Revista La Caída. Nº 2, Cuaresma 2016

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Revista de la Hermandad de la Caída de Elche. Cuaresma 2016.

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Regina Rosarii ...ora pro nobisRegina Rosarii ...ora pro nobis

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Regina Rosarii ...ora pro nobis

Rosmari Valentí

Regina Rosarii ...ora pro nobis

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4 La Caída 2016

Carta del Hermano mayor

Queridos hermanos cofrades, estimados lec-tores. En mi calidad de cofrade y Hermano Mayor de esta Hermandad, es mi deseo y

mi deber comenzar el presente Saluda con pala-bras de agradecimiento y reconocimiento público a todos los hermanos y simpatizantes de “La Caí-da” por la labor llevada a cabo durante todo este año cofrade. Gracias por vuestro constante tra-bajo, apoyo, sacrificio, tesón, ilusión y esfuerzo, absolutamente altruistas. Gracias por engrandecer a esta Hermandad y gracias por permitir que siga-

mos creciendo. Porque, en efecto, es esta implica-ción de todos la que permite que nuestra amada Hermandad continúe viva, presente y en constante evolución, superando las adversidades que la Vida, en su devenir, nos pone en el camino. Y así, fruto de ese crecimiento y evolución, en-tre otras, quiero destacar la importante novedad que, en esta Semana Santa 2016, presenta la Her-mandad, que es el cambio en el estilo de carga de nuestro Paso de Palio. Este Martes Santo, María

Gratitud frente al esfuerzo

Tomás Ruiz Godoy, Hermano Mayor

“Debemos recordar que Ellos nos esperan, cada día, cada mes, siempre... y no única-mente el Martes Santo, sólo así conseguiremos seguir creciendo, haciendo vivo el sentimiento de Hermandad, actuando en consecuencia con nuestra Fe y creencias”

Rosmari Valentí

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Carta del Hermano mayor

Stma. Del Rosario será portada por Sus Costaleras, por Nuestras Costaleras, y por primera vez, “a cos-tal”, paseando, como siempre, a la Madre de Dios por esta bendita ciudad, derrochando arte y buen hacer tras el Caído. Mi más sincera enhorabuena y apoyo, a buen seguro todo el esfuerzo realizado tendrá su justa recompensa.

Finalmente, quiero aprovechar la ocasión para recordar que debemos esforzarnos por asumir el compromiso que, en su día, adquirimos con la Her-mandad y el hecho de que, la pertenencia a la “La Caída”, supone mucho más que participar única-mente en la procesión del Martes Santo. Por ello, os invito a asistir, colaborar y participar activa-mente de todas las actividades que la Hermandad programa y lleva a cabo a lo largo del año, y, en especial, a los cultos religiosos que se celebran en honor de Nuestros Sagrados Titulares. Debemos recordar que Ellos nos esperan, cada día, cada mes, siempre... y no únicamente el Martes Santo, sólo así conseguiremos seguir creciendo, haciendo vivo el sentimiento de Hermandad, actuando en conse-cuencia con nuestra Fe y creencias.

Que Nuestro Padre Caído y la Sra. del Rosario nos protejan siempre y en en todo momento.

Época II - Boletín Nº 2

Consejo de Redacción: Alberto Pastor Irles Pablo López Fernández

Fotografías: Joan Fernández Rosmari Valentí Cela Fernando Huedo

Maquetación: Alberto Pastor Irles

Junta de Gobierno

Hermano Mayor: Tomás Ruiz Godoy Teniente de Hermano Mayor: Francisco Latorre Lozano Secretario: Ramón José Requena Martínez Secretario Segundo: Pablo López Fernández Mayordoma: Manuela García Vellerino Consiliario: Vicente Miguélez Miguélez Diputado Mayor de Gobierno: Ana Isabel Ruíz Cartagena Prioste: Joan Fernández Poveda Diputada de Caridad y Vocal General de Hermanos: Esther Sánchez Rodríguez. Diputado de Formación y Cultos: Sergio Villalba Mesa. Diputado de Juventud: Francisco José Orts López. Fiscal: José Antonio Rodriguez Izquierdo.

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Misa de la HerMandad

Fue gracias a ella que te conocí. Me agarró de la mano con dulzura hasta parar en la calle Aspe cuando todavía era un niño, y allí me re-

cibió una marea de capirotes negros que avanzaban lentamente al son de los tambores. Fue mi primera vez. La primera vez que vi a La Caída en la calle.

Y ahora que no la tengo aquí a mi lado para

decirle tantas cosas; cuánto la quiero y cuánto la echo de menos, te voy a pedir un favor. Dile que este Martes Santo se pose justo en la nube que va a parar sobre la cuesta más cofrade de Elche. Que me espere allí, junto a su querido Paco y el resto de personas que tiempo ha nos abandonaron. Porque este año, con lágrimas en los ojos, pienso decirle todo lo que no pude hacer en vida.

D. Alberto Pastor IrlesPeriodista

7 de marzo de 2015

Pregón de la Ilustre Hermandad y Cofradía de Nuestro Padre Jesús de La Caída y

María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos

Rosmari Valentí

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7La Caída 2016Rosmari Valentí

Que sepa que su nieto es pregoneroy con mucho orgullo también costalero.

Que aunque sigo sin novia,soy feliz con lo que hago...

...y no me falta de nadamás que sus besos.

¡Te quiero tanto Magdalena! que solo anhelo volver a abrazarte;

aunque sé tú prefieres que sea paciente.¡No tengo prisa! Tranquila.

Fuiste grande en viday seguro también lo eres allí arriba

donde al fin pudiste reunirtecon el amor de tu vida.

Pero no hay mayor amorque el que sienten los abuelos por sus nietos;

ni hay mayor dolorque veros partir sin decir “adiós”.

Por eso se me rompe el almacuando pienso en vuestra ausencia;

y llora mi corazón rogandopor ese instante, ese reencuentro

que acabe con este lamento.

Y lo hará. El Martes Santo al atardecer;Él con su madero a cuestas

y yo con mi costal;caminaremos juntos a vuestro encuentro.

El Martes Santo al atardecer,cuando los niños pidan caramelos,

sus madres clamen por salud,y los abuelos recen por los suyos; caminaremos juntos por esa cuesta

que el destino quiso tuviera nombre de Santa……y también de abuela.

El Martes Santo al atardecer,cuando no tenga fuerzas ni para alzar la voz,

susurraré a tu oído un “te quiero”que resonará en los cielos.

Y al fin este Martes Santo,con esa cuadrilla costalera que me acompaña,podré volar hasta el cielo para robarte un beso

¡en la misma Cuesta de Santa Ana!

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Misa de la HerMandad

Estimado Don Vicente Miguélez, párroco de esta santa casa y también el sacerdote que hace ya 20 años me dio mi Primera Comunión. Querido Tomás Ruiz, Hermano Mayor de La Caída y para qué ne-garlo, también padre adoptivo de más de uno de los que estamos aquí presentes. Miembros de la Junta Mayor, representantes de otras hermandades y co-fradías de Elche. Señoras, señores, amigos todos.

Este joven pregonero se planta ante vosotros con el corazón en la mano temeroso de no ser ca-paz de expresar con palabras todo el amor que pro-fesa por esta Hermandad. Por los que están ahí, siempre a nuestra vera, y por todos vosotros, que de un modo tan profundo habéis marcado mi vida.

¿Por qué? Me pregunto a menudo. ¿Qué tiene esta Hermandad para que sin ella me sienta tan va-cío? ¿De dónde procede esa fuerza invisible que me arrastra y me lleva, como la dulce marea que trajo a la Virgen de la Asunción a nuestras tierras, hasta parar una y otra vez a las puertas de este templo?

Esta maravilla del barroco que enamora; que embriaga por la belleza de sus frescos, por su im-ponente retablo y esas hermosas capillas laterales que bañadas por una tenue luz de otro mundo, uno divino, te hipnotizan; te dejan sin habla.

¿Por qué? Insisto ¿Qué tiene esta Hermandad para que nunca quiera abandonarla? Que mi cuer-po, mi alma me pida a gritos volver siempre aquí, a este templo, donde se respira paz, armonía y un dulce aroma celestial que embelesa los sentidos.

Y entonces, como el que despierta bruscamen-te de un sueño, doy con la respuesta que buscaba. Este es mi hogar. Nuestro hogar. Uno en el que caben ricos y pobres, sanos y enfermos; los que son de izquierdas y los de derechas, los que creen y también los que no lo hacen porque Ellos; Ellos no hacen distinción alguna. Simplemente te arro-pan entre sus brazos cubriéndote con ese manto de amor sincero del que nadie querría desprenderse jamás. Tal y como hicisteis conmigo hace ya diez

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años cuando me abristeis de par en par las puertas de esta gran familia que es La Caída. Mi hogar.

Así que gracias. Gracias por permitir que una persona como yo, a la que aún le queda tantísimo por aprender, pueda esta noche hablaros desde esta posición tan privilegiada que se enmarca en un espacio único; mágico. Por eso os pido a todos un favor: ¡protejamos nuestra casa! No permi-tamos que la dejadez y las imprudencias acaben con este divino tesoro que es la Parroquia de San José.

Hogar durante siglos de esa orden franciscana que dio cobijo a tantos necesitados; que se desvi-vió por sanar a los enfermos y proteger a los inde-

fensos. Qué buen ojo tuvo San Pedro de Alcántara que guiado por Dios señaló con un dedo en el mapa este preciso lugar. ¡Elche! Y aquí se puso la prime-ra piedra de esta maravilla que es antesala misma del cielo.

Lugar en el que las horas no pasan; donde el tiempo se detiene y nuestras almas fluyen libres al son de una melodía celestial que solo aquellos que escuchan con el corazón son capaces de sentir.

Quiero seguir admirando tu belleza regia; per-derme en los misterios que se ocultan en tus pare-des y dejar que mi mente vuele libre al encuentro de un Dios que no necesitaba de todo este esplen-dor para demostrar su grandeza.

Dios no necesitaba de este esplendor para

mostrar su grandeza“Protejamos este divino

tesoro que es la Parroquia de San José

Rosmari Valentí

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Misa de la HerMandad

Tú, que eres el vivo recuerdode la gloria que nos aguarda

fuiste testigo mudode su llegada.

Aquel, que por ser grandese hizo pequeño;

y a Elche Dios descendiópara hacer realidad un sueño.

Coged un cirio y venid;venid a un mundo donde no hay fronteras

y Él es adalidde la virtud imperecedera.

Abrazad su fe sin miramientos.Dejad que vuestro corazón

se alimente de ese sentimientoque se escapa a la razón.

Porque siendo grandese hizo pequeño;

y a Elche Dios descendiócon un solo empeño.

Dejad atrás vuestros temores,pues él ha venido a la Tierra

para acabar con nuestros pesares.

Su palabra es verdadera,y su rostro una dulce muestra

de un amor que no conoce fronteras.

Así que venid;prended un cirio y venid

al encuentro de ese Cristoque a nadie desoye.

Porque siendo grandese hizo pequeño;

y a Elche Dios descendiódespojado de toda su gloria.

Convertido en una imagen de piedra arenisca;

humilde, sencillo y diminuto...Dios unió a un pueblo

que le adora, que le rezay le llora cada Jueves Santo.

Y obró un milagroque quiero el mundo vea;

para que el mundo entero se rinda¡a mi Cristo de Zalamea!

Rosmari Valentí

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La Parroquia de San José es el precioso legado que nuestros antepasados nos dejaron. Por eso ahora es nuestra responsabilidad conservarlo fomentando desde las Cofradías y Hermandades obras que per-mitan rehabilitar y recuperar su gloria pasada.

Pero el legado de una Hermandad, y ahora ha-blo especialmente de La Caída, no se mide por la belleza de su sede canónica o la riqueza de sus en-seres. El mayor tesoro del que puede presumir una hermandad sois vosotros, las personas que mante-néis viva la tradición.

Los que con una sonrisa en la cara salís a la ca-lle gritando: “¡Yo soy de La Caída!” ¡Aunque na-die os haya preguntado! Tampoco hacía falta, que lo lleváis escrito en el corazón: ¡La Caída!

Aquí se mide el tiempo de Martes Santo en Mar-tes Santo; y no hay entremedias nada más que im-porte que Ellos, los que mandan, los que nos guían paso a paso camino a la gloria bendita. Esa gloria que se escribe con letras de oro sobre las calles de un barrio por el que el Señor y su Santa Madre pa-sean como si fuera su propia casa. ¿O acaso no lo es? Si es que en este bendito lugar no se les puede querer más. Fijáos.

Cualquiera de fuera habla de Él como “el Cristo Caído”, pero ni yo ni ninguno de vosotros lo ha visto caer jamás. Se arrodilla, sí, pero no porque caiga bajo el peso de la cruz. Aquí todos sabemos que lo hace para estar solo un poquito más cerca de los suyos, sus fieles; los que cirio en mano, costal bajo el brazo, o plegarias en los labios le siguen y rezan vaya donde vaya.

Todos queremos ser ese cirineo que cargue con su cruz, y no nos damos cuenta que en realidad es Él nuestro cirineo. Con su túnica nazarena, con es-pinas en las sienes, con la boca ya reseca y las ma-nos doloridas, es Él quien carga con nuestras pe-nas; es Él quien agarra la cruz símbolo de nuestros pecados y la posa sobre sus hombros lacerados. Es Él, Dios hecho hombre, quien se humilla y quien se arrastra por nosotros. Es Él, creador del cielo y de la tierra, el que tiende la mano al necesitado, el que alienta a los enfermos y protege a los indefen-sos. Es Él, nuestro Cristo amado, quien nos bendi-ce con esa mirada que todo lo dice. Es Él, Señor de San José, quien descendió de los cielos para ser luz

y camino de tantos ilicitanos que tienen grabado a sangre y fuego su nombre en el corazón.

Jesús de la Caída. Pero no la suya, sino la nues-tra propia; la que nos lleva a pecar, a perder la fe, a desconfiar de la palabra de ese Cristo que no cae, nunca cae; somos nosotros. ¡La Caída somos no-sotros!, y Él; ese cirineo que nos ayuda a llevar la carga; a levantarnos y caminar por esa cuesta que tanto cuesta pero nadie quiere que acabe jamás. Es Él, Dios de todas las cosas, quien nos guía todos los días de nuestra vida. Y es Él, solo Él, quien hoy nos hace clamar con la fuerza del corazón: ¡Sí! ¡Soy de La Caída!

Rosmari Valentí

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Misa de la HerMandad

Con zancada decidida, el izquierdo por delante, el hijo de Dios camina exultante por las calles de ese barrio que vive y transmite su fe con un glorio-so estruendo. Son los tambores, sus tambores, que anuncian la llegada del hijo de Dios camino al en-cuentro de esa dulce flor del Rosario que desgarra mi alma cada vez que la miro a los ojos.

¡Cómo no voy a querer consolarte!, madre de Dios; ¡cómo no voy a estar ahí para secar tus lágri-mas!, si tú eres la viva imagen del amor verdade-ro. Bendito el día en que llegaste a nuestras vidas, pues contigo llegó la mayor de nuestras alegrías.

Quién nos lo iba a decir cuando te tuvimos por primera vez cara a cara. Cualquiera que me conoz-ca sabe que no es fácil dejarme sin palabras y tú lo consigues. Tú, con esa mirada cargada de dolor, te adentras en lo más hondo de mi alma y desde allí me hablas directamente al corazón. Me transmites palabras de aliento, de amor, bondad... aunque no las oiga. Nadie las oye en realidad. Pero ahí están; flotando a tu alrededor encontramos divinas pala-bras de amor propias de una madre a sus hijos. Y tú lo eres.

La madre de Dios y de este pueblo que aunque ve dolor en esa mirada tuya bañada en lágrimas también siente paz y sosiego cuando está cerca de ti. Hay algo inexplicable, algo mágico que nadie que no se postre a tus pies entenderá jamás. A veces ni tan siquiera nosotros que te vemos a diario pode-mos explicarlo.

Y a mi me dejas sin palabras. Es difícil pero lo consigues. Día tras día intento entender qué tiene esa mirada tuya que a mi me cautiva. Por qué cada vez que me planto ante ti quedo hiptnotizado ante tanta belleza. Sufres, sí, pero Dios sabe que en este mundo no hay una flor más bella que tú, mi Virgen del Rosario. Y al final todo cobra sentido.

Haced la prueba. Fijáos en sus ojos y mirad más allá. No os quedéis solo en lo superficial. Id un paso adelante. ¿Qué veis? Yo ahí veo los ojos de mi madre, de mis abuelas, de mi hermana, y de tan-tas otras mujeres que han hecho de mi la persona que soy en la actualidad. En esa dulce mirada que va directa al corazón veo los rostros de los que me quieren, y también de los que lo hicieron antes de partir a un lugar mejor. Así que no es solo Ella la que nos mira y la que nos habla; hay tantas almas

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recogidas en esa mirada, tantas personas mirando y hablando a través de esos dos divinos luceros que son sus ojos, que es normal que la Virgen termine llorando. Pero no de tristeza. Esas son lágrimas de alegría. Si llora es porque está feliz de ver que sus fieles, los de aquí y los de allí arriba, pueden por unos instantes reencontrarse bajo su amparo.

Suena demasiado bonito, es verdad, pero cual-quiera que se haya postrado a los pies de la Santí-sima Virgen sabe que es así. Ese cruce de miradas, ese instante en el que Ella te mira a la cara, trasto-ca algo en tu corazón; te hace sentir amado de un modo inexplicable... pero a la vez familiar.

Familiar porque Ella es madre de todos, pero también familiar porque ahí, de algún modo, está tu madre terrenal, tus abuelas, y todas las personas que te quieren. Y como es Ella, mi Virgen del Ro-sario, la que día tras día me permite gozar de este milagro, hoy soy yo el que rompe en lágrimas de alegría. Hoy soy yo el que grita a viva voz “gra-cias”, pues no hay en este mundo mayor regalo que el que tú nos ofreces.

Viniste de Sevilla para encontrarte con tu hijo caído, y lo que aquí encontraste es una pueblo que cayó; pero cayó rendido a tus pies. ¡Cuánta belle-za! Cuánta dulzura hay en ese rostro capaz de curar los males del alma. Tú, señora del Rosario, eres consuelo de aquellos con el corazón herido; tú, flor de Santa Ana, eres la salvación de los que se per-dieron por el camino y ya olvidaron lo que es sentir el amor de una madre que nunca deja de querer. Y Tú jamás dejas de hacerlo. Tu amor infinito no conoce barreras. Por eso hoy a ti te digo ¡gracias! Gracias reina y señora del Rosario porque desde que llegaste a nuestras vidas, nuestras vidas son ahora un poquito más dulces.

Has traíado la alegría a este barrio, y también amor y esperanza para los que no lo tenían. Y solo con una mirada. Te basta una sola mirada para in-suflar de vida los corazones vacíos. Porque en esos ojos tuyos hay de todo menos soledad. En esos ojos tuyos hay tantas miradas conocidas, tantas personas observando desde los cielos, que al final ocurre el milagro. Ellos lloran, Tú lloras, y noso-tros lloramos. Por eso te digo gracias, de corazón.

Virgen del Rosario, eres la viva imagen del

amor verdadero.“

Rosmari Valentí

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Misa de la HerMandad

Tal como me enseñaron mis abuelos, como hi-cieron mis padres después que ellos, y como haré yo también con mis hijos el día que los tenga, aprender a disfrutar de la Semana Santa es el me-jor regalo al que uno mismo puede aspirar.

Tradición y devoción, cultura y religión... no importa el motivo por el que lo hagáis; pero ha-cedlo. De ese modo entraréis a formar parte de una gran familia que no es de sangre pero sí de puro corazón. Una familia que no deja de crecer; que ríe, llora y goza bajo el amparo de esos dos luceros que son luz y camino de este barrio de artesanos y zapateros.

No caigamos por tanto en el error de sentirnos solos, pues en esta vida caminamos siempre de la mano de nuestros hermanos. Acudid a ellos; abrid vuestros corazones y no pongáis nunca barreras a este amor fraterno que Dios nos ha regalado. Ha-cedlo de corazón y empezaréis a sentir de verdad por qué La Caída es como es. Por qué esta her-mandad ha enamorado a tantos y tantos ilicitanos a lo largo de sus 150 años de historia... y los que le quedan.

No perdamos la fe, y no dejemos que las penu-rias nos echen por tierra. Cada vez que flaqueamos y no nos levantamos, Ellos sufren y lloran al ver que no nos percatamos de la mano que nos están tendiendo.

Nos pasamos la vida rogando por milagros, su-plicando porque se acaben nuestros pesares, y no nos damos cuenta que el Señor y la Virgen siempre están ahí. Que a veces, los milagros responden al nombre de Carmela. Toman la forma de aquellos que nos rodean para cumplir con la divina provi-dencia. Tu fuiste un milagro, Carmela; tu hiciste que la persona que más quieres en este mundo siga hoy aquí entre nosotros. Y por mucho que te digan que fue casualidad, que fue una mera coinciden-cia, aquí los que te conocemos sabemos que fue el Señor y su Madre los que intercedieron. Son Ellos los que te guiaron al lugar correcto en el momento adecuado. No fue casualidad. A veces los milagros simplemente responden al nombre de Carmela.

Y sé que tú hoy Sergio debes pensar que el des-tino es a veces injusto. Que tú que tanto haces por esta Hermandad no merecías quedarte este año sin pasear al Señor de la Caída por las calles de El-che. ¿Por qué no el año que viene? ¿Por qué no me dejas cargar con tu madero un Martes Santo más? Imagino que algo así sentirás, y sé que es duro, pero algo te diré. Este año no llevarás la faja y el costal, pero junto a esta cuadrilla de costaleros tocarás el cielo en cada levantá. Estarás ahí bajo

Entraréis a formar parte de una gran familia que no es

de sangre pero sí de puro corazón

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con nosotros cada vez que llamen al martillo, nos pidan meter riñones, y volemos bien alto para lle-var al cielo las plegarias de todos aquellos que nos acompañan.

Porque allí arriba hay muchos cofrades de La Caída que nos miran con atención. Así que acer-quémosle a su Cristo Caído para que puedan darle un buen beso en las mejillas; ¡aunque eso provo-que lágrimas en sus ojos!, que todos sabemos en Semana Santa significa lluvia. Así que en vez de rezar para que no nos llueva, pedid por favor a los vuestros que contengan un poquito sus lágrimas. Yo lo haré con mi abuelo Paco, del que he here-dado la lágrima fácil... y también el amor por esta Hermandad.

Cada año que pasa es un año más de pasión por este Cristo que todo lo puede. Cada año que pasa es un año más de devoción a esta Virgen que a mi me deja sin habla. Cada año que pasa es un año más de sonrisas y lágrimas a vuestro lado, mis hermanos, mi familia. Y cada año que pasa, más cuenta me doy de que esta no es una Hermandad cualquiera; que formar parte de La Caída es un privilegio, ¡más bien un regalo divino!, que no podemos rechazar.

Doy gracias al Señor todos los días de mi vida por haberme puesto en su camino. Aunque tal vez las gracias debería dárselas a mi abuelo, que fue el primero en unirse a esta gran familia. Él, mis tíos,

mi madre, mis primos... todos ellos han paseado por las calles de Elche portando el capirote negro al son de esos tambores que cada Martes Santo nos recuerdan que el hijo de Dios, y ahora su madre también, no se olvidan de nosotros. Que si hace falta, aunque sea un día al año, Ellos salen a la ca-lle a buscarnos. Tal es su bondad.

Y ese día es el Martes Santo. El día en el que tiempo se detiene y hasta el aire es distinto. Caído del llano; Dios del universo, del cielo y de la tierra, de la vida y de la muerte, de la luz y las tinieblas...pasarán siglos enteros y siempre aquí su presencia entre claveles y cirios, costal y trabajadera. Pasa-rán siglos enteros, Cristo de mis anhelos, y este pueblo cirineo cumplirá su penitencia tal como lo hicieron sus padres, como le rezaron sus abuelos.

Todo se pare ante Él, que tiene una expresión divina que borra el mal y lo aleja. Está en nuestros corazones, con los enfermos y con los que ya no creen; porque Dios no se olvida de nadie. Y menos de este pueblo que otro Martes Santo más saldrá a la calle para recibir entre lágrimas y aplausos al Señor de la Caída. Y allí en los Cielos, donde no hay nada más que amor y bondad, resonarán los tambores de La Caida y un fuerte “a esta es” justo antes de alcanzar a los nuestros, los de allí arriba, con todas las plegarias y palabras que nunca les di-jimos en vida. Así de grande es Dios. Así de grande es La Caída. ¡He dicho!

Rosmari Valentí

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Martes santo

Rosmari Valentí

Crónica del Martes Santo 2015Crónica del Martes Santo 2015

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Martes santo

Por Cristian Ramón Marín

Historias de una Crónica del Martes Santo 2015Crónica del Martes Santo 2015

noche de ensueño

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Martes santo

Esta es la crónica de una persona cualquie-ra. La de uno de esos cientos de corazones que se agolpan en la cuesta de Santa Ana

cada Martes Santo. La única diferencia entre quien escribe estas palabras y el resto de mortales que busca al Señor de la Caída es que busca historias. En cada rincón. De forma constante.

Al fin llegó la hora. San José y esa luz tan es-pecial de la primavera. San José y el olor a incien-so. San José, todo un barrio que ya estaba pre-parado. Llegó como llega siempre: madre e hijo

salieron a la calle, y como si de una demanda del destino se tratara, unos futuros padres posaron sus manos sobre el vientre en el que la vida de su bebé se formaba antes de que el milagro se produjera. Para la mayoría de cofrades pasó desapercibido, pero no importaba: La Caída ya estaba en la calle, repartiendo Fe.

La Caída ya estaba en lacalle repartiendo Fe“

Rosmari Valentí

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Martes santo

En Santa Ana, como no podía ser de otra forma, una abuela les rezaba. Sus manos estaban entrelazadas y sostenían un pequeño Rosario. Esa señora murmu-raba constantemente, mientras su nieto contemplaba el paso del Señor sobre los pies. Jamás sabré por quién pedía, pero lo tengo claro: no era para ella. En esas manos no cabía el egoísmo. Esas manos aguantaban mucho dolor. Ay, las manos de una abuela…

Siempre de frente, la cofradía llegó a la Plaça Baix. Allí se demostró lo que puede dar de sí la simbiosis entre una cuadrilla de costaleros y una banda. Tras el encuentro, el llamador del Puente sonó, y la música y el andar se hicieron arte en-tre aplausos. Ante el pueblo de Elche, el Señor de la Caída retomaba el camino ha-cia su barrio. Siempre de frente, aunque a veces hace falta un paso paso atrás para coger impulso y sentir el calor de una Madre. El Miércoles Santo estaba cada vez más cerca, y la luna llena esperaba para escuchar a la banda de tambores a su paso por el Puente de la Virgen. Entre el sonido ronco, unos ojos llamaron mi atención: siempre miraban hacia arriba, porque pertenecían a un niño que, como se suele decir, no levantaba dos palmos del suelo. No paraba de sonreír, y pedía estampitas en lugar de caramelos.

Ya en su barrio, la Hermandad avanza-ba mientras sonaba El Reencuentro. Las notas compuestas por Manuel Alejandro González Cruz eran el preámbulo de la recogida del Stmo. Cristo de la Caída y María Stma. del Rosario y de la inmen-sa satisfacción por el trabajo bien hecho. Tras la marcha real y el himno nacional, los hermanos se fundieron entre abrazos y lágrimas. Y si eso es lo que pudo ver una persona cualquiera, imagínense lo que pudo sentir un hermano de La Caída en el Martes Santo de 2015. Otra vez llegó la hora.

Rosmari Valentí

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Martes santoMartes santo

Estampas para el recuerdoLa tarde noche del Martes Santo nos dejó con un sinfín de momentos inolvidables que nuestra amiga Rosmari Valentí supo captar con su cámara de fotos. En las siguientes páginas recopilamos algunas de sus mejores instantáneas.

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Martes santo

Estampas para el recuerdoLa tarde noche del Martes Santo nos dejó con un sinfín de momentos inolvidables que nuestra amiga Rosmari Valentí supo captar con su cámara de fotos. En las siguientes páginas recopilamos algunas de sus mejores instantáneas.

Martes santo

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Magna Mariana

Una peregrinación

Por Alberto Pastor

histórica

Como una bella flor que se resiste a marchi-tarse, Tú, Virgen del Rosario, saliste a las calles de Elche un 3 de octubre para reu-

nirte con esa otra gran flor que anida en el corazón de los ilicitanos. Tú, rodeada de los tuyos, paseaste por las calles de este oasis de palmeras para en-contrarte cara a cara con la Santísima Virgen de la Asunción. Un hito histórico porque además no lo hiciste sola. Esa Estrella fulgente que guía los pasos de tantos y tantos fieles; esa Virgen de blan-co que reparte Salud vaya donde vaya; la dolorosa que mira apenada al cielo en busca de su amado hijo; o esa María que porta sobre la mano un ra-

millete de flores de palma, símbolo de este pueblo; todas juntas acudisteis al encuentro de esa gloriosa imagen mariana que cada 15 de agosto nos hace mirar al cielo con el corazón en un puño y lágrimas en los ojos.

Fue además la primera vez que posaste tus ben-ditos pies en la Basílica de Santa María, y la pri-mera vez que tu tierna mirada se cruzó con la de la Virgen de la Asunción. Y fue especial. Uno de esos momentos que no se pueden explicar con palabras, pues no hay palabras para describir un encuentro de esas características. El cielo y la tierra se hicie-

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Magna Mariana

Fernando Huedo

Fernando Huedo

ron uno en el interior de este templo que conme-moraba el 750 aniversario de su consagración a la Virgen de la Asunción.

Qué suerte la nuestra que pudimos vivir un mo-mento tan único y especial como este, pero qué lás-tima también que fueran pocos ilicitanos los que se sumaran a esta peregrinación mariana. Ante la Virgen del Rosario no faltaron fieles marcando el camino con sus cirios, ni un buen cuerpo de acó-litos perfumando las calles con ese dulce aroma a incieno. Pero no era suficiente. No para ser un acto de carácter extraordinario que difícilmente volve-remos a ver.

Se echaron en falta más hermanos formando cortejo, y también más ilicitanos arropando a las Imágenes que iban camino de Santa María. Por fortuna para los que sí estuvieron allí, para el re-cuerdo quedarán estampas tan imponentes como las que mostramos en estas páginas gracias al buen ojo de nuestro amigo Fernando Huedo, que supo captar con su cámara esos pequeños detalles que hicieron grande a esta peregrinación mariana.

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Magna Mariana

Una peregrinación que concluyó con la vuelta a casa de la Virgen del Rosario tan solo un día des-pués de visitar la casa de todos los ilicitanos. Se había hecho historia, la Hermandad de La Caída había vuelto a escribir con letras de oro una página en la historia cofrade de Elche. Y ya desde su altar en San José, la Virgen del Rosario esbozó una son-risa que hoy a todos debería llenarnos de orgullo.

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Fernando Huedo

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Virgen del Rosario

La Junta de gobierno, recogiendo los deseos de todos los hermanos, tras la celebración del 150 aniversario fundacional se planteó la ejecución del nuevo paso de palio para María Stma. Del Rosario, y poco tardó en organizar una comisión encargada de trazar las líneas generales y el estilo del palio al completo, incluyendo orfebrería y bordados. El único condicionante era respetar e incluir en el proyecto los varales que el taller Orfebrería Triana ejecutó en el año 2006, y que actualmente porta el paso de la Virgen del Rosario.

Al plantear el proyecto como un objetivo a me-dio plazo, se opta por acudir a un proyectista in-dependiente que proporcione a la Hermandad la

libertad de elegir, si lo cree conveniente, el taller que ejecute cada una de las partes del mismo.

Pasada la Semana Santa de 2015 se inician los contactos con varios proyectistas, siendo elegido finalmente el sevillano Javier Sánchez de los Re-yes, que ya ha trazado una vida de éxito gracias a su talento arístico. No es para menos.

Nacido en Sevilla en 1972, este dibujante y pro-yectista de artesanía religiosa ha colaborado con algunos de los talleres de ofrebrería más reputados de España, amén de ser también el encargado de diseñar el Camarín y retablo del Stmo. Cristo de la Expiración (El Cachorro) de Sevilla.

Un palio perfecto para tiVirgen del Rosario

La Hermandad acomete el que es su proyecto de futuro más ambicioso hasta la fe-cha. Un palio diseñado por y para la Santísima Virgen del Rosario, que ya en 2017

estrenará un juego de jarras que harán de su paso un auténtico teosoro.

reportaje

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A partir de aquí, los encargos de Hermandades se suceden. Dibujos, proyectos de orfebrería, talla en madera, bordados… nada se resiste al talento de este artista que sobre el papel ha planteado un proyecto palio para la Virgen del Rosario absolu-tamente espectacular; una maravilla que en el mo-mento de su presentación a todos los hermanos en Asamblea General suscitó palabras de asombro.

Iconografía e inspiraciónLas premisas generales del proyecto se establecie-ron por la Comisión encargada para tal efecto, que elaboró una memoria previa y que se trasladó al diseñador antes de comenzar el trabajo. Aunque el encargo en concreto tan solo es de la orfebrería del paso, han quedado esbozadas las líneas generales del resto del proyecto.

El estilo general se enmarca dentro del barroco más comedido o clasicista, haciendo un conjunto con el Paso del Señor de la Caída y los actuales varales del Paso de palio, así como, en general, del aspecto estético y artístico que presenta la Her-mandad y en especial la imagen de Ntra. Sra. del Rosario.

La iconografía del paso se centra en el rezo del Santo Rosario, acompañado de elementos que ten-gan relación con la Hermandad, su Sede Canónica o la propia ciudad de Elche.

El proyectoEl proyecto se estructura en base a los 20 misterios del Rosario que estarán representados en diferen-tes puntos del palio.

Los Luminosos y Dolorosos, por ejemplo, se enmarcan dentro de los respiraderos que mostra-mos en la imagen adjunta en esta misma página; mientras que los misterios gloriosos formarán par-te del techo de palio, y los Gozosos ocuparán su lugar en el manto de salida.

La Hermandad también quería que este proyec-to recogiera de algún modo detalles que evocaran a nuestra Sede Canónica, la Parroquia de San José, y en particular a la Capilla donde permanece expues-ta al culto María Stma. Del Rosario. Dicho y hecho por parte de Javier Sánchez de los Reyes, que ha tenido un gusto exquisito a la hora de insertar to-dos estos pequeños detalles en el proyecto.

De la misma forma no faltan tampoco las alu-siones al barrio del Plá y la ciudad de Elche en ge-neral. Santa Ana, San Pascual y Santa Teresa tie-nen su lugar en las capillas de los respiraderos, y la Virgen de la Asunción, Patrona y Madrina Hono-rífica de Nuestra Titular, un lugar de relevancia en el frontal del palio junto a varias oraciones rezadas durante el Rosario, como pueden ser el Gloria, Ave María o las Letanías.

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Candelería Presenta un modelo clásico, de un barroco mode-rado, con cuerpos bulbosos y un cubillo en el que irán situadas las letanías del Santo Rosario, gra-badas. En los basamentos se contempla que vayan incluidos en dos de sus caras, el escudo de la Her-mandad, y en la tercera restante, el nombre de un posible donante.

JarrasDe igual forma, se plantean en un barroco mesu-rado, casi renacentista, y son unos de los motivos más originales del conjunto, pues sus asas la con-forman dos tritones, corpóreos, enroscados en sen-tido inverso. Se plantea un juego de 6 jarras peque-ñas, 2 medianas y 4 grandes.

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Faroles entrevaralLos faroles entrevarales, deseo expreso de la Her-mandad, la inspiración se encuentra en el templete marmóreo del altar mayor de la Basílica de Santa María, reproduciéndose en pequeña escala. Sobre su basamento, se ubican las representaciones de la templanza y la prudencia, en uno, y la justicia y la fortaleza en otro, inspiradas en las pinturas de la cúpula de la hornacina de María Stma. Del Rosario en la Parroquia de San José.

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PeanaLa peana tiene una estructura sencilla, con plinto, bombo y parte curvada hacia dentro. El frontal des-cribe una Capilla, curvando la moldura una cornisa en medio punto. Para salvar dicha altura se articula sobre el cuerpo principal un “banquillo” que podría utilizarse de manera independiente en besamanos o actos de culto. En el frontal de dicha peana, se sitúa una repre-sentación de las tres virtudes teologales; Fe,

Esperanza y Caridad, inspirado en la capilla de la comunión de la Basílica.

A lo largo del banquillo, está grabado en latín el Gloria :

Gloria Patri, et Fili, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc et semper,

et in saeccula saeculorum,amen.

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RespiraderosLos respiraderos, el elemento de más entidad del Paso, se propone como un recorrido por los distintos misterios del Rosario. A lo largo de los mismos, se establecen una serie de capillas a modo de pilastras a eje con los vara-les.

Dichas “pilastras” son pequeñas capillas inspiradas en las capillas del puente de Santa Teresa, que alojan en su interior a una serie de arcángeles que sostienen los distintos atributos de la Pasión.

Entre pilastra y pilastra se articulan los paños calados con diseños vegeta-les centrados por una cartela con una escena en bajorrelieve representativa de un misterio del Rosario, rematando dicha cartela un grupo de tres flores que expresan el carácter de dicho mis-terio; los lirios que simbolizan la luz de los misterios del Rosario y las ro-sas de pasión que simbolizan los mis-terios dolorosos.

Uniendo las pilastras con cartelas, y a modo de simbólico rosario, van las cuentas en dorado, independientes, enlazando así misterio con misterio y dando el impacto visual que se quiere dar del conjunto; un simbólico rezo del Rosario.

El centro de los respiraderos está presidido por una Capilla, con la ico-nografía marcada por la Hermandad y reproduciendo las imágenes que se ubican en su Iglesia de San José. Dichas Capillas se encuentran enmar-cadas por dos columnas salomónicas inspiradas en los retablos de San José.

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RepoRtajereportaje

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FrontalSigue la estructura de capillas y paños que en-contramos en el lateral, con la particularidad del pedestal que remata el frontal donde se ubica una reproducción de la patrona, la Virgen de la Asun-ción, sobre una nube resplandeciente, flanqueada por dos ángeles músicos que tañen una guitarra y un arpa, al modo de la representación del Misteri. Asimismo, las dos capillas que no están alineadas con los varales, portan los remates propios de la hornacina original del Puente de Santa Teresa.

Recorre todo el conjunto de respiraderos la ins-cripción en latín del Ave María.

Ave María, gratia plena,

Dominus tecum, benedicta tu in muliéribus,

et benedictus fructus ventris tui Iesus.Sancta Maria, Mater Dei,

ora pro nobis peccatoribus, nunc et in ora mortis nostrae.

Amen.

Las maniguetas, con motivos fitomórficos, están inspiradas en la ornamentación de la Capilla de la Virgen del Rosario en la Iglesia de San José y se conforman por unos tritones enroscados de cuyas fauces penden dos conchas decrecientes.

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Candelabros de colaLos candelabros de cola son otro de los elemen-tos más originales del conjunto, pues se plantean como una jarra más del conjunto de ellas, con sus correspondientes flores, realizadas éstas en orfe-

brería, añadiéndose algunas palmas, simbolizando a la ciudad de Elche. Del centro de este conjunto de flores emergen los brazos centrales del cande-labro de cola, con nueve luces cada uno de estilo barroco a juego con el conjunto.

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Noticias

Nace el grupo de benefactores para recaudar fondos destinados al ajuar de nuestros Titulares

Con la intención de completar el ajuar de nuestras Sagradas Imágenes Titulares, del seno de la Hermandad ha nacido el llamado

Grupo de Benefactores, que nace con el deseo de aumentar el ajuar de nuestros titulares acometien-do pequeños proyectos que sean asequibles para un grupo de fieles y hermanos que, de forma regular y en la medida de lo posible, realizarán aportaciones económicas con ese fin.

De este modo se pueden acometer proyectos de enriquecimiento del patrimonio sin que ello reper-cuta económicamente a la Hermandad.

Ya establecido el grupo, el primer proyecto a acometer será un manto de salida para María Stma. del Rosario, realizado en terciopelo rojo guinda, rematado con blonda de concha de oro (la misma tonalidad que el manto corto que ya posee la ima-

gen, el cual vistió por última vez en el pasado bes-amanos de octubre).

Si te ilusiona este proyecto, recordamos que to-das aquellos hermanos y/o fieles que deseen parti-cipar deberán comunicarlo al responsable del gru-po, a través del correo [email protected] o en el teléfono: 646 007 150.

Las aportaciones se realizarán:- Por transferencia bancaria con el concepto “Be-nefactores” junto con el nombre del donante, a la cuenta de la hermandad.- En mano, puntos definidos para la ocasión: Óptica 6000 (c/ Lope de Vega, nº35, esquina con c/ Jorge Juan, junto a Kamome)-En mayordomía.- A la Vocal General de Hermanos (Esther Sán-chez).

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Joan Fernández

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EntrEvista

“Tienes que dotar a la partitura que tienes

delante de un poquito de alma”

Adrián Amat BernalIntegrante de la Associació Musical Mare Deu de Loreto

Por Alberto Pastor

Este año María Santísima del Rosario irá acompañada por los sones de una nueva banda de música que la hemos tenido aquí

al lado, en Santa Pola, durante años, pero no ha sido hasta ahora que nuestros caminos se han cru-zado. Y bendito encuentro. Cerca de 40 músicos procedentes de la Associació Musical Mare Deu de Loreto pondrán este Martes Santo toda su alma para que la madre de Dios pasee por las calles de Elche acompañada de esa música celestial que a todos aviva el alma. Será una experiencia inolvida-ble, ellos mismos lo reconocen, pues será además la primera vez que la banda participe en la Semana Santa ilicitana. Y lo harán por todo lo alto.

Rosmari Valentí

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“Tienes que dotar a la partitura que tienes

delante de un poquito de alma”

Adrián Amat BernalIntegrante de la Associació Musical Mare Deu de Loreto

Por Alberto Pastor

Hay marchas de palio que sin cornetas no serían lo

mismo “ Con la ilusión por bandera este año, el primero tras el Rosario, dedicarán a la Virgen una marcha llamada Rosa de Santa Ana. Aprovechando la ocasión, nos hemos sentado con uno de los respon-sables de la banda para hablar de esta nueva etapa que ambas partes, la Associació Musical Mare Deu de Loreto y la Hermandad de la Caída, inician de la mano.

Este será vuestro primer año tras la Virgen del Rosario en Elche, ¿Cómo sentó la noticia entre los músicos?Con mucha alegría, siempre es de agradecer que una Hermandad tan importante como esta confíe en ti por tu trabajo. Esa confianza es la que cada día te da fuerzas para seguir mejorando y creciendo como banda.

Acostumbrados a tocar en Auditorios ¿qué se siente al sacar música a la calle? Pues una gran sensación de satisfacción al ver que después de ensayos y ensayos las piezas musica-les que sacas a la calle suenan afinadas, potentes y sobre todo con calidad. Saber que la partitura que estás tocando suena bien y ver disfrutar delante de ti a una escuadra en moros y cristianos, o a una cuadrilla de costaleros en Semana Santa es muy

gratificante. Si ellos no disfrutaran y apreciasen ese momento, nuestro trabajo no tendría sentido.

¿Y al ver una Virgen andando al compás de vuestros sones?La emoción que sentimos, más que al ver una Ima-gen, es al ver la cara del capataz del paso, o las de los costaleros que salen y entran: su satisfacción, o sus miradas y gestos de agradecimiento hacia no-sotros. Eso es lo que más te llena como músico y como banda en una Estación de Penitencia.

¿Qué tiene de especial la Música Cofrade? Podríamos hablar, dentro de su género, de la gran variedad de estilos, de la enorme cantidad de composiciones dedicadas al mismo, o de los miles de músicos que la interpretan, pero quizás lo más especial que tiene es que un cofrade pue-de llegar a sentir lo que tu estas interpretando y emocionarse.

¿Supone algún desafío extra?El único desafío, pero a la vez el más importante, es interpretar la música con calidad, intentando ser fiel a la partitura y al género que estas interpretan-do, es decir, además de tus conocimientos musica-

Adrián Amat Bernal se encarga de gestionar los contratos de la banda, llevar sus redes sociales y también actúa como asesor musical.

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les tienes que dotar a la partitura que tienes delante de un poquito de alma. Este desafío es para toda la música y todos los músicos en general.

¿Hay alguna marcha por la que sintáis especial predilección? La marcha procesional que a nuestros músicos más les gusta interpretar actualmente es “Esperanza de Alicante Coronada“, marcha, como su nombre in-dica, dedicada a Nuestra Señora de la Esperanza Coronada de Alicante, obra de Vicent Cerdà i Pe-ris, prestigioso compositor valenciano, muy amigo de esta Banda y que, actualmente, está componien-do para Hermandades de Sevilla tan importantes como La Macarena o la Paz.

Con esta Marcha empezó una nueva etapa para nosotros en la música cofrade y representa para los músicos algo muy especial, tanto por la gran cali-dad de la marcha, como por el vínculo que se ha creado entre la Banda y la Hermandad de la Espe-ranza de Alicante, que nos ha proporcionado una nueva manera de vivir la música cofrade.

¿Qué pieza es la que más os piden para tocar a lo largo de la Semana Santa?La verdad es que va variando porque, gracias a Dios, estamos viviendo un momento de gran crea-tividad en este género. Se compone mucha música nueva al año, y el cofrade siempre busca variedad. El año pasado las marchas que más interpretamos fueron Mi Amargura, de Víctor Ferrer, Hossana in Excelsis, de Oscar Navarro y Valle de Sevilla, de José de la Vega Sánchez.

A la hora de interpretar Música para un Palio, existe cierta tendencia de añadir más percusión e incluso cornetas. ¿Podrías hablar un poco de los cambios que supone contar o no con estos instrumentos?Lo cierto que es un estilo tradicional andaluz, pero en nuestra zona podríamos decir que se trata de un estilo totalmente nuevo. En el Levante, las bandas que han incorporado batería de tambores y cornetas en Semana Santa se pueden contar con los dedos de las manos. Nosotros somos una de ellas.

La Associació Musical Mare Deu de Loreto, durante un certament en Santa Pola.

La música cofrade en la región está en alza. Cada

vez se ven mejores bandas“ Rosa de Santa Ana es la primera marcha dedicada a la

Virgen del Rosario de Elche“

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Con un buen repertorio, por supuesto, se pro-ducen grandes cambios. Marchas como Corona-ción de la Macarena, de Pedro Braña Martínez o Coronación, de Manuel Marvizón, sin cornetas no serían lo mismo.

Es su primer año con la Virgen del Rosario pero ya han compuesto una marcha dedicada a ella. ¿Qué puede contarnos acerca de esta pieza?Lo cierto es que es un nuevo reto para mí, puesto que se trata de mi primera composición. Cuando vino Pablo López a proponerme componer una marcha, le pedí un tiempo para pensarlo, ya que mis conocimientos musicales no son tan amplios como para poder realizar una composición de tal calibre. Fue entonces cuando me reuní con mi gran amigo y compañero de la banda Juan Luis Más Forcada, y le propuse componer juntos la marcha; cosa que aceptó encantado. Entonces volví a ha-blar con Pablo para comunicarle que la marcha iba para adelante. Han sido meses de trabajo, nervios e ilusión hasta llegar al día de hoy, cuando este pro-yecto se ha convertido en realidad. Ya tenemos la pieza acabada.

Hemos querido realizar un homenaje a la Se-villa de principios de siglo pasado, utilizando las escalas del modo frigio, presente en marchas tan conocidas como Soleá dame la mano, de Manuel Font de Anta, o Margot, de Joaquín Turina Pérez;

marchas a las cuales tenemos un inmenso respeto y admiración. También hemos querido homenajear el cariño y el mimo que esta hermandad pone a la hora de elegir su repertorio, ya que en el sentido coloquial podríamos decir que es un repertorio “muy Ma-careno”, por eso hemos querido reflejar en ciertas partes la esencia y el sentir de esta gran hermandad sevillana, sin dejar de lado ciertos toques que un buen Ilicitano reconocerá sin duda. En definitiva, hemos querido hacer una fusión de lo antiguo y lo moderno que esperamos que guste mucho a la Hermandad.

¿Será esta la primera de muchas marchas dedi-cadas a la Virgen del Rosario de Elche?Comienza una nueva andadura. Tanto composito-res como la banda en pleno esperamos permanecer en esta Hermandad muchos años. Si es así, y la banda y marcha gustan, con el tiempo todo se an-dará.

Habiendo participado en Otras Procesiones, ¿tienen como músicos algún momento especial, de esos que te dan un “pellizco en el corazón”? Si así es, ¿podría contarnos alguna anécdota?El primer año que debutamos en Alicante lo íbamos a hacer en dos hermandades. Llevábamos meses de duro trabajo pues comenzaba una etapa nueva. Tu-

Otra actuación de la banda. Foto de Vanderley Tejeiro.

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vimos que preparar 40 marchas procesionales en un tiempo récord de tres meses, lo que supuso una auténtica locura. Pero el día antes de salir en la pri-mera de las dos hermandades, se canceló la salida de la banda lo que supuso un duro golpe para todos los músicos.

Entonces llegó el Miércoles Santo, el día en que debíamos procesionar con la Hermandad de la Esperanza, y decidimos meter por nuestra cuenta y riesgo la marcha Mi Amargura, en la que llevá-bamos meses trabajando para la hermandad que canceló la salida. La marcha fue interpretada en la Calle Vicente Inglada y sonó absolutamente espec-tacular, pero lo más bonito de todo fue que cuando acabamos de tocar la obra, se arrió el Paso, y vimos venir al capataz e incluso a muchos costaleros to-talmente emocionados preguntando por el nombre de la marcha. Fue un momento mágico y especial, de los que costará volver a repetir. Desde entonces, Mi Amargura, no falta a su cita con la Hermandad de la Esperanza de Alicante cada Miércoles Santo.

¿Cree que existe una buena cultura musical en la zona? Pienso que la música cofrade en la zona está al alza. Cada vez se ven mejores bandas; se ha me-jorado mucho en agrupaciones musicales y ban-das de cornetas y tambores, aunque creo que no

Cada vez hay más respeto por la música cofrade, por

las bandas y los músicos“

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se está cuidando como se debería a la banda de palio. Hay gente que aún no se preocupa por tener buena música, o Hermandades que pueden hasta llevar 80 músicos con el paso de misterio y detrás 25 músicos con la banda de pa-lio. Hay que cuidar el equilibrio de las bandas para que las dos puedan tener unas buenas plantillas de músicos y así puedan interpretar los repertorios con igual calidad, ya que eso siempre re-dundará en beneficio tanto de las Imá-genes como de las hermandades.

¿Se valora con justicia su trabajo o siente que todavía queda mucho ca-mino por recorrer?La música no se valora como debe-ría. Por una parte tenemos la cara, hermandades como vosotros o la Es-peranza de Alicante, que te valoran, te escuchan y te piden asesoramiento para que banda y hermandad realicen una Gran Estación de Penitencia; pero también tenemos la cruz, hermanda-des que no valoran tu trabajo, solo te quieren por lo “barato” que seas; que contratan los menos músicos posibles, no preguntándote nada y no dándote ni unas simples gracias. Ese aspecto, por suerte, está mejorando. Cada vez hay más respeto por la música cofrade, por las bandas y por los músicos, pero aún nos queda mucho camino por recorrer.

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Joan Fernández

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