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[ Técnicas de cultivo ] Agricultura Abril 08 I 308 E n la olivicultura actual existen tres tipologías muy definidas: tradicional, intensiva y seto. Estos sistemas de cultivo responden de forma general en el primer caso a plantaciones con árboles de 3-4 tron- cos y en número de 60-120 por hectá- rea, que pasan a 200 – 400 olivos por hectárea, y a un solo tronco con 2-3 ramas principales en el segundo, y a 800-2000 árboles por hectárea y for- mación en un eje en el tercero. En el presente artículo, se hace refe- rencia a la poda de los olivares consig- nados en el segundo caso: los denomi- nados intensivos, si bien los princi- pios y objetivos, con carácter general, son compartidos por los tres tipos, ex- cepción hecha de los criterios concer- nientes a la poda de formación. Este tipo de plantaciones de olivar son las que mayoritariamente se vienen reali- zando desde hace ya más de tres déca- das en España y resto del mundo. Poda y recolección: Gran demanda de mano de obra Junto con las demás prácticas y téc- nicas de cultivo, la poda tiene como fi- nalidad la optimización productiva y económica del olivar. La poda y la re- colección son las grandes demandan- tes de mano de obra y recursos eco- nómicos en el olivar. En el Gráfico 1, se muestran estos requerimientos pa- ra dos tipos de olivar destinados a la producción de aceituna para mesa y almazara. Estas dos actividades suponen el 80- 90% de la demanda de mano de obra y el 50-70% de los costes totales del cul- tivo, y por tanto, cualquier modifica- ción o actuación en ellas, por mínima que esta sea, se traducirá inmediata- mente de forma muy importante en el resultado de la cuenta de explotación. El derribo de la aceituna mediante vibradores de tronco es la práctica más generalizada, aunque en los últi- mos años están apareciendo en el mercado equipos de recolección con- tinua con unos requerimientos de em- pleo de mano de obra relativamente bajos y una calidad de trabajo y rendi- miento aceptables (Foto 1). No se con- cibe hoy en día una recolección que no esté mecanizada, dependiendo el grado de tecnificación de los medios disponibles por el olivarero. El rendi- miento de la maquinaria y mano de obra en la recolección está muy direc- tamente relacionado con la práctica de la poda, sobre todo en todo lo con- cerniente con la formación del árbol. Poda de formación Con las actuaciones realizadas me- diante la poda de formación durante los primeros años de la vida de los ár- boles, se modifica la forma natural de su vegetación para vigorizar o restrin- gir el desarrollo de las ramas con la fi- nalidad de darles forma y conseguir la Poda del olivo en la olivicultura intensiva [ OPTIMIZACIÓN DEL OLIVAR ] El rendimiento de la maquinaria y mano de obra en la recolección está muy directamente relacionado con la práctica de la poda, por ello debemos cuidar de forma exhaustiva las técnicas de poda que aplicamos en dicho cultivo. Sobre todo, en sus primeras estadías, porque de ello dependerá en gran parte el éxito de nuestra plantación Victorino Vega Juan Carlos Hidalgo Javier Hidalgo IFAPA. Centro “Alameda del Obispo”. Córdoba 1 De izda. a dcha., distintos sistemas de recolección mecanizada: vibrador acoplado al tractor, sin y con receptor de frutos tipo paraguas; recolectora integral continua tipo vendimiadora para olivar en seto y recolectora integral para olivar intensivo. [

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[Técnicas de cultivo ]

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En la olivicultura actual existentres tipologías muy definidas:tradicional, intensiva y seto.

Estos sistemas de cultivo respondende forma general en el primer caso aplantaciones con árboles de 3-4 tron-cos y en número de 60-120 por hectá-rea, que pasan a 200 – 400 olivos porhectárea, y a un solo tronco con 2-3ramas principales en el segundo, y a800-2000 árboles por hectárea y for-mación en un eje en el tercero.

En el presente artículo, se hace refe-rencia a la poda de los olivares consig-nados en el segundo caso: los denomi-nados intensivos, si bien los princi-pios y objetivos, con carácter general,son compartidos por los tres tipos, ex-cepción hecha de los criterios concer-nientes a la poda de formación. Estetipo de plantaciones de olivar son lasque mayoritariamente se vienen reali-zando desde hace ya más de tres déca-das en España y resto del mundo.

Poda y recolección: Gran demanda de manode obra

Junto con las demás prácticas y téc-nicas de cultivo, la poda tiene como fi-nalidad la optimización productiva yeconómica del olivar. La poda y la re-colección son las grandes demandan-tes de mano de obra y recursos eco-nómicos en el olivar. En el Gráfico 1,se muestran estos requerimientos pa-ra dos tipos de olivar destinados a laproducción de aceituna para mesa yalmazara.

Estas dos actividades suponen el 80-90% de la demanda de mano de obra yel 50-70% de los costes totales del cul-tivo, y por tanto, cualquier modifica-ción o actuación en ellas, por mínimaque esta sea, se traducirá inmediata-mente de forma muy importante en elresultado de la cuenta de explotación.

El derribo de la aceituna mediantevibradores de tronco es la prácticamás generalizada, aunque en los últi-mos años están apareciendo en elmercado equipos de recolección con-tinua con unos requerimientos de em-pleo de mano de obra relativamentebajos y una calidad de trabajo y rendi-miento aceptables (Foto 1). No se con-cibe hoy en día una recolección queno esté mecanizada, dependiendo elgrado de tecnificación de los mediosdisponibles por el olivarero. El rendi-miento de la maquinaria y mano deobra en la recolección está muy direc-tamente relacionado con la prácticade la poda, sobre todo en todo lo con-cerniente con la formación del árbol.

Poda de formación

Con las actuaciones realizadas me-diante la poda de formación durantelos primeros años de la vida de los ár-boles, se modifica la forma natural desu vegetación para vigorizar o restrin-gir el desarrollo de las ramas con la fi-nalidad de darles forma y conseguir la

Poda del olivo en la oliviculturaintensiva

[ OPTIMIZACIÓN DEL OLIVAR ]

El rendimiento de la

maquinaria y mano de obra

en la recolección está muy

directamente relacionado

con la práctica de la poda,

por ello debemos cuidar de

forma exhaustiva las técnicas

de poda que aplicamos en

dicho cultivo. Sobre todo, en

sus primeras estadías,

porque de ello dependerá en

gran parte el éxito de

nuestra plantación

Victorino VegaJuan Carlos Hidalgo Javier HidalgoIFAPA. Centro “Alameda delObispo”. Córdoba

1

De izda. a dcha., distintos sistemas de recolección mecanizada: vibrador acoplado altractor, sin y con receptor de frutos tipo paraguas; recolectora integral continua tipovendimiadora para olivar en seto y recolectora integral para olivar intensivo.

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máxima productividad. La poda debecumplir una serie de objetivos, entrelos que se puede citar:

• Formar y adaptar el olivo funda-mentalmente para la realización dela recolección mecanizada. • Adaptar el tamaño del árbol al me-dio productivo en el que vegeta.• Distribuir la vegetación en el árbolpara mejorar la iluminación.• Realzar todas aquellas ramas queimposibiliten o dificulten las distin-tas faenas de cultivo.• Rebajar la copa eliminando chupo-nes vigorosos que acortan la vidaproductiva de las ramas sobre lasque se insertan.• Mejorar la calidad de los frutos.• Rejuvenecer el árbol cuando ésteasí lo requiere.

Los dos objetivos básicos de la podade formación son, por un lado, la cre-ación de una estructura que en el fu-

riedad en particular, proporcionanproducciones precoces y abundantes,y demandan mano de obra poco espe-cializada. Otros sistemas como el mo-nocono, la palmeta o el ypsilon cuan-do se los ha comparado con el vaso(Morettini, 1972; Fontanazza, 1984;Parlati, 1995; Angeli, 1995) han resul-tado ser menos interesantes desde elpunto de vista productivo. En algu-nos casos se han necesitado unas in-versiones elevadas en medios mate-riales para la poda de formación,además de no haber representadouna mejora en la eficacia de derribode los frutos mediante el empleo devibradores de troncos.

El tipo de plantón que se va a utili-zar para la plantación tiene gran im-portancia. Se aconsejan los plantonesformados de un solo tronco en vivero,obtenidos mediante autoenraiza-miento de estaquilla semileñosa bajonebulización, dadas las ventajas quepresentan frente a los obtenidos deestaca gruesa. Destaca su mas rápidaentrada en producción y menores cui-dados e intervenciones de poda du-rante las primeras etapas de desarro-llo hasta formarles el tronco hasta laaltura de la cruz (Foto 2).

Una vez realizada la plantación, so-lamente se eliminarán las brotacioneso varetas emergidas directamente so-bre el tronco, a ser posible antes deque se lignifiquen para evitar hacerheridas de importancia. Este tipo debrotaciones se han de eliminar con lamano sin ayuda de ningún utensilio

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Gráfico 1: Distribución (%) de mano de obra empleada y costes de cultivo (%)en dos tipos de olivar (almazara y mesa).

La poda y la recolección son

fundamentales en la economía de

una explotación olivarera pues

acapara el 80-90 % de la demanda

de mano de obra y el 50-70 % de

los costes totales del cultivo

Estaquilla semileñosa autoenraizada bajo nebulización. Olivo joven podado formadoa un solo tronco hasta altura de cruz.

turo será el soporte de los órganos ve-getativos, así como de la cosecha du-rante la vida productiva del árbol; ypor otro, posibilitar la mecanizaciónintegral del cultivo, teniendo en cuen-ta que el rendimiento de la maquina-ria se ve muy afectado por el númerode troncos de los olivos y por la es-tructura de los árboles que afecta alporcentaje de frutos derribados por elvibrador.

Las formas libres en vaso, sobre unúnico tronco, que respeten la tenden-cia natural de la especie y de cada va-

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de corte. Si las varetas están demasia-do lignificadas y necesitamos unas ti-jeras o una navaja para cortarlas, yahemos llegado demasiado tarde, perohabrá que eliminarlas cuanto antes.

Repaso de poda

Periódicamente, en función del creci-miento de la planta, se dará un rápidorepaso de poda a la plantación. En esterepaso se realizarán simultáneamentelas siguientes operaciones:

• Revisión, reposición y aumento delnúmero de ataduras al tutor, mante-niendo siempre la planta en posiciónvertical.• Eliminación de las varetas y ramasbajas, insertas por debajo de la futuracruz, de forma escalona, comenzandopor las ramitas más vigorosas y contendencia a la verticalidad.• En la copa, en principio no realiza-rán ningún tipo de cortes ni pinza-mientos, favoreciendo la formaciónde una bola, esperando que con eltiempo la propia planta nos indiquecuáles serán las 2 ó 3 ramas más vigo-

rosas, que serán las futuras ramasprincipales, pero sin realizar todavíaningún tipo de intervención severa.• Cuando la planta tenga aproxima-damente de 0,80-1,20 m sobre el sue-lo se realizará la última atadura al tu-tor, punto a partir del cual se formarápor sí sola la futura cruz del olivo.• Vigilar que las ataduras o el propiotutor no causen estrangulamientos oheridas a las plantas, eliminando di-chas ataduras y reponiéndolas cadacierto tiempo si no se ha empleadomaterial degradable. Igualmente, hayque vigilar la posición relativa plan-ta/tutor en relación con los vientosdominantes.• Se realizará un control exhaustivode plagas y enfermedades, medianteun calendario riguroso de tratamien-tos durante los años de crianza de laplantación, para adelantarse siemprea la presentación del problema, yaque eventuales ataques de prays, gli-fodes o acariosis pueden estropear eltrabajo realizado con anterioridad. Elabichado (Euzophera pinguis), si noes bien controlado, puede causar lamuerte de muchos de los olivos de laplantación.

La forma de actuación presentadaanteriormente ha sido discutida pormultitud de técnicos y agricultores, ha-biéndose puesto de manifiesto por di-versos autores (Hartmann et al.1960;Pastor, 2004) que el procedimientodescrito anteriormente es el correcto.

Si el crecimiento de la plantación es

vigoroso, al segundo o tercer año, unavez que los árboles han dado las prime-ras aceitunas, ya se podrá realizar algu-na intervención de poda que organicela copa del árbol y seleccione las futu-ras ramas principales, siempre con ac-tuaciones de moderada intensidad.

La estructura básica propuesta parala formación del árbol es de un solotronco, lo más vertical posible y desdeel que se ramificarán, a una altura me-dia de 1 m sobre el suelo (0,80 – 1,20m), tres ramas principales o dos ramasbifurcadas de forma dicotómica.

A esta estructura se llegará sin inter-venciones drásticas de poda que dese-quilibren la copa del árbol, de una for-ma escalonada, con 2 ó 3 intervencio-nes muy suaves anuales. No son admi-sibles podas de formación que, al eli-minar una parte importante del árbol,ocasionen un desequilibrio en la rela-ción hoja/raíz, debilitando la planta ydisminuyendo su crecimiento y retra-sando la entrada en producción (Gráfi-co 2). Cuando el tronco pueda mante-ner la copa por sí mismo, se eliminaránlos tutores y las ligaduras, para no per-mitir brotaciones de ningún tipo pordebajo de la cruz.

Volumen óptimo paramáximas cosechas

Llegado este momento, las interven-ciones de poda serán mínimas con lafinalidad de llegar lo más rápidamente

Olivar en el periodo adultojoven. Las intervenciones depoda deben ser mínimas paraalcanzar cuanto antes elvolumen óptimo.

Gráfico 2: Producción acumulada (kg/olivo) de un olivar de la variedad‘arbequina’ sometido a diferentes tipos de poda.

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El tipo de plantón a utilizar

para la plantación tiene gran

importancia, aconsejándose los

plantones formados a un solo

tronco en vivero

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posible al volumen de copa óptimocompatible con el medio productivo enel que vegeta la plantación, volumenque cuando la plantación ha alcanzadosu inestimable desarrollo es constantee independiente de la densidad deplantación. Estas acciones se limitarána pequeñas intervenciones de elimina-ción de ramas bajas que dificulten lasaplicaciones de herbicidas, la realiza-ción de labores o bien pequeños brotesen el interior de la copa (Foto 3).

Cuando las plantas alcanzan este vo-lumen inmejorable se obtendrán lasmáximas cosechas, siendo además és-tas de buena calidad. El volumen decopa óptimo depende de diversos fac-tores como la textura, características fí-sico-químicas y profundidad de suelo,la climatología de la zona, etc. pero so-bre todo de las disponibilidades deagua. Cuantos mayores son estas, ma-yor volumen de copa por olivo pode-mos tener.

Si por desconocimiento o descuidodel podador se llegase a superar el vo-lumen de copa óptimo que el medio escapaz de mantener, se producirán pro-blemas como consecuencia de un ma-yor déficit hídrico estival. Así se obser-va la caída de frutos y defoliaciones queocasionan un brusco descenso en la re-lación hoja-madera, así como otrosefectos negativos que, a corto y medioplazo, pueden afectar a la producción yla rentabilidad de la plantación.

No son admisibles, por tanto, podas

intensas en este periodo, y éstas solo sejustificarían si fuese necesario elevar laaltura de la cruz para no hipotecar enel futuro la mecanización. Se ha demantener una elevada relaciónhoja/madera, o dicho de otra forma, elíndice de área foliar debe ser lo mayorposible. Así se aseguran de esta formaunas altas producciones.

Criterios diferenciadoresen olivar de secano yregadío

Es frecuente que se poden las plan-taciones de riego con los mismos cri-terios que en secano, lo cual siempreocasiona importantes pérdidas deproducción, con lo que disminuyepermanentemente el potencial pro-ductivo de las plantaciones. Se ha deresaltar que la transformación de unolivar de secano a riego debe llevaraparejado un aumento de tamaño delos árboles, traduciéndose finalmenteen una mayor producción. En el olivarde riego, las intervenciones de podaanuales muy poco severas que alterenmínimamente el volumen de copa sonlas aconsejadas.

Si en secano se pueden mantenervolúmenes de copa de unos 8.000m3/ha en las mejores zonas olivarerasde Andalucía, en riego esta cifra po-dría estar entre los 11.000 y 13.000m3/ha, en función de las dotacionesde agua disponibles.

La importancia del aclareo

Durante la época adulta de planta-ción, la poda se realizará de forma quese mantenga el volumen de los árboleslo más próximo al óptimo para ade-cuarlo a las disponibilidades de agua

Las formas lobuladas son preferibles frente a las esféricas, ya que la radiacióninterceptada es mayor para un mismo volumen de copa.

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Gráfico 3: Valores de rendimientos grasos enaceitunas procedentes de distintasposiciones en el olivo

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mediante la realización, en la mayoríade los casos, de una serie de aclareosque mejoren la cantidad de radiaciónsolar interceptada por las hojas, consi-guiéndose además una mejora en la ca-lidad de la producción obtenida.

Son preferibles las formas lobuladasa las esféricas, ya que a igualdad de vo-lumen de copa por olivo, las primerastienen mayor superficie iluminada y defructificación, y por tanto un mayorpotencial productivo (Foto 4).

En el Gráfico 3 se representan los va-lores de rendimiento graso de los fru-tos recolectados en diferentes zonasdel árbol. Se observa que en aquellaszonas donde hay una mala iluminaciónes donde se obtienen los frutos con me-nores rendimientos.

En el Gráfico 4 se representa gráfica-mente una evolución teórica del desa-rrollo de la copa de los árboles desdesu plantación hasta conseguir su vo-lumen óptimo, así como las modifica-ciones del mismo mediante la poda enel periodo adulto. El tiempo hasta al-canzar el este volumen optimo depen-de fundamentalmente de la densidady del medio productivo donde se esta-blezca la plantación.

Mediante la oportuna dosificaciónde la poda, único método disponiblepara controlar el crecimiento de losárboles, se debe de mantener el ópti-mo volumen de copa y el equilibrio en-tre la fructificación y el crecimiento.

En las zonas de aceituna de mesa sehan buscado soluciones alternativas ala poda severa de aclareo de ramosfructíferos como medio de conseguirfrutos de mayor calibre (Foto 5). El ca-

libre del fruto tiene una gran impor-tancia sobre la rentabilidad final delcultivo, dada la relación directa entre elprecio percibido por el olivarero y ta-maño del fruto. Las soluciones podríanser el aclareo químico de frutos (Pastoret al., 1992) técnica que permite redu-cir el número de frutos por olivo des-pués del cuajado, y el riego (Pastor etal., 1996; Pastor et al., 2004), que paraigual número de frutos por árbol, per-mite un importante aumento del tama-ño de las aceitunas con respecto al se-cano, e incluso obtener cosechas de ca-libre comercial en años de gran carga.

El aclareo químico de frutos podríaser una técnica interesante, ya que per-mitiría no realizar las podas severaspracticadas en las zonas del verdeo. Latécnica de aclareo químico puede susti-tuir a la poda severa, con las induda-bles ventajas que ello trae consigo. Estapráctica consiste en pulverizar una so-lución de ácido naftalenacético (ANA)a una concentración de 150 ppm demateria activa sobre las hojas del olivo,cuando los frutos cuajados tienen undiámetro polar medio de 3-5 mm, loque normalmente acontece unos 15 -20 días después del momento de plenafloración (Foto 6).

Escasez de mano de obraespecializada: la podamecánica

La disminución que en los últimosaños se ha observado de personas de-dicadas a las tareas de poda unida alaumento de la superficie de olivar haceque cada vez sea más difícil disponer

de podadores experimentados. Estehecho hace que muchos olivareros seplanteen la posibilidad de emplear sis-temas de poda mecánica.

Este sistema es un método de podaque recibe su nombre debido a que loscortes se realizan con ayuda de unamáquina podadora de discos rotativosmontada sobre un tractor de media po-tencia, que se mueve a velocidad cons-tante por el centro de la calle, y que re-aliza cortes perpendi-culares o concierta inclinación con respecto a la su-perficie del suelo, o paralelos a dichasuperficie (Foto 7).

La poda mecánica puede ser un mé-todo viable en las siguientes situacio-nes:a) En la poda de producción durante el

período adulto-joven de la planta-ción, sustituyendo a la clásica podamanual de producción.

b) En olivares intensivos para adaptar,de una forma sencilla, el volumen decopa de la plantación al óptimo pro-ductivo. Eso permite ensanchar lascalles para hacer posible el paso de lamaquinaria, mejorando además la ai-reación e iluminación.

c) En podas severas de rebaje para re-juvenecer olivares intensivos enveje-cidos debido a la edad, a las altas pro-ducciones y al exceso de volumen decopa.

Las intervenciones de poda mecánicadeben ser severas. Se elimina con lapodadora un casquete esférico cuya al-tura sea entre 1,00 y 1,50 m en la partealta de la copa de los árboles, dejandoposteriormente períodos de tiempo de

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Un menor número de frutos por olivo conlleva una mejora en el peso medio de losmismos, y por tanto en su calibre. Con la poda se puede reducir el volumen de copapara conseguir mejores calibres, pero con una reducción en la producción aldisminuir el número de frutos por árbol.

Gráfico 4: Evolución teórica del volumen de copaen una plantación de olivar hastaconseguir el volumen de copa óptimo. A medida que la densidad de plantaciónes mayor, menor es el tiempo hastaalcanzar el volumen óptimo

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tres o cuatro años sin intervenir denuevo con la máquina. Con ello se per-sigue reconstituir el árbol sobre lasbrotaciones vigorosas producidas y po-der rentabilizar productivamente loscrecimientos que se han producido co-mo consecuencia de los cortes realiza-dos con la podadora de discos. En lascaras laterales, las brotaciones son mu-cho menos vigorosas, por lo que es su-ficiente con un corte que elimine uncasquete esférico de 0,75 m de alturacomo máximo.

Es imprescindible alternar la podamecánica con elementales intervencio-nes manuales en el interior del árbol,mediante el aclareo de la copa con lamotosierra y evitar así llegar a situacio-nes límite en las que el olivo puede de-jar de producir debido a la acumula-ción de chupones y de madera en su in-terior.

En el Gráfico 5, se presentan los datosde producción obtenidos en un ensayode larga duración, una media de 9 co-

sechas, en un olivar de la variedadManzanilla con riego de apoyo, en elque se han comparado un sistema depoda mecánica sin/con eliminación demaderas gruesas muertas y aclareo dechupones interiores con el tradicionalde poda manual. Puede observarse laexcelente respuesta productiva del oli-var a la poda mecánica, y puede seruna solución para este tipo de olivar,sobre todo, si se acompaña de sistemasde recolección mecanizada y prácticasde aclareo químico.

El mayor inconveniente que planteaeste sistema de poda mecánica es la di-ficultad para la recolección manual delas aceitunas cuando se lleva podandomecánicamente una serie de años, difi-cultad que se solventa mediante aclare-os manuales de la copa cada cierto nú-mero de años, o mediante la recolec-ción mecánica con vibrador.

El sistema es poco viable y poco acon-sejable en plantacio-nes adultas some-tidas al proceso de rejuvenecimiento

continuado típico de Andalucía,debido al escaso poder de brota-ción de las ramas gruesas muy en-vejecidas.

Podas severas derejuvenecimiento

En el olivo, a medida que pasanlos años, se produce un lento decai-miento, por lo que al final de su pe-ríodo adulto empiezan a manifes-tarse síntomas de envejecimiento,que poco a poco vuelven al árbolpoco productivo. El árbol va acu-mulando madera, se acentúa la ve-cería y la producción empieza a de-caer como consecuencia de un me-nor crecimiento de los brotes, deun empeoramiento del tamaño del

fruto, de una menor actividad fotosin-tética de las hojas que adquieren unatonalidad amarillenta, y son necesariasuna serie de podas severas que regene-ren parte del árbol, manteniendo lasotras en producción. Estas intervencio-nes se harán espaciadas en el tiempo,actuando en determinadas zonas delárbol y eliminando madera gruesa. Deesta forma, al cabo de varios años ten-dremos el árbol totalmente rejuveneci-do y a plena capacidad productiva denuevo.

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Producciones de aceitunas (kg/ha) obtenidas en un olivar dela variedad Manzanilla con riego de apoyo en el que se haaplicado poda mecánica.

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Gráfico 5: Producciones de aceitunas(kg/ha) obtenidas en un olivar dela variedad Manzanilla con riegode apoyo en el que se ha aplicadopoda mecánica

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Máquina podadora realizando un topping. El manejo de losvolúmenes de copa se simplifica con la utilización de estamaquinaria.

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