Transcript of José María Obando: El Jeneral Obando a la historia crítica del asesinato del gran Mariscal de...
- 1. A-T5358 EL JENERAL OBANDO A LA. 8EL ASESENA1'. bE L. tRAN
MARlSCAL DE AYACUCUO, .~...."ADA tftll EL SE~OR AIITONlO mE IRTUW.
~r'Z4'1:~:~/~5 _._ ~~ Digitalizado por la Biblioteca Luis ngel
Arango del Banco de la Republica, Bogot-Colombia
- 2. UOOOTA-REIMV"RE80 POR JOSIl ANTONIO CUALLA CALLIi DIl LA
TERCERA . 1848. Digitalizado por la Biblioteca Luis ngel Arango del
Banco de la Republica, Bogot-Colombia
- 3. ADVERTENCIA, Publicndos yn en "El Comercio" los pri- eros
nrtculos de mi contestacion a la obra de .risarri, algunos sujetos
respetables manifestaron Interes en que yu formase un vollmen,
porque de otro modo apnas podria quedar memoria de ~~e yu ha~ia.
co~testado a esta nueva acu.sacio~, ~Iellllo mUI difcil conservarla
de las partlculal'l- dades de mi defensa, perdidas casi en las
colum- lIas dispersas de un diario, que por su propia naturale7.u
no puede dejar mas que recuerdos confusos de ilOpresiones efmeras.
Conociendo ellus mismos que si yo habia recurrido a un periJico
para la publicacion de mi defensa, no era sino porfJue carecia de
los medios de cos- tl'ar U I vol Cunen, ofrecieron reunir los
fondos necesariu.. para esto, i lo hicieron. A esta circuns-
tanl:ia, a la liberalidad de estos seores, i a su interes en favor
de un hombre que ellos reputan inicuamente calumniado e inmerecida-
mente perseguido, debo la ventaja de ver circu- lar mi dE'fensa en
un vollmen, despues de ha~ berla hecho aparecer en un peridico.
Debo aprovechar esta ocasion, como cnalquier otra ~~e se me
presente. de da rles pblico testimo- . 1110 de mi reconocimiE'nto
por 1lI1 fa 1'01', en rea Iidad mucho mas granrle todava que el
qUE' ellos un pensado hacerme. Digitalizado por la Biblioteca Luis
ngel Arango del Banco de la Republica, Bogot-Colombia
- 4. EL JENERAL OBANDO A I.A - ARTCTLO 1." ORn:N DE LA ODRA.
Publicados en Lima en 1842 mis Apuntamientos para la' historia,
rasgu con este escdlo IOJs velos que por tanto tiempo habian
mantenido inesplicable el misterio da mi persecucion por Jos que me
acusaban del asesinato del Jeneral Sucre los diez aftos de
sucedido, i el enigma de su noloria alianza con Flores i aun con
Apolinar Morilloj el primero, designado por la mas natural i justa
crtica como responsable de aquel hecho atroz (qull solo l podia
interesar); i el segundo, el hombre reconocido como el principal
instrumento para la ejecucion del crmen, a 10 mnos, segun las
apariencias i el comun consentimiento de las partes. Mi aparieion
en el Per, despucs que los persegu idores de mi vida i reputacion
se lisonjeaban ya de la seguridad de mi J1luerte en las montailas
del trnsito, i !TIas que todo, la publicacioll Digitalizado por la
Biblioteca Luis ngel Arango del Banco de la Republica,
Bogot-Colombia
- 5. 4 de mi defensa, pusieron en grave cuidado 6. los que, por
miras que no he menester csp!ic~r. habian tomad,o a su cargo ~l
sestenimiento de la ealumma I la defensa de F lores, su n~tural
aliado, Esto los hizo ya pensar en su vcrdadera Sltuaclon, I
resolviron salir -di! este- CIl1H~ - !currien~o a, un nucvo espe-
diente peligroso en verdad, pero 'cuya teorta sallsfacla, al
parecer, todas ~us necesidades: el aliado Morillo ~'ob,i a ser
presoj y ni mismo tiempo 9ue se tom~ban en la . Nueva ~ranada ,las,
conve- nientes precaucIOnes pam ImpedIr la IlltroducelOn de mI
Itbro, se concertaba con Flores el modo de dar a este grave nsunto
una ter- minacion que los pusiese a cubierto de los cargos,
llevando n Morillo al patbulo en la falsa creencia de que cl
aparato de su muerte no tenia mas objeto que dar )leso las palabras
con que en el lancetremcmlo habia de. achl'llina,rme B ca,mbio de
!~ vida, que ofreclan salvarle despues que huble~e sostenido nI pie
del suplicio que yo le habia ordenado asesinar a Sucre, Hzose as
por mi fortuna: condjose a Morillo al cadalso en aquel falso
concepto: cumpli, segun parece, su palabra: quitronle ertnces la
vida, i circularon por todo el mundo las ltimas palabras de
Morillo, Pero, no todos los hombres estaban ven- didos 01 poder:
las revelaCIOnes empezaron a dar n conocer en el esterior aquella
inicua trama, i la mano de Dios hizo que nIfin mis calumniadores
mi~mos, clijiendo documentos, imprimiesen alguno. con el tiulo de
Causa criminal srj'Uida fonlra ti C(mnul Apolinllr Morillo