EL NOMBRE DAVID

Prologo

El nombre de la persona conecta con su esencia; capta la

energía cósmica a través de las letras que lo integran, y la

proyecta por medio del alma. Ésas letras están vinculadas con el

origen de las capacidades innatas de la persona, sus virtudes,

habilidades, destrezas, talentos, dones, gracia, vocaciones y

aptitudes.

Por lo tanto, el conocimiento de ésos datos a través de las letras

del nombre es un medio esencial para conocerse mejor y

modelar el carácter.

LA CONEXIÓN SUPREMA

Lo concerniente al vínculo del alma con la esencia del nombre

tiene fuente cabalística. Tal como fue enseñado: el alma se

recibe en el momento de la concepción, y eso está indicado en la

cita bíblica que describe el proceso del nacimiento de un ser

humano, como está escrito: «Cuando una mujer conciba y dé a

luz un hijo varón [...]» (Levítico 12:2).

¿Por qué razón dice: «cuando una mujer conciba», e

inmediatamente a continuación: «y dé a luz un hijo varón?

¿Acaso da a luz después de concebir?

La respuesta es ésta: se hace hincapié en mencionarse el

momento de la concepción debido a que es el instante en el que

se determinan las características del embarazo. Porque después

de la concepción, la mujer ya habrá engendrado, y el ser

humano que se gestará en su interior tendrá las características

que fueron determinadas en ése momento. Pues a partir de la

concepción se determina lo que ocurrirá en el parto, ya que al

concebir se otorga el alma, que es lo principal de la persona

(véase Or Hajaim: Levítico 12:2).

LA IDENTIDAD DEL ALMA

Hemos visto que el alma se otorga en el momento de la

concepción. Y respecto al alma se enseñó que se la reconoce en

lo Alto, porque cada una tiene una identidad particular, y un

nombre propio, como fue enseñado: Dijo Rabí Yojanán: está

escrito: «Él hace grandes cosas, insondables; e innumerables

maravillas» (Job 9:10). Se refiere a las grandes cosas que El

Santo, Bendito Sea, hace con el nacimiento de un ser humano.

EL NACIMIENTO Y SUS IMPLICANCIAS

La razón de lo mencionado se debe a que cuando el hombre

cohabita con su mujer para procrear, El Santo, Bendito Sea, da

una indicación al ángel que está a cargo de las concepciones. Y

El Santo, Bendito Sea, le dice:

—Sabe que en esta noche se producirá la concepción de un ser

humano proveniente de la simiente de zutano. Sábelo y cuida

ésta gota –la esencia espiritual del cigoto–, y tómala en tu

mano, y lábrala con 365 partes –correspondientes a los 365

conductos sanguíneos esenciales del cuerpo de un ser humano–.

El ángel hace así, e inmediatamente toma la gota en su mano, y

la trae ante El que pronunció palabra y el mundo existió, y dice

ante Él:

—He hecho conforme a todo lo que me has ordenado, y esta

gota, ¿qué ocurrirá con ella?

Inmediatamente El Santo, Bendito Sea, decreta sobre ésa gota

qué ocurrirá con ella al final, si será varón, si será mujer. Si ése

ser humano que nacerá a partir de la misma será débil, si será

fuerte. Si será pobre, si será rico. Si será bajo, si será alto. Si será

antiestético, si será atractivo. Si será –por naturaleza–

voluminoso, si será delgado. Y así establece todas sus

características. Pero si será justo o malvado, no. Pues a eso lo

otorga en poder de la persona solamente, dándole libre

albedrío, como está dicho: «Observa, he puesto ante ti hoy la

vida y el bien, la muerte y el mal [...]» (Deuteronomio 30:15–

18). Se aprecia que El Santo, Bendito Sea, otorga libre albedrío

para que cada uno elija ser bueno o malo.

EL OTORGADO DEL ESPÍRITU

Inmediatamente El Santo, Bendito Sea, da una indicación al

ángel que está a cargo de los espíritus, y le dice:

—Tráeme al espíritu mengano, que está en el Jardín del Edén,

cuyo nombre es mengano, y sus características son ésta y ésta.

Pues todos los espíritus –rujot– que en el futuro serían

otorgados, ya estaban creados desde el día en que El Santo,

Bendito Sea, creó el mundo, hasta el final, estando preparados

para las personas, como está escrito: «Lo que es ya fue llamado

por su nombre» (Eclesiastés 6:10).

Inmediatamente el ángel va y trae el espíritu ante El Santo,

Bendito Sea. Y cuando el espíritu viene, de inmediato se inclina

y prosterna ante el Rey de reyes, El Santo, Bendito Sea. Y en ese

momento, El Santo, Bendito Sea, dice al espíritu:

—¡Entra en ésta gota –el origen espiritual del cigoto– que está

en poder de zutano! (Midrash Tanjuma: Pekudei III).

LA CONEXIÓN SUPREMA

Todas ésas características mencionadas, y sus manifestaciones,

están incluidas en las letras del nombre. Por eso, Rabí Meir

revisaba el nombre de la persona y sabía lo que ocurría con ella,

debido a que era experto en esta ciencia (Midrash Talpiot).

Además, en el Talmud se enseñó que el vínculo del nombre con

lo Alto tiene fuente bíblica, como dijo Rabí Eleazar: está escrito:

«Venid, observad las obras de El Eterno, que ha puesto

asolamientos en la Tierra» (Salmos 46:9). La palabra que indica

«asolamientos», en el texto original hebreo es shamot. Y

shamot puede leerse también shemot, que significa «nombres».

Es decir, en esta cita se encuentra aludido el misterio de la

esencia de los nombres (véase Talmud, tratado de Berajot 7b;

Maarshá).

Ahora bien, la persona, ¿cómo recibe su nombre? El Eterno

hace surgir de la boca de quien otorgará el nombre al recién

nacido, un nombre específico y apropiado para la criatura. Sin

embargo, el que hace esto desconoce la razón esencial que lo

llevó a elegir ese nombre determinado. Aunque después de

algunos años, el motivo encerrado en ese nombre se manifiesta

reveladamente en la vida de quien fue llamado así. Y esto no es

sólo para los Hijos de Israel, sino para todo el mundo (Hakotev

en Ein Iakov, véase Berajot 7b, Mefarshei Hatalmud).

Por lo tanto, a través del conocimiento de los rasgos esenciales

del carácter, incluidos en las letras del nombre, se pueden

trabajar y desarrollar los positivos y beneficiosos, y controlar y

modelar apropiadamente los negativos.

EL ANÁLISIS DEL NOMBRE

Debido a la gran relevancia de estos conocimientos,

observaremos las características esenciales de las letras con que

se escribe el nombre David.

El estudio se realiza en forma puntillosa con el sistema

elaborado por el rabino Aharón Shlezinger, basado en

profundos estudios cabalísticos.

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I

EL COMIENZO DEL NOMBRE

En este capítulo desarrollaremos la primera etapa de nuestro

estudio. Observaremos las características y naturalezas que

surgen de la letra inicial de vuestro nombre David, la cual es

considerada la cabeza del nombre.

Para realizar esta observación, y también las siguientes,

debemos conocer las letras hebreas correspondientes al nombre

David. Pues el hebreo ancestral es el lenguaje bíblico original, y

es, por lo tanto, la base de toda la creación y de todas las

lenguas que existen en el mundo.

¿Y de dónde sabemos que el mundo fue creado con las letras

hebreas? Como está escrito: «El Eterno Dios hizo caer sueño

profundo sobre el hombre, y se durmió; entonces tomó uno de

sus costados y cerró la carne en su lugar. Y El Eterno Dios

construyó con el costado que tomó del hombre una mujer y la

trajo al hombre. Y el hombre dijo: “Ésta es ahora hueso de mis

huesos y carne de mi carne; ésta será llamada mujer –ishá–,

porque del hombre –ish– fue tomada”» (Génesis 2:21–23).

Se revela en el versículo que el concepto ishá –mujer– deriva de

ish –hombre–, lo cual enseña que la Torá fue entregada en la

Lengua Sagrada –hebreo–.

LA LENGUA ORIGINAL

Rabí Pinjas y Rabí Jilkía dijeron en nombre de Rabí Simón: así

como la Torá fue entregada en la Lengua Sagrada, del mismo

modo, el mundo fue creado con la Lengua Sagrada. Pues, ¿acaso

has oído en todos tus días de vida que un griego que habla

griego y dice a una mujer gyné, diga a un hombre gynea? ¿O tal

como dice al hombre antropei, que diga a la mujer antropa? ¿O

un arameo que habla arameo, y dice al hombre gavra, acaso

dice a la mujer gavreta? ¡Ciertamente que no! Por lo tanto, los

términos ish e ishá mencionados en el versículo, ¿cuál es la

razón de su enunciado? Para enseñar que esta locución, ishá,

deriva de esta otra locución, ish, o sea, se refiere a la Lengua

Sagrada, que es la lengua hebrea (Midrash Bereshit Raba cáp.

XVIII).

LAS LETRAS DEL NOMBRE

El nombre David se escribe así con letras hebreas:

דוד

LA LETRA INICIAL DEL NOMBRE

Ésta es la información que surge a partir del primer carácter de

vuestro nombre David:

PRIMERA LETRA

LETRA DALET: ASPECTO GENÉRICO

El primer factor que analizaremos de la primera

letra de vuestro nombre es su género. Ya que cada

letra del alfabeto hebreo se identifica con un

género específico. Esto es en el plano cósmico, o

sea, en el plano espiritual1. Y hay letras que

proyectan energía proveniente del género

masculino y también del femenino2.

El género masculino cósmico se vincula

esencialmente con la capacidad de dar, y el género

femenino cósmico, con la capacidad de recibir y

transmitir3.

1Zohar Shir Hashirim, Matok Midbash.2Véase Hagaá, ibíd.3Matok Midbash

Por eso, el Sol, que está vinculado con el género

masculino, da luz a la Luna y la nutre; y la Luna,

que está vinculada con el género femenino recibe

la luz solar y la transmite. Y por eso el Sol tiene

ciclos graduales (en las cuatro estaciones), pero

siempre conserva su capacidad de irradiar

luminosidad; mientras que los ciclos de la Luna son

mucho más bruscos, hasta oscurecerse

completamente y volver a cargarse de luz y

renovarse cada mes.

Y el rigor vinculado con los momentos de

oscuridad se atenúa con la esperanza de la llegada

de la luz. Por eso, es importante conocer las

energías positivas de las letras del nombre. Ya que

la aprehensión de esas energías ayudará a

superarse constantemente y hacer frente a los

momentos difíciles, en los cuales hay oscuridad y

padecimiento, asociados a las energías negativas y

malas.

Pues fue enseñado: todo lo que hay en el mundo,

también lo considerado malo, tiene

indefectiblemente energía vivificante enraizada en

el bien4.

Esa energía está relacionada con las letras del

nombre5.

INFORMACIÓN GENÉRICA

La letra dalet, con que comienza vuestro nombre

David, se vincula con la capacidad de recibir y

transmitir6.

Esta energía propicia el desarrollo de estas

facultades: capacidad de amar, complacer,

demostrar afecto, ser fuerte, afrontar con valentía

los desafíos, e instruir con responsabilidad. La

energía que se proyecta a través de esta letra

4Or Hajaim Éxodo 11:55Véase Bnei Isasjar; y véase La Torá Explicada III, cáp. VI6Véase Zohar Shir Hashirim, Matok Midbash, Hagaa

ayuda a dotar de la capacidad necesaria para salir

adelante en los momentos apremiantes.

Asimismo, a través de esa energía se despierta el

deseo de ayudar a los demás, tanto de su propia

familia y entorno, como a otras personas. Pues es

una energía que insta a saber recibir, y dar

generosamente de lo que se recibe. Esta

característica ayuda a desarrollar la virtud innata

de contener a otras personas, y sostenerlas

cuando están decaídas o con el ánimo bajo, y

también cuando tienen problemas de otra índole.

A través de estas energías positivas, se neutralizan

las negativas, que inducen a cambios de humor,

sentirse molesto por razones triviales, irritarse a

causa de un malestar temporal, reacciones

emocionales inestables y actuar con rigor.

PROCEDENCIA FONÉTICA

La letra dalet es dental7, ya que su pronunciación

surge de entre los dientes.

La energía vinculada con la misma se relaciona con

la facultad de contención y defensa. Esa energía

es esencial para moderar cualquier sensación y

analizar si es conveniente expresarla, o no. Pues

una palabra, después de pronunciada, no se puede

volver atrás, como si no se hubiera dicho nada.

Sólo se podrá excusar, pero no, revertir. Pero si se

habla después de meditar lo que se dirá, las

posibilidades de error son mucho menores.

INFLUENCIA DEL COLOR

Ésta letra está vinculada con la irradiación de

luminosidad suprema vinculada con el color blanco.

Y a través de esa emanación cósmica se proyecta

energía vinculada con estas naturalezas: capacidad

de desarrollo del factor emocional y la gracia;

voluntad de acción, y deseo intenso de ayudar,

7Sefer Yetzira

beneficiar y proveer a los demás de lo que carecen

y necesitan, dando de lo mejor de sí.

A través de la tonalidad blanca se proyecta una

energía de claridad, pureza y calma, que no altera

el estado de ánimo ni produce cambios

emocionales bruscos. Genera un sentimiento de

paz, bondad y limpieza interior. Ayuda a la

concentración y el desarrollo de los pensamientos.

Insta a dar ilimitadamente, en forma generosa y

amplia. También ayuda a ser amable con las

demás personas, siendo contemplativo y tolerante.

ENERGÍA SENSORIAL

Asimismo, la letra dalet está vinculada con la

energía del altruismo8.

La energía del altruismo despierta la inclinación

natural a hacer siempre el bien, y ser amable y

considerado con los demás. También a ser

8Pardes Rimonim

diligente en procurar el bien ajeno incluso a costa

del propio. Amerita la virtud compasiva que inspira

el amor a Dios, y la tierna devoción por las cosas

santas, y también despierta el amor al prójimo, y

los actos de amor y humanidad. Proyecta la

tendencia natural y el despertar de benignidad,

mansedumbre, y afabilidad.

COMPOSICIÓN ELEMENTAL

La letra dalet está vinculada con el elemento

agua9.

La energía que se proyecta a través del elemento

agua está vinculada con el flanco del rigor, el de la

bondad, y el del equilibrio. Ya que se proyecta una

energía, vinculada con el flanco del rigor, de acción

dominante coincidente con las propiedades de

acción del agua, que se expande y domina toda la

superficie en la que se introduce. Aunque esa

misma energía se puede utilizar en forma

9Midrash Talpiot

beneficiosa y humanitaria, por el flanco de la

bondad, ya que el agua se adapta a toda forma y

lugar con absoluta naturalidad. Además, es

transparente y capaz de cambiar de estado según

las circunstancias y necesidades. Por lo tanto, a

través de esas facultades, puede serse rígido,

flexible, o moderado, según las circunstancias y

necesidades.

ATRIBUTO CÓSMICO

Además, la letra dalet se vincula con la energía

relacionada con el atributo de la palabra. Y el

desarrollo de este atributo es fundamental para

alcanzar el éxito. Pues si hay una buena

comunicación, el entendimiento está mucho más

cerca, y también el acercamiento y la afinidad. Ya

que se hace más fácil proponer y dialogar con

eficiencia, tanto de los asuntos personales como de

los comerciales. Y dado que el buen manejo del

atributo del habla es esencial para hacerse

entender y transmitir una idea, poseerlo, ayuda a

creer en uno mismo, lo cual es de gran utilidad

para ser más eficiente en las comunicaciones. Pues

cuando hay seguridad en sí mismo, se está

convencido de lo que se dice, y por lo tanto, las

ideas y opiniones son expuestas con convicción, y

entonces, las palabras emitidas transmiten energía

positiva al interlocutor. Y optimizar este aspecto

ayuda a superar aún más la calidad del habla, ya

que cuando se consigue seguridad en sí mismo, los

temores al fracaso en la selección de las palabras y

los conceptos se reduce, y se aprende a ser más

conciso y preciso. Entonces, en vez de poner varios

ejemplos, para demostrar un asunto, menciona

únicamente los que sean necesarios, y así, las

ideas transmitidas darán mejores resultados, pues

se ha escogido el argumento con criterio. Además,

la seguridad en sí mismo al hablar, ayuda a ser

coherente. Pues como hay confianza y no hay

demasiado nerviosismo ni temor de fallar en lo que

se dirá, es posible pensar más detenidamente lo

que se dice. Y en vez de hablar rápidamente,

intentando terminar cuanto antes, se aplican las

pausas que sean necesarias, y se transmiten las

ideas mejor elaboradas. Y esa energía está

vinculada con la letra dalet, la inicial de vuestro

nombre David. Por lo tanto, para aprovecharla solo

hace falta despertarla concentrándose en sus

propiedades, y vincularse con ella.

II

ANÁLISIS DE CARACTERES

Ahora observaremos las siguientes letras de vuestro nombre

David. Y para entender y conectar apropiadamente los detalles

de ésas letras, se necesita saber cómo funcionan, y de qué

manera interactúan y se vinculan con la primera letra. Por lo

tanto, para comprender correctamente los datos que

mencionaremos, es propicio conocer algunos fundamentos

esenciales:

El nombre de la persona está compuesto de varias letras que

cada una de ellas tiene características y energías particulares. Y

en conjunto forman el nombre y le dan fisonomía a sus

propiedades.

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