Asimismo, un claro referente a considerar es la Estrategia Territorial Europea (ETE) acordada en la Reunión Informal del Consejo formado por los Ministros responsables de Ordenación del Territorio en Potsdam el 10 y 11 de mayo de 1999, y que se ajusta al objetivo de procurar un desarrollo equilibrado y sostenible.

La ETE se fundamenta en tres principios o directrices que han de cumplir toda política de desarrollo territorial:

El desarrollo de un sistema equilibrado y policéntrico de ciudades y una nueva relación entre campo y ciudad,

la garantía de un acceso equivalente a las infraestructuras y al conocimiento, y

el desarrollo sostenible, la gestión inteligente y la protección de la naturaleza y del patrimonio cultural.

Relación con los objetivos del Plan General de Ordenación: Como ya se ha comentado, las determinaciones que plantea la Directiva Europea quedan recogidas en la Ley 9/2006 de ámbito estatal. Por tanto la relación existente, a nivel comunitario, con los objetivos planteados en el Plan General de Ordenación, es similar a la existente a nivel estatal.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 77

77

Por tanto, la propia elaboración de este Informe de Sostenibilidad Ambiental del Plan General de Ordenación, cumple directamente con los objetivos que plantea la Directiva 2001/42/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de julio de 2001. Con él se pretende aplicar el concepto de “desarrollo sostenible” a la ordenación territorial del ámbito, valorando las posibles afecciones ambientales que pudieran darse al llevar a cabo las distintas actuaciones que se proponen. En este sentido, el Plan General de Ordenación también adopta, a su escala, los objetivos de la ETE, al adoptar unas directrices de índole medioambiental y paisajística, urbanística, funcional y económica para el ámbito de actuación. Ámbito Nacional La evaluación ambiental que se lleva a cabo en este Plan se redacta en el marco de la Ley 9/2006, de 28 de abril, sobre evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente y la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural de la Biodiversidad. La primera de ellas es fruto de la conjunción de un marco legal tendente al estudio y establecimiento de la sostenibilidad como elemento fundamental en la ordenación territorial y urbanística. Según su propia Exposición de Motivos, pretende integrar los aspectos ambientales en la elaboración y aprobación de planes y programas para alcanzar un elevado nivel de protección del medio ambiente y promover el desarrollo sostenible en su triple dimensión económica, social y ambiental, a través de un proceso continuo de evaluación en el que se garantice la transparencia y la participación. Por tanto, la Ley 9/2006 introduce en la legislación española la evaluación ambiental de planes y programas, también conocida como evaluación ambiental estratégica, como un instrumento de prevención que permita integrar los aspectos ambientales en la toma de decisiones de planes y programas públicos, e incorpora a nuestro derecho interno la mencionada Directiva 2001/42/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de junio de 2001, relativa a la evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente. El proceso de evaluación ambiental acuñado por esta nueva Ley no ha de ser una mera justificación de los planes, sino un instrumento de integración del medio ambiente en las políticas sectoriales para garantizar un desarrollo sostenible más duradero, justo y saludable que permita afrontar los grandes retos de la sostenibilidad ambiental. Por su parte, la Ley 42/2007 establece el régimen jurídico básico de la conservación, uso sostenible, mejora y restauración del patrimonio natural y de la biodiversidad, como parte del deber de conservar y del derecho a disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona, establecido en el artículo 45.2 de la Constitución. El objetivo principal que pretende alcanzar esta Ley, es el de elaborar y mantener actualizado un Inventario Español del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad que recoja la distribución, abundancia, estado de conservación y la utilización, así como cualquier otra información que se considere necesaria, de todos los elementos terrestres y marinos integrantes del patrimonio natural, con especial atención a los que precisen medidas específicas de conservación o hayan sido declarados de interés comunitario. Ámbito Autonómico

A.- Modelo Territorial Básico de Canarias y Directrices de Ordenación General y del Turismo de Canarias

Finalmente, resulta necesario, para la visión municipal de los principios de sostenibilidad, hacerse eco del Modelo Territorial Básico que se propugna para la totalidad de las Islas Canarias, por la Comunidad Autónoma. Así, las Directrices de Ordenación General y del Turismo de Canarias (Ley 19/2003, de 14 de abril, por la que se aprueban las Directrices de Ordenación General y las Directrices de Ordenación del Turismo de Canarias. B.O.C. nº 73, 15 de Abril de 2003), presentan como objetivo básico la búsqueda de un mayor grado de sostenibilidad para el desarrollo canario, y la concepción del

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 78

78

proceso hacia un desarrollo más sostenible como un avance paulatino y sostenido durante un largo período de tiempo. En este sentido, la Directriz 48, hace suya y persigue aplicar y hacer aplicar, de acuerdo con las características del Archipiélago Canario, la Estrategia Territorial Europea, teniendo entre sus fines el establecer estrategias de acción territorial para la definición del Modelo Territorial Básico de Canarias. El Modelo de Ordenación Territorial Básico de Canarias deberá ser uno de los instrumentos de la Estrategia Territorial de Canarias, en su caso, estableciendo en la Directriz 48.2 los rasgos fundamentales que deberán cumplir las intervenciones tanto públicas como privadas para contribuir a la implantación en Canarias de un modelo territorial integrado y equilibrado, que hará cumplir los principios de la Estrategia Territorial Europea, de la que se pretende en este documento hacerse eco. Este modelo se fundamenta en:

La configuración de un territorio equilibrado, organizado en un conjunto de centralidades escalonadas que permitan el acceso de los ciudadanos a unos servicios eficientes y una mejor calidad de vida, la consolidación de unas ciudades dinámicas, el desarrollo endógeno de las áreas rurales y una mejor y más diferenciada articulación entre el medio rural y el medio urbano, incorporando criterios de cercanía y disminuyendo las necesidades de movilidad.

La integración de la ordenación ambiental y territorial, predominando los criterios y determinaciones ambientales.

La conservación de los recursos naturales y de los suelos de interés agrario, litorales y de valor paisajístico, considerándolos como recursos estratégicos para el desarrollo económico, la cohesión social y el bienestar de la población. Tendrán la misma consideración que el capital financiero, de forma que ambos serán relevantes en la toma de decisiones.

El desarrollo de núcleos de población más compactos, complejos y atractivos, en los que se use más eficientemente el suelo, mediante su reutilización y densificación, y se impulse la integración social y funcional, evitando la práctica extensiva de la zonificación urbana, y favoreciendo igualmente una reducción de las demandas de movilidad urbana.

La igualdad de acceso a las infraestructuras, los equipamientos, el conocimiento y la información.

El reconocimiento de la isla como unidad básica de planeamiento de los recursos naturales y del territorio y al municipio como unidad de ordenación urbanística.

La contención de la extensión urbana y fortalecimiento de la gestión urbanística y la intervención pública en el mercado del suelo.

La simultánea atención específica a la calidad del medio y su paisaje, como protagonistas de la ordenación, incluyendo el esponjamiento del tejido urbano.

4.2 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales y criterios de los instrumentos de rango autonómico

El Avance del Plan General de Ordenación de Agaete se ajusta plenamente a los objetivos y regulaciones de carácter ambiental que se establecen desde los instrumentos de ordenación de los recursos naturales y el territorio y de Espacios Naturales Protegidos de rango superior emanados del Decreto Legislativo 1/2000, de 8 de mayo, por el que se aprueba el Texto Refundido de las Leyes de Ordenación del Territorio de Canarias y de Espacios Naturales de Canarias (TRLOTENC), cuyas disposiciones son vinculantes. Nos referimos concretamente a las Directrices de Ordenación General

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 79

79

(Ley 19/2003), el Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria y a la ordenación de los Espacios Naturales Protegidos.

4.2.1 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales de las DOG

Los criterios y objetivos de ordenación del presente Plan General de Ordenación cumplen con los principios anteriores del Modelo de Ordenación Territorial Básico de Canarias, que les son exigibles a su objeto y escala dada. En cuanto al cumplimiento de los criterios y objetivos de las Directrices de Ordenación General, para una mejor comparación de los distintos objetivos ambientales establecidos por ellas y los asumidos por el Plan General de Ordenación de Ordenación de Agaete, los mismos se enumeran y correlacionan en la siguiente tabla:

OBJETIVOS AMBIENTALES RECOGIDOS EN

LAS DIRECTRICES DE ORDENACIÓN GENERAL (Ley 19/2003)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN

GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

Título II. Capítulo II: Biodiversidad

Directriz 13.1. Las intervenciones de conservación de la vida silvestre protegerán a las especies catalogadas en todo el archipiélago.

- Conservación de los valores naturales y culturales existentes. - Incrementar la cobertura vegetal del municipio.

Directriz 14.1. Las intervenciones públicas en los ecosistemas se orientarán a la preservación de la biodiversidad autóctona, asegurando el mantenimiento de poblaciones viables de especies nativas, la representatividad de los ecosistemas objeto de su atención, la interconexión entre los espacios protegidos mediante corredores ecológicos, y el mantenimiento de los procesos ecológicos y el potencial evolutivo de las especies y los ecosistemas, en armonía con la actividad humana.

- La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales que perviven en el municipio, evitando su merma, alteración o contaminación. - El aprovechamiento de los recursos naturales, evitando transformaciones en el medio físico y cultural que resulten irreversibles o irreparables. - La conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales. - La conservación, restauración y mejora del patrimonio arqueológico, etnográfico e histórico.

Directriz 17.1. Las intervenciones de recuperación de espacios degradados y las acciones de integración paisajística de las infraestructuras serán llevadas a cabo mediante el empleo de especies autóctonas. Se atenderá específicamente a corregir la fragmentación de los hábitats mediante el establecimiento de corredores biológicos.

- Recuperar áreas significativamente degradadas por actuaciones humanas y mejorar la calidad visual paisajística de los núcleos de población cuya morfología se encuentre escasamente integrada en el territorio.

Título II. Capítulo III: Calidad atmosférica, acústica y lumínica

Directriz 21.4. El planeamiento que ordene los suelos para actividades productivas analizará las consecuencias que puedan tener las concentraciones de actividades industriales sobre la calidad atmosférica del medio receptor, interviniendo con los instrumentos que le son propios para evitar que dichas concentraciones puedan contribuir a elevar los valores de inmisión superiores a los establecidos.

OBJETIVOS AMBIENTALES RECOGIDOS EN

LAS DIRECTRICES DE ORDENACIÓN GENERAL (Ley 19/2003)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN

GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

Título II. Capítulo IV: Aguas

Directriz 25. Las intervenciones en materia de aguas perseguirán el ahorro del consumo, la preservación de la calidad de los recursos, el adecuado tratamiento y

- Conservar la infraestructura relacionada con los recursos hídricos, tanto de las redes de riego y drenaje como de almacenamiento (estanques cueva, estanques de

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 80

80

OBJETIVOS AMBIENTALES RECOGIDOS EN

LAS DIRECTRICES DE ORDENACIÓN GENERAL (Ley 19/2003)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN

GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

reutilización de las aguas residuales, el correcto vertido de los efluentes resultantes y la integración de los criterios ambientales en las actuaciones y planes que se lleven a cabo.

mampostería, estanques de hormigón, presas, balsas), no sólo por su papel en el sistema agrícola sino también en la conservación de especies, en particular, de la avifauna. - Potenciar los procedimientos de obtención de recursos hídricos de forma eficiente.

Título II. Capítulo VI: Recursos geológicos

Directriz 34.2. No se permitirá la actividad extractiva en las playas, barrancos y espacios naturales protegidos, excepto por razones justificadas de índole ambiental y en los casos en que expresamente admita tal actividad el planeamiento a que se refiere el número anterior.

Título VI: Patrimonio Cultural y Paisaje. Capítulo I: Patrimonio Cultural

Directriz 106.2. La protección, tutela, conservación, restauración, acrecentamiento, investigación, difusión, fomento y puesta en uso del patrimonio cultural constituyen tareas básicas de las administraciones públicas del archipiélago, que fomentarán las actuaciones que faciliten el conocimiento y disfrute del patrimonio cultural de Canarias por sus habitantes y visitantes, y por las generaciones futuras.

- La conservación, restauración y mejora del paisaje.

Título VI: Patrimonio Cultural y Paisaje. Capítulo II: Paisaje

Directriz 112.1. Constituirá objetivo básico de todo instrumento de ordenación la cualificación del paisaje natural, rural o urbano al que afecte.

- La gestión ordenada de los recursos naturales para preservar la diversidad biológica, de modo que produzcan los mayores beneficios para las generaciones actuales, sin merma de su potencialidad para satisfacer las necesidades y aspiraciones de las generaciones futuras.

Directriz 112.3. El planeamiento urbanístico prestará especial atención a la ordenación en situaciones paisajísticas caracterizadas por su inadecuación topográfica en cualquier clase de suelo.

- La armonización de los requerimientos del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medioambiente urbano, rural y natural del municipio, asegurando a todos una digna calidad de vida.

Directriz 113.5. Los poderes públicos adoptarán especiales medidas de control y vigilancia con el objetivo de impedir la degradación paisajística causada por acciones ilegales de edificación, vertidos de residuos, movimientos de tierras, aperturas de caminos y otras.

- Actuaciones destinadas al desarrollo racional y equilibrado para el disfrute del medio natural y el paisaje, y el fomento de actividades educativo-ambientales, culturales y de esparcimiento de la población.

OBJETIVOS AMBIENTALES RECOGIDOS EN

LAS DIRECTRICES DE ORDENACIÓN GENERAL (Ley 19/2003)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN

GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

Directriz 115.2. El planeamiento general establecerá los criterios para la regeneración ambiental y paisajística de los entornos agrícolas degradados en las periferias urbanas y remitirá a planes especiales el diseño de intervenciones de protección y rehabilitación del paisaje especialmente en los bordes y entornos de núcleos turísticos, el entorno periurbano de las ciudades, la periferia rural de los núcleos de población y los antiguos asentamientos espontáneos de población.

- Conservar los recursos agrarios y fomentar la puesta en cultivo de áreas abandonadas que poseen recursos edáficos de buena calidad. - Conservación y mejora de la actividad agraria como valor económico y paisajístico del municipio. - Inventariar todos los asentamientos rurales y detectar aquellos que por sus características puedan ser reconocidos como tales, con el fin de dotarlos de los servicios mínimos. - La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural,

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 81

81

OBJETIVOS AMBIENTALES RECOGIDOS EN

LAS DIRECTRICES DE ORDENACIÓN GENERAL (Ley 19/2003)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN

GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

Directriz 116.2. Los planes generales de ordenación, para la mejora cualitativa del paisaje urbano en la ciudad consolidada, habrán de desarrollar criterios insulares.

- Mejorar las condiciones de vida en los cascos urbanos y en los núcleos de población rural.

4.2.2 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales de los Espacios Naturales Protegidos

En el municipio de Agaete, el único ámbito de protección que se establece basándose en el Decreto Legislativo 1/2000, de 8 de mayo, por el que se aprueba el Texto Refundido de las Leyes de Ordenación del Territorio de Canarias y de Espacios Naturales de Canarias, se identifica con el Parque Natural de Tamadaba. Con una superficie total de 7.538,6 hectáreas, el Parque ocupa territorio de los municipios de Artenara y San Nicolás, además del de Agaete, donde se extiende con una superficie de 2.805,4 ha., lo que representa el 61,6% de la superficie municipal. Todo el espacio, a excepción de un sector en la localidad de El Risco, es Área de Sensibilidad Ecológica a afectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención del Impacto Ecológico. El modelo de desarrollo sostenible que se plantea en el Plan Director, se define por los siguientes criterios:

Garantizar la conservación y protección de los recursos naturales y los ecosistemas en el parque natural.

Promover la restauración de los ecosistemas degradados.

Proteger las cuencas hidrológicas y garantizar la recarga del acuífero.

Conservar la calidad visual del paisaje y restaurar las zonas degradas y eliminar los impactos.

Garantizar la conservación y protección del patrimonio arqueológico y etnográfico.

Regular y promover los usos relacionados con el disfrute público, la educación la divulgación, y la investigación científica de forma compatible con la conservación.

Compatibilizar la conservación, protección y mejora de los recursos natural y cultural con el posible uso económico de los mismos de acuerdo con los criterios de sostenibilidad.

4.2.3 Adaptación del PGO a los objetivos ambientales y criterios del Plan Insular de Gran Canaria

También proyecta el cumplimiento de las determinaciones ambientales recogidas establecidas en el Plan Insular de Ordenación (PIO) de Gran Canaria vigente, aprobado definitivamente por acuerdo del Consejo de Gobierno (Decreto 277/2003, de 11 de noviembre), para los Planes Generales de Ordenación, que estipulan lo siguiente: A escala insular, el marco general de objetivos en materia de ordenación de los recursos naturales del Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria es el establecido por la Ley básica 4/1989, de 27 de

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 82

82

marzo, de Conservación de los Espacios Naturales y de la Flora y Fauna Silvestre y por el Texto Refundido. La siguiente tabla establece las relaciones existentes entre los objetivos del Plan Insular y los del Plan General de Ordenación de Agaete:

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN INSULAR DE ORDENACIÓN DE GRAN CANARIA (PIOGC)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

O1. Mantener los procesos ecológicos esenciales del medio biótico y abiótico.

- Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos, productivos y culturales del territorio. - La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales, evitando su merma, alteración o contaminación.

O2. Conservar la diversidad biológica y geológica con una gestión auto-sostenible.

- Preservar la biodiversidad, promoviendo la conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales y evitando la merma de sus valores. - El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles.

O3. Potenciar la gestión medioambiental y agroforestal de los recursos vegetales.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad biológica.

O4. Compatibilizar las actividades económicas con los requisitos ambientales.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural. - La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

O5. Restituir el papel socioeconómico de las costumbres y tradiciones populares.

- Procurar el mantenimiento de aquellos elementos y usos del suelo que han definido históricamente el paisaje, incidiendo en la protección de los mismos. - La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

O6. Gestión ordenada de las actividades productivas con una perspectiva turística.

- Procurar la calidad visual del territorio, evitando la localización de elementos discordantes y la práctica de actividades susceptibles de ocasionar impactos significativos. - La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O7. Valorización de recursos patrimoniales y etnográficos ligados al medio natural.

- Proteger y conservar el patrimonio cultural existente, tanto arqueológico como etnográfico y arquitectónico. - La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

O8. Evitar el impacto ambiental de las infraestructuras y redes de interconexión.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O9. Defender la integridad ecológica de los espacios de máxima preservación.

- Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos, productivos y culturales del territorio. - La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales, evitando su merma,

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 83

83

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN INSULAR DE ORDENACIÓN DE GRAN CANARIA (PIOGC)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

alteración o contaminación.

O10. Limitar drásticamente el desarrollo urbanístico en asentamientos existentes.

- Responder a la necesidad del ámbito de abordar acciones encaminadas a la rehabilitación de su espacio urbano-turístico, en el marco ambiental, social y paisajístico de modo que repercuta en una imagen turística positiva.

O11. Asegurar la concentración de las actividades intensivas de ocio y divulgación.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O12. Rehabilitación del patrimonio edificado para potenciar su valor etnográfico.

- Proteger y conservar el patrimonio cultural existente, tanto arqueológico como etnográfico y arquitectónico. - La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

O13. Cualificar e integrar paisajísticamente la red de caminos y senderos.

- Procurar el mantenimiento de aquellos elementos y usos del suelo que han definido históricamente el paisaje, incidiendo en la protección de los mismos.

O14. Fortalecer la identidad rural como interfaz productivo-natural.

- Procurar el mantenimiento de aquellos elementos y usos del suelo que han definido históricamente el paisaje, incidiendo en la protección de los mismos.

O15. Recuperar las formas tradicionales de transformación paisajística del suelo.

- Procurar el mantenimiento de aquellos elementos y usos del suelo que han definido históricamente el paisaje, incidiendo en la protección de los mismos.

O16. Mejorar el control paisajístico y agroambiental de los recursos naturales.

- El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles.

O17. Complementar las rentas agrarias con nuevas actividades económicas.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O18. Incentivar la agricultura ecológica y la repoblación económicamente sostenible.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O19. Inducir sinergias reequilibradoras que canalicen tensiones de uso y disfrute.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O20. Cualificar e integrar paisajísticamente la estructura viaria y parcelaria.

- Procurar la calidad visual del territorio, evitando la localización de elementos discordantes y la práctica de actividades susceptibles de ocasionar impactos significativos.

O21. Compatibilizar el tejido residencial con las actividades productivas.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O22. Potenciar la articulación jerárquica de los asentamientos existentes.

- Responder a la necesidad del ámbito de abordar acciones encaminadas a la rehabilitación de su espacio urbano-turístico, en el marco ambiental, social y paisajístico de modo que repercuta en una imagen turística positiva.

O23. Frenar la extensión inadecuada e ineficiente del nuevo tejido residencial.

- Procurar la calidad visual del territorio, evitando la localización de elementos discordantes y la práctica de actividades susceptibles de ocasionar impactos significativos.

O24. Desarrollar sistemas alternativos descentralizados de infraestructuras.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 84

84

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN INSULAR DE ORDENACIÓN DE GRAN CANARIA (PIOGC)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

O25. Incentivar la concentración y reubicación del tejido residencial disperso.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O26. Recuperar la vertebración territorial entre lo urbano, lo rural y lo natural.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O27. Potenciar el espacio frontera como borde estructurante terrestre y litoral.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O28. Contener el consumo de suelo en armonía con la capacidad de carga.

- La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

O29. Reducir los costes ambientales y paisajísticos de los nuevos tejidos y redes.

- Procurar la calidad visual del territorio, evitando la localización de elementos discordantes y la práctica de actividades susceptibles de ocasionar impactos significativos.

O30. Incorporar vacíos que estructuren territorialmente los distintos tejidos.

- Responder a la necesidad del ámbito de abordar acciones encaminadas a la rehabilitación de su espacio urbano-turístico, en el marco ambiental, social y paisajístico de modo que repercuta en una imagen turística positiva.

O31. Habilitar nuevos tejidos especialistas adaptados a su rol territorial e identitario.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O32. Inducir cambios en los modos de producción y gestión del tejido económico.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O33. Decantar la polaridad urbana o rural de los asentamientos dispersos.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O34. Condicionar plusvalías urbanísticas al resguardo del tejido agrícola productivo.

- La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

O35. Graduar la transformación proporcionada, ordenada y articulada del suelo.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O36. Reutilizar espacios obsoletos como oportunidad para nuevas centralidades.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo.

O37. Densificar el uso del suelo para fomentar su complejidad social y funcional.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O38. Integrar la arquitectura contemporánea y las formas tradicionales de ocupación.

- La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

O39. Considerar la variable ambiental en la optimización de las infraestructuras.

- Procurar la calidad visual del territorio, evitando la localización de elementos discordantes y la práctica de actividades susceptibles de ocasionar impactos significativos.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 85

85

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN INSULAR DE ORDENACIÓN DE GRAN CANARIA (PIOGC)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

O40. Potenciar la regeneración paisajística y prevención de riesgos naturales.

- Garantizar la protección del litoral, incidiendo en la adecuada ordenación del espacio litoral, previendo la conservación de las áreas de valor ecológico o paisajístico. - La conservación, restauración y mejora del paisaje.

O41. Reducir el excesivo incremento en el uso del vehículo privado.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada actividades en el territorio, garantizando aprovechamiento óptimo del suelo.

O42. Impulso al auto-sostenimiento de la gestión integral del agua.

- El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles.

O43. Potenciación de las fuentes alternativas de producción energética in situ.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad biológica.

O44. Priorizar la reducción, reutilización, reciclado y valorización de los residuos.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O45. Vertebrar transversalmente los distintos tejidos residenciales y productivos.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O46. Adecuar las dotaciones y servicios a la demanda competitiva de los tejidos.

- Responder a la necesidad del ámbito de abordar acciones encaminadas a la rehabilitación de su espacio urbano-turístico, en el marco ambiental, social y paisajístico de modo que repercuta en una imagen turística positiva.

O47. Optimizar condiciones de seguridad y dimensionado de las redes existentes.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O48. Articulación logística del sistema aeroportuario y el sistema portuario.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

O49. Garantizar vida útil de las instalaciones de tratamiento y gestión de residuos.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O50. Jerarquizar y extender el transporte de pasajeros en plataforma reservada.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O51. Reducir necesidades de movilidad e interconexión longitudinal y transversal.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 86

86

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN INSULAR DE ORDENACIÓN DE GRAN CANARIA (PIOGC)

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O52. Especializar corredores logísticos compatibles con otros tráficos.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

O53. Promoción del tráfico de cabotaje para el desplazamiento de pasajeros.

- Desarrollar de manera racional y equilibrada las actividades en el territorio, garantizando el aprovechamiento óptimo del suelo. - El desarrollo equilibrado de las actividades del territorio que, en todo caso, garantice su diversidad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

En cuanto a los instrumentos de ordenación territorial, existen Planes Territoriales de Ordenación (Especiales y Parciales), con aprobación definitiva y en tramitación, que afectan al ámbito de referencia. Así, cuentan con aprobación definitiva: el Plan Territorial Especial de Ordenación Turística Insular (PTEOTI-GC); el Plan Territorial Especial 05 de Paisaje (PTE-05); el Plan Territorial Especial 31 Ordenación de Corredores de Transporte de Energía Eléctrica (PTE-31); y, el Plan Territorial Especial 36ª de Campo de Golf (PTE-36ª). Las siguientes tablas establecen las relaciones existentes entre los objetivos ambientales de los PTE y los objetivos ambientales del Plan General:

- PTE 36a “Ordenación de Campos de Golf”.

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTE 36A OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE

ORDENACIÓN DE AGAETE

Modificación y enriquecimiento del tipo de turismo que visita Gran Canaria en la actualidad.

- Responder a la necesidad del ámbito de abordar acciones encaminadas a la rehabilitación de su espacio urbano-turístico, en el marco ambiental, social y paisajístico de modo que repercuta en una imagen turística positiva.

Conservación y respeto hacia el territorio y el medio ambiente.

- Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos, productivos y culturales del territorio. - La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

Regulación del sistema hidráulico insular con la potenciación de un cliente no estacional que garantice su correcto funcionamiento.

- El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles.

Adaptación a las características orográficas y paisajísticas de Gran Canaria.

- Procurar la calidad visual del territorio, evitando la localización de elementos discordantes y la práctica de actividades susceptibles de ocasionar impactos significativos.

Preservación de hábitats de interés. - La conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 87

87

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTE 36A OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL DE

ORDENACIÓN DE AGAETE

Establecimiento de un modelo global de implantación territorial.

- La armonización del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

- Plan Territorial Especial de Ordenación Turística Insular (PTEOTI-GC).

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTEOTI-GC OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL

Fijar los límites razonables de crecimiento turístico, de acuerdo con la Ley 6/2009 de Medidas Urgentes.

Impulsar la conservación, restauración y mejora del paisaje y del patrimonio histórico municipal. Agaete tanto por el clima, su litoral, su patrimonio, como por la cantidad y calidad de Espacios Naturales Protegidos que se encuentran en su territorio, cuenta con un entorno privilegiado del cual debe beneficiarse a la vez que velar por su cuidado y protección.

Fomentar la reconversión de los enclaves turísticos en declive mediante la renovación y sustitución de la planta alojativa obsoleta y la rehabilitación de los espacios urbanos degradados.

Intensificar el carácter lúdico, cultural, residencial y turístico de Agaete, aumentando para ello los equipamientos y servicios urbanos que la población demanda, con ofertas de ocio, cultura, deporte, medio ambiente, para el residente y el turista que se aloje en el término municipal y para el que va de paso. El desarrollo del producto turístico, conjugará la variable ambiental con la búsqueda de un producto viable y competitivo a escala local y comarcal, teniendo presentes las potencialidades y limitaciones del espacio municipal para estos fines, y en particular el sector de la isla en que se emplaza.

Cambiar los modos de producción y gestión que permitan la paulatina implantación de un nuevo modelo de desarrollo turístico.

Proteger el litoral, considerándolo como una zona de valor natural y económico estratégico, controlando la ordenación del mismo de cara a integrar los impactos derivados de las urbanizaciones turísticas y otras presiones de usos, previendo la protección específica de las áreas de valor ecológico o paisajístico y garantizando su uso público.

Fomentar el comportamiento sostenible de los establecimientos alojativos.

Intensificar el carácter lúdico, cultural, residencial y turístico de Agaete, aumentando para ello los equipamientos y servicios urbanos que la población demanda, con ofertas de ocio, cultura, deporte, medio ambiente, para el residente y el turista que se aloje en el término municipal y para el que va de paso. El desarrollo del producto turístico, conjugará la variable ambiental con la búsqueda de un producto viable y competitivo a escala local y comarcal, teniendo presentes las potencialidades y limitaciones del espacio municipal para estos fines, y en particular el sector de la isla en que se emplaza.

Sentar las bases para definir un destino turístico competitivo y sostenible en un entorno urbano renovado y natural de calidad.

Proteger el litoral, considerándolo como una zona de valor natural y económico estratégico, controlando la ordenación del mismo de cara a integrar los impactos derivados de las urbanizaciones turísticas y otras presiones de usos, previendo la protección específica de las áreas de valor ecológico o paisajístico y garantizando su uso público.

Preservar la biodiversidad e integridad de los sistemas naturales.

La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales que perviven en la isla, evitando su merma, alteración o contaminación.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 88

88

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTEOTI-GC OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL

Producir y explotar la oferta turística adecuada a los intereses de la sociedad canaria.

Fomentar el atractivo turístico propio de la zona fortaleciendo las diversas actividades acuáticas ofertadas, el paisaje litoral, los senderos y rutas que muestran los valores de la zona y su identidad.

Armonizar los requerimientos del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural.

La promoción de la integración y la cohesión sociales, así como de la solidaridad autonómica, insular e intermunicipal. En especial, la promoción social, económica y cultural de la población asentada en el Espacio Natural Protegido y sus zonas de influencia.

Utilizar el suelo de acuerdo con su aptitud natural y su productividad potencial.

La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad.

Determinar que las intervenciones deberán preservar y cuidar los valores naturales y la calidad de los recursos existentes.

El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles o irreparables.

Ubicar las actividades más desfavorables pare el medio ambiente, que no puedan ser evitadas, en los lugares donde menos impacto producen.

El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso, garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

Establecer la conservación, restauración y mejora en los hábitats naturales y Espacios Protegidos.

Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos y culturales en presencia, con remisión, en el caso del territorio adscrito al Parque Natural de Tamadaba, en lo referente a usos y actividades, al correspondiente Plan Rector de Uso y Gestión.

Establecer la conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico.

La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico existente, tanto arqueológico como etnográfico y arquitectónico.

Establecer la conservación, restauración y mejora del paisaje.

La conservación, restauración y mejora del paisaje.

Asegurar la racional utilización del litoral. Respecto al litoral, se pretende dotar al municipio para el disfrute de la población en las áreas de posible acceso público, y tratar de conservar la mayor parte posible de los espacios de costa y playas naturales.

Deber de respetar, por parte de las nuevas actuaciones, las condiciones particulares y especificidades ambientales del entorno afectado para favorecer la integración y minimizar los impactos.

La conservación, restauración y mejora ecológica de los hábitats naturales.

Prever una estricta conservación de los conjuntos y elementos geomorfológicos de especial interés en la configuración del relieve y el medioambiente.

La conservación, restauración y mejora ecológica de los hábitats naturales.

Prever una estricta conservación de los conjuntos bióticos de especial interés en la configuración del sistema ecológico insular.

La conservación, restauración y mejora ecológica de los hábitats naturales.

Prever una estricta conservación de los conjuntos, estructuras y ámbitos de interés patrimonial, y adscritos a la definición del poblamiento y la cultura prehispánica e histórica de la isla.

La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico existente, tanto arqueológico como etnográfico y arquitectónico. En cuestión de valores patrimoniales, adoptar mecanismos que contribuyan a la preservación, recuperación y, puesta en valor, de los elementos del patrimonio histórico - cultural del municipio.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 89

89

- Plan Territorial especial del Paisaje (PTE-05).

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTE 05 OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN GENERAL

Adecuar la gestión de los recursos naturales, y en especial de los espacios naturales y de las especies a proteger, siguiendo principios de preservación de la variedad, singularidad y belleza de los ecosistemas naturales y del paisaje.

La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad biológica de modo que produzcan mayores beneficios para las generaciones actuales, sin merma de su potencialidad para satisfacer las necesidades y aspiraciones de las generaciones futuras.

Definir el modelo general de asentamiento de población para asegurar la compatibilidad de los crecimientos y de los nuevos asentamientos con el medio natural y con su paisaje, así como asegurar la calidad urbana de los crecimientos y su integración con los espacios urbanos preexistentes.

Detectar, delimitar y ordenar los asentamientos rurales y agrícolas que por sus características puedan ser reconocidos como tales y disponer para los mismos una dotación de servicios mínimos. Potenciar el paisaje de los enclaves de población rural que gozan de mayor estética paisajística y ambiental, y también, potenciación y puesta en valor del patrimonio etnográfico que se concentra en estos espacios, incrementando su atractivo paisajístico sin que se pierdan las señas de identidad del mundo rural.

Configurar el espacio costero como recurso singular, tanto desde el punto de vista de su conservación –y de los ecosistemas a él vinculados- como para el disfrute y recreo de la población, atendiendo además a que es uno de los principales elementos conformadores del paisaje y de la imagen de la isla, restaurándolo cuando sea conveniente en sus medios marítimos y terrestres.

Proteger el litoral, considerándolo como una zona de valor natural y económico estratégico, controlando la ordenación del mismo de cara a integrar los impactos derivados de las urbanizaciones turísticas y otras presiones de usos, previendo la protección específica de las áreas de valor ecológico o paisajístico y garantizando su uso público.

Corregir los impactos debidos a actuaciones ilegales de apertura de pistas, extracciones de áridos, vertidos de escombros y residuos, construcciones y edificaciones y restauración de las áreas afectadas.

La conservación, restauración y mejora ecológica de los hábitats naturales.

Establecer medidas para la protección, gestión y ordenación de los paisajes de la isla de Gran Canaria, con objeto de lograr una mejora paisajística de la isla en todos los sentidos.

Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos y culturales en presencia, con remisión, en el caso del territorio adscrito al Parque Natural de Tamadaba, en lo referente a usos y actividades, al correspondiente Plan Rector de Uso y Gestión.

Propiciar el frenado del deterioro del ambiente mediante instrucciones específicas en las actuaciones que se derivan de los planeamientos municipales.

El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso, garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

- Plan Territorial Especial Ordenación de los Corredores de transporte de energía

eléctrica (PTE-31).

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTE 31 OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN DE

MODERNIZACIÓN

Incorporar de forma efectiva las políticas de ahorro y eficiencia, reutilizando y adaptando las instalaciones existentes mediante repotenciaciones, ampliaciones de subestaciones, cambios de tensión, etc.

El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso, garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 90

90

OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PTE 31 OBJETIVOS AMBIENTALES DEL PLAN DE

MODERNIZACIÓN

Apoyar al desarrollo de las energías renovables, dotando al sistema del correcto dimensionamiento en aquellas zonas donde pueda preverse la implantación significativa de este tipo de sistemas de generación y almacenamiento.

El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso, garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto a recurso natural singular.

5. EVALUACIÓN DE LAS CONSECUENCIAS AMBIENTALES DE LAS DETERMINACIONES DEL PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN DE AGAETE

Toda intervención antrópica sobre un territorio, de cualquier magnitud o intensidad, deriva en un efecto o impacto sobre los principales parámetros ambientales que caracterizan al mismo. Sin embargo, tales efectos pueden presentar distinto signo (positivo o negativo) y niveles de reversibilidad (o de recuperación de las condiciones ambientales preexistentes a la ejecución de la actuación). La presente evaluación de las diferentes alternativas expuestas, pretende abordar un análisis de los efectos ambientales potenciales que pueden derivar de la ejecución del planeamiento que se propone para el término municipal de Agaete, en cumplimiento del apartado 2A 5) del Documento de Referencia, en particular a los siguientes apartados:

1. Identificación de las determinaciones del planeamiento potencialmente generadoras de impactos.

2. Análisis del grado de adecuación entre las determinaciones del planeamiento y la calidad ambiental y capacidad de las unidades afectadas para acoger los diferentes usos propuestos.

3. Análisis y justificación de las alternativas seleccionadas para la clasificación urbanística, expresando sus efectos diferenciales sobre el medio ambiente y su grado de adecuación a los criterios y objetivos ambientales definidos.

4. Valoración detallada, signo de los impactos y de sus probables efectos, inducidos por las determinaciones contenidas en el instrumento de planeamiento.

Desde el punto de vista ambiental, este análisis y valoración supone un punto de apertura al conocimiento colectivo de las Alternativas que se someten a los trámites de participación ciudadana. Para ello y dado que, el objetivo básico de este Plan General de Ordenación como instrumento de ordenación del espacio municipal, es la integración ambiental del documento, haciendo que sus determinaciones puedan incidir en una organización de los usos del suelo y del desarrollo municipal coherente con las condiciones y dinámicas territoriales, que produzca menores desequilibrios entre el cumplimiento de los objetivos planteados y el respeto por los aspectos ambientales. Por tanto y visto lo expuesto, la lógica y el sentido común imponen la necesidad de compatibilizar los planeamientos urbanístico y medioambiental, de tal manera que se cubran estas expectativas de crecimiento sin menoscabo de los valores naturales y ambientales, tanto abióticos como bióticos y culturales, con los que cuenta el municipio.

5.1 Síntesis de contenidos de la evaluación de las consecuencias ambientales de la clasificación de suelo propuesta por las diferentes alternativas

Los contenidos que desarrollan la presente Evaluación Ambiental, como ya se comentó anteriormente, son los recogidos en el apartado 2A 5) del Documento de Referencia, en cumplimiento de la Resolución de 10 de agosto de 2006, por la que se hace público el Acuerdo de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias de 4 de agosto de 2006, relativo al Documento de Referencia para elaborar los Informes de Sostenibilidad de Planes Generales de Ordenación. No

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 91

91

obstante, este informe se amplía con la aportación de un dossier de fichas de evaluación de impacto, elaboradas para una serie de actuaciones de carácter urbanístico determinadas por las distintas alternativas propuestas por el Plan General. Esencialmente el presente trabajo se estructura en torno a tres ejes:

La identificación de impactos.

La determinación de medidas correctoras.

La elaboración de un dossier de fichas de evaluación de impacto.

En el establecimiento de las alternativas propuestas hay que tener en cuenta lo establecido en el Documento de Referencia para elaborar los Informes de Sostenibilidad de Planes Generales de Ordenación (BOC núm. 159, de 16/08/2006), además de otras normativas que contribuyen a la adecuada ordenación de los valores naturales, culturales y paisajísticos del municipio. Entre los múltiples criterios se destacan los siguientes: 1. La preservación de la biodiversidad y la defensa de la integridad de los ambientes naturales que perviven en las islas, evitando su merma, alteración o contaminación. 2. El desarrollo racional y equilibrado de las actividades en el territorio, que, en todo caso, garantice su diversidad y complementariedad y asegure el óptimo aprovechamiento del suelo en cuanto recurso natural singular. 3. La armonización de los requerimientos del desarrollo social y económico con la preservación y la mejora del medio ambiente urbano, rural y natural, asegurando a todos una digna calidad de vida. 4. La gestión de los recursos naturales de manera ordenada para preservar la diversidad biológica, de modo que produzcan los mayores beneficios para las generaciones actuales, sin merma de su potencialidad para satisfacer las necesidades y aspiraciones de las generaciones futuras. 5. El aprovechamiento de los recursos naturales renovables sin rebasar su capacidad de recuperación, evitando transformaciones en el medio que resulten irreversibles o irreparables. 6. La utilización del suelo de acuerdo con su aptitud natural, su productividad potencial y en congruencia con la función social de la propiedad. 7. La conservación, restauración y mejora ecológica en los hábitats naturales. 8. La conservación, restauración y mejora del patrimonio histórico. 9. La conservación, restauración y mejora del paisaje. 10. La conservación, restauración y mejora sostenible de las explotaciones agrarias de carácter extensivo.

5.2 Identificación de las determinaciones de las diferentes alternativas potencialmente generadoras de impacto

En este apartado se va a proceder a identificar todas aquellas propuestas expuestas por las diferentes alternativas del Plan General de Ordenación de Agaete, susceptibles de producir algún tipo de afección sobre el entorno. Dicha enumeración va a servir de base, para conocer las más reseñables o impactantes. En este sentido, los impactos resultantes se clasificarán siguiendo las mismas definiciones que se expresan en la ley, en cuatro tipos: Nada Significativo, Poco Significativo, Significativo y Muy Significativo.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 92

92

En primer lugar, se va proceder a la identificación de todas aquellas acciones potencialmente generadoras de impacto, a través de una sencilla matriz donde se confrontan la calidad para la conservación y el potencial de transformación sobre el territorio de las actuaciones previstas. POTENCIAL DE TRANSFORMACIÓN DEL TERRITORIO PARA LAS DISTINTAS CATEGORÍAS DE SUELO Y CONDICIONES PREEXISTENTES

SUELO URBANO Y URBANIZABLE

Suelo urbano consolidado 2

Suelo urbano no consolidado 5

Suelo urbanizable 5

SUELO RÚSTICO

FORMAS TRADICIONALES DE POBLAMIENTO RURAL

Asentamiento rural 3

Asentamiento agrícola 2

PROTECCIÓN DE VALORES ECONÓMICOS

Protección agraria

PROTECCIÓN AMBIENTAL

Protección natural 0

Protección paisajística 0

Protección cultural 1

OTRAS CATEGORÍAS

Suelo rústico de protección territorial 2

SISTEMAS GENERALES NO ADSCRITOS A SUELOS URBANIZABLES

Infraestructuras 3

Equipamientos deportivos y espacios libres 2

Parques y zonas verdes 1

El Primer paso metodológico concluye con la aplicación de la siguiente matriz de valoración:

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 93

93

MATRIZ DE NIVEL DE IMPACTO

IMPACTO= C + P

CALIDAD PARA LA CONSERVACIÓN (C) P

OT

EN

CIA

L D

E

TR

AN

SF

OR

MA

CIÓ

N

(P)

5 4 3 2 1

5 10 9 8 7 6

4 9 8 7 6 5

3 8 7 6 5 4

2 7 6 5 4 3

1 6 5 4 3 2

0 5 4 3 2 1

En consecuencia, se obtienen directamente aquéllas actuaciones previstas por el planeamiento que presentan un mayor potencial de generar un impacto ambiental destacado, con valor numérico igual o superior a 6. Una vez concluida la selección de las actuaciones potencialmente más impactantes, el valor concreto de su afección se establecerá aplicando la segunda pauta metodológica, por lo que cada una de ellas será valorada en cada alternativa propuesta, a un mayor detalle con la aplicación de la siguiente ficha de evaluación:

LOCALIZACION Y DATOS GENERALES

Clasificación Nomenclatura Toponimia

Unidad ambiental afectada

Tipo

Denominación

Superficie clasificada Has.

% respecto al total municipal

DESCRIPCIÓN

CARACTERÍSTICAS DEL MEDIO

Pieza

Geología

Geomorfología

Vegetación

Fauna

Patrimonio

Suelos

Usos

Calidad visual

SINTESIS DEL DIAGNÓSTICO AMBIENTAL

Calidad Conservación

Problemática Ambiental

Capacidad de Uso

Limitación de Uso

Valor Cultural

Valoración del impacto sobre los elementos del

medio

CO

MP

AT

IBL

E

MO

DE

RA

DO

SE

VE

RO

CR

ÍTIC

O

Evaluación de impacto ambiental

Signo Negativo Positivo

AFECCION DE INSTRUMENTOS DE PROTECCION

Denominación

Red Natura 2000 Z.E.C

Z.E.P.A

Directiva Hábitat

IBA´s

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 94

94

Magnitud Mínimo Notable

Causa-efecto Directo Indirecto

Geomorfología Complejidad Simple Acumulativo

Vegetación Plazo Corto Medio Largo

Fauna Duración Permanente Temporal

Patrimonio Reversibilidad Reversible Irreversible

Suelos Recuperabilidad Recuperable Irrecuperable

Hidrología Periodicidad Periódico Irregular

Usos Continuidad Continuo Discontinuo

Calidad Visual Valoración global

OBSERVACIONES ALTERNATIVAS

MEDIDAS CORRECTORAS

La aplicación del primer paso metodológico ha permitido seleccionar aquéllas actuaciones propuestas que pueden conllevar un impacto significativo. En este sentido, puede observarse como existe una generalizada compatibilidad entre las condiciones ambientales existentes y la propuesta de planeamiento recogida en el Plan General de Agaete. No obstante, la alta calidad geoecológica y paisajística de todo el ámbito municipal son las circunstancias que hacen incrementar la posible incidencia de la ejecución de algunas propuestas, especialmente de aquéllas orientadas a la progresión del edificado. Así, los resultados obtenidos permiten considerar, a priori, una cierta significación potencial del impacto ambiental para el 100% de los suelos urbanizables y asentamientos rurales de las alternativas presentadas. Igualmente, se obtiene como resultado la necesidad de evaluar en detalle la totalidad de los suelos urbanos no consolidados, salvo aquellos que ya se hallan desarrollados. Tabla de los suelos propuestos en las distintas alternativas: Alternativa 0

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 0

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

URBANO CONSOLIDADO SUC 871.749

NO CONSOLIDADO SUNC 206.312

TOTAL SUELO URBANO 1.078.061

URBANIZABLE SECTORIZADO SUS 992.460

NO SECTORIZADO SUNS 200.000

TOTAL SUELO URBANIZABLE 1.192.461

RÚSTICO

PROTECCIÓN NATURAL SRPN 14.288

PROTECCIÓN PAISAJÍSTICA SRPP 9.623.974

PROTECCIÓN CULTURAL SRPCu 605.925

PROTECCIÓN COSTERA* SRPC 323.322

PROTECCIÓN AGRARIA SRPA 3.813.043

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS-1

SRPIE-1 104.313

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS-2*

SRPIE-2 180.489

ASENTAMIENTO RURAL SRAR 7.153

TOTAL SUELO RÚSTICO 14.168.696

TOTAL SUELO ORDENADO ALTERNATIVA 0 16.439.218

TOTAL SUELO EN E.N.P. (PARQUE NATURAL DE TAMADABA) 28.082.153

TOTAL SUELO MUNICIPIO 44.521.371

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 95

95

Alternativa 1

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 1

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

URBANO CONSOLIDADO SUC 892.143

NO CONSOLIDADO SUNC 223.130

TOTAL SUELO URBANO 1.115.274

URBANIZABLE SECTORIZADO SUS 866.644

NO SECTORIZADO SUNS 266.936

TOTAL SUELO URBANIZABLE 1.133.580

RÚSTICO

PROTECCIÓN PAISAJÍSTICA SRPP 8.570.157

PROTECCIÓN CULTURAL SRPCu 1.587.921

PROTECCIÓN DE ENTORNOS SREN 350.691

PROTECCIÓN COSTERA* SRPC 325.479

PROTECCIÓN AGRARIA SRPA 2.818.735

PROTECCIÓN HIDROLÓGICA SRPH 360.206

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 1

SRPIE-1 310.910

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 2

SRPIE-2 53.808

ASENTAMIENTO RURAL SRAR 27.088

ASENTAMIENTO AGRÍCOLA SRAA 110.848

TOTAL SUELO RÚSTICO 14.190.364

TOTAL SUELO ORDENADO ALTERNATIVA 1 16.439.218

TOTAL SUELO EN E.N.P.-PARQUE NATURAL DE TAMADABA 28.082.153

TOTAL SUELO MUNICIPIO 44.521.371

Alternativa 2

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 2

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

URBANO CONSOLIDADO SUC 874.954

NO CONSOLIDADO SUNC 208.488

TOTAL SUELO URBANO 1.083.422

URBANIZABLE SECTORIZADO SUS 357.885

NO SECTORIZADO SUNS 619.205

TOTAL SUELO URBANIZABLE 977.100

RÚSTICO

PROTECCIÓN NATURAL SRPN 31.958

PROTECCIÓN PAISAJÍSTICA SRPP 10.250.106

PROTECCIÓN CULTURAL SRPCu 474.815

PROTECCIÓN COSTERA* SRPC 337.859

PROTECCIÓN AGRARIA SRPA 2.890.902

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 1

SRPIE-1 307.399

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 2

SRPIE-2 163.043

PROTECCIÓN TERRITORIAL SRPT 67.119

ASENTAMIENTO RURAL SRAR 56.062

ASENTAMIENTO AGRÍCOLA SRAA 137.272

TOTAL SUELO RÚSTICO 14.378.675

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 96

96

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 2

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

TOTAL SUELO ORDENADO ALTERNATIVA 2 16.439.218

TOTAL SUELO EN E.N.P.-PARQUE NATURAL DE TAMADABA 28.082.153

TOTAL SUELO MUNICIPIO 44.521.371

Tablas de las piezas a evaluar: Alternativa 0

ALTERNATIVA 0 Propuesta de suelos

CATEGORIA SUELO URBANO Y URBANIZABLE

SUPERFICIE (m²)

SUNC La Suerte 80.809

SUNC Los Arenales 1 18.545

SUNC Los Arenales 2 18.465

SUNC Los Arenales 3 2.902

SUNC San Francisco -Juan de Armas 3.452

SUNC Calle Belén 3.554

SUNC Los Chorros 15.513

SUNC Barranco Agaete -Alonso Medina 10.524

SUNC Naciente Campo Fútbol 15.860

SUNC El Molino (Las Nieves) 8.644

SUNC Ermita de Las Nieves 3.466

SUNC Roque de Las Nieves 2.812

SUNC Casas de San Pedro nº1 5.214

SUNC Casas de San Pedro nº2 6.909

SUNC Casas de San Pedro nº3 5.403

SUNC Casas de San Pedro nº4 4.240

TOTAL SUNC 206.312

SUS Las Moriscas Industrial 80.072

SUS Las Moriscas Residencial 310.003

SUS Ampliación Llanos del Turmán 103.500

SUS Ladera Norte 32.100

SUS Cruz Chiquita 90.612

SUS Geriátrico (Las Hoyillas) 67.523

SUS Las Nieves Costa 79.048

SUS Las Nieves Casa Fuerte 118.881

SUS Las Salinas (SG-RC) 20.588

SUS Barranco de Agaete (SG-EL) 28.400

SUS Ampliación Cementerio (SG-FU) 13.000

SUS Barranco del Tío Vicente I a (SG-EL) 7.960

SUS Barranco del Tío Vicente II (SG-CO) 13.272

SUS Casas de San Pedro 12.500

SUS Vecindad de Enfrente 15.000

TOTAL SUS 992.460

SUNS-Las Moriscas Turístico 200.000

TOTAL SUNS 200.000

TOTAL SUELO URBANO Y URBANIZABLE 2.270.521

CATEGORÍA DE SUELO RÚSTICO

Yacimiento Arqueológico Maipez 144.518

Las Salinas 20..588

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 97

97

ALTERNATIVA 0 Propuesta de suelos

CATEGORIA SUELO URBANO Y URBANIZABLE

SUPERFICIE (m²)

Barranco de Agaete 28.091

El Turmán. Ampliación Cementerio 13.000

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente I) 13.245

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente II) 13.272

Las Candelarias 9.200

Las Candelarias 8.685

GC-2, GC-200,GC-293, GC-231, GC-223 318.087

Puerto de Las Nieves 50.965

Puerto de Las Nieves 42.111

La Palmita 128.955

Barranco del Juncal 280.000

SRPIE

14.168.696

Alternativa 1

ALTERNATIVA 1 Propuesta de suelos

CATEGORIA SUELO URBANO Y URBANIZABLE SUPERFICIE (m²)

SUNC Barranco de Tío Vicente I b (SG-EL) 5.285

SUNC Los Arenales 1 4.672

SUNC Los Arenales 2 19.925

SUNC San Francisco -Juan de Armas 3.452

SUNC Los Chorros 25.659

SUNC Naciente Campo Fútbol 16.229

SUNC San Sebastián 3.302

SUNC El Molino (Las Nieves) 4.362

SUNC Ermita de Las Nieves 3.513

SUNC Roque de Las Nieves 3.468

SUNC Las Nieves 12.507

SUNC La Suerte 80.767

SUNC San Pedro 8.947

SUNC Casas de San Pedro 12.228

SUNC Cuevecillas 9.879

SUNC Vecindad de Enfrente I 4.125

SUNC Vecindad de Enfrente II 4.810

TOTAL SUNC 223.130

SUS Las Moriscas Industrial 159.069

SUS Las Moriscas Residencial 230.931

SUS Ampliación Llanos del Turmán 104.132

SUS Ladera Norte 31.776

SUS Cruz Chiquita 91.300

SUS Las Nieves Costa 58.245

SUS Las Nieves Centro 50.268

SUS Las Nieves Casa Fuerte 43.538

SUS Las Salinas (SG-RC) 17.285

SUS Barranco de Agaete (SG-EL) 23.298

SUS Ampliación Cementerio (SG-FU) 14.153

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 98

98

ALTERNATIVA 1 Propuesta de suelos

CATEGORIA SUELO URBANO Y URBANIZABLE SUPERFICIE (m²)

SUS Barranco del Tío Vicente I a (SG-EL) 7.753

SUS Barranco del Tío Vicente II (SG-CO) 9.040

SUS Casas de San Pedro 12.500

SUS Vecindad de Enfrente 13.357

TOTAL SUS 866.644

SUNS-1 Las Moriscas Turístico 200.000

SUNS Geriátrico (Las Hoyillas) 66.936

TOTAL SUNS 266.936

TOTAL SUELO URBANO Y URBANIZABLE 2.248.853

CATEGORÍA DE SUELO RÚSTICO

Yacimiento Arqueológico Maipez 144.518

Las Salinas 17.285

Barranco de Agaete 23.298

El Turmán. Ampliación cementerio 14.153

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente I a) 7.753

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente I b) 5.285

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente II) 9.040

Las Candelarias 7.616

Las Candelarias 8.685

GC-2, GC-200,GC-293, GC-231, GC-223 335.887

Puerto de Las Nieves 59.539

Puerto de Las Nieves 42.111

La Palmita 126.703

Los Berrazales 13.154

Barranco del Juncal (Las Moriscas) 280.000

Alternativa 2

ALTERNATIVA 2 Propuesta de suelos

CATEGORIA SUELO URBANO Y URBANIZABLE

SUPERFICIE (m²)

SUNC Los Arenales 1 4.672

SUNC Los Arenales 2 19.925

SUNC San Francisco -Juan de Armas 3.452

SUNC Los Chorros 25.378

SUNC Naciente Campo Fútbol 9.684

SUNC Cruz Chiquita 11.849

SUNC El Molino (Las Nieves) 4.362

SUNC Ermita de Las Nieves 3.513

SUNC Roque de Las Nieves 3.468

SUNC Las Nieves 12.507

SUNC La Suerte 80.767

SUNC Casas de San Pedro 1 9.097

SUNC Casas de San Pedro 2 13.473

SUNC Vecindad de Enfrente I 6.340

TOTAL SUNC 208.488

SUS Las Moriscas Industrial 159.069

SUS Ladera Norte 35.077

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 99

99

ALTERNATIVA 2 Propuesta de suelos

CATEGORIA SUELO URBANO Y URBANIZABLE

SUPERFICIE (m²)

SUS Cruz Chiquita 83.766

SUS Barranco del Tío Vicente Ia (SG-EL) 7.753

SUS Barranco del Tío Vicente Ib (SG-EL) 5.285

SUS Geriátrico (Las Hoyillas) 66.935

TOTAL SUS 357.885

SUNS-1 Las Moriscas Turístico 200.000

SUNS Las Moriscas Residencial 230.931

SUNS Ampliación Llanos del Turmán 104.132

SUNS Las Nieves Costa 84.152

TOTAL SUNS 619.215

TOTAL SUELO URBANO Y URBANIZABLE 2.060.543

CATEGORÍA DE SUELO RÚSTICO

Yacimiento Arqueológico Maipez 144.518

Las Salinas 17.285

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente I a) 7.753

Entrada Agaete (Bco.del Tío Vicente I b) 5.285

Las Candelarias 7.616

Las Candelarias 8.685

GC-2, GC-200,GC-293, GC-231, GC-223 336.168

Puerto de Las Nieves 59.539

Puerto de Las Nieves 42.111

La Palmita 126.703

Los Berrazales 13.154

Geriátrico Las Hoyillas 66.935

Por tanto, la relación de actuaciones previstas por cada alternativa que, pueden conllevar una mayor afección territorial y ambiental que se someterán, aplicando el segundo paso metodológico mencionado, a la ficha de evaluación de su impacto ambiental, son las que a continuación se describen: Por tanto, quedan fuera de evaluación los suelos propuestos que registran una clara compatibilidad con las condiciones ambientales de los sectores a los que afectan, en cada una de las alternativas propuestas. En este sentido, no se consideran posibles valores de impactos significativos en piezas propuestas de suelos urbanos que si bien, en algunos casos recogen espacios intersticiales por consolidar, constituyen áreas que desde el diagnóstico ambiental, se insertan en ámbitos aptos para el desarrollo edificatorio o llevan muchos años consolidados. También quedan excluidas de la valoración de su impacto las restantes categorías de suelo rústico consideradas, por adaptarse ambientalmente a los ámbitos que afectan y por no conllevar una transformación significativa de las condiciones geoecológicas existentes en dichos espacios. La valoración global del impacto es la siguiente, con la respectiva traslación a la tipología de impacto que introduce la normativa autonómica de Impacto Ambiental: • Compatible: impacto de poca entidad. Aquel cuya recuperación de las condiciones originales es inmediata tras el cese de la actividad, y no precisa prácticas protectoras o correctoras (Nada significativo).

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 100

100

• Moderado: aquel cuya recuperación de las condiciones originales no precisa prácticas protectoras o correctoras intensivas, y en el que la consecución de las condiciones ambientales iniciales requiere cierto tiempo (Poco significativo). • Severo: la magnitud del impacto exige la adecuación de prácticas correctoras para la recuperación de las condiciones iniciales del medio. Aún con estas prácticas, la recuperación exige un periodo de tiempo dilatado (Significativo). • Crítico: la magnitud del impacto es superior al umbral aceptable. Se produce una pérdida permanente de las condiciones ambientales, sin posible recuperación, incluso con la adopción de prácticas, o medidas correctoras (Muy significativo).

5.3 Análisis del grado de adecuación entre las determinaciones del planeamiento y los objetivos ambientales, la calidad ambiental y capacidad de las unidades afectadas para acoger los diferentes usos propuestos

Desde el punto de vista ambiental, este análisis y valoración supone un punto de apertura al conocimiento colectivo de las Alternativas que se someten a los trámites de participación ciudadana. Para ello y dado que, el objetivo básico de este Plan General de Ordenación como instrumento de ordenación del espacio municipal, es la integración ambiental del documento, haciendo que sus determinaciones puedan incidir en una organización de los usos del suelo y del desarrollo municipal coherente con las condiciones y dinámicas territoriales, que produzca menores desequilibrios entre el cumplimiento de los objetivos planteados y el respeto por los aspectos ambientales. Por tanto, tomando en consideración las valoraciones expuestas sobre las características y la posible incidencia ambiental de las Alternativas planteadas y las condiciones de ocupaciones del territorio expuestas, detalladas a lo largo de todo el Plan General de Ordenación, se puede estimar que las Alternativas expuesta conllevan el siguiente nivel de compatibilidad ambiental:

a) Con respecto a los Objetivos ambientales básicos que debe cumplir las diferentes alternativas expuestas por el PGO.

Alternativa 0

Alternativa 1

Alternativa 2

OBJETIVOS AMBIENTALES BÁSICOS

Baja

compatibilidad

Moderada

compatibilidad

Alta

compatibilidad

Baja

compatibilidad

Moderada

compatibilidad

Alta

compatibilidad

Baja

compatibilidad

Moderada

compatibilidad

Alta

compatibilidad

Garantizar la protección y conservación de los valores ecológicos, paisajísticos, productivos y culturales del territorio

X X X

Procurar el mantenimiento en actividad de aquellos elementos y usos del suelo que han definido históricamente el paisaje, incidiendo en la protección de las áreas con mayor valor agrícola

X X X

Proteger y conservar el patrimonio cultural existente, tanto arqueológico como etnográfico

X X X

Evitar el incremento desmesurado de la dispersión edificatoria, limitando las nuevas al recinto urbano y regulando las que se realicen en suelo rústico

X X X

Corregir los desequilibrios de estructuración interna que contienen los tejidos urbanos existentes

X X X

Preservar el territorio de la alteración producida por la apertura indiscriminada de pistas y el vertido incontrolado de escombros, basuras o chatarras

X X X

b) Con respecto a la calidad ambiental y capacidad de las unidades ambientales del PGO.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 101

101

Una vez analizadas, todas las Alternativas Planteadas por el Plan General y descritas exhaustivamente en el apartado 5 de este informe, es preciso hacer las siguientes puntualizaciones: Todas las Alternativas descritas persiguen la ordenación sostenible, pero la realidad es que, cada una lo consigue en mayor o menor medida. La Alternativa 0 (Planeamiento Vigente) consigue la menor protección ambiental del municipio, del mismo modo que no recoge las nuevas demandas vinculadas con la consecución de la sostenibilidad ambiental, ni las que se derivan de la legislación sobrevenida. En este sentido, las restantes alternativas resultan más sostenibles y se encuentran adaptadas a la legislación vigente que le es de aplicación. La alternativa más agresiva con el territorio es la 0, al plantear un escenario dominado por el paradigma desarrollista, justamente cuestionado en la actualidad. Las alternativas 1 y 2 poseen un carácter más integrador, al tratar de plantear la coexistencia de los usos humanos con la preservación del patrimonio natural, paisajístico e histórico, con objeto de realzar la singularidad y el atractivo del territorio municipal.

5.4 Examen y análisis de las diferentes alternativas contempladas

Las alternativas planteadas parten de un modelo territorial que se ha ido configurando con el transcurso de los años, evolucionando desde un modelo ligado a la agricultura y la ganadería a un modelo basado en las expectativas creadas por el desarrollo del Puerto de las Nieves y a un incipiente desarrollo turístico y terciario en el municipio desde la segunda mitad del siglo XX. Por tanto, el modelo territorial existente es, principalmente, el resultado de las características físicas del territorio y de la transición desde un modelo económico agrario hacia la diversificación económica, lo que, si bien supone un gran desarrollo y riqueza para el municipio, tiene el coste de un elevado consumo de suelo en un corto espacio de tiempo, quedando poco suelo disponible para desarrollos futuros a largo plazo en el municipio. La reflexión y las conclusiones sobre el modelo de desarrollo turístico que desde el último cuarto del siglo XIX ha dirigido el crecimiento de los núcleos urbanos, nos lleva a plantear la necesidad de reconducir el fenómeno de colonización del suelo, reconociendo los valores ambientales y paisajísticos que tiene el territorio del municipio, pero incorporando también una estrategia capaz de garantizar la adecuada proporción con los sistemas de espacios públicos y dotaciones y de los equipamientos complementarios de incidencia estructurante, así como la necesaria, aunque compleja, convivencia del uso residencial en los entornos turísticos que provienen del planeamiento que se revisa. A la hora de plantear las distintas alternativas hay que tener en consideración que el municipio de Agaete cuenta con una extensión de aproximadamente 44,50 km

2, encontrándose dos tercios de su

superficie, aproximadamente, dentro del Parque Natural de Tamadaba. Este hecho, junto con las limitaciones impuestas por una orografía abrupta y con elevadas pendientes, son factores limitantes para albergar usos agrarios, urbanos, etc, en buena parte del espacio municipal. Además, muchas de las variables ambientales, (sobre todo el paisaje y el patrimonio cultural), se definen con alto valores ambientales fuera del espacio natural protegido, demandando una protección adecuada a sus valores. Además de la aprobación del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural, las determinaciones y recomendaciones devenidas del TRLOTC y las Directrices de Ordenación del Territorio, la necesidad de concordar las diferentes categorías de suelo rústico con la zonificación establecida por el PIOGC., así como también la necesaria observancia de las Leyes de Costas, de Patrimonio de Canarias, de Aguas, etc., junto a las determinaciones del modelo vigente que devienen, en algunos casos, de las primeras normas subsidiarias municipales y planes especiales aprobados con anterioridad a las mismas, dejan poco margen a la hora de plantear alternativas reales al modelo de ordenación municipal, en el que en definitiva, la estructura territorial viene prefijada por las siguientes circunstancias:

- La necesidad de protección de los valores naturales presentes en el municipio.

- La necesaria preservación del abundante patrimonio histórico, artístico y cultural.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 102

102

- La consideración de los derechos adquiridos en los suelos urbanos y urbanizables con anterioridad incluso al Plan General vigente, si bien el incumplimiento de los deberes urbanísticos en algunos de ellos permite proponer alternativas y reconsiderar los crecimientos previstos.

- Las propuestas de sistemas generales condicionan la posible planificación que se pueda hacer del municipio, llevando aparejado un crecimiento urbanístico que se justifica por razones de la necesidad de evolución social, económica y cultural del municipio. Así, sistemas generales como el de la Ampliación del Puerto de Las Nieves, o el eje viario Las Palmas de Gran Canaria.

- La Aldea, ejecutado parcialmente hasta el Puerto de Las Nieves (con proyecto aprobado definitivamente, por resolución de la COTMAC, el 2 de abril del 2003 en el tramo hasta La Aldea), o la distribución poblacional histórica básicamente asentada en el Casco de Agaete y el Puerto de Las Nieves, son factores que condicionan el modelo.

La estructura territorial del municipio viene también determinada por el cumplimiento de los objetivos planteados, destacando entre otros:

- Aquilatar y acompasar los ritmos de crecimiento de los usos residencial y turístico al marco actual, de manera que funcionen como motores de la economía municipal y sirvan para paliar el éxodo de la población hacia otros municipios en busca de trabajo.

- Fomentar el uso industrial que sirva de apoyo a la actividad portuaria, siendo necesaria la implantación de un ámbito que, en su faceta logística a favor del tráfico marítimo con Tenerife, permita el incipiente desarrollo de este sector en el municipio y mejore la economía local al amparo de la actividad portuaria.

- Conservar los recursos agrícolas y fomentar de la puesta en cultivo de áreas abandonadas como método que evite la pérdida de recursos edáficos y de sostenimiento del paisaje agrario.

- Conservar los recursos hídricos y sus infraestructuras por su papel de apoyo a los usos agrícolas que se busca potenciar, y su importancia en la conservación de especies, y en particular, de la avifauna.

- Proteger el medio natural y el paisaje, así como la riqueza del patrimonio cultural municipal.

El documento de Avance del presente PGO de Agaete es un proceso abierto que establece tres modelos o alternativas de ordenación para que, a través de la participación ciudadana y las sugerencias que surjan del trámite de exposición pública del Avance, se defina con posterioridad un modelo de ordenación consensuado que tome en consideración las aportaciones realizadas por los ciudadanos y las administraciones. Las alternativas planteadas, tal y como se acaba de exponer, no suponen, en sí mismas, un cambio del modelo territorial existente, si bien introducen correcciones y ajustes necesarios desde la óptica y perspectiva actual, buscando el equilibrio entre el necesario crecimiento económico y la protección de los valores naturales y paisajísticos que son el principal recurso del municipio.

5.4.1 Alternativa 0

La Alternativa 0 reproduce el modelo territorial y las determinaciones de la ordenación estructural del planeamiento municipal vigente en el momento de la redacción del presente plan. La consideración de esta alternativa obedece al cumplimiento de la Ley 21/2013, de 9 de diciembre, de evaluación ambiental, así como la reciente ley autonómica (Ley 14/2014, de 26 de diciembre, de Armonización y Simplificación en materia de Protección del Territorio y de los Recursos Naturales), que obliga a una evaluación ambiental que tenga en cuenta, entre otros, los objetivos de la planificación y el alcance y

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 103

103

contenido del plan o programa propuesto y de sus alternativas razonables, técnica y ambientalmente viables. Desde el momento de su aprobación, la Adaptación Básica del PGO de Agaete en el año 2003, únicamente se ha desarrollado uno de sus suelos urbanizables (El SUS-1 Las Candelarias) y parte de algunas de las unidades de Actuación delimitadas en suelo urbano no consolidado (AUA-11 y AUA-15). El sector de Las Candelarias, tras la revisión parcial del Plan General de Ordenación de Agaete aprobado definitivamente en 2013, ha quedado clasificado como suelo urbano consolidado. La Alternativa 0 se corresponde, pues, con el modelo propuesto por el planeamiento actualmente vigente, sin adaptar plenamente a la legislación sobrevenida ni al planeamiento territorial parcial aprobado con posterioridad a su aprobación, aunque recoge las grandes infraestructuras propuestas (Ampliación del Puerto de Las Nieves y nueva carretera de Agaete a La Aldea) por ser proyectos aprobados. El Sistema Urbano El sistema urbano propuesto por la Alternativa 0 está formado por tres tipos de núcleos:

Núcleos III: Es la cabecera municipal (casco antiguo de Agaete y sus barrios tradicionales) y la gran conurbación urbana conformada por sus desarrollos recientes (barrios de El Turmán, La Palmita, Las Candelarias) y futuros (Llanos del Turmán y Las Moriscas al noroeste y Las Nieves al oeste). Los desarrollos previstos suponen la unión del núcleo de Agaete con el de Puerto de Las Nieves, conformando una gran cabecera urbana en contacto con la costa. Este núcleo busca adquirir mayor relevancia territorial insular y en la comarca norte, reforzado su papel tanto por la presencia del Puerto de Interés General de Canarias, como por la apuesta de diversificación y complejidad funcional y de usos. Núcleos IV: San Pedro y Vecindad de Enfrente. Son núcleos tradicionales de carácter rural separados actualmente por el Barranco de Agaete, pero muy próximos, y que comparten dotaciones y servicios. Los crecimientos urbanos previstos en esta alternativa, una vez ejecutados, acabarán por conformar un único núcleo con dos barrios diferenciados. Núcleos sin servicios: lo conforman el barrio o urbanización aislada de La Suerte, en la zona central del Valle de Agaete y próxima a San Pedro, y el pequeño núcleo de El Hornillo, al final del camino del valle que conduce a las Presas de Los Pérez.

La Alternativa 0, además de los suelos residenciales, contempla un suelo urbanizable de uso industrial (Las Moriscas-Industrial) y dos suelos de uso turístico (el Polígono 1- Las Nieves Costa del Plan Parcial de Puerto de Las Nieves, junto a la costa, y Las Moriscas Turístico). Las determinaciones turísticas de este último se encuentran suspendidas por acuerdo de la COTMAC de 5 de noviembre de 2003. A continuación se presenta un cuadro con los suelos urbanos y urbanizables de la Alternativa 0, que, en algunos casos, presentan pequeñas diferencias de superficie con la Adaptación Básica debido a los necesarios ajustes derivados del empleo de una cartografía digital actualizada y más precisa. Sistema Rural El sistema rural lo conforma la parte del territorio constituida por los espacios excluidos del proceso de urbanización y que tienen un valor por razones ambientales y económicas. Es decir, el sistema rural está conformado por los suelos ambientales, los de uso primario y los asentamientos de población en medio rural. A diferencia de la Adaptación Básica del año 2003, esta alternativa no incluye dentro de su ámbito de ordenación el suelo del Parque Natural de Tamadaba, que cuenta con instrumento de ordenación vigente. Por tanto, la Alternativa 0 queda circunscrita a la parte del territorio municipal que queda fuera de la delimitación de dicho Espacio Natural Protegido. Este ámbito coincide con la cuenca del Valle de Agaete y la meseta al norte de la misma, es decir, lo terrenos situados entre el Parque Natural de Tamadaba y el límite municipal con el municipio de Gáldar.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 104

104

En la Alternativa 0 el suelo con uso global ambiental está definido por el Suelo Rustico de Protección Natural, el Suelo Rústico de Protección Paisajística, el Suelo Rústico de Protección Cultural y el Suelo Rústico de Protección Costera. El Suelo Rustico de Protección Natural (SRPN) en esta alternativa se encuentra en contacto con el Parque Natural de Tamadaba, y configuran tres pequeñas áreas de suelo aisladas. Su delimitación responde a diferencias cartográficas con el borde del ENP delimitado en la Adaptación Básica de 2003 y categorizado por el mismo como SRPN. Con la delimitación cartográfica actualizada del mismo, parte de este suelo queda fuera del ámbito de ordenación del espacio natural, pero se ha mantenido su clasificación y categorización. Al margen del Parque Natural de Tamadaba, en la Adaptación Básica de 2003 no existían otros suelos clasificados como SRPN. El Suelo Rústico de Protección Paisajística (SRPP) de la Adaptación Básica coincide con los suelos que se consideraba deben ser protegidos por constituir elementos caracterizadores o definidores del paisaje, correspondiendo esta categorización a los distintos morros, roques y laderas que descienden del Macizo de Tamadaba y de los altos de Fagagesto, así como los cauces de barrancos, por determinar un paisaje característico y único de gran valor. Agaete es un municipio de gran riqueza patrimonial cultural, como demuestra el continuo hallazgo de yacimientos y restos arqueológicos. Para la protección del patrimonio cultural en suelo rústico el Plan General de 2003 asigna la categoría de Suelo Rústico de Protección Cultural (SRPCu) a las zonas donde se determinaba existían vestigios y restos históricos de valor etnográfico o cultural, teniendo en cuenta las áreas delimitadas por la carta arqueológica existente realizada entre los años 1988 y 1995 por el desaparecido Servicio de Arqueología del Museo Canario siendo la principal zona delimitada como SRPCu la que corresponde al Yacimiento Arqueológico del Maipez de Arriba, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Zona Arqueológica en 1973 y cuyos trabajos de restauración y musealización del yacimiento por parte del Cabildo finalizaron en el año 2013, siendo su delimitación más amplia que la que actualmente se identifica con el proyecto museístico ejecutado y vallado, no existiendo información cartográfica precisa con la delimitación del BIC por parte del Cabildo de Gran Canaria. Por otro lado, en los planos de la Adaptación Básica el Suelo Rústico de Protección Costera no se encuentra delimitado gráficamente, si bien se consideraba en su normativa como una categoría superpuesta a otras categorías de suelo rústico. No obstante, en la Alternativa 0 del presente plan general se procede a recoger su delimitación, que alcanza hasta la línea de los 100 m de servidumbre de protección en suelo rústico, manteniendo su carácter de categoría de suelo superpuesta a las demás categorías de suelo rústico existentes en el ámbito litoral. Respecto al suelo con uso primario, en esta Alternativa 0, únicamente encontramos la categoría de Suelo Rústico de Protección Agraria, no existiendo otras categorías vinculadas al uso primario del suelo. La alternativa 0 clasifica como Suelo Rústico de Protección Agraria (SRPA) los suelos clasificados como tales por el Plan General de 2003, definidos como los suelos cuya finalidad principal es la protección de la actividad agrícola y los paisajes agrícolas tradicionales y aquellos en que la actividad agrícola coexista con valores ambientales y patrimoniales de interés, concentrándose en dos áreas principales que coinciden con la vega del Valle de Agaete y Los Llanos de Agaete, aunque existen también otras áreas dispersas de menor dimensión en la cabecera del valle (El Sao, El Hornillo, Las Hoyillas, etc.). Además, la Alternativa 0 presenta un único asentamiento de población en medio rural, Piletas, ubicado en la zona de Los Llanos de Agaete, clasificado como Suelo Rústico de Asentamiento Rural (SRAR), conforme al Plan Insular y al Plan General de Ordenación del año 2003. En cuanto al suelo con uso global infraestructuras en la Alternativa 0 se corresponde con el Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos, así como a los principales sistemas generales de infraestructura viaria y portuaria que se encuentren en suelo clasificado como suelo urbano.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 105

105

En la Adaptación Básica del año 2003, el Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos (SRPIE) quedaba definido en normativa como aquel que incluye las zonas de protección y reserva que garantizan la funcionalidad de las distintas infraestructuras (viarias, de telecomunicaciones, energéticas, hidrológicas, de abastecimiento, saneamiento u otras), pudiendo superponerse a otras categorías de suelo rústico. En los planos de clasificación y categorización el Plan General de Ordenación de 2003 actualmente vigente únicamente se grafía como SRPIE la parte del trazado de la GC-2 (el tramo que discurre desde el núcleo de Agaete hasta el límite con el municipio de Gáldar), no existiendo en este tramo superposición con el resto de categorías existentes. Para el resto del municipio, el SRPIE se superpone con otras categorías de suelo rústico, no recogiéndose la delimitación precisa de las infraestructuras existentes, ni siquiera las viarias. No obstante, en la normativa del PGO vigente se especifica que el régimen jurídico para las carreteras y sus zonas de protección en suelo rústico es el aplicable por la legislación sectorial que le corresponde, entendiendo en este sentido que le es de aplicación lo estipulado por la Ley de Carreteras de Canarias vigente. A relación a lo anterior, en la Alternativa 0 del presente Plan General de Ordenación Supletorio se ha optado por establecer dos subcategorías para el Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos, a efectos de recoger gráficamente y delimitar todas las carreteras de interés regional e insular y su servidumbre de protección que discurren por suelo rústico, diferenciando entre el Suelo Rustico de Infraestructuras y Equipamientos-1 (SRPIE-1) -que no es una categoría superpuesta y que corresponde al suelo que acompaña el trazado viario entre la Agaete y Gáldar de la GC-2, enmarcado por los suelos urbanizables existentes con su delimitación conforme al plan general actualmente vigente- y el Suelo Rustico de Infraestructuras y Equipamientos-2 (SRPIE-2) como categoría superpuesta a las demás categorías de suelo rústico para el resto de la red viaria. Cabe indicar que en la Alternativa 0 el suelo clasificado como SRPIE-1 no coincide plenamente con las líneas de servidumbre definidas gráficamente conforme a la legislación sectorial (Ley de Carreteras de Canarias) tomando de base el trazado de la vía existente, ya que en el momento de la redacción del Plan General de Ordenación del 2003 la carretera GC-2 se encontraba todavía en proyecto, siendo el trazado definitivo ligeramente diferente al que se sirvió de base para la clasificación de dicho suelo. Sistema de Infraestructuras y Servicios El sistema de Infraestructuras y Servicios lo conforman a nivel de ordenación estructural, los Sistemas Generales y Equipamientos municipales de carácter estructurante, y a nivel de ordenación pormenorizada, la totalidad de sistemas generales, dotaciones y equipamientos. Es por ello que en esta fase nos centramos en reflejar únicamente aquellos que por su uso o dimensiones puede considerarse que son estructurantes del territorio, ya sea a nivel insular, supramunicipal o municipal. Por tanto, de la totalidad de los Sistemas Generales y Equipamientos Generales propuestos por el Plan General de Ordenación de 2003 (Adaptación Básica), la Alternativa 0 recoge como estructurantes los siguientes:

- S.G Espacio Libre del Yacimiento del Maipez.

- S.G Recreativo Las Salinas.

- S.G Espacio Libre Barranco de Agaete.

- S.G Funerario Ampliación del Cementerio de Agaete.

- S.G Espacio Libre en el Barranco del Tío Vicente I.

- S.G Comunitario en Barranco del Tío Vicente II.

- S.G Espacio Libre Las Candelarias.

- S.G Cultural Las Candelarias.

- S.G Viario.

- S.G Portuario Puerto de Las Nieves.

- E.E Recreativo La Palmita.

- E.E Espacio Libre y Parque de Ocio Barranco del Juncal.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 106

106

Cabe señalar que la práctica totalidad de los sistemas generales propuestos, a excepción del SG viario y del SG Portuario son sistemas generales adscritos a sectores de suelo urbanizable, tal y como se expone en la Memoria de Información del presente documento.

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 0

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

URBANO CONSOLIDADO SUC 871.749

NO CONSOLIDADO SUNC 206.312

TOTAL SUELO URBANO 1.078.061

URBANIZABLE SECTORIZADO SUS 992.460

NO SECTORIZADO SUNS 200.000

TOTAL SUELO URBANIZABLE 1.192.461

RÚSTICO

PROTECCIÓN NATURAL SRPN 14.288

PROTECCIÓN PAISAJÍSTICA SRPP 9.623.974

PROTECCIÓN CULTURAL SRPCu 605.925

PROTECCIÓN COSTERA* SRPC 323.322

PROTECCIÓN AGRARIA SRPA 3.813.043

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS-1

SRPIE-1 104.313

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS-2*

SRPIE-2 196.239

ASENTAMIENTO RURAL SRAR 7.153

TOTAL SUELO RÚSTICO 14.168.696

TOTAL SUELO ORDENADO ALTERNATIVA 0 16.439.218

TOTAL SUELO EN E.N.P. (PARQUE NATURAL DE TAMADABA) 28.082.153

TOTAL SUELO MUNICIPIO 44.521.371

*La superficie del SRPC y del SRPIE-2 no se han tenido en cuenta en la sumatoria total por tratarse de categorías de suelo superpuestas.

5.4.2 Alternativa 1

El modelo territorial propuesto por la Alternativa 1 presenta ciertas variantes o modificaciones con respecto al modelo territorial del Plan General de Ordenación vigente y a la Alternativa 0 derivadas, principalmente, de la adaptación al planeamiento territorial de orden superior con determinaciones vinculantes y en particular las impuestas desde el PIOGC, pero también a la numerosa legislación sobrevenida desde la aprobación de Adaptación Básica del Plan General de Ordenación de Agaete. Del estudio y diagnóstico ambiental realizado se derivan parámetros y criterios importantes a la hora de la concreción de las alternativas para las diferentes categorías de suelo y por tanto, de los modelos de ordenación que se proponen como alternativa al modelo vigente. La Alternativa 1 tiene como punto de partida la actualización el planeamiento municipal conforme a las características actuales y a las perspectivas de futuro del territorio, con la finalidad de establecer una distribución de usos en el espacio, y en particular, una clasificación urbanística del suelo compatible con las condiciones naturales y capacidad de acogida del medio, y al mismo tiempo coherente con las condiciones y dinámicas territoriales previamente establecidas desde las Normas Subsidiarias en materia de desarrollo socioeconómico. En lo referente a las determinaciones de aplicación al Plan General de Ordenación de Agaete que derivan de la zonificación, régimen de usos y categorización que establece el PIOGC, con carácter general la Alternativa 1 plantea una clasificación y categorización del suelo compatible con el planeamiento territorial en función de sus características, valores y capacidad de uso.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 107

107

Sistema urbano El sistema urbano propuesto por la Alternativa 1, al igual que la alternativa anterior está formado por el suelo urbano y los suelos urbanizables, y sus principales usos globales. El sistema urbano propuesto, al igual que la Alternativa 0, establece únicamente tres tipos de núcleos:

Núcleo III: Lo conforma la cabecera municipal (casco antiguo de Agaete y sus barrios tradicionales) y la gran conurbación urbana conformada por sus barrios de El Turmán, La Palmita, Las Candelarias) y los desarrollos previstos hacia el noreste (Llanos del Turmán y Las Moriscas) y hacia el oeste (Las Nieves), quedando unidos el núcleo de Agaete con el de Puerto de Las Nieves y formando una potente cabeza urbana frente al resto del valle y municipio, con diversidad de usos y mayor complejidad urbana y funcional. Núcleos IV: San Pedro y Vecindad de Enfrente. Son pueblos de carácter rural tradicionalmente vinculados a la agricultura y separados actualmente por el Barranco de Agaete, pero muy próximos, y que comparten dotaciones y servicios. Los crecimientos urbanos previstos en esta alternativa acaban por conformar un único núcleo con dos barrios diferenciados, aunque con bordes más definidos, y la mejora de dotaciones y equipamientos vinculados a los crecimientos previstos mediante la delimitación de unidades de actuación en Suelo urbano no consolidado como de la propuesta de los suelos urbanizables en los bordes de dichos núcleos. Núcleos sin servicios: La Suerte, en la zona central del valle y próximo a San Pedro. La propuesta para este núcleo consiste en mejorar su nivel de dotación y equipamiento, así como de la urbanización.

En cuanto a los usos globales de dichos suelos, en la Alternativa 1 encontramos suelo de uso global residencial, industrial y turístico. La Alternativa 1 mantiene el uso turístico en Las Moriscas, clasificando como Suelo Urbanizable No Sectorizado (SUNS) los terrenos situados junto la costa, con la misma delimitación de la Adaptación Básica, a la espera de que una vez se den las circunstancias socioeconómicas y territoriales pueda sectorizarse y desarrollarse. No obstante, debido a su muy alto valor para la conservación establecido en el diagnóstico ambiental, las condiciones de desarrollo de este sector deberán tener en cuenta su integración en el entorno y medidas correctoras específicas. Por otro lado la Alternativa 1 propone incrementar la superficie del suelo de uso industrial del SUS de Las Moriscas, tal y como se recoge en el Acuerdo de la COTMAC de 28 de Julio de 2005, relativo a la Aprobación Áreas Suspendidas de la Adaptación Básica del Plan General de Agaete en Las Moriscas (BOC nº 183 de 16 de septiembre de 2005), donde se recomendaba el estudio de la posible ampliación del suelo de uso industrial dado el interés estratégico que dicho uso tiene por la proximidad del Puerto de Las Nieves, minorando para ello la superficie prevista del sector suelo urbanizable de uso residencial contiguo. El desarrollo del sector industrial para este municipio se verá impulsado por la ampliación propuesta para el Puerto de las Nieves y la mejora de las comunicaciones con La Aldea, y es fundamental desde la óptica de creación de empleo y actividad de la zona. Las industrias previstas servirán de apoyo a la actividad portuaria (almacenamiento, manipulación y envasado de productos, entre otras), y permitirá disponer de suelo para las pequeñas y medianas empresas del municipio, ya que las pequeñas actividades industriales (panaderías industriales, talleres de vehículos, etc.) no tienen actualmente cabida dentro de los núcleos urbanos. La localización de esta zona industrial en Las Moriscas se debe a un intenso debate previo a la Adaptación Básica y se justifica en que, si bien esta zona no es contigua a la zona portuaria, permite una buena comunicación con la GC-2. No obstante, en fases posteriores de tramitación, deberá revisarse su ordenación y sus determinaciones a fin de proceder a su adecuación al entorno para que esta actuación se realice dentro de un marco de calidad paisajística y ambiental altos, tanto de la urbanización como de las edificaciones.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 108

108

Referente al suelo urbanizable de uso residencial, la Alternativa 1 mantiene con la misma clasificación, y categorización de suelo urbanizable sectorizado (SUS) los sectores de Llanos del Turmán, Ladera Norte y Cruz Chiquita, por ser estos suelos estratégicos para la consecución de determinados sistemas generales y del nuevo viario de borde de conexión de la GC-293 con el Valle de Agaete, aunque su delimitación sufre pequeños ajustes de borde. Por el contrario, el Sector de las Hoyitas (Geriátrico) se categoriza como suelo urbanizable no sectorizado (SUNS) ya que no es previsible su desarrollo en un corto espacio de tiempo y para adecuar las previsiones de crecimiento a las circunstancias socioeconómicas actuales. El sector de suelo urbanizable sectorizado de uso residencial de Las Moriscas, tal y como hemos expuesto, disminuye su superficie, para ampliar el uso industrial, por ser este estratégico para el desarrollo municipal e insular. Finalmente, para el Suelo urbanizable Sectorizado que deviene del antiguo Plan Parcial de las Nieves se propone su cambio a uso exclusivamente residencial para consolidar el Núcleo de Puerto de Las Nieves como núcleo residencial (el uso turístico existente se mantiene como compatible y es autorizable en la modalidad de hotel de ciudad), y se divide en tres sectores que respondan a las necesidades y características de este suelo y, a su vez, faciliten la gestión del suelo y su urbanización y puesta en carga progresiva. El suelo urbano en la Alternativa 1 es prácticamente el mismo que el establecido por el Plan General actualmente vigente, aunque con los lógicos ajustes de borde a la realidad y a la cartografía existente. Se incorpora como suelo urbano consolidado (SUC) algunas unidades de actuación aisladas, bien por haberse desarrollado (al menos en parte) bien porque su escasa entidad y dificultades para su gestión recomiendan su replanteamiento (AUA-7 Calle Belén). Por otro lado se clasifica y categoriza como suelo urbano no consolidado (SUNC) el frente marítimo del antiguo Plan Parcial de Las Nieves por ser un suelo transformado que cumple con lo dispuesto en el art.50 del TRLOTC, y que cuenta, además de varias viviendas y parcelaciones anteriores al Plan Parcial de las Nieves, con una gran división de la propiedad y dificultad para integrarse en un proceso urbanizador. Por otro lado, entre el borde del suelo urbano actualmente delimitado y el sector de suelo urbanizable de Ladera Norte, se propone una nueva unidad de actuación en junto a las viviendas de la calle Señorita María Manrique de Lara para culminar la urbanización de este suelo no consolidado y obtener dotaciones en un área de gran densidad. También se propone como SUNC la parte de suelo correspondiente al SG-EL adscrito antiguo sector de Las Candelarias, ya que dicho espacio libre no se ha ejecutado y las características del suelo no aconsejan su clasificación como suelo urbano consolidado por no contar con lo dispuesto en el art.50 del TRLOTC. Por último, se incluyen cambios en la delimitación de los bordes de los núcleos de San Pedro y Vecindad de Enfrente conforme a un estudio detallado de la realidad existente conforme al TRLOTC, buscando con ello definir mejor el borde urbano y contener el crecimiento en las áreas de transición con el suelo rústico, eliminando el suelo urbano no consolidado aislado y sin desarrollar en San Pedro, al sur del barranquillo de Bracamonte, por ser su uso realmente agrario, no cumplir con las condiciones del Art.50 del TRLOTC y existir suelo urbanizable suficiente y más apto para acoger el previsible crecimiento del núcleo. Los suelos urbanizables en estos dos núcleos tienen como objetivo albergar el futuro crecimiento de la población local y conseguir dotaciones y equipamientos que eleven el nivel de servicios y mejoren la calidad de vida de sus habitantes. Sistema Rural En general, el tratamiento dado por esta alternativa al Suelo Rústico deriva del hecho sobrevenido de la aprobación definitiva del PIOGC después de entrar en vigor la Adaptación Básica. Ello conlleva que, en general, las categorías asignadas a las distintas unidades ambientales lo han sido siguiendo las directrices de la zonificación del instrumento insular, sin que ello comporte cambio de modelo, por cuanto dicha zonificación recoge, en rasgos generales, la realidad preexistente del municipio. La principal diferencia en el modelo propuesto por la Alternativa 1 es la identificación y diferenciación, dentro de los suelos de uso global ambiental, de suelos con diversas categorías: Suelo Rústico de Protección Paisajística, Suelo Rústico de Protección de Entornos, Suelo Rústico de Protección Cultural, Suelo Rústico de Protección Costera y Suelo Rústico de Protección Hidrológica. Las modificaciones de categorización de los suelos rústicos se justifican en un mejor ajuste a la realidad, a las necesidades actuales del territorio y al cumplimiento con la legislación vigente.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 109

109

- El Suelo Rústico de Protección Paisajística (SRPP) de la Adaptación Básica se asigna a los suelos que deben ser protegidos para la conservación del valor paisajístico, natural o antropizado, y de las características fisiográficas de los terrenos, en especial aquellos que constituyen elementos caracterizadores o definidores del paisaje, como son los morros, laderas y picos que enmarcan el Valle de Agaete y constituyen un paisaje característico.

- El Suelo Rústico de Protección de Entornos (SRPEN) se asigna a determinados suelos para la

preservación de determinadas perspectivas y procesos ecológicos, como son el entorno de la Fortaleza, La Palmita y zona entre el Yacimiento de Maipez de Arriba y la GC-231. Esta categoría permite proteger y adecuar estos espacios como áreas de transición con el resto del suelo rústico de protección ambiental, pudiendo soportar pequeñas actuaciones tendentes a convertirlos en espacios abiertos y de ocio para la población residente y visitante del municipio.

- El Suelo Rústico de Protección Cultural (SRPCu) se establece para la preservación de

yacimientos arqueológicos y de edificios, conjuntos o infraestructuras de valor histórico, artístico o etnográfico y de su entorno inmediato, y recoge la totalidad de las zonas arqueológicas delimitadas conforme a la actualización de la Carta Arqueológica realizada entre los años 2004 y 2005 por la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico del Cabildo de Gran Canaria.

- En la Alternativa 1, el suelo Rústico de Protección Costera (SRPC) para la ordenación del dominio público marítimo terrestre y de las servidumbres de tránsito y protección se superpone sobre las demás categorías de suelo rústico propuestas y se establece hasta la línea de los 100 m de servidumbre de protección, conforme al deslinde actualizado de costas. En los suelos urbanos y urbanizables, el SRPC se establece solo hasta la línea de dominio público marítimo-terrestre.

- La categoría de Suelo Rústico de Protección Hidrológica (SRPH) se establece para la

protección de las cuencas los principales barrancos, tomando como base para su delimitación las unidades ambientales, ya que no se dispone de deslinde de los mismos. El SRPH está configurado por el cauce del Barranco de Agaete y sus principales barrancos tributarios (Barranco de Tierra Bermeja, Barranco de María, Barranco de la Culata y Barranco de Los Ríos), así como la parte del cauce del Barranco Hondo y del Barranco del Juncal que queda dentro del límite municipal. El SRPH se ha englobado dentro del uso ambiental y no del uso primario en atención a sus valores paisajísticos que priman sobre los valores económicos.

- Respecto al suelo de uso primario, en esta Alternativa está conformado por el Suelo Rústico de

Protección Agraria para la protección del potencial agrícola y ganadero y los asentamientos de población rural vinculados a dicha actividad.

- La alternativa 1 clasifica como Suelo Rústico de Protección Agraria (SRPA) los suelos que

albergan o son susceptibles de albergar actividad agrícola, y en especial los paisajes agrícolas tradicionales, concentrándose en dos áreas principales que coinciden con la vega del Valle de Agaete y Los Llanos, aunque existen también otras áreas dispersas de menor dimensión en zonas tradicionales del alto del valle. Estas zonas coinciden mayormente con las de la Alternativa 0, aunque con ajustes en su delimitación que responden, tanto a la actualización de los suelos agrarios como a una mayor precisión y ajuste de la cartografía empleada, tomando como base las unidades ambientales delimitadas en el diagnóstico ambiental.

- El modelo del sistema rural de la Alternativa 1 incorpora, además de los usos ambientales y

primarios, nuevos asentamientos poblacionales en suelo rústico, identificando los asentamientos rurales y agrícolas existentes en el municipio, lo que conlleva para sus habitantes una serie de derechos y obligaciones mucho más concretas y específicas que a los que se encuentran sujetos actualmente. Por tanto, esta alternativa presenta calificaciones de asentamientos rurales con unos límites diferentes a la zonificación del PIOGC. Esto se justifica porque el presente documento, al realizarse en una escala más pormenorizada, tiene una mayor precisión, concretando con mayor exactitud lo que se refiere a delimitaciones o categorizaciones. La clasificación y delimitación de los asentamientos poblacionales parte del

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 110

110

análisis y diagnóstico realizados, así como del cumplimiento de los criterios establecidos en el marco jurídico de aplicación, atendiendo a los criterios para su identificación y tratamiento previstos en el PIOGC, si bien este no se encuentra adaptado al TRLOTC.

- En esta alternativa se proponen tres asentamientos de población en medio rural: Piletas y el

Hornillo -cuya clasificación se corresponde con la de Suelo Rústico de Asentamiento Rural (SRAR)- y Las Longueras, que se corresponde a la de Suelo Rústico de Asentamiento Agrícola (SRAA).

- Cabe destacar en el núcleo de El Hornillo se propone su reclasificación como SRAR ya que sus

características son más propias de un asentamiento rural que de un suelo urbano, tanto por sus pequeñas dimensiones y número de viviendas como por su relación con su entorno y medio rural, lo que permite plantear alternativas a su clasificación y categorización, así como a su delimitación, que se ha realizado incorporando las casas-cuevas de origen prehispánicas existentes en el entorno, siendo este un enclave tradicional que conviene recuperar y poner en valor para turismo rural.

- El Asentamiento Rural de Piletas se ha redelimitado conforme a la realidad existente, aplicando

los criterios del PIOGC, e incorporando algunas viviendas nuevas.

- Además, tras el análisis territorial, se ha identificado un asentamiento agrícola en la zona de Las Longueras, con una delimitación que incorpora todas las parcelas agrarias con vivienda asociada y que se encuentran enlazadas por una red de caminos. El uso residencial no es el principal del entorno y está vinculado al ejercicio efectivo de actividades agropecuarias o compatibles con las características productivas o naturales del suelo rústico

En lo referente al suelo de uso global infraestructuras en esta alternativa se diferencian dos sub-categorías para el Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos: el Suelo Rustico de Infraestructuras y Equipamientos-1 (SRPIE-1) se corresponde con las infraestructuras viarias en suelo rústico y las zonas de protección y de reserva que garanticen la funcionalidad de las infraestructuras viarias. Su delimitación se corresponde con las servidumbres de protección y dominio del espacio libre público que marca las correspondientes leyes y reglamentos. En cuanto al segundo tipo, que denominaremos (SRPIE-2), se establece para garantizar la funcionalidad del resto de infraestructuras (telecomunicaciones, energéticas, de abastecimiento, saneamiento y otras análogas) y para la implantación de equipamientos y dotaciones en suelo rústico. Esta diferenciación se corresponderá también con el diferente régimen jurídico que le será de aplicación en el desarrollo de la normativa. Sistema de Infraestructuras y Servicios Como ya hemos visto, el Sistema de Infraestructuras y Servicios lo conforman a nivel de ordenación estructural, los Sistemas Generales y Equipamientos municipales de carácter estructurante, es decir, aquellos que por su uso o dimensiones se consideran que son estructurantes del territorio. En su mayoría coinciden con los de la Alternativa 0, aunque algunos de ellos se ven afectados en su superficie por ajustes debidos a las infraestructuras viarias existentes o previstas.

- S.G Espacio Libre del Yacimiento del Maipez.

- S.G Recreativo Las Salinas.

- S.G Espacio Libre Barranco de Agaete.

- S.G Funerario Ampliación del Cementerio de Agaete.

- S.G Espacio Libre en el Barranco del Tío Vicente I (a y b).

- S.G Comunitario en Barranco del Tío Vicente II.

- S.G Espacio Libre Las Candelarias.

- S.G Cultural Las Candelarias.

- S.G Viario.

- S.G Portuario Puerto de Las Nieves.

- E.E Recreativo La Palmita.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 111

111

- E.E Recreativo Los Berrazales.

- E.E Recreativo Parque de Ocio Barranco de El Juncal. La Alternativa 1 propone recoger como Equipamiento Estructurante recreativo Los Berrazales. La clasificación propuesta es la de Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos-2 (SRPIE-2) y engloba la antigua embotelladora de Agua de Agaete, el Hotel Guayarmina y sus dependencias anexas, (aparcamiento, piscina, etc.). La finalidad de esta clasificación no es otra que permitir una remodelación y puesta en valor del conjunto mediante la figura de un Equipamiento Estructurante, de tal forma que se propicie la recuperación del este edificio histórico y del uso del hotel y balneario para su puesta en valor con un carácter similar a la de un Hotel Rural u otra figura que permita el uso alojativo, lo que sin duda tendrá una repercusión positiva muy significativa a escala municipal, principalmente en lo que se refiere al ámbito social y económico. Los límites del SRPIE-2 se han concretado en la envolvente de las edificaciones existentes, evitando afectar a espacios no alterados o áreas ambientalmente significativas de este entorno.

La Alternativa 1 recoge también como propuesta la mejora de la red de comunicaciones dentro del núcleo urbano, clasificando el suelo que permita dos nuevos trazados de la red: un nuevo enlace por el norte del casco de Agaete de la carretera GC-293 con la carretera municipal que conecte con la GC-231 a la altura del campo de fútbol, y la nueva vía de acceso a Agaete por el sur desde la GC-200, una vez ejecutada la nueva carretera a La Aldea. Estas propuestas son de gran importancia, ya que repercute positivamente en la movilidad municipal, buscando paliar los problemas del tráfico en el casco antiguo de Agaete que supone el tránsito por vías de pequeñas dimensiones. Con este objetivo, desde el Estudio de Movilidad Urbana se plantea revisar y definir el sistema general viario y sus enlaces con el Puerto de las Nieves y el Valle de Agaete, incluyendo el trazado posible de su conexión periférica al casco histórico. En cuanto al Sistema General Viario, ante las dudas existentes sobre los terrenos efectivamente expropiados y de los que no se ha podido obtener información cartográfica precisa, se ha optado por grafiar las servidumbres recogidas en la normativa de la Ley de Carreteras, con excepción de los suelos urbanos, donde se ha adaptado a la cartografía disponible, sin perjuicio que de los informes preceptivos sectoriales se derive una mejor adecuación en fases posteriores.

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 1

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

URBANO CONSOLIDADO SUC 892.143

NO CONSOLIDADO SUNC 223.130

TOTAL SUELO URBANO 1.115.274

URBANIZABLE SECTORIZADO SUS 866.644

NO SECTORIZADO SUNS 266.936

TOTAL SUELO URBANIZABLE 1.133.580

RÚSTICO

PROTECCIÓN PAISAJÍSTICA SRPP 8.570.157

PROTECCIÓN CULTURAL SRPCu 1.587.921

PROTECCIÓN DE ENTORNOS SREN 350.691

PROTECCIÓN COSTERA* SRPC 325.479

PROTECCIÓN AGRARIA SRPA 2.818.735

PROTECCIÓN HIDROLÓGICA SRPH 360.206

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 1

SRPIE-1 310.910

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 2

SRPIE-2 53.808

ASENTAMIENTO RURAL SRAR 27.088

ASENTAMIENTO AGRÍCOLA SRAA 110.848

TOTAL SUELO RÚSTICO 14.190.364

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 112

112

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 1

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

TOTAL SUELO ORDENADO ALTERNATIVA 1 16.439.218

TOTAL SUELO EN E.N.P.-PARQUE NATURAL DE TAMADABA 28.082.153

TOTAL SUELO MUNICIPIO 44.521.371

*La superficie del SRPC no se ha tenido en cuenta en la sumatoria total por tratarse de una categoría de suelo superpuesta.

5.4.3 Alternativa 2

La Alternativa 2 plantea correcciones o ajustes al modelo vigente derivados de la actual coyuntura económica que, en buena medida, ha venido a ralentizar el proceso de transformación el suelo y obligan a reflexionar sobre un modelo expansivo de ocupación del territorio y sobre la necesidad de reconducir los procesos de urbanización, buscando un mayor equilibrio entre el sector primario y el terciario. Una década después de la Aprobación Definitiva del PGO de Agaete (Adaptación Básica) a excepción del sector de Las Candelarias, que ya forma parte del suelo urbano consolidado del municipio, el resto de sectores de suelo urbanizable siguen sin desarrollarse, en unos casos por situaciones sobrevenidas como consecuencia de la crisis económica, en otros por la falta de actividad o iniciativa de los propietarios o promotores, y en otros por las pequeñas dimensiones y excesivas cargas impuestas a las Unidades de Actuación en suelo urbano no consolidado. Todo ello nos sitúa en un marco que, al margen de la vorágine desarrollista que ha presidido el final de siglo pasado y comienzo de este, nos permite replantear los crecimientos propuestos por el planeamiento vigente y atemperarlos o diferirlos en el tiempo, de manera que el suelo urbanizable vaya poniéndose “en carga” y desarrollándose a medida que las perspectivas o circunstancias económicas mejoren y lo permitan, priorizando compactar el suelo urbano no consolidado existente y el desarrollo de aquellos suelos cuyos sistemas generales adscritos o papel en el desarrollo socioeconómico sean realmente prioritarios para el municipio. Sistema urbano El modelo territorial propuesto por la Alternativa 2 tiene como objetivo mantener la distinción entre Agaete y Puerto de Las Nieves como núcleos diferenciados y separados con su propia identidad e idiosincrasia. Por otro lado, en San Pedro y Vecindad de Enfrente, la propuesta se centra en compactar dichos núcleos y en contener los crecimientos en los bordes, a fin de obtener dos núcleos claramente diferenciados a nivel territorial y con sus límites claramente definidos, dando relevancia al Barranco de Agaete como elemento diferenciador y estructurante entre ambos. Por tanto, el modelo urbano de la Alternativa 2, a diferencia de las Alternativas 0 y 1, propone cuatro tipos de núcleos:

Núcleo IIIA: Agaete. Es la cabecera municipal y como tal alberga la mayoría de los servicios de ámbito municipal, entre los cuales destaca el uso administrativo, sanitario, docente, deportivo, religioso y funerario, contando además con algunos espacios libres más importantes (Parque Arqueológico del Maipez, Huerto de las Flores, etc.). Forman parte del Agaete los barrios de reciente crecimiento próximos o colindantes al mismo como El Turmán, La Palmita y Las Candelarias que, aunque separados topográficamente por los barrancos e infraestructuras existentes, funcionalmente deben entenderse parte del núcleo de Agaete. Núcleo IIIB: Puerto de Las Nieves. Núcleo urbano tradicional de origen marinero que cuenta con dotaciones y equipamientos locales y cuyo desarrollo está vinculado al Puerto de Las Nieves. Su carácter y atractivo turístico, y los servicios asociados, le caracterizan y diferencian del resto de núcleos del municipio. Su importancia en el modelo territorial insular y comarcal viene dada por el Puerto de Las Nieves, puerto de interés regional, lo que le confiere una relevancia territorial no sólo a nivel municipal sino también insular. Al ser el único núcleo

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 113

113

costero del municipio y contar con playa y piscinas naturales, tiene un papel destacado en el modelo, por su atractivo y sobre todo en lo referente a los usos ligados al ocio y restauración. Núcleos IV: Vecindad de Enfrente y Pan Pedro. Se mantienen como núcleos de interior de carácter local, con un papel de transición entre los núcleos urbanos más complejos y el mundo rural. La estrategia para ellos consiste en su colmatación, definiendo claramente sus bordes, y conteniendo su crecimiento hacia el exterior, mejorar su capacidad de servicios (sobre todo la dotación de espacios libres), y promover un cuidado crecimiento endógeno que permita el mantenimiento de población estable y las actividades agrarias en el entorno, fomentando en ellos el desarrollo actividades relacionadas con de turismo rural y con el Parque Natural de Tamadaba. Núcleos sin servicios: lo conforma el barrio o urbanización aislada de La Suerte, en la zona central del valle y próximo a San Pedro. La estrategia para este asentamiento consiste en culminar y mejorar el estado de su urbanización y obtener las dotaciones y espacios libres necesarios.

El sistema urbano de los núcleos lo conforman los distintos suelos urbanos y urbanizables, en sus distintas categorías definidas conforme al TRLOCT. En cuanto a los usos globales de dichos suelos, vemos que la Alternativa 2 reduce el suelo residencial, aumenta el industrial y mantiene el turístico. Con el fin de equilibrar el desarrollo municipal, esta alternativa apuesta por definir y potenciar territorialmente los dos núcleos principales que son Agaete y Puerto de Las Nieves. En el suelo de uso residencial por un lado se reclasifica parte de los terrenos sin urbanizar que separan ambos los núcleos de Agaete y Puerto de Las Nieves como Suelo Rústico de Protección Territorial (SRPT), con el fin de mantener ambos núcleos territorialmente separados, preservando el modelo existente, y por otro, se difieren algunos de los suelos urbanizables en el tiempo hasta que la actividad en el municipio y su desarrollo lo precisen. La reclasificación de suelo propuesta es posible debido a que los polígonos de uso parcialmente turístico Polígono 1 Las Nieves Costa y Polígono 2 las Nieves Casa Fuerte, del Plan Parcial Las Nieves aprobado definitivamente por la COTMAC el 6 de mayo de 1987, en aplicación de la Disposición Adicional Segunda de la Ley 6/2001 ha quedado extinguida su eficacia no habiendo, por otro lado, obligaciones que supongan derechos indemnizatorios. Parte de los terrenos que formaban parte del Polígono 1 pasan a recalificarse como Suelo Urbanizable No Sectorizado residencial, excluyendo las edificaciones preexistentes al Plan Parcial de Las Nieves y a la Ley de Costas, que se reclasifican como SUNC en atención a sus características. Por otro lado, el Polígono 2 pasa a reclasificarse como Suelo Rústico de Protección territorial, a excepción de los terrenos en el entorno de la Casa Fuerte que se clasifica como Suelo Rústico de Protección Cultural. Las Alternativa 2 plantea también la recategorización de los Suelos Urbanizables Sectorizados (SUS) de uso residencial de Llanos del Turmán y Las Moriscas 5A que pasan a ser Suelo Urbanizable No Sectorizado (SUNS), puesto que existen suelos urbanizables en contigüidad con el núcleo de Agaete cuyo desarrollo se considera preferente. Por otro lado, se propone mantener la separación entre los núcleos de uso residencial de San Pedro y Vecindad de Enfrente cuyo crecimiento demográfico reciente y proyección poblacional no justifican la ocupación de tanto suelo urbanizable. Los nuevos suelos urbanizables son de menor dimensión y se sitúan contiguos a los existentes, contemplando las dotaciones y equipamientos necesarios pero sin adscribir a los mismos sistemas generales que hagan inviable o dificulten su gestión. Su ubicación libera parte de los terrenos más fértiles en el borde del Barranco de Agaete a su paso por estos núcleos, recuperando su carácter de elemento estructurante y definitorio del paisaje, y se promueve la contención edificatoria en un medio rural de gran valor. En el suelo de uso turístico, se mantiene la clasificación de SUNS para el sector turístico de Las Moriscas, con la misma delimitación y superficie propuesta en la Alternativa 0 y 1, a la espera de que se den las condiciones para que pueda desarrollarse.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 114

114

En cuanto al suelo de uso industrial, debido a su carácter estratégico vinculado a la actividad logística portuaria y a la necesidad de disponer de suelo en el municipio apara alojar las pequeñas y medianas industrias que no tienen cabida en los suelos urbanos, así como para industrias y servicios vinculadas al puerto, se propone mantener el suelo industrial de Las Moriscas como Suelo Urbanizable Sectorizado (SUS), lo que se justifica por ser el único suelo industrial en el municipio y contar con expectativas de desarrollo a corto–medio plazo. Su delimitación coincide con la de la Alternativa 1 para aumentar su cabida y responder a la recomendación de la COTMAC de ampliar de este suelo, tal y como se ha expuesto previamente. El suelo urbano en la Alternativa 2 se ajusta a la realidad y a la cartografía existente e incorpora cambios derivados de una aplicación más precisa del TRLOCT. En el Puerto de Las Nieves se delimita el Suelo Urbano No Consolidado (SUNC) junto a la costa, sobre edificaciones preexistentes al Plan Parcial de Las Nieves y a la Ley de Costas, que al igual que en la Alternativa 1 estará sujeto a una Unidad de Actuación para obtener las dotaciones y equipamientos necesarios y culminar la urbanización del ámbito y la recualificación del frente marítimo entre Las Salinas y el Puerto. Por otro lado, se modifica la delimitación de los núcleos de San Pedro y Vecindad de Enfrente, que, en atención al cumplimiento de los art.50 y 51 del TRLOCT, resulta más restrictiva que la vigente, que viene heredada de las Normas Subsidiarias y se basa en una interpretación más amplia y genérica del suelo urbano. En este sentido, algunos de los suelos aislados próximos a San Pedro pasan a tener, en consideración a sus características y su carácter de transición, la clasificación de Asentamiento Rural, como es el caso de Los Pasitos y Cuevecillas. Con ello se pretende definir mejor el suelo urbano y contener el crecimiento en las áreas de transición con el suelo rústico. Sistema Rural El sistema rural propuesto parte de diferencias en las categorías de protección a aplicar en la protección del suelo rústico. El suelo de uso global ambiental en la Alternativa 2 está conformado por el Suelo Rústico de Protección Natural, el Suelo Rústico de Protección Paisajística, el Suelo Rústico de Protección Cultural y el Suelo Rústico de Protección Costera.

- Se categoriza como Suelo Rústico de Protección Natural (SRPN) parte del Barranco de La Culata, ya que tras el estudio y diagnóstico ambiental se han detectado valores florísticos y faunísticos en el mismo que aconsejan un mayor grado de protección por conformar el testigo más paradigmático de lo que fueron los bosquetes y matorrales termófilos del municipio.

- El Suelo Rústico de Protección Paisajística (SRPP) de la Adaptación Básica se asigna a los

suelos que deben ser protegidos por constituir elementos caracterizadores o definidores del paisaje, como son los barrancos, morros, laderas y picos que enmarcan el Valle de Agaete y constituyen un paisaje característico.

- Se categoriza como suelo Rustico de Protección Cultural (SRPCu) únicamente aquellas zonas

de la Carta Arqueológica donde se ha constatado tras el estudio ambiental que existen restos de relevancia arqueológica que justifiquen su clasificación como tal.

- El suelo Rústico de Protección Costera (SRPC) se superpone a otras categorías de protección que se establecen por los valores en presencia del territorio y se alcanza hasta la línea de los 100 m de servidumbre de protección, conforme al deslinde actualizado de costas. En los suelos urbanos y urbanizables, el SRPC se establece solo hasta la línea de dominio público marítimo-terrestre.

Respecto al suelo de uso primario, en esta Alternativa está conformado por el Suelo Rústico de Protección Agraria para la protección del potencial agrícola y ganadero y los asentamientos de población rural vinculados a dicha actividad.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 115

115

- La Alternativa 1 clasifica como Suelo Rústico de Protección Agraria (SRPA) los suelos que albergan o son susceptibles de albergar actividad agrícola, y en especial los paisajes agrícolas tradicionales, concentrándose en dos áreas principales que coinciden con la vega del Valle de Agaete y Los Llanos, aunque existen también otras áreas dispersas de menor dimensión en zonas tradicionales del alto del valle. Estas zonas coinciden mayormente con las de la Alternativa 0, aunque con ajustes en su delimitación que responden, tanto a la actualización de los suelos agrarios como a una mayor precisión y ajuste de la cartografía empleada, tomando como base las unidades ambientales delimitadas en el diagnóstico ambiental.

- El modelo del sistema rural de la Alternativa 2 incorpora, además de los usos ambientales y

primarios, nuevos asentamientos poblacionales en suelo rústico. Las características de algunos suelos en el entorno de San Pedro propias de la transición entre un medio urbano y un medio rural permite plantear alternativas de clasificación y categorización, como ocurre con El Hornillo, Los Pasitos y Cuevecillas, todos ellos núcleos tradicionales ligados al uso agrícola en el Valle de Agaete, pero cuyas características son más propias de asentamientos rurales que de núcleos urbanos tal y como hoy en día se definen. Por otro lado, en base a los estudios realizados, se proponen tres nuevos asentamientos: Casas del Camino como Asentamiento Rural y Las Longueras y Troya como Asentamiento Agrícola.

- En la Alternativa 2 se proponen en total siete asentamientos de población en medio rural:

Piletas, el Hornillo, Los Pasitos, Cuevecillas y Casas del Camino que se clasifican como Suelo Rústico de Asentamiento Rural (SRAR) y Las Longueras y Troya, que se clasifican como Suelo Rústico de Asentamiento Agrícola (SRAA). Los asentamientos rurales se reconocen y delimitan conforme al TRLOTC, la Ley 14/2014 y el PIOGC.

Esta alternativa presenta calificaciones de asentamientos rurales con unos límites diferentes a la zonificación del PIOGC. Esto se justifica porque el presente documento, al realizarse en una escala más pormenorizada, tiene una mayor precisión, concretando con mayor exactitud lo que se refiere a delimitaciones o categorizaciones. La clasificación y delimitación de los asentamientos poblacionales parte del análisis y diagnóstico realizados, así como del cumplimiento de los criterios establecidos en el marco jurídico de aplicación, en especial, los criterios para su identificación y tratamiento previstos en el PIOGC. El asentamiento de Las Longueras presenta una alternativa de delimitación respecto a la Alternativa 1, ya que en esta delimitación se han excluido las parcelas agrarias cuya vivienda asociada está vinculada al turismo rural más que a la residencia. Finalmente, en la Alternativa 2 se define con uso provisional aquellos suelos clasificados como Suelo Rústico de Protección Territorial (SRPT) por su ausencia de valores naturales, estar localizados cerca de áreas urbanas y que interesa preservar del proceso de urbanización para preservar el modelo territorial propuesto en esta alternativa. Como ya se ha expuesto, se reclasifica a SRPT parte de los terrenos que formaban parte del Polígono 2 Las Nieves Casa Fuerte. Sistema de Infraestructuras y Servicios Los Sistemas Generales y Equipamientos generales propuestos por la Alternativa 2 son los siguientes:

- S.G Espacio Libre del Yacimiento del Maipez.

- S.G Recreativo Las Salinas.

- S.G Espacio Libre en el Barranco del Tío Vicente I.

- S.G Espacio Libre Las Candelarias.

- S.G Cultural Las Candelarias.

- S.G Viario.

- S.G Portuario Puerto de Las Nieves.

- E.E Recreativo La Palmita.

- E.E Recreativo Los Berrazales.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 116

116

Respecto a las alternativas anteriores, la reclasificación de algunos suelos urbanizables sectorizados a urbanizables no sectorizados conlleva en su caso la reconsideración de los sistemas generales adscritos a los mismos, por lo que en la Alternativa 2 únicamente se mantienen los SG adscritos al suelo urbanizable sectorizado del Ladera Norte y los dos Sistemas Generales en Las Candelarias, que si bien ya han sido cedidos, están todavía pendientes de ejecutar. Se propone, además de los anteriores, la consideración de Equipamiento Estructurante y sanitario el Geriátrico de Las Hoyillas, que contemple equipamiento sanitario, deportivo y recreativo.

SUPERFICIES DE SUELO SEGÚN CLASIFICACIÓN Y CATEGORÍAS ALTERNATIVA 2

Clase y categoría Código Superficie (m²s)

URBANO CONSOLIDADO SUC 874.954

NO CONSOLIDADO SUNC 208.488

TOTAL SUELO URBANO 1.083.422

URBANIZABLE SECTORIZADO SUS 357.885

NO SECTORIZADO SUNS 619.205

TOTAL SUELO URBANIZABLE 977.100

RÚSTICO

PROTECCIÓN NATURAL SRPN 31.958

PROTECCIÓN PAISAJÍSTICA SRPP 10.250.106

PROTECCIÓN CULTURAL SRPCu 474.815

PROTECCIÓN COSTERA* SRPC 337.859

PROTECCIÓN AGRARIA SRPA 2.890.902

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 1

SRPIE-1 307.399

PROTECCIÓN INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS- 2

SRPIE-2 163.043

PROTECCIÓN TERRITORIAL SRPT 67.119

ASENTAMIENTO RURAL SRAR 56.062

ASENTAMIENTO AGRÍCOLA SRAA 137.272

TOTAL SUELO RÚSTICO 14.378.675

TOTAL SUELO ORDENADO ALTERNATIVA 1 16.439.218

TOTAL SUELO EN E.N.P.-PARQUE NATURAL DE TAMADABA 28.082.153

TOTAL SUELO MUNICIPIO 44.521.371

*La superficie del SRPC no se ha tenido en cuenta en la sumatoria total por tratarse de una categoría de suelo superpuesta.

5.5 Análisis comparativo de las alternativas e integración ambiental

El término municipal de Agaete se encuentra entre los municipios que en mayor grado adolecen de suelo susceptible de ser empleado para proporcionar las soluciones urbanísticas que desde hace algunas décadas viene demandando su población y los agentes sociales, que albergan un legítimo interés en transformar su territorio y con ello, la mejora de sus condiciones socioeconómicas. El intrincado relieve de Agaete y la existencia de un patrimonio natural e histórico muy estimable, que se concreta, especialmente, en el Parque Natural de Tamadaba, un espacio protegido que ocupa dos terceras partes de la superficie municipal, dificultan la ordenación que demanda un territorio que con la apertura del puerto comercial de las Nieves y con el trazado viario que facilita el acceso desde la capital insular, en la última década del pasado siglo, viene experimentando transformaciones territoriales significativas, fundamentalmente en la franja costera que se extiende en torno al Puerto de Las Nieves y al tramo inferior del Valle de Agaete.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 117

117

Tras reconocer las circunstancias que condicionan la ordenación urbanística de la superficie municipal que se extiende fuera de los límites del Parque Natural de Tamadaba, se aborda el análisis comparado de las tres alternativas de ordenación planteadas. Las alternativas propuestas persiguen la ordenación sostenible de las variables ambiental, socioeconómica y territorial, pero la realidad es que, cada una de ellas lo consigue en mayor o menor medida. La Alternativa 0 recoge el modelo territorial vigente (Adaptación Básica del Plan General de Ordenación del año 2003) que no se encuentra ajustado a la legislación sobrevenida, y que resulta de unas circunstancias socioeconómicas sustancialmente distintas a las actuales, proponiendo en la zona costera de Agaete un incremento que duplica con creces el suelo urbano ya consolidado. Las consecuencias negativas que tendría su materialización sobre el patrimonio ambiental, paisajístico e histórico, serían muy contundentes. La Alternativa 0 y la Alternativa 1, a diferencia de la Alternativa 2, parecen sobredimensionar el crecimiento de población que se estima para el municipio; más aun en las actuales circunstancias de incertidumbre económica. De este modo, contempla un notable crecimiento de los núcleos de Agaete y Puerto de las Nieves para acoger población residente, y el reforzamiento del carácter urbano de las localidades históricas de San Pedro y Vecindad de Enfrente que aun conservan un vínculo apreciable con la economía agraria que les dio origen. A diferencia de lo que sucede en la Alternativa 0, en las Alternativas 1 y 2, la clasificación del suelo rústico de protección natural y paisajística se ha establecido tras efectuar el análisis y el posterior diagnóstico ambiental del territorio municipal, y una vez que ha sido consignada la presencia de valores naturales, ecológicos, fisiográficos y paisajísticos, como dispone el artículo 55 del TRLOTC y en consonancia con la zonificación del PIOGC. Además, la incorporación en esta Alternativa 2 de los barrancos del municipio a los suelos de protección ambiental, a diferencia de lo que ocurre en la Alternativa 1, donde se les asigna una categoría de protección económica (Suelo Rústico de Protección Hidrológica), contribuye a la preservación de ecosistemas, ambientes y paisajes que detentan una notable relevancia en el contexto del Archipiélago. La Alternativa 2 muestra un encaje más adecuado con el reconocimiento de las circunstancias ambientales, paisajísticas, históricas y socioeconómicas del municipio. Desde la consideración que ambas alternativas hacen del análisis y el diagnóstico ambiental, en el crecimiento del tejido urbano priorizan la ocupación de los intersticios no edificados antes que la ocupación de grandes bolsas de suelo. La Alternativa 2 despliega una superficie inferior de suelo urbanizable en el conjunto del municipio, lo que también repercute en un menor número de sistemas generales adscritos, si bien se considera que aún así Agaete queda suficientemente dotado.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 118

118

CLASE Y CATEGORÍA DE SUELO ALT 0 ( m²s)

ALT 1 ( m²s)

ALT 2 ( m²s)

Suelos Urbanos y Urbanizables 2.270.521 2.248.853 2.060.543

Suelo Urbano Consolidado 871.749 892.143 874.954

Suelo Urbano No Consolidado 206.312 223.130 208.488

Suelo Urbanizable Sectorizado 992.460 866.644 357.885

Suelo Urbanizable No Sectorizado 200.000 266.936 619.205

Suelos Rústicos de Protección Ambiental 10.244.187 10.508.769 10.756.879

Suelo Rústico de Protección Natural 14.288 - 31.958

Suelo Rústico de Protección Paisajística 9.623.974 8.570.157 10.250.106

Suelo Rústico de Protección Cultural 605.925 1.587.921 474.815

Suelo Rústico de Protección Costera* 323.322 325.479 337.859

Suelo Rústico de Protección de Entornos - 350.691 -

Suelos Rústicos de Protección Económica 3.917.356 3.543.659 3.361.344

Suelo Rústico de Protección Agraria 3.813.043 2.818.735 2.890.902

Suelo Rústico de Protección Hidrológica - 360.206 -

Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos 1 104.313 310.910 307.399

Suelo Rústico de Protección de Infraestructuras y Equipamientos 2* 180.489 53.808 163.043

Suelos Rústicos de Asentamientos de Población Rural 7.153 137.936 193.334

Suelo Rústico de Asentamiento Rural 7.153 27.088 56.062

Suelo Rústico de Asentamiento Agrícola - 110.848 137.272

Suelo Rústico de Protección Territorial - - 67.119

TOTAL ALTERNATIVA 16.439.218 16.439.218 16.439.218

5.6 Valoración detallada y signos de los impactos de las determinaciones potencialmente generadoras de impacto de las diferentes alternativas

Corresponde este apartado al desarrollo de las fichas de evaluación de las clases y categorías de suelo de cada una de las tres alternativas planteadas, susceptibles de generar impactos ambientales, que son expuestas en el Anexo de Fichas de Evaluación. A continuación se exponen los resultados de las evaluaciones de los suelos propuestos en cada una de las alternativas:

ALTERNATIVA 0

SUELO EVALUACIÓN

SRAR

SRAR Piletas

COMPATIBLE

SUNC

SUNC La Suerte COMPATIBLE

SUNC Los Arenales 1 COMPATIBLE

SUNC Los Arenales 2 MODERADO

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 119

119

ALTERNATIVA 0

SUELO EVALUACIÓN

SRAR

SUNC Los Arenales 3 MODERADO

SUNC San Francisco -Juan de Armas COMPATIBLE

SUNC Calle Belén MODERADO

SUNC Los Chorros MODERADO

SUNC Barranco Agaete -Alonso Medina MODERADO

SUNC Naciente Campo Fútbol 1 COMPATIBLE

SUNC Naciente Campo Fútbol 2 MODERADO

SUNC El Molino (Las Nieves) COMPATIBLE

SUNC Ermita de Las Nieves COMPATIBLE

SUNC Roque de Las Nieves COMPATIBLE

SUNC Casas de San Pedro nº1 MODERADO

SUNC Casas de San Pedro nº2 MODERADO

SUNC Casas de San Pedro nº3 MODERADO

SUNC Casas de San Pedro nº4 MODERADO

SUS

SUS Las Moriscas Industrial MODERADO

SUS Las Moriscas Residencial MODERADO

SUS Ampliación Llanos del Turmán MODERADO

SUS Ladera Norte MODERADO

SUS Cruz Chiquita MODERADO

SUS Geriátrico (Las Hoyillas) MODERADO

SUS Las Nieves Costa MODERADO

SUS Las Nieves Casa Fuerte MODERADO

SUS Las Salinas (SG-RC) SEVERO

SUS Barranco de Agaete (SG-EL) SEVERO

SUS Ampliación Cementerio (1 y 2) COMPATIBLE

SUS Barranco del Tío Vicente I a (SG-EL) COMPATIBLE

SUS Barranco del Tío Vicente II (SG-CO) COMPATIBLE

SUS Casas de San Pedro SEVERO

SUS Vecindad de Enfrente SEVERO

SUSN

SUSN- Las Moriscas SEVERO

SRPIE

SRPIE Autovía del Norte de Gran Canaria MODERADO

ALTERNATIVA 1

SUELO EVALUACIÓN

SRAA

SRAA-Las Longueras COMPATIBLE

SRAR

SRAR-Piletas COMPATIBLE

SRAR- El Hornillo MODERADA

SUNC

SUNC Barranco de Tío Vicente I b (SG-EL) MODERADO

SUNC Los Arenales 1 COMPATIBLE

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 120

120

ALTERNATIVA 1

SUELO EVALUACIÓN

SUNC Los Arenales 2 MODERADO

SUNC San Francisco -Juan de Armas COMPATIBLE

SUNC Los Chorros MODERADO

SUNC Naciente Campo Fútbol MODERADO

SUNC San Sebastián COMPATIBLE

SUNC El Molino (Las Nieves) COMPATIBLE

SUNC Ermita de Las Nieves COMPATIBLE

SUNC Roque de Las Nieves COMPATIBLE

SUNC Las Nieves MODERADO

SUNC La Suerte COMPATIBLE

SUNC San Pedro MODERADO

SUNC Casas de San Pedro MODERADO

SUNC Cuevecillas MODERADO

SUNC Vecindad de Enfrente I MODERADO

SUNC Vecindad de Enfrente II

SUS

223.130 SUS Las Moriscas Industrial MODERADO

SUS Las Moriscas Residencial MODERADO

SUS Ampliación Llanos del Turmán MODERADO

SUS Ladera Norte MODERADO

SUS Cruz Chiquita COMPATIBLE

SUS Las Nieves Costa

MODERADO SUS Las Nieves Centro

SUS Las Nieves Casa Fuerte

SUS Las Salinas (SG-RC) SEVERO

SUS Barranco de Agaete (SG-EL) SEVERO

SUS Ampliación Cementerio (SG-FU) COMPATIBLE

SUS Barranco del Tío Vicente I a (SG-EL) MODERADO

SUS Barranco del Tío Vicente II (SG-CO) COMPATIBLE

SUS Casas de San Pedro SEVERO

SUS Vecindad de Enfrente MODERADO

SUNS

866.644 SUNS Las Moriscas Turístico MODERADO

SUNS Geriátrico (Las Hoyillas) MODERADO

SRPIE

SRPIE-1 Nueva vía circunvalación por Las Candelarias MODERADO

SRPIE-2 Centro de Toxicómanos MODERADO

SRPIE-2 Los Berrazales MODERADO

SRPIE-2 Telecomunicaciones MODERADO

SRPIE-2 Aerogeneradores Troya MODERADO

SRPIE-2 Presa de Barranco Hondo COMPATIBLE

SRPIE-2 Depuradora MODERADO

SRPIE-2 Infraestructuras Barranco de Agaete 1 COMPATIBLE

SRPIE-2 Infraestructuras Barranco de Agaete 2 COMPATIBLE

SRPIE-2 Montaña Blanca COMPATIBLE

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 121

121

ALTERNATIVA 2

SUELO EVALUACIÓN

SRAA

SRAA-Las Longueras COMPATIBLE

SRAA-Troya MODERADO

SRAR

SRAR-Piletas COMPATIBLE

SRAR- El Hornillo MODERADO

SRAR- Las Cuevecillas COMPATIBLE

SRAR- Los Pasitos COMPATIBLE

SRAR- Casas del Camino COMPATIBLE

SUNC

SUNC Los Arenales 1 COMPATIBLE

SUNC Los Arenales 2 COMPATIBLE

SUNC San Francisco -Juan de Armas MODERADO

SUNC Los Chorros COMPATIBLE

SUNC Naciente Campo Fútbol MODERADO

SUNC Cruz Chiquita MODERADO

SUNC El Molino (Las Nieves) COMPATIBLE

SUNC Ermita de Las Nieves COMPATIBLE

SUNC Roque de Las Nieves MODERADO

SUNC Las Nieves COMPATIBLE

SUNC La Suerte COMPATIBLE

SUNC Casas de San Pedro 1 COMPATIBLE

SUNC Casas de San Pedro 2 MODERADO

SUNC Vecindad de Enfrente I MODERADO

SUS

SUS Las Moriscas Industrial MODERADO

SUS Ladera Norte MODERADO

SUS Cruz Chiquita MODERADO

SUS Barranco del Tío Vicente Ia (SG-EL) COMPATIBLE

SUS Barranco del Tío Vicente Ib (SG-EL) COMPATIBLE

SUS Geriátrico (Las Hoyillas) MODERADO

SUNS

SUNS Las Moriscas Turístico MODERADO

SUNS Las Moriscas Residencial COMPATIBLE

SUNS Ampliación Llanos del Turmán

COMPATIBLE

SUNS Las Nieves Costa SEVERO

SRPT

SRPT- Las Nieves Casa Fuerte SEVERO

SRPIE

SRPIE-2 Centro de Toxicómanos MODERADO

SRPIE-2 Los Berrazales MODERADO

SRPIE-2 Las Chobiceras MODERADO

SRPIE-2 Aerogeneradores Troya MODERADO

SRPIE-2 Presa de Barranco Hondo COMPATIBLE

SRPIE-2 Barranco de Agaete Instalaciones COMPATIBLE

SRPIE-2 Infraestructuras Barranco de Agaete 1 COMPATIBLE

SRPIE-2 Infraestructuras Barranco de Agaete 2 COMPATIBLE

SRPIE-2 Montaña Blanca COMPATIBLE

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 122

122

5.7 Viabilidad económica de las alternativas

En la Resolución de 10 de agosto de 2006, por la que se hace público el Acuerdo de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias de 4 de agosto de 2006, relativo a la aprobación definitiva del Documento de Referencia para elaborar los Informes de Sostenibilidad de Planes Generales de Ordenación, en el punto F se desarrolla que el Estudio económico-financiero: “Contendrá, asimismo, una evaluación económica de las medidas correctoras y las actuaciones ambientales positivas programadas susceptibles de valoración, con especificación de las que correspondan a los sectores privados y públicos….” En este sentido, a la fecha de emisión del presente Informe de Sostenibilidad Ambiental, resulta inviable realizar un presupuesto realista para la puesta en práctica de las medidas correctoras y la vigilancia ambiental. Debido a la Metodología aplicada, el modelo presentado en el Avance del PGO de Agaete es de naturaleza esquemática y, en tanto síntesis propositiva y propuesta abierta, sin concretar ningún Modelo de Ordenación a resultas del periodo de participación pública e informes de las Administraciones consultadas, contiendo sólo determinaciones con capacidad estructurante sobre el territorio municipal.

6. MEDIDAS AMBIENTALES CORRECTORAS Y PROTECTORAS PARA REDUCIR LOS EFECTOS DE LAS DETERMINACIONES DEL PLAN GENERAL SOBRE EL MEDIO AMBIENTE

La correcta ubicación de las actuaciones no garantiza su adecuada integración ambiental y paisajística, por lo que, además de la elección del emplazamiento, como medida preventiva en la fase de planeamiento general, deberán evaluarse las afecciones que se producirían si se concretasen los planeamientos de desarrollo y de ejecución. Desde el planeamiento general, sólo podrán ser evaluadas la dimensión y la localización espacial de las actuaciones, puesto que las determinaciones que establece carecen de concreción y se limitan a definir la clasificación del suelo y la asignación de usos. Será en los planeamientos de desarrollo y ejecución específicos donde se examine la ejecución de las propuestas. De cualquier modo, desde este Plan General de Ordenación se propone, con carácter general, la adopción de una serie de medidas correctoras, que se exponen a continuación, con el fin de establecer recomendaciones a la hora de ejecutar el planeamiento. Objeto de las medidas ambientales Con el propósito de garantizar la protección ambiental del territorio municipal, su ocupación, su transformación y el uso que de él se haga serán sometidos a condiciones que garanticen la salvaguarda de su patrimonio natural, paisajístico e histórico.

ALTERNATIVA 2

SUELO EVALUACIÓN

SRPIE-2 Instalación Troya

MODERADO

SRPIE-2 Las Salinas COMPATIBLE

SRPIE-2 Las Hoyillas COMPATIBLE

SRPIE-2 La Palmita MODERADO

SRPIE-2 Campo de Fútbol COMPATIBLE

SRPIE-2 Ampliación Cementerio 1 y 2 COMPATIBLE

SRPIE-1 Circunvalación del Norte por Cruz Chiquita COMPATIBLE

SRPIE-1 Circunvalación del Sur por Las Candelarias MODERADO

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 123

123

Si se estimase que la materialización de las determinaciones urbanísticas que contiene este Plan General de Ordenación fuera susceptible de generar impactos ambientales, serían de aplicación estas determinaciones para, de este modo, proteger el patrimonio natural, paisajístico e histórico que albergue el territorio, y corregir, reducir o compensar el impacto ocasionado. Medidas generales de carácter ambiental y condiciones de la protección. 1. Con objeto de cumplir los objetivos implícitos en el modelo territorial adoptado y propiciar el uso racional de los recursos naturales, este Plan General de Ordenación establece una serie de medidas encaminadas a conservar, mejorar y proteger el patrimonio natural, el patrimonio histórico, el paisaje y el entorno rural. Se deberán respetar las determinaciones previstas en el Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria para la protección y conservación de los hábitats naturales, la recuperación de los que se encuentren deteriorados y la restauración de los que sean susceptibles de ser restablecidos, con el fin de preservar la biodiversidad del municipio. 2. Las medidas de carácter ambiental serán de aplicación a todas las obras que se pretendan acometer, sean o no de nueva planta. La administración podrá requerir a la propiedad de los inmuebles para que se ajuste a las condiciones que se señalan en esta normativa, así como a cualquier otra que corresponda a la legislación sectorial vigente. 3. Toda persona natural o jurídica que proyecte realizar cualquier obra o actividad susceptible de modificar el medio ambiente, o de producir el deterioro del entorno, está obligada a restringir su efecto. Las intervenciones en el territorio deben incorporar criterios de integración ambiental y paisajística. 4. Ante las siguientes afecciones susceptibles de ser generadas por la ordenación propuesta por el Plan General, se establecen medidas correctoras, con carácter general:

a) Limitaciones a la implantación de edificaciones, de infraestructura viaria, y de cualquier clase, susceptible de generar taludes, desmontes y movimientos de tierra, y reducir la calidad del patrimonio natural, cultural y paisajístico. Deben evitarse, en cualquier caso, las obras en enclaves sometidos a pendientes superiores al 30%. b) Limitaciones a la implantación de edificaciones y actividades susceptibles de deteriorar o de sustraer suelos que cuenten con calidad agrológica.

5. Respecto al control de residuos se adoptarán las siguientes medidas:

a) La instalación de actividades insalubres y nocivas no podrá autorizarse si no van acompañadas de dispositivos de depuración, mecánicos, químicos o físico-químicos, que eliminen las sustancias nocivas que puedan contaminar las aguas, conforme a las determinaciones que establece la legislación sectorial vigente.

b) Se deben regular los requisitos exigibles a los proyectos de urbanización, y a los lugares de vertido, para la gestión y eliminación de los residuos generados durante la ejecución de las obras.

6. Mediante el catálogo arquitectónico, el etnográfico y la carta arqueológica del municipio, con carácter general, se protegerán todos aquellos elementos que vengan recogidos en estos documentos y que pudieran ser afectados por la ordenación. 7. Con objeto de reducir los efectos de los riesgos derivados de la aparición de desprendimientos y avenidas de agua, se establecen las siguientes determinaciones:

a) Las vertientes donde se constata la existencia de un apreciable riesgo de desprendimientos, serán revegetadas con especies autóctonas del municipio, correspondientes al piso bioclimático del espacio que se trate.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 124

124

b) El pastoreo extensivo sobre las vertientes expuestas al riesgo de desprendimientos debe quedar limitado. c) Cuando el viario rodado discurra junto a vertientes, donde se haya constatado la existencia de desprendimientos, deben desplegarse mallas de protección que impidan la caída de piedras a las vías. d) Las fincas agrícolas cubiertas por invernaderos, los palmerales, las arboledas y los matorrales de elevada cobertura deben contar con un programa de prevención de incendios. e) Los rastrojos, malezas y cualquier tipo de residuos agrícolas inflamables no deben permanecer junto a los invernaderos. f) Debe estimarse la conveniencia de establecer muros de protección que, ante la aparición de avenidas, eviten el desbordamiento de los cauces de los barrancos en los tramos más críticos. g) Ante la posibilidad de aparición de avenidas de agua, los cauces de los barrancos deben permanecer libres de obstáculos que interrumpan o distorsionen el flujo de la corriente. Debe estimarse la conveniencia de establecer limpiezas periódicas de los cauces.

8. El estudio detallado de impacto ecológico constituye condición previa y preceptiva para admitir a trámite la licencia urbanística o el proyecto de urbanización. Las conclusiones de la declaración de impacto se incluirán como condicionantes de la autorización o licencia. Medidas para la protección y conservación de valores naturales y usos tradicionales. Se establecen medidas correctoras destinadas a aminorar las afecciones ambientales originadas por los usos del suelo que se desarrollan en el municipio, que se concretan en las determinaciones que siguen: 1. Evitar en lo posible la formación de desmontes y taludes, adaptando las construcciones a la pendiente. Las edificaciones residenciales no deben implantarse en sectores donde la pendiente supere el 30%. Si no pudiera impedirse, habría que establecer:

a) Taludes tendidos de superficie ondulada. b) Bancales en los desmontes en los que se pueda plantear su ejecución. c) Ruptura de las pendientes de los taludes mediante la sucesión de bancales, que adoptarán forma escalonada.

2. Debe evitarse la urbanización de las áreas de interés geológico y geomorfológico, delimitadas en el contenido ambiental de este Plan General de Ordenación. 3. Debe estimarse la conveniencia de establecer paneles en enclaves accesibles, que ilustren acerca del patrimonio geológico y del relieve del municipio. 4. En lo que se refiere al patrimonio natural y, especialmente, a la flora y a la fauna, resulta preciso:

a) Gestionar la ganadería de forma racional, de conformidad con las determinaciones del Código de Buenas Prácticas Agrarias. Se tratará de evitar la permanencia de densidades elevadas de cabezas de ganado sobre áreas abiertas. b) Respetar los planes vigentes de protección y conservación de la fauna y flora, en el momento de acometer cualquier actuación. c) Se tratará de conservar y recuperar el suelo fértil. d) Evitar los cerramientos de parcelas que puedan afectar a especies de la fauna silvestre.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 125

125

5. Todos los actos de ejecución previstos en los suelos que alberguen Hábitats de Interés Comunitario, incluidos en el Anexo I de la Directiva 92/43/CEE, que no estén insertos en la Red Natura 2000, ni en la Red de Espacios Naturales Protegidos, estarán condicionados a evitar su deterioro. De este modo, y respecto al régimen de usos que estos suelos contemplan:

a) No se permitirán nuevas roturaciones, desmontes ni sorribas. b) Las nuevas edificaciones que se permitan en cada categoría de suelo quedarán emplazadas en los sectores más degradados, ajenos a la presencia del patrimonio natural que ha justificado la delimitación del Hábitat. Para obtener la licencia municipal o la calificación territorial, según el caso, será menester aportar, junto a la documentación habitual, un informe ambiental, firmado por un técnico competente, que detalle las afecciones derivadas de la obra y las medidas correctoras previstas, si fueran precisas.

6. Toda actuación en el Suelo Rústico de Protección Agraria deberá tomar en consideración las determinaciones del Código de Buenas Prácticas Agrarias de la Comunidad Autónoma de Canarias, y en concreto las siguientes:

a) Mejorar la estructura del suelo mediante la remoción de elementos gruesos, los trabajos mecánicos, la mejora de suelos orgánicos, etc.). b) Respetar las normas establecidas en la legislación sectorial respecto a la aplicación de fertilizantes, enmiendas o encalados. c) Establecer medidas de control de la erosión mediante la implantación de barreras, la restauración de las gavias y los nateros deteriorados, la disminución de las cárcavas, el abancalamiento, el cavado de zanjas, etc., de conformidad con la legislación sectorial. d) Desarrollar labores de drenaje con la finalidad de evitar el encharcamiento del suelo. e) Mantener y enriquecer el contenido en materia orgánica de los suelos con potencial agrológico. f) Con objeto de evitar la pérdida de suelo de alto potencial agrológico en espacios destinados a la urbanización, se retirará el suelo fértil, acumulándolo, de modo que se evite su compactación y deterioro. En las áreas donde se conserve el suelo fértil, se impedirá el tránsito y el estacionamiento de vehículos en las zonas no establecidas al efecto. g) En los casos en los que los movimientos de tierra den lugar a la aparición de grandes superficies de suelo expuestas a los agentes atmosféricos, se adoptarán medidas encaminadas a evitar los procesos erosivos, como la revegetación. h) Se tenderá a atenuar pendientes y longitudes de los taludes, como mecanismo que evite la erosión por la aceleración de la escorrentía superficial.

7. Para evitar la aparición de procesos erosivos, las parcelas agrícolas que lleven abandonadas más de veinte años deberán ser repobladas con especies vegetales autóctonas del municipio, correspondientes al entorno bioclimático del espacio que se trate. Las estructuras agrarias de los campos de cultivo abandonados (gavias, bancales, nateros, muros de piedra seca, acequias,…) deben ser objeto de planes de protección y conservación. Protección de la flora y la vegetación. Sin perjuicio de lo que determine la legislación sectorial vigente, todo uso del territorio debe considerar las siguientes determinaciones relativas a la flora y a la vegetación:

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 126

126

1. Con carácter general, se respetará la integridad de la vegetación, especialmente cuando esté constituida por especies incluidas en los catálogos de protección y, fundamentalmente, en el Catálogo Canario de Especies Protegidas. Para el arranque, recogida y corte de algún ejemplar se considerará lo que determine la Orden de 20 de febrero de 1991 sobre protección de especies de la flora vascular silvestre de la Comunidad Autónoma de Canarias, el Plan Forestal de Canarias y el Código de Buenas Prácticas Agrarias de la Comunidad Autónoma de Canarias. 2. Las normas de protección serán de aplicación a la vegetación protegida, con independencia de la titularidad pública o privada de los terrenos sobre los que se desarrolla, o de su régimen de uso. 3. Los espacios libres con presencia de flora protegida solo podrán destinarse a usos compatibles con su conservación. 4. Las tareas de mantenimiento y restauración vegetal no deben alterar en ningún caso la configuración del espacio, ni la disposición e integridad de las especies vegetales ya presentes, incluidas en algún catálogo de protección. 5. Las actividades susceptibles de afectar a especies protegidas deben contemplar su salvaguarda previa en la forma que establezcan los órganos de la administración competente en la materia. 6. La tala y el trasplante de árboles requerirá licencia municipal previa, sin perjuicio de las autorizaciones administrativas exigidas por la legislación sectorial vigente. 7. Quedará garantizada la integridad de los palmerales de palmera canaria y de cualquier individuo de esta especie mediante la aplicación del “Decreto 62/2006, de 16 de mayo, por el que se establecen medidas para favorecer la protección, conservación e identidad genética de la palmera canaria (Phoenix canariensis)”. 8. Debe limitarse el pastoreo extensivo en las áreas de interés florístico, delimitadas en el contenido ambiental de este Plan General de Ordenación. 9. A su paso por las áreas de interés florístico, las vías pecuarias deberán estar cercadas con materiales rústicos que no generen impacto visual. Medidas de protección del paisaje. 1. Se prohíbe la urbanización de terrenos con pendiente media superior al 30% y la edificación que afecte a líneas de horizonte o a perfiles destacados del terreno, como lomos, divisorias de vertientes, montañas y otros. 2. Se prohíbe la edificación en los cauces de los barrancos, salvo en supuestos excepcionales y con las medidas correctoras que determine la administración competente, encaminadas a garantizar el desagüe a través de los cauces. 3. El ayuntamiento adoptará, en coordinación con el resto de las administraciones competentes, medidas de control y vigilancia con el objetivo de impedir la degradación paisajística causada por edificaciones ilegales, vertidos de residuos, movimientos de tierra, aperturas de viales y por otras. 4. Las áreas prioritarias para la preservación del paisaje serán categorizadas como suelo rústico de protección natural o paisajística. En estos espacios, cualquier proyecto público o privado deberá incorporar un estudio de la afección paisajística y de las medidas adoptadas para su corrección. 5. Los bordes de los suelos urbanos y urbanizables recibirán un tratamiento paisajístico adecuado, que incluirá su remate con viario no edificado. 6. Los instrumentos de ordenación de los suelos urbano y urbanizable deberán incluir las siguientes determinaciones: a) Criterios paisajísticos para los límites entre el suelo objeto de ordenación y los colindantes.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 127

127

b) Criterios para la delimitación de áreas urbanas que generan un especial impacto sobre la calidad visual del paisaje. Se fijarán las condiciones para su reinserción. c) Criterios para que los espacios libres incorporen las cualidades ambientales del entorno en los que se insertan. 7. En los lugares desde donde se contemplen paisajes abiertos y perspectivas de conjuntos urbanos históricos, y en las inmediaciones de carreteras y caminos de carácter pintoresco, no se deberá permitirá la construcción de cerramientos, edificaciones u otros elementos que limiten el campo visual o desfiguren sensiblemente las perspectivas. 8. Los aprovechamientos territoriales deberán adaptarse a las formas del relieve. 9. Las plantaciones y las repoblaciones vegetales deberán realizarse de manera que se eviten las formas geométricas y la disposición perpendicular o paralela a las curvas de nivel de las plántulas. 10. Los proyectos urbanísticos de nueva planta deberían incorporar un adecuado tratamiento cromático que facilite su integración visual en el entorno circundante, o cualquier otra solución que contribuya a su adecuada mimetización. Medidas para la protección y conservación del patrimonio cultural. 1. Las determinaciones aquí establecidas son complementarias a las que se detallan en los catálogos arquitectónico, etnográfico y arqueológico, y a la normativa específica sobre la materia. 2. Los elementos patrimoniales declarados Bienes de Interés Cultural, ya sea mediante procedimiento expreso o por ministerio de la ley, quedan sometidos al régimen de protección que se establece al efecto en la legislación aplicable en materia de patrimonio histórico. 3. La incoación del procedimiento de declaración de Bien de Interés Cultural determinará la inmediata suspensión de las licencias municipales de intervención en los inmuebles afectados. Serán de aplicación aquellos efectos y medidas preventivas dispuestos legalmente. 5. El promotor público o privado de obras o actuaciones susceptibles de afectar a la superficie de cualquier yacimiento arqueológico, recogido en el carta municipal, deberá aportar un estudio detallado de impacto ecológico que precise la incidencia de la obra o actuación sobre el patrimonio arqueológico del área en cuestión, de acuerdo a lo establecido en el artículo 65 de la Ley 4/1999, de 15 de marzo, de Patrimonio Histórico de Canarias. 6. Los planes parciales y los proyectos de urbanización integrarán, garantizando su realce visual, los bienes inmuebles del patrimonio histórico, que incluyen los de carácter etnográfico, como elementos de la urbanización en su emplazamiento original, salvo que sea de todo punto imposible, en cuyo caso se procederá a su traslado a una ubicación que garantice su integridad. Medidas ambientales aplicables al suelo rústico de asentamiento rural. 1. Se cuidará el diseño de las nuevas edificaciones, procurando mantener un equilibrio de formas, volúmenes, alturas, líneas, colores y texturas, y la adecuación al entorno rural circundante. 2. Se eliminará cualquier elemento que constituya un obstáculo que impida la plena contemplación del paisaje o que deteriore su calidad visual. 3. Las edificaciones cuyos linderos constituyan los límites del asentamiento, y sean colindantes también con espacios libres o con viales, deben abrir fachadas orientadas a éstos. 4. Las fachadas traseras de las edificaciones emplazadas sobre vertientes deberán estar revestidas de piedra del entorno. Los desmontes efectuados en las laderas con objeto de implantar las nuevas estructuras deben ser tratados con objeto de recuperar el perfil perdido.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 128

128

5. Se emplearán, preferentemente, materiales habituales en la arquitectural rural tradicional majorera. Quedará prohibido el uso de revestimientos reflectantes y de colores estridentes. 6. Se permite la aplicación de molduras y zócalos empleados en la arquitectura rural tradicional de la Isla. Quedará prohibido el uso de chapados, tirolesas y enfoscados de mortero vitrificado. No se autoriza el empleo de piedra dispuesta en almendrado. Quedan prohibidos los elementos ornamentales de corte neoclásico, como columnas, frontones, plintos o balaustradas, tanto tallados en piedra como prefabricados. Se recomienda no utilizar la teja árabe en elementos compositivos. 7. El mobiliario urbano deben contar con un diseño unificado y adecuado al entorno rústico en el que va a quedar emplazado. Se dará prioridad al empleo de piedra y madera. 8. Se evitarán las fachadas medianeras en las edificaciones de nueva planta. 9. Las medianeras vistas serán tratadas como un fachada más de la edificación, a fin de reducir su impacto visual. 10. Las edificaciones y construcciones adosadas y entremedianeras enfoscarán y pintarán el muro medianero en tanto no se ejecute la edificación colindante y el muro quede expuesto a la vista. 11. Los elementos vegetales de notable porte, que hayan tomado carta de naturaleza en el asentamiento, y los bienes inmuebles del patrimonio histórico, que incluyen los de carácter etnográfico, permanecerán en su emplazamiento original, salvo que sea de todo punto imposible, en cuyo caso se procederá a su traslado a una ubicación que garantice su integridad. 12. Los espacios libres de edificación serán ajardinados con especies autóctonas, correspondientes al entorno bioclimático en el que se emplaza el asentamiento. 13. Se integrará el asentamiento en el contexto agrícola o natural, mediante el adecuado tratamiento de la franja de contacto entre ambos entornos. 14. Se prohíbe la instalación de rótulos, marquesinas y toldos, que provoquen el deterioro paisajístico del entorno rural. 15. Los contenedores de basura deben ser ubicados en emplazamientos que produzcan menor molestia a los vecinos. Siempre que resulte posible serán colocados dentro de un recinto cuyas paredes no superen 1,5 metros de altura y con un acabado exterior recubierto de piedra o madera. 16. Las antenas de televisión, radio, telefonía móvil, etc., se ubicarán en los emplazamientos menos visibles de las posibles. 17. Los nuevos tendidos de alumbrado público, de suministro eléctrico o de telecomunicaciones deberán permanecer soterrados, siempre que resulte posible. 18. Se proveerán los medios adecuados para el correcto tratamiento de las aguas residuales, bien a través de su conexión a la red general de saneamiento, o mediante la aplicación de nuevas tecnologías, entre las que habrían de estimarse los sistemas de depuración natural (filtro verde, filtro de grava, infiltración rápida, escorrentía superficial, etc.). 19. Quedan prohibidos los pozos negros, de conformidad con el artículo 62 del TR-LOTENC. Aquellas viviendas que, de manera excepcional, no pudiesen conectarse a la red de saneamiento, provisionalmente, y hasta que se establezca la conexión, deberán disponer de depuradoras o fosas sépticas individuales.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 129

129

Medidas ambientales de aplicación a las actuaciones de urbanización. 1. Como medida preventiva de carácter general, los instrumentos que establezcan la ordenación pormenorizada de los ámbitos de suelo urbano no consolidado y de suelo urbanizable deberán evaluar las afecciones ambientales que se puedan producir, para acotar el previsible impacto que generen. 2. En las fichas correspondientes a los ámbitos de suelo urbano no consolidado y de suelo urbanizable, incluidas en los ficheros de ordenación urbanística, se incorporan medidas ambientales específicas, conducentes a reducir el signo y la intensidad de los impactos. 3. Sin perjuicio de otras determinaciones establecidas en estas medidas, toda transformación urbanística en suelos urbanos y urbanizables deberá respetar las siguientes determinaciones ambientales:

a) Con objeto de evitar o, al menos, reducir la alteración paisajística provocada por las nuevas implantaciones urbanísticas, se llevará a cabo un análisis del entorno con la finalidad de considerar las tipologías constructivas ya existentes, los volúmenes, la edificabilidad de las parcelas y la disposición de las alineaciones y rasantes. b) Con objeto de mitigar el impacto visual que genere la urbanización, se realizará un estudio desde los enclaves en los que sea más visible, y que puedan albergar mayor número de observadores. Deben articularse medidas correctoras adecuadas, entre las que se debiera incluir el adecuado tratamiento cromático de la urbanización. c) Los efectos físicos de las obras (terraplenes, muros, explanaciones, vertidos, etc.) no traspasarán en ningún caso los límites establecidos, que legitiman la urbanización. d) Se evitarán los bordes rectilíneos de los suelos urbanos que no guarden relación con las características topográficas de su entorno. La transición entre los suelos urbano y rústico se realizará de forma gradual. Con este propósito, el perímetro de las urbanizaciones deberá recibir un tratamiento paisajístico con objeto de atenuar el impacto visual sobre los suelos rústicos colindantes, que puede consistir en el trazado de un viario perimetral no edificado, rodado (calzada y acera) o peatonal, en la implantación de muros de piedra, en el establecimiento de una franja vegetal, no necesariamente arbolada, conformada por especies autóctonas del municipio, que deberá adaptarse a las circunstancias ambientales del entorno bioclimático en el que se inserta, o en cualquier otra intervención análoga. e) Las fachadas y las traseras orientadas a las vías transitables deben adoptar unos parámetros estéticos que eviten el deterioro de la calidad visual del entorno edificado. f) Las nuevas vías deberán adaptarse a la topografía del terreno. Sus trazados se adecuarán en lo posible a la estructura agraria. g) Los planes parciales y los proyectos de urbanización integrarán el arbolado ya existente y los bienes inmuebles del patrimonio histórico catalogado, que incluyen los de carácter etnográfico, como elementos de la urbanización en su emplazamiento original, salvo que sea de todo punto imposible, en cuyo caso se procederá a su traslado a una ubicación que garantice su integridad. h) Los entornos de mayor valor ambiental y paisajístico deberán incorporarse a los espacios libres, tras su identificación en un estudio previo a la urbanización. i) El ajardinamiento en los espacios libres, zonas verdes y zonas exentas de edificación se acometerá con especies autóctonas, o de gran arraigo en el paisaje (siempre que no tengan carácter invasor), adaptadas a las condiciones ambientales existentes. De este modo, se procura la prolongación de la continuidad visual del paisaje.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 130

130

j) Cualquier restitución vegetal o labor de ajardinamiento preverá los riegos iniciales que amenacen el arraigo de las plantas. Para garantizar la conservación adecuada de las plantaciones se encargará la tarea a personal cualificado durante el tiempo que sea preciso. k) En las plantaciones sobre aceras, deberá preverse la instalación de alcorques lo suficientemente amplios para garantizar la supervivencia de las plantas cuando alcancen su mayor desarrollo. l) Los movimientos de tierra no deben originar taludes que superen tres metros de altura y 45º de inclinación. En caso que se supere la altura podrá recurrirse al refuerzo del terraplén, mediante pedraplenado, o a la construcción de muros. Si la pendiente excediera de 45ª se optará por la aplicación de muros de contención. Todos los muros deberán ser revestidos con mampuesto o aplacado de piedra vista. En cualquier caso, debería realizarse un tratamiento paisajístico de todos los taludes y desmontes. m) Cuando los movimientos de tierra originen grandes superficies de suelo expuestas, cuyas pendientes superen el 15%, se aplicarán medidas que, como la revegetación o la disposición de canales de desagüe, estén encaminadas a evitar la aparición de procesos erosivos. n) Los sectores cuya pendiente sea superior al 30% serán tratados como áreas ajardinadas con especies autóctonas pertenecientes al ámbito bioclimático del enclave en cuestión. o) Con objeto de evitar la pérdida de suelo de alto potencial agrológico en espacios destinados a la urbanización, se retirará el suelo fértil, acumulándolo, de modo que se evite su compactación y deterioro. En las áreas donde se conserve el suelo fértil se evitará su apelmazamiento, impidiendo el tránsito y el estacionamiento de vehículos en las zonas no establecidas al efecto. p) La urbanización deberá prever la evacuación de las aguas de escorrentía, que, en la medida de lo posible, debieran ser empleadas en el riego de las áreas ajardinadas de los espacios libres. q) Se evitará la contaminación acústica derivada del tránsito de maquinaria de obra mediante la instalación de pantallas que eviten la propagación del ruido hacia los sectores poblados. Además, se cuidará la puesta a punto de los vehículos para evitar la propagación excesiva de ruidos y emisiones gaseosas. r) El mobiliario público será acorde con las características edificatorias, con objeto de lograr su integración en el paisaje urbano. s) La iluminación de los viales deberá evitar la dispersión lumínica y contribuir a incrementar la calidad del paisaje. t) Como norma general, y a tenor de los rasgos visuales del entorno, la gama cromática empleada en la resolución de las fachadas pasa por las tonalidades blancas y ocres. u) Los proyectos de urbanización especificarán el número y la ubicación de los contenedores para la recogida selectiva de residuos. Deben ser instalados en los emplazamientos que produzcan menor molestia a los vecinos; preferiblemente, en las intersecciones de las vías de distribución con las secundarias. v) Para eliminar las aguas residuales se procederá a la conexión con la red dirigida a la depuradora pública. w) En suelos industriales, al inicio de las obras y a su conclusión, se adecuarán zonas específicas para la recogida, depuración y evacuación de vertidos contaminantes.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 131

131

Condiciones ambientales para las edificaciones, construcciones e instalaciones. Todo acto de aprovechamiento y uso edificatorio del suelo tendrá en cuenta las siguientes determinaciones: 1. Las edificaciones deberán mostrar sus paramentos y cubiertas acabados mediante el empleo de formas, materiales y colores que favorezcan una adecuada integración paisajística. Se limitará el uso de materiales reflectantes. 2. Se evitarán los alicatados en fachadas, empleándose, en todo caso, piedra o muros enfoscados y pintados. 3. Se evitará la tipología casa-salón. Se regulará con especial énfasis el tamaño, los materiales y el color de las “puertas garajeras”. 4. Se recomienda evitar el empleo de carpintería metálica, especialmente en balaustradas y puertas exteriores. 5. Las edificaciones y construcciones adosadas y entremedianeras enfoscarán y pintarán el muro medianero en tanto no se ejecute la edificación colindante y el muro quede expuesto a la vista. 6. Con independencia de las limitaciones que establezcan las normas urbanísticas, se tomará como referencia a la hora de establecer la altura de la edificación, la rasante natural del terreno, medida en el punto más desfavorable. Medidas ambientales aplicables al suelo urbano. 1. Los proyectos de ajardinamiento deberán llevarse a cabo con especies autóctonas de valor ornamental del entorno bioclimático del espacio que se trate, y de especies exóticas que tengan un elevado arraigo en el sector, siempre que no posean carácter invasor, e incluirán el adecuado mantenimiento de las plantas por parte de personal cualificado. 2. Las plantaciones sobre aceras deberán incluir alcorques lo suficientemente amplios para garantizar el correcto desarrollo de los ejemplares. 3. Se mejorará el firme de los viales y se procederá al encintado de aceras que así lo requieran, a instancias del ayuntamiento. 4. En la elección del mobiliario urbano se considerarán las características edificatorias y cromáticas del entorno inmediato con objeto de lograr su adecuada integración paisajística. 5. Se aconseja resolver el impacto visual provocado por los trazados de los tendidos eléctrico y telefónico y por el “cableado” de las fachadas, adoptando las siguientes soluciones:

a) Canalización subterránea del cableado, como solución prioritaria. b) Conducción del cableado por el interior de los aleros. Se trataría de aplicar una perforación longitudinal a los aleros, que permita ocultar el cableado a su paso por las fachadas. c) Disposición paralela del cableado a la línea inferior de unión entre los aleros y la fachada. d) Utilización de canaletas de PVC -o de un material de análogas características- en la que introducir el cableado para evitar su visión exterior; posteriormente, se aplicaría a la canaleta pintura de un color igual o similar al de la fachada. e) Aplicación de molduras longitudinales que sirvan de soporte a la canalización del cableado.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 132

132

f) En cualquier caso, al cableado se le aplicará una tonalidad cromática igual o similar a la de la fachada de la edificación.

6. Los edificios deteriorados deberían ser restaurados o rehabilitados. 7. Cuando el mobiliario urbano tenga carácter histórico, o su presencia sea consustancial con el área en el que se halla emplazado, no podrá modificarse su ubicación. Medidas ambientales para las infraestructuras viarias. 1. En el trazado de la infraestructura viaria se evitarán los taludes de grandes proporciones. En cualquier caso, deberá realizarse un tratamiento paisajístico de todos los taludes y desmontes. Para la ejecución de obras o actividades que originen taludes con pendientes superiores al 15%, o que ocupen un volumen superior a 5.000 m3, los proyectos deberán incluir la documentación y los estudios que incorporen medidas correctoras que garanticen la ausencia de impacto negativo sobre la estabilidad del sustrato. 2. Deberán incorporarse a los proyectos viarios (cuando las condiciones técnicas lo permitan) apartaderos, vías de borde de tránsito peatonal y plantaciones con especies preferentemente autóctonas y de los pisos bioclimáticos que las vías atraviesen. 3. Durante el trazado de nuevas vías se evitará la desaparición de áreas ocupadas por formaciones vegetales relícticas, que serán restauradas cuando su deterioro haya sido inevitable. Se tendrá en consideración la absoluta salvaguarda de las especies florísticas y faunísticas incluidas en los catálogos de protección que tengan valor normativo. 4. Se respetará el tránsito por los caminos y senderos de titularidad pública. Cualquier obra que les afecte no deberá alterar la integridad de las formas constructivas originales. 5. Siempre que sea posible, se procederá al desdoblamiento de las vías ya existentes antes que a la acometida de nuevos trazados. Medidas ambientales para las obras de sistemas generales, dotaciones y equipamientos. 1. Con objeto de eliminar o, en su defecto, atenuar el impacto visual que genera el tendido aéreo, eléctrico y telefónico, se llevará a cabo el trazado subterráneo del cableado, siempre que fuese posible. No obstante, dada la relativa complejidad topográfica del municipio, el tendido aéreo no deberá disponerse perpendicularmente a la pendiente del terreno, ni atravesar el perfil del horizonte. 2. Los depósitos vinculados a la red de abasto no deberán superar la altura de los perfiles de cresterías y picos montañosos. Convendría que fuesen soterrados, pero en caso de que sobresalgan, la superficie exterior deberá revestirse de piedra. 3. Los desmontes y terraplenes no deberán ocasionar alteraciones paisajísticas significativas. Con objeto de atenuarlas, se aplicará un tratamiento consistente en la plantación de su superficie, u otro análogo. 4. Se desaconseja la instalación de vallas publicitarias y de instalaciones de características similares. Sólo se debería permitir la presencia de carteles informativos de interés público, con las características que determine la administración competente. 5. Se prohíben las inscripciones y rotulaciones sobre soportes naturales (rocas, taludes, montañas y elementos análogos). 6. Los reclamos publicitarios adosados a los edificios que se levantan fuera de los núcleos urbanos no podrán sobresalir del volumen construido.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 133

133

7. Cuando se prevea la generación de movimientos de tierra que ocasionen pendientes superiores al 15%, o de volúmenes que excedan de los 5.000 m3, los proyectos deberán incluir un estudio que incorpore las medidas correctoras que garanticen la ausencia de impactos negativos sobre la estabilidad y la erosionabilidad del suelo. 8. Cualquier actuación que afecte al cauce de un barranco preverá la evacuación de las aguas de escorrentía, de modo que se eviten los obstáculos en la corriente. 9. En las labores de revegetación y ajardinamiento se emplearán especies autóctonas, adaptadas a las circunstancias ambientales del entorno que se trate. Se evitará en lo posible la utilización de elementos exóticos. Se entienden eximidas de esta consideración las plantaciones de especies con finalidad científica o de explotación agrícola. 10. Se prohíben los cementerios de vehículos sin licencia municipal previa, que se otorgará exclusivamente cuando la localización y las medidas correctoras adoptadas garanticen una mínima incidencia ambiental y paisajística. Se prohíbe el abandono de vehículos en descampados. 11. Se evitará la contaminación acústica derivada del tránsito de la maquinaria de obra, aprovechando los obstáculos naturales, mediante la instalación de pantallas que eviten la propagación del ruido hacia las zonas más pobladas y a través del control de los niveles sonoros que ocasiona. 12. Se habilitará una plataforma de aparcamiento de la maquinaria, con objeto de reducir la contaminación por vertidos incontrolados. Medidas de seguimiento del PGO. Indicadores Ambientales. El establecimiento de un sistema de indicadores ambientales, en coherencia con las nuevas políticas emanadas desde los estamentos jurídicos supranacionales, comienza a incorporarse a los distintos proyectos, programas, planes y estrategias con incidencia territorial. El diseño de estos sistemas de indicadores está directamente relacionado con la disponibilidad de datos estadísticos cuantificables que permitan realizar un control empírico de diferentes variables ambientales. Con frecuencia no resulta posible cuantificar el potencial de afección ambiental, a causa de la ausencia de infraestructura adecuada con la que controlar los efectos derivados de la aplicación de un determinado programa, o la ejecución de algún proyecto. La elaboración del Plan General incide sobre la determinación de las estrategias territoriales a que se verá sometido el municipio en los próximos años, que afectan a sus circunstancias socioeconómicas y ambientales. Sus repercusiones son de índole variada y, en cualquier caso, distintas a las que derivan de la ejecución de un proyecto, dificultando, aún más si cabe, la previsión de impacto y la incidencia ambiental que el Plan puede generar. La elaboración de un sistema de indicadores ambientales vinculados con las determinaciones territoriales que emanan del Plan General facilita la cuantificación de los impactos que de su desarrollo se deriven. Es objeto esencial de este documento alcanzar una estrategia de ordenación sostenible y proteger y conservar el patrimonio natural, paisajístico e histórico que alberga el municipio, sin coartar el progreso económico y social y la calidad de vida de sus ciudadanos. Con objeto de supervisar el desarrollo del Plan desde una perspectiva ambiental, se establece una estrategia de monitorización que incluya el análisis periódico de parámetros e indicadores ambientales. La adecuada selección de los indicadores facilitará la articulación de un programa destinado a recabar de forma continuada los datos que permitan detectar efectos adversos y no previstos, derivados de las determinaciones del planeamiento, cuya consecución requerirá un análisis previo para establecer los umbrales de referencia. En su caso, este mismo sistema es el que permitirá aportar los datos que avalen la necesidad de modificar o revisar el Plan General.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 134

134

Las conclusiones alcanzadas en relación a la finalidad y forma de realizar el seguimiento de estos indicadores en el territorio son las que siguen: INDICADORES AMBIENTALES.

- Indicadores y seguimiento de prevención relacionadas con los desprendimientos.

- Indicadores y seguimiento de prevención relacionadas con los incendios.

- Indicadores y seguimiento de prevención relacionadas con las avenidas y el desbordamiento de cauce.

- Calidad del agua de abasto (análisis periódicos).

- Calidad de las aguas de baño (cantidad de aguas de baño con calidad buena, apta o no apta,

en relación con el total de zonas de baño analizadas).

- Porcentaje de agua residual depurada (y % de aguas residuales sin tratamiento de depuración).

- Porcentaje de agua depurada reutilizada.

- Generación absoluta de residuos de construcción (KG/año).

- Recogida selectiva de residuos (por tipo de residuo: papel-cartón, vidrio, envases, muebles y

enseres, electrodomésticos, aceites, residuos de construcción y demolición…).

- Superficies de suelo rústico del municipio incluido dentro de la delimitación de Hábitats Directiva Europea 92/43.

- Superficies de suelo rústico del municipio protegida por sus valores culturales.

- Superficies de suelo urbano del municipio protegida por sus valores culturales.

- Relación de las especies protegidas existentes en el municipio, incluidas en las Directivas o

legislación específica medioambiental.

- Normativa Específica que regula la protección de los valores culturales y ambientales.

- Porcentaje de aceptación de alegaciones de carácter ambiental surgidas a partir de la exposición pública del Plan.

- Superficie de suelos destinados a prácticas agrícolas extensivas.

- Variación de la superficie ocupada por invernaderos.

- Variación de la superficie repoblada con especies autóctonas.

- Porcentaje de suelo artificializado.

- Porcentaje de ocupación residencial del litoral.

- Gestión patrimonial (catálogos y bienes de interés cultural. Altas, bajas e incidencias).

- Inversión municipal en medio ambiente.

- Nivel de cumplimiento de los objetivos ambientales y de sostenibilidad del Plan.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 135

135

- Incorporación de criterios ambientales y de sostenibilidad en los Planes territoriales que desarrollen el PGO.

INDICADORES SOCIOECONOMICOS.

- Evolución demográfica.

- Saldo migratorio.

- Producción.

- Incremento del consumo energético.

- Porcentaje de energía procedente de fuentes renovables (en relación a las fuentes convencionales).

- Consumo energético por sectores.

- Valor Añadido por sectores.

- Distribución del empleo por sectores.

- Oferta turística alojativa.

- Demanda turística.

- Parque de viviendas.

- Parque de viviendas protegidas.

- Nivel de ocupación de viviendas.

- Nivel de viviendas vacías.

- Oferta de nuevas viviendas.

- Demanda de vivienda protegida.

- Mejora del abastecimiento de agua.

- Dotación de espacios libres por habitante (m2/hab.).

- Dotación de infraestructuras de transporte por habitante (m2/hab.).

- Dotación de infraestructuras educativas por habitante (m2/hab.).

- Dotación de infraestructuras sanitarias por habitante (m2/hab.).

- Dotación de infraestructuras culturales por habitante (m2/hab.).

INDICADORES SOCIOECONOMICOS DE IMPACTO TERRITORIAL.

- Densidad demográfica.

- Superficie cultivada relativa.

- Cabaña ganadera.

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 136

136

- Superficie zonas industriales.

- Densidad turística.

- Oferta alojativa turística relativa.

- Dotación espacial de viviendas.

- Dotación espacial de nuevas viviendas.

- Tasa de rehabilitación urbana.

- Dotación espacial infraestructuras de transporte.

- Dotación espacial red viaria.

- Densidad de parque móvil. La plasmación territorial del planeamiento general resulta difícilmente predecible, al estar sometida a avatares de naturaleza política, financiera o jurídica. En consecuencia, cualquier programa de seguimiento que se plantee tiene un carácter meramente orientativo.

7. ESQUEMA DE LA NORMATIVA BÁSICA APLICABLE EN SUELO URBANO, URBANIZABLE Y RÚSTICO

Como ya se expuso en apartado 1.3 “Papel del ISA en el proceso de ordenación del PGO de Agaete”, si se examina el contenido que, de acuerdo al Documento de Referencia, ha de contener el Informe de Sostenibilidad Ambiental, resulta más que evidente que muchos de sus elementos no pueden formar parte del Avance. Así, por ejemplo, entre las representaciones gráficas, se exige que haya planos de clasificación de suelo y de ordenación de los núcleos urbanos, y entre las determinaciones escritas, normas urbanísticas, etc… Se trata, obviamente, de determinaciones urbanísticas que, como ya se ha justificado en el mismo apartado de este documento referenciado anteriormente, no son parte del Avance. Por tanto, tales determinaciones han de ser establecidas en una fase posterior al Avance.

8. RESUMEN NO TÉCNICO

El presente Informe de Sostenibilidad Ambiental, emana de la entrada en vigor de la Ley 9/2006, de 28 de abril, sobre evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente (B.O.E. de 29 de abril de 2006), como respuesta al mandato de la Directiva 2001/42/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de junio de 2001. El objetivo de ambas es promover un desarrollo sostenible. En el ordenamiento en Canarias, el contenido de los planeamientos de ordenación municipal ha de ajustarse a la Resolución de 10 de agosto de 2006, por la que se hace público el Acuerdo de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medioambiente de Canarias de 4 de agosto de 2006, relativo al Documento de Referencia para la elaboración de los Informes de Sostenibilidad de los PGO. En este sentido, existen muchos puntos coincidentes con el contenido ambiental de la Memoria de Información y de Diagnóstico de la Aprobación Inicial del PGO, por lo que se ha optado por sintetizar y remitir cada uno de los epígrafes de este informe a la Memoria de Ordenación del Plan, con el propósito de no duplicar información. Por tanto con el inventario ambiental, de manera resumida se hace una exposición de los principales elementos abióticos (geología, geomorfología, clima, red hídrica, suelos), bióticos (vegetación y fauna)

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 137

137

y antrópicos (patrimonio cultural, usos del suelo e impactos), que configuran en la actualidad el municipio de Agaete. En el Diagnóstico, se realiza una valoración de la situación actual del municipio, con el apoyo de cada una de las unidades ambientales delimitadas. Para cada una de ellas, se ha realizado la problemática ambiental, las limitaciones de uso que presentan, la calidad para la conservación y el valor cultural que poseen, así como la capacidad de uso de las mismas. Con el propósito de establecer y conocer las fuerzas y las debilidades municipales y poder encarar así la ordenación. Agaete cuenta con valores naturales, paisajísticos y culturales de elevado interés, distribuidos por todo su territorio. La importancia de dichos valores territoriales es dispar, y existen zonas del municipio que se encuentran en mejor estado de conservación, acogiendo elemento singulares que merecen ser preservados, frente a otros espacios más degradados y afectados por la alteración generada por actividades antrópicas de diversa naturaleza. Normalmente, los espacios más alterados y degradados coinciden con las periferias de las zonas urbanas, los bordes próximos al casco Agaete, Puerto de Agaete y el resto de los núcleos del municipio, motivo por el cual se desarrollan la mayoría de los SUC, SUNCU, SUS y SUSN. Estos solares sufren en muchos casos el impacto que genera el vertido de escombros, en ocasiones también basura o chatarra, movimientos de tierras, etc, que degradan sus condiciones naturales. Es ésta una situación habitual no sólo en este municipio, sino en los entornos urbanos y periferias de muchas ciudades y pueblos de Canarias. Sin embargo, las zonas rurales del municipio, presentan un grado de conservación y unos valores naturales más que aceptables, en muchos casos acogiendo elementos naturales de índole paisajístico, ecológico o cultural que merecen una atención especial, de cara a su conservación y, en algunos casos, de su mejora y reforma a través de actuaciones de acondicionamiento: recogida de basura, adecentamiento de fachadas, repoblaciones, etc. La mayor parte de los valores naturales más destacados con que cuenta el municipio se encuentran clasificados bajo alguna de las figuras de Espacios Protegidos que recoge la legislación canaria, nacional y autonómica. Las diferentes leyes existentes se encargan en la actualidad de preservar los espacios con mayor valor natural. Todas estas figuras de protección son debidamente contempladas en la designación de categorías de suelo del Plan General, con el fin de asignar los usos permitidos y prohibidos según las características del territorio. Se trata de establecer un mapa municipal de potencialidad de usos. Es decir, definir qué usos son los más apropiados para implantar en cada porción de territorio según las condiciones y características del mismo, y eso es justamente lo que viene a realizar el presente Plan General. Los espacios naturales declarados por el TRLotc-Lenac y aquellos otros espacios de reconocido valor natural obtienen en el presente documento el nivel máximo de protección al integrarse en la categoría de Protección Natural del Suelo Rústico. Además, se incluyen en las categorías de protección ambiental los espacios con valores paisajísticos, los accidentes geomorfológicos más significativos y las zonas naturales que aun no teniendo valores relevantes que proteger se encuentran poco transformadas (barrancos, conos volcánicas, malpaises, , laderas, montañas, lomos, acantilados y zona litoral,.), normalmente calificados como Suelo Rústico de Protección Paisajística. La primera y más importante conclusión que puede extraerse del análisis de los valores naturales de Agaete, es que éstos están debidamente protegidos, y que el Plan General los contempla bajo figuras de protección adecuadas. Respecto a los valores patrimoniales en Agaete, a tal efecto, en el Documento de Información y Diagnostico, en la Memoria de Información Ambiental, se describen los el patrimonio arqueológico y etnográfico del Término Municipal. Dentro de la Memoria de Diagnóstico, del documento de ordenación del presente Plan General figura un apartado denominado “Diagnosis Ambiental” (apartado 3.4 de este mismo Informe), que es justamente una síntesis del estado actual del territorio municipal desde el punto de vista natural. Se

Informe Sostenibilidad Ambiental. Tomo V

Plan General de Ordenación Supletorio de Agaete. Adaptación a las Directrices de Ordenación General y del Turismo. Avance. 138

138

trata de una valoración técnica que desde un enfoque holístico interpreta las diferentes variables territoriales con el fin de configurar un mapa de unidades ambientales homogéneas, o lo que es lo mismo, porciones de territorio que cuentan con características más o menos comunes. Dicho apartado se encarga de definir y delimitar unas unidades territoriales tomando como base el inventario ambiental previamente realizado y que de alguna manera se vuelca por medio de un esfuerzo de síntesis en dichas unidades homogéneas. De esta manera se pueden comparar espacios homogéneos que tienen unas características similares y tomar decisiones sobre estas unidades según sus características, de tal manera que se pueda expresar la capacidad de acogida del territorio, o lo que es lo mismo, deducir la vocación territorial para soportar los distintos tipos de uso: residencial, agrario, de infraestructuras viarias, etc. Por tanto, del diagnóstico realizado se considera que, será necesario asumir por las determinaciones de ordenación del PGO, el tratamiento de aspectos, tales como:

a) El vertido de tierra y escombreras de inertes relacionados con la transformación del suelo para usos residenciales, turísticos e industriales.

b) Las grandes desmontes, visibles a grandes distancias, así como las pequeñas extracciones

incontroladas cuya suma pone de manifiesto un problema ambiental potencialmente irreversible.

c) Las acciones a llevar acabo en el frente litoral y en las zonas de mucha pendiente.

d) Los procesos incontrolados de edificación.

e) La rehabilitación, restauración y recuperación del frente litoral municipal, como icono

ambiental, cultural, científico y ocio-recreativo.

f) Que los asentamientos rurales no sufrirán modificaciones significativas, solo redelimitaciones de ajuste, limitaciones que recogen preexistencias, no implicando transformaciones importantes.

g) Que los crecimientos se propongan dentro de los actuales suelos urbanos existentes y con

espacios intersticiales a colmatar. h) Proyectos de restauración ambiental.