Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo...

17
INTRODUCCIÓN El trasplante renal es el mejor tratamiento para los pacientes con insuficiencia renal terminal. El gran in- conveniente de este procedimiento es la escasez de ór- ganos de cadáver para el trasplante, dada la demanda creciente por el aumento continuo de las listas de es- pera. Esta discrepancia entre oferta y demanda ha con- ducido a utilizar órganos que, por sus características, han sido considerados como “subóptimos”. Entre ellos los órganos procedentes de donantes con infecciones virales (1). En este apartado trataremos los resultados y la problemática del trasplante renal utilizando órga- nos de donantes hepatitis B positivos y hepatitis C po- sitivos. DONANTES HEPATITIS B POSITIVOS (Ag HBs+) La infección por el virus de la hepatitis B se trans- mite a través del trasplante renal (2). La primera des- cripción demostrando este hecho fue publicada por Wolf y col. en el año 1979 (3). Receptores de hepati- tis B negativos, que recibieron los injertos de donan- tes AgHBs+ y AgHBe+, todos fueron AgHBs+ pos- trasplante. Sin embargo, en esta primera experiencia los receptores VHB negativos trasplantados con do- nantes AgHBs+, pero AgHBe negativos, ninguno fue AgHBs+ postrasplante. Posteriormente, se ha consta- tado una clara evidencia del efecto negativo de la trans- misión de la infección en pacientes AgHBs negativos en la supervivencia del el injerto y del paciente (4). Además puede ocurrir el cuadro fatal de la hepatitis fi- brosante colostática en los receptores VHB negativos (5). Por lo tanto, el trasplante renal de donante VHB positivo en receptor VHB negativo está en general con- traindicado. Sin embargo, dado el limitado número de donan- tes, en algunas unidades se han utilizado los injertos renales de donante VHB+ en los receptores VHB+. Los resultados en dos unidades españolas han mostra- do una evolución similar entre los receptores VHB po- sitivos que recibieron un riñón de un donante VHB+, que los que fueron trasplantados con un injerto de do- nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su- gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po- sitivo es probablemente independiente de la serología VHB del donante. Incluso en determinadas circuns- tancias en los pacientes VHB negativos se puede va- lorar el trasplante siempre que reciban protección con inmunoglobulina específica y vacunación (7). Se han descrito siete genotipos y evidentemente puede exis- tir superinfección postrasplante con una diferente ce- pa del virus (2). A pesar de ello, las guías europeas de trasplante consideran el trasplante renal de donantes VHB positivos en receptores VHB positivos o en re- ceptores bien protegidos (8). En España la tasa de donantes VHB positivos du- rante el periodo 1992-1997 ha oscilado entre el 1,7% y el 0,3% (media 0-95%) (9). Considerando entre 1300 y 1400 donantes por año es posible que, al menos, al- rededor de 20 injertos anuales pudieran ser utilizados o, al menos, valorar su uso en pacientes AgHBs posi- tivos. 261 Utilización de donantes con serologías positivas para el VHB y el VHC en el trasplante renal Virus hepatotropos - Ponencia José María Morales Servicio de Nefrología. Unidad de Trasplante Renal Hospital Universitario 12 de Octubre, Madrid

Transcript of Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo...

Page 1: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

INTRODUCCIÓN

El trasplante renal es el mejor tratamiento para lospacientes con insuficiencia renal terminal. El gran in-conveniente de este procedimiento es la escasez de ór-ganos de cadáver para el trasplante, dada la demandacreciente por el aumento continuo de las listas de es-pera. Esta discrepancia entre oferta y demanda ha con-ducido a utilizar órganos que, por sus características,han sido considerados como “subóptimos”. Entre elloslos órganos procedentes de donantes con infeccionesvirales (1). En este apartado trataremos los resultadosy la problemática del trasplante renal utilizando órga-nos de donantes hepatitis B positivos y hepatitis C po-sitivos.

DONANTES HEPATITIS BPOSITIVOS (Ag HBs+)

La infección por el virus de la hepatitis B se trans-mite a través del trasplante renal (2). La primera des-cripción demostrando este hecho fue publicada porWolf y col. en el año 1979 (3). Receptores de hepati-tis B negativos, que recibieron los injertos de donan-tes AgHBs+ y AgHBe+, todos fueron AgHBs+ pos-trasplante. Sin embargo, en esta primera experiencialos receptores VHB negativos trasplantados con do-nantes AgHBs+, pero AgHBe negativos, ninguno fueAgHBs+ postrasplante. Posteriormente, se ha consta-tado una clara evidencia del efecto negativo de la trans-misión de la infección en pacientes AgHBs negativosen la supervivencia del el injerto y del paciente (4).

Además puede ocurrir el cuadro fatal de la hepatitis fi-brosante colostática en los receptores VHB negativos(5). Por lo tanto, el trasplante renal de donante VHBpositivo en receptor VHB negativo está en general con-traindicado.

Sin embargo, dado el limitado número de donan-tes, en algunas unidades se han utilizado los injertosrenales de donante VHB+ en los receptores VHB+.Los resultados en dos unidades españolas han mostra-do una evolución similar entre los receptores VHB po-sitivos que recibieron un riñón de un donante VHB+,que los que fueron trasplantados con un injerto de do-nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo es probablemente independiente de la serologíaVHB del donante. Incluso en determinadas circuns-tancias en los pacientes VHB negativos se puede va-lorar el trasplante siempre que reciban protección coninmunoglobulina específica y vacunación (7). Se handescrito siete genotipos y evidentemente puede exis-tir superinfección postrasplante con una diferente ce-pa del virus (2). A pesar de ello, las guías europeas detrasplante consideran el trasplante renal de donantesVHB positivos en receptores VHB positivos o en re-ceptores bien protegidos (8).

En España la tasa de donantes VHB positivos du-rante el periodo 1992-1997 ha oscilado entre el 1,7%y el 0,3% (media 0-95%) (9). Considerando entre 1300y 1400 donantes por año es posible que, al menos, al-rededor de 20 injertos anuales pudieran ser utilizadoso, al menos, valorar su uso en pacientes AgHBs posi-tivos.

261

Utilización de donantes con serologíaspositivas para el VHB y el VHC en el

trasplante renal

Virus hepatotropos - Ponencia

José María MoralesServicio de Nefrología. Unidad de Trasplante Renal

Hospital Universitario 12 de Octubre, Madrid

Page 2: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

DONANTES AgHBs NEGATIVO,ANTI-Hb- CORE POSITIVO

El uso de los injertos renales de los donantes AgHBsnegativo/anti-HB-core positivo ha sido analizado de-talladamente en los últimos años (10). En 1994 Kadiany col. describieron que 19 receptores de trasplante re-nal, que recibieron los injertos de donantes AgHBs ne-gativo/anti-HB-core positivo/IgM anti-HB-core nega-tivo, ninguno fue AgHbs positivo en el postrasplante.En contraste, el 33% de los receptores hepáticos fue-ron AgHBs positivo (11).

Wachs y col. publicaron en el año 1995 la expe-riencia de San Francisco (12). Veinticinco (2,1%) de1190 donantes fueron AgHBs negativo/anti-HB-corepositivo/IgM anti-HB-core negativo. Cuarenta y dosreceptores de trasplante renal fueron estudiados: uno(2,4%) se seroconvirtió a AgHBs positivo a los tresmeses del trasplante; previamente el paciente eraAgHBs negativo/anticuerpos anti-HBs negativo/anti-HB-corenegativo. El receptor que recibió el segundoriñón del mismo donante permanece AgHBs negativomás de tres años después del trasplante; característi-camente tenía anticuerpos anti-HBs pretrasplante. Nin-gún paciente desarrolló AgHBs positivo o anti-HB-co-repositivo que no tuviera previamente al trasplante re-nal. En este estudio la frecuencia de transmisión de lainfección fue claramente mayor en el trasplante hepá-tico que en el renal o cardíaco: 50%, 2,4 % y 0% res-pectivamente. Estos autores recomiendan trasplantarlos injertos renales AgHBs negativo/anti-HB-corepo-sitivo/ IgM HB-core negativo en receptores con anti-cuerpos anti-HBs positivos.

El estudio publicado por Sutterthwaite y col. reco-ge la experiencia de Los Angeles en un periodo de 14años con 38 trasplantados renales que recibieron un ri-ñón de donantes de cadáver AgHBs negativo/ anti-HB-corepositivo (13). Veintisiete de ellos eran receptoresAgHBs negativo/anti-HB-core negativo y 11 fueronanti-HB-core positivo. Ninguno recibió inmunoglo-bulina y todos recibieron el mismo tratamiento inmu-nosupresor. Después del trasplante del primer grupo,de 27 pacientes ninguno fue AgHBs positivo; sin em-bargo, tres (11%) desarrollaron anticuerpos antiHBspositivos, dos (7%) se seroconvierten a anti-HB-corepositivo y ninguno se seroconvirtió a ambos. Ningúnpaciente desarrolló signos clínicos ni bioquímicos de

hepatitis B aguda o crónica. Del grupo de 11 pacien-tes, ninguno desarrolló hepatitis aguda o crónica. Lasupervivencia de injertos y pacientes fue similar enambos grupos.

El estudio de Baltimore recoge la experiencia de 45pacientes que fueron trasplantados con injertos rena-les de donantes AgHBs negativo/ IgG antiHB-corepo-sitivo/IgM anti-HB-coreque fue comparada con la deun grupo de 45 pacientes trasplantados de donantes an-ti-HB-corenegativos. Ninguno de los 90 pacientes de-sarrolló AgHBs positivo. Sin embargo, el grupo querecibió injertos anti-HB-core positivos, 6 (13%) de-sarrollaron anticuerpos anti-HBs, 4 (9%) adquirieronanticuerpos anti-HB-core y 2 (4%) ambos. En el gru-po control un paciente (2%) desarrolló anticuerpos an-ti-HBs y otro (2%) anticuerpos anti-HB-core. El ries-go de seroconversión a anticuerpos anti-HBs o anti-cuerpos anti-HB-core, después del trasplante renal, fuecasi cinco veces mayor en el grupo de donantes anti-HB-coreque el grupo control. No hubo diferencias enla supervivencia de injertos y pacientes a los tres años(14).

Los resultados de Miami (15) y Stanford (16) conun menor número de pacientes corroboran estos ha-llazgos, mostrando que ningún paciente perdió el in-jerto o la vida por recibir el injerto renal de un donan-te anti-HB-core positivo. Un paciente del estudio deCalifornia desarrolló AgHBs positivo dos años des-pués del trasplante, siendo anticuerpos anti-HBs ne-gativo/anti-Hb-core positivo pretransplante. En estecaso no queda claro si la seroconversión representó lareactivación de la infección VHB más que la transmi-sión de la infección por el donante.

Los datos del registro americano UNOS han sidorecientemente publicados. Fong y col. han analizadoel impacto de la presencia de anti-HB-coreen los do-nantes en la transmisión viral y en los resultados de su-pervivencia del injerto y del receptor durante los años1994-1999 (17). Aunque en el análisis univariable, lasupervivencia de injerto y paciente fue significativa-mente más baja en el grupo anti-HB-coredonante po-sitivo/receptor negativo que en el resto de grupos +/+,-/+,-/ -; el análisis multivariable demostró que la pre-sencia de anti-HB-coreen el donante no influencia persela supervivencia de injertos ni pacientes. La inci-dencia de seroconversión a AgHBs fue mayor en elgrupo +/-, pero sin diferencias significativas; en cam-

262

Page 3: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

bio sí fue significativamente mayor la seroconversiona anti-HB-core.

En conclusión, los datos publicados de un sólo cen-tro y los del registro americano demuestran que el usode injertos renales con serología AgHBs negativo/ an-ti-HB-corepositivo conlleva un pequeño riesgo de se-roconversión a AgHBs (0,003 por año) y, por ello, ainfección activa. El riesgo es claramente menor que enlos trasplantados hepáticos. En la situación actual, conun número de donantes limitado, los órganos (concre-tamente los riñones) de donantes anti-HB-corepositi-vos deben ser considerados para trasplante especial-mente en los pacientes inmunizados con éxito o coninfección previa. También se debe considerar tras-plantarlos en pacientes no previamente vacunados ad-ministrando la gammaglobulina específica. Finalmen-te, Chung y col. recomiendan que la evaluación ruti-naria de un donante debe incluir la determinación deanti-HB-core junto con la del AgHBs (18). La presen-cia de anticuerpos anti-HBs y/o anticuerpos anti-HB-core sugiere infección previa, recomendando en estecaso realizar anticuerpos anti-HB-core IgM y ADN delvirus B para evitar la transmisión de la infección porel virus de la hepatitis B. La determinación del ADNviral será imprescindible en los trasplantes hepáticosy menos en los renales, habida cuenta del diferenteriesgo de transmisión en ambos órganos.

TRASPLANTE RENAL CONDONANTES VHC POSITIVOS

La transmisión de la infección por el virus de la he-patitis C a través del trasplante ha sido descrita por va-rios autores, siendo Pereira y el grupo del New EnglandMedical Centerlos que primero lo demostraron (19-22). Sin embargo, existen diferencias muy llamativasentre los grupos que han estudiado este fenómeno enlo que se refiere a la frecuencia de transmisión de laenfermedad y de sus consecuencias clínicas. Pereira ycol. demostraron que la infección se transmitía en el100% de los pacientes que recibían un riñón de un do-nante VHC ARN positivo, confirmado por la técnicade la reacción en cadena de la polimerasa (PCR); ade-más, el 50% de estos pacientes desarrollaban criteriosde enfermedad hepática crónica, hecho que se corre-lacionaba con el grado de inmunosupresión (20, 21,23). Aeder y col. del Midwest Organ Bank, presenta-

ron unos resultados similares a los de Boston (21). Sinembargo, autores tales como Roth y col. de la Univer-sidad de Miami (23,24), y Vicenti y col. de la Univer-sidad de San Francisco (25), aseguran que la transmi-sión de la infección por el VHC con el trasplante y elposterior desarrollo de enfermedad hepática son in-frecuentes. Tesi y col. de la Universidad de Columbusdescriben que la transmisión de la infección por el VHCocurre en el 57% de los receptores de donantes VHCARN positivos, pero que la enfermedad hepática sedesarrolla con la misma frecuencia que en un grupocontrol de pacientes trasplantados de donantes VHCnegativos (26). Mendez y col. de Los Angeles asegu-ran que la transmisión de la infección por el VHC espoco frecuente y, de hecho, constituyen el único gru-po que ha aceptado en algún momento la posibilidadde utilizar donantes VHC positivos en receptores VHCnegativos (27).

La variabilidad tan llamativa en la tasa de transmi-sión de la infección por el VHC con el trasplante deórganos podría explicarse por varias razones: el gradode viremia en el órgano trasplantado, la infectividadde la cepa implicada del VHC, el volumen de líquidoempleado en la perfusión del órgano (23), el métodoutilizado para la preservación del injerto (23), las trans-fusiones perioperatorias y la diferencia en los tests diag-nósticos empleados. Independientemente de la fre-cuencia de transmisión de la infección por el VHC conel trasplante de órganos, tal transmisión es un hecho;por este motivo, la actitud más racional y la opiniónmás generalizada es que los riñones de donantes VHCpositivos no deben utilizarse en receptores con sero-logía negativa para el VHC.

Sin embargo, y basándose en la escasez de órganosdisponibles para trasplante, varios grupos han plantea-do la posibilidad de utilizar riñones VHC positivos enreceptores que, a su vez, presenten una serología posi-tiva para el VHC (28, 29). Existen argumentos en con-tra y a favor de esta política. Por un lado, los anticuer-pos frente al VHC no son neutralizantes; es decir, noconfieren inmunidad frente al virus. En segundo lugar,la positividad para los anticuerpos frente al VHC no essinónimo de infección viral activa y, finalmente, exis-ten varias cepas del VHC, con lo cual, siempre existe laposibilidad de una superinfección por una cepa diferentedel virus (21). Sin embargo, y a favor de la utilizaciónde riñones VHC positivos para trasplante, se debe tener

263

Virus hepatotropos - Ponencia

Page 4: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

en cuenta que la prevalencia de la infección por el VHCpuede ser de hasta el 28% en algunas poblaciones (22,30), de modo que una política restrictiva con el uso deestos órganos podría agravar aún más la ya actual esca-sez de órganos para trasplante. Además, existe una im-portante lista de pacientes en espera por un trasplanterenal, pacientes que pueden morir en diálisis antes deser trasplantados. Por otro lado, la morbimortalidad deorigen cardiovascular supera ampliamente a la de cau-sa hepática en los pacientes trasplantados renales. Fi-nalmente, con los métodos diagnósticos actuales, toda-vía se podría excluir como donantes a sujetos con untest diagnóstico falsamente positivo para el VHC (22).

Basándose en los argumentos expuestos, en marzode 1990 los Hospitales “12 de Octubre” de Madrid y“Clinic” de Barcelona adoptaron la política de utilizarriñones de donantes VHC positivos en receptores VHCpositivos. Después de un año de seguimiento, la apa-rición de enfermedad hepática era similar entre 24 re-ceptores VHC positivos, que habían recibido el injer-to renal de un donante VHC positivo y 40 receptores

VHC positivos de un injerto VHC negativo (31). Conestos resultados, la Organización Española de Tras-plante apoyó esta política de utilización de riñonesVHC positivos (32). Con un periodo de seguimientomás largo, seguía sin encontrarse diferencias entre am-bos grupos en términos de incidencia de enfermedadhepática crónica (8,3% vs. 7,5%), supervivencia delinjerto (96% vs. 93%) y supervivencia del paciente(100% vs. 98%) (Tabla I). Sin embargo, cuando se de-terminó el ARN viral en donantes y receptores por latécnica de la PCR, se evidenció que el 80% de los pa-cientes VHC positivos con ARN viral negativo pre-trasplante, que habían recibido un injerto renal de undonante VHC ARN positivo, positivizaban el ARN vi-ral después del trasplante y el 50% de ellos desarro-llaba criterios de enfermedad hepática crónica (33).Por lo tanto, limitando el uso de riñones VHC positi-vos a receptores VHC positivos, no se evitaba por com-pleto la transmisión de la enfermedad viral. Esta ob-servación obligó a modificar la política referente a lautilización de riñones de donantes VHC positivos pa-

264

Receptores ELISA 2 positivos

Donante ELISA 2 Donante ELISA 2positivo negativoN=24 N=40

PretrasplantePCR positivo* 17/24 (71%) 31/40 (79%)

PostrasplanteSeguimiento (meses) 26 ± 8 3 ± 10Enfermedad hepática crónica** 2/24 (8,3%) 3/40 (7,5%)PCR positivo* 22/23 (96%) 30/39 (77%)Supervivencia del injerto 23/24 (96%) 37/40 (93%)Supervivencia del paciente 24/24 (100%) 39/40 (98%)

*PCR: reacción en cadena de la polimerasa.**Enfermedad hepática crónica: ALT superior a 2,5 veces el límite superior de la normalidaddurante más de 6 meses.Con autorización de Kidney International (Kidney Int 1995; 47: 236-40).

TABLA IRESULTADOS A CORTO PLAZO CON EL TRASPLANTE DE RIÑONES DE DONANTES VHC

POSITIVOS EN RECEPTORES VHC POSITIVOS

Page 5: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

ra trasplante vigente hasta entonces en ambos hospi-tales. De este modo, en 1993 se limitó su utilización areceptores con serología positiva para el VHC y quetuvieran el ARN viral positivo antes del trasplante.

El impacto que tienen estas políticas de utilizaciónde riñones VHC positivos reviste un interés especial alargo plazo, dada la historia natural de la infección porel VHC. En la mayoría de los pacientes con infeccióncrónica por el VHC la enfermedad hepática severa ysus consecuencias clínicas aparecen años después dehaber contraído la infección (34). Por este motivo, am-bos hospitales han revisado sus resultados 10 años des-pués de haber puesto en marcha la política de utilizarriñones de donantes VHC positivos en receptores VHCpositivos. Se analiza la evolución de 269 pacientes conserología positiva para el VHC que fueron trasplanta-dos en estos hospitales en el periodo marzo 1990-di-ciembre 1998. De estos pacientes, 101 (37,5%) reci-bieron un injerto renal de un donante VHC positivo y168 (62,4%) fueron trasplantados de un donante VHC

negativo. No se encontraron diferencias estadística-mente significativas entre ambos grupos en relacióncon la incidencia de enfermedad hepática crónica(12,2% vs. 10,5% respectivamente), supervivencia delinjerto a 10 años (56,4% vs. 70%) y supervivencia delpaciente a 10 años (80,6% vs. 78,6%) (Tabla II). Losresultados también son muy satisfactorios si el análi-sis se limita al periodo posterior a 1993, en el que serestringía el uso de donantes VHC positivos a recep-tores VHC positivos que tuvieran a su vez el ARN vi-ral positivo antes del trasplante. En este sentido, en ungrupo de 61 pacientes VHC ARN positivos, que reci-bieron un injerto de un donante con serología positivapara el VHC, la incidencia de enfermedad hepática cró-nica fue del 5,8%, la supervivencia del injerto a los 5años del 82% y la supervivencia del paciente a 5 añosdel 89%. Estos resultados no son significativamentediferentes de los obtenidos en un grupo de 97 pacien-tes VHC positivos que se trasplantaron en el mismoperiodo de tiempo de un donante VHC negativo (35).

265

Virus hepatotropos - Ponencia

Receptores ELISA 2 positivos

Donante ELISA 2 Donante ELISA 2 Ppositivo negativoN=101 N=168

PretrasplantePCR positiva* 80/89 (90%) 36/53 (68%) 0,001

PostrasplanteSeguimiento (meses) 58,3 ± 29 63,2 ± 34PCR positiva* 80/81 (99%) 95/101 (86%) 0,002Enfermedad hepática crónica** 12% 10% NSEnfermedad hepática severa*** 5,5% 5,1% NSSupervivencia injerto (10 años) 56% 70% NSSupervivencia paciente (10 años) 81% 79% NS

*PCR: Reacción en cadena de la polimerasa.**ALT por encima de 2,5 veces el límite superior de la normalidad durante más de 6 meses.***Signos de insuficiencia hepatocelular y/o hipertensión portal.Reproducido de J Am Soc. Nephrol. 2000; 11: 1343-53.

TABLA IIRESULTADOS A LARGO PLAZO CON EL TRASPLANTE DE RIÑONES DE DONANTES VHC

POSITIVOS EN RECEPTORES VHC POSITIVOS

Page 6: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

En el análisis multivariable de todos los pacientes VHCpositivos de nuestra serie, la serología del donante nofue un factor de riesgo ni para la supervivencia del pa-ciente ni para la del injerto.

Existen otras experiencias con el uso de órganos dedonantes VHC positivos para trasplante, que apoyan laidea derivada de las observaciones anteriores de que lautilización de estos órganos parece justificada y segura.Ali y col. (36) analizaron la evolución de 44 pacientestrasplantados renales VHC positivos, de los cuales 28habían recibido el injerto de un donante VHC positivo y16 de un donante negativo. No se encontraron diferen-cias en la tasa de rechazo agudo, muerte y pérdida delinjerto a corto plazo entre ambos grupos de pacientes.Testa y col. (37) compararon a su vez la evolución a lar-go plazo de un grupo de 22 pacientes VHC positivos querecibieron un injerto hepático de un donante VHC posi-tivo, con la evolución de un grupo de 115 trasplantadoshepáticos VHC positivos de un donante con serologíanegativa para el VHC. La tasa de recurrencia de la in-fección por el VHC, documentada por biopsia hepática,fue del 54,5% y del 41,7% respectivamente en ambosgrupos, sin que esta diferencia fuera estadísticamente sig-nificativa. Tampoco fue diferente la supervivencia delpaciente (83,9% vs. 79,1%) y del injerto (71,9% vs.76,2%) a cuatro años, entre ambos grupos de estudio.

Recientemente se han publicado los datos del regis-tro americano para conocer el impacto de la serologíaVHC en la supervivencia del paciente (38). Entre losaños 1994 y 1988 recibieron un trasplante renal 20.110pacientes: 484 de ellos eran VHC+. La supervivencia delpaciente a los tres años fue del 93% vs. 85% en los re-ceptores que recibieron un riñón de donante VHC nega-tivo y positivo respectivamente, evidenciando tambiénque los receptores VHC+ mostraron una peor supervi-vencia. En el análisis multivariable la presencia de VHCpositivo en el donante fue un factor de riesgo indepen-diente para la mortalidad del paciente. Estos datos debenverse con precaución porque, en una gran mayoría de loscasos, los riñones de donante positivo se trasplantaronen receptores VHC negativo, política no adecuada y, dehecho, prohibida en Europa. Además, como los propiosautores mencionan tiene importantes debilidades: estu-dio retrospectivo, no se conoce el test diagnóstico de lainfección VHC, no hay datos de biopsias hepáticas nitampoco del desarrollo de glomerulonefritis y una in-formación incompleta de la co-morbilidad.

Por lo tanto, por los datos disponibles en la actua-lidad la utilización de riñones VHC positivos para tras-plante renal en receptores VHC positivos parece en ge-neral segura. Esta política podría adquirir aún mayorseguridad si se limitara el uso de estos injertos a re-ceptores con el ARN viral positivo antes del trasplan-te. Pero existe todavía un paso más hacia la optimiza-ción de esta estrategia de uso de riñones VHC positi-vos. Se han descrito hasta 6 genotipos diferentes delVHC, de entre los cuales el genotipo 1b es el más fre-cuente en el área mediterránea (39). Widell y col. (40)describieron la posibilidad de superinfección con otracepa viral. Por lo tanto, conseguir emparejar donantey receptor en función del genotipo viral implicado po-dría ser importante para evitar la superinfección cuan-do se utilizan riñones de donantes VHC positivos. Exis-ten algunas experiencias, como la presentada por nues-tro grupo (41) que así lo avalan.

Pereira y Levey (42) analizaron el impacto de lasdiversas estrategias de utilización de donantes VHC po-sitivos en los EE. UU. Si se restringía el uso de riñonesVHC positivos a receptores con anticuerpos frente alVHC, la pérdida de órganos sería del 0%, la tasa detransmisión del 2,4% y la de neoinfección del 0,5%. Silos riñones VHC positivos se limitaban a receptoresVHC con ARN viral positivo, los porcentajes serían del0%, 2,4% y 0% respectivamente, concluyéndose, portanto, que esta última sería la mejor alternativa.

En conclusión, el uso de riñones de donantes VHCpositivos para trasplante en receptores VHC positi-vos parece una política segura y probablemente cons-tituya la mejor manera de utilizar estos órganos, evi-tando su pérdida. De hecho, hasta 3.800 riñones enlos EE.UU. y 300 riñones en España podrían haber-se “salvado” para trasplante en un periodo de 10 añossi se hubiera aplicado esta estrategia. El paso siguientehacia la optimización de esta política podría consis-tir en restringir la utilización de estos órganos a re-ceptores con el ARN viral positivo antes del trasplantey en emparejar donante y receptor en cuanto al ge-notipo viral implicado y, de hecho, las recientes Eu-ropean Best Practical Guidelines for Renal Trans-plantationasí lo consideran (8). En todo caso y convistas a reducir el riesgo de infección por el VHC ysus consecuencias clínicas, es imprescindible adop-tar una serie de medidas antes, durante y después deltrasplante (35) (Tabla III).

266

Page 7: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

BIBLIOGRAFÍA

1. Rubin HH. Infectious disease complications of renal trans-

plantation. Kidney Int 1993; 44: 221-36.

2. Kletzmayr J, Watschinger B. Chronic hepatitis B virus infection in

renal transplant recipients. Semin Nephrol 2002; 22 (4): 375-59.

3. Wolf JL, Perkins HA, Schreeder MT, Vincenti F. The transplanted

kidney as a source of hepatitis B infection. Ann Intern Med 1979;

91: 412-4.

4. Chan MK, Chan WK. Renal transplantation from HbsAg posi-

tive donors to HbsAg negative recipients. Br Med J 1988; 207:

522-5.

5. Kairatis LK, Gottlieb T, George CR. Fatal hepatitis B virus in-

fection with fibrosing cholestatic hepatitis following renal trans-

plantation. Nephrol Dial Transplant 1998; 13: 1571-3.

6. Campistol JM, Esforzado N, Andrés A et al. Resultados del tras-

plante renal utilizando riñones de donantes C positivos y he-

patitis B positivos. Nefrología 1998; 18: 60-4.

7. Berthoux FC, Broyet C, Alamartine E et al. HBs antigen posi-

tive organ donors and anti-HVC positive organ donors in re-

nal trasnplantation. In Touraine JLet al., eds. Transplantation

and Clinical Immunology XXIII. Elsevier Science Publishers

BV1991.

8. Berthoux F on behalf of the European Best Practice Guideli-

nes Expert Group on Renal Transplantation: European Best

Practice Guidelines for Renal Transplantation (part 1). Neph-

rol Dial Transplant 2000; 15: 1-85.

9. González Posada JM, Miranda B. Controversia ante la infec-

ción por el vrus de la hepatitis B y C en los donantes de orga-

nos en España 1992-1997. Nefrología 1998; 18 (supl. 5): 71-7.

10. Fabrizi F, Bunnapradist S, Martin P. Transplanting kidneys

from donors with prior hepatitis B infection: One response to

organ shortage. J Nephrol 2002; 15: 605-13.

11. Kadian M, Hawkins K, Schwartz H, Miller C. Use of hepatitis

B core antibody-positive multi-organ donors J Transpl Coord

1994; 4: 57-60.

267

Virus hepatotropos - Ponencia

1. Medidas en los pacientes en diálisis:- Evitar trasfusiones.- Aislamiento de los pacientes VHC positivos.- Tratamiento con interferón alfa si indicado (hepatitis crónica en biopsia hepática, VHC ARNdetectable en suero).

2. Medidas durante el trasplante renal:- Evitar trasfusiones.- No trasplantar riñones de donantes VHC positivos en receptores VHC negativos.- Posibilidad de utilizar riñones de donantes VHC positivos en receptores VHC positivos con ARNviral positivo y emparejar donante y receptor según el genotipo viral implicado.

3. Medidas después del trasplante:- Evitar trasfusiones.- Evitar protocolos de inmunosupresión agresivos (no utilizar rutinariamente ATG/ALG/OKT3 enla inducción).- Seguimiento estrecho de los pacientes después del trasplante (estar alerta respecto a la apariciónde proteinuria, infecciones graves, diabetes y tumores).- Valorar en cada caso tratamiento con ribavirina o ribavirina y bajas dosis de Interferónalfa.- Evitar el consumo de alcohol y el uso de drogas potencialmente hepatotóxicas.

Modificado del Journal American Society of Nephrology. (J Am Soc Nephrol 2000; 11: 1343-53).

TABLA IIIRECOMENDACIONES PARA PREVENIR Y/O MINIMIZAR EL IMPACTO DE LA INFECCIÓN

POR EL VHC EN PACIENTES TRASPLANTADOS RENALES

Page 8: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

12. Wachs M, Amend WJ, Ascher NJ et al. The risk of trasnmission

of hepatitis B from HBs Ag (-), HB-cAb (-), HBIgM (-) organ

donors. Trasnplantation 1995; 59: 230-4.

13. Satterthwaite R, Ozgu I, Shibdan H et al. Risks of transplan-

ting kidneys from hepatitis B surface antigen-negative, hepati-

tis B core antibody positive donors. Transplantation 1997; 64:

432-5.

14. Madayag RM, Johnson JB, Bartlett STet al. Use of renal allo-

grafts from donors positive for hepatitis B core antigen confers

minimal risk for subsequent development of clinical hepatitis

B virus disease. Transplantation 1997; 64: 1781-6.

15. Cirocco R, Zucker K, Contreras N et al. The presence of he-

patitis B core antibody does not preclude kidney donation. Lack

of viral DNAin the serum and biosies of core antibody positi-

ve donors and clinical follow-up. Transplantation 1997; 63:

1702-4.

16. Krierger NR, Vial CM, Millan MT et al. Revisting the use of

hepatitis B core antibody-positive-donor kidneys. Transplant

Proc 2001; 33: 1535-6.

17. Fong Tl, Bunnapradist S, Jordan SC, Cho Yw. Impact of hepa-

titis B core antibody status on outcomes of cadaveric renal trans-

plantation: analysis of United Network of organ Sharing data-

base between 1994 and 1998. Transplantation 2002; 73: 85-9.

18. Chung RT, Feng S, Delmonicoo FL. Approach to the manage-

ment of allograft recipients following the detection of hepatitis

B virus in the prospective organ donor. Am J Transplant 2001;

1: 185-91.

19. Pereira BJG, Milford EL, Kirkman RL, Levey AS. Transmis-

sion of hepatitis C virus by organ transplantation. N Engl J Med

1991; 325: 454-60.

20. Pereira BJG, Milford EL, Kirkman RL, Sayre KR, Johnson PJ,

Wilber JC, Quan S and Levey AS. Prevalence of HCVRNAin

hepatitis C antibody positive cadaver organ donors and their

recipients. N Engl J Med 1992; 327: 910-5.

21. Aeder MI, Shield CF, Tegtmeier GE, Bayer W, Luger AM, Nel-

son PW, Pierce GE, Polito A, Wilber JC, Johnson PJ, Ross G,

Bryan CF. The incidence and clinical impact of hepatitis C vi-

rus (HCV) positive donors in cadaveric transplantation. Trans-

plat Proc 1993; 25: 1469-71.

22. Pereira BJG. Hepatitis C in organ transplantation: its signifi-

cance and influence on transplantation policies. Curr Opin

Nephrol Hypertens 1993; 2912-22.

23. Roth D, Fernández JA, Babischkin BS, De Mattos A, Buck BE,

Quan S, Olson L, Burke GW, Nery JR, Esquenazy V, Schiff ER,

Miller J. Detection of hepatitis C virus infection among cada-

ver organ donors: evidence for low transmission of disease.

Ann Intern Med 1992; 117: 470-5.

24. Roth D. Hepatitis C virus: the nephrologist´s view. Am J kid-

neys Dis 1995; 25: 3-16.

25. Vincenti F, Lake J, Wright T, Kuo G, Weber P, Stempel C. Non

trnasmission of hepatitis C from cadaver kidney donors to trans-

plant recipients. Transplantation 1993; 55: 674-5.

26. Tesi RJ, Waller K, Morgan CJ, Delaney S, Elkhammas EA,

Henry ML, Ferguson RM. Transmission of hepatits C by kid-

ney transplantation: the risks. Transplantation 1994; 57: 826-

31.

27. Méndez R, Aswad S, Bogaard T, Khetan V, Asai P, Martínez A,

Flores N, Méndez RG. Donor hepatitis C antibody virus testing

in renal transplantat. Transplant Proc 1993; 25: 1487-90.

28. Pirsch JD, Belzer FO. Transmission of HCVby organ trans-

plantation [Letter]. N Engl J Med 1992; 326: 412.

29. Mizrahi S, Hussey JL, Hayes DH, Boudreaux JP. Organ trans-

plantation and hepatitis C virus infection [Letter]. Lancet 1991;

337: 1100.

30. Lauer GM, Walker BD. Hepatitis C virus infection. N Engl J

Med 2001; 345 (1): 41-52.

31. Morales JM, Andrés A, Campistol JM. Hepatitis C virus and or-

gan transplantation [Letter]. N Engl J Med 1993; 328: 511-2.

32. Matesanz R, National Transplant Coordinator, Spain. Organi-

zación de Trasplantes. Memoria 1993 (communication to all

transplant centers in Spain).

33. Morales JM, Campistol JM, Castellano G, Andres A, Colina

F, Fuertes Ano G, Ercilla G, Bruguera M, Andreu J, Carretero

P, Rodicio JL, Levey AS, Pereira BJG. Transplantation of kid-

neys from donors with hepatitis C antibody into recipients with

pre-transplantation anti-HCV. Kidney Int 1995; 47: 236-40.

34. Castellano G. The natural history of hepatitis C virus infec-

tion. Nephrol Dial Transplant 2000; 15 (S8): 19-23.

35. Morales JM, Campistol JM. Transplantation in the patient with

hepatitis C. J Am Soc Nephrol 2000; 11: 1343-53.

36. Ali MK, Light JA, Barhyte DY, Sasaki TM, Currier CB, Gran-

das O, Fowlkes D. Donor hepatitis C virus status does not ad-

versely affect short-term outcomes in HCV+ recipients in re-

nal transplantation. Transplantation 1998; 66: 1694-7.

37. Testa G, Goldstein RM, Netto G, Abbasoglu O, Brooks BK,

Levy MF, Husberg BS, Gonwa TA, Klintmalm GB. Long-term

outcome of patients transplanted with livers from hepatitis-C

positive donors. Transplantation 1998; 65: 925-9.

38. Bucci JR, Matsumoto CS, Swanson SJ et al. Donor hepatitis C

seropositivity clincal correlates and effect of early graft and

patient survival in adult cadaveric kidney transplantation. J Am

Soc Nephrol 2002; 13(12): 2974-82.

39. Rodés J, Sánchez Tapias JM. Hepatitis C. Nephrol Dial Trans-

plant 2000; 15 (S8): 2-11.

268

Page 9: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

40. Widell A, Mansson S, Persson NH, Thysell H, Herrnodsson S,

Blohme I. Hepatitis C superinfection in hepatitis C virus (HCV)

infected patients transplanted with an HCV-infected kidney.

Transplantation 1995; 60: 642-7.

41. Morales JM, Campistol JM, Andrés A, Domínguez-Gil B, Es-

forzado N, Muñoz MA, Bruguera M, Oppenheimer F, Rodicio

JL. Policies concerning the use of kidneys from donors infec-

ted with hepatitis C virus. Nephrol Dial Transplant 2000; 15

(S8): 71-3.

42. Pereira BJG, Levey A. Hepatitis C virus infection in dialysis

and renal transplantation. Perspectives in Clinical Nephrology.

Kidney Int 1997; 51: 981-99.

269

Virus hepatotropos - Ponencia

Page 10: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo
Page 11: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

Diapositiva 3 Diapositiva 4

Virus hepatotropos - Presentación

271

Diapositiva 1 Diapositiva 2

PresentaciónJosé María Morales

Page 12: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

272

Diapositiva 5 Diapositiva 6

Diapositiva 7 Diapositiva 8

Diapositiva 9 Diapositiva 10

Page 13: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

Virus hepatotropos - Presentación

273

Diapositiva 11 Diapositiva 12

Diapositiva 13 Diapositiva 14

Diapositiva 15 Diapositiva 16

Page 14: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

274

Diapositiva 17 Diapositiva 18

Diapositiva 19 Diapositiva 20

Diapositiva 21 Diapositiva 22

Page 15: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

Virus hepatotropos - Presentación

275

Diapositiva 23 Diapositiva 24

Diapositiva 25 Diapositiva 26

Diapositiva 27 Diapositiva 28

Page 16: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

276

Diapositiva 29 Diapositiva 30

Diapositiva 31 Diapositiva 32

Diapositiva 33 Diapositiva 34

Page 17: Utilización de donantes con serologías positivas para el ... · nante VHB negativo (6). Por lo tanto, estos datos su-gieren que la evolución clínica del receptor AgHBs po-sitivo

Virus hepatotropos - Presentación

277

Diapositiva 35