TEMA 5

LAS NORMAS EN EL

AULA DE INFANTIL

GRUPO SIMBA:

Marta Cazallas Córdoba

Lorena Fernández Sobrino

Cristina Granados Infante

Isabel Jurado Ruiz

Lorena Novillo Rodríguez

Natalia Pérez Perona

Miriam Ramírez Pacheco

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ÍNDICE:

1. INTRODUCCIÓN

2. LAS NORMAS Y SU IMPORTANCIA

3. CARACTERISTICAS DE LAS NORMAS

4. INTRODUCCIÓN DE LAS NORMAS

5. CÓMO APRENDERN LAS NORMAS LOS NIÑOS/AS

6. REPRESENTACIÓN DE LAS NORMA

7. REFORZAR LAS NORMAS

8. LA IMPORTANCIA DE LAS NORMAS EN LA RELACIÓN FAMILIAR

9. COLABORACIÓN CON LAS FAMILIAS

10. CONCLUSIÓN

11. BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFÍA

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1. INTRODUCCIÓN

La llegada del niño/a la escuela por primera vez, va a suponer un gran

cambio para él/ella. Pues va a pasar de su entorno familiar, donde siempre a

estado protegido y seguro, a un ambiente nuevo y desconocido para él. Poco a

poco se irá adaptando a este entorno, a sus maestros/as y a sus compañeros.

En este proceso de adaptación, el maestro/a va a desempeñar un papel

muy importante, que es el de la planificación de la terea educativa, la cuál se va

basar en una serie de hábitos, normas y rutinas.

Podemos entender por rutinas aquellas actividades que realizamos

diariamente de forma regular, periódica y sistémica.

Los hábitos, consideramos que son modos de actuar que aprendemos o

adquirimos con la intención de satisfacer nuestras rutinas y que, a través de

ellos, nos sentimos más seguros a la hora de actuar ante las distintas

situaciones.

En cuanto a las normas, podemos decir que son actitudes, conductas o

acciones construidas y aceptadas socialmente, que van a dar respuesta a los

conflictos de convivencia en el aula y en el centro.

Aunque estos tres elementos son complementarios, nosotras nos vamos

a centrar en las normas a la hora de abordar este tema. Veremos su

importancia, sus características y como trabajarlas en el aula.

Pero sobre todo tendremos en cuenta que en la Etapa de Infantil, las

normas van a servir como sostén y como punto de partida a la hora de realizar

cualquier tipo de aprendizaje.

Por este motivo queremos destacar su importancia tanto en el aula de

infantil como fuera de ella. Para ello es imprescindible que existan una buena

colaboración y relación entre familia y escuela, de esta forma, el éxito estará

asegurado.

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2. LAS NORMAS Y SU IMPORTANCIA

Las normas de la clase son el elemento más importante para el buen funcionamiento de la dinámica del aula y en casa. Dichas normas deben

adaptarse a las características de ambos contextos, incluso deben tener el

objetivo de conseguir los mismos valores.

Son importantes porque forman el marco de movimiento de los niños y

niñas, regula sus interacciones y el tipo de convivencia que queremos tanto

entre los alumnos como entre el profesor y su clase.

Los peques traen sus propias reglas implícitas desde casa, aquí no las escriben en papel pero ellos las van absorbiendo e interiorizando de modo

que cuando llegan a la clase actúan como de forma consecuente con estas. La cuestión es que las maestras y maestros también tienen unas normas implícitas: el modelo de funcionamiento de clase por ejemplo, pero

para que los niños las vayan asumiendo tenemos que:

• Sopesar hasta que punto la clase puede seguir ese modelo.

• Darle forma clara y explícita, a través de frases, imágenes o símbolos,

para que ellos lo vayan interiorizando.

Si no se realiza este proceso, no podemos exigir a los alumnos que sigan

una normas que o bien no entienden o bien no están claras.

Pero las normas no solo deben abordar hábitos, ya que también regulan las

relaciones entre compañeros y con la maestra, para ello deben regularse estas

situaciones.

La aceptación de las normas les dará seguridad, lo que favorecerá el

desarrollo de la autonomía individual.

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3. CARACTERISTICAS DE LAS NORMAS

Las normas, ya sea en Casa o en Clase, deben cumplir las 5C y la P y la F:

1. CLARIDAD: las normas deben de entenderse fácilmente y estar en un

lenguaje cercano al de los niños y niñas (no por eso infantilizado, hay

que llamar a las cosas por su nombre).

2. CONCRECCIÓN (CORTAS): el mensaje debe ser concreto y con pocas palabras, para que no se pierdan. Se trata de que sepan

concretamente lo que deben hacer según el caso.

3. COHERENCIA: las normas deben ser cumplidas por todos las personas

de la clase, incluido el profesorado. Nosotros somos los espejos de

nuestro alumnado. Por otra parte no podemos poner una norma si

continuamente nos la estamos saltando. Una norma que no sirve es

mejor cambiarla o quitarla.

4. CONSECUENCIA: Lo mismo pasa con los castigos y recompensas: no

podemos amenazar con algo que luego no vamos a hacer (el hecho de

amenazar es en sí desagradable)

5. COLABORACIÓN: la participación de las familias es básica en esta

cuestión. No podremos contar con que todas entiendan las normas, pero

si podemos explicarles lo que pretendemos hacer y pedir su

colaboración. A su vez si las familias necesitan ayuda para que sus hijos

cumplan una serie de normas en casa, o para aprender a formular

normas, pueden pedir ayuda al maestro.

6. POSITIVACIÓN: las normas deben estar descritas en positivo. Es

uno de los aspectos más importantes. Por ejemplo, si yo digo: no se

pega, ¿implica eso que sí se puede insultar o empujar, quizá ignorar y

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hacer el vacío? Esa frase no aclara casi nada. Por el contrario, si la

norma es: "Somos amigos y amigas por eso nos tratamos bien". Esto

deja claro que todo lo que hagamos que dañe al compañero o

compañera no está permitido.

7. FLEXIBILIDAD: hay excepciones en las que no seguimos la norma

porque el tiempo no lo permite, porque ocurre algo especial, porque el

peque en cuestión lo necesita... en cualquier caso en las excepciones es

importante aclarar lo que ha pasado al resto de la clase para que

entiendan que no es una "incoherencia" sino que hay razones para que

no se cumpla esa norma. Aunque sean pequeños saben comprender y

aceptar estas cosas y además les enseña a ser ellos mismos "flexibles"

con el comportamiento de los demás y aprender que hay excepciones

para todo.

4. INTRODUCCIÓN DE LAS NORMAS

Las normas están vigentes desde el primer día aunque aún no las

hayamos presentado oficialmente. Los profesores son el fiel reflejo de ellas y

hay que ir nombrándolas en cada cosa que hacemos para que entiendan por

qué se hace o no cada cosa y las vayan interiorizando.

Independientemente de esto es importante que la lista de normas tenga un lugar fijo y visible en la clase para que todos recurran a él cuando

sea necesario. Por ejemplo, si la clase está muy desordenada se podría

señalar la norma "Mantenemos la clase ordenada y limpia".

Según la edad de los niños, las normas se presentarán una a una a

principio de curso (en 3 años) o recordarlas entre todos (4 años), incluso, con

los de 5 años, es fácil crear en clase nuestras propias normas (evidentemente

por detrás está la labor de la maestra "sugiriendo" sutilmente para que estén

todas las que sabemos que tienen que estar).

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Para ir aprendiéndolas se pueden hacer juegos: adivinar la norma por el

dibujo, haciendo mímica ("¿Qué norma estoy representando?"), haciendo un

concurso a ver quién se las sabe o cantando una canción: "Todo el mundo en

esta clase nos queremos divertir. Si aprendemos nuestras normas seré mucho

más feliz: levanto la mano para hablar...".

Posteriormente hay que ir recordándolas en la asamblea y cada vez que

sea necesario, antes de empezar cada actividad, cuando vayamos a hacer algo

diferente... pero es más importante la coherencia que ser "machacones"

recitándolas.

5. CÓMO APRENDEN LAS NORMAS LOS NIÑOS

Los niños van aprendiendo las normas poco a poco. Los primeros

aprendizajes comienzan en el núcleo familiar.

En los primeros años de vida, las normas están relacionadas con las rutinas

y hábitos, es decir, con el sueño, comida e higiene.

Aunque los pequeños no entienden lo que decimos, si que entienden cómo

lo decimos, es decir, el tono de voz y los gestos.

Por ello es importante mantener firmeza ante las “provocaciones” y

oposiciones frecuente, sobre todo a los 2 años.

Ya sobre los 18 meses son capaces de atender las órdenes cortas:

recoger, abrir, cerrar, levantarse, buscar, etc.

Entre los 3 y los 6 años, los niños aprenden a obedecer las órdenes y

cumplir las normas. Para ello es muy importante la observación ya que los

niños aprenden por modelado y los adultos van a servir de ejemplo.

Es importarte que:

• Los adultos ayuden a los niños a realizar las tareas.

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• Que los guíen en la realización de las órdenes, las cuales deben ser

sencillas y de una en una.

• Reforzar siempre que haga aquello que le ordenamos

• Incrementamos responsabilidades con la edad

• Establecemos normas claras en casa: cómo se hacen las cosas, cómo

se habla, cómo nos tratamos, etc.

6. REPRESENTACIÓN DE LAS NORMAS

• Iconos o imágenes: con o sin mensaje escrito. Representando cada

una de las normas de modo que, con un golpe de vista, sepan a qué nos

referimos. Esta es útil sobre todo para los más pequeños.

o Uso de imágenes ya diseñadas y plastificadas.

o Si son los peques los que han "decidido" las normas lo justo es

que ellos mismos hagan los dibujos de las mismas (incluso

escribiendo ellos el contenido). Este es un trabajo que se puede

hacer en pareja y da muy buenos resultados. Luego se presentan

en la asamblea de clase y se cuelgan: aunque la imágenes no

sean muy claras todos sabrán a qué van referidas.

• Lista de normas: Igualmente los profesores pueden hacer un cartel

escribiendo las normas (es bueno numerarlas para que sepan a qué

número nos referimos porque les ayuda a situarse en el cartel) o ser

ellos mismos los que las escriban "a su manera". Aunque sea un cartel

sin dibujos la referencia a él tiene la misma fuerza que cuando hay

imágenes y de este modo también se trabaja la lectoescritura. Este tipo

de normas, son más adecuadas a partir de los 4 y sobre todo a los 5

años.

• Libro de normas: para los más pequeños es aconsejable que

aparezcan imágenes de ellos mismos realizando la acción ( recogiendo

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juguetes, lavándose las manos, etc.) y un texto corto y claro al

lado. Se recurre al libro siempre que surja un conflicto para recordar las

fórmulas acordadas para solucionar problemas, para ayudarnos, para

convivir.

El Libro de Normas puede ayudarnos a reflexionar y pensar sobre

actitudes y valores, con ello poco a poco se irán acostumbrando a hacer

una autoevaluación de sus actitudes y conductas.

7. REFORZAR LAS NORMAS

A veces cuesta mucho que las normas se instauren. Primero hay que

revisar y sopesar si las normas que hemos puesto cumplen las 5C, la F y la P,

si no son un número excesivo de normas y si hay algún tipo de problema.

Si vemos que el problema persiste es el momento de hacer algún tipo de

acción en clase. Se trata de reforzar, hacer visible, lo que hacen bien, de

modo que los buenos comportamientos tiendan a repetirse y los malos se

vayan acabando.

El Club de los Buenos Compis. En realidad es un contrato de

contingencia. Se trata de presentar una tabla grande y bien visible con todos

los nombre en un lado.

En la asamblea final de clase todos los peques que hayan cumplido las

normas ponen una pegatina en su nombre.

Se acuerda que el que tenga cierto número (5, 10, 15... depende de la

edad) tiene un premio: una medallita de cartulina, un diploma,... En esto hay

que ser un poco flexibles con algunos niños y niñas que intentan cumplir las

normas pero sus nervios no se lo permiten.

A éstos hay que ayudarles y guiarles, colaborando en lo posible con sus

familias, para que aprendan a regular su comportamiento.

Lo que no podemos es pedirle por ejemplo a un niño hiperactivo que

esté todo el día quieto; es evidente que hay que adaptarse.

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Otro recurso que podemos utilizar es una cartulina con espacio para

pegar los iconos o nombres de normas que ya cumplan (al final también hay

diploma). Este tipo de recurso necesita que los niños tengan bastante

autonomía si no el álbum se pierde entre sus papeles. Se puede hacer algo

parecido pero en vez de álbumes individuales en un gran panel con una tabla.

Es importante darles a ellos la oportunidad de reflexionar sobre si

cumplen o no las normas y para se pueden utilizar fichas de cara al

comportamiento de cada grupo.

Otra forma de abordar las normas es convertirlo en un "reto de la clase", o sea, proponer todos los días ciertas normas para cumplir y que luego,

en la asamblea final, evaluemos si, como clase, se han cumplido las normas,

por qué sí o por que no.

Otro recurso muy sencillo es el sellito "Cumple normas": al salir de la

clase se le pone un sellito con tienta en la mano a los peques que han cumplido

las normas (también se puede usar una pegatina). Éstos salen radiantes y los

que no lo tienen deben reflexionar sobre su comportamiento.

También se les puede pedir a ellos que consideren si se merecen tener

el sellito o no, para que vayan aprendiendo a autorregularse. Este método debe

usarse con cuidado porque si las familias entienden que no llevar el sello es

malo se convierte en un castigo y no es esa la intención.

8. LA IMPORTANCIA DE LAS NORMAS EN LA

RELACIÓN FAMILIAR

¿Por qué son tan necesarios los límites y las normas?

Los límites y las normas son fundamentales porque:

v Los límites que marcan los padres otorgan a los hijos sentimientos de

seguridad y protección.

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v Las normas y los límites ayudan a regular de forma externa lo que aún

no pueden controlar internamente, en relación con la conducta.

v Las normas establecen las conductas que son adecuadas.

v Los límites y las normas ayudan a lograr una convivencia más

organizada e inculcan sentido del respeto hacia los demás y hacia uno

mismo.

v Normas y límites preparan a los hijos para la vida en una sociedad que

se rige por restricciones y obligaciones que deberá cumplir por el bien de

todos.

9. COLABORACIÓN CON LAS FAMILIAS

Como hemos visto, es muy importante el uso de normas en el ambiente

familiar, pero más importante es que exista una continuidad entre las normas

que los niños aprenden en casa y las que aprenden en la escuela.

Para ello es imprescindible que exista una buena coordinación entre familia

y escuela, para que no existan incoherencias entre lo que se transmite en un

ambiente y lo que se transmite en otro.

Sobre este punto tendríamos mucho que decir, ya que se pueden

realizar diferentes actividades tanto grupales como individuales, porque hay

niños y niñas que necesitan un tratamiento individualizado para adaptarse a las

normas y en esos casos es importante reunirse con la familia y proponer un

plan.

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10. CONCLUSIÓN

Como conclusión final, podemos destacar la gran importancia que tienen las

normas en la Etapa de Infantil, las cuales nos van a ayudar realizar diferentes

aprendizajes en el aula, así como a desarrollar tanto la individualización como

la socialización de nuestros alumnos/as.

A la hora de desarrollar las normas debemos tener en cuenta las

características de nuestro grupo de alumnos/as así como su nivel de desarrollo,

con el fin de que las normas sean claras y entendibles para todos.

Las normas se trabajan en clase constantemente, aunque siempre

podemos tener un momento para repasarlas o reflexionar sobre ellas.

Como hemos visto existen diferentes recursos que podemos utilizar para

trabajarlas tanto en el aula como fuera de ella con la colaboración de las

familias.

11. BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFÍA

AA.VV.: La escuela infantil de 0-6 años. Ed. Anaya. Madrid, 1991.

http://aventuradiminuta.blogspot.com.es/2012/08/las-normas-en-educacion-infantil-un.html [consulta 18-03-2013]

http://infantiljoserobles.blogspot.com.es/2012/01/tecnicas-de-modificacion-

de-conducta.html

http://lluviadeideasyrecursos.blogspot.com.es/2011/10/las-normas-en-

educacion-infantil.html